CORRIENTES EPISTEMOLÓGICAS RELACIONADAS CON EL CONOCIMIENTO CIENTÍFICO Por: Prof. Milagros Chávez email: chavezm@ula.ve Para reflexionar ¿Las ciencias siempre han sido lo que son ahora? ¿Existe una sola manera de considerar el conocimiento científico? ¿El conocimiento científico es el único tipo de conocimiento? ¿Cuáles otros conocimientos existen? ¿Qué es para ti el conocimiento científico? Corrientes epistemológicas relacionadas con el conocimiento científico Como vimos en la sesión anterior, las ciencias naturales son las diversas formas sistemáticas de construir conocimientos acerca de los distintos fenómenos de la naturaleza. Las ciencias pueden ser vistas entonces como construcciones humanas, y como tales, puede decirse de ellas que son productos culturales. En este sentido, algunos pensadores se han interesado por explicar el fenómeno humano que representan las ciencias naturales, es decir, cómo se construyen, cual es la lógica que siguen, cuáles son sus métodos, etc. Así pues, la epistemología es una rama de pensamiento humano que se interesa en la dinámica de construcción de las ciencias. Una de las primeras preguntas que tratan de responder los epistemólogos es cómo son los conocimientos que producen las ciencias naturales, ¿se trata de conocimientos verdaderos? A este respecto, ya desde la antigüedad diversos pensadores han tratado de proponer teorías que explican al conocimiento y a la posibilidad de conocer. De este modo, en el siglo V a.C., los sofistas ponían en cuestión la posibilidad de que los humanos pudiesen acceder a un conocimiento fiable y objetivo. Por ejemplo, Protágoras proponía un relativismo del conocimiento tal que la opinión de toda persona era válida. Según este pensador, el único juez posible del conocimiento era la experiencia de cada persona. Platón, otro conocido filósofo griego, trató de solucionar este problema planteando la existencia de un mundo de formas perfectas, inmutables y eternas, el mundo de las “ideas”, las cuales representan el conocimiento exacto y verdadero. Así pues para este pensador, las cosas que vemos y tocamos son copias imperfectas de las ideas. No es a través del estudio de estas cosas como podemos acceder al conocimiento verdadero, sino a través de las matemáticas y de la filosofía, formas de pensamiento que se interesan en las “ideas” mismas. Así pues, sólo el razonamiento abstracto de estas disciplinas lleva al verdadero conocimiento. Uno de los discípulos de Platón, Aristóteles, llegó a ser muy conocido por sus ideas acerca del conocimiento y su filosofía en general. Este pensador griego coincidía con su maestro en reconocer el pensamiento abstracto como el más valioso de todos los tipos de conocimientos. Sin embargo, Aristóteles se separa de su maestro al proponer que casi todos los conocimientos, incluso los abstractos, provienen de la experiencia. Los conocimientos surgen de manera directa, abstrayendo los rasgos definitorios de una clase (inducción), o indirectamente, deduciendo nuevos hechos a partir de los ya conocidos. Esto último se hace siguiendo las reglas de la lógica, o sea los silogismos. Otros muchos pensadores griegos emitieron sus consideraciones acerca del conocimiento científico. Hemos expuesto aquí los que se han considerados como esenciales en esta reflexión acerca del conocimiento humano. El periodo histórico conocido como la Edad Media, se caracterizó por una fuerza extraordinaria de la iglesia cristiana y sus dogmas. Así pues, toda reflexión acerca del conocimiento y sus posibilidades estaba muy ligada a las consignas que establecían los dogmas de la religión. Toda deriva al respecto era interpelada por la iglesia y sus defensores se arriesgaban a ser condenados por la inquisición. Sin embargo, a pesar de esta presión religiosa, hubo ciertos pensadores que lograron encontrar puentes entre la necesidad de explicar el conocimiento y el dogma religioso. Tal es el caso Tomás de Aquino, quien a través de una fina reelaboración de la lógica aristotélica enmarcada dentro de los cánones de la religión católica, logró proponer ideas fundamentales sobre el conocimiento humano. Tomás de Aquino, siguiendo el empirismo aristótelico, estima que todo conocimiento ha de partir de una reflexión que se da en la experiencia sensible. Sin embargo, hay que distinguir el conocimiento sensible, que proviene de las sensaciones corporales y es un conocimiento particular de las cualidades sensibles de las cosas, del conocimiento inteligible, obra del entendimiento y que se constituye como un conocimiento universal o por conceptos. Es en el conocimiento inteligible donde se produce la abstracción, la separación de la forma o esencia con respecto a la materia individual. Cuando se conoce intelectivamente, lo que se separa es la forma de la materia individual. El entendimiento forja un concepto universal a partir de las imágenes, prescindiendo de las cualidades sensibles materiales y particulares para atender sólo a la esencia universal de las cosas. En el renacimiento, una de las figuras más importantes en la reflexión sobre el conocimiento fue Galileo Galilei. Este pensador sostiene que la naturaleza está escrita en un lenguaje matemático. Por lo tanto, para poder conocer el mundo natural, lo que hay que hacer es decodificar sus formas a través de este lenguaje. Este pensador considera que el lente privilegiado para observar los fenómenos naturales son las matemáticas en todas sus formas. Así pues, este pensador formula un método de investigación experimental donde la observación de los fenómenos se haya mediada por la capacidad mental de matematizar. A partir de esta observación, se elaboran hipótesis que luego habrán de ser demostradas por métodos métricos rigurosos. Los resultados se deberán interpretar a partir de las proposiciones de partida. Entre el siglo XVII hasta finales del XIX, la principal cuestión de la epistemología fue la utilidad de la razón frente a la percepción de los sentidos como vías para el conocimiento. Para los racionalistas, entre cuyos principales valedores encontramos a Descartes, Spinoza y Leibniz, la fuente principal y la prueba final del conocimiento es el razonamiento deductivo basado en principios auto-evidentes, o axiomas. Para los empiristas, empezando por los filósofos ingleses Francis Bacon y John Locke, la fuente principal y la prueba final del conocimiento es la percepción de los sentidos. Corrientes epistemológicas “modernas” Empirismo lógico o neopositivismo Todo concepto no lógico o no matemático puede reducirse a enunciados "observacionales". En las ciencias fáctico-experimentales, sólo aquello que es reducible a enunciados observacionales es considerado conocimiento válido. Círculo de Viena (Kurt Gödel, Rudolf Carnap) Racionalismo crítico o Falsacionismo Para tener carácter científico, una hipótesis ha de poder ser confrontada con la realidad, de lo contrario carece de dicho carácter y queda fuera del ámbito de la ciencia. Una teoría es científica si, pudiendo ser refutada por la experiencia, aún no lo ha sido. Karl Popper Falsacionismo metodológico Refutación para el falsacionismo metodológico de Lakatos no sólo es probar que una teoría es falsa, sino tener otra mejor que la que ha sido refutada. Imre Lakatos Teoría de las revoluciones científicas La ciencia no es un mero sistema teórico de enunciados que se desarrollan en la mente de los científicos sino una actividad de la comunidad científica. El desarrollo histórico de cada ciencia supone la existencia para esa comunidad de un "paradigma" (conjunto de creencias, valores y técnicas compartidos). La ciencia progresa por acumulación bajo un paradigma, en tiempos de normalidad, y por revoluciones, cuando un paradigma es reemplazado por otro. Thomas Kuhn Anarquismo teórico La ciencia es representada sólo como un tipo de estilo cognitivo. No existen meta-criterios válidos para garantizar la validez del conocimiento científico delante de otros tipos de conocimiento. Paul Feyerabend