Principales Disposiciones del Nuevo Proceso. La transición de un sistema penal inquisitorial a un proceso penal acusatorio y oral, regido por los principios de publicidad, contradicción, concentración, continuidad e inmediación. El establecimiento del principio de presunción de inocencia de toda persona imputada, mientras no se declare su responsabilidad mediante sentencia emitida por el juez de la causa. El reconocimiento del derecho a toda persona imputada de declarar o guardar silencio, quedando prohibida toda incomunicación, intimidación o tortura. La anulación del valor probatorio de toda confesión rendida sin la asistencia de un defensor, así como de cualquier prueba obtenida con violación de los derechos fundamentales. El establecimiento de un plazo razonable para juzgar, de cuatro meses en caso de delitos cuya pena no exceda de dos años y de un año si la pena excede dicho plazo. La institución del derecho del imputado a una defensa adecuada por el abogado que elija libremente o por el defensor público que, en su caso, designe el juez, reconociéndose el derecho irrenunciable a la defensa, así como la obligación del Estado de proporcionarla. El reconocimiento del derecho del imputado a ser juzgado en audiencia pública; El establecimiento de límites a la prisión preventiva (arraigo), la cual sólo podrá ser decretada cuando otras medidas cautelares no sean suficientes para garantizar la comparecencia del imputado a juicio, el desarrollo de la investigación, la protección de la víctima, los testigos y la comunidad; así como cuando el imputado esté siendo procesado o haya sido sentenciado previamente por un delito doloso. El juez ordenará de oficio la prisión preventiva en los casos de delincuencia organizada, homicidio doloso, secuestro, entre otros delitos graves; La creación de la figura del juez de control, que resolverá de manera inmediata y por el medio más rápido las solicitudes que haga el Ministerio Público sobre medidas cautelares o precautorias y técnicas de investigación, respetando siempre las garantías de las partes. También verificarán que la actuación de la parte acusadora esté apegada a derecho. Asimismo, siempre deberá existir un registro 1 fehaciente de todas las comunicaciones que existan entre jueces y ministerio público. La definición del concepto de flagrancia y el establecimiento de la obligación de la autoridad de realizar un registro inmediato de las detenciones. La obligación de que las órdenes de cateo sean solicitadas por el Ministerio Público a la autoridad judicial. La regulación de las comunicaciones privadas, normando las grabaciones entre particulares como medio de prueba. La incorporación de mecanismos alternativos de solución de controversias, incluyendo en materia penal. Se garantiza la reparación del daño en materia penal. La transformación del sistema de reinserción social, indicando que el sistema penitenciario se organizará sobre las bases del trabajo, la capacitación para el mismo, la educación, la salud y el deporte. El establecimiento del principio de la proporcionalidad de la pena al delito que sanciona y al bien jurídico afectado. Por la envergadura de los cambios requeridos, se estableció un plazo de ocho años para la implementación de esta reforma. Es importante destacar que esta reforma es el eje de la lucha contra la impunidad en México. Este nuevo sistema de justicia penal ha permitido la creación de nuevos y mejores instrumentos para fortalecer la investigación ministerial y policial en el combate a la delincuencia organizada, en concordancia con la normatividad internacional. Busca cambiar fundamentalmente los procedimientos de investigación del Ministerio Público, el papel de la policía en ésta y la forma en que se desarrolla en los tribunales el procedimiento penal. Desde el punto de vista social, la reforma se traduce en un beneficio social para quienes son víctimas de la conducta delictiva, pues al tener una intervención directa en el proceso, realmente se generan condiciones de igualdad entre las partes. 2 Se crea la figura del tribunal de juicio oral, encargado de dirigir el debate, vigilar la legalidad de las actuaciones de las partes y la forma en que se introduce la prueba en el juicio y dicta sentencia, en apego a los principios, de oralidad, inmediación, concentración, continuidad y publicidad. No tiene intervención alguna en las etapas previas a la audiencia de juicio oral. Existencia del Juez de Ejecución de Penas con facultades para conocer de las medidas de seguridad impuestas; fijar, modificar, extinguir y/o vigilar las sanciones impuestas por los jueces de control o de juicio oral, así como, la vigilancia de los centros de internamiento penitenciarios. 3