Jurisdicción: Social Recurso de Suplicación núm. 1864/2005. Ponente: Ilma. Sra. Dª. Mª Luisa Segoviano Astaburuaga VACACIONES: derecho al disfrute: trabajador en situación de incapacidad temporal en la fecha pactada en convenio colectivo para su disfrute: condición más beneficiosa. El TSJ desestima el recurso de suplicación interpuesto por la parte demandada contra Sentencia del Juzgado de lo Social núm. 3 de Valladolid, de fecha 24-06-2005, en autos promovidos en reclamación de derecho y cantidad En Valladolid a diecisiete de octubre de dos mil cinco. La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, sede de Valladolid, compuesta por los Ilmos. Sres. anteriormente citados ha dictado la siguiente SENTENCIA En el Recurso de Suplicación núm. 1864 de 2005, interpuesto por Iveco Pegaso SL contra sentencia del Juzgado de lo Social Tres de Valladolid (Autos 500/05) de fecha 24 de junio de 2005 dictada en virtud de demanda promovida por Gonzalo contra Iveco Pegaso SL, sobre REC. DERECHO Y CANTIDAD, ha actuado como Ponente la Ilma. Sra. Doña Mª Luisa Segoviano Astaburuaga. ANTECEDENTES DE HECHO PRIMERO Con fecha 1 de abril de 2005 se presentó en el Juzgado de lo Social de Valladolid Tres demanda formulada por Gonzalo en la que solicitaba se dictase sentencia en los términos que figuran en el Suplico de la misma. Admitida la demanda y celebrado el juicio, se dictó sentencia en los términos señalados en su parte dispositiva. SEGUNDO En referida Sentencia y como Hechos Probados constan los siguientes: «I.-El actor D. Gonzalo, mayor de edad y cuyas demás circunstancias personales constan en el encabezamiento de su demanda. Ha venido prestando sus servicios laborales para la Empresa demandada Iveco Pegaso, SA desde el 1-7-1963, con categoría profesional de Oficial la y percibiendo una retribución mensual incluido la parte proporcional de pagas extraordinarias por importe de 2.128,62 euros/mes. II.-El demandante ha estado en situación de Incapacidad Temporal desde el 15-7-2004 a 10-9-2004. III.-El período de vacaciones para la totalidad de la plantilla es del 1 a 31 de agosto. IV.-Ha sido práctica habitual de la empresa desde hace mas de 20 años conceder un nuevo período de vacaciones por los días que no pudieron ser disfrutados, por encontrarse en situación de Incapacidad Temporal, cuando dicha contingencia se producía con anterioridad a la fecha del disfrute de las vacaciones, en tales casos las vacaciones se disfrutaban tras el alta, situación ésta que la empresa ha venido manteniendo hasta el año pasado (2003). V.-En el vigente convenio colectivo de empresa ( LEG 2004, 2481) (doc. 71) cuyo ámbito temporal de aplicación es de 1-1-2001 a 31-12-2004 en su artículo 32 se señala: "La duración del período de vacaciones será de 30 días naturales seguidos, salvo pacto en contrario, o de la parte proporcional correspondiente en el supuesto de ser inferior al año, la antigüedad del Trabajador. El período oficial de vacaciones, será elaborado de común acuerdo, conforme alo descrito en el artículo sobre el calendario laboral. Por necesidades de la empresa y previa información al Comité, las vacaciones pactadas en el Calendario laboral, podrán adelantarse o retrasarse, siempre que todo el período quede comprendido entre el 1 de julio y el 31 de agosto, y con la siguiente operativa: antes de finalizar el mes de febrero, se fijarán las secciones y turnos afectados por el cambio de vacaciones. Los turnos de las secciones afectadas tendrán carácter rotativo". VI.-El actor solicita se le abone 2.128,62 euros correspondientes a 30 días de vacaciones no disfrutadas. VII.-Con fecha 15-12-2004 se presentó papeleta de demanda de conciliación ante el SMAC, habiéndose celebrado acto de conciliación con fecha 19-1-2005, con el resultado de intentado sin efecto. IX.-Con fecha 1-4-2005 se presentó demanda ante el Juzgado Decano que fue turnada a este Juzgado». TERCERO Interpuesto Recurso de Suplicación contra dicha sentencia por el demandado, fue impugnado por el demandante. Elevados los autos a esta Sala, se designó Ponente, acordándose la participación a las partes de tal designación. FUNDAMENTOS DE DERECHO PRIMERO La sentencia de instancia estimó la demanda formulada por Don Gonzalo contra Iveco Pegaso SL en reclamación de cantidad, condenando a la empresa demandada a abonar al actor la cantidad de 2.128,62 euros y frente a la misma se interpone recurso de Suplicación por la representación letrada de la demandada. Como cuestión previa que ha sido planteada por la parte actora al impugnar el recurso de Suplicación pero que, aún en el caso de que no lo hubiera sido, tendría que ser examinada de oficio por la Sala, por afectar al orden público procesal, está la referente a la recurribilidad de la sentencia dictada. A tenor de lo establecido en el artículo 189.1 de la Ley de Procedimiento Laboral ( RCL 1995, 1144, 1563) son recurribles en Suplicación las sentencias que dicten los juzgados de lo social en los procesos que ante ellos se tramiten, cualquiera que sea la naturaleza del asunto, cuya cuantía litigiosa exceda de 300.000 ptas., actualmente 1.803 euros. En el asunto ahora sometido a la consideración de esta Sala la cuantía reclamada asciende a 2.128,62 euros, por lo que es susceptible del citado recurso. Ciertamente esta Sala ha dictado sentencias en las que en asunto, aparentemente similar al ahora enjuiciado se denegaba la posibilidad de acceder al recurso de suplicación. En efecto, en los asuntos registrados con el número de recurso de suplicación 1456/04 ( JUR 2005, 21259) , 1455/04 ( JUR 2004, 274503) se reclamaba, al igual que se hace en éste, la indemnización compensatoria por el no disfrute de determinados días de vacaciones, pero mientras en dichos asuntos la cantidad reclamada era inferior a 1.803 euros, en el ahora debatido asciende a 2.128,62 euros, por lo que la sentencia dictada por el juzgado de lo Social es susceptible de recurso de Suplicación. SEGUNDO Al amparo del artículo 191 b) de la Ley de Procedimiento Laboral ( RCL 1995, 1144, 1563) , invocando los documentos obrantes a los folios 23, 24 y siguientes sin numerar (documento 5 de la parte recurrente) interesa la adición de un nuevo hecho probado, el décimo, del siguiente tenor literal: «Durante los meses de mayo, junio y julio/agosto, del año 2004, el índice de absentismo en Iveco Pegaso S.L, en su Planta de Valladolid ha sido 10, 18, 10, 21 y 10, 51 respectivamente». No procede la revisión interesada ya que, en primer lugar, se trata de un documento unilateralmente elaborado por la demandada, por lo que no es idóneo a efectos revisorios. En segundo lugar en el citado documento se consignan una seria de datos y porcentajes pero no aparece firmado ni consta la persona que lo ha elaborado. TERCERO Con el mismo amparo procesal, invocando el documento obrante al folio 21, interesa la adición de un nuevo hecho probado el undécimo, del siguiente tenor literal: «El calendario laboral correspondiente al año 2004 fijado mediante acuerdo de fecha 10 de diciembre de 2003 entre la representación de los trabajadores y por la empresa fijaba las vacaciones para todo el personal en el mes de agosto». No procede la adición interesada pues el dato que pretende adicionar ya consta, en esencia, en el hecho probado tercero. CUARTO Al amparo del artículo 191 c) de la Ley de Procedimiento Laboral ( RCL 1995, 1144, 1563) alega infracción del artículo 58 del Estatuto de los Trabajadores ( RCL 1995, 997) , en relación con el artículo 1091 y 1105 del Código Civil ( LEG 1889, 27) , así como lo señalado en el artículo 1214 del Código Civil. Aduce, en esencia, el recurrente como se pone de manifiesto en el calendario laboral del año 2004 de Iveco Pegaso, SL para la planta de Valladolid, acordado con la representación de los Trabajadores, fijaba las vacaciones en el mes de agosto para todo el personal. De acuerdo con el dispuesto en el art. 38 del ET el período de vacaciones anuales retribuida será el pactado en Convenio Colectivo ( LEG 2004, 2481) , debiéndose fijar de común acuerdo entre la empresa y el trabajador el período de disfrute. Son numerosas las sentencias, entre otras la Sentencia del Tribunal Supremo de fecha 30 de noviembre de 1995 ( RJ 1995, 8771) , que señalan que en aquellos casos en que el período de vacaciones ha quedado pactado colectivamente por acuerdo entre la empresa y la representación de los trabajadores, no es factible fijar un nuevo señalamiento para personas que estuvieran de baja por Incapacidad Temporal, durante el período fijado, debiéndose respetar el pacto colectivo existente. Continúa razonando el recurrente que no existe condición más beneficiosa, en el disfrute de vacaciones en período distinto al fijado en el Calendario Laboral, por coincidir el período de vacaciones la situación de Incapacidad Temporal y ello por los siguientes motivos: «La circunstancia consistente en estar en situación de I.T., durante el período fijado para el disfrute de vacaciones en el calendario laboral, es una manifestación fortuita, que en aplicación del art. 1.105 del CC ( LEG 1889, 27) , no puede pretender que la empresa sufra los efectos negativos de la imposibilidad del disfrute de vacaciones, correspondiendo a quien sufre el perjuicio soportar las consecuencias dañosas». No se dan, en definitiva ninguno de los requisitos exigidos para que alcance el calificativo de condición más beneficiosa. La dificultad para establecer si una determinada conducta o práctica de empresa constituye o no «condición más beneficiosa» ha sido reiteradamente puesta de relieve por la jurisprudencia. Así la sentencia de 24 de septiembre de 2005, recaída en Recurso de Casación núm. 119/03 ha establecido lo siguiente: «No siempre es tarea sencilla determinar si esa situación jurídica se produce, pues es necesario analizar todos los factores y elementos para saber, en primer lugar, si existe la sucesión de actos o situaciones en la que se quiere basar el derecho; y en segundo lugar; si realmente es la voluntad de las partes en este caso de la empresa, el origen de tales situaciones. Esta Sala ha dicho a propósito de ello en 1a sentencia de 20 de mayo de 2002 ( recurso 1235/200 1 [ RJ 2002, 6794] con cita de la sentencia de 11 de marzo de 1998 ( recurso 2616/97 [ RJ 1998, 2562] ) que la jurisprudencia de esta Sala ha declarado que para que pueda sostenerse la existencia de una condición más beneficiosa es preciso que ésta se haya adquirido y disfrutado en virtud de la consolidación del beneficio que se reclama; por obra de una voluntad inequívoca de su concesión ( sentencia de 16 de septiembre de1992 [ RJ 1992, 6789] , 20 de diciembre de 1993 [ RJ 1993, 9974] , 21 de febrero de 1994 [ RJ 1994, 1216] , 31 de mayo de 1995 [ RJ 1995, 4012] y 8 de julio de 1996 [ RJ 1996, 5761] , de suerte que la ventaja que se concede se haya incorporado al nexo contractual "en virtud de un acto de voluntad constitutivo de una concesión o reconocimiento de un derecho" (sentencias de 21 de febrero de 1994, 31 de mayo de 1995 y 8 julio de 1996) y se pruebe, en fin, "la voluntad empresarial de atribuir a sus trabajadores una ventaja o un beneficio social que supera a 1os establecidos en las fuentes legales o convencionales de regulación de la relación contractual de trabajo" ( sentencia de 25 de enero de 1995 [ RJ 1995, 410] , 31 de mayo y 8 de julio de 1996). Es la incorporación al nexo contractual de ese beneficio el que impide extraerlo del mismo por decisión unilateral del empresario; manteniéndose en definitiva el principio de intangibilidad unilateral de las condiciones mas beneficiosas adquiridas y disfrutadas (sentencia de 16 de septiembre de 1992), añadiendo también la referida doctrina que la condición más beneficiosa así configurada, tiene vigencia y pervive mientras las partes no acuerden otra cosa o mientras no sea compensada o neutralizada en virtud de una normativa posterior -legal o pactada colectivamente. Más favorable que modifique el "status" anterior en materia homogénea». Las diferentes sentencias que se han pronunciado sobre la existencia o no de condición más beneficiosa lo han hecho en los siguientes términos: han considerado que existe condición mas beneficiosa cuando la empresa venía concediendo ciertos beneficios, superiores a los correspondientes en virtud de las normas legales y convencionales aplicables, y los mismos aparecían reconocidos en una circular, así en las S de 8-7-96, recurso de casación 2831/95 ( RJ 1996, 5758) y en la de 24-6-92, CUD 1585/91 ( RJ 1992, 4667) , razonando en esta última los siguiente: «aunque estas Circulares carecen del valor normativo que parece atribuirles el recurrente, sí tienen como acuerdos privados plena eficacia entre las partes de conformidad con lo dispuesto en los arts. 1091 y 1278 del Código Civil ( LEG 1889, 27) , a los que se remite el motivo, en la medida en que tales Circulares constituyen una oferta de la empresa que, aceptada por el trabajador, establece y reglamenta las obligaciones derivadas de la suspensión o extinción del contrato de trabajo por la reestructuración de plantillas». Asimismo ha entendido el Alto Tribunal que constituía condición más beneficiosa el disfrute de determinados beneficios sociales que venían siendo reconocidos a los trabajadores. Así la Sentencia de 25-1-95, recurso de Casación 1321/94 ( RJ 1995, 410) entendió que el disfrute de los apartamentos de Fuengirola, que venía siendo concedido a los trabajadores del Banco Occidental constituía una condición mas beneficiosa ya que existía un reconocimiento expreso por parte de la entidad demandada de que dicho disfrute constituye un beneficio social del grupo de empleados del banco. Por su parte la sentencia de 15-6-92, recurso de casación 1889/91 ( RJ 1992, 4582) , entendió que constituía una condición más beneficiosa la mejora social consistente en la participación de los hijos de los empleados de Banca en colonias veraniegas con cargo económico a la entidad empresarial bancaria. Dicha sentencia ha establecido lo siguiente: «Subyace en toda condición más beneficiosa la existencia de una voluntad empresarial de otorgar un beneficio por encima de las exigencias legales o convencionales reguladoras de la materia; condición que pervive con el alcance que derive del pacto originario, naturaleza o uso pacífico hasta que las partes no alcancen otro acuerdo, o se produzca su neutralización por mor de una norma posterior, legal o paccionada, que altere la situación anterior con algún beneficio o utilidad de análogo significado.. Es cierto que, conforme un criterio interpretativo consolidado -al que se refiere la Sentencia de esta Sala de 9-11-1989 ( RJ 1989, 8029) la condici6n examinada se funda en los arts. 9.2 de la Ley de Contrato de Trabajo ( RCL 1944, 274) y 3.1.c) del Estatuto de los Trabajadores ( RCL 1980, 607) , y que, a salvo de supuestos especiales en que el propio acto de reconocimiento o las circunstancias concurrentes en el mismo conduzcan a la conclusi6n contraria, las condiciones laborales que tienen su origen en una concesi6n unilateral y voluntaria del empleador se incorporan, por la habitualidad, regularidad y persistencia de su disfrute en el tiempo, al nexo contractual, de forma que aquélla no puede ser suprimida o reducida unilateralmente por el empresario». En sentido contrario, considerando que las ventajas que disfrutaban los trabajadores no constituyen condición mas beneficiosa se han pronunciado otra serie de sentencias, como las de 21-2-94, CUD 3773/92 ( RJ 1994, 1216) y 31-5-95, CUD 2384/94 ( RJ 1995, 4012) , que entendieron que el beneficio concedido por la empresa a sus trabajadores, consistente en la entrega de la «cesta de navidad» que venía realizando desde hacía muchos años variando su contenido de forma pacífica, constituye una pura liberalidad del empresario, que tiene incluso anunciada la desaparición del obsequio navideño para el futuro. La sentencia de 20-12-93, CUD 443/93 ( RJ 1993, 9974) entendió que no constituía condición más beneficiosa el disfrute de dos meses de vacaciones de los profesores de enseñanza privada, razonado la citada sentencia que «en las sentencias comparadas falta sin duda el acto de concesión es buena prueba de ello en la sentencia recurrida en que la entidad titular del centro docente se cuidaba de consignar en los sucesivos contratos de trabajo con el profesorado una duración del período de vacaciones de 30 días (hecho probado 2º)». Por último la sentencia de 20-5-02, C.U.D 1235/01 ( RJ 2002, 6794) , entendió que no constituía condición más beneficiosa el día de licencia anual retribuida, por tercio de plantilla, con ocasión de las fiestas de Navidad, Año Nuevo y Reyes, concedida por el Banco Central Hispano a sus empleados, razonando la citada sentencia que «Es cierto que las condiciones más beneficiosas no pueden ser suprimidas o reducidas unilateralmente por el empresario, pero sí cabe que sean compensadas o neutralizadas en virtud de normativa posterior, sea ésta legal o pactada colectivamente, siempre que la nueva normativa sea más favorable, tal y como ocurría en este caso, en el que el nuevo Convenio Colectivo de Banca ( RCL 1999, 2929) , vigente desde el 1 de enero de 1999 a 31 de diciembre de 2002 incrementaba en dos los días de licencia, pasando a cuatro, por lo que el artículo 5.1 de su texto hubiera permitido a la empresa neutralizarla por la vía de la absorción de la mejora, teniendo en cuenta que se trata conceptos perfectamente homogéneos y que tienen un mismo origen paccionado, que puede ser por tanto absorbidos por las nuevas condiciones». En el asunto ahora sometido a la consideración de la Sala, tal como resulta de los hechos probados de la sentencia, la empresa desde hacía más de veinte años venía concediendo un nuevo período de vacaciones por los días que no pudieron ser disfrutados por los trabajadores que se encontraban en situación de incapacidad temporal, siempre que dicha contingencia se produjera con anterioridad a la fecha de inicio del disfrute de las vacaciones, disfrutándose tras el alta del trabajador. En el vigente Convenio Colectivo de empresa ( LEG 2004, 2481) , cuyo ámbito temporal de aplicación es de 1-1-01 a 31-12-04, la regulación de las vacaciones aparece en el artículo 32, en los siguientes términos: «La duración del período de vacaciones será de 30 días naturales seguidos, salvo pacto en contrario, o de la parte proporcional correspondiente en el supuesto de ser inferior al año, la antigüedad del Trabajador. El período oficial de vacaciones, será elaborado de común acuerdo, conforme alo descrito en el artículo sobre el calendario laboral. Por necesidades de la empresa y previa información al Comité, las vacaciones pactadas en el Calendario laboral, podrán adelantarse o retrasarse, siempre que todo el período quede comprendido entre el 1 de julio y el 31 de agosto, y con la siguiente operativa: antes de finalizar el mes de febrero, se fijarán las secciones y turnos afectados por el cambio de vacaciones. Los turnos de las secciones afectadas tendrán carácter rotativo». Durante los años 2001 y 2002, es decir, vigente ya el nuevo convenio, la empresa ha continuado concediendo las vacaciones a los trabajadores que se encontraban en incapacidad temporal en el momento de inicio de las mismas, en la forma antedicha que venía siendo practica habitual durante más de veinte años. Siendo ello así es obvio que por la habitualidad, regularidad y persistencia en su disfrute en el tiempo esta condición se ha incorporado al nexo contractual de forma que no puede ser suprimida, ni reducida unilateralmente por el empresario, sin que las pautas hayan alcanzado un acuerdo sobre la cuestión o se haya producido su neutralización en virtud de una norma posterior, legal o paccionada, que altere la situación anterior con algún beneficio o utilidad de análogo significado. En consecuencia la antedicha forma de disfrute de las vacaciones de los trabajadores en situación de incapacidad temporal constituye una condición más beneficiosa, incorporada al nexo contractual del actor, hoy recurrido, y al haberlo entendido así el juzgador de instancia, procede la desestimación del recurso formulado. Por lo expuesto y EN NOMBRE DEL REY FALLAMOS Que debemos DESESTIMAR Y DESESTIMAMOS el recurso de suplicación formulado por Iveco Pegaso SL contra la sentencia dictada en fecha 24 de junio de 2005 por el Juzgado de lo Social número Tres de Valladolid (Autos 500/05), en virtud de demanda promovida por Gonzalo contra Iveco Pegaso, SL, sobre RECONOCIMIENTO DERECHO Y CANTIDADVACACIONES, y en su consecuencia, debemos confirmar y confirmamos el fallo de instancia. Se decreta la pérdida del depósito y consignación efectuados para recurrir a los que se dará el destino legal, una vez sea firme esta resolución. Se condena en costas al recurrente, incluyendo en las mismas la minuta de honorarios del letrado que impugnó el recurso por importe de 300 euros. Notifíquese la presente a las partes y a la Fiscalía de este Tribunal Superior de Justicia en su sede de esta capital. Para su unión al rollo de su razón, líbrese la oportuna certificación, incorporándose su original al libro correspondiente. Firme que sea esta Sentencia, devuélvanse los autos, junto con la certificación de aquélla al Juzgado de procedencia para su ejecución. Así lo pronunciamos, mandamos y firmamos. PUBLICACIÓN.-En la misma fecha leída y publicada la anterior sentencia, por la Ilma. Sra. Magistrado Ponente, celebrando Audiencia Pública en esta Sala de lo Social. Doy Fe.