EVALUACIÓN BROMATOLÓGICA DE VARIEDADES AUTÓCTONAS DE CACAHUETE EN CULTIVO ECOLÓGICO Raigón1 MD; Monreal Carsi1 R; García Martínez1 MD; Ballester2 R. 1 Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agronómica y del Medio Natural. Universidad Politécnica de Valencia. Camino de Vera, s/n. 46022 Valencia. email: mdraigon@qim.upv.es; rita.monreal@gmail.com; magarma8@qim.upv.es 2 La Unió de Llauradors y Ramaders. Calle del Mar, 22-1ª. 46003. Valencia. e- mail: rballester@launio.org RESUMEN El cacahuete era un cultivo tradicional, integrante de las rotaciones clásicas de la huerta valenciana. Últimamente, el cultivo está en recesión, perdiéndose las variedades autóctonas que tradicionalmente se cultivaban. Es un alimento de aperitivo y un gran desconocido desde el punto de vista nutricional. El objetivo del presente trabajo es evaluar la composición nutricional y organoléptica del cacahuete en cultivo ecológico frente a cacahuetes del comercio convencional. Se pretende aportar datos de composición del cacahuete en producción ecológica en condiciones mediterráneas, y valorar la estrategia de la biodiversidad en este cultivo, recuperando tres variedades tradicionales de la zona de L´Horta de Valencia: Collaret, Cacahua y Morú. Los resultados indican que el cacahuete es una importante fuente de proteína vegetal con alta riqueza en minerales, sobre todo en potasio, hierro, fósforo, calcio, magnesio, zinc y cobre. En promedio el cacahuete presenta un 40% de grasa, siendo un alimento de alto valor energético, aunque con alto contenido en fibra, así 50 gramos de cacahuete aportan el 20% de las necesidades diarias de fibra. El perfil lipídico de la grasa del cacahuete presenta una alta fracción de ácidos grasos insaturados, aproximadamente un 40% de ácido oleico (monoinsaturado) y un 40% de linoleico (poliinsaturado), contribuyendo a los beneficios para la salud cardiovascular. La variedad Collaret se caracteriza por un alto contenido en proteína, fósforo, potasio, calcio, hierro, cobre e hidratos de carbono. La variedad Cacahua por altos contenidos en potasio, fósforo, zinc y en ácidos grasos poliinsaturados. La variedad Morú es la variedad con mayor contenido en grasa y de valor energético. Palabras clave: Arachis hypogaea L., cultivares locales, calidad nutricional, oleico, linoleico. INTRODUCCIÓN La promoción, el uso y la mejora de las variedades locales son claves en agricultura ecológica, tanto por las características intrínsecas de estas variedades (adaptación al clima, al tipo de suelo, a las condiciones locales...) como por el papel que ocupan en el incremento de la biodiversidad. Además, el hecho de recuperar los cultivos autóctonos es, desde el punto de vista ecológico, más adecuado y, a largo plazo, más eficaz, porque en general son cultivares que necesitan menos insumos, ya que han evolucionado con una baja cantidad de estos. A pesar de su importancia, las variedades locales están desapareciendo por diversas causas, sobre todo por la implantación de la agricultura industrializada que promueve la sustitución de las variedades locales por variedades mejoradas por parte del paquete tecnológico necesario para la modernización que están promulgando (Alföldi et al., 2002). La producción de cacahuete (Arachis hypogaea L.) en España es poco relevante. Según el Ministerio de Medio Ambiente Rural y Marino (http://www.marm.es/es/agricultura/estadisticas), en el año 2010 hubo una superficie de 4 ha destinadas al cultivo del cacahuete y se situaban en la Comunidad Valenciana. En la Comunidad Valenciana se diferencian fundamentalmente cuatro variedades de cacahuete: cacahuete de dos granos o Corto, cacahuete de dos a cuatro granos o Largo, cacahuete Moruno y cacahuete de Palma. Los dos primeros se relacionan con materiales genéticos principalmente comerciales que aluden al número de semillas que contiene cada vaina (Aizperritua Cornejo y García Gisert, 1961). Los cacahuetes constituyen un alimento muy nutritivo, cuya concentración de nutrientes supera a la de cualquier alimento de origen animal, incluido la carne. En el reino vegetal, solo la nuez y la almendra pueden compararse al cacahuete en riqueza nutritiva. El cacahuete supera ampliamente a la carne y los huevos en cuanto a cantidad de hidratos de carbono, grasas, proteínas, vitaminas B1, C, E y niacina. También los supera en cuanto a la concentración de minerales como calcio, magnesio y potasio; y todo ello sin aportar colesterol, ni exceso de ácidos grasos saturados (Ihekoronye, 1987). El cacahuete es uno de los alimentos con mayor concentración nutritiva para el consumo humano. Es cierto que algunos alimentos, como la miel o el aceite de oliva virgen, superan a los cacahuetes en algún nutriente particular (hidratos de carbono y grasas, respectivamente). Sin embargo, tan solo los frutos secos oleaginosos, y especialmente los cacahuetes, contienen todos los nutrientes fundamentales (hidratos de carbono, proteínas, lípidos, minerales y vitaminas) en una proporción tan elevada. Esto pone de manifiesto lo inapropiado que resulta, desde el punto de vista nutritivo, el considerar los cacahuetes como un mero complemento de ciertas comidas o como un aperitivo. La ingesta de 100 g proporciona un promedio de 567 kcal, siendo desaconsejable su ingesta de forma mayoritaria en personas con problemas de obesidad. Además es un alimento que hay que consumir con una buena masticación e insalivación, para no sufrir pesadez de estómago o mala digestión. La comercialización del cacahuete puede realizarse con la vaina o bien en grano descascarado. Su consumo directo se hace en forma de aperitivo, con o sin la cáscara, tostado o frito, con o sin sal. También se puede consumir transformado, en concreto tras la extracción de la grasa, proporcionando la manteca de cacahuete que tiene un consumo elevado en EE.UU, y que cada vez más aparece en los mercados europeos. En la zona mediterránea, además del consumo directo, se empleaba el grano de cacahuete para la elaboración de turrones, chocolates, dulces y otras pastas, y su manteca se empleaba para la elaboración de sopas, pastas y cremas. En el momento actual, existe demanda para las elaboraciones de panadería, empleándose para la fabricación de rosquilletas y galletas, dando un valor añadido al producto final. Para cubrir estas necesidades se recurre a las importaciones, principalmente de países centroafricanos, de China y de EE.UU. OBJETIVOS El principal objetivo del presente trabajo es evaluar la importancia del cultivo del cacahuete valorando su composición nutricional y organoléptica en cultivo ecológico frente a cacahuetes que se encuentran en el comercio convencional. De esta manera, se pretende aportar datos de composición del cacahuete en producción ecológica en condiciones mediterráneas, y valorar la estrategia de la biodiversidad cultivada en este cultivo, recuperando tres variedades tradicionales de la zona de L´Horta de Valencia: Collaret, Cacahua y Morú. MATERIAL Y MÉTODOS Los materiales vegetales empleados en el estudio son cacahuetes crudos de las variedades Collaret (Figura 1), Cacahua (Figura 2) y Morrut (Figura 3) procedentes de cultivo ecológico vinculado al plan de experimentación en agricultura ecológica de L’Unió de Llauradors en la campaña 2009-2010, en la Marjal del Moro en Sagunto (Valencia). También se estudian cacahuetes crudos identificados principalmente como “Collaret”, pero en donde coinciden otras variedades de cacahuete (Figura 4), procedente del comercio y comercializado como convencional. La variedad Collaret se caracteriza por presentar un claro estrechamiento en la parte intermedia de la vaina, dando dos semillas por cada fruto (Figura 1). La variedad Cacahua es una variedad de cacahuete largo que presenta un número de granos superior a dos e inferior a cinco. Los estrechamientos de la vaina son menos pronunciados, simulando un cilindro alargado. Las semillas son alargadas y el color de la cutícula es rojo intenso (Figura 2). La variedad de cacahuete Morú presenta dos semillas y cutícula rosada, y tiene un estrechamiento en la parte intermedia de la vaina, dando dos semillas por cada fruto (Figura 3). Figura 1. Legumbres y semillas de cacahuete de la variedad Collaret de cultivo ecológico procedente de la Marjal del Moro (ecológico). Figura 2. Legumbres y semillas de cacahuete de la variedad Cacahua de cultivo ecológico procedente de la Marjal del Moro (ecológico). Figura 3. Legumbres y semillas de cacahuete de la variedad Morú de cultivo ecológico procedente de la Marjal del Moro (ecológico). Figura 4. Legumbres y semillas de cacahuete de cultivo convencional procedente del comercio local. Las determinaciones realizadas en cada muestra fueron: el contenido en humedad de la semilla, determinado gravimétricamente por diferencia con el contenido en materia seca, expresando los resultados en g de agua/100 g de cacahuete; el contenido en grasa de la semilla, determinado mediante extracción con soxhlet (MAPA, 1994), expresando el resultado en g de grasa/100 g de cacahuete; el contenido en nitrógeno total por el método Kjeldahl y determinación de la proteína multiplicando por el factor 6.25 (MAPA, 1994), expresado en g de proteína/100 g de cacahuete; el contenido en fibra, determinado por extracción y posterior calcinación (MAPA, 1994), expresado en g de fibra/100 g de cacahuete; el contenido en hidratos de carbono, determinado por diferencia frente al resto de macronutrientes del cacahuete, expresado en g de glúcidos/100 g de cacahuete; el contenido en potasio y sodio, determinado por fotometría de llama (MAPA, 1994), expresado en mg/100 g de cacahuete; el contenido en fósforo por espectrofotometría UV/V (MAPA, 1994), expresado en mg/100g de cacahuete; el contenido en calcio, magnesio, hierro, cobre y zinc, determinado por absorción atómica (MAPA, 1994), expresado en mg/100 g de cacahuete; la obtención del perfil lipídico de la grasa de cacahuete, determinado por cromatografía gaseosa, expresado en porcentaje frente al total; y la valoración organoléptica del cacahuete tostado, según el test de Weiss (1981). Tratamiento estadístico: El análisis estadístico de los resultados se realizó a través de un análisis de la varianza (ANOVA) con un nivel de significación del 95% y utilizando para las comparaciones múltiples el test Least Significant Difference (LSD). El estudio de correlaciones se realizó con una regresión simple entre variables, empleando en estadístico T y un ANOVA entre variables con un nivel de confianza del 95%. Los cálculos se efectuaron con el programa Statgraphics® Plus 5.1. RESULTADOS Y DISCUSIÓN La Tabla 1 muestra los resultados de los diferentes parámetros de contenido nutricional para cada una de las variables estudiadas y los niveles de significación de las diferencias entre el sistema de cultivo (ecológico y convencional). Los niveles de humedad, proteína, fibra, hidratos de carbono o glúcidos, los niveles de los minerales de sodio, potasio, magnesio, hierro y cobre, así como el total de los ácidos grasos monoinsaturados no arrojaron diferencias significativas. La Tabla 2 muestra los diferentes estadísticos para el estudio comparativo de las variedades de cacahuete estudiadas. Los niveles de proteína, fibra, sodio, potasio, cobre y zinc no son fueron significativamente diferentes. Los parámetros con menor significación en sus diferencias no se muestran en la Tabla. Tabla 1. Valores resumen de las variables de composición nutricional del cacahuete en función del sistema de producción (ecológica y convencional). Parámetro Ecológico Convencional Humedad (%) Grasa (%) Proteína (%) Fibra (%) Glúcidos (%) Sodio (mg/100 g) Potasio (mg/100 g) Fósforo (mg/100 g) Calcio (mg/100 g) Magnesio (mg/100 g) Hierro (mg/100 g) Cobre (mg/100 g) Zinc (mg/100 g) A G Saturados (%) A G Monoinsaturados (%) A G Poliinsaturados (%) 4.98 44.80 24.61 11.42 12.45 11.37 628.75 531.58 112.34 196.16 1.09 1.09 4.82 18.57 46.10 35.29 4.16 38.53 22.03 11.68 18.19 12.13 556.11 466.73 77.55 211.89 1.16 0.84 3.23 20.11 51.86 27.99 Error estándar 0.50 1.32 2.81 1.28 2.72 1.56 38.75 9.17 20.96 8.16 1.01 0.12 0.14 0.45 2.83 2.44 Valor de F 14.20 12.75 12.34 0.02 1.71 0.13 1.98 28.13 14.21 2.09 0.60 2.33 5.40 6.69 2.33 5.00 p 0.0016 <0.001 0.5303 0.8848 0.2117 0.7207 0.1817 <0.0001 0.0021 0.1705 0.4520 0.1496 <0.0001 0.0215 0.1490 0.0421 Los niveles de humedad en los granos de cacahuete de producción ecológica son estadísticamente superiores (al 95% de confianza) a los que contienen los granos de cacahuete de procedencia convencional (Tabla 1), posiblemente debido a que provenían directamente de cultivo, mientras que los convencionales provienen del comercio y es posible que almacenados durante algún tiempo, durante el cual el grano pierde humedad. Es la razón por la que los contenidos en humedad de las variedades Collaret, Cacahua y Morú sean estadísticamente superiores al del cacahuete comercial (Tabla 2). Los contenidos de grasa varían del 44.8% que presentan los granos de producción ecológica y del 38.5% que presentan los granos de producción convencional (Tabla 1). Las diferencias encontradas pueden ser debidas a la variabilidad entre las diferentes variedades (Prathiba y Reddy, 1994). En este sentido la variedad Morú en ecológico puede acumular un 18% más de grasa que la variedad comercial de cultivo convencional (Tabla 2). Tabla 2. Valores resumen de las variables de composición nutricional del cacahuete en función de las variedades. Parámetro Humedad (%) Grasa (%) Glúcidos (%) Potasio (mg/100 g) Fósforo (mg/100 g) Calcio (mg/100 g) Magnesio (mg/100 g) Hierro (mg/100 g) A G Saturados (%) A G Monoinsaturados (%) A G Poliinsaturados (%) Variedad Collaret 5.71a Cacahua 5.38a Morú 5.22a Comercial 3.11b Collaret 43.84a Cacahua 42.68ab Morú 47.30a Comercial 39.30b Collaret 11.89a Cacahua 12.57a Morú 11.66a Comercial 22.09a Collaret 605.84a Cacahua 694.43a Morú 602.62a Comercial 559.24a Collaret 554.04a Cacahua 542.40a Morú 499.90a Comercial 454.69b Collaret 122.55a Cacahua 93.11b Morú 111.17ab Comercial 77.55c Collaret 209.07a Cacahua 191.21a Morú 185.67a Comercial 206.69a Collaret 1.29a Cacahua 1.10ab Morú 0.78b Comercial 1.11ab Collaret 20.99a Cacahua 19.15a Morú 16.27b Comercial 18.55a Collaret 41.65a Cacahua 40.90a Morú 48.73a Comercial 57.61b Collaret 37.33a Cacahua 39.91a Morú 34.96a Comercial 23.80b Error estándar Valor de F p 0.77 4.35 0.0227 1.46 7.21 0.0037 3.47 3.06 0.0631 38.20 2.79 0.0796 10.84 18.51 0.0007 5.35 25.59 0.0000 9.43 4.37 0.0554 0.08 29.77 0.0001 0.57 59.35 0.0000 3.89 16.78 0.0001 3.35 7.67 0.0028 No se observan diferencias estadísticamente significativas entre los niveles de proteína de los cacahuetes en función del sistema de cultivo y de la variedad, estando los valores de proteína dentro de los rangos aceptables para este alimento. Así, las concentraciones de proteínas que indica Elmadfa et al. (2001) en el cacahuete son de 26 g/100 g de materia fresca, mientras que las que citan Prathiba y Reddy (1994) son más variables, oscilando entre 17 y 25.2% en función de las variedades, o que las citadas por Campos-Mondragón et al. (2009), que oscilan entre el 23.5 y el 26.6%. Tampoco se observan diferencias estadísticamente significativas entre los niveles de fibra, en función de la variedad y procedencia del cacahuete, siendo las concentraciones, en todos los casos, superiores a las que se indican en la bibliografía, de manera que 100 g de cacahuete del presente estudio, es capaz de proporcionar importantes cantidades de fibra necesarias para satisfacer la mitad de la dosis necesaria para controlar el colesterol. En este sentido, los frutos secos son una importante fuente de fibra, principalmente de fibra insoluble (3.7-8.6 g/100 g) frente a la soluble (0.1-0.2 g/100 g), proporcionando, por un lado, propiedades estimulantes y favorecedoras del tránsito gastrointestinal y efecto saciante y, por otro lado, los efectos positivos atribuidos a la fibra dietética sobre el metabolismo de colesterol (Lavedrine et al., 1999). No se observaron diferencias estadísticamente significativas, al 95% de confianza, entre los contenidos en hidratos de carbono de los cacahuetes atendiendo al sistema de cultivo del cual proceden y a la variedad, si bien los cacahuetes de procedencia convencional son los que contienen mayor nivel de glúcidos totales, 18.19% frente al 12.45% de los cacahuetes de producción ecológica. El tamaño de la semilla parece tener un efecto significativo sobre la composición en azúcares de los cacahuetes. Pattee et al. (2000) indican que, en general, a tamaños más pequeños de la semilla de cacahuete, se observa mayor concentración de hidratos de carbono. En el presente estudio se han obtenido resultados similares, existiendo un efecto significativo, al 95% de confianza, entre el tamaño de las semillas de cacahuete y el contenido en hidratos de carbono de los mismos. La ecuación del modelo ajustado es “peso semilla=1.10061-0.0231107*HC”, explicando la concentración de hidratos de carbono (HC) el 31.10% de la variabilidad del peso de las semillas de cacahuete. El coeficiente de correlación es igual a -0.557677, indicando una relación inversa moderadamente sólida entre las dos variables. Los contenidos en fósforo de los cacahuetes de producción ecológica son significativamente superiores a los de producción convencional, es decir, que por cada 100 g de ingesta de cacahuete ecológico se ingiere 12 mg más de fósforo, siendo la variedad Collaret la que presenta los niveles de fósforo significativamente más altos. Las concentraciones de calcio en los cacahuetes de procedencia ecológica son significativamente superiores a los de procedencia convencional, existiendo un 31% más de calcio en los cacahuetes de origen ecológico. Además, la variedad Collaret es la que mayor concentración de calcio acumula en los granos. Esta misma variedad es la que presenta las mayores concentraciones de magnesio, aunque no se encuentran diferencias significativas entre sistemas de cultivo. Entre los oligoelementos, se observa que sólo el zinc presenta concentraciones estadísticamente superiores en los cacahuetes de procedencia ecológica; siendo la variedad Cacahua la que acumula mayor concentración de este oligoelemento (5.2 mg/100 g). Según el RD 1275/2003, la cantidad diaria recomendada para el zinc es de 15 mg, por lo que en dietas vegetarianas es aconsejable incorporar alimentos ricos en zinc, como los cacahuetes. Los resultados ponen de manifiesto que 100 g de cacahuete de la variedad Cacahua pueden proporcionar un tercio de la dosis diaria recomendada de zinc, por lo que se describe como un alimento rico en zinc (Iyer et al., 2006). La composición de los ácidos grasos del aceite de cacahuete depende de diversos factores como la zona de producción (latitud y condiciones climáticas), la variedad, la campaña productiva, y las interacciones entre los diferentes factores (Andersen y Gorbet, 2002). En los cacahuetes ecológicos, el total de ácidos grasos saturados e insaturados (mono y poliinsaturados) es respectivamente del 19% y del 81%. Aunque exista tendencia a evitar el consumo de cacahuetes debido a la alta fracción de grasas, el aceite es fácilmente digestible y su consumo se asocia a la prevención de enfermedades cardiovasculares (Alper y Mattes, 2003), reduciendo además el riesgo de padecer diabetes del tipo II (Jiang et al., 2002). Este papel protector del cacahuete se atribuye al alto valor del coeficiente oleico/linoleico de su aceite (Tuberoso et al., 2007). El sabor del cacahuete está influenciado por diferentes factores: ambientales (campaña de cultivo, región productora, localización dentro de región, e interacciones de la región y de la localización con la campaña), factores genéticos (cultivares), e interacción entre ambiental y factores genéticos. Además, la composición química del cacahuete influye notoriamente en el sabor y en la textura del mismo (Isleib et al., 2008). Del estudio de correlaciones se concluye que la proteína proporciona textura y estructura al cacahuete, pero la correlación obtenida no es estadísticamente significativa para un nivel de confianza del 90% o superior, presentando un coeficiente de correlación de 0.2686, lo que indica una relación relativamente débil entre las variables. Así, el modelo (concentración en proteína) explica sólo un 7.22% de la variabilidad de la textura. También se han buscado otras correlaciones con la textura, en concreto con la humedad, el contenido en grasa, fibra y en hidratos de carbono; ninguna de estas correlaciones presentaron significación estadística. Los coeficientes de correlación, en todos los casos, fueron bajos (0.3297 para la humedad, 0.0568 para la grasa, 0.1922 para la fibra y 0.3852 para los hidratos de carbono), de manera que el contenido en agua de los cacahuetes es capaz de explicar el 10.87% de la variabilidad de la textura de los cacahuetes, la grasa el 0.32%, la fibra el 3.59% y el contenido en hidratos de carbono el 14.83%. Por lo tanto, la textura del cacahuete aumenta ligeramente con el contenido en proteínas, humedad y fibra, mientras que los niveles de grasa prácticamente no influyen en la textura, y el contenido en hidratos de carbono influye de forma negativa, posiblemente porque incrementa las texturas harinosas, propiedad que se valora mal en el cacahuete. En este mismo sentido, el sabor del cacahuete prácticamente permanece invariable al contenido en grasa, ácido graso oleico, relación de los ácidos grasos oleico/linoleico y contenido en hidratos de carbono. CONCLUSIONES El cacahuete ecológico es una fuente de proteína vegetal importante, de manera que la ingesta diaria de 50 gramos puede aportar al organismo el 24% de las proteínas requeridas. Esto lo convierte en una alternativa nutricional para grupos vegetarianos, aunque por supuesto deberá ser evitado en personas con alergia a esta proteína. Las condiciones de cultivo ecológico generan cacahuetes que, en conjunto, presentan mayor fracción mineral, con un 7.3% más de fósforo, un 11% más de potasio, un 31% más de calcio, un 27.7% más de cobre y un 34.6% más de zinc, además de un alto contenido en el ácido graso poliinsaturado, linoleico, y por un menor contenido en oleico. Será preciso trabajar bajo las condiciones de ecológico para poder incrementar las concentraciones de oleico en las semillas de cacahuete. Las diferencias entre cultivares locales de cacahuete indican que la variedad Collaret se caracteriza por un alto contenido en proteína, fósforo, potasio, calcio, hierro, cobre e hidratos de carbono; la variedad Cacahua por altos contenidos en potasio, fósforo, zinc y en ácidos grasos poliinsaturados; mientras que la variedad Morú es la variedad con mayor valor energético, por ser la de mayor contenido en grasa. El cacahuete comercial convencional es el mejor valorado organolépticamente, confirmando la memoria gustativa de los catadores al sabor más normalizado. La calidad textural del cacahuete disminuye con el contenido en hidratos de carbono, porque incrementa las texturas harinosas que se valoran mal en el cacahuete. El elemento que más influye en el sabor del cacahuete es el contenido en magnesio. BIBLIOGRAFÍA Aizperritua Cornejo, J.; García Gisert, C. 1961. El cacahuete. Editorial: Ministerio de Agricultura. 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