Una visión muy especial de los Beatles a través del cine

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TEXTOS PARA TRABAJAR LOS ELEMENTOS DE LA COMUNICACIÓN. i
NIVEL SEMÁNTICO
La semántica estudia el significado de los signos lingüísticos y las relaciones que estos
signos mantienen entre sí a través del significado.
EL SIGNIFICADO: Desde el punto de vista semántico se puede decir que la palabra es
una unidad lingüística con significado completo e independiente.
E
El significado es el conjunto de características conceptuales
asociadas
indisolublemente a un significante. Todo significado está formado por una combinación
de rasgos significativos mínimos, los semas, que lo caracterizan y lo distinguen de otros
significados.
Ejemplo: “Hombre”: animado, humano, adulto, no femenino /
“Mujer”: animado, humano, adulto, no masculino / “Niño”: animado,
humano, no adulto, no femenino.
Los grupos de palabras (de la misma categoría gramatical)
relacionadas en su significado por el hecho de que comparten
algunos semas comunes forman un campo semántico. Cada
comunidad
lingüística
distribuye
y
estructura
los
campos
semánticos según sus necesidades; es lógico que una comunidad
que no conoce determinados objetos o no haya pensado en ciertas
relaciones o conceptos, tampoco tenga palabras que los definan.
El campo semántico de ‘nieve’ para nosotros es mucho más reducido que para los
esquimales, pero bastante más extenso que para los habitantes de la selva.
Aisladamente una palabra puede tener varios significados, pero cuando la situamos en
un contexto lingüístico, adquiere un significado concreto y único de todos los posibles, el
sentido. En él influyen tanto el contexto lingüístico como el extralingüístico.
- “Amigo” puede tener el sentido de ‘novio’ o ‘pareja’ por
circunstancias situacionales.
- “Mar”: “El mar estaba en calma”. “Estoy en un mar de dudas”.
Lo determinante es el contexto lingüístico.
- “Maestro”: “El maestro dio una gran estocada”. “Mi maestro
me felicitó por el examen”. Contexto lingüístico.
- “Zapatilla”: “Pásame la zapatilla”. Varía su sentido según sea
dicho
entre
bailarines
o
entre
fontaneros:
contexto
extralingüístico.
Por otra parte, las palabras expresan nuestro conocimiento de la realidad, pero
ese conocimiento no es sólo abstracto, es también experimental y concreto, y, por
consiguiente, afectivo. Llamamos denotación al significado objetivo y conceptual que
tienen las palabras y que son comunes a todos los hablantes. Las connotaciones son los
significados emotivos, subjetivos (positivos o negativos) que ciertas personas o grupos
añaden a la denotación. La connotación es una de las causas esenciales de los cambios
de significados. Las connotaciones pueden ser muy personales o estar muy
generalizadas.
- “Gallina”: significado denotativo: ‘tipo de ave’; significado
connotativo: ‘cobarde’.
-“Negro”: significado denotativo: ‘ausencia de color’; significado
connotativo: ‘muerte, tristeza, dificultad…’.
FENÓMENOS SEMÁNTICOS: Se verifican a partir de las relaciones que se establecen
entre el significante y el significado de las palabras:
a. Sinonimia: consiste en la equivalencia de significados entre distintos significantes.
Diferenciamos dos tipos de sinonimia:
- Total: Identidad total de todos los semas de distintos significantes que hace que dos
palabras sean intercambiables en todos los contextos: “burro / asno”, “ileso / indemne”. Es
muy escasa.
- Parcial: Significados parcialmente parecidos entre varios significantes que pueden
intercambiarse en ciertos contextos: “coger / tomar”: “Voy a coger / tomar un taxi”. “Voy a
tomar /*coger café”.
b. Homonimia: Se produce cuando hay significantes semejantes con significados
diferentes; son palabras de origen distinto que por evolución fonética han coincidido
en su significante.
- Teniendo en cuenta la categoría gramatical de las palabras homónimas, se establecen
dos tipos de homonimia:
- Homonimia absoluta: las palabras pertenecen a la misma categoría gramatical:
“banda”: Del fr. ant. bande, vende: ‘cinta’ / Quizá del gót. Bandwō: ‘grupo’.
- Homonimia parcial: las palabras pertenecen a categorías gramaticales
diferentes: “vino”: Del lat. Vinum: ‘licor alcohólico’ / Del lat. Venīre: 3ª persona
del singular del pretérito perfecto simple de indicativo del verbo ‘venir’.
- Por otra parte, teniendo en cuenta que la identidad de los significantes puede darse en
distintos niveles, las palabras homónimas pueden ser:
- Homónimos homófonos: identidad sólo en el nivel fónico: “bello”: Del lat. bellus
/ “vello”: Del lat. Villus.
- Homónimos homógrafos: identidad en el nivel fónico y gráfico: “cola”: Del lat.
vulg. coda, y este del lat. Cauda: ‘extremidad posterior del cuerpo y de la
columna vertebral de algunos animales’. / “cola”: Del lat. colla, y este del gr.
κόλλα: ‘pasta que sirve para pegar’.
c. Polisemia: Cuando al significante de una palabra le corresponde un único significado,
decimos que la palabra es monosémica: “bicarbonato”, “abdomen”… Hay muy pocas
palabras monosémicas, la mayoría son polisémicas, pues a un significante podemos
asociarle más de un significado y sólo el contexto hace que el significante adquiera un
sentido único. Entre los diferentes significados de un término polisémico suele haber
relación. La polisemia responde al principio de economía de la lengua porque facilita la
memoria, pero puede suponer a veces ambigüedad en el mensaje. Ejemplo: “banco”:
‘de un parque, de dinero, de arena, de sangre’, etc.
d. Antonimia: Se produce cuando el significado de una palabra es contrario al de otra. En
esta oposición de significados hay matices que nos llevan a establecer distintos tipos
de antónimos:
- Complementarios: se da una oposición total de significados de forma que la negación de
uno implica la afirmación del otro: “vivo / muerto”, “acentuado / inacentuado”.
- Graduales: existen términos intermedios, por lo que la negación de uno no implica la
afirmación del otro: “frío / caliente”, “alto / bajo”.
- Recíprocos: la afirmación de la existencia de un término implica la afirmación de la
existencia del otro: “padre / hijo”, “comprar / vender”.
EL CAMBIO SEMÁNTICO: Llamamos cambios semánticos a aquellas variaciones que
afectan al significado de una palabra, manteniéndose el significante.
La lengua es una realidad viva, por eso cambia el significado de muchas
palabras, bien eliminando el significado primitivo y dando a la palabra uno nuevo
(“contaminar” significaba en el Lazarillo de Tormes ‘atacar al ciego con engaños para
poder comer lo que éste le negaba’), bien dotando de nuevos significados a un término,
sin que por ello pierda su significado primero (“pluma”).
A)
Las causas de los cambios semánticos son las siguientes:
a. Históricas: Están conectadas con el progreso humano; una cosa puede cambiar de
forma o de uso y puede llegar a ser otra completamente diferente, a pesar de lo cual
sigue siendo designada con el antiguo significante: “carretera”.
b. Lingüísticas: Cuando dos palabras aparecen a menudo juntas en el mismo contexto
lingüístico, la elipsis del primer término puede hacer que su significado pase al
segundo: “(cigarro) puro”, “(gaseosa) Casera”.
c. Psicológicas: La repugnancia o al asco que inspiran ciertos animales explican su
aplicación para definir a las personas con intención de insultarlas: “reptil, víbora, sapo,
buitre”. También hay connotaciones positivas: “lince, zorro”.
d. Sociales: Son muchas y diversas. Señalaremos tres:
- Generalización de un tecnicismo: Se amplía el significado al pasar de un círculo
reducido a uno más amplio: “faena”, “plural”.
- Prejuicios de clase o grupo social: Uso como insultos de algunos términos:
“verdulera, villano”.
- Aparición de tabúes y eufemismos: Tabú es aquella palabra que nombra una
realidad desagradable y que los ciudadanos evitan: “muerto”. Para no utilizar la
palabra tabú, se recurre al eufemismo: término neutro o con connotaciones
positivas: “difunto”. Hay casos en que los tabúes son reemplazados por pablar que
no buscan suavizar la expresión, sino hacerla humorísticamente más dura y
malsonante, son los disfemismos: “fiambre”.
B)
Modos de los cambios semánticos:
a. Metáfora: Es una comparación abreviada, sin nexo comparativo. Sustituimos una
palabra por otra parecida a ella, sin más explicaciones. Para establecer la comparación
es necesaria una semejanza (real o imaginaria) entre el sustituido y el sustituto. Las
metáforas son frecuentes en la lengua usual, no sólo en la literaria y muchas palabras
polisémicas han adquirido uno de sus significados por metáforas cuyo uso se ha
extendido a todos los hablantes. Estos significados metafóricos quedan ya para
siempre asociados a la palabra y se recogen en los diccionarios; no son como las
metáforas literarias, comparaciones únicas y aisladas empleadas por un solo escritor.
Las metáforas incorporadas a los diccionarios se llaman catacresis, y se indican
mediante la abreviatura fig. que quiere decir lenguaje o sentido figurado.
Ejemplo: “Pajarraco”: m. despectivo. Pájaro grande cuyo nombre
se desconoce. // fig. y fam. hombre disimulado y astuto.
El primero en llamar pajarraco a un hombre astuto y listo,
comparándolo con un pájaro grande, hizo una creación metafórica
única e individual. Cuando este uso se hace común a todos los
hablantes, se crea un nuevo significado para el significante
pajarraco. Se ha producido un cambio semántico.
b. Metonimia: la relación entre el elemento sustituto y el sustituido es de contigüidad
física, basada en la realidad.
Ejemplo: “Café”: semilla del cafeto. // Bebida que se hace por
infusión con esta semilla tostada y molida. // Casa o sitio público
donde se vende y toma esta bebida y otras consumiciones.
Como vemos, los tres significados de café están relacionados
metonímicamente: de significar el grano de la planta (significado
1), café pasa a ser la bebida que se hace con ese grano
(significado 2) y, en un estado posterior, el lugar donde se
consume la bebida (significado 3).
c. Sinécdoque: Tipo especial de metonimia que consiste en llamar a un todo con el
nombre de una parte en él incluida o, al revés, dar a una parte el nombre del todo que
la incluye. Muchos cambios semánticos se crean de esta forma.
Ejemplo: “Cerebro”: uno de los centros nerviosos constitutivos del
encéfalo, situado en la parte anterior y superior de la cavidad
craneal. // fig. cabeza, talento, juicio, capacidad. // fig. persona
sobresaliente en actividades culturales, científicas o técnicas.
La acepción 2 es una traslación metonímica de 1: a. “Tiene
mucha inteligencia”. b. “Tiene mucho cerebro”. Podemos sustituir
la expresión a. por la b. basándonos en una relación de
contigüidad: ‘la inteligencia reside en el cerebro’.
La acepción 3 es un caso de sinécdoque: c. “Los mejores
cerebros
españoles
trabajan
en
los
Estados
Unidos”.
Naturalmente, no trabajan sólo los cerebros, sino el resto de la
persona también. Estamos dando a un todo (persona) el nombre
de una parte (cerebro) incluida en él.
d. Etimología popular: los hablantes creen percibir familiaridad entre dos palabras
porque sus significantes son parecidos y una contagia su significado a la otra, aunque
no tengan ningún parentesco etimológico. Son vulgarismos: “sanjuán, andalias,
mondarinas…”
LA PALABRA. CAMBIOS SEMÁNTICOS
ESQUEMA
1.- Vida de las palabras.
2.- Tabú y eufemismo.
3.- Impropiedad lingüística.
4.- Metáfora, metonimia y sinécdoque.
IDEAS PREVIAS
1.- ¿Eres consciente de que algunas palabras “no se pueden decir” porque son
desagradables e inconvenientes?
2.- ¿Qué queremos destacar de una persona cuando decimos que es una “tortuga”?
Es habitual comparar las palabras con los seres humanos: como nosotros, tienen cuerpo
(el significante) y alma (el significado). Según esta identificación, las palabras también
nacen, crecen y mueren.
A lo largo de su vida, el cuerpo y el alma de las palabras pueden sufrir alteraciones: unas
veces cambia el significante, manteniéndose el significado: así, el verbo hacer se escribió
en otra época fazer, y se pronunciaba de forma distinta a la actual. Otras veces cambia el
significado, aunque el significante se mantenga constante: el significante azafata
significaba originariamente “criada de la reina”; con el tiempo pasó a significar “camarera
distinguida que presta sus servicios a bordo de un avión”. Hoy en día nadie emplearía
esta palabra con su significado primitivo.
Llamamos cambios semánticos a aquellos que afectan al significado de una palabra. Los
eufemismos, las impropiedades lingüísticas, los casos de metáfora y metonimia, etc., son
hechos lingüísticos que provocan cambios semánticos.
1.- LA VIDA DE LAS PALABRAS
Nacimiento de las palabras
¿Cómo nace una palabra? Existen varios procedimientos:
- Muchas veces tomamos la palabra de una lengua extranjera; es lo que llamamos
préstamo lingüístico. Así, las palabras turismo, mitin o líder son préstamos del inglés;
las palabras blusa, champán u hotel son préstamos del francés; o las palabras acuarela,
caricatura y desfachatez, proceden del italiano.
- En ocasiones se une un significado nuevo con un significante ya existente, creándose un
signo nuevo; es el caso de azafata, o el de cabo que, a su significado originario de
“extremo” añade después los de “lengua de tierra que penetra en el mar”, “individuo de la
clase de tropa inmediatamente superior al soldado” y “cuerda”.
- Otra forma de crear una palabra nueva es mediante siglas, como TALGO, SIDA u
OTAN.
- A veces se convierte un nombre propio en común: sandwich es el apellido de un lord
inglés; Rebeca pasa de ser el nombre de la protagonista de una película de Alfred
Hitchcock a designar una prenda de vestir; y ya vimos casos como quijote o celestina (que
incluso crean derivados: quijotesco, celestinesco).
Rebeca: película dirigida por A. Hitchcock en 1940 y protagonizada por Joan
Fontaine y Laurence Oliver, basada en el folletín de Daphne du Marier. Su protagonista se
vestía con una prenda de este tipo; se trata de un jersey sin cuello, abrochado por delante
y cuyo primer botón está a la altura de la garganta.
Muerte de las palabras
Las palabras también mueren; esto sucede cuando dejan de usarse: muchas palabras del
diccionario están muertas porque no las emplea ya nadie (aunque puede argumentarse
que están vivas en los textos de los que han sido tomadas, por ejemplo cuando se trata
de una obra literaria medieval).
¿Por qué mueren las palabras?
- Por designar una realidad que cae en desuso: por ejemplo almófar es un arabismo
referido a una parte de la armadura (concretamente una malla de hierro con que el
guerrero se protegía la cabeza). Desde el momento en que deja de haber armaduras, la
vida de esta palabra es muy precaria (es difícil asegurar que una palabra no la emplea
nadie: siempre podemos encontrar expertos en armaduras medievales que utilicen este
término; sin embargo, el uso de esta palabra es hoy mucho más reducido que en la Edad
Media).
- Por un choque de dos significantes: la palabra latina OCULUM da en castellano ojo; la
palabra latina OLEUM, si hubiera evolucionado con regularidad habría dado ojo también;
tendríamos un único significante con dos significados:
Órgano de la vista: OCULUM
Aceite: OLEUM
Es decir, estaríamos ante un caso de homonimia. Sin embargo, para evitarla, ojo <
OLEUM desaparece, y es sustituida por un préstamo árabe, aceite.
- Otras palabras mueren por tabú: los hablantes rechazan una palabra por diferentes
razones, que estudiaremos en el siguiente apartado.
Tabú y eufemismo
Hemos dicho que las palabras mueren también por tabú. Con este término polinésico
(que significa “prohibido”) nos referimos al rechazo que una comunidad lingüística
muestra hacia una palabra. Lo que se rechaza no es la palabra en sí, sino su referente; lo
que molesta son las cosas designadas por las palabras. Los tabúes se dan en todas las
culturas conocidas, y se relacionan generalmente con los mismos temas: el sexo, lo
sobrenatural, la excreción y la muerte.
¿Cuáles son las razones de los tabúes?
- En primer lugar creencias, ya sean de tipo religioso (así, algunas religiones prohíben
expresamente pronunciar el nombre de su Dios), ya supersticiones (relativas, por ejemplo,
a determinados animales, como la serpiente, la comadreja o el lobo).
- Otra razón es el inconveniente social que provoca nombrar determinadas partes del
cuerpo, objetos o lugares; así se explica que la pieza de la casa que más veces ha
cambiado de nombre sea el baño (retrete, aseo, servicio, lavabo, water, etc.).
La solución al tabú es el eufemismo, una palabra no contaminada que se emplea como
sustituta de la malsonante. De todos modos el eufemismo suele ser una solución
provisional: con el uso la nueva palabra se “mancha” con el referente al que designa y
debe ser reemplazada por otra.
Algunos autores señalan como característica de los eufemismos su ambigüedad: junto al
sentido con que se usan para reemplazar a la voz tabú, conservan su sentido normal, que
precisamente sirve para disimular la realidad. Cuando pierden su sentido normal y
designan exclusivamente la realidad que se pretende evitar, agotan su valor como
eufemismos y en seguida pasan a ser tabúes. Mientras retrete mantuvo su significado
originario de “lugar apartado”, sirvió como eufemismo para designar el “aposento dotado
de las instalaciones necesarias para orinar u evacuar el vientre” (Diccionario de la RAE);
cuando perdió su significado primero, pasó en seguida a ser una palabra tabú.
La muerte es un tema tabú en muchas culturas. Producto de este rechazo es la serie de
eufemismos y expresiones eufemísticas de que disponen las lenguas para referirse a ella;
el eufemismo inicial de morir en español fue fallecer (que tenía el significado original de
“faltar”); otros eufemismos utilizados hoy son faltar y desaparecer. Además tenemos toda
una serie de expresiones eufemísticas para referirse a la muerte, más o menos
humorísticas: estirar la pata, dar el último suspiro, dejar de existir, entregar el alma a Dios,
quedarse como un pajarito, quedarse fiambre, etc. El francés tiene expresiones como
fermer son parapluie (cerrar el paraguas) o n’avoir plus mal aux dents (no tener más dolor
de muelas).
El lenguaje político / administrativo emplea también eufemismos o expresiones
eufemísticas para suavizar una realidad que puede incomodar a los ciudadanos:
Revisión / reajuste de precios: subida de precios.
Desempleado / desempleo: parado / paro.
Económicamente débiles: pobres.
1.3.- IMPROPIEDAD LINGÜÍSTICA
Se llama así al uso incorrecto del significado de una palabra. Es el equivalente al término
incorrección, que alude a la reproducción incorrecta del significante:
- Quien haiga sido, que lo diga (incorrección al escribir y pronunciar haiga en lugar de
haya).
A - ¿Te vienes o te quedas?
B - Me es inverosímil (impropiedad).
Al responder B “me es inverosímil”, está utilizando impropiamente el adjetivo inverosímil,
pues le da a éste el significado de “indiferente”, mientras que el significado que
corresponde a inverosímil es “que no parece verdad, que no tiene apariencia de verdad”.
Cuando el locutor deportivo nos dice que “el primer tiempo está a punto de culminar”,
emplea este infinitivo impropiamente, pues su significado es el de “llegar una cosa a su
punto más alto” y no el de “terminar”, “finalizar”, que es el sentido con el que lo usa el
locutor.
Al generalizarse el uso impropio de una palabra, puede llagar a producir un cambio en el
significado de la misma: el significante adopta un nuevo significado que puede desplazar
al anterior o coexistir con él.
Las personas que emplean el lenguaje, oral o escrito, en los medios de comunicación
(prensa, radio, televisión), han de cuidar especialmente el idioma; sus incorrecciones e
impropiedades deterioran la lengua y generalizan usos inexactos. Los libros y manuales
de estilo de los medios de comunicación (Agencia EFE, El País, El ABC, etc.) son un
intento de encaminar el uso que los redactores y locutores deben hacer de la lengua.
4.- METÁFORA, METONIMIA Y SINÉCDOQUE
Metáfora:
Una metáfora es una comparación abreviada, sin nexo comparativo. Sustituimos una
palabra por otra parecida a ella, sin más explicaciones. Para establecer la comparación es
necesaria una semejanza entre el sustituido y el sustituto.
Las metáforas son frecuentes en la lengua usual, no sólo en la literaria: muchas palabras
polisémicas han adquirido uno de sus significados por metáforas cuyo uso se ha
extendido a todos los hablantes.
Estos significados metafóricos quedan ya para siempre asociados a la palabra y se
recogen en los diccionarios; no son como las metáforas literarias, comparaciones únicas y
aisladas empleadas por un solo escritor.
Las metáforas incorporadas a los diccionarios se llaman catacresis, y se indican
mediante la abreviatura fig. Que quiere decir lenguaje o sentido figurado.
Pajarraco: m. despectivo. Pájaro grande cuyo nombre se desconoce. // fig. Y fam. Hombre
disimulado y astuto.
El primero en llamar pajarraco a un hombre astuto y listo, comparándolo con un pájaro
grande, hizo una creación metafórica única e individual. Cuando este uso se hace común
a todos los hablantes, se crea un nuevo significado para el significante pajarraco. Se ha
producido un cambio semántico.
El mismo proceso es observable en las siguientes entradas de diccionario:
Capaz: que tiene ámbito o espacio suficiente para contener en sí otra cosa. // fig. Apto,
con talento y cualidades para una cosa determinada.
Danzar: bailar las personas. // fig. y fam. Mezclarse o introducirse en un negocio.
Fulanito es un ángel. Menganito un burro: se hace corresponder la forma de ser de las
personas con las connotaciones o significados asociados que dichas criaturas, ángel y
burro, respectivamente evocan.
De tal palo, tal astilla (palo-padres; astilla- hijos).
A perro flaco todo son pulgas (perro flaco-pobre, desamparado; pulgas-desgracias,
gastos).
Cuando en la metáfora falta el término real, cuya naturaleza hay que suponer o adivinar,
como es el caso de los refranes, suele denominarse metáfora pura.
Metonimia:
En la metonimia, la relación entre el elemento sustituto y el sustituido es de contigüidad
física, basada en la realidad.
Café: semilla del cafeto. // Bebida que se hace por infusión con esta semilla tostada y
molida. // Casa o sitio público donde se vende y toma esta bebida y otras consumiciones.
Como vemos, los tres significados de café están relacionados metonímicamente: de
significar el grano de la planta (significado 1), café pasa a ser la bebida que se hace con
ese grano (significado 2) y, en un estado posterior, el lugar donde se consume la bebida
(significado 3).
Sinécdoque:
Tipo especial de metonimia que consiste en llamar a un todo con el nombre de una parte
en él incluida o, al revés, dar a una parte el nombre del todo que la incluye.
Muchos cambios semánticos se crean de esta forma:
Cerebro: uno de los centros nerviosos constitutivos del encéfalo, situado en la parte
anterior y superior de la cavidad craneal. // fig. Cabeza, talento, juicio, capacidad. // fig.
Persona sobresaliente en actividades culturales, científicas o técnicas.
La acepción 2 es una traslación metonímica de 1:
a. Tiene mucha inteligencia.
b. Tiene mucho cerebro.
Podemos sustituir la expresión a. por la b. basándonos en una relación de contigüidad: la
inteligencia reside en el cerebro.
La acepción 3 es un caso de sinécdoque:
c. Los mejores cerebros españoles trabajan en los Estados Unidos.
Naturalmente, no trabajan sólo los cerebros, sino el resto de la persona también. Estamos
dando a un todo (persona) el nombre de una parte (cerebro) incluida en él.
LA PALABRA: RELACIONES SEMÁNTICAS. ESQUEMA
1.- Polisemia y monosemia.
2.- Homonimia.
3.- Sinonimia.
4.- Antonimia.
5.- Inclusión.
IDEAS PREVIAS
1.- ¿Puedes citar una palabra que tenga más de un significado?
2.- ¿Recuerdas dos palabras que signifiquen lo mismo?
Los significados de las palabras pueden relacionarse de muy distintas maneras. A veces
varias palabras comparten una parcela de su significado y entonces forman un campo
léxico. Pero hay otras relaciones: palabras que significan lo mismo, palabras que
significan lo contrario, palabras incluidas en el significado de otra, etc.
1.- POLISEMIA Y MONOSEMIA
Solemos asociar una palabra a un significado. Así, decimos que mesa significa ‘mueble
para comer, escribir, etc. compuesto de un tablero horizontal sostenido por uno o varios
pies’.
Sin embargo, es muy frecuente que a una palabra, a un significante para ser exactos, le
corresponda más de un significado.
Encierro:
1.- Lugar donde se encierra.
2.- Clausura, aislamiento.
3.- Prisión muy estrecha y sin comunicación.
4.- Acto de traer los toros de lidia al toril.
Decimos que las palabras con un solo significado son palabras monosémicas (del griego
“mono”, uno y “semia”, significado) y llamamos polisémicas (griego “poli”, muchos) a las
palabras con varios significados.
2.- HOMONIMIA
Hablamos de homonimia cuando dos palabras distintas, con significante y significado
diferentes, pasan a coincidir en su significante con el paso del tiempo.
Lima 1: fruto del limero, parecido exteriormente al limón, pero de pulpa verdosa, de sabor
algo dulce.
Lima 2: instrumento de acero de varias formas, con la superficie finamente estriada para
desgastar y alisar metales y otras materias duras.// Corrección paciente de los escritos,
pinturas y demás obras del entendimiento.
Lima 1 y lima 2 se pronuncian y escriben igual en la actualidad, pero en el pasado sus
significantes eran distintos. En el caso de la polisemia sólo hay un significante, que se
asocia a distintos significados, formando con cada uno de ellos un signo.
Así, vemos que lima 1 es una palabra monosémica, mientras que lima 2 es polisémica,
pues tiene dos significados.
¿Cómo distinguir polisemia de homonimia? Es difícil, pues hay que conocer la historia de
las palabras para saber si estamos ante una única palabra con dos o más significados
(polisemia) o ante dos palabras distintas con igual significante (homonimia).
Algunas formas de distinguirlas:
1.- En la polisemia los significados suelen estar muy próximos entre sí. Todos tienen
alguna relación. En la homonimia los significados están muy distantes.
2.- Cuando las palabras pertenecen a dos categorías gramaticales distintas (por ejemplo
vino: venir / vino: sustantivo) se trata sin duda de homonimia.
3.- En los diccionarios las palabras homónimas aparecen en dos entradas distintas,
mientras que las polisémicas son distintas definiciones agrupadas en la misma entrada.
3.- SINONIMIA
La relación de sinonimia se da cuando dos palabras con diferente significante poseen el
mismo significado.
Empezar: significante empezar; significado: ‘dar principio a una cosa’.
Comenzar: significante comenzar; significado: ‘dar principio a una cosa’.
A veces dos palabras tienen un significado próximo o muy próximo, pero no significan
exactamente lo mismo:
Tacaño: miserable, mezquino.
Ahorrativo: dícese del que ahorra con exceso.
Existe un juicio negativo en tacaño que no se da en ahorrativo. Ambos formarían parte del
mismo campo léxico, pero con un sema diferenciador.
Aunque muchas veces podamos establecer diferencias entre los significados de dos
palabras, otras veces dos términos significan lo mismo, y así aparecen recogidos en el
diccionario.
¿Para qué sirven los sinónimos?
- Para evitar repeticiones.
- Para dar variedad al discurso.
- Para evitar combinaciones de sonidos desagradables...
- En resumen, para cuidar el estilo.
No sólo los escritores, también los usuarios normales de una lengua empleamos
sinónimos en nuestras conversaciones cotidianas: preferimos quizá empezar a comer que
comenzar a comer, para evitar la repetición de co-co-; cuando nos referimos mucho a un
concepto empleamos diferentes denominaciones del mismo, buscando la variedad. En
muchos casos no empleamos sinónimos totales, sino palabras que, en ese texto concreto,
se refieren a la misma realidad, pero que no son sinónimos, pues no tienen exactamente
el mismo significado.
Sinónimos geográficos
Los nombres de muchos animales y plantas cambian en algunas zonas geográficas,
aunque designen a las mismas realidades y tengan el mismo significado. Se habla
entonces de sinónimos geográficos, o geosinónimos. Por ejemplo: ¿Qué nombres recibe
el cerdo en distintas zonas de España y América?: cochino, puerco, marrano, gocho,
chancho... todas estas palabras significan lo mismo, pero una se prefiere a las demás en
cada zona geográfica.
4.- ANTONIMIA
Se define como antonimia la relación entre dos términos con distinto significante y
significados opuestos.
Esta definición es algo confusa, pues se aplica a pares de palabras como blanco / negro,
marido / mujer o entrar / salir, cuyas relaciones no parecen del todo equivalentes.
Podemos distinguir bajo el concepto global de antonimia tres relaciones distintas:
Complementariedad
Relación semántica entre dos términos de modo que la negación de uno implica la
afirmación del otro; por ejemplo (no casado supone soltero; no soltero, casado; fíjate que
aunque existen otros estados posibles -viudo, divorciado- no afectan a la primera pareja:
uno puede estar soltero y a la vez ser viudo o divorciado)
Reciprocidad
Relación semántica de doble dirección entre dos referentes; para cada una de las
direcciones, la lengua dispone de una palabra:
Referentes
mujer
> ser mujer de >
hombre
< ser marido de <
Antonimia gradual
Afecta a dos términos opuestos, entre cuyos significados existen grados
intermedios (que la lengua puede nombrar mediante palabras concretas)
Frío
(templado, tibio)
Grande
(mediano)
caliente
pequeño
5.- INCLUSIÓN
Hay relación de inclusión cuando el significado de una palabra está contenido en el de
otra.
La relación de inclusión se da entre el archilexema y los lexemas de un campo
semántico: el archilexema tiene un significado más general que los lexemas, y puede
sustituirlos a todos sin especificar. Volviendo al ejemplo anterior, el archilexema ver puede
sustituir a cualquiera de los otros elementos del campo:
- Desde la montaña se otea (ve) el horizonte.
- En este momento está observando (viendo) el paisaje.
Dentro de la inclusión se conoce como hiperónimo (nombre grande) al término
incluyente, y como hipónimo (nombre pequeño) al término incluido. El hiperónimo tiene
menos rasgos semánticos que el hipónimo, su significado es más general, pero se puede
aplicar a más referentes, es más extenso. Por el contrario, el hipónimo tiene un significado
más preciso que el hiperónimo (al tener más rasgos semánticos) pero se puede decir de
menos seres, objeto o acciones de la realidad, tiene menos extensión.
Ten en cuenta que desde la teoría del campo semántico, el término incluido es el
archilexema, no el lexema:
Ver S1
Observar S1 + S2 + S11
Otear S1 + S2 + S4
Observar y otear tienen el significado de ver y aportan nuevos rasgos; incluyen a ver, no
están incluidos en él.
ACTIVIDADES
1.- Busca en un diccionario las siguientes parejas de signos, e indica si mantienen una
relación de polisemia o de homonimia.
lira / lira
hipo / hipohinojo / hinojo
hinchar / hinchar
nave / nave
promoción / promoción
pronunciar / pronunciar
pastoral / pastoral
huelga / huelga
temple / Temple
2.- Indica en la página reproducida del diccionario (pág. siguiente) los casos de polisemia
y de homonimia que encuentres (pág. 1075, tomo I, DRAE).
3.- Busca en el diccionario las siguientes palabras: álamo, chopo, pobo, alno, tiemblo,
tremolín, tremol.
Indica las relaciones de inclusión y de sinonimia que se establecen entre ellas. Intenta
estructurar un campo semántico con estas siete palabras estableciendo el archilexema,
los lexemas y los semas diferenciadores.
4.- Rellena los huecos de los siguientes textos con palabras que designen la misma
realidad:
Texto 1
Una visión muy especial de los Beatles a través del cine
Con la proyección de cuatro películas del mítico______________ británico The Beatles, la
organización del IV Cinefórum musical pretende mostrar una visión especial de la
_____________ de Liverpool. (...)
A través de estas películas los espectadores podrán contemplar la faceta más
desconocida del _____________________ inglés.
Texto 2
Tod Browning llega a la filmoteca. Poeta de lo visual olvidado durante décadas
Tod Browning ______________ de cine de Hollywood clásico, es un personaje clave en la
transición del cine mudo al sonoro.
Este ______________ lleva a cabo en sus películas un recorrido sentimental, tierno y
emocionado por el alma que acoge los cuerpos más grotescos e innobles de cuantos nos
rodean cotidianamente.
Su trabajo se consolida en 1925, cuando se reencuentra con Lon Chaney.
Actor y ____________ unen sus esfuerzos en esa obra maestra de la lírica tenebrosa que
es El trío fantástico.
LA PALABRA. EL SIGNIFICADO
ESQUEMA
- Tipos de significado:
- Léxico.
- Gramatical.
- Ocasional.
- Significado léxico:
- Campos semántico.
- Significado y nombre propio.
- Denotación y connotación.
IDEAS PREVIAS
1.- ¿Cómo distinguirías el significado de un verbo del de una preposición?
2.- ¿Puedes enumerar varias palabras que tengan un significado parecido a “felicidad”?
1.- LA PALABRA: EL SIGNIFICADO
Las palabras son signos; como tales, tienen una parte material, perceptible por
los sentidos, que llamamos significante. Cuando leemos u oímos una palabra percibimos
su significante mediante los sentidos de la vista y del oído respectivamente.
Además, como todo signo, las palabras poseen también un significado, un
concepto, de modo que cuando leemos u oímos una de ellas, ese concepto se reproduce
en nuestra mente. De la misma forma, cuando hablamos o escribimos, representamos
conceptos que llegarán a la mente de nuestros lectores u oyentes. Llamamos significado
a esos conceptos evocados por las palabras.
1.- TIPOS DE SIGNIFICADO
La ciencia que estudia el significado se llama semántica. La semántica
distingue tres tipos de significado en las palabras:
Significado léxico
Es el que poseen las palabras que evocan en nuestra mente conceptos como
seres, objetos (los sustantivos); cualidades (los adjetivos); acciones, procesos o estados
(los verbos); circunstancias (los adverbios). Fundamentalmente se da en estas cuatro
clases de palabras, caracterizadas por ser listas abiertas, es decir, grupos de palabras
muy amplias que el hablante no conoce de memoria.
El sustantivo “mujer” evoca en nuestra mente la idea de un ser humano con
determinadas características.
El adjetivo “valiente” trae a nuestra mente el concepto de una cualidad atribuible
a determinados seres.
El verbo “comer” se refiere a una acción que pueden llevar a cabo los seres
vivos.
El adverbio “así” indica la circunstancia concreta de una acción.
Significado gramatical
Es el que poseen las palabras y morfemas que precisan e indican relaciones
entre otras palabras. Es el objeto de estudio de la gramática (morfología y sintaxis).
En el sustantivo perr-o-s, los morfemas o y s evocan en nuestra mente el
masculino y plural, respectivamente. Estos contenidos nos sirven para relacionar esta
palabra con otras, en la lengua hablada o escrita: con el artículo los, el adjetivo fieros o el
verbo muerden, por ejemplo, pero no con el artículo la o el verbo muerde.
Las palabras y morfemas con significado gramatical son listas cerradas de
elementos, es decir, pocas unidades (género: -o, -a, -e, -triz, -dor...; número: -s, -es, -0;
persona: primera, segunda, tercera; tiempo, modo, etc.) fácilmente memorizables.
¿Qué tipo de significado tienen las preposiciones? El hecho de que formen
una lista cerrada y memorizada nos lleva a incluirlas entre las palabras con significado
gramatical. Las más usadas como a, de, en, con se emplean muchas veces con la función
de puro enlace, sin expresar ningún contenido:
¿Te acuerdas de ella?
Vamos a ver qué sucede.
Insistió en ello todo el día
Cuenta con mi apoyo
Sin embargo, estas preposiciones pueden cumplir su función sintáctica de
enlace indicando a la vez un contenido gramatical:
Vivo en Salamanca (lugar)
Vamos a la costa (destino)
Vengo de trabajar (procedencia)
Pesco con anzuelo (instrumento)
Significado ocasional
El tercer tipo de significado que podemos encontrar en las palabras de una
lengua es el significado ocasional. Se da en aquellas palabras que necesitan de otra
palabra en el discurso oral o escrito, para “llenarse” semánticamente: hacen referencia a
otras palabras que a su vez tienen significado léxico.
Por ejemplo, no tiene sentido preguntarse qué significa lo en déjalo, a menos
que situemos esta oración en un contexto lingüístico:
- ¿Qué hago con el libro? - Déjalo.
2.- SIGNIFICADO LÉXICO: LOS CAMPOS SEMÁNTICOS
Las palabras con significado gramatical y ocasional están perfectamente
estructuradas en las lenguas; así, encontramos por ejemplo pronombres de 1ª, 2ª y 3ª
persona, en singular y plural, con género masculino o femenino, etc.
Con estos criterios (persona, número, género...) se hacen cuadros que reflejan
perfectamente las relaciones entre las formas.
Sin embargo, cuando intentamos organizar y estructurar las palabras con
significado léxico surgen problemas: no es tan fácil establecer las relaciones entre dos
verbos como sorprender y asustar, por ejemplo, o entre dos adjetivos como cálido y tibio.
El intento más logrado de estructurar las palabras con significado léxico es la
teoría de los campos semánticos.
Campo semántico
Es un grupo de palabras con un significado en parte común y en parte diferente.
Para que exista el campo es necesaria la base de significado común.
¿Cómo se construye un campo semántico? Ante todo necesitamos la ayuda de
un diccionario; leyendo sus definiciones podemos reunir un grupo de palabras que tengan
una parte de significado semejante. A partir de ahí, y basándonos siempre en las
definiciones, iremos estableciendo los rasgos que diferencian el significado de una
palabra del de las otras.
Vamos a estudiar el campo semántico de ver. Para ello anotamos primero
todas las palabras que conozcamos cuyo significado esté relacionado con ver: mirar,
observar, ojear; para buscar más debemos acudir a un diccionario; los diccionarios de
sinónimos nos pueden ser útiles, pues agrupan las palabras de significado parecido. Un
diccionario básico para establecer campos semánticos es el Diccionario Ideológico de la
lengua española, de Julio Casares: la primera parte de este diccionario ordena todo el
vocabulario del español en campos ideológicos que son agrupaciones de palabras
relacionadas entre sí; en estos campos podemos buscar los términos que necesitamos.
Añadimos a los tres anteriores: bizcar, otear, aojar, atisbar, fisgar, catar, lincear,
remirar; una vez que tenemos esta lista de palabras, buscamos sus definiciones en un
diccionario alfabético normal:
- Ver: percibir por los ojos la forma y color de los objetos.
- Mirar: fijar deliberadamente la vista en un objeto.
- Bizcar: torcer los ojos al mirar.
- Otear: mirar desde lugar alto lo que está abajo.
- Ojear: dirigir los ojos o mirar a determinada parte.
- Aojar: ojear la caza.
- Atisbar: mirar, acechar, recatadamente.
- Fisgar: atisbar para ver lo que pasa en la casa del vecino.
- Catar: mirar (antiguo).
- Lincear: descubrir o ver lo que difícilmente se distingue.
- Remirar 1: volver a mirar una cosa.
- Remirar 2: mirar una cosa complaciéndose en ella.
- Observar: mirar y examinar atentamente.
A partir de estas definiciones podemos establecer los rasgos de significado
mínimo o semas que aparecen en el campo:
- S1: percibir por los ojos la forma y color de los objetos.
- S2: fijándose en un objeto deliberadamente.
- S3: torciendo los ojos.
- S4: desde lo alto lo que está abajo.
- S5: la caza.
- S6: con recato.
- S7: para ver lo que pasa en casa del vecino.
- S8: lo que difícilmente se distingue.
- S9: de nuevo.
- S10: con complacencia.
- S11: con atención.
- S12: antiguamente.
Una vez hecho esto, podemos estructurar el campo semántico:
S1
S2
S3
S4
S5
S6
Ver
+
Mirar
+
+
Bizcar
+
+
Otear
+
+
Ojear
+
+
Aojar
+
+
Atisbar
+
+
+
Fisgar
+
+
+
Catar
+
Lincear
+
S8
S9
S10
S11
S12
+
+
+
+
+
+
Remirar 1 +
+
Remirar 2 +
+
Observar
+
+
S7
+
+
+
Nuevos conceptos:
- Archilexema: es el concepto más general del campo semántico; aquel término que
puede sustituir a cualquier otro sin especificar; en este campo el archilexema es ver.
- Sema: rasgo de significado mínimo. Sus combinaciones nos dan los distintos
significados. Para que haya campo semántico deben existir uno o varios semas comunes
a todos los términos del campo. En este caso el S1.
- Lexema: la lista de palabras que, junto con el archilexema, forma el campo semántico.
3.- EL SIGNIFICADO DE LOS NOMBRES PROPIOS
Hemos hablado de que un signo tiene dos caras, el significante y el significado.
Ahora bien, los signos, las palabras de una lengua, por ejemplo, nos sirven para señalar a
objetos o aspectos del mundo real, para designar. Esta relación entre el signo y la
realidad se representa en el siguiente triángulo:
Significado
Significante
Referente
- Significante: es la parte material del signo, las letras con que se escribe o los sonidos
con que se pronuncia.
- Significado: el concepto que el significante reproduce en nuestra mente cuando lo
leemos o escuchamos.
- Referente: el objeto de la realidad al que puedo referir con un signo determinado.
Una palabra nos sirve para designar a distintos objetos de la realidad; así, con
el signo mesa puede referirme a diversas mesas.
Por otro lado, un único objeto de la realidad puede ser designado con distintos
signos: puedo emplear mesa, escritorio, mueble para señalar al mismo objeto.
Además, hay signos que no tienen un referente en la realidad, aunque sí en la
ficción: yo no puedo aplicar los signos sirena (ser mitológico) o unicornio a seres reales,
aunque tienen un significado que mis oyentes comprenden.
De los nombres propios podemos decir que no son signos, pues tienen
significante pero no significado. Luis no significa nada, son unos sonidos o letras que yo
aplico a uno o a varios seres de la realidad. En este caso le falta un vértice al triángulo:
Significante: Luis
Significado: 0
así.
Los nombres propios son de dos tipos:
Referente: las personas que se llaman
- Antropónimos: nombres de persona.
- Topónimos: nombres de lugar.
El hacho de que los nombres propios no tengan significado no quiere decir que
no lo hayan tenido nunca, pues la mayoría procede de nombres comunes, que tenían un
significado léxico establecido: Eugenio, Catalina, Irene... fueron originariamente nombres
comunes en griego.
Igual que hay nombres comunes que pasan a propios, hay nombres propios que
pasan a comunes, adquiriendo entonces un significado preciso: quijote, tenorio, celestina,
lazarillo... son ejemplos claros.
Muchos antropónimos se eligen actualmente por influjo del cine o la televisión.
Esto no es nada nuevo: en el Siglo de Oro las comedias de Lope de Vega ponían de
moda los nombres entre la población. La verdad es que el dramaturgo elegía los nombres
que mejor le venían para construir sus versos, según l número de sílabas, la rima, etc. Así
emplea mucho el nombre Leonor, por las posibilidades de rima que le ofrece con amor y
honor.
Al igual que ocurre con los nombres propios de persona, muchos topónimos
fueron inicialmente nombres comunes: León se llama así por la legión romana (Legio
Séptima Gémina), allí establecida. Cuando se perdió entre los hablantes la conciencia de
este origen, en la Edad Media, se creó el escudo de la ciudad (que está en el escudo de
España) con la figura del animal salvaje, que nada tiene que ver con las legiones
romanas.
De la misma forma que ocurre con los nombres propios de persona, los
nombres propios de lugar se aplican también a diferentes realidades: en América hay
muchas ciudades con nombres idénticos a las ciudades españolas: Cartagena, Toledo,
Mérida. Dentro de España hay pueblos con el mismo nombre. Casi todas las ciudades de
Inglaterra se repiten en los Estados Unidos.
4.- DENOTACIÓN Y CONNOTACIÓN
Algunos lingüistas distinguen dos tipos de significado en las palabras: el
cognitivo o intelectual y el afectivo o emotivo. Las palabras de la lengua cotidiana, frente a
las terminologías, pueden cargarse de asociaciones emocionales o connotaciones.
Significado denotativo es el significado de una palabra común a todos los
hablantes; aquél que aparece en el diccionario y que todos reproducen en su mente al
escuchar o leer la palabra.
Significado connotativo es el contenido que una palabra evoca sólo en un
hablante (o en un grupo reducido de hablantes), por razones emotivas o afectivas
asociadas al término en cuestión. Si un significado connotativo pasa a ser de dominio
general se convierte en denotativo, se recoge en el diccionario como una nueva acepción
de la palabra.
Si buscamos en el diccionario la palabra holgazán encontramos la siguiente
definición, que conforma su significado denotativo: aplicase a la persona perezosa que no
quiere trabajar.
Ahora bien, pensemos que, por razones personales, esta palabra evoca
individualmente otro significado, asociado a una experiencia o vivencia previa (por
ejemplo nos recuerda a una persona concreta a quien llamaban siempre así, nos recuerda
a una persona que utilizaba con frecuencia esa palabra, etc.): ése sería su significado
connotativo; por esa razón afectiva podríamos preferir holgazán a vago o perezoso,
palabras de igual significado denotativo (sinónimos) pueden diferenciarse por sus
particulares asociaciones emotivas o evocativas.
ACTIVIDADES
1.- Indica si el significado de las siguientes palabras es léxico, gramatical u ocasional:
aprender
comprar
recuerdo
para
dulce
belleza
figura
este
según
él
más
por
mi
luego
suyo
ahí
mí
en
tomar
verde
2.- Estructura, con ayuda de un diccionario, los siguientes términos en dos campos
semánticos, indicando el archilexema y los rasgos semánticos más importantes de cada
campo:
CAMPO SEMÁNTICO
ARCHILEXEMA
RASGOS
SEMÁNTICOS
TÉRMINOS
Perfume, peste, hedor, aroma, fragancia, olor, cabello, ceja, pelo, cana, pestaña, rizo.
3.- Busca en un diccionario o enciclopédico el origen de los siguientes nombres propios:
Catalina, Irene, Eugenio, Alejandro.
4.- Piensa en dos palabras que tengan para ti un significado especial, al margen del
significado común a los hablantes. Explica en qué consiste ese significado connotativo y
cómo ha llegado a adquirirlo la palabra.
5.- Agrupa las siguientes palabras en campos semánticos, y estructura éstos indicando su
archilexema y los rasgos significativos mínimos diferenciadores o semas. Emplea para
ello un diccionario.
Encantar, oscurecer, incumplir, faltar, enlutar, hechizar, anochecer, omitir, embrujar,
evitar, ensombrecer, hadar, ensalmar, eludir, velar.
PROCEDIMIENTOS DE FORMACIÓN DE PALABRAS
Analice la formación de las palabras siguientes e indique de qué tipo es cada una según
su estructura.
Inconstitucional.
Dependencias.
Carabobo.
Bonificaciones.
Canalillo.
Reestructuración.
Reelaboración.
Acanalado.
Ultrasensible.
Sensitivo.
Papagayo.
Municipal.
Carnicero.
Trotaconventos.
Submarino.
Recomponer.
Anaranjado.
Higiénico.
Destructivo.
Supersónico.
Provincialismo.
Descartar.
Reemplazamiento.
Campos semánticos
Construye los campos semánticos de los accidentes geográficos y de los colores
presentes en este texto.
A lo lejos una torrentera rojiza rasga los montes; la torrentera se ensancha y forma un
barranco; el barranco se abre y forma una amena cañada. Refulge en la campiña el sol de
agosto. Resalta, al frente, el azul inmenso, el perfil hosco de las lometas; los altozanos
hinchan los lomos; bajan las laderas en suave encarnadura hasta las viñas. Y
apelotonados, dispersos, recogidos en los barrancos, resaltantes en las cumbres, los
pinos asientan sobre la tierra negruzca la verdosa mancha de sus copas rotundas.
Azorín, Antonio Azorín, Bruguera, Barcelona, 1973.
REPASO DE ACENTUACIÓN DE DIPTONGOS, TRIPTONGOS E HIATOS
1. DIPTONGO: Unión de dos vocales en una sola sílaba. Las combinaciones de vocales
posibles son:
a. Vocal abierta + vocal cerrada (o viceversa) (siempre que la cerrada no sea
tónica).
b. Vocal cerrada + vocal cerrada (siempre distintas).
En los dos casos, para la acentuación gráfica, se siguen las reglas generales de
acentuación de palabras agudas, llanas y esdrújulas. El lugar de colocación de la tilde
varía en las dos posibles combinaciones antes descritas de la siguiente manera:
a. La tilde se coloca sobre la vocal abierta: ordenáis.
b. La tilde se coloca sobre la segunda vocal: lingüística.
*Excepción: las palabras agudas terminadas en los diptongos –ay, -ey, -oy no llevan tilde:
estoy, jersey, pai-pay.
2. TRIPTONGO: Unión de tres vocales en una sola sílaba. La combinación de vocales es:
Vocal cerrada + vocal abierta + vocal cerrada (las cerradas no son tónicas).
Para la acentuación gráfica se siguen las reglas generales de acentuación de
palabras agudas, llanas y esdrújulas. La tilde se coloca siempre sobre la vocal abierta:
renunciáis.
*Excepción: las palabras agudas terminadas en triptongos con –y final, no llevan tilde:
Uruguay.
3. HIATO: Secuencia de dos vocales juntas que forman parte de sílabas consecutivas. Las
combinaciones de vocales posibles son:
a. Vocal abierta + vocal abierta.
b. Vocal cerrada + vocal cerrada (iguales).
c. Vocal abierta + vocal cerrada (o viceversa) (la cerrada debe ser tónica).
En los casos a) y b), para la acentuación gráfica, se siguen las reglas generales
de acentuación de palabras agudas, llanas y esdrújulas.
a. León, aéreo, canoa.
b. Friísimo, chiita.
c. Todas las palabras llevan tilde en la vocal cerrada, independientemente de
que lo exijan o no las reglas generales de acentuación: dormía, raíl, reír, evalúas.
LOS SIGNOS DE PUNTUACIÓN
1.
Añade los signos de puntuación que faltan en este texto narrativo:
Buenos días don Jorge ¿Está la señorita Julia?
Ahora no puede salir ¿Qué pasa?
El portero encaja bien la negativa No le preocupa el tono apremiante un poco grosero
de Jorge Esconde algo que le hará dominar la situación
Verá Vd es un poco delicado y aquí en la escalera
Pase dice Jorge asustado Mientras cierra la puerta el portero interpreta a su gusto la
amplia invitación y entra hasta el salón Jorge le sigue decididamente molesto y tras
cerrar la puerta que conduce al resto de la casa se vuelve hacia él ¿Qué ocurre?
Es por lo de don Luis La policía está abajo porque le han visto esta mañana por el
barrio y claro piensan que lo más lógico es que venga a casa de su mujer
Juan José MILLÁS Visión del ahogado, Alfaguara
2.
Escribe los signos de interrogación y de exclamación que faltan en este texto
teatral:
RUBÉN.— No ama usted al divino William
EL MARQUÉS.—En el tiempo de mis veleidades literarias, lo elegí por maestro. Es
admirable Con un filósofo tímido y una niña boba en fuerza de inocencia, ha realizado
el prodigio de crear la más bella tragedia. Querido Rubén, Hamlet y Ofelia, en nuestra
dramática española, serían dos tipos regocijados. Un tímido y una niña boba Lo que
hubieran hecho los gloriosos hermanos Quintero
RUBÉN.—Todos tenemos algo de Hamletos.
EL MARQUÉS.—Usted, que aún galantea. Yo, con mi carga de años, estoy más próximo
a ser la calavera de Yorik.
UN SEPULTURERO.—Caballeros, si ustedes buscan la salida, vengan con nosotros. Se
va a cerrar.
EL MARQUÉS.—Rubén, qué le parece a usted quedarnos dentro
RUBÉN.—Horrible
EL MARQUÉS.—Pues entonces sigamos a estos dos.
RUBÉN.—Marqués, quiere usted que mañana volvamos para poner una cruz sobre la
sepultura de nuestro amigo
Ramón María DEL VALLE-INCLÁN Luces de bohemia, Espasa Calpe
3.
Coloca los paréntesis donde corresponda en este otro fragmento teatral:
DIONISIO.—Un sombrero de copa, para la boda. Lo saca. Este me lo ha regalado
mi suegro hoy. Es suyo. De cuando era alcalde. Y yo tengo otros dos que me
he comprado. Los saca. Mírelos usted. Son muy bonitos. Sobre todo se ve en
seguida que son de copa, que es lo que hace falta… Pero no me sienta bien
ninguno… Se los va probando ante el espejo. Fíjese. Este me está chico…
Miguel MIHURA Tres sombreros de copa, Espasa Calpe
4.
Coloca los signos de puntuación correspondientes en las siguientes oraciones:
a)
Para qué has venido si ya lo sabías
b)
Si ya lo sabías para qué has venido
c)
Le preguntó si ya lo sabía
d)
Le preguntó Lo sabes ya
e)
Vimos pasar por delante de nosotros coches nuevos viejos de lujo de ocasión
f)
Bueno yo esto mejor me estoy callado
5.
Añade los signos de puntuación que faltan en este texto periodístico:
La ironía, al servicio del medio
En un ensayo de tres páginas el ganador de la categoría de 16 años Sergio
Carrasco Garrido plantea con mucha ironía soluciones prácticas al problema del agua
Y comienza a hacerlo desde el título Por qué el agua nunca te llegará hasta el cuello
Vituperios al derroche del aguafiestas y otros conflictos madrileños
Y continúa Somos unos 5 500 000 habitantes en la Comunidad de Madrid Vamos
a imaginarnos que cada día entre las largas duchas la comida y otros asuntos
consumimos de media unos 10 litros de agua por persona y día demasiado poco
suponemos Las cuentas cuyos números en millones de euros estarían bien para el
mayor premio gordo de todos los tiempos nos dicen que en un año 19 800 millones de
litros desaparecen del Canal de Isabel II tres mil seiscientos litros por persona y
año
Más adelante Sergio crea un personaje al que llama Pepito a través del cual va
resolviendo dudas y echando reprimendas por la mala utilización que hace del agua
Para rematar el ensayo concluye
Si […] hacéis comprender a vuestros hijos el significado oculto del agua […] algún
día os devolverán esa sonrisa impregnada […] habiendo entendido lo que significa el
desarrollo sostenible
Aula de El Mundo, 5 de junio de 2003
6.
Explica por qué aparecen los puntos suspensivos entre corchetes en el texto
anterior.
7.
Coloca los signos de puntuación en estos poemas de Antonio Machado:
Corazón ayer sonoro
Nuestro español bosteza
ya no suena tu monedilla de oro
Es hambre Sueño Hastío
Tu alcancía
antes que el tiempo la rompa
se irá quedando vacía
Doctor tendrá el estómago vacío
El vacío es más bien en la cabeza
Confiemos
en que no será verdad
nada de lo que sabemos
8.
Coloca los signos de puntuación que faltan en el siguiente texto ensayístico:
La tendencia a convertir las opiniones en parte simbólica de nuestro organismo y a
considerar cuanto las desmiente como una agresión física ha herido mis
convicciones no solo es una dificultad para la educación humanista sino también
para la convivencia democrática Vivir en una sociedad plural impone asumir que lo
absolutamente respetable son las personas no sus opiniones y que el derecho a la
propia opinión consiste en que esta sea escuchada y discutida no en que se la vea
pasar sin tocarla como si de una vaca sagrada se tratase Lo que el maestro debe
fomentar en sus alumnos no es la disposición a establecer irrevocablemente lo que
han elegido pensar la voz de su espontaneidad su autoexpresión etc sino la
capacidad de participar fructíferamente en una controversia razonada aunque ello
hiera algunos de sus dogmas personales o familiares Y aquí se echa en falta
alarmantemente el hábito de abstracción en los neófitos cuya ausencia también más
tarde en estudiantes universitarios lamentamos con amargura los profesores de
materias esencialmente teóricas Consiste en una dificultad casi terminal para deducir
de premisas para despegarse de lo inmediato o de lo anecdótico para no buscar tras
cada argumento la mala voluntad o el interés mezquino del argumentador sino la
debilidad de lo argumentado Algunos autores como Giovanni Sartori culpan de esta
deficiencia al predominio de lo audiovisual que proporciona impresiones sobre la
letra y la palabra que acostumbran a las razones
Fernando SAVATER El valor de educar, Ariel
9.
Coloca los signos de puntuación en usos lingüísticos y no lingüísticos:
POSOLOGÍA
Dosis medias
500 750 mg cada 8 horas o 1 g 2 3 veces al día
Niños 50 mg por kg de peso y día repartidos en 3 tomas con un intervalo de 8 horas
Recién nacidos y prematuros Gotas pediátricas 15 gotas cada 8 horas
Niños entre 5 y 8 kg de peso Gotas pediátricas 20 25 gotas cada 8 horas
Suspensión oral Clamoxyl Sobres 125 mg 1 sobre cada 8 horas Clamoxyl
Suspensión 1 2 cucharadita cada 8 horas
10. Busca un prospecto de un medicamento e indica los usos no lingüísticos de los
signos de puntuación que figuren en el mismo.
11. Explica para qué se emplean los paréntesis y los corchetes en las siguientes
oraciones:
a)
El interfaz MIDI (Musical Instrument Digital Interface) sirve para establecer la
transferencia de sonidos al ordenador.
b)
Desde aquella mañana (sin duda, de difícil recuerdo) no había podido cruzar por
aquel paso de peatones.
c)
—Ya sabes que no se le escapa una (!)
d)
Los proyectiles caían desde todos los lugares. […] Se había hecho imposible ver
nada desde la lejanía.
03/06/2006 14:14 rociomadrid #¿Necesitas ayuda?. Ortografía Hay 4 comentarios.
Actividades de acentuación
ACTIVIDADES DE ACENTUACIÓN DE DIPTONGOS, TRIPTONGOS E HIATOS
1. Separa en sílabas las siguientes palabras y coloca la tilde en los casos en los que sea
necesario:
ambulancia
debeis
familia
oasis
interviu
dia
titubee
clausula
reir
viuda
dieciseis
huesped
cuadruple
leido
tambien
caoba
friisimo
maniquies
gratuito
tardio
camion
estiercol
leon
relaciones
murcielago
fue
acuatico
linea
cancion
ilusion
sueño
vio
mia
baul
accion
2. Clasifica las palabras de la actividad anterior según tengan diptongo o hiato.
3. Coloca la tilde en las formas verbales que deban llevarla:
huiamos
paseabamos
destrui
ganareis
desviareis
acentuo
pensabais
insinuo
incluid
sabiamos
canteis
escuchais
construis
copies
fuesemos
4. Conjuga la segunda persona del plural del presente de indicativo de estos verbos:
estudiar
limpiar
esquiar
averiguar
desviar
copiar
aliviar
enviar
deshauciar
bailar
5. Observa tu respuesta a la actividad anterior y completa: En los triptongos, la tilde se
coloca siempre sobre la vocal __________.
6. Escribe las tildes en las palabras que lo precisen:
desvia
poesia
raiz
miel
puntua
duo
acentua
sonreir
heroico
aupa
sabria
Raul
reuno
cantaria
buho
guia
pua
prohibe
vehiculo
caida
acordeon
marea
geologo
buitre
aereo
frio
leiste
feisima
Andalucia
area
oceano
creeme
heroe
coetaneo
craneo
CASOS ESPECIALES DE ACENTUACIÓN
1. Coloca tilde donde haga falta en el siguiente texto:
Dijo el rey al filosofo: —Pues dame ejemplo del que deja de hacer lo que le esta bien y
hace otra cosa, y no la sabe ni la puede aprender; y asi torna a lo que suele hacer y no
lo puede recobrar, y acaba confundido.
Dijo el filosofo: —Señor, dicen que en una tierra habia un religioso y demandole un
hombre posada. Y diosela.[…] Y este religioso hablaba hebraico, y pagose el huesped
de aquel lenguaje, y estuvo en esto algunos dias por aprenderlo.
Dijo el religioso: —Con gran derecho debes tu caer en lo que cayo el cuervo, porque
quieres aprender hebraico.
Dijo el huesped:—¿Como fue eso?
Dijo el religioso: —Dicen que un cuervo vio andar una perdiz y pagose mucho de su
andamiento, y tuvo esperanza de aprenderlo y no pudo. Y cuando se fue, que no pudo
aprender, quiso tornar a su andar que era de primero y no pudo, que se le habia
olvidado.
Y asi con gran derecho te podra acaecer otro tal por querer aprender lo que no es para
ti, que dicen que loco es el que se entromete de hacer lo que no le esta bien y mudarse
de la medida a otra que no le esta bien; que a las veces acaece mucho mal a los
hombres en mudarse de la medida alta a la baja, y asi se derraman sus cosas y sus
estados.
Calila e Dimna, Castalia (Adaptación)
2. Pon tilde en los siguientes compuestos donde sea necesaria:
balonvolea
indoeuropeo
cariacontecido
galaico-portugues
salpimentar
electrodomestico
iconografia
milhojas
limpiauñas
calientaplatos
politico-social
pasapures
germano-suiza
salvamanteles
pesabebes
3. Coloca la tilde en las palabras que deban llevarla:
a) ¿Quien ha solicitado un billete de ida?
b) Aun no han llegado de la excursión.
c) Aun cuando pudiera, no lo haria.
d) Recuerdale que vendra seguramente solo.
e) No es ese nuestro paraguas.
f) Nos enviaron erroneamente este mensaje.
g) ¡Que pesado te estas poniendo!
h) No se practicamente nada de el.
i) ¿Escuchame, por favor!
4. Explica por qué llevan tilde las palabras que aparecen subrayadas en las oraciones:
a) Ésta mañana vendrá.
b) Hizo sólo la solicitud.
22/03/2006 18:52 rociomadrid #¿Necesitas ayuda?. Ortografía Hay 29 comentarios.
ORTOGRAFÍA DE LAS LETRAS B / V
1.
Completa las siguientes oraciones con b o v:
a) Ser_ía la comida con exquisito cuidado.
b) De_es sa_er _i_ir dentro de tus posi_ilidades económicas.
c) Ella sa_e bien cuáles son los ser_icios que desea de mí.
d) Los atracadores conci_ieron un plan que nadie supo pre_er.
e) Conser_o un recuerdo im_orra_le de aquel _erano.
f) No ca_e en ninguna ca_eza semejante idea.
g) La olla, que her_ía en la cocina, desprendía un agrada_le aroma.
h)Tenemos que conce_ir nue_as esperanzas.
i) Contri_uyó a una colecta.
j) No se atre_ieron a replicarle.
k) Los días tra_ajados deben retri_uirse de acuerdo con lo con_enido.
l) Be_a solamente agua si quiere _i_ir muchos años.
2.
Escribe una oración con cada una de las siguientes palabras homófonas:
A ver (preposición a seguida del verbo ver).
Haber (infinitivo del verbo haber).
Haber (sustantivo: «sueldo», «hacienda, caudal»).
Bienes (sustantivo: «posesiones»).
Vienes (forma del verbo venir).
Botar (verbo: «dar botes», «hacer rebotar»).
Votar (verbo: «emitir un voto», «dar una opinión»).
Rebelarse (verbo: «oponerse», «sublevarse», «resistirse.
Revelarse: (verbo: «descubrirse, manifestarse»).
Baca: (sustantivo: «portaequipajes»).
Vaca (sustantivo: «animal rumiante»).
Bacilo (sustantivo: «microbio»).
Vacilo (forma del verbo vacilar).
Basto (adjetivo: «tosco»).
Vasto (adjetivo: «enorme, inacabable»).
Bello (adjetivo: «hermoso»).
Vello (sustantivo: «pelo blando y suave»).
Tubo (sustantivo: «cilindro hueco»).
Tuvo (forma del verbo tener).
Cabo (sustantivo: «graduación militar», «accidente geográfico»).
Cavo (forma del verbo cavar).
TEXTO 2: GUÍA PARA EL COMENTARIO DE TEXTOS LITERARIOS
A. MODOS DE ESTUDIAR LITERATURA
1º. LECTURA DE OBRAS LITERARIAS:

En extensión: lectura de muchas obras.

En profundidad: comentario o explicación de textos. El comentario de textos literarios
es una herramienta que nos permite acercarnos al texto, profundizar en sus
componentes temáticos (fondo) y estilísticos (forma), ponerlo en relación con una
época, una ideología... En definitiva comprender y enjuiciar textos de forma meditada
y apreciar su valor estético de forma técnica, sin dejarnos llevar por la primera
impresión que suscita el texto en nuestro ánimo.
2º. ESTUDIO DE LA HISTORIA DE LA LITERATURA como elemento auxiliar.
El comentario de textos será tanto mejor cuanto más se haya leído y mejor se conozca la
Historia de la Literatura.
B. FINALIDAD DEL COMENTARIO DE TEXTOS: Explicar el contenido y las
características lingüísticas de un texto con la intención de provocar una reflexión en el
receptor. No se trata de explicar conceptos teóricos, sino de aplicarlos, con la finalidad de
analizar el texto. Se tendrá que remitir constantemente al texto objeto de análisis
mediante citas literales y referencias a las líneas o fragmentos donde aparece el aspecto
que se comenta.
El resultado final del comentario dependerá en gran medida de conocimientos:

Personales: La habilidad en el análisis y en la redacción, sensibilidad, agudeza, etc.

Otros que se adquieren con el tiempo: lengua, literatura, métrica, geografía, historia,
sociología, economía, religión, etc.
Los objetivos del comentario de texto son:
a. Fijar con precisión qué dice el texto (fondo).
b. Dar razón de cómo lo dice (forma).
Son buenas todas las explicaciones que, razonadamente, establezcan una relación clara
y ordenada entre el fondo y la forma de un texto. No existe una única posibilidad de
resolver el problema de la interpretación de un texto, sino diferentes maneras de
aproximarse a él, pero hay unas técnicas más útiles que otras y existen ciertos aspectos
imprescindibles para un buen análisis de los que nos ocuparemos en lo que sigue.
C. MÉTODO DE COMENTARIO DE TEXTOS: Es importante seguir las fases que se
explican a continuación:
1º. LECTURA ATENTA DEL TEXTO.
§ Leer despacio y comprender las palabras.
§ Buscar en el diccionario todo lo que no entendemos o entendemos a medias (en el
examen no contaremos con un diccionario, pero su uso continuado proporciona un
conocimiento del léxico suficiente para encararlo con tranquilidad).
§ Si cuando buscamos en el diccionario hay dos o más acepciones de una palabra, sólo
nos interesará la que conviene al texto (para saber cuál es esta acepción hay que sustituir
mentalmente la palabra problemática por sus diferentes acepciones hasta que se realice
un ajuste perfecto al texto).
En esta fase hay que comprender el texto, conocer su sentido literal, no interpretar qué
sentido especial tiene alguna expresión.
2º. LOCALIZACIÓN O PRESENTACIÓN DEL TEXTO. Con esta fase comienza el
ejercicio del comentario. Se trata de situar el texto dentro de la producción de su autor y
de la época correspondiente.
Utilizaremos nuestros conocimientos de Literatura y de Historia de la literatura y
seguiremos los siguientes pasos:
1. Relacionar la obra con el autor, su vida y el total de su producción. Destacaremos
sólo aquellos aspectos biográficos que sean relevantes para interpretar el texto. No es
pertinente emplear estos datos como excusa para demostrar todo lo que se sabe sobre la
vida del autor o su carácter. Es conveniente que nos detengamos sólo en aquellas
cuestiones que sean significativas en nuestro comentario.
2. Situarla dentro del contexto histórico e ideológico de su tiempo.
3. Relacionar la obra con la época o movimiento literario. Seleccionaremos marcas en
el texto de la época o el movimiento literario en el que se encuadra. Comentaremos si
estamos ante una obra típica de su época o si, por el contrario, presenta novedades
significativas; cada autor y cada obra puede poseer rasgos originales y propios.
4. Resaltar las características del género literario y subgénero al que pertenece.
Mencionaremos sólo aquellas que influyen directamente en el texto u obra que se va a
comentar.
5. Si analizamos un fragmento, hay que ubicarlo dentro de la obra a la que pertenece y
relacionar ésta con el resto de la obra del autor. Podemos encontrarnos con las
siguientes situaciones que requieren diferentes tratamientos:
§ El texto pertenece a una obra que conocemos entera: Situar exactamente el fragmento
en la obra, para ello, narraremos el argumento de la obra y señalaremos en qué punto se
inserta.
§ El texto pertenece a una obra de la que conocemos sólo una parte: Narrar brevemente
el argumento o contenido de la obra y situar en ella el capítulo (la escena o el episodio,
etc.) que conocemos. Narrar brevemente el contenido de dicho capítulo y situar en él el
fragmento que se nos ha propuesto para la explicación.
§ El texto pertenece a una obra de la que no conocemos nada: Proceder como si el texto
fuera completo. (Puntos 1-4).
3º. REALIZACIÓN DEL RESUMEN Y DETERMINACIÓN DEL TEMA.
- Resumen: Un buen resumen condensa lo esencial del texto conservando sólo los
detalles importantes. Hay que sintetizar el contenido del texto, no reproducir la forma.
Algunos consejos para realizar el resumen son:
§ No utilizar la sintaxis ni el léxico del texto original.
§ No parafrasear el texto.
§ No debe contener interpretación ni opiniones propias.
§ No debe ser más largo que el texto, en general, ocupará unas diez líneas, con letra
normal.
§ Hay que evitar el lenguaje poético, es preferible utilizar lenguaje estándar.
§ Casi todos los textos permiten organizar el resumen en un solo párrafo.
§ Muchos tienen tendencia a usar fórmulas fijas como: El texto nos habla de..., El autor
narra..., El fragmento propuesto para resumir trata sobre...; no hay inconveniente en
admitir estos clichés, pero quizá resulten más adecuados en otras fases del comentario,
en el resumen hemos de economizar palabras y podemos prescindir de este tipo de
recursos.
- Tema: Si el texto es fragmento de una obra mayor:
§ Aclararemos brevemente cuál es el tema general de la obra y cuáles sus motivos
temáticos principales. Es necesario insertar el texto dentro del argumento de la obra a la
que pertenece.
§ A continuación debemos definir el tema del fragmento y ponerlo en relación con el de la
obra.
Si eliminamos del resumen todos los detalles y definimos sólo la intención del autor,
conseguiremos enunciar el tema.
Hay que encontrar un enunciado (oración o frase) que sólo sea aplicable al texto que
comentamos y que exprese su idea fundamental, su mensaje, lo que el autor ha querido
decir; para ello se recomienda buscar un sustantivo abstracto que condense el mensaje
(queja, exhortación, crítica, lamento...) y acompañarlo de tantos adyacentes como
necesitemos para que la frase resultante identifique el texto en cuestión. Puede también
optarse por una oración parecida a éstas: El autor se lamenta de..., El amor traspasa los
límites de..., El protagonista se queja de...
Sus características son: claridad, exactitud y brevedad (no debería superar las diez o
quince palabras). El tema debe enunciarse con brevedad, pero no de forma simplista
(decir que un texto tiene como tema el amor es demasiado impreciso: debemos matizar
esa afirmación)
Se podría decir que el tema es un resumen del resumen, pero, al contrario que en este
último, aquí sí se debería interpretar el sentido del texto o la intención del autor.
4º. DETERMINACIÓN DE LA ESTRUCTURA: Establecer cómo se ha organizado el
contenido del texto para que forme un todo. Si no se pudiera establecer la estructura de
un texto, su interpretación resultaría difícil, e incluso podría ser incoherente. Todo texto
coherente comporta dos tipos de organización de los contenidos:
1. Estructura externa: Disposición de los enunciados en capítulos, apartados, párrafos,
etc:

Si se trata de un texto poético, realizar el análisis métrico: medida, rima, estrofa,
poema... Si es posible, debemos poner estos datos en relación con otras obras del
autor y movimiento literario. Si un autor introduce novedades en el empleo de la
métrica, dejaremos constancia de ello.

Si es un texto narrativo, indicar cuántos párrafos o capítulos lo forman. Señalar
también sus elementos constitutivos: focalización y tipo de narrador, tiempo externo e
interno, tipo de espacio, personajes... Sería conveniente buscar una explicación para
cada uno de estos aspectos: ¿Por qué el autor opta por una determinada focalización o
espacio? ¿Qué efectos busca? ¿Con qué intencionalidad los emplea? Así
profundizaremos en el significado último del texto.

Si es un texto teatral, indica los cambios de escena o de acto y los diferentes planos
que aparezcan: apartes, conversaciones cruzadas...
2. Estructura interna: División del texto en partes teniendo en cuenta el desarrollo
lógico del contenido, la evolución del tema.
Todas las partes de un texto se relacionan entre sí, porque todas contribuyen a expresar
el tema; pero se diferencian en que el tema adquiere variaciones en cada una de ellas.
Hemos de delimitar de qué línea a qué línea (o verso) va cada parte y explicar de qué
habla cada una de ellas.
Para hacer la división se pueden tener en cuenta diversos factores:

Las estructuras propias de los géneros y de los modos de elocución: narración
(planteamiento, nudo y desenlace, estructura circular, final abierto, etc.); texto teatral
(monólogo, diálogo rápido, aparte...), argumentación (tesis y argumentos), etc.

La división en párrafos, ya que éstos constituyen en sí mismos una unidad de
contenido y, por lo tanto, sería una incongruencia que se dividieran.

Si establecemos más partes de las necesarias perderemos el carácter unitario del
texto (no creamos que si tenemos muchas partes somos más precisos).

En poesía es un error considerar que cada parte coincide con cada estrofa (aunque a
veces puede ocurrir).
5º. ANÁLISIS DE LA FORMA PARTIENDO DEL CONTENIDO: La forma son las
palabras y giros gramaticales que integran el texto. Debemos tener presente que entre
todos los medios lingüísticos que el idioma ofrece al escritor, éste ha elegido los que le
parecían más adecuados para expresar el contenido. En el comentario debemos
comprobar de qué modo el contenido determina la forma del texto y explicar cada
rasgo formal como una exigencia del contenido. Este es el principio fundamental del
comentario de texto: el contenido está presente en todos los rasgos formales.
Esta es la fase más extensa del comentario, en ella hay que explicar no sólo qué dice el
texto, sino cómo lo dice. Para ello, analizaremos la lengua del texto; los recursos
fónicos, morfosintácticos, semánticos y estilísticos y los relacionaremos con el desarrollo
del tema y la intención del autor. Siguiendo los apartados que se han propuesto en la
estructura interna, explicaremos cómo los recursos estilísticos resaltan los
contenidos, describiendo así la relación entre el contenido y la forma.
Para que no olvides nada, aquí tienes algunas de las cuestiones lingüísticas y estilísticas
que siempre debes tener presentes y que te ayudarán a determinar la estructura y el
desarrollo temático de un texto:
o Aspectos fónicos: modalidades oracionales, métrica y peculiaridades fonéticas.
o Aspectos morfosintácticos: personas y tiempos verbales, estructuración sintáctica
(conectores), abundancia de adjetivos, sustantivos o verbos:
§ Análisis de los sustantivos (concreto, comunes, abstractos...)
§ Análisis de los adjetivos (especificativos, epítetos, sensoriales, evocativos,
ponderativos...)
§ Análisis de los pronombres (personas gramaticales, uso enfático, afectivo...)
§ Análisis de los determinantes y verbos
§ Estudio de la sintaxis (por ej., en una descripción impresionista predominan las
oraciones breves, simples o yuxtapuestas; en un argumentación retórica, los periodos son
largos y subordinados.)
o
Aspectos
léxico-semánticos:
campos
semánticos
predominantes,
tecnicismos,
neologismos, cultismos, presencia de mitos o tópicos, connotación o denotación. Estudio
del registro lingüístico...
o Aspectos estilísticos: Debes señalar las figuras retóricas o estilísticas que aparecen en
el texto y relacionarlas con el contenido: aliteraciones, comparaciones, metáforas,
repeticiones...
o Aspectos textuales: los modos de elocución (narración, descripción, diálogo,
argumentación...)
o Tipo de lenguaje: culto, común, coloquial...
También sería interesante establecer relaciones del contenido y los recursos con la
globalidad de la obra, su movimiento literario y su época.
Es el momento de comentar las posibles relaciones de intertextualidad: cuáles son sus
posibles hipotextos o si se ha convertido en hipertexto de otros posteriores.
Esta fase 5ª (análisis de la forma partiendo del contenido) puede realizarse de forma
conjunta con la anterior (determinación de la estructura), de forma que iremos explicando
de forma conjunta la forma y el contenido del texto.
6º. CONCLUSIÓN.
Si terminamos el comentario sin una conclusión dará la impresión de que no hemos
captado la esencia y el significado del texto. La conclusión se compone de:
1. Síntesis de nuestras observaciones: Reducir a líneas generales los resultados del
análisis, no sumar los datos en una farragosa enumeración, sino resaltar su rasgo común;
para ello es necesario releer el comentario fijándose en las observaciones que tienen un
origen o finalidad común.
2. Opinión personal argumentada y apoyada en el comentario: Se trata de una
valoración técnica del fragmento y de la obra, por lo que es inadecuado limitarse a una
opinión impresionista que refleje nuestra apreciación superficial sobre el texto).
Busquemos una frase adecuada para concluir con brillantez.
§ En lo referente a la forma, normalmente tendremos que alabar la calidad literaria de los
textos que se nos propongan.
§ En lo que se refiere al contenido puede que el tema o el sentido del texto no nos
agraden, podemos decirlo de forma modesta y firme sin fórmulas hechas (no olvidar que
el defecto puede estar en nuestro gusto).
Bibliografía: Cómo se comenta un texto literario, Fernando Lázaro Carreter y Evaristo
Correa Calderón, Madrid, Cátedra, 1994.
NUEVO TEXTO PARA TRABAJAR LOS ELEMENTOS DE LA COMUNICACIÓN Y LAS
FUNCIONES DEL LENGUAJE
1. Analice el acto de comunicación que se da entre los personajes del siguiente texto,
explicando todos sus elementos.
2. Identifique las funciones del lenguaje que están presentes en el texto y señale algunos
rasgos lingüísticos característicos de cada una de ellas.
Ansúrez se había sentado al otro lado de la mesa, donde no había más que un papel y un
teléfono, aquella mesa brillante, en cuya superficie uno podía mirarse y reconocerse.
Alargó el brazo y recogió el cigarrillo que el Presidente le ofrecía, un Partagás de
contrabando, elaborado con los mejores productos de Vuelta Abajo.
- Esa idea de escribir una novela me parece buena. Desde luego, cuente usted
con que los gastos de edición correrán a cargo de la Caja… A no ser, claro está, que
tenga usted ya contrato con alguna Casa Editorial… Porque, en tal caso, la Caja se
limitará a comprarle un cierto número de ejemplares… digamos tantos como funcionarios,
uno por barba, incluidos os botones.
- No tengo ningún compromiso, claro. En realidad, la idea de escribir una novela es
muy reciente. Como en otros casos muy conocidos, obedece al hecho de que la lírica me
viene ya estrecha como instrumento de expresión. Necesito algo más amplio y más
narrativo. Una historia de amor no puede contarse en verso, aunque haya habido casos…
- Luego, ¿lo que quiere usted contarnos es una historia de amor? ¿La suya
propia?
- La mía, sí, aunque contada de tal manera que pueda resultar la historia de amor
de todo el mundo. Y no una historia abstracta, como pudiera parecer a simple vista, sino
concreta y con nombres, usted lo dijo, la mía propia… Esta relación entre lo concreto más
personalidad y la generalidad es uno de los milagros que sólo el arte puede realizar.
- Y el dinero, no lo olvide usted.
La última frase del Presidente no la entendió bien Ansúrez. Al menos así se lo dio
a entender a Elisa cuando, horas más tarde, le contaba la entrevista.
Gonzalo TORRENTE BALLESTER, La novela de Pepe Ansúrez, Planeta,
Barcelona, 1994, pp. 51-52
Texto 3: TEXTO PARA TRABAJAR LOS ELEMENTOS DE LA COMUNICACIÓN
Analiza el doble circuito comunicativo en el siguiente texto. Es el inicio de un relato de
Sherlock Holmes, el famoso detective creado por sir Arthur Conan Doyle.
Al repasar mis notas sobre los setenta y pico casos en los que –
durante los últimos ocho años- he estudiado los métodos de mi amigo
Sherlock Holmes, descubro que se puede calificar a muchos de trágicos,
a algunos de cómicos, a bastantes simplemente de extraños, pero a
ninguno de vulgar; y es que, como Holmes no trabajaba para
enriquecerse, sino por amor a su arte, se negaba a intervenir en cualquier
investigación que no tendiera a lo infrecuente o incluso a lo fantástico.
Sir Arthur CONAN DOYLE,
“La banda moteada”, en Antología del relato policial,
Vicens Vives.
SITUACIÓN O CONTEXTO EXTRALINGÜÍSTICO
Comprende todas las circunstancias espaciales y temporales en las que se desarrolla el
acto comunicativo.
Un enunciado tan simple como ¿Qué hora es? puede dar lugar a varias interpretaciones
según donde se emita:
- Durante una conferencia, si alguien se lo dice a su compañero de asiento, se interpreta
como “Estoy aburrido, ¿falta mucho para que termine?”
- En la calle, si un transeúnte formula la pregunta, sólo desea saber la hora.
El contexto situacional puede anular el contenido de un mensaje. Un cartel de No hay
localidades tiene sentido en la taquilla de un teatro, pero no tendría sentido en mitad de
una calle.
Así pues, el contexto extralingüístico o situación está formado por las circunstancias que
rodean la comunicación y los elementos sobreentendidos por motivos culturales,
situacionales, etc., y que resultan también fundamentales en la comunicación.
Si decimos Juan está gordo, puede significar que tal persona, que el emisor y el receptor
conocen, tiene bastantes kilos; pero si lo dice en clase el profesor de lengua, puede
significar ejemplo de oración copulativa.
De la misma manera, en un diálogo como el siguiente:
- ¿Han traído el pan?
- Hoy es domingo.
la escueta respuesta significa “No, porque hoy es domingo y los domingos no traen el
pan”. Esto es lo que suele llamar presuposición (se denominan así los elementos
lingüísticos no explícitos, por ser sobreentendidos por emisor y receptor).
La situación pertenece al nivel extralingüístico porque es el contexto físico, social o
anímico en que se hallan el emisor y el receptor al comunicarse, el conjunto heterogéneo
de circunstancias extralingüísticas que rodean el acto de la comunicación: el lugar, el
tiempo, el estado de ánimo, la formación cultural, la intención de los interlocutores, ruidos,
interferencias, etc. La situación influye en el acto comunicativo, pudiendo hacer variar la
interpretación del mensaje o contribuir a su mayor o menor comprensión.
Hay que diferenciar este contexto situacional o extralingüístico del contexto lingüístico
(el resto de las unidades que aparecen alrededor de una determinada y que ayudan a su
comprensión).
El contexto situacional es estudiado por la pragmática, cuyo objeto de investigación es la
competencia comunicativa de los interlocutores y la adecuación de los enunciados a su
intención y al contexto en que se producen.
La competencia comunicativa es la capacidad del emisor y receptor para elaborar e
interpretar adecuadamente los enunciados, para lo cual deben tener en cuenta, no sólo el
significado explícito de sus palabras, sino también las implicaciones y contenidos
implícitos con que los elabora el emisor, así como las inferencias que de ellos pueda
extraer el destinatario.
Así pues, hay determinados factores que marcarán la relación entre los hablantes, el
enunciado y el contexto situacional y que son imprescindibles para comprender el
mensaje:
- Factores situacionales internos pertenecientes al mundo de los interlocutores, que
condicionarán la naturaleza del enunciado: cultura, ideología y creencias (políticas,
morales, religiosas), afectos, estados de ánimo, necesidades, son motivaciones de los
interlocutores que influyen en su actuación y marcarán decisivamente la intención del
mensaje y su interpretación. Estas motivaciones harán que el emisor, además del mero
contenido informativo, pretenda producir efectos en el receptor: persuadirle, tranquilizarle,
asustarle, agradarle, irritarle, inquietarle, pedirle, aconsejarle; lo que le obliga a conocer el
mundo del interlocutor y sus posibles reacciones, para desarrollar una estrategia
comunicativa adecuada a su intención y a las motivaciones del destinatario. El mundo
interior de los interlocutores y el conocimiento que tienen uno del otro, condicionarán la
elección del tema, el uso de fórmulas de tratamiento y cortesía, la entonación, el nivel del
lenguaje utilizado, la extensión del enunciado, las distancias...
- Factores situacionales externos, como el tiempo y el espacio en que se desarrolla la
comunicación, las circunstancias ambientales, el mundo social al que pertenecen los
interlocutores y sus relaciones afectivas, de parentesco, laborales o académicas,
marcarán también la relación comunicativa e influirán en el contenido y la forma del
enunciado.
- Por otro lado, para ser coherente, todo enunciado ha de adaptarse a un conocimiento
del mundo, a unos marcos conceptuales o de referencia que pertenezcan a la
experiencia del emisor y del receptor y se ordenen en torno a un campo conceptual que
recoja todos aquellos conceptos, acciones y relaciones que tienen que ver con él. Ello
supone no mezclar la velocidad con el tocino o la gimnasia con la magnesia; o que al
hablar de matemáticas hagamos uso de todo un abanico conceptual referido a ellas, pero
no a unicornios o al vuelo sin motor.
- El marco del discurso es un factor pragmático- enunciativo importante, ya que el
género o tipo de discurso que se utilice condicionará la naturaleza del mensaje y dará
lugar a una situación comunicativa distinta: lo que resulta increíble en un relato realista
puede ser coherente y verosímil en un cuento fantástico y viceversa; habrá que analizar la
adaptación de emisor y receptor al distinto marco de comunicación que existe en una
conversación intranscendente, en una conferencia, en un mitin político, en un mensaje
publicitario, en un sermón dominical, en un texto jurídico o administrativo, en un carta
personal o comercial, en una sesión de chistes o en un velatorio.
En definitiva, la pragmática pretende analizar la competencia comunicativa de los
interlocutores, las estrategias de la comunicación, la naturaleza de los mensajes y sus
rasgos lingüísticos y retóricos, condicionados por las circunstancias conceptuales,
emocionales e intencionales de los que se comunican, por su dominio de los factores
situacionales externos y del marco del discurso.
PERÍFRASIS VERBALES
Una perífrasis verbal es una construcción integrada por dos formas verbales, la primera
un verbo auxiliar y la segunda un verbo auxiliado; entre ambas puede aparecer un nexo,
que suele ser una preposición (de, a) o una conjunción (que). El verbo auxiliar es el
portador de los morfemas de persona, número, tiempo, aspecto y modo; y la forma verbal
no personal es la portadora del significado léxico.
La perífrasis realiza la función unitaria de núcleo del predicado.
VERBO AUXILIAR en forma personal + (NEXO) + VERBO AUXILIADO en forma no
personal
CÓMO RECONOCER LAS PERÍFRASIS:
-
El verbo auxiliar pierde o ve modificado su significado léxico.
-
El sujeto y los complementos son seleccionados por el verbo auxiliado.
-
No se puede sustituir el verbo auxiliado por ningún elemento equivalente
(pronombre, oración subordinada con verbo conjugado, etc.).
o
Perífrasis:
§
Viene avisándote desde hace tiempo.
§
Anda criticando a todos.
§
En ese momento se echó a reír.
§
No grites, que Pedro va a trabajar un rato.
§
Tengo que comprarme un abrigo. * Lo tengo. * Tengo eso.
o
§
No perífrasis:
Viene pensando en sus problemas desde su casa (CCL de viene).
§
Anda arrastrando los pies (Anda así).
§
Se echó a descansar en el sofá (CCL de se echó).
§
Pedro va a trabajar todos los días al colegio (Pedro va a eso todos los días) (Al
colegio es un CCL de va).
CLASES DE PERÍFRASIS VERBALES
Las perífrasis permiten expresar valores aspectuales y modales que no se recogen en la
conjugación del verbo.
Perífrasis Modales: Expresan el predicado como posible, probable, necesario, etc. Se
construyen siempre con infinitivo.
-
Obligación:
o Tener que + infinitivo: Tengo que leer esto.
o Haber de + infinitivo: Hemos de aprovechar el tiempo.
o Deber + infinitivo: Debo estudiar mucho.
o Haber que + infinitivo: Había que hacerlo así.
-
Probabilidad o posibilidad:
o Poder + infinitivo: En esa rifa puedes ganar un coche.
o Deber de + infinitivo: Deben de ser las seis.
o Venir a + infinitivo: Viene a costar unas mil pesetas.
Perífrasis Aspectuales: Informan sobre el desarrollo de la acción verbal, atendiendo a
las diversas gases por las que puede pasar.
-
Ingresivas: señalan la inminencia de la acción: ir a, estar para, estar a punto de +
infinitivo: Voy a escribir.
-
Incoativas: señalan el momento en que se inicia la acción: empezar a, arrancar a,
decidirse a, echar(se) a, ponerse a, romper a + infinitivo: Empiezo a escribir.
-
Reiterativas: señalan la repetición del proceso: volver a, soler + infinitivo: Vuelvo a
estudiar.
-
Perfectivas: señalan el fin o la interrupción de la acción:
o Con infinitivo: dejar de, acabar de, terminar de, llegar a + infinitivo: Acabo de venir.
Llegó a tener tres casas.
o Con participio: señalan el resultado de una acción o proceso previo: llevar, tener, haber
+ participio. Lleva hechas varias cenas. Te tengo dicho que te calles.
-
Durativas: acción en su desarrollo: estar, ir, venir, andar, seguir, continuar, llevar +
gerundio: Estoy escribiendo. Llevo pensándolo varios días.
ORACIONES SIMPLES PARA ANALIZAR
Analiza morfosintácticamente las siguientes oraciones (son muy fáciles, podéis con ellas).
1. El azar es casi siempre favorable al hombre prudente.
2. ¿No te parece ridícula su actitud?
3. De viciosos y tragones están llenos los panteones.
4. Los tres chopos de la ribera parecían tres paraguas con las puntas hacia arriba.
5. La abnegación ennoblece a las personas más vulgares.
6. Un grajo permaneció inmóvil sobre los pardos terrones.
7. Los conquistadores juzgaban inhóspitos aquellos parajes.
8. Ese vino lo tomaban en tiempo de Salomón.
9. Un hombre noble se olvida de las pasadas injurias.
10. En la mesa y el juego se conoce al caballero.
11. ¿En qué academia os preparan para la Selectividad?
12. ¿Se le cayó a tu padre la escoba por la ventana?
13. A ese profesor no le gusta el comportamiento de sus alumnos.
14. ¿Qué sucedió aquella noche en la playa?
15. El examen de Matemáticas se lo repetirá el profesor a sus alumnos.
16. En casa de mis padres cada uno se encarga de su ropa.
17. Los detenidos fueron arrollados por una multitud encolerizada.
18. Las sopas eran devoradas por el niño a la puerta de la cueva.
19. ¿Será reivindicada por los sindicatos la reducción de la jornada laboral?
20. Varios pesqueros españoles son acosador por patrulleras de Gibraltar.
21. Los incidentes fueron provocados por varios encapuchados.
22. Esa mujer llevaba deformados los zapatos.
23. Raíz de todos los males es la avaricia.
24. Luis y su amigo Antonio se saludaron en el parque.
25. La mujer de tu hermano se ha comprado unos pendientes de oro.
26. La ingratitud es hija de la soberbia.
27. ¿Os hicisteis muchos regalos tu hermano y tú el día de Reyes?
28. A tu compañero de clase se le entregará el certificado mañana por la mañana.
29. Varios obreros extranjeros fueron atacados en Alemania por grupos neonazis.
30. ¡No te vistas tan despacio!
31. La disciplina es poder.
32. De los niños nadie se preocupó.
33. El acusado escuchó impasible la sentencia.
34. Te espero a las siete en la puerta de mi casa.
35. El patio de la escuela era pequeño.
36. Esas personas son muy poco solidarias.
37. La otra noche entrevistaron en la televisión a los dos candidatos.
38. Ricardo se sentó junto a mí.
39. Ayer por la tarde visitamos la catedral.
40. He visto deprimido a tu amigo Jorge.
41. Debes confiar en tus posibilidades.
42. Han nombrado director del Instituto a un profesor de Matemáticas.
43. El lunes por la mañana te sentirás mucho mejor.
44. Un equipo de médicos forenses investiga la causa de la muerte.
45. Mañana escribiré una postal a nuestra amiga holandesa.
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Documento adaptado por Mg. FABIOLA RUGELES DUARTE. Docente DESH-UNAB.
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