TEXTOS PARA TRABAJAR LOS ELEMENTOS DE LA COMUNICACIÓN. i NIVEL SEMÁNTICO La semántica estudia el significado de los signos lingüísticos y las relaciones que estos signos mantienen entre sí a través del significado. EL SIGNIFICADO: Desde el punto de vista semántico se puede decir que la palabra es una unidad lingüística con significado completo e independiente. E El significado es el conjunto de características conceptuales asociadas indisolublemente a un significante. Todo significado está formado por una combinación de rasgos significativos mínimos, los semas, que lo caracterizan y lo distinguen de otros significados. Ejemplo: “Hombre”: animado, humano, adulto, no femenino / “Mujer”: animado, humano, adulto, no masculino / “Niño”: animado, humano, no adulto, no femenino. Los grupos de palabras (de la misma categoría gramatical) relacionadas en su significado por el hecho de que comparten algunos semas comunes forman un campo semántico. Cada comunidad lingüística distribuye y estructura los campos semánticos según sus necesidades; es lógico que una comunidad que no conoce determinados objetos o no haya pensado en ciertas relaciones o conceptos, tampoco tenga palabras que los definan. El campo semántico de ‘nieve’ para nosotros es mucho más reducido que para los esquimales, pero bastante más extenso que para los habitantes de la selva. Aisladamente una palabra puede tener varios significados, pero cuando la situamos en un contexto lingüístico, adquiere un significado concreto y único de todos los posibles, el sentido. En él influyen tanto el contexto lingüístico como el extralingüístico. - “Amigo” puede tener el sentido de ‘novio’ o ‘pareja’ por circunstancias situacionales. - “Mar”: “El mar estaba en calma”. “Estoy en un mar de dudas”. Lo determinante es el contexto lingüístico. - “Maestro”: “El maestro dio una gran estocada”. “Mi maestro me felicitó por el examen”. Contexto lingüístico. - “Zapatilla”: “Pásame la zapatilla”. Varía su sentido según sea dicho entre bailarines o entre fontaneros: contexto extralingüístico. Por otra parte, las palabras expresan nuestro conocimiento de la realidad, pero ese conocimiento no es sólo abstracto, es también experimental y concreto, y, por consiguiente, afectivo. Llamamos denotación al significado objetivo y conceptual que tienen las palabras y que son comunes a todos los hablantes. Las connotaciones son los significados emotivos, subjetivos (positivos o negativos) que ciertas personas o grupos añaden a la denotación. La connotación es una de las causas esenciales de los cambios de significados. Las connotaciones pueden ser muy personales o estar muy generalizadas. - “Gallina”: significado denotativo: ‘tipo de ave’; significado connotativo: ‘cobarde’. -“Negro”: significado denotativo: ‘ausencia de color’; significado connotativo: ‘muerte, tristeza, dificultad…’. FENÓMENOS SEMÁNTICOS: Se verifican a partir de las relaciones que se establecen entre el significante y el significado de las palabras: a. Sinonimia: consiste en la equivalencia de significados entre distintos significantes. Diferenciamos dos tipos de sinonimia: - Total: Identidad total de todos los semas de distintos significantes que hace que dos palabras sean intercambiables en todos los contextos: “burro / asno”, “ileso / indemne”. Es muy escasa. - Parcial: Significados parcialmente parecidos entre varios significantes que pueden intercambiarse en ciertos contextos: “coger / tomar”: “Voy a coger / tomar un taxi”. “Voy a tomar /*coger café”. b. Homonimia: Se produce cuando hay significantes semejantes con significados diferentes; son palabras de origen distinto que por evolución fonética han coincidido en su significante. - Teniendo en cuenta la categoría gramatical de las palabras homónimas, se establecen dos tipos de homonimia: - Homonimia absoluta: las palabras pertenecen a la misma categoría gramatical: “banda”: Del fr. ant. bande, vende: ‘cinta’ / Quizá del gót. Bandwō: ‘grupo’. - Homonimia parcial: las palabras pertenecen a categorías gramaticales diferentes: “vino”: Del lat. Vinum: ‘licor alcohólico’ / Del lat. Venīre: 3ª persona del singular del pretérito perfecto simple de indicativo del verbo ‘venir’. - Por otra parte, teniendo en cuenta que la identidad de los significantes puede darse en distintos niveles, las palabras homónimas pueden ser: - Homónimos homófonos: identidad sólo en el nivel fónico: “bello”: Del lat. bellus / “vello”: Del lat. Villus. - Homónimos homógrafos: identidad en el nivel fónico y gráfico: “cola”: Del lat. vulg. coda, y este del lat. Cauda: ‘extremidad posterior del cuerpo y de la columna vertebral de algunos animales’. / “cola”: Del lat. colla, y este del gr. κόλλα: ‘pasta que sirve para pegar’. c. Polisemia: Cuando al significante de una palabra le corresponde un único significado, decimos que la palabra es monosémica: “bicarbonato”, “abdomen”… Hay muy pocas palabras monosémicas, la mayoría son polisémicas, pues a un significante podemos asociarle más de un significado y sólo el contexto hace que el significante adquiera un sentido único. Entre los diferentes significados de un término polisémico suele haber relación. La polisemia responde al principio de economía de la lengua porque facilita la memoria, pero puede suponer a veces ambigüedad en el mensaje. Ejemplo: “banco”: ‘de un parque, de dinero, de arena, de sangre’, etc. d. Antonimia: Se produce cuando el significado de una palabra es contrario al de otra. En esta oposición de significados hay matices que nos llevan a establecer distintos tipos de antónimos: - Complementarios: se da una oposición total de significados de forma que la negación de uno implica la afirmación del otro: “vivo / muerto”, “acentuado / inacentuado”. - Graduales: existen términos intermedios, por lo que la negación de uno no implica la afirmación del otro: “frío / caliente”, “alto / bajo”. - Recíprocos: la afirmación de la existencia de un término implica la afirmación de la existencia del otro: “padre / hijo”, “comprar / vender”. EL CAMBIO SEMÁNTICO: Llamamos cambios semánticos a aquellas variaciones que afectan al significado de una palabra, manteniéndose el significante. La lengua es una realidad viva, por eso cambia el significado de muchas palabras, bien eliminando el significado primitivo y dando a la palabra uno nuevo (“contaminar” significaba en el Lazarillo de Tormes ‘atacar al ciego con engaños para poder comer lo que éste le negaba’), bien dotando de nuevos significados a un término, sin que por ello pierda su significado primero (“pluma”). A) Las causas de los cambios semánticos son las siguientes: a. Históricas: Están conectadas con el progreso humano; una cosa puede cambiar de forma o de uso y puede llegar a ser otra completamente diferente, a pesar de lo cual sigue siendo designada con el antiguo significante: “carretera”. b. Lingüísticas: Cuando dos palabras aparecen a menudo juntas en el mismo contexto lingüístico, la elipsis del primer término puede hacer que su significado pase al segundo: “(cigarro) puro”, “(gaseosa) Casera”. c. Psicológicas: La repugnancia o al asco que inspiran ciertos animales explican su aplicación para definir a las personas con intención de insultarlas: “reptil, víbora, sapo, buitre”. También hay connotaciones positivas: “lince, zorro”. d. Sociales: Son muchas y diversas. Señalaremos tres: - Generalización de un tecnicismo: Se amplía el significado al pasar de un círculo reducido a uno más amplio: “faena”, “plural”. - Prejuicios de clase o grupo social: Uso como insultos de algunos términos: “verdulera, villano”. - Aparición de tabúes y eufemismos: Tabú es aquella palabra que nombra una realidad desagradable y que los ciudadanos evitan: “muerto”. Para no utilizar la palabra tabú, se recurre al eufemismo: término neutro o con connotaciones positivas: “difunto”. Hay casos en que los tabúes son reemplazados por pablar que no buscan suavizar la expresión, sino hacerla humorísticamente más dura y malsonante, son los disfemismos: “fiambre”. B) Modos de los cambios semánticos: a. Metáfora: Es una comparación abreviada, sin nexo comparativo. Sustituimos una palabra por otra parecida a ella, sin más explicaciones. Para establecer la comparación es necesaria una semejanza (real o imaginaria) entre el sustituido y el sustituto. Las metáforas son frecuentes en la lengua usual, no sólo en la literaria y muchas palabras polisémicas han adquirido uno de sus significados por metáforas cuyo uso se ha extendido a todos los hablantes. Estos significados metafóricos quedan ya para siempre asociados a la palabra y se recogen en los diccionarios; no son como las metáforas literarias, comparaciones únicas y aisladas empleadas por un solo escritor. Las metáforas incorporadas a los diccionarios se llaman catacresis, y se indican mediante la abreviatura fig. que quiere decir lenguaje o sentido figurado. Ejemplo: “Pajarraco”: m. despectivo. Pájaro grande cuyo nombre se desconoce. // fig. y fam. hombre disimulado y astuto. El primero en llamar pajarraco a un hombre astuto y listo, comparándolo con un pájaro grande, hizo una creación metafórica única e individual. Cuando este uso se hace común a todos los hablantes, se crea un nuevo significado para el significante pajarraco. Se ha producido un cambio semántico. b. Metonimia: la relación entre el elemento sustituto y el sustituido es de contigüidad física, basada en la realidad. Ejemplo: “Café”: semilla del cafeto. // Bebida que se hace por infusión con esta semilla tostada y molida. // Casa o sitio público donde se vende y toma esta bebida y otras consumiciones. Como vemos, los tres significados de café están relacionados metonímicamente: de significar el grano de la planta (significado 1), café pasa a ser la bebida que se hace con ese grano (significado 2) y, en un estado posterior, el lugar donde se consume la bebida (significado 3). c. Sinécdoque: Tipo especial de metonimia que consiste en llamar a un todo con el nombre de una parte en él incluida o, al revés, dar a una parte el nombre del todo que la incluye. Muchos cambios semánticos se crean de esta forma. Ejemplo: “Cerebro”: uno de los centros nerviosos constitutivos del encéfalo, situado en la parte anterior y superior de la cavidad craneal. // fig. cabeza, talento, juicio, capacidad. // fig. persona sobresaliente en actividades culturales, científicas o técnicas. La acepción 2 es una traslación metonímica de 1: a. “Tiene mucha inteligencia”. b. “Tiene mucho cerebro”. Podemos sustituir la expresión a. por la b. basándonos en una relación de contigüidad: ‘la inteligencia reside en el cerebro’. La acepción 3 es un caso de sinécdoque: c. “Los mejores cerebros españoles trabajan en los Estados Unidos”. Naturalmente, no trabajan sólo los cerebros, sino el resto de la persona también. Estamos dando a un todo (persona) el nombre de una parte (cerebro) incluida en él. d. Etimología popular: los hablantes creen percibir familiaridad entre dos palabras porque sus significantes son parecidos y una contagia su significado a la otra, aunque no tengan ningún parentesco etimológico. Son vulgarismos: “sanjuán, andalias, mondarinas…” LA PALABRA. CAMBIOS SEMÁNTICOS ESQUEMA 1.- Vida de las palabras. 2.- Tabú y eufemismo. 3.- Impropiedad lingüística. 4.- Metáfora, metonimia y sinécdoque. IDEAS PREVIAS 1.- ¿Eres consciente de que algunas palabras “no se pueden decir” porque son desagradables e inconvenientes? 2.- ¿Qué queremos destacar de una persona cuando decimos que es una “tortuga”? Es habitual comparar las palabras con los seres humanos: como nosotros, tienen cuerpo (el significante) y alma (el significado). Según esta identificación, las palabras también nacen, crecen y mueren. A lo largo de su vida, el cuerpo y el alma de las palabras pueden sufrir alteraciones: unas veces cambia el significante, manteniéndose el significado: así, el verbo hacer se escribió en otra época fazer, y se pronunciaba de forma distinta a la actual. Otras veces cambia el significado, aunque el significante se mantenga constante: el significante azafata significaba originariamente “criada de la reina”; con el tiempo pasó a significar “camarera distinguida que presta sus servicios a bordo de un avión”. Hoy en día nadie emplearía esta palabra con su significado primitivo. Llamamos cambios semánticos a aquellos que afectan al significado de una palabra. Los eufemismos, las impropiedades lingüísticas, los casos de metáfora y metonimia, etc., son hechos lingüísticos que provocan cambios semánticos. 1.- LA VIDA DE LAS PALABRAS Nacimiento de las palabras ¿Cómo nace una palabra? Existen varios procedimientos: - Muchas veces tomamos la palabra de una lengua extranjera; es lo que llamamos préstamo lingüístico. Así, las palabras turismo, mitin o líder son préstamos del inglés; las palabras blusa, champán u hotel son préstamos del francés; o las palabras acuarela, caricatura y desfachatez, proceden del italiano. - En ocasiones se une un significado nuevo con un significante ya existente, creándose un signo nuevo; es el caso de azafata, o el de cabo que, a su significado originario de “extremo” añade después los de “lengua de tierra que penetra en el mar”, “individuo de la clase de tropa inmediatamente superior al soldado” y “cuerda”. - Otra forma de crear una palabra nueva es mediante siglas, como TALGO, SIDA u OTAN. - A veces se convierte un nombre propio en común: sandwich es el apellido de un lord inglés; Rebeca pasa de ser el nombre de la protagonista de una película de Alfred Hitchcock a designar una prenda de vestir; y ya vimos casos como quijote o celestina (que incluso crean derivados: quijotesco, celestinesco). Rebeca: película dirigida por A. Hitchcock en 1940 y protagonizada por Joan Fontaine y Laurence Oliver, basada en el folletín de Daphne du Marier. Su protagonista se vestía con una prenda de este tipo; se trata de un jersey sin cuello, abrochado por delante y cuyo primer botón está a la altura de la garganta. Muerte de las palabras Las palabras también mueren; esto sucede cuando dejan de usarse: muchas palabras del diccionario están muertas porque no las emplea ya nadie (aunque puede argumentarse que están vivas en los textos de los que han sido tomadas, por ejemplo cuando se trata de una obra literaria medieval). ¿Por qué mueren las palabras? - Por designar una realidad que cae en desuso: por ejemplo almófar es un arabismo referido a una parte de la armadura (concretamente una malla de hierro con que el guerrero se protegía la cabeza). Desde el momento en que deja de haber armaduras, la vida de esta palabra es muy precaria (es difícil asegurar que una palabra no la emplea nadie: siempre podemos encontrar expertos en armaduras medievales que utilicen este término; sin embargo, el uso de esta palabra es hoy mucho más reducido que en la Edad Media). - Por un choque de dos significantes: la palabra latina OCULUM da en castellano ojo; la palabra latina OLEUM, si hubiera evolucionado con regularidad habría dado ojo también; tendríamos un único significante con dos significados: Órgano de la vista: OCULUM Aceite: OLEUM Es decir, estaríamos ante un caso de homonimia. Sin embargo, para evitarla, ojo < OLEUM desaparece, y es sustituida por un préstamo árabe, aceite. - Otras palabras mueren por tabú: los hablantes rechazan una palabra por diferentes razones, que estudiaremos en el siguiente apartado. Tabú y eufemismo Hemos dicho que las palabras mueren también por tabú. Con este término polinésico (que significa “prohibido”) nos referimos al rechazo que una comunidad lingüística muestra hacia una palabra. Lo que se rechaza no es la palabra en sí, sino su referente; lo que molesta son las cosas designadas por las palabras. Los tabúes se dan en todas las culturas conocidas, y se relacionan generalmente con los mismos temas: el sexo, lo sobrenatural, la excreción y la muerte. ¿Cuáles son las razones de los tabúes? - En primer lugar creencias, ya sean de tipo religioso (así, algunas religiones prohíben expresamente pronunciar el nombre de su Dios), ya supersticiones (relativas, por ejemplo, a determinados animales, como la serpiente, la comadreja o el lobo). - Otra razón es el inconveniente social que provoca nombrar determinadas partes del cuerpo, objetos o lugares; así se explica que la pieza de la casa que más veces ha cambiado de nombre sea el baño (retrete, aseo, servicio, lavabo, water, etc.). La solución al tabú es el eufemismo, una palabra no contaminada que se emplea como sustituta de la malsonante. De todos modos el eufemismo suele ser una solución provisional: con el uso la nueva palabra se “mancha” con el referente al que designa y debe ser reemplazada por otra. Algunos autores señalan como característica de los eufemismos su ambigüedad: junto al sentido con que se usan para reemplazar a la voz tabú, conservan su sentido normal, que precisamente sirve para disimular la realidad. Cuando pierden su sentido normal y designan exclusivamente la realidad que se pretende evitar, agotan su valor como eufemismos y en seguida pasan a ser tabúes. Mientras retrete mantuvo su significado originario de “lugar apartado”, sirvió como eufemismo para designar el “aposento dotado de las instalaciones necesarias para orinar u evacuar el vientre” (Diccionario de la RAE); cuando perdió su significado primero, pasó en seguida a ser una palabra tabú. La muerte es un tema tabú en muchas culturas. Producto de este rechazo es la serie de eufemismos y expresiones eufemísticas de que disponen las lenguas para referirse a ella; el eufemismo inicial de morir en español fue fallecer (que tenía el significado original de “faltar”); otros eufemismos utilizados hoy son faltar y desaparecer. Además tenemos toda una serie de expresiones eufemísticas para referirse a la muerte, más o menos humorísticas: estirar la pata, dar el último suspiro, dejar de existir, entregar el alma a Dios, quedarse como un pajarito, quedarse fiambre, etc. El francés tiene expresiones como fermer son parapluie (cerrar el paraguas) o n’avoir plus mal aux dents (no tener más dolor de muelas). El lenguaje político / administrativo emplea también eufemismos o expresiones eufemísticas para suavizar una realidad que puede incomodar a los ciudadanos: Revisión / reajuste de precios: subida de precios. Desempleado / desempleo: parado / paro. Económicamente débiles: pobres. 1.3.- IMPROPIEDAD LINGÜÍSTICA Se llama así al uso incorrecto del significado de una palabra. Es el equivalente al término incorrección, que alude a la reproducción incorrecta del significante: - Quien haiga sido, que lo diga (incorrección al escribir y pronunciar haiga en lugar de haya). A - ¿Te vienes o te quedas? B - Me es inverosímil (impropiedad). Al responder B “me es inverosímil”, está utilizando impropiamente el adjetivo inverosímil, pues le da a éste el significado de “indiferente”, mientras que el significado que corresponde a inverosímil es “que no parece verdad, que no tiene apariencia de verdad”. Cuando el locutor deportivo nos dice que “el primer tiempo está a punto de culminar”, emplea este infinitivo impropiamente, pues su significado es el de “llegar una cosa a su punto más alto” y no el de “terminar”, “finalizar”, que es el sentido con el que lo usa el locutor. Al generalizarse el uso impropio de una palabra, puede llagar a producir un cambio en el significado de la misma: el significante adopta un nuevo significado que puede desplazar al anterior o coexistir con él. Las personas que emplean el lenguaje, oral o escrito, en los medios de comunicación (prensa, radio, televisión), han de cuidar especialmente el idioma; sus incorrecciones e impropiedades deterioran la lengua y generalizan usos inexactos. Los libros y manuales de estilo de los medios de comunicación (Agencia EFE, El País, El ABC, etc.) son un intento de encaminar el uso que los redactores y locutores deben hacer de la lengua. 4.- METÁFORA, METONIMIA Y SINÉCDOQUE Metáfora: Una metáfora es una comparación abreviada, sin nexo comparativo. Sustituimos una palabra por otra parecida a ella, sin más explicaciones. Para establecer la comparación es necesaria una semejanza entre el sustituido y el sustituto. Las metáforas son frecuentes en la lengua usual, no sólo en la literaria: muchas palabras polisémicas han adquirido uno de sus significados por metáforas cuyo uso se ha extendido a todos los hablantes. Estos significados metafóricos quedan ya para siempre asociados a la palabra y se recogen en los diccionarios; no son como las metáforas literarias, comparaciones únicas y aisladas empleadas por un solo escritor. Las metáforas incorporadas a los diccionarios se llaman catacresis, y se indican mediante la abreviatura fig. Que quiere decir lenguaje o sentido figurado. Pajarraco: m. despectivo. Pájaro grande cuyo nombre se desconoce. // fig. Y fam. Hombre disimulado y astuto. El primero en llamar pajarraco a un hombre astuto y listo, comparándolo con un pájaro grande, hizo una creación metafórica única e individual. Cuando este uso se hace común a todos los hablantes, se crea un nuevo significado para el significante pajarraco. Se ha producido un cambio semántico. El mismo proceso es observable en las siguientes entradas de diccionario: Capaz: que tiene ámbito o espacio suficiente para contener en sí otra cosa. // fig. Apto, con talento y cualidades para una cosa determinada. Danzar: bailar las personas. // fig. y fam. Mezclarse o introducirse en un negocio. Fulanito es un ángel. Menganito un burro: se hace corresponder la forma de ser de las personas con las connotaciones o significados asociados que dichas criaturas, ángel y burro, respectivamente evocan. De tal palo, tal astilla (palo-padres; astilla- hijos). A perro flaco todo son pulgas (perro flaco-pobre, desamparado; pulgas-desgracias, gastos). Cuando en la metáfora falta el término real, cuya naturaleza hay que suponer o adivinar, como es el caso de los refranes, suele denominarse metáfora pura. Metonimia: En la metonimia, la relación entre el elemento sustituto y el sustituido es de contigüidad física, basada en la realidad. Café: semilla del cafeto. // Bebida que se hace por infusión con esta semilla tostada y molida. // Casa o sitio público donde se vende y toma esta bebida y otras consumiciones. Como vemos, los tres significados de café están relacionados metonímicamente: de significar el grano de la planta (significado 1), café pasa a ser la bebida que se hace con ese grano (significado 2) y, en un estado posterior, el lugar donde se consume la bebida (significado 3). Sinécdoque: Tipo especial de metonimia que consiste en llamar a un todo con el nombre de una parte en él incluida o, al revés, dar a una parte el nombre del todo que la incluye. Muchos cambios semánticos se crean de esta forma: Cerebro: uno de los centros nerviosos constitutivos del encéfalo, situado en la parte anterior y superior de la cavidad craneal. // fig. Cabeza, talento, juicio, capacidad. // fig. Persona sobresaliente en actividades culturales, científicas o técnicas. La acepción 2 es una traslación metonímica de 1: a. Tiene mucha inteligencia. b. Tiene mucho cerebro. Podemos sustituir la expresión a. por la b. basándonos en una relación de contigüidad: la inteligencia reside en el cerebro. La acepción 3 es un caso de sinécdoque: c. Los mejores cerebros españoles trabajan en los Estados Unidos. Naturalmente, no trabajan sólo los cerebros, sino el resto de la persona también. Estamos dando a un todo (persona) el nombre de una parte (cerebro) incluida en él. LA PALABRA: RELACIONES SEMÁNTICAS. ESQUEMA 1.- Polisemia y monosemia. 2.- Homonimia. 3.- Sinonimia. 4.- Antonimia. 5.- Inclusión. IDEAS PREVIAS 1.- ¿Puedes citar una palabra que tenga más de un significado? 2.- ¿Recuerdas dos palabras que signifiquen lo mismo? Los significados de las palabras pueden relacionarse de muy distintas maneras. A veces varias palabras comparten una parcela de su significado y entonces forman un campo léxico. Pero hay otras relaciones: palabras que significan lo mismo, palabras que significan lo contrario, palabras incluidas en el significado de otra, etc. 1.- POLISEMIA Y MONOSEMIA Solemos asociar una palabra a un significado. Así, decimos que mesa significa ‘mueble para comer, escribir, etc. compuesto de un tablero horizontal sostenido por uno o varios pies’. Sin embargo, es muy frecuente que a una palabra, a un significante para ser exactos, le corresponda más de un significado. Encierro: 1.- Lugar donde se encierra. 2.- Clausura, aislamiento. 3.- Prisión muy estrecha y sin comunicación. 4.- Acto de traer los toros de lidia al toril. Decimos que las palabras con un solo significado son palabras monosémicas (del griego “mono”, uno y “semia”, significado) y llamamos polisémicas (griego “poli”, muchos) a las palabras con varios significados. 2.- HOMONIMIA Hablamos de homonimia cuando dos palabras distintas, con significante y significado diferentes, pasan a coincidir en su significante con el paso del tiempo. Lima 1: fruto del limero, parecido exteriormente al limón, pero de pulpa verdosa, de sabor algo dulce. Lima 2: instrumento de acero de varias formas, con la superficie finamente estriada para desgastar y alisar metales y otras materias duras.// Corrección paciente de los escritos, pinturas y demás obras del entendimiento. Lima 1 y lima 2 se pronuncian y escriben igual en la actualidad, pero en el pasado sus significantes eran distintos. En el caso de la polisemia sólo hay un significante, que se asocia a distintos significados, formando con cada uno de ellos un signo. Así, vemos que lima 1 es una palabra monosémica, mientras que lima 2 es polisémica, pues tiene dos significados. ¿Cómo distinguir polisemia de homonimia? Es difícil, pues hay que conocer la historia de las palabras para saber si estamos ante una única palabra con dos o más significados (polisemia) o ante dos palabras distintas con igual significante (homonimia). Algunas formas de distinguirlas: 1.- En la polisemia los significados suelen estar muy próximos entre sí. Todos tienen alguna relación. En la homonimia los significados están muy distantes. 2.- Cuando las palabras pertenecen a dos categorías gramaticales distintas (por ejemplo vino: venir / vino: sustantivo) se trata sin duda de homonimia. 3.- En los diccionarios las palabras homónimas aparecen en dos entradas distintas, mientras que las polisémicas son distintas definiciones agrupadas en la misma entrada. 3.- SINONIMIA La relación de sinonimia se da cuando dos palabras con diferente significante poseen el mismo significado. Empezar: significante empezar; significado: ‘dar principio a una cosa’. Comenzar: significante comenzar; significado: ‘dar principio a una cosa’. A veces dos palabras tienen un significado próximo o muy próximo, pero no significan exactamente lo mismo: Tacaño: miserable, mezquino. Ahorrativo: dícese del que ahorra con exceso. Existe un juicio negativo en tacaño que no se da en ahorrativo. Ambos formarían parte del mismo campo léxico, pero con un sema diferenciador. Aunque muchas veces podamos establecer diferencias entre los significados de dos palabras, otras veces dos términos significan lo mismo, y así aparecen recogidos en el diccionario. ¿Para qué sirven los sinónimos? - Para evitar repeticiones. - Para dar variedad al discurso. - Para evitar combinaciones de sonidos desagradables... - En resumen, para cuidar el estilo. No sólo los escritores, también los usuarios normales de una lengua empleamos sinónimos en nuestras conversaciones cotidianas: preferimos quizá empezar a comer que comenzar a comer, para evitar la repetición de co-co-; cuando nos referimos mucho a un concepto empleamos diferentes denominaciones del mismo, buscando la variedad. En muchos casos no empleamos sinónimos totales, sino palabras que, en ese texto concreto, se refieren a la misma realidad, pero que no son sinónimos, pues no tienen exactamente el mismo significado. Sinónimos geográficos Los nombres de muchos animales y plantas cambian en algunas zonas geográficas, aunque designen a las mismas realidades y tengan el mismo significado. Se habla entonces de sinónimos geográficos, o geosinónimos. Por ejemplo: ¿Qué nombres recibe el cerdo en distintas zonas de España y América?: cochino, puerco, marrano, gocho, chancho... todas estas palabras significan lo mismo, pero una se prefiere a las demás en cada zona geográfica. 4.- ANTONIMIA Se define como antonimia la relación entre dos términos con distinto significante y significados opuestos. Esta definición es algo confusa, pues se aplica a pares de palabras como blanco / negro, marido / mujer o entrar / salir, cuyas relaciones no parecen del todo equivalentes. Podemos distinguir bajo el concepto global de antonimia tres relaciones distintas: Complementariedad Relación semántica entre dos términos de modo que la negación de uno implica la afirmación del otro; por ejemplo (no casado supone soltero; no soltero, casado; fíjate que aunque existen otros estados posibles -viudo, divorciado- no afectan a la primera pareja: uno puede estar soltero y a la vez ser viudo o divorciado) Reciprocidad Relación semántica de doble dirección entre dos referentes; para cada una de las direcciones, la lengua dispone de una palabra: Referentes mujer > ser mujer de > hombre < ser marido de < Antonimia gradual Afecta a dos términos opuestos, entre cuyos significados existen grados intermedios (que la lengua puede nombrar mediante palabras concretas) Frío (templado, tibio) Grande (mediano) caliente pequeño 5.- INCLUSIÓN Hay relación de inclusión cuando el significado de una palabra está contenido en el de otra. La relación de inclusión se da entre el archilexema y los lexemas de un campo semántico: el archilexema tiene un significado más general que los lexemas, y puede sustituirlos a todos sin especificar. Volviendo al ejemplo anterior, el archilexema ver puede sustituir a cualquiera de los otros elementos del campo: - Desde la montaña se otea (ve) el horizonte. - En este momento está observando (viendo) el paisaje. Dentro de la inclusión se conoce como hiperónimo (nombre grande) al término incluyente, y como hipónimo (nombre pequeño) al término incluido. El hiperónimo tiene menos rasgos semánticos que el hipónimo, su significado es más general, pero se puede aplicar a más referentes, es más extenso. Por el contrario, el hipónimo tiene un significado más preciso que el hiperónimo (al tener más rasgos semánticos) pero se puede decir de menos seres, objeto o acciones de la realidad, tiene menos extensión. Ten en cuenta que desde la teoría del campo semántico, el término incluido es el archilexema, no el lexema: Ver S1 Observar S1 + S2 + S11 Otear S1 + S2 + S4 Observar y otear tienen el significado de ver y aportan nuevos rasgos; incluyen a ver, no están incluidos en él. ACTIVIDADES 1.- Busca en un diccionario las siguientes parejas de signos, e indica si mantienen una relación de polisemia o de homonimia. lira / lira hipo / hipohinojo / hinojo hinchar / hinchar nave / nave promoción / promoción pronunciar / pronunciar pastoral / pastoral huelga / huelga temple / Temple 2.- Indica en la página reproducida del diccionario (pág. siguiente) los casos de polisemia y de homonimia que encuentres (pág. 1075, tomo I, DRAE). 3.- Busca en el diccionario las siguientes palabras: álamo, chopo, pobo, alno, tiemblo, tremolín, tremol. Indica las relaciones de inclusión y de sinonimia que se establecen entre ellas. Intenta estructurar un campo semántico con estas siete palabras estableciendo el archilexema, los lexemas y los semas diferenciadores. 4.- Rellena los huecos de los siguientes textos con palabras que designen la misma realidad: Texto 1 Una visión muy especial de los Beatles a través del cine Con la proyección de cuatro películas del mítico______________ británico The Beatles, la organización del IV Cinefórum musical pretende mostrar una visión especial de la _____________ de Liverpool. (...) A través de estas películas los espectadores podrán contemplar la faceta más desconocida del _____________________ inglés. Texto 2 Tod Browning llega a la filmoteca. Poeta de lo visual olvidado durante décadas Tod Browning ______________ de cine de Hollywood clásico, es un personaje clave en la transición del cine mudo al sonoro. Este ______________ lleva a cabo en sus películas un recorrido sentimental, tierno y emocionado por el alma que acoge los cuerpos más grotescos e innobles de cuantos nos rodean cotidianamente. Su trabajo se consolida en 1925, cuando se reencuentra con Lon Chaney. Actor y ____________ unen sus esfuerzos en esa obra maestra de la lírica tenebrosa que es El trío fantástico. LA PALABRA. EL SIGNIFICADO ESQUEMA - Tipos de significado: - Léxico. - Gramatical. - Ocasional. - Significado léxico: - Campos semántico. - Significado y nombre propio. - Denotación y connotación. IDEAS PREVIAS 1.- ¿Cómo distinguirías el significado de un verbo del de una preposición? 2.- ¿Puedes enumerar varias palabras que tengan un significado parecido a “felicidad”? 1.- LA PALABRA: EL SIGNIFICADO Las palabras son signos; como tales, tienen una parte material, perceptible por los sentidos, que llamamos significante. Cuando leemos u oímos una palabra percibimos su significante mediante los sentidos de la vista y del oído respectivamente. Además, como todo signo, las palabras poseen también un significado, un concepto, de modo que cuando leemos u oímos una de ellas, ese concepto se reproduce en nuestra mente. De la misma forma, cuando hablamos o escribimos, representamos conceptos que llegarán a la mente de nuestros lectores u oyentes. Llamamos significado a esos conceptos evocados por las palabras. 1.- TIPOS DE SIGNIFICADO La ciencia que estudia el significado se llama semántica. La semántica distingue tres tipos de significado en las palabras: Significado léxico Es el que poseen las palabras que evocan en nuestra mente conceptos como seres, objetos (los sustantivos); cualidades (los adjetivos); acciones, procesos o estados (los verbos); circunstancias (los adverbios). Fundamentalmente se da en estas cuatro clases de palabras, caracterizadas por ser listas abiertas, es decir, grupos de palabras muy amplias que el hablante no conoce de memoria. El sustantivo “mujer” evoca en nuestra mente la idea de un ser humano con determinadas características. El adjetivo “valiente” trae a nuestra mente el concepto de una cualidad atribuible a determinados seres. El verbo “comer” se refiere a una acción que pueden llevar a cabo los seres vivos. El adverbio “así” indica la circunstancia concreta de una acción. Significado gramatical Es el que poseen las palabras y morfemas que precisan e indican relaciones entre otras palabras. Es el objeto de estudio de la gramática (morfología y sintaxis). En el sustantivo perr-o-s, los morfemas o y s evocan en nuestra mente el masculino y plural, respectivamente. Estos contenidos nos sirven para relacionar esta palabra con otras, en la lengua hablada o escrita: con el artículo los, el adjetivo fieros o el verbo muerden, por ejemplo, pero no con el artículo la o el verbo muerde. Las palabras y morfemas con significado gramatical son listas cerradas de elementos, es decir, pocas unidades (género: -o, -a, -e, -triz, -dor...; número: -s, -es, -0; persona: primera, segunda, tercera; tiempo, modo, etc.) fácilmente memorizables. ¿Qué tipo de significado tienen las preposiciones? El hecho de que formen una lista cerrada y memorizada nos lleva a incluirlas entre las palabras con significado gramatical. Las más usadas como a, de, en, con se emplean muchas veces con la función de puro enlace, sin expresar ningún contenido: ¿Te acuerdas de ella? Vamos a ver qué sucede. Insistió en ello todo el día Cuenta con mi apoyo Sin embargo, estas preposiciones pueden cumplir su función sintáctica de enlace indicando a la vez un contenido gramatical: Vivo en Salamanca (lugar) Vamos a la costa (destino) Vengo de trabajar (procedencia) Pesco con anzuelo (instrumento) Significado ocasional El tercer tipo de significado que podemos encontrar en las palabras de una lengua es el significado ocasional. Se da en aquellas palabras que necesitan de otra palabra en el discurso oral o escrito, para “llenarse” semánticamente: hacen referencia a otras palabras que a su vez tienen significado léxico. Por ejemplo, no tiene sentido preguntarse qué significa lo en déjalo, a menos que situemos esta oración en un contexto lingüístico: - ¿Qué hago con el libro? - Déjalo. 2.- SIGNIFICADO LÉXICO: LOS CAMPOS SEMÁNTICOS Las palabras con significado gramatical y ocasional están perfectamente estructuradas en las lenguas; así, encontramos por ejemplo pronombres de 1ª, 2ª y 3ª persona, en singular y plural, con género masculino o femenino, etc. Con estos criterios (persona, número, género...) se hacen cuadros que reflejan perfectamente las relaciones entre las formas. Sin embargo, cuando intentamos organizar y estructurar las palabras con significado léxico surgen problemas: no es tan fácil establecer las relaciones entre dos verbos como sorprender y asustar, por ejemplo, o entre dos adjetivos como cálido y tibio. El intento más logrado de estructurar las palabras con significado léxico es la teoría de los campos semánticos. Campo semántico Es un grupo de palabras con un significado en parte común y en parte diferente. Para que exista el campo es necesaria la base de significado común. ¿Cómo se construye un campo semántico? Ante todo necesitamos la ayuda de un diccionario; leyendo sus definiciones podemos reunir un grupo de palabras que tengan una parte de significado semejante. A partir de ahí, y basándonos siempre en las definiciones, iremos estableciendo los rasgos que diferencian el significado de una palabra del de las otras. Vamos a estudiar el campo semántico de ver. Para ello anotamos primero todas las palabras que conozcamos cuyo significado esté relacionado con ver: mirar, observar, ojear; para buscar más debemos acudir a un diccionario; los diccionarios de sinónimos nos pueden ser útiles, pues agrupan las palabras de significado parecido. Un diccionario básico para establecer campos semánticos es el Diccionario Ideológico de la lengua española, de Julio Casares: la primera parte de este diccionario ordena todo el vocabulario del español en campos ideológicos que son agrupaciones de palabras relacionadas entre sí; en estos campos podemos buscar los términos que necesitamos. Añadimos a los tres anteriores: bizcar, otear, aojar, atisbar, fisgar, catar, lincear, remirar; una vez que tenemos esta lista de palabras, buscamos sus definiciones en un diccionario alfabético normal: - Ver: percibir por los ojos la forma y color de los objetos. - Mirar: fijar deliberadamente la vista en un objeto. - Bizcar: torcer los ojos al mirar. - Otear: mirar desde lugar alto lo que está abajo. - Ojear: dirigir los ojos o mirar a determinada parte. - Aojar: ojear la caza. - Atisbar: mirar, acechar, recatadamente. - Fisgar: atisbar para ver lo que pasa en la casa del vecino. - Catar: mirar (antiguo). - Lincear: descubrir o ver lo que difícilmente se distingue. - Remirar 1: volver a mirar una cosa. - Remirar 2: mirar una cosa complaciéndose en ella. - Observar: mirar y examinar atentamente. A partir de estas definiciones podemos establecer los rasgos de significado mínimo o semas que aparecen en el campo: - S1: percibir por los ojos la forma y color de los objetos. - S2: fijándose en un objeto deliberadamente. - S3: torciendo los ojos. - S4: desde lo alto lo que está abajo. - S5: la caza. - S6: con recato. - S7: para ver lo que pasa en casa del vecino. - S8: lo que difícilmente se distingue. - S9: de nuevo. - S10: con complacencia. - S11: con atención. - S12: antiguamente. Una vez hecho esto, podemos estructurar el campo semántico: S1 S2 S3 S4 S5 S6 Ver + Mirar + + Bizcar + + Otear + + Ojear + + Aojar + + Atisbar + + + Fisgar + + + Catar + Lincear + S8 S9 S10 S11 S12 + + + + + + Remirar 1 + + Remirar 2 + + Observar + + S7 + + + Nuevos conceptos: - Archilexema: es el concepto más general del campo semántico; aquel término que puede sustituir a cualquier otro sin especificar; en este campo el archilexema es ver. - Sema: rasgo de significado mínimo. Sus combinaciones nos dan los distintos significados. Para que haya campo semántico deben existir uno o varios semas comunes a todos los términos del campo. En este caso el S1. - Lexema: la lista de palabras que, junto con el archilexema, forma el campo semántico. 3.- EL SIGNIFICADO DE LOS NOMBRES PROPIOS Hemos hablado de que un signo tiene dos caras, el significante y el significado. Ahora bien, los signos, las palabras de una lengua, por ejemplo, nos sirven para señalar a objetos o aspectos del mundo real, para designar. Esta relación entre el signo y la realidad se representa en el siguiente triángulo: Significado Significante Referente - Significante: es la parte material del signo, las letras con que se escribe o los sonidos con que se pronuncia. - Significado: el concepto que el significante reproduce en nuestra mente cuando lo leemos o escuchamos. - Referente: el objeto de la realidad al que puedo referir con un signo determinado. Una palabra nos sirve para designar a distintos objetos de la realidad; así, con el signo mesa puede referirme a diversas mesas. Por otro lado, un único objeto de la realidad puede ser designado con distintos signos: puedo emplear mesa, escritorio, mueble para señalar al mismo objeto. Además, hay signos que no tienen un referente en la realidad, aunque sí en la ficción: yo no puedo aplicar los signos sirena (ser mitológico) o unicornio a seres reales, aunque tienen un significado que mis oyentes comprenden. De los nombres propios podemos decir que no son signos, pues tienen significante pero no significado. Luis no significa nada, son unos sonidos o letras que yo aplico a uno o a varios seres de la realidad. En este caso le falta un vértice al triángulo: Significante: Luis Significado: 0 así. Los nombres propios son de dos tipos: Referente: las personas que se llaman - Antropónimos: nombres de persona. - Topónimos: nombres de lugar. El hacho de que los nombres propios no tengan significado no quiere decir que no lo hayan tenido nunca, pues la mayoría procede de nombres comunes, que tenían un significado léxico establecido: Eugenio, Catalina, Irene... fueron originariamente nombres comunes en griego. Igual que hay nombres comunes que pasan a propios, hay nombres propios que pasan a comunes, adquiriendo entonces un significado preciso: quijote, tenorio, celestina, lazarillo... son ejemplos claros. Muchos antropónimos se eligen actualmente por influjo del cine o la televisión. Esto no es nada nuevo: en el Siglo de Oro las comedias de Lope de Vega ponían de moda los nombres entre la población. La verdad es que el dramaturgo elegía los nombres que mejor le venían para construir sus versos, según l número de sílabas, la rima, etc. Así emplea mucho el nombre Leonor, por las posibilidades de rima que le ofrece con amor y honor. Al igual que ocurre con los nombres propios de persona, muchos topónimos fueron inicialmente nombres comunes: León se llama así por la legión romana (Legio Séptima Gémina), allí establecida. Cuando se perdió entre los hablantes la conciencia de este origen, en la Edad Media, se creó el escudo de la ciudad (que está en el escudo de España) con la figura del animal salvaje, que nada tiene que ver con las legiones romanas. De la misma forma que ocurre con los nombres propios de persona, los nombres propios de lugar se aplican también a diferentes realidades: en América hay muchas ciudades con nombres idénticos a las ciudades españolas: Cartagena, Toledo, Mérida. Dentro de España hay pueblos con el mismo nombre. Casi todas las ciudades de Inglaterra se repiten en los Estados Unidos. 4.- DENOTACIÓN Y CONNOTACIÓN Algunos lingüistas distinguen dos tipos de significado en las palabras: el cognitivo o intelectual y el afectivo o emotivo. Las palabras de la lengua cotidiana, frente a las terminologías, pueden cargarse de asociaciones emocionales o connotaciones. Significado denotativo es el significado de una palabra común a todos los hablantes; aquél que aparece en el diccionario y que todos reproducen en su mente al escuchar o leer la palabra. Significado connotativo es el contenido que una palabra evoca sólo en un hablante (o en un grupo reducido de hablantes), por razones emotivas o afectivas asociadas al término en cuestión. Si un significado connotativo pasa a ser de dominio general se convierte en denotativo, se recoge en el diccionario como una nueva acepción de la palabra. Si buscamos en el diccionario la palabra holgazán encontramos la siguiente definición, que conforma su significado denotativo: aplicase a la persona perezosa que no quiere trabajar. Ahora bien, pensemos que, por razones personales, esta palabra evoca individualmente otro significado, asociado a una experiencia o vivencia previa (por ejemplo nos recuerda a una persona concreta a quien llamaban siempre así, nos recuerda a una persona que utilizaba con frecuencia esa palabra, etc.): ése sería su significado connotativo; por esa razón afectiva podríamos preferir holgazán a vago o perezoso, palabras de igual significado denotativo (sinónimos) pueden diferenciarse por sus particulares asociaciones emotivas o evocativas. ACTIVIDADES 1.- Indica si el significado de las siguientes palabras es léxico, gramatical u ocasional: aprender comprar recuerdo para dulce belleza figura este según él más por mi luego suyo ahí mí en tomar verde 2.- Estructura, con ayuda de un diccionario, los siguientes términos en dos campos semánticos, indicando el archilexema y los rasgos semánticos más importantes de cada campo: CAMPO SEMÁNTICO ARCHILEXEMA RASGOS SEMÁNTICOS TÉRMINOS Perfume, peste, hedor, aroma, fragancia, olor, cabello, ceja, pelo, cana, pestaña, rizo. 3.- Busca en un diccionario o enciclopédico el origen de los siguientes nombres propios: Catalina, Irene, Eugenio, Alejandro. 4.- Piensa en dos palabras que tengan para ti un significado especial, al margen del significado común a los hablantes. Explica en qué consiste ese significado connotativo y cómo ha llegado a adquirirlo la palabra. 5.- Agrupa las siguientes palabras en campos semánticos, y estructura éstos indicando su archilexema y los rasgos significativos mínimos diferenciadores o semas. Emplea para ello un diccionario. Encantar, oscurecer, incumplir, faltar, enlutar, hechizar, anochecer, omitir, embrujar, evitar, ensombrecer, hadar, ensalmar, eludir, velar. PROCEDIMIENTOS DE FORMACIÓN DE PALABRAS Analice la formación de las palabras siguientes e indique de qué tipo es cada una según su estructura. Inconstitucional. Dependencias. Carabobo. Bonificaciones. Canalillo. Reestructuración. Reelaboración. Acanalado. Ultrasensible. Sensitivo. Papagayo. Municipal. Carnicero. Trotaconventos. Submarino. Recomponer. Anaranjado. Higiénico. Destructivo. Supersónico. Provincialismo. Descartar. Reemplazamiento. Campos semánticos Construye los campos semánticos de los accidentes geográficos y de los colores presentes en este texto. A lo lejos una torrentera rojiza rasga los montes; la torrentera se ensancha y forma un barranco; el barranco se abre y forma una amena cañada. Refulge en la campiña el sol de agosto. Resalta, al frente, el azul inmenso, el perfil hosco de las lometas; los altozanos hinchan los lomos; bajan las laderas en suave encarnadura hasta las viñas. Y apelotonados, dispersos, recogidos en los barrancos, resaltantes en las cumbres, los pinos asientan sobre la tierra negruzca la verdosa mancha de sus copas rotundas. Azorín, Antonio Azorín, Bruguera, Barcelona, 1973. REPASO DE ACENTUACIÓN DE DIPTONGOS, TRIPTONGOS E HIATOS 1. DIPTONGO: Unión de dos vocales en una sola sílaba. Las combinaciones de vocales posibles son: a. Vocal abierta + vocal cerrada (o viceversa) (siempre que la cerrada no sea tónica). b. Vocal cerrada + vocal cerrada (siempre distintas). En los dos casos, para la acentuación gráfica, se siguen las reglas generales de acentuación de palabras agudas, llanas y esdrújulas. El lugar de colocación de la tilde varía en las dos posibles combinaciones antes descritas de la siguiente manera: a. La tilde se coloca sobre la vocal abierta: ordenáis. b. La tilde se coloca sobre la segunda vocal: lingüística. *Excepción: las palabras agudas terminadas en los diptongos –ay, -ey, -oy no llevan tilde: estoy, jersey, pai-pay. 2. TRIPTONGO: Unión de tres vocales en una sola sílaba. La combinación de vocales es: Vocal cerrada + vocal abierta + vocal cerrada (las cerradas no son tónicas). Para la acentuación gráfica se siguen las reglas generales de acentuación de palabras agudas, llanas y esdrújulas. La tilde se coloca siempre sobre la vocal abierta: renunciáis. *Excepción: las palabras agudas terminadas en triptongos con –y final, no llevan tilde: Uruguay. 3. HIATO: Secuencia de dos vocales juntas que forman parte de sílabas consecutivas. Las combinaciones de vocales posibles son: a. Vocal abierta + vocal abierta. b. Vocal cerrada + vocal cerrada (iguales). c. Vocal abierta + vocal cerrada (o viceversa) (la cerrada debe ser tónica). En los casos a) y b), para la acentuación gráfica, se siguen las reglas generales de acentuación de palabras agudas, llanas y esdrújulas. a. León, aéreo, canoa. b. Friísimo, chiita. c. Todas las palabras llevan tilde en la vocal cerrada, independientemente de que lo exijan o no las reglas generales de acentuación: dormía, raíl, reír, evalúas. LOS SIGNOS DE PUNTUACIÓN 1. Añade los signos de puntuación que faltan en este texto narrativo: Buenos días don Jorge ¿Está la señorita Julia? Ahora no puede salir ¿Qué pasa? El portero encaja bien la negativa No le preocupa el tono apremiante un poco grosero de Jorge Esconde algo que le hará dominar la situación Verá Vd es un poco delicado y aquí en la escalera Pase dice Jorge asustado Mientras cierra la puerta el portero interpreta a su gusto la amplia invitación y entra hasta el salón Jorge le sigue decididamente molesto y tras cerrar la puerta que conduce al resto de la casa se vuelve hacia él ¿Qué ocurre? Es por lo de don Luis La policía está abajo porque le han visto esta mañana por el barrio y claro piensan que lo más lógico es que venga a casa de su mujer Juan José MILLÁS Visión del ahogado, Alfaguara 2. Escribe los signos de interrogación y de exclamación que faltan en este texto teatral: RUBÉN.— No ama usted al divino William EL MARQUÉS.—En el tiempo de mis veleidades literarias, lo elegí por maestro. Es admirable Con un filósofo tímido y una niña boba en fuerza de inocencia, ha realizado el prodigio de crear la más bella tragedia. Querido Rubén, Hamlet y Ofelia, en nuestra dramática española, serían dos tipos regocijados. Un tímido y una niña boba Lo que hubieran hecho los gloriosos hermanos Quintero RUBÉN.—Todos tenemos algo de Hamletos. EL MARQUÉS.—Usted, que aún galantea. Yo, con mi carga de años, estoy más próximo a ser la calavera de Yorik. UN SEPULTURERO.—Caballeros, si ustedes buscan la salida, vengan con nosotros. Se va a cerrar. EL MARQUÉS.—Rubén, qué le parece a usted quedarnos dentro RUBÉN.—Horrible EL MARQUÉS.—Pues entonces sigamos a estos dos. RUBÉN.—Marqués, quiere usted que mañana volvamos para poner una cruz sobre la sepultura de nuestro amigo Ramón María DEL VALLE-INCLÁN Luces de bohemia, Espasa Calpe 3. Coloca los paréntesis donde corresponda en este otro fragmento teatral: DIONISIO.—Un sombrero de copa, para la boda. Lo saca. Este me lo ha regalado mi suegro hoy. Es suyo. De cuando era alcalde. Y yo tengo otros dos que me he comprado. Los saca. Mírelos usted. Son muy bonitos. Sobre todo se ve en seguida que son de copa, que es lo que hace falta… Pero no me sienta bien ninguno… Se los va probando ante el espejo. Fíjese. Este me está chico… Miguel MIHURA Tres sombreros de copa, Espasa Calpe 4. Coloca los signos de puntuación correspondientes en las siguientes oraciones: a) Para qué has venido si ya lo sabías b) Si ya lo sabías para qué has venido c) Le preguntó si ya lo sabía d) Le preguntó Lo sabes ya e) Vimos pasar por delante de nosotros coches nuevos viejos de lujo de ocasión f) Bueno yo esto mejor me estoy callado 5. Añade los signos de puntuación que faltan en este texto periodístico: La ironía, al servicio del medio En un ensayo de tres páginas el ganador de la categoría de 16 años Sergio Carrasco Garrido plantea con mucha ironía soluciones prácticas al problema del agua Y comienza a hacerlo desde el título Por qué el agua nunca te llegará hasta el cuello Vituperios al derroche del aguafiestas y otros conflictos madrileños Y continúa Somos unos 5 500 000 habitantes en la Comunidad de Madrid Vamos a imaginarnos que cada día entre las largas duchas la comida y otros asuntos consumimos de media unos 10 litros de agua por persona y día demasiado poco suponemos Las cuentas cuyos números en millones de euros estarían bien para el mayor premio gordo de todos los tiempos nos dicen que en un año 19 800 millones de litros desaparecen del Canal de Isabel II tres mil seiscientos litros por persona y año Más adelante Sergio crea un personaje al que llama Pepito a través del cual va resolviendo dudas y echando reprimendas por la mala utilización que hace del agua Para rematar el ensayo concluye Si […] hacéis comprender a vuestros hijos el significado oculto del agua […] algún día os devolverán esa sonrisa impregnada […] habiendo entendido lo que significa el desarrollo sostenible Aula de El Mundo, 5 de junio de 2003 6. Explica por qué aparecen los puntos suspensivos entre corchetes en el texto anterior. 7. Coloca los signos de puntuación en estos poemas de Antonio Machado: Corazón ayer sonoro Nuestro español bosteza ya no suena tu monedilla de oro Es hambre Sueño Hastío Tu alcancía antes que el tiempo la rompa se irá quedando vacía Doctor tendrá el estómago vacío El vacío es más bien en la cabeza Confiemos en que no será verdad nada de lo que sabemos 8. Coloca los signos de puntuación que faltan en el siguiente texto ensayístico: La tendencia a convertir las opiniones en parte simbólica de nuestro organismo y a considerar cuanto las desmiente como una agresión física ha herido mis convicciones no solo es una dificultad para la educación humanista sino también para la convivencia democrática Vivir en una sociedad plural impone asumir que lo absolutamente respetable son las personas no sus opiniones y que el derecho a la propia opinión consiste en que esta sea escuchada y discutida no en que se la vea pasar sin tocarla como si de una vaca sagrada se tratase Lo que el maestro debe fomentar en sus alumnos no es la disposición a establecer irrevocablemente lo que han elegido pensar la voz de su espontaneidad su autoexpresión etc sino la capacidad de participar fructíferamente en una controversia razonada aunque ello hiera algunos de sus dogmas personales o familiares Y aquí se echa en falta alarmantemente el hábito de abstracción en los neófitos cuya ausencia también más tarde en estudiantes universitarios lamentamos con amargura los profesores de materias esencialmente teóricas Consiste en una dificultad casi terminal para deducir de premisas para despegarse de lo inmediato o de lo anecdótico para no buscar tras cada argumento la mala voluntad o el interés mezquino del argumentador sino la debilidad de lo argumentado Algunos autores como Giovanni Sartori culpan de esta deficiencia al predominio de lo audiovisual que proporciona impresiones sobre la letra y la palabra que acostumbran a las razones Fernando SAVATER El valor de educar, Ariel 9. Coloca los signos de puntuación en usos lingüísticos y no lingüísticos: POSOLOGÍA Dosis medias 500 750 mg cada 8 horas o 1 g 2 3 veces al día Niños 50 mg por kg de peso y día repartidos en 3 tomas con un intervalo de 8 horas Recién nacidos y prematuros Gotas pediátricas 15 gotas cada 8 horas Niños entre 5 y 8 kg de peso Gotas pediátricas 20 25 gotas cada 8 horas Suspensión oral Clamoxyl Sobres 125 mg 1 sobre cada 8 horas Clamoxyl Suspensión 1 2 cucharadita cada 8 horas 10. Busca un prospecto de un medicamento e indica los usos no lingüísticos de los signos de puntuación que figuren en el mismo. 11. Explica para qué se emplean los paréntesis y los corchetes en las siguientes oraciones: a) El interfaz MIDI (Musical Instrument Digital Interface) sirve para establecer la transferencia de sonidos al ordenador. b) Desde aquella mañana (sin duda, de difícil recuerdo) no había podido cruzar por aquel paso de peatones. c) —Ya sabes que no se le escapa una (!) d) Los proyectiles caían desde todos los lugares. […] Se había hecho imposible ver nada desde la lejanía. 03/06/2006 14:14 rociomadrid #¿Necesitas ayuda?. Ortografía Hay 4 comentarios. Actividades de acentuación ACTIVIDADES DE ACENTUACIÓN DE DIPTONGOS, TRIPTONGOS E HIATOS 1. Separa en sílabas las siguientes palabras y coloca la tilde en los casos en los que sea necesario: ambulancia debeis familia oasis interviu dia titubee clausula reir viuda dieciseis huesped cuadruple leido tambien caoba friisimo maniquies gratuito tardio camion estiercol leon relaciones murcielago fue acuatico linea cancion ilusion sueño vio mia baul accion 2. Clasifica las palabras de la actividad anterior según tengan diptongo o hiato. 3. Coloca la tilde en las formas verbales que deban llevarla: huiamos paseabamos destrui ganareis desviareis acentuo pensabais insinuo incluid sabiamos canteis escuchais construis copies fuesemos 4. Conjuga la segunda persona del plural del presente de indicativo de estos verbos: estudiar limpiar esquiar averiguar desviar copiar aliviar enviar deshauciar bailar 5. Observa tu respuesta a la actividad anterior y completa: En los triptongos, la tilde se coloca siempre sobre la vocal __________. 6. Escribe las tildes en las palabras que lo precisen: desvia poesia raiz miel puntua duo acentua sonreir heroico aupa sabria Raul reuno cantaria buho guia pua prohibe vehiculo caida acordeon marea geologo buitre aereo frio leiste feisima Andalucia area oceano creeme heroe coetaneo craneo CASOS ESPECIALES DE ACENTUACIÓN 1. Coloca tilde donde haga falta en el siguiente texto: Dijo el rey al filosofo: —Pues dame ejemplo del que deja de hacer lo que le esta bien y hace otra cosa, y no la sabe ni la puede aprender; y asi torna a lo que suele hacer y no lo puede recobrar, y acaba confundido. Dijo el filosofo: —Señor, dicen que en una tierra habia un religioso y demandole un hombre posada. Y diosela.[…] Y este religioso hablaba hebraico, y pagose el huesped de aquel lenguaje, y estuvo en esto algunos dias por aprenderlo. Dijo el religioso: —Con gran derecho debes tu caer en lo que cayo el cuervo, porque quieres aprender hebraico. Dijo el huesped:—¿Como fue eso? Dijo el religioso: —Dicen que un cuervo vio andar una perdiz y pagose mucho de su andamiento, y tuvo esperanza de aprenderlo y no pudo. Y cuando se fue, que no pudo aprender, quiso tornar a su andar que era de primero y no pudo, que se le habia olvidado. Y asi con gran derecho te podra acaecer otro tal por querer aprender lo que no es para ti, que dicen que loco es el que se entromete de hacer lo que no le esta bien y mudarse de la medida a otra que no le esta bien; que a las veces acaece mucho mal a los hombres en mudarse de la medida alta a la baja, y asi se derraman sus cosas y sus estados. Calila e Dimna, Castalia (Adaptación) 2. Pon tilde en los siguientes compuestos donde sea necesaria: balonvolea indoeuropeo cariacontecido galaico-portugues salpimentar electrodomestico iconografia milhojas limpiauñas calientaplatos politico-social pasapures germano-suiza salvamanteles pesabebes 3. Coloca la tilde en las palabras que deban llevarla: a) ¿Quien ha solicitado un billete de ida? b) Aun no han llegado de la excursión. c) Aun cuando pudiera, no lo haria. d) Recuerdale que vendra seguramente solo. e) No es ese nuestro paraguas. f) Nos enviaron erroneamente este mensaje. g) ¡Que pesado te estas poniendo! h) No se practicamente nada de el. i) ¿Escuchame, por favor! 4. Explica por qué llevan tilde las palabras que aparecen subrayadas en las oraciones: a) Ésta mañana vendrá. b) Hizo sólo la solicitud. 22/03/2006 18:52 rociomadrid #¿Necesitas ayuda?. Ortografía Hay 29 comentarios. ORTOGRAFÍA DE LAS LETRAS B / V 1. Completa las siguientes oraciones con b o v: a) Ser_ía la comida con exquisito cuidado. b) De_es sa_er _i_ir dentro de tus posi_ilidades económicas. c) Ella sa_e bien cuáles son los ser_icios que desea de mí. d) Los atracadores conci_ieron un plan que nadie supo pre_er. e) Conser_o un recuerdo im_orra_le de aquel _erano. f) No ca_e en ninguna ca_eza semejante idea. g) La olla, que her_ía en la cocina, desprendía un agrada_le aroma. h)Tenemos que conce_ir nue_as esperanzas. i) Contri_uyó a una colecta. j) No se atre_ieron a replicarle. k) Los días tra_ajados deben retri_uirse de acuerdo con lo con_enido. l) Be_a solamente agua si quiere _i_ir muchos años. 2. Escribe una oración con cada una de las siguientes palabras homófonas: A ver (preposición a seguida del verbo ver). Haber (infinitivo del verbo haber). Haber (sustantivo: «sueldo», «hacienda, caudal»). Bienes (sustantivo: «posesiones»). Vienes (forma del verbo venir). Botar (verbo: «dar botes», «hacer rebotar»). Votar (verbo: «emitir un voto», «dar una opinión»). Rebelarse (verbo: «oponerse», «sublevarse», «resistirse. Revelarse: (verbo: «descubrirse, manifestarse»). Baca: (sustantivo: «portaequipajes»). Vaca (sustantivo: «animal rumiante»). Bacilo (sustantivo: «microbio»). Vacilo (forma del verbo vacilar). Basto (adjetivo: «tosco»). Vasto (adjetivo: «enorme, inacabable»). Bello (adjetivo: «hermoso»). Vello (sustantivo: «pelo blando y suave»). Tubo (sustantivo: «cilindro hueco»). Tuvo (forma del verbo tener). Cabo (sustantivo: «graduación militar», «accidente geográfico»). Cavo (forma del verbo cavar). TEXTO 2: GUÍA PARA EL COMENTARIO DE TEXTOS LITERARIOS A. MODOS DE ESTUDIAR LITERATURA 1º. LECTURA DE OBRAS LITERARIAS: En extensión: lectura de muchas obras. En profundidad: comentario o explicación de textos. El comentario de textos literarios es una herramienta que nos permite acercarnos al texto, profundizar en sus componentes temáticos (fondo) y estilísticos (forma), ponerlo en relación con una época, una ideología... En definitiva comprender y enjuiciar textos de forma meditada y apreciar su valor estético de forma técnica, sin dejarnos llevar por la primera impresión que suscita el texto en nuestro ánimo. 2º. ESTUDIO DE LA HISTORIA DE LA LITERATURA como elemento auxiliar. El comentario de textos será tanto mejor cuanto más se haya leído y mejor se conozca la Historia de la Literatura. B. FINALIDAD DEL COMENTARIO DE TEXTOS: Explicar el contenido y las características lingüísticas de un texto con la intención de provocar una reflexión en el receptor. No se trata de explicar conceptos teóricos, sino de aplicarlos, con la finalidad de analizar el texto. Se tendrá que remitir constantemente al texto objeto de análisis mediante citas literales y referencias a las líneas o fragmentos donde aparece el aspecto que se comenta. El resultado final del comentario dependerá en gran medida de conocimientos: Personales: La habilidad en el análisis y en la redacción, sensibilidad, agudeza, etc. Otros que se adquieren con el tiempo: lengua, literatura, métrica, geografía, historia, sociología, economía, religión, etc. Los objetivos del comentario de texto son: a. Fijar con precisión qué dice el texto (fondo). b. Dar razón de cómo lo dice (forma). Son buenas todas las explicaciones que, razonadamente, establezcan una relación clara y ordenada entre el fondo y la forma de un texto. No existe una única posibilidad de resolver el problema de la interpretación de un texto, sino diferentes maneras de aproximarse a él, pero hay unas técnicas más útiles que otras y existen ciertos aspectos imprescindibles para un buen análisis de los que nos ocuparemos en lo que sigue. C. MÉTODO DE COMENTARIO DE TEXTOS: Es importante seguir las fases que se explican a continuación: 1º. LECTURA ATENTA DEL TEXTO. § Leer despacio y comprender las palabras. § Buscar en el diccionario todo lo que no entendemos o entendemos a medias (en el examen no contaremos con un diccionario, pero su uso continuado proporciona un conocimiento del léxico suficiente para encararlo con tranquilidad). § Si cuando buscamos en el diccionario hay dos o más acepciones de una palabra, sólo nos interesará la que conviene al texto (para saber cuál es esta acepción hay que sustituir mentalmente la palabra problemática por sus diferentes acepciones hasta que se realice un ajuste perfecto al texto). En esta fase hay que comprender el texto, conocer su sentido literal, no interpretar qué sentido especial tiene alguna expresión. 2º. LOCALIZACIÓN O PRESENTACIÓN DEL TEXTO. Con esta fase comienza el ejercicio del comentario. Se trata de situar el texto dentro de la producción de su autor y de la época correspondiente. Utilizaremos nuestros conocimientos de Literatura y de Historia de la literatura y seguiremos los siguientes pasos: 1. Relacionar la obra con el autor, su vida y el total de su producción. Destacaremos sólo aquellos aspectos biográficos que sean relevantes para interpretar el texto. No es pertinente emplear estos datos como excusa para demostrar todo lo que se sabe sobre la vida del autor o su carácter. Es conveniente que nos detengamos sólo en aquellas cuestiones que sean significativas en nuestro comentario. 2. Situarla dentro del contexto histórico e ideológico de su tiempo. 3. Relacionar la obra con la época o movimiento literario. Seleccionaremos marcas en el texto de la época o el movimiento literario en el que se encuadra. Comentaremos si estamos ante una obra típica de su época o si, por el contrario, presenta novedades significativas; cada autor y cada obra puede poseer rasgos originales y propios. 4. Resaltar las características del género literario y subgénero al que pertenece. Mencionaremos sólo aquellas que influyen directamente en el texto u obra que se va a comentar. 5. Si analizamos un fragmento, hay que ubicarlo dentro de la obra a la que pertenece y relacionar ésta con el resto de la obra del autor. Podemos encontrarnos con las siguientes situaciones que requieren diferentes tratamientos: § El texto pertenece a una obra que conocemos entera: Situar exactamente el fragmento en la obra, para ello, narraremos el argumento de la obra y señalaremos en qué punto se inserta. § El texto pertenece a una obra de la que conocemos sólo una parte: Narrar brevemente el argumento o contenido de la obra y situar en ella el capítulo (la escena o el episodio, etc.) que conocemos. Narrar brevemente el contenido de dicho capítulo y situar en él el fragmento que se nos ha propuesto para la explicación. § El texto pertenece a una obra de la que no conocemos nada: Proceder como si el texto fuera completo. (Puntos 1-4). 3º. REALIZACIÓN DEL RESUMEN Y DETERMINACIÓN DEL TEMA. - Resumen: Un buen resumen condensa lo esencial del texto conservando sólo los detalles importantes. Hay que sintetizar el contenido del texto, no reproducir la forma. Algunos consejos para realizar el resumen son: § No utilizar la sintaxis ni el léxico del texto original. § No parafrasear el texto. § No debe contener interpretación ni opiniones propias. § No debe ser más largo que el texto, en general, ocupará unas diez líneas, con letra normal. § Hay que evitar el lenguaje poético, es preferible utilizar lenguaje estándar. § Casi todos los textos permiten organizar el resumen en un solo párrafo. § Muchos tienen tendencia a usar fórmulas fijas como: El texto nos habla de..., El autor narra..., El fragmento propuesto para resumir trata sobre...; no hay inconveniente en admitir estos clichés, pero quizá resulten más adecuados en otras fases del comentario, en el resumen hemos de economizar palabras y podemos prescindir de este tipo de recursos. - Tema: Si el texto es fragmento de una obra mayor: § Aclararemos brevemente cuál es el tema general de la obra y cuáles sus motivos temáticos principales. Es necesario insertar el texto dentro del argumento de la obra a la que pertenece. § A continuación debemos definir el tema del fragmento y ponerlo en relación con el de la obra. Si eliminamos del resumen todos los detalles y definimos sólo la intención del autor, conseguiremos enunciar el tema. Hay que encontrar un enunciado (oración o frase) que sólo sea aplicable al texto que comentamos y que exprese su idea fundamental, su mensaje, lo que el autor ha querido decir; para ello se recomienda buscar un sustantivo abstracto que condense el mensaje (queja, exhortación, crítica, lamento...) y acompañarlo de tantos adyacentes como necesitemos para que la frase resultante identifique el texto en cuestión. Puede también optarse por una oración parecida a éstas: El autor se lamenta de..., El amor traspasa los límites de..., El protagonista se queja de... Sus características son: claridad, exactitud y brevedad (no debería superar las diez o quince palabras). El tema debe enunciarse con brevedad, pero no de forma simplista (decir que un texto tiene como tema el amor es demasiado impreciso: debemos matizar esa afirmación) Se podría decir que el tema es un resumen del resumen, pero, al contrario que en este último, aquí sí se debería interpretar el sentido del texto o la intención del autor. 4º. DETERMINACIÓN DE LA ESTRUCTURA: Establecer cómo se ha organizado el contenido del texto para que forme un todo. Si no se pudiera establecer la estructura de un texto, su interpretación resultaría difícil, e incluso podría ser incoherente. Todo texto coherente comporta dos tipos de organización de los contenidos: 1. Estructura externa: Disposición de los enunciados en capítulos, apartados, párrafos, etc: Si se trata de un texto poético, realizar el análisis métrico: medida, rima, estrofa, poema... Si es posible, debemos poner estos datos en relación con otras obras del autor y movimiento literario. Si un autor introduce novedades en el empleo de la métrica, dejaremos constancia de ello. Si es un texto narrativo, indicar cuántos párrafos o capítulos lo forman. Señalar también sus elementos constitutivos: focalización y tipo de narrador, tiempo externo e interno, tipo de espacio, personajes... Sería conveniente buscar una explicación para cada uno de estos aspectos: ¿Por qué el autor opta por una determinada focalización o espacio? ¿Qué efectos busca? ¿Con qué intencionalidad los emplea? Así profundizaremos en el significado último del texto. Si es un texto teatral, indica los cambios de escena o de acto y los diferentes planos que aparezcan: apartes, conversaciones cruzadas... 2. Estructura interna: División del texto en partes teniendo en cuenta el desarrollo lógico del contenido, la evolución del tema. Todas las partes de un texto se relacionan entre sí, porque todas contribuyen a expresar el tema; pero se diferencian en que el tema adquiere variaciones en cada una de ellas. Hemos de delimitar de qué línea a qué línea (o verso) va cada parte y explicar de qué habla cada una de ellas. Para hacer la división se pueden tener en cuenta diversos factores: Las estructuras propias de los géneros y de los modos de elocución: narración (planteamiento, nudo y desenlace, estructura circular, final abierto, etc.); texto teatral (monólogo, diálogo rápido, aparte...), argumentación (tesis y argumentos), etc. La división en párrafos, ya que éstos constituyen en sí mismos una unidad de contenido y, por lo tanto, sería una incongruencia que se dividieran. Si establecemos más partes de las necesarias perderemos el carácter unitario del texto (no creamos que si tenemos muchas partes somos más precisos). En poesía es un error considerar que cada parte coincide con cada estrofa (aunque a veces puede ocurrir). 5º. ANÁLISIS DE LA FORMA PARTIENDO DEL CONTENIDO: La forma son las palabras y giros gramaticales que integran el texto. Debemos tener presente que entre todos los medios lingüísticos que el idioma ofrece al escritor, éste ha elegido los que le parecían más adecuados para expresar el contenido. En el comentario debemos comprobar de qué modo el contenido determina la forma del texto y explicar cada rasgo formal como una exigencia del contenido. Este es el principio fundamental del comentario de texto: el contenido está presente en todos los rasgos formales. Esta es la fase más extensa del comentario, en ella hay que explicar no sólo qué dice el texto, sino cómo lo dice. Para ello, analizaremos la lengua del texto; los recursos fónicos, morfosintácticos, semánticos y estilísticos y los relacionaremos con el desarrollo del tema y la intención del autor. Siguiendo los apartados que se han propuesto en la estructura interna, explicaremos cómo los recursos estilísticos resaltan los contenidos, describiendo así la relación entre el contenido y la forma. Para que no olvides nada, aquí tienes algunas de las cuestiones lingüísticas y estilísticas que siempre debes tener presentes y que te ayudarán a determinar la estructura y el desarrollo temático de un texto: o Aspectos fónicos: modalidades oracionales, métrica y peculiaridades fonéticas. o Aspectos morfosintácticos: personas y tiempos verbales, estructuración sintáctica (conectores), abundancia de adjetivos, sustantivos o verbos: § Análisis de los sustantivos (concreto, comunes, abstractos...) § Análisis de los adjetivos (especificativos, epítetos, sensoriales, evocativos, ponderativos...) § Análisis de los pronombres (personas gramaticales, uso enfático, afectivo...) § Análisis de los determinantes y verbos § Estudio de la sintaxis (por ej., en una descripción impresionista predominan las oraciones breves, simples o yuxtapuestas; en un argumentación retórica, los periodos son largos y subordinados.) o Aspectos léxico-semánticos: campos semánticos predominantes, tecnicismos, neologismos, cultismos, presencia de mitos o tópicos, connotación o denotación. Estudio del registro lingüístico... o Aspectos estilísticos: Debes señalar las figuras retóricas o estilísticas que aparecen en el texto y relacionarlas con el contenido: aliteraciones, comparaciones, metáforas, repeticiones... o Aspectos textuales: los modos de elocución (narración, descripción, diálogo, argumentación...) o Tipo de lenguaje: culto, común, coloquial... También sería interesante establecer relaciones del contenido y los recursos con la globalidad de la obra, su movimiento literario y su época. Es el momento de comentar las posibles relaciones de intertextualidad: cuáles son sus posibles hipotextos o si se ha convertido en hipertexto de otros posteriores. Esta fase 5ª (análisis de la forma partiendo del contenido) puede realizarse de forma conjunta con la anterior (determinación de la estructura), de forma que iremos explicando de forma conjunta la forma y el contenido del texto. 6º. CONCLUSIÓN. Si terminamos el comentario sin una conclusión dará la impresión de que no hemos captado la esencia y el significado del texto. La conclusión se compone de: 1. Síntesis de nuestras observaciones: Reducir a líneas generales los resultados del análisis, no sumar los datos en una farragosa enumeración, sino resaltar su rasgo común; para ello es necesario releer el comentario fijándose en las observaciones que tienen un origen o finalidad común. 2. Opinión personal argumentada y apoyada en el comentario: Se trata de una valoración técnica del fragmento y de la obra, por lo que es inadecuado limitarse a una opinión impresionista que refleje nuestra apreciación superficial sobre el texto). Busquemos una frase adecuada para concluir con brillantez. § En lo referente a la forma, normalmente tendremos que alabar la calidad literaria de los textos que se nos propongan. § En lo que se refiere al contenido puede que el tema o el sentido del texto no nos agraden, podemos decirlo de forma modesta y firme sin fórmulas hechas (no olvidar que el defecto puede estar en nuestro gusto). Bibliografía: Cómo se comenta un texto literario, Fernando Lázaro Carreter y Evaristo Correa Calderón, Madrid, Cátedra, 1994. NUEVO TEXTO PARA TRABAJAR LOS ELEMENTOS DE LA COMUNICACIÓN Y LAS FUNCIONES DEL LENGUAJE 1. Analice el acto de comunicación que se da entre los personajes del siguiente texto, explicando todos sus elementos. 2. Identifique las funciones del lenguaje que están presentes en el texto y señale algunos rasgos lingüísticos característicos de cada una de ellas. Ansúrez se había sentado al otro lado de la mesa, donde no había más que un papel y un teléfono, aquella mesa brillante, en cuya superficie uno podía mirarse y reconocerse. Alargó el brazo y recogió el cigarrillo que el Presidente le ofrecía, un Partagás de contrabando, elaborado con los mejores productos de Vuelta Abajo. - Esa idea de escribir una novela me parece buena. Desde luego, cuente usted con que los gastos de edición correrán a cargo de la Caja… A no ser, claro está, que tenga usted ya contrato con alguna Casa Editorial… Porque, en tal caso, la Caja se limitará a comprarle un cierto número de ejemplares… digamos tantos como funcionarios, uno por barba, incluidos os botones. - No tengo ningún compromiso, claro. En realidad, la idea de escribir una novela es muy reciente. Como en otros casos muy conocidos, obedece al hecho de que la lírica me viene ya estrecha como instrumento de expresión. Necesito algo más amplio y más narrativo. Una historia de amor no puede contarse en verso, aunque haya habido casos… - Luego, ¿lo que quiere usted contarnos es una historia de amor? ¿La suya propia? - La mía, sí, aunque contada de tal manera que pueda resultar la historia de amor de todo el mundo. Y no una historia abstracta, como pudiera parecer a simple vista, sino concreta y con nombres, usted lo dijo, la mía propia… Esta relación entre lo concreto más personalidad y la generalidad es uno de los milagros que sólo el arte puede realizar. - Y el dinero, no lo olvide usted. La última frase del Presidente no la entendió bien Ansúrez. Al menos así se lo dio a entender a Elisa cuando, horas más tarde, le contaba la entrevista. Gonzalo TORRENTE BALLESTER, La novela de Pepe Ansúrez, Planeta, Barcelona, 1994, pp. 51-52 Texto 3: TEXTO PARA TRABAJAR LOS ELEMENTOS DE LA COMUNICACIÓN Analiza el doble circuito comunicativo en el siguiente texto. Es el inicio de un relato de Sherlock Holmes, el famoso detective creado por sir Arthur Conan Doyle. Al repasar mis notas sobre los setenta y pico casos en los que – durante los últimos ocho años- he estudiado los métodos de mi amigo Sherlock Holmes, descubro que se puede calificar a muchos de trágicos, a algunos de cómicos, a bastantes simplemente de extraños, pero a ninguno de vulgar; y es que, como Holmes no trabajaba para enriquecerse, sino por amor a su arte, se negaba a intervenir en cualquier investigación que no tendiera a lo infrecuente o incluso a lo fantástico. Sir Arthur CONAN DOYLE, “La banda moteada”, en Antología del relato policial, Vicens Vives. SITUACIÓN O CONTEXTO EXTRALINGÜÍSTICO Comprende todas las circunstancias espaciales y temporales en las que se desarrolla el acto comunicativo. Un enunciado tan simple como ¿Qué hora es? puede dar lugar a varias interpretaciones según donde se emita: - Durante una conferencia, si alguien se lo dice a su compañero de asiento, se interpreta como “Estoy aburrido, ¿falta mucho para que termine?” - En la calle, si un transeúnte formula la pregunta, sólo desea saber la hora. El contexto situacional puede anular el contenido de un mensaje. Un cartel de No hay localidades tiene sentido en la taquilla de un teatro, pero no tendría sentido en mitad de una calle. Así pues, el contexto extralingüístico o situación está formado por las circunstancias que rodean la comunicación y los elementos sobreentendidos por motivos culturales, situacionales, etc., y que resultan también fundamentales en la comunicación. Si decimos Juan está gordo, puede significar que tal persona, que el emisor y el receptor conocen, tiene bastantes kilos; pero si lo dice en clase el profesor de lengua, puede significar ejemplo de oración copulativa. De la misma manera, en un diálogo como el siguiente: - ¿Han traído el pan? - Hoy es domingo. la escueta respuesta significa “No, porque hoy es domingo y los domingos no traen el pan”. Esto es lo que suele llamar presuposición (se denominan así los elementos lingüísticos no explícitos, por ser sobreentendidos por emisor y receptor). La situación pertenece al nivel extralingüístico porque es el contexto físico, social o anímico en que se hallan el emisor y el receptor al comunicarse, el conjunto heterogéneo de circunstancias extralingüísticas que rodean el acto de la comunicación: el lugar, el tiempo, el estado de ánimo, la formación cultural, la intención de los interlocutores, ruidos, interferencias, etc. La situación influye en el acto comunicativo, pudiendo hacer variar la interpretación del mensaje o contribuir a su mayor o menor comprensión. Hay que diferenciar este contexto situacional o extralingüístico del contexto lingüístico (el resto de las unidades que aparecen alrededor de una determinada y que ayudan a su comprensión). El contexto situacional es estudiado por la pragmática, cuyo objeto de investigación es la competencia comunicativa de los interlocutores y la adecuación de los enunciados a su intención y al contexto en que se producen. La competencia comunicativa es la capacidad del emisor y receptor para elaborar e interpretar adecuadamente los enunciados, para lo cual deben tener en cuenta, no sólo el significado explícito de sus palabras, sino también las implicaciones y contenidos implícitos con que los elabora el emisor, así como las inferencias que de ellos pueda extraer el destinatario. Así pues, hay determinados factores que marcarán la relación entre los hablantes, el enunciado y el contexto situacional y que son imprescindibles para comprender el mensaje: - Factores situacionales internos pertenecientes al mundo de los interlocutores, que condicionarán la naturaleza del enunciado: cultura, ideología y creencias (políticas, morales, religiosas), afectos, estados de ánimo, necesidades, son motivaciones de los interlocutores que influyen en su actuación y marcarán decisivamente la intención del mensaje y su interpretación. Estas motivaciones harán que el emisor, además del mero contenido informativo, pretenda producir efectos en el receptor: persuadirle, tranquilizarle, asustarle, agradarle, irritarle, inquietarle, pedirle, aconsejarle; lo que le obliga a conocer el mundo del interlocutor y sus posibles reacciones, para desarrollar una estrategia comunicativa adecuada a su intención y a las motivaciones del destinatario. El mundo interior de los interlocutores y el conocimiento que tienen uno del otro, condicionarán la elección del tema, el uso de fórmulas de tratamiento y cortesía, la entonación, el nivel del lenguaje utilizado, la extensión del enunciado, las distancias... - Factores situacionales externos, como el tiempo y el espacio en que se desarrolla la comunicación, las circunstancias ambientales, el mundo social al que pertenecen los interlocutores y sus relaciones afectivas, de parentesco, laborales o académicas, marcarán también la relación comunicativa e influirán en el contenido y la forma del enunciado. - Por otro lado, para ser coherente, todo enunciado ha de adaptarse a un conocimiento del mundo, a unos marcos conceptuales o de referencia que pertenezcan a la experiencia del emisor y del receptor y se ordenen en torno a un campo conceptual que recoja todos aquellos conceptos, acciones y relaciones que tienen que ver con él. Ello supone no mezclar la velocidad con el tocino o la gimnasia con la magnesia; o que al hablar de matemáticas hagamos uso de todo un abanico conceptual referido a ellas, pero no a unicornios o al vuelo sin motor. - El marco del discurso es un factor pragmático- enunciativo importante, ya que el género o tipo de discurso que se utilice condicionará la naturaleza del mensaje y dará lugar a una situación comunicativa distinta: lo que resulta increíble en un relato realista puede ser coherente y verosímil en un cuento fantástico y viceversa; habrá que analizar la adaptación de emisor y receptor al distinto marco de comunicación que existe en una conversación intranscendente, en una conferencia, en un mitin político, en un mensaje publicitario, en un sermón dominical, en un texto jurídico o administrativo, en un carta personal o comercial, en una sesión de chistes o en un velatorio. En definitiva, la pragmática pretende analizar la competencia comunicativa de los interlocutores, las estrategias de la comunicación, la naturaleza de los mensajes y sus rasgos lingüísticos y retóricos, condicionados por las circunstancias conceptuales, emocionales e intencionales de los que se comunican, por su dominio de los factores situacionales externos y del marco del discurso. PERÍFRASIS VERBALES Una perífrasis verbal es una construcción integrada por dos formas verbales, la primera un verbo auxiliar y la segunda un verbo auxiliado; entre ambas puede aparecer un nexo, que suele ser una preposición (de, a) o una conjunción (que). El verbo auxiliar es el portador de los morfemas de persona, número, tiempo, aspecto y modo; y la forma verbal no personal es la portadora del significado léxico. La perífrasis realiza la función unitaria de núcleo del predicado. VERBO AUXILIAR en forma personal + (NEXO) + VERBO AUXILIADO en forma no personal CÓMO RECONOCER LAS PERÍFRASIS: - El verbo auxiliar pierde o ve modificado su significado léxico. - El sujeto y los complementos son seleccionados por el verbo auxiliado. - No se puede sustituir el verbo auxiliado por ningún elemento equivalente (pronombre, oración subordinada con verbo conjugado, etc.). o Perífrasis: § Viene avisándote desde hace tiempo. § Anda criticando a todos. § En ese momento se echó a reír. § No grites, que Pedro va a trabajar un rato. § Tengo que comprarme un abrigo. * Lo tengo. * Tengo eso. o § No perífrasis: Viene pensando en sus problemas desde su casa (CCL de viene). § Anda arrastrando los pies (Anda así). § Se echó a descansar en el sofá (CCL de se echó). § Pedro va a trabajar todos los días al colegio (Pedro va a eso todos los días) (Al colegio es un CCL de va). CLASES DE PERÍFRASIS VERBALES Las perífrasis permiten expresar valores aspectuales y modales que no se recogen en la conjugación del verbo. Perífrasis Modales: Expresan el predicado como posible, probable, necesario, etc. Se construyen siempre con infinitivo. - Obligación: o Tener que + infinitivo: Tengo que leer esto. o Haber de + infinitivo: Hemos de aprovechar el tiempo. o Deber + infinitivo: Debo estudiar mucho. o Haber que + infinitivo: Había que hacerlo así. - Probabilidad o posibilidad: o Poder + infinitivo: En esa rifa puedes ganar un coche. o Deber de + infinitivo: Deben de ser las seis. o Venir a + infinitivo: Viene a costar unas mil pesetas. Perífrasis Aspectuales: Informan sobre el desarrollo de la acción verbal, atendiendo a las diversas gases por las que puede pasar. - Ingresivas: señalan la inminencia de la acción: ir a, estar para, estar a punto de + infinitivo: Voy a escribir. - Incoativas: señalan el momento en que se inicia la acción: empezar a, arrancar a, decidirse a, echar(se) a, ponerse a, romper a + infinitivo: Empiezo a escribir. - Reiterativas: señalan la repetición del proceso: volver a, soler + infinitivo: Vuelvo a estudiar. - Perfectivas: señalan el fin o la interrupción de la acción: o Con infinitivo: dejar de, acabar de, terminar de, llegar a + infinitivo: Acabo de venir. Llegó a tener tres casas. o Con participio: señalan el resultado de una acción o proceso previo: llevar, tener, haber + participio. Lleva hechas varias cenas. Te tengo dicho que te calles. - Durativas: acción en su desarrollo: estar, ir, venir, andar, seguir, continuar, llevar + gerundio: Estoy escribiendo. Llevo pensándolo varios días. ORACIONES SIMPLES PARA ANALIZAR Analiza morfosintácticamente las siguientes oraciones (son muy fáciles, podéis con ellas). 1. El azar es casi siempre favorable al hombre prudente. 2. ¿No te parece ridícula su actitud? 3. De viciosos y tragones están llenos los panteones. 4. Los tres chopos de la ribera parecían tres paraguas con las puntas hacia arriba. 5. La abnegación ennoblece a las personas más vulgares. 6. Un grajo permaneció inmóvil sobre los pardos terrones. 7. Los conquistadores juzgaban inhóspitos aquellos parajes. 8. Ese vino lo tomaban en tiempo de Salomón. 9. Un hombre noble se olvida de las pasadas injurias. 10. En la mesa y el juego se conoce al caballero. 11. ¿En qué academia os preparan para la Selectividad? 12. ¿Se le cayó a tu padre la escoba por la ventana? 13. A ese profesor no le gusta el comportamiento de sus alumnos. 14. ¿Qué sucedió aquella noche en la playa? 15. El examen de Matemáticas se lo repetirá el profesor a sus alumnos. 16. En casa de mis padres cada uno se encarga de su ropa. 17. Los detenidos fueron arrollados por una multitud encolerizada. 18. Las sopas eran devoradas por el niño a la puerta de la cueva. 19. ¿Será reivindicada por los sindicatos la reducción de la jornada laboral? 20. Varios pesqueros españoles son acosador por patrulleras de Gibraltar. 21. Los incidentes fueron provocados por varios encapuchados. 22. Esa mujer llevaba deformados los zapatos. 23. Raíz de todos los males es la avaricia. 24. Luis y su amigo Antonio se saludaron en el parque. 25. La mujer de tu hermano se ha comprado unos pendientes de oro. 26. La ingratitud es hija de la soberbia. 27. ¿Os hicisteis muchos regalos tu hermano y tú el día de Reyes? 28. A tu compañero de clase se le entregará el certificado mañana por la mañana. 29. Varios obreros extranjeros fueron atacados en Alemania por grupos neonazis. 30. ¡No te vistas tan despacio! 31. La disciplina es poder. 32. De los niños nadie se preocupó. 33. El acusado escuchó impasible la sentencia. 34. Te espero a las siete en la puerta de mi casa. 35. El patio de la escuela era pequeño. 36. Esas personas son muy poco solidarias. 37. La otra noche entrevistaron en la televisión a los dos candidatos. 38. Ricardo se sentó junto a mí. 39. Ayer por la tarde visitamos la catedral. 40. He visto deprimido a tu amigo Jorge. 41. Debes confiar en tus posibilidades. 42. Han nombrado director del Instituto a un profesor de Matemáticas. 43. El lunes por la mañana te sentirás mucho mejor. 44. Un equipo de médicos forenses investiga la causa de la muerte. 45. Mañana escribiré una postal a nuestra amiga holandesa. i Documento adaptado por Mg. FABIOLA RUGELES DUARTE. Docente DESH-UNAB.