por una cooperación con derechos humanos

por una
cooperación
con derechos
humanos
EnDerechos
red
Cuántas veces en nuestro trabajo manejamos o escuchamos datos como:
UNICEF
"Desde 2006, 2.500 millones de personas, que representa
n el 38% de la población
mundial, carecen de acceso a instalaciones de sane
amiento mejoradas".
UNFPA
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...y cuántas veces datos como:
"Se vulnera el derecho al agua del 38 % de la población
mundial".
"En el mundo en desarrollo una mujer muere cada minuto, porque
se vulnera su derecho a la salud".
¿Es lo mismo hablar de desnutrición infantil, falta de agua potable, falta de hospitales o violencia intrafamiliar,
que del derecho a la alimentación de los niños y niñas, del derecho al agua o del derecho a la vida?
¿Es lo mismo pensar qué necesita una persona, que pensar que se están vulnerando sus derechos?
No, no es lo mismo. Tener una mirada sobre el desarrollo centrada en el ejercicio de los derechos humanos implica cambios en la propia concepción del desarrollo y del ser humano, en el acercamiento y conocimiento de la
realidad y en nuestras formas de hacer cooperación para el desarrollo.
Muchas veces hablamos de derechos humanos, pero ¿sabemos realmente qué son?
Los derechos humanos son mucho más que normas jurídicas recogidas en la legislación.
Son consecuencia de un proceso histórico de lucha social por la dignidad y la igualdad de las personas,
motivado por el desequilibrio en las relaciones de poder. Ante situaciones de desigualdad, o ante la
amenaza de pérdida de una capacidad o de recursos, surgen movimientos sociales que reivindican
instrumentos jurídicos e instituciones que los protejan.
Los derechos humanos forman parte de nuestras vidas. Ser titulares de derechos nos permite exigir al
Estado una respuesta a demandas relacionadas con necesidades primarias del ser humano sin las cuales
no puede desarrollarse una vida digna.
Así, los derechos humanos se han convertido en un código ético universal, un conjunto de valores,
principios y normas de conducta, basados en el respeto de la dignidad humana.
Los derechos humanos trascienden el contexto cultural
Un grupo de mujeres activistas de derechos humanos procedentes de diversos ámbitos islámicos ha elaborado un manual para
la educación sobre derechos humanos de las mujeres en las sociedades musulmanas (M. Afkhami y H. Vaziri, Claiming our Rights:
A Manual for Women’s Human Rights Education in Muslim Societies (Bethesda, Sisterhood Is Global Institute, 1996)). El manual
abarca una amplia gama de “situaciones” en relación con los derechos, como derechos en la familia, autonomía en las decisiones
de planificación familiar, derecho a la educación y al empleo, y derecho a la participación política. Sus ejercicios interactivos e
interpretativos entrelazan extractos de los acuerdos internacionales de derechos humanos con versículos del Corán, normas de la
ley islámica, cuentos, proverbios y experiencias personales.
Fuente: Preguntas frecuentes sobre el EBDH en la cooperación para el desarrollo. Oficina del Alto Comisionado de Naciones
Unidas para los Derechos Humanos. Naciones Unidas Nueva York y Ginebra, 2006
Numerosas personas y organizaciones luchan para que no se violen los derechos, por el fin de la
disciminación y las desigualdades y para mejorar la protección de derechos ya reconocidos. Así mismo,
buscan proteger recursos y capacidades que el ser humano ve amenazados y que aún no son reconocidos
como derechos.
En este sentido, el desarrollo de instrumentos jurídicos internacionales es un proceso vivo que refleja las
reivindicaciones de distintos movimientos sociales y busca la dignidad y la igualdad de las personas.
En la cooperación para el desarrollo hablamos de derechos humanos y desarrollo pero
¿qué significa incorporar los derechos humanos en la cooperación para el desarrollo?
Los derechos y el desarrollo humano comparten motivaciones y preocupaciones. Ambos se centran en la
dignidad y la igualdad de las personas y buscan promover su bienestar y mejorar sus vidas.
A principios de la década de los noventa los derechos humanos eran considerados un componente
necesario para lograr el desarrollo humano. A finales de la década se habla de un desarrollo con “enfoque
basado en derechos humanos” (EBDH), donde el fin último del desarrollo es lograr el ejercicio de los
derechos humanos.
El desarrollo con EBDH no tiene como primer objetivo terminar con la pobreza, el hambre, conseguir
la paz… El desarrollo con EBDH busca transformar las existentes relaciones de poder, corrigiendo las
desigualdades, las prácticas discriminatorias y el injusto reparto de poder, por ser estos los principales
problemas que dificultan el desarrollo.
El principal obstáculo para el desarrollo no es la pobreza o el hambre; es la discriminación de mujeres,
niños y niñas, o de indígenas; es el desigual reparto de la tierra, la concentración del poder en mano de
pocos, el reparto injusto de la riqueza. Todas esas situaciones presuponen la existencia de relaciones de
poder injustas y desiguales.
“El enfoque basado en los derechos humanos es un marco conceptual para el proceso de desarrollo humano que desde el punto
de vista normativo está basado en las normas internacionales de derechos humanos y desde el punto de vista operacional está
orientado a la promoción y la protección de los derechos humanos. Su propósito es analizar las desigualdades que se encuentran
en el centro de los problemas de desarrollo y corregir las prácticas discriminatorias y el injusto reparto del poder que obstaculizan
el progreso en materia de desarrollo”.
Fuente: Preguntas frecuentes sobre el EBDH en la cooperación para el desarrollo. Oficina del Alto Comisionado de Naciones
Unidas para los Derechos Humanos. Naciones Unidas Nueva York y Ginebra, 2006
Entonces, ¿cómo incorpora el EBDH los valores, principios y normas de los derechos
humanos en el desarrollo?
Los valores de libertad, paz, solidaridad y respeto, rigen las relaciones
humanas basadas en los derechos humanos, como características y
cualidades comunes que llevan a la dignidad.
Los principios de universalidad, igualdad, no discriminación,
interdependencia, indivisibilidad e inalienabilidad afirman y enuncian estos
valores, siendo la base fundamental para conseguir un desarrollo que busca
el ejercicio de los derechos humanos de todas las personas.
Las normas internacionales de los derechos humanos son la base del
desarrollo con EBDH, al considerar que son reivindicaciones de numerosos
movimientos sociales y obligaciones de los Estados.
Incorporar estas normas en el desarrollo significa que todos los seres
humanos en cuanto individuos son titulares de derechos y en cuanto
parte de la sociedad son titulares de obligaciones (familia, comunidad,
asociaciones). También existen instituciones del Estado con la obligación de
respetar, proteger y garantizar los derechos.
Los y las titulares de derechos tienen la capacidad de exigir al Estado que se
creen las condiciones necesarias para que puedan ejercerlos. La educación,
la salud, la vivienda, la alimentación… pasan de ser necesidades del ser
humano, que deben ser cubiertas, a ser derechos que pueden ser exigidos.
Incorporar los derechos humanos en la cooperación para el desarrollo
constituye una apuesta ideológica y política. Podemos trabajar con la gente
para cubrir sus necesidades o mejor aún apoyarla para que conozca sus
derechos y acompañarla en sus reivindicaciones.
Siempre buscamos mejorar nuestras intervenciones ¿que nos aporta el EBDH?
El EBDH otorga un fundamento jurídico a las acciones de cooperación. La cooperación no es algo
que los Estados deciden realizar de forma voluntaria, sino que tienen la obligación de cooperar
para crear un orden social internacional en el que los derechos humanos puedan hacerse efectivos.
La Declaración Universal de los Derechos Humanos en su artículo 28 señala: "Toda persona tiene derecho a que se
establezca un orden social e internacional en el que los derechos y libertades proclamados en esta Declaración se hagan
plenamente efectivos”.
Pacto Internacional de los Derecho Económicos, Sociales y Culturales: Artículo 2. 1. Cada uno de los Estados Partes en
el presente Pacto se compromete a adoptar medidas, tanto por separado como mediante la asistencia y la cooperación
internacionales, especialmente económicas y técnicas, hasta el máximo de los recursos de que disponga, para lograr
progresivamente, por todos los medios apropiados, inclusive en particular la adopción de medidas legislativas, la plena
efectividad de los derechos aquí reconocidos.
El EBDH incorpora los principios de universalidad, igualdad y no discriminación, y prioriza las
acciones a favor de los grupos más vulnerables y excluidos como los niños y niñas, la juventud, las
mujeres, los pueblos indígenas...
“Una aportación importante de un enfoque de derechos humanos con respecto a la reducción de la pobreza es una
concesión de poder a los pobres, que amplíe su libertad de opción y de acción para estructurar sus propias vidas. ...
Los derechos humanos facultan a los individuos y a las comunidades al otorgarles derechos que imponen obligaciones
jurídicas en otros.”
Fuente: Los derechos humanos y la reducción de la pobreza. Un marco conceptual. Oficina del Alto Comisionado para
los Derechos Humanos de Naciones Unidas. 2004
El EBDH facilita respuestas integrales a los problemas del desarrollo, proponiendo un trabajo
multisectorial. En su visión del entorno tiene en cuenta a las personas, la familia, la comunidad
y la sociedad civil como titulares de responsabilidades y a las autoridades locales y nacionales
Siempre buscamos mejorar nuestras intervenciones ¿que nos aporta el EBDH?
como titulares de obligaciones. Además tiene presente el contexto social, político, económico
y legal que determina las relaciones entre esas instituciones y las exigencias, los deberes y las
responsabilidades resultantes.
El EBDH asigna los roles de titulares de derechos, responsabilidades y obligaciones y los relaciona,
haciendo necesario el trabajo conjunto para lograr la transformación de las relaciones de poder.
Ejemplo de práctica del enfoque basado en los derechos humanos: aumento de la capacidad de los titulares de
derechos y los titulares de deberes
Malawi ilustra un caso de aplicación del EBDH, porque se vincularon la educación y el activismo en materia de
derechos en las aldeas, con la labor de promoción jurídica en el campo del Gobierno. La campaña trabajó por un lado
con los titulares de obligaciones, para velar por que los derechos necesarios quedaran consagrados en la legislación
en los planos nacional y local, y por otro lado, con los titulares de derechos, para informarles de los derechos
que tenían, qué relación guardaban esos derechos con su seguridad alimentaria y cómo podían proceder para
reivindicarlos.
La Constitución de Malawi de 1998 recoge los derechos a la alimentación y a la salud. También afirma que “el Estado
promoverá activamente el bienestar y el desarrollo del pueblo de Malawi adaptando y aplicando progresivamente
políticas y leyes encaminadas a lograr esos objetivos". Además, Malawi ha ratificado los mecanismos jurídicos
internacionales necesarios para garantizar el derecho a los alimentos.
La campaña sobre el derecho a los alimentos en Malawi se inició en las aldeas, educando a la población acerca de
sus derechos y obteniendo nuevos conocimientos acerca de las causas subyacentes de su inseguridad alimentaria.
La campaña vinculó las experiencias particulares de los aldeanos, los derechos humanos en los que podían basarse
para hacer frente al hambre y cómo podría emprenderse una campaña de ese tipo. Grupos de trabajo en las aldeas
aunaron sus esfuerzos de organización para llegar a las instancias regionales y después nacionales, manteniendo
la representación de los grupos de las aldeas. Estos grupos vincularon sus problemas cotidianos de hambre con
propuestas de política para leyes y actuaciones nacionales, velando por que la población pudiera reivindicar los
derechos necesarios para atender sus necesidades.
Fuente: Tomado de Preguntas frecuentes sobre el EBDH en la cooperación para el desarrollo. Oficina del Alto
Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos. Naciones Unidas Nueva York y Ginebra, 2006
Siempre buscamos mejorar nuestras intervenciones ¿que nos aporta el EBDH?
El EBDH, además, incorpora la participación como
principio y como derecho humano. Promueve la
construcción de una ciudadanía activa, participativa y
consciente de sus derechos.
Se pregunta por las causas de la vulneración de los
derechos humanos y los obstáculos para su ejercicio,
como base para conocer la realidad y orientar las políticas
e intervenciones de cooperación para el desarrollo.
Considera si titulares de derechos y titulares de
obligaciones no pueden ejercer sus derechos o no pueden
cumplir con sus obligaciones, por falta de capacidades.
Apoya procesos que buscan fortalecer las capacidades
de los y las titulares de obligaciones para que el proceso
de elaboración de políticas públicas sea transparente,
incorpore la rendición de cuentas y pueda cumplir con sus
obligaciones.
Apoya procesos que buscan fortalecer las capacidades
de los titulares de derechos para que puedan ejercerlos,
construyendo una ciudadanía activa, participativa,
consciente de sus derechos y de sus deberes como parte de
la sociedad.
Permite hacer reales los derechos humanos a través de las
intervenciones de cooperación para el desarrollo, pasando
del discurso ético al ejercicio real. Los derechos humanos
no son algo inalcanzable o retórico, son realidades
concretas de la dignidad humana.
Muchas veces incluimos los derechos humanos en nuestros proyectos y políticas de
cooperación para el desarrollo pero ¿sabemos lo que implican realmente?
La incorporación del EBDH en la cooperación para el
desarrollo implica un cambio en la orientación de la
política de cooperación de nuestras organizaciones,
centrando nuestras acciones en la transformación
de las relaciones injustas de poder, corrigiendo las
desigualdades y las prácticas discriminatorias.
Implica apoyar a los y las titulares de derechos,
obligaciones y responsabilidades para que trabajen
conjuntamente, transformen su realidad y así puedan
ejercer sus derechos y cumplir con sus obligaciones
y responsabilidades. El problema se centra en la
transformación de las relaciones de poder.
Las instituciones que trabajan en cooperación
para el desarrollo asumen su papel de titulares
de responsabilidades, creando puentes para que
titulares de derechos y de obligaciones trabajen
conjuntamente.
Optar por incorporar el EBDH en la política de nuestra
organización, supone una reorientación no sólo en
las acciones, sino en la propia definición y análisis
del problema, en la identificación de proyectos y en
su definición, incorporando los valores, principios y
normas de los derechos humanos.
Si decidimos incorporar el EBDH en nuestra organización ¿Por dónde tengo que
empezar?
Ya hemos visto que incorporar los valores, principios y normas de los derechos humanos en la
cooperación es algo más que utilizarlos como parte de nuestro discurso.
Cualquier cambio de fondo en la política de una organización debe darse a partir de un debate interno
motivado por la búsqueda de una mejora en sus formas de hacer. En este caso, se hace necesario un
debate en el cual se analice el propio concepto y papel que la organización tiene sobre la cooperación
para el desarrollo y el papel que ocupan los derechos humanos en su visión estratégica y en sus
intervenciones. Además, se debe reflexionar sobre los aportes que nos ofrece el EBDH para apropiarnos
esta nueva mirada.
El debate debería trasladarse a todas las contrapartes y socios de los distintos países, de forma que no se
vea como un nuevo enfoque que se impone desde las organizaciones del Norte.
Por otro lado, para incorporar el EBDH en nuestras organizaciones y nuestras intervenciones es necesario
incorporar una cultura de derechos humanos a través del conocimiento y apropiación de los derechos
humanos por parte de todas las personas que forman parte de la organización.
Los cambios no sólo deberían buscarse en la práctica de las intervenciones, sino que es necesario
un cambio previo en la política y estrategia de la organización, para que realmente se dé la citada
apropiación.
Es necesario habilitar espacios de reflexión, debate, formación e intercambio de experiencias, que nos
permitan apropiarnos del EBDH e incorporarlo en la filosofía e ideología de nuestra organización, para
poder trasladarlo a la práctica.
Red EnDerechos
Esta red está formada por un grupo de ONG de desarrollo y derechos humanos,
universidades, empresas y cooperativas, que nos articulamos en un espacio de
diálogo, intercambio de experiencias y construcción de conocimiento sobre el
EBDH y su incorporación práctica en la cooperación para el desarrollo.
Las entidades que formamos la Red creemos en una cooperación para el desarrollo
que busque una verdadera transformación social, y apostamos por el EBDH para
lograrla y dar coherencia a nuestro trabajo.
Desde la Red mantenemos una acción permanente centrada en cuatro ejes de
trabajo investigación – formación – sensibilización – incidencia. Y específicamente:
ǻǻ Promovemos el debate y la reflexión entre los actores de la cooperación
para el desarrollo sobre la importancia de incorporar el EBDH en las políticas
e intervenciones de cooperación para el desarrollo y los cambios que esto
implica.
ǻǻ Difundimos el EBDH entre los distintos actores del sistema de cooperación
para el desarrollo.
ǻǻ Facilitamos la capacitación y formación de los distintos agentes de la
cooperación sobre el EBDH y su incorporación en la cooperación para el
desarrollo.
ǻǻ Elaboramos herramientas y metodologías para la incorporación práctica
del EBDH en la programación y en los distintos ámbitos de actuación de la
cooperación para el desarrollo.
ǻǻ Elaboramos materiales y recursos para la educación para el desarrollo, en
derechos humanos, interculturalidad, paz… con EBDH.
ǻǻ Llevamos a cabo una estrategia de incidencia política para la incorporación del
EBDH en las políticas e intervenciones de la cooperación para el desarrollo.
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