Domingo 3 de enero de 2016 Año XI Nº 498 www.desdelafe.mx Suplemento del semanario Desde la fe, órgano de información de la Arquidiócesis de México Casi lista la Capilla Sixtina de la colonia Moctezuma El principal obstáculo a lo largo de catorce años de trabajo ha sido la falta de recursos, indica el pintor, don Miguel Macías; televisoras europeas han hecho reportajes sobre los avances de este homenaje a Miguel Ánguel Buonarroti en la Ciudad de México. Páginas 8 y 9 Además... ¡Adiós, 2015! Nuestro Pastor El año que ha concluido fue testigo de una Arquidiócesis de México llena de vida; la III Visita Pastoral del Card. Rivera se vivió con gran intensidad. En su tradicional mensaje de Navidad, el Card. Rivera reconoció que la nación mexicana vive momentos de muchos desafíos y problemas, pero también de mucha esperanza. Páginas 3-7 Página 2 Una publicación de: DELAFE S.A. DE C.V. RESERVA DE DERECHOS 04-2012-042716433700-107 El día que decidí felicitar por Navidad a quien me encontrara * La Misa dominical en la Catedral se puede seguir por internet * COLUMNAS: Rumbo al CEA * El misterioso llamado de Dios * Escuela para Padres * Cine * Ángelus Dominical * Matrimonio por la Iglesia * Cultura Bíblica * Piénsalo dos veces * Lectio Divina * Ayuda a la Iglesia que Sufre * 2 del 3 al 9 de enero de 2016 Navidad 2015 Mensaje del Card. Norberto Rivera Carrera Homilía Pronunciada por el Card. Norberto Rivera Carrera en la Catedral Metropolitana de México, el 25 de diciembre del 2015, Misa de Navidad. Con gozo les anuncio que en Belén de Judá se cumplió la promesa a favor de todos los pueblos y de cada uno de nosotros. Dios Padre envió a su Hijo, regalo de amor, nacido de la Virgen María. Al proclamar el Papa Francisco este año como año Jubilar de la Misericordia, lo convirtió en fecha privilegiada para celebrar este grande acontecimiento del Nacimiento del Señor, pues si viene a nosotros lo hace por su infinita misericordia. El privilegio de esta fecha consiste en que nos ha ofrecido, de modo extraordinario, el espacio para experimentar el amor misericordioso del Padre que nos invita a entrar en relación con Él para reconciliarnos y manifestar la solidaridad, especialmente a favor de los más necesitados. Según una tradición que dura hasta nuestros días, en la Irlanda Católica de otros tiempos, cuando llegaba la noche de Navidad, en todas las casas se ponía una luz en la ventana, para decirles a María y a José, que por si acaso pasaban por ahí, buscando posada, ahí estaba una familia que los esperaba, reunida en torno a la hoguera, y con la mesa servida con los dones de Dios. Esta tradición se conservó aún en el tiempo de la persecución y de la recesión cuando había una gran carestía: para los pobres siempre había una gran luz en las casas de los que creían en Cristo para anunciar que ahí siempre eran bienvenidos. Dios quiera que en nuestra gran ciudad cada día se enciendan más y más luces con ese significado y dejen de ser simples adornos. Como hace dos milenios, el nacimiento de Jesús sigue siendo un acontecimiento escondido: sólo pocos tuvieron el privilegio de conocerlo y aceptarlo: “Dichosos los ojos que ven lo que ustedes ven” (Lc.10, 23-24). La riqueza de este hecho va siendo descubierto gracias al testimonio de ustedes, quienes se comprometen en acudir a la fuente de la vida nueva, que es Jesús, para luego compartirlo solidariamente con los demás. Así, el natalicio del Hijo de Dios se convierte en el Evangelio de la vida y de la Caridad. Este contexto, el ejemplo de los pastores que escuchaban el mensaje del ángel y corrieron a buscar al niño, indica el itinerario que debemos seguir. En efecto, ellos no se habrían puesto en camino, si no hubie- ran recibido el anuncio del ángel: “No teman, pues les anuncio una gran alegría, que lo será para ustedes y para todo el pueblo: les ha nacido hoy en la ciudad de David, un Salvador, que es el Mesías, el Señor” (Lc. 2,10-11). Aceptaron presentarse con sus dones sencillos ante la pequeñez del recién nacido. Pero el contacto con la misteriosa grandeza oculta en la fragilidad del Niño, los convirtió en anunciadores de la Buena Nueva: “Y cuantos escuchaban lo que decían los pastores, se quedaban admirados” (Lc. 2,18). Frente a un mundo selectivo y exclusivista, que pretende restringir la felicidad a unos cuantos, tenemos la buena nueva de Dios, que se dirige a todos y a cada uno, sin excepción: “Tanto amó Dios al mundo, que le entregó a su Hijo, para que todo el que crea en Él, tenga vida eterna” (Jn. 3,16). Es el tiempo de la vida. Es el momento de reafirmar nuestra confianza en el fruto maduro del amor divino, pues Dios “no es Dios de muertos, sino de vivos” (Mt. 22,32). Nuestra nación mexicana vive momentos de muchos desafíos y problemas pero también de mucha esperanza; nada está maduro y acabado; se dan intentos que parecen pequeños, ante la grandeza y urgencia de los diversos retos que la sociedad presenta. No obstante, todo está llamado a crecer y a madurar en Cristo. Ya hemos comprobado que con la violencia nada crece y que con la desesperanza todo se paraliza. El Niño de Belén viene a alimentar nuestra esperanza y a fortalecer nuestras debilidades. Todos somos conscientes de la complejidad de los problemas y también somos conscientes de que nadie, por sí solo, los podrá resolver, pero también debemos tener la convicción de que si cada uno ponemos lo que está de nuestra parte mucho mejoraremos y mucha alegría llegará a los más excluidos. En la vida de Santa Zita se lee que queriendo asistir a la Misa de Gallo en la Navidad, sus amos le dieron permiso con la condición de que fuera bien abrigada con una capa de lana, recomendándole que no la fuera a manchar y mucho menos a perder. Cuando llegó a la puerta de la iglesia vio a un mendigo que titiritaba de frío. Se quitó su capa y se la puso encima diciéndole que se la prestaba sólo mientras duraba la Misa: entiéndeme, que la capa no es mía. Cuando salió de la misa Santa Zita no pudo encontrar al mendigo y mucho menos su capa. Se imaginan ustedes los regaños que con toda razón le dieron sus amos por ingenua, pero en ese momento llegó a casa un hombre montado a caballo, que entregando la capa agradeció en nombre de un misterioso Señor el favor que le habían hecho. La Santa se alegró de haber podido cobijar siquiera por la duración de una Misa a su Señor Jesús a quien reconoció en aquel mendigo. Por supuesto que no todo lo podemos resolver, pero algo, siempre podemos hacer. Así pues, estamos conscientes de que todavía quedan espacios, ambientes y personas a donde no ha llegado el anuncio de esta salvación. La Misión Permanente ha ido dando sus frutos: laicos, miembros de la vida consagrada, diáconos, presbíteros y obispos hemos ido entrando en la dinámica misionera como el modo habitual de participar en la siembra de valores que pueden cambiar nuestro México. Por lo mismo, la Proyección de la Misión, se fortalece celebrando de corazón el Jubileo de la Misericordia: cada uno está invitado a escuchar el llamado gozoso que Dios nos hace, para presentar lo que somos y tenemos ante el Niño de Belén, para luego compartirlo con los demás. No lo podemos hacer todo, pero algo siempre está a nuestro alcance. Animados por esta fuerza, seguiremos como hicieron los ángeles, anunciando la buenas noticias divinas a los alejados del influjo del evangelio , a los pobres, a las familias y a los jóvenes, de modo que todo ciudadano se convierta en luz de Dios en medio de la ciudad capital. La luz que nos guiará con certeza hasta el pesebre de Belén será la caridad. Que la celebración de esta Navidad llene de nueva esperanza la existencia de cada persona, de cada familia, especialmente de los niños y de los ancianos, de los que se sienten solos y han perdido interés por vivir. Que los padres de familia aprendan de María y de José a recibir la vida, que es regalo de Dios Padre. Que todo hogar sea un nuevo Belén, en donde cada uno comparta con sencillez la vida diaria. Con María Templo, Trono y Sagrario de la Santísima Trinidad, nos alegramos por la presente Navidad, mientras aguardamos con firme esperanza, la manifestación gloriosa de Nuestro Salvador Jesucristo. xx 3 del 3 al 9 de enero de 2016 2015, testigo de una Iglesia viva DLF REDACCIÓN El año 2015 abrió con una fe festiva, al realizarse la Peregrinación Anual de la Arquidiócesis a la Basílica de Guadalupe, bajo el lema “Misión Permanente de la Iglesia”, en la que participaron Obispos Auxiliares, sacerdotes, religiosas y religiosos, seminaristas y fieles laicos de las ocho Vicarías Episcopales. Al término del recorrido, el Card. Rivera Carrera celebró una Misa en la que puso a los pies de la Virgen de Guadalupe la Misión Permanente de la Iglesia, y presentó a los miembros del comité organizador del Congreso Eucarístico Arquidiocesano 2016. Asimismo, hizo un llamado a todos los católicos de la capital a asumir su “responsabilidad social” ante las personas afectadas por las circunstancias que vive el país. Pronto llegó la Cuaresma, y el 8 de marzo, para conmemorar el Miércoles de Ceniza, el Arzobispo de México presidió una Celebración Eucarística en la Catedral Metropolitana de México, donde recordó que la imposición de la ceniza es un rito simbólico, un gesto propicio y exclusivo del primer día de Cuaresma; no se trata de un mero ritualismo, sino de algo más profundo, que toca nuestro corazón. Agregó que “cada día, pero especialmente en la Cuaresma, el cristiano debe librar un combate, como el que libró Cristo en el desierto de Judá, donde durante cuarenta días fue tentado por el diablo, y luego en Getsemaní, cuando rechazó la última tentación, aceptando totalmente la voluntad del Padre”. Como cada año, el Jueves Santo, cientos de sacerdotes se reunieron en la Catedral de México para celebrar la Misa Crismal, que fue presidida por el Card. Norberto Rivera Carrera y concelebrada por el Card. Ennio Antonelli, y los venerables cabildos Metropolitano y de Guadalupe. En su mensaje al clero de la Arquidiócesis de México, el Card. Rivera Carrera llamó a todos los ministros de la Iglesia a anunciar con entusiasmo la Buena Nueva, llevar a los pobres el mensaje de salvación, y ser ministros de misericordia, paz y perdón, ante un México que yace en la esclavitud del crimen. El Viernes Santo, en el mismo recinto, se llevó a cabo la Adoración de la Cruz, en una ceremonia solemne encabezada por el Card. Rivera Carrera, quien, una vez más acompañado del cardenal Ennio Antonelli, presidente emérito del Pontificio Consejo para la Familia, entró en silencio al recinto para postrarse frente al altar sin cruz, sin candeleros y sin mantel; mientras que la comunidad se ponía de rodillas como parte de esta ceremonia en la que se conmemora la muerte de Cristo, quien murió en la Cruz para darnos vida. El Sermón del Pésame corrió a cargo del Sr. Cango. Julián López Amozurrutia, Teólogo de la Catedral de México, quien dirigió un extenso mensaje a la Virgen María. “María. Mujer. Ven a casa. Jesús me dijo en la Cruz que tú eres mi madre. Y a ti, que soy tu hijo. Ven. Me desgarra el dolor, pero no logro imaginar cómo será el tuyo. Madre…”, así dieron inicio las palabras del Cango. López Amozurrutia. El Domingo de Resurrección, el Arzobispo de México celebró una Misa en la Catedral Metropolitana, donde dijo que esta solemnidad, que nos hace revivir la experiencia absoluta de Jesús, es un llamado a convertirnos al Amor; una invitación a vivir rechazando el odio y el egoísmo, y a seguir dócilmente las huellas del Cordero inmolado por nuestra salvación, a imitar al Rey manso y humilde de corazón, que es descanso para nuestras almas. El 12 de abril, al celebrar la Fiesta de la Misericordia, instituida por el Papa Juan Pablo II, el Card. Rivera Carrera dijo que la Iglesia y el mundo tienen necesidad de misericordia, la cual expresa que el amor es más fuerte que el pecado y todo el mal en que está envuelto el hombre y su existencia terrena. “El amor se transforma en misericordia cuando hay que superar la norma precisa de la justicia, y el perdón es la expresión original del amor cristiano, de esa misericordia sin la cual hasta las exigencias más fuertes de justicia humana corren riesgo de ser injustas e inhumanas”. El último día de mayo, el Card. Rivera Carrera celebró una Misa en la Catedral de México para conmemorar la solemnidad de Pentecostés, donde dijo que “las divisiones en la Iglesia necesitan una irrupción del Espíritu Santo; sólo si hablamos todos los cristianos el mismo lenguaje, el lenguaje del amor, nos entenderemos a pesar de las diferencias accidentales que siempre deben existir”, y recordó que la solemnidad de Pentecostés es una fiesta esencial en el calendario católico, porque nos recuerda la acción del Espíritu Santo en los corazones, en la Iglesia y en la sociedad. Llegado el 4 de junio, el Arzobispo de México encabezó la celebración de Corpus Christi, en la que estuvo presente el presbiterio de la Arquidiócesis de México, religiosos, religiosas y fieles laicos, sin faltar los niños vestidos de “inditos” y los danzantes que dan a esta celebración un toque de color y de religiosidad popular. El Arzobispo de México, al celebrar esta solemnidad, explicó que la descomposición social que hoy se vive, para algunos parece una situación irreversible, Continúa página 4 Directorio Presidente del Consejo Editorial: Pbro. Hugo Valdemar Romero • Editor: Roberto Demian Alcántara Flores • Colaboradores en este número: • Alejandra M. Sosa Elízaga • P. Sergio Román P. Mario Á. Flores • Guillermo Gazanini • Mons. Salvador Martínez • P. Eduardo Lozano • Reporteros: Carlos Villa Roiz • Vladimir Alcántara Flores • José Alejandro Cruz Domínguez • Portada: Manuel Medina Parra • Diseño: Manuel Medina Parra • José Alejandro García Arrieta • Subdirector de Administración y Ventas: Victor M. Heredia Domínguez Tel.: 2652.9952 • Publicidad, Ventas y Distribución: Alejandra Vargas Agís Tels.: 2652.9954 / 5518.4099 / 5512.7949 “Eco Semanal” es una publicación semanal editada por la Arquidiócesis Primada de México, A.R. San Juan de Dios Núm. 222-C, Col. Lázaro Cárdenas, Del. Tlalpan, C.P. 14370, México, D.F. Teléfono: 5518-4099. Correo electrónico: contacto@desdelafe.mx • Páginas web: http://www.desdelafe.mx 4 del 3 al 9 de enero de 2016 la imagen de Santa María de Guadalupe, hecho que tuvo lugar en 1895, y el tercero fue el 523 aniversario del inicio de la evangelización en América, que comenzó en el año 1492. pero para el pueblo católico, que sigue a Cristo y se alimenta de su Cuerpo y Sangre, representa la necesidad de reconocer nuestras fallas y pecados, para un verdadero cambio social. Dijo que la mayoría de los males que hoy vivimos son ocasionados por hombres que permanecen alejados de Dios y de sus mandatos, cuyo corazón está ocupado por los ídolos del dinero y del poder, de las apariencias y del placer. El sábado 10 de octubre, en el Atrio de las Américas de la Basílica de Guadalupe, tuvo lugar el tradicional Rosario Viviente de la Arquidiócesis de México, en su XXIV edición, mismo que se realizó tras una oración cantada que se llevó a cabo a las 17:30 horas. Ante la Ausencia del Card. Rivera Carrera, quien se hallaba en Roma participando en el Sínodo de la Familia, el Santo Rosario fue dirigido por el Obispo Auxiliar de la I Vicaría Episcopal, Mons. Armando Colín, y en él se pidió a la Virgen para que todos los católicos vivan intensamente el Año de la Misericordia, para que niños y jóvenes católicos renueven su fe, por los matrimonios y familias cristianas, y por todos los consagrados a la vida religiosa y sacerdotal. Dos días más tarde, en este mismo recinto, el Venerable Cabildo Guadalupano llevó a cabo la Misa de las Rosas, celebración que hizo referencia a tres acontecimientos muy importantes para la vida de la Iglesia en México. El primero fue el 39 aniversario de la dedicación de la Nueva Basílica y el traslado de Sagrado Original, acontecimiento que ocurrió en 1976; el segundo fue el 120 aniversario de la Coronación Pontificia de Preocupación por la Niñez El 4 de enero, durante la primera Misa dominical del año, el Arzobispo de México, Card. Norberto Rivera Carrera, demandó a la sociedad respetar los derechos humanos de los niños, tomando como ejemplo de vida a la Sagrada Familia. “Una humanidad que dirige su mirada al hogar de Nazaret –dijo–, se llena de razones para respetar los derechos de la infancia, para evitar que niños sean abandonados o sea conculcada su dignidad con el horrendo crimen de la pornografía y la prostitución infantil, la iniciación a las drogas, la falta de alimento y hogar, o con trabajos que impiden su educación y su desarrollo humano.” Al finalizar el primer mes del año, una pipa de gas estalló frente al Hospital Materno Infantil de Cuajimalpa, accidente que arrojó varios heridos, entre quienes se hallaban varios re- cién nacidos que de inmediato fueron trasladados junto con sus madres a las instalaciones del Hospital ABC, adonde el Card. Rivera Carrera acudió para llevarles personalmente un mensaje de aliento que el Papa Francisco les dirigía a fin de manifestarles su cercanía espiritual. Desafortunadamente el estallido cobró la vida de siete personas: cuatro bebés y tres adultos. En abril, al celebrarse la festividad de san Marcos Evangelista, el Card. Riviera Carrera acu- dió al Seminario Conciliar, Casa Huipulco, para reunirse con niñas y niños, a fin de celebrar el III Encuentro de Monaguillos de la Arquidiócesis de México. En un ambiente de júbilo y alegría, los monaguillos y acólitos escucharon el mensaje de su pastor, quien les pidió continuar con el llamado que Jesús hiciera a sus discípulos, de predicar el Evangelio a todas las naciones, “pero sobre todo llevándolo a aquellos niños y jóvenes que se encuentran solos y abandonados”. Seminaristas y nuevos sacerdotes Al iniciar el año, el Arzobispo de México, Card. Norberto Rivera Carrera, invitó a toda la comunidad eclesiástica a participar en la Colecta Anual 2015 en apoyo a seminaristas, que se llevaría a cabo en las distintas parroquias y templos de la Ciudad de México. A mitad de año, en la Capilla de la Inmaculada Concepción del Seminario Conciliar de México, Casa Tlalpan, el Card. Norberto Rivera Carrera presidió una Misa de acción de gracias, que fue concelebrada Continúa página 5 xx 5 del 3 al 9 de enero de 2016 por el Rector de esta institución, P. José Guadalupe Godínez, y sacerdotes formadores, a fin de dar por concluido el ciclo escolar 2014-2015. En su homilía, el Card. Rivera pidió a los seminaristas sacrificio y entrega en sus correspondientes tareas, tal como lo hacía Jesús, el siervo que fue al matadero, que fue traspasado por nuestras rebeliones y asumió sobre sí nuestras impiedades. La Basílica de Guadalupe fue el escenario de la ordenación de diez nuevos sacerdotes para la Arquidiócesis de México, a través de una ceremonia que presidió el cardenal Norberto Rivera, quien dijo a los nuevos presbíteros: “Es el Señor quien los elige, quien los llama. Y los llama para que estén con Él, para que permanezcan en Él, para que sean de Él. Porque los quiere también enviar al mundo, los quiere enviar a anunciar su Palabra, a realizar los signos de santificación, a gobernar su pueblo santo”. Concluye la III Visita Pastoral El viernes 26 de junio, el cardenal Norberto Rivera Carrera concluyó su III Visita Pastoral por los 52 decanatos distribuidos en las ocho vicarías episcopales pertenecientes a la Arquidiócesis de México. El recorrido por parroquias y rectorías, cuyo objetivo fue dialogar con sacerdotes, grupos pastorales y comunidad juvenil sobre la labor y el estado actual de la Iglesia en la capital del país, inició el 4 de marzo de 2014. Así, luego de un año y tres meses de diálogo con el presbiterio y los fieles católicos de la Ciudad de México, visitó finalmente el noveno Decanato de la Séptima Vicaría Territorial “San Pablo Apóstol. Durante su recorrido, el Arzobispo de México habló sobre los temas prioritarios de la Iglesia actual: ladó a un poblado cercano a la capital argentina para bendecir un segundo templo dedicado al santo indígena, donde se conmovió al escuchar los “cantos bellísimos que le dedicaron a la Virgen de Guadalupe y a san Juan Diego”. la familia, tan golpeada por las distintas problemáticas sociales que se viven hoy en día; los jóvenes, muchos de los cuales no se sienten atraídos a participar en las comunidades parroquiales, y los alejados, algunos que han optado por formar parte de otras comunidades religiosas, y algunos que simplemente se van por no sentirse atendidos. Insistió en que hay personas que asisten a la Iglesia, pero sin sentirse miembros, sino clientes; contratan sus servicios, ya sea para un funeral, para un Bautismo o para una boda, como si fueran a una florería a comprar lo que ahí venden. Pero también dijo que ha encontrado una Iglesia viva, que sigue avanzando en muchos aspectos, sobre todo en la conciencia de ser evangelizadora, en salir al encuentro de los más pobres y en la labor social. Durante su III Visita Pastoral, el cardenal Rivera Carrera habló de dos preocupaciones fundamentales: los jóvenes y las vocaciones religiosas, por lo que en la totalidad de las reuniones decanales se abordaron estos dos temas. Para finalizar su largo recorrido pastoral, el 5 de agosto el Arzobispo de México inició la última etapa de esta III Visita, que consistió en acudir a las ocho Vicarías Episcopales, recorrido que concluyó el 18 de agosto con su asistencia a la VII Vicaría “San Pablo Apóstol”. Sínodo de Obispos sobre la Familia 2015 El 4 de octubre dio inicio el Sínodo de la Familia en el Vaticano, una asamblea mundial de obispos en la que se expuso al Papa Francisco las líneas pastorales para hacer frente a las dificultades que atraviesa esta institución fundamental de la sociedad. El Card. Rivera estuvo en Roma participando de esta asamblea que terminó por acabar con muchas las especulaciones que se habían venido suscitando en torno a diferentes temas relacionados con la familia, entre ellos, la posibilidad de que divorciados vueltos a casar pudieran comulgar. San Juan Diego en Argentina A finales de abril, el Arzobispo de México viajó a Buenos Aires, Argentina, para participar el 1 de mayo en la consagración de un templo dedicado a san Juan Diego, mismo que se comenzó a construir por iniciativa del Card. Jorge Mario Bergoglio, ahora Papa Francisco. Asimismo, el sábado 2, se tras- 20 años al frente de la iglesia capitalina Obispos auxiliares, sacerdotes, religiosas, religiosos y fieles laicos de la Arquidiócesis de México se reunieron el 1 de junio en torno a su pastor, el cardenal Norberto Rivera Carrera, para dar gracias a Dios por su onomástico y cumpleaños número 73, que se celebra el 6 de junio. Durante el año, hubo para el Card. Rivera dos motivos adicionales para festejar, pues el 26 de julio cumplió 20 años al frente de la Iglesia capitalina, y en diciembre se cumplió el 30 aniversario de su ordenación episcopal. Templos históricos en estado de deterioro En julio, con el apoyo del Card. Rivera Carrera, el P. Alfredo Ramírez Jasso, titular de la Comisión de Arte Sacro de la IV Vicaría “San Miguel Arcángel”, lanzó una invitación a instituciones de la iniciativa privada para intervenir con recursos económicos 22 templos históricos de la ciudad en grave estado de deterioro, recintos que requieren reparaciones estructurales, las cuales no fueron contempladas en las erogaciones de la federación, motivo por el que el sacerdote diseñó esta propuesta dirigida a empresarios, compañías automotrices, instituciones Continúa página 6 6 del 3 al 9 de enero de 2016 bancaras, televisoras y en general a cualquier grupo económico capaz de aportar recursos de forma permanente, para lo cual se consideró el plan de hacer un trámite ante la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, a fin de que los recursos aportados por los “padrinos” pudieran ser deducibles de impuestos. La iniciativa fue respaldada por diversos reportajes periodísticos en este medio de comunicación, que muestran el lamentable estado en que se encuentran estas joyas arquitectónicas patrimonio de la nación. Visita del Papa Francisco a México A mediados de octubre, la periodista Valentina Alazraki dio a conocer que el Papa Francisco confirmó su visita a México para el año 2016, aunque sin precisar la fecha de esta visita ni los recorridos que haría por nuestro país, datos que fueron difundidos al iniciar noviembre por el Card. Rivera Carrera, Arzobispo de México, quien adelantó que el Santo Padre llegaría a nuestro país el 12 de febrero, en lo que sería su primer viaje del Año de la Misericordia. Posteriormente, a finales de noviembre, a bordo de su avión rumbo a Kenia, el Papa Francisco daría a conocer al círculo de reporteros los lugares que visitaría durante su viaje a nuestra nación: Ciudad de México, Morelia, Michoacán; San Cristóbal de las Casas, Chiapas, y Ciudad Juárez, Chihuahua. Hacia una Pastoral Orgánica bien estructurada Del 19 al 21 de noviembre se llevó a cabo la XXI Asamblea Diocesana, en la que obispos, sacerdotes, religiosos y laicos compartieron ideas a fin de definir las acciones y estrategias necesarias para hacer más eficiente su participación dentro de la Iglesia con base en las exigencias de la Pastoral Orgánica al servicio de la Misión Permanente. Los principales temas que se abordaron en esta Asamblea fueron los obstáculos de la Pastoral Orgánica, la importancia de la familia, el trabajo en conjunto y la naturaleza de la Iglesia. Al término de la Asamblea, el Card. Rivera presidió una Misa en la que llamó a toda la comunidad a perdonar y ser misericordiosos ante una realidad tan sangrienta que, incluso parece mucho pedir que se cumpla al menos la ley del talión: ojo por ojo, diente por diente, “pues nuestro siglo ha sido testigo de actos cruentos donde la barbarie parece no tener límites. Fiestas guadalupanas y las Puertas Santas El 9 de diciembre, con la festividad de san Juan Diego, dieron inicio en la Basílica de Guadalupe las jornadas conmemorativas del Acontecimiento Guadalupano, en su edición 484, mismas que se prolongaron hasta el 11 y 12 de diciembre con la llegada de peregrinos al recinto guadalupano, muchos de los cuales tuvieron en honor de cantar Las Mañanitas a la Morenita del Tepeyac en el primer minuto de su día. El 12 y 13 de diciembre, en la Basílica de Guadalupe y en la Catedral Metropolitana respectivamente, el Card. Rivera Carrera abrió las Puertas Santas de la Misericordia, atendiendo el llamado del Papa Francisco en la bula Misericordiae Vultus, en la que pidió se abrieran Puertas Jubilares en todas las catedrales y santuarios importantes del mundo, “meta de tantos peregrinos que con frecuencia son tocados en el corazón por la gracia y encuentran el camino de la conversión. En el Tepeyac, la apertura de la Puerta Santa se realizó en medio de la gran afluencia de peregrinos que se congregaron en el recinto con motivo de los festejos del 484 aniversario del Acontecimiento Guadalupano; en la Catedral, la apertura de la Puerta Jubilar se realizó tras una solemne procesión por el atrio, en la que participaron el Venerable Cabildo Metropolitano e integrantes del Seminario Conciliar de México. Además de estas dos Puertas Santas, se abrieron otras ocho en la capital del país, en sedes litúrgicas correspondientes a las ocho Vicarías Episcopales de la Arquidiócesis de México. xx del 3 al 9 de enero de 2016 7 8 del 3 al 9 de enero de 2016 Casi lista la Capilla Sixtina de la colonia Moctezuma El principal obstáculo a lo largo de catorce años de trabajo ha sido la falta de recursos, indica el pintor, don Miguel Macías. VLADIMIR ALCÁNTARA Cuenta el señor Miguel Macías que cuando joven trabajaba como cocinero en una empresa, donde lo apoyaron para que pudiera estudiar la carrera de Diseño Gráfico, y al concluirla, fue trasladado al Área de Diseño, donde laboró hasta el día de su jubilación, en el año 2000. En ese mismo año también se jubiló un amigo suyo que trabajaba como arquitecto, quien le pidió que lo acompañara a Europa; sólo que don Miguel no contaba con dinero para realizar ese viaje, así que no pudo más que rechazarlo; sin embargo, el hijo de su amigo lo animó diciéndole que si acom- pañaba a su padre él le pagaba la mitad del viaje. Don Miguel lo platicó con su esposa, vendieron algunas cosas para poder cubrir el resto de los gastos, y partió hacia el Viejo Continente, donde pudo visitar Roma, quedando embelesado con la belleza de la Capilla Sixtina. “El día en que visité la Capilla Sixtina –comenta don Miguel Macías–, me percaté de que las dimensiones del techo eran semejantes a la de mi parroquia, la de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro; allá la medí el ancho y el largo dando pasos por entre la gente, y al llegar aquí hice lo mismo; todo coincidía, salvo la altura, porque la Capilla Sixtina tiene 20 metros de alto, mientras que la de aquí sólo 10, pero hasta la curvatura de la bóveda era similar. Se me ocurrió entonces que podía pintar aquí la obra de Miguel Ángel Buonarroti, y en ese mismo año, en el 2000, le planteé el proyecto al P. Agapito Lujano Mora. Él me dijo que sí, pero que no contaba con recursos; aun así, a mí no se me quitó la idea. Explica que lo habló por aquel entonces con sus amigos arquitectos, quienes, aunque consideraban que el proyecto era una locura, acudieron a la parroquia a tomar medidas, y como había una falla por centímetros, hicieron un plano a escala. “No podía yo ponerme a pintar boca arriba como Mi- guel Ángel, porque eso habría sido muy cansado para mí; me dijeron que lo conveniente era que pintara abajo sobre lienzos, utilizando la técnica del acrílico, y luego subiera a colocarlos. Así que de inmediato conseguí quien me enseñara a manejar esa técnica pictórica. Mandamos a hacer un bastidor de 15 metros de largo por 3 de alto, y también tuve que aprender a tensar la tela y a prepararla con químicos. En un principio queríamos contratar especialistas para colocar los lienzos en el techo, pero era muy costoso, y además decían que tenían que cortar las pinturas en varias partes para poder hacer ese trabajo; yo me las ingenié y pude subirlos enteros con ayuda de mis colaboradores”. Explica don Miguel que el trabajo que se hace arriba tam- bién es muy difícil, pues como los lienzos van formando una especie de rompecabezas, hay que ir empatándolos con los anteriores, de manera que las imágenes se continúen correctamente. “Este trabajo se hace sobre una plataforma, a la cual, además de subir con las telas enrolladas, hay que llevar pintura, palos, fierros, cables y otros tantos materiales. Y ya estando en las alturas siempre hay que ir resolviendo dificultades, pues como es un método inventado a veces nos hace falta prever cosas”. El señor Miguel Macías señala que a catorce años de trabajo, los avances son como de un ochenta por ciento y espera concluir la obra en unos tres años. “Actualmente ya tengo otros dos lienzos acabados, listos para colocarse, pero como van en la zona del presbiterio ya no se puede utilizar la plataforma que se usa comúnmente, debido a que hay escalones, por lo cual esta vez tendrá que ser con andamios”. Comenta que cuando inició el trabajo, miraba hacia el techo y se preguntaba cuándo colocaría el primer lienzo; ahora se pregunta cuándo pondrá el último. “El día en que se colocó el primer lienzo, allá como en el año 2002, vino el Card. Rivera Carrera a darle a la obra la bendición. Y desde ahí hasta ahora no he parado. He sufrido aquí ya varios accidentes, especialmente caídas al estar frente al basContinúa página 9 9 del 3 al 9 de enero de 2016 tidor, ya que llego a estar tan concentrado que se me olvida que no estoy a ras de suelo y al dar un paso atrás pues me voy para abajo. Pese a todo, nunca he pensado en abandonar este trabajo; incluso, a la cortina con que tapo los lienzos colocados en el bastidor le he puesto un letrero que dice “No te rindas, Miguelito”. Cuando estoy trabajando con alguien me siento apoyado, entusiasmado, y me digo: “no me rindo”, y cuando estoy trabajando solo, lo mismo: “no me rindo, no me rindo, no me rindo”. Ha sido un trabajo muy arduo y apasionante, en el que he estado metido por años – señala don Miguel–; pero los resultados ahí están. “Han venido varias televisoras para hacer reportajes sobre este homenaje a Miguel Ángel Buonarroti; de Televisa, TV Azteca, Canal 11, 22, 40, así como de la televisora alemana, inglesa y española. “La reportera de España quería que le enseñara una pintura en proceso, pero en ese momento yo no estaba pintando nada; se fue a España y desde allá me habló para decirme que yo estaba engañando a la gente, que lo que yo estaba poniendo en el techo eran fo- tografías ampliadas de la original. Empecé un nuevo lienzo y le llamé por si lo quería ver; ella vino dos meses después y al ver que estaba trabajando en esa pintura quedó muy emocionada y empezó a tomarle fotos de un lado y otro”. “Durante estos 14 años de trabajo –comenta el señor Macías–, he tenido ayudantes esporádicos; algunos vienen solo unos días, otros semanas y hay quienes me han ayudado por años, pero todos han sido voluntarios, han venido por amor a Dios y al arte, como mi ayudante actual, Isabel Ramírez, quien se traslada desde de Ecatepec, a veces con muchas dificultades, pues en ocasiones no tiene dinero para los pasajes; pide prestado y aquí conseguimos para pagar; ha adquirido mucho talento, ahora hace muy buenos trazos. Como ella, aquí muchos han aprendido a pintar. Sobre este tema de sus colaboradores, don Miguel Macías señala que hace un tiempo se le presentó una dificultad con uno, problema que aún le está afectando. Explica que aquel ayudante se fue muy inconforme porque de pronto le entró la avaricia y quería que se quitaran todas las pinturas del techo y se vendieran, asegurando que se ganarían millones. “Desde luego yo no acepté, así que él se llevó a otros tres colaboradores y abrió una red social en la que, bajo el argumento de que la obra es suya, hasta la fecha pide donativos para poder terminarla. Un amigo se metió a esa red para hacer supuestamente una donación, y le dijeron que de manera momentánea de- bía depositar el dinero en una cuenta que no era fija, porque son cuentas que van desapareciendo, al tiempo que van apareciendo otras nuevas, las cuales poco a poco le irían dando. Es verdad que se necesitan recursos económicos para terminar este trabajo, pero si alguien quiere donar, puede hacerlo con el P. José Guadalupe Ramírez Mu- rillo, encargado de esta parroquia, quien me ha brindado siempre todo su apoyo, o directamente conmigo. Para donaciones, acudir a la Parroquia de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, en Plaza Aviación, Núm. 74. Moctezuma 1ra. Sección. O llamar a los teléfonos 26437810 o 5545785407. 10 del 3 al 9 de enero de 2016 El misterioso llamado www.conciliar.mx 55732222 Dios llama a hombres concretos para servir a los demás Soy Noé Saúl Quezada Agüero, tengo 22 años de edad, nací en una comunidad indígena de la Sierra Tarahumara de Chihuahua llamada Bajíos, ubicada en el municipio de Guazaparez. Se ubica al suroeste del Estado. Pertenezco a la Diócesis de Tarahumara que está constituida por la región serrana, cadena montañosa que forma parte de la Sierra Madre Occidental y tierra de los indígenas Raramúris-Tarahumaras. La Diócesis de Tarahumara es una de las misiones Ad Gentes de México y del mundo, es decir, es un contexto de Iglesia nacien- Congreso Eucarístico Arquidiocesano 2016 MONS. PEDRO AGUSTÍN RIVERA DÍAZ La oración es el medio privilegiado para relacionarnos con Cristo, para contemplar su rostro y aprender a servir a los hermanos. “La oración es el lugar privilegiado del encuentro del discípulo con Jesucristo… Jesús nos trae hacia Sí y nos hace entrar en su dinamismo hacia Dios y hacia el prójimo (cf. Aparecida de Brasil N. 251). te y por lo tanto la evangelización no ha llegado a muchos pueblos, todavía existen personas que no conocen a Dios. Además, es una zona indígena que tiene sus propios retos y exigencias. Su clero es de 45 sacerdotes, de los cuales sólo cinco son nativos de estas regiones; esto nos indica que en nuestra Iglesia escasean cada vez más las vocaciones a la vida sacerdotal. Pertenezco a una familia católica. Desde la infancia, por medio de mis padres y abuelos, tuve acercamiento a la fe de la Iglesia transmitida en las tradiciones y costumbres de los indígenas Tarahumaras de la comunidad natal. El conocimiento de Dios y de la Iglesia nació en primer momento por el acercamiento a la religión de los Rarámuris (indígenas), sus tradiciones, sus ceremonias, sus ritos y sus celebraciones. Mi deseo de ser sacerdote inicia en la familia, en la comunidad Tarahumara y por el testimonio y ejemplo de misioneros laicos que reciben también el llamado de servir a los más pobres; nace también gracias a las religiosas, religiosos y sacerdotes que viven su misión y entregan su vida al servicio de los demás, de los pueblos y comunidades Tarahumaras, enfrentándose a otros rostros de la Iglesia, es decir, otro idioma, otra cultura y otras realidades sociales. En 2010 ingresé al Seminario Menor de San José, ubicado en San Agustín, Coahuila, perteneciente a la Diócesis de Torreón. Durante esos años en la Tarahumara no había Seminario Mayor, por lo que el Seminario Diocesano de Torreón abría sus puertas a las diócesis necesitadas del norte del país. En el año 2011 inicié la etapa de Filosofía en el Seminario Mayor de Santa María Reina, en Torreón, Coahuila. La etapa de Teología la cursé del año 2014 al 2015 en este mismo seminario. Actualmente soy estudiante de Teología en la Universidad Pontificia de México y vivo bajo el programa formativo del Seminario Conciliar de México. A través de mi vida vocacional he entendido que Dios se fija en los seres humanos, sus hijos, para cumplir con determinadas tareas, y que nuestro deber como hijos es responder a su llamado dando lo mejor de nosotros, es decir, sirviendo a los demás con un corazón sano y libre, para amar con plenitud y alegría la propia vida, vocación y destino. Por último, invito a todos a orar juntos para que siempre se susciten vocaciones sacerdotales en nuestra Iglesia. La Adoración Eucarística, formadora de discípulos y misioneros “La Eucaristía, fuente y culmen de la vida cristiana, hace que nuestras parroquias sean siempre comunidades eucarísticas que viven sacramentalmente el encuentro con Cristo Salvador” (Aparecida de Brasil n. 175a) Los miembros de una parroquia se preparan a dar frutos permanentes de caridad, reconciliación y justicia para la vida del mundo, justamente con la adoración eucarística y con la práctica del Sacramento de la Reconciliación para acercarse dignamente a comulgar (Aparecida de Brasil n. 175) Seguramente que el Congreso Eucarístico Arquidiocesano 2016 (CEA 2016), al que nos ha convocado el Emmo. Señor Cardenal Norberto Rivera Carrera, ayudará a que cada parroquia de nuestra Arquidiócesis sea como una auténtica “escuela de oración”, en la que los fieles cristianos, al contemplar el rosto de Cristo, aprendan a servir a los hermanos, en particular a los más necesitados; a acoger con diligente y fervoroso amor las prioridades pastorales, como la formación de discípulos y misioneros, y a acentuar en el apostolado la dimensión eucarística propia de la vida cristiana. Estando en oración frente a Jesús Eucaristía, los creyentes contemplamos el rostro de Jesús y de esta contemplación aprendemos a descubrir a Cristo presente en los demás, pero sobre todo en nuestro corazón, desde donde nos vamos configurando con Él para vivir como hijos de Dios y construir su Reino de amor. “Queremos ver a Jesús” (Jn 12,21), esta petición hecha al apóstol Felipe por algunos griegos que habían acudido a Jerusalén para la peregrinación pascual, resuena en nuestros oídos como un clamor en muchos habitantes de la Ciudad de México que necesitan esperanza y donde los católicos de la Arquidiócesis necesitamos fortalecer nuestra fe para expresarla con firmeza, trabajar por la cultura de la vida, construir la civilización del amor y transformar la sociedad de inhumana a humana y de humana a cristiana. xx 11 del 3 al 9 de enero de 2016 LELIS NORIEGA Epifanía o Día de Reyes ¡Ya estamos en 2016, comienza el año y con él nuevas esperanzas, nuevas metas y fiestas! El 6 de enero festejamos a los Reyes Magos y recibimos más regalos, tenemos otra reunión familiar alrededor de la rosca y más oportunidades para convivir felizmente con los amigos y familiares. Pero, ¿realmente celebramos a quién tenemos que celebrar? ¿Conocemos el significado de la fiesta? Podemos leer la historia de los Reyes Magos en Mateo 2, 1-12 “Después de haber nacido Jesús en Belén de Judea, en el tiempo del rey Herodes, unos magos de Oriente se presentaron en Jerusalén diciendo: ¿dónde está el que ha nacido, el Rey de los Judíos? Porque hemos visto su estrella en el Oriente y venimos a adorarlo. Al oír esto, el rey Herodes se puso muy preocupado; entonces llamó a unos señores que les llamaban pontífices y escribas (que eran los que conocían las escrituras) y les preguntó el lugar del nacimiento del Mesías, del Salvador que el pueblo judío esperaba hacía mucho tiempo. Ellos contestaron: En Belén de Judá, pues así está escrito por el Profeta: Y tú, Belén tierra de Judá de ningún modo eres la menor entre las principales ciudades de Judá porque de ti saldrá un jefe que será el pastor de mi pueblo Israel Entonces Herodes, llamando aparte a los magos, los envió a la ciudad de Belén y les dijo: Vayan e infórmense muy bien sobre ese niño, y cuando lo encuentren, avísenme para que yo también vaya a adorarlo. Los Reyes Magos se marcharon y la estrella que habían visto en el Oriente, iba delante de ellos hasta que fue a pararse sobre el lugar donde estaba el Niño. Al ver la estrella, sintieron una gran alegría. Entraron en la casa y vieron al Niño con María su madre. Se hincaron y lo adoraron. Abrieron sus tesoros y le ofrecieron regalos: oro, incienso y mirra. Luego, habiendo sido avisados en sueños que no volvieran a Herodes (pues él quería encontrar al Niño para matarlo), regresaron a su país por otro camino”. ¿Cómo vivir esta Epifanía en este año que celebramos el Año de la Misericordia? Se podría pensar en los regalos de los Reyes al Niño Jesús. ¿Cuáles pueden ser nuestros regalos para Él? Este año en especial pueden ser obras de misericordia: podemos dar de comer a alguna persona que lo necesite, pero también puede ser que dentro de nuestra propia familia el alimento que se necesite sea nuestro tiempo, nuestra atención, el sentirse aceptado y querido por alguien y saberse útil dentro del grupo. Otra obra de misericordia es dar un consejo a quien lo necesite, así que podemos estar atentos a las personas de nuestro alrededor por si estuvieran necesitados de nuestra compañía, nuestra atención y nuestro comentario oportuno. También podemos buscar en estos días a alguien a quien podamos ayudar enseñándole cosas que no sepa, orientándolo en sus tareas, apoyándolo para que aprenda a leer y escribir, o en alguna materia en la que vaya atrasado en la escuela, o a terminar algún proyecto que haya empezado. Rezar por los demás es otra obra de misericordia en la que podemos todos participar. En resumen, de lo que se trata es de que estemos al pendiente de quienes están a nuestro alrededor, saliéndonos de nosotros mismos y yendo a su encuentro, dándonos a los demás y olvidándonos de nuestro egoísmo, atentos siempre a las necesidades de los que nos rodean. Necesitamos ser la luz que guio a los Reyes Magos a Je- sús, llevando la Buena Nueva a los demás, principalmente con nuestro ejemplo y acciones concretas. También debemos ser como esos Reyes Magos, que dejaron sus casas y comodidades por seguir una estrella que a ratos les brillaba y a ratos se les escondía, seguir con esa fe que los hizo a ellos llegar hasta Jesús a pesar de las dificultades y tropiezos. Aunque a lo mejor ellos esperaban encontrar a Jesús en un palacio o rodeado de riquezas, supieron reconocerlo, creyeron en Él y le dieron todo lo que traían. Así, debemos abandonarnos en el amor de Dios, dar todo lo que tenemos y de esa manera lograremos ser fieles a nuestra vocación de hijos de Dios. 12 del 3 al 9 de enero de 2016 El día que decidí felicitar por Navidad a quienes me encontraba en el camino –¡Feliz Navidad! –le dije amablemente. Me miró extrañada, como preguntándose: –¿A éste qué le paso? No me desanimé por esta respuesta. Traté de amar y com- prender a la buena señora, con sus problemas y sus virtudes. Seguí adelante con el proyecto… y pronto empecé a recibir sonrisas inesperadas y unas pocas palabras que me llenaron de ánimo: “Muchas gracias. Es verdad…. Feliz Navidad”. De todos, el que más me impresionó fue un policía que caminaba malhumorado. Iba del otro lado de la calle cuando lo llamé: –¡Oficial!… Se volteó rápidamente colocando su mano sobre el arma. Me observó con sospecha. Le sonreí y exclamé: –¡Feliz Navidad! Dejó su pistola en el estuche. Me miró unos segundos preguntándose qué pasaba. De pronto sonrió. Algo en él había cambiado. Fue increíble. Levantó la mano saludando y respondió entusiasmado sin perder la sonrisa: –¡Feliz Navidad para usted también! Al rato continuó su camino, sonriendo, con una alegría interior que se le desbordaba en la mirada. Y yo, también sorprendido, seguía sonriendo, pensando en la alegría contagiosa de la Navidad, en las cosas maravillosas de Jesús. Olbaid actúa como consejero del Rey Herodes, a quien le muestra la estrella de Belén en el cielo, y lo convence de que deben detener el nacimiento anunciado. Así que, sin tiempo que perder, ponen en marcha un plan que consisten en tender diversas trampas a los reyes, a lo largo de su camino. Ambos planean una treta por demás infame: matar a todas las mujeres que estén embarazadas para que así no nazca ningún rey. Los tres Reyes Magos, de Adolfo Torres Portillo y Fernando Ruiz, es del año 1974 y se trata de la primera película animada de manufactura mexicana; es una cinta infantil muy divertida, pero también apta para toda la familia. Como es de esperarse, para el espectador de hoy, la animación resulta algo anticuada, pero para los estándares de las grandes productoras de caricaturas de aquella década, era una animación de bastante calidad. Algo que podemos destacar es que está cargada de humor. Varios son los méritos que tiene este filme de antaño, los cuales hacen a los niños querer volver a verla. El guion fue realizado por la magnífica escritora mexicana Rosario Castellanos, a la manera de la típica pastorela mexicana; el diseño de producción está basado en las figuras artesanales de Metepec, Estado de México; las ilustraciones fueron creadas por Moisés Velasco, quien en ese tiempo había hecho la famosa Odisea Burbujas y Caty la oruga. Es una película sencilla, que podría ser criticada en esta época, pero lo importante de esta cinta no es cómo se ve, sino lo que nos cuenta. Un detalle en el que vale la pena poner atención es en el significado de los regalos que los reyes ofrecen al Salvador. En este próximo Día de Reyes valdría la pena hacer regalos con un valor más allá de lo material. . . así como los que le hicieron al Niño los Reyes Magos. CLAUDIO DE CASTRO ¿Sabes? A menudo medito en la Navidad. Me trae recuerdos de la infancia. De una época feliz. Ahora, de grande, pienso en el pequeño Jesús y las palabras del Padre Ángel, mi amigo: “Jesús vino al mundo como un Niño indefenso, porque es fácil amar a los niños”. Con cuatro hijos, puedo comprender sus palabras y amar a este pequeño Niño, el hijo de Dios. Siempre paso feliz los días previos a la Navidad. Me emociono profundamente por el amor de Dios. Pero veo a muchos, tan agitados y preocupados, que no disfrutan la Navidad. Solía hablar al respecto. Pero pocos me escuchaban. Hace algunos años decidí intentar algo diferente, vivir una aventura por Jesús… en vísperas de la Navidad. Por su Amor, saludaría a cuantos encontrara en mi camino con un: ¡Feliz Navidad! No era fácil. Pensaba mucho en esto: ¿Algo tan sencillo, podrá hacer la diferencia? Era una necesidad que me nacía del corazón: amar al prójimo y expresarlo con aquel hermoso saludo de paz y alegría. Convertir este saludo en un pequeño oasis de serenidad, para los que estaban agobiados. Deseaba que fuera genuino, creíble y contagioso. En vísperas de aquella Navidad, encontré a muchos, ocupados y malhumorados, y no me prestaron atención. En los almacenes, había un caos, una desesperación por comprar. Parecía que nadie tenía tiempo para las otras personas, para amar, compartir y recordar el sentido verdadero de la Navidad. Empecé con serenidad en el corazón y una oración en el alma. Recuerdo que me acerqué a una señora que tomaba un boleto numerado en una panadería, esperando ser atendida. Tenía una agitación grande por tomarlo primero que yo. Me miró disgustada cuando me acerqué. Los tres Reyes Magos “Todos los hombres somos iguales” ANTONIO RODRÍGUEZ Una magnífica estrella en los cielos es la portadora de una gran noticia. Se le aparece a tres hombre, tres reyes, provenientes de distintas familias y con diferentes culturas, a quienes les pide que se apresuren a llegar al nacimiento del Niño Jesús; los tres aceptan con gusto la petición. A la par de esto, un demonio con forma de murciélago, llamado Murcio el Espía, le envía la noticia al príncipe Olbaid, el rey de las llamas; el Hijo de Dios está por nacer, y eso no debe permitirlo. xx 13 del 3 al 9 de enero de 2016 SE ACABÓ EL AÑO 2015 y yo terminé con la cabeza hecha bolas y el corazón en varios añicos; pero no estoy aquí ni para quejarme buscando consuelo ni para presumir de mis males, sencillamente comento que así como yo termino el Año Viejo, tal vez muchos otros andan en las mismas, o sea, el mundo sigue dando vueltas y en él vamos todos los que estamos… ESTOS SON DÍAS en los que quisiéramos que todo fuera dicha y felicidad, en los que soñamos con un horizonte encantador y con la vida color de rosa, en los que –como por arte de magia– desearíamos que despareciera todo rastro e indicio de mal y dolencia, de aflicción y pesar, pero no, la realidad no es así… Y MÁS QUE TENER la cabeza hecha bolas (¡ah!, ¡cuántos pensamientos e ideas, cuántos proyectos e iniciativas, cuántos ideales y necesidades!), y más que tener el corazón hecho añicos (¡ah!, ¡cuántos sentimientos y emociones, cuántos recuerdos y añoranzas, cuántos deseos e CARLOS VILLA ROIZ Desde hace poco más de un año se vienen realizando transmisiones por internet, inicialmente de tipo experimental, de la Santa Misa que el Sr. Cardenal Norberto Rivera Carrera, arzobispo de México, preside en la Catedral Metropolitana, en punto de las 12:00 horas. Las transmisiones corren a cargo del Ing. Francisco Yedra, quien cuenta con experiencia de varios años en la incertidumbres!), lo que más y mejor tengo es el amor y la misericordia de Dios que ni me deja, ni me olvida… MUY LEJOS Y APARTE de ti y de mí los falsos romanticismos con que embadurnamos estos días, con que encelofanamos el fin de año y el inicio de otro más; muy lejos y aparte de nosotros la ilusión superficial de que todo ha de ser a pedir de boca y a contentillo; y es que no acabamos de entender que si Dios nos pone en este suelo es para caminar al cielo, y no para ilusionarnos con lo pasajero y fútil de cuanto vemos… YA TENDRÉ TODO EL 2016 para desmarañarme la cabeza y para pegar –aunque sea con engrudo– los añicos cardiacos y con lo siguiente comienzo: no hay problema (por tremendo y complejo que parezca) que no nos traiga alguna enseñanza y oportunidad para crecer, no hay contrariedad de la que nos sea imposible sacar al menos alguna ventaja y provecho; y lo que estoy diciendo no es consuelo de tontos, más bien es el mejor resultado de un ingenio esperanzador... ES VERDAD QUE MUCHO me duele la abundancia de quienes se ilusionan pensando que Dios está para cumplirles sus antojos, para darles solución facilona a sus problemas; si acaso existiera el Genio de la Lámpara, estoy seguro que no daría rienda suelta a los fantásticos antojos de afanados sobadores de metal… QUE ME DISCULPEN lo que voy a decir, pero si Dios fuera como uno de esos medicamentos “milagro” que con dos pastillitas todo te curan, si Dios fuera como uno de esos productos quitacochambres automatizados, si Dios fuera como abarrotero baratero que todo te surte al dos por uno (¡qui-orrooorrr!) yo ya estoy apuntado para declararme ateo al 200%... UN SABIO Y BUEN PADRE jamás le quitará los problemas de enfrente a su hijo, más bien le enseñará a resolverlos y a prepararse para los que vengan; y para ejemplo, lo siguiente: estoy escuchando a mi alrededor la historia de un carnicero que por angas y mangas que- dó ciego, pero con la ceguera no se le entumieron las manos, y con todo y que sus ojos le fallaron, las manos seguían trabajando más impulsadas por el buen humor que por la necesidad, más movidas por sentirse útiles que dispuestas a causar lástimas ajenas… DOMINGO A DOMINGO profeso mi fe diciendo: “Creo en un solo Dios” (y con un etcétera puedes concluirlo), pero también me imagino que día a día, minuto a minuto, es Dios mismo quien sigue diciendo: “Creo en el ser humano, a quien di mi imagen y semejanza, por quien envié a mi Hijo Único al mundo P. EDUARDO LOZANO angelusdominical@yahoo.com.mx La Misa dominical de la Catedral de México se puede seguir en Internet producción televisiva de eventos religiosos, tanto nacionales como internacionales. “Llevamos cámaras profesionales porque en asuntos de la Iglesia también se debe estar a la vanguardia en tecnología. La fe se debe difundir con calidad, porque nuestra Iglesia merece calidad en todo”, señala Francisco Yedra. La transmisión de la Santa Misa se puede ver a través de tres páginas: la de la Catedral Metropolitana de México, la del movimiento laical Unión de Voluntades y en desdelafetv.com “Gracias a Unión de Voluntades, que nos apoyan con su plataforma en internet a través del canal uniondevoluntades.tv, nosotros podemos transmitir; de allí generamos un link que puede ser copiado por quien guste, puesto que para su salvación; creo en el hombre, destino desde el frágil tiempo para disfrutar mi sólida eternidad; creo en cada ser humano, a quien di un corazón capaz de la esperanza para que logre lo que parece inalcanzable; creo en cada hombre y cada mujer, destinatarios de todo mi amor y misericordia”… QUE VENGA EL AÑO NUEVO 2016 y si viene con retos y desafíos, ni me angustio, si viene con dificultades y adversidades, no me importa, si llega con calamidades y desavenencias, ni me espanto, si arriba con bemoles y con déficit, ni para qué me pongo a chillar; mejor pondré manos a la obra y a manifestar cuánto Dios me ama y me acompaña a pesar de todo, mejor me dispondré a ver de qué modo pongo solución, mejor inventaré no sé qué camino para seguir diciendo que ya nos podrá faltar todo, pero nunca nos faltará el amor de Dios… ASÍ QUE: FELIZ AÑO 2016, venga como venga… es gratuito. La Misa presidida por el Card. Rivera Carrera también se transmite a través de la página desdelafetv. com”, comenta el ingeniero. Las tres transmisiones son simultáneas, sin embargo, en la plataforma de Unión de Voluntades queda grabada y puede seguirse de manera diferida. Además de las Misas dominicales, también se transmiten ceremonias religiosas y eventos especiales, como los oficios de Semana Santa y la festividad de la Virgen de la Asunción, a quien está dedicada la Catedral de México, celebración que se lleva a cabo en el mes de agosto. El número de personas que cada domingo siguen la transmisión de la Santa Misa ha venido creciendo en estas tres direcciones de internet, e incluso se ha detectado que antes de que inicie la ceremonia religiosa, hay personas que están conectadas esperando la señal. 14 del 3 al 9 de enero de 2016 CULTURA BÍBLICA Para comprender el Evangelio de hoy... MONS. SALVADOR MARTÍNEZ En este Domingo reflexionaremos sobre el sentido de la fiesta de la Epifanía en el contexto cultural judeo cristiano. La fiesta de la Epifanía del Señor nos presenta el texto de la visita de los Magos de Oriente al niño Jesús en Belén, por tanto, una primera referencia de esta fiesta es la manifestación (en griego se dice epifanía ) de Jesús hombre e Hijo de Dios a los paganos. Dentro del contexto del evangelio de san Mateo, que es el único que nos narra el hecho, es claro que la misión primordial del Señor fue ir por las ovejas descarriadas de la casa de Jacob , es decir, que Jesús dedicó su ministerio por completo a la conversión de los judíos, pero las consecuencias de la muerte y resurrección del Señor son para todas las naciones. Así lo confirma el hecho de que Jesús resucitado pidiera a los discípulos ir a su encuentro en Galilea, región nor- te de palestina típicamente habitada por paganos. Así pues, el primer sentido de la Epifanía en nuestra comunidad católica es que Jesús ha venido en beneficio de todas las naciones, y en la persona de los Magos venidos de oriente estamos representados todos aquellos que hemos llegado a reconocer a Jesús como Nuestro Señor, pero no descendemos de la nación judía. Ahora bien, la historia de la celebración de la Epifanía dentro de la Iglesia es mucho más compleja de lo que parece. Hasta nuestros días el domingo posterior a la fiesta de la Epifanía se celebra la fiesta del Bautismo de Jesús. Por mucho tiempo ambas fiestas estuvieron unidas en el 6 de enero. En realidad en cuanto a su contenido son com- Piénsalo dos veces La cajuela ALBERTO QUIROGA En una ocasión acompañé a un amigo a su auto. Cuando abrió la cajuela, observé que había varios objetos de metal, entre ellos, un motor viejo de una lavadora y otras cosas similares. Le pregunté si los iba a llevar a algún lado a reparar o vender, y me contestó que no, que los había puesto allí como bodega, porque no quería tener aquellas cosas en su casa, y le pareció bien dejarlas allí guardadas. Le comenté que entre más pesado está un auto, más gasolina consume. Traer peso por cosas que no se van a utilizar, es gastar sin darse cuenta. –No lo había visto de esa forma –me respondió–. Pensé que no pasaba nada; además, siento feo tirar esas cosas porque creo que aún sirven, y en mi departamento no las puedo tener. Me quedé pensando que lo mismo ocurre con nuestros pecados. Los andamos cargando todo el tiempo, lo cual nos desgasta, pero nos negamos a dejarlos. Queremos ocultarlos, pero acabamos desgastados. Que un buen examen de conciencia y una buena confesión nos ayuden a vaciar “esa cajuela”. plementarias puesto que Jesús, al ser bautizado, se manifestó como el Hijo de Dios, así lo dicen todos los relatos del bautismo del Señor: entonces se oyó una voz del cielo que dijo: Este es mi Hijo Amado , por este motivo en algunas comunidades del oriente cristiano a esta festividad también se le llamaba la fiesta de la Teofanía (manifestación de Dios). La actual celebración de la fiesta del Bautismo del Señor sirve de gozne entre el tiempo de Navidad y el Tiempo Ordinario. Por tanto, se entiende que la Navidad comprende desde el nacimiento del Señor, pasa por la manifestación de Jesús a los magos, y culmina (en sentido celebrativo) en el Bautismo del Señor, el cual es propiamente dicho una manifestación divina. Pero hay un tercer sentido de la Epifanía en la historia de la Iglesia, ésta se refiere a la primera señal que realizó Jesús, de acuerdo con el Evangelio de san Juan, la cual consistió en la conversión del agua en vino durante las Bodas de Caná. El sentido de este acontecimiento coincide con los otros sentidos porque Jesús, según nos lo reporta este evangelista, dio inicio de esta forma a sus señales milagrosas. Una vez que nos hemos dado un paseo por los diversos sentidos que ha tenido esta fiesta a lo largo de la historia podemos concluir que para la comunidad cristiana siempre ha sido importante recalcar la humanidad de Jesús y el inicio de sus manifestaciones como verdadero Hijo de Dios para la salvación de toda la humanidad. 15 del 3 al 9 de enero de 2016 Lectura del Santo Evangelio En el principio ya existía la Palabra, y la Palabra estaba junto a Dios, y la Palabra era Dios. La Palabra en el principio estaba junto a Dios. Por medio de la Palabra se hizo todo, y sin ella no se hizo nada de lo que se ha hecho. En la Palabra había vida, y la vida era la luz de los hombres. La luz brilla en la tiniebla, y la tiniebla no la recibió. Surgió un hombre enviado por Dios, que se llamaba Juan: éste venía como testigo, para dar testimonio de la luz, para que por él todos vinieran a la fe. No era él la luz, sino testigo de la luz. La Palabra era la luz verdadera, que alumbra a todo hombre. Al mundo vino, y en el mundo estaba; el mundo se hizo por medio de ella, y el mundo no la conoció. Vino a su casa, y los suyos no la recibieron. Pero a cuantos la recibieron, les da poder para ser hijos de Dios, si creen en su nombre. Éstos no han nacido de sangre, ni de amor carnal, ni de amor humano, sino de Dios.Y la Palabra se hizo carne y acampó entre nosotros, y hemos contemplado su gloria: gloria propia del Hijo único del Padre, lleno de gracia y de verdad. Juan da testimonio de Él y grita diciendo: “Este es de quien dije: “El que viene detrás de mí pasa delante de mí, porque existía antes que yo.” Pues de su plenitud todos hemos recibido, gracia tras gracia. Porque la ley se dio por medio de Moisés, la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo. A Dios nadie lo ha visto jamás: Dios Hijo único, que está en el seno del Padre, es quien lo ha dado ha conocer. (Jn 1,1-18) “Y la Palabra se hizo carne” Lectio Divina Para comprender FELIPE MONROY MONROY FELIPE VIDA NUEVA NUEVA MÉXICO MÉXICO VIDA y vivir el Evangelio P. Julio César Saucedo ¿Qué dice el texto? Este texto puede ser comprendido bajo la siguiente estructura: a) La Palabra en Dios, luz y vida del mundo (vv. 1-5). Haciendo eco al libro del Génesis (1,1: «En el principio creó Dios el cielo y la tierra») Juan revela la preexistencia del Verbo en relación con el Padre. De esta forma, el autor presenta la obra de la revelación cumplida por la Palabra en la creación y en la redención: «y la vida era la luz de los hombres» (v. 4). El último versículo de esta primera parte (v. 5), se expresa: «y la luz brilla en las tinieblas, y las tinieblas no la vencieron». Justamente el momento terrible de la Cruz constituye la prueba suprema de que ninguna tiniebla puede apagar la Luz que es capaz de transformar un instrumento de suplicio en un trono de gloria (Jn 12,32). b) La encarnación de la Palabra (vv. 6-14). Esta segunda parte, presenta al hombre como aquél que está en búsqueda de la Luz, mas él puede extraviarse por el engaño de otras luces falsas e incompletas. La afirmación de Juan, «la Palabra era la luz verdadera» (v. 9) expresa que solamente aquel que se abre a ella encuentra la comprensión genuina de Dios y de sí mismo: «el misterio del hombre solo se esclarece en el misterio del Verbo encarnado» (CONCILIO VATICANO II, Gaudium et spes 22). Posteriormente, el autor presenta el drama de la libertad: «vino a los suyos, y los suyos no la recibieron» (v. 11). El mundo es visto positivamente porque es amado por Dios (Jn 3,16); sin embargo, el amor del Padre no suprime la responsabilidad humana en aceptarlo o rechazarlo. c) La Palabra en la vida de la comunidad de los discípulos (vv. 15-18). El texto concluye con una invitación a la escucha de la Palabra. Esta característica es propia de quien desea ser discípulo de Jesús; pues justamente de la escucha el discípulo se hace testigo (mártir). De este modo, el prólogo de san Juan inició presentando quién es el Hijo, pero termina expresando la «gracia sobre gracia» que se concede en Él, a saber, la de ser hijos. ¿Qué me dice el texto? Cada autor dedica tiempo a la apertura de su obra, dado que las primeras líneas o páginas crean una relación con el lector, revelando el objetivo de su misma obra. El Evangelio según san Juan abre con un himno que celebra a Jesús como Palabra –en griego Logos–. Palabra sugiere comunicación, deseo de entrar en relación con alguien reconocido como «otro», como un «tú». Juan sitúa, pues, su evangelio en un largo diálogo entre Dios y la humanidad, cuyo corazón radica en la expresión: «y la Palabra se hizo carne y puso su morada entre nosotros» (v. 14). El texto no es fácil porque no es narrativo, sin embargo, es extraordinario porque permite contemplar el misterio de la encarnación desde otra óptica: ver la historia con los ojos de Dios a partir del Verbo encarnado, quien revela que la «gloria de Dios no se manifiesta en el triunfo y en el poder de un rey, no resplandece en una ciudad famosa, en un suntuoso palacio, sino que toma morada en el seno de una Virgen y se revela en la pobreza de un niño. La omnipotencia de Dios, también en nuestra vida, actúa con la fuerza, siempre silenciosa, de la verdad y del amor. La fe nos dice, entonces, que la indefensa potencia de aquel Niño al final vence el rumor de las potencias del mundo. […] En aquel Niño, en efecto, se manifiesta Dios-Amor: Dios sin armas, sin fuerza, porque no pretende conquistar, por así decir, desde lo externo, sino pretende ser acogido por el hombre en la libertad; Dios se hace Niño indefenso para vencer la soberbia, la violencia, el bramido del poseer del hombre» (Joseph Ratzinger). ¿Qué me hace decir el texto? Padre de eterna misericordia, que en tu único Hijo nos has elegido y amado antes de la creación del mundo, y en Él, revelas tu amor y lo que nosotros somos; ilumínanos con tu Espíritu para que sepamos reconocer tu bondad en el rostro de cada hermano, concediéndonos el perdón, la paz y la benevolencia que proceden de ti. 16 del 3 al 9 de enero de 2016 Haz misericordia, adopta a un refugiado GUADALUPE ESQUIVIAS * Comienza el Jubileo Extraordinario de la Misericordia convocado por el Papa Francisco. Tiempo de reflexión y no sólo de eso, de acción para todos aquéllos que vivimos inmersos en el mundo de hoy. En la bula de convocación, el Papa Francisco asegura que en este tiempo se podrá realizar la experiencia de abrir el corazón a cuantos viven en las más contradictorias periferias existenciales, que con frecuencia el mundo moderno dramáticamente crea, y con admiración señala: “¡Cuántas situaciones de precariedad y sufrimiento existen en el mundo hoy! ¡Cuántas heridas sellan la carne de muchos que no tienen voz porque su grito se ha debilitado y silenciado a causa de la indiferencia de los pueblos ricos!” El Papa convoca a abrir los ojos para mirar las miserias del mundo, las heridas de tantos privados de la dignidad, y a sentirnos provocados a escuchar sus gritos de auxilio. A estrechar nuestras manos con las suyas, a acercarnos para que sientan el calor de nuestra presencia, de nuestra amistad y de la fraternidad. Recuerda que obras de misericordia son dar de comer al hambriento, dar de beber al sediento, vestir al desnudo, acoger al forastero, asistir a los enfermos, visitar a los presos, enterrar a los muertos. Además dar consejo al que lo necesita, enseñar al que no sabe, corregir al que yerra, consolar al triste, perdonar las ofensas, soportar con paciencia las personas molestas, rogar a Dios por los vivos y por los difuntos. Ojalá la invitación del Papa pudiera provocar hacer un alto en nuestro día a día y ver si para comenzar a ser misericordioso con otros, no se tendría que iniciar por uno mismo, tener misericordia por nuestra persona, perdonarnos por vivir estresados, cansados, quejumbrosos, adormecidos, desconfiados e intimidados ante los grandes retos tecnológicos y mercadológicos que ganan terreno en nuestro andar. Perdonarnos porque hemos dejado de ver la misericordia que se genera en nuestro alrededor. Ser misericordiosos con nosotros mismos, por no voltear a ver la grandeza de quienes viven y duermen en casa. Perdonarnos por hacer menos la misericordia que los niños nos brindan cuando brincan, sonríen y viven con inocencia; y perdonarnos por no saber de la misericordia que nos proporciona el saber que existe aún gente buena que trabaja para buscar el bien común en este mundo. Una vez que hiciéramos ese alto en el camino para ser misericordiosos con nuestra persona, abrir el corazón y utilizar las nuevas tecnologías para conocer y sumarnos a tantas y tantas obras de misericordia que están encomendadas a ir a la periferias del corazón, como lo sugiere el Papa. Hace poco en el Museo Soumaya de la capital mexicana, tuvo lugar el ‘Primer Encuentro por los Cristianos Perseguidos’, organizado por Ayuda a la Iglesia que Sufre (AIS México), bajo el lema “México es su esperanza”. Los cristianos de los lugares que sufren esta persecución como Irak, Siria, África y China, dieron su testimonio en este encuentro. Se puso de manifiesto que en el mundo hay 200 millones de personas que son perseguidas por sus creencias y 50 millones más que sufren discriminación. Y acudieron responsables de obras de caridad que devuelven la esperanza en los lugares en donde la persecución religiosa es un martirio, como la Madre Guadalupe, que ha sobrevivido en medio de la guerra en Alepo, capital de Siria, y cuya vida es una muestra inigualable de la misericordia, ya que trabaja en la ardua labor de curar el alma de los dolidos por la guerra. Una obra de misericordia que pareciera lejos, pero está más cerca de nosotros gracias a AIS, institución que requiere manos voluntarias y donativos para seguir brindando la misericordia en aquellos refugiados que como María, José y el niño Jesús algún día tuvieron que desplazarse por la persecución. * Colaboradora de AIS-México Donativos INBURSA 50028265021 / 036180500282650219 BANCOMER 0196372457 / 012180001963724576 BANAMEX sucursal 7006 / Nº de cuenta 6995141 www.ayudaalaiglesiaquesufre.mx Teléfono: 55 41 61 33 31