03/04/2013 Tirada: 294.394 Difusión: 294.394 Audiencia: 1.030.379 AREA (cm2): 611,0 Categoría: Andalucía Edición: Cádiz Página: 16 OCUPACIÓN: 56,9% V.PUB.: 2.520 NOTICIAS PROPIAS LECCIÓN DE ECONOMÍA: DINERO 5 LUIS DO CAMPO SCHROEDEL Vicesecretario del Colegio de Economistas de Cadiz S E habla estos días de una serie de conceptos macroeconómicos que estando perfectamente definidos en los manuales de Economía son los grandes desconocidos del público en general. La prensa nacional y extranjera nos inunda de datos e indicadores macroeconómicos todos los días y el público se ha acostumbrado a manejar términos como PIB, Prima de riesgo, Deuda pública etc. que más o menos dominamos o creemos dominar pero olvidamos otros muchos que utilizamos todos los días y que sin embargo si conociéramos su verdadero significado y trascendencia económica cambiaria sustancialmente nuestra actitud frente a ciertas políticas económicas que nos impone nuestros dirigentes. Hoy trataré de uno de estos conceptos que todos manejamos a diario y creemos conocer a la perfección: el dinero. Podemos definir el dinero como cualquier activo que se pueda usar fácilmente para comprar bienes y servicios (Krugman P. “Fundamentos de Economía”) De la sencillez de la definición se derivan las consecuencias que este medio de pago puede tener en las relaciones socioeconómicas de los pueblos que nos hemos otorgado este medio de intercambio para desarrollar nuestras relaciones económicas y sociales. Como digo de esta definición se derivan dos características esenciales “liquidez” y “fiabilidad”. Es decir que para que el dinero cumpla su función es necesario que sea un activo líquido por definición y que el que lo recibe a cambio de bienes y servicios le otorgue suficiente credibilidad otorgándole el valor que dice representar. Como todos sabéis antiguamente el papel moneda era titulo respaldado por las reservas en oro o plata del Banco emisor. Los más mayores se acordaran de la leyenda de las pesetas del siglo pasado en las que se podía leer: “El Banco de España pagara al portador…” En la actualidad los billetes y monedas que utilizamos normalmente es dinero fiduciario (de fiducia=confianza) es decir que no está respaldado por su valor en metales preciosos o divisas, sino que se basa exclusivamente en la confianza que tenemos en él y que proviene de la autoridad que lo emite: el Estado o los Bancos centrales públicos. A este tipo de dinero le denominamos dinero legal. Aclarados estos extremos y viendo que no es oro todo lo que reluce, ya podemos hablar de otros tipos de dinero de segunda y tercera categoría. Si el dinero legal lo integraba la totalidad de billetes y monedas en circulación (efectivo en circulación) veremos que existen otras formas de dinero creado por las entidades financieras al que podremos denominar dinero bancario y que se deriva del poder que tienen los bancos de crear medios de pago de la nada cada vez que estos conceden un préstamo o un crédito. El procedimiento es muy fácil de entender y se explica en los manuales de Economía (Introducción a la Economía Prof.: Torres Lopez). Supongamos que Pedro se deja convencer por un banco y deposita los 100 euros que dispone en un banco a cambio de recibir un interés del 4 % al año. En ese momento el banco hace un apunte anotando 100 euros en el activo (dinero en metálico) y por otra parte anota que tiene un pasivo (que debe a Pedro) 100 eu- La economía productiva representada por el PIB va por un lado y la de las finanzas por otro ros. Hasta ahora no ha cambiado la cantidad de dinero en circulación, pero supongamos que otra persona María necesita 20 euros si es Pedro quien se lo presta María tendrá 20 euros y Pedro 80 euros. La cantidad de dinero existente sigue siendo el mismo, 20 en el bolsillo de María y 80 en el bolsillo de Pedro; es decir que el préstamo entre particulares no ha alterado el dinero en circulación. Pero ¿qué ocurre si el préstamo se lo da un banco? El banco piensa que Pedro no va a retirar su dinero de inmediato por lo que puede prestar una parte de los 100 euros a otra persona siempre a un interés superior al 4%, dejando una parte depositada (coeficiente de caja) para atender un posible reembolso. El banco concede sin problemas en préstamo a María a un tipo de, por ejemplo, el 7%, entregándole una tarjeta de crédito para que pueda ir disponiendo del dinero concedido. ¿Cuánto dinero hay en circulación en el momento en que se concede el crédito? Pues en ese momento habrá 120 euros, 100 de dinero legal y 20 euros en dinero bancario, es decir que el banco ha creado en esta operación 20 euros en medios de pago sin que hayan aumentado las monedas o billetes en circulación Es decir que con esta sencilla operación el banco ha creado dinero. Y lo ha hecho como decía el premio Nobel de Economía Maurice Allais, ex nihilo, es decir de la nada. He aquí el milagro de la multiplicación de los panes y los peces con la única diferencia de que aquí no interviene la mano divina. En realidad, lo que ocurre es que el banco crea dinero en la medida que crea deuda. Este medio de pago, dinero bancario, representa mas del 80% del dinero legal lo que puede darnos una idea de la importancia de este dinero virtual en nuestra economía. Esta facultad de crear dinero pone en manos de la oligarquía financiera un poder enorme que escapa del control de las autoridades públicas responsables de la emisión de moneda. Y el lector se preguntará ¿de dónde nace esta capacidad de los bancos de crear tal cantidad de medios de pago? Pues, entre otras cosas, del deficiente control que ejercen los estados a través de los Bancos Centrales. En efecto, si dichas autoridades obligasen a los bancos a mantener unos mayores coeficientes de caja (parte del dinero depositado por los clientes, en la actualidad alrededor de 10%) se reduciría sustancialmente el llamado dinero bancario. Descendiendo de categoría nos resta por definir el dinero financiero o M3 que comprende los dos anteriores (dinero legal + dinero bancario) mas una serie de operaciones de dudosa liquidez como son los depósitos a largo, las cesiones temporales y diversas participaciones en fondos en el mercado monetario y de renta fija e incluso acciones de SA emitidas expresamente como medios de pago, no como ampliación de capital. En resumen que la cantidad de dinero en circulación supone un 90% del dinero legal, lo que significa que la capacidad de los bancos y grandes empresas de crear dinero va en relación inversa con los coeficientes de caja autorizados por el banco central y en relación directa con el importe de los préstamos concedidos a particulares y estados. Para ilustrar esta lección solo algunas cifras sobre el crecimiento desmesurado de los medios de pago a nivel mundial: Desde el año 1980 hasta 1.999 el importe total de las transacciones financieras creció 2.5 veces más rápido que el PIB mundial. En el año 2008 el volumen total de las transacciones financieras era 60 veces mayor que el PIB mundial. Esto quiere decir que la economía productiva representada por PIB, va por un lado y el mundo de las finanzas va por otro. En mi opinión el crecimiento exacerbado de este tipo de operaciones, meramente especulativas, está empobreciendo la economía real que en vez de producir se descapitaliza a pasos agigantados debido a la actitud de determinadas entidades financieras que han abandonado su objeto social para el que fueron creadas (tomar dinero de unos para prestarlo a otros) y se dedican a tomar dinero de los bancos centrales e invertirlos en meras operaciones especulativas que nada aportan a la economía productiva.