10-cOK.qxd 10 07/05/06 10:13 p.m. Page 1 Interés General La Plata, lunes 8 de mayo de 2006 SE CARACTERIZA POR MOVIMIENTOS ANORMALES La distonía, un síntoma cada vez más frecuente en la sociedad argentina Se trata de un grupo de enfermedades que en nuestro país padecen unas 40 mil personas y muchas otras desconocen. Hasta hace poco, se la consideraba una afección “rara”. En la actualidad, la sufren grandes y chicos. Cómo puede afectar a la vida cotidiana. Y los modos de tratarla cados movimientos con los dedos, como tocar el violín o en el caso de deportistas, por ejemplo, jugar al golf. La distonía puede estar acompañada de temblor, algunas veces parecido a los temblores que generalmente se observan en personas de edad, o por uno de tipo severo, de calidad irregular e inestable. Muchas veces, en las consultas, los especialistas observan que la distonía “aparece como único síntoma pero cuando se lo investiga aparece otro fenómeno”, señala Gravellone. Un ejemplo es la enfermedad de Parkinson, que puede cursar con distonía. Sin embargo, “hay trastornos en los cuales la distonía es el principal fenómeno”, dice el neurólogo. Muchos la confunden con un simple tic, de ésos que molestan cotidianamente aunque no terminan en consultorio médico. La distonía es un grupo de enfermedades neurológicas caracterizado por movimientos anormales involuntarios, y que es más frecuente que lo que se cree. Sólo en nuestro país, se estima que 40 mil personas sufren de trastornos distónicos y muchos aún no lo saben, pues se presentan en forma leve. Sin embargo, hay casos en los que este tipo de afección -se puede dar en una o más partes del cuerpo por una alteración de la función del sistema nervioso central- se vuelve progresiva, como es el caso del blefaroespasmo, que es el cierre involuntario y repetitivo del párpado. Los tratamientos dependen de la severidad del síntoma, la edad, y si aparecen otras enfermedades La distonía más común aparece sobre los hombros. Le sigue la que afecta los párpados Cuando este trastorno comienza en edad adulta, es generalmente focal o localizado y tiende a permanecer limitado a esa parte del cuerpo. Las distonías generalizadas son más comunes en los niños. Sin embargo, se puede ver este tipo de síntomas en adultos por traumas cerebrales o por falta de oxígeno en el cerebro. “La distonía es un grupo de enfermedades que puede presentar muchos trastornos para la vida diaria”, comentó a Hoy el neurólogo platense Néstor Gravellone. A cualquier edad, incluso en los chicos, se pueden desarrollar distonías que afecten regiones del cuerpo como la cabeza, cara, tronco, brazos y piernas. Las contracciones musculares pueden ser “discretas o predominantes, que son las que dificultan las actividades comunes”, asegura el especialista. Caminar, hablar, comer o escribir pueden convertirse en una situación incómoda y hasta dolorosa en muchas personas. A menudo se manifiesta en torsiones, deformaciones de una parte del cuerpo o posturas anormales. Y se puede tornar progresiva y hasta invalidante. Los tratamientos Hombres y mujeres Si bien la distonía no diferencia entre sexos, ciertos tipos se manifiestan más en mujeres que en hombres. Es el caso de la llamada oromandibular (ver infografía). Además, este grupo de enfermedades suele tener peso hereditario, sobre todo cuando se habla de distonía generalizada, que es la que afecta piernas, tronco y otras regiones corporales. Cada hijo de un padre que tiene el correspondiente gen anómalo, carga con un 50% de probabilidades de heredarlo. Determinadas actividades también propician la manifestación de contracciones musculares. Es el caso de los músicos ejecutantes de diferentes instrumentos que requieren realizar deli- Alcohólicos: hallan molécula “diferente” Un equipo de investigadores franceses descubrió en el cerebro de los alcohólicos una molécula que nunca había sido detectada en las personas, pero sí en la composición de algunas plantas, informó ayer el diario Le Parisien. Se trata de la scyllo-inositol, un azúcar complejo, cuya tasa es más elevada en función del grado de dependencia del alcohólico, explica al rotativo el jefe del servicio de biofísica del hospital Timore de Marsella (sureste de Francia), Patrick Cozzone. Efectuado por investigadores marselleses del Centro Nacional francés de Investigaciones Científicas (CNRS) y de la Universidad del Mediterráneo, el estudio se ha centrado en 40 individuos alcohólicos. Según estos investigadores, el etanol presente en el alcohol ingerido perturbaría la asimilación de la glucosa presente en el cerebro y fabricaría scyllo-inositol. “La glucosa es el carburante del cerebro. Si su transformación se efectúa con normalidad es una fuente de energía para las neuronas, pero en los alcohólicos ese proceso es alterado”, señala Cozzone. Ahora hay que determinar el papel que la scyllo-inositol podría desempeñar en las alteraciones cerebrales que sufren los adictos al alcohol. Los tratamientos dependen de la severidad del síntoma, la edad, y si aparecen otras enfermedades. Se puede decir que, si comienza en la infancia y hay antecedentes familiares de esta afección, es posible que el cuadro tienda a empeorar con el paso de los años. Por eso, resulta de suma importancia comenzar a tiempo con el tratamiento adecuado. En pacientes con distonías focales, el uso de toxina botulínica resulta un tratamiento efectivo. La aplicación del conocido botox necesita ser repetido cada tres o cuatro meses al año. Generalmente, los beneficios del tratamiento comienzan a tener efecto dentro de los cinco o diez días después de la aplicación, y se prolongan entre tres y seis meses. Luego, el paciente debe ser reinfiltrado. En quienes padecen distonía generalizada, están más indicadas las técnicas quirúrgicas centrales. La talamotomía es la más conocida. En cuanto a medicamentos orales, determinadas drogas tienen como fin interferir en la comunicación de los neurotransmisores, las sustancias químicas que permiten la circulación de mensajes dentro del cerebro.