CONTRADICCION DE TESIS 51/92. Número de registro: 177 Octava Época Instancia: Cuarta Sala Fuente: Semanario Judicial de la Federación Tomo: Tomo XIII, Abril de 1994 Página: 117 CONTRADICCION DE TESIS 51/92. ENTRE EL TERCER TRIBUNAL COLEGIADO DEL SEGUNDO CIRCUITO Y EL SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO DEL SEGUNDO CIRCUITO. CONSIDERANDO: TERCERO. Corresponde a continuación verificar si existe la contradicción denunciada, entre las tesis de referencia. A. Por una parte, de los dos juicios de amparo radicados ante el Tercer Tribunal Colegiado del Segundo Circuito, con residencia en Toluca, se tienen estos antecedentes: a). Del juicio de amparo directo número 588/92, resuelto el diez de septiembre de mil novecientos noventa y dos, aparece en el considerando quinto, lo siguiente: "Alega la quejosa que el laudo combatido resulta inconstitucional, en tanto que la Junta responsable con el afán de eludir condenar a la empresa demandada, quien no compareció a juicio a contestar la demanda, ni presentó prueba alguna, determinó que la actora, ahora quejosa, no había demostrado la acción de rescisión ejercitada, y estimó que la causal invocada no encuadra dentro de ninguno de los supuestos del artículo 51 de la Ley Federal del Trabajo, cuando la misma consistente en la negativa por parte del patrón de dar capacitación y adiestramiento al trabajador, debe considerarse como causa análoga a una falta de probidad y honradez por parte del patrón, el que tiene la obligación de proporcionar a sus trabajadores el adiestramiento y la capacitación que requieran para el desempeño de sus labores. "Los conceptos de violación son esencialmente fundados. "De las constancias de autos aparece que la ahora quejosa, demandó, entre otras prestaciones, el pago de indemnización constitucional por despido injustificado al haberse actualizado la causal de rescisión prevista en la fracción IX, del artículo 51 de la Ley Federal del Trabajo ante la reiterada negativa de Francisco Javier Nieto gerente de Corporación Andaluza, Sociedad Anónima de Capital Variable, para proporcionar a la actora la capacitación y el adiestramiento que como obligación debía otorgársele. -1- CONTRADICCION DE TESIS 51/92. "La Junta responsable, a pesar que la demandada no compareció a juicio, teniéndosele por contestada la demanda en sentido afirmativo, ni presentó prueba alguna, estimó que la actora no había acreditado la acción ejercitada, en virtud de que la negativa del patrón de otorgar capacitación y adiestramiento al actor, no encuadraba dentro de ninguno de los supuestos del artículo 51 de la Ley Federal del Trabajo. "La consideración de la responsable resulta inexacta, cuenta habida de que la causal de rescisión invocada por la actora, la fundó en la fracción IX del artículo 51 de la Ley Federal del Trabajo, que establece: "Artículo 51. Son causas de rescisión de la relación de trabajo, sin responsabilidad para el trabajador: ... IX. Las análogas a las establecidas en las fracciones anteriores, de igual manera graves y de consecuencias semejantes, en lo que al trabajo se refiere. "Y, la actora manifiesta que la analogía de la causal se da con falta de probidad y honradez por parte del patrón, quien tiene la obligación legal de proporcionar capacitación y adiestramiento a sus trabajadores. "La tesis de jurisprudencia número 1436, visible en la página 2291 del último Apéndice al Semanario Judicial de la Federación, Compilación 1917-1985, Segunda Parte, Volumen V, que dice: "'PROBIDAD U HONRADEZ, FALTA DE. CONCEPTO. Por falta de probidad u honradez se entiende el no proceder rectamente en las funciones encomendadas, con mengua de rectitud de ánimo, o sea, apartarse de las obligaciones que se tienen a cargo procediendo en contra de las mismas, dejando de hacer lo que se tiene encomendado, o haciéndolo en contra; debe estimarse que no es necesario para que se integre la falta de probidad u honradez que exista un daño primordial o un lucro indebido, sino sólo que se observe una conducta ajena a un recto proceder.' "Luego, constituye falta de probidad el apartarse de las obligaciones que se tienen a cargo, procediendo en contra o dejando de hacerlas como en el caso lo constituye la obligación de capacitar y adiestrar a los trabajadores, lo cual es un derecho constitucionalmente establecido en el artículo 123, inciso A, fracción XIII de la Carta Magna. "Por su parte, el artículo 132 fracción XV, de la Ley Federal del Trabajo, mediante reforma publicada en el Diario Oficial el veintiocho de abril de mil novecientos setenta y ocho, establece: "Artículo 132. Son obligaciones de los patrones: XV. Proporcionar capacitación y -2- CONTRADICCION DE TESIS 51/92. adiestramiento a sus trabajadores, en los términos del capítulo III Bis de este Título. "Por lo tanto, si el patrón tiene legalmente la obligación de proporcionar a sus trabajadores capacitación y adiestramiento, es claro que al negarse a proporcionarlo a la actora incurrió en una falta de probidad al dejar de dar la capacitación y adiestramiento que obligatoriamente debe otorgar a sus trabajadores conforme a lo establecido en la ley laboral. "De manera que al haberse acreditado la negativa del patrón para otorgar a la actora la capacitación y adiestramiento que obligatoriamente tenía de proporcionarle, al no haber comparecido a juicio y tener por contestada la demanda en sentido afirmativo, y constituir aquélla una circunstancia análoga a una falta de probidad por parte del patrón, debe estimarse que quedó acreditada la falta de probidad y, por tanto, la procedencia de la causal de rescisión laboral por causas imputables al patrón que ejercitó la actora en juicio." b). En el amparo directo 589/92 resuelto el dos de septiembre de mil novecientos noventa y dos, se sostuvo idéntico criterio. B. Por otra parte, del juicio de amparo directo número 578/92 radicado ante el Segundo Tribunal Colegiado del Segundo Circuito con residencia en Toluca, resuelto el nueve de septiembre de mil novecientos noventa y dos, aparece en el considerando cuarto, lo siguiente: "Los conceptos de violación son infundados. "En efecto, la Junta responsable declaró improcedente la acción ejercitada sobre la rescisión de la relación de trabajo, porque la causal invocada, consistente en la negativa del patrón de otorgar capacitación y adiestramiento al actor, no encuadra en ninguno de los supuestos previstos, por el artículo 51 de la Ley Federal del Trabajo. "Por su parte, el quejoso argumenta que a la empresa se le tuvo por contestada la demanda en sentido afirmativo y por perdido su derecho para ofrecer pruebas; que la autoridad se equivoca cuando habla de que la causal de rescisión no encuadra en ninguno de los supuestos previstos por el artículo 51 de la ley citada, aunque está perfectamente demostrado que la falta de capacitación tiene similitud por analogía con una falta de probidad, por ser la capacitación y adiestramiento un derecho constitucional. "Ahora bien, el artículo 51, fracción IX, de la Ley Federal del Trabajo, establece: 'Son causas de rescisión de la relación de trabajo, sin responsabilidad para el trabajador. IX. Las análogas a las establecidas en las fracciones anteriores, de igual manera graves y de consecuencias semejantes, en lo que al trabajo se refiere.'. "Según se desprende del precepto parcialmente transcrito, la aplicación de la última fracción -3- CONTRADICCION DE TESIS 51/92. del mismo, exige el cumplimiento de diversos requisitos, que son a saber: a). Que la causal de rescisión invocada guarde analogía con alguna de las enumeradas en el propio precepto legal; b). Que sea de naturaleza grave como las causales previstas expresamente, y c). Que las consecuencias que produzca sobre la relación de trabajo, sean semejantes a las que originarían las causas específicamente reguladas. "Dicho en otras palabras, para determinar que se está frente a una causal rescisoria de la relación de trabajo por analogía, es necesario que los hechos de que se trate no constituyan alguna de las causales enunciadas por la ley, pero sí semejante a ellas; y, que sean de tal naturaleza grave que sus efectos sobre el vínculo obrero patronal sean similares a los producidos por una causa de rescisión expresa, o sea que los resultados que una y otra originan respecto del desempeño de tal trabajo tengan una relación de proporcionalidad. "Sin embargo las exigencias a que se alude, no se reúnen en casos, en que se atribuye al patrón renuencia a proporcionar la capacitación y el adiestramiento a un empleado; en virtud de que no obstante que la omisión de cumplir con tal obligación legal, pudiera considerarse como una falta de honradez, ello no implica necesariamente que la abstención del patrón de que se hace referencia, traiga como consecuencia la imposibilidad de continuar con la relación de trabajo, que sería el factor determinante para considerar que es procedente dar por concluida la relación laboral. "Por tanto, puede ya establecerse que no basta que una situación en particular guarde analogía con cualquiera de las causales de rescisión previstas por la legislación en materia de trabajo, para decretar la terminación de la relación laboral sin responsabilidad para el trabajador; porque el propio ordenamiento legal citado, exige además que los motivos sean graves, de tal manera que sus consecuencias incidan sobre la continuidad de la relación obrero patronal, lo cual como se ha visto no ocurre en este asunto." CUARTO. De lo precisado en los párrafos anteriores, se desprende que los dos colegiados referidos se han pronunciado en torno a un mismo tema, al resolver en forma diversa, los amparos interpuestos por la parte actora en contra de laudos dictados por la Junta Especial Número Uno de la Local de Conciliación y Arbitraje del Estado de México, ante la que se demandara la rescisión de la relación laboral, por causas imputables a la empresa por no otorgar capacitación y adiestramiento. Queda de manifiesto que sí existe la contradicción de tesis que se denuncia, en razón de que, por una parte, el Tercer Tribunal Colegiado del Segundo Circuito, con residencia en Toluca, sostiene que la omisión del patrón para proporcionar capacitación a un trabajador constituye una circunstancia análoga a una falta de probidad u honradez por parte del empleador, haciendo procedente la causal de rescisión laboral ejercitada por la parte actora y, por la otra, el Segundo Tribunal Colegiado del Segundo Circuito, también con sede en Toluca, arriba a la -4- CONTRADICCION DE TESIS 51/92. conclusión contraria, esto es, que no obstante que la renuencia de capacitar al trabajador pudiera considerarse como falta de honradez, no implica que traiga como consecuencia, la imposibilidad de continuar la relación de trabajo, factor determinante para establecer que se está frente a una causal rescisoria, por analogía, de dicha relación. En estos términos queda configurada la contradicción de tesis entre los colegiados de referencia. QUINTO. Esta Cuarta Sala estima que debe prevalecer el criterio que se sostiene en esta resolución, que se aparta de los que sustentan, el Segundo y Tercer Tribunales Colegiados, ambos del Segundo Circuito, con residencia en Toluca. Ello es así, ya que en términos de lo dispuesto por los artículos 107, fracción XIII, de la Constitución Federal y 197-A de la Ley de Amparo, cuando esta Sala de la Suprema Corte de Justicia resuelve una contradicción de tesis, no está obligada a adoptar uno de los dos o más criterios en pugna, sino que goza de libertad para establecer, con toda validez, una tesis distinta de aquellas que se contraponen, según se desprende, tanto de la interpretación literal de estas disposiciones, como de la finalidad que de las mismas se refiere. El anterior criterio lo ha sustentado esta Cuarta Sala al resolver las contradicciones de tesis que dieron margen a la elaboración de la tesis jurisprudencial número 2/94, aprobada en sesión privada el 31 de enero de 1994, por unanimidad de cinco votos, que dice: "CONTRADICCION DE TESIS, NO TIENE QUE RESOLVERSE INVARIABLEMENTE DECLARANDO QUE DEBE PREVALECER UNO DE LOS CRITERIOS QUE LA ORIGINARON, PUESTO QUE LA CORRECTA INTERPRETACION DEL PROBLEMA JURIDICO PUEDE LLEVAR A ESTABLECER OTRO. La finalidad perseguida por los artículos 107, fracción XIII, de la Constitución Federal y 197-A de la Ley de Amparo, al otorgar competencia a las Salas de la Suprema Corte de Justicia de la Nación para resolver las contradicciones de tesis que surjan entre los Tribunales Colegiados de Circuito, estableciendo cuál tesis debe prevalecer, es la de preservar la unidad en la interpretación de las normas que integran el orden jurídico nacional, fijando su verdadero sentido y alcance, lo que, a su vez, tiende a garantizar la seguridad jurídica. Tan importante y trascendental propósito se tornaría inalcanzable si se llegara a concluir que la Suprema Corte de Justicia de la Nación está obligada, inexorablemente, a decidir en relación con el criterio que se establece en una de las tesis contradictorias, a pesar de considerar que ambas son incorrectas o jurídicamente insostenibles. Por consiguiente, la Suprema Corte válidamente puede acoger un tercer criterio, el que le parezca correcto, de acuerdo con el examen lógico y jurídico del problema, lo que es acorde, además, con el texto de las citadas disposiciones en cuanto indican que la Sala debe decidir '... cuál tesis debe prevalecer', no cuál de las dos tesis debe prevalecer." -5- CONTRADICCION DE TESIS 51/92. Así, esta Cuarta Sala no comparte el criterio del Tercer Tribunal Colegiado del Segundo Circuito, recogido en la correspondiente tesis que formuló, al fallar el 2 y 10 de septiembre de 1992, respectivamente, los juicios de amparo directo números 588/92 y 589/92 y a los que ya antes se hizo alusión, al estimar dicho tribunal que la negativa del patrón para otorgar capacitación constituye, en todo caso, una circunstancia análoga a una falta de probidad por parte del patrón y, por tanto, ser procedente la causal de rescisión laboral por causa imputable al patrón. De la misma manera, tampoco cabe adoptar en su integridad el criterio del Segundo Tribunal Colegiado, en el juicio de amparo número 578/92, fallado el 9 de septiembre de 1992, que resolvió en sentido opuesto, esto es, que en ningún caso constituye causal rescisoria por analogía a una falta de probidad, el no proporcionar capacitación al trabajador. Así las cosas, se pasa a razonar lo conducente a fin de establecer el criterio de esta Cuarta Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, al que deben sujetarse los tribunales de la nación. En primer lugar y a fin de dilucidar el problema en cuestión, procede resaltar que el proporcionar capacitación es una obligación del patrón que, a su vez, constituye un derecho y también una obligación de los trabajadores. En efecto, la fracción XIII del artículo 123 constitucional ordena: "Las empresas, cualquiera que sea su actividad, estarán obligadas a proporcionar a sus trabajadores capacitación o adiestramiento para el trabajo. La ley reglamentaria determinará los sistemas, métodos y procedimientos conforme a los cuales los patrones deberán cumplir con dicha obligación". Este imperativo constitucional se desarrolla en el Título Cuarto de la Ley Federal del Trabajo, al disponer en el Capítulo I, artículo 132, fracción XV, la obligación de los patrones de proporcionar capacitación y adiestramiento a sus trabajadores, en los términos del Capítulo III Bis del mismo Título Cuarto, de cuya simple lectura se hace patente el indiscutible acceso de los trabajadores a que se les imparta capacitación, en concordancia con el enfático pronunciamiento del artículo 3o. de la propia ley laboral que en su último párrafo, dispone ser de interés social promover y vigilar la capacitación y el adiestramiento de los trabajadores. Para el caso a estudio, deben destacarse los siguientes artículos de dicho Capítulo III Bis que a la letra establecen: "ARTICULO 153 A. Todo trabajador tiene el derecho a que su patrón le proporcione capacitación o adiestramiento en su trabajo que le permita elevar su nivel de vida y productividad, conforme a los planes y programas formulados, de común acuerdo, por el patrón y el sindicato o sus trabajadores y aprobados por la Secretaría del Trabajo y Previsión -6- CONTRADICCION DE TESIS 51/92. Social." "ARTICULO 153 B. Para dar cumplimiento a la obligación que, conforme al artículo anterior les corresponde, los patrones podrán convenir con los trabajadores en que la capacitación o adiestramiento se proporcione a éstos dentro de la misma empresa o fuera de ella, por conducto de personal propio, instructores especialmente contratados, instituciones, escuelas y organismos especializados, o bien mediante adhesión a los sistemas generales que se establezcan y que se registren en la Secretaría del Trabajo y Previsión Social. En caso de tal adhesión, quedará a cargo de los patrones cubrir las cuotas respectivas." "ARTICULO 153 F. La capacitación y el adiestramiento deberán tener por objeto: I. Actualizar y perfeccionar los conocimientos y habilidades del trabajador en su actividad; así como, proporcionarle información sobre la aplicación de nueva tecnología en ella; II. Preparar al trabajador para ocupar una vacante o puesto de nueva creación; III. Prevenir riesgos de trabajo; IV. Incrementar la productividad; y, V. En general, mejorar las aptitudes del trabajador." "ARTICULO 153 H. Los trabajadores a quienes se imparta capacitación o adiestramiento están obligados a: I. Asistir puntualmente a los cursos, sesiones de grupo y demás actividades que formen parte del proceso de capacitación o adiestramiento; II. Atender las indicaciones de las personas que impartan la capacitación o adiestramiento, y cumplir con los programas respectivos; y, III. Presentar los exámenes de evaluación de conocimientos y de aptitud que sean requeridos." "ARTICULO 153 I. En cada empresa se constituirán Comisiones Mixtas de Capacitación y Adiestramiento, integradas por igual número de representantes de los trabajadores y del patrón, las cuales vigilarán la instrumentación y operación del sistema y de los procedimientos que se implanten para mejorar la capacitación y el adiestramiento de los trabajadores, y sugerirán las medidas tendientes a perfeccionarlos; todo esto conforme a las necesidades de los trabajadores y de las empresas." "ARTICULO 153 M. En los contratos colectivos deberán incluirse cláusulas relativas a la obligación patronal de proporcionar capacitación y adiestramiento a los trabajadores, conforme a planes y programas que satisfagan los requisitos establecidos en este Capítulo. Además, podrá consignarse en los propios contratos el procedimiento conforme al cual el patrón capacitará y adiestrará a quienes pretendan ingresar a laborar en la empresa, tomando en cuenta, en su caso, la cláusula de admisión." "ARTICULO 153 N. Dentro de los quince días siguientes a la celebración, revisión o prórroga del contrato colectivo, los patrones deberán presentar ante la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, para su aprobación, los planes y programas de capacitación y -7- CONTRADICCION DE TESIS 51/92. adiestramiento que se haya acordado establecer, o en su caso, las modificaciones que se hayan convenido acerca de planes y programas ya implantados con aprobación de la autoridad laboral." "ARTICULO 153 O. Las empresas en que no rija contrato colectivo de trabajo, deberán someter a la aprobación de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, dentro de los primeros sesenta días de los años impares, los planes y programas de capacitación o adiestramiento que, de común acuerdo con los trabajadores, haya decidido implantar. Igualmente, deberán informar respecto a la constitución y bases generales a que se sujetará el funcionamiento de las Comisiones Mixtas de Capacitación y Adiestramiento." "ARTICULO 153 S. Cuando el patrón no dé cumplimiento a la obligación de presentar ante la Secretaría del Trabajo y Previsión Social los planes y programas de capacitación y adiestramiento, dentro del plazo que corresponda, en los términos de los artículos 153-N y 153-O, o cuando presentados dichos planes y programas, no los lleve a la práctica, será sancionado conforme a lo dispuesto en la fracción IV del artículo 992 de esta ley, sin perjuicio de que en cualquiera de los dos casos, la propia secretaría adopte las medidas pertinentes para que el patrón cumpla con la obligación de que se trata." "ARTICULO 153 U. Cuando implantado un programa de capacitación, un trabajador se niegue a recibir ésta, por considerar que tiene los conocimientos necesarios para el desempeño de su puesto y del inmediato superior, deberá acreditar documentalmente dicha capacidad o presentar y aprobar, ante la entidad instructora, el examen de suficiencia que señale la Secretaría del Trabajo y Previsión Social. En este último caso, se extenderá a dicho trabajador la correspondiente constancia de habilidades laborales." "ARTICULO 153 X. Los trabajadores y patrones tendrán derecho a ejercitar ante las Juntas de Conciliación y Arbitraje las acciones individuales y colectivas que deriven de la obligación de capacitación o adiestramiento impuesta en esta Capítulo." Dado que conforme al artículo 48 de la Ley Federal del Trabajo, tanto el trabajador como el patrón podrán rescindir en cualquier tiempo la relación de trabajo, por causa justificada, sin incurrir en responsabilidad, procede ahora determinar el meollo de la contradicción de tesis en estudio, esto es, si dentro de las acciones a ejercitarse, mencionadas en el artículo 153 X, transcrito anteriormente, queda incluida la de demandar la rescisión de la relación de trabajo, en los términos de la fracción IX, en relación con la fracción II del artículo 51 de la Ley Federal del Trabajo, que establecen: "ARTICULO 51. Son causas de rescisión de la relación de trabajo, sin responsabilidad para el trabajador: -8- CONTRADICCION DE TESIS 51/92. "... II. Incurrir el patrón, sus familiares o su personal directivo o administrativo, dentro del servicio, en faltas de probidad u honradez, actos de violencia, amenazas, injurias, malos tratamientos u otros análogos, en contra del trabajador, cónyuge, padres, hijos o hermanos. "... IX. Las análogas a las establecidas en las fracciones anteriores, de igual manera graves y de consecuencias semejantes, en lo que al trabajo se refiere." La interpretación de la última fracción transcrita, debe efectuarse partiendo de la base de que establece un derecho relativo y no absoluto, pues la Ley Federal del Trabajo preconiza y tiende a lograr como finalidad fundamental, la estabilidad del trabajador en el empleo, es decir, su permanencia y continuidad en el trabajo desempeñado, tanto por seguridad jurídica, como por la enorme repercusión social y humana que representa la extinción de una relación laboral. De ahí, que el interpretar analógicamente las trascendentes disposiciones legales relativas a la rescisión en materia laboral, implica hacerlo extensivamente a un caso no previsto, que debe revestir igual gravedad, además de ser similar a alguno de los previstos en las ocho causales señaladas en el artículo 51 de la ley, resultando acertado en este aspecto, el criterio del Segundo Tribunal Colegiado del Segundo Circuito, en el sentido de que, para determinar que se está frente a una causal rescisoria de la relación de trabajo por analogía, es necesario que los hechos de que se trate no constituyan alguna de las causales expresamente enunciadas por la ley, aunque sí semejantes a ellas, y, que sean de tal naturaleza graves que sus efectos sobre el vínculo obrero patronal sean similares a los producidos por una causa de rescisión expresa, o sea que los resultados y consecuencias que una y otra originen respecto del desempeño del trabajo, tengan una relación de proporcionalidad. Sentado que la rescisión es un derecho que le asiste a los dos sujetos de la relación laboral para darla por concluida y que tal derecho surge cuando ocurre alguno de los supuestos que la ley señala, procede determinar si tales exigencias se reúnen en casos en que se atribuye al patrón renuencia a proporcionar capacitación o adiestramiento a un trabajador. Es de resaltarse que el desarrollo de recursos humanos a través de la capacitación o adiestramiento es todo un proceso complejo y permanente, difícil de implantarse armónicamente con inmediatez en los centros de trabajo y mucho menos por decreto de autoridad, no obstante diversas y terminantes disposiciones legales para propiciar la capacitación, como las contenidas en los artículos 25, fracción VII; 132 fracción XV; 180 fracción IV; 391 fracción VII; 412 fracción V; 527; 537; 539; 699; 892; 992 y 994 todos de la codificación laboral. Sería prolijo intentar describir específicamente las fases del proceso de capacitación o adiestramiento, pero a guisa de ejemplo y solamente para efectos de esta resolución, pueden mencionarse algunas de esas fases, tasando como sinónimos, con fines estrictamente jurídicos, a la capacitación o al adiestramiento, por así entenderlo la legislación. Tales fases -9- CONTRADICCION DE TESIS 51/92. ejemplificativas serían: El diagnosticar necesidades a satisfacer, para evitar "capacitar por capacitar"; el diseño y operación de programas; su prioridad; el formular inventario de habilidades laborales; el concurso de voluntades de empleador y trabajador con absoluta convicción de lograr los beneficios esperados; el definir el acceso a la administración y tecnología deseable; el contar con los elementos humanos y técnicos apropiados; la disponibilidad de tiempo y de presupuesto, así como la relación costobeneficio en la búsqueda de la mejora continua, entre otras. Si a lo anterior, se agrega que en las tareas de capacitación o adiestramiento, no basta el común acuerdo de patrón y trabajador, pues de conformidad con los artículos, 153-A y 539 de la Ley Federal del Trabajo, a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social le corresponde aprobar, modificar o rechazar, según el caso, los planes y programas que se presenten sobre la materia, hace que todo lo mencionado enunciativamente y en forma por demás genérica, incida en el riesgo de que se presenten limitantes y, en consecuencia, múltiples causas de no inmediata aplicabilidad del proceso de capacitación, las que no necesariamente entrañan un indebido proceder. Asimismo, es de resaltarse que al elevarse a rango constitucional en 1968 el derecho y la obligación de capacitarse, el legislador no adicionó como causal de huelga específica, su incumplimiento, tal y como acontece en lo relativo a exigir el cumplimiento de las disposiciones legales sobre la participación de los trabajadores en las utilidades de la empresa (Artículo 450 fracción V de la Ley Federal del Trabajo). Esto es así, no porque se minimice a la capacitación, sino por las dificultades que puede implicar su aplicación, dada su peculiar esencia, anteriormente comentada. Sentado pues, que el artículo 153-A ya transcrito, establece que el derecho del trabajador a que se le proporcione capacitación o adiestramiento, es conforme a los planes y programas formulados de común acuerdo por el patrón y el sindicato o sus trabajadores y que sean aprobados por la Secretaría de Trabajo y Previsión Social, tal disposición permite deducir que si no existen tales programas, o existiendo no se apliquen, en un tiempo y condiciones razonables, indebidamente puede estimarse que ello provoque en forma imprescindible la terminación de la relación laboral, sino que, en primera instancia, tendría aplicación el artículo 153-X que otorga el derecho a los trabajadores y a los patrones, para ejercitar las acciones individuales y colectivas que deriven de la obligación legal de capacitar o adiestrar. Por ello, no es dable confundir tales acciones apresurando su homologación sin mayor análisis con la existencia de una causal rescisoria, pues entonces todo caso desembocaría en dar por terminada la relación laboral, lo cual no puede estimarse que haya sido la intención del legislador, dadas las diversas opciones que ofrece la ley para propiciar y exigir que se dé la capacitación, sin convertir, indiscriminadamente, su omisión, en generadora de rescisiones laborales, exponiendo así, la estabilidad en el empleo, socialmente de tanta trascendencia. -10- CONTRADICCION DE TESIS 51/92. Correlativa del derecho del trabajador para exigir el cumplimiento de la obligación de capacitar en los términos del artículo 153-X, antes transcrito, está la facultad que la fracción IV del 994 de la propia ley laboral, otorga a la autoridad al permitirle imponer al patrón una severa multa (de 15 a 315 veces el salario mínimo general) por no cumplir con la obligación de proporcionar capacitación; multa que se duplica si la irregularidad no es subsanada dentro del plazo que se conceda para ello. Tales circunstancias, entre otras, así como la repercusión establecida en el artículo 159, en cuanto a que si el patrón no ha dado cumplimiento a la obligación de capacitar, el ascenso para cubrir una vacante se otorgará al trabajador de mayor antigüedad, independientemente de su aptitud, son algunas ejemplificaciones de la reiterada tendencia contenida en la Ley Federal del Trabajo, para propiciar la capacitación e, igualmente, revela la intención del legislador de evitar la negativa sistemática del patrón, para cumplir sus obligaciones en esta importante materia, dado el beneficio incuestionable que la capacitación aporta al país, a la fuente de trabajo, o sea a los objetivos de la empresa y, por sobre todo, al desarrollo del recurso humano. Resulta pues obvio, reconocer que el dejar de capacitar al personal opera en contra de las trascendentes consecuencias ya referidas, lo cual crea una presunción para estimar que todo empleador tiene interés en promover la mejora continua, pero en caso de que así no sucediere, tal incumplimiento, en términos generales, no impide, forzosamente y de inmediato, la continuidad de la relación laboral. En tal sentido, este Alto Tribunal ha sostenido, tratando temas laborales diferentes, pero no por ello menos importantes, que determinados incumplimientos del patrón de alguna obligación contraída, como lo puede ser la inobservancia del pago correcto de vacaciones, del tiempo extraordinario o del aguinaldo, no da lugar a la rescisión del contrato por parte del trabajador, entre otras razones, por estimarse que tal incumplimiento no es de naturaleza grave, por lo que al trabajo se refiere, ni puede constituir una falta que interfiera con la supervivencia del trabajador, o afecte la relación laboral. Los referidos criterios han sido sustentados por la Suprema Corte de Justicia de la Nación en las siguientes tesis: "PATRONOS, PROBIDAD DE LOS. No hay razón alguna para suponer que la sola inoportunidad en el cumplimiento de obligaciones que se deriven en un contrato de trabajo, signifique falta de probidad en el patrono, pues la fracción XXII del artículo 123 constitucional, se limita a enunciar este término y el significado gramatical de tal palabra, da la idea de falta de honradez, de mala fe, engaño, abuso en la influencia moral que el patrono pudiera ejercer sobre el obrero en aprovechamiento indebido de los intereses del primero, con mengua de los del segundo, en tanto que la falta oportuna en el cumplimiento de las -11- CONTRADICCION DE TESIS 51/92. obligaciones del patrono, puede originarse no sólo en las causas indicadas, sino en causas enteramente ajenas a las que se acaban de señalar, sin que exista ninguna otra disposición legal de cuyos términos pudiera deducirse que a tal vocablo corresponde, en estos casos, una significación técnica especial.". M.E. RAYA Y CIA., SUCS., S.A., PAGINA 1200 TOMO XXXV, QUINTA EPOCA. 9 DE JULIO DE 1932. CINCO VOTOS. "VACACIONES. FALTA DE PAGO DE LAS. NO CONSTITUYE CAUSAL DE RESCISION. El hecho de que la empresa no le hubiera otorgado vacaciones al trabajador ni se les hubiera pagado, no constituye causa de rescisión, porque las ocho primeras fracciones del artículo 123 de la Ley Federal del Trabajo de 1931, no señala ese hecho como tal causa de rescisión, y no puede considerarse que sea una causa análoga que permita al trabajador rescindir su contrato de trabajo, puesto que la acción que se deriva de la omisión del patrón al no otorgar las vacaciones a que tenga derecho un trabajador, es la de que éste pueda exigirle ante la autoridad laboral correspondiente que se las otorgue. "Nota: el artículo 123 citado, corresponde al 48 de la Ley Federal del Trabajo de 1970." AMPARO DIRECTO 3204/53. MIGUEL SOSA JEREZ, PAGINA 1705. TOMO CXIX. QUINTA EPOCA. 11 DE MARZO DE 1954. CINCO VOTOS. AMPARO DIRECTO 5606/57. LOUIS MARRASSE MERLE. PAGINA 142 VOL. XXVI. SEXTA EPOCA. QUINTA PARTE. UNANIMIDAD DE CUATRO VOTOS. AMPARO DIRECTO 2986/63. OCTAVIANO RUIZ PERALTA. PAGINA 44 VOL. LXXXI. SEXTA EPOCA. 13 DE MARZO DE 1964. CINCO VOTOS. AMPARO DIRECTO 2995/66. SILVERIO PEREZ GARCIA Y OTROS. PAGINA 28. VOL. CXX. SEXTA EPOCA. 29 DE JUNIO DE 1967. UNANIMIDAD CUATRO VOTOS. AMPARO DIRECTO 2471/69. ABELARDO MEDINA MEDINA. PAGINA 69. VOL. X. SEPTIMA EPOCA. QUINTA PARTE. 29 DE OCTUBRE DE 1969. UNANIMIDAD DE CUATRO VOTOS. "VACACIONES, RESCISION INOPERANTE DEL CONTRATO DE TRABAJO, POR FALTA DE PAGO DE LAS. La falta de pago de lo correspondiente a vacaciones no da motivo a la rescisión del contrato por parte del trabajador, pues la causal prevista en la ley conforme a su letra y a su espíritu, se refiere a la falta de pago del salario estipulado, pero no al de prestaciones que no lo integran. La misma situación tampoco puede considerarse como falta de probidad y honradez del patrón ni puede su omisión situarse dentro de la fracción IX del artículo 123 de la ley laboral que regía antes." AMPARO DIRECTO 2575/62. FRANCISCO ARENAS MONTES Y OTROS. PAGINA 28. TOMO XCIV. SEXTA EPOCA. 5 DE ABRIL DE 1965. CINCO VOTOS. -12- CONTRADICCION DE TESIS 51/92. "HORAS EXTRAS. RESCISION DEL CONTRATO DE TRABAJO IMPUTABLE AL PATRON, INOPERANTE POR FALTA DE PAGO DE. La falta de pago de horas extras no es bastante para fundar la rescisión de un contrato de trabajo, por causa imputable al patrón, toda vez que no se encuentra prevista en ninguna de las fracciones del artículo 125-A de la Ley Federal del Trabajo, pues la causal a que se contrae la repetida ley, es la falta de pago de salario tabulado, porque es el que permite subsistir al obrero, pero no la falta de pago de prestaciones distintas." AMPARO DIRECTO 3830/64. ARMADORA CONSTRUCTORA DE CULIACAN, S.A., PAGINA 35. TOMO XCVII. SEXTA EPOCA. 9 DE JULIO DE 1965. UNANIMIDAD DE CINCO VOTOS. "AGUINALDO, FALTA DE PAGO O PAGO PARCIAL DEL. NO ES CAUSAL DE RESCISION. La falta de pago del aguinaldo o su pago parcial sólo da lugar a exigir por parte del interesado su pago conforme a la ley o a lo contratado, ya que esa situación no se encuentra prevista en ninguna de las fracciones del artículo 51 de la ley de la materia, y ello es así porque tal hecho no hace imposible la continuación de la relación laboral, el no haberse pagado el aguinaldo en términos del artículo 87 de la citada ley no constituye falta de probidad u honradez, pues tal conducta no entraña un proceder con mengua de rectitud de ánimo y tampoco entraña infracción a la fracción V del artículo 51, que se sanciona con la rescisión del contrato de trabajo, pues el salario a que alude la fracción de referencia es el que percibe el trabajador periódicamente en forma ordinaria, en virtud de que esas percepciones son necesarias para la subsistencia del trabajador, y el no hacerlo oportunamente va contra esos fines y por eso se considera grave la conducta, pero la reducción temporal del aguinaldo o el pagar menos de lo que la ley señale para ese concepto, no interfiere con la supervivencia del trabajador." AMPARO DIRECTO 6803/77. RAFAEL GUTIERREZ ALVARADO. PAGINA 9. VOL. TOMO 115-120. SEPTIMA EPOCA. 16 DE AGOSTO DE 1978. UNANIMIDAD DE CUATRO VOTOS. Cabe agregar que el artículo 153 U, también ya transcrito, permite al trabajador el demostrar que tiene los conocimientos necesarios para poder negarse a recibir la capacitación, lo cual avala que la falta de capacitación no hace, ineludiblemente incompatible, la relación de trabajo. Así, sin desconocer la trascendencia de la capacitación, elevada a rango constitucional, de orden público e interés social, es factible concluir que su incumplimiento no constituye, ineludiblemente y en todo caso, una causal de rescisión del contrato por culpa del patrón, por no estar establecida en alguna de las ocho primeras fracciones del artículo 51 de la ley laboral, ni poderse considerar en cualquier caso, como análoga a aquéllas, de igual manera -13- CONTRADICCION DE TESIS 51/92. grave y de consecuencias semejantes en lo que al trabajo se refiere, para poder ubicarla en la última fracción (la IX) del antes citado precepto, pues no basta la existencia de una conducta negligente, o simplemente torpe, pero ausente de dolo o mala fe, como sería el dejar de proporcionar la capacitación o el negarse a recibirla, para que tal hecho indefectiblemente se constituyera en una causal rescisoria análoga a la falta de probidad u honradez, pues dicha omisión, tendría que revestir tal gravedad, que afectara el cumplimiento de la relación de trabajo, requisito indispensable para que pudiera ser considerada como causa de rescisión del contrato de trabajo. En efecto, examinado a contrario sensu lo antes expuesto, debe establecerse que si en un centro de trabajo existen planes y programas definidos sobre materia de capacitación, debidamente aprobados por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, y a pesar de que dicha secretaría haya tomado las medidas pertinentes conforme al artículo 153-S, los mismos dejan de llevarse a la práctica sin causa justificada, sea para proporcionarla como para recibirla, en virtud de una conducta sistemáticamente negativa, con el objetivo de eludir de mala fe las obligaciones inherentes, se estaría ante una auténtica falta de probidad u honradez, sea en su caso del empleador o del patrón. Paralelamente a lo anterior, si las consecuencias de tal actitud dolosa revisten tal gravedad que inciden palpablemente en lo que al trabajo se refiere, imposibilitando la armónica continuación de la relación de trabajo, por analogía será procedente la causal rescisoria. Así, el requisito determinante sería que se impidiera el cumplimiento cabal de la relación de trabajo. Resulta obvia la conclusión anterior, pues evadir la capacitación por las partes, se traduce en un impedimento para mejorar la calidad de vida del trabajador, elevando sus conocimientos y aptitudes, lo cual le permitiría ascensos y una mayor remuneración, entre otros beneficios, mientras que al empleador se le privaría de la oportunidad de obtener los indudables frutos de contar con personal altamente capacitado, y con ello, una mayor productividad que a todos beneficia. Por las razones expuestas, se concluye que sobre la materia de la controversia debe prevalecer con el carácter de jurisprudencia obligatoria, en los términos precisados en el último párrafo del artículo 192 de la Ley de Amparo, la tesis jurisprudencial que a continuación se formula: "CAPACITACION O ADIESTRAMIENTO DE LOS TRABAJADORES. SU INCUMPLIMIENTO POR PARTE DEL PATRON, DA LUGAR A EJERCER LAS ACCIONES LEGALES O CONTRACTUALES, QUE DERIVEN DE TAL OBLIGACION. El derecho de los trabajadores a la capacitación o adiestramiento, elevado a rango constitucional, se inspira en principios de interés social, y por su trascendencia para elevar el nivel de vida del trabajador y la productividad de un centro de trabajo, está tutelado por la ley. La omisión del cumplimiento oportuno de obligaciones en materia de capacitación o -14- CONTRADICCION DE TESIS 51/92. adiestramiento por parte del patrón, o del trabajador a recibirlo da lugar a la procedencia de la imposición de las sanciones al empleador establecidas por la Ley Federal del Trabajo, así como a que el trabajador inicialmente, pueda ejercer las acciones que deriven de tal obligación, conforme a la ley o a lo convenido contractualmente, pero no se constituye indefectiblemente y de inmediato en causal de rescisión de la relación laboral, ya que esa situación no se encuentra expresamente prevista en ninguna de las fracciones de los artículos 47 y 51 de la Ley Federal del Trabajo. Sin embargo, de estar aprobados por la Secretaría de Trabajo y Previsión Social los planes y programas sobre la capacitación y a pesar de que dicha secretaría haya tomado las medidas pertinentes conforme al artículo 153-S, la omisión del empleador para proporcionarla o la negativa del trabajador a recibirla, en forma repetitiva, puede constituirse en una causal rescisoria análoga a la de falta de probidad y honradez, cuando tal incumplimiento negligente y reiterativamente sistemático, entrañe un proceder con mengua de rectitud de ánimo, revistiendo tal gravedad, que traiga como consecuencia la imposibilidad de continuar con la relación laboral, que sería el factor determinante para considerar la procedencia de darla por concluida. Por lo expuesto y con apoyo en el artículo 197-A de la Ley de Amparo, se resuelve: UNICO.-Debe prevalecer la tesis jurisprudencial definida en esta resolución, señalada en el último considerando. Notifíquese; remítase la tesis jurisprudencial al Pleno, a las Salas y a los Tribunales Colegiados que no intervinieron en la contradicción, así como al Semanario Judicial de la Federación y a su Gaceta; envíese copia de esta ejecutoria a los Tribunales Colegiados de los que derivó la contradicción y en su oportunidad archívese el expediente. Así por unanimidad de cinco votos de los señores Ministros Ignacio Magaña Cárdenas, Felipe López Contreras, Juan Díaz Romero, Carlos García Vázquez y José Antonio Llanos Duarte, lo resolvió la Cuarta Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, siendo presidente el Ministro Ignacio Magaña Cárdenas. Firman los Ministros con el presidente y ponente y la secretaria de Acuerdos que autoriza y da fe. -15-