Influencia de las poblaciones bacterianas y fúngicas en las emisiones de N 2O en pinares del País Vasco Barrena, I.a, Estavillo, J.M.a, Duñabeitia, M.a, González-Murua, C.a, Menéndez, S.b a Department of Plant Biology and Ecology, University of the Basque Country (UPV/EHU), Apdo. 644, E-48080 Bilbao, Spain. b Institute of Agro-biotechnology (IdAB), UPNa-CSIC-GN, 31192 Mutilva Baja, Navarra, Spain 1. Introducción Los bosques pueden representar una fuente de emisión significativa de óxido nitroso (N2O). Se ha estimado que los suelos forestales de clima templado pueden emitir alrededor de 0.01-8.07 Kg NN2O ha-1año-1 (Dalal y Allen, 2008). Sin embargo, los procesos de producción del N2O en suelos forestales conllevan gran complejidad. Así, Stange y cols. (2013) estudiaron la contribución de la oxidación del nitrógeno orgánico (Norg), la nitrificación (oxidación del amonio) y la desnitrificación (reducción del nitrato) a las emisiones de N2O en suelos forestales del País Vasco, concluyeron una clara dominancia de la contribución del proceso de oxidación del Norg a estas emisiones. En este proceso contribuyen tanto hongos como bacterias heterotróficas. El presente estudio tiene como objetivo profundizar en la contribución de hongos y bacterias a las emisiones de N2O en tres momentos significativos en el manejo habitual de Pinus radiata en el País Vasco. 2. Materiales y Métodos El estudio se llevó a cabo con suelos de tres rodales de pino (Pinus radiata D. Don) en tres diferentes fases de crecimiento (Tabla 1). Tabla 1: Propiedades del suelo para cada rodal (0-10 cm de profundidad). Densidad (g cm-3) Textura pH M.O. (%) N (%) C/N Nueva plantación 1.08 Franco arcillosa 4.72 3.20 0.27 6.89 Pinar joven 1.24 Franco arcillo arenosa 4.23 4.69 0.21 12.98 Pinar Maduro 1.20 Franca 4.71 4.99 0.26 11.16 Se tomó suelo de 0-10 cm de profundidad de cada rodal, que fue homogenizado e incubado a 24ºC con la técnica de substrate-induced respiration inhibition (SIRIN). Los inhibidores utilizados fueron cicloheximida (CH) y cloranfenicol (CF). Para las incubaciones se introdujeron 50 g de suelo fresco en tarros de cristal (1L) con un septo para la toma de muestras de gases. Los tratamientos se detallan en la Tabla 2. Tratamiento Control (C) CH CF CH+CF Glucosa 2 mg/g suelo 2 mg/g suelo 2 mg/g suelo 2 mg/g suelo Tabla 2. Tratamientos aplicados. Peptona Nitrato amónico 5 µmol N/g suelo 6.74 µmol N/g suelo 5 µmol N/g suelo 6.74 µmol N/g suelo 5 µmol N/g suelo 6.74 µmol N/g suelo 5 µmol N/g suelo 6.74 µmol N/g suelo Cicloheximida 2 mg/g suelo 2 mg/g suelo Cloranfenicol 1 mg/g suelo 1 mg/g suelo Se tomaron muestras de gases del interior de cada tarro cada dos horas durante ocho horas seguidas y se analizó su concentración de CO2 y N2O por cromatografía de gases (Menendez y cols., 2012). La contribución porcentual de los hongos y bacterias a la emisión de estos gases se calculó según las formulas descritas por Nakamoto y Wakahara (2004). 3. Resultados y Discusión Las emisiones de CO2 del tratamiento control (C) indican que la respiración microbiana es la mitad en la nueva plantación que en los pinares joven y maduro (p<0.01) (Tabla 3), consecuencia del drástico cambio en la actividad microbiana del suelo cuando se tala un bosque. Esto nos indica que en este rodal hay una menor masa microbiana, que a su vez se corresponde con la menor cantidad de materia orgánica en los primeros 10 cm del suelo (Tabla 1) debido al proceso de tala a matarrasa, que elimina parte del horizonte superior. Esta tala además estaría produciendo la desaparición de parte de la biomasa fúngica ectomicorrícica así como de su población bacteriana asociada. Nuestros resultados indican que los hongos contribuyen algo más que las bacterias a las emisiones de CO2 en el pinar maduro, mientras que contribuyen aproximadamente un 50% en el caso de la nueva plantación y el pinar joven (Tabla 4). El pinar maduro, al ser un bosque totalmente desarrollado, presenta más biomasa fúngica en el suelo, probablemente debido a una mayor estabilización de la simbiosis ectomicorrícica con la planta de pino adulto. Tabla 3: Emisiones medias de N2O (µg N2O-N kg-1 h-1) y CO2 (µg CO2-C kg-1 h-1) en los distintos tratamientos. C CH CF CH+CF Nueva plantación 3246±102 2839±187 3062±173 2049±149 CO2 Pinar joven 6878±633 5108±405 5150±474 3572±186 Pinar maduro 6279±1021 5265±464 5542±296 4641±614 Nueva plantación 0,66±0,06 0,29±0,13 0,33±0,06 0,24±0,07 N2O Pinar joven 0,45±0,05 0,41±0,36 0,38±0,01 0,36±0,02 Pinar maduro 0,43±0,11 0,37±0,13 0,31±0,03 0,28±0,12 Al contrario de lo que ocurría con la emisión de CO2, la mayor estimulación producida por la adición de las fuentes de C (glucosa) y N (peptona y nitrato amónico) indica que, en esta fase del manejo, el potencial de emisión de N2O es mayor en la nueva plantación que en los pinares joven y maduro (p<0.05)(Tabla 3), ya que se ha descrito que la exclusión simultanea de las raíces y los hongos micorrícicos aumentan las emisiones de N2O (Ernfors y cols., 2011). Por otro lado, las bacterias juegan un papel más importante en las emisiones de N2O en los pinares joven y maduro, con una contribución del 62 y 72%, respectivamente (Tabla 4), mientras que en la nueva plantación la contribución de los hongos es algo mayor que la de las bacterias. Tabla 4: Contribución porcentual (%) de hongos y bacterias a las emisiones de N 2O y CO2. CO2 N2O Nueva plantación Bacterias Hongos 47 53 45 55 Pinar Joven Bacterias Hongos 49 51 62 38 Pinar Maduro Bacterias Hongos 42 58 72 28 El hecho de que en los pinares joven y maduro la contribución relativa a la emisión de N 2O por parte de los hongos sea baja está de acuerdo con que las especies fúngicas ectomicorrícicas sean mayoritarias en estas fases avanzadas del manejo, ya que no se ha descrito que los hongos ectomicorrízicos puedan emitir N2O. Además, esta estabilización de la simbiosis ectomicorrícica potencia el crecimiento de la población bacteriana asociada. 4. Conclusión La actividad bacteriana contribuye en mayor grado que la fúngica a la emisión de N2O en los pinares joven y maduro. La tala a matarrasa modifica sustancialmente la microbiota edáfica siendo los hongos los que más contribuyen a la emisión de N2O. Agradecimientos Este proyecto ha sido financiado por los proyectos AGL2009-1339-C02-01 y GV IT-526-10. Iskander Barrena disfruta de una beca predoctoral del Departamento de Educación, Universidades e Investigación del Gobierno Vasco. Referencias Dallal R.C. y Allen D.E. 2008. Greenhouse gas fluxes from natural ecosystems. Australian Journal of Botany 56, 369-407. Ernfors M., RÜtting T. y Klemedtsson L. 2011. Increased nitrous oxide emissions from a drained organic forest soil after exclusion of ectomycorrhizal mycelia. Plant Soil 343, 161-170. Menéndez S., Barrena I., Setien I., González-Murua C. y Estavillo J.M. 2012. Efficiency of nitrification inhibitor DMPP to reduce nitrous oxide emissions under different temperature and water conditions. Soil Biology & Biochemistry 53,82-89. Nakamoto T. y Wakahara S. 2004. Development of Substrate Induced Respiration (SIR) method combined with selective inhibition for estimating fungal and bacterial biomass in Humic Andosols. Plant Production Science 7, 70-76. Stange C.F., Spot O., Arriaga H., Menéndez S., Estavillo J.M. y Merino P. 2013. Use of the inverse abundance approach to identify the sources of NO and N2O release from Spanish forest soils under oxic and hypoxic conditions. Soil Biology & Biochemistry 57, 451-458.