PRoeURAelON GRAL TESORO el TRIBUNAL ARBITRAL S.C. Comp. N° 624; L. XLVIII Suprema Corte: - ILa Sala II de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo Federal y la Sala A de la Cámara Nacional de Apelaciones en 10 Comercial discrepan en tomo a la competencia para entender en la presente causa, promovida por el Estado Nacional con el objeto de que se declare la nulidad de la decisión de la Corte Internacional de Arbitraj e de la Cámara de Comercio Internacional que resolvió la procedencia de su propia jurisdicción en el caso "Arbitraje CCI N° l2634/KGAlCCAlJRF Papel del Tucumán S.A. (en quiebra) (Argentina) c. Estado Nacional (República Argentina) (Argentina)" (fs. 92/93, 109/120 Y 212/217). -IILos magistrados de la Sala II de la Cámara Nacional de Apelaciones en 10 Contencioso Administrativo Federal, consideraron que el recurso de nulidad había sido incorrectamente presentado, desde que no se dirigía contra el laudo arbitral, sino contra una decisión de trámite, insusceptible de ser cuestionada mediante el recurso directo previsto en el articulo 763 C.P.C.C.N. (fs. 92/93). En tales condiciones, y no obstante declararse incompetente para conocer en el recurso de nulidad, el tribunal dispuso la remisión de las actuaciones a un magistrado del fuero, para que, en el marco del proceso de conocimiento que éste estime pertinente, les de trámite de conformidad con 10 dispuesto por el articulo 319 del código de rito. 1 En virtud de ello, el expediente fue asignado al Juzgado de Primera Instancia en lo Contencioso Administrativo Federal N° 4, Secretaría N° 7 (fs. 104). -liPor su parte, los jueces de la Sala A de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Comercial, ante la inhibitoria deducida por Papel Tucumán S.A. (en quiebra), sostuvieron su competencia para entender en los planteo s presentados por el Estado Nacional en el sub lite. En este sentido, afirmaron que las cuestiones a resolver en el arbitraje versan sobre hechos cuya materia se encuentra sujeta a la jurisdicción del juez de la quiebra de Papel del Tucumán -Juz. Nac. de Primo Instancia en lo Comercial N" 24, Seé. N° 47-. Al respecto, resaltaron que el juez a cargo del proceso uuiversal fue quien había autorizado el sometimiento a arbitraj e de los temas vinculados con procesos atraídos por la quiebra que se encuentran suspendidos a resultas de lo que se resuelva en dicho arbitraje. Los magistrados comerciales señalaron además, que tampoco resultaba óbice el reclamo del fuero federal ya que en la Capital Federal, los juzgados nacionales revisten, asimismo, naturaleza federal. Concluyeron que siendo la Cámara Comercial competente en razón de la materia y tratándose de árbitros de derecho, cuyo proceso se rige por las normas del proceso ordinario, la resolución sobre su jurisdicción, era asimilable a una decisión interlocutoria, recurrible por via de apelación. Invocaron los artículos 751, 752 y 763 del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación. 2 PRoeURAelON GRAL TESORO el TRIBUNAL ARBITRAL S.C. Comp. N° 624; L. XLVIll - IV- En atención a 10 resuelto por la Sala A de la Cámara Nacional de Apelaciones en 10 Comercial, el señor juez a cargo del Juzgado de Primera Instancia en 10 Contencioso Administrativo Federal N° 4, Secretaría N° 7, remitió las presentes actuaciones a ese tribunal a los efectos de su tramitación (fs. 123). Apelada esta última decisión por el Estado Nacional, la Sala II de la Cámara Nacional de Apelaciones en 10 Contencioso Administrativo Federal, en cuanto aquí resulta pertinente, revocó la providencia de fojas 123 mencionada y, en consecuencia, rechazó la inhibición requerida por el tribunal en 10 comercial. Para así decidir, los magistrados sostuvieron que no existe conexidad alguna entre el juício universal de Papel del Tucumán S.A. y la materia de la presente causa, en la que se debate la existencia o inexistencia de voluntad formal y legítimamente emitida por parte del Estado Nacional para someter diversas disputas -que tramitan por aplicación del fuero de atracción de la quíebra de Papel del Tucumán S.A. ante el fuero comercial según reconocieron a fs. 214 vta.-, a un procedimiento arbitral. Aclararon en relación con ello, que en el sub lite se debe analizar y decidir si el Estado Nacional emitió los actos necesarios -formal y legalmente exigibles- para la procedencia de la jurisdicción arbitral en diversas disputas, 10 cnal dicen- remite al estudio del derecho administrativo, sin que se encuentren en debate las cuestiones de fondo sometidas a arbitraje. - V- Se planteó así un conflicto positivo de competencia que corresponde dirimir a V.E. en los términos del artículo 24, inciso 7° del Decreto Ley N° 1285/58, texto según Ley N° 21.708 (art. 2°). 3 - VIComo tiene reiteradamente dicho el Máximo Tribunal, para la determinación de la competencia corresponde atender de modo principal a la exposición de los hechos que el actor hace en la demanda y, en la medida que se .adecue a ellos, al derecho que invoca como fundamento de la pretensión (v. doctrina de Fallos 329:2796; 330:628). En el sub lite el Estado Nacional promovió una acción de nulidad contra la decisión del Tribunal Arbitral adoptada en el marco de la causa "Arbitraje CCI N" 12634/KGAlCCAIlRF Papel del Tucumán S.A. (en quiebra) (Argentina) c. Estado Nacional (República Argentina) (Argentina)" mediante la cual había sostenido su propia competencia. En su escrito de inicio, el actor resaltó que dada la trascendencia y magnitud de las controversias judiciales y administrativas entre el Estado Nacional y Papel del Tucumán S.A., en las que se planteaban reclamos recíprocos, se evaluó la posibilidad de someter dichas cuestiones a arbitraje. En ese contexto, manifestó, fueron dictados los Decretos N° 835/95 (B.O. 5/12/95) Y 1021196 (B.O. 9/9/96) en los que, en cuanto resulta pertinente, se encomendó al Ministerio de Justicia la preparación de un compromiso arbitral tendiente a la solución de los conflictos antes señalados. El accionante relató que luego fue dictada la Resolución Ministerio de Justicia N° 80/97 de fecha 1 de agosto de 1997 (fs. 290/292, expte. 111.195270-1195 que corre agregado) que, en lo que aqui interesa, difirió la confección del compromiso arbitral hasta tanto los tribunales de la quiebra de Papel del Tucumán S.A. autorizaran a someter la cuestión a arbitraje. La jueza de la quiebra, el 9 de agosto de 1999, de conformidad con el testimouio agregado a fs. 480/482 del expte. 111.195270-1/95 y tal como señala tanto el actor -y es reconocido por los magistrados de ambas Cámaras en conflicto, fs. 115/116 Y 214 vta.-, resolvió: "aprobar el proyecto de compromiso arbitral ... , concediéndose la autorización requerida a las autoridades de Papel de Tucumán S.A ... . 4 PRoeURAelON GRAL TESORO el TRIBUNAL ARBITRAL S.C. Comp. N" 624; L. XLVIII para someter a arbitraje las cuestiones allí indicadas y en consecuencia suscribir dicho acuerdo". Ahora bien, el Estado Nacional alega que, sm mediar acto administrativo o acta compromisoria que expresara su voluntad, ellO de octubre de 2002, Papel del Tucumán S.A. presentó un requerimiento de arbitraje ante la Corte Internacional de Arbitraje de la Cámara de Comercio Internacional, que resolvió a favor de su jurisdicción. En tales condiciones, y más allá de los aspectos de fondo debatidos en las causas judiciales entre el Estado Nacional y Papel del Tucumán S.A., que fueran presentadas ante el Tribunal Arbitral, estimo que el presente juicio debe tramitar ante la Justicia en lo Contencioso Administrativo Federal, atendiendo especialmente que la cuestión aqui planteada encuentra su limite en el estudio· de normas y principios del derecho administrativo. No obsta a la decisión propuesta, a mi modo de ver, la sentencia del magistrado a cargo de la quiebra de Papel del Tucumán S.A., de fecha 9 de agosto de 1999 antes mencionada, desde que esa decisión importó sólo conceder autorización a la fallida para someterse a arbitraje (conf. arts. 134 Y 182, Ley N° 24.522). Ello aventa el peligro de sentencias contradictorias. El particular marco en el que fue planteada la demanda, en el que el Estado Nacional alega la inexistencia de compromiso arbitral, sin que sea objeto de pretensión la impugnación del laudo arbitral susceptible de recurso judicial (conf. arto 760, C.P.C.C.N.) sino la decisión sobre la propia competencia del Tribunal de Arbitraje, permite concluir que deviene inaplicable al caso lo dispuesto por el articulo 763 del código de rito. Esta norma atribuye competencia al tribunal jerárquicamente superior al juez que debiera conocer en la cuestión, por la materia y el territorio, si la causa no hubiera sido sometida a arbitraj e. 5 De tal fonna, no parece irrazonable, valorando el régimen de control judicial establecido por ley en nuestro país, que la presente causa continúe su trámite por ante un juez de grado del fuero Contencioso Administrativo Federal. -VII- Sobre la base de estas consideraciones, a mi modo de ver, la presente causa debe continuar su trámite ante el Juzgado de Primera Instancia en lo Contencioso Administrativo Federal N° 4. Buenos Aires, ) :; M. ALEJANDR~ ('0."'rlO~J'" ROSELLO ProcuradO¡"4 ~ ;-:;-:< :;-mte la Corte Suprema de la Nación SUBROGANTE ,~ORlANA PrOS" , -__,.;;i"CÍÓII 6