Red Econolatin www.econolatin.com Expertos Económicos de Universidades Latinoamericanas CUBA Abril-Junio 2016 Ricardo Torres Centro de Estudios de la Economía Cubana Universidad de La Habana Nuevos pasos en la reforma económica y tensión en las finanzas externas 1. SITUACIÓN ECONÓMICA ACTIVIDAD ECONÓMICA Los datos finales publicados por la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI) sobre el comportamiento de la economía revelan una situación dual. Por una parte, el crecimiento económico fue revisado al alza, hasta un 4,3%, lo que sin dudas constituyen buenas noticias. No obstante, para este año se avizora un panorama bastante diferente el aumento solo se prevé en el entorno del 2%. Durante el primer semestre, el comportamiento de algunos sectores ha quedado por debajo de lo esperado. En primer lugar, luego de una zafra incierta debido a eventos climatológicos adversos y los conocidos problemas en el sistema productivo cubano, la producción de azúcar se estima en alrededor de 1.6 millones de toneladas métricas, esto es más de un 15% inferior al año 2015 y se sitúa por debajo de las propias predicciones de las autoridades. Este resultado compromete significativamente el futuro de la industria a corto plazo, dado que pone en dudas el cumplimiento de los planes que informó el monopolio estatal del dulce (AZCUBA) cuando fue reestructurado el sector seis años atrás. En ese momento se contempló la posibilidad de incrementar los volúmenes hasta 2.6 millones de toneladas en el 2016. Esto ocurre en un momento en que las cotizaciones del azúcar crudo se ubican en los mayores niveles en casi dos años, por lo menos desde agosto de 2014. Resumen de resultados económicos, Cuba PIB real (2015, última revisión) PIB real (pronóstico 2016) Producción de Azúcar (2016) 4,3% 2% - 15,1% Fuente: Oficina Nacional de Estadísticas e Información (2016) y reportes de prensa. La otra rama que viene experimentando problemas desde hace algún tiempo es la fabricación de níquel, una de las principales fuentes de ingresos externos. El sector está siendo afectado por una combinación de precios muy deprimidos en el mercado internacional junto a las restricciones de capacidad para incrementar la oferta. La planta Pedro Soto Alba está produciendo a plena capacidad mientras que la otra instalación, Ernesto Che Guevara, se ubica muy por debajo de su capacidad de diseño de 30 000 toneladas anuales. Esta última planta atraviesa un complejo y dilatado proceso inversionista dirigido a disminuir sus costos de producción. A 8 600 dólares por tonelada, los precios del metal están en mínimos de 13 años, en parte debido a la disrupción creada por la desaceleración china y los problemas en la economía mundial. Más del 60% del níquel mundial se usa en la fabricación de acero inoxidable, lo que lo hace vulnerable cuando la ralentización del crecimiento en mercados emergentes afecta la construcción y las inversiones. La demanda china ha sido un factor fundamental detrás del sostenimiento de los precios de los commodities por más de diez años y ahora ha empezado a operar en sentido contrario. SECTOR EXTERIOR Las cifras aportadas por las autoridades acerca del comportamiento de las exportaciones al cierre del 2015 clarifican aún más la que ya era considerada una situación delicada. Las ventas externas de bienes disminuyeron un 24,2%, confirmando las afectaciones originadas en las bajas cotizaciones de productos esenciales en la canasta cubana (azúcar y níquel) junto a las reducciones en los envíos de refinos de petróleo, a partir del mal momento que atraviesan los productores de este sector. Aunque no se aportaron números sobre el desempeño de los servicios, se puede estimar razonablemente que estos deben haber sido afectados, teniendo en cuenta la situación de las economías venezolana y brasileña, de momento los dos principales destinos de los servicios médicos que exporta Cuba. Indicadores del sector externo, Cuba (2015) Exportaciones de bienes (2015, última revisión) -24,2% Turismo internacional (enero-mayo 2016) 11,9% Fuente: Oficina Nacional de Estadísticas e Información (2016) y reportes de prensa. Como nota positiva, durante los primeros cinco meses de este año se mantiene un buen ritmo de incremento de los visitantes internacionales, presagiando otro buen año para el turismo en Cuba. Las cifras indican que los dos millones de viajeros se alcanzaron con 27 días de anticipación respecto a 2015, lo que representa un aumento de 11,9%. No obstante, las mejores noticias pueden estar reservadas para la temporada alta de fin de año. El departamento de Transporte de Estados Unidos asignó las primeras rutas para las aerolíneas de ese país interesadas en ofrecer asientos para nueve aeropuertos en varias provincias fuera de La Habana. Las seis aerolíneas escogidas son American Airlines, Frontier Airlines, Jetblue, Silver Airways, Southwest Airlines y Sun Country Airlines. Ellas estarás volando desde Miami, Fort Lauderdale, Filadelfia, Chicago y Minneapolis/St. Paul, comenzando a principios de otoño. A esto hay que agregar que las muy disputadas 20 rutas diarias hacia la capital cubana están pendientes de asignación. Esta acción incrementa notablemente la disponibilidad de asientos para viajar a la Isla, aunque oficialmente los norteamericanos no son elegibles para desplazarse como “turistas” a la mayor de las Antillas, sino que deben encajar dentro de las 12 categorías aprobadas. Pocos dudan, sin embargo, que el fin de la restricción de viajes está cerca. A mediados de junio, el Comité de Apropiaciones del Senado estadounidense aprobó una enmienda que busca eliminar completamente las restricciones de viajes a Cuba. Aunque el camino por recorrer en el legislativo aun es largo, el hecho de que haya sido aprobada con apoyo bipartidista confirma el giro hacia el acercamiento de un creciente sector de la política norteamericana. El potencial por explotar en Cuba es inmenso. Los norteamericanos aun representan una pequeña fracción del número total de visitantes a la Isla, y en los primeros tres meses de 2016 los arribos se habían incrementado en un 94%, según fuentes cubanas. A esto hay que sumar que en los primeros días de mayo llegó al puerto de La Habana el primer crucero desde Estados Unidos, el Adonia, perteneciente a la compañía Carnival Cruises. Varias empresas del ramo están esperando la aprobación de las autoridades de ambas partes para iniciar trayectos similares. EMPLEO La situación del empleo revela dos tendencias que habrá que seguir con atención en los próximos períodos. En primer lugar, a nivel de la economía en su conjunto, tanto la población activa como el número de ocupados se redujeron en 2015. En ese sentido, la tasa de actividad económica (población activa como proporción de la población en edad laboral) se redujo hasta un 69,1%. Esto es siete puntos porcentuales inferior al nivel de 2011. Esto podría indicar la presencia de dos fenómenos. Por una parte, la economía no está creando, como mínimo, empleos suficientes de calidad para atraer a la fuerza laboral disponible. En segundo lugar, esto genera una presión hacia el aumento de la informalidad, la que a su vez se alimenta de las características de la apertura hacia el empleo no público, es decir privado y cooperativo. Esto se vincula con la segunda tendencia. Los números relativos al número de cuentapropistas (trabajo privado en Cuba, esencialmente urbano no agrícola) anunciados en marzo de 2016, apuntan hacia la existencia de alrededor de 507 342 trabajadores, lo que supone un incremento de 8 000 empleos respecto a las cifras de fines de 2015. No obstante, solo representa un estimado similar a mayo de 2015. Es decir, en los últimos dos años se observa una reducción sustancial en el dinamismo de este segmento. Esto se puede atribuir al tipo de actividades aprobadas para ejercer, en general de bajo valor agregado, señales contradictorias que empujan hacia la informalidad para evadir impuestos considerados injustos o excesivos, las debilidades del sistema de aprovisionamiento que estimula el establecimiento de redes de proveedores informales y probablemente ciertas restricciones de demanda, en determinados nichos. Las implicaciones de este panorama no deben subestimarse. El perfil demográfico de la nación requiere una alta tasa de participación laboral para maximizar el aporte de los que están en condiciones de hacerlo. A su vez, el empleo formal conecta con la tributación y la regulación necesaria, lo que es muy importante para garantizar el sostenimiento de los servicios básicos que se proveen libres de costo a todos los ciudadanos. Este complejo escenario requeriría reconsiderar el enfoque hacia el empleo privado, incorporando nuevos sectores de mayor complejidad, y favoreciendo, no penalizando como hace ahora el sistema impositivo, la creación de empleos formales en el sector no estatal. 2. PERSPECTIVAS ECONÓMICAS Todo indica que este año será bastante tenso para la economía cubana, particularmente en lo relativo a las finanzas externas. El propio Presidente Raúl Castro reconoció en diciembre que una de las causas principales de la ralentización del crecimiento iba a ser el deterioro de las condiciones financieras externas. Por una parte, es esperable que los tropiezos en las exportaciones cubanas se mantengan durante la mayor parte del año, a juzgar por el comportamiento de varios de los rubros decisivos. La única notable excepción es el turismo internacional, que una vez más se posiciona como un sector clave para la estrategia económica de la nación. Las favorables predicciones a corto plazo deberán acompañarse de una más amplia estrategia a mediano y largo plazo, orientada a destrabar los cuellos de botella infraestructurales que frenen el crecimiento actual e inciden negativamente en la calidad de los servicios. Otro eje deberá atender el giro hacia un destino más diversificado y sofisticado, que permita aprovechar en toda su magnitud los variados atributos de la nación, generando empleos de mayor calidad e ingresos netos superiores. Estos problemas tienen lugar en un contexto delicado. La restructuración exitosa de la deuda externa cubana atraviesa ahora su momento decisivo. El país tiene que demostrar que puede honrar sus compromisos financieros internacionales luego de haber recibido generosas reducciones por parte de sus acreedores. Este asunto está estrechamente ligado a otros tres procesos claves. Por una parte, la posibilidad, todavía algo lejana, de un nuevo acercamiento a organismos financieros internacionales requiere un entorno financiero externo sin grandes contratiempos, que refleje la construcción de confianza y una mejora sostenida de la credibilidad de la nación. Esto a su vez se conecta directamente con la política para atraer capitales extranjeros. Una economía con buen comportamiento macroeconómico y finanzas externas sostenibles genera un poder de atracción determinante, a lo que se suman en el caso cubano su carácter de “mercado frontera” y el amplio potencial de crecimiento que la mayoría le asigna. Todo lo anterior contribuye a generar un mejor entorno para avanzar resueltamente hacia la ansiada y necesaria unificación monetaria y cambiaria, proceso que requiere una posición sólida del Banco Central y una cantidad suficiente de reservas internacionales de divisas. Este proceso, inevitablemente traumático, puede ser manejado en mejores condiciones con una economía en rápido crecimiento y amplia proyección internacional. La posposición sistemática de este cambio puede suponer un retroceso en el camino de la desdolarización progresiva de la economía, precisamente cuando el acercamiento a Estados Unidos puede contribuir a reforzar esta tendencia. 3. SITUACIÓN POLÍTICA El evento más importante de este trimestre fue el VII Congreso del Partido Comunista de Cuba, evento que generalmente traza las directrices de las políticas más importantes a implementar en los cinco años venideros. En el plano económico, los resultados del cónclave son diversos. Posiblemente el acuerdo más importante tiene que ver con el lanzamiento de la discusión de dos documentos que van a tener un impacto sustancial en el rumbo del país: los proyectos de “Conceptualización del Modelo Económico y Social Cubano de Desarrollo Socialista” y el “Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social hasta 2030”. El primero de ellos se refiere esencialmente a las características generales del modelo cubano, incorporando aspectos que tendrán que desplegarse en los años venideros. Es un documento de gran alcance porque entre otros muchos aspectos, especifica la emergencia de una economía mixta, donde coexisten diferentes formas de propiedad, incluyendo la privada, tanto nacional como extranjera. Además, consagra la aspiración de que el Estado incida sobre la economía utilizando fundamentalmente instrumentos indirectos dentro de los ámbitos de las políticas monetarias, fiscal y otras, en detrimento de la acción administrativa, que se ha convertido frecuentemente en una fuente de inercia y rigidez, que afecta la toma de decisiones adecuadas por parte de los diferentes agentes económicos. Ambos documentos tienen amplios puntos de contacto, y se puede pensar que conforman una especia de sistema, en el cual la Conceptualización se refiere al “qué”, mientras que el Plan de Desarrollo remite principalmente al “cómo”. Un aspecto que fue planteado reiteradamente es que ambos deben reconocerse como dinámicos, sujetos a revisión y mejoramiento permanente. La etapa actual se enmarca en un momento esencialmente político. Estos documentos, que se aprobaron en primera instancia en el Congreso, se presentan ahora para la discusión amplia del pueblo cubano, de la que emergerán propuestas de cambios y opiniones de diverso tipo, que deberán ser consensuadas e incluidas para su aprobación final, prevista para fines de este año. Luego se inicia la que quizá sea la etapa más crítica, el proceso de implementación de todas las propuestas finalmente incorporadas en esos documentos.