REF.: 71-A-06. CAMARA DE FAMILIA DE LA SECCION DEL CENTRO, SAN SALVADOR, A LAS CATORCE HORAS VEINTE MINUTOS DEL DIA TREINTA DE AGOSTO DE DOS MIL SEIS. Conocemos del recurso de apelación interpuesto por el Lic. JUAN CARLOS RODRÍGUEZ VÁSQUEZ, como apoderado especial del Lic. *************, quien es mayor de edad, abogado y notario, de este domicilio; así como de la apelación adhesiva promovida por el Lic. MIGUEL ANGEL SOL MONTERREY, sustituido en esta instancia por el Lic. JOSÉ ÁNGEL GÓMEZ LARIOS, a quien se le da la intervención de ley como apoderado de la Licda. ***********, quien es mayor de edad, abogada y notaria, del domicilio de San Salvador, contra la sentencia definitiva emitida por el Lic. JORGE ALFONSO QUINTEROS HERNANDEZ, JUEZ PRIMERO DE FAMILIA DE ESTA CIUDAD, en el proceso de DIVORCIO iniciado por el Lic. LOPEZ CRUZ, contra la Licda. **********+. VISTOS LOS AUTOS Y CONSIDERANDO. I. A Fs. 120/123 se encuentra el acta de audiencia de sentencia y sentencia; que respecto a los puntos recurridos, resolvió: a) Fijar como cuota alimenticia a favor de la niña *************+, la cantidad de DOSCIENTOS CINCUENTA DOLARES mensuales, a cargo del Lic. ********++, la cual se hará efectiva mediante el sistema de retención en el salario del demandante. B) Se declaró no ha lugar el cese del descuento por la suma de QUINIENTOS SETENTA Y SIETE DOLARES en el salario del demandante, por declararse incompetente el Tribunal en razón de la materia. Inconforme con la sentencia el Lic. RODRIGUEZ VASQUEZ, por escrito de Fs, 125/128 interpone la apelación, en la que alegó: ● Incongruencia de la sentencia con la pretensión contenida en el literal E) de la demanda, donde peticionó se ordenara el reintegro de cuotas descontadas a su mandante o que se ordene a la Licda. *********** devuelva la diferencia entre la cantidad descontada y la cuota alimenticia fijada (sic). Que el a quo al declararse incompetente no valoró que la habitación es uno de los rubros que comprende la obligación de los alimentos, Art. 147 C.F., por lo que pide que dicho descuento (crédito hipotecario) se considere como cuota de alimentos. ● Errónea aplicación del Art. 154 C.F. porque no se tomó en cuenta la situación económica del Lic. **********, al no valorar el a quo que dicho señor recibe de forma líquida la suma de SETECIENTOS CINCUENTA Y TRES DOLARES CON SEIS CENTAVOS ($753.06), ni se consideró que no puede percibir más ingresos por ser Juez, por lo que con la cuota impuesta se le obliga a sobrevivir con QUINIENTOS DOLARES MENSUALES. Finaliza solicitando se modifique la sentencia declarando que el aporte del Lic. *************+ a los alimentos de su hija sea en base a los descuentos que se le hacen; además solicita que se ordene a la Licda. *************+ reintegre la diferencia entre la cuota fijada y la cantidad descontada y de no acceder a lo anterior se fije una cuota inferior que permita al apelante recibir una cantidad adecuada para sobrevivir. Por escrito de Fs. 132/133 el Lic. SOL MONTERREY, se pronunció sobre los puntos apelados y además interpuso apelación adhesiva, en los siguientes términos: ● Que se comprobó fehacientemente que el descuento efectuado en el salario del demandante por la suma de QUINIENTOS SETENTA Y SIETE DOLARES; es respecto de una obligación eminentemente mercantil y no de una deuda surgida de la relación de familia entre el recurrente y su hija *************++, por lo que la sentencia se encuentra apegada a derecho, no existiendo inobservancia o errónea aplicación de un precepto legal. Por otra parte el apelante relacionó en su escrito de alzada el Art. 147 C.F., que trata sobre la irrevocabilidad de la paternidad, lo cual es totalmente impertinente al recurso interpuesto. ● Respecto al segundo agravio se relacionó incorrectamente el Art. 154 C.F., el cual trata de la excepción de no paternidad, disposición que también resulta impertinente. Que consta en autos que el salario del Lic. ***************como Juez fue incrementado por SETENTA Y CINCO DOLARES MENSUALES ($75.°°), además percibe honorarios como docente en la Universidad "Dr. José Matías Delgado" y a partir de este mes en la Universidad Tecnológica, por lo que requiere sean solicitadas dichas constancias a las instituciones correspondientes. ● De conformidad al Art. 157 L.Pr.F., se adhiere al recurso de apelación del Lic. RODRIGUEZ VASQUEZ e impugna el punto relativo a la imposición de la cuota alimenticia por ser muy baja considerando los resultados del estudio social, el incremento salarial del demandante, así como las otras fuentes de ingreso del obligado, por lo que solicita que la misma se incremente a QUINIENTOS DOLARES MENSUALES, más gastos de instrucción, médicos, medicinas, hospitalización y exámenes de laboratorio de *********+. En aplicación del Art. 253 C.F. pide que los alimentos se ordenen desde la interposición de la demanda. Finaliza su escrito solicitando: A) Se ordene al Lic. ***********++, cancele las cuotas alimenticias atrasadas a favor de su hija *********+ a partir de la fecha de la interposición de la demanda, incluyendo el pago de aguinaldo. B) Se incremente la cuota alimenticia a favor de la citada niña a la cantidad de QUINIENTOS DOLARES MENSUALES más gastos de instrucción, médicos, medicinas, hospitalización y exámenes de laboratorio. C) Se declare sin lugar la apelación interpuesta por el Lic. *********. De la apelación adhesiva se mandó a oír al Lic. RODRIGUEZ VASQUEZ, Fs. 137/142, quien subsanó los errores advertidos por la contraparte en el sentido que los artículos que fundamentan la apelación son 247 y 254 C.F.. En cuanto al incremento de la cuota alimenticia señaló, que el aumento salarial que percibe su patrocinado es insignificante y no llega a la cantidad señalada por el Lic. SOL MONTERREY; en cuanto a las fuentes de ingreso como profesor hora clase de la Universidad Dr. José Matías Delgado, estos fueron acreditados en el estudio social y lo único que no consta son los ingresos que su cliente percibe como profesor de la Universidad Tecnológica, el cual es un trabajo eventual. Que la demandada omitió informar al Juzgado a quo que actualmente trabaja en la Superintendencia de Competencia, donde devenga un salario superior a los TRES MIL DOLARES, más los honorarios que devenga como abogada y notaria y los cánones de arrendamiento del edificio "Julia L de Duke". Que en el estudio social se determinó que los gastos de ********* son por OCHOCIENTOS DIECISIETE DOLARES ($817.°°), de los cuales a su poderdante se le descuentan QUINIENTOS SETENTA Y SIETE DOLARES ($577.°°) por el pago de vivienda más los DOSCIENTOS CINCUENTA DOLARES de la cuota alimenticia fijada por el a quo, lo que significa que la contribución total de su representado a los gastos de su hija es por la suma de OCHOCIENTOS VEINTISIETE DOLARES ($827.°°). En consecuencia su aporte es superior en diez dólares a las necesidades determinadas en el estudio social. En ese sentido la cuota no es proporcional a la capacidad económica del obligado y a las necesidades de **********; por otra parte el Art. 38 C.F., establece que los gastos de familia se deben sufragar en atención a los recursos económicos y considerando que la Sra. ******** percibe mayores ingresos el demandante no debería estar obligado a proporcionar toda la cuota como sucede en el presente caso. Que el Lic. ***********++ ha proporcionado alimentos de forma ininterrumpida a su hija desde antes de su nacimiento, por lo que no es procedente la petición de la Licda. *************, que pide que la cuota se decrete desde la interposición de la demanda, amén que ello sólo opera en los juicios de alimentos. Finaliza reiterando su petición contenida en la apelación primigenia declarando sin lugar la apelación adhesiva de la contraparte, por no estar fundamentada legalmente. Se admiten ambos medios de impugnación por reunir los requisitos de ley; en cuanto al escrito presentado por el apelante a Fs. 2/6 de este incidente por el que solicita se valoren nuevas circunstancias y que se agreguen como prueba las copias simples de cheque y planilla, se declara liminarmente sin lugar dicha petición, por cuanto no se reúnen las condiciones señaladas en el Art. 159 L.Pr.F. para recibir prueba en esta instancia y en cuanto los hechos a valorar son aquellos que se sometieron a conocimiento del a quo. II. Así la cuestión, el objeto de la apelación consiste en determinar, a partir del material fáctico y probatorio que obra en autos, si procede confirmar, revocar o modificar la sentencia venida en apelación en lo relativo a la cuota alimenticia fijada por el a quo, a favor de la niña ************* y a cargo del Lic. **********+. Ello implica el análisis y decisión sobre los puntos controvertidos de acuerdo a los respectivos libelos de apelación y contestación de ambas partes. En reiteradas sentencias esta Cámara ha sostenido que los alimentos son prestaciones que tienden a satisfacer las necesidades del(la) alimentario(a), entre éstos alimentación, vestuario, calzado, educación, vivienda, para establecer su quantum, es preciso valorar los siguientes criterios: a) La necesidad del(la) alimentario(a). B) La capacidad económica de ambos progenitores de la niña, incluso de quien ostenta su cuidado. C) Las condiciones personales de ambos alimentantes. A) Sobre las necesidades de ***********. La necesidad de los alimentos se presumen por tratarse de una menor de edad, pero para establecer el monto de la cuota alimenticia, es preciso analizar el estudio social que obra en autos para determinar el monto de los gastos de crianza, educación y formación integral de la niña; ninguna de las partes presentó ningún medio de prueba que acrediten la suma de los gastos para satisfacer las necesidades alimenticias de la menor. En ese sentido es válido analizar la información contenida en el mencionado estudio al no haber sido objetado su contenido. Amén de las manifestaciones hechas al respecto por las partes en sus respectivos escritos y actuaciones procesales. A Fs. 116 vto. y 117 se detallan los gastos de ************ y se afirma que estos ascienden a OCHOCIENTOS DIECISIETE DOLARES 66/100 ($817.66), dato que resulta de prorratear algunos rubros sobre gastos de la familia y de la niña entre los integrantes del grupo familiar -madre, abuela materna y niña- y que incluye: alimentación por CIENTO TREINTA Y TRES DOLARES ($133.°°), servicios de teléfono (fijo y celular), cable e internet por CIEN DOLARES ($100.°°), agua DIEZ DOLARES ($10.°°), energía eléctrica por VEINTISEIS DOLARES 66/100 ($26.66), recreación CIEN DOLARES ($100.°°), vestuario CIENTO CINCUENTA DOLARES ($150.°°) cada dos meses, es decir SETENTA Y CINCO DOLARES MENSUALES ($75.°°), calzado CIEN DOLARES, cada tres meses, es decir TREINTA Y TRES DOLARES 33/100 ($33.33) mensuales, medicamento CUARENTA DOLARES MENSUALES ($40.°°), escolaridad –Escuela Americana- DOSCIENTOS NOVENTA Y UN DOLARES. Hemos advertido que el rubro por servicios de telefonía, cable e internet, no fueron prorrateados entre los tres miembros integrantes del grupo familiar, en ese sentido dicho pago se reduce a SESENTA Y SEIS DOLARES 67/100 ($66.67) ya que se afirmó que el mismo ascendía a DOSCIENTOS DOLARES MENSUALES; por otra parte al efectuarse la sumatoria de los egresos de la niña, se tomó el gasto de vestuario y calzado de forma mensual, cuando se había señalado que se hacían en diferentes períodos; en consecuencia es preciso que esa suma se divida de forma mensual, tal como lo señalamos en el párrafo anterior; bajo estos supuestos el egreso mensual de gastos de **************+, se establece en SETECIENTOS SETENTA Y CINCO DOLARES 66/100 ($775.66) . En la enumeración de gastos no se incluyó el rubro vivienda la cual es propiedad exclusiva de la madre de la niña, por cuanto de los instrumentos que obran en autos consta que dicho inmueble es de su propiedad y se encuentra gravado con hipotecas inicialmente por deudas de la cónyuge y posteriormente por deudas contraidas por los cónyuges durante la vida matrimonial; en consecuencia las partes cancelan cuotas de DOS MIL TRESCIENTOS SETENTA Y SIETE DOLARES 14/100 ($2377.14) por préstamo efectuado al Banco Scotiabank por la suma de UN MILLON SEISCIENTOS CUATRO MIL COLONES (¢1,604,000.°°) equivalentes a CIENTO OCHENTA Y TRES MIL TRESCIENTOS CATORCE DOLARES 29/100 ($183,314.29); crédito que en la actualidad refleja mora, al efecto confróntese Fs. 72/76. (Sobre este punto volveremos adelante). Tácitamente el demandante Lic. **********+, acepta en sus escritos el monto a que asciende el gasto mensual de su hija, el cual se detalla en el estudio social, pues sobre este punto no hubo objeción en la audiencia de sentencia, aún cuando estuvo presente la Trabajadora Social. B) Capacidad económica de los obligados. Consta que el Lic. *******, es abogado y notario, desempeñándose como JUEZ DE PRIMERA INSTANCIA, devengando un salario mensual de DOS MIL CIENTO DIECISEIS DOLARES 40/100 ($2,116.40), al que se le efectúan descuentos de ley por la cantidad de CUATROCIENTOS UN DOLARES 54/100 ($401.54), y descuentos por obligaciones mercantiles como fiador de la demandada por el Banco Scotiabank por QUINIENTOS SETENTA Y SIETE DOLARES ($577.°°) y por crédito personal con el Banco Agrícola por la suma de TRESCIENTOS OCHENTA Y CUATRO DOLARES 80/100 ($384.80); ambas obligaciones suman la cantidad de NOVECIENTOS SESENTA Y UN DOLARES 80/100 ($961.80); en total los descuentos en el salario del Sr. ********** –deducciones de ley y obligaciones crediticias- ascienden a MIL TRESCIENTOS SESENTA Y TRES DOLARES 34/100 ($1,363.34); en consecuencia recibe la cantidad líquida de SETECIENTOS CINCUENTA Y TRES DOLARES 06/100 ($753.06). Se ha consignado y aceptado en el escrito de apelación que el demandado además de su salario percibe honorarios como catedrático en la Universidad Matías Delgado (sic) –aún cuando no se acreditó con ningún documento a cuanto ascienden los mismos- se afirmó en el estudio social Fs. 116 que el quantum de dicho ingreso depende de las horas clases que se impartan, pero una media de los ingresos recibidos en doce meses es la suma de CIENTO OCHENTA Y SIETE DOLARES MENSUALES ($187.°°), en consecuencia los ingresos mensuales líquidos del Lic. *******, asciende a NOVECIENTOS CUARENTA DOLARES 06/100 ($940.06). Con dicha suma satisface sus necesidades personales y las de su hija ***********En el estudio social Fs. 116, el demandante aseveró que sus gastos mensuales ascienden a MIL TRESCIENTOS SESENTA Y NUEVE DOLARES 29/199 ($1,369.29), destacándose que los gastos de vivienda y pago de servicios básicos, en ocasiones son cubiertos por su madre, cuando éste no puede solventarlos, amén de lo anterior también se afirmó que el demandado reside actualmente en casa de ésta, donde habitan tres personas más (la madre del demandante, una tía y un primo materno) en ese sentido resulta excesivo los gastos detallados en los rubros señalados, ya que los mismos deben ser absorbidos por todos los integrantes del grupo familiar, por ello serán prorrateados para así determinar el gasto que corresponde al Lic. ************, asimismo se alude a gastos como: servicios médicos, gasolina y mantenimiento del vehículo, los cuales en parte constituyen prestaciones otorgadas por el Órgano Judicial a jueces y magistrados, lo que no implica que se puedan efectuar ciertas erogaciones en dichos rubros, considerando que el demandado tenga vehículo propio y gastos médicos no cubiertos en el área de salud, en consecuencia éstas deben ser mínimas. Asimismo dentro de sus gastos incluye erogaciones a favor de su hija cuando se ejerce el régimen de visitas ascendiendo dicho egreso a CIENTO CUATRO DOLARES ($104.°°). Debemos resaltar que dentro de las condiciones de vida del demandado, éste afirmó que reside junto a su madre y a la vez que cancela un canon de DOSCIENTOS DOLARES en dicho rubro, más adelante expresó a la Trabajadora Social, que cuando no puede solventar los gastos de vivienda y pago de servicios es su madre quien los sufraga; tal y como lo mencionó en el referido estudio, por lo que concluimos que el demandante contribuye en forma mínima al pago de dichos rubros, en tanto son cuatro personas las que residen junto al demandante, por lo que las cantidades informadas a la Trabajadora Social ($200 en el pago de vivienda y $100 en el pago se servicios) no son permanentes, pues el mismo apelante refiere que cuando no puede sufragar sus gastos es su madre quien lo hace. Por su parte la demandada Licda. ************+, abogada y notaria, se desempeñó hasta el mes de marzo de dos mil cinco –tres meses después de la presentación de la demandacomo gerente legal del Ministerio de Obras Públicas, Transporte y Vivienda. A partir del mes de mayo de dos mil cinco se adjudicó a la demandada contrato por consultoría con el citado ministerio por la suma de TREINTA Y UN MIL SEICIENTOS OCHENTA DOLARES ($31,680. °°), por un plazo de ocho meses, con la posibilidad de renovación previa evaluación de su desempeño; por tanto dicho ingreso de forma mensual equivalentes a TRES MIL NOVECIENTOS SESENTA DOLARES ($3,960.°°) Fs. 82/86, no se acreditó con ningún medio probatorio los descuentos que se efectúan a dicho emolumento. En el estudio social la Licda. *************, expresó ejercer libremente la profesión, percibiendo como ingresos la suma de TRES MIL DOLARES ($3,000.°°), más la renta de un edificio de su propiedad por la suma de SETECIENTOS a MIL DOLARES MENSUALES ($700.°° a $1,000.°°), además de ingresos como docente universitaria por la suma de CIENTO CINCUENTA DOLARES ($150.°°). De lo anterior concluimos que en el estudio social la demandante proporcionó información contraria a los documentos presentados por su mismo apoderado; en ese sentido se tendrá como un ingreso por honorarios en el ejercicio de su profesión la suma de TRES MIL NOVECIENTOS SESENTA DOLARES ($3,960.°°); con respecto a la renta percibida por alquiler de inmueble, no se presentó por ninguna de las partes los documentos que acrediten fehacientemente la suma que se percibe por dicho alquiler; en consecuencia se tomará como base la información proporcionada en el estudio social el cual no fue controvertido por las partes, tomando un promedio de las cantidades detalladas, obteniendo la suma de OCHOCIENTOS CINCUENTA DOLARES MENSUALES ($850.°°), adicionando los CIENTO CINCUENTA DOLARES ($150.°°) que percibe como catedrática, obteniendo que como ingresos mensuales la demandada recibe la suma de CUATRO MIL NOVECIENTOS SESENTA DOLARES MENSUALES ($4,960.°°). Un poco más del doble respecto a los ingresos percibidos por el demandante. Con la suma anterior la demandada afronta sus gastos personales y los de su menor hija los que suman CUATRO MIL DOSCIENTOS NOVENTA Y UN DOLARES ($4,291.°°) -Fs. 117- de los cuales si deducimos los gastos de ************ los que según afirmó la demandante ascendían a OCHOCIENTOS DIECISIETE DOLARES (aunque para este Tribunal los mismos luego de las distribuciones efectuadas ascienden a SETECIENTOS SETENTA Y CINCO DOLARES 66/100), en ese sentido solo los gastos personales de la demandante según el estudio social ascienden a TRES MIL CUATROCIENTOS SETENTA Y CUATRO ($3,474.°°); y al efectuar la resta de los gastos de PATRICIA LORENA en el quantum estimado por este Tribunal tenemos que los gastos personales de la demandante arribarían a la suma de TRES MIL QUINIENTOS QUINCE DOLARES 34/100 ($3,515.34) quedándole un remanente de UN MIL CUATROCIENTOS CUARENTA Y CINCO DOLARES ($1,445.°°). Dentro de los egresos de la demandada se encuentra el pago de diversos créditos a instituciones financieras y comerciales, entre estas Banco Uno (actualmente Aval Card), Scotiabank, Banco América Central, Kismet, Dorians, Sambors, solo en pago de estos créditos la demandante incurre en un egreso de DOS MIL DOSCIENTOS CINCUENTA DOLARES, a ello agregó el pago de medicamentos de su madre y propios por la cantidad de NOVECIENTOS CINCUENTA DOLARES, lo que hacen TRES MIL DOSCIENTOS DOLARES, ($3,200.)en ese sentido los TRESCIENTOS QUINCE DÓLARES ($315.) de diferencia que se advierten de la suma total de sus gastos personales (en los que incluye los de su madre) corresponden a la proporción en que contribuye a los gastos del hogar prorrateados con las otras dos personas integrantes del grupo familiar (alimentación y servicios). A pesar de que los egresos de la demandada son elevados, sus ingresos continúan siendo superiores a los del demandante, y considerando el principio de proporcionalidad Art. 254 C.F., por el cual los alimentos se fijan en proporción a la capacidad de quien está obligado a darlos y a la necesidad de quien los pide, valorando la condición personal de ambos y las obligaciones familiares del alimentante, es procedente que la demandada contribuya en mayor proporción que el demandante, en los alimentos a favor de **************+, ya que su capacidad económica es superior. c) Sobre las condiciones personales de las partes. La demandada Licda. **************, junto a su hija y madre, residen en vivienda ubicada en –zona exclusiva- Residencial Loma Linda, Colonia San Benito se comprobó Fs. 36/40 que dicha vivienda fue adquirida por medio de un préstamo efectuado por la demandante al Banco Cuscatlán por la suma de CUATROCIENTOS SETENTA Y CINCO MIL COLONES (¢475,000.°°) equivalentes a CINCUENTA Y CUATRO MIL DOSCIENTOS OCHENTA Y CINCO DOLARES 71/100 ($54,285.71), el día veinticuatro de marzo de mil novecientos noventa y cinco. Para una mejor comprensión de lo acontecido en la especie, debemos reseñar que además del crédito para la adquisición de vivienda, el demandante Lic. LOPEZ CRUZ, con fecha dieciocho de mayo de mil novecientos noventa y ocho, celebró con la citada institución un crédito personal por la suma de: CIEN MIL COLONES (¢100,000.°°) equivalentes ONCE MIL CUATROCIENTOS VEINTIOCHO DOLARES 57/100 ($11,428.57), que se garantizó por medio de hipoteca en el inmueble que sirve de residencia y es propiedad además de la Licda. ************, quien se constituyó codeudora solidaria de las obligaciones que gravan el inmueble. Fs. 41/45. En el mes de septiembre de mil novecientos noventa y nueve, la Licda. *****************constituye nuevo crédito como deudora y el Lic. LOPEZ CRUZ, como codeudor por la suma de CIENTO CUARENTA MIL COLONES (¢140,000.°°) equivalentes a DIECISEIS MIL DOLARES ($16,000), destinados al pago de gastos personales y cancelación de crédito a favor del Lic. *********** Fs. 49/53. En noviembre del mismo año, ambos cónyuges se constituyeron en deudores ante el Banco de Comercio por un crédito de SETECIENTOS NOVENTA Y UN MIL COLONES (¢791,000.°°), equivalente a NOVENTA MIL CUATROCIENTOS DOLARES ($90,400.°°), dinero que se destinó a la cancelación de deuda originada en la adquisición de vivienda, propiedad de la demandada, Licda. DUKE CHAVEZ. Fs. 59/62. Ese mismo mes, el Banco de Comercio, otorgó, además, un crédito rotativo a favor de los Lics. ************* y *************, por la suma de QUINIENTOS CINCUENTA MIL COLONES (¢550,000.°°) equivalentes a SESENTA Y DOS MIL OCHOCIENTOS CINCUENTA Y SIETE DOLARES 14/100 ($62,857.14), el destino era la cancelación de crédito número 20-50-09093, pago de tarjetas de créditos, deudas del Banco Cuscatlán y gastos personales. Fs. 63/66. Finalmente el veintiséis de octubre de dos mil, Fs. 72/75 la Licda. *************+, en su calidad de deudora y el Lic. *************, como codeudor, suscriben nuevo crédito con el Banco de Comercio por la suma de UN MILLON SEISCIENTOS CUATRO MIL COLONES (¢1,604,000.°°) equivalentes a CIENTO OCHENTA Y TRES MIL TRESCIENTOS CATORCE DOLARES 29/100 ($183,314.29); dicho mutuo se destino a la cancelación de prestamos números 40-50-10372 (que se refiere a cancelación de deuda originada por adquisición de vivienda a fs. 91 y 96); 40-50-10374 (Tarjeta VISA a cargo de la Lic. ************+), así como al pago de tarjeta de crédito a favor del codeudor, Lic. ******** del Banco VISA 49138301-0101-5251. Adquirida a fs. 41/45 por ONCE MIL CUATROCIENTOS VEINTIOCHO ($11,428.°°) cancelada por éste contrato. En razón de la mora de este último crédito es que se descuenta del sueldo del demandante la cantidad de QUINIENTOS SETENTA Y SIETE DOLARES MENSUALES ($577.°°); sin embargo la Licda. *********+ en el estudio social a Fs. 117 vto., afirmó que cancela las dos terceras partes del mismo; al efecto consta a Fs. 78/80 tres comprobantes de pago de dicho préstamo presentados por la Licda. ****************, que oscilan entre las cantidades de UN MIL DOLARES ($1,000.°°) a DOS MIL DOLARES ($2,000), cuyas fechas corresponden a los meses de junio, septiembre y octubre de dos mil cinco, ello se comprende por cuanto las mayores sumas mutuadas han sido otorgadas a su favor como se desprende de la documentación mencionada. Por tanto, los préstamos por los cuales se le descuenta al Lic. ********* una cuota moratoria de su salario, es pagado también en la proporción señalada por la Licda. ************* lo que es lógico tratándose de un crédito solidario, ello significa que el Lic. *********** ha asumido similar responsabilidad respecto de la deudora principal, en obligaciones contraídas durante la relación familiar y en mayor cuantía por esta última. El préstamo referido se efectúo para consolidar varias deudas entre estas las originadas por el pago de las tarjetas de crédito mencionadas y de créditos anteriores; según se observa del detalle de préstamos efectuado supra, estos tuvieron básicamente como destino el pago de deudas personales en la proporción que se menciona y para la adquisición de vivienda; aún cuando no se determinó con precisión el monto que se utilizó del último crédito efectuado por ellos para el pago del rubro vivienda, la cual lógicamente era utilizada en beneficio del grupo familiar, por cuanto el demandado reside hoy en casa de la madre y la demandada y la hija de ambos en la referida vivienda. No obstante lo anterior, un referente para determinar las cantidades invertidas en el rubro vivienda, son el crédito originario efectuado al Banco Cuscatlán en el que consta que la Licda. ************, recibió la suma de CUATROCIENTOS SETENTA Y CINCO MIL COLONES (¢475,000.°°) equivalentes a CINCUENTA Y CUATRO MIL DOSCIENTOS OCHENTA Y CINCO DOLARES 71/100 ($54,285.71), para la adquisición de vivienda, Fs. 36/40, así como el crédito efectuado posteriormente al Banco Agrícola cuyo destino era el pago de la deuda originada en la cancelación de la adquisición de vivienda Fs. 59/62 cuyo monto fue por la cantidad de SETECIENTOS NOVENTA Y UN MIL COLONES (¢791,000.°°) equivalentes a NOVENTA MIL CUATROCIENTOS DOLARES ($90,400.°°); sumas muy inferiores a la última cantidad mutuada de UN MILLON SETECIENTOS CUATRO MIL COLONES (¢ 1,704,000.); es decir CIENTO OCHENTA Y TRES MIL TRESCIENTOS CATORCE DOLARES 29/100 ($ 183,314.29), cantidad de la cual se pagó un crédito del deudor originado por una tarjeta de crédito por ONCE MIL CUATROCIENTOS VEINTIOCHO DÓLARES ($11, 428.°°). El referido crédito fue adquirido para el pago de las deudas originadas en la adquisición de vivienda, y para cubrir otros préstamos producto del estilo de vida que las partes llevaron en su matrimonio pues, el último préstamo sobrepasa en casi el doble del préstamo anterior efectuado para el pago de vivienda; ello nos confirma lo dicho supra, de que las partes ostentaban un estilo de vida difícil de sufragar sin tener ingresos que superaran o igualaran esos gastos. Lo que se evidencia cuando sus deudas - y sobre todo de la demandada- se incrementaron al no poder afrontar el pago oportuno de las cuotas, elevándose la carga moratoria que se advierte en autos. La forma en que se otorgó el último crédito, en el que la Licda. *********** se constituyó en deudora y el Lic. ********* en codeudor, es porque ambos tenían un interés directo del destino del préstamo, fundado en los deberes de solidaridad y asistencia familiar derivados de su carácter de cónyuges; en consecuencia al establecerse la cuota alimenticia para la menor ************, se tomará en cuenta las condiciones personales de sus progenitores, lo que implica valorar las circunstancia en que dichas obligaciones se contrajeron aunque no puedan ser modificadas por originarse de una relación mercantil pero basadas en la relación familiar, lo que sin duda afecta su capacidad económica. El pago de dicha obligación no puede compensar el pago de alimentos, aunque se reduzca la capacidad económica y se hayan adquirido para satisfacer las obligaciones familiares por cuanto lo prohibe el Art. 260 inc. 2° C.F., amén de que se trata de diferentes acreedores, lo que no obsta para que este Tribunal tome en consideración para la fijación de la cuota el monto de esos compromisos las condiciones en que se realizaron por cada cónyuge y la reducción de su capacidad económica, es más, es necesario tomarlo en cuenta y atendiendo a ello determinar una cuota acorde a la capacidad económica del obligado. En ese sentido la pretensión del demandante de novar (modificar) las condiciones de pago de las obligaciones contraídas, es improcedente, porque como lo dijimos supra no se puede compensar la obligación de alimentos de la citada niña, quien no es acreedora del demandante en relación a esas obligaciones, aunque en todo caso estas se han contraído en razón de la relación conyugal, misma que también genera la obligación de brindar alimentos a favor de ***************, como progenitores de la niña, razón por la que independientemente de la naturaleza de las obligaciones contraídas es necesario valorar esas condiciones al momento de imponer la cuantía de alimentos, sin equiparar dichas obligaciones, por ser de diferente naturaleza, en ese sentido siendo los créditos contraídos obligaciones de carácter mercantil, se rigen por la legislación de comercio, aún y cuando tengan incidencia al momento de resolver derechos familiares, al tomar en cuenta la capacidad económica en que se sitúan las partes, la proporción en que cada uno se obligó y la satisfacción proporcional en las necesidades de la familia. Además los alimentos se caracterizan por ser inalienables, irrenunciables. Por ello habiéndose acreditado que la Licda. ***************, tiene una mayor capacidad económica a pesar de sus aportaciones a los créditos efectuados durante el matrimonio en razón de la proporción en que adquirió esos créditos, originalmente basados en la adquisición del inmueble de su propiedad, es pertinente que esta contribuya en mayor medida a satisfacer las necesidades de su hija, por lo que consideramos improcedente incrementar la cuota alimenticia a QUINIENTOS DOLARES MENSUALES, como lo peticionó la Licda. **************, porque resulta de justicia y equidad que atendiendo a sus ingresos esta contribuya en mayor proporción que el demandante a sufragar los gastos de crianza de ************+. El Lic. ************ atendiendo a las necesidades de su hija y a su limitada capacidad económica, debido a sus condiciones personales y obligaciones crediticias contraídas durante la vigencia de la relación conyugal deberá contribuir de forma proporcional a sufragar las necesidades de su hija, en una suma inferior a la establecida por el a quo, lo cual así será declarado, por cuanto él también ha de sufragar sus propias necesidades, llevando un nivel de vida acorde a su condición profesional y a la función que desempeña tomando en cuenta además que contribuye al rubro vivienda en beneficio de la alimentaria por ser éste un rubro de los alimentos y la cual es propiedad exclusiva de la madre. Como lo hemos sostenido en pretéritas sentencias la proporcionalidad no es el resultado de una simple operación aritmética, ni sinónimo de paridad en el reparto de las obligaciones alimenticias de ambos progenitores; de tal manera que puede fijarse a cada alimentante diferentes montos, atendiendo a su capacidad económica y condiciones personales y familiares, por otra parte -como la práctica lo ha demostrado- se puede incluso relevar del pago de la pensión a uno de ellos si careciere de ingresos -siempre que no se hayan colocado en dicha situación de forma dolosa- y su contribución a tales gastos sea a través del cuidado del hogar y de los hijos. Amén de lo anterior, es de suma urgencia que las partes reacomoden el nivel de vida que han llevado hasta el momento, acorde a su condición económica a fin de que puedan asumir responsablemente sus obligaciones, principalmente respecto de *************+, a quien podría perjudicar llevar un estilo de vida que no corresponde a la realidad económica de sus progenitores resultando beneficioso ubicar a la niña en su verdadera condición, de acuerdo a los ingresos y obligaciones de ambos, sólo de esta forma le garantizarán un desarrollo adecuado conforme a su realidad de vida. Debe acotarse, en cuanto a lo solicitado por la demandada que los alimentos en este caso, se dictaron como consecuencia del divorcio, aún cuando fueron peticionados por la vía de la reconvención, esta no fue aceptada, según resolución de Fs. 22, quedando únicamente como una simple contestación de la demanda, no siendo aplicable entonces el Art. 253 C.F., por lo que éstos se deben desde que se dictó la sentencia, pues en aplicación del Art. 83 L.Pr.F. esta causa ejecutoria no obstante apelación. Por la naturaleza de las cuotas alimenticias, estas pueden ser modificadas al variar las circunstancias que motivan esta sentencia. Art. 259 C.F.. Por los considerandos expuestos, de conformidad a los Arts. 3, 4, 8, 9, 111, 247, 248, 254, 260 C.F., 3, 7, 147, 149, 153, 156,160, 161 L.Pr.F., esta Cámara en nombre de la República de El Salvador, FALLA: Modifícase la sentencia venida en apelación, en el sentido que la cuota que el Lic. **************, deberá aportar en concepto de alimentos a favor de PATRICIA LORENA LOPEZ DUKE, será por la cantidad de CIEN DOLARES MENSUALES ($100.°°), la cual se hará efectiva por medio de descuentos en el salario del obligado (sistema de retención). Dicha cuota se debe desde la notificación de esta sentencia. Ejecutoriada la sentencia remítase el expediente, junto con certificación de este proveído al Tribunal de origen. Se hace constar que la resolución fue tomada por las Licdas. HILDA EDITH HERRERA DE MORÁN y RHINA ELIZABETH RAMOS GONZÁLEZ, no concurriendo con su voto el Dr. JOSÉ ARCADIO SÁNCHEZ VALENCIA. NOTIFÍQUESE. PRONUNCIADA POR LOS MAGISTRADOS DR. JOSE ARCADIO SANCHEZ VALENCIA (En disidencia), LICDA. HILDA EDITH HERRERA DE MORÁN Y LICDA. RHINA ELIZABETH RAMOS GONZALEZ . SECRETARIO. VOTO RAZONADO DEL DR. JOSE ARCADIO SANCHEZ VALENCIA: No he concurrido con mi voto a formar la sentencia anterior en los puntos relativos al quantum de la cuota alimenticia a favor de la niña **********+ y el momento desde que éstos se deben, de conformidad a los Arts. 1083 Pr. C. y 218 L. Pr. F. por los siguientes argumentos: Se ha acreditado en autos que la necesidad de la citada niña ascienden a la suma de SETECIENTOS SETENTA Y CINCO DOLARES MENSUALES, suma que se ha determinado luego de un análisis de los diferentes rubros que incluye los alimentos, considerando exclusivamente aquellos gastos que pertenecen a la niña al efecto se prorrateó estos con los demás miembros integrantes del grupo familiar (madre y abuela materna), debemos destacar que en el presupuesto de egresos del estudio social de Fs. 116 Vto. y 117 no se incluyó el rubro vivienda. Al efectuar una comparación entre la capacidad económica de los progenitores, se ha determinado que la capacidad económica de la Licda. **************+es superior a la del demandante Lic. ***************++; he apreciado que ambos progenitores enfrentan el cumplimiento de obligaciones mercantiles, situación que hace que sus ingresos se reduzcan significativamente, pero en una mayor medida respecto del demandante. No obstante lo anterior debo advertir que a pesar de ello el Lic. ************ percibe como ingresos mensuales la suma de NOVECIENTOS CUARENTA DOLARES 06/100 ($940.06) producto de su salario como Juez de Primera Instancia y honorarios como catedrático de la Universidad José Matías Delgado, con dichos ingresos satisface sus necesidades personales y colabora con la alimentación de su hija, afirmando el Lic. ****************** que sus gastos mensuales ascienden a MIL TRESCIENTOS SESENTA Y NUEVE DOLARES 29/100 ($1,369.29); en principio se podría afirmar que hay un déficit presupuestario; sin embargo se acreditó que algunos de los gastos no fueron prorrateados por los miembros del grupo familiar con quien habita. Además el mismo demandante afirmó a la Trabajadora Social que reside con la madre y en algunas ocasiones es ella quien paga dichos rubros. Es obvio que ello no lo inhibe al cumplimiento de sus obligaciones, pero cuenta actualmente con apoyo de su familia que le permite disminuir sus gastos. Se acreditó que la Licda. *************+, posee una capacidad económica muy superior a la del obligado y que incluso luego de solventar sus necesidades, las de su hija, las de su madre, y sus numerosas obligaciones financieras obtiene un remanente; pero ello no es impedimento para que el obligado aporte una cuota de CIENTO CINCUENTA DOLARES MENSUALES, la cual es muy por debajo de las necesidades de la menor y representa un trece por ciento de los egresos de la niña –que sea de paso- han sido aceptados por el Lic. **************. Además recuérdese que en dicho presupuesto no se incluye el gasto correspondiente al pago de vivienda, por tanto atendiendo a las necesidades de la alimentaria y a la capacidad económica de sus padres, es justo y legal que el Sr. **************, contribuya con dicha suma y no con una menor, pues la proporcionalidad en ese sentido es justa para ambos obligados. (padre y madre). Debemos destacar además que con el material probatorio aportado por las partes no fue posible acreditar fehacientemente que el préstamo efectuado al Banco de Comercio por la Sra. *************** por la suma de UN MILLON SEISCIENTOS CUATRO COLONES (¢1,604,000.°°), equivalentes a CIENTO OCHENTA Y TRES MIL TRESCIENTOS CATORCE DOLARES 29/100 ($183,314.29) y del cual el Lic. LOPEZ CRUZ es codeudor, se haya utilizado exclusivamente para el pago de vivienda, es más al confrontar los créditos precedentes destinados al rubro de vivienda resulta una diferencia elevada; al efecto analícese los siguientes elementos: el crédito originario para la adquisición de la vivienda fue efectuado al Banco Cuscatlán en el que consta que la Licda. DUKE CHAVEZ, recibió la suma de CUATROCIENTOS SETENTA Y CINCO MIL COLONES (¢475,000.°°) equivalentes a CINCUENTA Y CUATRO MIL DOSCIENTOS OCHENTA Y CINCO DOLARES 71/100 ($54,285.71), Fs. 36/40, posteriormente se efectúo crédito al Banco de Comercio, por la suma de SETECIENTOS NOVENTA Y UN MIL COLONES (¢791,000.°°) equivalentes a NOVENTA MIL CUATROCIENTOS DOLARES ($90,400.°°), cuyo destino era el pago de la deuda originada en la cancelación de la adquisición de vivienda Fs. 59/62; haciendo una comparación de cada uno de los montos de los dos últimos créditos, obtenemos que las sumas son muy inferiores a la última cantidad mutuada. De ello infiero que ese último crédito no fue adquirido exclusivamente para el pago de las deudas originadas en la adquisición de vivienda, sino para cubrir otros préstamos de las partes, sin poder determinarse de forma precisa que monto se destinó a cada una de los cónyuges. Consta que ambas partes asumen el pago de esa obligación mercantil, en ese sentido dicho dato únicamente es relevante en cuanto limita la capacidad económica de las partes, ya que fue una obligación adquirida por ambos y en ese sentido asumida de esa manera, e incluso en una mayor proporción por la demandada quien es la obligada principal. En el sub lite el Lic. LOPEZ CRUZ alegó y solicitó que el pago de dicho crédito debía ser considerado como su aporte a los alimentos a favor de su hija, ello no es posible considerando que no se permite en materia de alimentos la compensación de un crédito por otro, amén de que no se trata de los mismos acreedores. Finalmente reitero que no se acreditó debidamente qué monto de la cantidad descontada al demandante se utiliza para el pago del préstamo concerniente a la vivienda. De los hechos antes expuestos se deduce que dicho crédito no fue para el pago exclusivo de los créditos originados en la adquisición de la vivienda. Los alimentos en este caso, aún cuando se dictaron como consecuencia del divorcio, fueron solicitados como una pretensión acumulada por la vía de la reconvención –aún cuando indebidamente no se le dio el trámite, según resolución de Fs. 22- por lo que resulta aplicable analógicamente el Art. 253 C.F., por tanto estos se deben desde la interposición de la contestación, momento procesal en el cual fueron solicitados. Así mi voto. Dr. JOSE ARCADIO SANCHEZ VALENCIA SECRETARIO.