LEY 36/2011, DE 10 DE OCTUBRE, REGULADORA DE LA JURISDICCIÓN SOCIAL. PRINCIPALES NOVEDADES En el BOE del pasado día 11/10/2011 se publicó la Ley 36/2011, de 10 de octubre, reguladora de la jurisdicción social, que entrará en vigor el próximo día 11/12/2011 (a los 2 meses de su publicación en el BOE, de acuerdo con lo previsto en la Disposición Final Séptima de la citada Ley 36/2011), salvo las medidas relativas a las prestaciones derivadas de Ley 39/2006, de 14 de diciembre, de promoción de la autonomía personal y atención a las personas en situación de dependencia, cuya entrada en vigor se producirá por ulterior ley. La Ley 36/2011 deroga y sustituye a la hasta ahora vigente Ley de Procedimiento Laboral, cuyo Texto Refundido fue aprobado por el Real Decreto Legislativo 2/1995, de 7 de abril. De acuerdo con lo expuesto en su Exposición de Motivos, la nueva Ley de la jurisdicción social aspira a una mejor y mayor protección a los trabajadores y a los beneficiarios de la Seguridad Social; pretende una mejor protección de los trabajadores frente a los accidentes laborales y proporcionar una mayor seguridad jurídica al mercado laboral. Las principales novedades introducidas por la Ley 36/2011, y que pueden afectar a las Mutuas, son las siguientes: (i). Ámbito de competencia de la jurisdicción social: Se amplía el ámbito de conocimiento del orden jurisdiccional social, incluyendo en el mismo, todas aquellas 1 materias que de forma directa o por “esencial conexión” puedan calificarse como sociales. Así, se atribuye a la jurisdicción social (artículos 1 y 2 de la Ley 36/2011) además de lo ya previsto en la actual LPL: 1. El conocimiento de todas las cuestiones litigiosas relativas a los accidentes de trabajo y enfermedades profesionales (hasta la fecha, además de la jurisdicción social, los afectados podían o debían acudir a las jurisdicciones civil y/o contencioso-administrativas), creando así un ámbito unitario de tutela judicial para el resarcimiento del daño causado. Se prevé que todas las acciones que los trabajadores o sus causahabientes puedan ejercitar frente al empresario o frente a aquéllos que tuvieran legal, convencional o contractualmente responsabilidad por los daños causados en el trabajo o derivados de un AT/EP se sustanciarán ante la jurisdicción social, incluyendo las reclamaciones contra aseguradoras. No es competencia del orden social el conocimiento de las reclamaciones de responsabilidad patrimonial por los daños y perjuicios causados por la asistencia sanitaria dispensada, que continuará siendo competencia de la jurisdicción contencioso administrativa. 2. El enjuiciamiento del cumplimiento de la normativa de prevención de riesgos laborales: la jurisdicción social actuará como garante del cumplimiento de las obligaciones legal y/o convencionalmente establecidas en materia de prevención de riesgos laborales, incluyendo las reclamaciones de responsabilidad derivadas del incumplimiento de la normativa de prevención de riesgos laborales. Se excluyen las cuestiones litigiosas que se susciten entre el empresario y los servicios de prevención, o entre aquél y los que tengan que coordinar las actividades preventivas. 3. El conocimiento de las cuestiones litigiosas en materia social del personal funcionarial y estatutario; en especial, lo relativo a la prevención de riesgos laborales, la impugnación de convenios colectivos y acuerdos de aplicación al personal laboral de las Administraciones Públicas 2 4. El conocimiento de cualquier vulneración de derechos fundamentales y libertades públicas relacionados o conectados con la relación laboral (especialmente, el caso del acoso). 5. El conocimiento de la impugnación de resoluciones administrativas de la autoridad laboral en procedimientos de suspensión temporal de relaciones laborales, reducción de jornada y despidos colectivos de los art. 47 y 51 ET . 6. El conocimiento de los litigios en materia de prestaciones de Seguridad Social, incluyendo la prestación por desempleo y la de cese de actividad de los trabajadores por cuenta propia; y de las cuestiones derivadas de la aplicación de la ya citada Ley 39/2006. 7. El conocimiento en materia de intermediación laboral de los litigios que surjan entre trabajadores y los SPE (Servicios Públicos de Empleo). 8. El conocimiento de las impugnaciones de los actos de las administraciones públicas dictadas en el ejercicio de sus competencias y funcione en materia de Seguridad Social (excluye la impugnación de la disposiciones generales de rango inferior a la ley y decretos legislativos), con la salvedad de los actos administrativos relativos a inscripción de empresas, formalización cobertura AT/EP, tarifación, afiliación, altas, bajas y variaciones de datos de trabajadores, liquidación de cuotas, actas de infracción y de liquidación sobre cuotas, actos de gestión recaudatoria, que serán competencia de la jurisdicción contencioso administrativa. 9. El conocimiento de las cuestiones que se planteen entre los asociados y las Mutualidades de Previsión social establecidas por el correspondiente colegio profesional. (ii). Capacidad y legitimación: Se reconoce a los Sindicatos la legitimación para accionar en cualquier proceso en que estén en juego intereses colectivos de los trabajadores, así como para que puedan personarse en estos procesos. Asimismo, se exceptúa a los Sindicatos de la obligación de constituir depósitos y consignaciones para recurrir (por lo tanto, sólo las empresas y las mutuas continúan con la obligación de los depósitos y consignaciones). Se prevé que los funcionarios públicos y el personal estatutario gocen también del derecho a la asistencia jurídica gratuita. 3 (iii).Acumulación de acciones y de procesos: Se modifican las reglas de acumulación de procesos y de reparto de asuntos en materias relativas a accidentes de trabajo y enfermedades profesionales: los art. 25, 28 y 30 de la Ley 36/2011 prevén: 1. Que se puedan acumular todas las acciones o pretensiones de resarcimiento de daños y perjuicios derivados de un mismo AT o de una EP, incluyendo las mejoras voluntarios (por ejemplo, el complemento de I.T. – hasta la fecha no se podían acumular en el mismo proceso una reclamación de prestación y de complemento) y las reclamaciones frente a entidades aseguradoras, que se dirijan frente al empresario o frente a un tercero. 2. Que se conozcan por un mismo Juzgado las distintas demandas que se hubieran presentado derivadas del mismo AT o EP. 3. Que se acumularán también en un mismo proceso, aunque las partes sean distintas, las impugnaciones, en materia de prestaciones o FMS derivadas de un AT/EP, del mismo acto administrativo. 4. Que se acumulen todos los procesos derivados del mismo AT/EP, aún cuando las partes sean distintas. 5. Que se puedan acumular los procesos derivados de demandas interpuestas por el trabajador por algunas de las causas del art. 50 ET. (iv). Plazos: El mes de agosto es hábil para, entre otras modalidades procesales, las de impugnación de altas médicas, y para la adopción de medidas cautelares, medidas precautorias o actos preparatorios en materia de AT/EP y de prevención de riesgos laborales. (v). Evitación del proceso: Se refuerza y potencia la conciliación extrajudicial, la mediación y el arbitraje: además de la conciliación, la Ley 36/2011 prevé la posibilidad de la mediación ante el servicio administrativo competente u órgano que se constituya mediante acuerdos interprofesionales, convenios colectivos o los acuerdos de interés profesional de los TRADE; y del arbitraje (laudos arbitrales). Se establece la posibilidad de recurrir o impugnar también el acuerdo de conciliación o de mediación. 4 En caso de incomparecencia injustificada de la parte demandada al acto de conciliación, o de mediación se le impondrá por el Juez las costas del proceso, incluyendo los honorarios, hasta un límite de 600 €, del abogado/graduado social del demandante, si la sentencia coincide, en los sustancial, con lo pretensión de la conciliación o mediación. (vi).Reclamación previa en materia de Seguridad Social y Proceso de impugnación de altas médicas: Se exceptúan de la necesidad de reclamación previa a la vía judicial las impugnaciones de las resoluciones del INSS que acuerden el alta médica por agotamiento de los 365 días de duración de la I.T. En estos casos, la demanda se ha de interponer en el plazo de los 20 días siguientes a la notificación de la resolución o a la fecha en la que alta adquiera plenos efectos. En el resto de casos de impugnación de alta médica, sí será necesaria la reclamación previa, que deberá interponerse en el plazo de 11 días, a contar desde la notificación del alta (hasta la fecha el plazo, era el general de 30 días), y el plazo para contestar a estas reclamaciones será de 7 días ( para el resto se mantiene el plazo general de 45 días), aplicándose el silencio negativo en caso de no dar respuesta. La demanda se interpondrá en el plazo de los 20 días. En caso de acuerdos o resoluciones dictadas por las MATEPSS, la reclamación previa se interpondrá, en su caso, también ante la MATEPSS cuando tenga la competencia para resolver (por ejemplo, en el caso del CATA). Proceso judicial de impugnación de altas médicas: se establece un procedimiento específico, cuyas principales características son: 1º.-No será necesario demandar al SPS, salvo cuando se impugne un alta médica emitida por el SPS, ni a la empresa, salvo que se impugne la contingencia. 2º.- Será un procedimiento urgente y preferente: así el acto de vista se ha de señalar en los 5 días siguientes al de admisión de la demanda, y la sentencia se dictará en el plazo de 3 días (la sentencia no condicionará otros procesos conexos, como los relativos a bases reguladoras o determinación de contingencia). 3º.- No pueden acumularse otra acciones a la de impugnación de alta médica. 4º.- No cabe recurso de suplicación. (vii). Medidas cautelares: Se modifica la regulación de las medidas cautelares y se prevé la adopción de medidas cautelares en los procedimientos de: 1. AT/EP 5 2. Resoluciones de la autoridad laboral sobre paralización de trabajos por riesgo para la seguridad y salud de los trabajadores. 3. Responsabilidad empresarial por falta de reconocimientos médicos (se adoptarán las medidas previstas en los art. 195 y 197 LGSS – responsabilidad de la empresa sobre las prestaciones-). 4. Extinción del contrato a instancias del trabajador por vulneración de sus derechos fundamentales (se puede acordar la suspensión de la relación laboral, el traslado de puesto de trabajo, la reducción de la jornada etc.). (viii).Prueba: Se establecen nuevas reglas sobre la carga probatoria, en especial en materia de accidente de trabajo, con el fin de garantizar la igualdad entre las partes. Las novedades introducidas son: 1. En procesos de vulneración de derechos fundamentales (en especial, en los que existan indicios fundados de discriminación): corresponderá al demandado la carga de la prueba, y en concreto, el aportar una justificación razonable y objetiva de las medidas adoptadas y de su proporcionalidad. 2. En procesos sobre responsabilidades derivadas de AT/EP: corresponderá a los deudores de seguridad (es decir a los obligados a adoptar las medidas de prevención y/o seguridad) y a los concurrentes en la producción del resultado lesivo la carga de la prueba de demostrar que se habían adoptado las medidas necesarias para prevenir o evitar el riego, así como aportar cualquier factor o indicio excluyente o atenuante de su responsabilidad. No será causa exonerante de responsabilidad la culpa no temeraria o la imprudencia profesional del trabajador. (ix). Remisión del expediente administrativo: se prevé que los “organismos colaboradores” remitan también (como las entidades gestoras) su expediente administrativo (preferentemente en soporte informático) al Juzgado, en el plazo de los 10 días siguientes al de admisión de la demanda, requiriéndosele asimismo (al igual que a las entidades gestoras) para que informe sobre si conoce de la existencia de otras demandas frente al mismo acto o actuación, con el fin de acordar, en su caso, la acumulación. Recibido el expediente administrativo, el órgano jurisdiccional podrá acordar el emplazamiento de las personas que pudieran tener un interés legítimo en el proceso o resultar afectadas por el mismo. 6 (x). Procesos de tutela de derechos fundamentales: En los procesos de tutela de derechos fundamentales y libertades públicas, y de acoso se podrá accionar frente al empresario, y/o frente a cualquier otro sujeto que resulte responsable. (xi). Proceso monitorio: se introduce este nuevo procedimiento en la jurisdicción social (proviene de la jurisdicción civil), mediante el que se sustanciarán Reclamaciones frente a empresarios que no se encuentren en situación de concurso de cantidades vencidas, exigibles y de cuantía determinada derivadas de la relación laboral, y reclamaciones frente a entidades gestoras o colaboradoras (MATEPSS) cuya cuantía no exceda de los 6.000 € . Se trata de un procedimiento que se seguirá, en primer término, ante el Secretario Judicial: planteada la petición, se requerirá al deudor (empresario, entidad gestora o colaboradora) para que en un plazo de 10 días pague al trabajador o para que en ese mismo plazo comparezca ante el Juzgado y formule su oposición por no adeudar cantidad alguna (en todo o en parte). Si en ese plazo no paga o no formula alegaciones se despachará ejecución contra él. En el caso que se haya formulado oposición, el trabajador tendrá un plazo de 4 días para presentar la correspondiente demanda ante el Juzgado de lo Social. (xii). Recurso de suplicación:Se modifica la regulación del recurso de suplicación: se actualiza la cuantía para acceder al recurso de suplicación, y se pasa de los 1.800 € actuales a 3.000 € . (xiii).Recurso de casación: En la regulación del recurso de casación desaparece la necesidad de emplazamiento ante el TS (el recurso se presenta ante la Sala del TSJ o de la AN, así como la impugnación y posteriormente se remiten las actuaciones al TS). (xiv). Recurso de casación para la unificación de doctrina: Se modifica la regulación del recurso de casación para la unificación de doctrina, ampliando su ámbito: así se permite que se pueda alegar, como doctrina de contradicción, además de Sentencias del propio TS o de otros TSJ, sentencias del TC, sentencias dictadas por órganos jurisdiccionales internacionales en materia de derechos humanos y libertades fundamentales y Sentencias del TJUE. Se reconoce al Ministerio Fiscal legitimación para interponer este recurso, ya sea de oficio o ya sea a instancias de los sindicatos, organizaciones empresariales, 7 asociaciones representativas de los TRADE o entidades públicas que ostenten un interés legítimo sobre la cuestión planteada. Desaparece igualmente la necesidad de emplazamiento ante el TS. (xv). Disposiciones comunes a los recursos de suplicación, casación y casación para unificación de doctrina: 1º.- Se modifican las cuantías de los depósitos para recurrir: 1. Recurso de suplicación: 300 € (en la actualidad 150 €). 2. Recurso de casación para unificación de doctrina: 600 € (en la actualidad 300 €). 2º.- En cuanto a la consignación de los CCR, se otorga un plazo de 5 días para efectuar su ingreso en la TGSS, desde que se notifique el importe a ingresar. Se exceptúa de este requisitos a las entidades gestoras, que deberán presentar una certificación acreditativo del inicio del abono de la prestación y de su continuidad durante la tramitación del recurso. La consignación la ha de hacer también el declarado responsable por FMS, así como por el condenado al pago de mejoras voluntarias de la acción protectora de la Seguridad Social. Se puede sustituir la consignación por el aseguramiento mediante aval bancario solidario de duración indefinida y pagadero a primer requerimiento emitido por la entidad de crédito. 3º.- Las sentencias dictadas por los TSJ (en recursos de suplicación) o por el TS (en recursos de casación o de casación para la unificación de doctrina) impondrán las costas a la parte vencida (salvo que gocen del beneficio de justicia gratuita, sean sindicatos, funcionarios o personal estatutario), que incluirán los honorarios del abogado o graduado social colegiado que haya asumido la defensa o representación técnica de la parte, sin que puedan superar los 1.200 € en recurso de suplicación (en la actual regulación, 600 €) y los 1.800 € en recurso de casación (900 € en la actual regulación). Se contempla la posibilidad de imponer la multa por temeridad en el caso que se entienda que el recurso se interpuso con propósito dilatorio. Se prevé la posibilidad que las partes puedan alcanzar un convenio transaccional en cualquier momento durante la tramitación del recurso, que será 8 homologado por el órgano judicial siempre que no suponga lesión grave para alguna de las partes, fraude de ley o un abuso de derecho. (xvi). Otras disposiciones: La Ley 36/2011 en sus Disposiciones Finales entre otras medidas establece: - Modifica la Ley 20/2007, de 11 de julio, de Estatuto del Trabajo Autónomo: introduce un nuevo artículo 11 bis para regular el supuesto de negativa del empresario a la formalización del contrato del TRADE, en cuyo caso la cuestión deberá plantearse ante la jurisdicción social. Se modifican también los artículos 12 y 17. - Se prevé que en el plazo de 6 meses a partir de la entrada en vigor de la Ley 36/2011, el Gobierno adoptará las medidas necesarias para la aprobación de un sistema de valoración de daños derivados de AT y EP, mediante un sistema específico de baremo de indemnizaciones actualizables anualmente, para la compensación objetiva de dichos daños cuando las víctimas o sus beneficiarios no acrediten daños superiores. DIRECCIÓN DE ASESORÍA JURIDICA Octubre 2011. 9 10