GLorca 17 El cementerio de San Clemente (en las fotos) fue inaugurado en el año 1900, al quedar pequeños otros más antiguos como el de San José o San Cristóbal, debido al auge demográfico de la época Historia de nuestros cementerios Por GLorca Fotos: Paco Alonso y Juan Caballero A partir del siglo XVIII los enterramientos dejan de hacerse en los templos para evitar la propagación de enfermedades y la contaminación del ambiente.Cambia entonces la cultura funeraria de la época, que derivará en la proyección de austeros cementerios ubicados en las afueras de la urbe. Los camposantos de San José, San Cristóbal o San Clemente fueron el fruto de ese cambio de mentalidad auspiciado por los afanes de modernización que procedían del pensamiento ilustrado esde la segunda mitad del siglo XIX se levantan los grandes cementerios románticos en los que las tumbas adoptan un tono monumental. Éstos son los que perduran en la actualidad, en muchos caso inundados de construcciones seriadas. Quedán, así, atrás los enterramientos que se realizaban en el interior de las iglesias, y que a partir del siglo XVIII fueron desapareciendo, para construir cementerios alejados de la población, con el fin de evitar los malos olores, la contaminación del aire y la propagación de enfermedades. D Cristóbal, construido en 1890 sobre una superficie de 1.106 metros cuadrados, situado al otro lado del río Guadalentín. El barrio de San Cristóbal tuvo un gran desarrollo en la época contemporánea al instalarse en él sectores en expansión. A finales del siglo XIX la mayor parte de las ciudades se ven obligadas a sustituir los cementerios construidos a principios de siglo, ya que el auge demográfico deja pequeños los recintos y el consiguiente crecimiento urbano hace que muchos de ellos queden dentro del casco urbano o excesivamente cercano al mismo. San José, el primer cementerio de Lorca Según un estudio realizado por Ana Moreno Atance, el cementerio de San José fue el primero construido en Lorca, en el año 1806. Se sitúo en los arrabales de la ciudad, en el camino de Almería, y en él se dio sepultura entre los años 1811-1812 a 3.744 lorquinos que murieron como consecuencia de la epidemia de fiebre amarilla. Este camposanto acogía a los difuntos de las parroquias del centro del casco urbano: San Patricio, Santiago, San Mateo y San José. En este sentido, en 1884 la Dirección General de Sanidad ordenó la clausura del cementerio de San José, ya que la situación de insalubridad era tal que llegó a prohibirse su visita, incluso en la fiesta del 1 de noviembre. Al quedarse pequeño el camposanto de San José se proyectó el cemnterio de San Clemente que fue inaugurado en el año 1900. El primer cementerio de Lorca fue el de San José que acogía a los difuntos de las parroquias del casco urbano Plano cementerio S.José (Clavis 2001) Junto a éste se proyectaron otros cementerios pensados para salvar las dificultades de comunicaión de los barrios más alejados: uno se destinaría a las parroquias de Santa María, San Pedro y San Juan y el último a la parroquia de San Cristóbal. San Cristóbal, el segundo cementerio El segundo cementerio contemporáneo de la época fue el de San En el año 1910 se construye la capilla del cementerio, que hoy día conserva básicamente la distribución y fisonomía del proyecto primitivo, si se excluyen las ampliaciones realizadas con posterioridad.. Tienen especial importancia los panteones que se construyeron a partir de la segunda década del siglo XX por iniciativa de las principales familias lorquinas de la época. En la actualidad, este cementerio atesora, además de lso restos de nuestros antepasados, un gran legado arquitectónico y escultórico realizado por profesionales de la época.