Avances en la protección de los derechos de las mujeres en Colombia El objetivo de este artículo consiste en contrastar la existencia de instrumentos, internacionales y nacionales, para la protección de los derechos de las mujeres, con indicadores que reflejen la situación real de la protección de dichos derechos en Colombia. ventana global «Lo que se necesita es un cambio positivo y concreto que dé más poder y confianza a las mujeres y las niñas, y que transforme las relaciones entre las mujeres y los hombres en todos los niveles de la sociedad». Kofi Annan1 E Andrea Suárez Estudiante IX semestre Gobierno y Relaciones Internacionales andrea.suarez01@est.uexternado.edu.co l problema de la brecha entre hombres y mujeres, en cuanto a protección de derechos e igualdad de oportunidades, ha adquirido una especial importancia en las últimas décadas, tanto para la comunidad internacional que ha promulgado normas para la protección de los derechos de las mujeres, como para el Estado colombiano, que avanza en la incorporación de dichas normas en el ordenamiento jurídico interno. Según lo anterior, el objetivo de este artículo será analizar el avance en la defensa de los derechos de las mujeres en Colombia a partir de la revisión del marco normativo existente y su comparación con indicadores que reflejen la situación real de la protección de estos derechos. Tanto en el sistema universal (Organización de las Naciones Unidas, ONU) como en el regional (Organización de Estados Americanos, OEA) de protección de derechos humanos, la defensa de los derechos de las mujeres se ha desarrollado por medio de la adopción de instrumentos convencionales como los pactos de Naciones Unidas para la garantía de los derechos civiles y políticos, y los económicos, sociales y culturales (1966), al igual que la Convención sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (Cedaw, 1979), e instrumentos no convencionales, como las Plataformas de Acción de México (1976), Copenhague (1980), Nairobi (1985) y Beijing (1995), que fortalecieron el compromiso de la comunidad internacional en materia de protección de los derechos de las mujeres. En el sistema regional, la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer2 busca garantizar a las mujeres de las Américas una vida libre de violencia. Adicionalmente, tanto la ONU como la OEA cuentan con relatorías cuya función consiste en analizar las revista de la universidad externado de colombia 106 facultad de finanzas, gobierno y relaciones internacionales contenido 1 editorial 4 correo de brujas 8 cuarto de huéspedes 12 dossier 20 actualidad 64 ventana global 94 ventana global economía y finanzas 110 causas y efectos de la situación de violencia contra las mujeres3, y evaluar el accionar de los estados miembros para la igualdad y no discriminación de la mujer4, respectivamente. Debido a que la condición de vulnerabilidad de la mujer se agrava significativamente en contextos de violencia, la protección de derechos prevista en el sistema internacional también contempla las dinámicas de la guerra. El derecho internacional humanitario, desarrollado en los convenios de Ginebra y protocolos adicionales, se constituye en un instrumento de protección de las mujeres en situación de conflicto. Adicionalmente, el Estatuto de la Corte Penal Internacional protege el restablecimiento de los derechos de las víctimas de crímenes de lesa humanidad, de las que forman parte las mujeres que han padecido graves persecuciones y abusos sexuales. Los tribunales penales internacionales para la antigua Yugoslavia y para Ruanda constituyen puntos de referencia para «el procesamiento de abusos sexuales cometidos en tiempo de guerra»5. Así mismo, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas6 buscó incorporar una perspectiva de género en todas las medidas de consolidación y mantenimiento de la paz. Por su parte, en Colombia también se han desarrollado instrumentos normativos para garantizar los derechos de la mujer. En este sentido, la externautas 132 cultura y sociedad 136 107 ventana global Asamblea Nacional Constituyente dio un paso importante al «proponer que se eleve a canon constitucional el principio de la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer (…) el cual se traduce en que la mujer y el hombre tienen capacidad para ejercer y gozar de los mismos derechos en todos los campos»7. Así, el artículo 13 de la Constitución Política prohíbe todo acto discriminatorio por razones de sexo en tanto constituye una violación al derecho fundamental de la igualdad, y el artículo 43 consagra la igualdad de derechos y oportunidades, al tiempo que prohíbe toda forma de discriminación contra la mujer. En consonancia con los instrumentos internacionales, la normatividad interna ha avanzado en la promoción de la igualdad por medio de la promulgación de leyes y decretos en diferentes ámbitos, tales como la protección de las mujeres cabeza de familia8, la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres9, y la eliminación de la violencia y discriminación contra las mujeres10, entre otros. La Corte Constitucional ha desempeñado un papel importante en el avance de un accionar del Estado favorable a la mujer. Uno de los logros más significativos en este aspecto se da en la sentencia C-410 de 199411, en la cual se expone que, debido tanto a las diferencias físicas entre hombres y mujeres como a las construidas socialmente, es deber del Estado brindar un tratamiento especial a la mujer con el objetivo de que la igualdad en el goce de los derechos sea de carácter sustancial. Así mismo, en la sentencia C-371 de 2000, la Corte Constitucional declara exequible el proyecto de ley estatutaria que reglamenta la participación de las mujeres en los niveles decisorios del poder público y establece la temporalidad de este tipo de medidas en tanto su implementación sólo se hace necesaria mientras no exista igualdad real. Tomando en cuenta las graves consecuencias que tiene el conflicto colombiano sobre las mujeres, en el auto 092 de 200812 la Corte Constitucional identifica los patrones estructurales de violencia y discriminación, comprueba la presencia de diez riesgos de género dentro del conflicto y dieciocho facetas de género del desplazamiento forzado, y ordena al Estado colombiano la creación de trece programas específicos que llenen los vacíos de la política pública para la atención especial a mujeres desplazadas. A pesar de este avance en materia normativa, los datos reflejan que las mujeres colombianas aún distan de ejercer sus derechos a plenitud. Según información del Ministerio de Educación Nacional, la brecha existente entre los ingresos de hombres y mujeres fue del 17,4% en 200713. Además, Según datos existe inequidad en el acceso a la educación debido a que los niños de Medicina Legal, entre no ingresan al sistema educativo porque deben trabajar para generar 2004 y 2008 se maltrató a ingresos, mientras que las niñas se dedican a realizar actividades cerca de nueve mujeres cada domésticas. Esta diferenciación en los papeles desempeñados por hora, el 84% de las cuales eran niños y niñas desde temprana edad tiene repercusiones en su forniñas y adolescentes menores mación y, en consecuencia, en la construcción de su identidad como de 18 años. Pero apenas el 9% hombres y mujeres dentro de la sociedad. de las víctimas denuncia lo Adicionalmente, la situación de las mujeres dentro del hogar no ocurrido. es diferente dado que son víctimas del 95% de los casos de violencia conyugal. Según datos de Medicina Legal, entre 2004 y 2008 se maltrató a cerca de nueve mujeres cada hora, el 84% de las cuales eran niñas y ado- revista de la universidad externado de colombia 108 facultad de finanzas, gobierno y relaciones internacionales contenido 1 La brecha laboral y de ingresos se refleja en que la proporción de desempleo en las mujeres desplazadas es el doble que en los hombres, con 13,4 y 6,8%, respectivamente. lescentes menores de 18 años . Pero apenas el 9% de las víctimas denuncia lo ocurrido15. La violencia de la que son objeto las mujeres se incrementa significativamente en situación de desplazamiento. De acuerdo con una encuesta de Profamilia hecha en 200516, en ese año el 44,4% de las mujeres desplazadas fue víctima de agresiones físicas por parte de su cónyuge. En materia de salud, a las mujeres desplazadas las hospitalizan dos y tres veces más que los hombres17, pero en el año 2005 el 42,4%18 de ellas no se encontraba afiliado a ningún régimen del sistema de seguridad social en salud. La condición de jefes de hogar constituye un agravante de la situación de las mujeres desplazadas, de las cuales el 17% es analfabeta. El promedio de años de escolaridad para este grupo de mujeres es de tan sólo 4,119, en razón de que las niñas y adolescentes desplazadas enfrentan obstáculos adicionales para el acceso al sistema educativo. La brecha laboral y de ingresos se refleja en que la proporción de desempleo en las mujeres desplazadas es el doble que en los hombres, con 13,4 y 6,8%, respectivamente. La constatación de estas cifras constituye un llamado para profundizar en el análisis de las razones por las cuales, pese a la existencia de las normas pertinentes, las mujeres colombianas aún no gozan plenamente de sus derechos. La identificación de la brecha entre el derecho y el hecho, conforme la cual, si bien es cierto que el primero constituye un requisito, no es suficiente por sí solo, sugiere que también es necesario avanzar en una transformación cultural que reduzca la reproducción de inequidades y discriminaciones. 14 Notas 1. Mensaje de Kofi Annan, secretario general de la Organizacion de las Naciones Unidas, 8 de marzo de 2004. 2. Ratificada mediante la Ley 248 de 1995. 3. Relatoría especial de ONU sobre la condición de la mujer. Revisado en http://www.iidh.ed.cr/glosario/definicion. asp?codigo=66&b1=&b2=&b3=. Consultado el 20 de enero de 2011. 4. Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Relatoría sobre los derechos de la mujer. Consultado en: http://www.cidh.oas.org/women/mandate.sp.htm. Consultado el 20 de enero de 2011. 5. Radhika, Coomaraswamy «La violencia contra la mujer perpetrada y/o condonada por el Estado en tiempos de conflicto armado (1997-2000)». 6. Resolución 1325 de 2000, Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. 7. Asamblea Nacional Constituyente. Ponencia-informe «Derechos de la familia, el niño, el joven, la mujer, la tercera edad y minusválidos». Constituyentes Iván Marulanda, Jaime Benítez, Tulio Cuevas, Guillermo Perry, Angelino Garzón y Guillermo Guerrero. Gaceta Constitucional N0. 85, p. 5. 8. Congreso de la República, Ley 82 de 1993, «Por la cual se expiden normas para apoyar de manera especial a la mujer cabeza de familia». 9. Congreso de la República, Ley 823 de 2003, «Por la cual se dictan normas sobre la igualdad de oportunidades para las mujeres». 10. Congreso de la República, Ley 1257 de 2008, «Por la cual se dictan normas de sensibilización, prevención y sanción de formas de violencia y discriminación contra las mujeres». 11. Corte Constitucional, sentencia C-410 de 1994. Magistrado ponente: Carlos Gaviria Díaz. 12. Corte Constitucional, auto 092 de 2008. Magistrado ponente: Manuel José Cepeda Espinosa. 13. «Las mujeres profesionales ganan menos que los hombres». http://www.tusalario.org/colombia/Portada/ mujer-y-trabajo/las-mujeres-profesionales-ganan-menos-que-los. 14. Forensis Mujeres, «Datos para la vida», Bogotá, Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, 2010. 15. «Los desafíos del milenio ante la igualdad de género», Cepal, Unifem, marzo de 2007, p. 67. 16. Profamilia, «Salud sexual y reproductiva en zonas marginadas. Situación de las mujeres desplazadas 2005», junio de 2006. 17. Programa Mundial de Alimentos, OPS y Comisión Europea: «Estado nutricional, de alimentación y condiciones de salud de la población desplazada por la violencia en seis subregiones del país», enero de 2006. 18. Ibíd. 19. Encuesta Nacional de Verificación, Comisión de Seguimiento a la Política Pública sobre Desplazamiento Forzado, 2008. editorial 4 correo de brujas 8 cuarto de huéspedes 12 dossier 20 actualidad 64 ventana global 94 ventana global economía y finanzas 110 externautas 132 cultura y sociedad 136 109