EL 122 20151211 Cometas y Titán. Hace unos días os comentaba acerca de mi intención de observar y fotografiar el cometa “Catalina” que es visible (cuando no hay nubes) en las madrugadas, cerca del planeta Venus. Se dice que con cielos limpios se ve a simple vista, pero hasta hoy no ha habido tales cielos en mi zona y por lo tanto la foto que os muestro no es mía, sino del archivo de Spaceweather.com, y la hizo Fritz Helmut Hemmerich desde Tenerife, cuando el día 9 pasó cerca de Venus, que es el tremendo cuerpo brillante del lado derecho. Podemos distinguir dos colas, una, llamada cola de iones que se orienta en dirección opuesta al Sol, cuyo viento empuja los gases y el polvo más ligero alejándolos de él y la otra que se orienta según la órbita del cometa, formada por el polvo más pesado que es capaz de resistir la fuerza del viento solar. Para quienes quieran intentar ver el cometa, unos prismáticos son la herramienta ideal y la carta tomada de la revista Sky & Telescope que os muestro a continuación sirve como referencia para los amaneceres de estos próximos días. Podéis ver una mancha blanquecina con un centro más brillante y si el cielo lo permite, sus dos colas, al menos en las zonas cercanas al núcleo. Si ponéis una cámara sobre un trípode y hacéis un disparo de apenas 30 segundos enfocando a la zona, es muy probable que lo capte. Justo el día anterior al de la foto que os he mostrado, la sonda SOHO que vigila y observa al Sol desde hace veinte años (se le preveía una vida de dos a cinco) captó otro cometa que tal como le ocurrió en su día al cometa ISON, se desintegró al acercarse al astro rey. Las imágenes muestran al cometa acercándose al Sol y justo antes de desintegrarse, en sus cercanías, tal como lo captó la sonda. Los astrónomos que observaban el acercamiento finalizaron diciendo “un cometa entró y nada salió”. Y ahora vamos a Titán, la mayor luna del planeta Saturno, que como ya sabéis está siendo estudiado por la sonda Cassini desde hace ya unos años y cuyos éxitos y descubrimientos son continuos. Esta vez, se trataba de fotografiar el aspecto que ofrece el satélite Titán que tiene el tamaño de una Luna y media más o menos y cuya superficie no es visible para los telescopios terrestres ya que se encuentra rodeado de una densa atmósfera formada por gases de hidrocarburos que le dan un tono anaranjado. Solo cuando la sonda Huygens se separó de la Cassini y descendió sobre la superficie de Titán, pudimos verificar el aspecto que ofrece el satélite, con sus lagos de metano y el ciclo de evaporación, creación de nubes y lluvia que se produce con estos hidrocarburos. También se han podido observar cauces fluviales que desembocan en los lagos, dunas y otras muchas formaciones. La fotografía se hizo desde la Cassini utilizando longitudes de onda capaces de penetrar esa atmósfera y con diferentes resoluciones según la distancia de la Cassini al pequeño cuerpo celeste. Es una primera fotografía oficial publicada por la Nasa, de todo el satélite y tal como ocurrió recientemente con Plutón, es la primera vez que podemos verlo de cerca y entero. Según el equipo de la Nasa, el aspecto de Titán es bastante parecido al de la Tierra pero su temperatura de -179 grados y la falta de oxígeno en su atmósfera hacen que las probabilidades de encontrar algún tipo de vida sean muy remotas. Y como la semana pasada solo pude mostraros el fantasma de la nebulosa de la cabeza de caballo, para terminar esta semana lo quiero compensar mostrando una bellísima fotografía de esta nebulosa, que, por supuesto no es mía (que más quisiera uno), sino que fue hecha por Jesús M. Vargas y Maritxu Poyal con el telescopio robotizado en MayHill en Nuevo Méjico y para ello usó una cámara con un filtro para captar el Hidrógeno alfa, con 7 exposiciones de 900 segundos y luego con filtros RGB, 10 exposiciones de 300 segundos. La mía llegará pero será mucho más modesta. LA tenéis en la página siguiente. No sé si podré resistir la tentación de pintar un cuadro con esta imagen. Buena semana, Alberto Rivas Sr.