Autor: Carlos Fabián Aguirre Marin Ponencia: Derechos Humanos, Prevención y Familia Tema: Ética y Derechos Humanos Foro: Quinto. Cd de México. Durante los últimos meses, con la resolución que brindó la SCJN respecto al uso lúdico de la mariguana, se abrió un debate nacional respecto a este tema. Actores del poder Legislativo, así como por parte del Ejecutivo, se dieron a la tarea de generar un dialogo entre los diversos actores de la sociedad, con la finalidad de llegar a los consensos que permitan encontrar las vías de solución más adecuadas en función de este tema. El día de hoy, quiero introducir a esta mesa de propuestas, un tema que considero debió haberse involucrado desde su primer foro ya que considero falto incorporar en este tema tan delicado, la perspectiva de Familia, ya que es en ella en donde se viven los efectos que surgen del consumo de la mariguana. El Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, (Adoptado en la ciudad de Nueva York, EUA, el 16 de diciembre de 1966, teniendo México su adhesión el 24 de marzo de 1981), expresa en su artículo 23 lo siguiente: 1. La familia es el elemento natural y fundamental de la sociedad y tiene derecho a la protección de la sociedad y del Estado. … Este instrumento internacional y otros más de carácter nacional, colocan al Estado, como salvaguarda de los derechos fundamentales de las personas y tiene el compromiso de generar las condiciones adecuadas en los diversos ámbitos en que se desarrolla, destacando sin duda la salud, los derechos humanos, su seguridad personal y jurídica, así como la educación y de manera muy especial la de cada uno de los integrantes de la Familia. Por lo anterior, pensar solo en regularizar o entrar a un proceso legislativo para discutir su legalización no, es entrar con todo respeto, por el camino equivocado, cuando lo que se debería legislar, son todas aquellas propuestas que inhiban su consumo y generen caminos no solo de prevención, sino de realización de la persona y su familia. Esta discusión, cada vez se centra más en autorizar su consumo o no y en los diversos caminos que esto provocaría ya sea de una posición u otra. Desde este referente la Secretaria de Salud Federal en nuestro país, nos brinda una serie de datos claros y concretos respecto a los efectos que produce el consumo de la mariguana, siendo algunos los siguientes: El consumo crónico de la mariguana, altera diversas estructuras cerebrales como la amígdala, el hipocampo, el cerebelo y la corteza prefrontal, con repercusiones cognitivas y conductuales. En la etapa de adolescencia el número se eleva a casi 1 de cada 6 usuarios (16%). En esta etapa, su consumo en grandes cantidades se asocia con una pérdida de un promedio de 8 puntos de coeficiente intelectual. En nuestro país el 60 % de los pacientes que llegan con este problema son menores de edad. El 30 % de los adolescentes la obtienen de adultos que la adquieren legalmente. Los que la consumen son 13 veces más propensos a utilizar otra droga como cocaína, heroína o metanfetaminas. En Jóvenes, el uso frecuente predice episodios de depresión y ansiedad. En estados como Colorado, su legalización ocasiono un aumento explosivo en el consumo de los jóvenes. En EEUU, el grupo de 18 a 25 años, el promedio de consumo fue del 18.9, en Colorado subió a 29% El consumo en la mariguana durante el embarazo se asocia con un mayor riesgo de problemas neuro-conductuales en los bebes. En fumadores diarios se incrementa entre un 25 y 50%. Fumar mariguana tiene 20 veces más riesgo de desarrollar cáncer de pulmón que fumar tabaco. También se inhala 4 veces más alquitrán y 5 veces más monóxido de carbono que un cigarro de tabaco. Podríamos seguir desglosando infinidad de datos respecto al uso de la mariguana, pero quiero mejor tomar como referente sus efectos desde la familia. Valdría la pena preguntar, a cada madre y padre de familia, cuando descubren que su hijo es un fumador constante, que opinan. Preguntemos los efectos “favorables” que tiene la mariguana en su hijo. Preguntemos a los padres de familia, que opinan del consumo de la mariguana, cuando han perdido un hijo a causa de sus efectos, en un accidente automovilístico Sería interesante, saber la reacción de cada uno de los aquí presentes, cuando te dicen que violentas los derechos humanos de tu hijo, cuando no respetas el “libre desarrollo de su personalidad”, cuando te opones a que la consuma de manera libre mediante un “carrufo”. Sería interesante preguntarle a tantos padres de familia y a sus integrantes, que opinan cuando tratan de sacar adelante a un integrante que se volvió adicto a la “yerba”, y que tienen que lidiar con sus momentos de agresividad y violencia constante. Sería interesante generar un estudio directo, entre los alumnos de nivel medio superior, en donde expusieran el ambiente que genera el consumo de la mariguana, todo lo que ellos viven y los elementos sociales que provoca. Sería importante conocer de manera directa a los padres de familia, desde un punto de vista económico, como se ven mermadas sus finanzas Preguntemos por último, a todos aquellos padres que tienen a sus hijos y familiares en la cárcel, por haberse vinculado, directa o indirectamente, en un mundo, donde ellos fueron acusados, violentando sus derechos humanos. Ya es tiempo de velar verdaderamente los un auténtico derecho al Libre desarrollo de la personalidad de todos los integrantes de la familia. Porque querer legislar y legalizar un producto que bajo determinadas formas ha destruido la vida de miles de jóvenes y familias en este país. Por lo anteriormente expuesto, proponemos: La vida es un derecho humano fundamental, por lo que se necesita establecer en la Ley General de salud, que se prohíbe el uso lúdico y recreativo de la mariguana. En aquellos casos estrictamente médicos, su consumo será medicinal, bajo la autorización y supervisión de esta secretaria, previo estudio y en su caso aprobación, buscando el bienestar y el derecho a la vida el paciente. Reducir el gramaje al 1.5% cuando así lo requiera la persona, previa autorización médica y constante chequeo. En caso de incumplimiento será cancelado su uso. Incorporar en la ley de salud, educación y de manera transversal en todas aquellas políticas públicas, la participación de los padres de familia, como formadores, animadores y colaboradores en los procesos de prevención, seguimiento y cuidado de sus hijos y alumnos, en contra del consumo de la mariguana En el Marco de los Derechos Humanos incorporar en nuestro marco jurídico y de gobierno, el derecho al libre desarrollo de la persona en familia, que será una política transversal y en donde se priorice por parte del Estado, velar por la familia en sus diversas etapas y condiciones.