TEORÍAS SOCIALES DEL ORDEN Y DEL CONFLICTO núcleo temático uno Contenido Introducción ...................................................................... 2 Período de Revoluciones ................................................. 2 Contractualismo ............................................................... 9 Positivismo ....................................................................... 12 Emile Durkheim ................................................................ 15 El aporte de Karl Marx ..................................................... 17 La contribución de Max Weber ........................................ 26 BIBLIOGRAFÍA ................................................................ 32 Introducción El presente núcleo temático se propone introducir a los cursantes al pensamiento de los principales referentes teóricos que pensaron acerca del orden y el conflicto. Nos centraremos en las revoluciones sociales y políticas que dieron surgimiento al capitalismo y, con él, al desarrollo de la teoría social clásica. El recorrido propuesto comenzará por la perspectiva contractualista, luego el positivismo y, por último, abordaremos autores clásicos de la sociología: Emile Durkheim, Karl Marx y Max Weber. página 1 Período de Revoluciones Según el historiador Eric Hobsbawm el período comprendido entre 1789 y 1848 (iniciado con la construcción de la primera fábrica del mundo moderno en Lancashire y la Revolución francesa y terminado con la construcción de la primera red ferroviaria y la publicación del Manifiesto comunista) puede ser referido como “La era de la revolución”. Fue el período del triunfo no de la industria como tal sino de la industria capitalista; no de la libertad y la igualdad en general, sino de la clase media o sociedad burguesa y liberal; no de la economía moderna, sino de las economías y estados en una región geográfica particular del mundo, cuyo centro fueron los estados de Gran Bretaña y Francia. La transformación de 1789-1848 está constituida por eventos revolucionarios en ambos países que se propagaron de forma inmediata al mundo entero. Veamos ahora en particular los dos procesos más importantes de aquel período: la Revolución Industrial y la Revolución francesa. Revolución Industrial Hacia finales del siglo XVIII y comienzos del XIX confluyeron una serie de condiciones para que en Gran Bretaña se desarrollase la más importante transformación del sistema económico. Algunos cambios en la agricultura, la población, y la tecnología favorecieron un desarrollo industrial. Hacia mediados del S XVIII comienza un aumento progresivo de la producción agrícola gracias a la inversión de los propietarios en nuevas técnicas y sistemas de cultivo, además de la mejora del uso de fertilizantes. La modernización de la agricultura permitió un crecimiento demográfico debido a la mejora de la alimentación. También hubo adelantos en la medicina y en la higiene, de ahí que creciera la población. También hubo una migración del campo a la ciudad porque la ocupación en labores agrícolas disminuyó mientras crecía la demanda de trabajo en las ciudades. Las mejoras técnicas redujeron el número de campesinos necesarios para trabajar la tierra, y proporcionaron mano de obra para la industria. Este desarrollo culminó en la transformación del mundo occidental, que paso de ser un sistema fundamentalmente agrícola a otro industrial. Las máquinas se aplicaron a los transportes y a la comunicación iniciando una enorme transformación. El aumento de la demanda de maquinarias hizo que se produjeran innovaciones técnicas que aumentaron la producción y los beneficios. Lo importante no es el invento, sino su difusión en la industria. Cada invento no es muy importante en página 2 sí mismo, sino porque provoca nuevas innovaciones. La innovación más importante fue la máquina de vapor de James Watt que produjo consecuencias de gran importancia. Para que sea posible el uso de maquinaria en la industria, una condición previa es que los empresarios que van a utilizarla tengan el capital suficiente como para desembolsar las grandes cantidades de dinero inicial que cuestan las máquinas. Es necesario, pues, una acumulación previa de capital. Esta acumulación se produce gracias al aumento de la tasa de ahorro en la agricultura. Además del incremento del ahorro en la agricultura fue necesario el desarrollo de instituciones financieras que concentrasen los diferentes capitales ahorrados por particulares y los prestasen a la burguesía industrial que comenzaba a despuntar. La burguesía inglesa había acumulado grandes capitales a partir de su expansión colonial y comercial. Las ideas liberales, muy difundidas en la Inglaterra de esa época, favorecían la iniciativa privada. El ideal de esta ideología era un libre mercado en el que pudieran intercambiarse los diversos productos en un sistema industrial. El principal imperativo de la época era comprar en el mercado más barato para vender en el más caro. A esto se sumaban las garantías que daba un parlamento que representaba también los intereses de esta burguesía industrial y comercial. Por ejemplo, en esta época se crean los grandes mercados nacionales e internacionales. El comercio internacional se liberaliza, sobre todo tras el Tratado de Utrecht (1713), que facilita las relaciones comerciales de Inglaterra y otros países europeos, con la América española. Entre las principales consecuencias de la revolución industrial tenemos el traspaso de la población del campo a la ciudad. La expansión de las ciudades produjo una lista interminable de problemas urbanos: masificación, contaminación, ruido, tráfico, etc. El hacinamiento fue el primer problema que sufrió esta población de trabajadores empleados en el sistema industrial; debía vivir en espacios reducidos sin comodidades mínimas y carentes de higiene. Este proletariado urbano, que vivía en estas condiciones, trabajaba gran cantidad de horas a bajos salarios. Esta explotación del trabajo, que mantenía las rentas del obrero a un nivel de subsistencia, permitiendo a los ricos acumular los beneficios que financiaban la industrialización y aumentar sus comodidades, suscitaba el antagonismo del proletariado. Esto condujo a la creación del movimiento obrero, así como una diversidad de movimientos radicales cuyo objetivo era derrocar el sistema capitalista. página 3 Revolución Francesa Si la economía del mundo del S XIX se formó principalmente bajo la influencia de la Revolución industrial inglesa, su política e ideología se formaron principalmente bajo la influencia de la Revolución francesa. La Revolución Francesa fue el cambio político más importante que se produjo en Europa a fines del siglo XVIII. Esta revolución significó el triunfo de un pueblo (la burguesía) oprimido y cansado de las injusticias, sobre los privilegios de la nobleza feudal y del estado absolutista. Francia se hallaba bajo el dominio de una monarquía absolutista, el poder de rey y de la nobleza eran la base de este régimen, pero en realidad el estado se encontraba en una situación económica bastante precaria. El mantenimiento de un estado absolutista demandaba mucho dinero, ya que: existía un gran número de funcionarios en el gobierno y cada uno buscaba su propio beneficio, se tenía que mantener un gran ejército permanente, la corte vivía rodeada de lujos. Se trató de conseguir que la nobleza también aporte su correspondiente diezmo, medida que provocó la ira y oposición de esta última clase social, que estaba dispuesta a defender sus privilegios feudales, hasta el punto de enfrentar la monarquía. La economía del país estaba arruinada. La inmanejable deuda del Estado fue exacerbada por un sistema de extrema desigualdad social y de altos impuestos que los estamentos privilegiados, nobleza y clero no tenían obligación de pagar, pero que sí oprimía al resto de la sociedad. La colaboración interesada de Francia con la causa de la independencia estadounidense (que ocasionó un gigantesco déficit fiscal) y el aumento de los precios agrícolas tras las malas cosechas contribuyeron al clima de disconformidad imperante. La corriente de pensamiento vigente en Francia era la Ilustración, cuyos principios se basaban en la razón, la igualdad y la libertad. Para esta corriente de pensamiento la propiedad privada era un derecho natural sagrado, inalienable e inviolable. La Ilustración había servido de impulso a las Trece Colonias norteamericanas para la independencia de su metrópolis europea. Tanto la influencia de la Ilustración como el ejemplo de los Estados Unidos sirvieron de “trampolín” ideológico para el inicio de la revolución en Francia. página 4 La burguesía quería acceder a cargos públicos. El conjunto de la población mostraba un resentimiento generalizado dirigido hacia los privilegios de los nobles y del alto clero, que mantenían su dominio sobre la vida pública impidiendo que accediera a ella una pujante clase profesional y comerciante. Los campesinos estaban cansados del poder feudal. La monarquía prácticamente devastada económicamente y sin el apoyo de gran parte de la nobleza, estaba en la ruina. La sociedad estaba compuesta por tres sectores sociales llamados estados: la iglesia, la nobleza y un tercer estado compuesto principalmente por la burguesía y los campesinos libres. Viendo la difícil situación económica que se asomaba, la nobleza exigió que se llamara a Estados Generales, para el tratamiento de una ley de impuestos. Cuando se reunieron en los Estados Generales (1789), la situación de Francia estaba sumamente comprometida, ya que el pueblo no soportaba más tan penosa vida, y existía un gran descontento social. Los miembros del Tercer Estado se declararon como únicos integrantes de la Asamblea Nacional: ésta no representaría a las clases pudientes sino al pueblo en sí. La primera medida de la Asamblea fue votar la “Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano”. Esta proclama se transformó en la síntesis de las ideas revolucionarias, basadas en tres banderas: igualdad, fraternidad y libertad. Si bien invitaron a los miembros del Primer y Segundo Estado a participar en esta asamblea, dejaron en claro sus intenciones de proceder incluso sin esta participación. En 14 de Julio de 1789, la burguesía se vio apoyada por un gran sector explotado por la nobleza, los campesinos, que en medio de una agitada multitud revolucionaria formada por hombres y mujeres, saturados de injusticias y de hambre, se dirigen a la Bastilla, símbolo del régimen absolutista, donde funcionaba como cárcel de los opositores al sistema de gobierno, y la toman por la fuerza. Esta demostración atemorizó a los partidarios del antiguo sistema, y sirvió para inclinar la balanza en favor de los revolucionarios, desplazando así del poder a los nobles y partidarios del absolutismo. Paralelamente se produjo en las zonas rurales levantamientos de los campesinos contra los señores feudales, lo cuales fueron asesinados, y sus castillos saqueados e incendiados. A este movimiento social por la justicia y fraternidad de los hombres en 1789, se lo conoce como el Gran Miedo. La Asamblea Nacional estaba formada por la burguesía, que inicialmente para luchar contra la monarquía lo hizo en forma unificada, pero en realidad la burguesía no era una clase social homogénea, sino página 5 que estaba dividida en la alta burguesía –banqueros, financistas, comerciantes, propietarios- y en la baja burguesía - formada por los profesionales (abogados y médicos), pequeños comerciantes y dueños de talleres. Cuando llegó el momento de decidir por la forma de gobierno, la alta burguesía apoyó a los girondinos, oriundos de la provincia de La Gironda, que querían llegar a un acuerdo con la monarquía e instaurar una monarquía constitucional, es decir, tenía una actitud moderadora respecto a los cambios políticos. Por otro lado estaban los jacobinos, que tenían ideas más revolucionarias y de cambios radicales, con tendencia a la instauración de una república democrática, con derechos a la participación política y con la aplicación de medidas más equitativas para la repartición de la riqueza y la lucha contra el hambre popular. Dicho nombre proviene de que se reunían en asambleas, llamadas clubes, en un convento ubicado sobre la calle San Jacobo. Los diputados de la asamblea, decidieron eliminar los privilegios de la nobleza, se les obligó a pagar impuestos y se eliminó el diezmo a la Iglesia. El 3 de Septiembre de 1789, se proclamó la Constitución de carácter moderado en donde la alta burguesía había logrado prevalecer sus ideales de negociar con el antiguo régimen quedando a cargo del poder ejecutivo el rey (Luis XVI). El poder legislativo lo ejerció una asamblea formada por la burguesía y el poder judicial, se compuso de jueces electos. Se estableció que sólo podían votar aquellos que pagaban ciertos impuestos, y de esta manera se pone en evidencia que las banderas de igualdad proclamada por los revolucionarios tenían ciertas limitaciones. La nobleza de esta manera se vio con sus poderes recortados, lo que los motivó a tratar de crear alianzas y buscar apoyos en otros países con gobiernos absolutistas, y de paso tratar de evitar que estos movimientos se expandan a otros reinos, y para ello no había más remedio que la guerra. Países como Austria y Prusia, atacaron a los franceses en los límites de su territorio pero estos últimos lograron contenerlos. Sin embargo, los cuidados que tuvieron los países limítrofes con Luis XVI hicieron evidente de la alianza que existía entre éste y la intervención extranjera por lo que el pueblo francés destronó al rey, y luego se lo decapitó. Más tarde fue ejecutada su mujer: María Antonieta. La asamblea nacional fue desplazada y un nuevo cuerpo de representantes reunidos en una Convención, comenzó a dirigir el nuevo gobierno republicano, liderado por la baja burguesía, dependiente del partido jacobino. El cambio de mayor importancia es que ahora los representantes podían ser elegidos mediante el sufragio universal, permitiendo una mayor participación de sectores humildes y populares, llamados página 6 sans culottes (sin calzones). Desde 1792 los jacobinos lograron el control de la Convención, y sus principales activistas fueron: Dantón, Robespierre, Marat y Saint Just. La república jacobina en el plano exterior debió frenar el avance de los ejércitos extranjeros, en el plano interior debió combatir la aristocracia, y terminar con la resistencia de los girondinos, que se oponían a la nueva forma de gobierno. Para tomar mejor partido de su control, los jacobinos hicieron alianzas con los sans-culottes, y durante 1793, se creó una institución destinada a establecer un rígido control de los opositores, y castigarlos duramente y aplicar la pena de muerte a todos aquellos que no apoyaban el sistema de gobierno republicano. Este instrumento fue dirigido en persona por Robespierre. Se trataba de mantener dominados a sus opositores, a través del miedo, por lo que se lo llamó: El terror revolucionario. La medidas tomadas por la Convención no pudieron atender a todas las exigencias del sector popular, que seguían sufriendo la crisis económica. Se trató de llevar un control de precios para los alimentos básicos, aplicando severa penas a quienes no las acataban, pero no se logró el efecto deseado, lo que llevó al sector de los sans-culottes a romper su alianza con los jacobinos, creando una fisura y debilidad al partido gobernante. Con Robespierre al frente, se estableció un gobierno revolucionario, el Comité de Salvación Pública, que suspendió algunas garantías constitucionales, mientras la situación de guerra pusiera en peligro la Revolución, y se utilizó el Terror, un estado de excepción, para perseguir, detener y, en su caso, guillotinar a los sospechosos de actividades contrarrevolucionarias. Ante la guerra y la crisis económica se tomaron toda una serie de medidas para favorecer a las clases populares y que fueron signo del nuevo carácter social de la República. Las reformas de Robespierre concitaron muy pronto la oposición de la mayor parte de la burguesía, que veía peligrar sus propiedades. Por otro lado, su forma de gobernar, dictatorial, desagradaba a muchos porque a cualquier crítica se respondía con la detención y la muerte. Cuando la guerra dejó de ser un problema y las victorias del ejército republicano garantizaban la estabilidad de la República, gran parte de los diputados de la Convención se pusieron de acuerdo para dictar una orden de detención contra Robespierre, que fue guillotinado el 28 de julio de 1794. página 7 Conociendo la debilidad de este gobierno, la alta burguesía aprovechando la situación, y deseosos de terminar con los “excesos del populacho” en Julio de 1794, produjeron un golpe de estado, desplazando la república y creando un Directorio, que para lograr su autoridad se apoyaron en los militares. Los líderes de la Convención fueron guillotinados. El Directorio, eliminó la libertad política de votar a los más humildes, se eliminó el control de precios y se tomaron medidas que favorecieron a los comerciantes y especuladores. Este nuevo régimen, el Directorio, fue contestado tanto por los realistas, partidarios de volver al Antiguo Régimen, como por las clases populares, decepcionadas por el nuevo rumbo político. Así, el sistema fue evolucionando hacia un autoritarismo, que acabó por recurrir al ejército y entregarle el poder. De todas maneras, el sector popular siguió pasando por las misma penurias de siempre y míseras condiciones de vida. Entre los militares que apoyaban al Directorio, se encontraba Napoleón Bonaparte, que no tardó en hacerse del poder, mediante un golpe militar, aprovechando el gran prestigio que se había ganado en las diversas victorias militares en otros países. En 1799 se apoderó del gobierno se Francia, y se coronó como Primer Cónsul, concentrando cada vez más poder, hasta llegar a emperador en 1804. Con el tiempo la burguesía lo apoyó, ya que conservó muchos de los principios declarados en la Constitución, especialmente aquellos que beneficiaban a la burguesía más acomodada. A su vez estos lo apoyaban, porque evitaban el regreso de la república jacobina y del antiguo régimen aristocrático. Entre las principales consecuencias de la Revolución francesa podemos encontrar que: se destruyó el sistema feudal, se dio un fuerte golpe a la monarquía absoluta, surgió la creación de una República de corte liberal, se difundió la declaración de los Derechos del hombre y los Ciudadanos, la separación de la Iglesia y del Estado en 1794 fue un antecedente para separar la religión de la política en otras partes del mundo, la burguesía amplió cada vez más su influencia en Europa, se difundieron ideas democráticas, los derechos y privilegios de los señores feudales fueron anulados, comenzaron a surgir ideas de independencia en las colonias iberoamericanas y se fomentaron los movimientos nacionalistas. Quizás la verdadera revolución del tiempo no haya sido una revolución política como la Revolución francesa, sino una revolución económica, o sea, aquella revolución que hizo nacer la sociedad industrial, y que por lo tanto la solución de los problemas de la vida asociada no debe buscarse en el sistema político sino en el sistema social. página 8 Contractualismo El Iusnaturalismo o Derecho natural es una teoría ética y un enfoque filosófico del derecho que postula la existencia de derechos del hombre fundados en la naturaleza humana, universales, anteriores y superiores (o independientes) al ordenamiento jurídico positivo y al derecho fundado en la costumbre o derecho consuetudinario. Aquí nos centraremos en la concepción de Estado y sociedad de esta corriente teórica a través de las ideas de sus principales referentes: Thomas Hobbes, John Locke y Jean – Jaques Rousseau. Si bien pueden establecerse diferencias significativas entre las ideas de estos tres pensadores, que enseguida pasaremos a desarrollar, entendemos que existe un núcleo central que caracteriza al modelo iusnaturalista compuesto por los siguientes elementos: El punto de partida es el estado de naturaleza (un estadio no político). 1. Entre el estado de naturaleza y el estado político existe una relación de contraposición. 2. El elemento constitutivo del estado de naturaleza son los individuos singulares (no asociado aunque asociables). 3. Los individuos son libres e iguales. 4. El paso del estado de naturaleza al estado civil se produce mediante una o más convenciones (contrato social). 5. El consenso es el principio legitimador de la sociedad política. Pasamos entonces a desarrollar las principales ideas de los autores más significativos de la teoría iusnaturalista a través de tres ejes: su concepción del Estado de naturaleza, de contrato social y de sociedad civil. a. Estado de naturaleza En primer lugar podemos diferenciar las posturas de los mayores exponentes del iusnaturalismo según si estos entienden que el Estado de naturaleza es un suceso real que tuvo lugar en la historia o si se trata de una mera esquematización teórica que nunca sucedió. Hobbes, por su parte, entiende que el estado de naturaleza universal es una pura hipótesis de la razón. Jamás ha existido ni existirá. Se trata de un estado en el que los individuos se encontrapágina 9 rían regidos por su interés personal y su egoísmo. Por lo tanto, su existencia prolongada habría llevado a la extinción de la humanidad. Por su parte, Locke tampoco considera que se trate de un momento histórico ya que entiende que la disolución del Estado constituiría un regreso al Estado de naturaleza, que identifica con la anarquía. Para Russeau, en cambio, el Estado de naturaleza caracterizó al inicio de la historia de la humanidad. Se trataba de un estado donde primaban la inocencia y la felicidad. Un segundo elemento que permitiría acercarnos a la conceptualización de estos autores acerca del Estado de naturaleza es si éste es definido como un estado pacífico o belicoso. Llegados a este punto debemos dejar en claro que el fundamento de la construcción hobbesiana es que el estado de naturaleza es un estado de guerra. Locke, en tanto, describe el estado de naturaleza como un estado de paz pero de carácter hipotético. Es un estado incierto, inestable, inseguro, desagradable en el que el hombre no puede continuar viviendo indefinidamente. Por último, para Rousseau el estado original del hombre era un estado feliz y pacífico. El estado de guerra social no se le puede atribuir al hombre de naturaleza sino al hombre civil. Por último, un tercer elemento que podemos analizar con respecto al Estado de naturaleza es si para estos autores se trata de un estado de aislamiento o social, de individuos asociados entre sí. Para Hobbes, Locke y Russeau el Estado de naturaleza es un estado cuyo protagonista es el individuo singular, con sus derechos y deberes, con sus instintos e intereses en relación directa con la naturaleza, de la cual toman los medios para su supervivencia, y solo indirecta o esporádicamente se relacionan con los otros hombres. Según entienden Hobbes y Locke es el instinto de conservación lo que mueve al hombre. Para Russeau la vida del hombre natural se desarrolla en un feliz aislamiento de los demás hombres, movido exclusivamente por el amor de sí. El principio individualista en el que se inspiran las teorías iusnaturalistas no excluye que haya un derecho natural social. Lo que se excluye es que la sociedad política sea concebida como una prolongación de la sociedad natural; la sociedad política es una creación de los individuos, es el producto de la conjugación de voluntades individuales. La sociedad política substituye al estado de naturaleza, no lo continua ni lo prolonga ni lo perfecciona. pá ágina 10 b. El contrato social Para Hobbes el pacto social es un acuerdo para la constitución de un poder común. El hombre renuncia a todo lo que hace indeseable el estado de naturaleza, a su igualdad, para preservar su vida. El único derecho al que el hombre no renuncia es la vida. En el momento en el que el Estado no es capaz de asegurar la vida el individuo retoma la libertad de defenderse como mejor le parezca. El fin del estado es proporcionar seguridad. Para Locke en el estado civil los individuos renuncian al derecho a hacer justicia por sí mismos y conservan todos los demás, ante todo el derecho a la propiedad. Los individuos instruyen la sociedad civil principalmente para la tutela de la propiedad privada. Para Rousseau el poder soberano despersonalizado en la voluntad general es el resultado de la forma especial en la que se presenta la asociación, que es al mismo tiempo unión de todos y sumisión de todos al todo. El hombre es libre solamente cuando obedece las leyes que el mismo se puso. c. La sociedad civil La concepción de Estado que se inicia con Hobbes es la del absolutismo, un poder absoluto en indivisible. Los súbditos deben obedecer y el soberano posee una autoridad absoluta pues no debe rendir cuentas a nadie; el pacto se realiza entre los súbditos y el soberano queda por fuera del mismo. Por su parte, el pensamiento de John Locke dio origen al liberalismo, que brega por la división de poderes y considera que el poder soberano es resistible. Cuando el soberano no respeta los límites de su poder supremo, cayendo en el despotismo, los súbditos pueden resistirse. Rousseau instaura la concepción democrática del poder. Para este filósofo los individuos deben subsumirse a la ley que cada uno se ha dado dentro de la libertad. pá ágina 11 Positivismo El positivismo es una escuela o corriente filosófica que tiene su origen en Francia a principios del S XIX. Sus preocupaciones principales se encuentran en torno a poder contener los efectos de las transformaciones radicales desatadas en la época producto de la revolución francesa y la industrial. Los ejes centrales en los que se basa pueden resumirse en los siguientes tres puntos: • El estudio de los fenómenos sociales debe emplear las mismas técnicas científicas que las ciencias naturales. • Es una corriente que está en contra la filosofía destructiva y negativa de la Ilustración (por eso positivismo) que había desencadenado la Revolución Francesa. • También se opone a la revuelta social y la revolución a favor del orden social. Se trata entonces de una filosofía conservadora. Recorreremos las principales ideas de esta corriente a través de algunos exponentes centrales: Claude Henri de Saint – Simon, Aguste Comte y Herbert Spencer. 1. Claude Henri de Saint – Simon Para este pensador el conocimiento científico deberá ocupar en la nueva sociedad el papel que la fe religiosa ocupaba en la sociedad antigua. Sus preocupaciones giraban en torno a los problemas de la sociedad industrial: la necesidad de armonizar los intereses de los capitalistas y el proletariado; y el enfrentamiento clases progresistas (industriales) y retrógradas (rurales). Saint – Simon entiende que existe un enfrentamiento entre el progreso y la tradición. Para que el orden exista la clase progresista debe prevalecer sobre la otra. Mientras que para acceder a la armonía de las relaciones entre burgueses y proletarios se deben mejorar las condiciones de vida de estos últimos. De acuerdo con la nueva filosofía de la historia, iniciada por la teoría de la sociedad según Saint Simon ningún Estado (y mucho menos el estado de la sociedad burguesa) ha suprimido el estado de naturaleza. El Estado, en vez de ser un triunfo de la razón en la tierra (como creyó toda la filosofía política de Hobbes a Hegel), es el medio por el cual la clase económicamente dominante mantiene ese domino. Este pensador influyo en las ideas de Aguste Comte y Emile Durkheim y también contribuyó al socialismo utópico que guió el pensamiento de Karl Marx. pá ágina 12 2. Aguste Comte Es considerado el padre de la sociología a la que le dio su nombre: “física social”. Entiende que la sociología debe transformarse en una religión secular. Logró sintetizar en su pensamiento ideas del iluminismo y el conservadurismo. Del primero toma la concepción de razón y progreso; y del segundo la de un orden asentado en la moral. Los cambios, las transformaciones, deben estar contenidas en un orden social. Su lema entonces es “orden y progreso. El orden sólo es posible sobre la base del consenso y debe ser estudiado por la estática social. El progreso, por su parte, debe ser conducido de manera que asegure el mantenimiento de la solidaridad para evitar la desintegración social. Es estudiado por la dinámica social. Comte desarrolla la ley de los tres estadios o etapas. Se trata de una sucesión ordenada de etapas. Se pasa de un orden a otro y existe un momento de ruptura o transición. La primera etapa es la teológica o religiosa que se desarrolla desde el origen de la humanidad hasta el fin de la Edad Media. Su forma de conocimiento del mundo es mágico- religiosa. Tiene lugar en sociedades de carácter militar cuyas principales actividades son la conquista y el saqueo. Es de carácter estructurado, rígido y jerárquico. El poder está en manos de sacerdotes y guerreros. La segunda etapa es la metafísica o filosófica que se desarrolla entre el Renacimiento (S XV) y el Iluminismo (S XVII). Se ocupa centralmente de la indagación sobre las causas últimas. Se trata de una etapa de transición. El poder se encuentra centralizado en los filósofos y los diplomáticos o legistas. La tercera y última etapa es la positiva o científica. Se desarrolla en las sociedades industriales donde adquiere centralidad el conocimiento científico. El poder, entonces, va a estar capitalizado por los científicos e industriales en esta etapa. Para Comte existe una jerarquía de las ciencias, cada una de las disciplinas científicas va a alcanzar la etapa positiva en un momento diferente. 3. Herbert Spencer Spencer postulaba que no hay diferencias metodológicas en el estudio de la naturaleza y la sociedad. Era partidario del libre mercado, estaba en contra de la intervención estatal. Algunos de los conceptos centrales para su teoría son, sin dudas, los de estructura y función. Las estructuras sociales son concebidas como las de un organismo animal. Entre los órganos de la sociedad (instituciones) hay relaciones de mutua dependencia, como se observan en los seres vivos; en tales relaciones se observa una diferenciación de pá ágina 13 funciones, que lleva a la sociedad a ser cada vez mas heterogénea a medida que crecen sus dimensiones, y cada vez más capaces de realizar acciones más complejas. Uno de sus desarrollos teóricos de mayor relevancia es la Ley General de la Evolución. La sociedad es un organismo altamente complejo, un supraorganismo. Los organismos evolucionan desde formas simples y homogéneas a formas complejas y heterogéneas; de lo indiferenciado a lo diferenciado. Con el aumento de la complejidad de la estructura se especializan las funciones. De esta forma las diferentes partes de la estructura se hacen complementarias e interdependientes. Spencer realiza dos tipologías para la clasificación de las sociedades. La primera considera las jefaturas, es decir, si existe alguien que de órdenes; y la división social del trabajo, entendida como la existencia o no de una distribución de las tareas especializadas entre los miembros de la sociedad. Esta tipología ordenara a las sociedades entonces de acuerdo a su grado de complejidad y heterogeneidad. Existirán entonces sociedades simples, compuestas, doblemente y triplemente compuestas. La segunda tipología organiza a las sociedades de acuerdo a su tipo de actividad y cooperación. Spencer encuentra entonces sociedades militares, cuya actividad radica en la conquista y el saqueo y donde la cooperación será forzosa; y sociedades industriales, cuya ocupación será la producción y distribución pacifica de bienes y en donde la cooperación es voluntaria. La evolución de estas sociedades no es histórica, existe coexistencia de sociedades simples y complejas. pá ágina 14 4 Emile Durkheim Durkheim tenía dos preocupaciones principales como teórico. En primer lugar recoger la promesa central, pero incumplida, del positivismo: constituir a la sociología como una ciencia. Para ello debía crear leyes y explicaciones científicas. En segundo lugar, se propuso contestar la siguiente pregunta: ¿Cómo asegurar la cohesión, el orden, en una sociedad compleja, industrial, dinámica, en donde los lazos tradicionales, dados por la religión y la costumbre, que ataban al individuo con su comunidad y sus autoridades estaban ya definitivamente rotos? En definitiva, cómo solucionar los problemas sociales de su época. Este teórico temía y odiaba el desorden social. Gran parte de su obra estaba dedicada al estudio del orden social. Según entendía los desordenes sociales no constituían una parte necesaria del mundo moderno y podían solucionarse mediante la introducción de reformas sociales. Busca colaborar en la consolidación de un orden moral, equivalente al orden social. Entendía a este orden moral como el sistema de normas que se constituye en instituciones. En una de sus principales obras, La División del Trabajo Social, donde analizaba la relación entre el individuo y la sociedad entendiendo que esta última prima sobre el primero. Para explicar la relación entre los individuos analiza dos tipos de solidaridad. La primera, a la que denomina mecánica, es la que caracteriza a las formas primitivas de conexión entre los individuos. Está construida a partir de semejanzas. El segundo tipo de solidaridad, llamada orgánica, es la que caracteriza a las modernas sociedades industriales. En ella existe una diferenciación entre los individuos. Se produce una conflictividad que será zanjada a través de una autoridad exterior que Durkheim denomina conciencia colectiva. Esta no es la suma de las conciencias individuales. Es exterior al individuo. Resume el conjunto de creencias y sentimientos comunes al término medio de una sociedad. Durkheim entiende que la falta de integración entre el individuo y la sociedad es el principal síntoma patológico de las sociedades modernas. Este teórico social ve que en los grupos profesionales, la institución que agrupa a los hombres de acuerdo a la actividad que realizan, son la principal unidad integrativa que permitirá zanjar esta problemática. Otro aspecto central de la obra de Durkheim es sin duda su concepción del método sociológico, que desarrollará en su obra Las Reglas Elementales del Método Sociológico. Allí se define al objeto de la sociología como el estudio de los hechos sociales. Entendiendo por hecho social toda forma de obrar, de pensar y de sentir que pá ágina 15 ejerce sobre el individuo una presión exterior. El método correcto de estudiarlos será considerarlos como cosas; consiguiendo así un desapego de la realidad social que permitirá la neutralidad del investigador. Estos hechos sociales tienen para Durkheim tres características centrales: son exteriores, generales y coercitivos. Son anteriores y exteriores al individuo en dos sentidos: todo individuo nace en una sociedad que ya está en marcha con una organización y estructura determinada que lo condicionan; y el individuo es solo un elemento dentro de la totalidad de relaciones que constituyen una sociedad. El hecho social es general porque es colectivo. Es un estado del grupo, que se repite en todos los individuos porque se impone a ellos. Es un molde o patrón que se mantiene firme a pesar de las variaciones particulares de cada caso. Es coercitivo porque obligan a actuar al individuo, lo coaccionan en determinada dirección. Los hechos sociales se expresan en normas, leyes, en instituciones que aseguran la integración del individuo con la sociedad. Por último, un ejemplo de aplicación de esta disciplina social desarrollada por el autor es, sin dudas, su obra El Suicidio. A través de este estudio Durkheim pretendía aplicar el método sociológico a la explicación de un fenómeno que a primera vista es individual. La vinculación de un comportamiento individual como el suicidio con causas sociales será una prueba irrefutable de la importancia de una disciplina como la sociología. Durkheim desarrolla una tipología de los suicidios. El primero es un tipo común en las sociedades militares tradicionales. Se trata del suicidio altruista aquel que se genera porque el individuo se encuentra fuertemente ligado a la sociedad. Existe una intensa consciencia colectiva que lleva a los individuos a sacrificar su vida en aras de un valor colectivo. En la sociedad moderna observa otros dos tipos centrales. El suicidio egoísta que se da por un aislamiento del individuo con respecto a la sociedad. Por otro lado, el suicidio anómico, aquél que se da por la falta de normas. El individuo no sabe aceptar los límites que la sociedad le impone. Aspira a más de lo que puede y cae en la desesperación. Este es el tipo al que Durkheim otorga mayor relevancia ya que entiende que uno de los males centrales de su época tiene que ver con la falta reglamentación moral en los individuos. pá ágina 16 El aporte de Karl Marx “La ideología alemana” (Marx y Engels) La critica a los neohegelianos. Los autores comienzan su obra haciendo una crítica al pensamiento filosófico dominante de toda una época en Alemania, la filosofía de los viejos hegelianos y neohegelianos. Mientras que los hegelianos sostenían que las “ideas” y los productos de la conciencia eran los nexos de la sociedad, los neohegelianos, en cambio, critican estas ideas considerando que conformaban las ataduras del hombre. En los años que van de 1842 a 1845, Marx dice, se descompone todo el sistema hegeliano dominante de los últimos tres siglos. Pero ambos autores sostienen que todas estas críticas, se dan en el marco de las ideas; los neohegelianos formulan consecuentemente ante ellos el postulado moral de que deben cambiar su conciencia actual por la conciencia humana, crítica o egoísta, derribando con ello sus barreras. En este sentido, los autores de “La ideología alemana” dicen, los neohegelianos son tan conservadores como los hegelianos porque solo combaten las frases de este mundo y no combaten el mundo “real” existente. “La filosofía hegeliana de la historia es la última consecuencia, llevada a su ‘expresión más pura’ de toda esta historiografía alemana que no gira en torno a los intereses reales, ni siquiera a los intereses políticos, sino en torno a pensamientos puros. La historia de las ideas se presenta desconectada de los hechos y los desarrollos prácticos que les sirven de base”. La concepción materialista de la historia. A partir de la crítica que realizan Marx y Engels a los neohegelianos, comienzan a construir las bases de lo que va a ser el Materialismo Histórico, partiendo del análisis de la condiciones de vida de los hombres reales y sus necesidades y no de lo que se piensa que éstos son. Sostienen que el hombre se diferencia del animal no porque tienen conciencia sino porque es el único que produce sus medios de vida materiales. El modo como los hombres producen sus medios de vida depende de cómo se encuentran los medios de vida en la naturaleza. Cuando hablamos de modo de producción, no solo se trata de la reproducción de la existencia de vida, sino que es un determinado modo de las actividades de éstos individuos y un determinado modo de vida de los mismos. pá ágina 17 Los autores concluyen estas ideas diciendo: “Lo que los individuos son coincide con su producción, tanto con lo que producen y como lo producen”.”Lo que los individuos son dependen de las condiciones materiales de su producción”. La producción aparece al multiplicarse la población. Las relaciones entre las naciones, se vincula con el desarrollo de las fuerzas productivas y la división internacional del trabajo. La división del trabajo en una nación, se traduce en la separación del trabajo industrial y comercial del trabajo agrícola, es decir, es la separación del campo de la ciudad, y la contradicción entre sus intereses. En este sentido, los autores nos dicen: Cada etapa de la división del trabajo, determina las relaciones de los individuos entre sí, en cuanto a lo material, el instrumento y el producto del trabajo. Esta idea de la división social del trabajo es central, ya que no se trata de actividades de cooperación equitativa entre los distintos sectores, sino que partir de esta idea, se van a formar las clases sociales, sus intereses contradictorios, la propiedad privada, etc. Luego los autores enumeran las distintas formas de propiedad que surgen en la historia, producto de la división social del trabajo. Ellas son: La propiedad de la tribu, la propiedad comunal-estatal, la propiedad feudal, para luego seguir analizando los aspectos de la propiedad capitalista. Más adelante nos dirán: “no es la conciencia la que determina la vida sino la vida la que determina la conciencia”. Es decir, no se elige pensar de cierta forma sino que se piensa a partir de las relaciones sociales en las que se está inmerso. La conciencia es una conciencia práctica, producto del modo de vida de los individuos y de las relaciones que establecen con otros para reproducir sus condiciones de existencia. Determinados individuos, como productores, actúan de un determinado modo, construyendo entre sí relaciones sociales y políticas determinadas. La organización social y el Estado brotan constantemente del proceso de vida de determinados individuos; pero de estos individuos, no como puedan presentarse ante la imaginación propia o ajena, sino tal y como realmente son: es decir, tal y como actúan y como producen materialmente y, por lo tanto, tal y como desarrollan sus actividades bajo determinados límites, premisas y condiciones materiales, independientes de su voluntad”. Es decir, de acuerdo al lugar que ocupan en la producción. Esta visión acerca de la organización política y el estado cuestiona la idea dominante de que el Estado es la expresión de la voluntad general de la sociedad. Por el contrario sostiene que, el estado es de clase. Es decir, es la forma de organización política de la clase domipá ágina 18 nante. En la sociedad capitalista, el estado de la burguesía atiende sus intereses particulares. No obstante, el estado se nos aparece como una forma propia e independiente separado de los intereses reales particulares como “ilusión de comunidad”. La ilusión de que la ley se basa en la libre voluntad separada de las bases reales y materiales. El papel que cumple el derecho es proclamar las relaciones de propiedad como resultado de la voluntad general. “Lo general es siempre la forma ilusoria de la comunidad”. Por otra parte, la lucha práctica de estos intereses particulares que constantemente y de un modo real se enfrentan a los intereses comunes o que ilusoriamente se creen tales impone como algo necesario la interposición práctica y el refrenamiento por el interés ‘general’ ilusorio bajo la forma de Estado”. “las ideas de la clase dominante son las ideas dominantes en cada época”. (“[…] La clase que ejerce el poder material dominante en la sociedad es, al mismo tiempo, su poder espiritual dominante. La clase que tiene a su disposición los medios para la producción material dispone con ello, al mismo tiempo, de los medios para la producción política, cultural, lo que hace que se sometan, al propio tiempo, por término medio, las ideas de quienes carecen de los medios necesarios para producir espiritualmente. Las ideas dominantes no son otra cosa que la expresión ideal de las relaciones materiales dominantes, las mismas relaciones materiales dominantes concebidas como ideas; por tanto las relaciones que hacen de una determinada clase la clase dominante son también las que confieren el papel dominante a las ideas”. Es decir, la ideología dominante no opera en el vacío sino que tiene bases materiales. Y esto hacer referencia al modo de producción. El modo de producción se conforma entre las relaciones históricamente determinadas, entre las relaciones productivas y las relaciones de producción, es decir la base material de la sociedad. Las fuerzas productivas son los instrumentos de trabajo, producción, conocimiento, tecnología; y a la fuerza de trabajo, condiciones físicas y espirituales de la población (ver el próximo eje sobre el carácter dual de la mercancía). Las relaciones sociales de producción, son aquellas bajo las cuales producen materialmente los individuos, y se expresan bajo las formas de propiedad. Estas ideas se pueden comprender a través de la división social del trabajo, explicada anteriormente, donde la cooperación entre los individuos aparece como algo natural (no voluntaria). Como algo al margen de los trabajadores que no saben de donde procede pero que dirige la voluntad de estos individuos. Cuando pá ágina 19 esta enajenación resulta insoportable, algo que es necesario enfrentarlo, es necesario que haya una gran masa social de “absolutamente desposeídos” y en contraposición un gran mundo de riquezas y de cultura. Lo que presupone un gran desarrollo de las fuerzas productivas. Este fenómeno debe trascender lo local y transformarse en universal. Los cambios sociales de un orden se dan a través de cambios revolucionarios. Las revoluciones son las consecuencias de la contradicción entre las fuerzas productivas y las relaciones sociales de producción vigentes, se dan cuando son un obstáculo para el desarrollo de las fuerzas productivas. El comunismo no es un estado ideal que deba sujetarse la realidad, sino que es un movimiento real que anula y supera al estado actual de las cosas. Las condiciones de este movimiento son el resultado de las premisas previamente existentes. De esta manera, Marx y Engels sientan las bases de la concepción materialista de la historia, de los grupos antagónicos, de la lucha de clases y de la transformación social. Para luego profundizar en el próximo eje en que consiste la explotación capitalista y la necesitad histórica de superación de este orden dominante. “El Capital” Capítulo 1 Al referirnos a Marx, hay por lo menos, dos ideas bases que tenemos que tener presentes. La primera es que Marx entiende que el capital no es una cosa, sino una relación, una relación social. De esta manera construye su teoría social comprendiendo la sociedad en su conjunto como la suma de las relaciones y las condiciones en las que los individuos se encuentran recíprocamente situados. En especial se refiere a la relación entre el Capital y el Trabajo. La segunda idea que debemos considerar es que se trata de relaciones sociales históricas y no eternas. Esto lo muestra en su análisis sobre la división social del trabajo y los tipos de propiedad en el primer capítulo de “La Ideología alemana”. Por lo tanto le va a permitir sostener que el capitalismo, también es transitorio, y sus ideas del cambio social. La dinámica de las sociedades está determinada por la lucha de clases. Estas son ideas que debemos tener presente para comprender el entramado de su teoría. Ahora podemos hablar específicamente sobre la teoría del valor. pá ágina 20 En el capítulo 1 de “El Capital” Karl Marx intenta dilucidar cómo se produce la ganancia en el modo de producción capitalista y en el desarrollo de esta investigación conforma la Teoría del Valor. ¿Cómo surge la ganancia del capitalismo? ¿Cómo es que unos pocos tienen tanto y la mayoría de los trabajadores no tienen nada? ¿Cuál es el secreto de la sociedad capitalista, si todos dicen vender sus productos al precio justo? Estas son algunas de las preguntas que Marx trata de develar en este capítulo. En realidad estamos refiriendo a uno de los conceptos principales que es la PLUSVALÍA. Pero veamos en que teorías anteriores se apoya el intelectual alemán para desarrollar sus ideas. La teoría de Karl Marx va a estar influenciada, en economía, por la escuela clásica británica y fundamentalmente el pensamiento de Adam Smith y David Ricardo. En lo filosófico, como ya vimos en “La Ideología alemana” por todo el pensamiento alemán pero, en especial por Hegel. En lo social por todo lo desarrollado por el socialismo utópico, en especial, Fourier, Saint-Simón. La escuela de la economía clásica de Smith, Ricardo, aparece como un quiebre con la escuela económica anterior, “los fisiócratas”. Ahora bien, ¿Cuáles eran las diferencias centrales entre ambos sobre la cuestión del origen de la ganancia? Este es el tema que le interesa a Marx. Para los fisiócratas del siglo XVI, la ganancia surgía de la renta de la tierra. La tierra brindaba todos los productos que luego el hombre iba a transformar. Los clásicos, que se ubicaban históricamente en el período post-revolución industrial, van a decir, en cambio que la ganancia surge a través del trabajo humano, de esta manera el desarrollo es ilimitado. Todo lo que la naturaleza nos ofrece puede ser transformado por la mano del hombre. Esta última teoría se impone por sobre la de los fisiócratas. Y este es el punto donde Karl Marx retoma a los clásicos de la economía pero se diferencia de ellos. Según Marx ese valor producido por el trabajador es expropiado por el capital. Pero veamos más específicamente como desarrolla sus ideas Marx, nos dice: El capitalismo es un modo de producción de mercancías, es más se ha dado la generalización de las mercancías, todo o casi todo se puede comprar o vender en el mercado. ¿Qué es una mercancía? Son todos los productos del trabajo humano que fueron producidos con la intención de ser intercambiados en el mercado. Simplificando, va desde una silla, un pizarrón, una computadora, una idea, hasta la fuerza de trabajo es tomada como una mercancía más. pá ágina 21 Una mercancía tiene 2 valores, valor de uso y valor de cambio. Valor de uso Mercancía Valor de cambio Todos los productos del trabajo humano satisfacen una necesidad material o espiritual, pero no todos los productos son mercancías, sólo aquellos que fueron creados con el objetivo de ser intercambiados, siempre una mercancía tiene este doble carácter. El valor de uso se expresa en la utilidad del producto. Implica una relación cualitativa. Es decir, nos indica para qué sirve un producto. El valor de cambio se determina por algo que es común a todos los productos y es el trabajo humano incorporado. Se expresa como relación cuantitativa. Que cantidad de un producto se necesita para intercambiar con otro. En este sentido, como lo que importa es el valor de cambio (para que se venda un producto) es necesario hacer abstracción del valor de uso. Es decir, debemos olvidarnos para que sirve es producto, ya que no es importante considerar esto a la hora de establecer el valor de cambio. Pero si se hace abstracción del valor de uso, también se hace abstracción del trabajo que tiene incorporado. Se reduce la fuerza de trabajo y la utilidad del producto al valor de cambio. El valor de cambio se establece por el trabajo necesario que se mide en tiempo. Tiempo de trabajo socialmente necesario, para producir una mercancía en tiempos y condiciones “normales” para una época. Entonces: Trabajo Útil BASE DEL VALOR DE USO Trabajo abstracto BASE DEL VALOR DE CAMBIO (medido por tiempo de trabajo --- horas, semanas, mes) El valor de uso y valor son dos ASPECTOS DE LA MERCANCIA QUE EXPRESA EL CARÁCTER DUAL DE TRABAJO. pá ágina 22 El trabajo es útil porque transforma materias primas y las convierte en cosas útiles. Por ejemplo, como el trabajo del carpintero que convierte la madera en muebles necesarios para la comodidad en una vivienda. El trabajo abstracto es el gasto de trabajo humano indiferenciado y hace que las mercancías sean comparables entre sí. El trabajo abstracto puede ser simple, es decir no requiere ninguna destreza o conocimiento especial o complejo que requiere un aprendizaje o práctica especial. Una cantidad de trabajo complejo equivale a una cantidad de trabajo simple mayor. Trabajo abstracto es una categoría histórica que se aplica a la producción de mercancías en el capital. Pero volviendo a la pregunta: ¿De dónde surge la ganancia capitalista? ¿Cuánto vale la fuerza de trabajo? Mercancía Fuerza de trabajo Valor de uso: trabajo Valor de cambio: Fuerza de trabajo Decíamos antes: En el modo de producción capitalista, la fuerza de trabajo es una mercancía más, pero es la mercancía que crea al resto de las mercancías (la única que puede ejercer esa actividad creadora). Pero otra vez, ¿cómo surge la ganancia? Y para esto hay un proceso estructural que la determina. Este proceso es la sutil diferencia entre el concepto de trabajo y el concepto de fuerza de trabajo. La fuerza de trabajo es una mercancía como cualquier otra y que tiene un valor, como cualquier otra mercancía. Ese valor es la inversión que se necesita para producir esa energía. Entonces ¿qué se necesita para producir la fuerza de trabajo? Lo necesario para la alimentación de la familia de un trabajador. Necesidades básicas para que el trabajador vuelva al otro día en las mismas condiciones, para que se reproduzca siempre como trabajador (nunca como capitalista). Por ejemplo, el impuesto a la ganancia en los salarios limita la capacidad de ahorro de los trabajadores. Entonces, el trabajador precisa con su salario satisfacer sus necesidades de alimentación, tener abrigo, una casa, un remedio si se siente mal, etc. Esto varía históricamente. pá ágina 23 Entonces Plusvalía es el trabajo excedente que realiza el trabajador y es expropiado por el capital. El trabajador no se queda con todo lo que produce. Vimos que el valor de la fuerza de trabajo es el salario, pero el trabajador produce mucho más. Debemos aclarar que hay dos momentos de la plusvalía que corresponden a dos momentos históricos del capitalismo. La plusvalía absoluta basada en la prolongación del la jornada laboral. Es decir, si un trabajador trabaja 10hs diarias, 5hs son para garantizar la reproducción de sus necesidades, las otras 5hs son apropiadas por el capital dueño de los medios de producción. Por lo tanto, para incrementar la plusvalía, el capitalista va a precisar que el trabajador trabaje mucho más horas. La plusvalía relativa, refiere al desarrollo de las fuerzas productivas y se acortan los tiempos de producción, produce más en menos tiempo. El uso de maquinarias y tecnología en el lugar de producción implica un aumento de la productividad del trabajador. El trabajador produce más en menos tiempo. Entonces no es necesario que trabaje tantas horas, lo que importa acá es que se intensificó el trabajo y aumentó la productividad. Pero debemos aclarar que la explotación dada por la extracción de plusvalía es un proceso social. Esto no es fácilmente visible. La existencia de la plusvalía le permite a Marx fundamentar la existencia de las dos clases sociales. Los burgueses quieren que se reproduzcan las relaciones sociales de producción y los proletarios buscan que se eliminen. Al eliminar las relaciones sociales de producción lo que aparecería es la sociedad sin clases. Esto hace que estas clases estén permanentemente enfrentadas. Carácter fetichista de la Mercancía y su secreto: A primera vista, dice Marx es una cosa trivial, pero analizándola vemos su carácter endemoniado. En cuanto a su valor de uso, no hay secreto, es producto del trabajo humano y satisface una necesidad. Su carácter enigmático, deriva de que se igualan el gasto de fuerza de trabajo por su duración cobrando la forma valor los productos del trabajo; la relación social entre productores y el trabajo colectivo de una sociedad es opacada por la relación entre objetos. La mercancía nos deslumbra ocultando las relaciones de producción dadas como relaciones de explotación de un grupo sobre otro. Los productores producen en privado, es decir en su lugar de trabajo, y ahí son expropiados de sus productos, recibiendo a cambio un salario. Una vez en el mercado las mercancías, productos pá ágina 24 4 del trabajo humano, se le aparecen a los verdaderos productores como cosas. El productor se convierte entonces en un atributo del objeto producido, y el objeto se vuelve sujeto, por lo tanto es quien entabla relaciones “sociales” con otros objetos, al intercambiarse en el mercado. El fetichismo transforma “lo cualitativo” en “cuantitativo” ocultando así la explotación de los trabajadores. pá ágina 25 La contribución de Max Weber En el presente texto trabajaremos “La política como vocación” y algunas ideas desarrollada por A. Giddens en “El capitalismo y moderna teoría social” que refieren a las ideas del capitalismo racional analizadas por Max Weber. La política como vocación forma parte de un ciclo de conferencias dadas por Max Weber en Munich en el año 1919 a sus alumnos universitarios. La importancia de esta conferencia en la obra del pensador alemán remite a que allí trata de manera sucinta y clara, conceptos como racionalización, poder, dominación, estado, burocracia, carisma, etc. Weber parte de un interrogante: ¿Qué es la política? Si bien el concepto es muy amplio, al autor le va a interesar la política que refiere al estado. Es decir, la política es la dirección o la influencia sobre la dirección o trayectoria de una asociación política, en este caso refiere al estado moderno. Pero desde la sociología ¿qué es una asociación política? ¿Qué se entiende por Estado? Weber nos dirá hay una característica que define y diferencia al Estado de cualquier otra asociación política (por ejemplo un partido político); esa característica es la violencia física, éste es su medio específico. En este sentido define, al estado como aquella comunidad humana que dentro de un territorio determinado reclama para sí el ejercicio del monopolio de la violencia física legítima. El estado es la única fuente de derecho a la violencia. Las demás asociaciones políticas podrán ejercer el derecho a la violencia en la medida que el estado se los permita. Entonces se entenderá por política la aspiración a participar en el poder o a influir en la distribución del poder entre los distintos Estados o, dentro de un mismo Estado, entre los distintos grupos de hombres que lo componen. Quién hace política aspira al poder, persiguiendo fines idealistas o egoístas. El estado es una relación de dominación de hombres sobre hombres sostenida por la violencia legítima. En este sentido, buscará que los dominados acaten la autoridad. Pero ¿qué es la dominación legítima para Weber? La dominación legítima se basa en la creencia de los dominados en la validez del orden estatuido. Weber no profundiza demasiado en saber cuales pá ágina 26 son los motivos que impulsan a los individuos a aceptar un orden dominante; es suficiente con su manifestación exterior. Si bien, siguiendo su pensamiento son motivos individuales, el autor no indaga sobre las cuestiones psicológicos que hace que los hombres acepten la dominación. Además nos dice, un orden es efectivo no solo porque se cumplen las leyes sino por la continuidad de este orden en el tiempo. Para comprender mejor los tipos ideales de dominación que analiza Weber, debemos comprender previamente tres ideas que están vinculadas, ellas son: las idea de poder, dominación y disciplina, entendidas como probabilidad. Y luego definimos los tipos ideales. • Poder: Es la probabilidad de imponer una voluntad en una relación social independientemente que exista resistencia por parte de los otros miembros de la relación. En este caso el poder no es legítimo, es decir es resistido. • Dominación: Es la probabilidad de que un mandato sea obedecido por los miembros de una relación. En este caso se comprende los tres tipos de dominación que analizaré en el siguiente punto. • Disciplina: Es la probabilidad de encontrar obediencia a un mandato de manera rápida y automática basado en actitudes arraigadas. La prescindencia valorativa, el tipo ideal y la idea de racionalidad: Uno de los puntos relevantes para analizar la importancia del aporte de Max Weber y para comprender mejor los puntos anteriores, reside en su interés por “descubrir” la metodología adecuada que permita sostener que las Ciencias Sociales son verdaderas Ciencias. Weber entiende que las Ciencias Sociales hasta el momento, estaban altamente influenciadas por la ideología. En este sentido, su preocupación metodológica va a ser la de construir una metodología que prescinda de los valores. Por ejemplo, si se estudia un tipo de política, no importa si es “buena o mala”, lo que importa es comprenderla para explicarla; la valoración pertenece al ámbito de la política, la comprensión, en cambio, pertenece al ámbito de la ciencia. En este sentido, el pensamiento weberiano apunta simplemente a comprender la realidad, a diferencia de Marx cuyo objetivo era transformarla. Pero ¿que entiende por la realidad Weber? Para este pá ágina 27 autor, la realidad es una suma compleja de acciones y relaciones inabarcables e imposibles de comprender para un científico. En este sentido va a construir herramientas metodologías que le permitan ordenar el conocimiento de la realidad. Weber aborda el análisis de la realidad a partir de la construcción de “tipos ideales”. Los tipos ideales son herramientas metodológicas que le sirven para la formación de conceptos históricos, específicos y rigurosos; que le permiten el análisis y comprensión causal de los fenómenos históricos. El pensador alemán acentúa un aspecto de la realidad, lo racional, que permite tener una mirada unívoca y coherente, pero que no tiene intención de representar la realidad como es. Es decir, los tipos ideales no son ni verdaderos ni falsos, sino que son un medio útil para comprender la realidad de la manera más racional. Antes de continuar con el análisis de los tipos ideales, nos preguntamos, ¿qué es la racionalidad para este autor? La idea de racionalidad en Weber aparece permanentemente en sus escritos, sin embargo, no encontramos una definición concreta. La racionalidad se vincula con un tipo de acción que ejercen los individuos en el capitalismo y consiste en aumentar al máximo las ganancias y disminuir al mínimo las pérdidas. Este tipo de acción emprendida por los individuos no es por una sola vez sino por el contrario, un tipo de conducta continua. La racionalidad individual forma la base de un tipo de racionalidad social. La acumulación de ganancias individuales termina siendo autónoma de los individuos y se prolonga en el tiempo. Esta sería una de las explicaciones de la formación del capitalismo moderno. Aunque también hay que aclarar que para este autor siempre existió capitalismo, entendido básicamente como el intercambio comercial. Antiguamente existía un capitalismo aventurero, donde la conducta frecuente era gastar toda la ganancia e ir por nuevas conquistas, es decir se trataba de acciones irracionales. Pero en determinado momento de la historia se da un cambio en la acciones de los individuos. Este cambio en la forma de actuar se debe en parte a la influencia del pensamiento protestante. Es así que en los países donde predomina la religión protestante se desarrollará ampliamente el capitalismo moderno. Sucintamente, el pensamiento protestante sostiene que los bienes son de Dios, y en este sentido no hay derecho a malgastarlos. Estas ideas junto con la aplicación del cálculo racional y la generalización de las normas de la contabilidad en las distintas actividades serían la explicación del surgimiento del capitalismo racional. Por último, quien va a asumir esa racionalidad va a ser el Estado moderno, cuya definición dimos pá ágina 28 al comienzo del presente texto. Una vez aclarado estos puntos podemos continuar con los tipos ideales como formas de dominación legítima que establece el estado. Ellos son: a) El tipo ideal tradicional: Los hombres creen en la santidad de las costumbres, como la que ejercían los patriarcas y los príncipes. b) El tipo ideal carismático: En este caso se cree en las cualidades personales de un individuo, como por ejemplo el heroísmo, la valentía, etc. c) El tipo ideal racional legal: La creencia es en la validez de los preceptos legales. Se cree en la ley y en la competencia objetiva fundada en normas racionalmente creadas. Es el caso del moderno estado. Es claro que nunca se da de manera pura estos tipos de dominación. Nos dice, es verdad que la obediencia de los súbditos a un mandato se apoya en el miedo al castigo o a la esperanza de que es la mejor forma de dominación. Si bien de acuerdo a su pensamiento el tipo ideal racional legal es la forma más adecuada para la dominación moderna, Weber va a poner atención en el tipo de dominación carismática, ya que en su expresión más alta arraiga la idea de vocación. El guerrero o el demagogo del parlamento es el hombre llamado a ser conductor de hombres. Se cree en él, en su persona, en sus cualidades. En Occidente se da frecuentemente el caudillo político. Esta figura del líder carismático va a ocupar un lugar esencial en la política en momentos de crisis de legitimidad del tipo racional legal. Pero estos políticos por vocación no son las únicas figuras determinantes en la empresa política de la lucha por el poder. Es interesante visualizar como el teórico de la racionalidad apela a la irracionalidad en determinados momentos para preservar el orden legítimo. Weber continuará diciendo toda empresa de dominación que requiera una dominación continuada necesita por un lado, la obediencia de los súbditos a aquellos señores que se pretenden portadores del poder legítimo; por otro lado, necesita que los portadores de poder legítimo dispongan de los bienes necesarios para el empleo del poder físico, ya sea tanto el personal administrativo como los medios materiales de la administración. pá ágina 29 Para mantener la dominación se necesita de materiales externos. En este sentido las organizaciones estatales se pueden clasificar en dos grandes categorías. En una el titular del poder legítimo junto con sus funcionarios poseen en propiedad, los medios de administración (dinero, edificios, material bélico, caballos u otro medio de transporte, etc.). A esta forma se la denomina asociación estamentalmente estructurada. En la otra forma, el cuadro administrativo está separado de los medios de administración, de la misma manera que se separó en la empresa capitalista al productor de los medios de producción. Por ejemplo, los funcionarios públicos no son dueños de las computadoras que usan, del los autos, de las armas, etc. Precisamente, el desarrollo del estado moderno comienza cuando el príncipe inicia la expropiación de los titulares privados de poder administrativo que junto a él existen. Los expropia de los bienes de administración que antes mencionamos. Al término de este proceso, el estado moderno tiene a su disposición los medios de la empresa política acumulados en la cúspide. Ni un solo funcionario es propietario del dinero, de los edificios, de las armas, etc. Entonces, el estado moderno se forma cuando se separa históricamente al máximo el cuadro administrativo de los medios materiales de administración. Como dijimos anteriormente, Weber define al estado moderno como una asociación de dominación institucional que monopoliza dentro de un territorio la violencia física legítima como medio de dominación y con este fin reúne todos los medios materiales de administración en manos de sus dirigentes y ha expropiado a todos los funcionarios estamentales sustituyéndolos con sus propias jerarquías supremas (burocracia estatal). En este sentido el estado moderno establece el orden legítimo en donde funcionará el mercado libre. El papel del estado es demarcar las medidas necesarias para el funcionamiento del mercado. Por ejemplo, establecer el sistema de cambio, determinar lo que es lícito o no dentro de las actividades comerciales, determinar condenas por falsificación de moneda, etc. El funcionamiento del mercado, como vimos, se da dentro de los parámetros de la búsqueda racional de la ganancia por parte de los individuos. El orden de normas legítimas que establece el estado permite que todos los individuos acudan al mercado a fin de obtener ganancias bajo las mismas reglas. Resumiendo, el estado moderno y su orden legítimo establecen normas de funcionamiento para pá ágina 30 el desarrollo de las acciones individuales racionales en búsqueda de ganancias e influenciadas por el protestantismo, que en conjunto conllevan a la expansión de un tipo de capitalismo racional. pá ágina 31 Bibliografía Obligatoria 1. Período de Revoluciones • HOBSBAWN, Eric. “La era de la revolución”. 1789-1848. Buenos Aires, Editorial Crítica, 1997. Caps. 1 y 2. 2. Contractualismo • BOBBIO, Norberto y BOVERO, Michelangelo. “Sociedad y Estado en la Filosofía Moderna. El modelo iusnaturalista y el modelo hegeliano-marxiano”. Fondo de Cultura Económica, México, 1986. Capítulos: III El modelo Hobbesiano (pags. 47-55), V El Estado de naturaleza (pags. 69-86), VI El Contrato Social (pags. 87-107) y VII La Sociedad Civil (pags.108-122). Disponible en: http://www.scribd.com/doc/48191609/sociedad-yestado-en-la-filosofia-moderna-PDF 3. Positivismo • PORTANTIERO, J.Carlos (ed.) (1977). ”La sociología clásica: Durkheim y Weber”; CEAL, Buenos Aires, 1988. • BORDIGIONI, Roberto; MALLO, Lilia; POLITI, Monica. “Curso de Sociología; Psyc Pastorino Steirensis y Cabrera”, Buenos Aires, 2001. Capítulo III: Teorías Enciclopedicas (1820/30-1870). 4. Emile Durkheim • GIDDENS, Anthony. “El capitalismo y la moderna teoría social”. Labor, Barcelona, 1994. Segunda parte: Durkheim. Caps: V, VI y VII. 5. El aporte de Karl Marx • MARX, Karl. “La ideología Alemana”. Buenos Aires. Ediciones Pueblos Unidos/ Cartago, 1985. Cap. 1. • MARX, Karl. “El Capital”. México D.F., Siglo XXI, 1987/89. Capítulo I (Tomo I del vol.). • GIDDENS, Anthony. “El capitalismo y la moderna teoría social”. Labor, Barcelona, 1994. Cap. 4. 6. La contribución de Max Weber • WEBER, Max. “El político y el científico”. 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(1977): “La sociología clásica: Durkheim y Weber”; CEAL, Buenos Aires, 1988. 5. El aporte de Karl Marx • ZEITLIN, Irving. “Ideología y teoría sociológica”. Buenos Aires, Amorrortu, 1970. Cap. 8, 9 y 10. • MARX, Karl. “El 18 Brumario de Luis Bonaparte”. Buenos Aires. Editorial Polémica, 1975. Caps. I y VII. • GURVITCH, Georges. “El concepto de clases sociales”. Nueva Visión, Buenos Aires, 1967. 2ª Conferencia. • THOMPSON, E. P. “La formación de la clase obrera en Inglaterra”. Barcelona. Editorial Crítica, 1989. Prefacio. 6. La contribución de Max Weber • WEBER, M.. “La ética protestante y el espíritu del capitalismo”. • PORTANTIERO, J.Carlos (ed.) (1977): “La sociología clásica: Durkheim y Weber”; CEAL, Buenos Aires, 1988. pá ágina 33