14 REVISIÓN DE TEMA Aproximación al uso de marcapasos en urgencias: revisión, indicaciones, técnica y complicaciones Carlos Fernando Valencia, MD.(1); Sandy Marcela Pinzón, MD.(2); Jorge Andrés Suárez, MD.(3); José Guillermo Ruiz, MD.(4) Resumen El advenimiento en los servicios de urgencias de patologías con indicaciones para la utilización de marcapasos de forma cada vez más preponderante, sumado al aumento de la complejidad de las instituciones de salud, ha llevado al personal médico al conocimiento de este tipo de dispositivos, razón por la cual este artículo pretende realizar una revisión de la literatura para brindar un documento base para el profesional del área de la salud en el conocimiento, las indicaciones, la nomenclatura, la utilización, las contraindicaciones y el implante de marcapasos en el área de urgencias. Palabras clave: arritmias cardiacas, marcapasos, estimulación cardiaca. An approach to the use of pacemakers in emergency medicine; review, indications, technique, and complications Abstract The increasing number of patients with conditions that demand the use of pacemakers, together with the ever-increasing complexity of healthcare institutions, has led medical personnel to require knowledge of these devices. This article reviews the literature in order to offer healthcare professionals a basic document concerning the knowledge, indications, nomenclature, utilization, contraindications, and placement of pacemakers in the emergency area. Keywords: cardiac arrhythmias, pacemakers, cardiac stimulation. Introducción Los primeros hallazgos en la literatura sobre el uso del marcapasos, datan de 1952, fecha en la que Zoll anunció que había revivido a un sujeto víctima de paro cardiaco que sufría de insuficiencia cardiaca, por medio de un marcapaso externo con el cual se pudo controlar en forma continua el latido cardíaco durante 52 horas (1). ► ► ► ► (1) Especialista en Medicina de Urgencias, Pontificia Universidad Javeriana, Hospital Universitario San Ignacio, Clínica Organización para la Excelencia de la Salud, Bogotá, Colombia. (2) Especialista en Medicina de Urgencias, Pontificia Universidad Javeriana, Clínica Colina, Clínica Shaio, Bogotá, Colombia. (3) Especialista en Medicina de Urgencias, Pontificia Universidad Javeriana, Hospital Universitario San Ignacio, Clínica Marly, Bogotá, Colombia. (4) Internista, Intensivista, Profesor programa de Cuidado Intensivo, Pontificia Universidad Javeriana, Hospital San Ignacio, Bogotá, Colombia. Correspondencia: Dr. Carlos Fernando Valencia, fernandovalencia140@gmail.com Citar como: Valencia CF, Pinzón SM, Suárez JA, Ruiz JG. Aproximación al uso de marcapasos en urgencias: revisión, indicaciones, técnica y complicaciones. Perspectiva en Urgencias 2015; 1(1): 14-21. Recibido: 15/01/2015, Aprobado: 23/02/2015. Aproximación al uso de marcapasos en urgencias Tiempo después, en 1958, en Suecia, Senning consiguió implantar un pequeño estimulador eléctrico bajo la piel de un paciente diseñado por Elmquist. Un año más tarde, Chardack consiguió estimular el corazón al insertar un electrodo en el ventrículo derecho por vía transvenosa y estimular el corazón durante varios días, lo que llevó a que entre 1965 y 1967 se implementaran las bases modernas de los marcapasos, que se regían por tres factores principales (2): 1. El desarrollo de un aparato implantable. 2. El empleo de una vía transvenosa. 3. La capacidad del marcapasos para detectar la actividad y responder adecuadamente a dicha señal. Estos avances llevaron finalmente a la optimización del tamaño y la duración de la batería de los marcapasos, con lo que se pasó de aquellos que tenían un promedio de duración de dos días, hasta los de diez años de duración. Hoy en día, la estimulación endocardiaca transvenosa bajo manos expertas y orientación electrocardiográfica, no solo se ha convertido en un procedimiento seguro, con un porcentaje de éxito cercano al 80%, sino también rápido, con promedio de 20 minutos (3). Indicaciones para el uso de marcapasos Uno de los objetivos de la estimulación cardiaca con el uso de marcapasos es conseguir una despolarización cardiaca efectiva, en donde el conocimiento del compromiso hemodinámico sumado a la etiología del ritmo de perturbación y de la integridad del sistema de conducción, forman los componentes básicos para el empleo adecuado de los mismos (4, 5). Las indicaciones para el uso de marcapasos pueden agruparse en dos: taquicardias o bradicardias (6, 7) (tabla 1). Valencia y cols. Estudios clínicos muestran que en el 17% de los infartos agudos del miocardio de cara inferior se documenta bradicardia sinusal, con una tasa de mortalidad cercana al 2% (10); por otra parte, en los casos de asistolia no se ha comprobado que el uso de marcapasos transvenosos haya tenido cambios en la mortalidad y en los desenlaces (11-13). Bloqueos aurículo-ventriculares Constituyen la indicación clásica para la terapia con marcapasos; en infarto agudo del miocardio aproximadamente un 8, 5 y 6%, desarrolla bloqueo AV de primero, segundo y tercer grado, respectivamente, de ahí que se crea que los bloqueos AV son secundarios a la isquemia que se produce en el tabique del tejido de conducción infranodal, y que por tanto algunos autores a menudo utilicen marcapasos profilácticos (14-18). Trauma En este caso la relación se ha establecido con la hipovolemia y la hipotensión que pueden llevar a fenómenos de isquemia del tejido de conducción, lo cual TABLA 1. Indicaciones para marcapasos. Bradicardias Sin infarto agudo del miocardio • Disfunción del nodo sinusal sintomático • Bloqueo AV de segundo o tercer grado • Fibrilación auricular con respuesta ventricular lenta Con infarto agudo del miocardio • Disfunción del nodo sinusal sintomático • Bloqueo AV de segundo o tercer grado • Bloqueo de rama izquierda • Bloqueo de rama derecha con eje izquierdo • Bloqueo bifascicular Profilaxis • Cateterismo cardiaco • Cirugía cardiaca Bradicardias Taquicardias Disfunción del nodo sinusal • Disritmias supraventriculares Esta puede manifestarse en forma de paro sinusal o bradicardia sinusal, por lo que la bradicardia sintomática se convertiría en una indicación común para la inserción urgente de un marcapaso (8, 9). • Disritmias ventriculares Profilaxis • Cateterismo cardiaco • Cirugía cardiaca 15 16 Perspectiva en Urgencias se traduce en bradiarritmias marcadas que persisten a pesar de manejos vigorosos. Vale resaltar que la respuesta ante la estimulación cardiaca en este tipo de pacientes es baja (19). Bloqueo de rama e isquemia Diversos estudios han encontrado una asociación controvertida entre el bloqueo de rama derecha y los bloqueos bifasciculares en infarto agudo del miocardio que han llevado a bloqueos completos con posterior uso de marcapasos (20). Por tanto, en la literatura se pueden encontrar indicaciones de marcapasos profilácticos en casos de infarto agudo del miocardio con bloqueo de rama derecha y bloqueos bifasciculares como lo cita el estudio de Hidman (21, 22). Sin embargo, existen indicaciones un poco más claras y con evidencia médica para los casos de desórdenes de la conducción asociados con infarto agudo del miocardio (23). Taquicardias Desde 1980 se observa un interés creciente en la terapia para los casos de taquicardias, hasta el momento con buena experiencia clínica para las arritmias inducidas por digital en los servicios de urgencias (24). Estudios de mediados de siglo pasado enfocados al desarrollo del marcapasos y con evidencia clínica de casi medio siglo, han llevado a indicaciones de clase I para la utilización de marcapasos (25-27). Contraindicaciones Con base en revisiones sistemáticas de la literatura y en una experiencia clínica cercana a 60 años, se sabe que la presencia de una válvula protésica tricúspide se considera generalmente una contraindicación absoluta para el marcapasos transvenoso, al igual que la fibrilación ventricular generada por hipotermia (28). En los casos de población pediátrica, la supervivencia prevista de menos de seis meses es una contraindicación relativa para la terapia de estimulación permanente para pacientes con enfermedades cardiovasculares (29). Conceptos del marcapasos Para la utilización óptima y eficaz de los distintos tipos de marcapasos, resulta relevante el conocimiento de los parámetros a ajustar en el funcionamiento de estos dispositivos, en donde la amplitud, la sensibilidad, la frecuencia, el intervalo y el seguimiento engloban los pilares de su programación (30): Volumen 1 Número 1, 2015 • Intensidad o amplitud: se define como la intensidad del estímulo eléctrico generado por el marcapasos; el valor se ajusta para que el marcapasos sea capaz de despolarizar el miocardio de forma efectiva, la misma que en el monitor se evidenciará como una espiga seguida de una onda eléctrica. Su valor se programa entre 1 y 20 miliamperios. • Sensibilidad: se denomina sensibilidad al umbral en que el marcapasos reconoce la actividad eléctrica espontánea del corazón, la cual se expresa en milivoltios. Normalmente la sensibilidad se programa a un valor menor de 6 milivoltios; en los marcapasos esta puede apreciarse como una señal luminosa que indica la detección de la actividad eléctrica espontánea del paciente. • Frecuencia: es la repetición de estimulación programada del marcapasos, y constituye el punto de corte en donde, en caso de que la frecuencia caiga por debajo de ese valor, el marcapasos hará su trabajo. • Intervalo aurículo-ventricular: se define como el tiempo en milisegundos entre la estimulación auricular y ventricular. Debe cambiarse según la frecuencia programada en el marcapasos; algunos marcapasos la ajustan automáticamente entre 50 y 300 milisegundos. • Seguimiento auricular: es la capacidad del marcapasos para estimular el ventrículo después de una onda auricular espontánea, una vez transcurrido el intervalo aurículo-ventricular programado. Nomenclatura La Sociedad Americana de Marcapasos y Electrofisiología y el Grupo británico de marcapasos, crearon el código NASPE/BCG para identificar las características de los marcapasos por medio de letras que indican las cualidades de cada uno de estos. Fue publicada por primera vez en 1983 y revisada en febrero de 2012 (tabla 2) (31): • Primera letra: identifica la cámara o cámaras donde es entregado el estímulo, siendo A la aurícula y V ventrículo o D ambas. Aproximación al uso de marcapasos en urgencias Valencia y cols. TABLA 2. NASPE/BPEG: Código de marcapasos. Cámara de estimulación Cámara de detección Repuesta a detección Programación Marcapasos multisitio 0: ninguna 0: ninguna O: ninguna O: ninguna 0: ninguna A: aurícula A: aurícula I: inhibida R: modo frecuencia A: aurícula V: ventrículo V: ventrículo T: provocada V: ventrículo D: dual (A+V) D: dual (A+V) D: dual D: dual (A+V) • Segunda letra: representa dónde sensa el marcapasos, siendo A para auricular y V para ventricular o D dual ambas cámaras u O si no hay sensado. • Transcutáneo. • Tercera letra: define el mecanismo de acción del marcapasos, en donde la respuesta al sensado puede ser inhibición, disparo, dual o ninguna. • Transesofágico. • Intravenoso o endocavitario. • Transtorácico. Marcapasos permanentes O: Asincrónico: el marcapasos actúa independientemente de la actividad eléctrica del paciente. Para este tipo de marcapasos el generador se implanta en área subcutánea (33). I: Inhibido: el marcapasos no estimula si la frecuencia del paciente es superior a la programada. • Transvenosos T: Sensado: el marcapasos es estimulado por la señal detectada. D: inhibido y sensado. • Cuarta letra: hace referencia a la programabilidad de los mismos. R: frecuencia adaptativa. O: ninguna. • Quinta letra: se encuentra en los casos de marcapasos multisitio. O: ninguno. A: aurícula. V: ventrículo. D: dual. Clases de marcapasos Su clasificación está dada de acuerdo con su uso, en temporales o permanentes. Marcapasos temporales El generador no está implantado en el paciente y la clasificación de los mismos está dada por su forma de inserción (32): • Internos Programación del marcapasos • A ritmo fijo: envía estímulos de forma indiferente al ritmo o a la frecuencia del corazón. • Por demanda: es la más empleada en la actualidad. Su acción se da únicamente cuando la frecuencia disminuye a un nivel menor de la frecuencia predeterminada y no compite con el ritmo eléctrico del corazón (34). Modalidades de estimulación • Asincrónico: su utilidad se presenta en condiciones de asistolia o bradicardia extrema en donde el marcapasos estimulará la aurícula (A) o el ventrículo (V) o ambos (dual), a la frecuencia programada independiente de la frecuencia cardíaca del paciente (34). • Sincrónico: el marcapaso estimula el corazón de forma coordinada con la actividad eléctrica del corazón del paciente. Se producirá siempre fuera de la zona de “vulnerabilidad eléctrica del ECG”, después de la onda R hasta la finalización de la onda T. Técnica de inserción La vía de elección es la vena yugular interna derecha o la subclavia izquierda. Se prefiere la vía yugular 17 18 Perspectiva en Urgencias derecha ya que es más directa y forma casi una línea recta entre el sitio de inserción y el ápex del ventrículo. Una vez se tiene el acceso vascular, la vena se canaliza con el introductor a través de la técnica de Seldinger y luego se pasa el electrodo con precaución, cubriéndolo antes con una funda de plástico estéril para poder manipularlo y evitar su contaminación. Paso de marcapaso a ciegas El modo a ciegas es el más usado en urgencias. Para realizar el procedimiento, los electrodos del catéter se conectan directamente al generador de estimulación. El catéter se inserta con el generador de estimulación encendido. Si el paciente tiene pulso, el balón puede inflarse una vez ha pasado a través de la funda y se encuentra aproximadamente en la marca de 20 cm sobre el catéter. Se avanza el catéter 30 a 35 cm o hasta que el monitor muestre picos del marcapasos, que se presentan cuando el catéter entra en el ventrículo derecho y hace contacto con la pared del endocardio; se debe ver una imagen de bloqueo de rama izquierda después de cada espiga del marcapasos. El balón se puede desinflar y el catéter se asegura en su lugar. El generador de marcapasos se programa con la máxima salida y a una frecuencia que exceda 10 a 20 latidos la frecuencia del paciente, hasta evidenciar captura del marcapasos en el monitor, en el pulso del paciente y en la onda de presión arterial invasiva si la hay. En ese momento la salida del marcapaso se reduce lentamente hasta que no capture, usualmente es entre 0,5 y 1,0 mA. Inmediatamente se duplica el valor de la salida y se ajusta la sensibilidad, la cual se recomienda entre 1,5 y 2,5 mV para el paciente con actividad eléctrica (35). Colocación de marcapasos guiado por electrocardiograma La colocación del marcapasos transvenoso guiado por electrocardiograma (EKG) se realiza mediante monitorización de la progresión del catéter por el análisis de las formas electrocardiográficas que van apareciendo a medida que éste avanza (35). El catéter de estimulación sirve como derivación intracardiaca que localiza la posición de la punta del catéter. Esta técnica requiere la unión del electrodo negativo desde el extremo del catéter, a cualquier derivación precordial del electrocardiógrafo utilizando una pinza de cocodrilo. Generalmente se une a la derivación V1; las demás derivaciones se conectan al pa- Volumen 1 Número 1, 2015 ciente de manera habitual. La progresión del catéter de estimulación en el corazón, genera cambios en el trazado electrocardiográfico que ayudan a determinar la posición del mismo dentro de la cámara cardíaca (35). Su localización en la vena cava superior conlleva baja amplitud de las ondas P y del complejo QRS, ambos con polaridad negativa ya que el electrodo de detección está por encima del corazón, con el vector de despolarización auricular y ventricular dirigido hacia abajo y a la izquierda lejos del catéter. A medida que la punta del catéter entra en la aurícula derecha, la onda P se hace más grande (de hecho, más que el complejo QRS, debido a una mayor proximidad de la punta al marcapasos auricular nativo), y tanto la onda P como el complejo QRS inicialmente son negativos. Sin embargo, la onda P se convertirá a bifásica y luego a positiva cuando el catéter pase a través de la aurícula derecha y la válvula tricúspide. La entrada al ventrículo derecho es señalada por una onda P pequeña positiva seguida de un complejo QRS profundo negativo. Cuando la punta del catéter se acople al endocardio del ventrículo derecho, el complejo QRS mostrará elevación del segmento ST. Si el catéter sale de la aurícula derecha a la vena cava inferior, la onda P mantendrá una polaridad positiva, mientras que los complejos QRS perderán la amplitud al encontrarse el catéter más lejos del corazón. Este sería el mismo patrón visto si se utiliza la vía femoral, pero en este caso precede al trazo hallado en la aurícula derecha. Si el catéter atraviesa el ventrículo derecho y pasa a la arteria pulmonar, la polaridad de la onda P será negativa al dirigir la estimulación del catéter hacia la aurícula. Si se emplea la punta del catéter con balón, este último debe ser inflado, cuando la punta del catéter entre en la aurícula derecha y desinflado cuando pase a través de la válvula tricúspide; esto debería ayudar a guiar el catéter hacia su destino ideal, en el ápex del ventrículo derecho. Debe evitarse la migración hacia el tracto de salida del ventrículo derecho y la arteria pulmonar, favorecida por el flujo hacia adelante (36). Una vez posicionado correctamente el catéter en el corazón, se recomienda dejar al generador de estimulación del marcapasos como único visoscopio y retirar el electrodo del electrocardiógrafo. Al igual que con la técnica a ciegas, el generador de la estimulación se ajusta con la salida de corriente máxima; una frecuencia de estimulación que exceda 10 a 20 latidos la frecuencia del paciente y la sensibilidad al nivel más bajo Aproximación al uso de marcapasos en urgencias (asincrónica). Después de cada espiga de marcapasos se debe observar un patrón de bloqueo de rama izquierda que indica la captura. Si no hay captura total, es preciso reposicionar el catéter (36). Colocación del marcapasos guiado por ultrasonografía La ecografía se ha convertido en una herramienta práctica y fácil al demostrar el paso del cable del marcapasos al ventrículo derecho, confirmar el contacto con el miocardio ventricular derecho y verificar la captura exitosa del ventrículo en los pacientes con bradiarritmia significativa. Aunque no existen contraindicaciones absolutas, la obesidad o la hiperinflación pulmonar pueden interferir en el momento de la visualización cardiaca y del paso de los cables del marcapaso. Se utiliza la ultrasonografía a 2 - 3,5 MHz para visualizar de manera óptima el ventrículo derecho. La subxifoidea es la mejor ventana porque ofrece una buena visualización de las cuatro cámaras cardíacas, del espacio pericárdico y del movimiento global de la pared cardíaca; se aprecian los cables del marcapaso como líneas brillantes ecogénicas dentro del corazón. Una vez ubicado el acceso venoso central, el cable del marcapaso se puede seguir a medida que pasa al ventrículo derecho y se asegura en el ápex del mismo. La captura de miocardio se demuestra fácilmente por ecografía debido a la presencia de contracciones rítmicas del corazón al ritmo determinado por la programación del marcapasos (37). Verificación de la posición del marcapasos La radiografía de tórax se utiliza no solo para la verificación de la posición del marcapaso después de su fijación, sino como una herramienta útil para excluir complicaciones relacionadas con el procedimiento. Hoy en día se cuenta con otros métodos de comprobación un poco más detallados, como el uso del EKG de 12 derivaciones. La ubicación apical del ventrículo derecho se manifestará como un patrón de bloqueo de rama izquierda, a excepción de que el complejo QRS precordial usualmente concuerda con una polaridad negativa, mientras que un patrón de bloqueo de rama izquierda verdadero se caracteriza por la transición del complejo QRS de polaridad negativa a positiva en las Valencia y cols. derivaciones precordiales medias. El trazado también se caracteriza por una desviación del eje hacia la izquierda por el QRS del plano frontal ya que el impulso generado del ápex del ventrículo derecho se desplaza hacia la izquierda y hacia arriba (38). Verificación de la función Los umbrales de salida y sensibilidad deben ser probados después de que se ha demostrado un ritmo de captura. El umbral de estimulación es la corriente mínima necesaria para obtener la captura. Para determinarlo, el generador de estimulación se establece en un alto nivel de corriente de salida, y la frecuencia de estimulación entre 60 y 80 lpm, o por lo menos 10 lpm por encima de la frecuencia de base. La salida es reducida hasta que la captura se pierde. Esta prueba se repite varias veces para verificar este valor umbral. La corriente se debe establecer en aproximadamente 2-2,5 veces el umbral para asegurar la captura. El umbral de estimulación ideal es menor a 1 mA, por lo que la salida de estimulación generalmente se establece en no más de 2-3 mA; el catéter debe ser reposicionado si este umbral está por encima de 5-6 mA (39). El umbral de detección sólo se prueba si el marcapasos se va a utilizar en el modo sincrónico o a demanda. Esto se refiere a la forma como el generador envía el estímulo al corazón y funciona gracias a la capacidad que tiene el generador de detectar la onda R del complejo QRS. Puede ser fijo (asincrónico) o a demanda (sincrónico). Es a demanda cuando el corazón tiene ritmo autónomo y es capaz de inhibir el marcapaso. En el modo asincrónico, el marcapaso estimula el miocardio a la frecuencia que se haya programado, independiente de la frecuencia que tenga el paciente, y en ningún caso se verá inhibido. Con este modo se corrige el riesgo de que una espiga caiga en la onda T y se desencadene taquicardia o fibrilación ventricular (40). Para probar el umbral de detección, la frecuencia cardiaca se establece en aproximadamente 10 lpm por debajo de la frecuencia cardiaca intrínseca del paciente y la sensibilidad con el valor más alto (modo demanda). Con estos ajustes, el marcapasos no se dispara con solo sensar (destello de luz en ausencia de latidos estimulados). La sensibilidad se baja hasta que el marcapasos comienza a disparar de nuevo. Este valor es el umbral de detección. La sensibilidad se debe reducir por debajo del umbral de detección para garantizar una sensibilización apropiada y para asegurar que los estí- 19 Perspectiva en Urgencias 20 mulos inapropiados, tales como las ondas T, artefactos, y los espasmos musculares no sean sobresensados por la unidad y conduzcan a la supresión inapropiada del marcapaso (40). Volumen 1 Número 1, 2015 4. At lee J, Bernstein A. Cardiac rhythm management devices part I. Anesthesiology 2001;95:1265-80.. 5. Stone DJ, Bogdanoff DL, Leisure GS. Perioperative care: Anesthesia, Surgery and Medicine. Philadelphia: CV Mosby; 1997. 6. Purday JP, Towey RM. Apparent pacemaker failure caused by activation of ventricular threshold test by a magnetic instrument mat during general anaesthesia. Br J Anaesth. 1992;69:645-6.. 7. Bourke ME. The patient with a pacemaker or related device. 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La falla en la captura o al sensar es una complicación relativamente común, que ocurre en el 37 al 43% de los casos. Se asocia con sensación de fatiga, falla cardíaca o fibrilación auricular (44). Otros inconvenientes del marcapasos Puede desarrollarse síndrome de marcapasos cuando los modos subóptimos de estimulación o programación llevan a una pérdida de sincronía aurículo-ventricular, en cuyo caso se tiene una presentación clínica dada por síntomas de disminución de la perfusión, tales como fatiga, dolor de cabeza, confusión, disnea e incluso síncope. Esta situación es más frecuente cuando la estimulación se realiza en una sola cámara ventricular, por lo que su tratamiento se basa en la restauración de la sincronía aurículo-ventricular a través del cambio de una sola cámara por un sistema de estimulación bicameral (44). Bibliografía 10. Shaw DB, Holman RR, Gowers JI. Survival in sinoatrial disorder (sicksinus syndrome). Br Med J. 1980;280:139-41. 11. Rasmussen K. 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