II Congreso de Interacciones Bióticas Alumnos de Segundo Curso del Grado en Biología Programa de la Conferencia y Resúmenes 18-19 Abril de 2012, Alcalá de Henares 1 Comité organizador: Miguel Ángel Rodríguez Fernández y Mila Ferrero Cedenilla Departamento de Ciencias de la Vida de la Universidad de Alcalá Lugar de celebración Salón de Actos, Facultad de Ciencias, Universidad de Alcalá Programa del Congreso Hora inicio Jueves día 18 de abril Hora fin Entrega de presentaciones (en pendrive) en la mesa del congreso 9:30 9:50 Ceremonia de apertura Miguel Á. Rodríguez y Mila Ferrero Cedenilla 10:00 10:09 Inicio de la Sesión I 1. Acercamiento a las interacciones positivas interespecíficas 10:10 10:22 10:23 10:35 10:36 10:48 10:49 10:58 10:59 11:11 LANGTRY YÁÑEZ, A., MARTÍN AHIJÓN, P., MARTÍN DÍAZ, L., y MERINO VALVERDE, J. 2. Se busca compañero de piso: Interacciones positivas de alojamiento entre especies STEFAN, A., TORRES VÁZQUEZ, B., VARELA CHORÉN, T., y SÁNCHEZ SANZ J.C. 3. Interacciones positivas en la Gran Barrera de coral DORAL OLIVARES, A., GARCÍA RUÍZ, S., GONZÁLEZ GUERRA, R.N., y GUTIÉRREZ FERNÁNDEZ, A. 4. El ser humano y la microfauna HERREA PÚA, A., LORENZO VÉLEZ, L., y MARTÍNEZ MONZÓN, A. 5. De la dispersión de semillas en la migración y la trashumancia (zoocoria) MUÑOZ MARTÍNEZ, J., NOGALES GÓMEZ-IMAZ, P., ORDOÑEZ CENCERRADO, C. D., y PINILLA MARÍN, P. 2 6. Relación positiva entre córvidos y rapaces necrófagas en la búsqueda de alimento. Afecciones humanas a la misma 11:12 11:17 11:18 11:27 12:00 12:12 12:13 12:22 12:23 12:38 12:39 12:54 FERNÁNDEZ-ALONSO, D. 7. En busca de las interacciones perdidas ARANDA GARCÍA, C., BLANCO PALACIOS, N., y CARBALLO FERNÁNDEZ, V. Descanso 8. Mutualismo isleño ABIZANDA PARDO, D., ÁLVARO SACEDO, A., BENITO SORIANO, P., y LÓPEZ VILLALBA, Á. 9. “El animal más extrovertido”: Relaciones de conveniencia entre el hombre y otras especies OLMO-MOSTEIRO, A., PASCUAL-RODERO, A., y RAMAJOVAQUERO, A. 10. Simbiosis en fondos oceánicos: un mundo sin luz FUENTELSAZ-ROMERO, S., GARCÍA-PAREDES, L., GARCÍA-SORIANO, J.C., GARRIDO-MANZANARES, S., y GÓMEZ DE FRUTOS, S. 11. Ants & Company HORTA-BELLIDO, A., LAHUERTA-LORENTE, L., LOISZLOLNISKI, E., MAMBLONA-GONZÁLEZ, N., y MARTÍNALMAZÁN, N. 3 Hora inicio Hora fin Entrega de presentaciones (en pendrive) en la mesa del congreso 9:30 9:50 Bienvenida a la Sesión II Miguel Á. Rodríguez y Mila Ferrero Cedenilla 10:00 10:10 10:10 10:19 10:20 10:32 10:33 10:45 10:46 10:55 10:56 11:08 11:09 11:24 12:00 12:12 12:13 12:28 12:29 12:41 Viernes día 19 de abril Inicio de la Sesión II 1. Relaciones íntimas: convivencia entre pulgones, hormigas y mariquitas RUBIO LAHOZ, S., SANTOS ROMERO M., y TAMARGO LÓPEZ, E. 2. Viaje por el mundo: Relaciones interespecíficas mutualistas de limpieza RODRIGUEZ-LORENTE, I., SANTAFÉ-PÉREZ, N., VAQUEROEUSEBIO, I., y VILLANUEVA-GARCÍA, M. 3. Interacciones positivas en cultivos ecológicos MORENO BRIONES, Á., CORTÉS GALLEGO, J., FERNÁNDEZ GONZÁLEZ, M., y ORTEGA JUAN, N. 4. Relación mutualista animal-planta: dispersión de semillas MERAYO-MERA, A., MORALES-SÁNCHEZ, D., y PEDRIZAHERRERO, I. 5. Indirectamente amigos: Interacciones indirectas entre organismos GONZALVO-RAMÓN, M., MERCHÁN-VALDIVIA, M., SEMPERGARCÍA, L., y SOLER-VEGA, P. 6. Relaciones en desiertos y ambientes semiáridos SALGÜERO-GÓMEZ, S., SÁNCHEZ-MARTÍN, A., SÁNCHEZPARRA, L., SÁNCHEZ-SOLANO, J., y UREÑA-IMEDIO, P. Descanso 7. Bacterias, aliadas del ser humano MOLLEDO-PÉREZ. G., PECO-PALACIOS. J.D., MORACHOSANTOS, L., y HERNÁNDEZ-DOMÍNGUEZ. J. 8. “Favor con favor se paga”- Interacciones mutualistas entre hormigas y otros organismos LÓPEZ RAMOS, E., MENA CAÑAVERAL, N., MORALES PALOMO, S., PÉREZ RUIZ, F., y QUILES TUNDIDOR, P. 9. The Walking Dead: el control mental en el Reino Animal ARTÉS-PEREZ, J., BERNAL-URIBE, S., CARMONA-SÁNCHEZ, J.C., 4 y CARRASCOSO-RUBIO, C. 10. El mundo marino: un enigma por resolver BARATAS-CABALLERO, L., BARCO-MARTÍN, E., BUNESCANSADO, E., y CABANILLAS-VEGA, F. 5 12:42 12:54 Resúmenes (Abstracts): Jueves 18 de abril 1. Acercamiento a las interacciones positivas interespecíficas LANGTRY YÁÑEZ, A.1, MARTÍN AHIJÓN, P. 2, MARTÍN DÍAZ, L.3, MERINO VALVERDE, J.4 Asignatura Ecología, Grado en Biología, Universidad de Alcalá, España (1) alberto.langtry@edu.uah.es; (2) patricia.martina@edu.uah.es; (3) laura.martind@edu.uah.es; (4) javier.merino@edu.uah.es Resumen: El objetivo de nuestra ponencia es hacer una revisión de las interacciones interespecíficas. En una comunidad coexisten especies entre las cuales se establecen numerosas interacciones. Algunas de estas pueden ser negativas, en este caso una de las especies se ve beneficiada a costa de la otra, reduciendo así esta última su eficacia biológica. Por otro lado, existen interacciones positivas, las cuales pueden englobarse en el término facilitación, en este caso ambas o una de las especies se ven beneficiadas mientras que la otra no se ve afectada. Nos centraremos en este último tipo profundizando en los distintos subtipos y ejemplificándolos para facilitar su comprensión. Aunque hay distintos tipos de clasificaciones, nos centraremos en la que nos ha parecido más apropiada. Esta clasificación se basa en dividir las interacciones en +/+ ó +/0. Dentro de las +/+ encontramos el mutualismo y sus distintos niveles de asociación. En el tipo +/0 tenemos el comensalismo propiamente dicho y además tres especializaciones distintas: tanatocresis, inquilinismo y foresis. Vamos a empezar tratando el comensalismo, este término hace referencia a la práctica de algunos animales de alimentarse de los restos de presas de otras especies. Se englobaron distintas modificaciones en este término, que es lo que denominamos especializaciones, este se define como una interacción entre una especie comensal que obtiene un beneficio y una especie que no se ve afectada. La primera de las especializaciones es la tanatocresis, esta se basa en la utilización de los restos de otras especies muertas para beneficio propio. En el caso del inquilinismo una especie vive como un comensal en el refugio de otra especie. Por último, la foresis se basa en el transporte de una especie a costa de otra. Finalizaremos el trabajo hablando de las interacciones +/+ donde hablaremos del mutualismo, en el que la asociación de las especies conlleva un beneficio mutuo sin implicar necesariamente una asociación física íntima. Trataremos también la simbiosis, en la cual la relación entre ambas especie es íntima y necesaria para su supervivencia. 2. Se busca compañero de piso: Interacciones positivas de alojamiento entre especies STEFAN, A.1, TORRES VÁZQUEZ, B. ², VARELA CHORÉN, T. 3, SÁNCHEZ SANZ J.C.4 Asignatura Ecología, Grado en Biología, Universidad de Alcalá, España (1) andreea.stefan@edu.uah.es; (2) b.torres@edu.uah.es; (3) tania.varela@edu.uah.es; (4) juan.sanchezs@edu.uah.es 6 Resumen: Desde siempre se conoce la existencia de interacciones entre diferentes especies que pueden ser perjudiciales, beneficiosas o neutras. En nuestro caso nos centraremos en una interacción positiva denominada mutualismo que trata de la relación interespecífica en la que los dos organismos implicados obtienen un beneficio, como por ejemplo, el caso del gecko y los humanos, en el cual los geckos se alimentan de los insectos que cazan en nuestros hogares. En los siguientes tres ejemplos se analizarán, como en el caso anterior, interacciones de alojamiento donde una de las especies ejerce de hospedador a cambio de un servicio ofrecido por la otra especie. Chiasmocleis ventrimaculata, una especie de anfibio, se alimenta de los insectos atraídos por los huevos de Xenesthis immanis, una especie de tarántula. Aunque los anuros son parte de la dieta de la tarántula, no ataca a esta rana pero sí a los depredadores de esta. Oryzomys albigularis (ratón campesino) además, le proporciona un servicio de transporte a su invitado Amblyopinus emarginatus (escarabajo errante). El ratón campesino lleva enganchados en su pelo a los escarabajos y los lleva hasta su madriguera. Los escarabajos tienen la misión de dar caza a los parásitos tanto del ratón como de su madriguera, desparasitando así a ambos. Uromastyx aegyptius es un lagarto que excava su propia madriguera, la cual es aprovechada por Androctonus australis, un escorpión, para estar en un ambiente más fresco dado que ambos viven en el desierto. A cambio, el escorpión no picará al saurio pero sí lo hará con los depredadores que intenten darle caza. 3. Interacciones positivas en la Gran Barrera de coral DORAL OLIVARES, A.1, GARCÍA RUÍZ, S.2, GONZÁLEZ GUERRA, R.N.3, GUTIÉRREZ FERNÁNDEZ, A.4 Asignatura Ecología, Grado en Biología, Universidad de Alcalá, España (1) alba2doral@hotmail.com; (2)sara.garciaruiz@uah.es; (3) rocio_2304_guerra@hotmail.com; (4) alber_guti14@hotmail.com Resumen: En esta presentación se analizan una serie de relaciones positivas entre algunas de las especies que habitan en la Gran Barrera de coral australiana. La Gran Barrera mantiene uno de los más diversos ecosistemas conocidos, debido a determinadas características que permiten una gran biodiversidad. Es una barrera natural de corales que tienen importancia en la protección de la costa, como fuente de alimento, hábitat e incluso modifica la velocidad de las corrientes marinas. Algunas de las relaciones interespecíficas tratadas son la de Thor amboinensis, también conocida como gamba sexy, es una especie de camarón que vive sobre algunas anémonas aprovechando la protección que le brindan y limpiándolas de restos orgánicos. Acropora nasuta, una especie coralina que es capaz de emitir una serie de sustancias químicas ante la presencia de ciertas algas dañinas que atraen a dos especies de gobios (Gobiodon histrio y Paragobiodon echinocefalus) los cuales se alimentan de dichas algas. Dermochelys coriacea, especie de tortuga que establece una relación con la Remora remora, ésta se adhiere a la tortuga, alimentándose de los parásitos de la misma. Macrocheira kaempferi, crustáceo que favorece el crecimiento de los corales, los cuales le proporcionan protección. Los corales obtienen productos de la fotosíntesis de algas del género Symbiodinium, que se ven beneficiadas con un ambiente seguro y rico en nutrientes. El pez de la familia Scaridae, mejor conocido como pez loro mantiene una doble relación en las aguas del Pacífico, con los corales y con algunas especies de peces. Por último, Amphiprion percula, el pez payaso que establece una relación con las anémonas del arrecife coralino. 7 4. El ser humano y la microfauna HERREA PÚA, A.1, LORENZO VÉLEZ, L.², MARTÍNEZ MONZÓN, A.3 Asignatura Ecología, Grado en Biología, Universidad de Alcalá, España (1) alex_herre93@hotmail.com; (2) lunittalv@gmail.com; (3) almu_246@hotmail.es Resumen: Desde la aparición de los primeros homínidos, estos han establecido relaciones con una gran diversidad de formas de vida. Algunas de estas interacciones han sido perjudiciales y otras nos han resultado útiles e incluso necesarias. La agricultura y la ganadería han sido las interacciones más destacadas a lo largo de la historia. Sin embargo, en estos últimos años, con el avance de la ciencia, se han descubierto muchas otras que eran desconocidas hasta la fecha, como por ejemplo, las relaciones beneficiosas que se establecen con el cuerpo humano como escenario. Los beneficios que nos aportan muchos microorganismos son indispensables para un buen desarrollo, además muchos de ellos se están empezando a utilizar como probióticos en la industria farmacéutica para la cura y prevención de diferentes enfermedades. Este trabajo se ha centrado en las interacciones positivas que se dan el interior del cuerpo humano. Algunas de estas bacterias benignas se encuentran en el tracto digestivo, como Helicobacter pylori (conocida por ser la causante de las úlceras de estómago, a pesar de que aporta múltiples beneficios) y otras del género Bacteroides. En el tracto genito-urinario no solo encontramos bacterias sino también otros organismos como hongos. Candida constituye un ejemplo de estos últimos que, como muchos otros microorganismos establecidos en nuestro interior, forma parte de la flora normal, es inocua y además evita la presencia de patógenos. Gracias a los avances de la ciencia y su difusión se está produciendo un cambio en la concepción del efecto que tiene la microfauna sobre el ser humano. 5. De la dispersión de semillas en la migración y la trashumancia (zoocoria) MUÑOZ MARTÍNEZ, J.1, NOGALES GÓMEZ-IMAZ, P.2, ORDOÑEZ CENCERRADO, C. D.3, PINILLA MARÍN, P.4 Asignatura Ecología, Grado en Biología, Universidad de Alcalá, España (1) juan.munozm@edu.uah.es; (2) p.nogales@edu.uah.es; (3) d.ordonez@edu.uah.es; (4) patricia.pinilla@edu.uah.es Resumen: Las interacciones entre organismos son un mecanismo importante para la estabilidad de los ecosistemas. Para el estudio de estas nos hemos centrado en la relación que existe entre las interacciones positivas y la zoocoria. El efecto último de la zoocoria es la dispersión de semillas, por lo tanto el papel que desempeñan aquí los animales es fundamental para la distribución y colonización de nuevos hábitats por parte de las plantas. A pesar de esto, no hay que olvidar que en la naturaleza existen compromisos evolutivos por lo que se mantendrá un equilibrio, y en consecuencia, este mecanismo tendrá sus limitaciones. Para hacer un estudio en profundidad de la zoocoria, se eligieron las migraciones como punto de inicio y se quiso relacionarlas con el ser humano. Un ejemplo claro está en la trashumancia ya que engloba la zoocoria, la migración y la acción 8 antropológica. En los estudios, nos centramos en los procesos de epizoocoria ya que el sistema no depende tanto de un mecanismo activo por parte del animal sino de un proceso pasivo en el que depende casi únicamente de las adaptaciones de la planta. Tras finalizar el estudio de ambos procesos se pudo observar que existe una relación entre las rutas de migración y de trashumancia, y la distribución de ciertas especies vegetales con estructuras especializadas en este mecanismo. 6. Relación positiva entre córvidos y rapaces necrófagas en la búsqueda de alimento. Afecciones humanas a la misma FERNÁNDEZ-ALONSO, D. Asignatura Ecología, Grado en Biología, Universidad de Alcalá, España daniferal@yahoo.es Resumen: La relación entre los córvidos y las rapaces necrófagas totales o parciales, a la hora de localizar las carroñas es una interesante relación positiva que se encuentra en peligro por la acción humana. 7. En busca de las interacciones perdidas ARANDA GARCÍA, C.2, BLANCO PALACIOS, N.2, CARBALLO FERNÁNDEZ, V. 3 Asignatura Ecología, Grado en Biología, Universidad de Alcalá, España (1) cristina_ag7@hotmail.com; (2) nataliab25@hotmail.es; (3) virgycf_93@hotmail.com Resumen: Se han encontrado simbiosis en numerosas formas de vida, y desde tiempos muy remotos. A través del registro fósil, llegamos a conocer modos de interacciones entre organismos pasados, pudiendo considerar aquí las primeras simbiosis. Habitualmente, las interacciones positivas no dejan constancia física en los organismos; es por ello que el estudio de éstas en fósiles es complicado; las impresiones en los fósiles son infrecuentes, y los estudios acerca de ello son escasos. El mayor ejemplo conocido de simbiosis en el pasado es el origen de las células eucariotas; dos células procariotas establecieron endosimbiosis, dando lugar así a nuestros primeros ancestros. Otra interacción bien conocida es la de las Zooxantelas. Su origen se remonta al Ordovícico medio, pero su existencia es patente en la actualidad. Estos organismos son protistas fitoflagelados, que se encuentran en el interior de las células de diversos organismos como Foraminímeros, Lamelibranquios o Radiolarios, entre otros. El huésped aporta CO2 y el alimento al alga, que le procura los glúcidos de la fotosíntesis. Si nos remontamos al Paleozoico (Ordovícico medio-Pérmico medio), otro ejemplo es el de algunos organismos gasterópodos que establecen interacción con Crinoides. El Gasterópodo coprófago se ha adaptado progresivamente a la instalación permanente sobre el tegmen del Crinoide, vive dependiente del crinoide, y le proporciona a éste una ornamentación cromática original, lo cual le permite mimetizarse con el ambiente. Pero remontándonos aún más en el tiempo, encontramos la fauna de Ediacara. Poco se conoce acerca de ella; los fósiles presentan organismos sin apertura del tracto digestivo; lo que ha llevado a relacionarlos con Riftia pachyptila, un gusano perteneciente al filo Annelidae, que forma parte de las fauna abisales. 9 Se cree que estos organismos, al igual que Riftia, obtendrían su alimento a partir de algas y bacterias simbiontes presentes en su interior. 8. Mutualismo isleño ABIZANDA PARDO, D.1, ÁLVARO SACEDO, A.2, BENITO SORIANO, P.3, LÓPEZ VILLALBA, Á4. Asignatura Ecología, Grado en Biología, Universidad de Alcalá, España (1) dabipar@hotmail.com; (2) adrianalvarosacedo@hotmail.com; (3) pbenito93@gmail.com; (4) angelalv92@gmail.com Resumen: Los ambientes insulares son completamente diferentes a los continentales y marinos. La variedad de especies y las interacciones entre ellas en estos entornos es única y muy delicada, lo que ha dado lugar a relaciones mutualistas específicas. En algunas ocasiones estas relaciones han desembocado en coevolución, como es el caso de la planta carnívora Nephentes rafflesiana, de Borneo, cuya capacidad de cazar se ha visto mermada por su escasa producción de olor y líquido. Por ello, ha adoptado en su interior al murciélago insectívoro Kerivoula hardwickii, cuyos excrementos aportan nitrógeno a la planta, que ha pasado a ser coprófaga, aunque no en su totalidad. Por su parte, libra al murciélago de parásitos y le ofrece un refugio diurno, para lo cual ha adaptado sus jarras con un pequeño anillo. En otras ocasiones no ha dado tiempo a generar coevolución: en la isla de Seahorse (Florida, EE.UU.) existe una gran población de serpientes venenosas, pertenecientes a la especie Agkistrodon piscivorus. Normalmente, estas serpientes se alimentan de aves. Sin embargo, se ha observado que en su mayoría se alimentan de pescado que cae de los nidos, ya sea entero, excretado o regurgitado, pero nunca directamente de aves. La presencia de las aves en la isla atrae a sus depredadores, Rattus norvegicus, que son devoradas por las serpientes si intentan acercarse a los nidos. Por otro lado, las especies invasoras también son capaces de establecer relaciones mutualistas, como ocurre en el caso de varias especies de hormigas invasoras del Parque Nacional de los Volcanes de Hawái y la planta Vaccinium reticulatum. En esta interacción, las hormigas obtienen carbohidratos del néctar de las flores, y las plantas se libran de Stenoptilodes littoralis, un parásito invasor que reduce su potencial reproductivo. 9. “El animal más extrovertido” - Relaciones de conveniencia entre el hombre y otras especies OLMO-MOSTEIRO, A.1, PASCUAL-RODERO, A.2, RAMAJO-VAQUERO, A.3 Asignatura Ecología, Grado en Biología, Universidad de Alcalá, España (1) aixa.olmo@uah.es; (2) adrian.pascual@uah.es; (3) alvaro.ramajo@edu.uah.es Resumen: El ser humano se relaciona con una extraordinaria cantidad y variedad de especies, convirtiéndose en el animal con más relaciones mutualistas del planeta. Durante miles de años el hombre ha sabido aprovechar los recursos que le ofrecen el resto de seres vivos, y éstos a su vez han obtenido beneficios de ello. La agricultura y la ganadería son ejemplos generales de estas relaciones mutualistas, no obstante, nos centraremos en tres casos concretos que van más allá de estos aspectos. Hoy en día, los perros son utilizados 10 como mascota. Esta relación surgió hace miles de años, cuando pequeños grupos de lobos interactuaron con tribus humanas, lo que terminó proporcionando a éstos una función en la caza que fue clave para el desarrollo de ambas especies. Incluso en un medio acuático el hombre puede realizar tareas de pesca cooperando con un animal tan asombroso como el delfín. Este extraordinario trabajo en equipo logra que ambas especies obtengan alimento de una forma fascinante y eficiente. Por último, en Kenia existe un curioso pájaro conocido como “Guía de la miel”, que mediante sus indicaciones conduce a los miembros de una tribu hasta las colmenas ocultas en los bosques, donde recolectan el preciado recurso. 10. Simbiosis en fondos oceánicos: un mundo sin luz FUENTELSAZ-ROMERO, S.1, GARCÍA-PAREDES, L.², GARCÍA-SORIANO, J.C.3, GARRIDO-MANZANARES, S.4, GÓMEZ-DE FRUTOS, S.5 Asignatura Ecología, Grado en Biología, Universidad de Alcalá, España (1) sara.fuentelsaz@edu.uah.es; (2) luciacua@msn.com; (3) rosweil@hotmail.com; (4) sonia.garrido.manzanares@gmail.com; (5) s.gomezf@edu.uah.es Resumen: Hasta no hace mucho tiempo se consideraba que la escasez de organismos en las profundidades del océano se debía al déficit de alimentos. En estos hábitats, donde no llega la luz y no es posible la fotosíntesis, existe otra forma de obtención de energía basada en la quimiosíntesis. Este proceso es realizado por bacterias litoautótrofas o quimiosintéticas, la cuales son capaces de obtener nutrientes mediante la oxidación de compuestos inorgánicos como metano, azufre y otros compuestos tóxicos. La simbiosis de estas bacterias con diferentes organismos permite la existencia de formas de vida macroscópicas en las profundidades abisales. Este tipo de interacciones ocurren en ambientes tan extremos como comunidades de respiraderos hidrotermales, de los cuales emana agua caliente a partir de grietas de la superficie terrestre, constituyendo grandes sumideros de oxígeno y H2S. En dichas fuentes hidrotermales encontramos al gusano de tubo gigante (Ryfitia pachiptila) y al gusano termófilo Pompeya (Alvinella pompejana). Así mismo, también hablaremos de volcanes submarinos, donde destacaremos la existencia de poríferos del género Cladorhiza que interactúan con bacterias metanótrofas. Sin embargo, no todos los organismos se ven limitados a establecer relaciones simbióticas con un solo tipo de bacterias quimiosintéticas. Este es el caso de Idas modiolaeformis, un mejillón de las filtraciones frías que porta en su organismo seis filotipos diferentes de bacterias, siendo una de ellas capaz de degradar celulosa y quitina. Todos estos organismos simbióticos son meros ejemplos de las múltiples interacciones positivas que suponen un beneficio mutuo para los individuos. En conclusión, las bacterias quimiosintéticas son la base para el desarrollo de la vida macroscópica en estos ambientes. 11. Ants & Company HORTA-BELLIDO, A.1, LAHUERTA-LORENTE, L.², LOIS-ZLOLNISKI, E.3, MAMBLONAGONZÁLEZ, N.4, MARTÍN-ALMAZÁN, N5 Asignatura Ecología, Grado en Biología, Universidad de Alcalá, España (1) a.horta@edu.uah.es; (2) lidia.lahuerta@edu.uah.es; (3) estefania.lois@edu.uah.es; (4) noelia.mamblona@edu.uah.es; (5) nerea.martina@edu.uah.es 11 Resumen: Las hormigas son seres asombrosamente inteligentes y sociables. Han desarrollado comportamientos comparables a los de los humanos en cuestiones de agricultura y ganadería. De forma que, así como los humanos cultivamos especies con fines alimenticios, las hormigas son capaces de cultivar hongos; y así como nosotros criamos animales de los cuales obtenemos beneficios, ellas «crían» otras especies como pulgones y orugas. Todas estas especies obtienen, a su vez, beneficio del cuidado que les brindan las hormigas. Además, son capaces de establecer diversas y complejas relaciones de simbiosis con otras especies; por ejemplo, con Acacia sp., de la que obtienen refugio y alimento. Sin embargo, también existe competencia entre ellas, lo que complica las relaciones positivas que puedan establecer con otros organismos. Estas relaciones positivas son tan estrechas y están tan perfeccionadas que, aunque para las hormigas solo suponen una simple adaptación de comportamiento, para las especies a las que afecta son imprescindibles, llegando al punto de que sin la intervención de las hormigas no se podrían desarrollar completamente y se extinguirían. En este trabajo se tratarán estas relaciones y el beneficio obtenido por cada uno de sus integrantes. 12 Viernes 19 de abril 1. Relaciones íntimas: convivencia entre pulgones, hormigas y mariquitas RUBIO LAHOZ, S.1, SANTOS ROMERO M.2, TAMARGO LÓPEZ, E.3 Asignatura Ecología, Grado en Biología, Universidad de Alcalá, España (1) silvia.rubiol@edu.uah.es ; (2) m.santosromero@edu.uah.es; (3) eva.tamargo@edu.uah.es Resumen: Los pulgones se han buscado numerosos enemigos entre los agricultores, sin embargo cuentan con la ayuda de las hormigas, que conviven con ellos en un ecosistema que comprende una compleja red de interacciones positivas no perceptibles a simple vista. Dentro de esta ayuda, destaca la eficaz defensa que les proporcionan contra uno de sus principales depredadores, las mariquitas. Las relaciones positivas no se ciñen a este pequeño ecosistema, sino que llegan hasta el hombre, el cual se aprovecha de la voracidad de estos coleópteros aunque no sin consecuencias negativas. La colonia de hormigas se encarga del cuidado de los pulgones, como si de una guardería se tratase, los guían hacia las mejores zonas de la planta y los protegen para obtener alimento en forma de ligamaza. Esta sustancia, segregada por los áfidos, tiene una gran variedad de utilidades. Estas relaciones no constituyen un sistema aislado, las mariquitas también se benefician de las interacciones existentes entre hormigas y pulgones. Estas relaciones se manifiestan en forma de comportamientos sorprendentes que sin duda merecen la pena ser estudiados. 2. Viaje por el mundo: Relaciones interespecíficas mutualistas de limpieza RODRIGUEZ-LORENTE, I. 1, SANTAFÉ-PÉREZ, N. 2, VAQUERO-EUSEBIO, I. 3, VILLANUEVA-GARCÍA, M. 4 Asignatura Ecología, Grado en Biología, Universidad de Alcalá, España (1) irene-lorente@hotmail.com; (2) nazabj91@gmail.com; (3) ive_b_4@hotmail.com; (4) maria_vg5@hotmail.com Resumen: Un mutualismo es un tipo de relación biológica interespecífica en el que ambas partes se ven beneficiadas, el cual puede darse de forma simbiótica o asimbiótica. Nos centraremos en las interacciones mutualistas simbióticas, en concreto, las relacionadas con los mecanismos de limpieza entre organismos de diferentes especies. En cuanto a la clasificación, nos centramos en si los organismos guardan una relación en agua dulce, agua salada y medio terrestre. Los ejemplos de dichas relaciones se muestran a continuación: en el ambiente dulceacuícola estudiaremos por una parte la relación entre el hipopótamo (Hippopotamus amphibius) y garza real o garza blanca (Ardea cirenea o Ardea alba), y por otra parte, entre el cocodrilo del Nilo (Crocodylus niloticus) y el chorlito egipcio (Pluvianus 13 aegyptius); en el ambiente marino estudiamos la interacción entre un tiburón (del orden Selachimorfa) y la rémora (Echeneis remora), además de la relación entre la tortuga verde (Chelonya midas) y dos especies de peces: el pez cirujano (Acanthurus leucosternon) y el pez espiga (Bedotia geayi); para finalizar, veremos relaciones mutualistas terrestres no sólo entre dos especies de animales, sino también entre una planta y un animal. Como ejemplo de las primeras, explicaremos el mutualismo entre el jabalí africano (Phacochoerus africanus) y el estornino boyero (del género Sturnus), y como ejemplo de la segunda, la que mantiene la planta carnívora (Nepenthes bicalcarata) con la hormiga Camponotus schmitzi. A partir de los casos anteriores, observamos que las relaciones mutualistas pueden darse en medios muy variados y entre diferentes especies para su mejora evolutiva. 3. Interacciones positivas en cultivos ecológicos MORENO BRIONES, Á.1, CORTÉS GALLEGO, J.2, FERNÁNDEZ GONZÁLEZ, M.3, ORTEGA JUAN, N.4 Asignatura Ecología, Grado en Biología, Universidad de Alcalá, España (1) tay_286@hotmail.com; (2) anahoo02@gmail.com; (3) martuxy_123@hotmail.com; (4) neusetas_ibz@hotmail.com Resumen: La naturaleza es equilibrio. El equilibrio se alcanza mediante la cooperación. En todo sistema natural existen interacciones biológicas entre un organismo y los diferentes organismos de su entorno. Estas relaciones positivas son la base para la producción de cultivos sin la utilización de productos sintéticos, obteniendo una producción beneficiosa tanto a nivel medioambiental, como nutricional y social. Previo análisis de distintas investigaciones científicas, ha constituido el objeto de nuestro estudio, las interacciones biológicas entre los organismos y su aplicación en la agricultura ecológica o eco-agricultura, para lograr una producción agraria más eficiente, de mayor calidad y más respetuosa con el entorno. Exponemos ejemplos de simbiosis que establecen las plantas con distintos tipos de organismos, interacciones que son constantes y permanentes en el ecosistema. En los últimos años, ha sido un campo especialmente atractivo tanto a nivel científico como social que se encuentra en vía de desarrollo. La investigación científica puesta al servicio del desarrollo natural del medio ambiente para la mejora de la producción. 4. Relación mutualista animal-planta: dispersión de semillas MERAYO-MERA, A.1, MORALES-SÁNCHEZ, D.², PEDRIZA-HERRERO, I.3 Asignatura Ecología, Grado en Biología, Universidad de Alcalá, España (1) aira12@hotmail.es; (2) iniph_05@hotmail.com; (3) daniel3820@msn.com Resumen: En nuestro trabajo nos centraremos en el mutualismo que se da entre plantas y animales. La importancia de esta relación queda patente en el desarrollo de los ecosistemas naturales, así como, en la evolución de los individuos que forman parte de ellos. En esta relación, el animal se alimenta de los frutos de la planta, beneficiándola en la dispersión de sus semillas. Trataremos tres ejemplos: el mono araña (Ateles geoffroyi), la lagartija balear (Gallotia galloti) y el pájaro Dodo (Didus ineptus). El mono araña habita en la mayor parte de América central y el sureste de Méjico. Este primate se alimenta de frutos de un elevado 14 número de especies vegetales. La dispersión de semillas de estas especies no sería posible sin la acción de estos primates, debido a la frondosidad de los hábitats tropicales. Otro ejemplo sería el caso del pájaro Dodo. Este ave era la única vía de germinación y dispersión que tenía Calvaria major, en la isla de Mauricio (este de Madagascar). Esta relación es mucho más específica que la del caso del mono araña, ya que debido a la colonización de la isla, el pájaro se extinguió, provocando la imposibilidad de la dispersión de semillas del tambalacoque. Por último, exponemos la situación del arbusto endémico balear (Daphne rodriguezii). La lagartija balear, del género Gallotia, se alimenta de los frutos del arbusto, dispersando así, sus semillas. Esta relación tiene alta especificidad, ya que la disminución actual de la población de lagartija balear, puede suponer la desaparición del Dafne balear. 5. Indirectamente amigos: Interacciones indirectas entre organismos GONZALVO-RAMÓN, M.1, MERCHÁN-VALDIVIA M.², SEMPER-GARCÍA, L.3, SOLERVEGA, P4 Asignatura Ecología, Grado en Biología, Universidad de Alcalá, España (1) myryam_gr10@hotmail.com; (2) marcosmv_di@hotmail.com; (3) laura_xz147@hotmail.com; (4) pilisolvega@hotmail.com Resumen: En la naturaleza encontramos diferentes ecosistemas, dentro de los cuales hay una gran diversidad de organismos que establecen interacciones complejas entre ellos. Dichas interacciones afectan, en ciertas ocasiones, a organismos no implicados directamente por lo que las denominamos interacciones indirectas. Estas nos llevan a la formación de diversas redes y ciclos establecidos entre las especies pertinentes. Para ilustrar dicha complejidad, nos centramos en cuatro redes. En el océano se produce una interacción simbiótica entre Montipora y algunos anfípodos provocando cambios morfológicos por parte de los anfípodos en el coral favoreciendo su supervivencia. Dentro del dosel americano encontramos un microhábitat sobre los perezosos que ofrecen alojamiento a numerosos organismos. Más al norte, la garza gris, Ardea herodias, y Ribeiroia forman un extraño caso de simbiosis que lleva a una red compleja de interacciones determinadas por el ciclo de vida del trematodo. Finalmente, debido a que Pandanus da cobijo al gecko Phelsuma cepediana y que Trochetia blackburniana, que le ofrece alimento, se encuentra a veces en su área cercana, se establece una interacción que desemboca en la polinización de ambas plantas. Las interacciones indirectas ayudan, por tanto, a elevar el nivel de complejidad de la naturaleza. 6. Relaciones en desiertos y ambientes semiáridos SALGÜERO-GÓMEZ, S.1, SÁNCHEZ-MARTÍN, A.2, SÁNCHEZ-PARRA, L.3, SÁNCHEZSOLANO, J.4, UREÑA-IMEDIO, P.5 Asignatura Ecología, Grado en Biología, Universidad de Alcalá, España (1) sg.sofia@hotmail.com; (2) andrea-sym@hotmail.com; (3) laury_2611@hotmail.com; (4) jennifersanchez1993@hotmail.es; (5) patry_ui@hotmail.com 15 Resumen: En el planeta Tierra existen numerosos ecosistemas con características propias. El correcto funcionamiento de los ecosistemas se basa fundamentalmente en las relaciones que existen entre las especies que habitan en ellos. En los ambientes que presentan condiciones climáticas más extremas las relaciones se incrementan, como ocurre en desiertos y ambientes semiáridos. Por ello, el objeto de estudio en el que se basa nuestro trabajo es conocer las interacciones positivas y neutras que se dan en ambientes con esas condiciones, como son la escasez de precipitaciones y temperaturas fluctuantes. Para enfrentarse a estas duras condiciones las especies se ayudan unas a otras. Son numerosas las relaciones positivas, en las que ambas especies implicadas se benefician. Estas relaciones pueden darse entre plantas, entre animales o entre ambos. Un ejemplo de relación animal-animal se da entre Helogale undulata rufula y dos aves del género Tockus en el desierto de Tarú. Algunos ejemplos de relación planta-animal se dan entre Acacia spp y hormigas del género Pseudomyrmex en la Sabana centroamericana y entre Prosopis tamarugo y Centris mixta tamarugalis en el desierto de Atacama.Otro tipo de relaciones muy extendidas son las relaciones neutras, en las que una especie se beneficia de la actividad de otra sin beneficiarla ni perjudicarla. Un ejemplo de ello es la relación de varias especies de lagarto con Dipodomys spectabilis y Cynomys gunnisoni en el desierto de Chihuahua. En conclusión, las relaciones interespecíficas positivas y neutras entre las especies de ambientes desérticos y semiáridos son esenciales para la correcta dinámica de los ecosistemas. 7. Bacterias, aliadas del ser humano MOLLEDO-PÉREZ. G.1; PECO-PALACIOS. J.D.2; MORACHO-SANTOS, L.3; HERNÁNDEZ-DOMÍNGUEZ. J.4 Asignatura Ecología, Grado en Biología, Universidad de Alcalá, España (1) molledoperez@gmail.es; (2) jespeco.93@hotmail.com; (3) lorena.moracho@gmail.com; (4) jaimehernandez1992@hotmail.com Resumen: Se calcula que el ser humano tiene unas 2.000 especies bacterianas diferentes, de las cuales solamente 100 pueden llegar a ser perjudiciales. Muchos animales dependen muy estrechamente de estos microorganismos y aunque en el ser humano la dependencia no es tan radical, sí es importante. Teniendo en cuenta la importancia de estas bacterias en el ser humano, podemos centrarnos en bacterias beneficiosas de la boca y la piel, del aparato reproductor femenino y del aparato digestivo. Hay bacterias metilotróficas en la lengua, encía y placa supragengival (Bacillus, Brevibacterium casei, Hyphomicrobium sulfonivorans, Methylobacterium, Micrococcus luteus). Consumen los compuestos metilo responsables del mal aliento. En la piel encontramos bacterias son de los géneros Estafilococos (que impide el desarrollo del patógeno Staphylococcus aureus), Corinebacterias, Micrococos y Bacterias propiónicas (que producen ácido propiónico que impide el desarrollo de otras bacterias). Impiden la colonización de la piel por bacterias perjudiciales, y confieren el olor individual de cada persona. Otro ejemplo de esta interacción positiva entre humanos y bacterias, es el establecido entre bacterias del género Lactobacillus y la mucosa vaginal. Algunas especies de este género están muy adaptadas a las condiciones de la cavidad vaginal, por lo que presentan una ventaja en la competencia con otros microorganismos. Para evitar el establecimiento de patógenos sintetizan compuestos antimicrobianos: producción de ácidos orgánicos (principal mecanismo de protección de la mucosa vaginal), agua oxigenada (antiséptico), y bacteriocinas. Uno de los lugares más importantes en los que encotramos microorganismos beneficiosos es el aparato digestivo. Existen un gran número de funciones asociadas a la microbiota intestinal, como el metabolismo de determinadas biomoléculas o la especializacion del sistema 16 inmunitario (algunas bacterias se encargan de presentar a los linfocitos cepas de bacterias patógenas para el ser humano). Recientemente, han surgido múltiples publicaciones que plantean un posible rol de la microbiota intestinal, tanto en el desarrollo de obesidad como de la diabetes. Esta hipótesis nace de la observación de que pacientes obesos presentan una microbiota intestinal distinta a la de individuos con peso normal. 8. “Favor con favor se paga”- Interacciones mutualistas entre hormigas y otros organismos LÓPEZ RAMOS, E.1, MENA CAÑAVERAL, N. 2, MORALES PALOMO, S.3, PEREZ RUIZ, F.4, QUILES TUNDIDOR, P. 5 Asignatura Ecología, Grado en Biología, Universidad de Alcalá, España (1) esther.lopezramos@edu.uah.es; (2) noelia.mena@edu.uah.es; (3) sergio.moralesp@edu.uah.es; (4) f.perezr@edu.uah.es; (5) pablo.quiles@edu.uah.es Resumen: Aunque parezcan insignificantes, las hormigas son animales capaces de sorprendernos con sus diferentes comportamientos. Una de las actividades más llamativas de estos pequeños insectos son las relaciones mutualistas que establecen con una gran variedad de organismos. Gracias a estas interacciones, tanto las hormigas como las especies involucradas en dicha relación, salen beneficiadas mejorando su adaptación al medio. Sin embargo, existen casos en los que esta relación es obligada y ambos mutualistas precisan de la otra especie para su supervivencia. Algunas de las relaciones mutualistas más representativas de nuestras protagonistas son las que establecen con insectos y con plantas. La hormiga Camponotus rufipes podemos encontrarla interaccionando con la especie de Hemíptero Enchenopa sericea; en este mutualismo, el insecto se ve protegido por la hormiga y esta se alimenta del producto nutritivo que recibe del mismo. Por otro lado Pseudomyrmex ferruginea establece una relación de mutualismo con la acacia Acacia cornigera en la que la hormiga encuentra alimento y refugio a cambio de ofrecer protección a la planta contra herbívoros y otras especies vegetales. Podemos encontrar otros ejemplos más complejos en los que otras especies ajenas al mutualismo condicionan dicha interacción. Una de estas interacciones, es la que se establece entre las hormigas Crematogaster mimosae en su relación con Acacia drepanolobium, en la que participan otras especies como C. sjostedti, C. nigriceps, Tetraponera penzigi. Otro tipo de interacción compleja es el mutualismo entre las hormigas de los géneros Atta y Acromyrmex y el hongo Leucoprinus gongylophorus, el cual viene condicionado por bacterias de los géneros Pseudonocardia y Klebsiella 1y el hongo del género Escovopsis. 9. The Walking Dead: el control mental en el Reino Animal ARTÉS-PEREZ, J.1, BERNAL-URIBE, S.², CARMONA-SÁNCHEZ, J.C.3, CARRASCOSORUBIO, C.4 Asignatura Ecología, Grado en Biología, Universidad de Alcalá, España 17 (1) julio.artes@edu.uah.es; (2) susana.bernal@edu.uah.es; (3) juan.carmona@edu.uah.es; (4) carlos.carrascoso@edu.uah.es Resumen: ¿Existen los zombies en la naturaleza? Hay ciertos organismos capaces de ejercer un férreo control mental sobre algunos animales dirigiendo su conducta para su propio beneficio. En los mares mora Liocarcinus holsatus, un cangrejo cuyo instinto maternal puede verse manipulado por un parásito, Sacculina carcina. El protozoo Toxoplasma gondii es uno de los casos más asombrosos de control mental. Una de sus víctimas a lo largo de su ciclo vital es la rata, que deja de temer a la orina de gato. Lo más inquietante es que es capaz de afectar al ser humano. La mariposa Macculinea alcon ha coevolucionado con diferentes especies de hormigas del género Myrmica con el fin de manipularlas para que cuiden y alimenten a sus larvas. A su vez, el himenóptero Icneumon umerus ha desarrollado un sofisticado armamento químico para introducirse en el hormiguero y ovopositar la oruga de la mariposa. Por su parte, una avispa de Costa Rica, Hymenoepimecis argyraphaga, paraliza a la araña, Plesiometra argyra, y deposita una larva sobre su abdomen. Plesiometra continúa con normalidad, pero al desarrollarse la larva el arácnido modifica su conducta y teje una estructura amorfa que soportará la metamorfosis del insecto. 10. El mundo marino: un enigma por resolver BARATAS-CABALLERO, L.1, BARCO-MARTÍN, E.2, BUNES-CANSADO, E.3, CABANILLAS-VEGA, F.4 Asignatura Ecología, Grado en Biología, Universidad de Alcalá, España (1) lidia.baratas@edu.uah.es; (2) edu.barco@uah.es; (3) esther.bunes@edu.uah.es; (4) fernando.cabanillas@edu.uah.es Resumen: Muchos son los que aseguraban que las condiciones de las fosas abisales (presión, luz, nutrientes…) no daban pie a la aparición de alguna forma de vida. Pero hace algunos años, gracias a cuantiosas investigaciones, se observó que existían muchos microorganismos, los más abundantes las bacterias, como Vibrio fischeri, pueden desarrollarse en estos desconocidos ecosistemas gracias a su capacidad quimiosintética y las diversas fuentes de carbono. Las bacterias se convierten así en el primer eslabón de la cadena trófica y conceden mediante relaciones simbióticas propiedades tales como bioluminiscencia y relaciones alimentarias. En nuestro viaje veremos la gran diversidad de organismos que se benefician de estas relaciones como por ejemplo Photoblepharon palpebratus que emplea la bioluminiscencia generada por la simbiosis con bacterias para su alimentación y defensa. También celentéreos como Pelagia noctiluca, el cefalópodo Euprymna scolopes y el gusano tubícola Riftia pachyptila, serán los protagonistas de nuestro viaje. Aflorando ya a la superficie podremos observar simbiosis entre animales de diferentes filos tales como equinodermos (Clathia aculeofila) y poríferos, y la babosa Elysia chlorotica que utiliza las características fotosintéticas de los cloroplastos de las algas que ingiere beneficiándolos a ellas a su vez generando clorofila. Para finalizar nuestra exposición, reseñaremos la correlación de importancia que existe entre los vegetales en el mundo terrestre y las bacterias en estos ecosistemas, también quedará patente la gran diversidad de organismos e interacciones que suceden en nuestros grandes y desconocidos océanos. 18