ESTRATEGIAS DE MANEJO DE ARRECIFES CORALINOS EN COLOMBIA ANTE EL CAMBIO CLIMÁTICO: BUSCANDO FAVORECER SU CAPACIDAD DE ADAPTACIÓN El Cambio Climático Global (CCG) es considerado una de las amenazas más serias para los arrecifes coralinos debido a su vulnerabilidad ante la calidad de las condiciones físico-químicas del mar. El incremento de la temperatura superficial y el nivel del mar, la acidificación de los océanos y la mayor intensidad de eventos climáticos y meteorológicos, consecuencias del CCG, representan una amenaza potencial para la permanencia de los arrecifes coralinos así como para la calidad de sus bienes y servicios. Ante ésta situación, la implementación y ajuste de “lineamientos de manejo” como instrumentos de gestión en los Planes de Manejo, ha sido reconocida en Colombia como una herramienta fundamental para favorecer la capacidad de adaptación de éstos ecosistemas altamente sensibles a los impactos del CCG. El Área Marina Protegida Corales del Rosario, San Bernardo e Isla Fuerte AMP-CRSBeIF (resolución MAVDT 679 de 2005), al comprender el complejo coralino más desarrollado en el Caribe continental colombiano, fue elegida como área “piloto” para el diseño e implementación de lineamientos de manejo de arrecifes coralinos en el contexto del CCG en Colombia. Además, el AMP-CRSBeIF incluye un área de carácter restrictivo dentro del Sistema de Parques Nacionales Naturales (SPNN) denominada Parque Nacional Natural Corales del Rosario y San Bernardo (PNNCRSB). Los lineamientos de manejo propuestos se organizaron en tres líneas de acción prioritarias que responden de forma amplia al diagnóstico ambiental del área. Cada línea debe estar acompañada del monitoreo e investigación continua, educación y participación comunitaria y fortalecimiento de la gobernabilidad. En la primera línea de acción “Protección de áreas aparentemente resistentes y potencialmente resilientes”, se busca fortalecer la resiliencia (capacidad del sistema de asimilar/resistir/recuperarse a disturbios sin modificar procesos esenciales) de los arrecifes coralinos en el ÁMP. La identificación y protección de estas áreas aumentará la probabilidad del ecosistema para persistir en el tiempo y conservar sus atributos funcionales. La segunda línea de acción “Disminución y control de actividades y agentes causantes de estrés en el ecosistema coralino” pretende contrarrestar los efectos nocivos de tensores existentes en la actualidad provenientes de actividades humanas, con el fin de evitar efectos sinérgicos o acumulativos y aumentar la capacidad del ecosistema coralino de asimilar/recuperarse ante los impactos relacionados con el cambio climático (aumentar la resiliencia). La tercera línea de acción “Implementación de una red de zonas prioritarias de conservación” está encaminada a la protección de un sistema de áreas representativas en el que se incluya un ámplio rango de tipos de hábitat y de comunidades. De esta forma se favorecerá la continuidad del flujo de procesos y funciones ecológicas en el arrecife y se disminuirá la probabilidad de pérdida de un ambiente o especie particular. Para alcanzar su meta, los lineamientos de manejo deberán ser incorporados en el actual Plan de Manejo del AMP-CRSBeIF luego de presentarlos a las respectivas autoridades ambientales. Su éxito depende de la vinculación de numerosos actores al proceso de manejo integrado del área, así como de disposición para desarrollar de manera participativa esta iniciativa. Otros componentes fundamentales son la buena voluntad política, respaldo social y financiación a largo término. Se espera que dichas acciones contribuyan en la conservación de los arrecifes coralinos, como ecosistema altamente sensible, ante los impactos del Cambio Climático Global. La formulación de estos lineamientos de manejo hace parte del Proyecto Piloto Nacional de Adaptación al Cambio Climático INAP, componente C insular continental, a cargo del INVEMAR. http://www.invemar.org.co/cambioclimatico/noticias.jsp?id=4558&idcat=145