Descargar PDF - Psiquiatria.com

Anuncio
Avances en Salud Mental Relacional / Advances in Relational Mental Health
ISSN 1579-3516 - Vol. 10 - Núm. 3 - Diciembre 2011
Órgano de expresión de la Fundación OMIE y AMSA Avances Médicos
Revista Internacional On-line / An Internacional On-line Journal
APROXIMACIONES A LA PRODUCCIÓN PICTÓRICA DEL PACIENTE
PSICÓTICO CRÓNICO. AFINIDADES Y DIFERENCIAS CON OTRAS
CORRIENTES ESTILÍSTICAS
Fernando Jiménez
nandojimenez@telefonica.net
RESUMEN
El autor, tras discutir sobre los procesos psicológicos de la creatividad artística propone algunas
diferencias entre el arte psicopatológico y el arte de vanguardia: a) La ausencia de intencionalidad
estética. b) La temática del enfermo mental se nutre de sus vivencias psicóticas, de modo que, en su
subjetivismo y regresión, el paciente nos expresa a través de sus cuadros quien es y como se vive. c)
Hay circunstancias en la producción pictórica psicótica que pueden servir como indicadores de la buena
evolución del paciente. Así cuando se observa un mayor realismo en detrimento del simbolismo. O
cuando se percibe un perfeccionismo organizativo de la composición (en color, forma y perspectiva)
huyendo de dispersiones, dislocaciones y abigarramientos e inexpresividades.
Palabras clave: Arte Psicopatológico. Vanguardias artísticas.
SUMMARY
After discussing the different psychological processes of artistic creativity, the author proposes some
differences between psychopathological art and avant-garde art. A) The absence of aesthetic intentions.
B) The mental illness subject which feeds their psychotic experiences, so that in their subjectivity and
regression, the patient tells us who they are and how they live through their pictures. C) There are
circumstances in the psychotic pictorial production which can be used as indicators of the patient’s good
evolution. Like when greater realism is noted to the detriment of symbolism. Or when organisation
perfectionism is perceived in the composition (in colour, shape and perspective) avoiding dispersions,
dislocations and multi-coloured expressions and lack of expressivity.
Key words: Psychopathological art. Avant-garde art.
© 2011 CORE Academic, Instituto de Psicoterapia
-1-
Aproximaciones a la producción pictórica del paciente psicótico crónico. Afinidades y diferencias con otras
corrientes estilísticas
1. ARTE, PROCESO PRIMARIO Y SUBLIMACIÓN
Desde Freud la obra del artista se ha entendido como un “proceso primario”, constituido por
contenidos inconscientes, que sugieren al espectador la opción de proyectar sobre este compuesto una
percepción articulada –“proceso secundario”- que asignaría a la obra su condición estética.
Así, la obra de arte se convertiría en una vía de comunicación entre el artista y el espectador, a
quien lo emocional o vivencial expresado en imágenes llegaría como una instancia ó estimulo previo a la
elaboración intelectual que lo transformaría en concepto.
A su vez esta transformación de lo imaginativo en intelectual solo es posible si lo que el artista
ha expresado adquiere un significado para el espectador y ello no se produciría sin la presencia de la
abstracción, que, necesariamente ha de manifestarse a través de los símbolos.
En definitiva el arte transformaría en símbolos los contenidos vivenciales y, en cuanto tal, ha
sido considerado una desnaturalización de la forma.
Este proceso transformador nos lleva a una segunda consideración. Si el arte es una
representación de lo real en qué consiste representar la realidad, habida cuenta de lo dicho
anteriormente. Porque es obvio que en la obra artística están presentes las ambivalencias del ser
humano. A la gratificación de lo que contemplamos se une el dolor de algunos contenidos (tristeza,
agresividad, muerte, etc.) La “realidad” coexiste con lo idealizable o imaginario. En ocasiones, la
hipervaloración del significante intentaría borrar la presencia del significado. Por otra parte el arte no es
unidireccional en cuanto que transmita una sola significación sino que esta es múltiple en la medida que
los símbolos vertidos son reconocidos y reconstruidos por cada espectador de la obra estética según sus
claves especificas de comunicación y los condicionamientos y expectativas previas.
En cualquier caso, la obra de arte con independencia del espectador –aunque también con su
complicidad- serviría de mecanismo de sublimación y liberación de contenidos afectivos e instintivos
reprimidos.
2. EL ARTE DEL SUJETO ESQUIZOFRÉNICO
Este preámbulo nos enlaza con unas breves consideraciones sobre la producción pictórica del
paciente esquizofrénico crónico.
El arte, en cuanto expresión, cumple en el paciente psicótico una función liberadora y
comunicativa, pero, en tanto que los contenidos expresados derivan de las manifestaciones psíquicas de
la enfermedad, la obra artística desarrolla, también, una función restitutiva y reparadora de la
enfermedad misma.
Existe una diferencia evidente entre el arte del pintor no psicótico y la producción del pintor
enfermo mental que ha sido apuntada acertadamente por Henry Ey, quien considera que “el artista
enfermo sabe guardar la distancia con respecto a su obra, mientras que el paciente y su producción son
en si mismo obra estética”. Esta apreciación es importante porque la distancia permite observación y
ASMR. 2011 - Vol. 10 - Núm. 3
-2-
Aproximaciones a la producción pictórica del paciente psicótico crónico. Afinidades y diferencias con otras
corrientes estilísticas
experimentación. Por el contrario la no separación entre el yo y el objeto condicionan los automatismos
y estereotipias psicóticas, como luego veremos.
También hay que constatar el carácter regresivo del paciente psicótico, presente en sus
pinturas, o que el enfermo mental se mueva en el terreno de lo hipotético y posible a la hora de
comunicar.
No obstante estas diferencia básicas, también encontraremos similitudes con algunas corrientes
artísticas y con la expresión estética de etapas evolutivas y pueblos primitivos, de las que luego
hablaremos.
Se ha considerado a la producción pictórica del esquizofrénico como una forma de manierismo.
El manierismo es una variedad estilística, cuya característica fundamental reside en la oposición
al clasicismo, que aparece en la Roma clásica, persiste en la Edad Media, se reafirma particularmente en
las postrimerías del Renacimiento italiano (que es cuando toma su denominación: “maniera”,
“amaneramiento”) y se irradia al arte moderno.
Características del manierismo son:
- Inclinación por lo sorprendente, extraordinario y distorsionarte, apareciendo como motivos
manieristas la espiral, el laberinto, el reloj, el espejo, la mascara, la muerte, etc.
-
Difuminación del límite entre lo onírico e imaginario y la realidad.
- Ruptura de las formas y actitudes convencionales de la figura humana que muestra un
hieratismo deshumanizado o un movimiento frenético.
-
Utilización de colores vivos e impactotes.
Estas características pictóricas se hallan presentes en la producción artística del psicótico, si bien
no guiadas por un condicionamiento estilístico sino que traducen el sufrimiento y la percepción
distorsionada del paciente.
Al hablar de los rasgos definitivos de la pintura del paciente esquizofrénico crónico hay que
partir del hecho apriorístico de que cada dibujo corresponde a un paciente y a un momento dado en la
evolución del paciente y que esta es fruto tanto de la incidencia del trastorno (alteraciones
sensoperceptivas, estado del animo, cronicidad, etc.) como de las características especificas (biografía,
extracción sociocultural, etc.)
Entre los rasgos más representativos encontramos:
- Pérdida del sentido de las proporciones, que se acompaña de la tendencia a lo geométrico, a la
dislocación (combinando posiciones de frente y de perfil con ruptura de la unidad corporal).
Esta ruptura de la realidad se suele acompañar de lo que se ha llamado “racionalismo mórbido”.
El paciente explica el contenido del cuadro como si se tratara de un texto aprendido o de una
formulación matemática.
ASMR. 2011 - Vol. 10 - Núm. 3
-3-
Aproximaciones a la producción pictórica del paciente psicótico crónico. Afinidades y diferencias con otras
corrientes estilísticas
- Presencia de contenidos enigmáticos nacidos del propio extrañamiento e incoherencia del
paciente.
- Simbolismos: Expresivos de vivencias amenazantes o simplemente de acontecimientos vividos
por el paciente y que se nutren de los contenidos enigmáticos antes expresados. En cualquier caso la
represión instintiva parece ser determinante en estos símbolos. Así la cifra aislada o series de cifras
(como búsqueda primaria y parcial de la realidad), la espiral (símbolo dinámico del movimiento), el
laberinto (en relación con el angustioso trayecto vital del paciente), el ojo, (proyección del control y
amenaza), la máscara (relativa al sentido de la ocultación, los “miedos psicoticos” y las experiencias
disociadoras), la muerte (como expectativa de desaparición).
- Frecuencias de contenidos anatómicos (expresivos tanto de la desestructuracion como de la
recuperación del esquema corporal) y de contenidos sexuales (casi siempre hipertrofiados y fetichistas).
- Otros rasgos característicos de la pintura psicotica son: el hieratismo (como antitesis del
movimiento y expresividad), la transparencia (que permite ver un cuerpo a través de otro, rompiendo
los cánones de la perspectiva), las estereotipias (o repeticiones temáticas), el abigarramiento
ornamental (necesario para eludir el vacío).
Se han encontrado similitudes entre la pintura esquizofrenica, el arte infantil, el arte primitivo y
las modernas tendencias de la pintura.
La regresión vivida en el trastorno psicotico aproxima su producción artística al arte primitivo y
al arte infantil coincidiendo con ellos en:
-
Predominio de lo subjetivo sobre la representación real del objeto
-
Inexistencia de las leyes de la perspectiva
-
Desproporción en las formas
-
Hieratismo expresivo
Sin embargo, -y pese a la coincidencia en el empleo de elementos comunes –el significado es
diferente en unos y en otros. Así, por ejemplo, la influencia del substrato cultural es importante en los
pacientes psicóticos y en el arte primitivo, sin embargo es mucho menos significativo en el arte infantil.
Sin embargo, en las pinturas infantiles se aprecia como la habilidad psicomotora dependiendo de las
fases de la evolución mejora la calidad estética llegando a la tridimensionalidad a diferencia del arte
primitivo. La pintura del enfermo mental muestra la existencia de símbolos específicos, cuya
representación depende de la perturbación perceptiva, a diferencia del arte primitivo cuyos símbolos
representan aspectos de la realidad pero impregnado de una notable incidencia mágica. Por ultimo
entre las pinturas del enfermo mentol y el arte infantil se aprecia la diferencia de que el niño diferencia
muy precozmente fantasía y realidad mientras que la contaminación entre lo real y lo imaginario
acompaña la evolución del enfermo psicótico.
ASMR. 2011 - Vol. 10 - Núm. 3
-4-
Aproximaciones a la producción pictórica del paciente psicótico crónico. Afinidades y diferencias con otras
corrientes estilísticas
3. ¿ARTE PSICOPATOLÓGICO O VANGUARDISTA?
Por ultimo vamos a comentar de manera resumida las aproximaciones y diferencias de la
producción pictórica del enfermo mental respecto a algunas corrientes estilísticas de vanguardia como
cubismo, expresionismo y surrealismo.
Se han apoyado estas correlaciones en el valor de las estructuras arcaicas del pensamiento, del
simbolismo y de la disgregación y autismo del psicótico.
Lo que si es cierto es que podemos encontrar elementos comunes.
a) El cubismo, se plantea abordar el problema por la reconstrucción del espacio dando primacía
al volumen e investigando en la esencia del objeto dejando la estructura originaria de este en un
segundo plano. Coincide con la pintura psicótico en lo disgregado y fragmentario
b) El expresionismo no centra su interés artístico en la estética sino que con una línea estilística
emocional y espontánea busca descubrir al hombre en su afectividad, sus miedos y contradicciones.
Dada la primacía de lo emotivo coincide con la pintura psicótica en lo subjetivo, en la utilización asidua
de formas antitéticas y en la depuración de formas con tendencia al reduccionismo y limitación de la
silueta.
c) El surrealismo coincide en que la liberación del automatismo inconsciente y la ruptura con la
realidad, en la búsqueda de una mayor libertad de las formas, fomenta la presencia del simbolismo y de
lo onírico.
Sin embargo con relación a estas corrientes artísticas si que podemos reseñar como diferencias
apreciables en la pintura del enfermo mental.
a) La ausencia de intencionalidad estética.
b) La temática del enfermo mental se nutre de sus vivencias psicóticas, de modo que, en su
subjetivismo y regresión, el paciente nos expresa a través de sus cuadros quien es y como se vive.
c) Hay circunstancias en la producción pictórica psicótica que pueden servir como indicadores
de la buena evolución del paciente. Así cuando se observa un mayor realismo en detrimento del
simbolismo. O cuando se percibe un perfeccionismo organizativo de la composición (en color, forma y
perspectiva) huyendo de dispersiones, dislocaciones y abigarramientos e inexpresividades.
4. BIBLIOGRAFÍA
- Kofan J. El lenguaje del arte. Editorial Paidos
- Navratil L. Esquizofrenia y arte. Seix Barral Ed.
- Weber JP. Psicología del Arte. Biblioteca del Arte contemporáneo. Editorial Paidos.
ASMR. 2011 - Vol. 10 - Núm. 3
-5-
Aproximaciones a la producción pictórica del paciente psicótico crónico. Afinidades y diferencias con otras
corrientes estilísticas
- Escudero Valverde JA. Pintura psicopatológica. Espasa Calpe Ed.
- Álvarez Villar A. Psicología del Arte. Psicología de la Cultura. Biblioteca Nueva Ed.
- Ehrenzwey A. Psicoanálisis de la percepción artística. Colección comunicación visual. Editorial Gustavo
Pili S.A.
ASMR. 2011 - Vol. 10 - Núm. 3
-6-
Descargar