La elocuencia del mar

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LA PROVINCIA
SUPLEMENTO SEMANAL
9 DE OCTUBRE DE 2005
DIARIO DE LAS PALMAS
Dominical
EDUCACIÓN P Ecca cumple cuatro décadas como soporte intelectual de
cientos de familias que encontraron en sus ondas la oportunidad de superarse
FUERA DE PLANO P Rita Irasema, cantante y actriz: “La oferta televisiva
se ha convertido desgraciadamente en un referente para los niños”
GASTRONOMÍA P Ocho cocineros compiten para representar
a España en la 39º edición del Prix Culinaire Pierre Taittinger
Contra el cambio climático
El grupo Quima de la ULPGC mide el CO2 del Atlántico Norte, dentro de
un programa internacional para evitar la tendencia al calentamiento global
40 / II DOMINICAL
Domingo, 9 de octubre de 2005
EN PORTADA
Melchor González Dávila
La elocuencia del mar
PROYECTO P El grupo ‘Quima’ de la ULPGC participa en un proyecto internacional para determinar la
absorción de CO2 del Océano Atlántico, en un intento de poner límites científicos al calentamiento global
Una imagen tomada desde un satélite de una formación nubosa sobre el Atlántico. i LA PROVINCIA / DLP
E
l dióxido de carbono es el gas de efecto invernadero que mayor influencia tiene en el calentamiento global. Los océanos son las regiones
más importantes donde ese dióxido de carbono
emitido como consecuencia de las actividades
industriales hacia la atmósfera es captado. El proyecto internacional Carboocean investiga desde
Enero de 2005 y por un periodo de cinco años
(final de 2009) el sistema del dióxido de carbono
en el océano Atlántico para comprender cómo se
comporta y cuál es su influencia en el cambio climático. El grupo de investigación de Química Marina, Quima, de la Universidad de Las Palmas de
Gran Canaria, participa de forma activa en dichas
investigaciones. Este grupo y el del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) de
Vigo son los representantes españoles en el proyecto.
El grupo Quima, del que soy máximo
responsable, se encarga de la puesta en marcha
de una nueva línea de determinación de dióxido
de carbono que atraviesa de Norte a Sur el Océano Atlántico, midiendo entre otros parámetros el
contenido de dióxido de carbono tanto en la atmósfera como en la capa superficial del océano
para poder así estimar la cantidad de CO2 tomada
por el océano, su variabilidad espacial y estacional y su papel en la regulación del contenido de
CO2 emitido a la atmósfera. Esta tarea no es nueva, pero sí mucho más ambiciosa para el grupo,
ya que somos los responsables de las medidas del
sistema del dióxido de carbono en la estación europea de series temporales al norte de Canarias,
Estoc desde 1995.
El profesor Melchor González Dávila, trabajando con su equipo tecnológico i LA PROVINCIA / DLP
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LA PROVINCIA/DIARIO DE LAS PALMAS
EL barco MSC-Martina en una de sus visitas al Puerto de La Luz y de Las Palmas, donde se han instalado los equipos de medida. i LA PROVINCIA / DLP
La concentración de CO atmosférico
2
ha aumentado desde su valor a comienzos de la
era industrial (finales del siglo XVIII) de 280 ppm
(partes por millón), hasta 370, en el momento actual, y sigue creciendo debido a las emisiones de
CO2, consecuencia de la actividad humana. Su aumento produce un cambio climático anticipado
mediado por la acción del hombre. Sus consecuencias en la vida en la Tierra no son aún previsibles.
Sin embargo, la sociedad y los políticos necesitan
conocer realmente los contenidos, su variación y
las tendencias del ciclo del carbono en la Tierra
para tomar decisiones sobre cómo mitigar y adaptarse a estos cambios. Reducir las emisiones de
CO2 sería la manera más efectiva de disminuir la
acumulación de CO2 en la atmósfera.
El Protocolo de Kyoto
, o cualquier
otro sistema de control de emisiones de CO2, sólo
será útil si las fuentes y los sumideros de CO2 terrestres y oceánicos se estiman perfectamente a
escala regional. En teoría, las estimaciones regionales se pueden realizar utilizando modelos atmosféricos junto con datos atmosféricos. Sin embargo, son demasiados los impedimentos para
estimar, incluso a nivel continental, estos flujos.
Las mejoras en la determinación de los flujos de
CO2 atmósfera-océano facilitará y mejorará la cuantificación de la cantidad de CO2 tomada por los
continentes. Actualmente, podemos decir que una
tercera parte de las emisiones de CO2 debidas a
los carburantes fósiles van a parar a los océanos.
Estos océanos tienen una capacidad importantísima para absorber CO2 en los próximos cientos
de años y más. Sin embargo, también sabemos hoy
en día, y en eso ha contribuido el grupo Quima
con los estudios de diez años en la estación europea Estoc, que el sumidero de CO2 que representa
el océano es variable y esta cambiando apreciablemente desde los años ochenta a nuestros días.
La preocupación por los efectos del cambio climático y el calentamiento global es real. Esta preocupación se hace ahora más patente para la comunidad científica por el crecimiento industrial
que se está produciendo en países como China e
India, y a lo que nadie debe quedar impasible.
El proyecto Carboocean determi-
nará el papel cuantitativo del océano en la incorporación de dióxido de carbono atmosférico. Tras varias décadas de recogida de datos sobre
el contenido de dióxido de carbono en los océanos, publicaciones científicas y reuniones de
comités auspiciados por la UNESCO, podemos
indicar que el Atlántico Norte es el mayor sumidero de dióxido de carbono a escala global y
que los océanos han incorporado 1.9 más/menos 0.8 y 1.7 más/menos 0.7 gigatones de CO2
por año (1012 kg) en la década de los ochenta y
en la de los noventa, respectivamente. Esos valores son importantes y muestran el papel que
juegan los océanos en el control del contenido
de dióxido de carbono en la atmósfera. Los océanos han ayudado a reducir los valores de CO2
en la atmósfera, pero los errores que existen en
las determinaciones (ese más/menos) deben reducirse de forma drástica para poder saber ante
lo que nos encontramos. A tal efecto, el objetivo
principal que se ha planteado el proyecto europeo Carboocean es el de reducir las incertidumbres que existen en la cuantificación de los flu-
CO2 P El CO 2
de la
atmósfera ha
aumentado
desde 280
partes por
millón, en el
siglo XVIII,
hasta 370
actualmente
NORTE P El
Atlántico norte
es el mayor
sumidero de
dióxido de
carbono
jos anuales de CO2 entre la atmósfera y el océano
en un factor de dos a escala total oceánica y por
un factor de cuatro, en el papel jugado por el
Océano Atlántico en el sumidero global oceánico. Para alcanzar este objetivo, 34 instituciones oceanográficas de 12 países europeos, con
la colaboración de siete centros americanos,
presentamos en la Unión Europea un proyecto
integrado dentro del VI Programa Marco Cambio global y ecosistemas que ha sido concedido
con fecha de inicio de enero de 2005 y por un
periodo de cinco años, por valor de 14.5 millones de euros totales.
Las tareas que
nos hemos planteado para reducir los errores en nuestro conocimiento
del papel del océano se pueden dividir en cinco
grandes bloques. Primero, cuantificar y describir
el intercambio de dióxido de carbono atmósferaocéano y su variabilidad a escala estacional e interanual para el océano Atlántico y mares del Sur.
Segundo, establecer la cantidad almacenada de
dióxido de carbono en los océanos en los últimos
200 años. Tercero, establecer la contribución de
las diferentes regiones europeas al contenido global de carbono en los océanos. Cuarto, identificar
y comprender los diferentes mecanismos biogeoquímicos y sus retroalimentaciones que controlan
la incorporación y eliminación de carbono en los
océanos. Y quinto, integración de las observaciones en modelos de predicción que expliquen lo
que ha ocurrido hasta el momento actual y lo que
puede suceder en los próximos 200 años considerando diferentes escenarios.
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Domingo, 9 de octubre de 2005
LA PROVINCIA/DIARIO DE LAS PALMAS
EN PORTADA
Melchor González Dávila
Después de varias reuniones de diferentes grupos oceanográficos europeos como respuesta a un proyecto solicitado a la Unión Europea para conocer el contenido y variabilidad del
dióxido de carbono en tierra, proyecto Carboeurope, en una reunión mantenida en Amsterdam en
la que participa ya personalmente nuestro grupo,
se definen los objetivos y contenidos de los diferentes grupos de trabajo del proyecto. El grupo
Quima propuso incluir un sistema de medida de
la presión parcial de dióxido de carbono en la atmósfera y en el agua superficial en una nueva línea comercial entre Canarias y Sudáfrica. Estos
dos parámetros son necesarios para calcular el flujo de CO2 que es tomado o expulsado por los océanos. El sistema debe además permitir la medida
de la temperatura del agua superficial y de su contenido salino (salinidad), que controlan la solubilidad del dióxido de carbono.
Otros parámetros interesantes a medir son el contenido de oxígeno disuelto y la fluorescencia del agua que permiten conocer la actividad biológica de la zona, que afecta a la
eliminación de dióxido de carbono. El sistema debe disponer de un dispositivo de posicionamiento GPS así como de una estación meteorológica
para la medida, principalmente de la velocidad
del viento, que regula el intercambio gaseoso de
CO2. Todo este aparataje automatizado y controlado por ordenador para su trabajo autónomo, valorado en más de 80.000 euros, se estaba construyendo en el Instituto Bjernus de Noruega sufragado
por un proyecto de Infraestructura de fondos FEDER del Ministerio de Ciencia y Tecnología.
El océano Atlántico Norte presenta
Equipos de medida instalados en el MSC-Martina, incluyendo el medidor de la presión parcial de CO2, entre otros sensores. i LA PROVINCIA / DLP
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Nuestro grupo de trabajo en Química
Marina mantiene dos líneas de investigación de
estudio del medio marino, que son el sistema del
dióxido de carbono oceánico y el estudio de procesos químicos de metales que traza en el medio
marino. Centrándonos en la actividad primera,
desde octubre de 1995 el grupo Quima es responsable de las medidas de los diferentes parámetros
que controlan el sistema del dióxido de carbono
en un punto particular del océano. Esta estación
Estoc, mantenida por el Instituto Canario de Ciencias Marinas (ICCM), se sitúa a 60 millas al norte
de Gran Canaria, en la corriente de Canarias como parte de lo que conocemos como giro subtropical del Atlántico Norte. Después de diez años de
trabajo con determinación mensuales y en concordancia con estudios que se realizan en otras regiones (Bermudas y Hawai, mantenidas económicamente por EEUU) hemos observado que la
presión del dióxido de carbono en la atmósfera
aumenta a una velocidad de 1.5-1.7 unidades (microatmósferas), lo que produce un aumento anual
en la presión debida al dióxido de carbono en las
aguas superficiales de 1.2-1.3 microatmósferas.
Los valores disueltos de dióxido de
carbono varían estacionalmente, íntimamente relacionados con los cambios en la temperatura del
agua y con la actividad biológica y con la solubilidad de los carbonatos que secuestran parte de ese
dióxido de carbono enviándolo hacia capas más
profundas oceánicas donde se incorporan a la circulación oceánica profunda. Así, en invierno, los
valores de la presión de dióxido de carbono debido al CO2 disuelto disminuyen debido a una mayor solubilidad del gas (con valores de 320-330 mi-
croatmósferas) y aumentan hacia finales de octubre
(hasta valores de 400 unidades) debido al aumento de la temperatura del agua de mar. El contenido
total de carbono inorgánico disuelto varía también
estacionalmente, y hemos encontrado que va aumentado a una concentración de 0.8-0.9 micromoles por litro de agua de mar al año. Todo esto, lleva consigo que el sistema del dióxido de carbono
se vea afectado, siendo el pH del agua de mar una
de esas variables. El aumento de dióxido de carbono disuelto en el agua de mar reducirá el pH del
agua, y así hemos podido determinar que a lo largo de estos años, su valor disminuye a una velocidad de 0.001-0.002 unidades por año. A simple vista parece un valor despreciable, pero en estos 10
años los valores han disminuido casi dos centésimas, lo cual hoy hay que tener en cuenta.
Los organismos marinos están
adaptados a vivir en unas condiciones muy específicas de pH (pensemos en nuestro cuerpo cuando nos pasamos un poco en nuestras comidas), y
pequeñas variaciones pueden ocasionar alteraciones importantes en la vida de los mismos. No debemos olvidar el efecto además que tiene la disminución del pH en la disolución de los carbonatos
y en los depósitos de carbonatos en las regiones
coralinas. La estación Estoc está así contribuyendo a mejorar nuestro conocimiento sobre el efecto del incremento de dióxido de carbono atmosférico en el medio marino. Sin embargo, Estoc es
un punto en un medio altamente variable, no sólo
estacional (como hemos estudiado) sino espacial.
El Proyecto Carboocean ampliará nuestro conocimiento al cubrir amplias regiones del océano Atlántico, que junto a proyectos americanos y japoneses, principalmente, contribuirán a mejorar nuestro
conocimiento de las fuentes y sumideros oceánicos y su variabilidad.
varias líneas comerciales con dispositivos semejantes al indicado, que van desde Inglaterra y Alemania hacia América con frecuencia mensual, que
han funcionado satisfactoriamente en los últimos
años. Sin embargo, el Atlántico Sur sólo es estudiado una vez al año en el viaje que realiza el Hespérides hacia la Antártica, coincidiendo con el verano austral. Nuestra excitante propuesta que hace
uso de la situación de Canarias y en particular de
Gran Canaria como punto de unión norte y sur,
este y oeste, y del puerto de la Luz y de Las Palmas de Gran Canaria con el movimiento importante de portacontenedores, fue incluida y financiada para los cinco próximos años, hasta finales
de 2009. La consecución de los objetivos del proyecto por nuestra parte pasaba en ese momento,
enero de 2004, por conseguir una Naviera que pusiera a disposición de nuestro grupo de una infraestructura tan cara como lo es un barco de grandes dimensiones, con una frecuencia de
movimiento como para visitar Gran Canaria cada
30-40 días.
VARIACIÓN
P El dióxido de
carbono varía
por estaciones,
de acuerdo a la
temperatura del
agua y la
actividad
Lo que parecía un importante escollo
en nuestro proyecto, no lo fue. La Compañía Mebiológica
TÉCNICA P
MSC facilita al
grupo de
investigadores
el soporte
técnico
necesario
diterranean Shipping Company, MSC-Sorrento,
con base en Ginebra y a través de su agencia en
Las Palmas, actuando como interlocutores el capitán Russo (Ginebra) y el Sr. Francisco Ortega
(Las Palmas de Gran Canaria), ponen a disposición del grupo Quima el portacontenedores MSCMartina, que une Felixstowe, en Inglaterra, con
Sudáfrica, pasando tanto en su viaje al sur como
al norte por Gran Canaria. Esto cumple y aumenta nuestras perspectivas iniciales, al poder disponer de datos mensuales desde el sur de Inglaterra
hasta Sudáfrica del contenido de dióxido de carbono. Después de varios meses de trabajo de instalación contando con la inestimable ayuda del
Comandante y de la tripulación del MSC-Martina, nuestro sistema realiza medidas actualmente
en las diferentes rutas norte y sur, tres meses antes de lo indicado como objetivo a alcanzar en el
proyecto Carboocean. El proyecto implica además del director del grupo Quima, Dr. González
Dávila, a los profesores del mismo, Dra. J. Magdalena Santana Casiano y Dr. Miguel Suárez de
Tangil, y ha permitido la contratación de un investigador con cargo al presupuesto del proyecto,
D. Iván Rodríguez Ucha, cuyo objetivo final es la
obtención de su Tesis Doctoral.