ANESTESIA EN SERPIENTES Sara Trancón Amador; Diana Ruiz Redondo; Manuel San Andrés La anestesia en serpientes es una práctica cada vez más habitual en las clínicas veterinarias especializadas en animales exóticos, tanto para un más fácil manejo en la exploración o diagnóstico como para poder realizar una serie de intervenciones quirúrgicas. Antes de referirnos a los procedimientos anestésicos propiamente dichos, vamos a repasar alguna de las características anatomofisiológicas de estos animales que pueden tener una repercusión en el desarrollo de la anestesia. Al hablar de ofidios nos situamos dentro del Fylum Chordata, Subfylum vertebrata, Clase Reptilia, Orden Squamata y Suborden Ophidia o Serpentes. Son animales de naturaleza carnívora que se caracterizan por tener el cuerpo alargado y flexible. No presentan extremidades y se desplazan reptando. Tegumento externo Poseen un tegumento con una epidermis firme recubierta de escamas de distintos tamaños según su localización. Estas escamas no deben ser dañadas durante la administración de medicamentos por lo que se deberá insertar la aguja entre ellas, o tenerlas en consideración a la hora de administrar tratamientos locales como pomadas o geles. Son animales que presentan muda o ecdisis, por lo que es normal verles de color azulado cuando la realizan debido a un acúmulo de líquido de naturaleza linfática entre piel vieja y nueva. Esta característica nos interesa por dos motivos: el primero que nunca deberemos tomar esta coloración como patológica en estas circunstancias; y el segundo que durante la muda los ofidios tienden a aumentar su agresividad ya que poseen una visión mas reducida por la opacidad que se produce sobre el ojo y es menos recomendable su manejo. El manejo es también menos adecuado en hembras gestantes o serpientes recién alimentadas, teniendo que esperar incluso un par de días. Izq. y centro: distintos tipos de tegumento, con y sin quilla; Dcha: turbidez en la muda Sistema endocrino A diferencia de los otros animales terrestres, que generan su calor corporal a partir de la energía que extraen de los alimentos, los reptiles no pueden generar su propio calor. Por el contrario, son poiquilotermos (dependen del calor externo del ambiente para mantener estable su propia temperatura corporal). Muchas especies pasan largos periodos tendidas tomando el sol, a menudo estirando sus cuerpos para aumentar la superficie que recibe calor. Debido a que no necesitan utilizar el excedente de energía alimenticia para mantenerse calientes, los reptiles tienen requerimientos energéticos mucho más bajos que los animales endodérmicos como los mamíferos y, por lo tanto, pueden mantener un índice metabólico también mucho más bajo. Esta es una de las razones por las cuales muchos reptiles son capaces de hibernar por largos períodos sin necesidad de alimentarse para permanecer vivos. Sus procesos corporales internos pueden ralentizarse tanto que son capaces de sobrevivir sin alimento durante varios meses. Muchas especies de serpientes, en regiones templadas y desérticas se retiran bajo tierra durante los meses de invierno, donde se hallan protegidas de las heladas. Algunas cavan madrigueras, pero otras especies hacen uso de las guaridas hechas por otros animales, o de las cavidades en la base de los tocones de los árboles. Algunas especies son conocidas por hibernar en grandes grupos, por ejemplo la serpiente de cascabel es conocida por formar grandes bolas que contienen docenas de individuos, que se agrupan para pasar el invierno. Al tener una actividad tan ligada a la temperatura exterior se dice que las serpientes tienen costumbres estacionales. Fosetas termorreceptoras para controlar el ambiente externo y adaptar su comportamiento. La temperatura óptima corporal varía de unas especies a otras, sin embargo se fija en 29 ºC como estándar. Hay que tener en cuenta el hecho de que son animales poiquilotermos a la hora de realizar la anestesia, eligiendo la temperatura más adecuada, que será la más próxima a los 29 ºC que necesitan fisiológicamente.No es patológico encontrar timo en animales adultos al realizar una intervención, ya que al contrario que en mamíferos no involuciona. Sistema respiratorio Presentan un solo pulmón desarrollado a modo de saco que se extiende hasta el riñón. Es el pulmón derecho, ya que el izquierdo es vestigial. El pulmón funcional presenta dos porciones con funciones distintas: una para intercambio gaseoso que está vascularizado y tiene tejido alveolar, y otra como reservorio de aire que carece de vascularización y de tejido alveolar y es, por tanto, incapaz de realizar intercambio. Esta división es importante a la hora de hacer la ordeña manual para acelerar la recuperación tras la anestesia, de la que hablaremos más adelante. Las serpientes no poseen diafragma, por lo que la inspiración y espiración se lleva a cabo mediante los músculos costales. Tienen un corto número de movimientos respiratorios por minuto y respiran profundamente, debido a la ausencia del hueso esternón en el tórax. Esto hace que a la hora de contar las respiraciones por minuto nos resulte difícil y se complica aún más cuando el animal está bajo anestesia. Sistema cardiovascular: Las serpientes poseen circulación porta renal y porta hepática, lo cual debe tenerse en cuenta a la hora de administrar determinados fármacos. Además, la ausencia de diafragma hace que el corazón presente cierta movilidad por no estar unido en ese punto como en mamíferos, siendo un aspecto a tener en cuenta en caso de querer utilizar la vía intracardiaca. Una última característica del sistema cardiovascular es la presencia de la vena abdominal que viaja por la línea media ventral y que hay que tener en cuenta a nivel quirúrgico. Sistema Renal y Reproductor La porción más caudal del riñón presenta en los machos una modificación durante la época reproductiva transformándose en el “segmento sexual”, cuya función es la de producir líquidos que van a formar parte del semen (lo encontraremos aumentado de tamaño). Hay que tener especial cuidado con la localización de los hemipenes en machos para no dañarlos. Los ofidios carecen de vejiga de la orina. Hemipenes en protusión hacia el exterior Manejo básico A la hora de traer la serpiente a la clínica hay que advertir al propietario que el momento más complicado a la hora de cogerlas es en el terrario. Deben ser agarradas con firmeza, aguantando su cuerpo. Hay que estar tranquilo y alerta. Se pueden transportar en bolsas de algodón teniendo mucho cuidado con la temperatura de la serpiente (por ser animales poiquilotermos, ya mencionado anteriormente). Las serpientes pequeñas se pueden transportar en un recipiente de plástico con algún tipo de papel absorbente. Hay que tener cuidado especial con los mordiscos (aún cuando no sean venenosas). PREANESTESIA Hay que tener en cuenta tanto las diferencias anatómicas de estos animales, como las diferencias fisiológicas (descritas con detalle en apartados anteriores). Por su vital importancia, recordar que la temperatura a la que debe realizarse la anestesia será entorno a los 29ºC, asegurándonos además de que sea así ya que influirá en la duración y profundidad de la anestesia, así como en la recuperación (las temperaturas bajas pueden enlentecer su recuperación, mientras las elevadas pueden acelerarla aunque tampoco se recomienda como método). La preparación de las serpientes antes de una anestesia debe incluir una historia clínica, es de vital importancia y nos da gran cantidad de datos de modo sencillo; exploración, teniendo en cuenta sobre todo un manejo adecuado en el que sometamos al menor estrés posible al animal, ya que esto influye en el grado de relajación muscular y en algunos procesos se requiere que sea elevado (mantener siempre sujeta y vigilada la cabeza y dejar que el cuerpo se enrosque en torno a nuestro brazo); determinación del peso, necesario no solo para el cálculo de la dosis de anestésico aplicada sino también para conocer la cantidad de fluidos que han de ser administrados en caso de necesitar fluidoterapia (tanto en la etapa preoperatoria al encontrar un animal deshidratado; como en la postoperatoria por pérdida de fluidos o tras el uso de un anestésico de larga recuperación como es la ketamina); análisis hematológicos y bioquímicos, para diagnosticar posibles patologías y conocer el estado de coagulación; y por último el ayuno que debe ser de 96 horas, es muy importante este dato ya que es superior al realizado en animales domésticos. Normas de correcto manejo durante la exploración ANESTESIA Tras seguir todos estos puntos, pasamos a las condiciones anestésicas que se traduce a la valoración del estado anestésico y la monitorización. El estado anestésico se estabiliza entre 15 y 25 minutos generalmente, pudiendo observar la estabilización de la respiración tras el estado de excitación que se produce en el momento inicial. Pero el tiempo que tarda en establecerse este estado puede variar por lo que se realizan una serie de pruebas sencillas: a) Tocar los músculos en torno a la columna vertebral con firmeza generará respuesta en una serpiente que no esté por completo anestesiada. Con ello comprobamos la perdida de reflejo de enderezamiento. b) Comprobar el tono de la lengua viperina, pinzándola e intentando extraerla para ver si hay resistencia. Sólo la habrá si no está del todo anestesiada. Evaluamos así el reflejo de retracción que se pierde con la anestesia. c) Se producirá dilatación de las pupilas y pérdida del reflejo de retirada de la cola al pellizcar. La monitorización es cardiaca y respiratoria. La monitorización respiratoria es complicada de realizar ya que debido a la anestesia apenas detectamos los movimientos respiratorios que se alternan con periodos de apnea prolongados de tipo fisiológico. Es muy importante la aplicación de presiones positivas de oxígeno (dos veces el volumen del animal por minuto). Con respecto a la monitorización cardiaca se realiza mediante electrocardiograma, Doppler o pulsioxímetro. Pero aún así es complicado medir las ondas eléctricas del corazón por lo que se recurre más a la medida de los movimientos musculares o de la respiración para comprobar el estado del animal. Distintas imágenes sobre monitorización cardiaca y respiratoria. A la dcha. ejemplo de ventilación asistida; en la parte inferior electrodos para monitorización cardiaca y ejemplo de un electro normal. Una vez mencionadas las precauciones antes y durante la anestesia, evaluamos los distintos fármacos y sus vías de administración. Los agentes se dividen en inyectables e inhalatorios. Los fármacos inyectables se administran por vía intravenosa, intraperitoneal, intramuscular e intracardiaca. Los lugares de punción de la vía intravenosa son el seno venoso central (aguja en ángulo de 45º, entre pares caudales y con especial cuidado en machos por la situación de los hemipenes), venas palatinas y sublingual (estas venas son fácilmente observables cuando la boca está abierta. La curvatura de la aguja es habitualmente necesaria y el muestreo es más fácil si el reptil está sedado con metomidato o bajo una anestesia ligera), vena yugular (se procede al igual que en mamíferos) y punción cardiaca (esta última es de gran peligrosidad, solo en animal terminal o que vaya a sacrificarse). La vía intraperitoneal o intracelómica se realiza en la segunda parte del cuerpo respetando la orientación de las escamas y sólo para la administración de sueros o algunas anestesias. La vía intramuscular Se realiza en la musculatura longitudinal a lo largo del dorso de la primera mitad del animal. Consiste en aplicar dosis con pequeños volúmenes en múltiples sitios. Debe realizarse con seguridad de que no se accede directamente a un vaso sanguíneo mediante aspiración cuando se introduce la aguja. La vía intracardiaca es difícil de realizar y no se usa (salvo en los casos ya comentados). Imágenes de las distintas vías inyectables y localización de algunas venas Han sido descritas muchas formas de anestesia química inyectable en serpientes, aunque las más comunes son las citadas a continuación: adyuvantes, anestésicos esteroideos, anestésicos disociativos y otros. Como adyuvante se usa: - Etorfina es un analgésico opiáceo administrado por vía intramuscular (dosis = 0,3-2,75 mg/Kg.). Su inconveniente es que induce pocos efectos analgésicos sobre las serpientes (debido al gran peligro que supone a los seres humanos no se recomienda su utilización salvo en caso de emergencia). - Xylacina, un tranquilizante de tipo agonista adrenérgico ? 2 , administrado por vía intramuscular (dosis = 0,1-10 mg/Kg.) produciendo diferentes estados comprendidos entre el grado de letargo y anestesia. La inmovilización dura entre 45 minutos y 12 horas. Se recomienda utilizar xylazina (10mg/kg) y ketamina (50mg/kg) en combinación ya que implica una mejoría con respecto a la ketamina per se. - Succinilcolina, un relajante muscular administrado por vía intramuscular o intraperitoneal (dosis = 0,34-1 mg/Kg.). Este agente, como único fármaco anestésico, se ha considerado crítico para el bienestar de los animales y las posibles implicaciones jurídicas del anestesista. Su gran inconveniente es que no proporciona analgesia, solame nte parálisis de los músculos por lo que operar en un reptil tan inmovilizado se puede considerar que causa sufrimientos innecesarios. Como anestésico esteroideo se usa: - Alfaxalona/alfadolona con dosis de 6-9 mg/Kg. por vía intravenosa y 9-15 mg/Kg. por vía intramuscular. Su ventaja es que es muy buen anestésico en los reptiles, especialmente cuando se administra por vía intraveno sa. Su desventaja es que administrado por vía intramuscular es que se requieren grandes volúmenes de la dosis y debe inyectarse en múltiples sitios en las serpientes. Si se administra por vía intravenosa se produce una respuesta rápida por lo que se permite la intubación en los 3 minutos de la inyección. Sin embargo, la inducción por vía intramuscular es más lenta (25-40 minutos).La anestesia dura 15-35 minutos, con un promedio de 25 minutos. Como anestésicos disociativos se usa la Ketamina o la Tiletamina: La Ketamina (dosis = 20-100 mg/Kg.) cuya ventaja es que es eficaz si se administra por vía subcutánea, intramuscular o intrave nosa. Se aconseja empezar con dosis inferiores a 30 mg/kg y a continuación ir incrementándolas en intervalos de 20-30 minutos, hasta obtener el estado deseado de anestesia. Las dosis menores a 50 mg/kg normalmente producen tranquilización o una ligera ane stesia, mientras que las dosis por encima de 50 mg/kg provocan resultados satisfactorios para la cirugía. Está contraindicado en reptiles debilitados o deshidratados, especialmente aquellos con daño hepático o renal. El otro gran inconveniente de la ketamina es que el período de recuperación es proporcional a la dosis utilizada, por lo que con dosis muy altas, como de 100 mg/kg, la recuperación puede durar varios días. Tras la recuperación se han descrito casos en los que la ketamina ha provocado agresividad permanente. La Tiletamina (dosis = 15-30 mg/Kg. vía intraperitoneal) actúa de manera muy semejante a la ketamina, aunque se requieren dosis más pequeñas, aunque presenta como principal efecto adverso su capacidad convulsiva. Otro fármaco que se usa es el Metomidato, aplicado vía intramuscular (dosis = 10-20 mg/Kg.) es un sedante muy útil para serpientes. Facilita el examen clínico, endoscopia o la toma de muestras de sangre. Se ha demostrado que el metomidato es útil para hacer frente a estomatitis graves: se puede utilizar con seguridad de manera diaria para la limpieza y el tratamiento de la boca. Tiene un rápido efecto; cuando se administra por vía intramuscular la serpiente queda profundamente sedada después de 15-20 minutos. No debería considerarse como un anestésico, ya que no tiene la propiedad analgésica. El Propofol, tras numerosas pruebas y estudios comparativos entre los distintos anestésicos se ha determinado como el que mejores ventajas ofrece, aunque debe ser administrado exclusivamente por via endovenosa (dosis = 10 mg/Kg.). Destacan su rápida pero suave inducción, su mínima acumulación en repetidas inyecciones, unos efectos secundarios relativos en cuanto a la excitación del animal y por la rápida recuperación con tan solo una aparente “resaca” tras su efecto. Además puede ser inyectado por una aguja muy fina, pudiendo ser inyectado vía intravenosa también en pequeños reptiles (la alfaxalona/alfadolona no puede administrarse así). Los fármacos inhalatorios presentan una fácil reversión y un menor grado de acumulación, lo que fomenta su uso. Las técnicas utilizadas son muy variadas: a) El equipo anestésico permite por ejemplo realizar una monitorización mientras se realiza la anestesia. b) La cámara de vidrio es muy útil para serpientes venenosas y de pequeño tamaño colocando en ella una torunda de algodón impregnada del anestésico. c) La máscara facial consiste en una campana, generalmente de plástico rígido, con dos aperturas, una con una pieza flexible de goma que reduce su abertura a modo de diafragma (que no garantiza cierre hermético) para introducir la cabeza de la serpiente y otra por la cual se administra el anestésico. A la izq. imagen del equipo anestésico; A la dcha. cámara de vidrio Distintos modelos de máscara faciales para la anestesia inhalatoria d) La intubación que teniendo en cuenta los siguientes aspectos es bastante sencilla: ? La glotis de las serpientes se encuentra en posición craneal en el suelo de la boca (por tanto la intubación resulta fácil) ? La tráquea de las serpientes es móvil, permitiendo la ventilación durante la ingestión de alimento. ? El pulmón derecho como ya mencionamos es responsable de la ventilación ? Los sacos aéreos se extienden caudalmente desde el pulmón derecho. La técnica consiste en una vez abierta la boca y habiendo observado la laringe introducir el tubo a través de la glotis. Distintas imágenes de una correcta intubación. Los agentes utilizados como inhalatorios han ido cambiando a lo largo del tiempo. Se han dejado atrás algunos como el Éter (irritante y explosivo), Óxido nitroso (en combinación con el oxígeno y otro anestésico volátil) o el Cloroformo. Hoy día, a excepción del Halotano, todos los anestésicos volátiles son metil etil éter halogenados los cuales causan depresión respiratoria e hipoxia y otros efectos adversos como daño hepático y renal. El Halotano, es el agente inhalatorio más usado en reptiles. Sin embargo frecuentemente provoca daños hepáticos. El 15-20% de este agente es metabolizado en el cuerpo, por tanto es necesario cierto tiempo para que el animal anestesiado se recupere en su totalidad. Como inconveniente, el Halotano provoca apnea y paro cardiaco simultáneamente. La relajación muscular es sólo moderada y hay una marcada depresión respiratoria y en el postoperatorio es posible que el reptil precise ventilación asistida hasta que la respiración vuelva a ser normal. El tiempo de inducción (a vol 3%) es de 1-30 minutos. El Metoxiflurano, es un metil etil éter halogenado y tanto la técnica anestésica como el postoperatorio presenta muchos inconvenientes (aunq ue hay autores que lo consideran seguro y fiable): el alto coeficiente de solubilidad hace que el animal necesite ventilación con oxígeno puro durante más tiempo que con otros anestésicos volátiles. El efecto y el periodo de recuperación son prolongados; también la apnea y el paro cardiaco pueden ocurrir simultáneamente; además puede causar una marcada depresión respiratoria y debido a las altas concentraciones de fluoruro en sangre resultantes de su metabolismo puede provocar daño renal; por este motivo el metoxiflurano ha sido retirado del mercado pero este presenta una ventaja respecto al halotano ya que proporciona una excelente relajación muscular y una buena analgesia. El Sevoflurano, es un metil etil éter halogenado. En ciertas ocasiones ha llegado a provocar daño hepático provocado no directamente por él sino por los metabolitos que da lugar. Apenas causa depresión cardiovascular, sin embargo causa una marcada depresión respiratoria e hipoxia. Su ventaja con respecto al isoflurano es que la inducció n a la anestesia es más rápida. Al igual que en los fármacos inyectables, también se han realizado estudios que han concluido que el Isoflurano es el fármaco más recomendado. Sólo el 0,3% es metabolizado en el cuerpo, además tiene una muy baja solubilidad en sangre (respecto a los anteriores), es excretado casi totalmente por los pulmones lo que significa que tan pronto como es administrado, el reptil comienza a exhalarlo y se recupera rápidamente. Tiene propiedades similares al metoxiflurano en lo referente a la excelente relajación muscular y buena analgesia que proporciona. Además tiene otra ventaja ya que produce una menor depresión respiratoria y no se da simultáneamente apnea y para cardiaco. En ciertas ocasiones el isoflurano ha provocado daño renal. Los fármacos utilizados para la anestesia en ofidios son muchos más, aparte de los mencionados. Sin embargo, a pesar de la variedad, los utilizados principalmente son los aquí expuestos. No hay que olvidarse nunca de evaluar todas las posibles ventajas e inconvenientes de cada fármaco para hacer una correcta elección, ya que la anestesia en cualquier intervención es de suma importancia. POST-ANESTESIA Y RECUPERACIÓN La temperatura adecuada son 29 ºC (la misma utilizada durante toda la anestesia) y sin corrientes de aire. Se puede acelerar la recuperación mediante baños de agua caliente y mediante evacuación de sustancias manualmente de cloaca a cabeza. La ventilación y la monitorización deben mantenerse en esta fase (se puede administrar doxapram para estimular la respiración espontánea si la ventilación no fuese suficiente). Una correcta recuperación se establece cuando recuperan el reflejo que les permite volverse sobre el vientre al ser colocadas sobre su dorso. En el caso de necesitar fluidoterapia se realizara en este periodo aplicando un 4% del peso corporal. BIBLIOGRAFIA Anna Meredith y Sharon Redrobe, Manual Animales Exóticos. 2007 4ª edición. Ediciones S. Barcelona. William V. Lumb, y E. Wynn Jones,. Anestesia Veterinaria, 1981 Editorial Cia editorial Continental S.A. Mexico Peter H. Beynon; Martin P.C. Lawton and John E. Cooper Manual of reptils, 1994. B.S.A.V.A.. Gloucestershire. William W. Muir, III y John A.E. Hubbell Manual Anestesia Veterinaria, 1989. Editorial Acribia SA. Zaragoza Bibliografía electrónica: PubMed. http://www.ncbi.nlm.nih.gov/PubMed/ 18 -2-2008 Cabdirect. http://0-217.154.120.6.cisne.sim.ucm.es/CABDIRECT/select-database.nsp 19-2-2008