DESCARTES CONTEXTO HISTÓRICO, CULTURAL Y FILOSÓFICO 1.1 Contexto histórico La filosofía de Descartes se desarrolla en el siglo XVII. En este siglo se abre la Edad Moderna. Esta nueva etapa trajo consigo una manera distinta de ver el mundo y de interpretar las aspiraciones del ser humano. Es la época de la gran confianza en la razón humana. En el ámbito político, se trata de un período que se corresponde con la consolidación y vigencia de las monarquías absolutas. Descartes vivió primero esta etapa absolutista y, más tarde, el ambiente preparatorio de la Revolución Francesa. En el ámbito económico se desarrolla un capitalismo comercial y en el ámbito religioso, nos encontramos con tiempos en los que se dan grandes convulsiones y medidas de reforma para mejorar el sistema religioso de cada zona. 1.2 Contexto cultural En el plano cultural se refleja, en el Barroco, la inestabilidad predominante de aquellos tiempos. El Barroco muestra la crisis en sus distorsiones y excesos. Frente a esto Descartes pretende fundar un sistema basado en el orden, la claridad y la sencillez. Además, la filosofía moderna que se inició con Descartes está en íntima conexión con el triunfo de la nueva ciencia. 1.3 Contexto filosófico Descartes inauguró una nueva corriente filosófica: el Racionalismo, que se basa en la absoluta confianza en la razón. Estas son las características comunes de los filósofos racionalistas: - La razón es la única fuente de conocimiento válido. Innatismo de las ideas. Aspiración a una filosofía universal y puramente racional. El método matemático se considera el modelo de conocimiento científico por su carácter estrictamente racional. COMPARACIÓN CON DAVID HUME La teoría racionalista de Descartes suele oponerse a la corriente empirista. El empirismo es una corriente moderna de pensamiento que tuvo sus precedentes y su desarrollo en Gran Bretaña. La idea principal del empirismo es que la existencia es el origen de nuestros conocimientos y el único criterio de verdad. La corriente empirista está representada por filósofos como Locke, Berkeley y David Hume, siendo este último el representante más radical y coherente del empirismo y, por tanto, el autor con el que compararemos a Descartes. Principiaremos pues, comentando que Hume mantiene una clara discrepancia con Descartes respecto al modelo de conocimiento y respecto al criterio de verdad. - Respecto al modelo de conocimiento de Hume, éste comienza analizando los contenidos de la mente, y encuentra en ella sólo percepciones. Las percepciones son de dos clases: impresiones e ideas. Hume afirma que si no hay impresión - no hay idea. Por tanto, no existen las ideas innatas. Respecto al criterio de verdad o validez, Hume afirma que todo pensamiento puede confirmarse como válido si se corresponde con una impresión. Mientras que para Descartes el criterio de verdad es la evidencia puramente racional, para Hume el criterio de verdad es la experiencia. Desde este planteamiento verterá una duda crítica a las nociones de causalidad y sustancia, muy importantes en la filosofía de Descartes. - Respecto al principio de causalidad, los racionalistas lo habían considerado como un principio que la mente conoce de forma evidente. Recordemos que éste afirma que a cada efecto le corresponde una causa que se debe señalar. Pero, ¿qué dice Hume sobre esto? Dice que para considerar que una idea es verdadera hay que haber tenido una impresión de ella. Entonces, aquí Hume se - aparta completamente de Descartes. Por último, respecto al concepto de sustancia, tan importante en Descartes, Hume afirma que no tenemos ninguna impresión que se corresponda con la idea de sustancia. De esta manera Hume ataca a las tres sustancias que estableció Descartes: el yo, Dios y el mundo exterior. VALORACIÓN DE LA ACTUALIDAD Acerca de la actualidad del pensamiento cartesiano deberíamos, en primer lugar, mencionar que Descartes supuso un paso decisivo para conseguir la autonomía de la razón. En segundo lugar, cabe destacar la actualidad de la duda metódica tanto en la ciencia como en la filosofía. En tercer lugar, recordemos que Descartes propone un método y un criterio de verdad que son herederos de las matemáticas. En cuarto lugar, podemos hallar una última expresión de la actualidad del proyecto cartesiano en la informática, que constituye a su vez un mundo que refleja el ideal de Descartes. Por último, en el cine actual podemos rastrear también la presencia de algunas ideas cartesianas, por ejemplo en la película Matrix. Por otra parte, en cuanto a los aspectos que gozan hoy de menor actualidad, cabe destacar el dualismo antropológico cartesiano, su intención de hallar un único método para todas las ciencias, su confianza radical en la razón y su intento de demostrar la existencia de Dios. 2.OBJETIVO: BÚSQUEDA DE UN MÉTODO - 2.1 ¿Por qué era necesario un método? El objetivo principal de Descartes era la búsqueda de un método. El método era necesario para llegar a afianzar todos los conocimientos y principios que establecía la filosofía, un método por el que se pudiera llegar a la verdad absoluta sin posibilidad de error. - 2.2 Características del método El método en cuestión presenta una serie de características: La primera de ellas es que es un método único y universal, pues Descartes quería emplear ese método para una filosofía única y universal. La segunda de sus características es que es un método inspirado en las matemáticas, ya que Descartes se siente atraído por ellas debido a que ofrecían un modelo de claridad y de certeza, de deducción ordenada que no tenía la filosofía. La tercera característica es que las operaciones del método son intuición y deducción. Sostenía, pues, que la mente posee la capacidad natural de efectuar dos operaciones: la intuición y la deducción. - 2.3 Reglas del Método Por otra parte, el método también presenta unas reglas: La primera regla se basa en la evidencia. Esta regla nos dice que hay que admitir sólo aquello que se presenta a nuestra inteligencia con tal claridad que no quepa la menor duda. La segunda regla se centra en el análisis, que consiste en descomponer los múltiples datos del conocimiento en sus elementos más simples. La tercera regla se sostiene sobre la síntesis, en la que se comienza por las preposiciones más simples que se intuyen, para proceder entonces a deducir de manera ordenada. La cuarta y última regla se basa en la enumeración, dentro de la cual se revisará todo el proceso para asegurar que no se omite nada. 3. APLICACIÓN DEL MÉTODO - 3.1 El punto de partida: la duda metódica (La aplicación de este método en cuestión ha tenido como punto de partida la duda metódica = inicio de apartado, así para conectar con el punto anterior y tal, xk se terminó hablando un poco del método, y después que eso, su aplicación tuvo como punto de part….etc) Descartes decía que había que comenzar dudando para poder llegar a una idea que sea del todo evidente. Así pues, pensó que como paso previo para su búsqueda, era necesario dudar de todo lo que se pudiera dudar. - 3.1.1 ¿Cómo es la duda? [De este modo (conector)], la duda es: - • • En primer lugar, universal: hay que dudar de todo. En segundo lugar, metódica: La duda es un instrumento para alcanzar la • verdad y un método para encontrar una filosofía cierta y segura. En tercer lugar, teorética: la duda se aplica a las teorías. 3.1.2 ¿De qué se duda? • Se duda de los sentidos, ya que algunas veces nos engañan y nos llevan a • error. Se duda del mundo exterior, Descartes sostiene que no se puede estar seguro de que existan cosas, ya que hay ocasiones en que se confunde el • sueño con la vigilia. Se duda de los propios razonamientos, pues el propio entendimiento se puede equivocar cuando razona, incluso se puede dudar de los razonamientos matemáticos. - 3.2 El resultado de la duda: COGITO ERGO SUM Finalmente, se da el resultado de la duda: pienso luego existo o cogito ergo sum. (El tema del fragmento del texto se centra en este apartado, por lo que procederemos a explicarlo detalladamente para llegar su compresión). Con la duda, Descartes ha barrido todas las opiniones, ha dejado en suspenso toda certeza, excepto las verdades de la fe y las normas de la moral para “seguir viviendo”. Pero es en ese momento de duda profunda cuando surge como una iluminación la primera certeza. Por tanto, hay una certeza de la que es imposible dudar: el hecho mismo de que estoy dudando. En el “Cogito ergo sum” encuentra Descartes la base firme sobre la que construir la filosofía científica universal. Es una idea clara y distinta. Así pues, Descartes quiere dejar claro que el “cogito ergo sum” es una idea que se impone con evidencia inmediata, sin necesidad de ningún razonamiento. - 3.3 La deducción de la realidad. En su deducción de la realidad, Descartes ha encontrado la primera realidad de la que pueda partir la deducción del resto de la realidad. Ha encontrado un criterio de certeza para distinguir lo verdadero de lo falso. - 3.3.1 Primer momento de la deducción: la res cogitans (sustancia pensante) El primer momento de la deducción es la “res cogitans” (sustancia pensante), en el que Descartes cree que la sustancia pensante es el alma inmortal. De lo único que da certeza la primera verdad hallada es de que “soy un ser que piensa”. Por lo tanto, ante la pregunta “¿Qué soy?” se deberá responder: “Soy una cosa que piensa” (una res cogitans). Así pues, la res cogitans es la realidad primera de la que ha de partir la deducción filosófica. - 3.3.2 Segundo momento de la deducción: de la res cogitans a la res infinita. (De la sustancia pensante a la sustancia infinita) El segundo momento de la deducción pasa de la res cogitans a la res infinita. (De la sustancia pensante a la sustancia infinita). En él, Descartes encontraba que cada persona tiene en su entendimiento, además de la idea “pienso luego existo”, la idea de infinitud, de algo infinito. Descartes llega a la conclusión de que la idea de lo infinito sólo puede proceder de un ser infinito, es decir, de Dios. - 3.3.3 Tercer momento de la deducción: de la res infinita a la res extensa. (De la sustancia infinita a la sustancia extensa) El tercer y último momento de la deducción pasa de la res infinita a la res extensa. (De la sustancia infinita a la sustancia extensa). Para demostrar la existencia del mundo exterior, Descartes recurre a la existencia de Dios. Sostiene que Dios no puede permitir que nos engañemos al creer que el mundo existe, por tanto, el mundo existe. Por otra parte, Descartes concibe el mundo como una máquina: todo se reduce a materia y movimiento. Descartes también creía que el mundo puede conocerse matemáticamente, a través de los ejes cartesianos (da la espalda a los sentidos).