SEMANA DE ORACIÓN POR LOS CRISTIANOS PERSEGUIDOS Queridos diocesanos: En la última Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal los obispos hemos tenido en cuenta la persecución a la que están siendo sometidos en diversas partes del mundo muchos hermanos nuestros en la fe, por el solo hecho de ser cristianos, padeciendo esta prueba los mismo los católicos que los ortodoxos y los evangélicos. La persecución afecta también a los creyentes de otras religiones. El cardenal Presidente Mons. Ricardo Blázquez dijo en el discurso de apertura apoyándose en algunas citas del papa Francisco: “Matar en nombre de Dios es profanarlo y pervertir el sentido de su reconocimiento, que nos pide unir la adoración de su Nombre y el servicio a los demás. Es terrible que a unas personas y familias se las sitúe irremediablemente ante las alternativas siguientes: o creéis y hacéis lo que os mandamos, o salís de vuestra tierra, de vuestra casa y de vuestro pueblo, que ha sido vuestra patria desde tiempo inmemorial, o inmediatamente os asesinamos. Y así han tenido que huir muchos miles de hombres y mujeres, de niños y ancianos, de familias enteras”. Por este motivo se acordó en la citada asamblea unirnos a la petición del papa mostrando nuestra solidaridad y ayuda material para paliar los sufrimientos de los que son perseguidos, e invitar a todos los fieles católicos a orar intensamente por estos hermanos nuestros como hacía la Iglesia Apostólica cuando Pedro fue encarcelado (cf. Hch 12,5). Lo haremos en el tiempo que transcurre desde la Ascensión del Señor hasta Pentecostés, periodo especialmente significativo para invocar la presencia y la ayuda del Espíritu Santo. Por tanto, invito y exhorto a la comunidad diocesana y, de manera particular a los sacerdotes, religiosos/as y vida consagrada, a orar por esta intención: 1. En la Santa Misa añádase esta petición u otra semejante en la Oración Universal: «Por nuestros hermanos cristianos perseguidos: para que el Espíritu Santo les conceda el don de la fortaleza y convierta los corazones de quienes atentan cruelmente contra sus vidas y sus tierras, y en todas partes se afirme la paz y sea respetada la libertad religiosa. Roguemos al Señor». 2. En las preces de Laudes y de Vísperas añádase esta petición u otra semejante: «Envía, Señor, a la Iglesia y a la humanidad tu Espíritu de Amor para que desaparezcan las disensiones y odios, y los cristianos puedan convivir en paz y armonía con todos los hombres». 3. Oportunamente, en uno de los días feriales, a juicio de los párrocos y rectores de iglesias, convóquese a todos los fieles cristianos para una celebración eucarística en la que se use el formulario «Por los cristianos perseguidos» que se encuentra en el Misal Romano («Misas por diversas necesidades», n°. 15), pudiendo usarse, o bien, las lecturas del día, o bien, eligiendo de entre las que se proponen en el leccionario VI: «Lecturas para las Misas por diversas necesidades y votivas», en el capítulo 12: «Por los cristianos perseguidos». 4. En los ejercicios piadosos del pueblo cristiano y, de manera especial, allí donde se mantenga la adoración prolongada o continua del Santísimo Sacramento, invítese a los fieles a orar por la misma intención. 5. En la ciudad de León convoco al pueblo de Dios, al clero, a la vida consagrada y a los seminarios diocesanos, a participar en la Santa Misa que presidiré yo mismo pudiendo concelebrar los sacerdotes que lo deseen, seguida de un breve espacio de adoración eucarística comunitaria, el día 21 de mayo, jueves de la semana previa a Pentecostés, a las 8’30 de la tarde en la Real Colegiata-Basílica de San Isidoro. 6. Recuerdo también que la Fundación de la Santa Sede “Ayuda a la Iglesia Necesitada” viene celebrando desde hace varios años el “Día de Oración por los Cristianos Perseguidos” el día 13 de mayo, Fiesta de Nuestra Señora de Fátima, invitando a que nos unamos en dicho día a esta intención. Esperando vuestra respuesta generosa y con mi cordial saludo y bendición. León, a 7 de mayo de 2015. + Julián, Obispo de León