Revista Digital ISOCUANTA / ISSN: 2145-1419 / Vol. 2 / No. 2. / 2012 / pp. 31-44 AMBIENTALISMO Y COMERCIO JUSTO: ¿CAPITALISMO RESPONSABLE?* Environmentalism and fair trade: responsible capitalism? Damián Mauricio Paternina Puentes** Resumen Abstract Los incentivos actuales de desarrollo social se dan a partir del crecimiento económico, lo que ha exigido la extracción intensiva de recursos, trayendo consecuencias ambientales que han afectado la supervivencia misma de los seres concentrados en la biósfera, principalmente las comunidades más vulnerables. Este problema cautiva la atención de las organizaciones sociales que se han movilizado para proponer nuevas alternativas al actual modelo de producción. Sin embargo, al ser el capitalismo un sistema que interactúa y domina diferentes redes, propone una relación light con el ambiente y la justicia en el comercio internacional, pese a que la lógica del modelo continúa generando desigualdad y contaminación. En este contexto, es fundamental entender la importancia del ambientalismo y el comercio justo como procesos necesarios en la búsqueda de un nuevo modelo. The current incentives for social development, grows out of economic growth which has required intensive extraction of resources, bringing environmental consequences that have affected the survival of the human beings that are concentrated in the biosphere (actually, the most vulnerable communities are the most poor). This problem captures the attention of social organizations have mobilized to propose new alternatives to the current production model. But capitalism being a system that interacts and master different networks, suggests a relationship with the environment light and justice in international trade, but the logic of the model continues to generate inequality and pollution. In this context it is important to understand the importance of environmentalism and fair trade as a necessary process in search of a new model. Keywords: environmental economics, natural disasters, global warming, trade, environment. Palabras clave: economía del medio ambiente, desastres naturales, calentamiento global, comercio y medio ambiente. Clasificación JEL: Q5, Q54, F18. * Artículo de investigación. Recibido: 19 de abril de 2012; revisado: 22 de mayo de 2012; aprobado: 13 de junio de 2012. **Estudiante de la Facultad de Economía de la Universidad Santo Tomás. Correo electrónico: damianpaternina@usantotomas.edu.co 30 Revista Digital ISOCUANTA - Vol. 2, No. 2, 2012 Revista Digital ISOCUANTA - Vol. 2, No. 2, 2012 Ambientalismo y comercio justo: ¿capitalismo responsable? deductivo, con el apoyo de disciplinas como la socioeconomía y el concepto del bien común. Al ser un problema global y masivo, se pretende, además, que el lector explore y comprenda fácilmente las alternativas del comercio justo y el ambientalismo, así como las implicaciones que tendría perder el sentido puro, democrático e incorruptible de estos instrumentos, que pueden ser absorbidos por el capitalismo mismo para lograr su perpetuidad. Creo que la crisis ecológica traerá el fin del capitalismo. Rudolf Bahro Introducción Las catástrofes naturales recientes presionan y exigen un cambio en los hábitos de producción y consumo. El cambio climático es una preocupación de diferentes sectores. Los movimientos ambientalistas y las iniciativas de fair trade (concepto de comercio justo) se convierten en agentes importantes de opinión y decisión en los escenarios mundiales. Las catástrofes naturales causan extensas pérdidas humanas y económicas, lo cual constituye un alto costo que deben asumir los gobiernos para asegurar y reconstruir las regiones afectadas. Además, el cambio climático agrava las sequías, causando detrimentos en los recursos naturales que sirven como base para la supervivencia humana, produciendo, en consecuencia, migraciones para la búsqueda de bienestar. Algunos autores como Christian Felber aseguran que la transición a un nuevo modelo es una necesidad para disminuir las inequidades y el impacto ambiental, a fin de implementar un modelo sostenible que contemple el desarrollo económico, tecnológico y social. Este artículo está compuesto de dos apartados: el primero describe el impacto de los desastres naturales como consecuencia del cambio climático antropogénico, seguido de la respuesta social que se representa con el surgimiento de los movimientos ecológicos que desempeñan un papel fundamental en la construcción de un modelo sostenible. En el segundo apartado se hace una introducción sobre la importancia de las instituciones como bases que soportan el actual sistema de libre mercado y su influencia en la sociedad. Desde un caso colombiano, se dará un ejemplo del conflicto ambiental y crecimiento económico. Luego se hace una introducción al fair trade como alternativa al comercio internacional de libre mercado. Al final del documento se hacen las conclusiones como juicios normativos. Desastres naturales y cambio climático La ejecución de un modelo de desarrollo ideal ha sido más un problema de concientización que un problema teórico; por tanto, este es un documento de reflexión que tiene por objetivo analizar la importancia del movimiento ambientalista y la iniciativa del fair trade, en tanto herramientas alternativas al modo actual de producción. A partir de la observación de los hechos recientes más relevantes, que demuestran las falencias del sistema capitalista y la necesidad de un nuevo modo de producción, se Desastres naturales En diferentes civilizaciones antiguas existe una extensa documentación del diluvio narrado en la Biblia, tal como permanece en la memoria de las diferentes tradiciones culturales. Los pueblos griegos, babilónicos, sumerios, hindúes, persas, incas, etc., registraron este cataclismo en sus libros más importantes como el Popol Vuh, el fundarán las hipótesis y conclusiones a partir del método 31 Revista Digital ISOCUANTA - Vol. 2, No. 2, 2012 Damián Mauricio Paternina Puentes Mahabharata, el Corán, entre otras. Allí aparecen leyendas que comparten en su descripción un desastre global que había despertado la furia de la naturaleza, había dejado pocos sobrevivientes y sería la posterior base de una nueva generación. En 1841, el geólogo francés Marcel de Serres encuentra una gran similitud entre estas leyendas religiosas y advierte que el común denominador de los relatos está representado por un “castigo” que los dioses libraron contra los habitantes que ocasionaron el desequilibrio natural. La megacatástrofe ocurrida en marzo de 2011 sobre Japón, país con amplia experiencia en este tipo de eventos, dejó 15.856 muertes y alrededor de 10 billones de dólares en pérdidas. Esto demuestra que aun siendo un país altamente desarrollado, le fue imposible escapar a las fatales consecuencias del terremoto de 9,0 magnitud en la escala de Richter. También aumenta la preocupación, ya que países más pobres tienen menos posibilidades de protegerse y de recuperarse, tal como ocurrió con el terremoto de Haití, que fue de una magnitud menor que el de Japón (7,0 en la escala de Richter), pero las víctimas fueron de hasta diez veces más, lo que puede ser explicado por la inexperiencia, la infraestructura y la deficiente atención en salud prevista para esta emergencia. Charles Darwin, al referirse sobre la desaparición inexplicable de diferentes especies, señala en su investigación zoológica relatada en el Origen de las especies (1859): “La mente se ve irresistiblemente apremiada a creer en alguna gran catástrofe, pero para destruir así animales, grandes y pequeños, tenemos que sacudir toda la estructura del globo”. Por su parte, Platón afirmó: “Ha habido y volverá a haber muchas destrucciones de la humanidad por muchas causas”. Esto nos sugiere que los defensores del ambientalismo pesimista, misantrópico y apocalíptico pueden tener cierta razón. El hombre ha logrado domesticar su entorno, transportarse de un hemisferio a otro en pocas horas, aumentar sus expectativas de vida, pero no puede predecir con exactitud y mucho menos controlar las grandes fuerzas de la naturaleza a su voluntad. Por esto, el cambio climático resulta ser un gran inconveniente y está lejos del control del hombre y sus avances tecnológicos. La ONG Intermón Oxfam (2006) afirma que el crecimiento de diferentes desastres naturales hidrometeorológicos se encuentra relacionado directamente con el calentamiento global. Las aglomeraciones urbanas modernas se encuentran construidas cerca al mar o a grandes ríos. Con el paso del tiempo, la población se ha incrementado con altas tasas de natalidad, principalmente en los países en vías de desarrollo, donde aumentan las campañas de planificación familiar con el objetivo de disminuir el rápido crecimiento poblacional. Los ciudadanos dejan las regiones campesinas y buscan formar parte de los grandes centros urbanos: Nueva York, Río de Janeiro, Seúl, Tokio, Shanghái, Londres, Sídney, Buenos Aires, Los Ángeles, Bombay, etc. Las grandes ciudades –que sirven a la vez como importantes puertos comerciales– se encuentran expuestas a los maremotos y los desastres que estos producen. Cambio climático antropogénico El cambio climático actual, causado por la contaminación del ambiente por parte del hombre, refleja cómo el capital natural ha sido víctima del gran crecimiento de la producción industrial. Los detractores de este fenómeno conciben la variación media del planeta como el resultado de procesos naturales, tales como las variaciones solares y los ciclos glaciares, sugiriendo que la humanidad es ajena de toda 32 Revista Digital ISOCUANTA - Vol. 2, No. 2, 2012 Ambientalismo y comercio justo: ¿capitalismo responsable? responsabilidad. Sin embargo, el consenso científico actual1 resalta cómo desde el siglo XX ha aumentado la emisión de gases nocivos para la capa de ozono, y esto ha acelerado el efecto invernadero, causando calentamiento global. Sin embargo, el Protocolo de Kioto no logrará las metas propuestas: la falta de voluntad política y el incumplimiento de las naciones ponen en evidencia el largo camino que aún se debe recorrer para lograr un modelo económico sostenible. Las críticas a las cumbres climáticas y a las estrategias de protección ambiental contemplan aspectos como la venta de bonos de emisiones de CO2, el insuficiente efecto que tendría la reducción de los niveles de CO2 propuestos por el Protocolo de Kioto y la desigual e injusta diferenciación de compromisos establecidos que pueden afectar el crecimiento económico de los países en vías de desarrollo. Por ejemplo, Estados Unidos es el país con mayores emisiones de CO2, ya que representa el 24,3% de las emisiones globales (Organización de Naciones Unidas, 2009). Sin embargo, se limitó a firmar el Protocolo de Kioto, pero no a ejecutarlo, y resulta beneficiado por los países que sí han invertido recursos para la disminución de emisiones nocivas. La liberación de gases como el metano, el dióxido de carbono (CO2) y el óxido nitroso ha debilitado la capa de ozono, mientras el calor procedente del sol se concentra en el ambiente terrestre y aumenta la temperatura media del planeta. En 1988, el Programa Ambiental de las Naciones Unidas (UNEP) crea el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), que tiene como objetivo analizar la información científica, técnica y socioeconómica para la comprensión del riesgo del calentamiento global inducido por el hombre. Numerosos informes especializados han sido publicados por el IPCC, como el de 2007, donde se advierte: “El calentamiento antropogénico podría producir impactos abruptos o irreversibles, en función de la rapidez y magnitud del cambio climático”. Los países industrializados impactan en mayor medida el ambiente. Las economías en desarrollo como India y China han aumentado su crecimiento económico en los últimos años, pero así mismo se han incrementado las emisiones de CO2, generadas especialmente por las trasnacionales La solución más visible que se presenta ante esta problemática es un cambio en los hábitos actuales de consumo y, en especial, en una reducción de los niveles actuales de producción, vía disminución de las emisiones de carbono. El primer gran paso para esto se da en 1992 en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, que señaló la importancia del problema y estableció el compromiso genérico de actuar bajo el principio de las “responsabilidades comunes pero diferenciadas”. No obstante, no fue hasta el protocolo de Kioto, el 11 de diciembre de 1995, cuando se establecieron compromisos cuantitativos al respecto. que se radican en estos países con mano de obra barata. Los países más pobres del África son los que aportan con menos emisiones de CO2 en el cambio climático. La figura 1 explica cómo los países con altos ingresos per cápita son a la vez los que más contaminan2. 1 La comunidad científica internacional especializada reconoce al Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) como el consenso climático especializado en esta materia. 2 Las cifras de emisiones de CO2 son del Centro para el Análisis de la Información del Dióxido de Carbono (CDIAC) y el ingreso per cápita del Banco Mundial (2006). 33 Revista Digital ISOCUANTA - Vol. 2, No. 2, 2012 Damián Mauricio Paternina Puentes Figura 1. Relación entre emisiones de CO2 e ingreso per cápita United States France Japan China India Nigeria Brazil Pakistan Ghana Kenya Congo, Dem. Rep. Afghanistan Guinea Liberia Italy Germany Canada Argentina Iran Colombia Chile Bolivia Haiti Uganda México Panamá Australia Greece Austria Israel Hong Kong, China Qatar Luxembourg Cameroon Cambodia Medio Oriente Europa Guinea-Bissau África Ásia Ásia Oriental, Oceanía Central African Republic Comoros América Fuente: autor Migraciones climáticas El cambio climático reciente es una prueba incuestionable de cómo el medio ambiente se enfrenta a temperaturas poco comunes desviadas del promedio histórico. En varios países, las sequías confirman cómo la temperatura media del planeta ha estado aumentando, por medio de capas de contaminación que se forman en la atmósfera y albergan gases nocivos que no permiten una respiración “sana” en el planeta. En diferentes lugares del mundo, las sequías han agravado las hambrunas, provocando incendios y causando muertes masivas, principalmente en Europa, África y Asia. La Oficina de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur, 2008) prevé que el cambio climático será el responsable de mayores movilizaciones de población, con el suficiente potencial para dejar apátridas a varias personas. La contaminación ambiental no solo afecta a las generaciones futuras, sino además a cada una de las especies de la biósfera. Analizando el caso de los seres humanos, son los más pobres los que sufren en mayor grado las consecuencias del agua contaminada, la erosión de los suelos, la polución y demás. La organización territorial en el mundo provee de mayores beneficios para los que tienen mayor poder adquisitivo y pueden pagar un lugar con un suelo fértil y seguro, con vegetación, agua limpia, etc. Los oprimidos deben aceptar los peores lugares para vivir, lejos de las comodidades y cerca de la contaminación de las industrias. En los lugares más críticos, donde las sequías han impactado negativamente las provisiones 34 Revista Digital ISOCUANTA - Vol. 2, No. 2, 2012 Ambientalismo y comercio justo: ¿capitalismo responsable? de agua y alimentos que demandan las comunidades, se dan las migraciones en búsqueda de abastecer las necesidades básicas. contaminación, surge la corriente ambientalista como una herramienta democrática y social para el bienestar de las generaciones presentes y futuras. Las migraciones climáticas no son un fenómeno nuevo: el hombre se ha desplazado de un continente a otro desde hace miles de años en busca de un clima mejor. Así, por ejemplo, huyendo de sequías que se habrían dado en África, debió atravesar el norte a través del estrecho de Bering. El ciclo actual del cambio climático parece indicar que este fenómeno se presentará en el siglo XXI en gran proporción; en 2008 cerca de 20 millones de personas fueron expulsadas de su territorio a causa del cambio climático, según la Organización para las Migraciones Internacionales (OIM). Ambientalismo y movimientos ecológicos En la segunda mitad del siglo XX, nace el ambientalismo como movimiento social e iniciativa para proteger el medio ambiente. Diferentes acontecimientos críticos causados por la producción industrial despertaron la atención de la comunidad, tales como el derramamiento desconsiderado de crudo, la aparición de los pesticidas y herbicidas en la agricultura, la carrera armamentista durante la Guerra Fría, el riesgo evidente de la energía nuclear y casos puntuales como la tragedia de Bhopal, en la que la empresa Union Carbide (hoy llamada Dow Chemical) liberó gases de cianuro en un radio que alcanzó 900.000 personas, de las cuales 558.125 resultaron heridas, y desde entonces se han dado más de 12.000 muertes causadas por enfermedades relacionadas con el gas nocivo. La multinacional de productos químicos nunca aceptó la responsabilidad de la tragedia causada por contaminación y nunca compensó a la comunidad. Ante estos acontecimientos surgieron las organizaciones no gubernamentales ecologistas. Según el informe “In search of shelter: mapping the effects of climate change on human migration and displacement (2009)”, de la ONU, la necesidad por abastecerse de recursos naturales y la degradación de los ecosistemas serán los motivos que impulsarán nuevas migraciones. Más de 200 millones de personas migrarían para el 2050 en busca de nuevas territorialidades. Los habitantes más afectados serán los de los países más pobres y los que se encuentren alrededor de la línea ecuatorial. Etienne Piguet, geógrafo de la Universidad of Neuchâtel, Suiza, afirma que estas migraciones se presentan principalmente en las zonas áridas del continente africano o en países como Bangladesh e India. Greenpeace (GP) es desde hace varios años la entidad que representa la lucha por la protección del ambiente y la denuncia de los crímenes que se cometen en contra de la fauna y flora de la tierra. Fundada en 1971 en Canadá y con cinco millones de miembros (según cifras de la página web oficial de GP), sus objetivos actuales se centran básicamente en el rechazo a la energía nuclear irresponsable y los alimentos transgénicos, y en la promoción del correcto proceso de desechos, la protección La preocupación por la contaminación causada por la producción y consumo de bienes ha generado una fuerte reacción social por diferentes organizaciones y grupos. La lógica intrínseca del modelo capitalista afecta el bienestar de los seres humanos y el equilibrio de los recursos finitos e infinitos, además de que aflige la cultura y el desarrollo. Por ello, y para hacer resistencia a la constante de los páramos y especies en vía de extinción, el desarrollo de energías alternativas, entre otros. 35 Revista Digital ISOCUANTA - Vol. 2, No. 2, 2012 Damián Mauricio Paternina Puentes GP realiza acciones directas de desobediencia civil no violentas y de investigación para lograr sus objetivos. Como toda gran institución, GP debe afrontar acusaciones que desde el punto de vista científico y social no resultan del todo irracionales. Greenpeace es criticada por publicitar sus acciones de forma superficial, sin atacar realmente la raíz del problema. Sus fondos, según The Center for Consumer Freedom, proceden de organizaciones como The Rockefeller Foundation y The Turner Foundation, que proceden de compañías y familias de origen petrolero y financiero. designadas por la divina providencia para llevar la democracia y la libertad a todas partes, al precio que sea (Cadena, 2009). Al Gore, exvicepresidente de Estados Unidos, es uno de los personajes políticos más influyentes de nuestra era y uno de los ambientalistas más famosos. Con la publicación de su libro An inconvenient true ha visitado varios países, donde ha dictado conferencias y vendido miles de ejemplares. Esta obra le ha traído diferentes premios –como el premio Nobel de Paz y Príncipe de Asturias en 2007–, y gracias al ambientalismo ha logrado obtener diferentes distinciones y reconocimientos. Además de ganar adeptos (de naturaleza ajena a la política), se ha mantenido en la escena mediática como una figura prestigiosa. Este movimiento ecológico se opone radicalmente a la energía nuclear, que es una fuente de energía mucho menos contaminante que el carbón y que ha hecho importantes aportes a la medicina y la agricultura; sin embargo, esta energía es principalmente asociada al uso bélico, y el recuerdo principal que se tiene de ella son las bombas atómicas. GP, para cambiar la energía nuclear, propone la energía solar, que resulta ser mucho más limpia que la anterior, pero que requiere de inversiones de varios millones de dólares –inversiones inviables para los países más pobres–. El futuro de las energías se encuentra en estas nuevas alternativas3. Al Gore viaja dictando conferencias por distintos lugares del mundo (en su jet privado). La entrada a estas conferencias, que en general tiene un costo elevado, hace parte de su agenda ecológica. Él es solo uno de una gran cantidad de figuras públicas que apoyan o participan activamente en el ambientalismo. Así, los movimientos verdes aumentan y reciben voluntarios, en tanto los recursos financieros se acrecientan vía donaciones desde los sectores privados y los organismos gubernamentales. World Wildlife Fund (WWF) es otro movimiento ecologista muy prestigioso. Con cinco millones de miembros y presencia en 28 países, se declara independiente, a pesar de funcionar con socios como la Organización de Naciones Unidas, la Unión Mundial para la Naturaleza, Traffic, la Comisión Europea y entidades de financiamiento como USAID y el Banco Mundial; entidades burocráticas Es indudable que toda organización política que quiera permanecer a través del tiempo deberá contemplar y adaptarse al discurso ecológico. Este pasará a convertirse lentamente en una nueva fuerza política a la que llegarán millones de recursos (ya sean dirigidos o autodirigidos) y tendrá como difícil tarea la reivindicación ambiental y la puesta en marcha del desarrollo sostenible ambiental. Desde el interior de varias multinacionales y para cumplir con sus obligaciones en responsabilidad social, por regulación o por iniciativa propia, ciertas empresas crean 3 La empresa Bright Source Energy construye actualmente una planta de energía solar por valor de 1600 millones de dólares en el desierto de Mojave, California. Sería la empresa más grande en el mundo y de la cual es importante inversionista Google. El negocio de la energía solar presenta un retorno del 29% sobre la inversión. 36 Revista Digital ISOCUANTA - Vol. 2, No. 2, 2012 Ambientalismo y comercio justo: ¿capitalismo responsable? va estilizando al ciudadano del futuro, y la sociedad se encarga de determinar sus deseos y su realización a partir de lo que el hombre ve en su entorno como el bienestar que estará encargado de conseguir durante el transcurso de su vida. El capitalismo es el modelo actual que define los valores de la sociedad, expresado como éxito o fracaso y representado por ganadores y perdedores dentro del comercio y la geopolítica global. sus propias fundaciones y organizaciones ambientales, que permiten disminuir sus niveles de contaminación, ser amigables para sus clientes, no ser atacadas por el activismo ecológico y reducir impuestos, dado que la política fiscal de muchas naciones contempla ventajas tributarias por la reducción de contaminación. Pese a la urgencia e importancia de encontrar vías idóneas para el desarrollo sostenible, el discurso de la lógica capitalista ha convertido al ambientalismo en un término flexible que se pronuncia en todas partes y que se adapta a diferentes intereses. Así como la libertad, la fe, la paz, la democracia, la fraternidad, la igualdad y demás valores o ideales sociales han marcado los discursos sociales, también el ambientalismo, al ser un término altamente interesante, ha fascinado a los diferentes poderes económicos, sociales y políticos. El sistema monetarista basado en las teorías de economistas como Milton Friedman ha impulsado a todos los países a una guerra comercial sin precedentes y a un estado de liberación total de los mercados, donde reina el óptimo paretiano4. Para el mercado global se crean instituciones que regulan, promueven, protegen y extienden los mercados mundiales, los cuales actualmente presencian una subordinación de la economía real frente a la financiera, en la que reinan los oligopolios y no existe una evidente equidad entre los habitantes. Capitalismo verde Debemos recordar que desde el pensamiento neoliberal y monetarista nacen las bases teóricas que sustentan al capitalismo moderno y las relaciones comerciales de globalización. Para ellos, el eje central es la cantidad de dinero en circulación y su influencia en el proceso de determinación de precios y, por tanto, en los niveles de inflación. A esta última la consideran como un fenómeno puramente monetario, en el que el mercado se regula gracias a la mano invisible enunciada por Adam Smith y en el que no es necesaria la intervención y regulación estatal. Las instituciones como creadoras de sociedad El institucionalismo se conoce como el enfoque que tienen las ciencias sociales y, particularmente, las ciencias políticas que estudian a la sociedad a partir de sus instituciones formales y de qué tan efectivo es su funcionamiento (Ortiz, 2006). Los Estados se han construido a partir de una serie de organizaciones e instituciones políticas, sociales, religiosas, comerciales, militares, nacionales, musicales, etc., que han evolucionado de acuerdo con su espacio geográfico y según la influencia recibida por otras culturas (Hinojosa, 2002). Las instituciones gubernamentales de los países que hacen parte de la Organización Mundial del Comercio La visión del mundo que tiene el hombre moderno no puede ser ajena al contexto que lo rodea. La educación orientada a los miembros más jóvenes de la comunidad 4 El concepto está relacionado con estudios de eficiencia económica y distribución del ingreso y establece como eficiente aquella situación en la cual se cumple que no es posible beneficiar a más individuos en un sistema sin perjudicar a otros. 37 Revista Digital ISOCUANTA - Vol. 2, No. 2, 2012 Damián Mauricio Paternina Puentes (OMC)5 se han adaptado al comercio internacional y a la globalización. El crecimiento económico es la prioridad de los Estados, a pesar de los efectos negativos que ello puede generar. traslada su agricultura para proveer de materias primas a los países industrializados, los cuales demandan combustibles, minería y productos agrícolas destinados, en gran proporción, a la alimentación de sus animales. Crecimiento económico vs. conservación ambiental El crecimiento económico vía explotación de las materias primas promueve un modelo de progreso económico insostenible, que condena aún más a los países más pobres, pues estos venden sus recursos naturales para ser transformados en el exterior con valor agregado (tecnología), pero luego se convierten en bienes exportados y vendidos nuevamente por las empresas multinacionales en nuestro territorio. Los países más pobres y los que se encuentran en vía de desarrollo han optado por la explotación de su economía primaria en actividades como la minería y la industria, para la producción de bienes con mano de obra barata. Colombia, por ejemplo, es hoy pionera en la producción de biocombustibles, y gran parte de la inversión extranjera directa es debida a este sector; sin embargo, la gran utilidad y buenos retornos para el inversionista no logran compensar el deterioro ambiental que puede causarse. En nuestro país, el eterno problema por el control de tierras entre grupos armados al margen de la ley, junto con la corrupción burocrática, agravan esta problemática en un sentido social, dado el desplazamiento forzado de los campesinos y los incendios en estos cultivos, que generan graves enfermedades respiratorias. El caso del páramo de Santurbán en Santander es un ejemplo de cómo un país de la “periferia” aún está en proceso de desarrollo y se encuentra sometido a la ignorancia de sus dirigentes y funcionarios públicos, que dieron la licencia de excavación de oro a la multinacional Greystar y solo gracias a la presión de los habitantes se logró parar el proyecto que pretendía afectar un páramo con la utilización de cianuro, de donde nacen varios ríos de la región que proveen agua a cerca de dos millones de habitantes. Este incidente se resume con el siguiente interrogante: ¿el agua o el oro? La plantación de palma aceitera ha sido responsable del 87% de la deforestación en Malasia, y la tendencia del sector en hectáreas se encuentra en aumento. Entre 1990 y 2002, las hectáreas en el mundo aumentaron en un 43% (Fedepalma, 2005). Pero acaso, ¿es inteligente que una economía pobre, con serios problemas sociales y de seguridad alimentaria, traslade su producción agrícola a la producción de biocombustible? A pesar de tener los recursos necesarios para abastecer el hambre de su población, Colombia, al igual que todos los países pobres, Colombia es uno de los grandes exportadores de carbón, es el segundo país con mayor biodiversidad, posee grandes reservas de petróleo, tiene una ubicación geográfica privilegiada, es el tercer PIB más fuerte de Suramérica en 2009, es reconocido exportador cafetero a nivel mundial; sin embargo, es a la vez un país con problemas de distribución de riqueza; el coeficiente de Gini de Colombia es de 53,8, lo que significa que para 2007 ocupaba en el mundo el puesto 15 en mayor desigualdad, con una distribución del ingreso peor que países como Zambia, Honduras, Singapur y Ecuador, entre otros. Esto demuestra que la 5 La OMC se creó oficialmente en enero de 1995. Está compuesta por 157 países miembros y 27 en calidad de observadores. 38 Revista Digital ISOCUANTA - Vol. 2, No. 2, 2012 Ambientalismo y comercio justo: ¿capitalismo responsable? ineficiencia política, el conflicto armado, los desplazamientos forzados y demás problemas particulares del país han contribuido a aumentar la brecha entre los más ricos y los más pobres. Las políticas económicas buscan principalmente aumentar la inversión extranjera directa, a partir de los tratados de libre comercio y las ventajas económicas dadas a los inversionistas extranjeros, sin tener en cuenta a los pequeños productores y agricultores, que se ven enfrentados a los grandes oligopolios que lideran el mercado global. Para la identificación del estatus de producto del comercio justo se han creado sellos que garantizan la calidad y autenticidad, en colaboración con algunos gobiernos. Estos sellos permiten brindar toda la información al consumidor, para que su elección contemple los beneficios de adquirir un producto justo. Fair trade: ¿la solución? bienestar tan anhelado por todos. De acuerdo a la OMCJ, uno de los 10 principios del fair trade es promover mejores prácticas medioambientales. No obstante, esta es solo una premisa en la que no se establecen de forma clara cuáles son los mecanismos o soluciones, así como las prácticas permitidas y prohibidas. La producción de bienes bajo la iniciativa del fair trade está lejos de solucionar, por su propio valor intrínseco, los daños ya causados a la biósfera. Este modelo alternativo es presentado como la solución y la vía por la cual se debe transformar al comercio libre, pero el fair trade debe ser visto como una herramienta que debe ser articulada con muchas más para alcanzar el En los últimos años, el mercadeo del comercio internacional ha hecho énfasis en el fair trade, una alternativa de comercio que pretende establecer un intercambio justo de productos, por medio de una relación directa entre el comprador y el vendedor. Al eliminar todo intermediario, los ingresos recibidos se dirigen únicamente al productor, promoviendo así la equidad y el respeto por los derechos humanos. Los principios del fair trade rechazan la explotación laboral, los alimentos transgénicos y la contaminación medioambiental, como también persiguen la abolición de los subsidios y el proteccionismo, para así mantener precios bajos. Slavoj Žižek, profesor de la Universidad de Nueva York, es un crítico del fair trade. Admite que ayudar a los más pobres por medio de un comercio justo es mejor que nada, pero analiza cómo el ser humano en su estado consumista busca redención de los daños que comete. Afirma que los productos de comercio justo, que incluyen en su precio el aporte que hacemos a las sociedades y al ambiente, no son más que un excelente mercadeo de las grandes empresas, que convierten al capitalismo en sí en un modo de producción justo, al mismo tiempo que no se remedian los daños medioambientales y la inequidad ya causada, sino que solo prolonga los males. Entonces, según Žižek, este capitalismo responsable no es realmente una solución, sino un agravante de los oprimidos: el capitalismo se ha reinventado para no desaparecer, manteniendo en Diferentes organizaciones no gubernamentales y cooperativas han sido las pioneras en la organización y promoción de los productos del comercio justo; el café, azúcar, arroz, verduras, hortalizas, artesanías y una gran cantidad de productos son elaborados bajo la idea del comercio justo. La Organización Mundial para el Comercio Justo (OMCJ) agrupa a más de 324 organizaciones en 70 países, y desde 1989 es la entidad que lidera las iniciativas de fair trade. La defensa de los pequeños agricultores y productores, la creación de mercados y la publicidad del fair trade hacen parte de su objetivo organizacional. 39 Revista Digital ISOCUANTA - Vol. 2, No. 2, 2012 Damián Mauricio Paternina Puentes el poder a las personas que dirigen el sistema: los habitantes más ricos. necesario entender las consecuencias e implicaciones que tiene el mal uso y abuso de palabras como “ambientalismo” y “fair trade”. En 2004, el Observatorio en Globalización de la Universidad Politécnica de Cataluña denunció cómo las multinacionales Kraft y Nestlé buscaban engañar a los consumidores, lanzando marcas éticas de café sin reconocer los principios que deben cumplir estos productos. La Organización Mundial del Comercio (OMC), desde sus inicios en 1995, ha tenido como responsabilidad facilitar las relaciones entre importadores y exportadores, pero desde su funcionamiento se han firmado más de cien tratados de libre comercio mientras persiste la desigualdad. De acuerdo con Stiglitz (2005), el libre mercado ha alejado a los más pobres del bienestar que es prometido por sus gobernantes cuando firman dichos tratados. Los tratados de libre comercio son un incentivo más para la explotación exhaustiva de recursos. Por esto, se hace necesario revisar cuáles son los modelos alternativos que funcionan con éxito en Europa, como también lo que representaría su implementación en el resto del mundo, para lograr un desarrollo sostenible ambientalmente y un modelo menos excluyente que el actual. El austriaco Christian Felber, profesor de Economía de la Universidad de Viena, ha creado un modelo del bien común, con el que se busca calificar a las empresas de acuerdo con sus prácticas. Las empresas que obtengan mayores puntos por disminuir impacto ambiental, respetar los derechos humanos, respetar la salud y dignidad humana tendrán beneficios económicos y ventajas legales frente a las empresas que afecten negativamente el bienestar de la sociedad. Este modelo ha sido desarrollado desde el año 2009, y a él se han adherido diferentes empresas en Europa, que participan como una organización democrática que dirige sus esfuerzos para que la reglamentación teórica sea aprobada y contemplada en las actuales leyes comerciales de la Unión Europea. El modelo de Felber puede verse como un esfuerzo por reconocer los antivalores (codicia, afán de lucro, egoísmo, corrupción, envidia, injusticia, avaricia, etc.) que hoy incentivan y alimentan al sistema económico. Al identificarlos se puede entender la raíz de los problemas actuales del sistema, demostrados en las diferentes protestas y movimientos sociales que reclaman un sistema mejor, así como en las consecuencias ambientales que afectan a la población. El comportamiento de la sociedad se ha estado alejando de los verdaderos valores e ideologías que sirven para alcanzar el bienestar: reconocer la dignidad humana, el valor intrínseco del ecosistema, los beneficios del cooperativismo, la fraternidad, el respeto, la confianza, la solidaridad, la sinceridad y demás valores que hacen parte de los ideales resumidos por el concepto del bien común y fundamentales para alcanzar un modelo de desarrollo sostenible. Hacia un verdadero nuevo modelo Aplicar un modelo idóneo y alternativo de desarrollo sostenible en cada uno de los sectores económicos es un ideal para los ambientalistas y las organizaciones sociales que exigen un mundo más justo. Para lograr un estado sostenible que disminuya el impacto ambiental y proteja a los habitantes en situaciones de vulnerabilidad frente a las catástrofes naturales y la inequidad social en general, se hace necesario identificar el valor de las alternativas y de las responsabilidades que cada agente debe asumir para la creación de un modelo mejor. También se hace 40 Revista Digital ISOCUANTA - Vol. 2, No. 2, 2012 Ambientalismo y comercio justo: ¿capitalismo responsable? Conclusiones no incurren en gastos pero resultan favorecidos por los esfuerzos de otros. El capitalismo busca reinventarse para permanecer en el poder, pero sus contradicciones son evidentes y el poder público no acepta fácilmente los mensajes que buscan limpiar su imagen de los efectos ya causados sobre la población y sobre el medio ambiente. El mercado actual nos habla de comercio justo y la “economía verde”, pero no se ve una clara participación de los oprimidos en esta nueva etapa de la globalización responsable, porque mientras existan hambrunas, migraciones, guerras, pérdida de soberanía en los Estados y demás problemáticas sociales, seguirá siendo necesario identificar las soluciones. Desde el funcionamiento de la OMC, el libre mercado ha llegado a todas las regiones, y la tendencia de los diferentes países es abrir sus barreras comerciales; sin embargo, los más pobres son excluidos de este modelo. Por ello es elemental reconocer la trascendencia y beneficios que tienen los instrumentos alternativos al actual modelo, porque estos son un inicio para alcanzar un modelo racional. Las futuras cumbres climáticas y los compromisos derivados de estas deben, inequívocamente, establecer compromisos a cada nación, de acuerdo con su efecto sobre el cambio climático. Se deberá tener en cuenta el efecto contaminante de las multinacionales que se han instalado fuera de sus fronteras de origen, para no desconocer el poder de las multinacionales más grandes y su responsabilidad. Los países pobres deberán ser incluidos en las nuevas reglas de juego para la preservación ambiental, que contemplan inversiones para la adaptación y uso de las energías alternativas. Sin embargo, la transición de procesos contaminantes a procesos sostenibles ecológicamente debe hacerse al mismo tiempo en todo el mundo, incluyendo los países periféricos, que según una visión actual, se quedarán rezagados por su pobre inversión en proyectos de biocombustibles, energías alternativas y tecnificación en la producción agrícola. Los grandes inversionistas del mundo ya han destinado sus recursos para la creación de energías futuras en proyectos con altas tasas de rentabilidad, que se encuentran localizados en los países hegemónicos y dispuestos para su consumo. La iniciativa del fair trade y los movimientos ambientalistas son susceptibles de ser politizados, como sucede con muchas organizaciones que se han visto permeadas por las grandes multinacionales y los órganos burocráticos que construyen las políticas económicas de forma conjunta con los intereses de las empresas privadas al servicio del mercado y la rentabilidad. El discurso ambientalista no se puede convertir en una especie de apocalipsis de los activistas, que genere temor y limitaciones diferenciadas, que puedan afectar negativamente El fair trade, así como el ambientalismo, son herramientas útiles que los movimientos sociales han formado para el servicio de la comunidad, pero su aplicación como salidas claras y eficaces frente a la problemática social y ambiental resultan insuficientes por la naturaleza misma de la lógica capitalista. En este sentido, la racionalidad de un comercio justo y un ambiente sano debe construir un el progreso científico y, en especial, el desarrollo de las economías emergentes. Tratados como el de Kioto son un paso importante y necesario para mitigar la contaminación ambiental, pero los países que no asumen compromisos se ven beneficiados económicamente, ya que nuevo escenario de racionalidad social donde cada uno de los agentes económicos reconozca su papel dentro de la sociedad. Igualmente, el fair trade debe devolver bienestar a los productores menos favorecidos, mas no dar a los consumidores un sentido de doble moral en el 41 Revista Digital ISOCUANTA - Vol. 2, No. 2, 2012 Damián Mauricio Paternina Puentes Cárdenas, M. y Díaz, F. (2011). La economía social: concepto y reinterpretación (documento de trabajo). Bogotá: Universidad Santo Tomás. cual redimen su culpa por seguir apoyando y comprando los productos de un sistema que impacta negativamente la sociedad. Tampoco se debe tomar al fair trade como una estrategia de mercadeo que proponga una relación superficial con la responsabilidad social. Comisión de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur). (2008). Cambio climático, desastres naturales y desplazamiento humano: la perspectiva de la Acnur. Ginebra. Los instrumentos ambientalistas y de fair trade se deberán mantener democráticos y honestos, con canales de comunicación abiertos y directos al público. Las grandes instituciones multilaterales son importantes en la construcción de un sistema económico más justo. No se podrá implementar un comercio justo mientras los países desarrollados protejan sus mercados con subvenciones y subsidios. La reglamentación internacional debe propender al respeto de los derechos fundamentales de los trabajadores y del comercio justo, así como deberá informar de las injusticias e impedir la asimetría en la información. Correa, P. (2011, 18 de marzo). El futuro de Santurbán. El Espectador. Recuperado de http://www.elespectador.com/impreso/vivir/ articulo-257849-el-futuro-de-santurban. Darwin, C. (1859). On the origin of species by means of natural selection, or the preservation of favoured races in the struggle for life. Londres: Forgotten Books. Felber, C. (2008). New economic values. Viena: Deuticke. La biósfera es un sistema interconectado en el cual un defecto afecta a los demás individuos que lo componen; las catástrofes son la evidencia de los errores que se obtienen por la explotación de los recursos finitos e infinitos, sin una previa evaluación ecológica de los riesgos. No será difícil encontrar un modelo que permita el sano desarrollo humano. La sostenibilidad podrá ser alcanzada con la unión de los avances y destrezas que las diferentes disciplinas del conocimiento puedan aportar al bienestar de la humanidad, reconociendo, a la vez, la herencia natural y sus beneficios, en el contexto de un capitalismo realmente responsable que no permita ninguna injusticia social. González, S. y Mascareñas, J. (1999). La globalización de los mercados financieros. Noticias de la Unión Europea, 172, 15-35. Madrid: Universidad Complutense de Madrid. Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC). (2007). Cambio climático 2007: Informe de síntesis. Contribución de los Grupos de trabajo I, II y III al Cuarto Informe de Evaluación del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático. Ginebra. Referencias Hinojosa, L. M. (2002). Comercio justo y derechos sociales. Madrid: Tecnos. Cadena, J. (2005). De la geopolítica a la geoeconomía: ¿una forma virtual de colonización? Revista CIFE, 16(12), 1-26. Bogotá: Universidad Santo Tomás. Intermón Oxfam (2006). La realidad de la ayuda 20062007. Barcelona. Recuperado de www.intermonoxfam. 42 Revista Digital ISOCUANTA - Vol. 2, No. 2, 2012 Ambientalismo y comercio justo: ¿capitalismo responsable? org/sites/default/files/documentos/files/070323_ Realidad_Ayuda_06-07_0.pdf Organización de las Naciones Unidas (ONU) (2009). In search of shelter mapping: the effects of climate change on human migration and displacement. New York. Johannessen, S. & Wilhite, H. (2010). Who really benefits from fair trade? Analysis of value distribution in fair trade coffee. Globalizations, 7(4), 525-544. Ortiz, R. (2006). Institucionalismo contextualizado: diccionario de ciencia política. Teorías, métodos, conceptos. México: Dieter Nohlen. Lacompba, J. (2008). Historia de las migraciones internacionales. Madrid: Los libros de la Catarata. Žižek, S. (2009): First as tragedy, then as farce. London: Verso. Leff, E. (1996). 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