Fecha de publicación global (inglés): 19 de noviembre de 2013 Fecha de publicación (español): 20 de mayo de 2014 Criterios | Empresas | Industrias Factores Crediticios Clave para la Industria de Proveedores de Autopartes Analistas principales: Nishit K Madlani, Nueva York (1) 212-438-4070; nishit.madlani@standardandpoors.com Barbara Castellano, Milán (39) 02-72111-253; barbara.castellano@standardandpoors.com Global Criteria Officers: Mark Puccia, Nueva York (1) 212-438-7233; mark.puccia@standardandpoors.com Peter Kernan, Londres (44) 20-7176-3618; peter.kernan@standardandpoors.com 1. Standard & Poor's Ratings Services está perfeccionando y adaptando su metodología y supuestos de sus factores crediticios clave para la industria de proveedores de autopartes. Publicamos este artículo para ayudar a los participantes del mercado a entender mejor estos factores crediticios clave. Este artículo está relacionado con nuestros criterios para calificar empresas (véase "Metodología para calificar empresas", publicado el 19 de noviembre de 2013) y con nuestro artículo sobre criterios "Principios de las Calificaciones Crediticias ", publicado el 16 de febrero de 2011. 2. Estos criterios sustituyen a "Key Credit Factors: Business And Financial Risks In The Auto Component Suppliers Industry", publicado el 28 de enero de 2009. ALCANCE DE LOS CRITERIOS 3. Estos criterios aplican a los proveedores de componentes de autos y camiones en todo el mundo. Definimos a los proveedores de componentes de autos como aquellas empresas que obtienen la mayoría de su ingreso de la producción, ensamble, venta y distribución de partes o servicios para la industria automotriz o de producción de vehículos comerciales y de sus correspondientes mercados de refacciones. 4. Estos criterios no aplican a las concesionarias automotrices, que están cubiertas por "Factores Crediticios Clave para la Industria Comercial y Restaurantera", publicado el 19 de noviembre de 2013. RESUMEN DE LOS CRITERIOS 5. Standard & Poor's actualiza sus criterios para analizar a los proveedores de componentes de autos, con base en la aplicación de sus criterios para calificar empresas. 6. Consideramos la industria de proveedores de autopartes como una industria de ‘riesgo moderadamente alto’ de acuerdo con nuestros criterios dado su riesgo ‘moderadamente alto’ de comportamiento cíclico y el grado ‘moderadamente alto’ de riesgo competitivo y de crecimiento. Cuando evaluamos la posición competitiva de un proveedor de autopartes, ponemos un énfasis particular en la posición de mercado y las posibilidades de crecimiento de sus segmentos de mercado, diferenciación de producto, alta demanda de capital, comportamiento cíclico de los mercados finales y el nivel de diversidad y eficiencia operativa, incluyendo flexibilidad en los costos base y sensibilidad a los precios de materias primas. En nuestra evaluación del perfil de riesgo financiero, consideramos las necesidades de gasto de capital específicas de la industria o de la empresa, características de capital de trabajo (incluyendo estacionalidad), flujos de salida y entrada durante el curso del ciclo del negocio y su efecto en los índices de cobertura de flujo de efectivo. 1 IMPACTO SOBRE LAS CALIFICACIONES ACTUALES 7. No esperamos que estos criterios, en y por sí mismos, se traduzcan en algún cambio de calificación. Vea los criterios para calificar empresas para el impacto sobre las calificaciones para esta industria. FECHA DE ENTRADA EN VIGOR Y TRANSICIÓN 8. Estos criterios son efectivos inmediatamente en la fecha de publicación. METODOLOGÍA Parte I -- Análisis de riesgo del negocio A. Riesgo de la industria 9. Dentro del marco de los criterios globales para calificar empresas de Standard & Poor's, para evaluar el riesgo industria consideramos a la industria de proveedores de autopartes como de ‘riesgo moderadamente alto’ (categoría 4). Nuestra evaluación del riesgo de la industria se deriva de nuestra opinión sobre el grado ‘moderadamente alto’ de comportamiento cíclico del segmento (4) y nuestra evaluación de que la industria también tiene un nivel ‘moderadamente alto’ (4) de riesgo competitivo y de crecimiento. 10. Los factores clave del comportamiento cíclico en la industria de proveedores de autopartes incluyen los siguientes: • • • • Volatilidad del crecimiento económico y confianza del consumidor; Elevados costos fijos para operar en la industria; Presión de los clientes más grandes sobre el establecimiento de precios, y Potencial de reincidencia de una marcada volatilidad en los costos de materias primas y energía. 11. Volatilidad del crecimiento económico y confianza del consumidor: Los proveedores de autopartes a la demanda derivada. El alto grado de comportamiento cíclico de su industria como cliente, la manufactura automotriz, es un factor de riesgo crítico para los proveedores de autopartes debido a su elevado apalancamiento operativo, especialmente, dado lo variable y difíciles de proyectar que son los programas de producción de los clientes. Los automóviles representan artículos de gran valor para la mayoría de los individuos y por lo tanto, la confianza del consumidor (con frecuencia inconstante) es un factor clave detrás de las ventas. El crecimiento del empleo, formación de la familia, tasas de interés, disponibilidad de crédito, y la demanda impulsada por el consumidor (por ejemplo, un mayor uso de los sistemas de información y entretenimiento y mayor eficiencia del combustible) son otras variables que contribuyen a moldear la demanda. Para los vehículos comerciales, el comportamiento cíclico está más estrechamente relacionado con el crecimiento económico y el nivel de confianza en el negocio ya que los clientes incluyen a empresas de carga y pequeñas empresas de transporte carretero o a propietarios-operadores individuales. (Refiérase también a "Key Credit Factors For The Auto And Commercial Vehicle Manufacturing Industry", publicado el 19 de noviembre de 2013). 12. Elevados costos fijos para operar en la industria: Esto genera un riesgo de volatilidad sustancial en los ingresos debido a que los proveedores de autopartes necesitan hacer inversiones de capital considerables para asegurar acuerdos de suministro con las grandes armadoras de automóviles. Estas inversiones no se recuperan necesariamente en su totalidad de estos grandes clientes, dada la inherente volatilidad para la demanda de nuevos vehículos y el potencial de un mal desempeño de una plataforma de un modelo dado. El exceso de construcción de capacidad de producción en la industria automotriz probablemente creará más presión competitiva y sobre los ingresos, especialmente en caso de una desaceleración cíclica en la demanda. Por consiguiente, los proveedores de autopartes necesitan demostrar cierta resistencia en un escenario económico adverso mediante su habilidad para reducir continuamente sus bases de costos conforme se reducen los ingresos. El elevado apalancamiento operativo que caracteriza esta industria es, 2 con frecuencia, exagerado del lado financiero por estructuras de capital altamente apalancadas y la volatilidad de los flujos de efectivo que afectan negativamente la calidad del servicio de deuda. 13. Presión de los clientes más grandes sobre el establecimiento de precios: La presión sobre los márgenes se exacerba por las reducciones de precio periódicas incorporadas dentro de los acuerdos de suministro y con frecuencia, los proveedores de autopartes afrontan márgenes de utilidades reducidos en relación a su base de costos fijos. En los mercados maduros, debido a que las armadoras de automóviles han tenido un poder limitado para establecer precios con los consumidores, buscan concesiones de precio de sus proveedores; estas empresas, a su vez, exigen lo mismo de sus propios proveedores y así sucesivamente hacia abajo de la cadena de producción (refiérase también a "Key Credit Factors For The Auto And Commercial Vehicle Manufacturing Industry", publicado el 19 de noviembre de 2013). 14. Potencial de reincidencia de una marcada volatilidad en los costos de materias primas y energía: Este sigue siendo el desafío de mayor potencial para la industria de autopartes. Los márgenes reducidos, debido a la naturaleza altamente competitiva del negocio, se han erosionado aún más en las pasadas desaceleraciones por los crecientes costos. Consideramos que sería poco probable que la cadena de suministro y producción fuera capaz de transferir completamente los potencialmente crecientes costos a los clientes finales. 15. El efecto de las características del comportamiento cíclico, arriba mencionadas, se observa en los datos de transición de calificaciones en la industria de proveedores de autopartes en la historia reciente –con cerca de 35 entidades que han incumplido desde 2004. Para los proveedores que han incumplido desde finales de 2004, el tema común ha sido la combinación de pérdida en la participación de mercado y abruptos recortes en la producción de sus clientes principales, un fuerte incremento en los costos no recuperados de materias primas y el deterioro en la liquidez –todo lo cual ocurrió en el mismo periodo de 12 meses. 16. El sector de proveedores de autopartes, con calificaciones predominantemente de grado especulativo, siempre ha sido vulnerable ante los recortes y la volatilidad en la producción de vehículos, debido a sus elevados costos fijos y a la falta de apalancamiento con las armadoras de automóviles, que pueden utilizar su poder de compra para pedir concesiones de precio y dejar a los proveedores con poca protección sustancial de precio. Además, muchas empresas tuvieron balances endeudados después de un periodo no tan exitoso de consolidación de la industria. 17. En nuestra opinión, la recuperación (solamente dos proveedores de autopartes calificados presentaron solicitudes de bancarrota de 2010 a 2013, después de que 15 proveedores incumplieran en 2008-2009) ha sido más pronunciada en la industria automotriz que en todo el sector de industrias corporativas. Esto se debe a la severidad del estrés y a los esfuerzos que los proveedores han realizado para realinear sus operaciones y evitar un escenario similar en el caso de trastornos futuros. La mayoría de los proveedores más grandes han salido ahora de la bancarrota o han sido vendidos y los que incumplieron también salieron de esta situación con cargas de deuda más manejables a través de sus reestructuras. 1. Comportamiento cíclico 18. Evaluamos el comportamiento cíclico de la industria de proveedores de autopartes en un nivel de ‘4’, lo que refiere a ‘riesgo moderadamente alto’. La industria ha demostrado un comportamiento cíclico moderadamente alto –con respecto a otras industrias– tanto en ingresos como en rentabilidad, que son los dos indicadores claves utilizados para derivar una evaluación del comportamiento cíclico de una industria (véase "Metodología: Riesgo de la Industria", publicado el 19 de noviembre de 2013). Con base en nuestro análisis de la información global Compustat, los proveedores de autopartes experimentaron deterioros promedio a través del punto más alto hasta el punto más bajo del ciclo económico (PTT, por sus siglas en inglés) en ingresos y rentabilidad (medido por el margen EBITDA) de 9.5% y 13.5% respectivamente, durante los periodos de recesión desde 1952. 3 19. Para los proveedores de autopartes, en dos de los nueve periodos de recesión desde la década de los años 1950 (1979-1982 y 2007-2009), el ingreso disminuyó significativamente más que el 9.5% de deterioro promedio. Esto se debió al shock petrolero a finales de 1979 que siguió a la recesión, el cual detonó una inflación de dos dígitos y llevó las tasas de interés por encima de 20% mientras que la confianza del consumidor se deterioró significativamente generando una depresión en toda la industria automotriz. A la larga, la crisis petrolera forzó a las armadoras de automóviles estadounidenses a resolver sus problemas de calidad y de rendimiento. 20. El deterioro en los ingresos de los proveedores de autopartes durante el periodo de recesión más reciente (2007-2009) fue precipitado por las caídas promedio de ingresos PTT de casi 31% para sus clientes productores de equipo original (OEM, por sus siglas en inglés), derivado de la debacle en el mercado de vivienda, y que causó severos desplomes en los márgenes mayores y más elevados de ventas de vehículos, llevando a GM y Chrysler a presentar solicitudes de bancarrota. Dados los destinos entrelazados de las entidades que operan en la industria automotriz, la caída de las grandes armadoras de automóviles afectó adversamente a varios proveedores de autopartes y los problemas en la cadena de suministro desafiaron aún más las posibilidades de recuperación para los OEMs desde el punto de vista de liquidez. 21. Dada la intensidad en el uso de capital y la naturaleza de elevados costos fijos de la industria, las tendencias en la caída PTT en el margen EBITDA están altamente correlacionadas con los periodos de mayor descenso PTT en los ingresos de la industria (véanse los párrafos 19 y 20). 22. Con una caída promedio de 9.5% en ingresos y un descenso promedio de 13.5% en la rentabilidad, la evaluación del comportamiento cíclico de los proveedores de autopartes se refiere a (4) ‘riesgo moderado’. Generalmente consideramos que entre más alto es el nivel del comportamiento cíclico de la rentabilidad en una industria, más alto es el riesgo crediticio de las entidades que operan en esa industria. Sin embargo, el efecto total del comportamiento cíclico sobre el perfil de riesgo de una industria puede mitigarse o exacerbarse por su entorno competitivo y de crecimiento. 23. De manera similar que algunos de sus grandes clientes que son armadoras de automóviles, varios proveedores de automóviles y de vehículos comerciales reorganizaron sus operaciones durante la desaceleración mediante el cierre de sus instalaciones de alto costo, reduciendo los niveles de personal y saliendo de las líneas de producción de bajo rendimiento, muchas de las cuales eran de elevado intensidad en el uso de capital. Varias empresas utilizaron la protección de bancarrota o intercambios de deuda similares a incumplimiento para reestructurar sus balances y alinearlos mejor con la industria automotriz cíclica. 24. Con el beneficio de estas acciones y la recuperación en la demanda de autos, los proveedores de autopartes, en general, han reducido sus niveles de punto de equilibrio de volumen y están mejor posicionados (que en los años anteriores) para afrontar otro escenario de recesión. Esto sería consistente con nuestra opinión de una evaluación de riesgo moderadamente alta para el sector de la industria de proveedores de autopartes. 2. Riesgo competitivo y crecimiento 25. Consideramos que la industria de proveedores de autopartes tiene una evaluación de riesgo competitivo y de crecimiento ‘moderadamente alto’ (categoría 4). Para evaluar el riesgo competitivo y el crecimiento, analizamos los siguientes cuatro subfactores y los clasificamos como de riesgo bajo, mediano o alto: • • • • Efectividad de las barreras de entrada de la industria; Nivel y tendencia de los márgenes de rentabilidad de la industria; Riesgo de cambio secular y sustitución por productos, servicios y tecnologías, y Riesgo en las tendencias de crecimiento. 4 a) Efectividad de las barreras de entrada – riesgo mediano 26. Las barreras de entrada son, en general, relativamente elevadas en la industria de proveedores de autopartes, dado el gran y continuo requerimiento de gastos de capital, especialmente aquellos con un horizonte de retorno de largo plazo. Así como ocurre con otras industrias como la de servicios públicos, acero y aeroespacial, este es con frecuencia un obstáculo importante para las entidades que tratan de incursionar porque su acceso a financiamiento con deuda y capital a menudo es más débil que el de los proveedores principales de la industria. 27. Las siguientes características de la industria de proveedores de autopartes respaldan nuestra opinión sobre la efectividad de algunas barreras inherentes: • • • • Muchos proveedores fabrican productos que son muy complejos, con desviaciones mínimas dadas las rigurosas especificaciones (por ejemplo, ciertas partes de seguridad que son críticas), lo que crea barreras de entrada para competidores menores. Las armadoras de automóviles realizan inversiones considerables para la selección, integración y pruebas como parte de su desarrollo de producto. Esto beneficia a los proveedores principales a los que se ha confiado como socios de desarrollo de producto para volúmenes elevados de componentes críticos de bajo costo, especialmente si ofrecen una cobertura global con sus instalaciones de producción y logística. Varios proveedores operan (con un buen historial) en segmentos enfocados en el rendimiento de combustible (ya sea a través de productos relacionados con el motor o productos que ofrecen una significativa reducción de peso), emisiones o seguridad. La confianza del cliente en sus capacidades técnicas con frecuencia puede evitar cualquier perspectiva creíble de entrada de competidores. Muchos proveedores pequeños y medianos que no pueden desarrollar una cobertura de entrega global probablemente no serán considerados para atender el sustancialmente creciente número de solicitudes de cotización sobre las plataformas mundiales. Han habido reducciones sustanciales de capacidad (incluyendo demoliciones y el cierre permanente de algunas fundiciones) en subsegmentos tales como los de fundición y forjado después de la Gran Recesión, junto con el elevado costo que representa para los competidores la instalación de más capacidad, lo que puede demostrar ser una importante barrera de entrada. 28. Sin embargo, en nuestra opinión, las siguientes características contrarrestan de manera más que suficiente la efectividad de algunas barreras inherentes de entrada (en una industria intensiva en capital), al limitar a los nuevos participantes: • • • Los proveedores operan en una industria fragmentada y los proveedores principales no se benefician necesariamente del tamaño y de las eficiencias debido a que la industria aún está madurando. Como resultado, están expuestos a los riesgos relacionados con la expansión geográfica y potencialmente compiten con proveedores locales conforme sus clientes OEM expanden su presencia. Consecuentemente, esto limita la efectividad de las barreras de entrada al excluir a los nuevos competidores en algunos subsegmentos, especialmente comparados con sus clientes OEM. Existe una alta probabilidad de competencia de parte de los proveedores que se benefician de menores costos de mano de obra, tasas impositivas más bajas y, en algunos casos, de subsidios de exportación o para materias primas. Ciertos segmentos, tales como los marcos de los asientos, los paneles de instrumentos y ciertos productos electrónicos para vehículos, ofrecen productos masivos y son menos intensivos en el uso de capital. Los competidores pueden desplazar a los proveedores principales relativamente fácil y ganar credibilidad con los clientes. b) Nivel y tendencia de los márgenes de rentabilidad de la industria – riesgo alto 29. Persisten fuertes variaciones de los márgenes operativos debido a la constante presión para el establecimiento de precios por parte de los grandes clientes OEM y el riesgo de que se presenten variaciones en los precios de materias primas. 5 30. La mayoría de los acuerdos de suministro de autopartes (con clientes OEM) incluyen requisitos de reducción de precio a lo largo de la vida del contrato. Conforme los proveedores de autopartes amortizan los costos de capital y aumentan la producción desde el punto de vista tecnológico y de proceso, sus clientes OEM más grandes esperan que una porción de las crecientes utilidades se comparta a través de reducciones de precio de los componentes. Esta característica obliga a los proveedores a adoptar un enfoque continuo en la mejora de márgenes mayormente a través de reducciones de costo. Para varios proveedores de autopartes, consideramos que el reciente incremento en el margen de rentabilidad que surge del aumento en el establecimiento de precios debido a la baja capacidad de suministro y a la creciente demanda, puede no ser sostenible y existe un riesgo a más largo plazo de un deterioro en la rentabilidad de la industria desde los niveles recientes. 31. Las empresas que seguirán siendo vulnerables serían las que afronten una erosión en sus márgenes debido a su incapacidad para compensar las reducciones de precio de los OEM con mejoras en su propio desempeño. Por ejemplo, durante la desaceleración 2008-2009, muchos de los proveedores de autopartes estadounidenses se reorganizaron bajo el esquema de bancarrota y ajustaron significativamente sus estructuras de costo en estas áreas. Sin embargo, la capacidad para mejorar continuamente la eficiencia operativa es crítica para tener éxito en la industria de proveedores de autopartes. 32. Dependiendo de la naturaleza de los componentes que ofrezcan, la fortaleza y la sustentabilidad de la rentabilidad también dependerá de cuán vulnerable es un proveedor ante los movimientos de precios de materias primas. El impacto de las materias primas básicas (commodities) puede estimarse analizando las materias primas claves y desglosando los costos de los insumos (incluyendo la existencia de contratos de cobertura). La habilidad para trasladar los precios de las materias primas sin una demora importante (de tres a seis meses) puede tener un impacto significativo en la rentabilidad y el efectivo utilizado y liberado en un ciclo normal de capital de trabajo. 33. Los riesgos anteriores pueden más que compensar la mejora a largo plazo en las estructuras de costo posterior a las desaceleraciones económicas y bancarrotas y reorganizaciones. c) Riesgo de cambio secular y sustitución por productos, servicios y tecnologías – riesgo mediano 34. En general, consideramos que existe una probabilidad moderada de riesgo de sustitución. 35. Las carteras de productos con un alto contenido tecnológico actual o potencial (tal como los turbocargadores y nuevas tecnologías de mecanismos de tren motriz que buscan mejorar el rendimiento de combustible) pueden demostrar ser una barrera de entrada, lo que genera un bajo riesgo de sustitución. 36. Por el contrario, aquellos proveedores en segmentos de productos que se caracterizan por contenido tecnológico relativamente bajo, afrontan un mayor riesgo de sustitución (tales como el sellado de automóviles o el estampado de hojas de metal) en comparación con otros. 37. Consideramos que para algunos proveedores (por ejemplo, audio automotriz, sistemas de información y entretenimiento, servicios de telemática) existe un potencial de que se presente más competencia de participantes más grandes dentro o fuera de la industria automotriz, de manera que consideramos que existe, al menos, cierto riesgo discernible de sustitución. d) Riesgo en las tendencias de crecimiento – riesgo alto 38. Consideramos a la industria de proveedores de autopartes como una industria establecida cuyas ventas crecen entre el 1% y la tasa de crecimiento nominal del PIB a mediano plazo. Sin embargo, para la industria automotriz en general (armadoras de automóviles y proveedores) existe una alta probabilidad de que las ventas en estos mercados probablemente se contraigan de manera más severa que las caídas del PIB durante las recesiones. 39. Percibimos la tendencia de crecimiento en la industria de proveedores de autopartes como de ‘riesgo alto’, con respecto a la de armadoras de automóviles (‘riesgo mediano’). Las caídas sostenidas de ventas 6 de automóviles generan la necesidad de ajustes en la capacidad por parte de los proveedores que tradicionalmente tienen menores medios financieros para recuperarse de un entorno de recesión prolongado en una región en particular en comparación con sus clientes OEM grandes y más diversos globalmente. 40. Los proveedores probablemente afronten el fuerte desafío de alinear sus capacidades de producción para satisfacer a largo plazo menos plataformas, pero que sean globales. Los riesgos se derivan de la mayor presión sobre los proveedores para diseñar y producir autopartes globalmente, lo que se traduce en operaciones más complejas que necesitan administrar. Las empresas afrontan el riesgo de sobreestimar su capacidad para manejar la complejidad global de rápido crecimiento en su organización e instalaciones de producción mientras invierten en investigación y desarrollo (R&D, por sus siglas en inglés) global y en el desarrollo de recursos. 41. En los mercados maduros, la tasa de crecimiento de ventas se ha desacelerado y parte de esto puede atribuirse a un cambio en los hábitos sociales y en la disponibilidad de opciones alternativas de movilidad que pueden contribuir a una tendencia de más largo plazo de una erosión lenta pero sostenida en el uso del automóvil. 42. Aunque la industria de proveedores de autopartes está razonablemente bien establecida con posibilidades moderadas de crecimiento en el mediano plazo, este crecimiento también podría ser un generador de riesgo. Algunos sub-segmentos de la industria de proveedores de autopartes se enfocan en el uso de nueva tecnología mientras que muchos aún tienen un modelo de negocio con viabilidad comercial a largo plazo no probada en lo que se refiere a alienar su capacidad con clientes en los mercados emergentes. 43. Además, el riesgo a mediano plazo también persiste conforme los costos se propagan en la industria para respaldar el crecimiento de ventas y el número mucho mayor de lanzamientos de productos desde la recesión de 2008-2009. B. Riesgo país 44. El riesgo país tiene un rol crítico en la determinación de todas las calificaciones de las empresas en un país. Los factores de riesgo relacionados con el país pueden tener un efecto sustancial en la calidad crediticia de una empresa, tanto directa como indirectamente. Aunque nuestras calificaciones crediticias soberanas sugieren el riesgo general que afrontan las entidades locales, pueden no captar completamente el riesgo aplicable al sector privado. Vemos más allá de la calificación soberana para evaluar los riesgos económicos, demográficos y otros del país específicos que pudieran afectar la calidad crediticia de la entidad. Para evaluar el riesgo país para los proveedores de autopartes, nuestro análisis utiliza la misma metodología que para otros emisores corporativos (véase nuestra metodología para calificar empresas). 45. Para los proveedores de autopartes con exposición a más de un país, mediremos la proporción de exposición a cada uno con base en los ingresos por país. Si existe una variabilidad significativa en los márgenes de rentabilidad (por región), podemos utilizar el EBITDA proyectado (en lugar de los ingresos) por país para reflejar la exposición a un país de mayor riesgo. C. Posición competitiva (incluyendo rentabilidad) 46. De acuerdo con nuestros criterios globales para calificar empresas, la posición competitiva se evalúa como (1) excelente, (2) fuerte, (3) satisfactoria, (4) razonable, (5) débil o (6) vulnerable. Para evaluar la posición competitiva para los proveedores de autopartes, revisamos los siguientes factores en cada empresa: • • • • Ventaja competitiva; Tamaño, alcance y diversidad; Eficiencia operativa, y Rentabilidad 7 47. Evaluamos los primeros tres componentes de manera independiente como (1) ‘fuerte’, (2) ‘fuerte/adecuado, (3) ‘adecuado’, (4) ‘adecuado/débil, o (5) ‘débil’. La rentabilidad se evalúa con base en la combinación del nivel y de la volatilidad de la rentabilidad. 48. Después de evaluar de manera separada la ventaja competitiva, el tamaño, alcance y diversidad y la eficiencia operativa, determinamos la evaluación preliminar de la posición competitiva atribuyendo un peso específico a cada componente. Las ponderaciones aplicables dependerán del Perfil de Grupo de la Posición Competitiva (PGPC) de la empresa 49. El PGPC asignado a los proveedores de autopartes es de ‘enfoque en capital o activos’. Ponderamos los primeros tres componentes de la posición competitiva de la siguiente manera: ventaja competitiva (30%), tamaño, escala y diversidad (30%) y eficiencia operativa (40%). 1. Ventaja competitiva 50. Nuestra evaluación de la ventaja competitiva para los proveedores globales de autopartes incluye una revisión de los siguientes factores: • • • Posición de mercado, estrategia, mezcla de productos, servicio y calidad del producto, y proposición de valor; Capacidad para satisfacer entornos regulatorios y políticos complejos y en evolución, debido a la economía energética cada vez más estricta, estándares de seguridad y emisiones (y costos) relacionados con cambios en tecnología, barreras de entrada, y Capacidades e inversión en R&D y diseño e ingeniería. 51. Consideramos un historial demostrado de impulso a la posición de mercado y mejora del tamaño, como un factor determinante significativo de la capacidad de un proveedor de autopartes para distribuir los gastos indirectos, servir mejor a los clientes en todo el mundo y apalancar eficientemente sus gastos en R&D en una amplia gama de productos. Pueden existir también ventajas de mercadotecnia, distribución y compras. En la medida que haya información disponible, medimos el porcentaje de la participación de mercado del proveedor de autopartes por segmento de producto o por línea de productos y por región. No tenemos niveles absolutos para evaluar la participación de mercado. Dada la variedad de mercados finales y segmentos dentro del sector del proveedor de autopartes, evaluamos la participación de mercados en varias formas porque una participación de 20% en un segmento con tres a cuatro grandes competidores puede no ser suficiente para obtener una ventaja competitiva significativa, mientras que una participación de 20% en un segmento con 15 competidores menores puede indicar una fuerte posición competitiva. Vigilamos las tendencias de más largo plazo en la participación de mercado –al alza o a la baja— que pueden indicar una mezcla de producto favorable o desfavorable comparada con la demanda actual del mercado. 52. La inversión en diseño, ingeniería, R&D y tecnología de soporte es crítica, dada la creciente complejidad de las autopartes y los vehículos de hoy en día. Consideramos que los proveedores que gastan más en R&D que el promedio de la industria, tradicionalmente cuentan con las reputaciones más altas en cuanto a la calidad del producto y también se benefician de un crecimiento por arriba del promedio. Los productos diseñados por encargo aumentan el valor que un proveedor da a su cliente al diferenciar el aspecto o rendimiento y puede también servir para reducir la rotación de clientes. 53. La innovación es importante para la estabilidad de las ventas, crecimiento y protección de margen debido a la presión competitiva para mejorar las ofertas, los crecientes requisitos del cliente y la presión de costos proveniente de los crecientes costos de insumos. Las armadoras de automóviles dependen de los proveedores que suministran tecnología avanzada para mejorar la funcionalidad de sus productos a través de la innovación. 8 54. Cuando es aplicable, analizamos la R&D como un porcentaje de las ventas (contra los promedios de la industria) y el historial de éxito a través de la introducción de nuevos productos cuando la información está disponible. Para rediseñar un vehículo, las mejoras de calidad podrían también conducir a menores conteos de autopartes por modelo individual de automóviles, reduciendo potencialmente los costos de producción totales. 55. Un proveedor de autopartes con una evaluación para su ventaja competitiva como ‘fuerte’ o ‘fuerte/adecuada’, tradicionalmente se caracteriza por cualquier combinación de los siguientes factores: • • • • • • • Orientada a precio con prima (en relación con otros proveedores) dadas sus posiciones de mercado dominantes dentro de un subsegmento. Cartera de productos de alto valor agregado tales como mecanismos de tren motriz turbocargados o componentes de seguridad activa en lugar de los productos masivos como los interiores de los vehículos o el estampado de metal. Proveedores con una cartera de productos tecnológicamente avanzados y con un historial de respaldo a la innovación y considerable poder para establecer precios. Entre el gran número de proveedores de autopartes que carecen de algún poder significativo para establecer precios frente a los clientes OEM mucho mayores, tendemos a considerar más favorablemente a aquellos que hayan demostrado la capacidad para reducir costos y compensar las reducciones anuales de precio exigidas por los clientes. Posibilidades para un crecimiento orgánico mayor contra el de la industria total a través de considerables órdenes por ejecutar, sustentabilidad de la obtención de nuevos negocios y/o los beneficios de las plataformas de alto volumen y de la tecnología. Buen historial por mejora de la posición de mercado a través de pequeñas adquisiciones sinérgicas enfocadas a reforzar la tecnología o mejorar la integración de la cadena de suministro más que con base en grandes adquisiciones, que, en cualquier caso, son raras. Los proveedores de autopartes tradicionalmente utilizan las adquisiciones para mejorar el crecimiento del ingreso, expandir las líneas de producción, consolidar la participación de mercado, lograr sinergias de costo y obtener acceso a tecnología superior. Capacidad demostrada para desarrollar rápidamente una amplia variedad de productos y poder fabricarlos en grandes cantidades a bajo costo posiblemente a través de la integración vertical que se traduce en el desarrollo de relaciones sólidas con las grandes armadoras de automóviles para obtener negocios nuevos. Por ejemplo, la capacidad interna permite a ciertos proveedores desarrollar equipo hasta a un 30% de costo más bajo que las líneas de moldeo de sus clientes OEM. Capacidades R&D demostradas que muy probablemente generen productos o servicios superiores y diferenciados. Esto se demuestra por el liderazgo tecnológico reconocido y por órdenes de adjudicaciones para programas de nuevos clientes que posicionan mejor a un proveedor de autopartes para diseñar productos que abordan los requerimientos tecnológicos y regulatorios que surgen para los vehículos. Esto ayuda a consolidar la relación de negocios de largo plazo con sus grandes clientes armadoras de automóviles. Al convertirse no sólo en un proveedor de autopartes, sino en un proveedor de tecnologías y capacidades, un proveedor de autopartes crea barreras de entrada para los competidores. Proveedores que dominan el poder para establecer precios debido a su presencia en subsegmentos (tales como fundición y forjado) donde la capacidad sustancial fue permanentemente eliminada, demostrado por las reducciones de precio por debajo del promedio de la industria exigidas por los clientes OEM y un EBITDA menos los márgenes de gastos de capital, que se compara favorablemente con la mayoría de los proveedores calificados. 56. Un proveedor de autopartes con una evaluación ‘débil’ o ‘adecuada/débil’ de su ventaja competitiva tradicionalmente se caracteriza por una combinación de los siguientes factores: • Historial previo que sugiere una alta probabilidad de pérdida de negocio significativa con los clientes actuales, o potencial para la pérdida de participación de mercado dentro de sus mercados finales, posiblemente debido a la competencia de precios de los participantes más grandes o a la 9 • • • • • • falta de tecnología superior. Podría también ser resultado de competidores que se benefician de costos de mano de obra más bajos, tasas impositivas más bajas y en algunos casos, subsidios a la exportación o de materias primas. Proveedores que operan en sub-segmentos, que son menos intensivos en el uso de capital (por ejemplo, unos cuantos proveedores de nivel 2 y varios de nivel 3 y proveedores de refacciones) y competidores que pueden entrar relativamente fácil y ganar credibilidad con los clientes. Apalancamiento de negociación relativamente débil (y posiblemente bajo contenido por vehículo) con las grandes armadoras de automóviles y con sus propios vendedores. Débil percepción de la estrategia de negocio con base en el desempeño histórico de un proveedor de autopartes y qué tan realista consideramos sus objetivos prospectivos de negocio (precio frente al de la competencia, ventas o crecimiento de utilidades y niveles de inversión requeridos). Principalmente productos masivos (por ejemplo, varios proveedores de refacciones) que hacen más vulnerable a la empresa ante los ciclos económicos adversos o si existe potencial para elevar el nivel de riesgo técnico (dada la cobertura tecnológica actual) en sus segmentos de negocios, tales como baterías. Ausencia de un apalancamiento significativo en el establecimiento de precios con su base de clientes más grande y más poderosa. Historial de innovaciones no probado, la construcción de la reputación está en marcha (por ejemplo, debido que recientemente salió del Chapter 11 o a la reciente incursión en nuevos mercados finales). 2. Tamaño, alcance y diversidad 57. Nuestra evaluación del tamaño, escala y diversidad para los proveedores de autopartes incluye la revisión de los siguientes factores: • • La diversidad de mercados finales (por ejemplo, base de clientes, plataforma y segmento, y regiones; nivel de alienación con la producción global y presencia en un mercado de refacciones relativamente estable). El alcance de la diversificación determina la capacidad de un proveedor de autopartes para contrarrestar el impacto de temas regulatorios, ambientales, responsabilidad de producto o de seguridad, por región. El tamaño de la base de ingreso y su posición dentro de la industria ayudan a determinar la fortaleza del negocio y la flexibilidad de operación. 58. Esperamos que la expansión internacional sea un enfoque continuo de las estrategias de crecimiento para los siguientes años con la globalización de plataformas y mecanismos de tren motriz para vehículos. Cada vez más, el tamaño y la escala se están convirtiendo en factores de diferenciación competitiva clave para obtener nuevos programas conforme las armadoras de automóviles se expanden en el mundo y continúa la consolidación de la industria. 59. El destino de los proveedores está estrechamente relacionado con el destino de sus clientes y las plataformas de vehículos que ofrecen. Muchas armadoras de automóviles están optando por trabajar con menos proveedores, de manera que el tamaño y la masa crítica son importantes. Mientras que puede ser beneficioso para un proveedor de autopartes integrar sus componentes en una o más plataformas de autos, esto puede ser una espada de doble filo si la plataforma y/o el fabricante tropiezan con la falta de éxito y dificultades financieras. 60. Dentro del mercado de vehículos ligeros, a pesar de las recientes mejoras generales en el rendimiento de combustible, consideraríamos la exposición significativa de una empresa a los camiones ligeros y camionetas (SUVs), con respecto a los autos de pasajeros, como un riesgo potencial si los precios de gasolina suben nuevamente a sus máximos históricas previos, ocasionando que los consumidores adquieran más autos de pasajeros. 61. Existe una incipiente tendencia hacia el desarrollo de tecnologías que sean rentables y que busquen satisfacer los nuevos y próximos estándares de regulación para tecnología de rendimiento de eficiencia de 10 combustible y seguridad. Por ejemplo, las alianzas de las armadoras de automóviles y las tendencias hacia los mecanismos de tren motriz alternativos y hacia vehículos más pequeños, aumentarán la demanda de los proveedores, algunos de los cuales se beneficiarán. Un factor clave que consideramos es la capacidad para competir en mercados difíciles como proveedor de las armadoras de automóviles que requieren capacidades globales, escalabilidad, innovación de productos y sólida salud financiera de sus proveedores nivel 1. Los nuevos productos que ofrecen un mayor valor a los clientes, permiten a los proveedores reestablecer el precio base, aligerando las presiones sobre los precios. 62. Un proveedor de autopartes con una evaluación ‘fuerte’ o ‘fuerte/adecuada’ de su tamaño, alcance y diversidad, típicamente se caracteriza por una combinación de los siguientes factores: • • • • • • • Muy amplia variedad de clientes (tradicionalmente los tres principales clientes representan menos del 30%), presencia de instalaciones de producción estrechamente alineada con la producción global y una amplia gama de productos que generan posibilidades para ventas cruzadas y potencialmente para obtener nuevos negocios en todos los sub-segmentos dentro del sector automotriz. Los ingresos provienen de una amplia variedad de productos a través de múltiples plataformas y/o sub-segmentos (por ejemplo, sistemas de información y entretenimiento, seguridad, rendimiento de combustible y mercado de refacciones) que no están estrictamente correlacionados. Por ejemplo, las empresas con presencia en el negocio de reemplazo de autopartes (incluyendo reparación de colisiones) o en los mercados industriales finales están mejor posicionadas para navegar periodos de debilidad para la industria más amplia debido a que sus ventas están menos correlacionadas con la producción de vehículos, que con frecuencia es volátil. Sin embargo, la sola presencia en los segmentos anti-cíclicos, tales como refacciones o componentes para los camiones pesados, no necesariamente conducirían a una evaluación favorable porque nuestro análisis está en conjunción con el alcance al cual operan los competidores dentro de los mismos segmentos. Consideramos como favorable la fortaleza de negociación con los clientes automotrices y con los proveedores de materias primas y subcomponentes para asegurarse un suministro alternativo (si y cuando sea necesario) sin incurrir en cambios de costos sustanciales. Una participación de mercado significativa que señala una amplia variedad de operaciones, productos o servicios. Esto también implica recortes cualitativos a las participaciones de mercado si una empresa opera en un segmento nicho (por ejemplo, vigilancia de la presión de llantas y manufactura de válvulas en lugar de un segmento más amplio de la industria como mecanismo de tren motriz crítico y componentes de transmisión). Sólida capacidad para lograr un crecimiento sustentable, impactar las tendencias del negocio y establecer precios de la industria debido a la magnitud de tamaño (medida por ingresos) en relación con otros participantes. Estabilidad de volumen (con respecto a la de sus pares) especialmente cuando se demuestra durante un ciclo económico adverso o si la estabilidad relativa se logró con menos reducciones de precio a los OEMs que los competidores. Demostrar una resistencia superior al promedio ante los riesgos típicos de la cadena de suministro (por ejemplo, proveedores débiles, concentración geográfica o desastres naturales o provocados por el hombre). Aunque sería raro que un proveedor pudiera pasar esta prueba. 63. Un proveedor de autopartes con una evaluación ‘débil’ o ‘adecuada/débil’ de su tamaño, alcance y diversidad generalmente se caracteriza por una combinación de los siguientes factores: • Los ingresos provienen desproporcionadamente de una estrecha línea de productos, lo que podríamos considerar que acrecienta el riesgo de exposición a un pequeño mercado geográfico y, así, evaluar sus componentes de tamaño, alcance y diversidad como débiles. Dentro de este conjunto de proveedores, clasificamos favorablemente aquellos que consideramos tienen al menos un plan creíble para incrementar la diversidad de los clientes a través de nuevo negocio neto rentable (potencialmente con sus clientes no dominantes) en los siguientes tres a cinco años. 11 • • • • Apalancamiento de negociación relativamente débil (y posiblemente de bajo contenido por vehículo) con las grandes armadoras de automóviles y con sus propios vendedores, y una falta de tamaño para fabricar a bajo costo. Riesgo significativo de tener sustancialmente toda su capacidad de manufactura y clientes concentrados en una región sin alguna diversidad de producto o exposición al mercado de refacciones más estable (los principales tres clientes típicamente representan más del 50%). Vulnerable a los riesgos de la cadena de suministro, posiblemente debido a una excesiva dependencia de un proveedor crítico o a un evento de alto impacto y baja probabilidad, que con frecuencia puede romper incluso la cadena de suministro más sofisticada, incluso solamente de manera temporal. Dichos fracasos, aunque raros, pueden ganar rápidamente impulso y traducirse en una acción de calificación negativa. Contracción de la participación de mercado o pérdida de contratos rentables, lo que sugiere una reducción de posibilidades para la rentabilidad futura. 3. Eficiencia operativa 64. Nuestra evaluación de la eficiencia operativa para los proveedores de autopartes incluye los siguientes elementos: • • • El grado de flexibilidad en la estructura de costos, costos fijos o variables; Sensibilidad a los costos de materias primas y energía y la habilidad para trasladar los incrementos de costos, y El manejo del capital de trabajo a través del ciclo de negocios. 65. Evaluamos el historial para demostrar flexibilidad ajustando el exceso de capacidad de manera oportuna. Algunos proveedores tienen una capacidad demostrada para reducir los costos de mano de obra originando exitosamente más componentes y subensablajes de países con costos de mano de obra más bajos en comparación con las armadoras de automóviles. Incluso los proveedores sindicalizados tienden a tener una estructura salarial más baja que la de las armadoras de automóviles. 66. Como resultado, la presión para reducir los costos solamente se incrementará en el mediano plazo. Ser un fabricante de bajo costo de autopartes es crítico, dadas las presiones para establecer precios que ejercen en la industria las armadoras de automóviles, muchas de las cuales enfrentan sus propias presiones para reducir costos y elevar las débiles utilidades. 67. Los proveedores tienden a tener costos de mano de obra más bajos que las armadoras de automóviles debido a que generalmente tienen una representación sindical menor y también a la dinámica de la industria en relación con el número de competidores y la presión de los precios de parte de los clientes. Sin embargo, el historial demostrado de un proveedor de autopartes (que puede variar considerablemente entre las empresas), combinado con nuestra percepción sobre su habilidad futura para manejar estos costos a través de los ciclos económicos es otro factor característico que utilizamos para evaluar la eficiencia operativa. 68. Además, la inversión insuficiente conduce al riesgo potencial de tiempo inactivo y pérdidas de producción, que pueden dañar severamente la rentabilidad en el corto plazo y aún más importante, conducir a una pérdida de volumen a largo plazo para los clientes. La industria de proveedores de autopartes es de alta demanda de capital y la inversión continua en la eficiencia de las capacidades de producción es, con frecuencia, necesaria para mantener la posición de costos de una empresa. 69. Como industria competitiva con una creciente presencia global, la capacidad de un proveedor para trasladar las fluctuaciones cambiarias mediante el ajuste de sus precios a sus clientes extranjeros, también es importante. Muchos de los grandes proveedores de autopartes producen en los mismos mercados geográficos donde se venden sus productos. Con frecuencia, las ventas están más concentradas en dólares estadounidenses y en euros que sus gastos y, por lo tanto, los márgenes de rentabilidad y los ingresos pueden reducirse debido a las fluctuaciones o a las tendencias adversas en los tipos de cambio. Los cambios de corto plazo en los tipos de cambio pueden constituir un entorno operativo desafiante para 12 los proveedores de autopartes que rutinariamente operan en un contexto global mientras se esfuerzan en mantenerse competitivos en precio para sustentar los márgenes de rentabilidad. 70. Un proveedor de autopartes con una evaluación ‘fuerte’ o ‘fuerte/adecuada’ de su eficiencia operativa tradicionalmente se caracteriza por una combinación de los siguientes factores: • • • • • • • Habilidad para controlar el ‘lento ascenso de costos’ administrando los costos fijos (el índice de gastos de ventas, de administración y generales sobre ventas) mejor en comparación con sus pares, en un escenario alcista. Manejar el uso de la capacidad instalada al menos en línea con sus clientes OEM (lineamientos PTT y estimados para señalar el rango adecuado de 50% a 80%), pero puede variar dependiendo de cómo se determina y/o reporta) a la luz del apalancamiento operativo típicamente alto de la industria. Capacidad demostrada para mitigar exposiciones sustanciales ante las fluctuaciones de precios de materias primas a través de (a) mecanismos de largo plazo de traslado a los clientes, (b) productos o servicios de valor agregado, que otorgan poder para establecer precios, o (c) un mecanismo de recargos perfeccionado regularmente para reflejar más cercanamente la composición y oportunidad más actual de los costos de los insumos. Las empresas que hayan demostrado un historial de o que probablemente puedan demostrar flexibilidad para los programas de producción volátiles de los clientes, mediante el reajuste rápido de los niveles de inventario. Los proveedores de autopartes que empleen efectivamente instrumentos financieros para cubrir algunas de estas exposiciones para al menos aislarlas parcialmente de los efectos de fluctuaciones cambiarias. Otras maneras para mitigar este riesgo incluye trabajar directamente con sus clientes o una de sus propias subsidiarias para compensar este riesgo a través de un mejor establecimiento de precios de los componentes vendidos a los clientes extranjeros. Costos de mano de obra flexibles (por ejemplo, una proporción más grande de la fuerza de trabajo temporal, especialmente en regiones donde los costos de indemnización por cese son muy altos) y un historial de buena relación con los sindicatos para minimizar el riesgo de costosas huelgas. Además de nuestra opinión cualitativa sobre lo anterior, consideramos favorablemente a los emisores que demuestren tener ciclos cortos de conversión de efectivo (definido como los días de inversión en inventario y cuentas por cobrar menos los días de inversión en cuentas por pagar), especialmente dado que esto les da flexibilidad para redistribuir más efectivamente el capital. 71. Un proveedor de autopartes con una evaluación ‘débil’ o ‘adecuada/débil’ de su eficiencia operativa generalmente se caracteriza por una combinación de los siguientes factores • • • • • Falta de mecanismos de transferencia (menos del 50% de recuperación) y exposición a la volatilidad de precios de las materias primas (que se acentúa si los márgenes están por debajo del promedio de la industria). Las necesidades de financiamiento de capital de trabajo tienden a incrementarse cuando se elevan los precios de materias primas y consideramos negativamente a aquellos proveedores que carezcan de una transferencia efectiva de costos a los clientes –un problema que ha ocasionado trastornos financieros en el pasado. Débil historial del manejo de costos de insumos para las empresas que tienen un modelo de negocio que respalda los beneficios de mejores fuentes, resultado de la integración vertical (por ejemplo, reciclaje de baterías o fundición y mecanizado). Apalancamiento operativo significativamente alto (índice del margen de contribución de una empresa sobre utilidades), bajo nivel de flexibilidad de costos, historial limitado de márgenes de rentabilidad sostenidos a través del ciclo o empresas con pérdidas operativas sostenidas. Débil historial que muestra incapacidad para reestructurar la presencia de sus instalaciones de producción en forma oportuna y mejorar potencialmente el uso de su capacidad instalada. Evidencia de errores operativos (incluso eventos únicos que condujeron a subsiguientes cierres de fábrica) y falta de diligencia respecto a la inversión y el mantenimiento de los activos de producción. 13 4. Rentabilidad 72. La evaluación de la rentabilidad puede confirmar o modificar la evaluación preliminar de la posición competitiva. La evaluación de la rentabilidad consiste de dos componentes: el nivel de la rentabilidad absoluta y la volatilidad de la rentabilidad. Combinamos los dos componentes en la evaluación final de la rentabilidad utilizando una matriz (véase nuestra metodología para calificar empresas). 73. Los proveedores de autopartes requieren continuamente de márgenes adecuados para conservar la capacidad para realizar inversiones en R&D necesarias para mantener una ventaja tecnológica. Como se observó durante el último ciclo económico adverso, en la ausencia de utilidades sostenidas, era poco probable que el flujo de caja proveniente de las operaciones de los proveedores de autopartes tuviera el nivel necesario para respaldar el capital de trabajo, los gastos de capital y los requisitos del servicio de la deuda. 74. Consideramos más favorablemente a las empresas que fabrican productos con una significativa cantidad de contenido de ingeniería y técnico porque generalmente tienen una flexibilidad más grande para establecer previos y generar mayores márgenes brutos. 75. Los proveedores que tienen un enfoque estratégico para cambiar la producción a lugares con costos más bajos y más flexibles tienen una mayor probabilidad de mostrar niveles de rentabilidad por encima del promedio. La capacidad para reducir continuamente los costos y mejorar el establecimiento de precios mediante la mejora de la tecnología, es un factor crítico porque mitiga el impacto de producción potencialmente volátil de los grandes clientes OEM y los costos inestables de materias primas que presionan los márgenes de rentabilidad del proveedor de autopartes. Sin embargo, esto puede no siempre ser positivo en el corto plazo, especialmente si las empresas experimentan ineficiencias conforme reconfiguran la presencia de sus instalaciones de producción. En el largo plazo, consideramos que los proveedores deberán beneficiarse del enfoque en la realineación de su red de instalaciones de producción al establecer nuevas instalaciones en regiones de bajo costo para mejorar la eficiencia de costos, y en los mercados de rápido crecimiento para incrementar la diversificación de las ventas. 76. La rentabilidad de los subsectores y las líneas de producción en las cuales opera un proveedor de autopartes también se toma en cuenta en nuestro análisis de empresas individuales. Por ejemplo, el negocio de interiores automotrices, típicamente tiene márgenes más bajos que otros segmentos, pero también normalmente requiere de una inversión menor de capital que nuestra estimación mediana de cerca de 3% de las ventas para la industria. a) Nivel de la rentabilidad 77. Determinamos el nivel de rentabilidad en una escala de tres niveles: ‘superior al promedio’, ‘promedio’ e ‘inferior al promedio’. 78. Utilizamos el margen de EBITDA como el principal indicador del nivel de rentabilidad de un proveedor de autopartes y comparamos este contra sus pares en el contexto total de la industria en el cual opera la empresa, no solamente en su sector más reducido. 79. Nuestro análisis para determinar los límites para los niveles de rentabilidad (véanse las tablas 1 y 2) incorpora el desempeño de los proveedores globales de autopartes durante los últimos dos años y nuestra expectativa de desempeño en una proyección de tres años. 80. Para evitar los efectos de alguna distorsión cíclica (tales como indicadores máximos y mínimos durante el ciclo o el impacto de las fluctuaciones cambiarias o calamidades naturales que no consideramos totalmente representativas del nivel normalizado de rentabilidad de la empresa), podemos ajustar nuestros límites para mantener una distribución normalizada, a través de los ciclos. 81. Además, podemos observar los factores cualitativos, por ejemplo, el grado de demanda de capital, para comparar empresas dentro de la industria más amplia en la cual operan, debido a que los gastos de capital 14 son necesarios para mantener la base de activos que a su vez permite generar las utilidades. Debido a que la depreciación es con frecuencia una buena aproximación de los gastos de capital requeridos para mantener la base de activos, podemos utilizar el retorno sobre capital (ROC, por sus siglas en inglés) como un indicador complementario (utilizando un enfoque similar a aquel utilizado arriba para los márgenes EBITDA, para llegar a los límites) para comparar empresas que no tienen estructuras de capital significativamente diferentes. 82. También utilizamos el ROC como in indicador complementario para perfeccionar nuestra evaluación cuando el margen de EBITDA está cerca de los límites para ‘inferior al promedio’ o ‘superior al promedio’ (véanse los límites ROC en la Tabla 2). Por ejemplo, si el margen de EBITDA de una empresa está en el extremo más alto de un rango definido para ‘promedio’ pero su retorno sobre capital está cómodamente en el rango ‘inferior al promedio’, podemos evaluar su nivel de rentabilidad como ‘inferior al promedio’. 83. De conformidad con los criterios globales para calificar empresas, para esta evaluación, normalmente determinamos un margen de EBITDA y ROC promedio de cinco años utilizando los últimos dos años de resultados históricos y tres años de resultados proyectados. Podemos dar más énfasis en los años proyectados si la información histórica no se considerara representativa o para tomar en cuenta perfiles de deterioro o de mejora en donde los índices posibles se diferencian significativamente de los índices promedio. Tabla 1 Niveles límite del margen de EBITDA de proveedores de autopartes Márgenes de EBITDA Inferior al promedio Promedio Superior al promedio < 9% 9%-15% > 15% Inferior al promedio Promedio Superior al promedio < 8% 8%-18% >18% Tabla 2 Niveles límite en retorno sobre capital de proveedores de autopartes Retorno sobre capital b) Volatilidad de la rentabilidad 84. Determinamos la volatilidad de la rentabilidad en una escala de seis puntos donde ‘1’ corresponde a las empresas menos volátiles y ‘6’ a las que tienen una volatilidad muy alta. 85. La volatilidad de la rentabilidad se determina utilizando la evaluación del error de regresión estándar (SER, por sus siglas en inglés), de conformidad con nuestros criterios globales para calificar empresas. El margen de EBITDA es el indicador que utilizamos para determinar el SER para los proveedores de autopartes. Sólo determinamos el SER cuando las empresas tienen al menos siete años de información anual histórica para garantizar que los resultados sean significativos. De acuerdo con los criterios generales para calificar empresas y sujeto a cumplir ciertas condiciones, podemos ajustar la evaluación SER por hasta dos categorías mejores (menos volátil) o peores (más volátil). Si no tenemos la suficiente información histórica para determinar el SER, seguimos los lineamientos de los criterios globales para calificar empresas para determinar la evaluación de la volatilidad de la rentabilidad. Parte II-Análisis de riesgo financiero D. Contabilidad y ajustes analíticos 86. Cuando evaluamos las características contables de los proveedores de autopartes, utilizamos la misma metodología que con otros emisores corporativos (véase nuestra metodología para calificar empresas). Nuestro análisis de los estados financieros de una empresa empieza con una revisión de la contabilidad para determinar si los estados miden con precisión el desempeño de una empresa y su posición con respecto a sus pares y al más grande universo de las entidades corporativas. Para permitir que los análisis financieros sean globalmente consistentes y comparables, nuestro análisis de calificación puede incluir ajustes cuantitativos a los resultados reportados de una empresa. Estos ajustes también permiten una 15 mejor alineación de las cifras reportadas de una empresa con nuestra perspectiva de las condiciones económicas subyacentes. Además, permiten una representación más precisa del negocio en marcha de una empresa. Los ajustes que conciernen ampliamente a todos los sectores corporativos, incluyendo este sector, se incluyen en "Metodología para calificar empresas: Índices y Ajustes", publicado el 19 de noviembre de 2013. E. Análisis flujo de efectivo/apalancamiento 87. Para evaluar el flujo de efectivo/apalancamiento de un proveedor de autopartes, nuestro análisis utiliza la misma metodología que con otros emisores corporativos (véase nuestra metodología para calificar empresas). Evaluamos el flujo de efectivo/apalancamiento en una escala de (1) mínimo, (2) modesto, (3) intermedio, (4) significativo, (5) agresivo y (6) altamente apalancado, sumando las evaluaciones de una variedad de índices crediticios principalmente basados en el flujo de efectivo, que se complementan uno al otro, enfocando la atención en los diferentes niveles de flujo de efectivo de una empresa en relación con sus obligaciones. 1. Índices principales 88. Para cada empresa, hacemos el cálculo de conformidad con los criterios de Índices y Ajustes de Standard & Poor’s, dos índices principales de pago de deuda: fondos operativos/deuda y deuda/EBITDA. 2. Índices complementarios 89. Dado el hecho de que en general los proveedores de autopartes son empresas con alta demanda de capital con requerimientos moderadamente altos de capital de trabajo, complementamos el análisis de los índices principales con un análisis de flujo de efectivo operativo libre /deuda total. El flujo de efectivo es, típicamente, volátil para los proveedores de autopartes y puede existir una variación significativa de un año al otro, dependiendo de la oportunidad del lanzamiento de producto y del nivel de ganancias o pérdidas de nuevos contratos. 90. Evaluamos minuciosamente el ciclo del capital de trabajo y los requisitos de gastos de capital cuando analizamos el perfil de riesgo financiero de un proveedor de autopartes. Dichos proveedores que obtienen convenios de suministro para un gran número de plataformas nuevas con frecuencia se caracterizan por tener un menor flujo de efectivo operativo dados los costos de lanzamiento asociados con el activo fijo y las inversiones de capital de trabajo necesarias para ejecutar esos convenios. El flujo de efectivo generalmente mejoraría de manera considerable conforme estos lanzamientos de negocios anunciados cumplan con los calendarios esperados de producción. 91. El capital de trabajo puede ser un importante uso de efectivo. Las empresas en el sector tradicionalmente invierten en inventarios y cuentas por cobrar durante los periodos de crecimiento de ventas, presionando la generación de efectivo, lo que puede traducirse en una significativa necesidad de financiamiento. Evaluamos el manejo de capital de trabajo en base al historial del manejo de inventarios y términos de pago (con frecuencia dictados por los OEMs) durante el ciclo de negocios. Hemos visto que algunos proveedores pueden ser capaces de liberar capital de trabajo del inventario y de las cuentas por cobrar durante los periodos de reducción de ventas. Por consiguiente, nos enfocamos más en el historial de flujo de efectivo operativo libre (después de capital de trabajo y flujos de efectivo relacionados con el gasto de capital), potencialmente a través de los ciclos, más que en los fondos operativos. 92. Aunque podemos observar consistencia del flujo de efectivo libre como una consideración clave para distinguir los perfiles de riesgo financiero de los proveedores de autopartes, no penalizamos necesariamente a las empresas que experimentan salidas de efectivo relacionados con el crecimiento. Esto es siempre que consideremos que dicha inversión en el nuevo negocio respalde la generación futura de flujo de efectivo con base en nuestra evaluación de una mejora potencial en la posición competitiva para sus productos y servicios. 16 Parte III-Modificadores de calificación F. Efecto de diversificación/cartera 93. Para evaluar el efecto de diversificación/cartera para un proveedor de autopartes, utilizamos la misma metodología que con otros emisores corporativos (véase nuestra metodología para calificar empresas). G. Estructura de capital/análisis de activos 94. Para evaluar la estructura de capital para un proveedor de autopartes, utilizamos la misma metodología que con otros emisores corporativos (véase nuestra metodología para calificar empresas). H. Liquidez 95. Para evaluar la liquidez para un proveedor de autopartes, utilizamos la misma metodología que con otros emisores corporativos (véase nuestra metodología para calificar empresas). 96. Podemos ajustar nuestro cálculo de las fuentes de liquidez sobre los usos de liquidez en base a nuestra evaluación de la habilidad de los proveedores de autopartes para extraer efectivo del capital de trabajo, al menos temporalmente; por ejemplo, al monetizar las cuentas por cobrar a través de factoraje o bursatilización, liquidar inventarios no necesarios o extender los pagos a sus proveedores. En nuestra evaluación consideraríamos que cada una de estas técnicas tiene potenciales desventajas e incorporaríamos el historial de alcance de términos favorables, el tiempo necesitado para ejecutarlos o, en el caso de la extensión de los pagos, la probabilidad de enviar potenciales señales de alarma a sus proveedores. I. Administración y gobierno corporativo 97. Para evaluar la administración y el gobierno corporativo para un proveedor de autopartes, utilizamos la misma metodología que con otros emisores corporativos (véase nuestra metodología para calificar empresas). J. Política financiera 98. Para evaluar la política financiera para un proveedor de autopartes, utilizamos la misma metodología que con otros emisores corporativos (véase nuestra metodología para calificar empresas). K. Análisis comparativo de calificaciones 99. Para evaluar el análisis comparativo de calificaciones para un proveedor de autopartes, utilizamos la misma metodología que con otros emisores corporativos (véase nuestra metodología para calificar empresas). CRITERIOS Y ANÁLISIS RELACIONADOS • • • • • • Metodología para calificar empresas, 19 de noviembre de 2013. Metodología: Riesgo de la Industria, 19 de noviembre de 2013 Metodología para calificar empresas: Índices y Ajustes, 19 de noviembre de 2013 Metodología y supuestos: Descriptores de liquidez para emisores corporativos, 19 de noviembre de 2013 Metodología: Factores crediticios de la administración y gobierno corporativo para empresas y aseguradoras, 13 de noviembre de 2012. Principios de las Calificaciones Crediticias, 16 de febrero de 2011. Estos criterios representan la aplicación específica de los principios fundamentales que definen el riesgo crediticio y las opiniones de calificación. Su uso está determinado por los atributos específicos de una emisión o emisor, así como por la evaluación de Standard & Poor’s Ratings Services sobre los riesgos crediticios, y de ser aplicable, los riesgos estructurales para la calificación específica de una emisión o emisor. La metodología y los supuestos pueden cambiar como resultado de condiciones económicas y de mercado, por factores específicos del emisor o emisión, o por nueva evidencia empírica que afecten nuestra evaluación crediticia. 17 Copyright © 2014 por Standard & Poor's Financial Services LLC (S&P). Todos los derechos reservados. Ninguna parte de esta información puede ser reproducida o distribuida en forma alguna y/o por medio alguno, ni almacenada en una base de datos o sistema de recuperación de información sin autorización previa por escrito de S&P. S&P, sus filiales y/o sus proveedores tienen derechos de propiedad exclusivos en la información, incluyendo las calificaciones, análisis crediticios relacionados y datos aquí provistos. Esta información no debe usarse para propósitos ilegales o no autorizados. Ni S&P, ni sus filiales ni sus proveedores o directivos, funcionarios, accionistas, empleados o agentes garantizan la exactitud, integridad, oportunidad o disponibilidad de la información. S&P, sus filiales o sus proveedores y directivos, funcionarios, accionistas, empleados o agentes no son responsables de errores u omisiones, independientemente de su causa, de los resultados obtenidos a partir del uso de tal información. S&P, SUS FILIALES Y PROVEEDORES NO EFECTÚAN GARANTÍA EXPLÍCITA O IMPLÍCITA ALGUNA, INCLUYENDO, PERO SIN LIMITACIÓN DE, CUALQUIER GARANTÍA DE COMERCIALIZACIÓN O ADECUACIÓN PARA UN PROPÓSITO O USO EN PARTICULAR. 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