IMPORTANTE RECOMENDACIONES PARA EL SUEÑO SEGURO DEL BEBÉ El Síndrome de Muerte Súbita del Lactante (SMSL), es la muerte repentina e inesperada de un bebé aparentemente sano durante el sueño. Se produce durante el primer año de vida. Si bien no se conoce la causa, se puede disminuir su riesgo incorporando pautas de sueño seguro durante el descanso del niño. FACTORES DE RIESGO ► Dormir boca abajo o de costado ► Madre fumadora durante el embarazo y crecer en un ambiente contaminado con humo de cigarrillo ► Compartir la misma superficie para dormir con la madre y padre ► Cabeza cubierta durante el sueño RECOMENDACIONES ► Posición boca arriba durante el sueño ► Uso de una superficie firme para dormir (sin almohadas) ► Lactancia materna ► Cohabitación (dormir en la misma habitación de los padres) sin colecho (sin compartir la misma cama). ► Esquema de vacunas completo ► El uso del chupete a la hora de dormir ► Evitar la cabeza cubierta durante el sueño, el sobrecalentamiento, la exposición al humo del cigarrillo, al alcohol y a las drogas ilícitas 1 + INFO Posición para dormir Se recomienda la posición boca arriba para dormir en los lactantes, con el objetivo de reducir el riesgo de SMSL. Dormir de costado no es seguro y no está aconsejado. La posición boca arriba disminuye en forma importante el riesgo del SMSL. Dormir boca abajo aumenta el riesgo de re inspiración de los gases expirados, resultando en aumento del anhídrido carbónico y disminución de la oxigenación de la sangre. La posición boca abajo también aumenta el riesgo de sobrecalentamiento por disminución de la pérdida de calor y el aumento de la temperatura corporal. La posición boca arriba en el sueño del bebé es más superficial. La evidencia reciente sugiere que la posición boca abajo puede disminuir la oxigenación cerebral. La posición de costado para dormir no está aconsejada. La misma es inestable ya que el niño puede rolar a la posición boca abajo. Es sumamente importante acostar al bebé boca arriba desde su nacimiento. ¿Dónde deben dormir los bebés? Los bebés deben dormir preferentemente en una cuna de madera con barrotes. Las cunas deben cumplir con los estándares de seguridad, incluyendo la separación de los barrotes, montaje adecuado y colchones firmes. Se sugiere el uso de cunas nuevas, debido a que las cunas más viejas pueden no satisfacer las necesidades actuales de las normas de seguridad, podrían tener partes faltantes, o podrían ser ensambladas incorrectamente. 2 Los colchones deben ser firmes y mantener su forma. No debe quedar espacio entre el cochón y el borde de la cuna. No deben utilizarse almohadas o almohadones como sustitutos de colchones. Además, los bebés no deben ser colocados para dormir en camas de tamaño adulto (peligro de caídas, asfixia, etc). Los asientos para auto (“huevitos”) y otros dispositivos de asiento no se recomiendan para el sueño rutinario en el hogar. El uso de los mismos facilita que el niño vomite. Los bebés recién nacidos tienen un pobre control de la cabeza mientras están en posición sentada por ende acostumbran a flexionar la misma. Los niños menores de 1 mes que utilizan estos dispositivos tipo asiento, podrían tener un riesgo aumentado de obstrucción de las vías aéreas superiores como así también disminución de la oxigenación. Crece la preocupación acerca de caídas y lesiones causadas por los asientos de seguridad cuando estos son ubicados en superficies elevadas. Se recomienda compartir la habitación sin compartir la cama El colecho (cuando el bebé comparte la misma superficie para dormir con sus padres) aumenta el riesgo del SMSL. Dormir en la misma habitación con los padres es confortable, facilita la alimentación y el cuidado del bebé, pero se recomienda no dormir en la cama con ellos. Compartir la cama puede aumentar el riesgo de sobrecalentamiento, re inspiración del aire expirado, obstrucción de las vías respiratorias, cobertura de la cabeza, y exposición al humo del cigarrillo, que son todos factores que incrementan el riesgo para SMSL. La cama de los adultos, no está diseñada para la seguridad del niño y expone a éste a un mayor riesgo de lesiones accidentales y muerte en circunstancias tales como sofocación, asfixia, atrapamiento de la cabeza, caídas y estrangulación. Los lactantes, en particular los menores de 3 meses de vida y los que nacen prematuramente y/o con bajo peso, presentan mayor riesgo, posiblemente debido a que sus habilidades motoras y su fuerza muscular no están desarrolladas en su totalidad y hacen que sea difícil escapar de estas potenciales amenazas. Los niños pueden estar en la cama de los adultos para su alimentación o confort, pero deben ser devueltos a su propia cuna al momento de dormir. Ropadecama Almohadas, colchas, edredones, pieles de oveja, y otras superficies blandas son peligrosas si se colocan por debajo del niño o sueltas en su cuna. Generalmente los padres y los cuidadores utilizan almohadas y mantas para crear barreras para evitar que el niño se caiga (desde una cama de adulto o sofá), o dentro de la cuna evitando lesiones de golpes. Sin embargo esta barrera blanda puede aumentar las posibilidades de asfixia y re inspiración del aire expirado. 3 Las almohadas, colchas, edredones, pieles de oveja, y otras superficies suaves son peligrosas cuando se colocan debajo del lactante o cuando se dejan sueltas en el área de sueño del niño, estas pueden aumentar el riesgo de SMSL hasta cinco veces, independientemente de la posición de sueño. También han informado que en muchos casos de SMSL las cabezas de los niños, incluyendo algunos que dormían en posición boca arriba, estaban cubiertas por ropa de cama suelta. Además, la ropa de cama suave y suelta ha sido asociada con muertes por asfixia accidental. La Academia Americana de Pediatría ha informado que en su base de datos, la mayoría de las muertes relacionadas con el sueño infantil son atribuidas a sofocación por la presencia de almohadas, colchas, y ropa de cama extra. Recomienda que los lactantes duerman en una superficie firme sin ningún tipo de ropa de cama blanda o floja. Las almohadas, colchas y edredones nunca deben estar en el medio ambiente de sueño del bebé. Se puede utilizar la ropa de cama para niños que está diseñada para mantener la temperatura del bebé sin los posibles riesgos de cubrir la cabeza. Por ejemplo se recomienda una bolsa de dormir para bebés. Si se utiliza una manta, ésta debe ser delgada y debe llegar hasta las axilas del bebé, para evitar que la cabeza o la cara queden cubiertas. Estas prácticas también deben realizarse en el ámbito hospitalario. No se recomiendan las chichoneras para cuna y productos similares. Los almohadones y productos similares que se adhieren a los barrotes de la cuna o a los lados son frecuentemente utilizados con la idea de proteger a los niños de una lesión. En un principio, los protectores para cuna se desarrollaron para prevenir el atrapamiento de la cabeza entre los barrotes de la misma. Sin embargo, las nuevas normas para cunas que requieren un espacio entre 50 y 90 mm entre los barrotes han evitado la necesidad de los protectores de cuna. Las mujeres embarazadas deben buscar y obtener atención prenatal con regularidad Existe considerable evidencia epidemiológica que vincula el menor riesgo de SMSL para los niños cuyas madres obtienen cuidado prenatal en forma regular. Las mujeres deben buscar cuidado prenatal temprano en el embarazo y seguir obteniendo atención prenatal regular durante todo el periodo de gestación. Se debe evitar fumar durante el embarazo, en el medio ambiente de la mujer embarazada y en el entorno del recién nacido Aparte de la posición para dormir, otro factor de riesgo muy importante para SMSL es la exposición al humo del cigarrillo. Se estima que un tercio de las muertes por SMSL podrían evitarse si todas las madres eliminaran el cigarrillo durante el embarazo. Las asociaciones de pediatría apoyan la eliminación de toda exposición al humo del cigarrillo, tanto antes del nacimiento como en el medio ambiente del niño. Evitar el alcohol y el uso de drogas ilícitas durante el embarazo y después del nacimiento del niño. Varios estudios han investigado específicamente la asociación entre el SMSL y la exposición prenatal y postnatal al alcohol o a drogas ilícitas. 4 Se recomienda la lactancia materna Estudios sobre el sueño fisiológico han encontrado que los niños amamantados son más fáciles de despertar que aquellos alimentados con fórmula. Además, la lactancia materna disminuye la incidencia de diarrea, infecciones respiratorias superiores y bajas, entre otras enfermedades infecciosas que se asocian con un aumento de la vulnerabilidad al SMSL. Ofrece beneficios al sistema inmunitario en general a partir de los anticuerpos maternos y micronutrientes en la leche humana. Se ha hallado que la lactancia materna exclusiva hasta los 6 meses es más protectora contra las enfermedades infecciosas en comparación con la lactancia materna exclusiva a los 4 meses de edad y la lactancia materna no exclusiva. Luego de amamantarlo acostar al bebé en su propia cuna para dormir. Ofrecer el chupete al momento de la siesta y por la noche Varios estudios han encontrado un efecto protector del chupete sobre el SMSL, particularmente cuando es utilizado en el momento del sueño. Es frecuente que el chupete caiga de la boca al dormirse; aun así, el efecto protector persiste a todo lo largo del período del descanso. Evitar el sobrecalentamiento y cubrir la cabeza en lactantes Hay pruebas claras de que el riesgo de SMSL está asociado con la cantidad de ropa o frazadas en el lactante y la temperatura de la habitación. Los niños que duermen en posición boca abajo tienen un mayor riesgo de sobrecalentamiento que los que duermen en posición boca arriba. Evitar la cubrir la cabeza. La habitación debe tener una temperatura entre 20 y 22ºC. Los lactantes deben ser vacunados de acuerdo con las recomendaciones de su pediatra y los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades Se ha encontrado que las vacunas tienen un efecto protector contra el SMSL por lo que se debe vacunar a los bebés de acuerdo con el calendario brindado por los centros para el control y prevención de enfermedades. Monitores para el hogar, SMSL y Eventos de Aparente Amenaza a la VIDA Los Eventos de Aparente Amenaza a la VIDA (ALTE) no son precursores del SMSL y no hay evidencias científicas de que los monitores hogareños sean efectivos para disminuir el riesgo del SMSL. 5