LA SITUACIóN COMERCIAL CON ARGENTINA Y SUS IMPACTOS

Anuncio
Octava Época Año 3 | Nº 303 | Octubre 2014
Espacio Industrial
la Situación comercial con
argentina y sus impactos
en la industria nacional
Centro de Extensionismo
Industrial: un proyecto para
la industria hecho realidad
Análisis de la Ley de
Responsabilidad penal
del empleador
Inmigración Europea,
industrias y corporaciones
en la región
V
arios son los temas de interés
que se presentan en esta nueva
edición de Espacio Industrial.
En primer lugar, se destaca como
nota central un informe sobre la
situación comercial con Argentina y
sus impactos en la Industria Nacional, elaborado conjuntamente por
las áreas de Estudios Económicos y
Comercio Exterior de la CIU.
El análisis de las exportaciones e
importaciones entre Argentina y
Uruguay revela datos significativos
sobre lo que ha sido el relacionamiento comercial, por ejemplo:
• la magnitud del descenso de las
exportaciones hacia la Argentina,
que en el año 2013 representaron
el 4,9% del total exportado por
Uruguay mientras que a mediados de los 90 llegaron a alcanzar
el 20%.
• desde otra perspectiva, si se
observa el mercado argentino y
las exportaciones uruguayas (en
relación al total de importaciones
argentinas), éstas continuaron
mostrando una tendencia negativa y se alcanzó el nivel de
mediados de los años 70 (0,7%),
mientras que Brasil y otros países
latinoamericanos aumentaron su
participación en el share argentino (3,4% y 0,7%, respectivamente).
• la pérdida de competitividad no
afectó únicamente a los sectores
que destinan parte de su producción al mercado argentino, sino
también a sectores que venden
al mercado interno nacional, por
el creciente ingreso de productos
argentinos.
Esta edición de Espacio Industrial
también incluye información sobre el
Centro de Extensionismo Industrial
(CEI) que comenzó a funcionar en el
mes de mayo en la CIU. El Centro es
una iniciativa conjunta entre el Ministerio de Industria, la Universidad de
la República y la Cámara. Además
cuenta con el financiamiento de la
Agencia Nacional de Investigación
e Innovación.
En esta primera etapa, el CEI se focalizará en las pymes de los sectores
plástico, metalúrgico o alimentario,
interesadas en superar una dificultad
tecnológica o aprovechar una oportunidad de innovación. Su función
es vincular a las industrias con los
instrumentos de apoyo y servicios
existentes. Con la creación del CEI
la industria cuenta con una herramienta utilizada en muchos países
desarrollados de fácil acceso y sin
costo para los industriales.
En materia de seguridad y salud
laboral, hemos incluido un análisis
de la llamada ley de penalización del
empresario en caso de accidentes
laborales, que brinda una perspectiva desde la gestión empresarial.
Por último, recomendamos prestar
atención a los demás temas que
se presentan en este número de
Espacio Industrial que al igual que
los anteriormente mencionados,
contribuyen a una necesaria puesta
al día empresarial.
Buena lectura.
1
SUMARIO
PÁG. 1
Editorial
NOTA DE PORTADA
PÁG. 4
La situación comercial con Argentina
y sus impactos en la Industria Nacional
PÁG. 38
Análisis de la Ley Nº 19.196
(Responsabilidad penal del
empleador por omisión de
la normativa de SST) desde
la perspectiva de la gestión
PÁG. 50
Histórica Misión Empresarial
a Paraguay
PÁG. 52
PÁG. 16
Centro de Extensionismo Industrial: un proyecto
para la industria hecho realidad
PÁG. 20
Continúa el deterioro de la actividad industrial
PÁG. 24
Índice Global de Innovación 2014:
El factor humano en la Innovación
2
Manual para la Certificación
del Componente Nacional
de la Inversión (CNI)
PÁG. 54
Cámara de Industrias
del Uruguay una vez más
muestra su apoyo
al medio ambiente
PÁG. 58
Inmigración Europea,
industrias y corporaciones
en la región, 1870-1914
(Primera parte)
OCTAVA ÉPOCA | AÑO 3 | NO 303 | OCTUBRE 2014
BUZÓN
DEL LECTOR
El Buzón del Lector es una forma de
comunicación directa para recibir
sugerencias y comentarios sobre nuestra
publicación. Los lectores pueden enviar
sus inquietudes a: espacio@ciu.com.uy
NOTA
Las opiniones, entrevistas y la información
incluida en ESPACIO INDUSTRIAL no
expresan necesariamente la opinión
o posición institucional de la Cámara
de Industrias del Uruguay, y son
únicamente responsabilidad de los
autores o entrevistados. Los contenidos
publicitarios son espacios contratados,
no existiendo por parte de la Cámara
de Industrias del Uruguay ningún tipo
de patrocinio, auspicio, ni garantía
con respecto al producto, servicio o
anunciante.
SUSCRIPCIÓN
Por suscripciones a esta revista dirigirse
a: www.ciu.com.uy/suscripcion
Consejo Directivo
Presidente
Ing. Agr. Javier Carrau
Vicepresidente
Sr. Gabriel Murara
Vicepresidente de Desarrollo Institucional
I.Q. Roberto González Gil
Vicepresidente de Micro y Pequeñas Empresas
Sr. Luis Panasco
Secretario
Sr. Juan Carlos De León
Pro-Secretario
Sr. Andrés Fostik
Tesorero
Sr. Enrique Clérici
Protesorero
Sr. José Picorell
Titulares
Sra. Esperanza Romariz
Sr. Eduardo Vanrell
Dr. Juan José Fraschini
Dr. Daniel Rainusso
Sr. Ruben Donnángelo
Sr. Elbio Fuscaldo
Sr. Juan Pablo Speranza
Sr. Nelson Penino
Comisión Fiscal
Titulares
I.Q. Ruben H. Ordoqui
Sr. Washington Corallo
Cr. Ricardo Zerbino
Suplentes
Sr. Delfino Álvarez
Sr. Carlos Cibils
Sr. Rafael Sanguinetti
Suplentes (Respectivos)
Cr. Guzmán Barreiro
Sr. Carlos Calzá
Sr. Álvaro Terra
Ing. Agr. Walter Frisch
Ing. Ramón Cattáneo
Sr. Jacob Stawsky
Sr. Ricardo Kunin
Sr. Eduardo Pietra
Sr. Manuel Romero
Sr. Mario Radesca
Sr. Franscisco Tucci
Redactor Responsable
Sr. Miguel Vilariño
Gerente
Coordinación y supervisión
Dirección de Relaciones Institucionales
Dr. Pelayo Scremini
Sra. Laura Fernández
Sra. Virginia Viviani
Sra. Jimena Ortiz
Producción Ejecutiva
Medios
medioseditores@gmail.com
Director Comercial
Germán Fernández E.
099.453060
german.fernandeze@gmail.com
Diseño y maquetación
Florencia Lista
Ejecutivo de cuenta
Miguel Rocha Hornos
rrpp@ciu.com.uy
www.ciu.com.uy
ISSN: 1510-3595
3
NOTA DE PORTADA
La situación comercial
con Argentina y sus impactos
en la industria nacional1
1. Comercio bilateral
Uruguay - Argentina
a igual período del año anterior, a un
ritmo más acelerado (-17%).
diados de los 90 llegó a representar
en promedio el 1,6% del PIB).
En 2013, las exportaciones uruguayas
de bienes con destino a Argentina, medidas en dólares corrientes, volvieron
a mostrar una nueva caída en relación
al año anterior (-4%), acumulando un
descenso de 18% en el período 20112013. En enero – julio de 2014, las mismas volvieron a descender respecto
Por su parte, se observa una persistente caída en la participación de las
exportaciones de bienes con destino
a Argentina en el Producto Interno
Bruto (PIB) de Uruguay, situándose
dicho ratio en 2013 en el 0,9%, uno
de los niveles más bajos desde que
se constituyó el MERCOSUR (a me-
Otro punto interesante a destacar es
el descenso de la participación de las
exportaciones con destino a Argentina en relación al total exportado por
Uruguay. En este sentido, en 2013, las
ventas externas con destino al mercado argentino representaron el 4,9%,
mientras que a mediados de los 90
Gráfico 1 – Exportaciones uruguayas de bienes con destino a Argentina
(Millones de dólares)
Fuente: Dirección de Estudios Económicos en base a Trademap y BCU
1
Documento elaborado por la Ec. Mag. Valeria Cantera, la Lic. Erika Lanzetta y el Cr. Mag. Sebastián Pérez .
4
Gráfico 2 – Participación de las exportaciones uruguayas de bienes con destino
a Argentina en el PIB uruguayo
Fuente: Dirección de Estudios Económicos en base a Trademap y BCU
Inicio del Mercosur
Gráfico 3 – Participación de las exportaciones con destino a Argentina en el total
de exportaciones uruguayas de bienes
Nota: Exportaciones totales incluyen colocaciones externas de zonas francas
Fuente: Dirección de Estudios Económicos en base a SmartDATA y BCU
Inicio del Mercosur
llegaron a alcanzar el 20% del total
exportado por Uruguay.
Asimismo, la participación en el mercado argentino de las colocaciones externas uruguayas (en relación al total de
importaciones argentinas), continuaron
mostrando una tendencia negativa y
se alcanzó el nivel de participación de
mediados de los años 70 (0,7%). Cabe
mencionar que a inicios de la década
del 90 se alcanzó una participación de
aproximadamente 2%.
Brasil en cambio no tuvo una caída en
el share como Uruguay. El conjunto de
los restantes países de Latinoamérica
tampoco perdió participación en las
importaciones argentinas, a pesar de
que la mayoría de ellos no integra el
MERCOSUR y no tiene las ventajas logísticas de nuestro país. Cabe precisar
que para este análisis se excluyeron las
importaciones de origen chino, ya que
las mismas aumentaron su participación considerablemente en la región
en el período considerado.
En efecto, mientras que la participación de las colocaciones externas
uruguayas con destino a Argentina se
redujo en más de la mitad, Brasil aumentó su participación en 3,4 puntos
porcentuales y el resto de los países
latinoamericanos, en conjunto, alcanzaron un crecimiento de 0,7 puntos
en el share.
5
NOTA DE PORTADA
Gráfico 4 – Participación de las exportaciones uruguayas de bienes en las importaciones argentinas de bienes
Fuente: Dirección de Estudios Económicos en base a Trademap
2%
0,7%
0,7%
0,7%
0,7%
Cuadro 1 – Participaciones de las exportaciones en las importaciones argentinas
(Excluye las exportaciones de bienes de
China con destino al mercado argentino)
Fuente: Dirección de Estudios Económicos en base
a Trademap
Como proveedor de cercanía, tiene
sentido que Uruguay mantenga un
fuerte relacionamiento comercial con
Argentina, incluso considerando que
ambos países conforman un mismo
bloque comercial como es el MERCOSUR. Si bien no es sencillo estimar con precisión cuál hubiera sido
el desempeño comercial de no existir
restricciones al comercio, es claro que
Uruguay no ha logrado aprovechar el
6
máximo potencial del mercado argentino, por el creciente incumplimiento
de los acuerdos comerciales vigentes
por parte de dicho país.
En lo que refiere a las Manufacturas
de Origen Industrial, las colocaciones
externas con destino a Argentina (excluyendo al capítulo 87, donde se clasifican la mayoría de las exportaciones
del sector automotriz) se mantuvieron
estables en 2012 en relación a 2011 y
cayeron 9% en 2013, perdiendo participación en relación al total exportado
de este tipo de bienes por Uruguay
en los últimos dos años.
Por su parte, las importaciones uruguayas de bienes de origen argentino
mostraron un sostenido crecimiento
hasta 2008, a pesar de la desaceleración en los últimos años.
La situación comercial con Argentina
y sus impactos en la industria nacional
Gráfico 5 – Variación de las exportaciones de Manufacturas de Origen
Industrial con destino a Argentina (Excluye capítulo 87)
Fuente: Dirección de Estudios Económicos en base a SmartDATA y CNCE
Gráfico 6 – Participación de las exportaciones con destino a Argentina en el total
de Manufacturas de Origen Industrial exportadas por Uruguay (Excluye capítulo 87)
Fuente: Dirección de Estudios Económicos en base a SmartDATA y CNCE
Uruguay mantiene un importante
déficit comercial con Argentina en
el comercio de bienes (US$ 1.100
millones en 2013). Particularmente en
2013 Uruguay exportó unos US$ 500
millones a ese país, mientras que se
adquirieron bienes a Argentina por
unos US$ 1.600.
Pero lo que es más, computando el
comercio de servicios (en particular el
turismo), también la balanza comercial resulta deficitaria, presentando
un desbalance cercano a los US$ 800
millones, aumentando considerablemente en los últimos dos años, por
la disminución del saldo de la balanza comercial del turismo. En este
sentido, el incremento de gastos de
uruguayos en Argentina, así como la
disminución del gasto de argentinos
en Uruguay, el cual fue motivado por
la pérdida de competitividad y las
restricciones financieras, agudizó el
desbalance comercial.
Otro punto importante a destacar es
que la pérdida de competitividad no
afectó únicamente a los sectores que
destinan parte de su producción al
mercado argentino, sino también a
sectores que venden al mercado interno, por el creciente ingreso de productos competitivos desde Argentina,
lo cual genera un desbalance mayor
en el saldo de la balanza comercial
de bienes.
2
La estimación se realizó asignándole a las exportaciones uruguayas con destino a Argentina a nivel de rama del Código CIIU Rev.3 el crecimiento de las exportaciones uruguayas con
destino a Brasil de esa misma rama.
7
NOTA DE PORTADA
Gráfico 7 – Importaciones uruguayas de bienes de origen argentino
(Millones de dólares)
Fuente: Dirección de Estudios Económicos en base a TradeMAP
Gráfico 8 – Evolución del saldo comercial de bienes y turismo de Uruguay con Argentina
(Millones de dólares)
Fuente: Dirección de Estudios Económicos en base a Trademap y BCU
8
9
NOTA DE PORTADA
2. Consecuencias de las
restricciones comerciales
argentinas en el sector
industrial
Evolución del Índice de Volumen Físico
Fuente: Dirección de Estudios Económicos en base a INE
Las exportaciones a la región y en
particular con destino a Argentina
han representado históricamente una
buena porción de la producción y el
empleo industrial, razón por la cual las
restricciones comerciales impuestas
por Argentina desde ya hace varios
años representaron un impacto muy
negativo para el sector manufacturero
nacional.
Según nuestras estimaciones2, actualmente están involucrados unos
2.500 puestos de trabajo directos en
la fabricación de bienes orientados al
mercado de dicho país, mientras que
de haber existido un crecimiento del
flujo comercial similar al experimentado con Brasil en el período 20082013, la cantidad de trabajadores
involucrados podría haber llegado a
13.000. En efecto, se podría decir que
el sector industrial habría alcanzado
una pérdida potencial de aproximadamente 10.500 empleos por mantener
un comercio plagado de restricciones
durante los últimos años.
Al analizar cuáles fueron los sectores
industriales más afectados en cuanto
al empleo y que venden al mercado
argentino se destacan la fabricación
de prendas de vestir, tejidos de punto,
tejeduría, artículos de papel y cartón,
y plásticos.
En anexo se puede observar el comportamiento de las exportaciones
uruguayas con destino a Argentina
para el período 2007- 1er semestre
de 2014, a nivel de ramas del códi10
Evolución del Índice de Personal Ocupado
Fuente: Dirección de Estudios Económicos en base a INE
Evolución de las exportaciones (Millones de dólares)
Fuente: Dirección de Estudios Económicos en base a SmartDATA
La situación comercial con Argentina
y sus impactos en la industria nacional
Evolución del Índice de Volumen Físico
Fuente: Dirección de Estudios Económicos en base a INE
Evolución del Índice de Personal Ocupado
Fuente: Dirección de Estudios Económicos en base a INE
Evolución de las exportaciones (Millones de dólares)
Fuente: Dirección de Estudios Económicos en base a SmartDATA
11
NOTA DE PORTADA
Evolución del Índice de Volumen Físico
Fuente: Dirección de Estudios Económicos en base a INE
Evolución del Índice de Personal Ocupado
Fuente: Dirección de Estudios Económicos en base a INE
Evolución de las exportaciones (Millones de dólares)
Fuente: Dirección de Estudios Económicos en base a SmartDATA
12
La situación comercial con Argentina
y sus impactos en la industria nacional
go CIIU Rev.3, desagregadas por las
principales subpartidas del Sistema
Armonizado y por empresa.
Seguidamente se muestra la evolución
del Índice de Volumen Físico y del
Índice de Personal Ocupado correspondientes a estos sectores
Tejidos de punto
La producción y el empleo del sector
se han visto significativamente afectados por los problemas comerciales
del mercado argentino.
Hilandería, tejeduría y acabado
El sector ha mostrado un desempeño
muy negativo en los últimos años,
siendo la situación comercial con Argentina uno de los principales causas
de dicho comportamiento.
Prendas de vestir
El importante descenso de la actividad,
así como la destrucción de puestos
de trabajo en el sector en el último
período, obedeció en buena parte a
las restricciones y pérdida de competitividad con el mercado argentino.
Artículos de papel y cartón
Después de haber mostrado un importante dinamismo en la producción y
empleo, el sector comenzó a registrar
un desempeño negativo debido a los
problemas comerciales con Argentina.
Plásticos
La producción y el empleo han verificado un descenso en el último período
con motivo de los problemas comer-
3
4
ciales con el mercado argentino, luego
de haber registrado un importante
dinamismo luego de la crisis del 2002.
Resultados del relevamiento
a empresas afectadas3
a. Metodología y definición de la
muestra
Se creyó oportuno nuevamente tomar
contacto con empresas exportadoras
a Argentina, para relevar el estado actual de la problemática comercial con
dicho mercado. Para la identificación
del universo de empresas industriales
afectadas por las restricciones impuestas por Argentina, se procedió a
analizar las exportaciones con destino
a dicho mercado en el período 1999
– 2013. De ese grupo de empresas se
analizó el comportamiento de las que
superaron en promedio anual exportaciones por US$ 300 mil en el período
mencionado. Finalmente, se creó la
muestra definitiva con la elección de
ciertas empresas representativas que
registraron tasas negativas anualizadas
en el período 2008 - 2013.
Cuestionario:
1. ¿Cómo percibe su relacionamiento
comercial con la República Argentina al momento?
2. ¿Cómo vislumbra este relacionamiento en un futuro?
3. En caso de corresponder ¿Cuenta
con mediciones de su pérdida
de mercado en plaza debido a
comercialización de productos
argentinos?
Otras fuentes consultadas:
AFIP, www.afip.gov.ar
SENASA, www.senasa.gov.ar
Consultoras privadas argentinas
b. Restricciones aplicadas
actualmente por el Gobierno
de la República Argentina en
su política proteccionista para
Importaciones4
A continuación se detallan algunas de
las medidas que exige el Gobierno
argentino para llevar a cabo operaciones de importación y que continúan
vigentes, así como las principales dificultades expresadas por las empresas
antes referidas.
1 DJAI (Declaración Jurada Anticipada de Importación)
El presente régimen de información
alcanza a todas las operaciones de
importación (salvo excepciones como
envío de muestras comerciales, donaciones, entre otras), y la declaración
debe solicitarse por el importador o su
despachante de aduanas, a través del
Sistema MARIA de comercio exterior.
Se debe ingresar la información referente al destino definitivo de la importación para consumo, en forma previa
a la emisión de la Nota de Pedido,
Orden de Compra o documento similar
utilizado para concertar sus operaciones de compras en el exterior.
La encuesta fue realizada en agosto de 2014
El presente resumen se basa en información remitida por un grupo de empresas exportadoras de diversos sectores, consultadas por la Cámara de Industrias del Uruguay en el mes de
agosto de 2014, y en información obtenida en diversos organismos intervinientes en operaciones de comercio exterior en la República Argentina.
13
NOTA DE PORTADA
En la DJAI se deben registrar los siguientes datos:
•
•
•
•
•
•
•
Clave Única de Identificación Tributaria (C.U.I.T.) del importador
y del declarante, en caso de corresponder.
Valor FOB y Divisa correspondiente.
Posición Arancelaria SIM/Código
AFIP.
Tipo y cantidad de unidades de
comercialización.
Estado de la mercadería.
País de origen.
País de procedencia.
De acuerdo a lo dispuesto por la Resolución General N° 2570, los organismos gubernamentales que adhieran al
régimen de DJAI, deberán efectuar las
observaciones electrónicas que correspondan, dentro de las 72 horas de la
oficialización de dicha declaración. De
esta forma, muchos organismos del
Estado pueden frenar el normal curso
de una DJAI.
El referido plazo puede ampliarse
hasta un máximo de 10 días corridos
en caso de que la competencia específica del organismo adherente así
lo amerite.
La DJAI tiene una vigencia de 180 días
desde su oficialización, prorrogables,
de acuerdo con lo señalado por la AFIP
(Administración Federal de Ingresos
Públicos).
En cuanto a esta exigencia, las empresas consultadas destacaron en primer
lugar que este mecanismo representa
la mayor dificultad a la hora de exportar al mencionado país.
14
En este sentido, se ha transmitido la
excesiva demora, tanto en la aprobación del documento (en ocasiones
tratándose de meses o hasta períodos de un año), como la falta de un
criterio unificado ante discrepancias
u observaciones.
Otras ambigüedades destacadas por
los exportadores, refieren a la influencia de la contraparte involucrada en
la importación a la hora de las autorizaciones por parte del organismo de
contralor. Algunas de las empresas
consultadas, informaron que son mucho más viables aquellas aprobaciones
de DJAI en que se encuentran involucradas empresas importadoras “de
gran porte o influencia”.
Adicionalmente, la reciente aprobación de la Instrucción AFIP 959/2014
ha incorporado nuevos controles por
parte de éste y otros organismos, que
pueden extender el plazo actual hasta
10 días adicionales, dilatando más aún
el proceso.
Al respecto, expertos argentinos en
la materia han destacado que la normativa referida, además, introduce
algunas complicaciones en caso de
que el importador desee recurrir a la
Justicia. En este sentido, señalaron
que hasta el momento era viable
iniciar acciones judiciales ante DJAI
“observadas”, en caso de falta de
fundamento jurídico. En cambio, al
día de hoy, la referida Declaración
se categorizaría en un único estado:
“en estudio”, es decir que solamente se podría recurrir a la vía judicial,
sustentándose en la “demora en la
respuesta”, pronunciamientos que según manifestaron estos especialistas,
“son mucho más lentos”.
2 Restricciones en operaciones con
moneda extranjera
Entre las empresas consultadas, una
de las dificultades mencionadas ha
sido la problemática para el cobro
de sus ventas a la República Argentina. Estos inconvenientes se generan
esencialmente debido a la escasez de
divisas liberadas por el Banco Central
Argentino, dadas las restricciones cambiarias impuestas por el Gobierno de
aquel país.
Esta situación, además de dilatar el
cobro de aquellas exportaciones ya
realizadas, provoca una demora en
la concreción de nuevas operaciones
de importación. En este sentido, algunas de las empresas consultadas
han manifestado que los pagos se
vuelven más difíciles de cobrar en
plazos cortos, volviendo al mercado
argentino “aún menos atractivo de lo
que ya es”.
3 Certificacionesdenormas
técnicas
En ciertos casos, y dependiendo del
producto a importar, son necesarias
algunas certificaciones. En este sentido, varias de las empresas consultadas
han expresado que existen organismos
en el vecino país que experimentan
demoras excesivas a la hora de cursar
sus solicitudes.
Un ejemplo lo constituye el INAL
(Instituto Nacional de Alimentos),
organismo que interviene a la hora
de consideración de productos para
consumo humano, y que al día de
hoy presenta un período de trámite
mínimo de 10 días.
La situación comercial con Argentina
y sus impactos en la industria nacional
Otras empresas también han referido
a la intervención del SENASA (Servicio Nacional de Sanidad y Calidad
Agroalimentaria), a través del que
se impone la obligación de certificar
ciertos productos como pallets de
madera. En este caso, el tiempo de
demora depende de si el trámite se
desea realizar en 24, 48 o 72 hs. (cada
opción representa un costo diferente),
de acuerdo con lo relevado.
En este caso, también se agrega una
medida impuesta recientemente, que
implica que antes de exportar la mercadería, se deba enviar el número de
certificado emitido, aumentando aún
más la carga de documentación a
presentar previo al embarque.
Las exigencias expresadas han encarecido la operativa logística de algunas empresas uruguayas, ya que se
ven obligadas a “tener mercadería
parada, en stock” hasta el momento
de la autorización, para su posterior
embarque.
Otras preocupaciones
expresadas por las empresas
consultadas
Trabas portuarias
En lo que refiere a la operativa portuaria, la nueva Reglamentación del
Gobierno argentino, que comenzó a
regir el 7 de noviembre de 2013 y que
ordena que el trasbordo de carga de
5
6
7
exportación de Argentina se efectúe
solo en puertos del MERCOSUR con
los que ese país mantenga acuerdos
marítimos –algo que no sucede con
Uruguay–, ha implicado una disminución de las líneas navieras que arriban
al Puerto de Montevideo y por tanto ha
“encarecido diversas operaciones”, de
acuerdo con algunas de las opiniones
recabadas.
las mencionadas reclamaciones, documentos que concluyen y recomiendan
lo siguiente:
•
De acuerdo con los referidos informes, la Organización Mundial
del Comercio concluye que las
medidas aplicadas por Argentina (prescripciones relacionadas
con el comercio), constituyen una
restricción a la importación de
mercancías y por consiguiente son
incompatibles con el párrafo 1 del
artículo XI del Acuerdo General
sobre Aranceles Aduaneros y Comercio de 1994 (GATT de 1994)6.
•
El procedimiento DJAI, independientemente de si constituye una
licencia de importación, constituye
una restricción a la importación de
mercancías y por consiguiente es
incompatible con el párrafo 1 del
artículo XI del GATT de 19947.
•
El Grupo Especial recomienda
que el Órgano de Solución de
Diferencias solicite a la Argentina
que ponga las medidas incompatibles en conformidad con las
obligaciones que le corresponden
en virtud del GATT de 1994.
Designación de Canal rojo
Otra preocupación manifestada por
algunas empresas consultadas, refiere
a que al momento de exportar a Argentina, se les asigna generalmente
“canal rojo de verificación”, “sin motivo aparente para que se configure
dicha instancia”.
OMC - Recientes informes
del Grupo Especial en la
diferencia sobre medidas de
importación de la Argentina
Cabe destacar que en cuanto refiere a
restricciones aplicadas por el Gobierno
argentino en sus importaciones, en el
año 2012 fueron presentadas ante la
Organización Mundial del Comercio
(OMC), reclamaciones por parte de
la Unión Europea, Estados Unidos y
Japón.
El 22 de agosto del 2014, se publicaron los informes del Grupo Especial de
Solución de Diferencias5, respecto a
www.wto.org/spanish/tratop_s/dispu_s/cases_s/ds438_s.htm
Artículo XI: Eliminación general de las restricciones cuantitativas: 1. Ninguna parte contratante impondrá ni mantendrá -aparte de los derechos de aduana, impuestos u otras cargas- prohibiciones ni restricciones a la importación de un producto del territorio de otra parte contratante o a la exportación o a la venta para la exportación de un producto destinado al territorio
de otra parte contratante, ya sean aplicadas mediante contingentes, licencias de importación o de exportación, o por medio de otras medidas.
Ídem Anterior
15
Centro de Extensionismo
Industrial: un proyecto para
la industria hecho realidad
Uruguay cuenta con una herramienta de apoyo a empresas utilizada
en varios países desarrollados. El
Centro de Extensionismo Industrial
(CEI) comenzó a funcionar en las
instalaciones de la CIU en mayo de
este año. Su actividad permitirá a las
empresas detectar sus dificultades y
oportunidades para innovar, al actuar
como articulador entre las necesidades tecnológicas y de innovación del
sector industrial y la estructura de
conocimientos, apoyos y servicios
existentes.
El origen: construcción
Academia - Industria - Estado
1
Para acceder a la investigación que dio
origen al CEI, “Capacidades, necesidades
y oportunidades de la industria uruguaya
en materia de tecnología e innovación
en los sectores alimentario, metalúrgico y
plástico” escanee el siguiente código QR:
También disponible en: http://www.ciu.
com.uy/Diie/Index.html
16
En los años 2011 – 2012 se realizó un
proyecto de investigación1 cofinanciado por el Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM), la Cámara de
Industrias del Uruguay (CIU) y la Universidad de la República (UdelaR), que
buscó comprender el comportamiento
empresarial referido a la identificación
e incorporación de innovación en tres
sectores de actividad: alimentario,
metalúrgico y plástico.
Guiados por la pregunta, ¿es posible
transformar las necesidades tecnológicas del sector industrial nacional
en demandas específicas que puedan ser abordadas conjuntamente
por los actores del Sistema Nacional
de Innovación (SNI)?, se realizaron
80 entrevistas a empresarios que
representaron el primer paso para
la comprensión de las empresas, su
realidad, expectativas, dificultades y
su conocimiento del estado del arte
en su área de especialidad.
En particular, de las entrevistas surgía
la unanimidad en considerar la tecnología como una variable importante
para la competitividad empresarial. Sin
embargo, la forma en que las empresas
entendían cómo operaba la tecnología
mostraba dos aspectos importantes: 1)
la asimilación del concepto tecnología
de forma casi exclusiva con la compra
de maquinaria y equipamiento, y 2)
la marcada dificultad de las PYMES
para describir en términos tecnológicos ciertos cuellos de botella que
enfrentaban.
A su vez, una proporción significativa
de las empresas entrevistadas (46% de
las pequeñas; 32% de las medianas)
no recurría a recursos externos ante
sus cuellos de botella, y la cuarta parte
de ellas declaraba no haber usado
ningún instrumento de política en los
últimos años.
Es así que con el fin de dar solución
a las necesidades tecnológicas planteadas por las empresas, se creó el
Centro de Extensionismo Industrial
(CEI), una iniciativa conjunta del gobierno (MIEM), la industria (CIU) y la
academia (UdelaR), a través del cual se
detectarán demandas tecnológicas y
de innovación en las PYMES industriales para canalizarlas hacia la estructura
de apoyos, servicios y capacidades de
resolución de problemas existentes.
Sobre el hecho de que el CEI esté
cobijado bajo el techo de la CIU, el
ministro de Industria, Energía y Minería, Roberto Kreimerman, en su visita
al Centro el pasado mes de agosto,
dijo que “es fundamental para que la
relación público-privada, gobiernouniversidad-empresas esté lo más cerca posible de donde está la acción”.
Recientemente se concretó además
el apoyo financiero de la Agencia Nacional de Investigación e Innovación
(ANII) para la realización de Consultas
de orientación Tecno-Competitivas
que llevará adelante el equipo de CEI.
Estas consultas permiten analizar y
generar oportunidades de mejora en
aspectos tecno-competitivos de las
Pymes, inicialmente de los sectores
metalúrgico, plástico y alimentario.
Como afirmó el ministro Kreimerman
en su visita, se trata de “dar soluciones a las empresas y, a su vez, de que
los organismos públicos se enfoquen
correctamente hacia los problemas
que tienen las empresas”.
¿Qué puede esperar un/a empresario/a
del CEI?
La empresa que se acerque al CEI, es
una empresa interesada en superar un
cuello de botella tecnológico, vencer
una barrera de crecimiento o aprovechar una oportunidad de innovación,
cuya vía de solución no tiene plenamente identificada y/o para la cual no
ha podido identificar un instrumento
de apoyo idóneo.
El CEI realizará un diagnóstico de la
empresa con personal capacitado
que puede incluir a un ingeniero o
tecnólogo especializado en el sector
o en la problemática a abordar, un
17
Centro de Extensionismo Industrial
¿CÓMO TRABAJA EL CEI?
CEI
Centro de
Extensionismo
Industrial
Una PYME del sector plástico, La empresa contacta al CEI:
metalúrgico o alimentario quiere
cei@ciu.com.uy
alcanzar mejoras tecnológicas,
Tel: 2604 04 64
de productividad o de procesos
El Centro realizará diagnósticos tecnológicos
en PYMES del ámbito
industrial, con profesionales especializados
en el área problemática
de la empresa y sin costo para el empresario.
Cada diagnóstico será
acompañado de una
propuesta de plan de
acción y, si el empresario decide ejecutarlo, el equipo del CEI
lo acompañará en los
primeros contactos con
los agentes sugeridos
del lado de la oferta de
servicios y apoyos.
18
La empresa y el CEI
revisan y acuerdan el plan
de acción
La empresa decide
qué acciones va a
implementar
El equipo del CEI
elabora un plan de acción
para la empresa
El CEI vincula a la empresa
con los instrumentos de
apoyo y servicios existentes
El equipo del CEI se reúne
con la empresa
El CEI y profesionales
especializados realizan un
diagnóstico de la empresa
Al implementar las
diferentes acciones
la empresa mejora su
rendimiento
El CEI cumple su objetivo: logra la mejora
tecnológica y de conocimiento
de la empresa
experto en aspectos comerciales, un
especialista en los instrumentos de
apoyo existentes y/o un facilitador
con visión empresarial.
El equipo técnico elaborará un informe
sobre la viabilidad tecno-competitiva
de la demanda de la empresa que
comprenda: i) su percepción de la
problemática u oportunidades que
enfrenta; y ii) una propuesta acerca
de cómo encarar esta cuestión con la
oferta especializada de conocimiento
disponible.
sa no se centrará exclusivamente en
la cuestión tecnológica. Las empresas
pueden necesitar una combinación de
servicios tecnológicos y no tecnológicos (gestión de la producción, comercialización, formación). Esto define la
visión amplia de negocio que tiene el
equipo del CEI, asociada a capacidades tecnológicas y comerciales.
En este contexto y de acuerdo a sus
objetivos, el CEI dará preferencia a
las empresas que:
¿A quiénes está dirigido el servicio
del CEI?
–Contemplen cuestiones vinculadas
con mejoras tecnológicas y adopción
de nuevas tecnologías
En principio, las consultas ofrecidas
por el CEI se dirigen a las pequeñas
y medianas empresas industriales
de los sectores metalúrgico, plástico y alimentario.
–Muestren interés en participar en
alianzas o proyectos dirigidos a
aplicar o desarrollar nuevos conocimientos con centros tecnológicos o
universidades
Conforme a las buenas prácticas internacionales, el diagnóstico en la empre-
–Expresen necesidades y metas comunes a varias empresas de un sector,
sea en materia tecnológica (compra
compartida de equipamiento, capacitaciones conjuntas, consorcios tecnológicos o proyectos de innovación),
en el área productiva (desarrollo e
integración de proveedores en cadenas productivas) o en el ámbito
comercial (actividades de promoción
y de venta compartidas, consorcios de
exportación).
En el primer caso, el CEI promueve
la innovación a nivel de la empresa;
en el segundo, la vinculación entre la
oferta y demanda tecnológica; y en
el tercero, la construcción de capacidades de innovación y exportación
colectivas.
Las empresas encontrarán en el CEI
una herramienta que les tenderá puentes entre las demandas específicas
que necesitan resolver y la oferta de
conocimientos, servicios y apoyos que
existen en el país.
¿RECONOCE ALGUNO DE ESTOS PROBLEMAS?
•
•
•
•
•
•
•
•
¿Quiere innovar dentro de su empresa pero no sabe por dónde empezar?
¿Necesita automatizar alguna fase de su proceso productivo?
¿Le faltan recursos financieros para innovar?
¿Le faltan conocimientos específicos?
¿Necesita maquinaria nueva o adaptar la que ya tiene?
¿Le faltan trabajadores capacitados?
¿No conoce el abanico de instrumentos e incentivos existentes?
¿Encuentra trancas burocráticas y/o dificultades con los instrumentos de apoyo existentes?
Información y contacto: Centro de Extensionismo Industrial (CEI) / Av. Italia 6101 - 1er piso / Tel: 2604 0464 int. 175
cei@ciu.com.uy / www.ciu.com.uy/cei
19
Continúa el deterioro
de la actividad industrial1
La industria manufacturera uruguaya
sigue enfrentando una coyuntura desfavorable este año al igual que en el
año 2013. Si bien en los últimos meses
se registró un quiebre en la tendencia
descendente que venía mostrando el
tipo de cambio real, aún continua en
niveles que dificultan la competitividad, en especial en lo que refiere a la
región. A su vez, como sucedió en los
años previos, se volvió a observar una
importante heterogeneidad dentro
del sector, con un elevado número
de ramas industriales que reducen
su actividad.
En el primer semestre del año, la producción industrial (excluyendo a la
refinería de ANCAP y a las principales
empresas instaladas en zonas francas)
cayó 1,1% respecto a igual período de
2013, luego de haber permanecido
estable en 2013 y haber crecido 1,5%
en 2012. La caída en la actividad del
sector obedeció al mal desempeño
de las exportaciones, aunque también
comenzó a observarse una afectación
en las ventas domésticas, con motivo
de la desaceleración de la demanda
interna.
1
Documento elaborado por la Ec. Mag. Valeria Cantera
20
Gráfico 1 – Variación anual de la producción industrial
(Excluye refinería y empresas de zonas francas)
Fuente: Dirección de Estudios Económicos en base al INE
Gráfico 2 – Evolución de las exportaciones en volumen físico
(Excluye refinería y empresas de zonas francas, índice base 2012=100)
Fuente: Dirección de Estudios Económicos
Como se comentó anteriormente, este
comportamiento no fue homogéneo
entre los sectores, verificándose en
varios de ellos situaciones aún más
complejas. Este fue el caso de los
sectores más intensivos en mano de
obra, muchos de los cuales colocan sus
productos principalmente en la región.
A nivel sectorial, se observa un estancamiento en la producción de Alimentos y Bebidas en los últimos dos años.
Sin embargo, al excluir del análisis a la
rama donde se encuentra la empresa
Pepsi, instalada en Zona Franca Colonia, se aprecia que la agrupación
mostró una caía sostenida desde ini-
cios de 2012, frenando esta tendencia
recién a inicios de 2014.
Por su parte, la producción de Textil,
Vestimenta y Cuero continua reduciendo su producción, alcanzando niveles
mínimos en la comparación histórica.
En cuanto a la actividad de la agrupación Madera, Papel e Imprentas,
si bien la misma ha crecido en los
últimos meses, este comportamiento obedeció al buen desempeño de
la producción de UPM, ya que sin
considerar la rama que incluye a esta
empresa, la producción industrial de
la agrupación se encuentra estable
desde hace ya un año.
A pesar de que Químicos y Plásticos
fue una de las agrupaciones con mejores desempeños en los últimos años, a
fines de 2013 comenzó a mostrar una
caída en su producción.
A su vez, si bien en marzo de 2014,
la actividad industrial de Metálicas
básicas y Minerales no metálicos quebró la tendencia descendente que
comenzó en el segundo semestre de
2012, en los últimos meses se observa
una enlentecimiento en el proceso de
recuperación.
Finalmente, Productos metálicos, Maquinaria y equipos volvió a alcanzar los
Gráfico 3 – Evolución de las ventas internas en volumen físico (Excluye refinería, índice base 2012=100)
Fuente: Dirección de Estudios Económicos
21
Continúa el deterioro
de la actividad industrial
Gráfico 4 – Variación del empleo industrial (Excluye refinería)
Fuente: Dirección de Estudios Económicos en base al INE
niveles previos a la crisis internacional
de 2009, en particular impulsado por
el sector automotriz.
En cuanto al empleo, continúa descendiendo el personal ocupado en la
industria, situación que comenzó ya en
2011. En efecto, en el primer semestre
del año el empleo cayó 0,6% si se compara con enero – junio de 2013. Con
este resultado se habrían destruido
el 5% de los puestos de trabajo que
generaba la industria en 2011.
Gráfico 5 – Índice de inversión en maquinaria y equipos en la industria
(Excluye refinería y zonas francas, base 2004=100)
Fuente: Dirección de Estudios Económicos
Este escenario de estancamiento
prolongado del sector y de magras
perspectivas para los próximos meses,
se reflejó en el comportamiento de la
inversión, ya que el Índice de Inversión
en Maquinaria y Equipos (IMEQ) de la
industria disminuyó 37% en el segundo
trimestre del año en comparación con
igual período del año anterior. De
esta forma se confirmó la tendencia
decreciente del indicador, al verificar el
tercer trimestre de caída consecutiva.
Este comportamiento de la inversión
resulta esperable no solo por las magras perspectivas de crecimiento de
la producción, sino también debido a
que la industria transita por un período
de elevada capacidad ociosa, o lo que
es lo mismo, por bajos índices de utilización de su parque de maquinarias.
22
Gráfico 6 – Evolución de la utilización de la capacidad instalada en la industria (Excluye refinería)
Fuente: Dirección de Estudios Económicos
En linea con lo anterior, las expectativas empresariales de los industriales
respecto a la economía y a la propia
empresa continúan en terreno negativo, lo que implica que las respuestas
negativas superan a las positivas.
A modo de síntesis
El desarrollo del sector industrial viene mostrando síntomas de estancamiento desde hace ya algunos años,
que se reflejan en la evolución de la
producción medida en volúmenes
físicos, las ventas al exterior y el nivel
de empleo. En 2014 el estancamiento
pasó a transformarse en un descenso
de la actividad.
Gráfico 7 – Expectativas empresariales industriales respecto a su propia
empresa (% de respuestas positivas vs negativas)
Fuente: Dirección de Estudios Económicos
Dentro de los factores que explican
dicha situación se encuentran: la persistencia de elevados costos de producción (mano de obra, transporte,
energía), la pérdida de competitividad
con nuestros principales socios comerciales, favorecida por un tipo de cambio que está distante de sus niveles
de equilibrio, las crecientes barreras a
la entrada de productos industriales a
Argentina, y la débil recuperación de
las principales economías.
23
Índice Global de Innovación
2014: El factor humano en
la Innovación1
El Índice Global de Innovación (IGI),
elaborado por la Universidad Cornell,
la escuela de negocios INSEAD y la
Organización Mundial de la Propiedad
Intelectual (OMPI), es un indicador que
intenta capturar los aspectos multidimensionales de la innovación, considerada una herramienta clave para
promover el crecimiento económico
y el bienestar de los países. Para su
construcción, adopta el concepto de
innovación en sentido amplio que
establece el Manual de Oslo, publicado por la Oficina de Estadística de
la Comunidad Europea (EUROSTAT) y
la Organización para la Cooperación
y el Desarrollo Económico (OCDE):
“La innovación es la introducción de
un nuevo o significativamente mejorado, producto (bien o servicio),
de un proceso, de un nuevo método
de comercialización o de un nuevo
método organizativo, en las prácticas
internas de la empresa, la organización
del lugar de trabajo o las relaciones
exteriores.”
El IGI incorpora nueva información a
través de los años, a medida que los
países van ampliando sus estadísticas
sobre innovación, así como perfeccionando las diferentes variables que lo
componen. En 2014, el IGI incluye un
total de 143 países o economías que
representan el 92,9% de la población
24
mundial y el 98,3% del PIB mundial (en
dólares corrientes). La temática central
del informe del presente año se basa
en el “Factor Humano en la Innovación”, explorando el rol que individuos
y equipos de personas desempeñan
en los procesos de innovación.
Las 84 variables que comprenden el
índice están organizadas en 21 subpilares que se agrupan, a su vez, en 7
grandes pilares, de los cuales 5 capturan los elementos determinantes de las
actividades de innovación (Insumos de
la Innovación) y los 2 restantes refieren
a los resultados de la innovación en la
economía (Productos de la Innovación).
El IGI se construye como un promedio
simple del puntaje obtenido por los 2
sub-índices (Insumos y Productos de
la Innovación).
Además, se elabora el Ratio de Eficiencia de la Innovación como la relación
entre los esfuerzos y los resultados
que una economía obtiene de las actividades de innovación.2
1
Documento elaborado por el Ec. Mathias Cardarello.
2
Para conocer en detalle las variables que componen el
Índice Global de Innovación 2014 ver Anexo.
Principales resultados3
Al igual que en las últimas ediciones,
se verifica una relativa estabilidad en
los primeros lugares del ranking del
IGI, con excepción de Luxemburgo
que en 2014 se ubicó dentro de las
diez economías más innovadoras,
desplazando a Irlanda de la décima
posición. Suiza mantiene el liderazgo en innovación, seguido por Reino
Unido y Suecia, que intercambiaron
sus posiciones respecto a 2013. Por
su parte, Finlandia registró el mayor
crecimiento y reingresó a las cinco
economías más innovadoras, según
los resultados del IGI 2014.
Si bien los países más innovadores
se caracterizan por tener un alto nivel
de ingresos4, aún existen economías
de elevados ingresos que no logran
ubicarse en los primeros lugares del
ranking, lo cual refleja el carácter multidimensional que tiene la innovación.
Los resultados del IGI 2014 también
confirman la brecha existente entre
los líderes en innovación y el resto
de las economías, particularmente
3
4
En 2014 se incluyeron 143 países en el ranking y 142 en
2013.
Según la Clasificación por Grupo de Ingreso del Banco
Mundial (Julio 2013).
Gráfico 1 - Estructura del Índice Global de Innovación 2014
Fuente: Cornell University, INSEAD y WIPO
25
Índice Global de Innovación 2014:
El factor humano en la Innovación
Cuadro 1 - Economías más innovadoras
Fuente: Cornell University, INSEAD y WIPO
entre los 25 países más innovadores
y el resto de las economías de alto
nivel de ingresos. Cuanto menor es
el nivel de ingresos, los puntajes de
los países se vuelven más homogéneos, lo cual estaría indicando que
pequeñas mejoras en el IGI pueden
tener un gran impacto en la posición
de las economías menos avanzadas.
Las brechas en la innovación también
persisten entre las diferentes regiones
así como dentro de ellas, siendo el
puntaje promedio de América del
Norte (58,11) y Europa (47,23) muy
superior a los registrados por África
del Norte y Asia Occidental (35,73), y
América Latina y el Caribe (32,85). Esto
se debe a que los resultados de las
políticas de inversión en capital humano y mejora del contexto institucional
de las economías menos desarrolladas
tardan años en aparecer, por lo que
un mayor impulso a la innovación se
vuelve necesario para lograr alcanzar
a las naciones más ricas.
Además, la mayoría de los países
que conforman el grupo conocido
como “BRIC” ha progresado en el
ranking del IGI, aunque presentando
una mayor heterogeneidad, debido
al excelente desempeño de China,
que aumentó 6 posiciones en 2014
hasta ubicarse en el puesto 29º, y el
rezago mostrado por India, pasando
del lugar 66º en 2013 al 76º en 2014.
Por último, se destaca un grupo de
economías de África Subsahariana que
ha escalado importantes posiciones
en el IGI, de las cuales cinco (Burkina
Faso, Gambia, Malawi, Mozambique y
Ruanda) entraron al grupo de “apren-
Gráfico 2 – Relación puntaje IGI 2014 y PIB per cápita *
(PIB per cápita en dólares constantes ajustados por PPA)
*Luxemburgo y Qatar fueron eliminados por problemas de escala
Fuente: Cornell University, INSEAD y WIPO
26
dices de innovación”5 por su mejora
en los pilares Capital humano e investigación y Sofisticación del mercado.
Cuadro 2 - Economías más innovadoras de América Latina
y el Caribe (Posiciones en el Índice Global de Innovación)
Fuente: Cornell University, INSEAD y WIPO
La innovación en América
Latina y el Caribe
A nivel regional, Barbados se consagró como el país más innovador en
2014, aumentando 6 posiciones hasta
alcanzar el puesto 41º en el IGI. Sus
fortalezas se encuentran en los Insumos de innovación, principalmente
en el pilar Sofisticación del mercado
donde se ubica quinto a nivel mundial.
Por su parte, Chile continúa siendo la
segunda economía más innovadora
de América Latina y el Caribe, seguida por Panamá y Costa Rica, que se
vio desplazada a la cuarta posición
regional tras caer dieciocho lugares
en el IGI 2014. La lista es completada por Brasil, México, Colombia y
Argentina, los cuales se ubican en la
primera mitad del ranking. Por otro
lado, los países más rezagados son El
Salvador, Bolivia, Ecuador, Honduras,
Venezuela y Nicaragua, que están por
fuera de los 100 primeros puestos del
ranking global.
Además, se destaca que ninguna economía de la región se ubicó entre los
“aprendices de innovación” y ocho
países tuvieron un desempeño inferior
al esperado dado su PIB per cápita
(Honduras, El Salvador, Uruguay, Nicaragua, Argentina, Ecuador, Trinidad
y Tobago, y Venezuela).
5
Las economías que logran unos resultados superiores por lo menos en un 10% a los de otros países
equiparables por su nivel de PIB reciben el nombre de
“aprendices en innovación” o “innovation learners”.
Resultados en Uruguay
Luego de ubicarse entre los países
más innovadores de América Latina y
el Caribe en 2013, gracias al impulso
dado a las actividades de ciencia,
tecnología e innovación en los últimos
años, Uruguay continúa presentando
debilidades que le impiden tener una
mejor posición en el IGI, acorde a los
países con nivel de ingreso similar.
En el último informe, nuestro país ha
perdido veinte lugares en el ranking
global de innovación, ocupando actualmente la posición 72º.
Dentro de las dificultades que tiene
Uruguay se destacan el escaso desarrollo del mercado financiero (crédito
de las instituciones de microfinanzas,
27
Índice Global de Innovación 2014:
El factor humano en la Innovación
Cuadro 3 – Debilidades de Uruguay
Fuente: Cornell University, INSEAD y WIPO
capitalización bursátil, valor de las
acciones negociadas, intensidad de
la competencia local), baja inversión
en I+D por parte de las empresas,
escasos vínculos de innovación e ingresos por regalías y derechos de
licencias, y un bajo nivel de expor-
28
taciones de servicios audiovisuales.
Además, persisten deficiencias a nivel
de capital humano, debido al nivel del
gasto público en educación media por
alumno, un puntaje insuficiente en las
pruebas PISA y el bajo porcentaje de
graduados en Ciencias e Ingeniería.
Cuadro 4 – Fortalezas de Uruguay
Fuente: Cornell University, INSEAD y WIPO
Por otro lado, según el IGI 2014, las
fortalezas de nuestro país radican
en su estabilidad política y libertad
de prensa (Instituciones), la relación
alumno/profesor en secundaria, esperanza de vida escolar y porcentaje
de inscriptos en educación terciaria
(Capital humano e investigación), el
consumo de energía como porcentaje
del PIB (Infraestructura), la certificación
de calidad ISO 9001 (Producción de
conocimiento y tecnología) y un conjunto de indicadores correspondientes
al pilar Producción creativa (registros
de marcas por residentes, dominios
con código de país de nivel superior
y ediciones mensuales de artículos de
Wikipedia).
29
Índice Global de Innovación 2014:
El factor humano en la Innovación
Gráfico 3 – Evolución de Uruguay
*Disponible a partir de 2010
Fuente: Cornell University, INSEAD y WIPO
Con respecto al Ratio de Eficiencia,
éste debe medirse conjuntamente
con el resto de los indicadores de
innovación, pues una mayor eficiencia
puede ser el resultado de una baja
puntuación en sub-índice Insumos de
Innovación. Uruguay posee una Ratio
de Eficiencia de 0,70, al igual que las
demás economías latinoamericanas
con igual nivel de ingreso (Barbados
y Chile), excepto Trinidad y Tobago
que presenta un puntaje menor (0,60).
Por último, vale destacar que en el
único pilar donde Uruguay mejoró
su posición respecto al año anterior
fue Capital humano e investigación,
ocupando el lugar 67º a nivel mundial.
30
La importancia del capital
humano en la innovación
La necesidad de entender el rol que
juegan los individuos y los equipos en
los procesos de innovación ha llevado
a centrar el reporte del Índice Global
de Innovación 2014 en la importancia
del factor humano. En este sentido, se
señala que la presencia de mano de
obra calificada, la retención y captación de talentos, así como la movilidad
de personas con un alto grado de
formación, son aspectos relevantes
para promover la innovación.
Las economías menos avanzadas se encuentran atrapadas en un círculo vicioso,
debido a que su nivel de desarrollo no
proporciona los incentivos suficientes a
la población joven para elevar su nivel
educativo, lo que limita las perspectivas de crecimiento del país. A su vez,
se constata que los ciudadanos más
educados tienen un mayor éxito en las
economías de alto nivel de ingreso al
momento de aprovechar las oportunidades del mercado y los negocios,
para realizar actividades de innovación.
Por tanto, comprender la importancia
del factor humano en la innovación
es esencial para la realización de
políticas nacionales y locales que
contribuyan a promover el desarrollo
económico.
Anexo
Cuadro 1 – Resultados de Uruguay (Índice Global de Innovación 2014)
*Puntaje (0-100) o valor del indicador.
Fuente: Cornell University, INSEAD y WIPO
31
Índice Global de Innovación 2014:
El factor humano en la Innovación
32
33
Índice Global de Innovación 2014:
El factor humano en la Innovación
Gráfico 1 – Comparaciones de Uruguay con líderes en innovación de la región
(Puntaje en el Índice Global de Innovación)
Fuente: Cornell University, INSEAD y WIPO
34
Gráfico 2 – Comparaciones de Uruguay con promedio regional2 y otras economías
(Puntaje en el Índice Global de Innovación)
Fuente: Cornell University, INSEAD y WIPO
2
Incluye: Argentina,
Barbados, Bolivia,
Brasil, Chile,
Colombia, Costa
Rica, República
Dominicana,
Ecuador, El Salvador, Guatemala,
Guyana, Honduras,
Jamaica, México,
Nicaragua,
Panamá, Paraguay,
Perú, Trinidad y
Tobago, Uruguay y
Venezuela.
35
Índice Global de Innovación 2014:
El factor humano en la Innovación
Gráfico 3 – Evolución de los líderes en América Latina y el Caribe2 (Posiciones en el Índice Global de Innovación)
*Disponible a partir de 2013
Fuente: Cornell University, INSEAD y WIPO
2
En 2014 se incluyeron 143 países en el ranking, 142 en 2013, 141 en 2012, 125 en 2011, 132 en 2010, 130 en 2009 y 107 en 2008.
36
37
Análisis de la Ley No 19.196
(Responsabilidad penal del empleador
por omisión de la normativa de SST)
desde la perspectiva de la gestión
En el siguiente trabajo analizamos
cómo una gestión responsable en
materia de Seguridad y Salud en el
Trabajo, es la mejor forma, no solo de
prevenir los riesgos sino de protegerse
ante la responsabilidad penal objetiva1.
I)
Introduccion
y antecedentes
de la Ley 19.1962
El 18 de marzo del corriente año y por
16 votos contra 13 de la oposición,
finalmente el Senado le dio sanción
definitiva al proyecto ahora convertido
en ley. La llamada “ley Sunca” tuvo no
obstante, y a pesar de su aprobación,
algunas advertencias de la propia bancada oficialista en cuanto a dudas e
incluso opiniones críticas respecto a
posibles “vulnerabilidades”.
Este tema comenzó a tratarse a mediados del 2010 en la Comisión de
Legislación del Trabajo de Diputados
impulsado por distintos sectores del
PIT CNT. Inicialmente tuvo la oposición
del sector empresarial, no en cuanto
a la finalidad o propósito del mismo
-obviamente- ya que se impulsaba el
proyecto para proteger la vida, la seguridad y la salud de los trabajadores,
sino en cuanto al alcance conceptual
o redacción de algunas cláusulas, lo
que también tuvo el cuestionamiento
técnico de gran parte de la cátedra
de Derecho Penal y Derecho Laboral
respecto fundamentalmente a la tipificación del delito “de peligro”, entre
otros aspectos.
1
2
Autor: Dr. Raúl Damonte Viroga (representante empleador en el Consejo Nacional
de Salud y Seguridad en el Trabajo, por la CIU)
www.parlamento.gub.uy/leyes/AccesoTextoLey.asp?Ley=19196&Anchor=
38
Éste precisamente es uno de los principales problemas de la ley. No la finalidad de la misma como se dijo, sino
la “infeliz técnica legislativa” como
han dado en llamar algunos especialistas, al hecho de que -según éstosno se agrega nada al régimen penal
vigente sino que reitera cuestiones
que dicho ordenamiento jurídico ya
regula y resuelve. El debate se centra
en la penalización del empleador por
incumplimiento de la normativa de
seguridad cuando debería focalizarse en la prevención de los riesgos.
Y decimos que esta ley no agrega
nada puesto que el régimen penal
ya establecía normas aplicables en
caso de daños (lesión o muerte) a los
trabajadores a consecuencia de un
proceder negligente o imprudente del
empleador. La diferencia del régimen
general respecto a esta norma, es que
ésta ley no responsabiliza penalmente
al empleador por un daño concreto
sino por poner en peligro la vida, la
salud o la integridad física del trabajador, constituyendo una verdadera
innovación en la materia.
Sin embargo, los legisladores que
impulsaron el proyecto, se centraron
precisamente en ese aspecto, el delito
de peligro, el cual finalmente quedó
plasmado en el art. 1 de la Ley, para
-según ellos- crear conciencia de prevención del delito, así como ocurre en
España, Inglaterra o Italia. Lo que ocurre es que en esos países, entre otros,
además del delito de peligro, existen
otros mecanismos de protección de la
vida o la seguridad de los trabajadores como la concientización sobre el
tema, la capacitación, los controles y
fiscalización del Ministerio de Trabajo,
el trabajo conjunto, comprometido y
sistematizado de los actores sociales,
las distintas formas de gestión del
riesgo en las áreas de seguridad y
salud laboral, etc. en cuyo contexto, la
responsabilidad penal es solo uno de
los aspectos. A nuestro criterio, está
bien que «por algo se empieza», pero
para proteger derechos fundamentales
como la vida, la salud o la integridad
física, no es razonable comprometer
otro como lo es el derecho a la libertad
el cual está en juego cuando se puede
tipificar una conducta que aunque
no cause un daño efectivo, tenga la
potencialidad de causarlo. Es más, la
responsabilidad objetiva significa que
se puede ser responsable sin ni siquiera tener conocimiento o intensión de
poner en peligro o generar un daño.
Pero por otro lado también es importante tener en cuenta que los datos
de la siniestralidad en nuestro país son
preocupantes. La llamada «crónica
roja» que muchas veces pasa desapercibida por la falta de información,
muestra que según los últimos datos
del BSE (2013) se registran 54.000
accidentes por año (tomando los que
han sido denunciados ante ese organismo), aumentando un 5% del último
registro en el 2010; 50 muertes en
39
Análisis de la Ley No 19.196
el año, lo que significa 1 muerte por
semana; de los 54.000 accidentes,
700 derivan en incapacidades graves
o permanentes. Por su parte el BPS
paga más de 20.000 pensiones por
incapacidades graves derivadas de
accidentes de trabajo o enfermedades
profesionales.
Con estos antecedentes se aprobó
una ley, la cual compartimos en cuanto al objetivo enunciado de reducir
la siniestralidad laboral que traiga
consecuencias de lesiones graves o
muertes de trabajadores, pero que
en su texto, no cumple con dicho
principio ya que ni establece condiciones de prevención, análisis de
riesgos, formación y capacitación,
sistemas de gestión, etc., sino que
se limita a crear el delito de peligro
(por omisión del cumplimiento de la
normativa de Salud y Seguridad en el
Trabajo, en adelante SST), modificar
el seguro obligatorio y monopólico
de accidentes de trabajo a cargo
del BSE y a alterar sustancialmente
la estructura del proceso penal en
nuestro país, al ampliar el concepto
de denunciante a «cualquier persona»
y además facultando a éstos a acceder
al expediente, producir prueba, etc.
lo que además modifica el concepto de secreto del pre-sumario en el
proceso penal.
II) Análisis del texto
art. 1: “El empleador, o en su caso
quién ejerciendo efectivamente en su
nombre el poder de dirección en la
empresa, no adoptaren los medios de
resguardo y seguridad laboral previstos en la ley y su reglamentación, de
forma que pongan en peligro grave y
concreto la vida, la salud o la integri40
dad física del trabajador, serán castigados con tres a veinticuatro meses
de prisión”.
El primer tema a considerar es que
la ley no expresa nada respecto al
alcance del concepto “empleador”,
es decir respecto a quién se considera
sujeto activo. En efecto, si se trata de
personas físicas el tema no ofrece dificultades pero si estamos ante personas
jurídicas habría que ser muy preciso en
cuanto a su delimitación: directores de
sociedades anónimas, administradores
de SRL, gerentes generales, director
de un centro educativo, responsable
de Seguridad Industrial, etc., para
determinar a quién es aplicable la
responsabilidad penal. Tampoco se
aclara, pero suponemos que incluye
tanto a empleadores públicos como
privados. No hay dudas que están
incluidos quienes contratan servicio
doméstico, los administradores o copropietarios de un edificio, el dueño
del taxi. Surge de los antecedentes
parlamentarios que el empleador, en
tanto responsable de la organización
del trabajo, lo es también de garantizar de modo eficaz, el derecho a la
seguridad laboral, por tanto es “deudor de seguridad” en relación a los
trabajadores que se encuentran bajo
su subordinación y dependencia.
No incluye a los delegados obreros
de seguridad (Decreto 291/007), a los
sindicatos, a los profesionales independientes que no actúen en relación
de subordinación con la empresa o
jerarcas que no tengan relación directa
o tomen decisiones en materia de SST
y en general a todos aquellos que
actúen fuera de la relación de dependencia (trabajadores independientes,
contratos de arrendamiento de servi-
cios o que no actúen en nombre del
empleador ni ejerzan en su nombre
el poder de dirección).
cargos que tengan la responsabilidad
de tomar decisiones respecto a temas
de SST.
“...o quién ejerciendo efectivamente
en su nombre el poder de dirección”:
este concepto incluye no solo a los
representantes legales de la persona
jurídica, o al empleador persona física, sino también a los representantes
legales o estatutarios o apoderados,
así como aquellos jefes o gerentes
que ejerzan el poder de dirección
de la empresa o bien que se trate de
Desde el punto de vista de los parlamentarios que impulsaron el proyecto,
hoy ley, esta obligación de protección, o “carga de seguridad” para el
empleador, surge del hecho de que
la seguridad laboral y el derecho a la
protección contra accidentes de trabajo o enfermedades profesionales,
en tanto derechos fundamentales,
están íntimamente relacionados con el
concepto de OIT de “trabajo seguro
= trabajo decente” y trabajo decente
es sinónimo de trabajo en condiciones de equidad, libertad, seguridad
y dignidad humana (Programa de Seguridad y Salud en el Trabajo y Medio
Ambiente, OIT, Safework), concepto
que por otra parte, compartimos y
que supera el enfoque tradicional de
tener como objetivo, cero accidente.
Para garantizar de un modo eficaz ese
derecho a la seguridad laboral, la ley,
según sus propulsores, se ha basado
41
Deterioro de los indicadores
Análisis de la Ley No 19.196
de competitividad del Uruguay
en el “delito de peligro”, peligro como
“alta probabilidad de un daño”, por
tanto la forma de protección no es la
de reprimir la conducta dolosa que
cause un daño efectivo sino aquella
que tenga la potencialidad de causarlo. En el delito de peligro se castiga
la acción peligrosa y no el resultado,
basta que se ponga en riesgo el “bien
jurídico tutelado” en este caso, la
vida, la salud o la integridad física del
trabajador (art. 1), aunque se trate de
una mera posibilidad y no de un daño
concreto o efectivo.
De lo anterior también se desprende
la “responsabilidad objetiva” del empleador, otra de las creaciones de este
texto legal, por la que el empleador es
responsable por el solo hecho de serlo,
no por el resultado e independientemente de que haya tenido conocimiento ni siquiera intención de provocar el
daño. Discrepamos de plano con este
concepto de que el empleador puede
llegar a ser responsable “por lo que es
y no por lo que hace”.
Hay que aclarar no obstante, que si
bien la responsabilidad objetiva en
el delito de peligro (presunción de
culpa) implica la potencialidad de
un daño y no el daño efectivo, esa
responsabilidad no es automática,
sino que requiere de tres condiciones:
la primera es probar que la persona
es “el empleador”, la segunda que
no cumplió (omitió) con las medidas
de protección laboral previstas en
la normativa y su reglamentación y
la tercera probar que ese incumplimiento fue el que puso en peligro
grave y concreto la vida, la salud o
la integridad física del trabajador (el
bien jurídico tutelado). Dicho de otro
modo, para exonerarse de la respon42
sabilidad, se deberá probar ante el
Juez Penal que se adoptaron todas
las medidas de seguridad necesarias
para evitar la puesta en peligro de
la vida, la salud o la integridad física
del trabajador.
Art. 2. “Modíficase el art. 7 de la Ley
16.074 del 10 de Octubre de 1989, el
que quedará redactado de la siguiente
manera:
Art. 7: las personas amparadas por la
presente ley y, en su caso, sus derechohabientes, no tendrán más derechos
como consecuencia de accidentes de
trabajo y enfermedades profesionales
que los que ella les acuerda, a no ser
que en éstos haya mediado dolo o
culpa grave por parte del patrono en
el incumplimiento de normas sobre
seguridad y prevención.
Acreditada por el patrono la existencia
del seguro obligatorio establecido
por esta ley, la acción deberá dirigirse
directamente contra el BSE, quedando
eximido el patrono asegurado de toda
responsabilidad y siendo inaplicables,
por lo tanto, las disposiciones del
derecho común. Todo ello sin perjuicio de la excepción establecida en el
inciso anterior.
Si hubiera mediado dolo o culpa grave del empleador en el incumplimiento de normas sobre seguridad
y prevención, éste deberá reparar
íntegramente el daño causado, en
todo cuanto no hubiere sido cubierto
por el seguro de conformidad con las
disposiciones de la presente ley. En
este caso además, el Banco excluirá
el siniestro y recuperará los gastos
generados por la asistencia médica
prestada y las sumas de dinero ne-
cesarias para atender la totalidad de
las indemnizaciones previstas en la
presente ley.
Constatado el dolo o la culpa grave
del empleador en el accidente del
trabajo o enfermedad profesional, los
funcionarios actuantes del BSE deberán dar cuenta de tal circunstancia al
Inspector General del Trabajo y de la
Seguridad Social, quién deberá bajo
su estricta responsabilidad funcional,
denunciar ante el Juzgado competente en materia penal, los hechos que
configuren un presunto delito contra
la vida o la integridad física de los trabajadores, con remisión de testimonio
de los antecedentes administrativos
disponibles”.
En este articulo aparece un cambio significativo en lo relacionado al seguro
obligatorio que debe ser contratado
con el BSE en mérito a lo dispuesto por
la Ley 16.074. En efecto, en la redacción anterior el BSE tenía la facultad
de repetir contra la empresa gastos
asistenciales, eventuales daños y perjuicios, indemnizaciones, etc. (decía
“podrá...”) en caso de comprobarse
dolo o culpa grave, aún teniendo el
seguro contratado. En la nueva redacción el empresario es responsable, no
es opcional del BSE accionar contra el
empresario, sino que es el empresario
el directamente responsable y deberá
reembolsarle al BSE todos los gastos
en los que se hubiere incurrido por
el accidente. Dice “deberá reparar
íntegramente el daño....” y además
el BSE deberá dar cuenta a la Inspección General del Trabajo y Seguridad
Social a efectos de que ésta haga
la denuncia ante el Juzgado Penal
correspondiente.
43
Deterioro de los indicadores
Análisis de la Ley No 19.196
de competitividad del Uruguay
Art. 3. “Modíficase el art. 83 del Código de Proceso Penal, Decreto Ley
15.032 del 7 de Julio de 1980, el que
quedará redactado de la siguiente
manera:
Articulo 83 (Del denunciante). Es denunciante toda persona que comunica
al juzgado competente la noticia de
hechos que, a su juicio, constituyen
delito.
La denuncia deberá ser presentada
por escrito en el que se relatarán los
hechos y se agregarán los elementos
de prueba de que se disponga, así
como la solicitud de su diligenciamiento si correspondiere.
El damnificado, el denunciante y el
tercero civilmente responsable, tendrán acceso al expediente durante
todo el desarrollo del pre-sumario, y
podrán proponer el diligenciamiento
de pruebas”.
Este artículo amplía el concepto de
denunciante, puede hacer la denuncia
cualquier persona cuando a “su juicio” exista un delito de peligro, pero
además, no solo incluye la denuncia
sino que faculta a los denunciantes
a iniciar el expediente, acceder al
mismo, producir prueba, etc. modificando sustancialmente la esencia del
proceso penal, es decir, el secreto del
pre-sumario.
III) Reflexiones y
comentarios acerca
de la Ley
Se comparte la intencionalidad en la
búsqueda de reducir los índices de
siniestralidad y accidentes y mejorar
44
las condiciones de trabajo, pero se erró
el camino. Ese objetivo no se logra
buscando culpables sino generando
mecanismos de prevención eficientes
y seguros, educando, capacitando,
comprometiendo a todos los actores,
no a través de infundir temor o presumiendo que el empleador es siempre
el primer y único responsable.
Si la voluntad de los parlamentarios
del oficialismo fue la de realizar una
norma preventiva, lo cual es totalmente compartible, por qué se apuntó
solo a la figura del empleador o de
quién en su nombre ejerza el poder
de dirección? Se deja afuera a otros
actores del sistema como funcionarios públicos, delegados sindicales,
trabajadores, profesionales, etc. que
pueden incurrir en la conducta típica
pero se duda si están incluidos en el
concepto de sujeto activo.
Partiendo de la base que todos compartimos la necesidad de mejorar las
condiciones de trabajo, la siniestralidad
y en general el concepto de trabajo
seguro o trabajo decente, que incluye
como vimos, no solo el concepto de
cero accidentes sino la garantía de un
trabajo digno, seguro, libre de riesgos
o con riesgos controlados, etc., el camino de la ley no garantiza nada. En
efecto, como sabemos en la realidad
del mundo del trabajo es imposible
partir de la premisa que el empleador
tiene siempre el control de todo lo que
acontece en la empresa y por ende,
haciéndolo responsable se resuelve el
tema. Esto no solo no es cierto sino que
es totalmente injusto e ineficaz, puesto
que en toda empresa hay decenas de
personas que toman decisiones en
temas de SST independientemente de
que ejerzan el poder de dirección. Es
sabido que los trabajadores, los delegados de seguridad, el propio sindicato, pueden ante ciertas circunstancias
tomar decisiones respecto a procesos,
operaciones, tareas, etc. en función
del rol que cumplen en el área de SST,
por la dinámica de las relaciones laborales o porque el caso así lo amerita.
Este intercambio que muchas veces es
producto del acuerdo o de los propios
mecanismos de participación, demuestra que no siempre el empleador es el
único y último responsable, sino que
este tema de la SST es producto de
un trabajo compartido e involucra a
muchas personas en la organización.
La tarea de prevención de riesgos
laborales es multidisciplinaria, por
tanto debe involucrarse a todos los
que cumplen un rol en el sistema:
técnicos prevencionistas, delegados
de seguridad, sindicatos, médicos y
otros especialistas, etc. Por otra parte,
el abordaje del tema de la SST debe
ser integral partiendo de políticas nacionales que induzcan a trabajar en
forma preventiva, en esta temática
los resultados se obtienen convenciendo y no obligando, debe existir
de base, un cambio cultural. ¿Cómo
hace el empleador para asegurarse
que el trabajador use los elementos
de protección personal (EPP) en todo
momento? para protegerse, para cuidarse. La prevención es el resultado
del diálogo, de la educación, de la
gestión conjunta y comprometida, no
45
Análisis de la Ley No 19.196
de infundir temor o buscar culpables.
Convengamos por último que el objetivo de bajar la siniestralidad es compartido por todos, pero el camino
elegido con la Ley 19.196 no ha sido
el más adecuado. Hay que disponer de
políticas nacionales como se ha dicho;
de procedimientos centralizados entre
los distintos organismos competentes
(BSE, BPS, IGTSS, MSP) los cuales
deberían actuar coordinadamente y
no como hasta ahora que se reciben
inspecciones simultáneas de varios de
ellos por el mismo tema, los controles
administrativos y trámites no están
centralizados, no existe información ni
estadísticas oficiales (para tomar decisiones y planificar, se necesita información); se ha avanzado en la negociación
tripartita sobre aspectos de SST tanto
a nivel de Convenios Colectivos como
en ámbitos más formales, ejemplo el
Consejo Nacional de Salud y Seguridad en el Trabajo (CONASSAT), del
cual surgen instancias de participación
como las bipartitas de SST en las empresas o las Tripartitas a nivel sectorial
(ref. Decreto 291/07 reglamentario del
Convenio Internacional de Trabajo
Nro. 155) que luego van quedando
por el camino o se instalan y no tienen
continuidad -salvo excepciones- todo
lo cual refleja falta de control y seguimiento por parte de las autoridades,
falta de responsabilidad y compromiso
de los actores sociales y en definitiva,
demostrando que se debe empezar
por sensibilizar, capacitar, promover
el cambio cultural que involucre a los
empleadores y también a los trabajadores y el Gobierno. Para esto no era
necesario una nueva ley, alcanzaba
con hacer cumplir lo que ya estaba.
46
IV) Recomendaciones: la
gestión preventiva como
parte de la política de las
empresas.
El 21 de julio de 2014 se cumplieron 100 años de la promulgación de
la Ley Nro. 5.032 de prevención de
accidentes de trabajo. Esta ley fue la
primera ley laboral en nuestro país,
la que inició un período de legislación laboral y social proteccionista
y de avanzada (período fundacional)
que teniendo en cuenta el momento
en el que surgió (año 1914!!!) resulta
totalmente paradigmática y ejemplarizante no solo para nuestro país sino
para el mundo entero. La obligación
de tomar medidas de resguardo y
seguridad para los trabajadores, a
efectos de evitar accidentes, nace con
esa ley 5.032 (“art. 1... los empresarios de establecimientos industriales,
directores de construcciones de toda
clase ...o cualquier otro trabajo en
que haya peligro para los operarios,
quedan obligados a tomar medidas de
resguardo y seguridad ...a efectos de
evitar los accidentes originados en la
utilización de las máquinas, engranajes...”) y recién 100 años después, se
“cierra el círculo” responsabilizando
al empresario que no tome medidas
de resguardo y seguridad, atento a
lo que dispone el también art. 1 de
la Ley 19.196 que hemos comentado
(responsabilidad penal por omisión).
En oportunidad de compartir el panel
en el evento de conmemoración de
los 100 años de la Ley 5.032, con
integrantes de la Secretaría de Salud
del PIT CNT, IGTSS, Colegio de Técnicos Prevencionistas, participando por
invitación del MTSS en representación
de la CIU, resaltamos nuestro compro-
miso como sector, con la seguridad
y salud en el trabajo así como con
la prevención de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales,
pero marcamos la discrepancia con
los caminos elegidos por el Gobierno,
fundamentalmente con la Ley 19.196.
“Infundir temor o buscar culpables
no es el camino, el cambio cultural
es el punto de partida”, resaltamos
la importancia en el trabajo conjunto,
comprometido y participativo; en la
labor multidisciplinaria; en la integración de la prevención como parte de
las políticas de gestión en la empresa;
en los incentivos tributarios para las
empresas que inviertan en prevención;
en el abordaje integral y el trabajo
conjunto, etc.
Entonces, para posicionarnos como
sector y fundamentalmente desde la
perspectiva de las empresas, recomendamos encarar el tema de la Ley
de Responsabilidad Penal del Empleador por incumplimiento de las
normas de SST, tomando como punto
de partida, la pregunta: ¿qué debo
hacer para cumplir con la normativa?
y la respuesta no es otra que la que
da título a la presente nota: una gestión responsable en materia de SST.
A continuación, algunos aspectos o
recomendaciones a tener en cuenta
para abordar el tema de la “gestión
responsable”:
• las empresas deberán resolver qué
sistema de trabajo preventivo en
materia de SST van a adoptar como
parte de su política de gestión:
continuar con un enfoque clásico o
tradicional, el cual implica cumplir
con la normativa de reparación o
proteccionista (contratar el seguro con el BSE, entregar los EPP) o
pasarse a un sistema estratégico
de gestión que supone un enfoque preventivo, disponer de información y diagnóstico de riesgos,
un plan de acción para eliminar o
minimizar los mismos, informar y
capacitar, generar mecanismos y
ámbitos de participación conjunta
con los trabajadores, etc., tal como
lo establece el enfoque estratégico
de la OIT. El primer paso entonces,
es la decisión política que tiene que
tomar la empresa y que implica
todo un cambio cultural que debe
sostenerse en el tiempo e involucrar
a todos los niveles de la organización, desde la dirección hasta los
cuadros operativos.
• Hay algunos aspectos a corregir que
tiene que ver con la documentación
de la empresa. Como hemos visto,
la carga de la prueba acerca de “no
haber incurrido en omisión en el
cumplimiento de la normativa o su
reglamentación” corresponde siempre a la empresa, por tanto ésta deberá tener especialmente en cuenta
toda la documentación interna que
pueda encauzar el cumplimiento
de las normas, dado que tanto las
políticas como los procedimientos
son herramientas clave para poder
cumplir con ese requerimiento. Por
ejemplo incluir en los Reglamentos
Internos o Contratos de Trabajo, la
obligación de los trabajadores de
cumplir con la normativa de SST,
de uso de los EPP, de participar en
actividades de capacitación relacionadas con la prevención de los riesgos inherentes a sus cargos o categorías, etc. Se recomienda incluso,
incorporar el concepto de que su
omisión puede llegar a configurar
una falta grave. Redactar políticas y
procedimientos relacionados con la
gestión en planta, trabajo en altura,
sendas peatonales de circulación,
evacuación, brigadas, etc. Definir
de común acuerdo (comisiones bipartitas de SST) los protocolos de
trabajo por empresa o actividad,
acordes a cada uno de los niveles
de riesgo, así como el compromiso
de seguimiento y actualización.
• Se recomienda sumar al equipo de
trabajo a Técnicos Prevencionistas
o Especialistas en Seguridad quienes aportarán sus conocimientos y
experiencia para trabajar desde la
perspectiva de la gestión preventiva
partiendo de un análisis de riesgos
(mapeo), en función de los mismos,
el plan de acción, luego seguimientos, chequeos, auditorías de control
no solo respecto a la normativa
sino también a los procedimientos, protocolos, etc. de acuerdo a
cada tipo de empresa y también
por la posibilidad de participar en
las bipartitas de seguridad y en
definitiva en todo ámbito conjunto
y participativo en materia de SST.
• El cumplimiento de la normativa
de SST y su reglamentación: el repertorio de normas es amplísimo
y por otro lado, la actualización
permanente y los cambios a nivel
de resoluciones de distintos organismos como BPS o MSP por ejemplo,
por tanto el estricto cumplimiento
para no incurrir en la omisión que
penaliza la ley, requiere un control
o auditoría permanentes a cargo
de especialistas en cada empresa
y grupo de actividad. Para actuar
conforme a derecho, es necesario
estar empapado de toda la normativa inherente al grupo de actividad
47
Análisis de la Ley No 19.196
al que pertenece la empresa (convenios colectivos de rama, convenios
internos bipartitos, acuerdos de las
Tripartitas Sectoriales, etc.) además
de la normativa de carácter general
que hay que tener en cuenta, como
base: los Convenios Internacionales de Trabajo Nro. 155 y 161, el
Convenio Internacional de Trabajo
Nro. 187 no reglamentado pero
que contiene el marco promocional
de SST), el Decreto 406/88, la Ley
5.032, la Ley 16.074, el Decreto
291/07, el Decreto 423/07 (cargas
máximas), por ejemplo.
• La Gestión en SST: una gestión preventiva, como parte de la política de
prevención de riesgos de la empresa, deberá contar entre otras medidas, procedimientos o sistemas de
trabajo, realizados -como lo hemos
dicho a lo largo de este trabajo- en
forma multidisciplinaria con participación y compromiso de todos los
involucrados (responsables técnicos
de la empresa, técnicos prevencionistas, médicos laboralistas, delegados de seguridad, trabajadores,
jefes y supervisores, etc.: mapeos de
riesgo actualizados por área o sector; auditorías o controles permanentes tanto de la normativa como
de los sistemas o procedimientos y
planes de acción; check list periódicos (auto-control) de compromisos,
actas de acuerdo, prioridades o aspectos a corregir; llevar estadísticas
internas de accidentes, incidentes,
siniestralidad por área y sector y
evaluación de riesgos; severo control de cumplimiento de procedimientos y requisitos definidos para
proveedores y subcontratos que
aseguren acciones o servicios bajo
la garantía de seguridad para todos
48
los operarios, así como el uso bajo
las mismas condiciones de insumos,
equipos, elementos de limpieza u
otros materiales, etc.; ocuparse de
la difusión y comunicación como herramienta fundamental de sustento
del sistema a través de campañas
de sensibilización, charlas informativas, capacitación relacionadas
con manejo seguro de máquinas
y herramientas, desplazamiento de
vehículos dentro de planta, consumo de alcohol y drogas, hábitos
saludables, protección en el hogar,
entorno social en contextos críticos,
etc.; participación activa de supervisores y jefes conjuntamente con los
delegados de SST para la definición
de planes de acción, seguimiento y
control; asumir como concepto la
definición de trabajo seguro/trabajo
decente que implica no solo el cero
accidentes como hemos dicho sino
también la garantía de un medio
ambiente laboral acorde, condiciones de trabajo dignas, control de los
estresores (factores desencadenantes de enfermedades psicosociales)
en cada puesto de trabajo como
temperatura, iluminación, ritmos,
condiciones ergonómicas, turnos,
carga horaria, etc.
Una gestión responsable implica no
solo actuar conforme a derecho sino
también hacerlo profesionalmente, en
equipo, con participación de todos
quienes sean parte de la temática de
SST y necesariamente deben intervenir. Una gestión responsable significa
tener un alto compromiso con el objetivo de bajar los índices de siniestralidad y tomar el desafío de recibir en la
empresa un trabajador sano y apto y
devolverlo a su familia todos los días
en las mismas condiciones, una gestión
responsable requiere del empleador
y de los trabajadores en su conjunto,
el compromiso de formación continua
en habilidades y competencias para
generar un ambiente seguro de trabajo y finalmente el compromiso en
conjunto, de tomar este tema con la
seriedad que corresponde. Este aspecto va referido a todos, gobierno,
empresarios y trabajadores dado que
para lograr un cambio cultural de base
que garantice resultados, es necesario
seguir profundizando: quienes se encargan de controlar el cumplimiento de
las normas que lo hagan también con
un enfoque proactivo (capacitando/
asesorando en temas específicos por
sector de actividad) y no meramente
reactivo (multas o clausuras por incumplimientos), insertando la SST como
parte del sistema educativo, formación
específica en gestión de riesgos o
planificación estratégica; se necesita
disponer de información actualizada,
periódica y permanente; los sindicatos
y las empresas que no hayan instalado
aún sus comisiones bipartitas deberán
hacerlo a la brevedad.
Es necesario un cambio cultural como
punto de partida, pero no es necesario
agregar más normas como la que ha
sido objeto de este análisis, funda-
mentalmente porque las existentes
no se cumplen, empecemos por ello.
Si tomamos por ejemplo el Convenio
Internacional de Trabajo Nro. 155,
reglamentado por el Decreto 291/07,
vemos que claramente se reflejan en
él mucho de lo que ahora recomendamos, ejemplo: que la elaboración de
políticas y programas de acción en materia de SST competen conjuntamente
a los organismos gubernamentales y
a las organizaciones de empleadores
y trabajadores (que se refleja en los
objetivos estratégicos del Plan de
Acción de OIT 2010-2016) como parte
de las instancias de cooperación y del
“común acuerdo” que es el denomi-
nador de las acciones preventivas de
riesgos laborales a nivel de empresas,
tal como lo expresa el capítulo III del
multireferido Decreto 291/07.
El empleador deberá entenderlo así,
no solo porque se sienta atemorizado
por la búsqueda de culpables si así se
toma la Ley 19.196, o bien porque se
vea reflejado en la recomendación del
cambio cultural y político en materia
de SST sino simplemente porque si no
tiene tiempo ahora para ocuparse de la
gestión preventiva de SST tendrá que
disponerlo después, aunque no quiera,
para ocuparse de sus enfermedades
o accidentes.
PARA CADA
APLICACIÓN INDUSTRIAL
ENCUENTRE UNA SOLUCIÓN AVANZADA DE BOMBEO
CON TECNOLOGÍA JAPONESA Y EL MEJOR RESPALDO
Presurización - Abastecimiento - Aguas Residuales
Servicios y Procesos - Combate de Incendio
49
Histórica misión
empresarial a Paraguay
28 empresas uruguayas participaron
de una misión multitudinaria
Del 27 al 30 de
mayo, tuvo lugar la
mayor delegación de
empresarios uruguayos
a la ciudad de Asunción
del Paraguay realizada
hasta la fecha.
El Centro Internacional de Negocios
de la CIU, junto al Instituto Uruguay
XXI estuvieron a cargo de la organización de la mencionada misión empresarial, la misma contó con el apoyo del
Centro de Cooperación Empresarial
y Desarrollo Industrial de Paraguay,
quien estuvo a cargo del armado de las
agendas de negocios de las empresas
uruguayas y el apoyo de la Embajada
de Uruguay en Paraguay.
Paraguay figura como el país de mayor
crecimiento económico de la región,
según las principales entidades globales. La bonanza económica paraguaya
está sustentada en una serie de políticas públicas aplicadas en la materia
50
durante los últimos 10 años. A su vez,
la aplicación de políticas fiscales y
monetarias adecuadas ha permitido
lograr una estabilidad macroeconómica importante, que transmite previsibilidad y estabilidad de la economía
paraguaya, lo cual se vio reflejado en
una misión de empresas uruguayas
sumamente numerosa.
Algunos de los sectores que se vieron
representados en esta misión fueron:
maquinaria agrícola, vitivinícola, desarrolladoras de software, arquitectura y
construcción, packaging, diseño gráfico, consultoría, textil, seguridad vial,
automatización industrial, alimentos,
cables, salud ocupacional, entre otros.
Las empresas participantes se dividieron en dos grupos. El primero compuesto por: Metalúrgica J. Hartwich, Paraje
Espinillo S.A. y Ruben Darío Martínez
S.C., en primera instancia visitaron el
8 y 9 de mayo la Feria de Santa Rita,
más enfocada al sector agrícola.
El otro grupo de empresas formado
por: AT S.R.L., Arnaldo C.Castro S.A.,
Bodega 3 Palmas, Care Calificadora de
Riesgo, Cruce Design Group, Detexman, Devsys Soluciones Informáticas,
F. Pache S.A., GEX 21, JCR Ingeniería Industrial S.R.L., La Sacristía, Lioy
Raggio Arquitectos, Lyte Iluminación
Técnica, Magalink, Manentia Software,
Mary S.R.L., Medilab, Montreal S.R.L.,
MPR Project Management, Nublit,
Rotoplast S.R.L., Simplifica Software,
Smartway, Tessamerica y Trip, viajaron,
entre el 27 y 30 de mayo, directamente
a la ciudad de Asunción.
Agendas de Negocios
Las empresas uruguayas mantuvieron
reuniones de negocios en las empresas
paraguayas, las cuales habían sido
previamente identificadas en base a
sus perfiles de actividad.
Un elemento valorado por los empresarios fue la coordinación de la logística y el transporte desde y hacia las
reuniones ya que permitió que éstos
pudieran focalizarse en sus estrategias
de negocio.
Algunos de ellos mantuvieron reuniones con autoridades del gobierno, en
las cuales fueron acompañados por el
Embajador de Uruguay, Lic. Federico
Perazza.
Resultados
Las empresas participantes se mostraron conformes con los contactos generados y ya hay empresas avanzando
en acuerdos comerciales concretos.
Centro Internacional
de Negocios - CIU
Tel.: (598) 2 604 0464
int. 160/223
cin@ciu.com.uy
51
Manual para la Certificación
del Componente Nacional
de la Inversión (CNI)
A comienzos de este año, la Cámara
de Industrias (CIU) lanzó el “Manual
para la solicitud de Certificación del
Componente Nacional de la Inversión
(CNI)”, una herramienta para quienes
deban gestionar la certificación del
CNI en sus parques, plantas o granjas
de generación de energía eléctrica,
por fuentes renovables.
En un contexto en el que se promueve
la diversificación de la matriz energética y la incorporación de diferentes
fuentes alternativas de generación,
el Poder Ejecutivo dispuso la necesidad de incorporar en las inversiones
requeridas, componentes de origen
nacional, alentando con ello la actividad industrial nacional y el desarrollo
tecnológico del país.
A través del Ministerio de Industria,
Energía y Minería (MIEM), se delegó
en la CIU la tarea de certificar el origen
nacional de los componentes que integran el tipo de inversión mencionada.
Se han producido diversos procesos
de adquisición de energía de fuentes
renovables por parte de UTE (Administración Nacional de Usinas y Trasmisiones Eléctricas), los cuales, en la
jerga de trabajo de la CIU, se denominan “hitos”. Cada “hito” refiere a
un proceso de compra de energía en
particular, con base legal específica
vinculada. Precisamente son parte de
52
ese marco legal aplicable, los criterios
de calificación que deben ser tenidos
en cuenta para que cada componente
integrante de la inversión califique
como nacional.
La CIU decidió realizar, a través del
lanzamiento del citado Manual, un
aporte para el mejor ordenamiento,
administración, gestión y ejecución
del proceso de certificación.
La publicación ordena decretos, normas, resoluciones y criterios de calificación asociados a cada “hito” y
describe una serie de sugerencias para
presentar la información y la documentación necesarias para cada ejercicio
de certificación, lo cual contribuirá a
una mayor eficiencia y celeridad en
la gestión de los correspondientes
certificados.
Asimismo, la adquisición del Manual
permite contar con diez horas de
asesoramiento respecto al proceso
de certificación, las que deberán ser
previamente agendadas con el equipo
de trabajo dispuesto para tal fin.
En lo que refiere a la autogeneración
(o eólica industrial), a parques eólicos
con participación propia de UTE, y a
las plantas de generación por fuente
solar fotovoltaica, cabe destacar que
si bien en tales proyectos también se
exige determinado componente nacio-
nal de inversión y su correspondiente
certificación, la presente edición del
Manual no incluye su base normativa
vinculada.
también los detalles metodológicos
que pudieran corresponder a ejercicios de certificación del CNI que se
realicen a su amparo.
No obstante, la lógica y estructura
de trabajo propuestas se mantendrán
en todos sus términos, ajustándose
aquellos aspectos que así lo requieran
de acuerdo a la normativa específica
que resulte de aplicación.
En síntesis, adquirir el Manual le permitirá:
Una segunda edición del Manual
contendrá tanto éstas como otras resoluciones a promulgarse, como así
1. Conocer en detalle la información
y documentación necesaria para
acreditar cada concepto de inversión involucrado en su proyecto,
como así también el carácter nacional de aquellos que conforman
el CNI correspondiente.
2. Contar con los modelos propuestos para la presentación de
la información y documentación
requerida, tanto en formato impreso como digital.
3. Acceder a 10 (diez) horas de asesoramiento ofrecido por el equipo
técnico de la CIU, para la mejor
comprensión de las distintas etapas y exigencias que el proceso
de certificación del CNI implica.
4. Deducir el monto de su adquisición, del precio del servicio de
certificación que deberá abonarse
una vez culminado el proceso.
Departamento de Certificación del Componente Nacional de la Inversión
En el primer trimestre del corriente año se formalizó en la CIU el “Departamento de Certificación del Componente Nacional de la Inversión”, el cual
tiene como principales objetivos la determinación del carácter nacional
de los componentes de inversión en proyectos de generación de energía
eléctrica por fuentes renovables, en el marco de los contratos firmados
con UTE, y el asesoramiento integral a los diferentes actores en general
vinculados a estos proyectos durante el proceso de certificación.
Por mayor información:
Departamento de Certificación del Componente Nacional de la Inversión
E-mail: cni@ciu.com.uy
Teléfono: +598 2604 0464 internos 146, 171 y 107.
Fax: +598 2604 0501
Dirección: Av. Italia 6101
Sitio web: http://www.ciu.com.uy/innovaportal/v/60400/33/innova.front
53
Plan de Gestión de Envases de la CIU
Cámara de Industrias del
Uruguay una vez más muestra
su apoyo al medio ambiente
La CIU continúa trabajando en la implementación y funcionamiento del
plan de gestión de envases en el territorio nacional, contando con plantas
de clasificación y acopio de envases
en: Canelones, Maldonado, Flores,
Rocha, Rivera y Montevideo, las cuales
en todo el territorio nacional emplean
a más de 250 personas.
¿Qué es la ley de envases y cómo
se aplica?
En el año 2004 se crea la Ley 17.849
la cual indica que todos los propietarios de marcas e importadores deben
gestionar los envases en los que llegan
sus productos a manos del consumidor
final. Dicha Ley no era aplicable, ya que
no poseía un marco regulatorio, por
lo que en el año 2007 DINAMA emite
un decreto reglamentario (260/007) en
el cual indica, entre otros aspectos,
qué clasificación debe utilizarse, y
cuáles son los productos que están
comprendidos.
¿Cómo surge el Plan de Gestión de
Envases?
Desde 2007 la CIU ha trabajado en la
aplicación de Plan de Gestión de Envases (PGE – CIU) en distintos puntos del
país. En sus inicios dicho servicio era
prestado únicamente a los socios de
la CIU, pero en el año 2008 se buscó
ampliar el número de empresas beneficiadas por el servicio. Actualmente
54
cuenta con más de 2400 empresas
adheridas, entre socias y no socias de
la CIU, siendo el que cuenta con más
adherentes en el país.
En setiembre de 2012 se concretó
la extensión a través de un convenio
firmado por: el Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio
Ambiente (MVOTMA), el Ministerio
de Desarrollo Social (MIDES), la Intendencia de Montevideo (IM) y la CIU.
Mediante dicho convenio se extiende el Plan de Gestión de Envases en
Montevideo para la recuperación de
residuos de envases no retornables, y
se planificó la construcción de cuatro
plantas de clasificación. Cada una de
las Instituciones asumió un rol en el
proyecto. La CIU se comprometió a
realizar los aportes económicos necesarios para la ejecución durante
dos años. Esto comprende: remuneración de trabajadores, construcción
y acondicionamiento de plantas de
clasificación, contenedores e islas de
recepción de envases, vigilancia, uniformes y maquinaria, entre otros.
Por tal motivo, en mayo de 2013, el
Fideicomiso (PGE – CIU) realizó una
primera convocatoria a diferentes empresas para definir qué proveedor
llevaría adelante la construcción de
las plantas. Luego de importantes
ajustes y negociaciones sobre el pre-
supuesto, se comenzó con las obras
civiles y complementarias de las cuatro
plantas, realizando una inversión total
de aproximadamente $ 44.000.000
en este rubro.
Asimismo, se adquirió el equipamiento
completo para el correcto funcionamiento de las plantas, y para que los
trabajadores logren desarrollar sus
tareas de forma correcta dentro de un
buen ambiente. A modo de ejemplo,
se adquirió la maquinaria adecuada
para procesar los residuos de envases,
los elementos de protección personal,
uniformes, etc.
de Gestión de Envases- los cuales se
encuentran en grandes superficies,
como shoppings y supermercados, y
en los que los ciudadanos colocan los
envases post consumo como papel,
cartón, vidrio, plásticos y otros.
Estos residuos de envases son trasladados hasta las plantas donde se realiza
la clasificación según tipo de material,
color, y otras características, así como
también el acondicionamiento y la
Los días 24 de marzo y 29 de abril se inauguraron las dos primeras plantas de
clasificación en Montevideo. La planta
La Paloma está ubicada en Camino La
Paloma S/N y Santín Carlos Rossi, y la
planta Géminis está ubicada en Camino Géminis entre Rosario y Chacarita
de los Padres. El 30 de setiembre y el
21 de octubre se inauguraron las dos
plantas adicionales las cuales complementaron el proyecto, y aunaron
esfuerzos con las ya existentes para
procesar los envases vertidos dentro
del departamento.
¿Cómo funciona el PGE Montevideo?
El 17 de marzo comenzó la instalación de contenedores -debidamente
identificados con los logos del Plan
55
Plan de Gestión de Envases de la CIU
venta de los envases que, luego de
este proceso, se transformarán en
materia prima.
Actualmente las plantas atienden a
todo el departamento dividiéndolo
de la siguiente manera:
• Planta La Paloma: atiende a los
municipios A y B
• Planta Géminis: atiende a los municipios E y F
• Planta Durán: atiende a los municipios C y G
• Planta Burgues: atiende a los municipios CH y D
De esta manera, se logrará la cobertura total de Montevideo en cuanto
a la acumulación, traslado y “puesta
a punto” de todos los envases post
consumo de la zona.
¿Quiénes trabajan en las plantas?
Los trabajadores que realizan las tareas operativas son ex clasificadores
informales. Por intermedio del MIDES
se realizó la selección del personal,
cuya remuneración será aportada por
el Fideicomiso.
Las cuatro plantas emplean a 128 trabajadores. Actualmente, 28 desempeñan tareas en la planta La Paloma,
40 en Géminis, 32 en Burgues y 28
en Durán.
Cada una cuenta con una organización
de la sociedad civil con diferentes funcionarios, quienes están encargados
del control del personal, de la organización y de la supervisión de las
tareas, así como también de las tareas
administrativas que se requieran.
La CIU y el compromiso
con el medio ambiente
La Cámara de Industrias del Uruguay
es la primera institución privada en
realizar una declaración expresa para
cuidar, promover y colaborar en el
desarrollo sostenible del medio ambiente. Ha trabajado arduamente en
estas líneas desde 1999 y este, como
otros emprendimientos, son muestras
claras de compromiso.
Declaratoria Ambiental de la CIU
Montevideo, 28 de Abril de 1999.
1.- Promover en las empresas industriales, el logro de la excelencia en
la gestión ambiental como clave determinante para un desarrollo
sostenible que asegure su competitividad en un mercado globalizado
y su relacionamiento con la sociedad.
2.- Promover el interés y respeto por el Ambiente buscando una participación equitativa en el logro de los objetivos ambientales de todos
los actores sociales: empresarios, autoridades públicas nacionales y
municipales, los distintos niveles de la educación, las organizaciones
de la sociedad civil y la comunidad toda de modo de asegurar una
conciencia ciudadana proactiva al ambiente.
3.- Colaborar activamente con las autoridades públicas en el desarrollo
de una normativa ambiental apropiada, apoyando la implementación
de disposiciones viables, técnica y económicamente, estables y fundamentadas en bases científicas, que apoyen el desarrollo sostenible
del sector industrial.
4.- Propender al desarrollo y mejoramiento continuo de las políticas,
programas y desempeño ambientales de las empresas teniendo
presente la realidad nacional, en coherencia con la inserción regional
e internacional.
56
57
Inmigración europea,
industrias y corporaciones
en la región, 1870-1914
(primera parte)1
Alcides Beretta Curi2
Los complejos procesos de cambios
registrados en las últimas décadas
del siglo XIX (la llamada “modernización”) que transitaron los países del
sur de América y Brasil, redundaron
en el desarrollo de economías agroexportadoras y un mayor vínculo con
el mercado mundial, una creciente
urbanización, acompañada del desarrollo de un sector de industrias, una
reestructura de la sociedad (constitución de nuevas clases sociales), la
recepción de capitales extranjeros
que concurrieron al desarrollo de
servicios, y un flujo variable pero
sostenido de inmigrantes europeos.
Se reconoce en la presencia de los
europeos, uno de los motores de los
principales cambios operados. En este
capítulo, y en el contexto de la región,
se aborda el rol de la inmigración europea en la formación de los cuadros
empresariales y las organizaciones
corporativas sectoriales en Chile,
Argentina, Brasil y particularmente
centrado en el Uruguay.
Cuadro I
Población, tasas de crecimiento (%) y saldos netos de inmigración (en miles)
FUENTE: elaboración propia sobre Sánchez Albornoz, ob. cit.
ARGENTINA
2
Profesor Titular en régimen de “dedicación total”,
Centro de Estudios Interdisciplinarios Latinoamericanos
“Profª. Lucía Sala” (CEIL). Facultad de Humanidades y
Ciencias de la Educación. Universidad de la República.
E-mail: <alcides.berettacuri@gmail.com>
58
1850
1900
%
SALDO NETO INMIGRACIÓN
1.100
4.693
2,9
1.140,40
CHILE
1.443
2.959
1,4
35,1
URUGUAY
132
915
4,0
116,5
BRASIL
7.230
17.980
1,8
1.655
El puerto de Valparaiso hacia
1900. Tomado de Pontificia Universidad Católica de Valparaiso
http://www.filosofiayeducacion.
ucv.cl/?p=3406
Valparaiso en el siglo XIX
Tomado de Panoramio: http://
www.panoramio.com/photo/2234502
59
Inmigración europea, industrias
y corporaciones en la región, 1870-1914
Litografía de Buenos Aires de Deroy, de la original realizada en París en 1861
Tomado de Historia y Arqueologia Marítima
http://www.histarmar.com.ar/InfHistorica/BreveHistArqBsAs/BreveHistArqubase.htm
Muelle de pasajeros en el puerto de Buenos Aires (año 1888)
Tomado de Historia y Arqueologia Marítima
http://www.histarmar.com.ar/InfHistorica/BreveHistArqBsAs/Fotos/1888muellpax.jpg
60
Inmigración europea e
industrialización en la
periferia austral
en las décadas de 1870-80 los europeos se orientaron hacia distintas
geografías. Si bien cobraron relevancia Estados Unidos y Australia, en las
últimas décadas del XIX el principal
destino fue la América del Sur y en
ella, el Río de la Plata. No se conoce
con exactitud el número de personas
que emigraron hacia este continente
entre 1870 y 1930, estimándose los
saldos netos en unos 4 millones para
Argentina y 2 millones para Brasil, e
inferiores para Chile (200.000), Cuba
y Uruguay (600.000 en cada país).3
3
SÁNCHEZ-ALBORNOZ, Nicolás La población de América Latina, 1850-1930 In: BETHEL, Lesli (Edit.) Historia de
América Latina. 7 América Latina: economía y sociedad,
c. 1870-1930 Barcelona. Ed. Crítica, 1991; pp. 112-113
Estos inmigrantes, eran portadores
de una racionalidad propia de las relaciones capitalistas de producción,
registraron altas tasas de radicación
urbana y su presencia tuvo un peso
considerable en el desarrollo de los
servicios y de la industria. Entre 1870
y la primera guerra mundial, América
Latina desarrolló industrias inducidas
por las exportaciones, etapa que coincide con la llamada “modernización”
(institucional, creación de infraestructura, constitución de un mercado de
bienes de consumo y bienes de capital). Estas economías demandaron
artículos diversos para las exportaciones (bolsas para cereales y harinas,
toneles para el tasajo, etc), astilleros
para reparación de las embarcaciones
que atendían el cabotaje; talleres para
el mantenimiento de la red ferroviaria,
y de las estructuras portuarias. A su
vez, el proceso de urbanización pro-
vocó un crecimiento de la población
y consiguientemente una expansión
de la demanda de artículos básicos
(alimentos, vestimenta, etc) que fueron
suministrados por nuevas industrias. La
mayoría de los establecimientos censados al iniciar el siglo XX continuaban
siendo talleres, con baja concentración
de trabajadores.4 Coincidiendo con la
observación de Colin M. Lewis, este
desarrollo de industrias inducidas por
las exportaciones desmiente el análisis
de quienes abogaron por un desarrollo
a partir de cero cuando la crisis de
1929. En tanto las economías europea
y norteamericana encontraron en el
cambio tecnológico el motor de crecimiento, en América Latina la expansión
del mercado interno, desde fines del
XIX, se debió al sector exportador.
Una consecuencia fue la expansión
del ingreso y una creciente urbanización en aquellos países con mayor
crecimiento exportador (Argentina,
4
LEWIS, Colin M. La industria en América Latina antes de
1930 In: BETHEL, Leslie (Ed.) Historia de América Latina.
7. América Latina: economía y sociedad, c. 1870-1930
Barcelona. Editorial Crítica, 1991; pp. 233 y ss.
61
Inmigración europea, industrias
y corporaciones en la región, 1870-1914
VISTA DE MONTEVIDEO EN 1865
http://es.wikipedia.
org/wiki/Villa_del_
Cerro
Brasil, Chile, Uruguay, Perú, Colombia,
México y Cuba). Fue esta expansión
de la economía agroexportadora que
concurrió a superar o atenuar algunos
de los obstáculos principales para el
desarrollo de la industria: el tamaño
de los mercados (consecuencia de
los bajos ingresos de la población),
su débil integración (elevados costos
de los transportes), los problemas de
abastecimiento energético, escasez
de algunas materias primas y débil
desarrollo del sistema financiero.5
5
62
MEISEL ROCA, Adolfo Mercados internos, industrialización y finanzas In: AYALA MORA, Enrique; Duardo Posada Carbó Los proyectos nacionales latinoamericanos:
sus instrumentos y articulación, 1870-1930 (UNESCO.
Historia General de América Latina) Salamanca.
UNESCO-Trotta, 2008; pp. 120-121.
En la Argentina agroexportadora, las
industrias representaban, en 1881, el
10,7% del producto bruto interno, pero
luego de la crisis de 1890 –y por efecto
de algunas leyes que tuvieron efecto
proteccionista- se registró un crecimiento: en 1900 eran el 18,2% del PIB y un
quinquenio más tarde, su participación
superaba a la ganadería (22,1 y 17,1
respectivamente).6 La industria se concentraba principalmente en la ciudad
de Buenos Aires, y en 1887, el censo
municipal registraba 4.200 establecimientos pero sólo 560 contaban con
fuerza motriz, y de ellos una docena
tenía una potencia instalada superior
6
ROCCHI, Fernando El péndulo de la riqueza: La economía argentina en el período 1880-1916 In: LOBATO,
Mirta Zaida El progreso, la modernización y sus límites
(1880-1916) Buenos Aires. Editorial Sudamericana; p.
35.
a 50HP7 A partir de los datos del censo
de 1895, Germani había observado que
el 81% de los propietarios de talleres
y fábricas eran extranjeros. Devoto
destaca el papel protagónico de los
italianos en el sector, particularmente
en cuatro rubros (alimentación, construcción, vestido y metalurgia ligera)
que, en 1914, representaban el 78%
de los establecimientos industriales y
el 61% de los capitales invertidos.8 De
ese universo de talleres, emergían unas
pocas fábricas. Pero los “capitanes de
la industria”, que aparecen tempranamente, son individuos ya presentes en
otros segmentos de la economía, con
riqueza y poder social que exploraron
otros campos de inversión.
En cuanto a Chile, Carmagnani ubica
el despunte de su industria a partir de
la Guerra del Pacífico9, si bien otros
autores anticipan ese inicio unas décadas.10 La creación de la SOFOFA
(Sociedad de Fomento Fabril, 1883),
CARMAGNANI, Marcello Desarrollo industrial y
subdesarrollo económico. El caso chileno, 1860-1920
Santiago. DIBAM,1998.
10 ORTEGA, Luis Los empresarios, la política y los orígenes
de la Guerra del Pacífico. Santiago. Contribuciones, 24,
FLACSO, 1984. GARCÍA, Rigoberto Incipient Industrialization in an Undevelopment Country. The Case of
Chile, 1845-1879
9
7
SCHVARZER, Jorge La industria que supimos conseguir.
Una historia político-social de la industria argentina
Buenos Aires. Editorial Planeta, 1996: pp. 91-92.
8
DEVOTO, Fernando Historia de los italianos en la
Argentina Buenos Aires. Editorial Biblos, 2006; pp. 285286.
63
Inmigración europea, industrias
y corporaciones en la región, 1870-1914
El puerto de
Montevideo en
la segunda mitad
del siglo XIX
del Ministerio de Obras Públicas (1887)
y el ingreso de los industriales a la
Comisión que fijaba las Tarifas de Avalúos para los productos importados,
pautaron una gradual política estatal
favorable a la industria. El censo de
1895 aporta a la comprensión del
proceso industrializador chileno: de
los 2.449 establecimientos censados,
el 9,8% habían iniciado antes de 1870;
el 13,7% se habían instalado entre
1870-79; 34,6% en el período 1880-89
y 41,9% en el quinquenio 1890-95.11
Chile compartió en parte un camino
común a la región: desde que inicia
el proceso inmigratorio, los europeos
están presentes en la naciente industria
y su desarrollo inmediato posterior. El
censo levantado por la SOFOFA en
1895, indica que el 61% de la industria
chilena se ubicaba en la capital (1.502
establecimientos) y en Valparaíso (417)
y en ellos, el peso de los europeos era
indiscutible. Su presencia dominante y
11 ESTRADA TURRA, Baldomero Participación italiana en
la industrialización de Chile. Orígenes y evolución hasta
1930 In: Baldomero Estrada Turra (Editor) Presencia
italiana en Chile Serie Monografías Históricas, 7. Valparaíso. Universidad Católica de Valparaíso, 1993; p. 96.
64
dinámica contrasta con su escaso interés por radicar en Chile (Collier y Sater
anotan que entre 1889 y 1907, llegaron
55.000 europeos en tanto para ese
mismo período Argentina recibió más
de dos millones12). Estrada observa
que “pese a su disminuido volumen,
tuviera una repercusión sobresaliente
y totalmente desproporcionada respecto a sus efectivos demográficos.
La participación de europeos en la
actividad industrial fue un factor decisivo para sus desarrollo”.
Un estudio sobre los españoles en
Valparaíso, da cuenta de su presencia
en establecimientos pequeños (principalmente panificadoras, fabricación de
prendas de vestir, sombreros, calzado)
y se concentraban en ramas que no
requerían un desarrollo tecnológico
importante, que operaban con bajas dotaciones de capital, en base
al trabajo manual y requerían escasa
concentración de trabajadores.13 Estas
características también fueron comunes a los establecimientos iniciados
por italianos. Para 1910, Mazzei aporta
que en las ciudades de Concepción,
Talcahuano y Tomé, las empresas de
españoles e italianos, representaba
el 20,2% y el 17,9% respectivamente,
del capital total de distintas firmas
de europeos radicados en Chile.14 A
inicios del XX, de las 91 industrias más
12 COLLIER, Simon; William F. Sater A History of Chile,
1808-1994 Cambridge Latin American Studies; p. 172.
13 NAVARRO AZCUE, Concepción; Estrada Turra, Baldomero Migración y Redes de Poder en América: el caso
de los industriales españoles en Valparaíso (Chile) 18601930) “Revista complutense de Historia de América” 31,
2005; p. 141.
14 MAZZEI DE GRAZIA, Leonardo L’integrazione degli
immigrati italiani nell’economia della provincia di
Concepción, 1889-1930 In: FAVERO, Luigi; STABILI,
Maria Rosaria; … Il contributo italiano allo sviluppo del
Cile Torino. Edizioni della Fondazione Giovanni Agnelli,
1993; p. 285.
importantes existentes en Valparaíso,
sólo 15 eran propiedad de chilenos.
Y, en 1914, la propiedad de establecimientos industriales correspondía
en un 50,3% a extranjeros, 43,2% a
chilenos y 4,6% eran de propiedad
mixta. El proceso de concentración y
centralización de capitales en el sector no fue excepcional respecto a la
región, aunque presenta sus singularidades. Grez Toso subraya que la
formación de la burguesía industrial
chilena admitió dos vertientes: por un
lado a elementos de la inmigración
europea y por otro los segmentos
superiores del artesanado urbano que
luchaba por desarrollarse.15
En el Brasil del último cuarto del XIX,
la empresa fabril coexistió con un número elevado de pequeñas empresas
y talleres, y no fueron pocos los establecimientos que completaban el
proceso productivo con el trabajo a
domicilio. Warren Dean observa que
la producción de tejidos de algodón
se cumplió durante mucho tiempo en
ámbitos de producción doméstica,
apreciable en el censo de 1920 por un
consumo de hilo superior a la demanda
de las fábricas instaladas y el registro
de 275.000 trabajadores industriales y
de 1.264.000 personas empleadas en
la fabricación de prendas de vestir.16 El
nacimiento de la industria se procesó
en varias ciudades y regiones (Rio de
Janeiro, Sao Paulo, Rio Grande do Sul).
En el caso de Sao Paulo, Dean enfatiza
que “al parecer no hubo casos de
15 GREZ TOSO, Sergio La reivindicación proteccionista artesanal y la constitución del movimiento popular (Chile,
1826-1885) “Historia Social”, 31, 1998; p. 99.
16 DEAN, Warren La economía brasileña, 1870-1930 In:
Leslie Bethell Historia de América Latina. 10: América
del Sur c. 1870-1930 Barcelona. Editorial Crítica, 1992;
pp. 360 y 363.
65
Inmigración europea, industrias
y corporaciones en la región, 1870-1914
Fueron claves en el
desarrollo de la industria
brasilera, anterior a la
primera guerra mundial
brasileños de las clases media o baja,
cuya ascendencia no fuese extranjera,
que crearan empresas manufactureras
significativas antes de 1930”.17 Si bien
entre 1872 y 1920, los municipios
con más de 100.000 habitantes incrementaron su participación en el
conjunto de la población, de 5,1% a
9,7%, la economía brasileña era fundamentalmente agraria y en 1920, la
agricultura aun ocupaba al 66,7% de
la mano de obra. Fueron claves en el
desarrollo de la industria brasilera,
anterior a la primera guerra mundial:
a) la cafeicultura, en tanto principal
responsable de la ampliación del mercado interno, atrayendo inmigrantes
como mano de obra y orientando el
excedente hacia la industria, expandiendo la red de transporte, el sistema
bancario y el proceso de urbanización,
en tanto capitales ociosos generados
en las plantaciones fueron invertidos
en la industria; b) el rol relevante de
la inmigración europea que proveyó
a la industria de mano de obra y de
los cuadros empresariales.18 De ello
resultó una penetración de la elite
por elementos de la inmigración que
recorrían el camino del ascenso social.
El Estado de Río Grande do Sul recibió,
desde mediados del XIX, inmigrantes
europeos (principalmente alemanes e
italianos), que poblaron las tierras del
estado, al amparo de los programas de
colonización, y desde allí atendieron
una demanda creciente de alimentos
para la región. 19 El excedente agrario
17 DEAN, Warren Industriales y oligarquía en el desarrollo
de Sao Paulo In: CERUTTI, Mario; VELLINGA, Menno
(Comps.) Burguesías e industria en América Latina y
Europa meridional Madrid. Alianza Editorial, 1989; p.41.
18 PEREIRA, José Carlos Formaçâo industrial do Brasil e
outros estudios Sâo Paulo. Editora HUCITEC, 1984; pp.
31-33.
19 SLOMP GIRON, Loraine; HERÉDIA, Vania História da
Imigraçâo Italiana no Rio Grande do Sul Porto Alegre.
EST Ediçóes, 2007
66
propició el proceso de urbanización,
destacando las ciudades Porto Alegre
y Pelotas, en tanto creció el número
de industrias en manos de extranjeros (franceses, españoles e italianos principalmente).20 En la zona de
Caxias do Sul se instalaron industrias
de alimentos (principalmente molinos), textiles y confección de ropa, y
una incipiente industria metalúrgica y
mecánica, propiedad de inmigrantes.21
El valor de la producción industrial
brasilera era, en 1907 el 30,7% del
PIB y en ella, Rio Grande do Sul representaba el 14,9%.22
Dejando la región austral del continente americano, el aporte europeo
se reconoce también en la industrialización de los Estados Unidos. Entre
fines del siglo XIX y los inicios del XX,
los Estados Unidos se transformaron
profundamente: de ser una sociedad
predominantemente rural se convirtieron en un país con una economía
centrada en las grandes ciudades y
una economía industrial. En 1880, la
mitad de los trabajadores lo hacían
en el medio rural y menos del 15%
estaban asignados a la industria.23 El
sector industrial se componía fundamentalmente por talleres y pequeñas
empresas con tecnología artesanal;
los molinos harineros y aserraderos se
ubicaban en el medio rural y utilizaban energía hidráulica. Parte del país,
20 RODRIGUES SOARES, Paulo Roberto “Burgueses
inmigrantes” y desarrollo urbano en el extremo sur de
Brasil “Scripta Nova” 94 (78), 2001: http://www.ub.edu/
geocrit/sn-94-78.htm
21 HERÉDIA, Vania Processo de Industralizaçâo da Zona
Colonial Italiana Caxias do Sul. EDUCS, 1997; p. 80.
22 SINGER, Paul Desenvolvimento económico e evoluçâo
urbana: análise de evoluçâo econômica de Sâo Paulo,
Blumenau, Porto Alegre, Belo Horizonte e Recife Sâo
Paulo. Nacional, 1968.
23 JONES, Maldwyn Historia de los Estados Unidos, 16071992 Madrid. Cátedra, 1996.
principalmente el medio rural, era casi
autosuficiente, produciendo ropas,
alimentos y otros artículos esenciales.24 Hacia 1920, los Estados Unidos
se habían transformado, resultado de
su revolución industrial (visible, por
ejemplo, en la gradual generalización
del motor eléctrico: en 1909 era el 23%
del conjunto de motores usados en
la industria, pero el 77% veinte años
más tarde).
En los 130 años comprendidos entre
el primer censo (1790) y 1920, la población evolucionó de alrededor de
4 millones de habitantes a alrededor
de 107 millones. El crecimiento fue
resultado de altas tasas de natalidad
y moderados niveles de mortalidad, y
la llegada al país de alrededor de 33
millones de inmigrantes, que aportaron un saldo neto equivalente al 25%
de ese crecimiento. Los flujos hacia
los Estados Unidos fueron estimulados por periodos de crecimiento y/o
prosperidad y se interrumpieron por
coyunturas críticas; en tanto la legislación restrictiva de la década de 1920
pauta su ocaso. En los años de 1920,
la población norteamericana ascendía
a unos 105 millones de personas.
Si se considera los 14 millones de
inmigrantes y los 23 millones de sus
descendientes nacidos en los Estados
Unidos, la “comunidad inmigrante”
representaba en conjunto algo más
de un tercio de la población del país.
Por otra parte, los inmigrantes y sus
hijos componían más de la mitad
de la fuerza de trabajo del sector
industrial; y si se incluye la segunda
24 OLMSTEAD, Alan; RHODE, Paul “The transformation of
northern agricultura” en ENGERMAN, Stanley; GALLMAN, Robert (Eds.) The Cambridge Economic History
of the United States vol. 3 Cambridge University Press,
2000; pp. 693-742.
generación nacida en el país (los nietos de esos inmigrantes), su aporte
a esa fuerza de trabajo superaba los
dos tercios.25
Inmigrantes y empresas industriales
se concentraron en las principales
ciudades que crecían rápidamente
(Nueva York, como en Chicago, Boston, Cleveland, San Francisco, Buffalo,
Milwaukee y Detroit), de modo que,
hacia 1900, las tres cuartas partes de
su población estaba compuesta por
los inmigrantes y sus descendientes.
La presencia de la inmigración fue
tan contundente, que Hirschman y
Mogford –respondiendo a Hatton y
Williamson- se preguntan si el proceso industrializador norteamericano
hubiera sido posible sin esta fuerza de
trabajo inmigrante. Para un período
más reciente, Piore y Sabel rescatan
el papel de la pequeña empresa italiana, de corte familiar-artesanal que,
a la vez que heredera de una larga
tradición, es innovadora. Y si bien los
autores remiten a esta experiencia
como posible referencia frente a niveles de agotamiento de la empresa
americana, están allí presentes una
historia previa de cultura empresarial
que indudablemente la inmigración
aportó a la industrialización norteamericana.26
esconden otros factores presentes en
el desarrollo industrial de esta nación,
como lo fueron la abundancia y menor
costo de recursos minerales y energéticos, si bien como observa Wright, no
existe una vinculación inexorable entre
abundancia de esos recursos y una
industria nacional fuerte.27 Del mismo
modo, concurrieron ventajosamente
en ese desarrollo exitoso, la innovación tecnológica, el desarrollo de los
transportes, la amplia disponibilidad
de mano de obra, o el temprano desarrollo de una cultura empresarial.
No obstante, las aproximaciones entre
los países de la región austral y los
Estados Unidos por el rol protagónico de la inmigración europea, no
25 HIRSCHMAN, Charles; MOGFORD, Elizabeth “Immigration and the American industrial revolution from 1880
to 1920” en Social Science Research nº 38, 2009; pp.
897–920
26 PIORE, Michael; SABEL, Charles “Italian Small Business Development Lessons for U. S. Industrial Policy”
Working Paper Department of Economics Number 288
Massachusetts Institute of Technology, August, 1981.
27 �RIGHT, Gavin “The Origins of American Industrial Success, 1879-1940” en American Economic Review nº 80,
1990; pp. 651–678.
67
SERVICIO ESPECIALIZADO PARA LA INDUSTRIA
DUCSA, líder en la distribución
68
Ing. Fernando Mesner e Ing. Quím. Martín Baeza
Para conocer la realidad de DUCSA
entrevistamos al Ing. Fernando Mesner, que es Jefe de Producto de Lubricantes ANCAP y Asistencia Técnica y al Ing. Quím. Martín Baeza de
Asistencia Técnica de Productos de
DUCSA, quienes nos interiorizaron
sobre la competitividad de DUCSA a
través de su red de distribuidores en
todo el país, su servicio de post venta y
la calidad de los productos y servicios
que ofrece a sus clientes.
- ¿Cómo es la logística de distribución hacia las empresas industriales?
Nuestra empresa abastece directamente a grandes industrias, mientras
que las pequeñas y medianas industrias se abastecen a través de nuestra
red de distribución integrada por estaciones de servicio y distribuidores. La
red de estaciones de servicio ANCAP
tiene la capacidad de suministrar y
entregar un combustible como es el
Gas Oil para uso industrial, en tanto
el Fuel Oil Pesado y el Fuel Oil Medio
para uso en calderas industriales y
hornos es suministrado directamente
por DUCSA a sus clientes.
- En estos trece años de existencia
¿Cuál fue el crecimiento de DUCSA?
DUCSA ha pasado por varias etapas.
Una primera etapa fue la de tomar
el negocio que tenía otra empresa,
insertarse en el mercado para posteriormente ingresar en un periodo de
crecimiento y de proyección de nuevos
desafíos, entre ellos, tomar la distribución de Gas Licuado de Petróleo, conocido comúnmente como Supergas.
Posteriormente CHEVRON URUGUAY
decide terminar sus operaciones en el
país y las 90 estaciones de servicio
del sello TEXACO pasan a ser del
sello ANCAP, paralelamente mediante una negociación DUCSA adquirió
la representación de los lubricantes
TEXACO y CHEVRON, por lo que
desde el año 2007, DUCSA importa,
comercializa y distribuye dichas marcas. En los años siguientes fueron
surgiendo distintos tipos de proyectos,
como fue la incursión en el desarrollo
de las tiendas de conveniencia para las
estaciones de servicio ANCAP, como
son las estaciones propias de DUCSA
ubicadas en el barrio Trouville y en
cercanías del Aeropuerto de Carrasco,
donde se ofrece a los clientes un menú
ESPACIO CONTRATADO
DUCSA es una empresa
privada propiedad de
ANCAP que nace en el
2001 con el objetivo de
distribuir los combustibles
y lubricantes de ANCAP.
Comenzó con la gestión
de abastecimiento de las
210 estaciones ANCAP
que existían en ese
momento en todo el país,
y también se encargó
del abastecimiento a
grandes consumidores
de combustibles y
lubricantes. Actualmente
es líder del mercado
comercializando
y distribuyendo
combustibles y lubricantes
a casi 300 estaciones de
servicio ANCAP y otras
empresas que venden
y consumen estos
productos, y va por más.
n
de combustibles y lubricantes
de comidas rápido de buena calidad,
con excelente atención, limpieza y
seguridad, a la vez de una serie de
productos al que se puede acceder
en un régimen de 24 horas.
ESPACIO CONTRATADO
- Y en el sector industrial, ¿Cómo
van desarrollando su plan de negocios?
En cuanto a combustibles se refiere
DUCSA vende a sus clientes industriales los productos que ANCAP produce
que son Fuel Oils y Gas Oil para el uso
en calderas y hornos. En la actualidad
existen una serie de combustibles
sustitutivos, como la leña, el gas natural, la biomasa que compiten con
nuestros productos, sin embargo hoy
seguimos teniendo buena presencia
en el mercado industrial.
En lo que se refiere a lubricantes
de uso industrial, DUCSA tiene algunos grandes clientes directos, pero
básicamente orientamos la venta y
distribución de estos productos a la
industria a través de nuestros canales
de ventas.
Contamos con una amplia gama
de productos tanto en la línea de Lubricantes ANCAP como en la línea
de Lubricantes CHEVRON-TEXACO.
A nivel industrial los lubricantes
de mayor consumo son los aceites
para sistemas hidráulicos, aceites
para cajas de engranajes, aceites
para compresores de aire, aceites
para compresores de refrigeración,
aceites para turbinas, aceites para
sistemas neumáticos, aceites para
lubricación de maquinaria textil y una
amplia variedad de grasas lubricantes.
tibles con los nuevos biocombustibles
incorporados según lo marca la ley de
biocombustibles.
- ¿Cómo funciona la investigación,
el desarrollo y la innovación para los
lubricantes en una empresa como
DUCSA?
Debido al Sistema de Gestión de Calidad que ANCAP tiene para la elaboración y comercialización de los
Lubricantes ANCAP, que satisface
los requerimientos de la norma ISO
2001:2008, DUCSA participa de reuniones de “diseño de producto”. Este
proceso implica la existencia de un
comité que se encarga de estudiar las
demandas y requerimientos del mercado, y se evalúan las oportunidades
de negocio para el desarrollo de la
línea de los Lubricantes ANCAP. La
participación de DUCSA es importante
en esto dado que somos las personas
que estamos más cerca del mercado
y por lo tanto más informadas de lo
que realmente está sucediendo. De
acuerdo a esto se realizan junto con
ANCAP las investigaciones de mercado correspondientes, los estudios
de las tecnologías disponibles y junto
a un análisis económico de precios
y costos se determina la factibilidad
de la modificación de un producto o
ingreso de un nuevo producto. De
hecho ya hemos lanzado una nueva
línea de lubricantes ANCAP sintéticos y
semi-sintéticos atendiendo a los requerimientos de las nuevas tecnologías
de los motores.
A nivel industrial hemos desarrollado nuevos productos para sistemas
hidráulicos que operan en amplio
rango de temperaturas, aceite sintético para engranajes y grasa de
complejo de litio de amplio espectro
de aplicación.
En la línea de los Lubricantes
TEXACO, CHEVRON ya tiene su
propio desarrollo de productos y nos
ofrece una gama de lubricantes muy
amplia a la cual accedemos y de la
cual podemos importar cuando vemos
una oportunidad de negocios en el
mercado o también cuando un cliente
- ¿Cómo ingresan los biocombustibles en los productos que comercializa DUCSA?
ANCAP produce los combustibles derivados del petróleo y agrega en sus
plantas los biocombustibles, es decir
que DUCSA ya adquiere los combus69
- ¿Cuál es el nivel de concientización
en el cuidado del medio ambiente
por parte de DUCSA?
En DUCSA tenemos un sector de la
empresa que trabaja en pos de la
aplicación de un Sistema de Gestión
Ambiental ISO 14001 para las estaciones de servicio del sello ANCAP,
de manera de hacer amigable con
el medio ambiente las operaciones
que se realizan en las estaciones de
servicio y la gestión de los residuos
que se generan en las mismas. Además de esto, nuestro Departamento
de Asistencia Técnica de Producto
asesora a los clientes en el uso de
los lubricantes y combustibles, para
qué son, qué aplicaciones tienen, cuál
es el mejor uso, cómo hacer un seguimiento de los mismos y en lo que
tiene que ver con la disposición final.
Cuando hay un cambio de lubricante
en un equipo, se genera un residuo
de aceite usado, nuestra empresa
participa de un sistema de gestión
de este residuo para darle un destino adecuado medioambientalmente.
También capacitamos y asesoramos
en el análisis del aceite usado como
una herramienta preventiva para que
los clientes protejan sus máquinas y
para darle un mejor rendimiento al
lubricante.
70
- ¿Qué objetivos tienen para los
próximos años en el negocio lubricantes?
El mercado de los lubricantes es de
libre competencia, no hay monopolio,
existe una gran cantidad de empresas
importadoras que compiten ofreciendo
diversas marcas. La oferta de productos es amplia y el desafío es mantenerse líderes en el mercado. El mundo
se desarrolla y evoluciona, y nosotros
tenemos que ofrecer productos y servicios adecuados que estén acordes
a los requerimientos de los clientes,
buscando el mejor equilibrio entre calidad y precio. Mantener el liderazgo es
el desafío y en particular en el sector
industrial, nuestra empresa con las
dos marcas de lubricantes ANCAP y
TEXACO tiene una excelente herramienta para que esto suceda. Existen
competidores importantes, no obstante
DUCSA tiene importantes clientes industriales que atiende directamente, y
una red de distribución que le permite
llegar a todas las industrias del país,
sean del tamaño que sean.
-¿Cómo se accede a los servicios
de DUCSA?
DUCSA dispone de una logística de
distribución propia, un Centro de Atención al Cliente que funciona en un
amplio horario durante todo el año a
través del número telefónico 0800 6060
y una fuerza de ventas que atiende
personalmente a todos los canales
de ventas y clientes.
- ¿Qué ventajas tiene DUCSA frente
a la competencia en cuanto a los
lubricantes qué ofrece?
La capacidad de tener casi 300 puestos
de venta en todo el Uruguay, tanto de
la línea de Lubricantes ANCAP como
de Lubricantes TEXACO. El stock, la
disponibilidad y la amplia oferta de
productos son las mayores fortalezas,
ya que cubrimos casi la totalidad de las
necesidades del mercado uruguayo.
Otro aspecto diferenciador es el
servicio técnico que atiende permanentemente las consultas de todos
los clientes independientemente de su
volumen de compra. Además contamos con el servicio de análisis de los
lubricantes usados, contando con la
asistencia del laboratorio de lubricantes de ANCAP, el cual es el más completo que hay en Uruguay para hacer
ensayos fisicoquímicos de lubricantes,
además de que está catalogado como
uno de los más modernos laboratorios
en este rubro.
Todo esto nos da un respaldo muy
bueno y un diferencial importante frente a otros competidores.
ESPACIO CONTRATADO
nos hace un pedido específico. Si
nosotros determinamos que hay un
requerimiento por parte de un cliente
y que el volumen involucrado nos
ayuda a facilitar el hecho de realizar
otros negocios y estrechar vínculos
comerciales con ese cliente, no dudamos en importar el producto para
dicho cliente aunque no resulte un
negocio rentable.
SERVICIO TÉCNICO LUBRICANTES ANCAP y TEXACO
Asesoramiento Técnico:
DUCSA ofrece el asesoramiento por parte de profesionales de asistencia técnica, respaldados a su vez por
especialistas en lubricación nacionales y extranjeros.
Servicio de análisis de muestras de lubricantes
usados:
DUCSA brinda un servicio completo de análisis de
aceites y grasas lubricantes para el seguimiento y
control efectivos del funcionamiento de equipos, los
cuales incluyen las interpretaciones y recomendaciones en cada caso, y un histórico de resultados de las
muestras enviadas de cada equipo.
Los ensayos se basan en métodos internacionales
ASTM y otros, a continuación se describen algunos
ensayos típicos para lubricantes de aplicaciones
industriales*:
- Viscosidad cinemática a 40°C.
- Viscosidad cinemática a 100°C.
- Número Ácido Total (TAN).
- Contenido de agua por método de Karl-Fischer.
- Código ISO 4406 de limpieza de aceites industriales (contaminación por partículas)
- Contenido de metales de desgaste (Hierro, Cromo, Cobre) por espectrometría de emisión atómica (ICP).
- Contenido de Silicio por espectrometría de emisión atómica (ICP).
- Oxidación (por absorción infrarroja).
* Pueden adicionarse otros ensayos según requerimiento.
ESPACIO CONTRATADO
El laboratorio que se utiliza a tales efectos es el Laboratorio de Lubricantes de ANCAP, ubicado junto a
la planta de elaboración que dispone ANCAP dentro
de la refinería de La Teja. Dicho laboratorio dispone
de 400 metros cuadrados de instalaciones y es capaz
de realizar más de 100 técnicas distintas de análisis
de productos lubricantes.
La entrega de los resultados para controles de rutina
es realizada vía correo electrónico dentro de las 72
horas hábiles de recibida cada muestra en la sección
INFORMES de Refinería La Teja (Humboldt 3900,
Montevideo). En el caso de análisis urgentes el envío de
los resultados se realiza dentro de las 36 horas hábiles
de recibida la muestra en el lugar antes mencionado.
Guías y Planes de lubricación:
DUCSA ofrece su personal técnico para la realización
de los “Planes y Guías de Lubricación” que incluyen
un relevamiento pormenorizado de maquinarias y
equipos, y el estudio de los manuales de los mismos
para cada punto a lubricar, asegurando que el lubricante sea el adecuado para la aplicación en el punto
y el equipo correcto.
Asistencia Técnica en Lubricación:
DUCSA ofrece sus técnicos para realizar asesoramiento técnico puntual en instalaciones del cliente a
los efectos de verificar la correcta gestión de lubricación general. Esto cubre aspectos de Mantenimiento,
Operaciones, Almacenamiento y Manipulación de
los lubricantes. El objetivo de esta tarea es ayudar a
identificar aspectos de mejora en la gestión.
Capacitación:
Se incluye en la propuesta técnica un programa de
capacitación del personal, brindando conocimientos
generales o de mayor profundidad respecto a los
lubricantes y sus aplicaciones. La temática de la
capacitación incluye:
- Fundamentos de lubricación y aplicación de los
lubricantes.
- Línea de productos ANCAP y TEXACO.
- Lubricación de motores y sistemas hidráulicos.
- Lubricación de transmisiones (automotrices e
industriales).
- Mantenimiento predictivo: análisis del aceite
usado, control del estado de los lubricantes, interpretación de resultados de análisis y toma de
muestras.
- Almacenamiento y manipulación de lubricantes.
- Lubricantes y el cuidado del medio ambiente.
Asimismo se puede diseñar capacitación específica
sobre temas afines a lubricantes de manera de cubrir
los requerimientos de vuestra empresa.
Recolección y disposición de aceite usado:
Para la disposición final de lubricantes usados, DUCSA
cuenta con el servicio sin costo* brindado por PETROMOVIL LTDA para la recolección y traslado de
este peligroso residuo a la Planta Portland ANCAP en
la ciudad de Minas, donde es destruido de acuerdo
a las disposiciones ambientales vigentes en el país.
En cada retiro de lubricantes usados desde las instalaciones del cliente se emite un remito detallando
la cantidad de litros de aceites usados retirados, el
cual debe estar firmado por personal responsable
designado de ambas empresas.
* Sujeto a un volumen mínimo de recolección por parte del cliente
71
72
Descargar