E L M U N D O, M A R T E S 2 3 D E J U L I O D E 2 0 0 2 3 OPINION LA TRONERA ANTONIO GALA Pasado y futuro El complejo de superioridad español y el complejo de inferioridad marroquí nos han jugado muy malas pasadas. Entre otras, hacer el ridículo. Existen cuantiosas inversiones nuestras en aquel reino que serán fructíferas si son normales. Y teóricos proyectos comunes: contra el narcotráfico y las mafias de la inmigración. Marruecos tiene aquí 200.000 inmigrados y más aún nos atraviesan en verano. Somos dos países imbricados, uno puede ser modelo del otro hacia la democracia: pero el progreso y la prosperidad de ese otro no nos puede dejar indiferentes. El Estrecho no es un abismo sino un puente. Los gobernantes, todos, tienen que tener eso muy claro: no hay reyes que valgan si los pueblos no valen. La historia nos es adversa. Que el futuro le gane la batalla al pasado. La presión nacionalista se cobra un exiliado vasco más El último informe del Euskobarómetro, hecho público hace escasos días, señalaba que un 11% de los vascos estaría dispuesto a dejar la comunidad autónoma si lograra en otro lugar condiciones similares de trabajo. El dato ilustra lo difícil que resulta expresarse y vivir en libertad para quienes no comparten el intolerante modelo de sociedad defendido por el terrorismo de ETA y quienes lo respaldan. Curiosamente, ha sido el propio director del Euskabarómetro, el sociólogo bilbaíno Francisco Llera, quien ha tenido que hacer las maletas y encaminar su futuro profesional y académico hacia EEUU, tras denunciar valientemente durante años la «persecución» a la que son sometidos los intelectuales en Euskadi desde el entorno nacionalista. El catedrático de Ciencias Políticas se une así a la lista de intelectuales como Jon Juaristi, Mikel Azurmendi o José María Portillo, obligados a dejar su RICARDO comunidad en los últimos tiempos. Otros, como José Luis López de Lacalle, pagaron con su vida la osadía de expresar sus ideas democráticas. Llera ha vivido durante años el acoso del entorno peneuvista, nada conforme con el modo riguroso e imparcial en que ha desarrollado su trabajo al frente del Euskobarómetro, cuyos resultados, con frecuencia, muestran una sociedad vasca muy alejada de la que sueñan Otegi o Arzalluz. En la Universidad, Llera ha sido un referente para los defensores de los valores constitucionales y no dudó en denunciar casos como la campaña contra Edurne Uriarte, a quien le fue denegada la cátedra por motivos políticos. «Es difícil acudir a las clases aguantando el día a día de insultos, vejaciones y linchamientos de la comparsa nacionalista», advirtió entonces Llera. Su marcha es una nueva denuncia sobre una situación insostenible. WorldCom se queda en papel mojado EEUU conoció ayer la mayor quiebra de su historia con la suspensión de pagos de WorldCom, que acumula una deuda de 32.000 millones de dólares. Es el final de una crisis acrecentada al conocerse el modo en que los responsables de la compañía maquillaron las pérdidas y engañaron a los mercados para elevar en beneficio propio el valor de las acciones. La quiebra de WorldCom, que llegó a valer 180.000 millones de dólares, es un golpe durísimo para la confianza de los inversores en el funcionamiento del sistema financiero y en los mecanismos de auditoría previstos para controlarlo. La leyenda del nacimiento de WorldCom contaba que fue en una servilleta de papel donde sus creadores diseñaron la estrategia para ponerla en pie. Ayer, volvió a sus orígenes: antes de quebrar, sus acciones, un día valoradas en 64 dólares, no llegaban a los 9 centavos, papel mojado. Lasazabala Malditos asesinos descomunales, psicópatas con corbata. Ciegos de poder, soberbia y odio hacia su propia mismidad. Se burlaron de El Clemente. Uno: No Matarás. Dos: No mirarás atrás con ojos embusteros. No ocultarás tu origen, ni la sangre inolvidable de los inocentes, tras tus titulares mentirosos. Mas desoyeron a El Justiciero. ¿Y? Quedaron convertidos en estatuas de cal (viva). -ERASMO ELPMUNDO DEL SIGLO VEINTIUNO Directores adjuntos: Jorge Fernández, Fernando Baeta, Casimiro García-Abadillo, Miguel Angel Mellado (Suplementos) Adjuntos al Director: Juan Carlos Laviana, Alfonso Rojo, Melchor Miralles. Adjunto para relaciones internacionales: Víctor de la Serna. Director de Arte: Carmelo G. Caderot. Internet: Gumersindo Lafuente. UNIDAD EDITORIAL S.A. PRESIDENTE ALFONSO DE SALAS DIRECTOR PEDRO J. RAMIREZ Secretario general: Juan González. Director general: Antonio Fernández-Galiano. Directores gerentes: Jaime Gutiérrez-Colomer, DIRECTOR GENERAL BALBINO FRAGA Dep. Legal: M-36233-1989. Imprime: Fabripress, Avda. Constitución, 3. Torrejón de Ardoz. OJD: La difusión promedio del último control fue de 312.366 ejemplares José Manuel Díez Quintanilla. Asesor jurídico: Alfonso de la Dehesa. Director comercial: Alejandro de Vicente. GALINDO, UN CULPABLE CON TODAS LAS GARANTIAS La decisión del Tribunal Constitucional de rechazar los recursos de amparo presentados por el ex general Rodríguez Galindo y el ex gobernador civil de Guipúzcoa Julen Elgorriaga contra la sentencia del Supremo que les condenó por el secuestro y asesinato de José Antonio Lasa y José Ignacio Zabala tiene una gran trascendencia. En cierta medida, cierra un capítulo particularmente execrable de nuestra historia reciente, el de la guerra sucia contra ETA durante el mandato de Felipe González. El alto tribunal es la última instancia española a la que podían apelar Galindo, Elgorriaga –75 años de condena– y el resto de los guardias civiles que fueron declarados culpables por la Audiencia Provincial y después por el Supremo. En los últimos meses han arreciado las presiones sobre el Constitucional –desde las de sectores felipistas hasta las de la derecha más conservadora– para que la condena firme fuera anulada, lo cual hubiera supuesto la salida de la cárcel de los condenados. Confiados en los discutibles informes del abogado del Estado y el fiscal, los protagonistas han echado el resto intentando in extremis la recusación, sin base jurídica, del magistrado Tomás Vives. De lo complicadas que han resultado las deliberaciones da cuenta el hecho de que la decisión del TC haya sido tomada por siete votos en contra de la petición de amparo y cinco a favor, entre ellos el del presidente, Jiménez de Parga, cuyas vinculaciones con la cúpula de Interior socialista son conocidas. En su fallo, el pleno del TC establece que la Audiencia y el Supremo no vulneraron el derecho a la presunción de inocencia y que el proceso se desarrolló con todas las garantías. Ello supone un triunfo indiscutible del Estado de Derecho frente a quienes abusaron de él «prevaliéndose» de su cargo público, como sostuvo la sentencia del Supremo. Pero también un triunfo de hombres y mujeres valientes como el fiscal Ignacio Gordillo que inició la causa, el instructor Javier Gómez de Liaño, quien sufrió todo tipo de coacciones y agravios o la ex secretaria de Estado, Margarita Robles, que impulsó la labor policial. Supone, en fin, un respaldo al trabajo de investigación periodística de EL MUNDO, que aportó las principales claves de los hechos, a la vez que un baldón en la conciencia de los gobernantes socialistas –de quienes dependían Galindo y Elgorriaga– que nunca quisieron asumir ninguna responsabilidad. A los condenados sólo les queda ya la vía del indulto para eludir una prisión que en el caso de Rodríguez Galindo tendrá que dejar de ser militar, puesto que ha perdido el generalato. Muy difícil, por no decir imposible, sería para el Gobierno argumentar la concesión de la medida de gracia para quienes han sido condenados nada menos que por delitos de asesinato. COMIENZA EL DESHIELO DIPLOMATICO A pesar de que el encuentro de cuatro horas que ayer mantuvieron en Rabat los ministros de Asuntos Exteriores de España y Marruecos estuvo rodeado de frialdad y gestos que evidenciaron la tensión existente entre ambos países, el comunicado conjunto emitido al término de la entrevista hace abrigar esperanzas de un deshielo en las relaciones bilaterales. Nadie podía vaticinar hace sólo veinte días, cuando se precipitaron los acontecimientos en torno a Perejil, que la crisis pasara del terreno militar al diplomático en tan poco tiempo. Ana Palacio y Mohamed Benaisa confirmaron formalmente el acuerdo, auspiciado por el secretario de Estado norteamericano, por el que el reino alauí reconoce la vuelta al statu quo anterior al 11 de julio, cuando sus gendarmes ocuparon la isla y el Gobierno español se vio obligado a responder a la provocación. Marruecos acepta así la exigencia española, por mucho que, según recoge el comunicado, ello no prejuzga las «respectivas posiciones» sobre la soberanía de Perejil. Mal que les pese tanto a los que echan de menos la permanencia de la bandera rojigualda y la Legión en el islote como a quienes en esta importante encrucijada han antepuesto su odio contra Aznar a los intereses nacionales –con un destacado papel por parte de la cadena de emisoras ya conocida como Radio Rabat–, el Gobierno español ha sabido resolver rápida y acertadamente la mayor crisis con Marruecos desde la Marcha Verde sobre el Sáhara. El comunicado conjunto certifica el papel de árbitro concedido por España y Marruecos a Colin Powell, y es una demostración de que ambos países han sabido aprovechar el hecho de tener un aliado común. En este punto, resulta sorprendente que Trinidad Jiménez –a la que suponíamos centrada en los problemas de la Casa de Campo madrileña– haya regresado a la política exterior criticando al Gobierno por recurrir a Estados Unidos como mediador y no a la UE. Habría que recordar al PSOE, cuyo secretario general ha mantenido una actitud responsable durante la crisis, que España y la UE no son disociables y por tanto no pueden ser juez y parte. Lo más importante de la reunión de ayer, sin embargo, es el compromiso hispano-marroquí de entablar un diálogo «franco y sincero» en el mes de septiembre, que debe desembocar sin tardanza en la vuelta de los dos embajadores. Madrid y Rabat tienen mucho que ganar con la normalización de sus relaciones.