Revista Nº 71-1 - Asociación Bioquímica Argentina

Anuncio
VOL 71 - Nº 1 - 2007
Ciudad de Bs. As. Argentina
ISSN 1515-6761
Bioquímica y Patología Clínica
Revista de la Asociación Bioquímica Argentina - Volumen 71 - Nº 1 - 2007
Bioquímica y
Patología Clínica
Electroforesis de hemoglobinas
en gel de agarosa alcalino
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10 11 12 13 14 15 16 17 18
Revista de la Asociación Bioquímica Argentina
Incorporada al Latindex y a la Red de Revistas Científicas de
América Latina y el Caribe, España y Portugal (REDALYC)
VOL 71 - Nº 1 - 2007
Ciudad de Bs. As. Argentina
ISSN 1515-6761
Bioquímica y
Patología Clínica
Revista de la Asociación Bioquímica Argentina
Incorporada al Latindex y a la Red de Revistas Científicas de América Latina y el
Caribe, España y Portugal (REDALYC)
SUMARIO
11 14 Implicancia clínica del antígeno prostático específico libre (PSAL) y antígeno prostático
específico total (PSA) en una población masculina. Flavia Canitano, Sofia Coniglio, Silvana
Roveto, Diego Barreiro, Norberto Lafós, Daniel Rimoldi
15 22 Insulinemia, HOMA, fibrinógeno, apolipoproteína B y colesterol no-HDL en el síndrome
metabólico. María Susana Castillo Rascón, Graciela Bonneau, Williams Pedrozo, Augusto Sánchez,
Cristina Malarczuk, Blanca Ceballos, Carlos Castro Olivera, María Ester Pianesi, Ruth Leiva, Natalia
Blanco, Graciela Dusse
23 26 Dislipidemia y nefropatía diabética. Sandra Arriaga, Adriana Monje, Beatriz Bouvet, Griselda Della
Rosa, Cecilia Paparella, Adriana Almará
27 30 Rango de referencia para las lipoproteínas de baja densidad oxidadas en embarazadas
normolipémicas. Stella M. Daniele, María de los Ángeles Valdés, Héctor F. Pelusa, Adriana M. Caille,
Adriana M. Almará, René Dimónaco, Jorge Renzi, Sandra M. Arriaga, Sergio A. Ghersevich
31 35 Streptococcus agalactiae como responsable de patologías distintas a las materno
neonatales. A. Caraffini, C. Nóbile, M. Figueroa, R. Costamagna
36 41 Determinación de hematíes dismórficos con microscopio óptico convencional. Ma. Del Valle
Rodríguez Aranciva, Ma Susana Salgado, Ma Soledad Izurieta, Pablo Novoa, Marcelo Orías, Silvia
Barzón
42 48 Lipoproteína a, apolipoproteina B y perfil lipídico básico. I. Prudente, W. Alallon, P. Gentilli
49 53 Detección de VIH proviral por nested-PCR utilizando metodología casera (in house). Claudia
Kairiyama, Marcela Benhaim, Patricia Buresti, Sergio Citatti, Claudia Pengue, Nancy Perroni, Sergio
Pittaluga, María C. Tonelli
54 66 Isoflavonas en soja, contenido de daidzeina y genisteina y su importancia biológica.
Beatriz Ludueña, Carlos Mastandrea, Carlos Chichizola, Ma. Cecilia Franconi.
67 70 Ferremia: ¿biomarcador de exposición humana al plomo? Fernando D. Ventimiglia, Laura
Mauleón, Liliana Bruzzone, Nilda E. Fink, Alfredo Salibián
Foto de tapa:
ELECTROFORESIS DE HEMOGLOBINA EN GEL DE AGAROSA ALCALINA
Estudios de Hemoglobina realizados en gel de agarosa
a pH alcalino con equipo automatizado de SEBIA, para
mostrar las distintas movilidades electroforéticas tanto
de la HbA ( adulta normal ) como de las Hemoglobinas
(Hb) patologicas más comunes que se presentan en el
laboratorio clínico.
N1º.- Banda más catódica: Anhidrasa carbónica
La siguiente corresponde a la fracción HbA2
La más anódica es la Hb A ( adulta normal )
Nº2.- Banda más anódica HbA + una banda entre HbA y
HbA2 : corresponde a la movilidad de la Hb Lepore.
Heterozigota para Hb Lepore
Nº3.- Hb A con fracción de HbA2 aumentada.
Nº4.- Hb A con pequeño aumento de HbF.
Nº5.- Hb A con Hb F muy aumentada, corresponde a un
bebé de dos meses. La HbF alcanza los valores del
adulto entre los 6 y 8 meses.
Nº6.- Hb A con Hb F ligeramente aumentada.
Nº7.- Hb A + una banda de alta concentracion entre HbA
y HbA2: correponde a la movilidad de la HbS: se
trataria de un heterozigota HbAS.
Esta misma movilidad la presentan las Hb G y D,
para dilucidar a que corresponde se debe correr
con gel de agarosa a pH ácido y realizar las pruebas
de solubilidad y de anoxia de los hematiés en la
presunta muestra de Hb S.
Nº8.- Corresponde a un homozigota para Hb S, observese
la muy pequeña cantidad de HbA.
Nº9.- Muestra de un doble heterozigota HbAS +
talasemia, observe la diferencia de concentración
de la banda correpondiente a la Hb S en la muestra
Nº7.
Nº10.-La banda más anódica corresponde a la HbA ,
la más catódica con movilidad igual a la HbA2
corresponde a una HbC. La misma movilidad que la
HbC tambien la presenta la HbE. Deben realizarse
otras pruebas para confirmar a cual de ellas
corresponde.
Nº11.-Muestra correpondiente a un portador de Hb Lepore
( HbA + Lepore)
Nº12.-Presenta Hb A + HbF aumentada + HbA2
aumentada ( paciente con talasemia intermedia)
Nº13.-Heterozigota HbAS.
Nº14.-Se observa una banda más anódica que la HbA,
puede corresponder a Hb rápidas como son la
H, J, K ó I, son heterozigotas, se debe investigar
la posibilidad de estar en presencia de una
αtalasemia.
Nº15.-Doble heterozigota para HbA + C talasemia.
Nº16.-Paciente que presenta Persistencia de Fetal en el
Adulto. Observe la fraccion correspondiente a la Hb
F con una concentración de 39%.
Nº17.-Corrida con HbA2 aumentada, se observa en
portadores talasemicos.
Nº18.-Corrida de HbA normal.
Se valoran los porcentajes de cada fracción de la Hb
escaneando las corridas.
HEMOGLOBINOPATÍA: Defecto genético: consecuencia de
la estructura anormal de una de las cadenas de globina de
la molecula de Hb. No todas presentan manifestaciones
clínicas. Algunas son hallazgos de laboratorio. El defecto
genético puede deberse a la sustitucion de un aminoácido
por otro en la cadena de globina, (HbS,HbC), a una
hibridización anormal entre dos cadenas ( Hb Lepore).
Las alteraciones pueden presentarse en cualquiera de las
cuatro cadenas de la globina .
(alfa, beta, gamma o delta).
TALASEMIA: Defecto genético caracterizado por una
producción cuantitativamente baja de una o mas
cadenas de globina. El defecto puede afectar a las
cadenas alfa, beta, gamma y delta, ó a una combinación
de cadenas beta,gamma, delta, en algunos pacientes.
Nunca se afectan las cadenas alfa y beta al mismo
tiempo. Ésta alteración produce un desbalance en la
síntesis de las cadenas de globina y una inadecuada
producción de eritrocitos. Éstos eritrocitos son
microcíticos/hipocrómicos y contienen un exceso de
cadenas no afectadas, las que no pueden unirse en forma
estequiométrica por inadecuado suministro de cadenas
talasémicas.
Autor: Raquel Osatinsky – Bioquimica
Jefa del Área Proteínas de MANLAB
Bioquímicas del Área Proteínas : Vanesa Paola Chavez;
Noel Aguet
Lugar de trabajo: Laboratorio MANLAB
Marcelo T. de Alvear 2263- C.A. de Bs.As.
Dirigir correspondencia a: Raquel Osatinsky
e-mail: raquelo@arnet.com.ar
VOL 71 - Nº 1 - 2007
Ciudad de Bs. As. Argentina
ISSN 1515-6761
Bioquímica y
Patología Clínica
REVISTA DE LA ASOCIACION BIOQUIMICA ARGENTINA
Venezuela 1823 - Piso 3 - CP (1096) Buenos Aires - Argentina
Tel/ fax: 4384-7415 - Tel: 4381-2907 - e-mail: info@aba-online.org.ar - www.aba-online.org.ar
ASOCIACION BIOQUIMICA ARGENTINA
Fundada el 3 de septiembre de 1934
Registro Nacional de Derechos de Autor Nº 034772
Publicación cuatrimestral
COMISION DIRECTIVA
COMITE EDITORIAL
Presidente Dra. Silvia Morilla
Vicepresidente Dr. Anibal E. Bagnarelli
Secretaria Dra. María Ruggiero
Tesorero Dra. Estela Meyer
Vocales Titulares Dra. Mabel Villareal - Dra. Silvia de Pardo Dr. Néstor Litwin
Director Dr. Néstor Litwin
Secretaria Dra. Raquel Osatinsky
Redacción Dra. Patricia Indaburu Dr. Gabriel Carballo
COMISION REVISORA DE CUENTAS
Dra. Mónica Aixalá
Dr. Juan Antonio Barcat
Dra. Alicia Blanco
Dra. María de la Paz Castresana
Dr. Sergio Damilano
Dra. Ana Di Martino
Dr. Luis Gamek
Dr. Emilio Labal
Dra. Graciela Lucero
Dr. Alejandro C. Paladini
Dra. Juana María Pasquini
Dr. Marco Pizzolato
Dra. Elvira Roehr
Dr. Edgardo Poskus
Dra. Liliana Roquel
Dr. Otmaro Roses
Dra. Sandra Rozenthal
Dr. Modesto Rubio
Dra. Nora Slobodianik
Dra. Marysia Szefner
Dra. Graciela Valdéz
Dra. Patricia Sorroche
Titulares Dr. Abel Pallares - Dra. Isabel de Simone
Suplentes Dra. Verónica Natoli - Dra. Vanina Berardi Dr. Alberto Villagra
COMISIONES INTERNAS
Actividades Culturales Dr. Alberto Villagra - Dra. Liliana Paz Dra. Silvia Morilla
Acreditación de Laboratorios Dra. Silvia de Pardo - Dra. Mabel
Villareal - Dr. Marigliano - Dra. Silvia Morilla Dr. Alberto Villagra
Certificación Profesional Dr. Edgardo Poskus Dr. Anibal E. Bagnarelli - Dr. Néstor Litwin
Cursos y Conferencias Dra. Raquel Osatinsky - Dra. Verónica
Natoli - Dr. Alberto Villagra - Dra. Vanina Berardi- Dra. María
Ruggiero - Dra. Gladys Oviedo - Dra. Estela Meyer
Premios y Distinciones Dra. Juana M. Pasquini - Dr. Edgardo
Poskus - Dr. Modesto Rubio - Dr. Néstor Litwin - Dra. Alicia
Blanco
COMITE ASESOR CIENTIFICO
REGLAMENTO DE PUBLICACIONES DE BIOQUIMICA Y PATOLOGIA
CLINICA, REVISTA DE LA ASOCIACION BIOQUIMICA ARGENTINA
Bioquímica y Patología Clínica (ByPC), Revista de la Asociación Bioquímica Argentina publica artículos relacionados con aplicaciones de la
bioquímica clínica en todas sus especialidades en el campo asistencial
y de investigación clínica humana, como así también en bioquímica animal y vegetal. Los trabajos enviados a la Revista ByPC no deben haber
sido publicados en otra revista u órgano de difusión científica nacional
o extranjero y los autores deben informar si han sido presentados previamente en carácter de comunicaciones libres.
Los manuscritos serán enviados a un jurado de la especialidad del Comité Científico Asesor de la Revista, quienes podrán convocar a otros profesionales de relevantes méritos. La resolución del jurado será remitida
a la Comisión Revista ByPC dentro de los 30 días de recibido. El dictamen
del jurado que será reservado, deberá fundamentarse de modo explicito.
La aceptación o rechazo del trabajo será comunicada a los autores por la
Comisión Revista ByPC, mencionando los motivos del mismo.
REQUERIMIENTOS GENERALES
Imprimir el manuscrito en papel blanco de 80 g/m2 - A4 ( 21 x 29.7
cm) en Word-Window, folios a simple faz, letra fuente Arial, tamaño de
la fuente 12 e interlineado 1.5 cm. Margen izquierdo 2.5 cm. y margen
derecho 1.0 cm en hojas numeradas en el extremo superior derecho,
comen-zando con la pagina del Titulo. Se debe adjuntar diskette con el
archivo del trabajo en formato Word.
Los trabajos podrán ser enviados por email y la información adicional
del trabajo como ser, fotos de color, gráficos etc podrán ser enviados
por correo postal. De cualquier manera el correcto envío-recepción del
trabajo queda bajo exclusiva responsabilidad de los autores.
A.TRABAJO ORIGINAL
Las siguientes secciones del trabajo original serán confeccionadas en
folios separados:
1 |Título del trabajo
2 |Resumen en español e inglés
3 |Texto
4 |Agradecimientos
5 |Referencias bibliográficas
6 |Cada una de las tablas
7 |Figuras y leyendas
1 |Título: indicar:
a. Título del trabajo.
b. Nombre, Apellido y Título profesional de cada autor.
c. Institución/es en la/s cual/es el trabajo fue llevado a cabo.
d. Dirección postal y de email del autor al que deberá ser dirigida la
correspondencia
2 |Resumen : en español e inglés
Se utilizarán hasta un máximo de 150 palabras para definir el problema,
delinear el diseño experimental y comentar resultados y conclusiones.
3 |Texto:
Deberá constar de:
a. Introducción: definir la razón del estudio, la naturaleza del problema,
su relación con trabajos previos y el objetivo del trabajo.
b. Métodos: describir sujetos experimentales, equipamiento, reactivos
y procedimiento utilizado, incluyendo marcas registradas cuando corresponda y referencias al utilizar métodos establecidos.
lndicar consideraciones éticas que correspondan si seres humanos
han sido involucrados en el estudio.
c. Resultados:presentar en secuencia lógica los datos generados utilizando apropiadamente tablas o figuras sin duplicación. Indicar los procedimientos estadísticos utilizados y sus referencias si corresponde.
d. Discusión: indicar las conclusiones que se extraen ubicándolas críticamente en el contexto de la experiencia anterior. Distinguir claramente
entre nueva información y hallazgos previos, así como las especulaciones de los hechos. Se podrán identificar nuevos problemas emergentes
del trabajo así como las nuevas hipótesis generadas por el mismo.
4 |Agradecimientos:
Indicar asistencia o ayuda científica, técnica, financiera y obsequios.
5 |Referencias Bibliográficas:
Las referencias deberán ser numeradas por orden de aparición en el
trabajo, citando en la forma más completa posible las que sean estrictamente relevantes a los fines del trabajo. Las abreviaturas utilizadas
corresponden a la lista de revistas indexadas publicadas anualmente
en el número de enero del Index Medicus.
El formato de presentación será:
a. Publicación en revistas: Gainer AL, Stinson RA. Evidence that alkaline
phosphatase from human neutrophils is the same gene product as the
liver/kidney/bone isoenzyme. Clin Chim Acta 1982; 123: 11-17.
b. Publicación en libros: Wright LA. Diagnostic Clinical Toxicology. En:
Gornall AG, ed. Applied Biochemistry of Clinical Disorders. Pp. 378-88.
Hagerstown: Harper & Row, 1980.
6 |Tablas:
Tipear cada tabla a doble espacio en hojas separadas, numerándolas
consecutivamente en números arábigos y dando un encabezamiento
descriptivo y con notas al pie aclarando las abreviaturas.
7 |Figuras y leyendas:
Enviar un juego de figuras de alta calidad con símbolos de tamaño
sufi-ciente para que permanezcan legibles al reducirlas para su publicación.
B.COMUNICACIONES BREVES
Seguirán las normas explicadas para los trabajos originales, con la diferencia que el TEXTO (punto 3 de Trabajos Originales) deberá tener una
extensión no mayor de 3 páginas.
C.ACTUALIZACIONES,EDITORIALES Y COMENTARIOS
Las actualizaciones, editoriales y comentarios serán usualmente solicitados por el Comité Editorial de la Revista de la Asociación Bioquímica Argentina a autores considerados expertos en el campo, disciplina
o especialidad en cuestión. Sin embargo serán consideradas para su
publicación las enviadas espontáneamente. Deberán seguir los lineamientos expuestos para la publicación de trabajos originales a diferencia que su texto no necesitará contar con introducción, métodos,
resultados y discusión, debiendo contener, referencias bibliográficas
completas y actualizadas a los fines del tema tratado.
D.TRABAJOS DE LAS RESIDENCIAS BIOQUIMICAS
Serán bienvenidos los trabajos originales o actualizaciones bibliográficas de temas producidos por residentes bioquímicos, a condición que
integre el plantel de autores un profesional asesor acreditado en el
campo, disciplina o especialidad considerada
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 11 | 14
Pág | 11
Implicancia clínica del antígeno prostático específico
libre (PSAL) y antígeno prostático específico total (PSA)
en una población masculina
Flavia Canitano1
Sofia Coniglio2
Silvana Roveto3
Diego Barreiro4
Norberto Lafós5
Daniel Rimoldi 6
1 Bioquímica Residente
2 Bioquímica Residente
3 Bioquímica especilista en Endocrinología
4 Médico Urólogo
5 Médico Urólogo
6 Médico Endocrinólogo
RESUMEN
El antígeno prostático específico (PSA) es una serinoproteasa regulada principalmente por testosterona. Circula unido o libre (PsaL). Es marcador de hiperplasia
prostática benigna y cáncer de próstata (CaP). El índice PsaL/PSAx100, mejora la
eficacia diagnóstica para CaP. Objetivos: determinar Índice y testosterona sérica.
Dividir en dos grupos y reagruparlos en A y B de acuerdo al Índice obtenido. Correlacionarlos con edad.
Seleccionamos 106 hombres > 50 años y PSA hasta 10 ng/ml. Grupo1 PSA<4 y
grupo 2 de 4-10 ng/ml; 1A y 2A ≥18% y 1B y 2B <18%. Significativo p<0.05. PSA,
PsaL y Testosterona entre 1 vs. 2; p<0.05. Edad y PsaL entre 2A vs.2B; p<0.05.
Testosterona entre 1A vs. 1B y 2A vs.1A; p<0.05.
No hubo asociación entre los niveles de testosterona e índice en grupo 2, ni 1B y
2B. Establecimos la necesidad de realizar biopsia prostática en 47 hombres y de
las efectuadas, hallamos 35% de CaP con PSA 4-10ng/ml.
Palabras claves | PSA, Psa libre, testosterona y cáncer de próstata
Lugar de Trabajo:
Instituto de Investigaciones Médicas A.
Lanari
Servicio de Urología
Departamento de Endocrinología Clínica
Enviar Correspondencia a:
Dirección postal:
Av. Combatientes de Malvinas 3150 II
Cuerpo 1er. Piso
e-mail: flaviacanitano@yahoo.com.ar
endoroveto@lanari.fmed.uba.ar
Revista ByPC. Incorporada al Latindex.
ISSN 1515-6761 Código Bibliográfico: RByPC
Trabajo Recibido: 19-10-06 Aceptado: 31-12-06
SUMMARY
PSA is a serine-protease mainly regulated by testosterone. It circulates complexed
or free(fPsa). It’s serum marker for bening prostatic hyperplasia or prostate
cancer(PCa). The index fPsa/PSAx100 improves the diagnostic efficiency for PCa.
Objetives: to determine index and serum testosterone; to split into two groups and
regroup into A and B according to obteined index; to correlate them to age.
106 men >50 years old with PSA up to 10ng/ml were selected. Group 1 PSA<4 and
group 2 of 4–10ng/ml; 1A and 2A ≥18% and 1B and 2B <18%. Significance level
p<0.05.
PSA, fPsa and testosterone between 1 vs. 2; p<0.05. Age and fPsa between 2A
vs.2B; p<0.05. Testosterone between 1A vs. 1B and 2A vs.1A; p<0.05.
No association was found between testosterone and index neither in goup 2, 1B
nor 2B. We found the need to make 47 men prostate biopsies. Among the made
biopsies, we found 35% PCa with PSA 4-10 ng/ml.
Keywords | PSA, freePsa , testosterone and prostate cancer
Implicancia clínica del Antígeno Prostático específico libre (PSAL) y Antígeno Prostático específico total (PSA) en una población masculina
Introduccion
EL antígeno prostático específico (PSA) es una enzima serino
proteasa regulada por andrógenos, miembro de la familia de
las kalikreínas tisulares. Su peso molecular es de 33 Kd. Es la
glicoproteína de mayor concentración en el plasma seminal
(un millón de veces superior a la concentración sérica).
La transcripción del gen de PSA está regulada positivamente por el receptor de andrógenos. La testosterona sérica,
principal andrógeno circulante, ingresa a la célula prostática
convirtiéndose en dihidrotestosterona por acción de la 5 alfa
reductasa. Esta hormona forma un complejo con el receptor
de andrógenos, que uniéndose a secuencias específicas del
ADN (AREs), modula la expresión del gen de PSA a.
Es producido principalmente por los acinos y ductos de la
glándula prostática, se encuentra en tejido prostático, plasma seminal y suerob. Otras fuentes : glándulas periuretrales y
perirrectales. Además se producen pequeñas cantidades en
mama, ovario, endometrio, líquido amniótico, leche y fluidos
mamarios c-d. Estos sitios contribuyen poco al valor medido de
PSA sérico con inmunoensayos convencionales.
Su acción catalítica específica está asociada con el clivaje de
la semenogelina I y II, estas proteínas participan en la coagulación del semen, por lo tanto al clivarlas se produce la licuefacción del mismo.
La biosíntesis se inicia a partir de un preproPSA, que en el
interior celular se cliva a proPSA, éste pasa al lumen donde
se transforma en PSA activo por acción de la kalicreína hK2.
Dicha forma activa actúa en el fluido seminal y puede ir a circulación donde se une a las proteínas inhibidoras o por proteólisis dentro del lumen se inactiva pasando a circulación
como PSA libre (PsaL).
El PSA que difunde a la sangre existe en 2 formas moleculares:
libre de 30 kd y unido a proteínas inhibidoras, principalmente
a la α1antiquimotripsina (ACT) de 90 kd con vida media 2-3
días (forma inmunorreactiva preponderante en suero) y a la
α2macroglobulina de 800 kd con vida media 2-5 minutose- f
.
Es el analito relacionado con el tejido prostático normal, la
hiperplasia prostática benigna (HPB) y el cáncer de próstata
(CaP). Suele incrementarse con la edad (reflejando generalmente HPB) y varía entre los distintos grupos étnicosg. En
el suero es determinado por los inmunoensayos convencionales.
Cuando la membana basal de la glándula prostática está intacta, la difusión del PSA es lenta, pero en CaP se modifican
los mecanismos de secreción, debido fundamentalmente a
la pérdida de polarización de la arquitectura glandular. Esto
provoca la secreción directa de PSA activo a la circulación favoreciendo mayor formación de complejos, aumentando así
su concentración y el porcentaje unido a ACT.
Su mayor relevancia bioquímica es en el diagnóstico del CaP
( junto al tacto rectal y la ecografía), así mismo en el seguimiento, evaluación de respuesta al tratamiento y detectección de recidivas luego de la prostactectomía .
El dosaje de PSA presenta un inconveniente, es un marcador
de baja especificidad para ser usado como pesquisa para
CaP. Se considerada valor normal hasta 4 ng/ml. El 26% de
los hombres con niveles de PSA entre 4 y 10 ng/ml tienen
CaP, que correlaciona con la histología revelada por biopsia.
Thompson y col. investigaron la prevalencia de CaP en hombres con PSA menor o igual a 4ng/ml h.
Un método para mejorar el valor diagnóstico de la determinación sérica de PSA es medir su fracción libre, calculando el
índice porcentual (I) : PsaL/ PSA x 100 i.
Este I es mayor en HPB que en CaP y es el mejor parámetro
para discriminar entre CaP y HPB , especialmente en los casos clínicos con valores de PSA hasta 10 ng/ml en hombres
mayores de 40 años j.
En los diagnósticos tempranos de CaP se han hallado concentraciones significativamente mas altas de PSA en hombres
negros que en blancos, incluso los niveles de PSA son mayores a igual volumen glandular, grado del tumor y edad del
pacientek.
En japoneses se observan menores niveles de PSA comparado a hombres blancos de la misma edad. El CaP ocurre en el
9,7% de japoneses con PSA menor a 4 ng/ml l .
Trabajos previos indican la existencia de un incremento de
la especificidad con el porcentaje de la fracción libre sin disminución de la sensibilidad. Hallaron que la especificidad
para la pesquisa de CaP se incrementaba con un índice de
corte=18%m- n. Por lo tanto, en todos los casos en que se obtiene I mayor a 18% no se realiza la biopsia prostática.
Objetivos
a) Determinar el I y la testosterona sérica (T) en hombres
mayores de 50 años ambulatorios con PSA hasta 10 ng/ml,
que consultan al Servicio de Urología de nuestra Institución.
b) Dividirlos en 2 grupos: grupo 1 menor a 4 ng/ml (considerado normal) y grupo 2 de 4-10 ng/ml. c) Cada grupo 1 y 2
subdividirlo en A y B de acuerdo al I obtenido mayor o igual
y menor al 18%, respectivamente. d) Correlacionar edad con
PSA, I y T.
Materiales y métodos
Fueron seleccionados 106 hombres mayores de 50 años
ambulatorios, que consultaron espontáneamente al Servicio
de Urología desde Enero hasta mediados de Agosto de 2006.
Todos con niveles de PSA hasta 10 ng/ml, cumpliendo los siguientes criterios de inclusión: sin tratamiento con finasteride, historia de cáncer de próstata, infección urinaria actual ni
terapia hormonal. El tacto rectal no coincidió con el estudio, y
el criterio médico evaluó el momento oportuno de realizarlo.
Las determinaciones hormonales fueron procesadas en el
Laboratorio de Endocrinología Clínica, y las muestras séricas,
obtenidas por punción venosa, fueron congeladas hasta su
procesamiento.
Pág | 13
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 11 | 14
Para PSA se utilizó un inmunoensayo IMMULITE con sensibilidad analítica de 0.03 ng/ml. La sensibilidad funcional obtenida
en nuestro Laboratorio es de 0.09 ng/ml con un CV= 17%. Se
considera como valor de referencia hasta 4ng/ml.
Para PsaL utilizamos un inmunoensayo IMMULITE, con sensibilidad analítica de 0.02 ng/ml.
El I fue obtenido mediante el cálculo : PsaL / PSA x 100.
La testosterona sérica fue cuantificada con inmunoensayo
IMMULITE y sensibilidad analítica 0.5 nmol/l. El rango de referencia considerado para hombres mayores de 50 años fue
7 a 27 nmol/l.
En cada inmunoensayo procesamos controles de calidad internos y muestras que corresponden al programa de control
de calidad interlaboratorios.
Los resultados obtenidos fueron divididos en dos grupos:
Grupo 1:hasta 4 ng/ml (considerado normal) n= 44 Edad:
de 50 a 89 años
Grupo 2:de 4 a 10 ng/ml ( zona gris) n=62 Edad: de 50 a 90
años
Cada uno fue reagrupado de acuerdo al porcentaje del índice
obtenido:
Subgrupo 1A Índice mayor o igual a 18 % n= 22 Edad: 61 a 88
años
1B Índice menor a 18% n= 22 Edad: 50 a 89
años
Subgrupo 2A Índice mayor o igual a 18% n= 15 Edad: 68 a 86
años
2B Índice menor a 18% n= 47 Edad: 50 a 90
años
Para el análisis estadístico se utilizaron las pruebas de Mann
Whitney, regresión lineal y correlación de Spearman. Considerando significativo p<0.05.
Figura 1
parando 2B, que representa el 76% de hombres (47/62) del
grupo 2 y 1B, el 50% (22/44) del grupo 1, encontramos 2B
vs. 1B: 12.3 ±3.8 vs. 11.8±4.6; p=0.96 NS. Analizando 2A vs.
1A: 14.2±4 vs. 9.2±3.3; p<0.001, observamos los niveles mayores en el 24% de hombres (15/62) seleccionados con PSA
entre 4-10 ng/ml. [Figura 2]
Figura 2
Resultados
Expresados como media±SD. No hubo diferencias significativas en las medias de edad entre grupo 1 y 2; 72.6±10.4 y
74.5±7.6 respectivamente, p = 0.271 NS.
En el grupo 1 y 2 hallamos el 50% y 24% respectivamente, de
hombres con I > 18%.
Los 47 pacientes restantes del grupo 2 tuvieron indicación
de biopsia prostática y 22 hombres del grupo 1 permanecen
en control estricto para evaluar la progresión bioquímica /
clínica, todos con I < 18%. [ Figura 1]
Encontramos diferencias significativas de PSA, PsaL y T entre grupo 1 vs. 2: 1.8 ±1 vs. 6.8±1.8 p< 0.001; 0.3±0.2 vs.
0.9±0.5 p<0.001 y 10.5±4.1 vs.12.7±3.9; respectivamente
p< 0.006. El análisis de la edad y PsaL en el grupo 2 presentó
diferencias significativas: 2A vs. 2B 78±5 vs.73±8; p<0.024 y
1.6±0.6 vs. 0.8±0.3; respectivamente, p<0.01 y lo contrario
en el grupo1: 1A vs.1B 75±7 vs.71±12 y 0.4±0.2 vs. 0.2±0.2;
respectivamente, p>0.05 NS.
El análisis estadístico de T fue: 1A vs. 1B 9.2±3.3 vs. 11.8±4.6;
p< 0.042 y 2A vs. 2B 14.3±4 vs. 12.3±3.8; p=0.08 NS. Com-
Resaltamos que no hubo diferencias en los valores medios
de testosterona sérica entre los subgrupos 2A y 2B (PSA en
zona gris) ni entre 1B y 2B ( I< 18%).
Correlacionando edad con PSA, I y T para cada subgrupo resultó no significativo; p > 0.05. Por lo tanto no hubo correlación
de las variables analizadas con el envejecimiento en cada
subgrupo de hombres seleccionados mayores de 50 años y
reagrupados según el índice obtenido.
Hasta la fecha se realizaron 26 biopsias, de las cuales resultaron 65% HPB (17/26) y 35% CaP (9/26).
Conclusión
Si bien la concentración media de T entre grupos fue diferente
significativamente; entre los subgrupos con valores de PSA
de 4 -10 ng/ml y entre los dos con I menor a 18% no encontra-
Implicancia clínica del Antígeno Prostático específico libre (PSAL) y Antígeno Prostático específico total (PSA) en una población masculina
mos estadísticamente diferencias. Por lo tanto no pudimos
hallar asociación entre los niveles séricos de testosterona e
índice en la zona gris, ni entre los subgrupos con I menor a
18%.
El índice nos permitió diferenciar los sujetos estudiados que
consultaron en esta institución y tomar una conducta clínica
de acuerdo al I calculado.
Resulta destacable que mediante la determinación del I en
los pacientes del grupo 2, pudimos establecer en 47 hombres
(I menor a 18%) la necesidad de realizar biopsia y diferenciarlos de aquellos que con I mayor o igual a 18%, continúan en
observación clínico-bioquímica. Con el cálculo del I evitamos
la realización de biopsia en un 24% de pacientes del grupo
2 (PSA 4-10 ng/ml). Hasta la fecha, se realizaron 26 biopsias prostáticas y hallamos 35% de CaP, en los hombres del
subgrupo 2B con PSA de 4-10 ng/ml.
Habiendo obtenido I menor a 18% con PSA considerado normal en 22 hombres, pensamos extender el estudio en sujetos masculinos de menor edad, y analizar la utilidad del I
como marcador precoz de enfermedad en hombres menores
de 50 años con valores de PSA hasta 4 ng/ml.
Agradecimiento:
TOKATLIAN SA por la donación de equipos para IMMULITE
Bibliografía
Balk S.P., Ko Y.J., Bubley G.J. Biology of Prostate specific
antigen. Journal of Clinical Oncology 2003; 21 (2): 383-391.
2
Dimitrios N.M., He Yu, Mala A., Chun W. and al. Prostate
specific antigen in female serum, a potencial new marker of
androgen excess. J Clini Endoc and Metab 1997; 82; 3 777780.
3
Lovgren J., Valtonen –Andre C., Marsal K. Et al. Measurement
of prostate-specific antigen and human glandular kallikrein 2
in different body fluids. J Androl 1999; 20: 348-355.
4
Howarth
Dj,
Aronson
JB,
Diamandis
EP.
Immunohistochemical localization of prostate-specific
antigen in bening and maignant breast tisssues. Br J Cancer
1997; 75:1646-1651.
5
Wians F.H., Cheli C.D., Balko J.A. at al. Evaluation of the
clinical performance of equimolar and skewed response total
prostate specific antigen assays versus complexed and free
PSA assays and their ratios in discriminating between benign
prostatic hyperplasia and prostatic cancer. Clinica Chimica
Acta 2002; 326: 81-95.
6
Damilano S, Nosetto S, Guzmán Z y Casal J Antigeno
Especifico de Próstata. Bioquímica y Patología Clínica. 1997;
61 (2): 193-7.
7
Oesterling JE, Jacobsen SJ, Chute CG et al. Serum prostate
specific antigen in community-based population of healthy
men. Establishment of age-specific reference ranges. J Am
1
Med Assoc 1993; 270: 860-864.
8
Ian Thompson et al. Prevalence of Prostate Cancer among
Men with a Prostate-Specific Antigen Level < o iqual 4 ng per
milliliter. N Engl J Med 2004; 350: 2239-2246.
9
Beatty P.A., Glaser A.I., . Prostate Cancer with low PSA levels.
N Engl J of Med 2004; 351;17, 1802-1803.
10
Toubert ME, Guillet M, Chiron P, Meria P et al. Percentage of
free serum prostate-specific antigen; a new tool in the early
diagnosis of prostatic cancer. Eur J Cancer 1996; 32: 20882093.
11
Morgan TO, Jacobson SJ, McCarthy WF et al. Age specific
reference ranges for prostate specific antigen in black men. N
Engl J Med 1996; 335: 304-310.
12
Shin E, Shigehiro S, Makoto O , Toyoaki U et al. The ratio
of free to total serum prostate specific antigen and its
use differential diagnosisof prostate carcinoma in Japan.
American Cancer Society 1997;79: 90-98.
13
Christensson A, et al. Serum prostate specific antigen
complexed to alfa 1 antichymotrypsin as an indicator of
prostate cancer. J Urol 1993 ; 150: 100-5.
14
Luderer AA, et al . Measurement of the proportion of free to
total prostate specific antigen in the diagnostic gray zone of
total prostate specific antigen. Urology 1995; 46: 187-94.
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 15 | 22
Pág | 15
Insulinemia, HOMA, fibrinógeno, apolipoproteína B y colesterol no-HDL en el síndrome metabólico
María Susana Castillo Rascón ¹
Graciela Bonneau ²
Williams Pedrozo ³
Augusto Sánchez ³
Cristina Malarczuk ³
Blanca Ceballos ³
Carlos Castro Olivera
María Ester Pianesi
Ruth Leiva ³
Natalia Blanco ³
Graciela Dusse ³
1 Bioquímico Magíster en Salud Pública
2 Bioquímico Especialista en Química
Clínica
3 Bioquímico
4 Médico especialista en Clínica Médica
y Cardiología
5 Médico especialista en nutrición
Lugar de Trabajo:
Laboratorio Central, Hospital Dr Ramón
Madariaga, Posadas, Misiones.
Enviar Correspondencia a:
María Susana Castillo Rascón
Bermúdez 2775
Posadas, Misiones, Cp 3300
Te 03752-447846
E-mail:scastillorascon@yahoo.com.ar
Revista ByPC. Incorporada al Latindex.
ISSN 1515-6761 Código Bibliográfico: RByPC
Trabajo Recibido: 16-10-06 Aceptado: 5-01-07
RESUMEN
Nos propusimos comparar los niveles de Insulina, Modelo de Evaluación Homeostática (HOMA), Fibrinógeno, Apo B y Colesterol no HDL (C-noHDL) entre individuos
con y sin Síndrome Metabólico (SM) y correlacionar C-noHDL con Apo B. El grupo
con SM de acuerdo al Adult Treatment Panel III (ATPIII) estaba constituido por 38 sujetos de 45±7 años y un grupo control de 32 sujetos de 44±8 años, evaluados con
ayuno de 12 horas. Los individuos con SM vs grupo control presentaron Insulina (
M=16,25 vs 4,8 mU/ml, p<0,001), HOMA (M=3,41 vs 0,99, p<0.001), Fibrinógeno
(M=315 vs 265 mg/dl, p=0.179), Apo B (X±DS=91,25±20,39 vs 67,38±13,99 mg/
dl, p<0,001 ) y C-noHDL (X±DS=162,08±35,21 vs 116,19±23,75 mg/dl, p<0,001).
Apo B correlacionó significativamente con C-noHDL (p=0,01,R²= 0,7772). Los parámetros estudiados deberían ser incluidos en la evaluación del riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 y/o enfermedad cardiovascular en individuos con SM. El C-noHDL podría ser utilizado como estimador de todas las lipoproteínas aterogénicas
en laboratorios de baja complejidad.
Palabras claves | síndrome metabólico – insulina – fibrinógeno - apolipoproteína
B - colesterol no HDL.
SUMMARY
Our purpose was to compare levels of insulin, HOMA, Fibrinogen, Apo B and no HDL
cholesterol (no HDL-C) among individuals with and without Metabolic Syndrome
(MS) and correlate no HDL-C with apo B. According to ATP III the group with MS was
integrated by 38 individuals aged 45±7 years old, and a control group aged 44±8
years old, assessed in a fasting condition of 12 hs. Individuals with MS vs. control
group showed insulin (M=16,25 vs. 4,8 mU/ml, p<0,001), HOMA (M=3,41 vs. 0,99,
p<0,001), Fibrinogen (M=315 vs. 265 mg/dl, p=0,179), Apo B (X±DS=91,25±20,39
vs. 67,38±13,99 mg/dl, p<0.001) and no HDL-C (X±162,08+-35,21 vs.
116,19±23,75 mg/dl, p<0,001. Apo B significantly correlated with no HDL-C. Those
studied parameters should be included in the assessment of Diabetes type 2
and/or Cardiovascular disease development in individuals with MS. No HDL-C could
be used as an estimate of all atherogenic lipoproteins in low complexity clinical
analysis laboratories.
Keywords | metabolic syndrome - insulin-fibrinogen - apolipoprotein B - non HDL
cholesterol.
Insulinemia, Modelo de Evaluación Homeostática (HOMA), Fibrinógeno, Apolipoproteína B y Colesterol no-HDL en el Síndrome Metabólico
Introduccion
El síndrome metabólico (SM), representa una constelación
de factores de riesgo lipídico y no lipídico de origen metabólico como obesidad abdominal, triglicéridos elevados,
colesterol HDL disminuido, presión sanguínea aumentada
y glucemia en ayunas alterada asociados a un estado protrombótico y proinflamatorio (1). Este síndrome está relacionado muy estrechamente con un desorden metabólico
generalizado llamado resistencia insulínica en el cual la insulina no es eficiente en cumplir su acción (2,3,4).
Las causas subyacentes del SM continúan siendo un desafío para los expertos, pero la Insulino Resistencia (IR) y la
obesidad central son considerados factores significativos.
Factores genéticos, inactividad física, envejecimiento, un
estado proinflamatorio y cambios hormonales pueden tener
también un efecto causal, pero el rol de estos puede variar
dependiendo del grupo étnico (5).
Aunque el SM es a menudo referido como una entidad discreta, es importante reconocer que es un síndrome y no una
entidad uniforme definida, donde podría abarcar un conjunto de Factores de Riesgo (FR) unidos a través de un mecanismo subyacente común (6).
Existen distintos modelos para definir el SM, basados en criterios clínicos, entre los que se encuentran el propuesto por
la Organización Mundial de la Salud, la Asociación Americana
de Endocrinólogos Clínicos y uno de los más difundidos, el
propuesto por el Programa Nacional de Educación en Colesterol (NCEP), en su publicación del III Panel de Tratamiento
de Adultos (ATP-III) (7-8), con la modificación propuesta por
la AHA y el NHLBI en el año 2005 (9). Todos presentan criterios similares en muchos aspectos, pero se diferencian en su
posición respecto a las causas predominantes del síndrome.
En nuestro trabajo nos basaremos en lo propuesto en el ATPIII, que define al SM por la presencia de 3 o más de los siguientes criterios: cintura: > 102 cm en hombres y > 88 cm en mujeres, Triglicéridos ≥ 150 mg/dl, HDL colesterol < 40 mg/dl en
hombres y < 50 mg/dl en mujeres, Presión Arterial ≥ 130 / 85
mmHg y Glucemia en ayunas ≥ 110 mg/dl (8 ).
Se estima que cerca de un cuarto de la población adulta del
mundo tiene SM lo que significa dos veces más probabilidad
de morir y tres veces más probabilidad de tener un infarto
de miocardio o un accidente cerebrovascular comparado
con gente sin el síndrome. Además, las personas con SM
tienen 5 veces mayor riesgo de desarrollar Diabetes tipo 2.
El grupo de FR para Enfermedad Cardiovascular (ECV) que
caracterizan el SM es ahora considerado como la fuerza que
conduce a una epidemia de ECV (5).
El grupo de consenso de la Fundación Internacional de Diabetes propone otros parámetros que parecen estar relacionados con el SM, los cuales podrían ser incluidos en estudios
de investigación para ayudar a determinar el poder predictivo de estos criterios extras para ECV y/o diabetes (10). Los
criterios metabólicos adicionales a investigar en el presente
trabajo son: resistencia a la insulina, estado protrombótico
y dislipidemia aterogénica (más allá de los triglicéridos elevados y el colesterol HDL disminuido).
La insulinorresistencia (IR) se describe como una respuesta biológica inadecuada en el organismo, menor a la normal,
a concentraciones fisiológicas de insulina y puede definirse como una disminución del efecto de la hormona, o sea,
una disminución de la respuesta o de la sensibilidad de los
efectores de la acción biológica de ella a una concentración
de insulina dada, para estimular el consumo normal de glucosa por las células. Los efectores de la insulina incluyen,
principalmente, a las células musculares, los adipositos, los
hepatocitos y a las mismas células beta de los islotes pancreáticos (11,12).
La sensibilidad de los tejidos a la acción insulínica se ha
estimado a través de varios métodos, siendo el “gold standard” la prueba del Clamp Euglucémico-Hiperinsulinemico.
Existen otros métodos, pero son complicados, caros, necesitan tiempo, y son sólo aplicables para el estudio de un
grupo reducido de sujetos siendo difícil su implementación
en estudios poblacionales (13,14). Para estudios epidemiológicos y clínicos se han propuesto métodos indirectos más
simples basados en la medida de los valores de insulina en
ayunas, entre ellos el HOMA (Homeostasis Model Assessment) que se calcula a través de la insulina en ayunas (µU/
ml) x glucosa en ayunas (mmol/l) / 22,5 (13,15).
El fibrinógeno plasmático aumenta con el número de los
componentes del SM (16). El reconocimiento del incremento del fibrinógeno ligado con la obesidad abdominovisceral
se asoció durante muchos años a su acción como factor
trombógeno, hoy se jerarquiza el hecho de que es una de las
proteínas que aparecen en la fase aguda de la inflamación
además de la PCR, el ácido siálico, PAI1 y el factor del complemento. (17). El fibrinógeno elevado, refleja el nivel de
actividad inflamatoria y se asocia con progresión de aterosclerosis carotídea, así como fue demostrado previamente
para otros parámetros inflamatorios. Sin embargo esta asociación parece estar relacionada de forma no específica a la
extensión del proceso inflamatorio en la enfermedad aterosclerótica mas que a propiedades específicas del fibrinógeno
(18). De igual manera se ha demostrado una disfunción en
la fibrinólisis (PAI-1, t-PA) y la presencia de aterosclerosis
carotídea por ecografía (19).
La dislipidemia aterogénica del SM consiste en niveles elevados de triglicéridos y apo B, LDL pequeñas y densas y
bajos niveles de colesterol HDL (6). Los individuos que presentan un incremento de las partículas de LDL pequeñas
y densas (patrón B) tienen incrementado el riesgo de ECV
(20-21). Los niveles de apo B denotan el número de lipoproteínas aterogénicas en circulación, es un potente predictor
de riesgo cardiovascular y es de mayor valor en el diagnóstico y tratamiento de hombres y mujeres con alguna anormalidad lipídica común pero con concentración normal de
colesterol LDL (22). El colesterol no HDL ha sido sugerido
como un adecuado sustituto para Apo B, sin embargo hay
estudios que demuestran que Apo B es superior al coleste-
Pág | 17
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 15 | 22
Materiales y Metodos
Se estudiaron 2 grupos de adultos de ambos sexos, empleados de los Hospitales Públicos Dr. Ramón Madariaga y
Provincial de Pediatría de la Ciudad de Posadas, provincia de
Misiones. Un grupo de 38 sujetos con SM constituido por 29
mujeres y 9 varones de 45±7 años y otro grupo Control sin
ninguno de los cinco componentes de SM formado por 32
sujetos, 21 mujeres y 9 varones de 44±8 años.
Los criterios utilizados para la identificación de SM fueron
los del ATP III.
Los criterios de exclusión tanto para el grupo en estudio
como para el grupo control fueron: hipotiroidismo e hipertiroidismo, diabéticos ya diagnosticados, pacientes en tratamiento con hipolipemiantes, enfermedad infecciosa, hepática o neoplasias, fumadores, pacientes con nefropatías o
terapia de reemplazo hormonal.
Se llenó una ficha con datos personales (nombre completo,
edad y sexo). Todos los pacientes y controles otorgaron su
consentimiento para la realización del estudio.
Se midió la circunferencia de cintura como evaluador de la
obesidad abdominal, siguiendo los criterios de la OMS, con
cinta métrica (graduada, flexible e inelástica) en el punto
medio entre el borde inferior de la última costilla y la cresta
iliaca, en expiración (29).
La presión arterial fue medida en ambos brazos con
esfingomanómetro de mercurio y estetoscopios de
diafragma siguiendo las recomendaciones de la American
Heart Association. (30)
Se realizó una extracción de sangre con 12 horas de ayuno
para el estudio de glucemia, lípidos, lipoproteínas, fibrinógeno e Insulinemia. El suero se separó dentro de las 2 horas
posteriores a la extracción y su procesamiento se realizó
dentro de las 24 horas. Para la determinación de Fibrinógeno se utilizó plasma citratado pobre en plaquetas, el que
se obtuvo dentro de las 2 horas posteriores a la extracción
(Proporción 1/9: 1 anticoagulante citrato trisodico 3,8 % y 9
de sangre).
Las determinaciones bioquímicas realizadas fueron: Glucemia (CVinterensayo= 2,38%), Colesterol total (CV interensayo = 1,68%) y Triglicéridos (CV interensayo = 2,42%)
que se midieron por métodos enzimáticos-colorimétricos
en autoanalizador (Metrolab 2100), el Colesterol-HDL (CVinterensayo= 1,24%) por precipitación selectiva con ácido
fosfotúngstico, y medida enzimática del colesterol del sobrenadante en autoanalizador (Metrolab 2100) todos los
reactivos utilizados para las determinaciones bioquímicas
fueron del laboratorio Wiener (Wiener Lab, Argentina). Se
utilizaron calibradores y controles comerciales en rango
normal y patológico, también se realizó Control de Calidad
interno con pool de sueros preparado en el Laboratorio y
Control de Calidad externo a través de controles provistos
por la Fundación Bioquímica Argentina.
La Insulina se determinó por radioinmunoanálisis en fase
sólida por competencias utilizando Insulina marcada con
yodo 125 Coat-A-Count Insulin (DPC) (CV=8% inter e intraensayo), el fibrinógeno por el método de Clauss y la Apo B fue
determinada por inmunoturbidimetría en el Laboratorio de
Referencia de Lípidos y Lipoproteínas de la Facultad de Bioquímica de la Universidad Nacional de Buenos Aires.
Para el análisis estadístico se utilizó el programa SPSS versión 11.5. Para comparación entre grupos se utilizó la prueba t para muestras independientes cuando se cumplían los
supuestos de distribución normal y homogeneidad de varianzas, en caso contrario se utilizó la prueba no paramétrica de contraste U de Mann-Whitney. Para realizar el análisis
de correlación entre apo B y colesterol no HDL se utilizó el
coeficiente de Pearson.
Resultados
A efectos de evaluar el grado de insulinorresistencia se
midieron los niveles de insulina en ayunas y se calculó el
HOMA.
El grupo con SM presentó una mediana para Insulina de
16,25 mU/ml con una amplitud de 6,20 a 63,5 mU/ml, mientras que en el grupo control la mediana fue de 4,80mU/ml
Figura 1: Comparación de los niveles de insulina entre
individuos con y sin SM (p<0,001).
insulinemia
rol no HDL en predecir el riesgo vascular y en el control post
tratamiento farmacológico (23), principalmente cuando se
combina con triglicéridos (24) o con Apo A1 para formar el
índice Apo B/Apo A1, (25,26,27). o como lo sugiere el estudio Interheart (28)
En el presente trabajo nos propusimos comparar si existen
diferencias significativas para Insulinemia, HOMA, fibrinógeno, colesterol no HDL y Apo B entre individuos con y sin SM,
y correlacionar el colesterol no HDL con Apo B.
Insulinemia, Modelo de Evaluación Homeostática (HOMA), Fibrinógeno, Apolipoproteína B y Colesterol no-HDL en el Síndrome Metabólico
con una amplitud de 1 a 12 mU/ml.
El índice de IR HOMA presentó una mediana de 3,41 y una
amplitud de 1,54 a 15,10 en el grupo con SM, mientras que
en el grupo control la mediana fue de 0.99 con una amplitud
de 0,18 a 2,61.
Para evaluar el estado protrombótico se midieron los niveles de Fibrinógeno en los dos grupos en estudio.
En el grupo con SM la mediana para el Fibrinógeno fue de
315 mg/dl con un amplitud de 130 a 390, mientras que en el
grupo control la mediana fue de 265 mg/dl con una amplitud
de 200 a 380.
La anormalidades lipídicas más allá de la hipertrigliceridemia y los niveles de Colesterol HDL disminuido fueron evaluadas a través de los niveles de Apo B y del colesterol no
HDL.
La media del nivel de Apo B en el grupo con SM fue de 91,25
mg/dl con DS de 20,39 , mientras que en el grupo control la
media fue de 67,38 mg/dl con un DS de 13,99.
La media para el Colesterol no HDL en el grupo con SM fue de
162,08 mg/dl con un DS de 35,21, mientras que en el grupo
control la media fue de 116,19 mg/dl con un DS de 23,75.
La correlación entre los niveles de Apo B y colesterol no HDL
fue medida a través del coeficiente de correlación de Pearson,
encontrando una correlación significativa al nivel 0,01 (bilateral).
Discusión
La insulinemia en ayunas correlaciona inversamente con la
sensibilidad a la Insulina, por lo que niveles elevados de Insulina reflejarían IR. En nuestro caso, encontramos niveles significativamente más altos de Insulina en el grupo con SM que
en el grupo control. Sin embargo, el nivel circulante de esta
hormona es función simultánea de la IR y de la capacidad se-
Figura 3: Comparación de los niveles de Fibrinógeno
entre individuos con y sin SM (p = 0,179)
Fibrinógeno
HOMA
Figura 2: Comparación de los valores de HOMA entre
individuos con y sin SM (p<0,001).
cretoria de las células beta del páncreas, por lo que utilizar a
la hiperinsulinemia como método de diagnóstico de IR tiene
serias desventajas (31).
También encontramos diferencias significativas al comparar el índice de IR, HOMA, entre el grupo en estudio y el grupo
control. Los índices de IR predicen la aterosclerosis y eventos
cardiovasculares de forma independiente de otros factores
de riesgo como los niveles de lípidos y glucosa en ayunas
(32,33). Por esto es tiempo de considerar la inclusión de estos simples índices de Insulino sensibilidad dentro de la rutina clínica (34). Es importante destacar que en la actualidad
se estudia el uso precoz de insulinosensibilizadores en condición de IR aun sin diabetes clínica a fin de retrasar la aparición de esta ultima, y evitar las complicaciones que conlleva
(32,35).
Al evaluar el estado protrombótico a través de los niveles de
fibrinógeno, no hallamos diferencias significativas entre los
individuos con SM y el grupo control. Un estudio realizado
con sujetos con SM, clasificados de acuerdo a los criterios
del ATP III, refiere niveles significativamente más altos de
recuento de leucocitos y del Inhibidor del Activador del Plasminógeno 1 (PAI 1), mientras que no encuentran diferencias
significativas para Fibrinógeno y el factor de von Willebrand
(36). Utilizando la base de datos del Cardiovascular Health
Study en individuos longevos no diabéticos, el fibrinógeno
se asocia con factores de inflamación mas que con actividad
procoagulante, asumiendo la posición de que el fibrinógeno
principalmente refleja inflamación subyacente mas que potencial procoagulante (37). El riesgo de presentar eventos
cardiovasculares es 1,8 a 4,1 veces superior en sujetos con
niveles de fibrinógeno en el tercilo superior que en los sujetos
del tercilo inferior (18); sin embargo, los marcadores de hipercoaglabilidad como la hiperfibrinogenemia no han podido
ser asociados en forma consistente con la hiperinsulinemia y
la intolerancia a la sobrecarga de glucosa (17). El fibrinógeno
Pág | 19
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 15 | 22
debería ser considerado como predictor o marcador de riesgo
de ECV, especialmente en población susceptible al efecto deletéreo de los FR mayores modificables como HTA, hipercolesterolemia y tabaquismo (38).
Quedarían pendientes por evaluar los niveles de PAI-1 y t-pA
en ambos grupos en estudio, ya que este parámetro constituye la anomalía hemostática mas consistentemente asociada
con IR(16), sugiriendo que la disfunción fibrinolítica media el
riesgo incrementado de ECV en individuos con el SM (19).
También debe señalarse que los niveles de fibrinógeno plasmático se encuentran influidos por diversos factores (16),
algunos de los cuales fueron considerados en el presente trabajo como tabaquismo, diabetes, menopausia y la edad pero
otros no fueron evaluados, como el Indice de Masa Corporal
(BMI), el recuento de leucocitos, el consumo de alcohol y los
niveles de colesterol LDL.
Al comparar Apo B y Colesterol no HDL entre individuos con
SM y el grupo Control, encontramos diferencias significativas para los dos parámetros; además obtuvimos una buena
correlación entre ambos analitos. Varios investigadores han
propuesto que Apo B total es el indicador preferido del potencial aterogénico total contenido en LDL y VLDL (39). La
cuantificación de Apo B puede ser útil en determinar riesgo
cardiovascular y adecuación del tratamiento en gente que
tiene el SM ya que determina el número de partículas aterogénicas (40), siendo mejor predictor de riesgo vascular que el
colesterol LDL (41). El problema en su implementación es la
disponibilidad de equipamiento apropiado para su medición;
esto ha conducido a que el ATP III identifique un parámetro
en la rutina de análisis que pueda servir como reemplazante, el colesterol no HDL, que incluye el colesterol LDL y VLDL
y se correlaciona fuertemente con los niveles de Apo B (6).
El ATP III refiere que en pacientes con dislipidemia aterogénica en quienes los niveles de triglicéridos son ≥ 200 mg / dl
el colesterol no HDL se convierte en el segundo objetivo de
colesterol no HDL
Figura 5: Comparación de los niveles de Colesterol no
HDL entre individuos con y sin SM (p<0,001).
tratamiento después que el colesterol LDL es alcanzado(8).
Un estudio realizado en individuos jóvenes sugiere que entre
los FR convencionales, lipídicos y no lipídicos, el colesterol no
HDL es el mejor discriminador para predecir la presencia de
Infarto Agudo de Miocardio (IAM). Los autores encuentran que
por cada 10 mg/dl de incremento en los niveles de colesterol
no HDL hubo un 34% de incremento en el riesgo de tener un
IAM (42). Sin embargo el Insulin Resístanse Atherosclerisus
Study (IRAS) señala que Apo B se asocia más estrechamente
con adiposidad central, resistencia insulínica, trombosis e inflamación que el colesterol no HDL, sugiriendo que Apo B sería
un mejor indicador de riesgo cardiovascular (43).
Recientemente, Denke presenta una revisión original, donFigura 6: Correlación entre los niveles de Apo B y
colesterol no HDL.
Apolipoproteina B
Apolipoproteina B
Figura 4: Comparación de los niveles de Apo B entre
individuos con y sin SM (p<0,001).
Insulinemia, Modelo de Evaluación Homeostática (HOMA), Fibrinógeno, Apolipoproteína B y Colesterol no-HDL en el Síndrome Metabólico
de se compara la potencia del colesterol no HDL versus Apo
B para predecir el desarrollo de ECV en hombres sanos. Se
señala que ambos parámetros son equivalentes en cuanto
a confiabilidad, reproducibilidad y variación biológica, pero el
colesterol no HDL es superior en disponibilidad metodológica, mientras que Apo B acarrea menos costos y tiene mayor
poder predictivo de ECV en individuos con terapia hipolipemiante. El autor plantea que Apo B podría sustituir, tanto para
screening como para control post tratamiento, a Colesterol
LDL y colesterol no HDL en la evaluación del riesgo de ECV
(44). La guía canadiense sobre manejo de la dislipidemia y la
prevención de la ECV del año 2003 sugiere la determinación
de Apo B en los pacientes con hipertrigliceridemia moderada; especialmente para determinar el riesgo y el tratamiento
adecuado en los pacientes con SM (40)
Hasta tanto no exista disponibilidad de metodologías confiables, accesibles a laboratorios de baja complejidad como
el nuestro, pensamos que la cuantificación del colesterol no
HDL es una buena aproximación a la estimación del riesgo de
ECV en individuos con niveles de TG elevados.
Los nuevos FR lipídicos (LDL pequeña y densa, LDL oxidada y
apo B) como no lipídicos (glucosa en ayunas alterada, factores trombogénicos / hemostáticos y marcadores inflamatorios) pueden ayudar a mejorar la capacidad para predecir el
riesgo futuro y determinar el tratamiento cuando estos son
incluidos con los FR clásicos en el perfil de riesgo global (45).
Conclusión
Al comparar individuos con SM versus el grupo Control encontramos diferencias significativas para Insulinemia, el
índice de insulinorresistencia HOMA, Apolipoproteína B y Colesterol no-HDL. Estos parámetros deberían ser incluidos en
la evaluación de individuos portadores del SM a fin de detectar aquellos que tienen mayor probabilidad de desarrollar
Diabetes tipo 2 y ECV.
Al evaluar los niveles de fibrinógeno entre ambos grupos no
hallamos diferencias significativas, lo que puede deberse a
que este parámetro se asocie más a componentes de inflamación que a estado protrombótico. Quedaría pendiente por
estudiar los niveles de PAI1, factor que posee mayor correlación con actividad fibrinolítica.
Apolipoproteína B mostró una buena correlación con el Colesterol no-HDL. Mientras no se disponga de equipamiento
que permita le medición confiable de Apo B, los laboratorios
de baja complejidad como el nuestro, podríamos utilizar el
Colesterol no-HDL como estimador de todas las lipoproteínas aterogénicas.
Agradecimientos
A todo el personal de los Hospitales Madariaga y Pediátrico
de la ciudad de Posadas. A las Dra Graciela Lopez del Labo-
ratorio de Lípidos y Lipoproteínas de la FFyB de la UBA, a las
Dras Mariam Martínez y Ana Cantelli del Laboratorio del Sanatorio IOT de Posadas. A Laboratorios Wiener por proveer
parte de los reactivos utilizados en el presente trabajo.
BIBLIOGRAFÍA
1- Grundy S M. Metabolic Syndrome: Connecting and
Reconciling Cardiovascular and Diabetes Worlds.Journal of
the American College of Cardiology,47,6, 2006:1093-2000.
2- Haffner S. M., Valdez R. A., Hazuda H. P., Mitchell B.D.,
Morales P. A. and Stern M.P. Prospective Analysis of the
insulin-resistance syndrome (Sindrome X)Diabetes 1992;
41:715-722.
3-Kolanowski J. Pathophisiology and tratment of the
obesity-related arterial hypertension. Acta Clínica Bélgica
1992; 47 (14):18-25
4- Wasserman O and Grosso C. Síndrome metabólico de
riesgo vascular e hipertensión arterial. Medicina 1996;
56:183-194.
5- Backrounder 3:Metabolic Síndrome-driving the CVD
epidemic. International Diabetes Federation. 2005,16,www.idf.org.
6- Grundy S.M., Cleeman J.I. ,Daniels S.R., Donato K.A.,
Eckel R.H., Franklin B.A., Gordon D.J., Krauss R.M., Savage
P.J., Smith S.C., Spertus J.A. and Costa F. Diagnosis and
Management of the Metabolic Syndrome: An American
Heart Association / National Heart, Lung, and Blood Institute
Scientific statement. Circulation 2005,112,2735-2752.
7- Bloomgarden ZT. Definitions of the Insulin Resistance
Syndrome. Diabetes Care 2004; 27 (Nº3):824-830.
8- National Cholesterol Education Panel (NCEP). Adult
Treatment Panel III (ATP III). JAMA 2001;285:2486-97.
9- Grundy S.M, Cleeman J.I., Daniels S.R., Donato K.A.,
Eckel R.H., Franklin B.A., Gordon D.J.., Krauss R.M., Savage
P.J., Smith S.C., Spertus J.A. and Costa .F. Diagnosis and
management of the metabolic syndrome. An American
Heart Association / National Heart, Lung, and Blood Institute
Scientific Statement: Executive Summary. Circulation.2005;
112:e 285-e 290.
10- Backrounder 1: The IDF consensus worldwidw definition
of the metabolic syndrome. International Diabetes
Federation. 2005,1-6,www.idf.org.
11- Fleitas Esteves A.. Síndrome X. Alto riesgo de enfermedad
arterial.
Rev. Cubana Angiol. y Cir. Vasc. 2002; 3(1):68-74.
12- Gonzalez, C.D., Santoro, S.G., Sinay, I. Farmacología de
la Insulinorresistencia: Situación actual y perspectivas.
Revista Argentina de Endocrinonologia y Metabolismo. julio
2004. Vol 41. N° 3 (pag. 159-169)
13- Valmore Bermude P.; Climaco Cano P.; Mayerlim Medina
R.; Fernando Bermudez A.;Miguel Lemus A. Homeostasis
Model Assessment (HOMA) en Pacientes Diabéticos tipo 2.
Med. Int. (Caracas)2000; Vol.16 (3)
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 15 | 22
14- De Fronzo R. A., Tobin J.D., Andres R. The glucosa clamp
technique: a method for cuantificationof beta cell sensitivity
to glucosa and of tissue sensitivity to insulin. Am. J. Phisiol.
1979; E214-E223.
15- Skrha J, Haas T, Sindelka G, Prazny M, Widimsky J,
Cibula D, et al. Comparison of the insulin action parameters
from hyperinsulinemic clamps with homeostasis model
assessment and QUICKI indexes in subjects with different
endocrine disorders. J Clin Endocrinol Metab 2004;89:13541. [Medline].
16- Kamath S and Lip G.Y..Fibrinogen: biocemistry,
epidemiology and determinants.QJM 96:711-729,2003.
17- Braguinsky J. Síndrome Metabólico…¿enfermedad
metabólica?. Una mirada abierta desde la clínica. Asociación
Civil de Investigación y Desarrollo en Salud. Ed Médica
A.W.W.E.2006.
18- Sabeti S, Exner M, Mlekusch W, Amighi J, Quetienberger
P, Rumpold H, Maurer G, Minar E, Wagner O and schillinger M.
Prronostic impact of fibrinogen in carotid atherosclerosis.
Nonespecific indicator of inflammation or independent
predictor of disease progression?.Stroke,2005,36:14001404.
19- Anand S S, Yi Q, Gerstein H, Lonn E, Jacobs R, Vuksan V,
Teo K, Davis B, Montague P, Yusuf S. Relationship of Metabolic
Syndrome and fibrinolytic dysfunction to Cardiovascular
Disease. Circulation.2003; 108:420-425.
20- Reaven G.M. Compensatory hiperinsulinemia and the
development of an atherogenic lipoprotein profile: the
price to maintain glucose homeostasis in insulin-resistant
individuals. Endocrinol Metab Clin N.Am 34,2005: 49-62.
21- Berneis K, Rizzo M. LDL size: does it matter?. Swiss Med
Wkly,2004,134:720-724.
22- Carmena R, Duriez P, Fruchart J.Ch. Atherogenic
lipoprotein particles in atherosclerosis. Circulation,2004,109
suppl III: III 2-III 7.
23- Sniderman A.D. Applying apo B to the diagnosis
and therapy of the atherogenic dyslipoproteinemias: a
clinical diagnostic algorithm. Current Opin. Lipidol15:433438,2004.
24- Talmud P J, Hawe E, Miller G J, Humphries S E. Nonfasting
Apolipoprotein B and Triglyceride levels as a useful predictor
of Coronary Heart Disease Risk in middle-aged UK men.
Arterioscler Thromb Vasc Biol.2002;22:1918-1923.
25- Gotto A M, Whitney E, Stein E A, Shapiro D R, Clearfiel M,
Weis S, Jou J Y, Langendorfer, Beere P A, Watson D J, Downs J
R and Cani J S. Relation between baseline and on-treatment
lipid parameters and first acute major coronary events in
the air force/Texas Coronary Atherosclerosis Prevention
Study(AFCAPS/TexCAPS).Circulation,200;101:477-484.
26- Walldius G and Jungner I. The apoB/apoA-I ratio: a strong,
new risk factor for cardiovascular disease and a target for
lipid-lowering therapy-a review of the evidence, Journal of
internal Medicine 2006; 259:493-519.
27- Lind L, Vessby B, Sundström J. The Apolipoprotein B/A1
ratio and the Metabolic Syndrome independently predict risk
Pág | 21
for Myocardial Infarction in middle-aged men. Arterioscler
Thromb Vasc Biol.2006;26:406-410.
28- SalimYusuf, Steven Hawken, Stephanie Ounpuu, Tony
Dans, Alvaro Avezum, Fernando Lanas, Matthew McQueen,
Andrezj Budaj, Pren Pais. Effects of potentially modifiable
risk factor associated with myocardial infarction ion 52
countries (the INTERHEART study). Case Control Study.
29- Physical status: the use and interpretation of
anthropometry. Report of a WHO Expert Committee. Geneva,
World Health Organitation. WHO Technical Report Series,
N°.854. 1993:429-430.
30- Pickering T.G, Hall J.E., Appel L.J., Falkner B.E., Graves
J., Hill M.N., Jones D.W., Kurtz T., Sheps S.G., and Roccella
E.J. Recommendation for blood pressure measurements in
humans and experimental animals. Part 1 : Blood Pressure
Measurements in Humans. Hypertension 2005,45: 142161.
31-RuibalG.ConsensosobrediagnósticodeInsulinorresistencia.
Revista de Endocrinología Ginecológica y Reproductiva.,2004:
24-26
32- Bloomgarden ZT. The 1st World Congress on the Insulin
Resistance Syndrome. Diabetes Care 2004;27 (Nº2):602609.
33- .Kuczmarski RJ, Carroll MD, Flegal KM, Troyano RP.
Varying body mass index cut-off points to describe
overweight prevalence among U.S. Adults: NHANES III (1988
to 1994). Obes Res 1997;5:542-8.[Medline]
34- Reilly MP; Rader D J. The Metabolic syndrome. More Than
the Sum of this Parts?. Circulation. 2003; 108:1546-1551.
35- Skrha J, Haas T, Sindelka G, Prazny M, Widimsky J,
Cibula D, et al. Comparison of the insulin action parameters
from hyperinsulinemic clamps with homeostasis model
assessment and QUICKI indexes in subjects with different
endocrine disorders. J Clin Endocrinol Metab 2004;89:13541. [Medline]
36- Mertens I, Verrijken A, Michiels J J, Van der Planken
M, Ruige J B and Van Gaal L F. Among inflammation and
coagulation markers, PAI-1 is a true component of the
metabolic syndrome. International Journal of Obesity,
2006, 30,1308-1314.
37- Sakkinen P.A., Wahl P., Cushman M, Lewis M.R. and
Tracy R.P.Clustering of procoagulation, inflamattion,and
fibrinolysis variables with metabolic factors in Insulin
Resistance Syndrome.American J. Epidemiol,vol52,Nº10,2
000,897-907.
38- Paterno C.A. Los enigmas del Fibrinógeno y la enfermedad
coronaria. Rev Fed Arg Cardiología.29:515-517, 2000.
39- Grundy S.M. Approach in lipoproteic management in
National Cholesterol Education Panel (NCEP) 2001.Am. J.
Cardiology, 2002; 90(supply):11i-21i.
40- Genest J, Frohlich J, Fodor G, McPherson R.
Recommendations for the management of dislipidemia
and the prevention of cardiovascular disease:2003 update.
CMAJ 2003; 168(9):921-924.
41- Sattar N, Williams K, Sniderman A D, D’Agostino R, Haffner
Insulinemia, Modelo de Evaluación Homeostática (HOMA), Fibrinógeno, Apolipoproteína B y Colesterol no-HDL en el Síndrome Metabólico
S M. Comparison of the associations of Apolipoprotein B
and non-High Density Lipoprotein Cholesterol with other
cardiovascular risk factors in patients the Metabolic
Syndrome in the Insulin resistance Atherosclerosis Study.
Circulation.2004;110:2687-2693.
42- Rallidis L.S., Pitsavos C, Panagiotakos D.B, Sinos L,
Stefamadis C, Kremastinos D. Non-high density lipoprotein
cholesterol is the best discriminator of myocardial infarction
in young individuals. Atherosclerosis 179 (2005):305-309.
43- Williams K, Sniderman A D, Sattar N, D’Agostino
R, Wagenknecht L E, Haffner S M. Comparison of the
associations of Apolipoprotein B and Low-Density
Lipoprotein Cholesterol with other cardiovascular risk
factors in the Insulin Resistance Atherosclerosis Study
(IRAS).Circulation,2003;108: 2312-2316.
44- Denke M.A. Low-Density Lipoprotein Cholesterol and NonHigh Density Lipoprotein Cholesterol versus Apolipoprotein
B as the best predictor for Coronary Heart Disease and the
best measure of therapy. Circulation.2005; 112: 33683370.
45- Fruchart J.CH, Nierman M.C, Stroes E, Kastelein J. and
Duriez P, New risk factors for atherosclerosis and patiernte
risk assessment. Circulation,2004,109 suppl III : III-15- III19.
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 23 | 26
Pág | 23
Dislipidemia y nefropatía diabética
Sandra Arriaga1
Adriana Monje2
Beatriz Bouvet3
Griselda Della Rosa4
Cecilia Paparella5
Adriana Almará6
1 Doctora en Bioquímica
2 Médica nefróloga
3 Bioquímica
4 Médica
5 Bioquímica
6 Doctora en Bioquímica
Lugar de Trabajo:
Facultad de Ciencias Bioquímicas y
Farmacéuticas. Universidad Nacional de
Rosario.
Enviar Correspondencia a:
Adriana M. Almará
Facultad de Ciencias Bioquímicas y
Farmacéuticas
Suipacha 531
S2002LRK-ROSARIO
ARGENTINA
TE:0341-4350661
e-mail: almara@ibr.gov.ar
Revista ByPC. Incorporada al Latindex.
ISSN 1515-6761 Código Bibliográfico: RByPC
Trabajo Recibido: 6-10-06 Aceptado: 28-12-06
RESUMEN
La nefropatía diabética (ND) se asocia generalmente con dislipidemia que puede
contribuir a una mayor morbimortalidad por complicaciones cardiovasculares. En
este trabajo se compararon las características del perfil lipídico entre dos grupos
de pacientes con diabetes mellitus tipo 2 de más de 5 años de evolución: grupo
con Nefropatía Clínica (proteinuria>500 mg/24 h; n=21) y grupo Control no proteinúrico (n=26). No se observaron diferencias estadísticamente significativas
entre ambos grupos en edad, sexo, duración de la diabetes, presión arterial, % de
hemoglobina glicosilada, colesterol (C) total y C-LDL. El grupo con Nefropatía Clínica presentó mayores niveles séricos (mg/dl) de triglicéridos que el grupo Control
(245±129 vs. 145±97 respectivamente; p<0,005) y menores niveles de C-HDL
(38±13 vs. 46±12 respectivamente; p<0,05). La hipertrigliceridemia y la disminución del C-HDL evidencian un perfil lipídico aterogénico que podría coadyuvar a la
patogenia de la ND.
Palabras claves | diabetes mellitus tipo 2, dislipidemia, nefropatía diabética.
SUMMARY
Diabetic nephropathy (DN) is known to be associated with dyslipidemia which can
contribute to increase the morbimortality by cardiovascular complications. In this
study, we compared the characteristics of the lipid profile between two groups of
type 2 diabetic patients with more than 5 years of evolution: Clinical Nephropathy
group (proteinuria>500 mg/24 h; n=21) and non-proteinuric Control group
(n=26). Both groups had similar age, male to female ratio, blood pressure, % of
glycosylated hemoglobin, total cholesterol (C) and LDL-C. The Clinical Nephropathy
group showed significantly higher serum levels (mg/dl) of triglycerides than the
Control group (245±129 vs. 145±97 respectively; p<0.005) and lower levels of
HDL-C (38±13 vs. 46±12 respectively; p<0.05). This atherogenic lipid profile,
characterized by hypertriglyceridemia and low HDL-C, could contribute to the ND
pathogenesis.
Keywords | type 2 diabetes mellitus, dyslipidemia, diabetic nephropathy
Insulinemia, Modelo de Evaluación Homeostática (HOMA), Fibrinógeno, Apolipoproteína B y Colesterol no-HDL en el Síndrome Metabólico
INTRODUCCIÓN
MÉTODOS
La nefropatía diabética (ND) constituye la etiología más
frecuente de insuficiencia renal crónica en el mundo occidental y la principal causa de ingreso a hemodiálisis (1,2).
Aproximadamente el 25% de los pacientes con diabetes mellitus (DM) tipo 1 (3) y el 40 % de los pacientes con DM tipo
2 (4) desarrollan ND. Esta asociación aumenta la morbimortalidad por complicaciones de origen macrovascular (5,6)
y microvascular (7).
La nefropatía diabética (ND) se define como el aumento
en la excreción urinaria de albúmina (EUA) en ausencia
de otras enfermedades renales. La evolución natural de la
ND presenta dos estadios secuenciales: microalbuminuria
(EUA=30-299 mg/24 h) y macroalbuminuria o nefropatia
clínica (NC) (EUA>300 mg/24 h o proteinuria>500 mg/24
h) (1).
La DM tipo 2 se asocia generalmente con un tipo de dislipidemia, conocida como “dislipidemia diabética”, la cual
se caracteriza por aumento de los triglicéridos (TG) séricos, disminución del colesterol (C) de lipoproteínas de alta
densidad (HDL) y preponderancia de la fracción pequeña y
densa de las lipoproteínas de baja densidad (LDL) (8,9,10).
Estas alteraciones lipídicas son aún más severas en los
pacientes con ND y se deben tanto al efecto inductor que
ejerce la albuminuria sobre la síntesis de lipoproteínas de
muy baja densidad (VLDL) como a una disminución en el
catabolismo de las mismas (9,10). Por otra parte, aunque la
hiperglicemia, el aumento de la presión arterial y la predisposición genética son los principales factores de riesgo para
el desarrollo de la ND (11), la dislipidemia podría contribuir
a la progresión del daño renal una vez que este es iniciado
(12,13,14).
El objetivo de este trabajo fue estudiar las características
del perfil lipídico en la etapa clínica de la ND en pacientes
con DM tipo 2.
Pacientes. Se estudiaron 47 pacientes con DM tipo 2 de más
de 5 años de evolución. Los pacientes se clasificaron en dos
grupos: a) grupo con NC (n=21) y b) grupo Control no proteinúrico (n=26). Se excluyeron los pacientes bajo tratamiento hipolipemiante así como aquellos con hematuria, piuria o
ultrasonido renal anormal. El protocolo de estudio fue aprobado por el Comité de Bioética de la Facultad de Ciencias
Bioquímicas y Farmacéuticas.
Parámetros bioquímicos. Se extrajo sangre venosa luego de
un ayuno de 12 h y se realizaron las siguientes determinaciones: C, C-HDL, C-LDL y TG séricos por métodos enzimáticos (Wiener lab) y hemoglobina glicosilada (HbA1c) por
cromatografía de intercambio iónico (Biosystems S. A.). El
clearance de creatinina se determinó por método cinético y
la proteinuria, en orina aislada y de 24 h, por método turbidimétrico con ácido tricloroacético. La NC se definió como la
presencia de proteinuria>500 mg/24 h (1). Para los lípidos
se consideraron como valores deseables los recomendados
por el Adult Treatment Panel III (ATP III) para la población
diabética: C total<200 mg/dl, C-HDL>40 mg/dl, C-LDL<100
mg/dl, TG<150 mg/dl (15).
Análisis estadístico. Los datos son presentados como promedio ± DS o mediana (rango). Los grupos se compararon
utilizando la prueba t de Student o la prueba U de Mann Whitney. Se consideró significativo un valor de p<0,05.
RESULTADOS
En la tabla 1 se muestran las características clínicas y bioquímicas de los pacientes en estudio. Puede observarse
que no se encontraron diferencias estadísticamente significativas entre ambos grupos en edad, sexo, duración de la
diabetes, presión arterial y % de HbA1c. Sin embargo, el gru-
Tabla 1. Características clínicas y bioquímicas de los pacientes estudiados
Características clínicas
Nefropatía Clínica (n=21)
Control (n=26)
Edad (años)
66±7
69±8
Sexo (masculino/femenino)
8/13
11/15
11 (5-16)
10 (5-17)
Presión arterial sistólica (mm Hg)
135±2
130±3
Presión arterial diastólica (mm Hg)
78±2
76±2
7,8 (5,1-12,9)
7,6 (5,8-15,1)
Proteinuria (g/24 hs)
4,9±2,5
No correspondea
Clearance de Creatinina (ml/min)
47±24
98±10*
Duración de la DM (años)
HbA1c (%)
Los resultados se expresan como promedio ± DS o mediana (rango). aNo corresponde realizar la proteinuria de
24 h cuando no se detecta proteinuria en la orina aislada. *p<0,0001.
Pág | 25
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 23 | 26
Concentración (mg/dl)
Figura 1. Análisis del perfil lipídico en los grupos de
pacientes estudiados.
Se determinaron por métodos enzimáticos los niveles séricos de C total, C-HDL, C-LDL y TG en el grupo con NC y en
el grupo Control. Cada valor representa el promedio ± DS.
* p<0,05 y ** p<0,005 con respecto al grupo Control.
po con NC presentó un menor clearance de creatinina que el
grupo Control, evidenciando un grado variable de deterioro
de la función renal.
Al analizar el perfil lipídico de ambos grupos de pacientes
(Fig. 1), se observó que sólo el grupo con NC mostró mayores valores de TG y menores niveles de C-HDL que los
recomendados por el ATP III para la población diabética, presentando ambos grupos de pacientes valores de C-LDL levemente superiores a los especificados. Además, el grupo con
NC evidenció un aumento de TG y una disminución de C-HDL
con respecto al grupo Control. Por otra parte no se encontraron diferencias significativas entre ambos grupos en los
niveles de C total y C-LDL, aunque estos valores tendieron a
ser mayores en el grupo con NC.
DISCUSIÓN
En el presente estudio se encontró que los pacientes diabéticos tipo 2 con NC muestran un perfil lipídico caracterizado
por hipertrigliceridemia y bajos niveles de C-HDL. Este grupo
de pacientes presentó un grado variable de falla renal y las
alteraciones lipídicas observadas se correspondieron con
la dislipidemia de la enfermedad renal crónica, la cual se
caracteriza por niveles normales de C-LDL, hipertrigliceridemia y C-HDL disminuido (16). El perfil lipídico encontrado en
los diabéticos con NC en el presente trabajo es comparable
al observado por otros autores en pacientes con insuficiencia renal crónica, tanto de etiología diabética como de otros
orígenes (17). Se ha demostrado que en la ND la hipertrigliceridemia se debe principalmente a una disminución en el
catabolismo de las lipoproteínas ricas en TG dado que, como
consecuencia de la disfunción endotelial generalizada, la
lipoproteinlipasa muestra una actividad reducida (18). El
aumento en la producción hepática de VLDL también puede
contribuir a la hipertrigliceridemia en sujetos proteinúricos
(9,10).
Por otra parte el hallazgo de valores similares de HbA1c en
los dos grupos de pacientes estudiados sugiere que el grado
de control glicémico no influyó en el aumento de los TG observado en el grupo con NC.
La hipertrigliceridemia constituye un factor de riesgo independiente de enfermedad coronaria (19) y por lo tanto podría contribuir al aumento de la morbimortalidad de causa
cardiovascular en los pacientes con ND. En la DM tipo 1 se ha
sugerido que una concentración de TG séricos elevada es un
factor predictivo independiente de la aparición o el agravamiento de las complicaciones renales (13). La hipertrigliceridemia ejercería en parte su efecto deletéreo induciendo la
producción de LDL pequeñas y densas, las cuales son más
susceptibles a la oxidación promoviendo la generación de
peróxidos de lípidos que producen daño endotelial (8). En
la microcirculación renal, la hipertrigliceridemia favorecería,
además, la captura de lipoproteínas ricas en TG, principalmente VLDL, por las células mesangiales lo cual aceleraría
la injuria renal (20).
En conclusión, el grupo con NC estudiado presentó un perfil
lipídico aterogénico que podría no sólo aumentar el riesgo
cardiovascular sino también contribuir a la progresión de la
ND. Un tratamiento hipolipemiante debería implementarse
tempranamente para prevenir estas complicaciones.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
1. Gross JL, Mirela J, Silveiro S, Canani L, Caramori ML,
Zelmanovitz T. Diabetic Nephropathy: Diagnosis,Prevention,
and Treatment. Diabetes Care 2005; 28: 176-188.
2. Remmuzi G, Schieppati A, Ruggenenti P. Nephropathy
in patients with type 2 diabetes. N Engl J Med 2002; 346:
1145-1151.
3. Hovind P, Tarnow L, Rossing K, Rossing P, Eising S, Larsen
N, Binder C, Parving H Decreasing incidence of severe
diabetic microangiopathy in type 1 diabetes. Diabetes Care
2003; 26: 1258-1264.
4. Yokoyama H, Okudaira M, Otani T, Sato A, Miura J, Takaike
H, Yamada H, Muto K, Uchigata Y, Ohashi Y, Iwamoto Y. Higher
incidence of diabetic nephropathy in type 2 than in type 1
diabetes in early-onset diabetes in Japan. Kidney Int 2000;
58: 302-311.
5. Sasso FC, De Nicola L, Carbonara O, Nasti R, Minutolo R,
Salvatore T, Conte G, Torella R. Cardiovascular risk factors
and disease management in type 2 diabetic patients with
diabetic nephropathy. Diabetes Care 2006; 29: 498-503.
6. Bo S, Ciccone G, Rosato R, Gancia R, Grassi G, Merletti F,
Pagano GF. Renal damage in patients with Type 2 diabetes:
a strong predictor of mortality. Diabet Med 2005; 22: 258265.
Insulinemia, Modelo de Evaluación Homeostática (HOMA), Fibrinógeno, Apolipoproteína B y Colesterol no-HDL en el Síndrome Metabólico
7 Chan JC, Cheung CK, Cheung MY, Swaminathan R, Critchley
JA, Cockram CS. Abnormal albuminuria as a predictor of
mortality and renal impairment in Chinese patients with
NIDDM.
Diabetes Care 1995; 18: 1013-1016.
8. Goldberg IJ. Diabetic Dyslipidemia: Causes and
Consequences. J Clin Endocrinol Metab 2001; 86: 965-971.
9. Trovati M, Cavalot F. Optimization of hypolipidemic and
antiplatelet tratmente in the diabetic patient with renal
disease. J Am Soc Nephrol 2004; 15: S12-S20.
10. Molitch ME. Management of dyslipidemias in patients
with diabetes and chronic kidney diseases. Clin J Am Soc
Nephrol 2006; 1: 1090-1099.
11. Schrijvers BF, De Vriese AS, Flyvbjerg A. From
Hyperglycemia to Diabetic Kidney Disease: The Role of
Metabolic, Hemodynamic, Intracellular Factors and Growth
Factors/Cytokines. Endocrine Reviews 2004; 25: 9711010.
12. Thomas M, Rosengárd-Bárlund M, Mills V et al. Serum
lipids and the progression of nephropathy in type 1 diabetes.
Diabetes Care 2006; 29: 317-322.
13. Hadjadj S, Duly-Bouhanick B, Bekherraz A, Bridoux F,
Gallois Y, Mauco G, Ebran JM, Marre M. Serum triglycerides are
a predictive factor for the development and the progression
of renal and retinal complicationd in patients with type 1
diabetes. Diabetes Metab 2004; 30: 43-51.
14. Bruno G, Merletti F, Biggeri A, Bargero G, Ferrero S,
Pagano G, Cavallo Perin P. Progression to overt nephropathy
in type 2 diabetes: The Casale Monferrato Study. Diabetes
Care 2003; 26: 2150-2155.
15. Executive Summary of the Third Report of the National
Cholesterol Education Programm (NCEP) Expert Panel
on Detection, Evaluation, and Treatment of High Blood
Cholesterol in Adults (Adult Treatment Panel III). JAMA 2001;
285: 2486-2497.
16. Locatelli F, Pozzoni P, Tentori F, Del Vecchio L.
Epidemiology of cardiovascular risk in patients with chronic
kidney disease. Nephrol Dial Transplant 2003; 18: vii2–vii9.
17. Massy ZA, Khoa TN, Lacour B, Descamps-Latscha B,
Khoa Man N, Jungers P. Dyslipidemia and the progression of
renal disease in chronic renal failure patients. Nephrol Dial
Transplant 1999; 14: 2392-2397.
18. Kashiwazaki K, Hirano T, Yoshino G, Kurokawa M, Tajima
H, Adachi M. Decreased Release of Lipoprotein Lipase Is
Associated With Vascular Endothelial Damage in NIDDM
Patients with Microalbuminuria. Diabetes Care 1998;
21:2016–2020.
19. Fruchart JC; Duriez P.HDL and triglyceride as therapeutic
targets. Therapy and clinical trials. Curr Opin Lipidol 2002;
13: 605-616.
20. Bonnet F, Cooper ME. Potential influence of lipids in
diabetic nephropathy: insights from experimental data and
clinical studies. Diabetes Metab 2000; 26: 254-264.
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 27 | 30
Pág | 27
Rango de referencia para las lipoproteínas de baja
densidad oxidadas en embarazadas normolipémicas
Stella M. Daniele1
María de los Ángeles Valdés2
Héctor F. Pelusa3
Adriana M. Caille4
Adriana M. Almará5
René Dimónaco6
Jorge Renzi7
Sandra M. Arriaga8
Sergio A. Ghersevich9
1 Dra. en Bioquímica
2 Bioquímica
3 Dr. en Bioquímica
4 Licenciada en Química
5 Dra. en Bioquímica
6 Médico
7 Doctor en Medicina
8 Dra. en Bioquímica
9 Dr. en Bioquímica
Lugar de Trabajo:
Facultad de Ciencias Bioquímicas y
Farmacéuticas. Universidad Nacional de
Rosario
Enviar Correspondencia a:
Sergio A. Ghersevich
Facultad de Ciencias Bioquímicas y
Farmacéuticas
Suipacha 531
S2002LRK - Rosario
Argentina
TE 0341-4804592
e-mail: sghersev@fbioyf.unr.edu.ar
Revista ByPC. Incorporada al Latindex.
ISSN 1515-6761 Código Bibliográfico: RByPC
Trabajo Recibido: 8-10-06 Aceptado: 7-01-07
RESUMEN
El embarazo puede asociarse a dislipidemia y estrés oxidativo con la subsiguiente peroxidación lipídica que resultaría en un aumento de las lipoproteínas de baja
densidad oxidadas (LDLox), el cual podría contribuir a diversas complicaciones,
tales como el aborto o la eclampsia. El objetivo del trabajo fue la obtención de un
rango de referencia para los niveles plasmáticos de LDLox en embarazadas sanas
y normolipémicas (n=27), con un tiempo de gestación comprendido entre el primer y segundo trimestre. Se determinaron los niveles de colesterol (C) total, C-HDL
y triglicéridos por métodos enzimáticos y el C-LDL por la fórmula de Friedewald. La
LDLox plasmática se determinó mediante un ELISA competitivo. Los resultados se
expresaron como unidades (U) LDLox, estableciéndose un rango de referencia de
1,0 a 2,6 ULDLox. El intervalo obtenido en la población en estudio nos permitirá
analizar el potencial valor predictivo de los niveles de LDLox en la evaluación del
embarazo de riesgo.
Palabras claves | Embarazo- LDL oxidada- estrés oxidativo
SUMMARY
Pregnancy can be associated to dyslipidemia and oxidative stress leading to
lipid peroxidation that results in an increase of oxidated low-density lipoproteins
(oxLDL), which could contribute to different complications, such as abortion and
eclampsia. The aim of this work was to obtain a reference interval for plasma levels
of oxLDL in healthy, normolipemic pregnant women (n=27), in their first or second
trimester of pregnancy. Plasma total cholesterol (C), HDL-C and triglycerides
levels were determined by enzymatic methods, while C-LDL was calculated by
the Friedewald formula. Plasma oxLDL level was determined by competitive ELISA.
Results were expressed as oxLDL units (oxLDLU), and a reference interval ranging
from 1.0 to 2.6 oxLDLU was established. The interval obtained in the studied
population shall allow us analyse the potential predictive value of oxLDL levels in
the evaluation of risky pregnancy.
Keywords | Pregnancy – oxidated LDL – oxidative stress
Rango de referencia para las Lipoproteínas de baja densidad oxidadas en embarazadas normolipémicas
INTRODUCCIÓN
El embarazo es una condición que muestra una elevada susceptibilidad al estrés oxidativo, el cual se define como un
disturbio en el balance prooxidante-antioxidante a favor del
primero, determinando un riesgo potencial para aborto y preeclampsia (1,2). Durante el período gestacional se observa
un incremento en el consumo basal de oxígeno y cambios en
los sustratos energéticos utilizados por los diferentes órganos incluyendo la unidad fetoplacentaria. La placenta, muy
rica en mitocondrias, consume alrededor del 1% de la tasa
basal metabólica de la mujer embarazada (1), está muy vascularizada y expuesta a altas presiones parciales de oxígeno
materno. Estas características explican, en parte, la generación de anión superóxido, ya que alrededor del 5% de todos
los electrones de la cadena respiratoria mitocondrial escapan fuera de la mitocondria (3). El estrés oxidativo origina,
entre otras alteraciones, una modificación oxidativa de las
lipoproteínas de baja densidad (LDL), un importante paso en
el desarrollo de la aterosclerosis (4). Cuando las LDL están
oxidadas son captadas por los macrófagos, vía el receptor
“scavenger”, lo que promueve la formación de células espumosas y el desarrollo de lesiones ateroscleróticas, iniciando
la disfunción endotelial y la oclusión vascular (5-7).
Se ha demostrado que en la preeclampsia se incrementa la
peroxidación lipídica en la placenta y disminuye la actividad
de las enzimas antioxidantes superóxido dismutasa y glucosa 6-fosfato-deshidrogenasa (8). Otros investigadores
han observado que la peroxidación lipídica aumenta significativamente en el primer trimestre de la gestación y en los
casos de aborto espontáneo, es ligeramente mayor que en
el embarazo normal (9).
Previamente establecimos el intervalo de referencia para
los niveles plasmáticos de LDL oxidada (LDLox) en la población normal (10). El objetivo de este trabajo fue la obtención
de un rango de referencia para la LDLox en embarazadas
sanas y normolipémicas, lo cual nos permitirá analizar el
potencial valor predictivo de los niveles de este parámetro
en la evaluación del embarazo de riesgo.
MATERIALES Y MÉTODOS
Pacientes: se incluyeron en el presente estudio 27 embarazadas sanas evaluadas clínicamente en el Servicio de Obstetricia
del Hospital Provincial del Centenario, normolipémicas según
el según el Adult Treatment Panel III (ATP III), con un tiempo de
gestación comprendido entre el primer y segundo trimestre.
Previo consentimiento, se extrajeron muestras de sangre entera para la obtención de suero y plasma usando EDTA como
anticoagulante. El protocolo de estudio fue aprobado por el Comité de Ética del Hospital Provincial del Centenario.
Métodos:
Perfil lipídico: Se determinaron los niveles séricos de colesterol (C) total, C-HDL y triglicéridos (TG) por métodos enzimá-
ticos (Wiener Lab) y de C-LDL por la fórmula de Friedewald.
Según recomendaciones del ATP III (11), se consideraron
normolipémicas aquellas pacientes que presentaron valores de: C total < 200 mg/dl; C-HDL > 40 mg/dl; C-LDL < 130
mg/dl y TG < 150 mg/dl.
Elisa para LDL ox: Los niveles plasmáticos de LDLox se determinaron mediante un ensayo de ELISA competitivo previamente desarrollado por nuestro grupo (10). Para ello se
separó la LDL de muestras de plasma humano por ultracentrifugación secuencial y se la sometió a un proceso de oxidación con CuSO4. La LDLox así obtenida se utilizó como antígeno para la sensibilización de placas de poliestireno (Costar
USA) compitiendo con la LDLox proveniente de las muestras
por una cantidad constante de anticuerpos (Ac) anti-LDLox
policlonales (origen conejo, desarrollado en nuestro laboratorio). Los Ac fijados a la placa se revelaron mediante un
Ac a-IgG de conejo-peroxidasa (DakoCytomation, Glostrup,
Dinamarca), y el agregado de sustrato cromógeno 3,3’,5,5’tetrametilbencidina-H2O2 (Sigma Chemical Co., Saint Louis,
MO). La reacción se detuvo con H2SO4 2N, detectándose el
producto final a 450 nm. Las densidades ópticas (DO) obtenidas se compararon con la de un control con Ac a-LDLox en
el cual se omitió el agregado de la muestra (100% de unión).
Los resultados se expresaron como unidades (U) LDLox definidas como el cociente DO control/DO muestra.
Los resultados fueron expresados como promedio ± DS. El
rango de referencia se calculó como el promedio ± 2 DS.
RESULTADOS
En la Tabla 1 se muestran los resultados obtenidos para el
perfil lipídico de las pacientes estudiadas. Como puede observarse, la muestra analizada cumplió con los criterios de inclusión en el rango normolipémico establecidos por el ATP III.
En el Gráfico 1 se observan los niveles plasmáticos de LDLox
obtenidos en cada una de las muestras analizadas. Los valores mínimo y máximo hallados fueron 1,1 ULDLox y 2,5
Tabla 1. Perfil lipídico de las pacientes
estudiadas.
Se determinaron los niveles séricos de C total,
C-HDL y TG por métodos enzimáticos y C-LDL por
la fórmula de Friedewald en el grupo estudiado
(n=27). Cada valor representa el promedio ± DS.
Parámetro
C total
C-HDL
C-LDL
TG
Concentración (mg/dl)
177 ± 28
61 ± 15
94 ± 21
109 ± 41
C: colesterol;TG: triglicéridos
Pág | 29
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 27 | 30
Figura 1. Niveles plasmáticos de LDLox en embarazadas sanas y normolipémicas.
Se determinaron los niveles plasmáticos de LDLox en el grupo en estudio (n=27) mediante un ELISA competitivo.
Los resultados se expresaron como unidades ULDLox definidas como el cociente DO control/DO muestra.
El rango de referencia obtenido (promedio ± 2 DS) fue: 1,0 a 2,6 ULDLox.
ULDLox, respectivamente, obteniéndose un promedio de
1,8 ULDLox y un DS de 0,4 ULDLox. El rango de referencia
establecido fue de 1,0 a 2,6 ULDLox (promedio ± 2 DS).
El intervalo de referencia obtenido en este estudio para los niveles plasmáticos de LDLox nos permitirá analizar su potencial valor predictivo en la evaluación del embarazo de riesgo.
DISCUSIÓN
BIBLIOGRAFÍA
Las alteraciones del embarazo relacionadas con desórdenes placentarios se presentan casi exclusivamente en la
especie humana. Estos desórdenes, los cuales afectan alrededor de un tercio de los embarazos humanos, incluyen
sobre todo el aborto y la preeclampsia (12). Hay evidencias
crecientes de que el estrés oxidativo o el desbalance en la
actividad oxidante/antioxidante de la unidad fetoplacentaria, juegan un rol importante en las complicaciones del embarazo (12). El desequilibrio en el balance oxidante-antioxidante origina un tejido más vulnerable a la injuria por las
especies oxígeno reactivas, las cuales conducen a la formación de peróxidos lipídicos que alteran las membranas celulares incrementando la incorporación de C, C-LDL y ácidos
grasos libres oxidados (13). Los peróxidos lipídicos están
directamente involucrados en mediar la disfunción endotelial materna por incrementar la producción de tromboxano
A2 y la expresión de moléculas de adhesión en la circulación
materna periférica y en la útero-placentaria (8,14-17). Los
niveles de peróxidos lipídicos en la circulación materna son
superiores a los encontrados en el estado no gravídico, aún
en el embarazo normal, indicando un cierto grado de estrés
oxidativo fisiológico (8, 14-17). Los ácidos grasos libres están aumentados en la preeclampsia desde 15 a 20 semanas
antes del comienzo de la enfermedad clínica (18) y son particularmente sensibles a la oxidación, pudiendo contribuir a
la susceptibilidad materna al estrés oxidativo.
1. Sies H. En: Sies H, ed. Oxidative stress: Oxidants and
antioxidants. Pp XV-XXII. London, San Diego: Academic
Press, 1991.
2. Page KR. The Physiology of Human Placenta. Pp 164-9.
London, UK: UCL Press Limited, 1993.
3. Fridivich I. Hypoxia and oxygen toxicity. Adv Neurol 1979;
26: 255-9.
4. Toescu V, Nuttall SL, Martin U, Nightingale P, Kendall MJ,
Brudon P, Dunne F. Changes in plasma lipids and markers
of oxidative stress in normal pregnancy and pregnancies
complicated by diabetes. Clin Sci 2004; 106: 93-8.
5. Dejager S, Brukert E, Chapman MJ. Dense LDL subsecies
with diminished oxidative resistance predominate in
combined hyperlipidaemia. J Lipid Res 1993; 34: 295-308.
6. Rajman I, Eacho PI, Chowienczyk PJ, Ritter JM. LDL particle
size: an important drug target? Br J Clin Pharmacol 1999;
48: 125-133.
7. Steinberg D, Parthasarathy G, Carew TE, Khoo JC, Witztum
JL. Beyond cholesterol. Modifications of low density
lipoprotein that increase its atherogenicity. N Engl J Med
1989; 320: 915-24.
8. Poranen AK, Ekblad U, Uotila P, Ahotupa M. Lipid
peroxidation and antioxidants in normal and pre-eclamptic
pregnancies. Placenta 1996;17: 401-5.
9. Yoshioka T, Ando M, Taniguchi K, Yamasaki F, Motoyama
H. Lipoperoxidation and antioxidant substances in the
Rango de referencia para las Lipoproteínas de baja densidad oxidadas en embarazadas normolipémicas
human placenta during gestation. Nippon Sanka Fujinka
Gakkai Zasshi 1990; 42: 1634-40.
10.Pelusa H, Valdés M, Salas B, Daniele S, Arriaga S, Almará
A, Caille A, Ghersevich S. Desarrollo de ELISA competitivo
para la determinación de lipoproteínas de baja densidad
oxidadas en plasma. Medicina 2005; 65 (Supl. II): 96.
11. Executive Summary of the Tirad report of the National
Colesterol education Programm (NCEP) Expert Panel on
Detection, evaluation, and treatment of High Blood Colesterol in
Adults (Adult Treatment Panel III). JAMA 2001; 285: 2486-97.
12.Jauniaux E, Poston L, Burton GJ. Placental-related
diseases of pregnancy: involvement of
oxidative stress and implications in human evolution. Hum
Reprod 2006;12: 747-55.
13.Hubel CA, Roberts JM, Taylor RN, Musci TJ, Rogers GM,
McLaughlin MK. Lipid peroxidation in pregnancy: New
perspectives on preeclampsia. Am J Obstet Gynecol 1989;
161: 1025-34.
14. Uotila JT, Tuimala RJ, Aarnio TM. Findings on lipid
peroxidation and antioxidant function in hypertensive
complications of pregnancy. Br J Obstet Gynaecol 1993;
100: 270-6.
15. Walsh SW, Wang Y. Trophoblast and placental villous
core production of lipid peroxides, thromboxane, and
prostacyclin in preeclampsia. J Clin Endocrinol Metab 1995;
80:1888-93.
16. Myatt L, Rosenfield RB, Eis ALW, Brockman DE, Greer
I, Lyall F. Nitrotyrosine residues in placenta. Evidence of
peroxynitrite formation and action. Hypertension 1996; 28:
488-93.
17. Wang Y, Walsh SW. Increased superoxide generation is
associated with decreased superoxide dismutase activity
and mRNA expression in placental trophoblast cells in
preeclampsia. Placenta 2001; 22: 206-12.
18. Lorentzen B, Endersen MJ, Clausen T, Henriksen T.
Fasting serum free fatty acids and triglycerides are increased
before 20 weeks of gestation in women who later develop
preeclampsia. Hypertens Pregnancy 1994; 13:103-9.
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 31 | 35
Pág | 31
Streptococcus agalactiae como responsable de
patologías distintas a las materno neonatales
A. Caraffini1
C. Nóbile1
M. Figueroa1
R. Costamagna2
1 Bioquímica Especialista en
Microbiología
2 Técnica de Laboratorio Clínico e
Histopatológico
Lugar de Trabajo:
Laboratorio de Microbiología del Hospital
Nuestra Señora De la Misericordia.
Belgrano 1500-Córdoba. ArgentinaX5000JRD-TE 0351-4344107
Enviar Correspondencia a:
Boulevard Illia 49 3ª A
5000-Córdoba, Argentina.
E-mail:bioanaca@hotmail.com
RESUMEN
Objetivo: evaluar la importancia de Streptococcus agalactiae (EGB) como causa
de enfermedad no sólo en neonatos y embarazadas, sino también en adultos
susceptibles, alertar sobre la presencia de este germen y las implicancias de la
infección que causa a fin de establecer estrategias para un buen diagnóstico y
manejo terapéutico.
Realizamos un estudio retrospectivo descriptivo del 2000 al 2005. El total de
muestras positivas para EGB en pacientes ambulatorios e internados, fue 63,
pertenecientes a, 7 neonatos, 20 embarazadas y puérperas, 4 mujeres adultas
no embarazadas y 32 hombres.
En pacientes adultos no embarazados se identificó EGB en 13 muestras de orina,(
37,1 % ), 7 de piel y partes blandas (20 %), 7 hemocultivos( 20%) , 4 de tracto
genital (11,4 % ) 3 de líquido abdominal (8,6 %) y una secreción ocular, (2,9% ).
Los factores de riesgo más importantes para adquirir infección en estos
pacientes fueron: diabetes 26 pacientes (41.3%); etilismo, 1 paciente ( 1,6%);
no determinados, 9 pacientes (14,3% ).
Concluyendo, el mayor porcentaje de aislamientos proviene de orina, seguido de
bacteriemias y piel y partes blandas; todos monomicrobianos.
Hubo mayor porcentaje de recuperación en bacteriemias de pacientes adultos,
que en embarazadas, puérperas y neonatos.
Es importante realizar la sensibilidad antibiótica y la serotipificación.
SUMMARY
Revista ByPC. Incorporada al Latindex.
ISSN 1515-6761 Código Bibliográfico: RByPC
Trabajo Recibido: 18-11-06 Aceptado: 15-01-07
Streptococcus agalactiae as responsible of pathologies other from maternalneonatal ones
Aim: to evaluate the importance of Streptococcus agalactiae (GBS) as cause not
only of infections in neonates and pregnants, but also in susceptibles adults;
to alert about the presence of this microorganism and the consequences of
the infection it causes in order to establish strategies for a good diagnosis and
therapy.
A descriptive-retrospective study was performed between 2000 and 2005. There
were 63 positive samples for GBS in hospitalised population and outpatients: 7
from neonates; 20 from pregnants and puerperas; 4 from non-pregnant adult
women and 32 adult men.
In non-pregnant adult patients GBS was identified in 13 urine samples (37,1%),
7 skin and soft tissue samples (20%), 7 blood cultures (20%), 4 genital tract
samples (11,4%), 3 abdominal fluid cultures (8,6%) and 1 ocular sample.
Risk factors included were: Diabetes mellitus, 26 (41,3%) patients; alcoholism 1
(1,6%) patients; indeterminate 9 (14,3%) patients.
Conclusion: the major percentage of isolates proceeded from urinary tract
infections, following bacteremia, and skin and soft tissues infections, all of them
as the only isolate.
GBS was found mostly in non-pregnant adults bacteremias rather than in those
from pregnants, puerperas and neonates.
Streptococcus Agalactiae como responsable de patologías distintas a las materno neonatales
INTRODUCCIoN:
Streptococcus grupo B o Streptococcus agalactiae (EGB)
es una causa importante de infección grave en neonatos y
niños menores de tres meses. También produce patologías
en embarazadas y de manera creciente infección invasiva en adultos, fundamentalmente en mayores de sesenta
años y con alguna enfermedad de base.
La colonización vaginal y anorrectal en las embarazadas se
correlaciona con las infecciones neonatales por esta bacteria. La principal vía de transmisión del microorganismo es el
canal de parto colonizado, aunque también se puede producir por infección intrauterina y adquisición nosocomial post
parto. En los neonatos es un patógeno importante que causa neumonía, sepsis y meningitis con un alto índice de mortalidad.. En las madres es agente etiológico de infecciones
intrauterinas, endometritis, fiebre post parto, infecciones
urinarias y bacteriemias (1,2)
En los últimos años EGB se reconoce como patógeno emergente en pacientes adultos no embarazados. Las infecciones por EGB se presentan generalmente, como complicaciones de otras patologías de base, en particular, diabetes, hepatopatìas, cáncer, alteraciones neurológicas, alcoholismo,
esplenectomias e insuficiencia cardíaca o renal. Las manifestaciones clínicas más frecuentes son las infecciones de
piel y tejidos blandos, bacteriemias sin foco séptico evidente, endocarditis, infecciones del tracto urinario, meningitis
e infecciones osteoarticulares (1, 2,3,4, 5, 6, 7, 8, 9, 10, 11,
12 13, 14.).
El Hospital Nuestra Señora de la Misericordia es un hospital
polivalente que posee servicios de ginecología-obstetricia
y neonatología, pero además atiende una población de pacientes con enfermedades de base que, según literatura,
podrían ser factores de riesgo para la infección por EGB. De
éstas las más importantes en número de pacientes son diabetes, cáncer, HIV y alcoholismo.
años, excepto uno, que fue un niño de 5 años; el origen de
las muestras fue tanto de pacientes ambulatorios, como de
internados, atendidos en la institución. Sólo se tuvieron en
cuenta aislamientos de muestras clínicamente representativas.
RESULTADOS:
De los 63 aislamientos 11,1% correspondió a muestras provenientes de neonatos, 31,7 % a embarazadas y puérperas,
6,34% a mujeres adultas no embarazadas, 50,8 % a hombres. Ver Gráfico 1.
El origen de las muestras se detalla en la Tabla 1. Los aislamientos fueron: orina 28 (44.4%), sangre 13 (20.6%), piel
y partes blandas 8 (12.7%), líquido abdominal 3 (4,8%),
Gráfico 1: Porcentaje de aislamientos de EGB
obtenidos de infecciones invasivas
entre 2000 y 2005
Tabla 1: Origen de los aislamientos de sgb.
OBJETIVOS:
Nuestro objetivo fue evaluar la importancia del EGB como
causa de enfermedad no sólo en neonatos y embarazadas,
sino también en adultos susceptibles, alertar sobre la presencia de este germen y las implicancias de la infección que
causa a fin de establecer estrategias para un buen diagnóstico y manejo terapéutico.
MATERIALES Y MÉTODOS:
Se realizó un estudio retrospectivo descriptivo desde enero de 2000 a diciembre de 2005. El total de muestras positivas para EGB fue 63, pertenecientes a, 7 neonatos, 20
mujeres embarazadas y puérperas, 4 mujeres adultas no
embarazadas y 32 hombres, todos adultos mayores de 45
Materiales
Liquido Cefalorraquídeo
Número de
aislamientos (%)
2 (3.2%)
Sangre
13 (20.6%)
Orina
28 (44.4%)
Piel y Partes Blandas
8 (12.7%)
Liquido Abdominal
3 (4.8%)
Secreción de Endometrio
2 (3.2%)
Secreciones Vaginales y Uretrales
2 (3.2%)
Abscesos Tracto Genital
3 (4.8%)
Otros
2 (3.2%)
Total
63 (100%)
Pág | 33
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 31 | 35
absceso de tracto genital 3 (4, 8%), secreción de endometrio 2 (3,2%), secreciones vaginal y uretral 2 (3,2%), líquido
cefalorraquídeo .2(3,2%), otros 2 (3,2%), uno de los cuales
provenía de una secreción ótica de un niño y una secreción
ocular de un paciente adulto.
Los factores de riesgo más importantes para adquirir infección fueron: diabetes 26 pacientes (41.3%); embarazo 20
pacientes (31,7%); neonatos 7 pacientes (11,1%); etilismo,
1 paciente ( 1,6%); no determinados, 9 pacientes (14,3%).
Ver Tabla 2.
En pacientes adultos no embarazados se identificó EGB en
13 muestras de orina, ( 37,1 %), 7 de piel y partes blandas
(20 %), 7 hemocultivos ( 20%), 4 de tracto genital (11,4 %) 3
de líquido abdominal (8,6 %) y una secreción ocular, (2,9%).
Ver Tabla 3.
DISCUSIoN
El rol de Streptococcus agalactiae como potencial patógeno
se ha reconocido ampliamente en países industrializados
(1), sin embargo en países en desarrollo no se informa con
frecuencia la infección por esta bacteria.
En nuestro estudio, teniendo en cuenta solamente los aislamientos de adultos no embarazados, el mayor porcentaje
de aislamientos proviene de orina (13), le siguen piel y partes blandas(7), bacteriemias(7); luego los materiales del
tracto genital(4) y por último una secreción ocular perteneciente a un paciente adulto diabético y una secreción ótica de un niño de 5 años, del cuál se desconocía si existían
factores predisponentes.
El significado de encontrar EGB en orina aún es difícil de
valorar. En la población obstétrica su asociación es clara,
aumenta el riesgo de aborto espontáneo, rotura prematura
de membranas, endometritis e infección, y según las recomendaciones para la prevención, diagnóstico y tratamiento de la infección precoz por EGB del Ministerio de Salud y
Ambiente de la Nación deben recibir profilaxis antibiótica
intra parto. En la población adulta no embarazada existen
estudios que refieren que el aislamiento en orina se relaciona con alteraciones del tracto urinario (cálculos, hipertrofia
prostática, y otros) y enfermedades graves (cirrosis hepática, insuficiencia renal crónica, diabetes y otras). La realización de una punción suprapúbica nos ayudaría a establecer
definitivamente el papel del EGB como patógeno urinario
(6). En nuestro caso seis de los trece aislamientos de orina
corresponden a pacientes diabéticos lo cual se marca como
un factor predisponente.
El porcentaje de EGB detectado en infecciones de piel y
partes blandas en este caso fue menor que lo reportado
por otros autores (15,16,17). Esta diferencia de casuística
puede deberse a que en nuestro hospital estos materiales
provienen principalmente de pacientes con infecciones de
herida quirúrgica sin factores de riesgo que lo predispongan
a infecciones por EGB.
Tabla 2: Distribución de las muestras de acuerdo
a los factores de riesgo.
Factores de riesgo
Número de
aislamientos (%)
Neonatos
7 (11.1%)
Embarazadas y puérperas
20 (31.7%)
Diabéticos
26 (41.3%)
Etilista
1 (1,6%)
Otros
9 (14,3%)
Tabla 3: Porcentaje de aislamientos de egb en
adultos no embarazados
Materiales
Orina
Número de
aislamientos (%)
37,1%
Piel y partes blandas
20%
hemocultivos
20%
Tracto genital
11,4%
Secreción ocular
2,9%
Líquido abdominal
8,6%
De los trece casos de bacteriemias, seis correspondieron
a neonatos o embarazadas y puérperas, seis a pacientes
diabéticos y uno a un hombre adulto del que no se conocen
datos. Es importante destacar que el porcentaje de recuperación en embarazadas, puérperas y neonatos fue menor
que en pacientes adultos con otros factores de riesgo.
En pacientes con infecciones de cavidad abdominal, EGB se
recuperó en tres casos, dos de líquido abdominal de pacientes diabéticos, y uno de un etilista con cirrosis.
Otras localizaciones relacionadas con enfermedad de base
fueron endometrio, dos aislamientos en puérperas, dos provenían de secreciones genitales, uno vaginal y uno uretral
pertenecientes a pacientes diabéticos, en los cuales EGB se
aisló como flora única, de secreción purulenta, habiéndose
descartados otros agentes causales.
Hubo tres punciones de absceso de glándula de Bartolino,
correspondientes a dos pacientes diabéticas no embarazadas, y uno a una embarazada.
En nuestra casuística no se registró ningún aislamiento de
EGB en pacientes HIV positivo.
Durante los años en que se realizo el estudio no se determinó la sensibilidad antibiótica de los aislamientos.
A pesar de que EGB continúa siendo sensible a penicilina ha
sido demostrada tolerancia a éste antibiótico en algunas ce-
Streptococcus Agalactiae como responsable de patologías distintas a las materno neonatales
pas, por lo cual el uso combinado de penicilina o ampicilina
con algún aminoglucósido ha sido sugerido en infecciones
graves producidas por este microorganismo. (1,16).
Los porcentajes de resistencia de clindamicina y eritromicina varían de acuerdo al país en estudio (4 a 30%), en
Argentina la resistencia a eritromicina es de 6%, mientras
que a clindamicina es de 4,5%; por lo cual sería importante
conocer la sensibilidad a éstos antibióticos, ya que son el
tratamiento de elección para los pacientes alérgicos a penicilina. (18)
El EGB presenta además de antígeno polisacárido común
que le caracteriza como perteneciente al grupo B de Lancefield, antígenos polisacáridos específicos y antígenos
proteicos, que permiten su clasificación en serotipos. Todos
los aislamientos del EGB expresan el polisacárido capsular
siendo identificados nueve tipos diferentes. Los cuatro serotipos capsulares más importantes son Ia, Ib, II y III (16,
19).
Conocer los serotipos predominantes determina su comportamiento epidemiológico, pues los serotipos tienen propiedades diferentes de virulencia y causan morbi-mortalidad
menor o mayor.
Asimismo es importante establecer el serotipo que circula
en la población ya que sería útil para desarrollar vacunas
que generen títulos altos de anticuerpos protectores que
pueden prevenir la infección.
Sin embargo en nuestro nosocomio la serotipificación no se
realizó por cuestiones de costo.
En cuanto a los factores de virulencia el principal es la cápsula, especialmente con actividad antifagocítica, otro factor
importante son las proteínas de superficie (Ag C α y β) encargadas de dar inmunidad protectora, otras proteínas de
superficie de importancia son Rib, Scp ( C5 a peptidasa),
Lmb, Fb5a, Sip, CspA. Csb1, algunas de estas participan en
estadios tempranos de la infección debido a su habilidad
para promover la unión a componentes de la matriz extracelular, otros intervienen en los estadios tardíos de la invasión
evadiendo la inmunidad del huésped (18,20).
Todas las personas que tengan defectos específicos de la
inmunidad, por ejemplo los pacientes que padecen diabetes, cáncer e infecciones por HIV tienen mayor riesgo de sufrir infecciones por EGB.
Los esplenectomizados son más susceptibles a presentar
sepsis fulminante debido a que EGB es una bacteria encapsulada (8). A su vez los neonatos están expuestos por la inmadurez de su sistema inmune. (1,19).
Estos hallazgos, al igual que los de otros autores ponen en
evidencia la necesidad de dejar de considerar a EGB como
un patógeno oportunista casi exclusivo de neonatos, embarazadas y puérperas .En la actualidad EGB ocupa un lugar
destacado como agente causal de infecciones invasivas en
pacientes con algún grado de compromiso inmunológico o
con factores predisponentes , por lo que es importante tenerlo en cuenta para realizar un correcto diagnóstico microbiológico
BIBLIOGRAFiA
1) Crespo Ortiz, María, Vélez Juan Diego. “Importancia clínica del Streptococcus agalactiae como causante de infección”. Colombia Medica .1996; 27: 53-8.
2) Picard F.J, Bergeron M.G. “Laboratory detection of
group B Streptococcus for prevention of perinatal disease”.
Eur.J.Clin.Microbiol.Infect.Dis. 2004; 23: 665-671.
3) De la Rosa Fraile Manuel, De Cueto López Marina. “Prevención de la infección neonatal por Streptococcus agalactiae. Un tema consolidado. “ Enferm. Infecc. y Microbiol.
Clin.2003; 21 (4). 171-173
4) Roca B, Ardasmal L H. “Endocarditis por Streptococcus
agalactiae”. Semg.2000; 20 . 77-78.
5) Diaz Peña R., Espinosa Oliva MR. “Osteoartritis por
Streptococcus agalactiae en una escolar.Informe de un
caso y revisión de la literatura.”Enferm..Infecc. y Microbiol.
Clin..2004; 24. (3)
6) Hernáiz Carmen, Antón Nieves, Alós Juan Ignacio y Col.
“Significado clínico del aislamiento de Streptococcus agalactiae de orina de pacientes de centros de salud.” Enferm.
Infecc.Microbiol.Clin.2004;22 (2).89-91.
7) Schuchat Anne. “Epidemiology of Group B Streptococcal Disease in the United States: Shifting Paradigms.”.Clin.
Microbio.Rev.1998;11 (3) 497-513.
8) Balderramo Domingo C, Bertoli Ana M, Paganinil Miguel
A y Col. “Poliartritis y tenosinovitis grave por Streptococcus agalactiae en un paciente con hipoesplenia funcional”.
Medicina.(Buenos Aires) 2002.Vol 62 n 4.
9) Peña Jiménez D, De la Torre Lima J, Prada Pardal JL y
Col. “Endoftalmitis y abscesos cerebrales múltiples en un
paciente con endocarditis por Streptococcus agalactiae “
An.Med.Interna (Madrid) 2001Vol 18 N 7.
10) Alvarez Navascués R, Sánchez Cembellín M, Carrio Montes I y Col. “Pericarditis purulenta por Streptococcus agalactiae” An.Med.Interna (Madrid) 2005.Vol 22 n 4.
11) Harrison Lee, Afsar Alí, Dwyer Diane y Col. “Relapsing
invasive Group B Streptococcal infection in adultos” Ann.
Intern.Med.1995;123:421-427.
12) Edwards MS, Baker CJ “Streptococcus agalactiae
(Group B Streptococcus) .En: Mandell GL, Bennett JE, Dolin
R (Ed), Principles and practices of infections diseases . Vol.
2 Fifth Ed. Churchill Livingstone, USA, p. 2156-2167.
13) Faclkam RR, Carey RB: Streptococci and aerococci. In
Lennette EH (ed): Manual of Clinical Microbiology, 4 th ed,
pp 154-175. Washington, DC, American Socie0.ty for Microbiology, 1985
14) Bailey Scott. Diagnóstico Microbiológico . 7ª Edición.
Editorial Médica Panamericana .Año 1989
15) Peirotti M.G, Gonzalez S.E, Littvik A.M. “Infecciones por
estreptococos grupo B en adultos excluyendo infecciones
genitales”.Rev.Arg.Microbiol.2002. 32:226-229.
16) Lopardo H, Vidal P, Jeric P y Col. “Six- month multicenter
study on invasive infections due to Group B Streptococci in
Argentine” J.Clin Microbiol. 2003. Vol 41 N 10 4668-4694.
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 31 | 35
17) Farley M, Harvey C, Stull T y Col. “A population-bassed
assessment of invasive disease due to Group B Streptoccocus in nonpregnat adults. New England Jour. Med 1993. Vol
328 N 25 .1807-1811.
18) Di Bartolomeo S, Gentile M, Priore G y Col. “Streptococcus agalactiae en embarazadas .Prevalencia en el Hospital
Alejandro Posadas.” Rev.Arg.Microbiol. 2005. Vol 37:142144.
19) Lindahl y Col. “Surface proteins of Streptococcus agalactiae”.Clin Microbiol,Rev. 2005. Vol 18 103-127.
20) Farinatti Alicia “Factores de virulencia de Streptococcus Grupo B con importancia en las infecciones neonatales”
Asociación Argentina de Microbiología .2001. 7-10.
Pág | 35
Determinación de hematíes dismórficos con microscopio óptico convencional
Determinación de hematíes dismórficos con microscopio óptico convencional
Rodríguez Aranciva, Ma. Del Valle1
Salgado, Ma Susana2
Izurieta, Ma Soledad3
Novoa, Pablo4
Orías, Marcelo5
Barzón, Silvia6
1-Bioquímica Especialista en Nefrología y
Medio Interno
2-Bioquímica Especialista en Nefrología y
Medio Interno
3-Bioquímica Especialista en Nefrología y
Medio Interno
4-Dr. en Nefrología y Medio Interno
5-Dr. en Nefrología y Medio Interno
6-Bioquímica Especialista en Inmunología.
Estadística
Lugar de Trabajo:
Laboratorio de Enfermedades Renales
(LER).
Servicio de Nefrología, Sanatorio Allende.
Independencia 678. Nueva Córdoba.
Córdoba. Argentina.
Enviar Correspondencia a:
María del Valle Rodríguez Aranciva
Edison 2383. Yofre Norte. CP: 5012
Córdoba. Argentina
e-mail: maviroar@hotmail.com
Revista ByPC. Incorporada al Latindex.
ISSN 1515-6761 Código Bibliográfico: RByPC
Trabajo Recibido: 06-11-06 Aceptado: 28-12-06
RESUMEN
En muchas ocasiones, la hematuria es microscópica, asintomática, siendo
diagnosticada ocasionalmente por un control de rutina.
Motivados por la experiencia adquirida durante diez años en la observación de
hematurias, con microscopio óptico de luz convencional y la correlación con los
diagnósticos que poseían los pacientes, decidimos evaluar la concordancia entre
nuestro método estandarizado y el método de observación con microscopio con
contraste de fase, para el diagnóstico de hematuria glomerular. Las muestras
de orina fueron procesadas por ambos métodos a la vez y clasificadas según
sus características morfológicas en no glomerulares y glomerulares Nosotros
obtuvimos una concordancia muy buena entre ambos métodos para hematurias
glomerulares y no glomerulares con k = 0,94, p < 0,00001, sensibilidad de
100% y especificidad de 95,8%); en la observación de acantocitos fue k =
0,96 p < 0,00001, sensibilidad de 92,6% y especificidad de 100%. Con los
resultados obtenidos sugerimos que nuestro método estandarizado es válido
para el diagnóstico diferencial de hematurias ya que posee gran sensibilidad y
especificidad con respecto al método con contraste de fase.
SUMMARY
In many ocasions, the haematuria is microscopic, asymptomatic, being
occasionally diagnoses on a rutine basis.
The aim of the present work was to evaluate the agreement among our
standardized method and the observation with phase conttrast microscope, for
the diagnose of glomerular haematuria.
The samples of urines processed by both methods at same time were classified
according to its not glomerular and glomerular morphological characteristics.
We obtained a very good agreement among both method for glomerular and not
glomerular haematuria with k = 0.94, p<0.0001 sensibility of 100% and specificity
of 95,8%.
The agreement among both method for acanthocytes was k = 0.96, p<0.00001,
sensibility of 92.6% and specificity of 100%.
With the obtained results we suggest that our standardized method is been
worth for the differential diagnoses of haematuria because it possesses greater
sensibility and specifity than phase contrast method.
Pág | 37
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 36 | 41
INTRODUCCIoN
La hematuria, macro o microscópica, es un signo y manifestación frecuente en enfermedades uronefrológicas, cuya incidencia en niños varía de 0,5 - 4% y en adultos del 10 - 20%. (1,2)
“Se define como hematuria a la presencia de un número ≥ 4
hematíes por campo, con objetivo de 40x, ocular 10x, en orina fresca, y centrifugada”.
Sobre el número de hematíes por campo no hay consenso,
pueden variar de 2 a 6 hematíes por campo, según el autor o
equipos de trabajo que lo definan. (1,2,3,4,5,6)
“La detección de hemoglobina en la tira reactiva ≥ 1+ deberá
corroborarse en dos o más muestras de orina seriadas, descartando la presencia de mioglobina y hemólisis intravascular.” Este hallazgo en tira reactiva, debe confirmarse siempre
con el examen microscópico de la orina.
La clasificación de hematuria puede realizarse de diferentes
maneras: según su intensidad, momento de aparición, si se
presenta sola o asociada a otros signos clínicos, según su localización anatómica o su etiología. Para un correcto diagnóstico
hace falta una buena anamnesis, examen físico, estudios complementarios de diversa complejidad, algunos sencillos, otros
invasivos y/o costosos, hasta llegar a la biopsia renal, siendo
ésta el “gold standart” en el diagnóstico de lesión glomerular.
El grado de hematuria no se relaciona con la gravedad de la
enfermedad ni permite saber si su origen es glomerular o no
glomerular.
En muchas ocasiones, la hematuria es microscópica, el color
de la orina es amarillo de apariencia normal, asintomática y
sin acompañamiento de proteinuria, siendo diagnosticada
ocasionalmente por un control de rutina.
El examen del sedimento urinario es un método sencillo y valioso en el diagnóstico de hematurias asintomáticas. Una vez
confirmada la hematuria, es importante determinar su origen,
glomerular (G) o no glomerular (NG), para poder definir el tratamiento a seguir, por lo que el estudio del dismorfismo eritrocitario adquiere importancia para tal fin.
“La hematuria glomerular o parenquimatosa, está definida
por la presencia en orina, de hematíes que han sufrido cambios en su tamaño, contenido de hemoglobina o en su membrana, adquiriendo características específicas”. Estos hematíes dismórficos o glomerulares son modificados por acciones
mecánicas, osmóticas y enzimáticas luego de atravesar los
glomérulos y túbulos renales. (5).
En la búsqueda de métodos sencillos, no invasivos, son varios
las técnicas de laboratorio propuestas para el diagnóstico
diferencial de hematurias G de NG: marcación inmunohistoquímica de la proteína de Thamm-Horsfall para hematíes de
origen G(7)(8); valoración según el tamaño de los hematíes
urinarios en contador hematológico (2)(9) y métodos microscópicos como observación en microscopio con contraste
de fase (MCF) (10), en microscopio con barrido láser (11), o
en microscopio óptico de luz convencional (MOC) (12).
La microscopía por contraste de fase es el método más recomendado para el estudio de dismorfismo eritrocitario. (
1,2,3,4,5,6,10). Hay diversidad de criterios para definir el
valor límite del porcentual de dismorfismo eritrocitario indicativo de lesión glomerular. Un porcentaje ≥ 20% es el recomendado por la mayoría de los estudios, pero en la literatura ese
valor puede variar entre el 10% - 80%; con sensibilidades entre
el 21% - 95%; y especificidades entre el 75% - 100% en adultos.
(1)(13)(14)
En estudios pediátricos, los valores adoptados son similares, comprendidos entre 20% - 80% de dismorfia glomerular,
con sensibilidad de 52% - 100% y especificidad entre 51% 100% (1)
Los acantocitos o hematíes mixtos, son aquellos hematíes
que presentan más de una dismorfia específica en sí mismo. Cuando están presentes en un porcentaje ≥ 5%, dan
diagnóstico preciso de lesión glomerular (sensibilidad de
52 %; especificidad de 98%) (15)(16)
La experiencia en nuestro laboratorio nos permitió observar,
que existía una muy buena correlación entre las dismorfias
observadas al MOC, y el número de pacientes que poseían
lesiones glomerulares de diferente índole.
OBJETIVO
Nuestro objetivo fue evaluar el grado de concordancia entre
el método diagnóstico de hematurias glomerulares al microscopio con contraste de fase y el método con microscopio de luz convencional, realizado por personal bioquímico
especializado.
MATERIALES Y MÉTODOS
Orinas hematúricas según criterios de inclusión y exclusión
Densímetro, Tiras reactivas Multistix, porta objetos y cubre
objetos
Microscopio óptico de luz convencional ARCANO, provisto
con equipo para observación con contraste de fase., objetivos 10x – 40x – 100x y oculares 10x y 15x.
Procedimiento pre-analítico:
A los pacientes se les solicita
• No realizar ejercicios físicos el día previo al estudio,
para evitar inducir hematuria por esfuerzo físico.
• Orinar temprano en su domicilio, retener de 2 a 3 horas
y tomar la muestra en el laboratorio.
• Asepsia de la zona genital, para poder recolectar la orina como para urocultivo.
• A las mujeres se le indica el uso de tampón vaginal, al
momento de tomar la muestra y evitar posibles contaminaciones.
Criterios de inclusión:
• Orinas hematúricas, de pacientes con antecedentes
de hematurias o hallazgo casual.
• Orinas con densidades comprendidas entre 10101020, según densímetro
Determinación de hematíes dismórficos con microscopio óptico convencional
Criterios de exclusión
• Orinas con pH ≥7.0, determinado con tira reactiva.
• Orinas con densidades <1010 y > a 1020.
• Orinas que presentasen posible infección urinaria.
• Mujeres en período menstrual ± 5 días.
• Orinas procedentes de bolsas recolectoras.
Procedimiento analitico
Las muestras se procesaron dentro de los primeros 60
minutos de recolectadas. Se midió la densidad con densímetro. Se determinó la presencia de hemoglobina con tiras
reactivas.
Se centrifugaron 10 ml de cada muestra durante 5´ a 1000
r.p.m.; descartamos el sobrenadante, aproximadamente 9,5
ml, resuspendiendo el sedimento en los 0,5 ml restantes
colocando 20 ul aproximadamente entre porta y cubre para
mirar al microscopio.
El sedimento urinario se realizó utilizando objetivo 40x y
ocular 10x.
Para la determinación de la dismorfia eritrocitaria, en el MOC
se utilizó el objetivo 40x y ocular 15x, bajando bien el condensador que permite aumentar el contraste.
En la determinación de la dismorfia eritrocitaria, con MCF
utilizamos objetivo 40x y ocular 15x, con el equipo correspondiente.
Al observar las muestras, elegimos un campo al azar, prime-
ro las observamos con MOC y luego al mismo campo con el
MCF.
Los hematíes observados fueron clasificados según sus características morfológicas en NG (isomórficos, estrellados,
septados, gigantes, fantasmas) y G (vacíos, anulares, espiculados, polidiverticulados y acantocitos).
Para cada muestra, se realizaron 2 cuadros, uno para cada
método, sobre los cuales se anotaban los elementos observados según la clasificación de hematíes descripta.
A partir de ellos se armó, para cada muestra, una tabla de
concordancia entre métodos.
Del total de las muestra procesadas, observamos 4350 hematíes, ordenados en una tabla de concordancia entre los
métodos de observación con MCF y MOC, incluyendo el total
de los elementos analizados (Tabla Nº 1)
A partir de esta tabla general se calculó el índice la concordancia sólo para hematíes no glomerulares y aparte para
hematíes glomerulares.
Calculamos índice de concordancia para isomorfia, dismorfia inespecífica, vacíos, anulares y otras dismorfias específicas (Tabla Nº 2); índice de concordancia para hematíes G y
hematíes NG (Tabla Nº 3); por último índice de concordancia
para hematíes no ACAN y hematíes acantocitos (Tabla Nº 4).
Se calculó sensibilidad (S), especificidad (E) y sus respectivos intervalos de confianza, falsos positivos (FP), falsos negativos (FN), valor predictivo positivo (VPP) y valor predictivo negativo (VPN) para la determinaciones de “hematurias
glomerulares de no glomerulares” y “acantocitos”
Tabla Nª1: Concordancia entre los métodos de observación con MCF y MOC
MOC: Microscopio de luz convencional; MCF: Microscopio con equipo de contraste de fase; ISOM: isomórficos,
EST: estrellados; SEP: septados; GIG: gigante; FAN: fantasma; VAC: vacíos; ANU: anulares; ESP: espiculados;
POL: polidiverticulados; ACAN: acantocitos. (k = 0,99; p<0,00001 para hematurias no glomerulares y k = 0,96;
p< 0,001 para la dismorfia glomerular)
Pág | 39
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 36 | 41
TABLA Nº2: Tabla de concordancia entre elementos isomórficos, dismórficos inespecíficos, vacíos,
anulares y otros dismórficos específicos
La concordancia entre los hematíes isomórficos y los de dismorfia inespecífica, con respecto a los
vacíos, anulares y otros dismórficos específicos fue de k = 0,95; p < 0,0001; FP =114 (hematíes vacíos y
anulares).
Metodo estadistico
Para el análisis estadístico se utilizó el programa Epi Info
6.0. La concordancia se calculó con el coeficiente Kappa (k);
un índice k = 1 indica una concordancia perfecta.
Se calculó Sensibilidad, Especificidad, VPP y VPN. Los intervalos de confianza de la sensibilidad y especificidad se calcularon según Fleiss. Se consideró significativo un valor de
p < 0.05.
Resultados
Con las tablas de concordancia de cada muestra observada,
se efectuó una tabla general de concordancia entre ambos
métodos, con el total de los elemento observados (TABLA
Nº 1), a partir de la cual calculamos el índice la concordancia
sólo para hematíes no glomerulares y aparte para hematíes
glomerulares.
Calculamos índice de concordancia para isomorfia, dismorfia inespecífica, vacíos, anulares y otras dismorfias específicas (TABLA Nº 2); índice de concordancia para hematíes G
y hematíes NG (TABLA Nº 3); por último índice de concordan-
cia para hematíes no acantocitos y hematíes acantocitos
(TABLA Nº 4).
Discusión
El método estandarizado de observación con el microscopio
óptico de luz convencional, es sencillo, económico y no invasivo para el diagnóstico de hematurias glomerulares, requiriendo personal bien entrenado. La ventaja con respecto al
método con MCF, es su accesibilidad.
Las muestras de orinas deben ser procesadas rápidamente, aunque esto afecte la organización del laboratorio, para
evitar cambios en la morfología de los hematíes por efectos
del pH o su concentración.
Para mejorar la visualización del tamaño y la morfología de
los hematíes se debe utilizar en el microscopio, un ocular de
15x y la luz del condensador bien baja.
Un inconveniente que presenta el método es el tiempo de
observación que puedan requerir algunas muestras, como
el bajo contenido de hematíes, o la presencia de elementos
que enmascaren o distorsionen el tipo de hematuria.
En algunos muestras determinar el porcentaje de dismor-
Tabla Nº3: Concordancia entre métodos para hematíes glomerulares y no glomerulares
El índice de concordancia k = 0,94, p < 0.00001, sensibilidad 100 % , IC (99,7–100%); especificidad 95,8 %, IC
(95 – 96,5 %); VPP = 93,3 % y VPN = 100 %, FP=115 (hematíes glomerulares), FN=0
Determinación de hematíes dismórficos con microscopio óptico convencional
TABLA 4: Tabla de concordancia en la determinación de Acantocitos
Concordancia en la determinación de acantocitos k = 0,96, p < 0.00001, Sensibilidad 92,6 %, IC (88,7 – 95,3);
especificidad 100 %, IC (99,8 – 100); VPP = 99,6 % y PN = 99,5 %, FP = 1 y FN = 20.
fia específica se complica, independientemente del método
usado, por la presencia de microcoagulos pues no es fácil
determinar que tipo de hematíes lo forman, pudiendo cometer errores por defecto o exceso en su recuento. En estos
casos adquiere mucha importancia la búsqueda de cilindros
hemáticos.
Podemos citar revisiones y trabajos realizados por el grupo
de Robert Koene., donde afirma que el método de observación con MOC posee sensibilidad y especificidad semejante a las obtenidas con el MCF al momento de diagnosticar
hematurias glomerulares, remarcando la importancia de un
operador bien entrenado (1) (12) (17)(18)
No hemos encontrado en la literatura trabajos con valor estadístico que indiquen la concordancia entre ambos métodos o comparen el poder diagnóstico de los mismos.
Al calcular k entre los métodos de observación, sólo para
hematíes de origen no glomerular la concordancia fue perfecta, demostrando que para este tipo de elementos, la observación con MOC no presenta dificultades.
La determinación de k sólo para los hematíes con dismorfia específica de daño glomerular demostró una muy buena
concordancia entre ambos métodos.
Observamos que la mayor diferencia en el recuento de los
elementos estaba en los hematíes vacíos y anulares, estos eran sobreestimados en la observación con MOC, evidenciando alguna dificultad en su diferenciación, confundiéndolo con elementos que en realidad son normales. No
obstante, el calculo de k nos indica que nuestro método de
observación en el MOC, para el reconocimiento de hematíes
vacíos y anulares, mantiene una muy buena concordancia
con lo observado al MCF.
Cuando agrupamos a los hematíes en “no glomerulares y
glomerulares”, obtuvimos un índice de concordancia k muy
bueno con una sensibilidad de 100% y una especificidad de
95.8% para hematíes glomerulares.
Los elementos determinados como falsos positivos de todos los hematíes glomerulares, coinciden en su mayoría
con los falsos positivos de los elementos vacíos y anulares,
marcando la causa de la discordancia en la comparación de
los métodos.
Cuando cotejamos los métodos en la observación de acantocitos, elementos diagnóstico de lesión glomerular, pode-
mos decir que el método de observación elegido posee una
alta sensibilidad y es muy específico al momento de definir
si un elemento es o no acantocito.
De acuerdo a los resultados obtenidos, podemos decir que el
método de observación con MOC, implementado en nuestro
laboratorio para diagnóstico de hematuria glomerulares, es
muy sensible y de alta especificidad, con resultados comparables a los obtenidos con el MCF, validándolo como método
para el fin antes expuesto.
Conclusiones
El método diagnóstico estandarizado para la determinación
de hematuria glomerular en microscopio de luz convencional, utilizado en nuestro laboratorio, tiene una muy buena
concordancia con el método diagnóstico de observación al
microscopio con contraste de fase, requiriendo de un operador experimentado para ser de este un método altamente
sensible y específico.
BIBLIOGRAFÍA
1- Importância do dismorfismo eritrocitário na
investigação da origem da hematúria:
Revisão da literatura. Leonardo de Souza VasconcellosI;
Maria Goretti Moreira Guimarães PenidoII;
Pedro Guatimosim VidigalIII J. Bras. Patol. Med. Lab. vol.41 no.2 Rio de Janeiro Apr. 2005
2- Evaluation of Asymptomatic Microscopic Hematuria
in Adults. Timothy R. Thaller, M.D University of Kansas
Medical Center, Kansas City, Kansas
Lester P. Wang, M.D. Valley Urology Center, Renton,
Washington. Publisher by The American Academy of
Family Fysician. Vol. 60/No. 4. September, 15, 1999.
3- Hematuria. R. Hernández y J. Martín Capítulo 11
www.aeped.es/protocolos/nefro/0- Indice.pdf
4- Hematuria. Alfonso Latiff Conde. Sección de Urología.
Santa Fe de Bogotá. Capitulo V
www.fepafem.org.ve/Guias_de_Urgencias/Alteraciones_
genitourinarias_ y_ginecologicas/Hematuria.pdf.
Pág | 41
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 36 | 41
5- Impacto del binomio dismorfia / isomórfia en el
diagnóstico de patologías Uronefrológicas.Dalet, F.
Manual. docenciamir. Cht.es Capitulo 72
6- Localización de la hematuria: técnica de laboratorio
no invasiva. F. Dalet , T. Segovia y G. Del Río. Formación
continuada de A.E.F.A. Laboratorio 6111/90, 159-169.
7- Pathophysiology of Tamm-Horsfall protein. JR. Hoyer,
MW Seiler. Germany, West. Kidney International 16(3):
279-89, 1979 Sep.
8- Distinction between renal and nonrenal hematuria using
immunoperoxidase staning of erythrocytes in urine for
Tamm-Horsfall Protein. Jansessens PM;
Monnens LA; Willems JL. Central Klinisch Chemisch
Laboratoium, Academisch Ziekenhuis St. Radbound,
Nijmegen. Ned Tijdschr Geneeskd;136(33); 1605-10;
1992 Aug 15
9- The value of comparative volumetric analysis of
urinary and blood erythrocytes to localize the source of
hematuria. Angulo JC; Lopez-Rubio M; Guil M; Herrero B;
Burgaleta C; Sanchez-Chapado M. Department of
Urology, Hospital Principe de Asturias, Madrid, Spain. J
Urol;162(1):119-26, 1999 Jul.
10- Hematuria: A simple method for identifying glomerular
bleeding. Kenneth F.,Fairley and Douglas F. Birch.
Depart. Of Medicine. University of Melbourne and Depart.
Of Nephrology the Royal Melbourne Hospital. Melbourne.
Victoria. Australia. Kidney Interntional. Vol.21 (1982),
pp 105-108.
11- Diagnostic Revolution of Microhematuria by real
time confocal scanning laser microscope: Hyodo-IinoMiyagawa, third report. Hyodo Toru, Miyagawa Ikuo, Iino
Akihiro et col. Japan Nephron 1995; 70: 171-179
12- Unexplained haematuria. Robert Koene. Dep of
Neprhology Univ. Nijmegen. The Netherlands. Oxford
Journal. Neprhology Diálisis Transplantation, Vol 14. Nº 8
Pp 2025-2027, 1999. European Renal AsssociationEuropean Diálisis and Transplant Association.
13-Diagnóstico topográfico de las heamturias en pacientes
pediátricos mediante el porcentaje de hematíes
dismórficos. JB García Sanchez, García Suzel, H Martinez
Canalejo, S Santana Porbén, MC Duarte, R Carpio
Sabatela y JR Salabarría González. Hospital Pediátrico
Docente “Juan Manuel Márquez”. Revista Cubana de
Pediatría, Vol 69 Nº 1 Enero-Abril 1997.
14- Differentiation of renal from non-reanl hematuria
by microscopio examination of erythocytes in
urine. TJ Pillsworth Jr, VM Haver, CK Abrass and
CJ Delaney. Department of Laboratory Medicine,
Veterans Administration Medical Center , University
of Washintong, Seattle 98195. Clinical Chemestry, Vol
33, 1791-1795. 1987.by American Association for
Chemistry
15- Acanthocyturia. A characteristic marker for glomerular
bleeding. Hans Köhler, Eveline Andel and Bernd Brunck.
Mainz. Germany. Kidney Internacional. Vol. 40(1) pp
115-120
16- La acantocituria es más eficaz en diferenciar la
hematuria glomerular de la no-glomerular que los
hematíes dismórficos. Catalá López JL; Fábregas
Brouard M. Servicio de Bioquímica Clínica, Hospital
Insular de Gran Canaria, Las Palmas de Gran Canaria,
España. beljos@teleline.es
Arch Esp Urol;55(2):164-6, 2002 Mar
17- The (fixed) urinary sediment, a simple and useful
diagnostic tool in patients with haematuria. Huussen J,
Koene RA, Hilbrands LB. Neth J Med; 62(1), 4-9, 2004
Jan. Netherlands
18- Unexplained haematuria. Letters and Replies. Giovanni
B Fogazzi ,Divisione di Nefrologia e Dialisi, Ospedale
Maggiore, IRCCS, Via Commenda 15-20122 Milano, Italy
- Robert Koene Department of Nephrology, University
Hospital Nijmegen, Nijmegen, The Netherlands. Oxford
Journals Nephrology Dialysis Transplantation Volume
15, Number 5 Pp. 734-735
ABREVIATURAS
ACAN = acantocitos
ANU = anulares
ESP = espiculados
EST0 = estrellados
FAN = fantasma
FP = falsos positivos
GIG= gigante
IC = intervalo de confianza
ISOM = Isomórficos
MCF = Microscopio con contraste de fase
MOLC = Microscopio óptico de luz convencional
POL= polidiverticulados
SEP = septados
VACI0S = vacíos
k = Coeficiente de correlación
G = Glomerular
NG = No glomerulares
Lipoproteína a, Apolipoproteina B y Perfil lipídico básico
Lipoproteína a, apolipoproteina B y perfil lipídico básico
Prudente, I.1
Alallon, W. 2
Gentilli, P. 3
1-Médico Patólogo clínico. Asist. Lab. Cent.
Hospital de Clínicas de Montevideo.
2-Médico Patólogo Clínico. Prof. Lab. Cent.
Hospital de Clínicas de Montevideo.
3-Bioquímica. Lab. Fares Taie. Mar del
Plata.
Lugar de Trabajo:
Departamento de Laboratorio Clínico,
Hospital de Clínicas, Montevideo,
Uruguay.
RESUMEN
La lipoproteína a, Lp(a) es una proteína altamente polimórfica, tiene 2 componentes: la apolipoproteína a, apo (a), unida covalentemente a la apolipoproteína B,
apoLpB. El objetivo de este trabajo es evaluar el comportamiento de los valores de
apoLpB y del perfil lipidico básico en pacientes con valores de Lp(a) aumentada,
así como determinar la relación existente entre las concentraciones plasmáticas
de Lp(a) y apoB-100. La dosificación de Lp(a) no encontró buena correlación con
los otros analitos del perfil lipídico básico o con la apoLp B. Solamente los valores
de cLDL y Triglicéridos (TG) fueron significativamente diferentes en ambos grupos
de Lp(a) ( < y > de 30 mg/dl). El cociente apoLp B /Lp(a) hallado en la población
con Lp(a) > 30 mg/dl fue de 1.86; y para la población con Lp(a) =< 30 mg/dl fue de
3.79. El perfil lipídico básico o la determinación de apoLp B no sustituyen la dosificación de Lp(a), la cual debería ser determinada en todo individuo, y fundamentalmente en población hipertrigliceridémica y con valores de cLDL elevados, ya que el
cálculo de cLDL puede estar contaminado por los altos valores de Lp(a).
Palabras claves | Lipoproteína a, Apolipoproteina B, Riesgo aterogénico.
SUMMARY
Enviar Correspondencia a:
Dr. Isidoro Prudente. Avda Italia s/n.
Tel: 4871515 int 2299
e-mail: isipru3@adinet.com.uy
Revista ByPC. Incorporada al Latindex.
ISSN 1515-6761 Código Bibliográfico: RByPC
Trabajo Recibido: 20-11-06 Aceptado: 25-01-07
Lipoprotein a, Lp(a), is a highly polimorphic protein. It is composed of two
molecules: apolipoprotein a, apo a, and apolipoprotein B, apoLp B. The aim of this
study is to evaluate the behaviour of apoLp B and basic lipid profile when Lp (a)
serum value is high, and to determine the relationship between Lp(a) and apoLp
B serum concentrations.
We worked with two groups of Lp(a): Lp(a) > 30 and Lp(a) =< 30 mg/dl. In
both groups, Lp(a) has no correlation with any other lipid profile measurement
included apoLp B. Only cLDL and triglycerides, TG, were statistically different in
both groups of Lp(a).
The ratio apoLp B/ Lp(a) when Lp(a) > 30 mg/dl was 1.86, and when Lp(a) =< 30
mg/dl was 3.79.Lp(a) test cannot be substituted by any basic lipid measurement
or by apoLp B, and it should be measured in every person, mainly in those cases
with high serum values of TG and cLDL, because Friedewald Formula may be
contaminated by high levels of Lp(a). There is no parallel variation between
Lp(a) and apoLp B serum concentrations, as demonstrated by the ratio apoLp
B/Lp(a).
Keywords | Lipoprotein a, Apolipoprotein B, Atherogenic risk.
Pág | 43
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 42 | 48
INTRODUCCIoN
En 1963 Kare Berg describió por primera vez la lipoproteína
a, Lp(a), como un antígeno lipoproteico mas prevalente en
el plasma de pacientes sobrevivientes de infarto de miocardio que en el grupo control de igual edad.
Estudios como “Lipid Research Clinic Study” han mostrado
una relación positiva entre la concentración de Lp(a) y la
enfermedad arterial coronaria. El estudio Atheroesclerosis
Risk in Communities con 10 años de seguimiento y 725 casos de enfermedad coronaria encontró que la Lp(a) estaba
asociada con ratios de riesgo moderados y que confiere menor riesgo en la raza negra que en la blanca (1).
Esta proteína comprende 2 componentes, una única copia
de apolipoproteina B100 unida a una única copia de otra
proteína denominada apolipoproteina a, apo(a), mediante
un enlace disulfuro en una relación estequiométrica 1:1. Es
una proteína de fase aguda.
La apo(a) es una proteína altamente hidrofilica, rica en carbohidratos, caracterizada por una heterogeneidad de tamaño atribuible a un polimorfismo genético en el tamaño de la
cadena polipeptídica. El análisis del ADN de la apo(a) revela
una estrecha homología con el plasminógeno, y ambos la
apo(a) y el plasminógeno parecen derivar de la superfamilia de genes del plasminógeno. La apo(a) consiste en múltiples repeticiones en tándem del kringle 4 del plasminógeno
y una repetición del kringle 5. Posee un dominio proteasa,
pero a diferencia del plasminógeno, carece de actividad enzimática. Los kringle 4 tipo 1, y los tipos del 3 al 10, están
presentes en una única copia por molécula, y el kringle 4
tipo 2 aparece con 3 a 40 copias por molécula de apo(a).
Este diferente número de repeticiones del dominio kringle 4
tipo 2 genéticamente determinado origina diferentes isoformas de apo(a), modifica el peso molecular de la Lp(a) que
oscila entre 420 y 840 kD, el tamaño de las isoformas que
varía entre 50 y 500 nm, así como la razón apo B / apo a de
las partículas de Lp(a), y también modifica la masa molecular de la Lp(a). La apo(a) es altamente polimórfica en tamaño y tiene mas de 35 alelos presente en su locus (1).
Existe una correlación inversa ente el tamaño de las isoformas de apo(a) y la concentración de Lp(a), las isoformas
mas grandes están asociadas con las menores concentraciones. Mediante análisis genético se ha corroborado que
cuando las repeticiones de kringle 4 tipo 2 son menores de
20 en numero en al menos uno de los alelos, el riesgo de enfermedad cardiovascular es 15 veces superior que cuando
son mayores de 20(2).
En cuanto a la vida media de la Lp(a) es de 4,8 días, mientras que la de la apolipoproteina B es de 2,5 días, lo que sugiere según algunos autores que la primera recircula dos
veces en una partícula con apoB en plasma antes de su
catabolismo. Según estos autores, la apo(a) no permanece
unida covalentemente a una única molécula de apo B-100
sino que se reasocia al menos con otra partícula de apo B100, probablemente recientemente sintetizada, durante su
metabolismo plasmático (3).
La apoB es el único componente proteico de las LDL plasmáticas , la apoB completa es llamada apoB100, es una
proteína muy grande, 550 kDa luego de la glucosilacion, con
una estructura primaria compleja. Uno de los residuos de
cisteína del extremo C-terminal (Cys4326) es capaz de formar enlaces disulfuro entre la apoB100 y la apolipoproteina
a para formar Lp(a)
Estos datos hacen muy interesante poder estudiar el comportamiento de la Lp(a), sus concentraciones séricas, y
compararlo con el comportamiento y las concentraciones
séricas de apo B100. Observar los valores séricos de apoB
que corresponden a las Lp(a) de alta concentración y bajo
número de repeticiones de Kringle 4 tipo 2, en contraste con
aquellas apoB pertenecientes a Lp(a) de menor concentración plasmática y mayor número de repeticiones de Kringle
4 tipo 2. Es de interés conocer la relación apoB/Lp(a) para
ambos niveles de concentraciones de Lp(a). Teniendo en
cuenta que la apo(a) mantiene una relación estequiométrica 1:1 con la apoB, que se postula puede asociarse con por
lo menos 2 moléculas de apoB-100 antes de ser catabolizada, dato no corroborado por todos los autores, y que posee
un gran polimorfismo genético que ocasiona importantes
variaciones en su concentración sérica, es de interés determinar si los valores de apolipoproteina B y Lp(a) presentan
una variación proporcional entre ambas a diferentes rangos
de concentración de Lp(a).
Objetivo: evaluar el comportamiento de los valores de apoLpB y del perfil lipidico básico en pacientes con valores de
Lp(a) aumentada, así como determinar la relación existente entre las concentraciones plasmáticas de Lp(a) y apoB100.
MATERIAL Y MeTODOS
Se realiza un estudio prospectivo, siendo la población a estudiar pacientes ambulatorios que consultan en servicios
de policlínica del Hospital universitario, sin límite de edad ni
infecciones intercurrentes, de ambos sexos, en el caso de
mujeres que no estuvieran cursando embarazo, se obtuvieron las muestras durante el período Octubre 2005 – Mayo
2006.
Se procesaron 175 muestras, se obtuvo sangre por punción
venosa periférica, se centrifugó y separó el suero del coágulo y se procesaron entre las 24 – 48 horas siguientes. Se
dosificó:
Lp(a) masa por método turbidimétrico. Se utilizaron 3 niveles de controles de Lp(a), el nivel 1 con un valor medio de
13.6 mg/dl, un nivel 2 con media de 22.1 mg/dl y un nivel 3
con media de 34.5 mg/dl.
Colesterol Total (CT): test enzimático con colorimetría según Trinder utilizando la técnica de colesterol esterasa y la
colesterol oxidasa(5).
Lipoproteína a, Apolipoproteina B y Perfil lipídico básico
Tabla 1:
CONTROLES
Lp(a)
TG
Colesterol
cHDL
apoB
NIVEL 1
X= 13.57
DS= 0.75
CV= 5.5
X= 118.8
DS= 5.5
CV= 4.63
X= 93.4
DS= 3.9
CV= 4.18
X= 31.8
DS= 2.46
CV= 5.6
X= 74
DS= 2.51
CV= 3.4
NIVEL 2
X = 22.11
DS = 1.97
CV = 8.9
X= 211.9
DS= 5.3
CV= 2.5
X= 199.3
DS= 5.0
CV= 2.51
X= 47.8
DS= 1.6
CV= 3.3
X= 111
DS= 2.16
CV= 1.98
NIVEL 3
X= 34.5
DS= 3.3
CV= 9.5
cHDL: test enzimático in vitro para la determinación directa
del cHDL utilizando enzimas modificadas por polietilenglicol
y sulfato de dextrano(5).
Triglicéridos (TG): método enzimático con colorimetría según Trinder(5).
ApoLp B : inmunoturbidimetria(5).
Dichas determinaciones se realizan en un autoanalizador
Hitachi 911 con calibradores y controles Precipath y Precinorm Universal en 2 niveles (Roche) para CT y TG.
Utilizamos Calibrador C.f.a.s lípidos, Precinorm y Precipath
Lípidos para cHDL y apoLp B.
Y se calcula cLDL por Fórmula de Friedewald: cLDL = CT(cHDL + TGC/5) (10). Cuando los valores de TGC fueron mayores de 400 mg/dl no se realizó el cálculo(6).
Los rangos de referencia utilizados son(4):
HDL: bajo si < 40 mg/dl
Alto si > 60 mg/dl.
Colesterol: Deseable < 200 mg/dl
Borderline: 200 - 239 mg/dl
Alto:
>= 240 mg/dl
Triglicéridos: Normal < 150 mg/dl
Borderline 150 - 199 mg/dl
Alto
200 - 499 mg/dl
Muy alto >= 500 mg/dl
Trabajamos con 2 poblaciones con similares características
en cuanto a edad y sexo, una con Lp (a) >= 30 mg/dl (n =
123) y otra con Lp (a) < 30 mg/dl (n = 52).
Se calcularan media, desvío standard, Coef. de variación,
Coef. de correlación r de Pearson, se utilizará es test estadístico t de student, considerando significativa una p < 0.05
(29).
RESULTADOS
En la Tabla 1 se muestran los valores de media, desvío standard
y coeficiente de variación para los controles (Ver Tabla 1).
La población con Lp(a) >= 30 mg/dl tuvo una media de edad
de 41 años, con una proporción de mujeres de 73%; mientras que para la población con Lp(a) < 30 mg/dl la media de
edad fue de 37 años, y la proporción de mujeres fue de 83%.
En la tabla 2 se muestran los resultados de media y desvío
standard de las dosificaciones realizadas para pacientes
Tabla 2:
mg/dl
Lp(a) =< 30mg/dl Lp(a) > 30 mg/dl
Lp(a)
X = 25.28
DS = 3.45
X = 61.62
DS = 29.03
cLDL
X = 105
DS = 32
X = 128
DS = 43
TG
X = 95
DS = 46
X = 124
DS = 90
X = 83.25
DS = 28.21
X = 93.07
DS = 28.33
No HDL col
ApoLp B : no se tiene valores de referencia estandarizados.
Se utilizo como valor de corte 120 mg/dl (5).
X = 124
DS = 37
X = 151
DS = 48
CT
X = 178
DS = 39
X = 203
DS = 48
Lp(a) valor de corte: < 30 mg/dl(7).
HDL
X = 54
DS = 14
X = 52
DS = 14
cLDL: óptimo
subóptimo
borderline
alto
muy alto < 100 mg/dl
100 - 129 mg/dl
130 - 159 mg/dl
160 - 189 mg/dl
>= 190 mg/dl.
apoLp B
Pág | 45
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 42 | 48
Tabla 3:
Coef. de correlación
Lp(a)> 30 mg/dl
Coef. de correlación
Lp(a) =< 30 mg/dl
rLp(a) – cLDL=
0,012
r Lp(a) - cLDL =
0,090
r Lp(a) - TGC=
0,086
r Lp(a) - TGC =
0,342
r Lp(a) - cHDL=
0,219
r Lp(a) - cHDL=
0,127
r Lp(a) - CT =
0,073
rLp(a) - CT =
0,204
r Lp(a) - No HDL=
0,010
rLp(a) – noHDL =
0,194
r Lp(a)- apoB =
0,425
rLp(a)- apoB=
0,116
r apoB - No HDL =
0,785
r apoB - cLDL=
0,600
r apoB - cLDL
0,716
r apoB- NoHDL=
0,669
r apoB - CT =
0,721
r apoB - CT =
0,358
con Lp =< 30 mg/dl y Lp(a) > 30 mg/dl (Ver Tabla 2).
La Tabla 3 nos muestra los siguientes Coef. correlación:
Lp(a) vs. apoLp B vs. perfil lipídico básico, en población con
Lp(a) > 30 mg/dl, y Lp(a) =< 30 mg/dl. (Ver Tabla 3)
Las Figura 1 muestra la correlación entre la población Lp(a)
y cLDL, (cuando Lp(a) > 30 mg/dl); y la Figura 2 entre Lp(a)
y apoLp B,(cuando Lp(a) > 30 mg/dl).
Las Figuras 3 y 4 muestran la correlación en ambas poblaciones (Lp(a) =< y > 30 mg/dl) entre apoLp B y No HDL colesterol.
Figura 1
Figura 3
Correlación entre Lp(a) y cLDL en la población con
Lp(a) > 30 mg/dl.
Correlación entre apoLp B y No HDL colesterol en
la población con Lp(a) > 30 mg/dl.
Figura 2
Figura 4
Correlación entre Lp(a) y apoLp B en la población
con Lp(a) > 30 mg/dl
Correlación entre apoLp B y No HDL colesterol en
la población con Lp(a) =< 30 mg/dl.
Lipoproteína a, Apolipoproteina B y Perfil lipídico básico
El valor máximo de Lp(a) obtenido fue de 160.4 mg/dl, y el
mínimo fue de 9.7 mg/dl.
En el caso del grupo de Lp(a) >= 30 mg/dl, el menor valor
de cLDL encontrado fue de 38 mg/dl y el mayor fue de 266
mg/dl.
Analizando las diferencias entre los valores de cLDL, TG,
apoLp B, No HDL colesterol, CT y cHDL colesterol entre ambos grupos de Lp(a) ( =< 30 y > 30 mg/dl) encontramos los
siguientes valores de p mostrados en la Tabla 6. (IC 95 %).
Tabla 6
Lp(a) =< 30 vs. Lp(a) > 30
cLDL
P = 0.0012
(S)
TG
P = 0.00001 (S)
apoLp B
P = 0.4451
(NS)
No HDL col
P = 0.058
(NS)
CT
P = 0.058
(NS)
cHDL
P = 0.39
(NS)
Tabla 6. NS = no significativa; S = significativa.
Al realizar el cociente apoLp B /Lp(a) hallamos que en la población con Lp(a) > 30 mg/dl dicho cociente fue de 1.86; y
para la población con Lp(a) =< 30 mg/dl fue de 3.79.
DISCUSIoN:
Nuestro estudio tiene como fortaleza desde el punto de vista
preanalítico que realizó un procesamiento de la Lp(a) poco
tiempo después de extraída la muestra, evitando cualquier
alteración debido a frizado u otras condicionantes (8).
Si bien nuestra población es mayoritariamente femenina,
su edad promedio es de 38 años, estando por tanto alejada
de la menopausia donde se verifican aumentos de la concentración plasmática de Lp(a) (10), por tanto la edad y el
sexo no son factores que estén influyendo en forma importante en los resultados obtenidos.
Analizando ambos grupos de Lp(a) estudiados: Lp(a) >= 30
y Lp(a) < 30 mg/dl; en el primer grupo no encontramos ningún coeficiente de correlación r mayor de 0.43 entre Lp(a) y
los otros componentes del perfil lipídico básico y apoLp B. El
mejor r fue entre Lp(a) y apoB, (r = 0.425). Esto demuestra
que la Lp(a) en el grupo de pacientes con valores por encima de 30 mg/dl aporta información adicional a cualquier
otra analito del perfil lipídico básico y también a la apoLp B.
En el grupo de Lp(a) < 30 mg/dl, no se obtuvo ningún r mayor de 0.40, siendo el mejor r obtenido de 0.342 entre Lp(a)
y TG; por lo tanto en este grupo de Lp(a) con valores por debajo de su punto de corte tampoco la dosificación de Lp(a)
encuentra correlación con ningún otro analito del perfil lipí-
dico básico o con la apoLp B, y también aporta información
adicional a todos ellos.
Por lo tanto la dosificación de Lp(a) no puede ser sustituida
por ningún analito del perfil lipídico básico ni por la apoLp B,
y debería dosificarse alguna vez en la vida de todo individuo,
fundamentalmente en aquellos pacientes en quienes se requiere nuevos factores de riesgo para su estratificación y
elección de una terapia preventiva correcta (11)
En ambos grupos sí encontramos coeficientes de correlación mayores de 0.60 al relacionar apoB y colesterol LDL,
y apoB y No HDL colesterol, lo cual esperábamos ya que la
apoB constituye un resumen de todas las partículas aterogénicas apo B dependientes, constituidas en su mayor parte por colesterol LDL..
Considerando el valor p, encontramos que el valor de cLDL
fue estadísticamente diferente en el grupo de Lp(a) < 30 vs.
el grupo de Lp(a) >= 30 mg/dl (p = 0.0012).
También los valores de TG fueron estadísticamente diferentes ( p = 0.00001) entre el grupo de Lp >= 30 vs. Lp(a)
< 30 mg/dl. Para el caso de cHDL, CT, NoHDL colesterol y
apoLp B, los valores en ambos grupos de Lp(a) no fueron
significativamente diferentes.
Por tanto los pacientes hipertrigiceridémicos y portadores
de niveles de cLDL aumentados tienen un riesgo aumentado de presentar altos valores de Lp(a).
Quizás sea en estos pacientes hipertrigliceridémicos y portadores de altos niveles de cLDL, donde el pedido de Lp(a)
sea de mayor utilidad, sobre todo si las isoformas de bajo
peso molecular y alta concentración de Lp(a) se unen a las
isoforma pequeñas y densas de cLDL, aumentando el riesgo
aterogénico de esta población.
También debemos considerar que el valor de cLDL calculado
podría estar sufriendo contaminación por los altos valores
de Lp(a). Dicha observación posee relevancia clínica, debido a que los agentes hipocolesteromiantes, como las estatinas, son efectivos en descender las concentraciones de
cLDL pero no tienen efecto sobre la Lp(a), por tanto es importante conocer la proporción de colesterol que deriva de la
LDL y la que deriva de la Lp(a). Esto reafirma la importancia
de dosificar Lp(a) alguna vez en la vida de todo individuo,
y fundamentalmente en población hipertrigliceridémica y/o
con valores de cLDL aumentados, para decidir tratamiento
en población con riesgo aterogénico intermedio, además de
en los casos donde se sospecha que actúa como factor de
riesgo trombótico, compitiendo con el plasminógeno plasmático por sitios de unión, resultando en la disminución de
síntesis de plasmina e inhibición de la fibrinolisis(11,12).
En cuanto a la relación existente entre Lp(a) y apoLp B, algunos autores proponen una vida media de la primera doble a la
de la segunda, lo cual no ha sido corroborado por otros trabajos de investigación; y asimismo otros postulan que una única
molécula de Lp(a) podría unirse a dos moléculas de apoLp B en
su vida media, lo cual tampoco ha sido corroborado por otros
autores que postulan como difícil este hecho ya que es un
único enlace, y además de tipo covalente, el que interviene en
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 42 | 48
esta unión. Sí podríamos plantear como alternativa que frente
a la presencia de altas concentraciones de Lp (a), la apoLp B
disminuiría su capacidad de unión al receptor de apo B, de lo
cual tampoco existe evidencia científica documentada.
Nosotros no encontramos un coeficiente de correlación r
significativo entre Lp(a) y apoLp B, sin embargo al realizar
el cociente apoLp B /Lp(a) hallamos que en la población con
Lp(a) > 30 mg/dl dicho cociente fue de 1.86; y para la población con Lp(a) =< 30 mg/dl fue de 3.79.
Si Lp(a) > 30, apoB/ Lp(a) = 1.86
Lp(a) =< 30, apo B/ Lp(a) = 3.79
No existen estudios que hallan evaluado que ocurre con dicho radio apoLp B/ Lp(a) en pacientes tratados con hipocolesteromiantes.
CONCLUSION:
El perfil lipídico básico o la determinación de apoLp B no
sustituyen la dosificación de Lp(a), la cual debería ser determinada en todo individuo, y fundamentalmente en población hipertrigliceridémica y con valores de cLDL elevados,
ya que el cálculo de cLDL puede estar contaminado por los
altos valores de Lp(a). No se comprueba una variación paralela entre las concentraciones de Lp(a) y apoLp B, como
lo muestran los valores del cociente apoLp B / Lp(a) para
diferentes rangos de Lp(a).
BIBLIOGRAFIA:
1)Santica M. Maryls K. John A. Skarlators S. Report of the
National Heart, Lung and Blood Institute Workshop on
lipoprotein (a) and Cardiovascular Disease: Recent advances and future directions. Clinical Chemistry 2003;
49 (11): 1785-1796.
2) Vaca, Ordoñez, Wagner. Lípidos, lipoproteínas y apolipoproteínas. Nuevas indicaciones en el diagnóstico, evaluación y prevención del riesgo cardiovascular. Hospital
Creu i Sant Pau, Barcelona, España, 2000.
3) Jenner J; Seman L. The metabolism of apolipoproteins
(a) and B-100 within plasma lipoprotein (a) in human
beings. Metabolism 2005; 54 (3): 361-369.
4) 1º Consenso Nacional de Ateroesclerosis, Montevideo,
Uruguay, 2003.
5)Prudente I; Castro M; Alallón W. Correlación entre las concentraciones séricas de apolipoproteina B y colesterol
LDL en una muestra poblacional. Utilidad de la apolipoproteina B para valorar riesgo aterogénico. Mem. Inst.
Investig. Cienc. Salud 2006; 2 (1): 44 – 49.
6) Angelo M; Scanu MD. Lipoprotein (a), Friedewald Formula
and NCEP Guidelines. The American Journal of Cardiology
2001; 87: 608-609.
Pág | 47
7)Leino A. Impivaara O. Kaitsaari M. Jarvisalo J. Serum Concentrations of Apolipoprotein A-1, Apolipoprotein B and
Lipoprotein (a) in a population sample. Clinical chemistry 1995; 41 (11): 1633-1636.
8) Simó J; Camps J; Vilella E; Gomez F; Paul A; Joven J. Instability of Lipoprotein (a) in plasma stored at –70°C: effects
of concentration apolipoprotein (a) genotype, and donor
cardiovascular disease. Clinical Chemistry 2001; 47 (9):
1673-1678.
9)González Sastre F; Guinovart J. Patología Molecular. Hospital de Sant Pau, Barcelona, Masson Barcelona, 2003.
10) Dati F; Tate J. Reference Materials for the Standarization
of the Apolipoprotein A-I and B, and Lipoprotein (a). The
Journal of the International Federation of Clinical Chemistry and Laboratory Medicine 2004; 13 (3): 1-7.
11)Emerson J. Desirables components of a screening lipid
profile. Lab. Medicine 2003; 34(6): 476-80.
12) Otero A; Pou F. Pons E; Lens D; De Lisa E; Dellepiane M;
Storch E; Attarian D; Ferrari A; Pierri S; Motta N. Trombofilia y pérdida recurrente de Embarazo. Revista Médica del
Uruguay 2004; 20: 106 – 113.
13)The Expert Panel. Report of the National Cholesterol Education Program (NCEP) Expert panel on detection, evaluation and treatment of high blood cholesterol in adults.
Arch Intern Med, 1988; 148: 36-69.
14)González de Buitrago, Medina Jimenez. Patología Molecular, Universidad de Salamanca, España. McGraw-HillInteramericana, 2001.
15)Miremadi S, Frohlich. Can measurement of serum apo B
replace the lipid profile monitoring of patients with lipoprotein disorders? Clinical Chemistry 48:3, 484-488, 2002.
16) Bachorik P; Lovejoy K; Carroll M; Johnson C. Apolipoprotein B and AI distributions in the USA, 1988-1991: results
of the National Health and Nutrition Examination Survey
III (NHANES III), Clinical Chemistry 1997; 43 (12): 23642378.
17)Villar S; Server H.; Gilabert B. Concentraciones séricas
de las apolipoproteínas AI y B en una población de la Comunidad Valenciana: su utilidad para valorar el colesterol
como factor de riesgo cardiovascular. Hospital Universitario La Fe, Valencia, España. Ateroesclerosis 2000;
195:199.
18) Walldius G; Jungner I; Holme I; Aastveit A; Kolar W; Steiner E. High apolipoprotein B, low apolipoprotein A-1, and
improvement in the prediction of fatal myocardial infarction (AMORIS study): a prospective study. The Lancet
2001; 358: 2026-2033.
19)2º Consenso uruguayo sobre Dislipemias, Montevideo,
Uruguay, 1998.
20)Third Report of the National Cholesterol Education Program (NCEP), Expert Panel on detection, evaluation and
treatment of high blood cholesterol in adults (Adult Treatment Panel III). NCEP, National Heart, Lung, and blood
Institute. National Institutes of Health. NIH Publication Nº
01-3670, 2001
Lipoproteína a, Apolipoproteina B y Perfil lipídico básico
21)Planella T; Cortés M; Martínez-Brú C; González Sastre F;
Ordoñez-Llanos J. Calculation of cLDL by using apolipoprotein B for classification of nonchylomicronemic dyslipemia. Clinical Chemistry 1997; 43(5): 808-815.
22)Kaplan L; Pesce A; Kazmierczak S. Clinical Chemistry.
Theory, Analysis, Correlation, fourth edition, Mosby Inc
US, 2003.
23) Danesh J; Collins R; Peto R. Lipoprotein (a) and Coronary Heart Disease. Meta-Analysis of Prospective Studies.
Circulation 2000; 102: 1082-1085.
24)Cobbaert C; Arentsen J; Mulder P; Lindemans J. Significace of various parameters derived from biological variability of lipoprotein (a), homocysteine, cysteine, and total antioxidant status. Clinical Chemistry 1997; 43(10):
1958-1964.
25) De la Peña A; Izaguirre R; Anglés-Cano E. Lipoproteína
(a), ¿ es un factor de riesgo en la enfermedad aterotrombótica coronaria?. Archivos de Cardiología de México
2001; 71 (3): 188-192.
26) Spence D. Lipoprotein(a): Involved in Events, but not
Burden of Atherosclerotic Disease? Stroke 2006; 37:
1350 – 1351.
27) Taddei-Peters W; Butman. Bryan J; Venetta T; Macomber
P; Ranson J. Quantification of Lipoprotein (a) particles
containing various apolipoprotein (a) isoforms by a monoclonal anti-apo(a) capture antibody and a policlonal
anti-apolipoprotein B detection antibody sandwich enzyme immunoassay. Clinical Chemistry 1983; 39 (7).
28)Jorde L; Carey J; Bamshad M; Whit R. Genética Medica.
University of UTA Health Sciences Center, SALT Lake City,
UTA, USA. Tercera Edición, Elsevier Madrid, 2005.
29) Martell M; Fescina R; Martínez G; Martínez M; Delgado L;
García E; Roca R; García A; Gutierrez S; Barrios E; Alvarez
A. Introducción a la Metodología de la Investigación Científica. 1º Ed., Jul 1997
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 49 | 53
Pág | 49
Detección de VIH proviral por nested-PCR utilizando
metodología casera (in house)
Claudia Kairiyama1
Marcela Benhaim2
Patricia Buresti3
Sergio Citatti4
Claudia Pengue5
Nancy Perroni6
Sergio Pittaluga7
María C. Tonelli8
1 doctora en farmacia y bioquímica
2 bioquímica, Jefa de Laboratorio del
Hospital Interzonal Eva Perón
3 bioquímica
4 bioquímico
5 bioquímica
6 licenciada en química
7 bioquímico
8 bioquímico
Lugar de Trabajo:
Laboratorio Central, Hospital Interzonal
de Agudos Eva Perón, San Martín,
Provincia de Buenos Aires
Enviar Correspondencia a:
Marcela Benhaim, Helguera 4445, C
1419 CUK Buenos Aires, 4571-6395,
marcelabdec@hotmail.com
Revista ByPC. Incorporada al Latindex.
ISSN 1515-6761 Código Bibliográfico: RByPC
Trabajo Recibido: 30-11-06 Aceptado: 31-01-07
RESUMEN
En este trabajo se estudió la sensibilidad de un método de detección de VIH proviral
basado en una metodología de PCR anidada cualitativa como ayuda diagnóstica
para infección por VIH neonatal. Para ello se estudiaron treinta pacientes con
serología positiva VIH, con bajo recuento de linfocitos CD4 y, como control
de número de copias capaces de detectar, se utilizó la línea linfoidea 8E5. Se
amplificó por nested PCR dos regiones específicas del gen gag VIH. Como control
de purificación y estado de conser­va­ción de la muestra se amplificó una región
del gen constitutivo de β-globina. En los treinta casos se obtuvo amplificación
gen gag de VIH para las dos regiones y para el control de β-globina y, para la línea
8E5, se obtuvo positividad para las tres bandas aun en el caso de sólo diez copias
de VIH proviral. Se demuestra un alta sensibilidad para esta metodología in house,
que la hace apta para su aplicación en diagnóstico pediátrico a un costo accesible
para instituciones públicas.
Palabras claves | PCR anidada, sensibilidad, controles, diagnóstico, infección
VIH
SUMMARY
We studied the sensibility of a proviral HIV detection method, based in a qualitative
nested PCR methodology, as a neonatal HIV infection diagnostic tool. 30 hiv
infected patients with low CD4 lymphocytes count were monitored and we used
the 8E5 lymphoid line to control the number of copies capable of detection. Two
specific regions of “gag” gene of HIV were amplified by nested PCR. For control of
purification and preservation state of the sample we amplified a region of β-globin
constitutive gene. All cases were positive for amplification of two regions of gag
HIV gene and for control of β-globin, and with only 10 copies of proviral HIV, we
found three positive bands in the 8E5 cellular line. This “in house” methodology,
thus demonstrates a high sensibility, making it capable for application in pediatric
diagnosis with an accessible cost in public institutions.
Keywords | nested PCR, sensibility, controls, diagnosis, HIV infection
Detección de VIH proviral por nested-PCR utilizando metodología casera (in house)
Introduccion:
Es conocida la dificultad para arribar al diagnóstico de infección por VIH en niños menores de dieciocho meses, ya que la
posible presencia de anticuerpos maternos no permite realizar técnicas serológicas, lo cual hace necesario el uso de
técnicas de de­tec­ción viral. Entre ellas, la PCR es la técnica
más sensible y específica para la de­tec­ción viral en lactantes. La prueba de antígeno p 24 disociado es desaconsejable para ser usada aisladamente para descartar infección y
los cultivos virales resultan inaccesibles, debido a su complejidad, riesgo de contaminación y tiempo requerido para
su correcta evaluación (1,2). En nuestro laboratorio se puso
a punto una técnica casera (in house), casera, para la detección cualitativa de VIH proviral mediante una técnica de
reacción en ca­dena de polimerasa PCR anidada (3).
El objetivo de nuestro trabajo es estudiar la sensibilidad de
este método me­dian­te su aplicación en pacientes infectados con bajo conteo de células T CD4 y el uso de una línea
linfoidea 8E5 con número de copias de VIH proviral conocidas como control.
(4,5) y (tabla 1). La amplificación que resulta de la nested
PCR con los primers JA4, JA7y JA5, JA6 da una banda 131
bp y con los primers JA4, JA7 y Sk431,SK462 da una banda
de 142 bp. Como control de purificación y estado de con­ser­
vación de la muestra se amplificó una región del gen constitutivo β-Globina con los pri­mers GH20 y PC04 (210 bp). Los
primers fueron sintetizados por Operon Biotech­no­lo­gies. Se
utilizó la enzima Hot Start de Fermentas y un ciclador Perkin
Elmer Gene Amp PCR System 2400, donde se realizaron las
dos amplificaciones suce­sivas, para lo cual primero se activó la enzima durante cinco minutos a 95ºC y luego se cicló
treinta veces: desnaturalización 30 seg. a 94º C, annealing
30 seg. a 41ºC y extensión 30 segundos a 72ºC. Las bandas
específicas de amplificación se visualiza­ron al UV en un gel
de agarosa 3%, teñido con Bromuro de etidio. El recuento de
linfo­citos CD4/CD8 se realizó por Citometría de Flujo (EPICS)
Coulter, utilizando anti CD8FITC, antiCD4 PE y antiCD3 PC. En
todos los casos se realizaron controles de ca­lidad externo del
Ministerio de Salud Pública de la Provincia de Buenos Aires,
del PEEC y del Círculo Rioplatense de Citometría de Flujo.
Resultados:
Metodo:
Se estudiaron treinta pacientes VIH positivo con bajo rango
CD4 entre 0 y 195 cél/μl. Como control de número de copias
(1 genoma por cél) de DNA HIV proviral, se utilizó una línea
linfoidea 8E5 (ATCC CRL- 8993) y se realizaron diluciones
de 0, 1, 10,100 y 1000 células resuspendidas en un millón
de linfocitos normales. La purifica­ción de ADN genómico se
realizó con columnas QiaGen a partir de 200 μl de buffy-coat,
con citrato como anticoagulante, ó células resuspendidas en
buffer fosfato salino. Se amplificaron dos regiones específicas del gen gag del VIH en dos pasos (fig. 1). Se utilizaron
como primers externos JA4gag 1319-1338 y JA7gag 16151596; y como primers internos JA5gag 1446-1465, JA6gag
1577-1558, SK431gag 1507-1481 y SK462gag 1366-1395
En todos los casos 30/30 pacientes se observó amplificación para las dos bandas es­pecíficas del gen gag y para la
banda control de β-Globina (Figura 2 y Tabla 2). Para la línea
celular 8E5 se obtuvo positividad para las tres bandas, aun
en el caso de sólo diez copias de VIH proviral totales (Figura
3 y Tabla 2).
En general se visualizó una intensidad mayor en la banda
obtenida luego del la Nested con los primers SK431-SK462.
Discusion:
Según la clasificación propuesta por el CDC en 1994 y las
recomendaciones emanadas de Ministerio de Salud de la
Tabla 1: Oligonucleótidos para la detección de VIH por PCR.
Primer
Secuencia 5´- 3´
Gen y localización
JA 4
GAAGGCTTTCAGCCCAGAAG
gag 1319-1338
JA5
ACCATCAATGAGGAAGCTGC
gag 1446-1465
JA6
TATTTGTTCCTGAAGGGTAC
gag 1577- 1558
JA7
TCTCCTACTGGGATAGGTGG
gag 1615 – 1596
SK462
AGTTGGAGGACATCAAGCAGCCATGCAAAT
Gag 1366- 1395
SK431
TGCTATGTCAGTTCCCCTTGGTTCTCT
Gag 1507- 1481
GH20
GAAGAGCCAAGGACAGGTAC
β-Globina
PC04
CAACTTCATCCACGTTCACC
β- Globina
Pág | 51
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 49 | 53
Tabla 2: Resultados de las nested PCR`s en muestras de treinta pacientes VIH po­si­ti­vos con recuento de CD4/ul
sangre entre 195-0, y en células 8E5 resus­pendidas en 1x10 6 linfocitos normales (*). Las intensidades de las
bandas es­pecíficas visualizadas en el gel de agarosa se especifican de la siguiente ma­nera: (+++) muy fuerte,
(++) fuerte, (+) regular, (+/-) baja y (-) nula.
CD4 cel / ul
195
172
169
165
146
137
137
120
113
106
101
83
76
62
49
44
44
43
32
32
27
26
13
12
6
3
3
0
0
Cél. 8E5
0
1
10
100
1000
β-Globina
++
+
+/++
+
+
++
+
+
+
+
++
+
+
+
+
+
+
+
++
+
+
+
+/+
+
+
++
+
β-Globina
++ *
++ *
++
++
++
Nación, en niños nacidos de madre VIH positiva la infección
por VIH se determina según los siguientes criterios:
1.- En menores de dieciocho meses: dos resultados positivos de PCR y/o aislamiento viral y/o antígeno p24 en sangre
en dos muestras diferentes.
2.- En mayores de dieciocho meses: serología repetidamente positiva por métodos de ta­mizaje y confirmación por WB
o IFI o con los criterios mencionados en 1.
Considerando las técnicas recomendadas para menores de
dieciocho meses, que es el motivo de nuestra preocupación,
la determinación de antígeno p24 tiene una sensi­bilidad de
aproximadamente un 45%, que la hace inaplicable para ser
usada de manera aislada. El aislamiento del VIH por cultivos
virales sigue siendo hoy en día una técnica de referencia
gag Nested JA5-6
+
+
++
+
+
+
+
+
++
+
+
+
+
+
+
+
++
++
+
+
+/+/+/+/+
+
+
+/+
gag Nested JA5-6
+
+
+
gag Nested SK431-462
+
++
+
++
++
++
+
++
+
++
++
++
++
++
++
+
++
+
+
++
+
+
+
++
++
+
++
+/+
gag Nested SK431-462
++
++
+++
con adecuada sensibilidad y especificidad, absolutamente
necesaria cuan­do se necesita establecer la fenotipificación
VIH, pero su empleo queda restringido a laboratorios muy
bien equipados con complejos sistemas de contención biológica (nivel P3) y, por lo tanto, inaccesible para numerosos
centros asistenciales. La técnica más am­pliamente usada
en centros de salud es la reacción en cadena de la polimerasa por tener una adecuada sensibilidad y especificidad y
oportunidad en la entrega de resultados, a diferencia de la
técnica de cultivo.
En el caso de la PCR, el grado de estandarización de estas
pruebas, así como la disponibilidad de reactivos, es desigual. La estandarización de ensayos caseros es en g­eneral
laboriosa debido al número de variables que deben ajustarse
Detección de VIH proviral por nested-PCR utilizando metodología casera (in house)
Figura 1: Esquema de los oligonucleótidos específicos para gag HIV-1 empleados en las nested PCR´s.
para su óptimo fun­cio­namiento. Existen reactivos comerciales para PCR diagnóstica de VIH-1, pero sus pre­cios siguen
siendo muy elevados, ya que también incluyen el costo de
la aparatología que sólo puede ser utilizado para esos kits.
También es una dificultad real en el uso de técnicas PCR la
falta de criterios internacionalmente aceptados en la validación de re­sul­tados, por lo que debe considerarse en forma
escrupulosa cada caso clínico en parti­cular.
En un estudio anterior efectuado entre los años 2001 y 2003
en nuestro Hospital sobre la metodología de VIH PCR casera
empleada en este trabajo, evaluamos en ciento cuarenta casos la sensibilidad clínica de este ensayo, analizados según
el Test de Bayes. Ciento ocho casos corresponden a niños
menores de dieciocho meses nacidos de madres portadoras
Figura 2: Detección de VIH-1
proviral en sangre de pacientes
infectados con bajo re­cuento
de CD4. Electroforesis en gel
de agarosa 3% de productos
esperados del segundo round de
PCR, 131bp (nested JA5/JA6) y
142bp (nested SK431/SK462).
Calle: 1) control VIH-1 positivo, 2) 0
CD4/ul, 3) y 4) 3 CD4/ul, 5) 6 CD4/
ul y 6) 49 CD4/ul.
Figura 3: Detección de copias de VIH-1
proviral en células linfoideas 8E5 por
nested PCR. Electroforesis en gel de
agarosa 3% de productos esperados
del segundo round de PCR, 131bp
(nested JA5/JA6) y 142bp (nested
SK462/ SK431); y PCR de B-Globina
260bp. Calles: 1) control VIH-1
positivo, 2) 1 copia, 3) 10 copias, 4)
100 copias, 5) 1000 copias y 6) 0
copias de VIH-1 proviral 8E5.
del VIH, otros dieciocho casos eran pacientes adultos con
más de un ELISA VIH positivo pero WB indeterminado, nueve
de pacientes con sintomatología y clínica sospechosa pero
serología negativa; y cinco casos provenientes de accidente laboral rela­cionado con fuente VIH positiva. De los ciento
ocho casos pediátricos analizados, se obtuvieron amplificación específica de la región gag en seis casos (5,6 %); de
estos seis casos, 5/6 provenían de niños cuyas madres y
neonato no habían recibido profilaxis an­ti­rre­troviral (ARV)
o la habían recibido de manera incompleta. De dieciocho
casos con serología por WB indeterminado, catorce (77/%)
resultaron positivos por esta metodo­lo­gía siendo pacientes
con SIDA en etapa terminal, y de los otros cuatro casos, tres
eran mujeres en período de embarazo o puerperio. De nueve pacientes con sintomatología y clínica sospechosa pero
serología negativa, sólo uno (11%) resultó positivo por esta
técnica. En todos los casos de PCR negativa, luego se demostró una etiología no relacionada con VIH o ausencia de
infección por VIH. Finalmente, los cinco casos pro­ve­nientes
de exposiciones ocupacionales arrojaron resultados negativos. La sensibilidad en ese estudio resultó del 100 % y la
especificidad diagnóstica mayor del 95 %, por lo que representó una herramienta de suma utilidad como ayuda diagnóstica en casos de VIH pediátricos y WB indeterminado. No
se registraron casos de falsos negativos.
A pesar de que los resultados previos sobre la utilidad clínica de esta metodo­logía fueron realmente alentadores, en
este nuevo trabajo nos abocamos a desarrollar controles de
sensibilidad que nos permitieran fijar los límites de detec-
Pág | 53
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 49 | 53
ción en cuanto a nú­mero de copias virales y a la presencia
de células CD4 en los pacientes investigados.
Está ya demostrado que los principales blancos para infección por VIH son los linfocitos T helpers CD4. (6), aunque no
todas las subpoblaciones presentan la misma susceptibilidad. Los linfocitos TH1 serían menos proclives a la infección
viral que los TH0 y TH2 (7 y 8) y, en cambio, los linfocitos
CD4 de memoria son más susceptibles (9). A pesar de que
los linfocitos CD4, como vemos, son los principales blancos
para la infección viral, otras células también están involucradas, como por ejemplo macrófagos y células dendríticas
(10 y 11). Por la especial importancia de las células CD4
en la pro­gresión de la infección, pareció oportuno probar la
respuesta de nuestra metodología casera frente a pacientes con valores muy diversos de células CD4. Los resultados ob­te­nidos demuestran que aun en uno de los dos casos
en que no se detectaron en sangre células CD4, obtuvimos
una positividad franca en las bandas y, en el otro, una positi­
vidad débil.
La línea celular usada en este trabajo como control del límite de detección de la PCR nested fue la 8E5 de origen humano, de estirpe linfoblástica, que contiene un solo genoma
defectivo proviral de VIH por célula. Pudimos comprobar que
nuestra técnica tiene un límite de detección adecuado, ya
que se detectó positividad a partir de 10 copias de HIV proviral por muestra. Comparando con técnicas comerciales
(13), la performance de nuestra técnica in house demostró
ser sensible, rápida y confiable para la detección de infección por VIH y su puesta en marcha nos permitió mejorar el
diag­nóstico clínico en aquellos casos en que los métodos
serológicos son inaplicables.
biology, 1993, pp. 309-315.
6. Klatzmann D., Barre Sinoussi M.T., Nugeyre C., Dauquet E., Vilmer
C., Griscelli F., Brun-Vezinet C., Rouzioux J., Gluckman J., Chermann
J. “Selective tropism of lymphadenopathy-associated virus
for helper-inducer T-lymphocytes”, Science 225 (1984), 5962.
7. Clerici M., Balotta C., Moroni L., Ferrario E., Riva C., Trabattoni D.,
Rodolfo A., Villa M., Shearer G., Moroni M., Galli M. “Type I cytokine pro­duction and low prevalence of viral isolation correlate
with long-term non-progression in HIV infection AIDS”, Res
Hum Retro 12 (1996), 1053-1061.
8. Maggi E., Mazzetti M., Ravina A.,Annunziato F., de Carli M., Piccinni P., Manetti R., Carbonari M., Pesce A., del Prete G., Romagnani S.
“Ability of HIV to promote a TH1 to TH0 shift and to replicate
preferentially in TH2 and TH0 cells”, Science 265 (1994),
244-248.
9. Adleman L., Wofsy D., “T cell homeostasis: implications in HIV
infection”, J AIDS 6 (1993) 144-152.
10. Gartner S., Markovitz D., Kaplan M., Gallo R., Popovic, M.”The
role of mononuclear phagocytes in HTLV-III/LAV infection”,
Science 233 (1986), 215-219.
11. Patterson S., Knight S. “Susceptibility of human peripheral
blood dendritic cells to infection by human immunodeficiency virus J”, Gen Virol 68 (1987), 1177-1181,
12. Kabamba-Mukadi, Benoît1 ; Henrivaux, Philippe2 ; Ruelle, Jean1 ;
Del­fe­rriè­re, Nicole1 ; Bodéus, Monique1, Goubau, Patrick. ”Human
immunode­fi­ciency virus type 1 (HIV-1) proviral DNA load in
purified CD4+ cells by LightCy­cler® Real-time PCR. BMC Infect
Dis. 2005; 5: 15.
Bibliografía:
Agradecemos especialmente a la doctora Moira Vignoles
del Centro Nacional de Referencia para el SIDA, Facultad de
Medicina UBA, por proveernos de los controles de 8E5.
1. Ministerio de Salud de la Nación. Recomendaciones para el
diagnóstico y trata­mien­to de VIH SIDA en Pediatría, 20032004.
2. Ministerio de Salud de la Nación. Recomendación para la Prevención de la trans­­mi­sión perinatal de VIH. Unidad Coordinadora Ejecutora VIH/SIDA/ETS Argen­ti­na, no­viembre de 2001.
3. Kairiyama C., Canella V., Corazza R., Tonelli C., Pallone E. y Ben­haim
M. “Apli­cación de HIV DNA PCR in house como ayuda-diagnóstico de in­fección por HIV”. Ponencia presentada a las
Jornadas de Actualización Científica del Hospital Eva Perón
de San Martín, noviembre de 2004.
4. Albert, Jan – Fenyo, Eva Maria. “Simple, Sensitive, and Specific Detection of Hu­man Immunodeficiency Virus Type 1 in
Clinical Specimens by Polimerase Chain Re­action with Nested Primers”, Journal of clinical microbiology, July 1990, pp.
1560-1564.
5. Kwok, Shirley – Sninsky, John. “PCR Detection oh Human
Immunodeficiency Virus Type 1 Proviral DNA Sequences”, en
David H. Persing et al. edd. Diagnostic Molecu­lar Microbiology. Principles and Applications. American Society for Micro-
Agradecimientos:
Isoflavonas en soja, contenido de Daidzeina y Genisteina y su importancia biológica
Isoflavonas en soja, contenido de daidzeína y
genisteína y su importancia biológica
Beatriz Ludueña1
Carlos Mastandrea2
Carlos Chichizola3
Ma. Cecilia Franconi4
1-Bioquímica, Master en Ciencia y
Tecnología de Alimentos
2-Bioquímico, Especialista en Toxicología
3-Bioquímico, Especialista en
Endocrinología
4-Bioquímica.
Lugar de Trabajo:
Alkemy-Center Lab,
San Lorenzo 2780
(3000) Santa Fe, Argentina
Enviar Correspondencia a:
Beatriz Ludueña
San Lorenzo 2780
(3000) Santa Fe, Argentina
TE: 0342-4551615
e-mail: bluduena@alkemyweb.com
web: alkemyweb.com
Revista ByPC. Incorporada al Latindex.
ISSN 1515-6761 Código Bibliográfico: RByPC
Trabajo Recibido: 10-12-06 Aceptado: 27-02-07
RESUMEN
La soja, hoy en día, es muy conocida en todo el mundo, especialmente en países orientales,
por sus efectos beneficiosos sobre la salud humana. Siendo Argentina uno de los países productores de soja más importante, es muy poco lo que su población conoce y consume de
esta oleaginosa y los subproductos derivados de la misma.
Existe una amplia bibliografía que detalla los numerosos efectos saludables de la soja, entre ellos se destacan los efectos anticancerígenos, antioxidantes, cardiovasculares. Los
componentes de la soja más activos biológicamente son conocidos como fitoestrógenos y
dentro de este grupo se encuentran las isoflavonas. Debido a que estas últimas poseen una
gran similitud estructural con los estrógenos humanos, la asociación de las mismas con la
disminución de los síntomas peri y post menopáusicos está ampliamente estudiada.
Se elaboraron a escala de laboratorio e imitando procesos industriales, bebida de soja y tofu
a partir de diferentes variedades de semillas transgénicas y no transgénicas obtenidas de
productores de la zona.
El método desarrollado y validado consistió en cromatografía líquida de alta performance
(HPLC) con detección ultravioleta (UV), que identificó y cuantificó eficazmente las dos isoflavonas analizadas: Daidzeína y Genisteína.
Evaluamos el contenido de las mismas en las semillas y en cada subproducto de la elaboración.
Los resultados obtenidos mostraron una gran variabilidad en el contenido de ambas isoflavonas en los diferentes tipos de semillas analizadas. Por otro lado, se observó cómo los
procesos de industrialización de los subproductos derivados inciden sobre el contenido de
las isoflavonas, notándose pérdidas importantes de las mismas en todos los pasos de elaboración de la bebida y tofu estudiados.
Palabras claves | soja, isoflavonas, fitoestrógenos, cromatografía líquida de alta performance (HPLC).
SUMMARY
Soybean, nowadays, is very well-known anywhere in the world, specially in eastern countries,
by its beneficial effects on the human health. Being Argentina one of the producing countries
of more important soybean, it is very little what its population knows and consumes of this
oily one and the by-products derived from the same one.
An ample bibliography exists that details the numerous healthful effects of the soybean,
among them the anticancerigenic effects stand out, antirust, cardiovascular. The most active
components of the soybean biologically are known as phytoestrogens and within this group
they are isoflavones. Because these last ones have a great structural similarity with human
estrogens, the association of same with the diminution of the menopausics symptoms peri
and post widely is studied.
They were elaborated on laboratory scale and imitating industrial processes, drink of
soybean and tofu from different varieties of obtained transgenics and nontransgenics seeds
from producers of the zone.
The developed and validated method consisted of of high performance liquid chromatography
(HPLC) with ultraviolet detection (UV), that it identified and it quantified the two effectively
isoflavones analyzed: Daidzein and Genistein.
We evaluated the content of the daizen and genistein in the seeds and each by-product of
the elaboration.
The obtained results showed to a great variability in the content of both isoflavones in the
different types from analyzed seeds. On the other hand, it was observed how the processes
of industrialization of derived by-products affect the content of isoflavones, noting important
losses of same in all the steps of elaboration of the studied drink and tofu.
Keywords | soybean, isoflavones, phytoestrogens, liquid chromatography of high
performance (HPLC).
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 54 | 66
1- INTRODUCCIoN
Algunos vegetales contienen ciertos fitoquímicos no-nutricionales que ejercen acciones protectoras sobre la salud
humana. Estos principios activos de origen vegetal, conocidos como fitoestrógenos, se clasificaron en dos grandes
grupos: lignanos e isoflavonas, con peso molecular y estructuras parecidas al estradiol (la hormona femenina más importante) (1). En las plantas, las isoflavonas específicas presentes varían ampliamente, y con regularidad se acumulan
sólo bajo condiciones específicas de estrés. Una excepción
a esto es el alto nivel constitutivo del fitoestrógeno isoflavona, la genisteína, que se encuentra presente en la semilla de
soja, como aglucona o como conjugados glucosílicos (2).
Los mecanismos por los cuales estos fitoestrógenos influyen sobre la producción hormonal, metabólica y acciones
biológicas parecen depender de sus propiedades agonistasantagonistas estrogénicas. Se postula que estos químicos
vegetales poseen dos acciones biológicas importantes: la
unión a receptores de hormonas y a enzimas metabolizantes de hormonas. Por otro lado, existe una conexión epidemiológica entre dietas semivegetarianas y baja incidencia
de enfermedades crónicas degenerativas como cáncer dependiente de hormonas, cáncer de colon, ateroesclerosis y
enfermedades coronarias (1).
El poroto de soja es una fuente rica en isoflavonas. Las isoflavonas más importantes encontradas en este cereal son
genisteína, daidzeína y gliciteína (3).
Las ventas de productos de soja han aumentado mucho
en los últimos años, y esto se puede atribuir a un aumento
de conciencia de los consumidores de que los productos
derivados de soja son alimentos saludables. Si bien los
compuestos activos de las proteínas de soja no se determinaron claramente, un gran número de estudios sugieren
que las isoflavonas son el grupo más benéfico de los componentes de la soja (4).
1.1- ORIGEN DE LAS ISOFLAVONAS
Las isoflavonas poseen una larga data en la historia de la
ciencia. Frecuentemente mencionadas como estrógenos
débiles, fueron sintetizadas químicamente antes de conocerse la estructura de los esteroides de mamíferos, en los
años 1920-1930. Un poco más tarde, Wieland y Windaus
recibieron el premio Nóbel por este descubrimiento a pesar
de que fue una estructura errónea. Recién en 1940 las isoflavonas re-emergieron de la oscuridad como principios estrogénicos en el trébol rojo que causó infertilidad en ovejas
en el oeste de Australia (5).
Mientras los esteroides son un producto del metabolismo
de bacterias, hongos y plantas; las isoflavonas son producidas sólo por plantas y hongos.
La primera flavona se encontró en un alga verde-azulada
(cianobacteria) que habita las playas de ríos y lagos y po-
Pág | 55
dría ser el resultado de una deshidrogenación introduciendo
dobles enlaces en los anillos esteroideos.
Las isoflavonas pueden aislarse de la mayor parte de los tejidos de las plantas, incluyendo hojas, tallos, raíces, flores,
semillas y germen. En germen y brotes se encuentran en
abundancia y parecen regular procesos fisiológicos importantes para el crecimiento de la planta (1).
1.2- Principales Fuentes de Isoflavonas
Existen por lo menos 220 especies de vegetales que contienen isoflavonas (6-7).
La mayor concentración de isoflavonas en semillas comestibles se encontró en la raíz de Pueraria lobata, seguida por
la soja y el garbanzo. Todas las especies de poroto de soja
analizadas resultaron ser las fuentes más ricas de genisteína, el fitoestrógeno biológicamente más activo. En todas las
legumbres analizadas, las cantidades de genisteína excedieron a las de daidzeína. Analizando harina de centeno, grano de centeno fraccionado y muestras de pan de centeno y
otros cereales se encontraron solo trazas de isoflavonas. Se
analizaron muestras de té negro, verde y una variedad negra y se encontraron bajos niveles de isoflavonas. Además
se detectó genisteína y daidzeína en cerveza (1).
La soja y sus derivados son la mayor fuente de isoflavonas
en la dieta (8,9). Se encuentran mayoritariamente en una
subfamilia de las Leguminosae, la Papilionoideae. Se recuperaron ocasionalmente en otras pocas familias tales como
Compositae, Iridaseae, Myristaceae y Rosaceae (1).
En la segunda generación de alimentos con soja, elaborados
mediante la incorporación de ingredientes de soja a una extensa variedad de alimentos manufacturados, el contenido
neto de isoflavonas disminuye. La salsa de soja, por ejemplo, contiene muy pocas isoflavonas (9).
Las isoflavonas están presentes predominantemente como
glicósidos y en consecuencia son compuestos altamente
polares. Los análisis realizados en numerosos alimentos de
soja indican que las isoflavonas se encuentran más concentradas en aquellos a base de germen de soja derivados del
hipocotiledon (8, 10).
El poroto de soja crudo contiene entre 2 y 4 mg de isoflavonas totales por gramo en base seca. Los alimentos de soja
difieren en su concentración de isoflavonas, pero todos los
tradicionales, tales como el tofu y la “leche” de soja entre
otros, son fuentes ricas de isoflavonas. Debido a su alta polaridad, la salsa y el aceite de soja no contienen isoflavonas.
Mientras que la harina de soja es rica en isoflavonas; el aislado de proteínas de soja contiene menores cantidades (10).
En poblaciones occidentales la ingesta diaria dietaria de isoflavonas es casi nula (<1 mg/d) debido a que los productos
de soja más frecuentemente consumidos en estos países
son los aceites y la lecitina de soja, desprovistos de estos
fitoquímicos (8).
Isoflavonas en soja, contenido de Daidzeina y Genisteina y su importancia biológica
1.3- Características químicas de las
Isoflavonas
Son químicos derivados de fenoles heterocíclicos que exhiben una estructura cerrada similar a los estrógenos. Derivan
biosintéticamente de la unión de un precursor aromático
(hidroxicinamil coenzima-A ester) con un alifático (malonil
coenzima-A). Como compuestos fenólicos típicos, actúan
como potentes antioxidantes. Como compuestos aromáticos
conjugados actuarían protegiendo potentemente contra la
luz UV y atenuando la luz visible (1).
La característica estructural básica de las isoflavonas es el
núcleo flavona, compuesto por dos anillos bencénicos (A y
B) unidos por un anillo pirano heterocíclico (C) (Figura 1).
La posición del anillo benzoico B divide a las flavonas en dos
clases: flavonas (posición 2) e isoflavonas (posición 3). Las
isoflavonas primarias en el poroto de soja son genisteína
(4’.5.7-trihidroxiisoflavona) y daidzeína (4’,7-dihidroxiisoflavona) y sus respectivos β-glicósidos, genistina y daidzina
(los azúcares se unen en la posición 7 del anillo A). En el poroto de soja también se encuentra en menor cantidad gliciteína
(7,4’-dihidroxi-6-metoxiisoflavona) y su glicósido, glicitina.
En alimentos de soja no-fermentados, las isoflavonas están
Figura 1: Estructura química de las isoflavonas
primarias en el poroto de soja (11).
presentes fundamentalmente como conjugados, mientras
que en los productos de soja fermentados, predominan las
agliconas (11).
Además de las isoflavonas encontradas en el poroto de soja,
la microflora intestinal puede convertir la daidzeína en varios
productos diferentes, incluyendo el isoflavonoide equol (7hidroxiisoflavona), dihidrodaidzeína, y O-desmetilangolensin. Debido a las diferencias en las microfloras intestinales,
la producción de equol ocurre en aproximadamente 1 de cada
3 individuos consumidores de soja. Se postuló que en humanos, la genisteína es metabolizada a dihidrogenisteína y 6’hidroxi-O-desmetilangolensina (11).
Se reportaron aproximadamente 364 agliconas de isoflavonas. Los compuestos más investigados e interesantes con
relación a la estrogenicidad son: genisteína, daidzeína, biocanina A y formononetina. La genisteína es el principio activo
que presenta la mayor afinidad al receptor de estrógenos. El
metoxiderivado, biocanina A, no se une a este receptor pero
es estrogénico in vivo. La daidzeína posee mayor afinidad al
receptor de estrógenos que su metoxiderivado, la formononetina, pero ambas son estrógenos débiles in vivo. La metilación
podría ser el mecanismo por el cual la potencia estrogénica
de las isoflavonas se ve reducida. La diferencia de potencia
entre la genisteína y la daidzeína se debe a la presencia del
grupo 5-OH en la genisteína (1).
1.4- Metabolismo de las Isoflavonas en
el organismo humano
Daidzeína
(4’,7-dihidroxiisoflavona)
Genisteína
(4’,5,7-trihidroxiisoflavona)
Gliciteína
(7,4’-dihidroxi-6-metoxiisoflavona)
La forma química en que se encuentran las isoflavonas influye en la actividad biológica, la biodisponibilidad y los efectos
fisiológicos (8).
Hidrólisis
Cuando estos compuestos son ingeridos, los glucósidos de
las isoflavonas de soja son hidrolizados por glucosidasas intestinales, produciendo un aumento de las agliconas daidzeína, genisteína y gliciteína. Esta hidrólisis se lleva a cabo en el
colon proximal a través de enzimas bacterianas (8, 9, 12).
Biotransformación
Las agliconas pueden ser absorbidas o metabolizadas a diferentes compuestos símil-hormonas con capacidades para
unirse con baja afinidad a los receptores estrogénicos. Así,
la genisteína se metaboliza a p-etilfenol y dihidrogenisteína.
Mientras que la daidzeína se convierte en o-desmetilangolesina, equol y otros metabolitos. Esta vía de metabolización es
clínicamente relevante para la eficacia de las isoflavonas de
soja debido a que la potencia estrogénica del equol es un orden de magnitud más alta que la de su precursor, la daidzeína
.
(8, 12)
Conjugación y Excreción
Al igual que los estrógenos, las isoflavonas sufren una circulación enterohepática. Luego estas isoflavonas conjugadas son
excretadas por vía renal y biliar. La excreción urinaria máxima
de las isoflavonas y sus metabolitos ocurre entre las 24 horas
Pág | 57
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 54 | 66
posteriores a la ingesta del alimento. Estudios realizados reportaron además, la excreción urinaria de los metabolitos de
las isoflavonas como el equol (9, 12-14).
La vida media de la daidzeína y genisteína en plasma es de
7.9 h en adultos, la concentración pico ocurre 6 a 8 hs después de la administración del compuesto puro; mientras que
la mayor parte de las mismas se excreta en las primeras 24
horas (8, 12, 15).
Estudios realizados por Watanabe y col. mostraron que administrando iguales cantidades de genisteína y daidzeína
a un grupo de personas voluntarias, las concentraciones en
plasma de genisteína fueron siempre más altas que las de
daidzeína, mientras que la excreción urinaria de daidzeína fue
mucho más elevada que la de genisteína (14, 16).
Farmacocinéticamente se estableció que el volumen de distribución en adultos es grande, indicando una extensa distribución tisular. Se observó una eliminación más rápida de isoflavonas presentes en una matriz líquida que en una sólida
.
(12)
Cuando se consume soja regularmente, los niveles de isoflavonas en plasma exceden las concentraciones de estradiol
plasmáticas (8).
1.5- Acciones biológicas
1.5.1- Acción de las Isoflavonas sobre
los Receptores Estrogénicos
Las isoflavonas son sorprendentemente similares en estructura química a los estrógenos humanos. El anillo fenólico es
un elemento estructural clave en la mayoría de los compuestos que se unen a los receptores de estrógenos. Si se superponen las estructuras del metabolito equol y el estradiol, se
observa que son virtualmente superponibles; la distancia
entre los grupos oxhidrilos de cada extremo de ambas moléculas es casi idéntica (Figura 2).
Analizando solamente la estructura de estos compuestos, no
resulta raro que las isoflavonas se unan a los receptores de
estrógenos (ER), si bien sus acciones pueden ser agonistas y
antagonistas de estrógenos (8). La acción estrogénica de las
isoflavonas, bioquímicamente se basa en que puede aparentemente desplazar el H3 unido al 17β-estradiol de los receptores estrogénicos (5).
Luego de la unión del estrógeno al receptor, el complejo se
contacta con un sitio específico del DNA de la célula para la
transcripción de genes determinados y la inducción de respuestas estrogénicas en el tracto reproductivo, tales como hipertrofia, hiperplasia, etc. Los fitoestrógenos son estrógenos
débiles, por lo tanto su menor afinidad al receptor da como
resultado un complejo menos estable y con capacidad reducida para transformarse (6).
El reciente descubrimiento de un segundo receptor de estrógenos complica la comprensión del mecanismo de acción
de las isoflavonas. Kuiper clonó un nuevo miembro de la fa-
Figura 2: Comparación de las estructuras químicas
del equol, formado en el tracto intestinal humano y
animal, estradiol, dietilestilbestrol y otros fitoestrógenos de origen vegetal (9).
Equol
Estradiol
Dietilestilbestrol
Daidzeína
Genisteína
Formononetina
milia de receptores nucleares, llamado ERβ para distinguirlo
del clásico ERα, ambos receptores pueden jugar diferentes
roles en la regulación de los genes. La extensa distribución
de los receptores en los tejidos y las afinidades de unión de
los ligandos a estos, podría explicar la acción selectiva de los
estrógenos en los distintos tejidos. Se observó que el ERβ se
encuentra en cerebro, hueso, vejiga y epitelio vascular, todos
tejidos que responden a la terapia de reemplazo hormonal
clásica en mujeres menopáusicas. Por otro lado, las afinidades de unión de los diferentes compuestos estrogénicos revelan que tanto los fitoestrógenos como algunos xenoestrógenos ambientales tienen afinidades significativamente más
altas a los ERβ que a los ERα, lo que indicaría que este nuevo
receptor puede ser importante para la acción de estrógenos
no-esteroideos (8).
1.5.2- Estrogenicidad vs.
Antiestrogenicidad
Los fitoestrógenos son interesantes desde el punto de vista
biológico debido a que exhiben, tanto in vitro como in vivo, actividades estrogénicas y antiestrogénicas débiles.
Los primeros efectos estrogénicos de los fitoestrógenos se
observaron como disturbios en el sistema reproductor ovino.
Las isoflavonas estimulan la hipertrofia uterina en animales de laboratorio, exhibiendo de esta manera sus acciones
estrogénicas. Cuando se administra en modelos animales,
Isoflavonas en soja, contenido de Daidzeina y Genisteina y su importancia biológica
genisteína junto con estradiol, la primera funciona como un
antiestrógeno, disminuyendo el efecto del estradiol en el útero (9).
1.6- Efectos Clínicos
1.6.1- Mujeres Premenopáusicas
Estudios realizados en mujeres premenopáusicas sugieren
que las dietas que contienen fitoestrógenos pueden producir
efectos estrogénicos. Una ingesta diaria de proteína vegetal
texturizada (TVP) con 45 mg de isoflavonas modificó el ciclo
menstrual de mujeres premenopáusicas sanas prolongando
su duración. Este efecto no ocurre con proteínas de soja libres
de isoflavonas, por lo tanto da evidencia de que las dietas que
contienen fitoestrógenos ejercen un efecto endocrino-modulador y que ocurre a nivel del eje hipotálamo-hipófisis-gonadal
.
(8, 17)
La duración del ciclo menstrual, mostrado como dato epidemiológico, es uno de los factores de riesgo para el cáncer de
mama, si bien las razones de esta asociación no son del todo
claras. El ciclo promedio en países occidentales, en los cuales
el riesgo de cáncer de mama es alto, es de 28-29 días, mientras que en mujeres japonesas es de 32 días donde el riesgo
de cáncer de mama es cuatro a cinco veces menor (8).
Las concentraciones de fitoestrógenos en orina y plasma
de mujeres japonesas con dieta tradicional son altas, como
así también en las vegetarianas; y la incidencia de cáncer de
mama, de endometrio y de ovario en este grupo de mujeres
es bajo. Un estudio confirmó la idea que las dietas ricas en fitoestrógenos pueden ofrecer un efecto protector beneficioso,
demostrándose una relación inversa entre el riego de cáncer
de mama y la excreción de fitoestrógenos urinarios (8).
1.6.2- Mujeres Postmenopáusicas
Los datos epidemiológicos muestran que con una dieta rica
en isoflavonas, existe una reducción del 40 al 55% de los síntomas postmenopáusicos en un período de 12 semanas de
consumo. Se reportaron efectos de estas sustancias tanto
sobre el epitelio vaginal de estas mujeres, como así también
en los sofocos de calor característicos de esta etapa. Los estudios sugieren que estos fitoestrógenos son capaces de actuar como estrógenos débiles, particularmente en presencia
de bajo status de estrógenos endógenos, como en el caso de
las mujeres postmenopáusicas (8).
Estudios realizados recientemente demostraron que las isoflavonas de soja per se, cuando se consumen como constituyentes de aislados de proteínas de soja, bajan las concentraciones de LDL-colesterol y la relación LDL/HDL-colesterol en
mujeres postmenopáusicas normo e hipercolesterolémicas.
Esta acción podría asociarse con la reducción del riesgo de
enfermedades arteriocoronarias (18).
1.6.3- Efectos Anticancerígenos
Las isoflavonas presentan actividad anticarcinogénica in
vivo. Animales de laboratorio alimentados con una dieta fortificada con soja, muestran menor proliferación de células
tumorales mamarias luego de la estimulación con agentes
inductores directos e indirectos (9, 19).
La genisteína es la isoflavona de mayor interés hasta el presente; in vitro, en líneas celulares humanas posee efectos
proliferativos (estrogénicos) y antiproliferativos (antiestrogénicos). En líneas celulares de cáncer de mama MCF-7
receptor de estrógenos (ER) positivas, estos efectos son
bifásicos y dependen de la concentración, a bajas concentraciones de genisteína (10 –5 – 10 –8 M) estimula el crecimiento celular y a altas concentraciones (10 –4 – 10 –5 M) lo
inhibe. A bajas concentraciones la genisteína compite con el
estradiol por la unión al ER con una concentración inhibitoria
media de 5 x 10 –7 M y estimula la expresión del pS2 mRNA,
un marcador específico de actividad símil estrógeno mediado por ER (9).
Se postula que la genisteína, y quizás otros fitoestrógenos,
inhibe el crecimiento de células tumorales por intervención
en la actividad de la tirosina quinasa de los receptores del
factor de crecimiento activado y de la tirosina quinasa citoplasmática e inhibe las tropoisomerasas de DNA, las cuales
son esenciales para la transducción de señales mitogénicas
. Resultados de un estudio reciente en células de cáncer
(9)
de mama humana reveló que la genisteína posee acciones
estrogénicas; en un rango de concentración fisiológicamente relevante, actuaría como un agonista reemplazante de
estrógenos y como un regulador del crecimiento. El efecto
antiestrogénico de los fitoestrógenos se observó in vivo; a
concentraciones de 10 a 100 veces más altas que el estradiol son capaces de competir con los estrógenos endógenos,
unirse al receptor de estrógenos y prevenir un crecimiento
estimulado por estrógenos (1).
Cáncer de Próstata
Estudios epidemiológicos mostraron una buena correlación entre la disminución del riesgo de cáncer de próstata
y la alta consumición de alimentos de soja, que provoca un
aumento en los niveles de fitoestrógenos (isoflavonas) en
sangre (20). El fitoestrógeno genisteína, un inhibidor de la
5-α-reductasa, fue detectado en fluido prostático humano
como un agente inductor de apoptosis (muerte celular). Davis y colaboradores (21) investigaron el efecto inhibitorio de
la genisteína sobre el crecimiento de células de cultivos y su
efecto sobre la expresión de genes involucrados en la regulación del ciclo celular y la apoptosis. Estos investigadores
encontraron que la genisteína puede modular genes específicos involucrados en la inhibición del crecimiento celular
y en la apoptosis.
Lamartiniere y colaboradores (22) evaluaron la protección de
la genisteína contra el cáncer de próstata realizando una in-
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 54 | 66
ducción química con N-metilnitrosurea al cáncer de próstata en ratas. La genisteina de la dieta inhibió el desarrollo de
adenocarcinomas invasivos de manera dosis-dependiente.
Cáncer de Mama
Se observó que la genisteína inhibe el crecimiento de células
de mama cancerígenas in vitro. Por otro lado esta isoflavona también inhibe un proceso conocido como angiogénesis
(crecimiento de nuevos vasos sanguíneos), este proceso es
esencial para que los tumores aumenten su tamaño. Esto
indica que compuestos que puedan inhibir la angiogénesis,
podrían inhibir el crecimiento del cáncer. Además, la actividad
antioxidante de estas isoflavonas protegería a las células del
daño de los radicales libres, los cuales iniciarían el proceso
del cáncer (23).
En 2002, Lamartiniere y colaboradores (22) demostraron en un
estudio realizado con ratas, que el tiempo de exposición a la
genisteína es importante para la quimioprevención del cáncer.
Observaron que la quimioprevención ejercida por la genisteína
contra el cáncer de mama es efectiva luego de tratamientos
efectuados con dicha isoflavona en estado puberal y prepuberal, pero no luego de tratamiento con genisteina solo en la
vida adulta. Datos epidemiológicos soportan este concepto;
mujeres asiáticas que han consumido tofu durante la adolescencia pero no en la vida adulta tienen una menor incidencia
de cáncer de mamas comparado con aquellas que nunca consumieron tofu o solo lo han hecho en la vida adulta(5).
1.6.4- Efectos Cardiovasculares
Los efectos hipocolesterolémicos de las proteínas de soja se
conocen desde hace más de 30 años. Estudios realizados en
animales muestran que la sustitución de las proteínas animales de la dieta por proteínas de soja, reduce las concentraciones plasmáticas de colesterol total y LDL-colesterol. El mecanismo exacto de este efecto parecería ser multifactorial. Las
proteínas de soja poseen el efecto de aumentar la excreción
fecal de ácidos biliares y alterar la síntesis de estos ácidos,
uno de los mecanismos responsables de la regulación de la
homeostasis del colesterol. La secreción hepática del colesterol también se encuentra incrementada (8, 24).
Aparte de los efectos sobre los lípidos, podrían existir otros
beneficios de los fitoestrógenos que serían relevantes para
la disminución del riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Las propiedades antioxidantes, que ejercerían una acción
cardioprotectora, pueden contribuir a reducir la oxidación de
los lípidos. Se observó que la genisteína incrementa la resistencia a la oxidación del LDL-colesterol in vitro, y esta isoflavona es el antioxidante más potente de la soja (8, 25).
La ateroesclerosis, una respuesta secundaria a la hipercolesterolemia y dislipemia, empeora la reactividad vascular coronaria. En un estudio realizado con monos rhesus ateroescleróticos, se vio que las isoflavonas pueden reducir la reactividad
Pág | 59
vascular coronaria por aumento de la dilatación sanguínea;
si bien el mecanismo de este efecto sobre el endotelio no es
del todo claro. Se observó también que la genisteína inhibe el
proceso de coagulación, un promotor clave en la formación de
la placa ateromatosa y que este efecto estaría mediado por
la inhibición de factores de crecimiento tales como el factor
de crecimiento derivado de plaquetas y alteraciones en la formación de trombina. El mecanismo estaría relacionado con la
potente inhibición ejercida por la genisteína sobre la tirosina
quinasa, enzima importante en la síntesis de trombina y en el
proceso de inflamación general (8).
1.7- Distribución de las isoflavonas
en el poroto de soja
La concentración de las isoflavonas (expresada en % en
peso) es más alta en el hipocotiledon y más baja en la cáscara. El cotiledon posee alrededor del 20% del contenido de
las isoflavonas glucosídicas. La distribución de las isoflavonas individuales también es diferente en el hipocotiledon y
en el cotiledon. En el hipocotiledon, las más abundantes son
las formas glucosídicas daidzina y glicitina, mientras que en
el cotiledon se encuentran aproximadamente 20 veces más
de genisteína que en el hipocotiledon (26).
El germen de soja representa la matriz que contiene concentraciones de isoflavonas de 6 a 10 veces más altas que las
encontradas en otros alimentos de soja. El germen de soja
comercial recibe un paso de tostado seco intenso. Este paso
de calentamiento altera la distribución de las isoflavonas
más que el calor por extrusión (27). Kim y col. en su trabajo
recientemente publicado compararon la composición de las
isoflavonas en las diferentes partes de la semilla de soja y
encontraron que el germen es la parte del porto más rica en
estos fitoestrógenos (28).
Nakamura Y. y colaboradores (29), en un estudio realizado en
2001, observaron que la composición de las isoflavonas difiere significativamente en los diferentes estadíos de crecimiento de los porotos. El porcentaje de agliconas disminuye
desde los borotes hacia el poroto inmaduro y luego al maduro,
mientras que el porcentaje de glucósidos aumenta en orden
contrario. La actividad biológica de las isoflavonas es más
fuerte en la forma aglicona que en la forma glucósida. Esto
indicaría que las isoflavonas tales como daidzeina, gliciteina
y genisteina tienen un rol específico durante las etapas de
crecimiento del poroto.
1.8 - Bioquímica de las Isoflavonas en
el poroto de soja
En el poroto de soja crudo, las tres familias más importantes
de isoflavonas, la genisteína, la daidzeína, y la gliciteína, se
encuentran en una relación de aproximadamente 6:3:1 respectivamente. Cada una de estas existe en cuatro formas
Isoflavonas en soja, contenido de Daidzeina y Genisteina y su importancia biológica
químicas, como agliconas (genisteína, daidzeína y gliciteína), como β-glucósidos (genistina, daidzina, y glicitina),
como acetil-glucósido (6OAcGlc) (6’’-O-acetilgenistina, 6’’-Oacetildaidzina, y 6’’-O-acetilglicitina), y como malonil-glucósido (6OMalGlc) (6’’-O-malonilgenistina, 6’’-O-malonildaidzina, y 6’’-O-malonilglicitina) (3). Debido a la hipótesis de que
las formas agliconas podrían ser las más bioactivas, conocer
el efecto del procesamiento sobre la composición exacta de
las isoflavonas y sus cuatro formas es muy importante (30),
figura 3.
En los porotos de soja crudos no procesados, la forma predominante de las isoflavonas es el 6’’-O-Malonil. Estas formas
malonil se decarboxilan durante el tiempo de extracción para
originar las formas acetil (27).
Los alimentos de soja fermentados tales como el miso y el
tempeh contienen las agliconas no conjugadas de las isoflavonas, mientras que los alimentos no fermentados (“leche”
de soja, tofu, harina, concentrado de proteína de soja) contienen sus β-glucósidos conjugados. Coward y colaboradores
recuperaron las isoflavonas por extracción en caliente,
(31)
con solventes orgánicos acuosos tales como acetonitrilo,
etanol o metanol. Este estudio mostró que los conjugados
glucósidos de las isoflavonas fueron fácilmente alterados durante la extracción, procesamiento y cocción. Los conjugados
6OMalGlc fueron inestables al calor. El calentamiento acuoso,
como en el caso de la extracción con metanol acuoso, causó
la conversión hacia los conjugados β-glucósidos. La extracción a temperatura ambiente también condujo a pérdidas de
los conjugados 6OMalGlc, pero en una relación mucho menor.
Los conjugados 6OMalGlc fueron estables durante más de 24
horas a 4 ºC, pero la conservación por varios días en frío también causó pérdidas de los mismos.
Figura 3: Estructuras químicas de los conjugados
glucósidos de la genisteína encontrados en los
alimentos de soja. A, 6’’-O-malonil-β-glucósido; B, βglucósido; C, 6’’-O-acetil-β-glucósido (31).
A
B
C
1.9- Influencia del procesamiento
industrial sobre el contenido y la
composición de las isoflavonas
Se observó que la molienda para producir la harina de soja y
la extracción con hexano para remover las grasas no altera
la conjugación glucosídica. El calor, como en el tostado de la
harina de soja o la extrusión usada para producir proteína vegetal texturizada (TVP), causa pérdidas de dióxido de carbono
y lleva a la formación de cantidades sustanciales de los conjugados 6OAcGlc. Las formas 6’’-O-Acetil solo se encuentran
en los productos de soja que son sometidos a un tratamiento
con calor seco. La extracción acuosa en caliente, usada para
producir el tofu o la “leche” de soja, resulta casi en su totalidad
en la formación de conjugados β-glucósidos. La fermentación, para producir miso y tempeh, causa una pérdida de glucósidos para formar las agliconas. La cocción en horno de los
productos alimenticios da como resultado mayoritariamente
los conjugados β-glucósidos, mientras que los productos fritos contienen más 6OAcGlc conjugados (27, 31).
Los procesos que involucran líquidos, tales como el lavado, el
remojado y la ebullición, reducen el contenido de isoflavonas
totales (30).
1.1O- Acción de las β-glucosidasas
endógenas
En los productos de soja que son procesados con agua, las
β-glucosidasas nativas de la soja están activas previo al tratamiento con calor generando las agluconas, como en el remojado de los granos de soja previo al proceso de la “leche” de
soja. Mientras que el proceso de fermentación de los alimentos de soja para producir miso y tempeh da como resultado
la producción de agluconas por acción de las β-glucosidasas
microbianas (27).
Cuando los porotos son remojados en agua, la enzima β-glucosidasa endógena hidroliza las formas glicósidas a sus formas agluconas. La enzima β-glucosidasa puede hidrolizar la
genistina completamente y formar genisteína estequiométricamente.
Pandjaitan y col. (32) evaluaron las condiciones de mayor actividad hidrolítica de estas enzimas durante el proceso de obtención del concentrado de proteína de soja. Concluyeron que
el pH óptimo es de 5; la temperatura óptima es de 50 ºC; y el
tiempo de incubación es de 1 hora.
2- OBJETIVOS
El objetivo principal del presente trabajo consistió en analizar el contenido de las isoflavonas genisteína y daidzeína en
porotos de soja, sean o no manipulados genéticamente y en
subproductos del aprovechamiento industrial del poroto seleccionando diferentes líneas de producción: harina desgra-
Pág | 61
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 54 | 66
sada, “leche”(bebida de soja), tofu; y evaluar las posibles pérdidas de estas isoflavonas durante el proceso de elaboración.
Como objetivo complementario se planteó desarrollar y poner
a punto la metodología analítica apropiada para las diversas
matrices involucradas en estos estudios sobre isoflavonas.
3- MATERIALES Y MÉTODOS
3.1- Muestras
Las semillas de soja orgánicas y modificadas genéticamente fueron provistas por industrias del sector; igualmente las
de harinas desgrasadas. Además se procuraron semillas no
tratadas térmicamente directamente de productores. Las
muestras de “leche” de soja y tofu se prepararon a escala
de laboratorio mediante procedimientos publicados por W.J.
Mullin y col. (33).
Los procesos de extracción se realizaron tal cual lo detallaron Wang H. y Murphy P en su trabajo publicado en 1994 en
el Journal Agricultural Food Chem. (34).
Debido a que existen ciertas pérdidas en los pasos de extracción de las isoflavonas, se debe usar un standard interno (S.I.) para precisar la cuantificación de las mismas; en
nuestro trabajo utilizamos Flavona con S. I.
Figura 4: Comatograma correspondiente a una matriz fortificada con Daidzeína (1), Genisteina (2) y Estándar
Interno Flavona (3), con los respectivos tiempos de retención.
2
1
3
Isoflavonas en soja, contenido de Daidzeina y Genisteina y su importancia biológica
3.2- Método Analítico para la
valoración de isoflavonas
3.2.1- Equipamiento analítico utilizado
Para el análisis cromatográfico se utilizó un Cromatógrafo Líquido LaChrom Hitachi. La columna utilizada para realizar la
separación fue una LichroCART 125-4, RP-18 (5 μm) de Agilent Technologies.
corrida de mezcla de testigos y estándar interno. Las mismas se separan de acuerdo a su polaridad. Primero aparece
la daidzeina (la más polar), luego genisteína y por último la
Flavona.
4- RESULTADOS Y DISCUSIÓN
4.1-Validación del Método
Cromatográfico
3.2.2- Patrones y Reactivos
(Ver Tabla 1)
Los patrones utilizados para la identificación y cuantificación
de las isoflavonas, Genistein, Daidzein, y flavona fueron obtenidos de ICN. Todos los solventes utilizados (metanol, AcN,
agua) fueron de calidad HPLC. El ácido acético utilizado para
la fase móvil también fue de calidad HPLC.
4.2- Análisis de los datos obtenidos
3.2.3- Condiciones Cromatográficas
Las isoflavonas absorben la luz UV a 262 nm, por ello elegimos esta longitud de onda tal como lo hizo Eldrige (35).
La fase móvil elegida consistió en una mezcla de Acido Acético en agua (0.1%) y AcN, usada por Wang y Murphy (36). Para
lograr la separación deseada utilizamos un gradiente no lineal. El caudal de la fase móvil fue de 1 ml/min. Las corridas
se realizaron a temperatura ambiente.
La figura 4 (Ver página anterior) muestra un cromatograma
típico de las isoflavonas analizadas correspondiente a una
4.2.1- Contenido de Isoflavonas en
semillas de diferentes variedades de
soja
El contenido de isolfavonas en las semillas utilizadas para la
comparación se detalla en la tabla 2. Las muestras analizadas corresponden a dos variedades de soja no transgénica
y cuatro variedades de soja transgénica.
Encontramos que en las semillas de sojas no transgénicas
el contenido de genisteina fue mayor al de daidzeina; mientras que en las sojas transgénicas se observó lo inverso, la
concentración de genisteina fue menor que la de daidzeina;
tal como lo describe la bibliografía consultada (30).
Los rangos de variabilidad son muy marcados, esto también
lo observaron Simonne y col. (52) en su trabajo publicado el
Tabla 1: Parámetros de validación. C.V.%: coeficiente de variación porcentual.
L.D.: límite de detección. L.C.: límite de cuantificación.
DAIDZEINA
GENISTEINA
y = 1.0627x + 0.3427
r = 0.9904
y = 0.2431x + 0.032
r = 0.9988
L. D.
0.029 ppm
0.096 ppm
L. C.
0.117 ppm
0.389 ppm
C.V.% INTRAENSAYO
1.32 %
2.87 %
C.V.% INTERENSAYO
8.91 %
8.73%
RECUPERACION
102 %
85.1%
LINEALIDAD
Tabla 2: Comparación de Concentraciones de Daidzeina y Genisteina en las diferentes Variedades de Soja. Soja
No Transgénica A (S.No T. A); Soja No Transgénica B (S. No T. B); Soja Transgénica C (S.T.C); Soja Transgénica D
(S. T. D); Soja Transgénica E (S. T. E); Soja Transgénica F (S. T. F).
S. No T. A
S. No T. B
S. T. C
S. T. D
S. T. E
S. T. F
Daidzeina (ppm)
5.28 ± 0.27
1.08 ± 0.26
50.2 ± 5.9
53.12 ± 11.05
20.44 ± 1.23
54.19 ± 4.92
Genisteina (ppm)
27.84 ± 0.46
4.18 ± 0.89
41.79 ± 7.06
15.66 ± 2.31
0.16 ± 0.12
38.28 ± 3.48
Pág | 63
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 54 | 66
Tabla 3: Contenido de Daidzeina y Genisteina durante el proceso de elaboración de la bebida de soja y tofu a
partir de soja no transgénica B.
Soja
Bebida (“leche”)
Okara
Tofu
Daidzeina (ppm)
1.08 ± 0.26
0.30 ± 0.42
0.36 ± 0.10
ND
Genisteina (ppm)
4.18 ± 0.89
1.72 ± 0.14
4.22 ± 0.71
0.86 ± 0.12
Tabla 4: Contenido de Daidzeina y Genisteina durante el proceso de elaboración de la bebida de soja y tofu a
partir de soja desgrasada transgénica variedad D.
Semilla
Bebida (“leche”)
Okara
Tofu
Daidzeina (ppm)
53.12 ± 11.05
2.24 ± 0.59
13.22 ± 2.53
0.92 ± 0.12
Genisteina (ppm)
15.66 ± 2.31
2.88 ± 0.43
10.17 ± 2.43
4.64 ± 0.24
año 2000 donde analizaron diferentes variedades de sojas
comerciales.
Comparando los contenidos de Daidzeina y Genisteina
mediante el análisis estadístico de ANOVA, encontramos
que hay diferencias estadísticamente significativas (p =
0.0000) en las concentraciones de Genisteina y Daidzeina,
para un nivel de confianza de 95%.
4.2.2- Contenido de isoflavonas en los
subproductos de la industrialización
de las diferentes variedades de soja
Soja No Transgénica
Para evaluar el efecto del proceso de elaboración en el
contenido de daidzeina y genisteina, procesamos soja no
transgénica elaborando a escala de laboratorio, tal como se
detalló en Materiales y Métodos, la bebida de soja y luego
el tofu. Analizamos el contenido de ambas isoflavonas en
cada paso del proceso de elaboración, la bebida (“leche”), el
okara, tofu y residuo acuoso del tofu o suero. En este último
producto del proceso no se detectaron las isoflavonas analizadas por lo que no aparecen valores en tablas y figuras.
En la tabla 3 se observan los valores obtenidos en la cuantificación de las isoflavonas.
Así el contenido de Daidzeína encontrado en la bebida representa el 18.1 %, expresado en base seca, del contenido total
de esta isoflavona en la semilla seca. Mientras que el contenido de Genisteína en la bebida es el 27.2 % del contenido
total en semilla.
Para el okara los porcentajes fueron 16% y 48.9% para Daidzeina y Genisteína respectivamente. La pérdida de isoflavonas a través de este residuo fue considerable.
Finalmente para el tofu obtuvimos solamente Genisteína
que representó el 12.1% de la concentración inicial en semillas.
Estos resultados podemos compararlos con los encontrados por Jackson y colaboradores (53) en su trabajo realizado
en 2002, donde evaluaron el efecto del procesamiento de
manufactura de la bebida de soja y el tofu sobre el contenido de isoflavonas totales. La recuperación de isoflavonas
desde el poroto de soja hasta el tofu fue del 67% en este estudio; mientras que Wang y Murphy (36) obtuvieron 36% de
recuperación en una evaluación similar.
Murphy y col. (37) evaluaron el contenido de fitoestrógenos
en subproductos de soja y también encontraron disminuciones significativas de las concentraciones de genisteína
en todos los productos examinados (bebida y tofu). Resultados similares encontraron Wang y col. (38)
Soja Transgénica
La misma evaluación se realizó en soja transgénica variedad D (semilla Nidera 8000), la Tabla 4 muestra los datos
correspondientes para ambas isoflavonas. Se observa que
la pérdida de Genisteina, durante el proceso de elaboración
de la bebida y el tofu, se produce fundamentalmente en el
residuo okara. Al igual que en la variedad anterior, en el residuo acuoso del tofu no detectamos isoflavonas.
La distribución de las isoflavonas en cada subproducto difirió de la encontrada en la variedad anterior. En la bebida
estos valores fueron de 2.8% y 11.7% para Daidzeína y Genisteína respectivamente. En okara 12.1% y 31.6%; y en tofu
1.02% y 17.3% para Daidzeina y Genisteina respectivamente. Las pérdidas nuevamente son importantes, y podemos
suponer que también existen pérdidas de isoflavonas en el
agua de remojo, pero esta última no fue analizada.
Se analizaron de igual modo las otras variedades de soja
transgénicas arribando a resultados similares a los encontrados en la variedad anterior.
Isoflavonas en soja, contenido de Daidzeina y Genisteina y su importancia biológica
Tabla 5: Concentraciones de Daidzeina y Genisteina de las diferentes harinas desgrasadas analizadas.
Harina A
Harina B
Harina C
Harina D
Daidzeina (ppm)
2.40 ± 0.12
11.72 ± 0.74
2.16 ± 0.26
5.7 ± 0.58
Genisteina (ppm)
17.4 ± 1.09
32.97 ± 0.55
16.86 ± 0.79
10.58 ± 0.67
4.2.3- Contenido de Isoflavonas en
diferentes harinas desgrasadas de soja
Tal como se expresó en Materiales y Métodos, se analizaron muestras de harinas de soja desgrasadas para evaluar
el contenido de Daidzeína y Genisteína. Tomamos cuatro
harinas provistas por industrias de la zona. Por cuestiones
prácticas las denominamos como Harina A, B, C y D. La tabla
5 muestra los resultados obtenidos para cada una de las
mismas.
Se observa una marcada variación en el contenido de isoflavonas en las diferentes variedades estudiadas, pero en
todas las concentraciones de Genisteína superaron a la de
Daidzeína.
El análisis estadístico arrojó para Daidzeína y Genisteína p
= 0.000, es decir, que existen diferencias estadísticamente
significativas entre todos los tipos de harinas procesadas.
En un trabajo realizado por Batt y col. (39) donde se cuantificó el contenido de isoflavonas en harinas de soja desgrasadas industriales, las concentraciones fueron muy variables
encontrando mayor cantidad de Daidzeína que Genisteína.
De todos modos, las muestras contenían un alto porcentaje
de isoflavonas glicosiladas.
5- CONCLUSIONES
El método cromatográfico desarrollado y validado es un
método sencillo, preciso y de buena sensibilidad. Resultó
eficazmente útil para analizar el contenido de Genisteína y
Daidzeína en las muestras procesadas.
Observando los datos obtenidos en la cuantificación de Genisteína y Daidzeína, en las diferentes variedades de soja,
vemos que existe una importante fluctuación en las concentraciones de las agliconas, especialmente en las variedades
transgénicas. Nuestros hallazgos nos parecen interesantes porque observamos una inversión en la relación de las
isoflavonas analizadas. En las variedades no transgénicas
el contenido de Genisteína es mayor que el de Daidzeína,
mientras que esta relación cambia en las variedades modificadas genéticamente. Sobre todo si tenemos en cuentas
que la Genisteína es el fitoestrógeno biológicamente más
activo. No hemos encontrado referencias de estudios anteriores donde se analicen las relaciones de concentración de
isoflavonas en variedades de soja modificadas y no modificadas genéticamente.
Respecto a la evaluación de las concentraciones de estos
fitoestrógeneos en los sub-productos derivados de la soja,
encontramos que existen pérdidas de los mismos a lo largo del proceso de elaboración. El residuo okara mostró una
retención importante de isoflavonas durante la preparación
de la bebida de soja a partir del poroto, lo que explicaría la
caída en la concentración de Daidzeína y Genisteína en los
productos derivados. Respecto al residuo o suero del tofu,
no hemos encontrado pérdidas importantes de ambas isoflavonas ya que en todos los casos tanto Daidzeína como
Genisteína no fueron detectadas por nuestro sistema cromatográfico.
Las concentraciones de las isoflavonas Genisteína y Daidzeína en semillas de soja y subproductos varían dramáticamente. En primer lugar la manipulación genética tiene,
impacto significativo sobre la composición y cantidad de
Genisteína y Daidzeína en las semillas. En segundo lugar los
procesos tecnológicos de manufactura también afectan las
concentraciones de estas isoflavonas.
Resulta importante profundizar la investigación de los efectos de las condiciones de procesos sobre la retención de las
isoflavonas. Aún más, son necesarios nuevos procesos tecnológicos o modificaciones de los procesos ya existentes
para minimizar las pérdidas de los fitoestrógenos durante
los mismos.
Nuestro trabajo suma un humilde aporte a tan necesarios
avances en este campo, teniendo en cuenta especialmente
la importancia de obtener alimentos saludables y que respondan a las exigencias cada vez más altas de los consumidores en orden a alcanzar una mejor calidad de vida.
6. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
1. Manzur, W., and Adlercreutz, H.. Natural and anthropogenic
environmental oestrogens: the scientific basis for risk
assessment. Naturally occurring oestrogens in food.
Pure & Appl. Chem., Vol. 70, Nº 9, 1759-1776. 1998.
2. Métodos de investigación en Fitoestrógenos. Química,
análisis y propiedades biológicas. SOYANOTICIAS.
www.ag.uiuuc.edu. Diciembre de 1998.
3. Kurzer, M. S. Dietary phytoestrogens. Annu. Rev. Nutr.
17:353-381. 1997.
4. Uzzan, M. and Labuza, T. Critical issues in R&D of Soy
Isoflavone-enriched foods and dietary supplements. J.
Food Scince 2004 ; 69: 77-86.
5. Barnes S. Soy Isoflavones– Phytoestrogens and What
Else? J. Nutr. 2004 ; 134: 1225S-1228S.
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 54 | 66
6. Rickard and Thompson, L.. Phytoestrogens and
Lignans: Effects on Reproduction and Chronic Disease.
S. Antinutrients and Phytochemicals in Food. Fereidoon
Shahidi EDITOR. Memorial University of Newfomdland.
American Chemical Society, Washington DC. 1997.
7. Mazur, W., Duke, J., Wahala, K,. Rasku, S., and Adlercreutz,
H.. Isoflavonoids and lignans in legumes: nutritional and
health aspects in humans. Nutritional Biochemistry
1998; 9: 193-200.
8. Stechell, K. and Cassidy, A.. Dietary Isoflavones:
Biological Effects and Relevance to Human Health. J. of
Nutrition 1999; 129: 758-767.
9. Murkies, A., Wilcox, G. and Davis, S.. Phytoestrogens. J.
of Clin. Endocrinology & Metabolism Vol. 83, No. 2, 297303. 1998.
10. Anderson, J.W.. Isoflavone concentration in soyfoods.
www.soyfoods.com.
11. Messina, Mark J.. Legumes and soybeans: overview of
their nutritional profiles and health effects. Am. J. of
Clin. Nutrition, Vol. 70, No. 3, 439S-450S. 1999.
12. Stechell, K.. Absorption and Metabolism of Soy
Isoflavones from Food to Dietary Supplements and
Adults to Infants. J. of Nutrition. 130:654S-655S.
2000.
13. Stechell, K.. Phytoestrogens: the biochemestry,
physiology, and implications for human health of soy
isoflavones. Am. J. Clin. Nutr. 68:1333S-1346S. 1998.
14. Andlauer, W. et al. Absorption and metabolism of
genistein in isolated rat small intestine. J. of Nutr.
130:843-846. 2000.
15. Watanabe, S., Yamaguchi, M., Sobue, T., Takahashi, T.,
Miura, T., Arai, Y., Mazur, W., Wahala, K. and Adlercreutz,
H.. Pharmacokinetics of Soybean Isoflavones in Plasma,
Urine and Feces of Men after Ingestion of 60 g Basked
Soybean Powder (Kinako). J. of Nutr. 128:1710-1715.
1998.
16. Zhang, Y., Song, T., Cunnick, J., Murphy, P. and Hendrich,
S.. Daidzein and Genistein Glucuronides in vitro are
Weakly Estrogenic and Activate Human Natural Killer
Cells at Nutritionally Relevant Concentrations. J. of
Nutr. 129:399-405. 1999.
17. Cassidy, A., Bingham, S. and Setchell, K.D.. Biological
effects of a diet of soy protein rich in isoflavones on the
menstrual cycle of premenopausal women. Am. J. Clin.
Nutr. 60:333-340. 1994.
18. Wangen, K.E., Duncan, A., Xu, X., and Kurzer,
M.. Soy isoflavones improve plasma lipids in
normocholesterolemic and mildly hypercholesterolemic
portmenopausal women. Am. J. Clin. Nutr. 73:225-231.
2001.
19. Coward, L., Barnes, N., Setchell, K., Barnes, S.. Genistein,
Daidzein, and theri B-glycoside conjugates: antitumor
isoflavones in soybean foods from american and asian
diets. J. Agri. Food Chem. 41, 1961-1967. 1993.
20. Adlercreutz, H., Mazur, W., Bartels, P., Elomaa, V.,
Pág | 65
Watanabe, S., Wahala, K., Landstrom, M., Lundin, E.,
Bergh, A., Damber, J., Aman, P., Widmark, A., Johansson,
A., Zhang, J. and Hallmans, G. . Phytoestrogens and
prostate disease. J. Nutr. 130 : 658S-659S. 2000.
21. Davis, Joanne, N., et al. Molecular mechanism of cell
growth inhibition and apoptosis induced by isoflavonegenistein in prostate cancer cell lines. Proc. Amer. Assoc.
Cancer Res. 39. 1998.
22. Lamartiniere, C., Cotroneo, M., Fritz, W., Wang, J., MentorMarcel, R. and Elgavish A. Genistein chemoprevention:
Timing and mechanisms of action in Murine Mammary
and Prostate. J. Nutr. 132: 552S-558S. 2002.
23. Hasler, Clare, M.. Phytoestrogens and Breast Cancer.
Proc. Amer. Assoc. Cancer Res. 39. 1998.
24. Brouns, F.. Soya isoflavones: a new and promissing
ingrediente for the health foods sector. J. Agri. Food
Chem. 35, 187-193. 2002.
25. Stechell, K.. Soy Isoflavones. Benefits and risks from
nature’s Selective Estrogen Receptor Modulators
(SERMs). J. Am. College of Nutr. 20:354S-362S. 2001.
26. Eldridge, A. and Kwolek, W. Soybeans isoflavones: effect
of environment and variety on composition. J. Agric. Food
Chem. 31:394-396. 1983.
27. Murphy, P., Barua, K., Hauck, C. Solvent extraction
selection en the determination of isoflavones in soy
foods. J. Chrom. B. 777:129-138. 2002.
28. Kim, J., Hong, S., Jung, W., Yu, C., Ma, K., Gwag, J., Chung,
I. Comparison of isoflavones composition in seed,
embryo, cotyledon and seed coat of cooked-with-rise
and vegetable soybean (Glycine max L.) varieties. Food
Chem. 15 September 2006.
29. Nakamura, Y., Kaihara, A., Yoshii, K., Tsumura, Y.,
Ishimitsu, S. and Tonogai, Y. Content and Composition
of Isoflavonoids in Mature or Immature Beans and Bean
Sprouts Consumed in Japan. J. Health Science. 47(4)
394-406. 2001.
30. Grün, I., Adhikari, K., Li, C., Lin, B., Zhang, J. and Fernando,
L.. Changes en the profile of Genistein, Daidzein, and their
conjugates during thermal processing of Tofu. J. Agric.
Food Chem. 49:2839-2843. 2001.
31. Coward, L., Smith, M., Kirk, M. and Barnes, S.. Chemical
modification of isoflavones during cooking and
processing. Am. J. Clin. Nutr. 68:1486S-91S. 1998.
32. Pandjaitan, N., Hettiarachchy, N. and Ju, Z.U.. Enrichment
of Genistein in soy protein concentrate with βglucosidase. J. Food Sc. 65:3. 403-407. 2000.
33. Cheftel, J.C., Cuq, J.L. and Lorient, D. “Proteines
Alimentaires”. Tec & Doc Lavoisier, Paris. 1985.
34. Wang, H. and Murphy, P. Isoflavone composition of
American and Japanese soybeans in Iowa: effects of
variety, crop year, and location. J. Agric. Food Chem. 42:
1674-1677. 1994.
35. Eldridge, A.. High-performance liquid chromatography
separation of soybean isoflavones and their glucosides.
J. Chromatography. 234, 494-496. 1982.
Isoflavonas en soja, contenido de Daidzeina y Genisteina y su importancia biológica
36. Wang, H.J. and Murphy, P.A.. Mass balance study of
isoflavones during soybean processing. J. Agric. Food
Chem. 44, 2377-2383. 1996.
37. Murphy, P. Phytoestrogen content of processed soybean
products. Food Technology. January 1982.
38. Wang, C., Ma., Q., Pagadala, S., Sherrard, M., and Krishnan,
P.. Changes of isoflavones during processing of soy
protein isolates. J. AOCS, 75. Nro. 3. 1998.
39. Batt, H., Thhmas, R., Rao, A.. Characterization of isoflavones
in membrane-processed soy protein concentrate. J. Food
Science. 68, Nro. 1. 2003.
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 67 | 70
Pág | 67
Ferremia: ¿biomarcador de exposición humana al plomo?
Fernando D. Ventimiglia1
Laura Mauleón1
Liliana Bruzzone2
Nilda E. Fink3
Alfredo Salibián4
1 Bioquímico
2 Doctora en Química
3 Doctora en Farmacia y Bioquímica
4 Doctor en Ciencias Biológicas
Lugar de Trabajo:
Cátedra de Hematología, Departamento
de Ciencias Biológicas y Departamento
de Ciencias Químicas, Facultad de
Ciencias Exactas, Universidad Nacional
de La Plata. Calles 47 y 115, 1900 La
Plata, Argentina.
Comisión de Investigaciones Científicas
de la Provincia de Buenos Aires y
Programa de Ecofisiología Aplicada de
la Universidad Nacional de Luján. 6700
Luján, Argentina.
Enviar Correspondencia a:
Dra. Nilda E. Fink
Cátedra de Hematología
Departamento de Ciencias Biológicas
Facultad de Ciencias Exactas
Universidad Nacional de La Plata
47 y 115
1900 La Plata
Argentina
e-mail: fink@biol.unlp.edu.ar
Revista ByPC. Incorporada al Latindex.
ISSN 1515-6761 Código Bibliográfico: RByPC
Trabajo Recibido: 08-01-07 Aceptado: 05-03-07
RESUMEN
Se estudió el efecto del plomo sobre el metabolismo del hierro mediante la cuantificación de la ferremia por colorimetría directa, en la sangre de dos grupos de
adultos masculinos: a) 24 trabajadores laboralmente expuestos al plomo (Pb),
de 25-79 años de edad y b) 10 individuos sanos no expuestos (controles), de
20-40 años, habitantes en la misma localidad donde se halla la planta industrial.
La concentración del analito fue 150,5±42,7 μg/dl ( ±DE) en los operarios y
86,1±20,3 μg/dl en los controles. Se consideró como valor de referencia 87,0±5,1
μg/dl. Estos resultados preliminares sugieren que el importante aumento de la
ferremia en los individuos expuestos respecto de los controles debe ser atribuido al déficit en su utilización biológica (secundaria a la inhibición de la síntesis
del hemo); además, dicho parámetro podría ser adoptado como biomarcador de
exposición crónica al Pb.
Palabras claves | Ferremia, Biomarcadores, Exposición al plomo, Humanos
SUMMARY
The effect of lead (Pb) on iron metabolism was studied through the measure
of blood iron by direct colorimetry, in two groups of adult males: a) 24 workers
occupationally exposed to Pb, 25-79 years old, and b) 10 healthy individuals not
exposed to Pb (controls), 20-40 years old, living in the same city of the industrial
plant. The concentration of this analyte was 150,5+42,7 ( ±SD) for workers and
86,1±20,3 μg/dl for controls. The reference value considered was 87,0±5,1 μg/dl.
These preliminary results suggest that the important increase in blood iron, in
exposed individuals relative to controls should be attributed to the deficiency in
biological utilization (secondary to the inhibition of hem synthesis). Furthermore,
this parameter may be adopted as a biomarker of chronic exposure to Pb.
Keywords | Blood iron, Biomarkers, Lead exposure, Humans
Ferremia: ¿Biomarcador de exposición humana al plomo?
INTRODUCCIoN
METODOS
El plomo es el tóxico metálico más estudiado y de mayor interés en la Toxicología Laboral, ya que causa la enfermedad
profesional más frecuente (1-2). Hemos estudiado sus efectos sobre algunos parámetros bioquímicos en trabajadores
expuestos de una fábrica de baterías, habiendo confirmado
que los cambios más importantes ocurren en la plombemia
(Pb-S), la actividad de la δ-ALA-dehidratasa (ALA-D) y la concentración de protoporfirina eritrocitaria libre (PEL) (3-4).
La acción tóxica del plomo tiene como uno de sus blancos a
los precursores eritroides en los cuales genera una serie de
alteraciones metabólicas y estructurales. Siendo que el principal metal utilizado en los glóbulos rojos es el hierro (tienen
aproximadamente 65% del hierro del organismo), se esperaría un trastorno en su metabolismo como consecuencia de la
intoxicación plúmbica.
El hierro se encuentra en el organismo en diferentes compartimientos: de reserva (en la ferritina, hemosiderina y macrófagos del sistema retículo endotelial), de transporte (en la
transferrina) y de utilización (en los eritroblastos de médula
ósea) (5).
El efecto tóxico del plomo se estudió, mediante las posibles
alteraciones en el nivel del pool de transporte de hierro, es decir por la medida del hierro que circula en la sangre unido a su
proteína de transporte específica.
Un hombre adulto tiene entre 35 y 45 mg de hierro por kg de
peso. Diariamente se absorben entre 1 y 2 mg de hierro provenientes de la dieta y esto se utiliza para compensar las pérdidas por vía digestiva. Asimismo se transportan diariamente
aproximadamente 20 mg desde los lugares de depósito hacia
los sitios de utilización y también en sentido inverso (6).
Se sabe que el plomo interfiere en diversas fases de la biosíntesis del hemo, por inhibición de enzimas específicas involucradas en la vía, provocando una acumulación del hierro no
utilizado en los eritroblastos. Este hierro que queda de este
modo secuestrado en la transferrina tiene un efecto negativo sobre la absorción intestinal del mismo (7). A su vez, la
inhibición de la ferroquelatasa inducida por la acumulación
de PEL puede decrecer la eficiencia con la que el hierro es
descargado de la transferrina (8), al disminuir la síntesis y
la expresión del número de receptores en la superficie de los
eritroblastos.
También está bien documentada la asociación entre la deficiencia de hierro sérico y el aumento en la absorción de plomo, especialmente en niños (9-11). Recientemente se ha
descubierto que la absorción intestinal de hierro se realiza
a través de un transportador de metales divalentes (DMT-1)
presente en las células epiteliales, en las primeras porciones
del intestino delgado, especialmente en duodeno,. Esta es
una proteína que no es específica del hierro por lo que también transporta otros metales que competirán con él, entre
los que se cuenta el Pb (12). De este modo, en el saturnismo
se produce una disminución de la absorción de hierro por este
mecanismo.
Se verificó la magnitud del efecto sobre el metabolismo del
hierro, evaluando el contenido de hierro en el pool de transporte, es decir unido a la trasferrina, mediante la cuantificación de la ferremia.
Para la experiencia se trabajó con dos grupos de individuos
adultos de sexo masculino: a) 24 trabajadores laboralmente expuestos al Pb, con edades comprendidas entre 25 y 79
años de edad, que cumplían una jornada de 8 horas diarias
y b) 10 individuos sanos no expuestos (controles), con edades entre 20 y 40 años, habitantes residentes de la misma
localidad donde se halla la planta industrial, ubicada en el
sudoeste de la provincia de Buenos Aires.
Se obtuvo sangre por punción venosa y se la distribuyó en
diferentes tubos según el tipo de ensayo: tubos con heparina para la cuantificación de la plombemia, con EDTA dipotásico para la cuantificación de PEL, hematocrito (Hto) y
hemoglobina (Hb) y sin anticoagulante para la medida de
la ferremia.
La ferremia se determinó en los sueros de los individuos por
el método colorimétrico directo basado en la reacción con
ferrozima (13), a 560 nm en un espectrofotómetro de doble
haz Shimadzu (Shimadzu Corp., Kyoto, Japón). Se realizó un
estudio de correlación utilizando el software SPSS 10.0 for
Windows (SPSS Inc., Chicago, Estados Unidos), con los marcadores de exposición y efecto (Pb-S, ALA-D y PEL) y con los
parámetros hematológicos Hb y Hto.
La concentración de PEL se realizó por el método de Piomelli (14) utilizando un espectrofluorómetro Aminco-Bowman
SPF (SLM Aminco, Foster City, CA, Estados Unidos), equipado con fuente de excitación de xenón de 150 W, espejo condensador elipsoidal y fotomultiplicador Hamamatsu R928
(Hamamatsu Photonics K.K., Hamamatsu, Japón). La cuantificación de la actividad enzimática de ALA-D se realizó por
el método de Berlin y Schaller (15), en un espectrofotómetro marca Zeltec ZL5000 (Zeltec Engineering GMBH, Hennef,
Alemania), en el espectro visible. El Pb-S se determinó por
espectrometría de absorción atómica por llama, en un equipo Varian Spectra AA 300 (Varian Inc., Palo Alto CA, Estados
Unidos). Los parámetros hematológicos fueron determinados en un autoanalizador Coulter JT (Beckman Coulter Inc.,
Fullerton CA, Estados Unidos)
RESULTADOS
La concentración de hierro hallada en la sangre de los trabajadores y del grupo control se muestra en la Tabla 1. Los
valores de referencia utilizados fueron los de Artaza et al.
(16).
Se realizaron análisis de regresión entre la ferremia y los parámetros biosensores de exposición y efecto (Pb-S, ALA-D y
PEL), no encontrándose diferencias estadísticamente significativas en las correlaciones de los trabajadores (p=0,815;
Pág | 69
REVISTA BIOQUIMICA Y PATOLOGIA CLINICA VOL 71 Nº 1 2007
Trabajo: págs 67 | 70
AGRADECIMIENTOS
Tabla 1. Concentraciones de hierro en sangre
(μg/dl) ( ±DE), en individuos de sexo masculino
expuestos laboralmente al plomo y no expuestos
(controles).
Grupo
Trabajadores
Controles
Nº
24
10
El Dr. A. Salibián es Profesor Titular en el Departamento
de Ciencias Básicas de la Universidad Nacional de Luján e
Investigador Principal de la Comisión de Investigaciones
Científicas de la Provincia de Buenos Aires (CIC-PBA). Los
autores agradecen a la CIC-PBA por la ayuda económica
brindada (Subsidio para Investigadores). A Wiener-Lab, por
la provisión de los kits de reactivos Fer-color. A la Lic. Ana
María Martínez y al personal del SACT-FABA, por su valiosa
contribución en la confección y corrección de este trabajo
así como también en la búsqueda bibliográfica.
Ferremia ( ±DE)
150,5 + 42,8
86,1 + 20,3
0,379 y 0,973 respectivamente), ni en el caso de los controles (p=0,728; 0,956 y 0,127) (Tabla 2).
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
DISCUSIoN
Estos resultados preliminares sugieren que el importante
aumento de la ferremia en los individuos expuestos (aproximadamente 75%) confirmaría en ellos un déficit en su utilización biológica, secundaria a la inhibición de la síntesis del
hemo. Además, dicho parámetro podría ser adoptado como
biomarcador de exposición crónica al Pb.
El gráfico de regresión entre ferremia y PEL muestra una
tendencia: la ferremia disminuye al aumentar la concentración de PEL. Esto es así ya que el plomo produce un aumento de la PEL por inhibición de la ferroquelatasa. La actividad
de la ferroquelatasa es uno de los puntos de regulación del
metabolismo de hierro (17) y se demostró que la inhibición
de la biosíntesis del hemo conduce a una acumulación de
hierro intramitocontrial,
Un aspecto controversial para considerar a la ferremia
como biomarcador, puede surgir al considerar la marcada
y conocida variabilidad biológica de la ferremia, que es del
orden de 26,5 CV intraindividuo (18), ya que se trata de un
valor comparativamente alto en relación con otros analitos
séricos. Como contraparte, hay que considerar el CV menor
de los controles (23,5), respecto de los tratados (28,3) y
la significancia estadística observada en la diferencia de
medias entre ambos grupos (p <0,05).
1. Repetto M. Revisión general de la toxicología de los
metales. En: Toxicología Avanzada. Madrid: Díaz de
Santos,1995, p. 293-358.
2. Piola JC. Valoración de marcadores de exposición al
plomo en diagnóstico y vigilancia. Rev Soc Med Legal
Rosario 1998; 7(7):2-4.
3. Ventimiglia F, Salibián A, Fink NE. Parámetros hemáticos
de trabajadores expuestos al plomo. Acta Toxicológica
Argentina 2003; 11(2):102.
4. Ventimiglia F, Bruzzone L, Salibián A, Fink NE. Biosensores
hematológicos de exposición y efecto en trabajadores
expuestos al plomo. Acta Toxicológica Argentina 2004;
12(Supl):36.
5. Sans Sabrafén J, Besses Raebel C, Vives Corrons JL.
Anemia ferropénica y otros trastornos del metabolismo
del hierro. En: Hematología Clínica. 4 ed. Madrid,
Barcelona: Harcourt Brace-Elsevier, 2001, p. 105-130.
6. Andrews NC. Disorders of iron metabolism. N Engl J Med
1999; 341(26):1986-1995.
7. Osatinsky R. Mecanismo de regulación del metabolismo
del hierro. Bioquím Patol Clín 2004; 68(1):13-24.
8. Ponka P. Tissue-specific regulation of iron metabolism
and heme synthesis: distinct control mechanisms in
erythroid cells. Blood 1997; 89(1):1-25
Tabla 2. Ecuaciones de regresión lineal entre la ferremia y los diferentes parámetros estudiados, en
trabajadores laboralmente expuestos al plomo y en un grupo control.
Parámetros
δ-ALA-dehidratasa
Protoporfirina eritrocitaria libre
Plombemia
Concentración de hemoglobina
Hematocrito
Controles
Trabajadores expuestos
y = 85.69+0,01x
y = 151.25-0,06x
y = 8.88+1,36x
y = 159.26-0,06x
y = 72.06+0,08x
y = 161.88-0,08x
y = 135.15-3,22x
y = 31.11+8,11x
y = 142.50-1,23x
y = 86.46+1,38x
Ferremia: ¿Biomarcador de exposición humana al plomo?
9. Mahaffey KR. Environmental lead toxicity: nutrition as
component of intervention. Environ Health Perspect
1990; 89:75-78.
10. Lockitch G. Perspectives on lead toxicity. Clin Biochem
1993; 26(5):371-381.
11. Wright RO. Association between iron deficiency and blood
lead level in a longitudinal analysis of children followed in
an urban primary care clinic. J Pediatr 2003;142:9-14.
12. Fleming RE, Bacon BR. Orchestration of iron homeostasis.
The New England journal of Medicine 2005; 352: 17411744.
13. Fer-color: método colorimétrico para la determinación
de hierro sérico sin desproteinización. En: Vademécum
[en línea]. Rosario: Wiener-Lab, 2001 [Consulta 27 Dic
2006]. Disponible en la World Wide Web:
http://www.wiener-lab.com.ar/sp/vademecum.html
14. Piomelli S. A micromethod for free eriyhrocyte porphyrins:
the FEP test. J Lab Clin Med 1973; 81(6):932-940.
15. Berlin A, Schaller KH. European standardized method for
the determination of δ–aminolevulinic acid dehydratase
activity in blood. J Clin Chem Clin Biochem=Z Klin Chem
Klin Biochem.1974;12:389-390.
16. Artaza JR, Carbia CD, Ceballo MF, Díaz NB. Indice de
distribución de glóbulos rojos (RDW): su aplicación en la
caracterización de anemias microcíticas e hipocrómicas.
Medicina (B Aires) 1999; 59(1):17-22.
17. Jones MS. Permeability properties of mitochondrial
membranas and the regulation of haem biosynthesis.
Biochem Biophys Res Commun 1970; 41(4):10721079.
18. Ricos C, Alvarez V, Cava F, García Lario JV, Hernández
A, Jiménez CV et al. Biological variation database and
desirable quality specifrications: the 2001 update [en
línea]. Madison: Westgard QC, 2001 [Consulta 14 Dic
2006]. Disponible en la World Wide Web:
http://www.westgard.com/guest21.htm
ASOCIACION BIOQUIMICA ARGENTINA
PROGRAMA DE EDUCACION CONTINUA - CICLO LECTIVO 2007
CURSOS TALLER-CICLO 2007
COORDINACIÓN: Dra Silvia Morilla
1. Acreditación con la norma 15189.
¿Qué es Acreditación?¿Qué es certificación? Sistemas ISO 9000.
Organismos de Evaluación de la conformidad. ILAC. EA. APLAC.
IAAC. Norma ISO 17011. Convenios MLA/MRA. Organismos
firmantes que acreditan con ISO 15189. Evaluación de pares.
Organismo Argentino de Acreditación.
El proceso de Acreditación . Requisitos de ISO 15189
Normas ISO de referencia asociadas a ISO 15189.
Evaluación externa.
DURACIÓN: 8 hs. ( 2 martes por mes )
DIRECTORA: Silvia Depardo
ABRIL- SETIEMBRE
2. Documentación de un sistema de Gestión
Manual de calidad y procedimientos. Registros
Herramientas de mejora continua Indicadores
Tableros de comando Auditorias
Acciones correctivas y preventivas
Gestión de no conformidades
Revisión por la Direccion
DURACIÓN: 16 hs. ( 4 martes por mes )
DIRECTORA: Mabel Villarreal
MAYO - OCTUBRE
3. Procedimientos analíticos
Calificación de instrumentos
Evaluaciones de desempeño.
Documentación asociada
Calibradores. Trazabilidad
Esquemas de mantenimiento
Validación y Verificación de métodos
Requisitos de calidad Variabilidad biológica
Protocolos de precisión y veracidad
Intervalos de medida. Sensibilidad analítica y funcional
Detectabilidad y límite de cuantificación
Estimación de incertidumbre de medida
4. Procedimientos analíticos
Aseguramiento de Calidad Analítica
Planificación del control de calidad
Control interno
Planificación de control interno.
Evaluación de desempeño. OPSpecs charts
Reglas de control. Criterios de aceptabilidad . Seis sigma.
Análisis de situaciones fuera de control. Acciones correctivas.
Registros
Control externo
Evaluación de proveedores de control externo y comparaciones
interlaboratoriales
Limitaciones de aceptabilidad
Análisis de datos Detección de desviaciones.
Acciones correctivas. Registros.
Interpretación de gráficas de desempeño
Requisisto: tener conocimientos básicos de Estadística
DURACIÓN: 16 hs. ( 4 clases mensuales)
DIRECTOR: Gabriel Migliarino
JULIO
5. Formación de auditores ISO 15189
Impacto de la formación de los mismos en la eficacia del Sistema
de Gestión
Auditorias internas. Norma ISO 19011
Calificación de Auditores.
Gestión de un programa de auditoria: objetivos y extensión.
Responsabilidades, recursos, procedimientos, registros.
Seguimiento y revisión del programa
Actividades de la auditoria
Requisito: tener conocimientos de la Norma ISO 15189
DURACIÓN: 16 hs. ( 4 martes por mes )
DIRECTORA: Mabel Villarreal
AGOSTO-NOVIEMBRE
DURACIÓN: 16 hs. ( 4 clases mensuales)
DIRECTOR: Gabriel Migliarino
JUNIO
Secretaría de la Asociación Bioquímica Argentina: Venezuela 1823 Piso 3
1096 – Ciudad de Buenos Aires. e-mail: info@aba-online.org.ar. WEB: www.aba-online.org.ar
TELEFAX (011)4384-7415-TEL (011) 4381-2907. Horario: Lunes a Viernes de 15:00 a 19:00 Hs.
ASOCIACION BIOQUIMICA ARGENTINA
PROGRAMA DE EDUCACION CONTINUA - CICLO LECTIVO 2007
BASES PARA EL DIAGNÓSTICO MICROBIOLÓGICO
EN EL LABORATORIO DE ATENCIÓN AMBULATORIA
DIRECTORAS: Dras Adriana Sucari y Ana di Martino
SECRETARIA: Fernanda Degese
MODALIDAD: Curso teórico semanal con evaluación final.
ORIENTADO A: Bioquímicos de laboratorios de atención
ambulatoria y residentes de bioquímica clínica.
6. Diagnóstico de las infecciones entéricas: qué
microorganismos buscar
Temas: etiología de la diarrea bacteriana, utilidad del coprocultivo,
qué buscar y qué informar.
7. Infecciones de piel y partes blandas: muestras de
pacientes ambulatorios
DIAS Y HORARIO: Lunes de 18 a 20.30 hs
FECHA : del 7 de mayo al 16 de julio
Temas: Celulitis, heridas quirúrgicas, infecciones asociadas a
prótesis: etiología, muestras adecuadas para cultivo.
Carga horaria: 60 hs.
8. Muestras para búsqueda de bacterias anaerobias
TEMARIO
Temas: muestras adecuadas, transporte, cultivo e identificación.
1. Infección urinaria: urocultivo
9. Diagnóstico de las micosis superficiales y profundas.
Temas: fisiopatogenia de la infección urinaria, urocultivo: toma de
muestra, diferentes tipos de muestras, recuento de colonias,
agentes etiológicos, antimicrobianos útiles en infección urinaria,
Temas: Preparación del paciente, tipos de muestras, diagnóstico
etiológico.
2. Infecciones respiratorias altas: importancia del
diagnóstico bacteriológico
Temas: faringitis, otitis y sinusitis: cuadro clínico, tipos de muestas,
agentes etiológicos. Utilidad de los métodos rápidos de detección
en faringitis.
10. Examen parasitológico de materia fecal y diagnóstico de
parasitosis sistémicas.
Temas: Recolección de las muestras: examen parasitológico en
fresco, parasitológico seriado y test de Graham. Diagnóstico
parasitológico por coloraciones. Parasitosis endémicas en
Argentina. Parasitosis del viajero: qué buscar y cómo.
3. Infecciones respiratorias bajas adquiridas en la
comunidad: muestras adecuadas
Temas: Presentaciones clínicas, etiología viral y bacteriana, muestras
para cultivo, diagnóstico serológico e inmunofluorescencia.
4. Muestras genitales femeninas
Temas: Vaginitis, vaginosis y cervicitis: cuadro clínico, etiología y
diagnóstico de laboratorio. Búsqueda de Estreptococo grupo B en
embarazadas.
5. Muestras genitales masculinas
Temas: Lesiones genitales, uretritis: agentes etiológicos, muestras
adecuadas para diagnóstico.
Secretaría de la Asociación Bioquímica Argentina: Venezuela 1823 Piso 3
1096 – Ciudad de Buenos Aires. e-mail: info@aba-online.org.ar. WEB: www.aba-online.org.ar
TELEFAX (011)4384-7415-TEL (011) 4381-2907. Horario: Lunes a Viernes de 15:00 a 19:00 Hs.
ASOCIACION BIOQUIMICA ARGENTINA
PROGRAMA DE EDUCACION CONTINUA - CICLO LECTIVO 2007
TECNICAS DE AVANZADA EN BIOLOGIA
MOLECULAR APLICADA A LA CLÍNICA
DIRECTORA: Dra. Marina I. Gutierrez
TEMARIO
DOCENTE: Bioq. Carolina Rodriquez, Bioq. Sonia Castillo,
Bioq. Silvia Pérez, Centro de Estudios Infectológicos
Centros Médicos Dr. Stamboulian.
1) Técnicas de Biología Molecular aplicadas al
diagnóstico.
Metodologías caseras y comerciales.
DÍA Y HORARIO: Miércoles de 18,00 a 2100 hs.
2) Diagnóstico molecular de enfermedades infecciosas I.
HIV y hepatitis
FECHA : del 18 de Abril al 16 de Mayo
CARGA HORARIA:30 hs.
CON EVALUACION FINAL
3) Diagnóstico molecular de enfermedades
infecciosas II.
Infecciones en sistema nervioso central. Infecciones virales
en pacientes trasplantados. Contribución a la
bacteriología, micología y parasitología.
4) Diagnóstico molecular de enfermedades
onco-hematológicas.
Leucemias agudas y crónicas. Síndromes linfoproliferativos.
ogénesis y farmacogenética.
5) Etiología molecular de enfermedades
multifactoriales poligénicas.
Síndrome de poliquistosis ovárica como modelo.
Secretaría de la Asociación Bioquímica Argentina: Venezuela 1823 Piso 3
1096 – Ciudad de Buenos Aires. e-mail: info@aba-online.org.ar. WEB: www.aba-online.org.ar
TELEFAX (011)4384-7415-TEL (011) 4381-2907. Horario: Lunes a Viernes de 15:00 a 19:00 Hs.
ASOCIACION BIOQUIMICA ARGENTINA
PROGRAMA DE EDUCACION CONTINUA - CICLO LECTIVO 2007
COSTOS EN EL LABORATORIO DE ANALISIS
CLINCOS PARA LA TOMA DE DECISIONES
DIRECTOR: Dr. Juan Carlos Galli.
Gerente de Laboratorio Centros Médicos Dr. Stamboulian.
• Determinación de precio de venta por estudio.
• La influencia de los factores del mercado.
TEMARIO A DESARROLLAR EN CUATRO SESIONES.
• Concepto y aplicación del “costo marginal”.
• Conceptos básicos de análisis de costos.
• Relación entre costo – volumen – ganancia.
• Definiciones de términos utilizados habitualmente.
• Estrategias en la fijación de precio de venta.
• Costos directos de mano de obra y de insumos.
• Decisión “hacer o derivar”
• Concepto de costos fijos y variables. Importancia de cada
uno.
• Costos en el sector privado y en el sector público.
• Costos indirectos y su asignación al producto final.
• Formas de retribución, “fee for service”, capitación,
módulos, etc.
• Concepto de índices o “drivers”.
• Estrategias de estudio de costos global del sistema.
• Diferentes sistemas de costeo. Ventajas y desventajas.
• Ejercicios de aplicación.
• Elección de un sistema de costeo.
• Sistema de cuentas contables.
• Costos reales y estándar. Diferentes aplicaciones.
• Concepto de punto de equilibrio (Break-even).
“La ciencia pura que ha sido el pilar de la práctica de
laboratorio a través de la historia, no puede seguir siendo
el único sostén, hoy la ciencia económica debe ser una
parte integral de la práctica de laboratorio en aquellos
laboratorios que intenten sobrevivir en el entorno
desafiante de negocios de hoy en día” Eleanor Travers,
M.D. Washington D.C.
• Análisis conceptual y matemático del punto de equilibrio.
• Costos fijos y variables en el análisis del punto de
equilibrio.
• Factores que afectan la incorporación de equipamiento.
• Cálculo de costos por práctica en equipos automatizados.
Secretaría de la Asociación Bioquímica Argentina: Venezuela 1823 Piso 3
1096 – Ciudad de Buenos Aires. e-mail: info@aba-online.org.ar. WEB: www.aba-online.org.ar
TELEFAX (011)4384-7415-TEL (011) 4381-2907. Horario: Lunes a Viernes de 15:00 a 19:00 Hs.
Descargar