Poder Judicial de la Nación //doba, 29 de septiembre de dos mil once.Y VISTOS: Estos autos caratulados: “AGUIRRE, Carlos Enrique y otros p.ss.aa Defraudación a la administración publica” (Expte. N° 205/2011), venidos a conocimiento de la Sala A de este Tribunal interpuesto por en el virtud Dr. del recurso de apelación Benjamín Sonzini Astudillo en representación de Mónica Beatriz Bisio a fs. 338/340, los Dres. Marcos Juárez y Julio César Páezº en de Augusto Enrique Varas a fs. 341/342 representación y la Defensora Pública Oficial, en representación de María Eve del Valle USO OFICIAL Rodríguez y Carlos Edgardo Bisio a fs. 343, todos en contra de la resolución dictada con fecha 16 de junio de 2011 por el señor Juez Federal de Córdoba, registrada con el N° 88/2011, de la Secretaría penal de este Tribunal y en la que decide: RESUELVO: I. ORDENAR EL PROCESAMIENTO de Carlos Aguirre, Mónica Bisio, Augusto Enrique Varas y Hugo Roberto Chavarría, filiados en autos, por considerarlos prima facie coautores penalmente responsables del delito de Defraudación a una Administración pública (art. 174 inc. 5 del Código Penal y 45 del C.P.) y de Eve Rodríguez y Carlos Bisio, en carácter de partícipes secundarios (art. 46 del C.P.) en los términos de los arts. 306 y 310 del C.P.P.N. II. ORDENAR el PROCESAMIENTO de Mónica Bisio y Augusto Enrique Varas responsables del como delito supuestos de coautores Falsificación penalmente de documento privado de conformidad a lo preceptuado por el art. 292 primer párrafo del Código Penal y art. 45 del C.P.) dos hechos, en los términos de los arts. 306 y 310 del C.P.P.N III. ORDENAR el PROCESAMIENTO de Carlos Enrique Aguirre, Mónica Bisio y Augusto Enrique Varas, por considerarlos 1 “AGUIRRE, Carlos Enrique y otros p.ss.aa administración publica (Expte. N° 205/2011) Defraudación a la coautores penalmente Adulteración de responsables documento privado del delito (arts. 292, de primer párrafo del C.P y 45 del Código Penal) -un hecho-, en los términos de los arts. 306 y 310 del C.P.P.N. IV. ORDENAR el PROCESAMIENTO de Augusto Martín VARAS, filiado en autos como supuesto autor penalmente responsable del delito de Encubrimiento en grado de tentativa, de acuerdo a lo preceptuado en los arts. 277 inc. “b” y 42 del Código Penal, imputable al nombrado en carácter de autor (art. 45 del C.P) en los términos de los arts. 306 y 310 del C.P.P.N). VI. TRABAR EMBARGO sobre los bienes de María Eve Rodríguez y Martín Augusto Varas hasta cubrir la suma de veinte mil pesos a cada uno de ellos. Y CONSIDERANDO: I. Contra la resolución obrante a fs. 307/326, cuya parte resolutiva ha sido transcripta precedentemente, el Dr. Benjamín Sonzini Astudillo en representación de Mónica Beatriz Bisio a fs. 338/340, los Dres. Marcos Juárez y Julio César Páez en representación de Augusto Enrique Varas a fs. 341/342 y la Defensora Pública Oficial, en representación de María Eve del Valle Rodríguez y Carlos Edgardo Bisio a fs. 343, han interpuesto sus respectivos recursos de apelación, habiendo informado en forma oral en la audiencia llevada a cabo el 15 de septiembre pasado, según lo prescribe el art. 454 del C.P.P.N. II. El señor Juez Federal de primera instancia entiende que los procesamientos son procedentes en virtud de que, existen conforme pruebas la imputación suficientes dada a los para encartados, atribuirles responsabilidad penal en los hechos a ellos atribuidos. 2 Poder Judicial de la Nación III. Cuestiona la Defensora Pública Oficial, la motivación de la sentencia. Manifiesta que la prueba de cargo es insuficiente respetado el y principio las de pruebas la sana valoradas crítica no han racional en relación a sus asistidos. La defensa de Mónica Beatriz Bisio plantea la atipicidad del hecho subsidiariamente niega endilgado la a su defendida y participación de su defendida en el hecho ilícito atribuido. Plantea la inexistencia de elementos de intervención convicción de su suficientes defendida, como para sostener también la alega la USO OFICIAL inaplicabilidad del art. 45 del Código penal es decir, la coautoría. Invoca la falta de proporcionalidad del monto embargado en el procesamiento. También pide la nulidad parcial de la declaración testimonial del Sargento Luis Alberto Molina de fs. 64/165 y fs. 166. Por su parte, se agravia la defensa de Augusto Enrique Varas al cuestionar la participación del mismo y el arbitrario manejo procesamiento de las cuestionando pruebas la para valoración dictar de el ellas, efectuadas por el Juez. IV. Seguidamente, debe ingresarse al análisis de la cuestión de fondo, de acuerdo al sorteo realizado para determinar el orden de votación efectuado en autos. A cuyo fin, se expide en primer término el señor Juez de Cámara doctor Ignacio María Vélez Funes, para hacerlo en segundo y tercer orden los doctores Luis Rodolfo Martínez y Roque Ramón Rebak. El señor Juez de Cámara doctor Ignacio María Vélez Funes dijo: I. Situación procesal de Mónica Beatriz Bisio 3 “AGUIRRE, Carlos Enrique y otros p.ss.aa administración publica (Expte. N° 205/2011) Defraudación a la La pretensión defensiva respecto a Mónica Beatriz Bisio se centra en el dictado de falta de mérito a favor de la nombrada en razón de que, a su entender el hecho de defraudación a la administración pública es atípico por haber existido culpa exclusiva por parte del Ministerio de Desarrollo Social subsidio a la equipar realizar de la Nación “Asociación talleres al Mutual haber Carlos textiles otorgado Mujica” para el para personas carenciadas. Por otro lado, entiende la defensa que las pruebas existentes en la causa no acredita la participación de su defendida, propiciando el sobreseimiento de la misma en orden a los delitos enrostrados. Tal como argumentó el defensor en la audiencia pública (Art. 454 del C.P.P.N.) celebrada el 15 de septiembre de 2011 (fs. 418/427). En virtud de que la defensa de Bisio ha estimado que el hecho de estafa es atípico porque el perjuicio económico ocurrió por culpa exclusiva del organismo que concedió el préstamo dinerario –Ministerio de Desarrollo de la Nación-, el suscripto estima que carece de razón y que por lo tanto, se han satisfecho los requisitos que demanda el art. 172 del Código Penal. El delito de estafa es una de aquellas infracciones contra la propiedad, que encierra un mecanismo sencillo. Todo consiste en viciar el intelecto de la victima para que ésta crea como verdadero, lo que es falso, e ignore como consecuencia que no conoce el verdadero estado de las cosas. Para ello, el autor puede valerse de cualquiera de los modos de conducta que la disposición prevé, o de cualquier otro ardid o engaño. En esencia, la estafa es una defraudación por fraude y queda satisfecha cuando el referido mecanismo ardidoso o de engaño se ha perfeccionado de modo tal, que en virtud del error causado 4 Poder Judicial de la Nación por quien estafa, la víctima ha efectuado una disposición patrimonial que le causa perjuicio a ella misma o a un tercero. Si el error no se debe a la conducta del autor del hecho, la excluida, estafa cuando patrimonial, se pese ésta no excluye a como existir determina también una perjuicio resulta disposición de carácter económico. En esta causa se ha verificado dicho mecanismo, aunque la defensa no acepa que haya existido fraude por parte de los imputados, aduciendo que fue una maniobra USO OFICIAL manejada con liviandad de la cual nadie obtuvo lucro. En principio, debe aceptarse que existió el ardid y que a causa del mismo el intelecto de la víctima resultó viciado por error y que a raíz de la conducta de la imputada el organismo público fue engañado y que, desde luego, existió una disposición patrimonial que causó daño a la administración pública por las maniobras efectuadas con los dineros recibidos. Lo que se discute es que los funcionarios públicos hubiesen tomado los recaudos necesarios para dar este dinero, como hablar por teléfono o librar oficios, según lo manifiesta la defensa. La pregunta: cuestión ¿Requiere el queda delito reducida de a estafa la siguiente que el error padecido por la víctima como consecuencia de los ardides empleados por el autor, deba ser invencible o insuperable? o por el contrario, ¿admite esta infracción penal solamente que quien efectúa la disposición patrimonial lo haga creyendo conocer el verdadero estado de las cosas cuando 5 “AGUIRRE, Carlos Enrique y otros p.ss.aa administración publica (Expte. N° 205/2011) Defraudación a la tan sólo conoce una falsedad a causa de los embustes y de las maquinaciones del estafador? Parece mucho, en todo caso, entender que el art. 172 del Código Penal hubiese exigido a quien resulta despojado de su patrimonio, que antes de disponer de su propiedad, hubiese conocido con certeza el verdadero estado de las cosas. Si esto hubiese requerido la infracción, ninguna estafa descubriría, abstendría se en de podría todo acceder consumar caso, a y las porque siempre el pretensiones la víctima fraude del y se ardidoso, engañador o taimador. Así y cuando mucho, la estafa debería quedar siempre en tentativa, entendiendo el argumento propuesto por la defensa de Bisio. El art. 172 del Código Penal requiere de parte del autor que utilice fraude mediante ardid o engaño y requiere en la víctima que ignore a causa del fraude, que está siendo engañada y muy próxima a ser despojada. Exige que crea como cierto lo que no lo es; que ignore que está siendo engañada. En una palabra, lo que el autor se propone, es crear, o motivar el intelecto del sujeto pasivo, un error de hecho, de manera que, en base a la buena fe lograda, sacar provecho patrimonial mediante un despojo engañoso. Por fin, ¿qué diligencias podría llevar a cabo la víctima para conocer el verdadero estado de las cosas cuando en efecto ha sido engañada y captada por lo tanto su buena fe? ¿ qué otras diligencias deberá efectuar para conocer el verdadero estado de las cosas, cuando en efecto cree ya conocer con seguridad dicho estado? En todo caso, a dichas diligencias las deberá llevar adelante quien dudara sobre si eventualmente podría ser víctima de estafa. Si las omitiera, no podrá reclamar 6 Poder Judicial de la Nación el carácter de victima de esta infracción, ello, simplemente porque la duda no equivale al error, ni éste se equipara con aquella. Autorizada doctrina nacional, es coincidente con este modo interpretativo de la ley. Al respecto, dice Justo Laje Anaya:”… cuando alguien se encuentra en error por creer conocer el verdadero estado de las cosas, ese creer conocer el estado de las cosas, le impide efectuar las diligencias, porque las diligencias para saber el verdadero estado de las cosas, se origina ante la duda…”. Ver, “La estafa y otras defraudaciones en la doctrina judicial USO OFICIAL argentina”, Editorial Alveroni, año 2005, pág. 38). En síntesis, el suscripto estima que el art. 172 del C.P., exige nada más que el intelecto de la víctima se halle viciado por error de hecho y que ese error sea la consecuencia de un procedimiento ardidoso o engañoso de parte del autor, sin que dicho error deba ser invencible. En cuanto a la existencia material de los hechos y la autoría de la imputada Mónica Bisio en los delitos de fraude a la administración pública, adulteración y falsificación de documento privado, el material probatorio consistente en documentos y testimoniales recabado y valorado en la causa, resulta suficiente y determinante para arribar a la conclusión a la que se arriba y acreditar la participación de la nombrada Mónica Bisio en los hechos endilgados, tal como ha merituado el juzgador en primera instancia y constancias de la causa. Tengo en cuenta, en primer lugar y como lo adelantara, que el instructor ha valorado con acierto la prueba incorporada para sostener a esta altura que los hechos existieron, todo lo cual, permite – a los 7 “AGUIRRE, Carlos Enrique y otros p.ss.aa administración publica (Expte. N° 205/2011) Defraudación a la fines de este momento procesal-, sostener que existe probabilidad cierta de que la autora del mismo habría sido la prevenida Mónica Beatriz Bisio. Ello así, en virtud de que en el curso instructorio no se ha logrado establecer, ahora sí, con certeza, que el hecho no existió o que habiendo existido en su materialidad, circunstancia no fue que cometido determinaría, por la imputada, el dictado del sobreseimiento, como lo pretende la parte defensiva. Arguye la defensa de Mónica Bisio que su defendida no ha participado en el hecho por cuanto si bien reconoce que el dinero del subsidio se manejó en forma improlija, no existe prueba que indique que hizo alguna extracción de dinero ni que tenía acceso al mismo, aclarando que se gastó todo en artículos de computación, máquinas de propiedad coser, que se en viáticos alquiló al y en señor arreglos Carreras de la para el desarrollo de los cursos. La postura defensiva al intentar desvincular a la imputada Mónica Bisio, no resulta a mi parecer, convincente para deslindarla desvirtuado por de el responsabilidad cúmulo probatorio penal y queda incorporado en la causa, por las siguientes razones. Así, en primer lugar, las pruebas recolectadas demuestran que Mónica Bisio habría sido la encargada de gestionar todas concreción del las cuestiones proyecto, la relacionadas obtención del con subsidio, la el lugar para el desarrollo de los cursos, la compra de las máquinas de coser y elementos de computación; ello a través de las testimoniales recabadas, las que son coincidentes con los dichos de algunos coimputados en esta causa, dichos que por cierto deben tomarse con el valor que tiene una 8 Poder Judicial de la Nación declaración prestada sin el juramento de ley o el interés en el resultado de la causa de otros imputados. Al respecto declara la arquitecta Norma Josefina Vaudagna, que Mónica Bisio le solicitó un programa de los cursos que la declarante dictaba en la Universidad Nacional de Córdoba y en fundaciones civiles, a fin de obtener un subsidio de la Nación destinado a formar cooperativas textiles, comprometiéndose que cuando el gobierno federal le otorgara el subsidio, la llamaría para dictar esos cursos, pero nunca la llamaron. Las manifestaciones vertidas por la arquitecta USO OFICIAL Vaudagna son coincidentes en su contexto con los dichos del coimputado Carlos Aguirre y Hugo Chavarría, quienes manifestaron que Mónica Bisio era la encargada de gestionar y concretar las cuestiones relacionadas con la concreción del proyecto y a la obtención del subsidio. Inclusive, manifestó la testigo Vaudagna que los datos insertos en el programa supuestamente elaborado por ella y presentado ante el Ministerio nacional para el otorgamiento del subsidio, eran falsos porque los títulos que allí se exponían nunca los había obtenido (fs. 43). En objetivo dicho la proyecto capacitación se habría para consignado hombres y como mujeres desocupados, en el rubro textil, estableciendo la manera de su realización, insumos y el profesionales su localización, equipamiento que el necesario, desarrollarían presupuesto, propuesto actividades por los los docentes, detallando además la cantidad y datos filiatorios de los beneficiarios, siendo éstos aproximadamente ciento cincuenta (150) personas por ciclo lectivo, estipulado en 9 “AGUIRRE, Carlos Enrique y otros p.ss.aa administración publica (Expte. N° 205/2011) Defraudación a la tres semestres, más tres meses de práctica siendo la Bisio la responsable del proyecto. Asimismo, encargada de habría alquilar sido una Mónica vivienda Beatriz a los fines de desarrollar los cursos de costura paradojalmente, propiedad del señor Juan Carlos Carreras, pareja o conviviente de la misma Mónica Beatriz Bisio, quien en sus declaraciones refirió que para que el Ministerio le otorgara el subsidio, debía realizar un contrato de locación con el propietario del inmueble de calle Ducasse N° 1077 de Barrio San Martín, el cual se hizo por un período locativo de treinta y seis meses. Agrega que ni bien fue alquilado el lugar, se comenzaron a hacer refacciones que nunca se terminaron, quedando la casa en condiciones deplorables, motivo por el cual jamás se llevaron a cabo los talleres o cursos de costura en esa propiedad. Fue por tal motivo que Mónica Bisio decidió el dictado y desarrollo de los cursos en calle Brandsen N° 440, donde se dictaron sólo durante un par de meses en el año 2008 (fs. 121). Las maniobras ardidosas, engañosas o aparentes, desplegadas por la imputada previas a la obtención de subsidio, con la elaboración del proyecto y el contrato de locación en calle Ducasse N° 1077, entre otros, son continuadas luego de que se efectuara el depósito del mismo en la cuenta “Asociación corriente Mutual N° Carlos 108116616/2 Mujica”, con a nombre la de la compra de artículos de computación por el monto de pesos Setenta mil quinientos cuarenta y ocho mil con catorce centavos ($ 70.548,14) simulando que eran destinados al desarrollo del proyecto textil aprobado, con las clases de unas pocas personas que asistieron a recibir clases y con la posterior rendición de cuentas que debía hacerse al Ministerio de 10 Poder Judicial de la Nación Desarrollo de la Nación, de acuerdo a la documentación oportunamente firmada con dicho ente público. Repárese en los dichos de la testigo Nora Beatriz Zacarías, persona conocida de Mónica Bisio, quien manifestó que nunca concurrió al domicilio de calle Ducasse N° 1077 a dictar cursos, ni reconoció las facturas que el Tribunal le exhibió desconociendo las firmas puestas al pie de las mismas que a ella le fueron atribuidas. Refiere la misma testigo Zacarías que a la máquinas industriales las compró Mónica Bisio con el dinero del subsidio en la casa Vargas, agregando que lo que Bisio está haciendo es hacer pasar las USO OFICIAL máquinas como si fueran de su propiedad y decir que Varas se las pidió prestadas. Agrega que lo sabe con certeza porque a ella misma Mónica Bisio se lo contó cómo habían sido las cosas (fs. 51). Otro testimonio relevante respecto a este punto, resulta el de la testigo Natalia Yanina Leonardo quien refiere que en una oportunidad, Mónica Bisio le comentó que estaba preocupada porque había comprado máquinas de coser y la cantidad que figuraba en el remito no era la misma que le habían entregado (fs. 70). Respecto a los cursos de costura o tejido que debía dictar para justificar el subsidio, debe analizarse en los testimonios de las pocas personas que asistieron a los cursos, quienes refieren que las máquinas de coser o de tejer no servían para la realización de las actividades propuestas, y que debieron ser adaptadas o reparadas. Expresan que dichas actividades sólo se cumplieron en el término de tres meses (repárese que el contrato de alquiler de calle Ducasse N° 1077 era por treinta y seis meses) y para una cantidad muy reducida de alumnas, abonándoles por 11 “AGUIRRE, Carlos Enrique y otros p.ss.aa administración publica (Expte. N° 205/2011) Defraudación a la las mismas la suma de pesos treinta ($ 30) la hora como lo señalaron las testigos Mirta Benita Arévalo (fs. 49) y Mónica del Carmen Paramidani (fs. 57). No escapa al suscripto el despliegue ardidoso que habría efectuado la imputada al retener los factureros de las personas que daban los cursos, a los fines de la posterior emisión de facturas ideológicamente falsas por trabajos que en realidad nunca se habían efectuado y de sumas dinerarias que no habían percibido las personas individualizadas en las mismas, lo cual es reconocido y declarado por las testigos Mirta Benita Arévalo y Mónica del Carmen Paramidani, todo lo cual ya ha sido congruentemente valorado por el Juez Federal de primera instancia, como así también, las adulteración de la factura emitida por la abogada María soledad Baggini a nombre de Carlos Bisio, hermano de la encartada, la que habría sido entregada al mismo por un juicio tramitado en el fuero de familia. De acuerdo a la prueba testimonial y documental que obra en la causa, surge que la imputada, sirviéndose de facturas falsas y adulteradas, efectuaba apócrifas rendiciones de cuentas ante el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación. Esta maquinación serviría a Bisio para abultar o pretender justificar los gastos que supuestamente le demandaba distintos la cursos Asociación de Mutual perfeccionamiento en el por dictado parte de de los docentes, utilizando nombres de profesionales en el rubro textil e informático que no habían participado ni en el proyecto ni en el dictado de talleres, desconociendo algunos de éstos, inclusive, la existencia de la misma “Asociación Mutual Carlos Mujica”. 12 Poder Judicial de la Nación Por estas razones, no alcanzan los dichos de la defensa técnica de Mónica Bisio en cuanto alega que no realizó extracción alguna de la cuenta y que el dinero fue gastado, aunque en forma improlija, para la compra de los artículos necesarios para dicho emprendimiento. El argumento exculpatorio que se pretende justificar por falta de prolijidad o cuidado en la administración de dineros públicos resulta inatendible a esta altura de la causa. En definitiva, con las pruebas descriptas brevemente y valoradas por el inferior, el suscripto se encuentra en condiciones de afirmar que el ardid requerido USO OFICIAL por el delito de estafa se refleja en primer lugar, en la presentación por parte de Mónica Bisio de una copia de un programa de cursos diseñado por la arquitecta Norma Josefina Vaudagna, sin su autorización, cuya autoría se la atribuía a la “Asociación Mutual Carlos Mujica” y cuyas condiciones, sabía de antemano que no estaba dispuesta a cumplimentar, pero que eran necesarias e indispensables en lo formal o aparente para que el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación lo aprobara y en consecuencia le otorgara el subsidio institucional a la “Asociación Mutual Carlos Mujica”. El ardid desplegado en un principio con la presentación de este proyecto bajo la denominación “Escuela Laboratorio Industrial de de Indumentaria y Accesorios”, continúa una vez otorgado el subsidio, con los contratos a docentes inexistentes o utilizando sus nombres para que dictaran cursos y talleres de costura nunca se realizaron según el compromiso asumido y documentación firmada ante el Ministerio y con la rendición de cuentas al organismo público a fin de justificar el compromiso asumido, para lo 13 “AGUIRRE, Carlos Enrique y otros p.ss.aa administración publica (Expte. N° 205/2011) Defraudación a la cual se valió de facturas falsas en su contenido y utilizando nombres de personas que nunca habían trabajado para dicha fundación o que lo habían hecho por un breve lapso de tiempo. Ello revela una fraudulenta mayor que una acción reprochable conducta desprolija, descuidada o con falta de dolo como pretende la defensa técnica ante esta alzada solicitando la revocación del procesamiento de Mónica Bisio. Estas conductas positivas constituyen el engaño hacia la Administración Pública, encaminadas a lograr la percepción simulando de dinero que el por mismo parte se del destinaría gobierno a la federal “Asociación Mutual Carlos Mujica” para enseñar un oficio a personas desocupadas. La encartada, en su beneficio personal, utilizó las necesidades ajenas de terceros desocupados para provecho propio, procurando burlar la autoridad nacional subsidiante. El error de la víctima consiste en el desconocimiento que tuvo de la realidad. Es decir, frente al engaño de quien perpetraba esta maniobra, traducido en la presentación de un proyecto falso y en la rendición de cuentas también falsas, creyó que el dinero que otorgaba en calidad de subsidio institucional, sería utilizado para capacitar gente desocupada, humilde y sin recursos propios. Así las cosas, a través de esta serie de ardides e inducida en error, la misma Administración Pública realizó un desprendimiento dinerario, cuando no existían las condiciones reglamentarias para hacerlo, constituyendo este accionar un perjuicio patrimonial para el Estado Nacional que el Código Penal reprime en su Art. 174.. Se consuma el delito de estafa, con el otorgamiento del subsidio en la cuenta corriente especial 14 Poder Judicial de la Nación del Banco Nación Argentina N° 108116616/2, momento este en que se logra el desprendimiento patrimonial por parte de la víctima, cuya calificante está dada porque quien sufre un detrimento en su patrimonio a raíz del accionar ardidoso es el Estado Nacional cuyos recursos son desviados en provecho de terceros ajenos al fin público propuesto.. Finalmente, en relación al monto del embargo considero atendible disminuir el monto del mismo a la suma de Pesos veinticinco mil ($ 25.000), por cuanto considero que guarda coherencia y razonable proporción con los eventuales costos de la tasa de justicia y demás gastos USO OFICIAL causídicos, fiscal o como así económico también irrogado con al el Estado posible perjuicio Nacional con la maniobra delictiva. Por los fundamentos dados, debe confirmarse el auto apelado en cuanto decide el procesamiento de Mónica Beatriz Bisio por considerarla co-autora penalmente responsable del delito de defraudación a una administración pública (art. 174 inc. 5 del Código Penal y 45 del C.P.); falsificación de documento privado de conformidad a lo preceptuado por el art. 292 primer párrafo del Código Penal y art. 45 del C.P.) dos hechos; y adulteración de documento privado (arts. 292, primer párrafo del C.P y 45 del Código Penal) -un hecho-, en los términos del artículo 312 y 310 del C.P.P.N.; modificando parcialmente el monto del embargo dispuesto por el Juez de primera instancia, estableciendo el mismo en la suma de pesos veinticinco mil (25.000), de conformidad a lo establecido por el artículo 518 del C.P.P.N.. II. Situación de María Eve del Valle Rodríguez y Carlos Edgardo Bisio 15 “AGUIRRE, Carlos Enrique y otros p.ss.aa administración publica (Expte. N° 205/2011) Defraudación a la Respecto a los imputados María Eve del Valle Rodríguez y Carlos Edgardo Bisio, ambos procesados por el delito de partícipes secundarios del delito de defraudación a la administración pública, debo decir que analizada la causa y revisadas encuentro las suficientes posturas de elementos ambas de partes, prueba que no permitan acreditar con el grado de probabilidad necesario en esta etapa procesal, Rodríguez y que los Carlos participación imputados Edgardo secundaria en María Eve Bisio el hecho del Valle habrían tenido atribuido, aunque tampoco estoy en condiciones de asegurar ahora que sean totalmente ajenos para disponer sus respectivos sobreseimientos. En efecto, se le atribuye a María Eve del Valle Rodríguez haber participado en una reunión previa a la obtención del subsidio, a quien, en tal oportunidad se les habría adjudicado el carácter de “coordinadora” de algunos de los cursos. En reunión efecto, habría funcionarios Social de sido se llevadas dependientes la Nación, encuentra en a del la acreditado cabo con Ministerio sede de esta personal de la que o Desarrollo Unión obrera Metalúrgica (UOM) –Delegación Córdoba- sita el calle Lima N° 1560 de Barrio General Paz de la ciudad de Córdoba, previo a el otorgamiento del subsidio sobre cuya defraudación versa esta causa penal. No surge prueba alguna de que en la misma defraudatoria aludida dichas maniobras ya se habría planificado la maniobra o que cuando se efectuó la misma, habrían estado ideadas y que la imputada María Eve del Valle Rodríguez habría comenzado desde entonces a ejercer sus funciones específicas como coordinadora, tal como lo afirma el señor Juez, por lo que 16 Poder Judicial de la Nación resulta una conjetura la conclusión del juez instructorio interviniente. Aunque es cierto que luego de la obtención del subsidio, María Eve del Valle Rodríguez –madre de Mónica Beatriz Bisio- dictó clases de costura, y contactó a la señora Mirta Benita Arévalo para que trabajara en el dictado de estos cursos, mas estas circunstancias tampoco son suficientes para vincularla con el ilícito en cuestión, en razón de la ausencia pruebas para vincularla con la maniobra defraudatoria. No está acreditada su intencionalidad subjetiva como partícipe de la defraudación USO OFICIAL planeada o urdida por su propia hija. Repárese en la testimonial de Norma Josefina Vaudagna quien manifiesta que una señora llamada Mónica Bisio, cuya madre tenía un taller de costura, le solicitó un programa de los cursos; fue la hija y no su madre que hizo la gestión ante la docente (fs. 43). Señala la costurera Mirta Benita Arévalo que no conoce a la “Asociación Mutual Carlos Mujica”, pero que ella trabajó para una cooperativa en calle Brandsen, que llegó a dar clases por una conocida suya llamada Eve Rodríguez que también es costurera, no mencionando a la imputada en la utilización posterior de las facturas (fs. 49). Por su parte, la testigo Nora Beatriz Zacarías, de ocupación comerciante, manifestó que nunca concurrió al inmueble de calle Ducasse N° 1077 de Barrio San Martín y que nunca trabajó allí, pero que recuerda que hace dos años aproximadamente, una conocida suya llamada Mónica Bisio la convocó para dar clases de tejido en una cooperativa que ésta iba a formar. Señala que concurrió a una reunión en 17 “AGUIRRE, Carlos Enrique y otros p.ss.aa administración publica (Expte. N° 205/2011) Defraudación a la calle Lima creía que era de la UOM y allí estaba Mónica Bisio, la madre de esta última de nombre Eve, el señor Juan Carlos Carreras dueño de la casa de calle Ducasse N° 1077 y la gente del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación. Manifiesta que en dicha reunión se habló de cuándo se iba a empezar con los cursos y las pautas de las actividades (fs. 51). La reunión fue convocada y explicada en sus objetivos por Mónia Beatriz Bisio y la asistencia de otros no alcanza para atribuir la responsabilidad penal suficiente. Luego de analizadas estas testimoniales, estoy en condiciones de afirmar que María Eve del Valle Rodríguez, viuda de Bisio, participó efectivamente de la reunión cuestionada, que trabajó dando cursos de costura y que realizó el contacto de Mirta Benita Arévalo, pero no se vislumbra una participación secundaria o primaria, según las preubas colectadas hasta ahora. En igual sentido sostengo respecto al hecho atribuido a Carlos Edgardo Bisio, hermano de Mónica Beatriz Bisio e hijo de María Eve del Valle Rodríguez de Bisio, consistente en haber depositado dos máquinas de coser en su domicilio, máquinas que fueron secuestradas por personal de la Policía Federal Argentina en oportunidad allanarse ese domicilio con fecha 5 de junio de 2009 (fs. 153vta./154), no lo hace partícipe necesario del delito de defraudación con ello aunque tampoco puedo asegurar que nada tuvo que ver con el ilícito de defraudación investigado. Es preciso señalar brevemente, conforme al texto y letra del Código Penal: El que ejecuta el hecho es un autor; el o los que toman parte en la ejecución del hecho son coautores; los que prestan al autor o autores en el hecho, una cooperación o auxilio sin los cuales ese hecho no hubiera podido cometerse, son cómplices necesarios y los 18 Poder Judicial de la Nación que cooperan de cualquier otro modo a la ejecución del hecho, son cómplices no necesarios. Los que intervienen después del hecho y prestan una ayuda posterior cumpliendo entonces, sus promesas anteriores a la ejecución, son también cómplices no necesarios. Desde el punto de vista material queda satisfecha la imputación dada ahora a los imputados. Sin embargo, y lo que aquí interesa, lo que no se ha comprobado es la vinculación subjetiva, en razón de que el partícipe debe hallarse unido al hecho del autor. La participación no es sólo comunidad USO OFICIAL subjetiva: objetiva, Ello sino, importa que esencialmente, el partícipe comunidad debe tener conocimiento, cierto o incierto del hecho que ejecuta el autor. Este aspecto, que hace a la culpabilidad, no se halla establecido en el procesamiento actualmente, es decir si Rodríguez y Bisio sabían o dudaban del hecho que cometería el o los restantes imputados o al menos, sabían, conocían o prestaban consentimiento al propósito defraudatorio. En consecuencia, considero apropiado revocar respecto a estos dos imputados el procesamiento dictado en su contra como partícipes secundarios del delito de defraudación a la administración pública, debiendo dictarse falta de mérito en su favor en orden al delito mencionado, conforme art. 309 del C.P.P.N., sin perjuicio de que debe ahondarse la investigación respecto de la actuación de los mismos, teniendo en cuenta los vínculos de parentesco por consaguinidad con Mónica Beatriz Bisio. III. Situación procesal de Augusto Enrique Varas Respecto a la situación procesal de Augusto Enrique Varas, luego de revisados los elementos de prueba 19 “AGUIRRE, Carlos Enrique y otros p.ss.aa administración publica (Expte. N° 205/2011) Defraudación a la existentes en la causa y la postura de la defensa del imputado, primera considero que su descargo oportunidad ante el Juzgado efectuado Federal en de una primera instancia con fecha 15 de marzo de 2010 (fs. 265/267), no ha quedado desvirtuado tal como lo considera en el auto apelado, pues las pruebas arrimadas al proceso no resultan suficientes hasta el momento, para dictar procesamiento en su contra por los delitos endilgados en la resolución puesta a consideración en esta segunda instancia. En efecto, considero que es cierto que en un principio hubieron motivos suficientes que llevaron al Juez instructor a sospechar que Augusto Enrique Varas, entre otros, habría ideado un plan y habría efectuado una serie de maniobras ilícitas para lograr la obtención de un subsidio por parte del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, atribuyendo su autoría a la “Asociación Mutual Carlos Mujica”, probanzas pero recolectadas no es hasta menos el verdadero momento, no que las conducen a concluir que el mismo haya tenido participación alguna en los hechos, haya contribuido a la defraudación, o haya planificado o se haya propuesto defraudar. Al llevar respecto, adelante el ha quedado objetivo de demostrado solicitar el que para subsidio aludido, Mónica Beatriz Bisio habría obtenido una copia de un programa de cursos diseñado por la arquitecta Norma Josefina Vaudagna, sin autorización de la nombrada, con la finalidad de que Carlos Aguirre, quien invocaba indebidamente su calidad de presidente de la “Asociación Mutual Carlos Mujica”, lo presentara ante el Ministerio atribuyendo su propia autoría a la Asociación Mutual que decía representar como autoridad societaria. 20 Poder Judicial de la Nación En el mes de abril de 2007 el inculpado Aguirre simulando indebidamente y malintencionadamente ser el presidente de la “Asociación Mutual Carlos Mujica”, por cuanto en ese entonces su mandato había fenecido renovado, habría presentado Desarrollo Social de denominación la ante Nación, “Escuela el un y no Ministerio proyecto Laboratorio de bajo Industrial la de Indumentaria y Accesorios” con el objetivo de capacitar hombres y mujeres desocupados, en el rubro textil, estableciendo la manera de su realización, localización, presupuesto equipamientos necesarios, docentes, períodos de USO OFICIAL extensión de los cursos y eventuales costos. Señala el Juez que el manejo de todas y cada una de las situaciones a partir de esas conductas atribuidas, habrían estado siempre a cargo del encartado Augusto Enrique Varas, en razón de que Mónica Beatriz Bisio había trabajado antes con Augusto Enrique Varas como dirigente importante de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) también organizado otros cursos o proyectos en ese ámbito. De esta manera, destaca el Juez Federal de primera instancia, que Augusto Varas fue el denominador común entre todas las personas vinculadas en la causa, como también fue quien, generosamente y sin el conocimiento de la Comisión Directiva del gremio que representa, abusando de su autoridad como Secretario General de la Seccional Córdoba, le prestó las instalaciones de su gremio a la “Asociación Mutual Carlos Mujica”, para que Carlos Aguirre y Mónica Beatriz Bisio junto con el resto de los imputados, cumplieran el proyecto de llevar a cabo la capacitación de unas trescientas personas durante el período de casi un 21 “AGUIRRE, Carlos Enrique y otros p.ss.aa administración publica (Expte. N° 205/2011) Defraudación a la año, subsidiados por el Ministerio de Acción Social de la Nación. A su parecer, ello determina la maniobra delictiva planeada, pues la realidad es que en el Sindicato nadie advertiría tal situación porque tal capacitación no existió, sino que fue una maniobra orquestada por Augusto Enrique Varas con un propósito absolutamente despreciable y ajeno a los intereses aprovechamiento destinado en de de un su gremio, subsidio definitiva a la del pretendía Estado capacitación de el Nacional personas carenciadas. Ahora bien, luego de valoradas las pruebas testimoniales como así también los dichos del resto de los coimputados, aunque deba asignársele el valor de una declaración prestada sin el juramento de decir la verdad, el suscripto vislumbra una fundada duda respecto a la participación de Augusto Enrique Varas en los tramos de este proyecto para la obtención del subsidio para atribuirle autoría o coautoría en la defraudación. En efecto, considero que el imputado Augusto Enrique Varas habría vinculado a Mónica Beatriz Bisio, que era conocida por éste por proyectos anteriores, a Carlos Aguirre, anterior presidente de la Asociación Carlos Mujica, a los fines de la realización del proyecto aludido. Debe repararse en que el mismo Carlos Aguirre manifestó que Mónica Beatriz Bisio era la encargada de gestionar todas las cuestiones relacionadas con la concreción del proyecto y a la obtención del subsidio, señalando que a raíz de que la vivienda de calle Ducasse N° 1077 estaba deteriorada, le solicitó a Augusto Enrique Varas un préstamo de uso, un domicilio a fin del desarrollo de los talleres textiles, por lo que Vargas accede y le 22 Poder Judicial de la Nación autorizó el uso en préstamo el inmueble de calle Lima N° 1560 de Barrio San Martín de propiedad de la Seccional Córdoba de la Unión Obrera Metalúrgica. Por otra parte, Hugo Chavarría, tesorero de la “Asociación Mutual Carlos Mujica”, se expidió en similares términos al manifestar que fueron Mónica Bisio y su socio Daniel Langreen los encargados de concretar y proyectar los talleres de capacitación textil, y expresa que el mecanismo consistía en que Mónica Bisio le llevaba las facturas de los profesores, algunos eran amigos de Bisio, él le entregaba el dinero y ella misma les abonaba. USO OFICIAL Repárese en que los dichos de Varas coinciden con los del coimputado Carlos Aguirre y el testigo Hugo Chavarría, quienes aportaron las planillas de las supuestas horas de cursos dictados por Mónica Beatriz Bisio. No escapa al suscripto el testimonio de Juan Carlos Carreras, pareja de Mónica Bisio, el que da cuenta que ella trabajaba con Augusto Enrique Varas en la UOM en tareas de promoción de HPV, y allí surgió ayudar a la gente de la “Asociación Mutual Carlos Mujica” para crear un taller de costura para personas cadenciadas. Que para que el Ministerio de Desarrollo social le otorgara un subsidio a la mencionada asociación, se realizó un contrato de alquiler en casa del compareciente de calle Ducasse al 1077 de Barrio San Martín de la ciudad de Córdoba. Así fue que luego de ostentó alquilar dicho indebidamente su lugar a condición Carlos de Aguirre, quien presidente de la asociación en aquel entonces, comenzaron las refacciones en el mismo pero esas refacciones quedaron sin terminar y su casa en condiciones deplorables. Agrega que por ello jamás 23 “AGUIRRE, Carlos Enrique y otros p.ss.aa administración publica (Expte. N° 205/2011) Defraudación a la se llevaron a cabo allí los talleres, razón por la cual se consiguió otro lugar en calle Brandsen N° 440. A ello deben sumarse los dichos de las testigos ya valorados más arriba del presente voto, quienes hacen referencia a que Mónica Beatriz Bisio como la persona que se ocupó de los contactos para el dictado de talleres de capacitación, no haciendo referencia ninguna de éstas a Augusto Enrique Varas. Efectivamente, y tal como lo sostuvo el Juez, Augusto Enrique Varas habría prestado el inmueble de calle Lima N° 1560, lo cual habría sucedido cuando el subsidio ya se había gestionado y el proyecto estaba en su curso de ejecución, como también que el dinero del subsidio fuera retirado de la cuenta corriente del Banco Nación Argentina. En este punto, donde el suscripto considera relevante conocer si dicho inmueble propiedad de la UOM fue prestado en ejercicio de sus atribuciones como Secretario General, con conocimiento y anuencia expresa de la Comisión Directiva constituida entonces, mediante acta, o lo habría sido a título personal con su propia voluntad, cuestión que deberá ser dilucidada y aclarada en forma inmediata por el Juez instructor de la causa por cuanto permitirá resolver o aclarar el aspecto subjetivo y objetivo de la intervención que le cupo a Varas como Secretario General en el lugar de desarrollo de los cursos. Sin perjuicio de esta prueba que considero determinante a los fines de resolver definitivamente la situación procesal del Augusto Enrique Varas, debe tenerse en cuenta que más allá de haber entregado el local de la UOM sito en máquinas, no 24 calle consta Lima N° 1560 en la causa para el depósito concretas de maniobras Poder Judicial de la Nación ardidosas por parte de Varas en dicho proyecto hasta la actualidad. Adviértase asimismo que tanto Carlos Aguirre como Augusto Enrique Varas manifiestan que a raíz de que comenzó a detectar irregularidades, Aguirre le solicitó a Varas que sacara las máquinas que estaban en el domicilio de la UOM. Estas irregularidades detectadas por Carlos Aguirre, habrían sido advertidas por el imputado Augusto Enrique Varas y Aguirre, quienes con las facturas de los supuestos prestadores que habría aportado Mónica Beatriz Bisio, se habrían USO OFICIAL consignados documentos a y fin constituido de si se constatar habían en los la veracidad efectuado domicilios las de allí dichos tareas allí descriptas. Sobre el particular, los dichos del testigo Gabriel Mindurri, vendedor de artículos de fotografía y video, dan cuenta de la probable falta de conocimiento de Varas en las maniobras engañosas y aridosas que venía desplegando Mónica Beatriz Bisio. Así, declara este testigo que no conoce a la “Asociación Mutual Carlos Mujica”, que sólo conoce a Augusto Enrique Varas, porque hace aproximadamente tres meses atrás de su declaración, (enero o febrero de 2009), lo llamó por teléfono a su negocio ubicado en calle Olmos N° 115 de la ciudad de Córdoba y le dijo que necesitaba entregarle un dinero por una factura supuestamente expedida por el compareciente a la “Asociación Mutual Carlos Mujica” por unas horas cátedras brindadas a la misma. Expresa que cuando le manifestó que él no había brindado dichas horas, Varas le preguntó si podía acercarse a su negocio y entonces se hizo presente en el lugar, ofreciéndole nuevamente pagarle por la factura 25 “AGUIRRE, Carlos Enrique y otros p.ss.aa administración publica (Expte. N° 205/2011) Defraudación a la que le exhibió en ese momento y el declarante observó que no se correspondía con su facturero, pero sí era su CUIT, aunque no su logo, ni la dirección consignada. Cuando no aceptó el dinero, le expresó a Varas que no era su facturero, y Varas le solicitó sacarle una copia, a lo que el declarante se negó (fs. 89 y vta). En el mismo sentido declara la testigo Nora Beatriz Zacarías, quien refiere que fue convocada por una conocida suya, Mónica Beatriz Bisio, para dar clases. Luego de ello Monica Bisio se acercó a su negocio para ofrecerle pesos cuarenta mil ($ 40.000) para quedar al frente de la fundación y que ella se quedaría con el resto del dinero que le había dado el gobierno federal, a lo que la dicente se negó rotundamente. Relata esta testigo que en febrero de 2009 Augusto Enrique Varas y Carlos Aguirre se presentaron en su negocio y le ofrecieron dejarle dinero para la declarante, argumentando que le pagaban un trabajo que la misma había hecho y su amiga se negó a recibirlo (fs. 51 y vta). En definitiva, el imputado Augusto Enrique Varas habría vinculado a Mónica Beatriz Bisio a Carlos Aguirre para la concreción del proyecto y habría dado en préstamo el inmueble de la UOM sito en Lima N° 1560 a los fines de depositar las autorizan a máquinas, concluir mas por estas ello que circunstancias el imputado no me habría efectuado maniobras ardidosas con el fin de obtener un subsidio por parte del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, ni cumplimentar con las condiciones pactadas luego del otorgamiento del mismo, como tampoco aseverar que con su investidura o representación como Secretario General de la Seccional Córdoba de la Unión Obrera Metalúrgica 26 Poder Judicial de la Nación hubiera deliberadamente y con propósitos delictivos respaldar o legitimar el pedido del subsidio. Sin perjuicio de no hallar suficientes pruebas para confirmar su procesamiento, no parece que la razón le asista al Defensor técnico en relación al dictado de un auto de sobreseimiento como ha peticionado en la audiencia pública y oral ante este Tribunal, pues según el estado actual de la causa, las pruebas incorporadas tampoco permiten llegar a la certeza, ni permite al suscripto, concluir definitivamente en que la versión suministrada por el defensor, determina en forma cierta y terminante un USO OFICIAL sobreseimiento definitivo que deba prevalecer sobre lo valorado por el Juez instructor para imputarlo en esta causa penal. De este modo, se advierte que la existencia de las circunstancias que rodean el hecho, conduce a que la versión Varas ofrecida despierte por el mismo una suficiente imputado duda Augusto de Enrique magnitud que autoriza el dictado de una falta de mérito con las pruebas coleccionadas hasta ahora, pero no ofrecen la certeza exigida para dictar una sentencia final de sobreseimiento que lo desvincule de la defraudación a una Administración Pública. Debe recordase que la ley procesal sólo consiente y justifica la medida, toda vez que la causal que pretende ser aplicada, sea evidente; vale decir, cuando permita llegar a un conocimiento cierto sobre el verdadero estado de las cosas, nota que en la causa, no se ha verificado hasta el momento para adoptar ahora esa determinación concluyente. 27 “AGUIRRE, Carlos Enrique y otros p.ss.aa administración publica (Expte. N° 205/2011) Defraudación a la Por otra parte, al suscripto no se le escapa que si bien es cierto que una sentencia dictada tras el juicio público y oral, puede hallarse fundada en el principio in dubio pro reo, la ley procesal exige que en la etapa instructoria, la sentencia de sobreseimiento debe hallarse motivada fuera de toda duda y que ésta, cuando subsiste, exige profundizar la investigación en resguardo del principio de inocencia y la tutela judicial efectiva. No suscripto, deberá, obstante considero en forma las que reflexiones el urgente, Juez vertidas de solicitar primera a la por el instancia Unión Obrera Metalúrgica el Libro de Actas de la Comisión Directiva de la época a fin de constatar si el inmueble propiedad de la UOM sito en Lima N° 1560 fue prestado por Augusto Enrique Varas en General, ejercicio con de anuencia sus atribuciones expresa de la como Secretario Comisión Directiva según acta, o lo habría sido a exclusivo título personal, como Secretario General, cuestión que deberá ser dilucidada y aclarada en el Juzgado de origen, como así también, deberá realizar todas aquellas pruebas testimoniales o que considere idóneas que permitan resolver la situación de todos los imputados, a los fines de concluir la instrucción judicial, teniendo en cuenta que los intereses jurídicos protegidos en relación a la hacienda pública y fe pública merecen su esclarecimiento definitivo para contribuir a desterrar la corrupción en el manejo de dineros públicos para fortalecer la confianza pública de todos los ciudadanos. Por lo expuesto, a mi juicio corresponde por ahora dictar falta de mérito a favor de Augusto Enrique Varas 28 en orden a los delitos por los cuales fuera Poder Judicial de la Nación procesado, conforme lo prescripto por el artículo 309 del C.P.P.N.. ASÍ VOTO.El señor Juez de Cámara doctor Luis Rodolfo Martínez dijo: Que adhiere a lo argumentos dados en el primer voto, por lo que se expide en el mismo sentido. ASÍ VOTO. El señor Juez de Cámara doctor Roque Ramón Rebak: Que se expide en el mismo sentido que el Juez titular del primer voto. ASÍ VOTO. Por lo expuesto; SE RESUELVE: I. CONFIRMAR parcialmente la resolución de fecha USO OFICIAL 16 de marzo de 2011 dictada por el Titular del Juzgado Federal n° 1 de Córdoba, en cuanto dispuso el PROCESAMIENTO de la imputada Mónica Beatriz Bisio (D.N.I 18.653.957) por considerarla co-autora penalmente responsables del delito de defraudación a una administración pública (art. 174 inc. 5 del Código Penal y 45 del C.P.); falsificación de documento privado de conformidad a lo preceptuado por el art. 292 primer párrafo del Código Penal y art. 45 del C.P.) dos hechos; y adulteración de documento privado (arts. 292, primer párrafo del C.P y 45 del Código Penal) un hecho-, en los términos del artículo 312 y 310 del C.P.P.N.; modificando parcialmente el monto del embargo dispuesto por el Juez de primera instancia, estableciendo el mismo en la suma de pesos veinticinco mil (25.000), de conformidad a lo establecido por el artículo 518 del C.P.P.N.. II. REVOCAR parcialmente la resolución de fecha 16 de marzo de 2011 dictada por el Titular del Juzgado Federal n° 1 de Córdoba, en cuanto dispuso el procesamiento de María Eve del Valle Rodríguez (D.N.I. 4.385.012) y 29 “AGUIRRE, Carlos Enrique y otros p.ss.aa administración publica (Expte. N° 205/2011) Defraudación a la Carlos Edgardo Bisio (D.N.I. 26.408.745), en carácter de partícipes secundarios (art. 46 del C.P.) del delito de defraudación a una Administración pública (art. 174 inc. 5 del Código Penal y 45 del C.P.), y en consecuencia dictar la falta de mérito en su favor de conformidad a lo dispuesto por el artículo 309 del C.P.P.N.. III. REVOCAR parcialmente la resolución de fecha 16 de marzo de 2011 dictada por el Titular del Juzgado Federal n° 1 de Córdoba, en cuanto dispuso el procesamiento de Augusto Enrique Varas (D.N.I. n° 13.990.851) como coautor penalmente responsable del delito de defraudación a una administración pública (arts. 174 inc. 5 del Código Penal y 45 del C.P.); falsificación de documento privado de conformidad a lo preceptuado por el art. 292 primer párrafo y 45 del C.P.) dos hechos; y adulteración de documento privado (arts. 292, primer párrafo y 45 del Código Penal) un hecho-, en los términos del artículo 312 y 310 del C.P.P.N.; y en consecuencia dictar la falta de mérito en su favor conforme a lo dispuesto por el artículo 309 del C.P.P.N.. IV. Córdoba, DISPONER diligencie probatorias a indicadas pronunciamiento, como que la en así el Juzgado brevedad los Federal posible fundamentos también todas las del n° 1 de medidas presente aquellas que permitan resolver la situación de los imputados, a los fines de concluir la instrucción judicial, teniendo en cuenta los intereses jurídicos protegidos en relación a la hacienda pública y fe pública. V. Protocolícese, hágase saber y bajen. SALA A IGNACIO VELEZ FUNES LUIS RODOLFO MARTINEZ 30 Poder Judicial de la Nación USO OFICIAL ROQUE RAMON REBAK 31 “AGUIRRE, Carlos Enrique y otros p.ss.aa administración publica (Expte. N° 205/2011) Defraudación a la