Sentencia 895-12 - Poder

Anuncio
Exp: 12-000387-0007-CO
Res. Nº 2012000895
SALA CONSTITUCIONAL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA. San
José, a las catorce horas treinta minutos del veinticinco de enero de dos mil
doce. Acciónde inconstitucionalidad planteada por Xxxx, mayor, soltero, vecino de Alajuela,
portador de la cédula de identidad número Xxxx, contra el primer párrafo del artículo 25 de
la Ley de Pensiones Alimentarias, y el párrafo segundo del artículo 19 de la Ley de la Defensoría
de los Habitantes.
Resultando
1.- Por escrito recibido en la Secretaría de la Sala el 11 de enero de 2012, el
accionante interpone acción de inconstitucionalidad contra el primer párrafo del
artículo 25 de la Ley de Pensiones Alimentarias, y el párrafo segundo del artículo
19 de la Ley de la Defensoría de los Habitantes. Refiere que su legitimación
proviene de estar defendiendo el interés superior del niño. Señala que en su criterio
es inconstitucional el párrafo segundo del artículo 19 de la Ley de la Defensoría de
los Habitantes, en la medida que dispone que esa institución debe suspender sus
actuaciones si la persona interesada interpone una demanda o recurso ante
instancias judiciales, porque estima que siendo la Defensoría la principal obligada a
promover y procurar la protección de los derechos humanos, esta norma le niega la
posibilidad de colaborar en la protección de los derechos de los niños. En cuanto al
primer párrafo del artículo 25 de la Ley de Pensiones Alimentarias, refiere que la
inconstitucionalidad la plantea respecto de la frase «siempre que la parte actora haya
gestionado el cobro en forma reiterada», porque se obliga a la madre a estar
firmando órdenes de apremio, lo que implica gastos de traslado; además, porque si
EXPEDIENTE N° 12-000387-0007-CO
Teléfonos: 2295-3696/2295-3697/2295-3698/2295-3700. Fax: 2295-3712. Dirección electrónica: www.poder-judicial.go.cr/salaconstitucional.
Edificio Corte Suprema de Justicia, San José, Distrito Catedral, Barrio González Lahmann, calles 19 y 21, avenidas 8 y 6
no hay firma o solicitud de apremio, se origina un beneficio para el deudor
alimentario porque se le causa un enriquecimiento sin causa. Aduce no aportar
especies fiscales porque en su criterio se encuentra exento en virtud del artículo 106 del
Código de la Niñez y la Adolescencia.
2.- El artículo 9 de la Ley de la Jurisdicción Constitucional faculta a la Sala a
rechazar de plano o por el fondo, en cualquier momento, incluso desde su
presentación, cualquier gestión que se presente a su conocimiento que resulte ser
manifiestamente improcedente, o cuando considere que existen elementos de juicio
suficientes para rechazarla, o que se trata de la simple reiteración o reproducción de una
gestión anterior igual o similar rechazada.
Redacta el Magistrado Armijo Sancho; y,
Considerando
I.- Sobre los presupuestos formales de admisibilidad de la acción de
inconstitucionalidad. La acción de inconstitucionalidad es un proceso con
formalidades precisas, que deben ser cumplidas a efecto de que la Sala logre de
forma válida conocer el fondo de la impugnación. El artículo 75 de la Ley de la
Jurisdicción Constitucional, estipula los presupuestos de admisibilidad de la acción
de inconstitucionalidad; entre ellos se exige la existencia de un asunto base o previo
pendiente de resolver, sea en vía judicial, o en el procedimiento para agotar la vía
administrativa, en que se haya invocado la inconstitucionalidad como medio
razonable para amparar el derecho o interés que se considera infringido. Por su
parte, en el párrafo segundo y tercero de la misma norma, se regula de forma
excepcional los presupuestos en los cuales no se requiere el asunto previo, es decir,
cuando por la naturaleza del asunto no exista una lesión individual y directa, o bien,
se trate de la tutela de intereses difusos o colectivos, o cuando la interpone de
manera directa el Contralor General de la República, el Procurador General de la
República, el Fiscal General de la República y el Defensor de los Habitantes. Sobre
EXPEDIENTE N° 12-000387-0007-CO
Teléfonos: 2295-3696/2295-3697/2295-3698/2295-3700. Fax: 2295-3712. Dirección electrónica: www.poder-judicial.go.cr/salaconstitucional.
Edificio Corte Suprema de Justicia, San José, Distrito Catedral, Barrio González Lahmann, calles 19 y 21, avenidas 8 y 6
la exigencia de un asunto pendiente de resolver, la Sala, mediante sentencia número
1995-4190, señaló que la acción es «un proceso de naturaleza incidental, y no de
una acción directa o popular, con lo que se quiere decir que se requiere de la
existencia de un asunto pendiente de resolver -sea ante los tribunales de justicia o en
el procedimiento para agotar la vía administrativa- para poder acceder a la vía
constitucional, pero de tal manera que la acción constituya un medio razonable para
amparar el derecho considerado lesionado en el asunto principal, de manera que lo
resuelto por el Tribunal Constitucional repercuta positiva o negativamente en dicho
proceso pendiente de resolver, por cuanto se manifiesta sobre la constitucionalidad
de las normas que deberán ser aplicadas en dicho asunto; y únicamente por
excepción es que la legislación permite el acceso directo a esta vía -presupuestos de los
párrafos segundo y tercero del artículo 75 de la Ley de la Jurisdicción
Constitucional-». Por tal razón, la exigencia de un asunto previo pendiente
de
resolver no configura un mero requisito de forma, pues no basta con la única
existencia de un asunto base, ni con la invocación de la inconstitucionalidad, pues
resulta indispensable que la acción constituya un medio razonable para amparar el
derecho o interés que se considera vulnerado, lo que significa, que las normas
recurridas deben ser aplicables en el asunto base ±ver, en similar sentido, sentencias
números
1990-1668,
1993-408,
1994-798,
1994-3615,
1995-409,
1995-851,1995-4190 y 1996-791-. Por otra parte, es oportuno indicar que existen
otras formalidades que deben cumplirse, como por ejemplo, la determinación
explícita de las normas impugnadas debidamente motivadas, con referencia
específica de los mandatos y principios constitucionales que se consideren
infringidos, la autenticación mediante patrocinio letrado del escrito de interposición
de la acción, la acreditación de las condiciones de legitimación -poderes y
certificaciones-, así como la certificación literal del libelo de impugnación, los
EXPEDIENTE N° 12-000387-0007-CO
Teléfonos: 2295-3696/2295-3697/2295-3698/2295-3700. Fax: 2295-3712. Dirección electrónica: www.poder-judicial.go.cr/salaconstitucional.
Edificio Corte Suprema de Justicia, San José, Distrito Catedral, Barrio González Lahmann, calles 19 y 21, avenidas 8 y 6
cuales, en caso de no ser aportadas por los accionantes, pueden ser prevenidos por la
Presidencia de la Sala para su cumplimiento.
II.- Sobre el incumplimiento de los requisitos de admisibilidad en esta
acción de constitucionalidad. El accionante acude a la jurisdicción constitucional
aduciendo que su legitimación se encuentra en estar ejerciendo una acción donde
impera el interés superior del niño, lo que en su criterio le permite acudir
directamente en acción de inconstitucionalidad prescindiendo de los requisitos de
admisibilidad establecidos en el artículo 75 de la Ley de la Jurisdicción
Constitucional, citando en apoyo
a su tesis la sentencia de esta Sala número
2007-13583. Al respecto, debe indicarse al accionante que si bien la sentencia de cita
refiere la posibilidad de interponer de manera directa una acción de
inconstitucionalidad cuando se encuentre en discusión el interés superior del niño, lo
cierto es que la misma sentencia es clara en indicar que ello es posible cuando la
persona accionante tenga un interés legítimo por el cual actuar; en el caso resuelto en
dicha sentencia, se trataba de una acción de inconstitucionalidad interpuesta por una
integrante de la Junta Directiva del Patronato Nacional de la Infancia, a quien es
claro sí le asistía en ese momento un interés legítimo respecto de las
competencias
del
Patronato
que
estimó
estaban
siendo
conferidas
inconstitucionalmente a otro órgano del Poder Ejecutivo. De manera expresa la Sala
resolvió en la citada sentencia 2007-13583 que:
³Vemos entonces como, si bien nuestra Constitución Política atribuye la
protección de la niñez solamente al Estado, los instrumentos internacionales
de tutela de derechos humanos amplían esa obligación de tutela a la sociedad
en general.
En esta línea de análisis, siendo la protección de la niñez y la
adolescencia una obligación-deber a cargo del Estado y de la sociedad en
general, cualquier persona con interés legítimo en la defensa de esos
derechos, está legitimada para reclamar ante la lesión de alguno que
perjudique de manera directa o mediata a los niños. Esa vulneración
constitucional se traduce, en el caso de la acción de inconstitucionalidad, en
EXPEDIENTE N° 12-000387-0007-CO
Teléfonos: 2295-3696/2295-3697/2295-3698/2295-3700. Fax: 2295-3712. Dirección electrónica: www.poder-judicial.go.cr/salaconstitucional.
Edificio Corte Suprema de Justicia, San José, Distrito Catedral, Barrio González Lahmann, calles 19 y 21, avenidas 8 y 6
la posibilidad de impugnar las normas o actos no susceptibles de amparo, así
como las omisiones. La relevancia del tema justifica entonces, aceptar una
legitimación más amplia con el objeto de garantizar la supremacía del
derecho de la Constitución, de manera que se permita a los ciudadanos
fiscalizar de manera más directa y efectiva la actuación u omisión del Estado,
máxime tratándose de un sector tan vulnerable como lo es el de la niñez. En
el caso concreto, la accionante estima que las normas impugnadas cercenan
competencias constitucionales atribuidas en forma exclusiva al Patronato
Nacional de la Infancia, lo cual incide de manera indirecta en la efectiva y
oportuna protección de los derechos de los niños y adolescentes. Siendo
Costa Rica un Estado Social de Derecho, teniendo el Estado como obligación
constitucional apoyar y proteger determinados grupos entre los cuales se
encuentra los niños, las niñas y los adolescentes, y constituyendo el Patronato
Nacional de la Infancia el ente constitucional competente para materializar esa
tutela, el Tribunal reconoce y admite la existencia de una legitimación directa
para actuar en la defensa de sus derechos.´(énfasis añadido)
De tal forma, es claro que para aceptar la tesis de una legitimación que permita la
acción directa, debe necesariamente valorarse
si el accionante posee
un interés
legítimo, lo cual, en el caso concreto, estima la Sala que no logra acreditar. Nótese
que el accionante se limita a citar la referida sentencia como el precedente
jurisprudencial que permite la interposición de esta nueva acción, sin explicitar en
qué ni en dónde reside el interés legítimo que pudiera disponer para su
interposición, pues en momento alguno indica que se le haya restringido o limitado
el ejercicio de algún derecho constitucional relacionado, ni el interés que pudiera
vincularlo con una persona directamente afectada por la norma impugnada. Si bien
en el encabezado del escrito de interposición el accionante indica interponer la
acción a favor de cuatro menores de edad, no aporta documento alguno que acredite
esa representación, así como tampoco explica ni menciona en qué medida estos
menores son afectados por las normas que pretende impugnar. Esta misma
circunstancia impide que esta acción de inconstitucionalidad pueda valorarse como
EXPEDIENTE N° 12-000387-0007-CO
Teléfonos: 2295-3696/2295-3697/2295-3698/2295-3700. Fax: 2295-3712. Dirección electrónica: www.poder-judicial.go.cr/salaconstitucional.
Edificio Corte Suprema de Justicia, San José, Distrito Catedral, Barrio González Lahmann, calles 19 y 21, avenidas 8 y 6
un medio razonable para el amparo del derecho constitucional que se estima
inflingido. Adicionalmente, bajo estas argumentaciones, debe concluirse que esta
acción de inconstitucionalidad dista de cumplir los demás requisitos de
interposición establecidos en el artículo 75 de la Ley de la materia, toda vez que se
omite indicar la existencia de un asunto previo, tampoco se aporta la certificación del
libelo o memorial donde pudo haberse aducido la inconstitucionalidad dentro de ese
asunto previo, el escrito de interposición carece de la autenticación necesaria y de los
requisitos fiscales ±timbre- correspondientes. Si bien el accionante pretende aplicar la
exención establecida en el artículo 106 del Código de la Niñez y
Adolescencia, debe indicarse que tal exención de especies fiscales está prevista para los
casos en que las acciones judiciales sean interpuestas por menores de edad o por sus
representantes, y tal como se ha indicado, el accionante es omiso en aportar
documento alguno que acredite ser representante de algún menor de edad, por lo
que necesariamente subsiste la exigencia de que la acción de inconstitucionalidad se
presente mediante un escrito debidamente autenticado donde se consigne
adecuadamente el cumplimiento de los requisitos fiscales. La conjunción de todos
estos factores determina que la presente acción deba ser rechazada por incumplir los
requisitos
de
admisibilidad
legalmente
establecidos,
sin
que,
tomando
en
consideración el cúmulo de ellos, sea dable prevenir su cumplimiento. No obstante, en
seguimiento de la propia jurisprudencia constitucional, la Sala considera de
particular interés realizar las siguientes manifestaciones.
III.- Sobre el primer párrafo del artículo 25 de la Ley de Pensiones
Alimentarias. El accionante aduce la inconformidad constitucional del primer
párrafo del artículo 25 de la Ley de Pensiones Alimentarias, en la medida que
dispone que procede la orden de apremio corporal hasta por seis meses, si la parte
interesada ha instado de manera reiterada el cumplimiento de la obligación
EXPEDIENTE N° 12-000387-0007-CO
Teléfonos: 2295-3696/2295-3697/2295-3698/2295-3700. Fax: 2295-3712. Dirección electrónica: www.poder-judicial.go.cr/salaconstitucional.
Edificio Corte Suprema de Justicia, San José, Distrito Catedral, Barrio González Lahmann, calles 19 y 21, avenidas 8 y 6
alimentaria. Sobre el particular, debe señalarse que la normativa de origen
internacional define la viabilidad y procedencia del apremio corporal cuando de
cubrir las obligaciones alimentarias se trate. Principios y valores superiores
representados en el interés superior del niño y la protección de la familia, han
motivado a la comunidad internacional al reconocimiento de esta posibilidad como uno
de los últimos resabios por los cuales es factible la comúnmente denominada «prisión
por deudas». Así, el artículo 7 de la Convención Americana sobre
Derechos Humanos señala que:
"Nadie será detenido por deudas. Este principio no limita los mandatos de
autoridad judicial competente dictados por incumplimiento de deberes
alimentarios."
En el ámbito interno, la integración de los artículos 38, 39, 51, 52 y 53 de la
Constitución Política, versan ±entre otros- en el mismo sentido del reconocimiento del
principio de protección y del derecho a la prestación de alimentos, logrando así de
manera expresa que la definición de origen internacional de cita sea receptada en los
citados artículos 38 y 39 de esta manera:
³ARTÍCULO 38.- Ninguna persona puede ser reducida a prisión por deuda.
ARTÍCULO 39.- A nadie se hará sufrir pena sino por delito, cuasidelito o
falta, sancionados por ley anterior y en virtud de sentencia firme dictada por
autoridad competente, previa oportunidad concedida al indiciado para
ejercitar su defensa y mediante la necesaria demostración de culpabilidad.
No constituyen violación a este artículo o a los dos anteriores, el apremio
corporal en materia civil o de trabajo o las detenciones que pudieren
decretarse en las insolvencias, quiebras o concursos de acreedores.´
De tal forma, es claro que para garantizar el cumplimiento de las obligaciones
alimentarias, desde el más alto nivel normativo se reconoce la posibilidad de
proceder mediante mecanismos que incluso pueden ser restrictivos de otros
EXPEDIENTE N° 12-000387-0007-CO
Teléfonos: 2295-3696/2295-3697/2295-3698/2295-3700. Fax: 2295-3712. Dirección electrónica: www.poder-judicial.go.cr/salaconstitucional.
Edificio Corte Suprema de Justicia, San José, Distrito Catedral, Barrio González Lahmann, calles 19 y 21, avenidas 8 y 6
derechos o libertades ±en este caso la libertad personal-razón por la cual, en estas
circunstancias deberá estarse a las previsiones que al respecto se hayan previamente
establecido. En este sentido, lo señalado en cuanto a la viabilidad del apremio y la
restricción de la libertad personal, es finalmente traducido en el ámbito legal
ordinario en el artículo 25 de la Ley de Pensiones Alimentarias, norma que en lo
conducente dispone:
³ARTÍCULO 25.- Procedencia del apremio
El apremio corporal procederá hasta por seis mensualidades, incluyendo el
período vigente, siempre que la parte actora haya gestionado el cobro en
forma reiterada. El apremio no procederá si se probare que al obligado se le
practica la retención efectiva sobre salarios, jubilaciones, pensiones, dietas u otros
rubros similares.´
Se evidencia, entonces, que para el decreto del apremio corporal es necesario no
sólo que el obligado alimentario se encuentre en mora con respecto a sus
obligaciones, sino que la parte actora del proceso «haya gestionado el cobro en
forma reiterada». Esta definición muestra una protección especial y adicional a la
libertad personal, pues ya no sólo basta con que la posibilidad de restricción haya
sido autorizada por la vía legislativa, sino que se requiere una apreciación del
cuadro fáctico concreto para determinar que ciertamente existe tanto una
obligación, como particularmente una necesidad de recibir los alimentos, necesidad
que se traduce en la instancia reiterada de los mismos. Debe partirse de la
naturaleza propia de «los alimentos» como elemento necesario para la subsistencia
de toda persona humana, concepto que trasciende la más básica definición
etimológica para convertirse
en un elemento comprehensivo
de otros aspectos
igualmente necesarios para el desarrollo humano, tales como el vestido, la
educación y la calidad de vida, entre otros, los cuales por sí mismos deben ser
inaplazables. Ello justifica entonces que la demanda para el cumplimiento de la
EXPEDIENTE N° 12-000387-0007-CO
Teléfonos: 2295-3696/2295-3697/2295-3698/2295-3700. Fax: 2295-3712. Dirección electrónica: www.poder-judicial.go.cr/salaconstitucional.
Edificio Corte Suprema de Justicia, San José, Distrito Catedral, Barrio González Lahmann, calles 19 y 21, avenidas 8 y 6
obligación alimentaria demuestre precisamente la necesidad de «los alimentos», y
esta necesidad se acredita cuando la parte actora hace una petición reiterada de los
mismos; lo contrario, es decir, omitir la solicitud, implica desnaturalizar el concepto
de «alimentos» y desvirtuar la necesidad de los mismos, por lo que bien puede
interpretarse que si no existe aquella gestión reiterada, la necesidad de alimentos
dista de ser una situación apremiante. Es por esta razón, que el legislador ha
determinado que para el dictado de una orden de apremio corporal que implique al
menos más de una cuota alimentaria, la parte actora deberá haber instado el cobro
de las mismas, al punto que para la emisión de una orden de apremio de hasta por
seis meses ±como lo define el artículo de comentario- se requerirá, entonces, que
tales cuotas hayan sido reiteradamente reclamadas en la vía correspondiente.
Siguiendo este criterio de necesidad, y acompañándolo de un criterio de lógica
±incluso jurídica- debe determinarse que esta gestión reiterada de cobro lo debe ser
de manera mensual. Esto por cuanto si una orden de apremio puede ser expedida
por un número determinado de meses hasta un máximo de seis, deberá acreditarse
previamente que cada uno de esos meses haya sido reclamado por el beneficiario
alimentario. Interpretar lo contrario sería desnaturalizar la necesidad e inmediatez de
los alimentos, desconocer
la fijación mensual de la obligación alimentaria, y
ocasionar un perjuicio grave a la libertad personal, la que de suyo, debe ser
interpretada siempre bajo la égida del principio pro libertatis . De tal manera,
cuando el artículo 25 de la Ley de Pensiones Alimentarias señala que debe haberse
gestionado el cobro de forma reiterada, debe entenderse que esa gestión reiterada
sea al menos una gestión de carácter mensual para cada uno de los meses adeudados
por el obligado alimentario. Esta definición no implica que no proceda el cobro de
aquellas cuotas cuyo pago no haya sido instado de manera reiterada y mensual, sino
que sobre estas debe seguirse la vía que legalmente también se ha previsto a través
EXPEDIENTE N° 12-000387-0007-CO
Teléfonos: 2295-3696/2295-3697/2295-3698/2295-3700. Fax: 2295-3712. Dirección electrónica: www.poder-judicial.go.cr/salaconstitucional.
Edificio Corte Suprema de Justicia, San José, Distrito Catedral, Barrio González Lahmann, calles 19 y 21, avenidas 8 y 6
de los mecanismos ordinarios y no por medio de la privilegiada vía del apremio
corporal ±ver, entre otras, sentencias de esta Sala números 2011-1989, de las
dieciséis horas dieciocho minutos del 15 de febrero de 2011, y 2011-6432, de las
ocho horas cincuenta y nueve minutos del 20 de mayo de 2011-. En consecuencia,
debe descartarse la aducida inconstitucionalidad de la norma impugnada.
IV.- Sobre el segundo párrafo del artículo 19 de la Ley de la Defensoría de
los Habitantes. Por otra parte, aduce el accionante la inconstitucionalidad del
segundo párrafo del artículo 19 de la Ley de la Defensoría de los Habitantes, en la
medida que impide que esta institución conozca o continúe conociendo de un caso del
cual sobre el cual esté pendiente una resolución judicial. La norma que se
pretende impugnar indica, en lo conducente, que:
³ARTÍCULO 19.- No interrupción de plazos. («)
2.- La Defensoría de los Habitantes de la República no podrá conocer las
quejas sobre las cuales esté pendiente una resolución judicial. Suspenderá su
actuación, si el interesado interpone, ante los Tribunales de Justicia, una
demanda o un recurso respecto del mismo objeto de la queja, lo cual no
impedirá, sin embargo, la investigación sobre los problemas generales
planteados en las quejas presentadas.´
La norma de cita es una clara manifestación del carácter y naturaleza jurídica de
una institución que como el Ombudsman ±conocida regularmente como Defensoría
del Pueblo, o, como en Costa Rica, Defensoría de los Habitantes-, está llamada a ser
una instancia de mediación para la protección y respeto de los derechos humanos,
con base en la autoridad moral que la caracteriza, teniendo sus pronunciamientos el
carácter de recomendaciones y no de resoluciones coercitiva ni coactivamente
ejecutables. En este sentido, dentro de los atributos de esta institución se reconoce
justamente la
imposibilidad de pronunciarse
o emitir recomendaciones
aspectos que ya se encuentren siendo estudiados
sobre
en el ámbito judicial, espacio
donde existe mayor amplitud de prueba y posibilidad de realización de
EXPEDIENTE N° 12-000387-0007-CO
Teléfonos: 2295-3696/2295-3697/2295-3698/2295-3700. Fax: 2295-3712. Dirección electrónica: www.poder-judicial.go.cr/salaconstitucional.
Edificio Corte Suprema de Justicia, San José, Distrito Catedral, Barrio González Lahmann, calles 19 y 21, avenidas 8 y 6
procedimientos contradictorios para validar la verdad real de los hechos, más allá de
la intermediación que al efecto pueda realizar la Defensoría de los Habitantes. Es
importante resaltar que la Defensoría es parte del esquema nacional de protección
de los derechos humanos, pero desde la particularidad del carácter recomendativo
de sus pronunciamientos. Es por esta razón, y para evitar indebidas confrontaciones
o contradicciones, y hasta para asegurar de manera coherente la actuación del
Estado en materia de protección de los derechos humanos y el cumplimiento de las
decisiones del ámbito judicial, que el legislador inhibió a la Defensoría de continuar
con los procedimientos cuando el mismo caso es trasladado al ámbito judicial,
porque ante dicha circunstancia corresponde su análisis y decisión final a un
tribunal de la República, quienes por mandato constitucional tienen la obligación de
resolver en definitiva los conflictos sometidos a su conocimiento.
V.- En consecuencia, siendo
que la presente acción adolece de vicios de
forma que determinan la inadmisibilidad de la misma, y tomando en consideración lo
indicado en los considerandos precedentes, lo que corresponde es rechazar de plano la
acción, como en efecto se dispone.
Por tanto
Se rechaza de plano la acción.
Gilbert Armijo S.
Presidente a.i.
Luis Paulino Mora M.
Ernesto Jinesta L.
EXPEDIENTE N° 12-000387-0007-CO
Teléfonos: 2295-3696/2295-3697/2295-3698/2295-3700. Fax: 2295-3712. Dirección electrónica: www.poder-judicial.go.cr/salaconstitucional.
Edificio Corte Suprema de Justicia, San José, Distrito Catedral, Barrio González Lahmann, calles 19 y 21, avenidas 8 y 6
Fernando Cruz C.
Fernando Castillo V.
Paul Rueda L.
Ricardo Guerrero P.
LDN3SPGFLGK61
EXPEDIENTE N° 12-000387-0007-CO
Teléfonos: 2295-3696/2295-3697/2295-3698/2295-3700. Fax: 2295-3712. Dirección electrónica: www.poder-judicial.go.cr/salaconstitucional.
Edificio Corte Suprema de Justicia, San José, Distrito Catedral, Barrio González Lahmann, calles 19 y 21, avenidas 8 y 6
Descargar