XI JORNADAS ANÁLISIS CONTABLE Córdoba, 9 de Noviembre de 2007 ANÁLISIS Y VALORACIÓN DE PEQUEÑAS Y MEDIANAS EMPRESAS ASEPUC XI JORNADAS ANÁLISIS CONTABLE - Córdoba, 9 de Noviembre de 2007 ANÁLISIS Y VALORACIÓN DE PEQUEÑAS Y MEDIANAS EMPRESAS índice PRESENTACIÓN 4 1. COMPARABILIDAD DE LA INFORMACIÓN FINANCIERA ELABORADA SEGÚN EL PLAN GENERAL DE CONTABILIDAD ESPAÑOL DE 1990 Y LAS NIIF 5 1. INTRODUCCIÓN _______________________________________________________________________________6 2. CUESTIONES A INVESTIGAR _____________________________________________________________________7 3. DISEÑO DE LA INVESTIGACIÓN ___________________________________________________________________8 4. RESULTADOS ________________________________________________________________________________11 5. CONCLUSIONES E IMPLICACIONES _______________________________________________________________17 TABLAS ______________________________________________________________________________________18 BIBLIOGRAFÍA _____________________________________________________________________________22 2. EL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO: PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS 23 1. INTRODUCCIÓN ______________________________________________________________________________24 2. OBJETIVO Y CLASIFICACIÓN DE LOS FLUJOS DE EFECTIVO ____________________________________________26 3. LA ESTRUCTURA DEL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO: ANÁLISIS COMPARADO ___________________________31 4. UTILIDAD DEL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO ____________________________________________________37 5. CONCLUSIONES FINALES _______________________________________________________________________39 BIBLIOGRAFÍA _____________________________________________________________________________41 3. UTILIDAD DEL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO PARA DETECTAR MANIPULACIONES DE RESULTADOS 43 1. INTRODUCCIÓN ______________________________________________________________________________44 2. CONTABILIDAD CREATIVA Y RESULTADOS __________________________________________________________44 3. RESULTADOS VERSUS FLUJOS DE EFECTIVO DE EXPLOTACIÓN__________________________________________45 4. ESTUDIO EMPÍRICO SOBRE LA COMPARACIÓN ENTRE RESULTADOS Y FLUJOS DE EFECTIVO DE EXPLOTACIÓN ____49 5. CONCLUSIONES ______________________________________________________________________________56 BIBLIOGRAFÍA _____________________________________________________________________________57 4. ANÁLISIS DEL RIESGO Y TRATAMIENTO DEL DESCUENTO BANCARIO 58 1. INTRODUCCIÓN ______________________________________________________________________________59 2. ANTECEDENTES ______________________________________________________________________________59 3. EL ANÁLISIS DE LA SOLVENCIA TÉCNICA EN BASE A DATOS CONTABLES __________________________________62 4. EL EFECTO DEL DESCUENTO EN EL ANÁLISIS DE LA SOLVENCIA _________________________________________66 5. CONCLUSIONES ______________________________________________________________________________67 BIBLIOGRAFÍA _________________________________________________________________________________68 APENDICE 1 _______________________________________________________________________________70 XI JORNADAS ANÁLISIS CONTABLE - Córdoba, 9 de Noviembre de 2007 ANÁLISIS Y VALORACIÓN DE PEQUEÑAS Y MEDIANAS EMPRESAS índice 5. LA INSOLVENCIA EMPRESARIAL EN LAS MICROEMPRESAS DE LA COMUNIDAD VALENCIANA UNA APROXIMACIÓNA PARTIR DEL ANALISIS UNIVARIANTE 74 1. INTRODUCCIÓN ______________________________________________________________________________75 2. METODOLOGIA PARA LA PREDICCIÓN DE LA INSOLVENCIA PARA LAS MICROEMPRESAS DE LA COMUNIDAD VALENCIANA ___________________________________________________________________76 3. CONCLUSIONES ______________________________________________________________________________88 BIBLIOGRAFÍA _________________________________________________________________________________89 6. LA REFORMA DEL TRATAMIENTO DE LOS ARRENDAMIENTOS: HACIA UNA REVELACIÓN MÁS ADECUADA DE LOS RECURSOS, COMPROMISOS Y ESTRATEGIA EN LA GESTIÓN DE ACTIVOS DE LA ENTIDAD 91 1. INTRODUCCIÓN ______________________________________________________________________________92 2. EL ESTADO DE LA CUESTIÓN EN LA LITERATURA CIENTÍFICA ___________________________________________93 3. METODOLOGÍA_______________________________________________________________________________97 4. RESULTADOS _______________________________________________________________________________100 5. CONCLUSIONES _____________________________________________________________________________108 BIBLIOGRAFÍA ________________________________________________________________________________109 ANEXO 1 ________________________________________________________________________________111 XI JORNADAS ANÁLISIS CONTABLE - Córdoba, 9 de Noviembre de 2007 ANÁLISIS Y VALORACIÓN DE PEQUEÑAS Y MEDIANAS EMPRESAS presentación 4 El análisis de las empresas con la finalidad de emitir un diagnóstico que tenga utilidad para un decisor no es un capítulo agotado en el campo de las finanzas, sino que tiene un interés creciente en la actualidad y se enfrenta a no pocos problemas. Si la empresa a analizar no cotiza en bolsa y además es pequeña y mediana los problemas se agigantan. Las jornadas de ASEPUC, que se celebrarán en Córdoba, el 9 de noviembre del 2007, proporcionan una magnífica ocasión para que profesores y expertos revisen las metodologías utilizadas, avancen en los aspectos conceptuales del análisis financiero y debatan sobre los nuevos retos, que desde distintos ángulos, se plantean en el futuro. El tema del encuentro, Análisis y valoración de pequeñas y medianas empresas, se encuadra en ámbito general del análisis financiero con dos concreciones importantes: una con carácter exclusivo, su aplicación a la pequeña y mediana empresa y otra con carácter opcional, la valoración de la misma a efectos de compraventa. El análisis y la valoración de las pymes, mucho menos desarrollado que el de las empresas cotizadas, tiene numerosos aspectos, en los ámbitos metodológico y conceptual, no resueltos, algunos son antiguos y otros nuevos, unos exclusivos de las pequeñas y medianas empresas y otros que afectan a todas. A modo de ejemplo enumeramos algunos de ellos: Las peculiaridades propias de las empresas familiares. Las dificultades relacionadas con la información a utilizar, tanto las del entorno exterior de la empresa como las variables internas, en particular, la valoración de los intangibles. El tratamiento de la información financiera estudiada, en especial las dificultades para contrastar la información contable de empresas no auditadas. La nueva situación creada con la armonización contable europea y los cambios formales y conceptuales introducidos por las NIC/NIIF. Las dificultades de los modelos tradicionales cuando se encuentran con empresas que operan en mercados con alto nivel de incertidumbre. Los cambios de enfoque requeridos para evaluar situaciones que se plantean desde la ética y el interés social, y que se contraponen con los criterios de eficiencia reclamados por lo economía de mercado, tales como decisiones en política de defensa del medio ambiente, o de responsabilidad social de la empresa, en general. Todo ello exige una puesta a punto de las metodologías aplicadas, la búsqueda de nuevos métodos y modelos que abarquen la complejidad de las nuevas situaciones y el contraste permanente con la realidad. El Comité organizador. COMPARABILIDAD DE LA INFORMACIÓN FINANCIERA ELABORADA SEGÚN EL PLAN GENERAL DE CONTABILIDAD ESPAÑOL DE 1990 Y LAS NIIF Gonzalo Rodríguez Pérez John Slof Magda Solà Tey Departamento de Economía de la Empresa Universidad Autónoma de Barcelona Universidad Autónoma de Barcelona - 08193 Cerdanyola (Barcelona). España Tf.: 93 581 12 09 Fax.: 93 581 25 55 e-mail de contacto: gonzalo.rodriguez@uab.es PALABRAS CLAVE Cambio criterio contable, comparabilidad, NIIF, PGC. RESUMEN Se analiza el impacto de la aplicación de las NIIF en las magnitudes más importantes de las cuentas anuales consolidadas de grupos que cotizan en el mercado continuo español, ofreciéndose explicaciones a los cambios encontrados con el PGC. A pesar de que pocas diferencias de medias entre partidas resultan significativas para el conjunto, para numerosas empresas individuales se dan cambios materiales (definidos como aumentos o disminuciones superiores a 10% de su valor inicial) en elementos tan importantes como los activos financieros (en el caso del 44% de las empresas), el patrimonio neto (31%) y el resultado (40%), entre otras. En las conclusiones se discuten las implicaciones que los cambios anteriores pueden tener para analistas, inversores, investigadores y diseñadores de políticas macroeconómicas. COMPARABILIDAD DE LA INFORMACIÓN FINANCIERA ELABORADA SEGÚN EL PLAN GENERAL DE CONTABILIDAD ESPAÑOL DE 1990 Y LAS NIIF 6 1. INTRODUCCIÓN La creciente globalización de las empresas en los últimos tiempos, así como la integración que han llevado a cabo los países pertenecientes a la Unión Europea ha planteado la necesidad de elaborar estados financieros comparables a nivel internacional, con la doble finalidad de que la información contable sea útil para la toma de decisiones y con la de disminuir los costes que las empresas con actividad en distintos países tienen que soportar, al tener que adaptar la elaboración de sus estados financieros a las distintas normas contables de los países donde desarrollan su actividad. El Reglamento (CE) 1606/2002, de 19 de julio sobre la aplicación de las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF) da dos opciones a los estados miembros de la Unión Europea. Estos pueden permitir o exigir a las sociedades cuyos valores, en la fecha de cierre de su balance, hayan sido admitidos a cotización en un mercado regulado de cualquier Estado que, a partir del 1 de enero de 2005, elaboren sus cuentas consolidadas de conformidad con las NIIF. En España se optó por la exigibilidad de dichas normas, lo cual nos lleva a plantearnos las consecuencias, en términos de comparabilidad, de la adopción de las mismas. El objetivo de esta investigación es comprobar hasta qué punto la información financiera elaborada a partir del Plan General de Contabilidad de 1990 (PGC) es comparable a la elaborada al aplicar las NIIF. A tal efecto, se identificarán las partidas más relevantes del balance y la cuenta de resultados, y ratios derivadas de las mismas, para analizar en cuáles de ellas se produce una mayor o menor divergencia, comprobando si la misma es o no relevante y cuál es la normativa específica y las razones que han provocado el cambio, si éste existe. A tal efecto, la muestra considerada consta de las cuentas consolidadas del ejercicio de 2005 de empresas que cotizaban en el mercado continuo de la bolsa española. En este ejercicio las empresas objeto de estudio presentan los datos consolidados del ejercicio 2005 y los comparativos de 2004 elaborados según la normativa de las NIIF. Asimismo, estas empresas han de presentar una conciliación del ejercicio 2004 según las dos normativas. Este último ha sido el ejercicio analizado, pues permite comparar los estados financieros elaborados con las dos normativas en una misma fecha. En esta investigación se encuentran evidencias de no comparabilidad entre las dos normativas en numerosas partidas contables. Las mayores diferencias, utilizando varias medidas para evaluar la comparabilidad, se encuentran en los activos financieros, patrimonio neto, deuda a largo plazo, amortizaciones, otros gastos y resultado neto. Diferentes criterios de valoración (valor razonable, coste amortizado, …) y reclasificaciones entre partidas pueden explicar los cambios anteriores. La falta de comparabilidad entre la información del PGC y las NIIF tiene numerosas implicaciones. La principal es que imposibilita un análisis temporal de las empresas con los datos actualmente disponibles (PGC hasta 2004 y NIIF a partir de esta fecha). El efecto anterior afectará tanto a inversores y analistas como a investigadores y reguladores, que necesitarán realizar algún tipo de ajuste para comparar la información. Por otro lado, puede existir un efecto de reorientación de las inversiones, ya que los indicadores contables cambian de forma relevante en la mayoría de las empresas, y pueden llevar a tomar decisiones diferentes a las efectuadas hasta ahora. Aunque a nivel individual las diferencias entre los dos sistemas contables afectan a numerosas empresas (por ejemplo el resultado cambia más de 10% para un 40% de las empresas analizadas), en el conjunto magnitudes en un sentido pueden compensar los cambios en otro sentido, por lo que puede parecer que las cifras no varían (y globalmente parece ser así en la mayor parte de partidas analizadas). COMPARABILIDAD DE LA INFORMACIÓN FINANCIERA ELABORADA SEGÚN EL PLAN GENERAL DE CONTABILIDAD ESPAÑOL DE 1990 Y LAS NIIF 7 Estudios previos han demostrado diversos beneficios al adoptar las NIIF sobre las normativas locales: mejoran la capacidad de los inversores para tomar decisiones, permiten la comparación entre países y reducen el riesgo y el coste del capital para las empresas (Street el al., 1999). Comprobar si realmente existen diferencias entre la información presentada según el PGC y las NIIF es condición suficiente, pero no necesaria, para reforzar la idea de que las NIIF son superiores a la normativa local, puesto que si no hubiese diferencias la información sería similar. Otra cuestión adicional, no tratada en este estudio, es comprobar qué información es más útil. En otro tipo de estudios, al testar cómo reaccionan las cotizaciones a los datos contables calculados según la normativa local y según las NIIF, se puede comprobar que la normativa NIIF es de mejor calidad, en el sentido de explicar mejor el valor de la empresa (Van der Meulen et al, 2007). Este trabajo se estructura de la siguiente manera: en el siguiente apartado se presentan las cuestiones a investigar, para posteriormente explicar en el apartado de diseño de la investigación la muestra y las medidas de comparabilidad utilizadas. Posteriormente se presentan los resultados para pasar finalmente a las conclusiones e implicaciones del estudio. 2.CUESTIONES A INVESTIGAR Los resultados acerca de la comparabilidad de la información entre diferentes normativas contables no son concluyentes. Varios estudios han analizado las divergencias entre las NIIF y diferentes regulaciones locales, en especial los U.S. GAAP. La mayoría de estudios comparan estas dos normativas, puesto que numerosas empresas han de reconciliar la información preparada según las NIIF con la normativa estadounidense debido a que cotizan en mercados de ese país. Street et al. (1999), encuentran diferencias, aunque no muy importantes, entre las NIIF y la normativa estadounidense, especialmente en la determinación del resultado, gastos en I+D, diferencias de cambio y combinaciones de negocio. También Harris y Muller (1999) encuentran evidencias de no comparabilidad en el caso del resultado y los activos netos. Por otro lado, Street, Nichols y Gray (2000) encuentran evidencias de convergencia entre las normativas anteriores, para una muestra de empresas que reconcilian la información contable preparada según las NIIF y que luego es reconciliada según la normativa U.S. GAAP. En un reciente estudio con empresas chinas, Haverty (2006) halla evidencia de falta de comparabilidad entre la información preparada con estas dos normas contables, causada mayormente por revalorizaciones de inmovilizado material, permitidas por las NIIF pero no por las U.S. GAAP, aunque sin embargo destacan la convergencia que se ha ido produciendo a lo largo de los años entre los datos contables preparados según estas dos normativas. La primera de las cuestiones planteadas en este trabajo (Q1) pretende determinar si existen diferencias en los valores de distintas partidas del balance, la cuenta de pérdidas y ganancias y algunas de los ratios de utilización habitual, entre la información contable elaborada según las NIIF y el PGC, comprobando si es o no comparable. La importancia de plantearnos esta disyuntiva es sin duda clave para las empresas y los analistas, puesto que si se demuestran como no comparables los estados financieros elaborados bajo las dos normativas contables, cualquier análisis temporal se verá truncado con la adopción de las normas COMPARABILIDAD DE LA INFORMACIÓN FINANCIERA ELABORADA SEGÚN EL PLAN GENERAL DE CONTABILIDAD ESPAÑOL DE 1990 Y LAS NIIF 8 contables NIIF, y conducirá a tomar distintas decisiones según la aplicación de las diferentes normativas. Se plantea así la primera pregunta: Q1: ¿Es materialmente diferente la información contable generada con la aplicación de las NIIF de la generada aplicando el PGC? Respecto a la segunda cuestión, nos planteamos a qué puede deberse una posible falta de comparabilidad entre las dos normativas. Los cambios de valor que presentan las distintas partidas de los estados contables pueden deberse a dos motivos distintos. En primer lugar, pueden aparecer diferencias de valor debidas a la introducción de distintas formas de valoración. Así como el PGC sólo permite valorar, de forma general, activos a precio de adquisición y pasivos a valor de reembolso o valor nominal, en la aplicación de las NIIF se permiten en algunos casos valoraciones alternativas, como el valor razonable o el coste amortizado. En segundo lugar, los modelos de las cuentas anuales según las NIIF obligan a algunas clasificaciones distintas a las del PGC, lo que también puede ser origen de algunas diferencias. Así, por ejemplo, de acuerdo con las normas NIIF, los activos fijos (no corrientes) que la empresa pretenda recuperar mediante su venta, y no mediante su utilización, y cuando sea probable su enajenación a corto plazo, deben clasificarse en el activo corriente. No es así, en cambio, si se sigue el PGC, ya que dichos activos siguen clasificados como inmovilizados. Así, la segunda pregunta que nos planteamos es: Q2: ¿Cuáles son las razones que explican la comparabilidad entre las normativas contables estudiadas? 3. DISEÑO DE LA INVESTIGACIÓN 3.1. Muestra El estudio se ha realizado sobre las cuentas de los grupos de empresas no financieras que cotizaban en el mercado continuo de la bolsa española en diciembre de 2005. En este ejercicio económico estas empresas estaban por primera vez obligadas a elaborar sus cuentas consolidadas según las NIIF. A su vez, debían presentar las cifras comparativas a diciembre de 2004 elaboradas también según las NIIF. Estos requerimientos han creado una situación única, puesto que las cuentas anuales a diciembre de 2004 bajo la normativa del PGC se pueden comparar con las del 2004 bajo la normativa NIIF. La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha exigido además que las empresas presenten un balance con un formato intermedio entre el exigido por las NIIF y el del PGC, reconciliando estas dos informaciones sobre la misma estructura formal, elaborada una según las NIIF y otra según el PGC. En cuanto a la cuenta de resultados no existe esta exigencia, por lo que se ha optado por comparar la información del ejercicio de 2004 utilizando las cuentas del periodo 2004-2003 (elaborada según el PGC) y las del periodo 2005-2004 (elaborada según las NIIF), estableciendo las equivalencias oportunas en las diferentes partidas. El número de empresas no financieras del mercado continuo español con obligación de presentar información consolidada a diciembre de 2005 en la CNMV era de 102 empresas. De éstas, 21 no presentan toda la información requerida para el estudio, por lo que la muestra final analizada se compone de 81 empresas. COMPARABILIDAD DE LA INFORMACIÓN FINANCIERA ELABORADA SEGÚN EL PLAN GENERAL DE CONTABILIDAD ESPAÑOL DE 1990 Y LAS NIIF 9 3.2. Metodología Para responder a las cuestiones planteadas, se analizan las diferencias de valores que se dan en distintas partidas de balance, cuenta de resultados y ratios más habituales al utilizar ambas normas contables. En primer lugar, y dado que de la práctica totalidad de las partidas (excepto la de la ratio de deuda) no sigue una distribución normal, se calcula para ellas un test de rangos de Wilcoxon, que permite establecer si existen diferencias significativas de rango entre las magnitudes. Este test es asimismo indicado para muestras relativamente pequeñas. Como una medida alternativa se utiliza un test t-Student de diferencias de medias, eliminando en este caso los casos extremos(1). Este test requiere una interpretación más cauta, ya que las distribuciones de las variables están sesgadas (tablas 1 y 3). La segunda medida utilizada para analizar la comparabilidad entre datos calculados según NIIF y PGC es el llamado índice de comparabilidad, usado por primera vez por Gray (1980) y comúnmente utilizado en otros estudios posteriores (Weetman, Jones, Adams y Gray, 1998; Adams, Weetman, Jones y Gray, 199; Street et al., 2000 y Haverty, 2006): ( partida NIIF partida PGC partida NIIF ( 1 x 100 [1] Con el fin de eliminar los problemas derivados de valores extremos de este índice (como por ejemplo cuando el denominador es próximo a cero) se han eliminado las observaciones cuyo índice era menor o igual que cero o mayor que 200. El rango de variación se sitúa así entre 0 y 200, siendo el valor 100 el correspondiente a aquellos casos en que no existe una variación entre la partida correspondiente calculada según los dos sistemas contables. Un índice con un valor de 110 indicará que la partida elaborada según el PGC es un 10% más alta que la elaborada según las NIIF. Un valor de 90 indicaría que la partida según el PGC es un 10% menor que la calculada según las NIIF. Respecto a la consideración de qué valor de este índice representa materialidad en el cambio de valor, los estudios generalmente utilizan un intervalo de rango entre el 5% i el 10% alrededor del valor 100, tanto por encima como por debajo. En la investigación de Adams et al. (1999) se considera que el cambio relevante se produce por encima del 10%, porcentaje que también hemos adoptado en nuestro estudio debido a que en la muestra utilizada es alrededor del 10% donde se encuentra el mayor porcentaje de empresas con cambios relevantes de valor (columnas 2, 3 y 4 de las tablas 2 y 4). Con el índice anterior para cada partida analizada, se ha calculado su media y se ha contrastado si es significativamente diferente de 100, indicando entonces que se ha producido un cambio significativo en la partida al cambiar de sistema contable. El contraste se ha efectuado con un test de Wilcoxon, al presentar la mayoría de las variables una distribución significativamente diferente de la normal. En las tablas correspondientes (2 y 4) se indican las variables con distribución normal, para las cuales se ha realizado alternativamente un test t-Student (columna 5 e las tablas 2 y 4). Respecto a las medidas anteriores de comparabilidad, hay que señalar que en algunos casos presentan resultados no coincidentes. Por ejemplo, podría suceder que la media de alguna partida no fuera significativamente (1) Como normal general y a fin de seguir un criterio homogéneo, para este test se ha optado por suprimir el 10% de las observaciones por encima y por debajo del valor de cada variable, salvo en casos excepcionales, en que se han eliminado observaciones adicionales que por sus valores podrían distorsionar los resultados, como por ejemplo los valores cero. COMPARABILIDAD DE LA INFORMACIÓN FINANCIERA ELABORADA SEGÚN EL PLAN GENERAL DE CONTABILIDAD ESPAÑOL DE 1990 Y LAS NIIF 10 diferente entre las dos normativas contables, que a su vez el índice de comparabilidad tampoco fuera significativamente diferente de 100 y, sin embargo, hubiese un gran número de empresas que presentan cambios materiales (superior a 10%). En nuestra opinión, esta última sería la medida de cambio más relevante a considerar, y en ella está centrado el análisis. Las otras dos medidas están basadas en una comparación de medias, y puede suceder que valores positivos anulen valores negativos, resultando en medias muy cercanas cuando en realidad existe una gran variabilidad entre empresas. Así, cuando un número similar de empresas sufren cambios materiales por encima y por debajo del 10% (inferior a 90% y superior a 110%), puede resultar una media significativamente igual a 100, cuando lo que realmente sucede es que valores por encima de 100 son compensados por valores situados por debajo. Para evitar este problema, se ha realizado el test de Wilcoxon (o alternativamente, t-Student) en dos submuestras. Analizamos por separado si los cambios son significativos en las medias del índice de comparabilidad con valores positivos y negativos, es decir, medias en los que al pasar a normas NIIF el índice disminuye el valor y medias en las que aumenta (tablas 2 y 4, columnas 7 y 9). En las columnas 8 y 10 de la tabla 2 se muestra el número de empresas en las que el índice cambia materialmente su valor en cada partida: en la columna 8 aparecen las empresas cuyo valor disminuye al adoptar las NIIF y en la columna 10 se indica el número de empresas en el que aumenta. Hay que señalar que todas las variaciones anteriores aparecen como significativas. Las medidas anteriores de comparabilidad se han aplicado a una serie de partidas del balance, la cuenta de resultados y ratios más habituales, para comparar los valores que asumen siguiendo las NIIF y los que tienen siguiendo el PGC. En las tablas 1 y 2 figuran las partidas de balance seleccionadas, y en las tablas 3 y 4 las partidas correspondientes a la cuenta de resultados y ratios de síntesis. Se han seleccionado aquellas partidas de activo más relevantes para el análisis: inmovilizado material e inversiones inmobiliarias, fondo de comercio, otros activos intangibles, activos financieros, activos a largo plazo, existencias, deudores, activos a corto plazo y activo total. Se analizan también el patrimonio neto, el pasivo a largo plazo, el pasivo a corto plazo, la deuda con coste y las provisiones totales. Estas partidas de pasivo y patrimonio son importantes tanto por su magnitud en el balance total, como por estar, a priori, posiblemente afectadas por los cambios introducidos por las NIIF en cuanto a criterios de valoración y clasificación. Lo mismo sucede con las siguientes partidas de la cuenta de resultados: importe neto de la cifra de negocios, aprovisionamiento, otros gastos, valor añadido, gastos de personal, dotación a las amortizaciones, resultado de explotación, ingresos financieros, gastos financieros, diferencias de cambio, participación en el resultado de las asociadas y negocios conjuntos contabilizadas según el método de la participación, impuesto sobre el beneficio, resultado neto del grupo, resultado atribuido a intereses minoritarios y resultado de la sociedad dominante. Finalmente, se ha efectuado la comparación de cinco ratios de gran importancia para el análisis empresarial, intentando recoger diferentes consideraciones sobre rentabilidad y solvencia: rentabilidad del activo, de los fondos propios, de la inversión, ratio de endeudamiento (deuda con coste sobre total de activo) y ratio de liquidez (activos a corto sobre pasivos a corto). COMPARABILIDAD DE LA INFORMACIÓN FINANCIERA ELABORADA SEGÚN EL PLAN GENERAL DE CONTABILIDAD ESPAÑOL DE 1990 Y LAS NIIF 11 4. RESULTADOS 4.1. Comparabilidad de los activos En la tabla 1 se muestran estadísticos descriptivos y un test t-Student y Wilcoxon para comprobar si existen diferencias significativas entre las partidas analizadas del PGC y las NIIF. Según estos estadísticos, la mayoría de partidas no se pueden considerar comparables. De todas las partidas de activo consideradas, solamente en tres, el fondo de comercio (FCC), las existencias (EX) y el activo total (TA), las diferencias de valor entre el PGC y las NIIF no son significativas y por lo tanto pueden considerarse comparables atendiendo tanto al test de Wilcoxon como al de la t-Student (en este último salvo para los activos a corto plazo, ACC, ver tabla 1). Sin embargo, ya hemos señalado las limitaciones de esta medida de comparabilidad basada en las medias. Con el fin de realizar un análisis más detallado de las partidas se activo, estudiamos las mismas por separado y basándonos en la tabla 2. Según la información de esta tabla, el activo total de las empresas cambia para el 17% de las mismas al pasar a NIIF, aunque para el 10% es menor y para el 7% mayor). Seguramente por esta razón el total del activo de la muestra no es significativamente diferente entre las dos normativas (tabla 1), ya que el número de empresas para las cuáles disminuye es aproximadamente el mismo que para las que aumenta. Por otro lado, en una misma empresa puede suceder que algunos activos aumenten mientras otros disminuyen, por lo que se hace difícil analizar globalmente esta partida, siendo más útil su estudio caso por caso. Hay que señalar que el número de empresas incluidas en el cálculo de los índices de comparabilidad de las partidas analizadas varía (tabla 2, columna 1) puesto que se han eliminado los resultados extremos, tal como se indica en el apartado de la metodología. 4.1.1. Inmovilizado material e inversiones inmobiliarias (IMII) La importancia cuantitativa de esta partida respecto al total de activos hace que su comportamiento condicione el del activo total en prácticamente la totalidad de las empresas. En esta partida se detecta una contradicción entre algunos resultados de las tablas 1 y 2. La media de esta partida es significativamente menor calculada según las NIIF (tabla 1). Sin embargo, en la tabla 2 podemos comprobar como la media global del índice de comparabilidad es de 93, siendo significativamente diferente de 100 e indicando que, en promedio, esta partida es un 7% inferior calculada según el PGC. Este resultado parece mucho más fiable, si lo analizamos teniendo en cuenta que el 32% de las empresas disminuye su índice de comparabilidad por debajo del 10%, indicando que para las mismas la cifra de inmovilizado material según las NIIF es un 10% mayor. Tan sólo para un 6% de las empresas sucede lo contrario, y para el resto la variación es menor a 10%. Esta divergencia de la tabla 1 en los resultados podría deberse a la influencia de los valores extremos, no considerados en la tabla 2. Las NIIF dan opción a las empresas a valorar a estos activos a valor razonable, lo cual podría explicar las diferencias de valor. Por otro lado, las NIIF obligan a reclasificar a cualquier inmovilizado que ya no se utilice en la actividad de la empresa y esté disponible para la venta, como activo corriente, siempre que cumpla determinadas condiciones, como que sea muy probable su venta en un plazo inferior a un año. En este caso algunas de las partidas que se consideran en el inmovilizado con el PGC, serán clasificadas como activo corriente con las NIIF, actuando en sentido contrario al incremento de valor que hemos visto anteriormente para numerosas empresas. Sin embargo, parece tener una mayor importancia el efecto de la revalorización de estos activos. COMPARABILIDAD DE LA INFORMACIÓN FINANCIERA ELABORADA SEGÚN EL PLAN GENERAL DE CONTABILIDAD ESPAÑOL DE 1990 Y LAS NIIF 12 4.1.2. Fondo de comercio de consolidación (FCC) Esta partida no presenta diferencias significativas entre los dos sistemas contables (tabla 1), aunque globalmente disminuye. Sin embargo comprobamos en la tabla 2 que varía de forma material para el 27% de las empresas. Para el 10% disminuye al aplicar las NIIF y para el 17% aumenta, con lo que podría ocurrir que globalmente los valores en un sentido de unas empresas compensen a otras en otro sentido. Dos elementos pueden explicar el comportamiento de esta partida. Por un lado la definición del perímetro de consolidación puede haber cambiado al aplicar las NIIF, variando entonces el fondo de comercio a la alza o a la baja. Por otro lado, según el PGC el fondo de comercio se ha de amortizar con un límite máximo de 20 años, mientras que según las NIIF esta partida tan sólo se ha de modificar en caso de sufrir depreciación. En algunas empresas esta depreciación puede superar a la considerada según un criterio lineal de amortización, que es el habitualmente empleado por las empresas, mientras que para otras puede haber sucedido lo contrario. Globalmente, la partida presenta un índice de comparabilidad significativamente inferior a 100 (columna 5, tabla 2), lo que nos indica que el valor de esta partida es menor según las NIIF, debido a que considerando esta partida en su totalidad el volumen de su disminución supera al de su incremento. 4.1.3. Otros activos intangibles (OAI) En la tabla 1 observamos como el valor de estos activos es significativamente menor para la magnitud calculada según las NIIF. Este resultado coincide con el de la tabla 2, puesto que para un 33% de las empresas el valor de esta partida es un 10% menor calculado según las NIIF, mientras que en sólo un 12% es superior. Dos factores pueden explicar la disminución de valor al aplicar las NIIF: en primer lugar, el endurecimiento de los requisitos de activación de los gastos de investigación y desarrollo, no permitiendo las NIIF, a diferencia del PGC, activar los gastos de investigación. En segundo lugar, debería tenerse en cuenta la posibilidad de una reclasificación de activos intangibles como activos no corrientes mantenidos para la venta, que formarían parte del circulante según las NIIF. Por otro lado, para explicar el incremento de valor de los intangibles en algunas empresas (12%) deberíamos considerar la posibilidad de que se hayan efectuado revalorizaciones. 4.1.4. Activos financieros (AFINA) El valor de la media de los activos financieros a corto y largo plazo es significativamente menor si se calculan según las NIIF (tabla 1). Sin embargo, al analizar la tabla 2 comprobamos como prácticamente en el mismo número de empresas estos activos disminuyen y aumentan de valor al aplicar las NIIF (21% vs. 23%) por encima del 10% (cambios materiales). En total, en esta partida se observan cambios en el 44% de las empresas. La explicación al incremento de valor de estas partidas al aplicar las NIIF está en que las mismas obligan a que algunos activos financieros sean valorados a valor razonable, como los clasificados como cartera de negociación y los activos financieros disponibles para la venta, lo cual habría conducido a una disminución de valor en empresas en posesión de activos financieros con un valor razonable por debajo de su valor contable y al contrario. Por otro lado, destaca la fuerte disminución que se produce en la valoración de las acciones propias al aplicar las NIIF, tanto a corto como a largo plazo (aunque no se muestra separadamente en la tabla). La diferencia de valoración es significativa a un nivel del 99% aplicando tanto un test t como uno de Wilcoxon. El importe global de los activos financieros se ve fuertemente influenciado (reducido) para las empresas con acciones COMPARABILIDAD DE LA INFORMACIÓN FINANCIERA ELABORADA SEGÚN EL PLAN GENERAL DE CONTABILIDAD ESPAÑOL DE 1990 Y LAS NIIF 13 propias, y para la mayor parte de las empresas que reducen el valor de los activos financieros al aplicar las NIIF la explicación vendría dada por el diferente reconocimiento de sus acciones propias. 4.1.5. Activo circulante (ACC) Dentro del activo circulante se distinguen las partidas de existencias, deudores, tesorería y los activos no corrientes mantenidos para la venta. El comportamiento de estas partidas es diferente, pero globalmente el activo circulante muestra una cifra significativamente menor al aplicar las NIIF, aunque sólo al considerar el test de Wilcoxon (tabla 1), resultado que coincide con el análisis de la tabla 2, donde todas las partidas muestran comportamientos similares. El elemento más destacable, tanto por su variación como por su importancia numérica, se refiere a la cifra de deudores. Para el 21% de las empresas esta magnitud disminuye más de un 10%, es decir, representa un cambio material, frente al 9% en que aumenta. Las causas de la disminución habría que buscarlas en el incremento del valor de las estimaciones de insolvencias o bien en la valoración a coste amortizado de las mismas, no teniendo datos para explicar el incremento más allá de la observación anterior. En sentido contrario actúan la tesorería y los activos no corrientes mantenidos para la venta, que aumentan significativamente. Hemos de tener en cuenta que esta última partida, que proviene de reclasificaciones del inmovilizado y que no existía en el PGC, ahora presenta valores para 17 de las empresas de la muestra cuando consideramos las NIIF. El incremento de la tesorería se podría deber a la reclasificación de algunas inversiones financieras a corto plazo. 4.2. Comparabilidad del patrimonio neto y los pasivos Tomando en consideración el test de Wilcoxon, tan sólo tres partidas presentan diferencias significativas (tabla 1): el patrimonio neto de la dominante (PND), los pasivos a largo plazo (PLP) y las provisiones (PRO). Pero debido a que la información basada en la diferencia de medias ha de ser tomada con cautela, por los problemas que puede presentar y que se han señalado anteriormente, basaremos el análisis en la tabla 2. El rasgo más destacable es que los pasivos a largo plazo es que se incrementan significativamente al aplicar las NIIF, junto al hecho de que esta partida sufre cambios materiales para un 38% de las empresas (el 26% disminuyen y el 12% aumentan). Esto puede ser debido a un cambio en la forma de valoración al aplicar las NIIF, ya que estas normas introducen distintas formas de valoración para distintos pasivos (como el coste amortizado). También el patrimonio neto(2) cambia de forma material para el 31% de las empresas, aunque se reparten por igual los incrementos y las disminuciones y las diferencias de medias no son significativas. En el caso del patrimonio de la dominante un 23% de las empresas lo incrementan más de un 10% y un 12% lo disminuyen bajo este porcentaje. 4.2.1. Patrimonio neto de la sociedad dominante (PND) intereses minoritarios (IMIN) y patrimonio neto (PNTNET) Tan sólo la cifra de patrimonio neto de la dominante presenta diferencias significativas, aunque en los tres casos las cifras son menores para los datos calculados según las NIIF (tabla 1). Considerando la tabla 2, observamos como el patrimonio neto cambia de forma material para el 31% de las empresas, repartiéndose aproximadamente por igual los incrementos y las disminuciones al pasar a NIIF (16% vs. 15%). No sucede (2) En este estudio se ha considerado como valor del patrimonio del PGC las mismas partidas que en los estados financieros elaborados según las NIIF. COMPARABILIDAD DE LA INFORMACIÓN FINANCIERA ELABORADA SEGÚN EL PLAN GENERAL DE CONTABILIDAD ESPAÑOL DE 1990 Y LAS NIIF 14 así al considerar el patrimonio de la sociedad dominante, puesto que para un 23% de las empresas disminuye más de un 10% al calcularlo según las NIIF, mientras que para un 12% aumenta. Cabe explicar estas variaciones por el efecto que la primera aplicación de las NIIF tiene sobre el resultado (en la tabla 4 observamos como el porcentaje de empresas con incrementos y disminuciones del mismo es similar a las del patrimonio de la dominante) y por los ajustes llevados a reservas a causa del cambio de sistema contable, que afectan a unas empresas positiva (12%) y a otras negativamente (23%) en el patrimonio. Las diferencias en el comportamiento entre el patrimonio neto de la dominante y el patrimonio neto total hay que buscarlas también en el comportamiento de la partida de intereses minoritarios. Globalmente, esta partida presenta una disminución (tabla 1). Esta disminución explica en parte también la disminución de la cifra de patrimonio neto de la sociedad dominante, que también se ve explicada por la disminución global (con diferencias significativas, aunque es un resultado que no se presenta) de los ingresos a distribuir en diferentes ejercicios, aunque en esta magnitud coincide el número de empresas que la aumentan y la disminuyen (7%), debido a la diferente contabilización tanto de las subvenciones como de las diferencias de cambio. En el caso de los intereses minoritarios, es mayoría las empresas que disminuyen esta partida al aplicar las NIIF frente a las que la aumentan (15% vs. 7%). La diferente definición del grupo a consolidar según las NIIF explicarían estas diferencias. 4.2.2. Pasivos a largo plazo (PLP), a corto plazo (PACP) y deuda con coste (DEUCOS) Los pasivos a largo plazo son la partida del pasivo que cambia materialmente para más empresas, pues para un 26% de las empresas se incrementa y para un 12% disminuye (tabla 2). Globalmente se produce un incremento significativo (tabla 1). La nueva contabilización de las deudas a coste amortizado de las NIIF tiene un gran efecto en esta partida, puesto que se incorporan intereses que antes no aparecían. Por otro lado, la cifra media de pasivos a corto plazo prácticamente no varía, presentando cambios tan sólo para un 15% de las empresas, aunque para la mayoría aumenta, seguramente por la misma causa anterior, ya que la contabilización de la deuda sin coste permanece inalterable con las NIIF. Los cambios anteriores afectan a la partida de deuda con coste, que aunque presenta cambios materiales tan sólo para un 12% de las empresas, tiene un incremento significativo, debido al mayor efecto de las partidas con coste a largo plazo. 4.2.3. Provisiones a corto y largo plazo (PRO) Junto con el pasivo a largo y el patrimonio, las provisiones son la otra partida que más cambios presenta al cambiar de normativa, ya que con las NIIF varía la cuantificación de las mismas, exigiéndose en algunos casos la aplicación de técnicas más complejas que las actuales para su cálculo. La disminución de las mismas es significativa, aunque el cambio es positivo o negativo aproximadamente para el mismo porcentaje de empresas (15% vs. 18%, respectivamente). Al disminuir significativamente la media entendemos que globalmente las disminuciones son más importantes que los incrementos. La definición de pasivo de las NIIF, en las que se exige para su reconocimiento que se trate de una obligación presente surgida a raíz de sucesos pasados, al vencimiento del cual deba desprenderse de recursos, deja fuera a algunas provisiones que podían reconocerse en el PGC, como las provisiones para grandes reparaciones (que afectaran muy especialmente, por ejemplo, a las empresas cuya actividad sea el transporte aéreo, ya que en el momento de su dotación aún no ha surgido la obligación), o el fondo de reversión (que afectará principalmente a las empresas que tienen concesiones). Por otro lado, el incremento de la partida de provisiones para algunas empresas sería debido a que la nueva normativa detalla más el cálculo de las mismas, siendo más conservador para estas empresas. COMPARABILIDAD DE LA INFORMACIÓN FINANCIERA ELABORADA SEGÚN EL PLAN GENERAL DE CONTABILIDAD ESPAÑOL DE 1990 Y LAS NIIF 15 4.3. Comparabilidad de las partidas de la cuenta de resultados El aspecto más remarcable por lo que respecta a las partidas de la cuenta de resultados es la magnitud del cambio que se produce en el resultado neto (RN). En total un 40% de las empresas presentan un cambio material en esta magnitud, el 19% incrementándolo y el 21% disminuyéndolo (tabla 4), aunque globalmente esta magnitud no presenta diferencias significativas debido al reparto anterior de su variación. El comportamiento del resultado antes de impuestos, del resultado atribuido a la sociedad dominante (RSD) y del impuesto de sociedades (IS) es muy similar, todas ellas magnitudes relacionadas con el resultado. El hecho de que las magnitudes anteriores no sean significativamente diferentes implica que la dirección del cambio dependerá mucho del tipo de empresa, pues a algunas les afectará positiva y a otras negativamente. El resultado de los intereses minoritarios (RIM) varía para menos empresas (para un 10% disminuye y para un 8% aumenta), cambios debidos también a las modificaciones introducidas por las NIIF que afectan a la definición del grupo de empresas. Veamos cuáles son las principales causas de que se produzca un cambio material en el resultado neto para el 40% de las empresas, la mitad en sentido positivo y la mitad en negativo. Del análisis de las partidas de la cuenta de resultados hemos de destacar los cambios producidos en las partidas de aprovisionamientos (APRO) y de otros gastos (OG), por el alto porcentaje que sobre el resultado representan. A pesar de que sus medias no muestran diferencias significativas, la cifra de aprovisionamientos cambia de forma material para un 34% de las empresas y la de otros gastos un 30%, repartiéndose estos porcentajes más o menos por igual entre empresas que incrementan o disminuyen esta cifra. Sin embargo, la falta de desagregación de estas partidas nos impide establecer hipótesis sobre cómo las NIIF han influido en su modificación. Evidentemente, para explicar el cambio del resultado habríamos de tener en cuenta también el cambio de la cifra de negocios (INCN), aunque afecta a muy pocas empresas (el 5% la disminuyen y el 7% la incrementan), no existiendo diferencias significativas entre PGC y NIIF. Por lo que respecta a las amortizaciones, otra partida con un cierto peso en el resultado, un 7% de media, disminuyen para el 23% de las empresas y se incrementan para el 7%. Dos elementos explicarían este comportamiento, teniendo en cuenta que los métodos de amortización no tienen por qué variar entre normativas. Por un lado los incrementos podrían ser debidos a las revalorizaciones efectuadas según las NIIF, y los decrementos se podrían explicar por el hecho de que los activos no corrientes mantenidos para la venta (partida que no existía en el PGC y que como hemos visto con las NIIF ahora presenta valores) dejan de amortizarse. Ingresos (IF) y gastos financieros (GF) también se modifican para numerosas empresas, aunque su incidencia en el resultado es mínima (un 1% de media para los ingresos financieros y un 4% para los gastos de esta naturaleza). 4.4. Comparabilidad de las ratios En la tabla 3 observamos como sólo la rentabilidad de las inversiones (ROI) y la ratio de solvencia a corto plazo (SOL) son significativamente menores al calcularlas según las NIIF. Como ya se ha mencionado, los resultados del test t deben tomarse con precaución, al estar sesgadas las distribuciones de todas las variables excepto la de la deuda (DEBT). Si nos fijamos en el primer indicador, la ROI, se observa que su media baja de 5,13% a 4,85% al adoptar las NIIF y al analizar cuáles de sus componentes son significativamente diferentes, se observa que ni los recursos propios (PNTNET, en la tabla 1) ni los beneficios netos (RN, en la tabla 3) aparecen como significativamente diferentes, debido a lo cual la ROE tampoco lo es. Sí en cambio lo son los intereses (GF, en la table 3) y la deuda con coste (DEUCOS, en la tabla 1). Así pues, en las empresas cuya financiación con recursos ajenos sea más importante respecto al resto serán en las que menos comparabilidad tendrá el indicador de rentabilidad de las inversiones, presentando un valor significativamente COMPARABILIDAD DE LA INFORMACIÓN FINANCIERA ELABORADA SEGÚN EL PLAN GENERAL DE CONTABILIDAD ESPAÑOL DE 1990 Y LAS NIIF 16 más bajo para los datos calculados según las NIIF, pues tanto los gastos financieros como la deuda con coste serán significativamente mayores calculados según esta normativa. Por otro lado, la ratio de liquidez, el otro indicador significativamente diferente, también disminuye significativamente su media de 138% a 131%. Al observar sus componentes encontramos que los valores del activo circulante (ACC, tabla 1) son significativamente mayores para los datos según el PGC, aunque no los del pasivo circulante (PACP, tabla 1). Así, la solvencia a corto plazo de las empresas calculada según el PGC aparece como más favorable debido a que se presentan unos activos mayores. Podemos afirmar que al adoptar las NIIF para el conjunto de las empresas pueden compararse la rentabilidad de sus activos (ROA), la rentabilidad de los recursos propios (ROE) y el endeudamiento con coste (deudas con coste/ pasivo), mientras que no son comparables los indicadores basados en la rentabilidad de las inversiones ni en la solvencia a corto plazo. Por otro lado, estas ratios presentan mejores valores para los datos calculados según el PGC. Sin embargo, para analizar la materialidad de los cambios la media no es una medida demasiado adecuada ya que debemos considerar los cambios tanto por encima como por debajo del valor 100, y unos valores pueden compensar a otros. Si analizamos las ratios a partir de los resultados de la tabla 4, al igual que en los resultados anteriores, la ROI y la solvencia a corto plazo son las dos ratios que presentan un cambio significativo, ya que tanto el test t como el de Wilcoxon indican diferencias significativas respecto al valor de referencia de 100 (columna 5). En ambos casos, las magnitudes son mayores (de media un 2% para la ROI y un 3% para la solvencia) para los datos calculados según el PGC. El rasgo más destacable a la vista de la tabla 4 es la gran cantidad de empresas (alrededor del 50%) que tienen un cambio material (de más de 10%) para las ratios ROA, ROE y ROI. En el caso de la ROI, predominan claramente las empresas con cifras mayores calculadas según el PGC respecto a las NIIF (31%), mientras que sólo un 17% de las empresas presentan una cifra con las NIIF mayor que con el PGC. En las otras dos ratios existe más igualdad. Si observamos de dónde vienen estos cambios, podemos deducir que dos partidas son las que más pueden afectar a las ratios anteriores. Por un lado el resultado neto del grupo (RN, en la tabla 4). Un 19% de las empresas disminuyen esta magnitud por debajo del 10% al pasar al calcularlo según las NIIF, y un 21% la incrementan. El resultado afectaría a las tres ratios. Por otro lado, los gastos financieros (GF, en la tabla 4), que afectan de forma especial a la ROI, también tienen cambios materiales para el 52% de las empresas (para el 17% disminuyen y para el 35% aumentan al pasar del PGC a las NIIF). Otra partida que afecta de forma especial a la ROE y que también cambia para numerosas empresas (31%) es el patrimonio neto del grupo (PNTNET, tabla 2), siendo la mitad de estos cambios incrementos y la mitad disminuciones. En el caso de la deuda y la solvencia existen relativamente pocas empresas con un cambio material (27% y 20%, respectivamente), por lo que los resultados de la tabla 3 que mostraban diferencias significativas en la solvencia entre NIIF y PGC podrían ser debidos a valores extremos. COMPARABILIDAD DE LA INFORMACIÓN FINANCIERA ELABORADA SEGÚN EL PLAN GENERAL DE CONTABILIDAD ESPAÑOL DE 1990 Y LAS NIIF 17 5. CONCLUSIONES E IMPLICACIONES En este estudio se analiza el impacto de la aplicación de las NIIF, frente al Plan General de Contabilidad de 1990, en las magnitudes más importantes de las cuentas anuales consolidadas de los grupos que cotizan en el mercado continuo español, así como en una serie de ratios de síntesis. El ejercicio analizado es el de 2004, que es el único que permite la comparación entre las cifras obtenidas según los dos sistemas contables. El análisis se efectúa en primer lugar a partir de las diferencias de medias entre las partidas, pero debido a las limitaciones de este estadístico resulta más útil utilizar un índice de comparabilidad, construido teniendo en cuenta la literatura previa. Se considera que se produce un cambio importante en una partida, “material”, cuando la magnitud varía por encima o por debajo del 10%. La principal conclusión a extraer de este estudio es que, a pesar de que pocas diferencias de medias entre partidas resultan significativas para el conjunto de la muestra, para numerosas empresas se dan cambios materiales en elementos importantes del activo, el patrimonio y el resultado, lo que afectan al análisis de las mismas efectuado desde una perspectiva económica y financiera. Considerando cambios materiales (de más del 10%), respecto al activo, cabe destacar que para el 44% de las empresas varía la cifra de activos financieros, posiblemente a causa de la revalorización o reclasificación de los mismos, y para el 45% los activos inmateriales (para un 33% de las mismas disminuye el valor). El patrimonio neto varía de forma material para un 31% de las empresas, repartiéndose por igual aquellas empresas para las cuáles aumenta y aquéllas para las que disminuye. En el caso de los activos a largo plazo, para un 26% de las empresas aumenta su cifra y para un 12% disminuye. Como se puede observar, globalmente podría suceder que cambios en un sentido anulasen a cambios en otro sentido. Considerando cada empresa individualmente, comprobamos como una gran parte de ellas se ve afectada en magnitudes elementales para el análisis. Respecto al análisis de las partidas de la cuenta de resultados, se mantienen las observaciones de carácter general indicadas en el párrafo anterior. Hemos de destacar que el resultado neto varía de forma material para un 40% de las empresas (aproximadamente repartidas por igual las disminuciones e incrementos), el resultado de explotación para un 48% y los gastos financieros para un 52% (el efecto de la contabilización según el criterio de coste amortizado puede ser aquí muy relevante). Cambios de criterios contables referidos a la imputación de gastos podrían estar detrás de estas cifras. Hay que destacar también el gasto por impuesto de sociedades varía materialmente para un 38% de empresas, por lo que el efecto fiscal de la nueva contabilización es considerable para muchas empresas. Los efectos de lo anterior en las ratios de síntesis son considerables, pues los indicadores de rentabilidad varían también para numerosas empresas como consecuencia básicamente del cambio en los resultados. La ratio de deuda también se ve afectada para numerosas empresas, aunque menos que en las anteriores (20%). Las implicaciones de la transición del PGC a las NIIF son, como se ve, numerosas, y afectan a diversos colectivos. Hay que distinguir, sin embargo, el nivel macro y macroeconómico. A nivel global, considerando cifras a nivel agregado, diferencias en un sentido anulan a las de otro sentido, por lo que no existen demasiados cambios. A nivel de empresas concretas los cambios son considerables, y cada caso puede presentar diferentes efectos a la hora de aplicar las NIIF. Los agentes que diseñan políticas a nivel global han de tener en cuenta el efecto anterior, puesto que aunque agregadamente parecen no existir cambios, sí pueden encontrarse al considerar diferentes tipos de empresas. A nivel micro, analistas e inversores han de considerar los cambios que en cada empresa se producen al aplicar las NIIF, teniendo en cuenta que las comparaciones temporales pueden no ser válidas (entre los periodos en que eran de aplicación el PGC y las NIIF). Los efectos anteriores también han de ser considerados por los investigadores, particularmente, al realizar estudios que analicen series temporales. COMPARABILIDAD DE LA INFORMACIÓN FINANCIERA ELABORADA SEGÚN EL PLAN GENERAL DE CONTABILIDAD ESPAÑOL DE 1990 Y LAS NIIF 18 TABLAS Tabla 1. Partidas de balance. Descriptivos y significatividad de las diferencias entre PGC y NIIF Media PGC Media NIIF t-test Z Wilcoxon rank-test Dv. St. PGC Dv. St. NIIF IMII 1,518,696 1,410,095 2.689*** -3.980*** 4,026,554 3,969,179 FCC 286,466 260,409 -0.686 -0.695 976,478 865,509 OAI 277,235 238,104 -2.983*** 4.799*** 1,038,906 849,459 AFINA 503,614 392,358 -1.973* 2.218*** 1,837,041 1,143,182 EX 289,046 303,749 -0.823 0.842 553,873 597,755 DEU 563,318 507,985 -2.489** 4.628*** 1,151,069 1,055,210 ACC 1,164,374 1,136,103 -0.359 3.828*** 2,276,724 2,214,680 TA 3,814,641 3,692,782 -0.964 0.407 9,174,145 8,861,783 PND 1,062,143 924,444 1.801* 2.046** 2,621,879 2,079,064 IMIN 160,783 81,773 -1.574 1.533 624,724 239,165 PNTNET 1,172,318 1,037,452 0.362 -0.650 3,099,619 2,326,348 PLP 1,365,767 1,456,988 0.552 -2.613*** 3,421,691 3,954,134 PACP 1,182,392 1,198,339 0.899 -0.772 2,806,105 2,839,174 DEUCOS 1,282,073 1,329,483 0.495 1.818* 3,332,540 3,635,312 288,036 201,761 -1.692* 2.759*** 1,058,044 890,316 PRO * Diferencia significativa al nivel 0.10 (p-valor < 0.10). ** Diferencia significativa al nivel 0.05 (p-valor < 0.05). *** Diferencia significativa al nivel 0.01 (p-valor < 0.01) IMII: inmovilizado material e inversiones inmobiliarias; FCC: fondo de comercio; OAI: otros activos inmateriales; AFINA: activos financieros; EX: existencias; DEU: deudores; ACC: activos a corto plazo; TA: activo total; PND: patrimonio neto de la sociedad dominante; IMIN: intereses minoritarios; PNTNET: patrimonio neto del grupo; PLP: pasivo a largo plazo; PACP: pasivo a corto plazo; DEUDOS: deuda con coste; PRO: provisiones totales. COMPARABILIDAD DE LA INFORMACIÓN FINANCIERA ELABORADA SEGÚN EL PLAN GENERAL DE CONTABILIDAD ESPAÑOL DE 1990 Y LAS NIIF 19 Tabla 2. Partidas de balance. Descriptivos del índice de materialidad y porcentaje de empresas con materialidad Índice de materialidad Índice de materialidad de empresas con de empresas con % de empresas con cambios Índice de materialidad valores NIIF<PGC valores NIIF>PGC (1) N (2) (3) (4) <-10% >+10% >|10%| NIIF>PGC NIIF<PGC (5) (6) (7) (8) (9) (10) Media Desv. st Media > 100 N > 100 Media < 100 N < 100 IMII 78 38 32 6 93*** 17.3 112*** 15 88*** 57 FCC 47 27 17 10 94** 28.9 125*** 12 81*** 31 OAI 51 45 12 33 113*** 41.1 140*** 32 68*** 13 AFINA 63 44 23 21 100 37.9 126*** 29 71*** 28 EX 78 17 10 7 100 13.2 109*** 27 91*** 21 DEU 76 30 9 21 101*** 22.2 113*** 52 84*** 17 ACC 80 17 7 10 101*** 7.6 104*** 55 94*** 23 TA 81 17 7 10 100 12.5 107*** 39 95*** 42 PND 78 35 12 23 103 16,3 112*** 33 92*** 34 IMIN 56 22 7 15 100 28.2 126*** 23 84*** 17 PNTNET 79 31 16 15 99 15.0 111*** 33 91*** 45 PLP 79 38 26 12 96*** 22.1 118*** 27 87*** 51 PACP 81 15 11 4 100 11.0 103*** 37 93*** 42 DEUCOS 79 12 6 6 100 12.5 105*** 43 93*** 23 PRO 63 33 15 18 100 26.6 123*** 26 82*** 21 * Diferencia significativa al nivel 0.10 (p-valor < 0.10). ** Diferencia significativa al nivel 0.05 (p-valor < 0.05). *** Diferencia significativa al nivel 0.01 (p-valor < 0.01 IMII: inmovilizado material e inversiones inmobiliarias; FCC: fondo de comercio; OAI: otros activos inmateriales; AFINA: activos financieros; EX: existencias; DEU: deudores; ACC: activos a corto plazo; TA: activo total; PND: patrimonio neto de la sociedad dominante; IMIN: intereses minoritarios; PNTNET: patrimonio neto del grupo; PLP: pasivo a largo plazo; PACP: pasivo a corto plazo; DEUDOS: deuda con coste; PRO: provisiones totales. Empresas analizadas en cada partida (columna1). Porcentaje de las mismas con cambios en el índice de materialidad: +/-10% (columna 2), -10% (columna 3) y +10% (columna 4) al pasar de PGC a NIIF. Se han eliminado los valores extremos del índice de materialidad por encima de 200 y por debajo de 0. Un índice con valor superior a 100 indica el porcentaje en que la partida considerada para la empresa es superior calculada según el PGC. Un índice con valor inferior a 100 indica el porcentaje en que la partida considerada para la empresa es inferior calculada según el PGC. En la columna (5) se indica si el valor del índice de materialidad es significativamente diferente de 100 con un test de Wilcoxon (test t para las variables OAI y AFINA, con distribución normal). En la columna (7) se indica, para las empresas con el índice superior a 100, si su valor es significativamente diferente de 100. Test de Wilcoxon (test t para las variables FCC y OAI, con distribución normal). En la columna (9) se indica, para las empresas con el índice inferior a 100, si su valor es significativamente diferente de 100. Test de Wilcoxon (test t para las variables FCC y OAI, con distribución normal). COMPARABILIDAD DE LA INFORMACIÓN FINANCIERA ELABORADA SEGÚN EL PLAN GENERAL DE CONTABILIDAD ESPAÑOL DE 1990 Y LAS NIIF 20 Tabla 3. Partidas de la cuenta de resultados y ratios de síntesis. Descriptivos y significatividad de las diferencias entre PGC y NIIF Media PGC INCN Media NIIF t-test Z Wilcoxon rank-test Dv. St. PGC Dv. St. NIIF 2,274,942 2,195,332 -2.041** 1.557 6,013,285 5,787,469 APRO 281,005 306,621 1,346 0,858 340,296 372,246 OG 169,426 149,450 -1,893* 1,457 208,608 172,537 VA 791,495 773,244 -1.142 3.147*** 2,255,478 2,215,474 GP 253,800 261,898 1.007 2.747*** 567,909 635,019 DA 185,417 183,181 0.098 -3.407*** 730,244 696,816 RE 335,483 328,165 0.025 0.946 1,015,290 959,751 IF 45,104 29,053 -3.308*** 4.966*** 172,508 125,422 GF 91,114 94,605 1.083 -3.002*** 281,457 320,661 DCAMB 1,797 3,285 -5.519*** 3.270*** 8,098 28,547 REAS 6,855 5,900 -1.604 1.648* 28,563 28,134 IS 82,459 87,102 1.169 -0.028 223,971 268,340 RN 188,151 193,524 -0.310 -0.935 486,933 527,895 RIM 12,625 9179 0.116 1.065 50,816 39,449 RSD 175,526 184,345 -0.399 -0.986 444,323 494,608 ROA (%) 6.22 6.19 -0.230 -1.066 9.25 9.31 ROE (%) 10.26 11.41 0.800 -0.0403 23.86 21.40 ROI (%) 5.13 4.85 -2.351** 2.408** 6.26 6.24 DEBT (%) 28.24 28.44 0.423 -0.0385 16.31 17.33 SOLV (%) 138.13 131.45 -1.802* 3.105*** 65.16 57.95 * Diferencia significativa al nivel 0.10 (p-valor < 0.10). ** Diferencia significativa al nivel 0.05 (p-valor < 0.05). *** Diferencia significativa al nivel 0.01 (p-valor < 0.01) INCN: importe neto de la cifra de negocios; APRO: aprovisionamientos; OG: otros gastos; VA: valor añadido; GP: gastos de personal; DA: dotación a las amortizaciones; RE: resultado de explotación; IF: ingresos financieros; GF: gastos financieros; DCAMB: diferencias de cambio; REAS: participación en el resultado de las asociadas y negocios conjuntos contabilizadas según el método de la participación; IS: impuesto sobre el beneficio; RN: resultado neto del grupo; RIM: resultado atribuido a intereses minoritarios; RSD: resultado de la sociedad dominante; ROA: rentabilidad del activo; ROE: rentabilidad de los fondos propios; ROI: rentabilidad de la inversión; DEBT: Deuda con coste / activo; SOLV: activo circulante / pasivo circulante. COMPARABILIDAD DE LA INFORMACIÓN FINANCIERA ELABORADA SEGÚN EL PLAN GENERAL DE CONTABILIDAD ESPAÑOL DE 1990 Y LAS NIIF 21 Tabla 4. Partidas de la cuenta de resultados y ratios de síntesis. Descriptivos del índice de materialidad y porcentaje de empresas con materialidad Índice de materialidad Índice de materialidad de empresas con de empresas con % de empresas con cambios Índice de materialidad valores NIIF<PGC valores NIIF>PGC (1) N (2) (3) (4) <-10% >+10% >|10%| NIIF>PGC NIIF<PGC (5) (6) (7) (8) (9) (10) Media Desv. st Media > 100 N > 100 Media < 100 N < 100 INCN 80 12 5 7 100 17.2 109*** 29 89*** 21 APRO 79 34 15 19 101 30.3 123*** 31 83*** 37 OG 72 30 16 14 98** 25.8 120*** 22 88*** 50 VA 79 24 9 15 101*** 22.5 109*** 54 85*** 25 GP 80 11 6 5 100*** 17.1 111*** 17 92*** 38 DA 78 30 7 23 103*** 26.0 114*** 56 81*** 19 RE 75 48 18 30 101 27.6 117*** 41 82*** 33 IF 49 34 11 23 103 34.9 129*** 27 73*** 15 GF 74 52 17 35 103** 33.5 125*** 46 76*** 24 5 4 4 88* 44.5 - - 39 3 REAS 42 10 5 5 100 25.7 116*** 14 81*** 12 IS 69 38 17 21 100 36.1 121*** 33 74*** 31 RN 77 40 19 21 98 26.6 121*** 32 86*** 45 RIM 51 18 8 10 100 25.0 121*** 13 81*** 21 RSD 77 39 19 20 98 26.2 120*** 32 85*** 45 ROA (%) 77 44 25 19 101 26.4 121*** 31 87*** 46 ROE (%) 77 53 28 25 100 33.2 124*** 36 79*** 41 ROI (%) 78 48 17 31 102** 23.5 118*** 47 88*** 31 DEBT (%) 79 27 12 15 100 13.7 109*** 39 92*** 40 SOLV (%) 79 20 6 14 103*** 15.2 109*** 49 94*** 30 DCAMB * Diferencia significativa al nivel 0.10 (p-valor < 0.10). ** Diferencia significativa al nivel 0.05 (p-valor < 0.05). *** Diferencia significativa al nivel 0.01 (p-valor < 0.01) INCN: importe neto de la cifra de negocios; APRO: aprovisionamientos; OG: otros gastos; VA: valor añadido; GP: gastos de personal; DA: dotación a las amortizaciones; RE: resultado de explotación; IF: ingresos financieros; GF: gastos financieros; DCAMB: diferencias de cambio; REAS: participación en el resultado de las asociadas y negocios conjuntos contabilizadas según el método de la participación; IS: impuesto sobre el beneficio; RN: resultado neto del grupo; RIM: resultado atribuido a intereses minoritarios; RSD: resultado de la sociedad dominante; ROA: rentabilidad del activo; ROE: rentabilidad de los fondos propios; ROI: rentabilidad de la inversión; DEBT: Deuda con coste / activo; SOLV: activo circulante / pasivo circulante Interpretación de las columnas igual que en la tabla 2. COMPARABILIDAD DE LA INFORMACIÓN FINANCIERA ELABORADA SEGÚN EL PLAN GENERAL DE CONTABILIDAD ESPAÑOL DE 1990 Y LAS NIIF 22 BIBLIOGRAFÍA Adams, C; Weetman, P.; Jones, E. y Gray, S. (1999): “Reducing the burden of US GAAP reconciliations by foreign companies listed in the United States: the key question of materiality”, The European Accounting Review, 8 (1): 1-22 Gray, S. J. (1980): ”The impact of international accounting differences from a security-analysts perspective: Some European evidence”, Journal of Accounting Research, 18 (Spring): 64–76. Harris, M. S., y Muller, K. A., III. (1999): “The market valuation of IAS vs. U.S.-GAAP accounting measures using Form 20-F reconciliations”, Journal of Accounting and Economics, 26: 285–312. Haverty, J. L. (2006): “Are IFRS and U.S. GAAP converging? Some evidence from People’s Republic of China companies listed in the New York Stock Exchange”, Journal of International Accounting, Auditing and Taxation, 15: 48-71. Street, D. L., Gray, S. J. and Bryant, S. M. (1999) Acceptance and observance of International Accounting Standards: an empirical study of companies claiming to comply with IASs, The International Journal of Accounting, 34 (1): 11–48. Street, D. L., Nichols, N. B., y Gray, S. J. (2000): “Assessing the acceptability of international accounting standards in the U.S.: An empirical study of the materiality of U.S. GAAP reconciliations by non-U.S. companies complying with IASC standards”, The International Journal of Accounting, 35 (1): 27–63. Van der Meulen, S.; Gaeremynck, A. y Willekens, M. (2007): Atribute Differences between U.S. GAAP and IFRS earnings: An exploratory Study, The Internacional Journal of Accounting, 42: 123-142. Weetman, P. E., Jones, A. E., Adams, C. A., & Gray, S. J. (1998): “Profit measurement and UK accounting standards: A case of increasing disharmony in relation to U.S. GAAP and IAS’s”, Accounting and Business Research, 28 (3): 189–208. EL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO: PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS Eva Mª Ibáñez Jiménez Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales Paseo Senda del Rey, 11 - 28040 Madrid Tel: 91/3986389 e-mail: eibanez@cee.uned.es Laura Parte Esteban (autor de contacto) Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales Paseo Senda del Rey, 11 - 28040 Madrid Tel: 91/3988966 E-mail: lparte@cee.uned.es PALABRAS CLAVE Análisis comparado, Estado de flujos de efectivo, Liquidez, Normalización contable RESUMEN El Estado de flujos de efectivo, de acuerdo con el modelo del IASB, forma parte del conjunto de documentos que integran las cuentas anuales. El legislador español ha incorporado recientemente este nuevo documento contable a la información requerida a las empresas que presentan cuentas según el modelo normal. La próxima elaboración de dicho estado tiene repercusiones en el ámbito de la información externa e interna. En este trabajo se lleva a cabo un análisis comparado de la estructura del Estado de flujos de efectivo según la normativa contable nacional y las normas correspondientes emitidas por el FASB y el IASB. A partir de ahí, se estudian sus principales ventajas para los usuarios de la información financiera. EL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO: PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS 24 1. INTRODUCCIÓN La información financiera tiene como principal objetivo proporcionar a sus usuarios información útil en la toma de decisiones de inversión y financiación. Por ello debe permitirles, por una parte, conocer la gestión realizada por la empresa, en particular los resultados obtenidos, y por otra, establecer perspectivas racionalmente fundadas sobre los flujos de caja que esperan recibir así como sobre el riesgo y periodicidad a ellos asociados (FASB 1978: 37 y 38 e IASB, NIC 1: Objetivo). Los inversores están interesados en conocer a través de la información financiera la capacidad de la empresa para generar flujos de caja, esto es, en las cantidades, periodicidad y certidumbre de las entradas y salidas de efectivo por dividendos, intereses o amortización de títulos o préstamos. Las previsiones de esos flujos de caja dependen de los activos líquidos presentes de la entidad y, lo que es más importante, de la capacidad de generar suficiente efectivo para pagar a sus proveedores, empleados y satisfacer otras necesidades operativas, para cumplir sus obligaciones a tiempo, para acometer nuevas inversiones y para remunerar a los propietarios. Puesto que nuestras economías están basadas en los medios de pago, este objetivo está establecido en términos de efectivo y equivalentes (que constituyen un acumulador de valor para el ahorro o para el consumo) y en la capacidad de generarlos (FASB 2006: OB3-5). Los mercados de capitales juzgan esta capacidad e influyen sobre los valores de la deuda y de las acciones de la empresa, afectando a su vez los flujos de caja de accionistas y prestamistas a través de la venta de sus títulos. Los estados financieros son la pieza central de la información financiera porque cumplen con el objetivo de suministrar información sobre los recursos de una entidad, sus fuentes de financiación así como los cambios que hayan experimentado, e información útil para establecer las previsiones de flujos de caja de dicha entidad. En concreto, la NIC 1 (párs. 7 y 8) establece que el objetivo de los estados financieros es suministrar información acerca de la situación financiera, del rendimiento financiero y de los flujos de efectivo de la entidad, que sea útil a una amplia variedad de usuarios al tomar sus decisiones económicas. Para cumplir este objetivo, los estados financieros informarán sobre los activos, pasivos, patrimonio neto, gastos e ingresos, así como sobre otros cambios en el patrimonio neto y sobre los flujos de efectivo. El conjunto completo de estados financieros en las NIC incluye el ECPN y el Estado de flujos de efectivo. A través del Reglamento (CE) Nº1606/2002 de 19 de julio la Unión Europea adopta las Normas Internacionales de Contabilidad y de Información Financiera (NIC/NIIF) y se exige su aplicación a los grupos de sociedades cuyos valores coticen en un mercado regulado de cualquier Estado miembro que elaboren sus cuentas consolidadas a partir de enero de 2005. Asimismo, se permite que, voluntariamente, las sociedades distintas a las mencionadas elaboren sus cuentas anuales individuales o consolidadas conforme a las citadas Normas internacionales. En este contexto de armonización contable comunitaria, el pasado 21 de junio de 2007 se ha aprobado la Ley de Reforma de la legislación mercantil en materia contable para su armonización internacional con base en la normativa de la Unión Europea (publicada en el BOE nº 160 de 5/7/07). Una de las novedades básicas que introduce esta Ley (artículos 34.1 y 44.1 del Código de Comercio, para cuentas individuales y consolidadas respectivamente) es la incorporación de dos nuevos documentos al conjunto que componen las cuentas anuales: un estado que recoja los cambios en el patrimonio neto (ECPN) y un Estado de flujos de efectivo (EFE), que a diferencia de aquél, sólo deberá formularse obligatoriamente por las empresas que no puedan formular balance, ECPN y memoria abreviados (art. 175.4 TRLSA). EL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO: PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS 25 Por otra parte, el pasado mes de julio se ha publicado el Proyecto de Real Decreto por el que se aprobará el nuevo Plan General de Contabilidad (PGC). Este nuevo PGC, elaborado por el Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas (ICAC), desarrolla la Ley de Reforma de la legislación mercantil y será obligatorio para todas las empresas a partir del 1 de enero de 2008. El Gobierno aprobará simultáneamente a este nuevo PGC un plan general para PYMES. El borrador del nuevo Plan General de Contabilidad (BNPGC) establece (tercera parte, norma 1ª) de manera análoga al Código de Comercio, que las cuentas anuales comprenden el balance, la cuenta de pérdidas y ganancias, el estado de cambios en el patrimonio neto, el Estado de flujos de efectivo y la memoria, y también añade que cuando pueda formularse balance, ECPN y memoria abreviados, el Estado de flujos de efectivo no será obligatorio. La NIC 1 explica que los estados financieros (incluido el Estado de flujos de efectivo) junto con la información contenida en las notas ayuda a los usuarios a predecir los flujos de efectivo futuros, y en particular, su distribución temporal y el grado de certidumbre asociado a los mismos. La presentación del Estado de flujos de efectivo es congruente, por tanto, con el objetivo de la información financiera enunciado por el FASB y el IASB: cubrir las necesidades informativas de los usuarios, sobre la situación y rendimiento financiero de la entidad y sobre las perspectivas de flujos de caja. Por ello, tanto la NIC 1, como el SFAC nº 5 establecen que un conjunto completo de estados financieros debe comprender: un balance para mostrar la situación financiera al final del periodo, el estado de resultados, que mide los efectos de las transacciones de la entidad durante el periodo o cambios en su patrimonio que no procedan de operaciones con los propietarios, el estado de de cambios en el patrimonio neto que muestra dichas operaciones y el Estado de flujos de efectivo, para mostrar directa o indirectamente los flujos obtenidos por su actividad principal y por otras actividades de inversión o financiación. Por otro lado, el Proyecto de Norma Internacional de Información Financiera para Pequeñas y Medianas Entidades (NIIF para las PyME, Sección 3) establece que los estados financieros (balance, estado de resultados, ECPN y EFE) deberán presentar razonablemente la posición financiera, el rendimiento financiero y los flujos de efectivo de la entidad. Según este proyecto de norma (Sección 1, Alcance), se consideran pequeñas y medianas empresas las entidades que no tienen obligación pública de rendir cuentas, o lo que es lo mismo, las que no registran sus estados financieros en comisiones de valores u organizaciones reguladoras con el fin de emitir algún tipo de instrumentos en un mercado público(1). En el caso español, a efectos de la presentación de las cuentas en formato normal o abreviado, el criterio que se toma para clasificar las empresas es el tamaño (activo total, importe neto de la cifra anual de negocios y número medio de trabajadores empleados, véase el art. 175 TRLSA modificado por la Ley de Reforma de la legislación mercantil), no así la condición de cotizada. Observamos, por tanto, un tratamiento diferente en relación a la presentación de los estados financieros de las PyME, dado que el proyecto de NIIF considera necesaria su elaboración para cumplir con el objetivo de los estados financieros de este tipo de empresas, mientras que el BPGC no estima imprescindible su elaboración. En el siguiente apartado estudiaremos la utilidad de las informaciones que arroja el EFE en sus diferentes formatos de cara al análisis financiero. Pero ya podemos anticipar que es un documento clave para conocer la situación financiera a corto plazo. De hecho, la NIC 7, exige a todas las empresas que presenten el Estado de flujos de efectivo como parte integrante de sus estados financieros. (1) También las que no mantengan activos en calidad de fiduciaria para un amplio grupo de terceros ajenos a la entidad, como bancos, aseguradoras, intermediarios de bolsa, fondos de pensiones o de inversión colectiva. EL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO: PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS 26 En este trabajo analizaremos el contenido y la utilidad del EFE para los usuarios de la información financiera cuya incorporación a las cuentas anuales de las empresas españolas es inminente. La estructura seguida es la siguiente: en primer lugar, se señala el objetivo del EFE y la clasificación de los flujos de efectivo; en segundo lugar, se lleva a cabo un análisis comparado de la estructura de dicho documento en distintas normas contables; en tercer lugar, se evalúa la utilidad de este nuevo estado contable desde dos perspectivas: en el análisis financiero y como herramienta de control interno y, por último, se presentan una serie de consideraciones y conclusiones finales. 2. OBJETIVO Y CLASIFICACIÓN DE LOS FLUJOS DE EFECTIVO 2.1 Antecedentes del Estado de flujos de efectivo Desde hace más de una década las entidades normalizadoras internacionales que son referentes en Contabilidad incluyen entre la información financiera obligatoria un Estado de flujos de efectivo(2). Este requerimiento se implementará en breve en nuestro país con la aprobación del Nuevo Plan General de Contabilidad. Cabe mencionar dos notas de la memoria que ya se incorporaron al PGC90 y que pueden ser consideradas como antecedentes del EFE. En primer lugar, la nota 20 de la memoria normal del PGC90 incluye el Cuadro de Financiación, que muestra las causas de variación del capital circulante, variable central, describiendo los fondos obtenidos (orígenes) y su destino (aplicaciones). La sustitución de este documento por el EFE viene a satisfacer las demandas de buena parte de los profesionales y académicos que consideran que aquél es un documento de difícil comprensión en la práctica del contable, constituyendo una carga de trabajo más para las empresas, de dudosa utilidad como parte de la información financiera (Gonzalo 2003: 3). En segundo lugar, la nota 3 de la memoria “Distribución de resultados” (en cumplimiento del art. 216 TRLSA), solicita una indicación del importe de los dividendos a cuenta que la sociedad acuerde repartir, junto con la presentación de un estado contable previsional para poner de manifiesto en tal caso de la existencia de liquidez suficiente, que abarque un periodo anual desde el acuerdo de distribución del dividendo a cuenta. La opinión de la AECA, que expresaba en su Documento 20, es que el estado contable que cumple las condiciones mencionadas debe ser un estado de tesorería o de flujos de efectivo previsional, con el mismo contenido y estructura que un estado histórico de la misma naturaleza. Sin embargo, la publicación de dicho Documento 20 no ha logrado homogeneizar en la práctica española la elaboración de los estados demostrativos de la liquidez, sino que las empresas presentan dichos estados de manera heterogénea, a causa, en primer lugar, de la ambigüedad de la propia normativa; en segundo lugar, por la incongruencia que representa la inclusión del cuadro de financiación al mismo tiempo que se exige un estado de liquidez cuya variable central es la tesorería en lugar del capital circulante, y en tercer lugar, por el incremento de los costes asociados a la publicación de información en términos previsionales junto con los riesgos de auditoría asociados de este tipo de información (Larrán et al. 2003: 38-39). A pesar de las críticas que ha recibido el cuadro de financiación desde su inclusión en la información que deben rendir las entidades no podemos olvidar su validez en el análisis de los estados financieros. En este (2) A modo de ejemplo pueden citarse Estados Unidos (SFAS95 en 1987), Nueva Zelanda (SSAP10 en 1987), Reino Unido (FRS1 “Cash Flow Statement” en 1991), Australia (AASB26 en 1992) y la NIC7 (Estados de Cambios en la Posición Financiera en 1977 que posteriormente ha sido revisada). EL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO: PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS 27 sentido, ya en el Libro Blanco (2002: 133) se recomendaba seguir presentándolo en la memoria o incluir su información en las notas. Sin embargo, si se quiere ahondar en los antecedentes del EFE dentro de la normativa española sin duda debemos acudir al Documento 20 sobre “El estado de flujos de tesorería” emitido por Comisión de Principios y Normas de Contabilidad de AECA en 1997. Este pronunciamiento de aplicación voluntaria, constituye el único intento normalizador en España y se inspira básicamente en las propuestas del FASB y del IASB. 2.2 Objetivo del Estado de flujos de efectivo El principal propósito del Estado de flujos de efectivo es proporcionar información relevante sobre las entradas o cobros y las salidas o pagos de una empresa durante un período (SFAS 95: 4). Este objetivo es consistente con los objetivos que persigue la información financiera, en concreto, ayudar a los inversores y prestamistas de la entidad (actuales y potenciales) y al resto de usuarios de la información financiera a establecer las cantidades, certidumbre y periodicidad de los futuros cobros de intereses y dividendos así como de los cobros por la venta de sus valores y vencimiento préstamos (FASB 1978, CON1: 37). Los flujos de caja esperados por los accionistas y prestamistas así como la cotización de los valores en los que han invertido dependen de la capacidad de la empresa para generar flujos de caja (FASB 1978 CON1: 39). La información financiera debe proporcionar información sobre cómo la empresa obtiene y gasta sus fondos, sobre cómo se financia, sobre sus operaciones de patrimonio neto, incluyendo la política de dividendos y sobre cualquier factor que afecte a su liquidez y solvencia (FASB1978, CON1: 49). El Estado de flujos de efectivo (EFE) informa sobre los movimientos históricos en el efectivo y los equivalentes de efectivo, clasificados según su procedencia: actividades de explotación, de inversión y de financiación (NIC 7, BPGC: tercera parte, 9ª norma; Proyecto NIIF PyME 7.1). Esta información histórica, junto con la que contienen el resto de los estados financieros, permite conocer la capacidad de la empresa para generar flujos de caja y para cumplir con sus obligaciones relacionadas con la financiación ajena y propia, investigar las diferencias que existen entre sus resultados y los cobros y pagos correspondientes, así como establecer los efectos de las transacciones de inversión y financiación, monetarias o no, llevadas a cabo durante el periodo (SFAS 95: 4). Los estados financieros tradicionales muestran los efectos de las transacciones de inversión y financiación que afectan a la posición financiera de la empresa, pero no muestran directamente los cobros y pagos por ellas generados. Pero el EFE no sólo es importante para conocer la liquidez y evaluar la solvencia de la empresa, sino también para explicar si la empresa será capaz de financiar su crecimiento con su actividad interna o se verá obligada a recurrir a financiación externa. 2.3. Clasificación de los flujos de efectivo El EFE informa sobre los cambios habidos durante el periodo contable en los flujos de efectivo y equivalentes clasificados según las siguientes actividades: - Flujos de las actividades de explotación. - Flujos de las actividades de inversión. - Flujos de las actividades de financiación. Esta clasificación de los flujos de caja es común a todos los pronunciamientos contables sobre el EFE. Se entiende por equivalentes de efectivo a aquellas inversiones de alta liquidez cuyo vencimiento es tan cercano (tres meses o menos) que presentan una exposición no significativa al riesgo de tipos de interés (SFAS 95: EL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO: PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS 28 8 y NIC 7: 7). El BPGC (tercera parte, norma 9ª) identifica el efectivo y sus equivalentes con los elementos que como tal figuren en el epígrafe B.VI. del activo del balance (tesorería y depósitos bancarios a la vista) así como aquella parte de los instrumentos financieros convertibles en efectivo cuyo vencimiento no sea superior a tres meses, y siempre que no exista riesgo significativo de cambios de valor y formen parte de la política de gestión normal de la tesorería de la empresa. La magnitud objeto de análisis en el EFE es el efectivo y sus equivalentes, magnitud que también se suele denominar “disponibilidades líquidas”. Su finalidad es mostrar las causas que han generado los movimientos de efectivo, desde el inicio hasta el final del periodo considerado, entre las que podremos encontrar en un primer grupo, las operaciones normales o típicas del negocio (flujos de operaciones o de explotación), y en segundo lugar, las operaciones de capital, que proporcionan o consumen efectivo (flujos de inversión y de financiación). 1. Flujos de las actividades de explotación o flujos de las operaciones Son aquellos flujos que proceden de las transacciones que constituyen la principal fuente de ingresos ordinarios de la empresa, y por tanto, son los efectos monetarios de aquellas transacciones que han intervenido en la formación del resultado neto (SFAS 95: 21; NIC 7: 14 y BPGC: tercera parte, norma 9ª). Estos flujos muestran la capacidad de producir a diario liquidez por los cobros y pagos corrientes (o de actividades ordinarias o de explotación), que proceden de gastos e ingresos de la explotación, de carácter financiero, de impuestos, etc. En el cuadro nº 1 se muestran los principales flujos de efectivo derivados de las actividades de explotación. NIC 7 (extracto) SFAS 95 (extracto) a) Cobros por ventas y prestación de servicios a) Cobros de clientes por ventas o servicios b) Cobros por otros ingresos ordinarios, cuotas, comisiones b) Pagos a proveedores c) Pagos a proveedores y suministradores d) Pagos a empleados e) Cobros y pagos a empresas de seguros por pólizas c) Pagos a empleados y otros suministradores f) Cobros o pagos por impuesto sobre las ganancias d) Pagos a los gobiernos por impuestos, cuotas, tasas, multas y sanciones. g) Cobros o pagos por contratos de intermediación e) Cualesquiera otros cobros y pagos que no sean de inversión o financiación como devoluciones o de clientes o proveedores, cuotas a ENL, o indemnizaciones (de seguros o pleitos) etc. h) Cobros por intereses y dividendos percibidos (pueden ser clasificados como de explotación o como de inversión) d) Cobros de intereses y dividendos (de préstamos concedidos, otros instrumentos de deuda y acciones de otras entidades) i) Pagos por intereses y dividendos (pueden clasificarse como de explotación o como de financiación) e) Pagos por intereses a prestamistas y otros suministradores de financiación f) Cobros y pagos por la compra y venta de deuda y valores clasificados como “comercio de valores” según el SFAS nº 115. EL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO: PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS 29 El documento 20 de AECA recomienda que los flujos de efectivo de explotación se clasifiquen de acuerdo con su naturaleza, esto es, los que derivan de actividades de explotación, financieras y por el impuesto sobre beneficios. Cabe señalar que la mayor parte de las normas reguladoras del EFE permiten presentar los flujos de las operaciones tanto por el método directo como por el método indirecto. El método directo muestra a los usuarios todos los cobros y pagos derivados de la actividad corriente de la empresa, mientras que el método indirecto toma el resultado del ejercicio, realiza sobre éste una serie de ajustes y así obtiene los flujos de efectivo generados por las actividades de explotación. Cabe mencionar que la NIC 7 (párs. 14 y 31) obliga a informar de manera separada sobre los intereses y dividendos recibidos y pagados, mientras que los restantes tipos de flujos de explotación se enumeran a modo de ejemplo. El SFAS 95 (pár. 27) exige que cuando se elabore el EFE por el método directo, se enumeren como mínimo, todos los tipos de flujos de operaciones mencionados en el cuadro n º 1. 2. Flujos de las actividades de inversión Reflejan el esfuerzo de la empresa en inversiones en inmovilizado o en la compra de empresas. Es la medida de los desembolsos efectuados en recursos económicos que en el futuro producirán ingresos y nuevos flujos de efectivo. Cuadro nº 2: Flujos de efectivo generados por actividades de inversión. NIC 7 (extracto) a) Pagos por la adquisición de inmovilizado SFAS 95 (extracto) a) Cobros por la venta de inmovilizado material material, inmaterial incluyendo costes capitalizados, y otros activos a largo plazo. b) Cobros por ventas de inmovilizado b) Pagos por la compra de inmovilizado material material, inmaterial incluyendo costes capitalizados, y otros activos a largo plazo. c) Pagos por la adquisición de instrumentos de pasivo c) Cobros y pagos por la venta o compra de o de capital emitidos por otras empresas, así como instrumentos de deuda de otras empresas o por la participaciones en negocios conjuntos. concesión y reembolso de préstamos. f) Cobros por venta y reembolso de instrumentos de d) Cobros y pagos por la venta o compra de instrumentos pasivo o de capital emitidos por otras empresas, así de patrimonio neto de otras empresas y por los retornos como inversiones en negocios conjuntos. de estas inversiones. g) Anticipos de efectivo y préstamos a terceros h) Cobros del reembolso de anticipos y préstamos a terceros h) Cobros y pagos derivados de contratos a plazo, futuros, opciones y permutas financieras que no se mantengan por motivos de intermediación, o acuerdos comerciales habituales. EL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO: PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS 30 3. Flujos de las actividades de explotación o flujos de las operaciones Son los flujos procedentes de las operaciones de captación de capitales ajenos y propios, así como de la devolución de aportaciones o reembolso de deudas. Permiten conocer las necesidades de efectivo para cubrir los compromisos con quienes financian la empresa. Cuadro nº 3: Flujos de efectivo generados por las actividades de financiación NIC 7 (extracto) a) Cobros por la emisión de acciones u otros instrumentos de capital y pagos por la compra o rescate de las acciones de la empresa b) Cobros por la emisión de instrumentos de deuda (a corto y a largo plazo) y reembolso de los fondos tomados en préstamo. SFAS 95 (extracto) a) Cobros por la emisión de acciones y reembolsos por su amortización. b) Pagos de dividendos c) Cobros y pagos procedentes de instrumentos de deuda a corto y a largo plazo y reembolsos de deudas. c) Pagos para reducir la deuda pendiente de los arrendamientos financieros. Por último, hay que advertir que en el caso de que se hayan realizado operaciones de inversión y financiación no monetarias (por ejemplo, capitalización de deuda o adquisiciones de activo con financiación a largo plazo) se informará de ello en la memoria, puesto que al no afectar al efectivo no pueden figurar en el EFE. Si estas operaciones se realizaran parcialmente en efectivo, figurarían por la parte cobrada o pagada en el EFE, y se informaría en la memoria de la parte no monetaria (BPGC: norma 9ª, 9; NIC 7: 43; SFAS95: 32). Otra alternativa a las notas para informar de las transacciones no monetarias cuando su número es muy reducido, es incluirlas en un esquema separado o anexo al EFE (SFAS 95: 74). EL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO: PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS 31 3. LA ESTRUCTURA DEL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO: ANÁLISIS COMPARADO En el apartado anterior ya hemos tenido la oportunidad de comprobar que las distintas normas se muestran unánimes en la clasificación de los flujos de efectivo: flujos de efectivo generados por actividades de explotación, por actividades de inversión y por actividades de financiación. No obstante, se pueden señalar una serie de peculiaridades establecidas en el BPGC, siguiendo las indicaciones de la NIC 7, no contenidas en el resto de documentos que regulan dicho estado. Para el cálculo de los flujos de efectivo procedentes de las actividades de explotación, la norma 9ª del BPGC establece el método indirecto mientras que la NIC 7 (pár. 19), Documento 20 de AECA y el Libro Blanco aconsejan la utilización del método directo. El SFAS 95 (pár. 30) requiere que cuando se utilice dicho método, se ofrezca una conciliación entre el resultado neto y los flujos de efectivo de las operaciones, bien en el propio Estado de flujos de efectivo, bien en un esquema o anexo separado. En el cuadro nº 4 se lleva a cabo un análisis comparado de las diferentes normativas. Cuadro nº 4: Métodos recomendados y permitidos para el cálculo de las actividades de explotación Método recomendado Método permitido Directo (y conciliación) Indirecto (y conciliación) NIC 7 (1994) Directo Indirecto AECA Doc.20 (1998) Directo Indirecto (y conciliación) Libro Blanco (2002) Directo Indirecto (y conciliación) Indirecto ----- SFAS 95 (1987) BPGC (2007) La principal ventaja del método directo es que deja constancia de todos los flujos de las operaciones que se han producido, que es el objetivo principal del EFE. El análisis de estos cobros y pagos históricos puede anticipar los futuros flujos de las actividades (SFAS 95: 107), información que no ofrece el método indirecto (NIC 7: 19). En palabras del profesor Gonzalo Angulo (2003: 5-6) este método tiene la enorme ventaja de la simplicidad, la comprensibilidad y la estrecha relación entre los movimientos naturales que desea presentar y la forma de denominarlos. El lector puede entender fácilmente qué representa cada uno de los conceptos. Es interesante también como instrumento de proyección, ya que la comparación intertemporal de las cifras puede llevar a conclusiones significativas. Por otro lado, el método indirecto requiere realizar una serie de ajustes en el resultado del ejercicio para obtener el flujo neto de efectivo generado (o aplicado) en las actividades operativas. Siguiendo las indicaciones del SFAS 95: 28 y la NIC 7: 18 los flujos de efectivo de las operaciones se obtienen a partir del resultado (pérdida o ganancia neta del ejercicio) corrigiéndolo por todo tipo de partidas de pago diferido y devengos que sean la causa de cobros y pagos en el pasado o en el futuro y por los resultados (pérdidas o ganancias) asociados con flujos de efectivo de actividades clasificadas como de inversión o financiación. EL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO: PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS 32 El SFAS 95 reconoce la validez de los dos métodos, puesto que ambos arrojan informaciones relevantes. Es interesante comprobar cómo en los comentarios al borrador previo al SFAS 95, los representantes de la banca comercial y los analistas financieros argumentaban que el detalle de los flujos de las operaciones (método directo) es especialmente relevante para mostrar las necesidades financieras de las empresas y su capacidad para devolver los fondos que les han prestado (pár. 111). El método directo exige conocer el montante total de efectivo de las facturas cobradas y pagadas de las diferentes actividades de explotación, por ello, la mayoría de las empresas argumentaron que de sus sistemas contables no podían obtener los cobros y pagos de operaciones directamente. Así, el FASB consideró también la posibilidad de que lo presenten por el método indirecto (pár. 114). Este organismo entiende que los costes de ajustar solamente los gastos e ingresos relacionados con los flujos de operaciones que la norma exige como mínimo (ventas, coste de ventas, sueldos, suministros, impuestos, intereses y dividendos) no supone una carga excesiva, puesto que no conlleva un alto grado de detalle. El formato más completo y útil para el FASB es el método directo acompañado de la conciliación entre el resultado neto y los flujos de las operaciones. Por ello, exige a las empresas que utilicen el método indirecto, que revelen separadamente los intereses e impuesto pagados, así como las variaciones de circulante (existencias, cuentas por pagar y por cobrar) (pár. 121). Por ello, en el caso de las empresas que siguen el SFAS 95 y utilizan el método indirecto, es frecuente encontrar al final del mismo una información suplementaria para cumplir este precepto, donde se muestran directamente los flujos de caja de intereses e impuestos pagados. Los defensores del método indirecto, elegido por el BPGC, destacan una serie de razones a su favor: a) permite comparar el resultado neto con los flujos de las operaciones (SFAS 95: 108), b) es un cálculo sencillo puesto que a partir de la información del balance de situación y la cuenta de pérdidas y ganancias no necesita calcular los cobros y pagos realizados en el ejercicio; y, c) permite una aproximación a la calidad del resultado contable en la medida que muestra las conciliaciones del principio de devengo frente a las del principio de caja (por ejemplo en Ruiz Lamas 2005: 4). En esta línea los análisis empíricos realizados principalmente en muestras anglosajonas ponen de manifiesto la preferencia por la utilización del método indirecto (por ejemplo, Bahnson et al. 1996; Ding et al. 2003). También parece que las empresas españolas que obligatoriamente han tenido que aplicar las NIIF a partir del ejercicio 2005 se han decantado por la utilización del método indirecto (Villacorta 2006: 25). En el cuadro nº 5 se presenta un análisis comparativo de las distintas normativas. En el cálculo de los flujos de efectivo de explotación pueden encontrarse una serie de diferencias entre las recomendaciones dadas en el Documento 20 de AECA y la norma 9ª (pár. 1) del BPGC, que traslada el modelo propuesto por la NIC 7. Cuatros pasos propone el BPGC para el cálculo de los flujos corrientes por el método indirecto: 1. Resultado del ejercicio antes de impuestos. Para el cálculo de los flujos de efectivo de explotación el documento 20 de AECA parte del resultado del ejercicio siendo habitual en la práctica tomar el resultado neto. Por el contrario, el SFAS 95, NIC 7 y el BPGC acotan el concepto de resultado del ejercicio considerando que el punto de partida debe ser el resultado antes de impuestos. Este requerimiento hace que se tengan que presentar de forma directa los pagos realizados por el impuesto sobre beneficios en el periodo (concretamente aparecen separados en el punto 4 del modelo requerido por el BPGC y la NIC7). 2. Ajustes al resultado. Para el cálculo del primer apartado que conforma el EFE, el BPGC (norma EL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO: PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS 33 9ª) inspirado en la NIC 7, corrige del resultado antes de impuestos los siguientes apartados: a) correcciones de valor y resultados por valor razonable; b) resultados por operaciones de inversión y financiación; y, c) remuneración de activos y pasivos financieros (ingresos y gastos financieros), que se eliminan ahora, para figurar separadamente más adelante, los cobros y pagos correspondientes a los mismos obtenidos por el método directo. Por tanto, entre los ajustes realizados al resultado nos encontramos con las amortizaciones, provisiones, pérdidas por deterioro, resultados por la baja o enajenación del inmovilizado e instrumentos financieros, diferencias de cambio y resultados por aplicación del valor razonable. Esta última partida se justifica por la introducción del valor razonable para ciertos elementos. La novedad incorporada en el BPPC (norma 9ª) son los ajustes relativos a los intereses y dividendos que tienen como finalidad eliminar totalmente su efecto en el resultado, para, posteriormente volver a mostrarlos separadamente, y cumplir así con el mandato de la NIC 7. La introducción de estas partidas hace que el usuario de la información financiera pierda una variable significativa para el análisis de la conciliación entre el resultado y los flujos de caja de explotación. Nos referimos a los recursos procedentes de las operaciones (RPO), variable de gran utilidad en el análisis financiero de la entidad. De este modo, la suma del resultado antes de impuestos más los ajustes señalados en este párrafo da lugar a una variable diferente al RPO y que actualmente se encuentra sin denominación(3) . 3. Cambios en el capital circulante. Existe coincidencia plena en las normas estudiadas en eliminar los cambios en el capital corriente que tengan su origen en una diferencia temporal entre la corriente real y la corriente monetaria de bienes y servicios, transformando así ingresos y gastos de explotación en cobros y pagos. 4. Otros flujos de efectivo de actividades de explotación. Mención aparte requieren las distintas normas en el caso de los flujos de intereses, cobro de dividendos y los flujos por impuesto sobre beneficios, conformando el último apartado exigido para la elaboración de los flujos de efectivo de explotación. Como se ha comentado, en las normativas analizadas se señala que los intereses cobrados y pagados y los dividendos cobrados formarán parte de las actividades de explotación aunque pueden aparecer también clasificados dentro de las actividades de inversión y financiación. El lector puede observar cambios sustanciales en el modelo adoptado por el BPGC y el modelo establecido por AECA en el Documento 20 (véase el cuadro nº 5). Cabe señalar que algunos autores consideran que la forma de obtener los flujos de efectivo generados por la actividad de explotación de la entidad apuntada en la NIC 7 (y ahora trasladada prácticamente de forma literal en el BPGC) peca de farragosa y poco estructurada y en todo caso, resulta insuficiente como presentación normalizada (Ruiz Lamas 2005: 8). En el cuadro de financiación se puede observar entre los orígenes de fondos, aquellos que procedentes de las operaciones (RPO) que representa el excedente financiero derivado de las operaciones corrientes, que se materializará en un incremento del fondo de maniobra o en alguno de los elementos que integran la estructura fija o permanente de la empresa. Los RPO representan la cantidad de recursos generados por la empresa que, una vez que se hayan pagado las deudas y cobrados los créditos por las partidas de gastos e ingresos de la empresa, se convertirán en flujos netos de efectivo (EPO). (3) En los apéndices de la NIC 7 se utiliza el concepto de “ganancia de la operación antes de cambios en el capital de trabajo”. 6. Cobros por operaciones de inversión 7. Pagos por operaciones de inversión 9. Cobros por operaciones de financiación 10. Pagos por operaciones de financiación (dividendos pagados opcional) 11. Flujos de efectivo de financiación 9. Cobros por operaciones de financiación 10. Pagos por operaciones de financiación (dividendos pagados) 8.Flujos de efectivo de inversión 6. Pagos por operaciones de inversión 7. Cobros por operaciones de inversión (1+2+3) 5.Flujos de efectivo de explotación (1+2+3+4) (1+2+3+4) 9. Cobros y pagos relacionados con instrumentos de patrimonio 10. Cobros y pagos relacionados con instrumentos de pasivo financiero 11. Pagos por dividendos y remuneraciones de otros instrumentos de patrimonio 6. Pagos por inversiones 7. Cobros por inversiones Nota: Las normas del IASB y FASB no establecen modelos normalizados para la elaboración del Efe. Los formatos anteriores se basan en las indicaciones de la norma y en los ejemplos ilustrativos que contienen Fuente: Elaboración propia Informacion adicional minima: a) Intereses pagados y cobrados b) Dividendos cobrados c) Pagos (cobros) por impuesto sobre beneficios d)otros 9. Pagos por operaciones de financiación 10. Cobros por operaciones de financiación (dividendos pagados) 6. Pagos por inversiones 7. Cobros por inversiones (1+3) (intereses pagados y cobrados, dividendos pagados y cobrados, pagos/cobros por impuesto sobre beneficios) 3. Cambios en el capital circulante (aumentos y disminuciones) Sin denominación (intereses pagados y cobrados, dividendos pagados y cobrados, pagos/cobros por impuesto sobre beneficios) 3. Variación de saldos del capital circulante (saldos deudores y acreedores) 2. Recursos procedentes de las operaciones RPO (amortizaciones y provisiones resultados de la baja y venta de inmovilizados resultados de subvenciones traspasadas ajustes por impuestos sobre beneficios y otros) BPGC 1. Resultado del ejercicio antes de impuestos 2. Ajustes en el resultado a) Correcciones valorativas (amortizaciones, provisiones y deterioro y resultados surgidos por aplicación del valor razonable) b) Ingresos y gastos financieros c) Resultados por bajas y ventas de inmovlizado d) Diferencias de cambio y otros 4. Otros flujos de efectivo de actividades de explotacion 3. Cambios en el capital circulante (aumentos y disminuciones) 3. Cambios en el capital circulante (aumentos y disminuciones) AECA (1997) 1. Resultado del ejercicio +Cargos que no mueven fondos -Abonos que no mueven fondos 4. Otros flujos de efectivo de actividades de explotacion Sin denominación Sin denominación NIC 7 1. Resultado antes de impuestos 2. Ajustes al resultado a) Correcciones valorativas b) Ingresos y gastos financieros c) Resultado por bajas y ventas de inmovilizado d) Diferencias de cambio y otros SFAS 95 1. Resultado neto de impuestos 2. Ajustes para conciliar el resultado con los flujos de caja de las operaciones a) Amortizaciones y provisiones b) Resultado de inmovilizados d) Otros: resultados de operaciones discontinuas, cambios en criterios contables, etc. EL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO: PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS 34 EL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO: PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS 35 Este proceso tiene especial relevancia para los usuarios y más si se tiene en cuenta el objetivo propuesto en la elaboración de la información financiera. Puede verse de forma más clara en el cuadro nº 6. Aún cuando el resultado es positivo la empresa puede tener problemas de liquidez. En este caso, habría que evaluar la conciliación entre el beneficio y los flujos de operaciones. En esta conciliación intervienen dos tipos de operaciones: los ajustes a largo plazo, que determinan los RPO, y las variaciones en el capital circulante. La presentación del EFE por el método indirecto permite observar la parte de los RPO que se transforma en liquidez y la parte que se acumula en partidas de circulante como existencias, clientes y acreedores comerciales (Gonzalo Angulo 2003: 6; Jeter 2005: 6). Cuadro nº 6: Relación entre el beneficio neto y los flujos de operaciones Resultado BN<0 RPO Método recomendado Método permitido RPO<0 Iliquidez severa Liquidez inestable RPO>0 Iliquidez preocupante Liquidez suficiente Más adelante ahondaremos en el tratamiento dado en la NIC7 y BPGC a determinadas partidas como los intereses, dividendos y el impuesto sobre beneficios. Pero ahora analizamos el formato exigido para presentar los flujos derivados de las actividades de inversión y financiación del EFE, donde aparecen ciertas peculiaridades. Los ejemplos ilustrativos del SFAS 95 y el modelo propuesto por el Documento 20 de AECA calculan los flujos obtenidos por actividades de inversión mediante la diferencia entre los cobros y los pagos generados por este tipo de actividades. En cambio el BPGC (y los ejemplos ilustrativos de la NIC 7) sigue el procedimiento contrario, primero da cuenta de los pagos para terminar con los cobros. Aunque es un aspecto meramente formal puesto que el resultado lógicamente es el mismo, conviene tenerlo en consideración(4). En línea con los anteriores argumentos, los inversores y analistas están habituados a encontrarse en los flujos de efectivo generados por las actividades de financiación, los cobros (básicamente por aportaciones de los accionistas y captación de capitales ajenos a largo plazo) y después los pagos (básicamente por devolución de aportaciones, reembolso de capitales ajenos y pago de dividendos) tal y como se recoge en el documento 20 de AECA. El BPGC no sigue estas pautas en la clasificación de los flujos generados por las actividades de financiación sino que las agrupa en función de su procedencia, obteniendo así, tres categorías: Cobros y pagos relacionados con instrumentos de patrimonio Cobros y pagos relacionados con instrumentos de pasivo financiero Pagos por dividendos y remuneraciones de otros instrumentos de patrimonio Si retomamos el tema de la presentación de intereses y dividendos, la NIC 7 señala que deben ser presentados de forma separada y pueden formar parte de las actividades de explotación, inversión o financiación. Esta indicación es válida para el importe total de intereses pagados tanto si ha sido reconocido como gasto en la cuenta de resultados como si han sido capitalizados de acuerdo con el tratamiento alternativo permitido por la NIC 23. El motivo según la NIC 7 (pár. 37) para clasificar alternativamente los intereses y dividendos pagados como flujos de financiación, consiste en que pueden representar el coste de obtener recursos financieros. Dicha (4) En el caso particular de que la empresa adquiera o enajene un conjunto de activos y pasivos que constituyan un negocio o línea de actividad se incluirá una partida única y específica en las actividades de inversión con signo positivo o negativo según corresponda a una desinversión o inversión, respectivamente (BPGC, pár. 10). EL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO: PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS 36 norma permite que los dividendos pagados se califiquen como de operaciones, porque en muchas empresas son recurrentes y no dependen del resultado obtenido y además entran en la determinación del resultado. Los intereses y dividendos cobrados pueden considerarse por la misma razón flujos de operaciones, pero pueden asimismo considerarse flujos de inversión ya que representan el rendimiento de inversiones financieras. Tanto la NIC 7 como el Proyecto NIIF PyME se manifiestan flexibles en el tratamiento de estos flujos. El SFAS 95 se muestra partidario de que los intereses cobrados y pagados, así como los dividendos cobrados se clasifiquen como de operaciones, como suele ser habitual en la práctica, permitiendo así una mayor comparabilidad entre empresas. Esta norma reconoce también las razones mencionadas que justifican su presentación alternativa como actividades de inversión o de financiación, según el caso, pero considera más apropiado que figuren entre los flujos de las operaciones, para poder resaltar las diferencias entre el resultado neto y los flujos procedentes de las operaciones, que de lo contrario no se podrían comparar de la misma manera al no intervenir dichos flujos en ambas magnitudes (párs. 88-90). No obstante, como comprobaremos a continuación, los dividendos pagados figurarán normalmente entre los flujos de financiación, tal y como señala la norma (pár. 20). El BPGC hace esta misma indicación para los dividendos pagados. En cuanto a los flujos de caja procedentes de los impuestos las dos normas coinciden en que deben ser clasificados como de explotación, a menos que puedan ser específicamente asociados con actividades de inversión o financiación (NIC 7, pár. 35-36). El SFAS (párs. 91-92) apunta que desentrañar los distintos flujos por impuestos es una labor compleja y arbitraria cuyos beneficios no compensan los costes en que para ello se habría de incurrir. También la NIC 7 y el BPGC consideran necesario informar sobre los flujos procedentes de transacciones en moneda extranjera, importes significativos de saldos de efectivo que no estén disponibles para ser utilizados, flujos de efectivo relacionados con coberturas contables y flujos de operaciones interrumpidas. En el caso en que la empresa tenga activos y pasivos financieros de rotación elevada puede mostrarlos netos y dar información adicional en la memoria (el lector interesado en estas cuestiones puede consultar los párs. 4-8 de la norma 9ª de BPGC). En suma, el BPGC exige un formato estándar para la elaboración del EFE al igual que para el resto de documentos que integran las cuentas anuales. La estructura propuesta difiere de la indicada por AECA en su Documento 20, aproximándose a los requerimientos de la normativa del IASB. Si cabe señalar alguna debilidad de fondo en el formato requerido por el BPGC, sería la pérdida definitiva de los RPO debido a que no aparecen explícitamente en el EFE ni tampoco en el cuadro de financiación, al ser éste eliminado de la información que deben rendir las empresas españolas. EL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO: PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS 37 4. UTILIDAD DEL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO Hasta el momento hemos abordado el objetivo, contenido y estructura del EFE resaltando las principales diferencias entre el BPGC y el resto de normas de obligada referencia. Sentamos ahora con las principales ventajas que presenta este nuevo estado contable para los usuarios de la información financiera: a) Permite a los usuarios evaluar los cambios en los activos netos de la empresa, su estructura financiera y su capacidad para modificar tanto los importes como las fechas de cobros y pagos, con la finalidad de adaptarse a la evolución de las circunstancias y a las oportunidades que se puedan presentar (NIC 7, pár. 4) La primera ventaja del EFE es, por tanto, su capacidad y utilidad como herramienta de análisis para la toma de decisiones sobre la empresa que es consistente con los objetivos que debe cumplir la información financiera señalados en los marcos conceptuales del IASB, FASB, AECA y ahora en el BPGC. El conocimiento de la liquidez de la firma y cómo se ha generado es un instrumento de gran ayuda para un amplio conjunto de usuarios como son los propios gestores de la empresa para fines de control y también para un amplio abanico de usuarios externos con la finalidad de evaluar la situación de la entidad. b) Permite conocer la capacidad que la empresa tiene para generar efectivo y equivalentes al efectivo, permitiendo a los usuarios desarrollar modelos para evaluar y comparar el valor actual de los flujos netos de efectivo de diferentes empresas (NIC 7, pár. 4). La NIC 7 resalta la idea de que EFE informa no sólo la evaluación de cómo se han formado los flujos históricos de tesorería de la empresa a lo largo del tiempo sino su contraste con los de otras empresas. La información financiera exigida en la normativa trata de asegurar que se cumplen los objetivos de relevancia, fiabilidad y utilidad. La clasificación de los flujos en tres categorías (explotación, inversión y financiación) contribuye a proporcionar información cuantitativa y cualitativa sobre el origen del efectivo generado o aplicado. c) Posibilita la comparación de la información sobre el rendimiento de la explotación de diferentes empresas, ya que elimina los efectos de utilizar distintos tratamientos contables para las mismas transacciones y sucesos económicos. (NIC 7, pár. 4) Cabe recordar que el resultado contable se calcula sumando a los flujos de caja los ajustes por devengo dando así preferencia al principio de devengo frente al de correlación de ingresos y gastos. Los ajustes por devengo reflejan un conjunto de transacciones que en el ejercicio presente no suponen movimientos de efectivo pero lo harán en periodos futuros o lo han hecho en periodos previos. Es habitual desagregar dichos ajustes por devengo en dos grandes apartados: los que son manejables por los administradores (ajustes por devengo discrecionales) y los que derivan de las condiciones económicas a las que se encuentra sometida la entidad. Desde los foros de investigación se pone de manifiesto que los gerentes son capaces de retocar el resultado del ejercicio utilizando su poder de maniobra sobre los ajustes por devengo discrecionales(5). (5) El análisis de las diferencias entre el resultado contable y los flujos de caja de explotación puede descomponerse también en dos grandes grupos: los ajustes a largo plazo, que sumados al resultado contable darían lugar a lo que conocemos como recursos procedentes de las operaciones y los ajustes a corto plazo originados por las variaciones deudoras y acreedoras de las partidas del capital circulante. EL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO: PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS 38 Bernard y Skinner (1996: 324) indican que conocer por qué los gerentes eligen determinados ajustes discrecionales presenta gran interés tanto para los organismosreguladores y usuarios de la información financiera, como para la comunidad académica al objeto de poder entender e interpretar correctamente el resultado. Teóricos y expertos financieros argumentan que debido a las características que presentan los ajustes discrecionales (agrupan un conjunto de variables contables, modificaciones poco visibles y costosas) se constituyen como una herramienta muy poderosa a manos de los administradores para llevar a cabo políticas de alteración del resultado. La contrastación de las diferencias ocasionadas entre el principio de devengo y el principio de caja tienen especial importancia desde dos ópticas: la gestión del resultado y el comportamiento del mercado. Desde la primera de ellas los análisis empíricos sostienen que los ajustes por devengo son una herramienta frecuentemente empleada por los administradores para el logro de sus intereses privados. También desde el área del comportamiento del mercado se pone de manifiesto la incidencia que tienen los ajustes por devengo en la determinación de la formación de precios en el mercado. Incluso en esta línea de investigación se habla de la anomalía de los ajustes por devengo. d) La información histórica de los flujos de efectivo se usa como indicador del importe, momento de la aparición y certidumbre de flujos de efectivo futuros. Es útil para comprobar la exactitud de evaluaciones pasadas respecto a flujos futuros, así como para examinar la relación entre rendimiento, flujos de efectivo netos y el impacto de los cambios en los precios (NIC 7, pár. 5). Otra razón de peso para la incorporación del EFE es la de aumentar la predicción de la información financiera. A lo largo del tiempo la doctrina contable ha mostrado especial preocupación por la relevancia, utilidad y fiabilidad de la información financiera reportada en los estados financieros, características destacadas en los marcos conceptuales del IASB o AECA. De este modo, se pueden encontrar sin mucho esfuerzo estudios que demuestran que los flujos de caja constituyen un buen predictor de los resultados futuros esperados, superando incluso al tradicional resultado contable, debido a que los ajustes por devengo se presentan menos persistentes (Sloan 1996; Clinch et al. 2002). En suma, el EFE se constituye como un instrumento de control interno y externo. Desde el punto de vista del control interno es una herramienta básica en la gestión interna para los propietarios y los administradores; y, desde el punto de vista externo, confiere información útil para los prestamistas, inversores potenciales, analistas, proveedores y clientes. Además pone de manifiesto la existencia de liquidez suficiente para la distribución de dividendos. EL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO: PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS 39 5. CONCLUSIONES FINALES Uno de los aspectos más significativos que introduce el BPGC viene dado por la exigencia de dos nuevos documentos que integran el cuerpo de los estados financieros: el estado de cambios en el patrimonio neto y el Estado de flujos de efectivo. Este último no será obligatorio para aquellas entidades que presenten cuentas abreviadas y viene a sustituir al cuadro de financiación. Los usuarios de la información financiera tendrán a partir de ahora cinco documentos contables a su disposición para ejercer los controles necesarios sobre la información financiera: el balance de situación, la cuenta de pérdidas y ganancias, la memoria, el estado de cambios en el patrimonio neto y el Estado de flujos de efectivo. Los nuevos requerimientos de información financiera tienen como finalidad mejorar el análisis económico y financiero de la empresa, así como ayudar a los inversores a la toma de decisiones. Concretamente el Estado de flujos de efectivo es un documento que informa sobre el origen y la utilización los activos monetarios representativos de efectivo y otros activos líquidos equivalentes. Buena parte de la doctrina contable hace tiempo que defendía la elaboración de un estado de tesorería dentro de la información financiera principalmente por su facilidad de comprensión, su capacidad de predicción de la actuación y evolución futura de la entidad y su objetividad frente a otros documentos contables como la tradicional cuenta de resultados que no en pocas ocasiones se encuentra sujeta a ciertos retoques por parte de los administradores. El EFE se constituye como una herramienta esencial para el análisis financiero de la entidad que atenúa algunos de los inconvenientes de los otros estados financieros. Por tanto, no ponemos en duda la conveniencia de su incorporación en la normativa española y más si se tiene en cuenta que los inversores y las tendencias en la interpretación de los mercados financieros se centran en buena medida en la evaluación de los flujos de caja (históricos y potenciales). En este sentido, se piensa que la elaboración del EFE ayudará a cumplir con la función de predicción de la actuación futura de la entidad y contribuirá a incrementar la cantidad y la calidad de la información financiera que las empresas españolas deberán divulgar próximamente. Teniendo en cuenta estos beneficios, así como el propio objetivo de la información financiera que está expresamente orientado al conocimiento de los flujos de caja ya obtenidos y futuros, quizá podríamos sugerir que sería oportuno que también las PYMES lo elaboren, no ya por imperativo legal, sino por las ventajas que se derivan de su análisis. Este complemento de información que se caracteriza principalmente por su facilidad de comprensión, objetividad y mejora del análisis financiero de la entidad (situación pasada y futura) contribuiría a conocer mejor el tejido empresarial español que precisamente está formado fundamentalmente por las PYME. Una serie de reflexiones pueden realizarse con respecto al contenido y la estructura del EFE. En todas las normativas analizadas existe coincidencia en la clasificación de los flujos de efectivo que atiende a actividades de explotación, inversión y financiación. No obstante, el BPGC establece que los flujos de efectivo derivados de operaciones de explotación se calculen siguiendo el método indirecto sin exigir una conciliación adicional tal y como propone la mayoría de las normas analizadas (NIC 7; SFAS95; Documento 20 de AECA). La utilización del método indirecto supone realizar una serie de ajustes en el resultado del ejercicio para obtener los flujos de efectivo derivados de operaciones corrientes. Cabe señalar que entre este tipo de ajustes se incluyen los gastos e ingresos financieros, pero no porque no supongan cobros o pagos, sino porque deben figurar posteriormente de forma separada siguiendo las indicaciones de la NIC 7. Dos consecuencias se desprenden de los razonamientos anteriores. En primer lugar, el carácter opcional del EL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO: PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS 40 método directo puede suponer un esfuerzo adicional en la comprensión por parte de los usuarios de de la primera categoría de flujos presentados en este documento. En segundo lugar, la incorporación de ciertos ajustes al resultado como los intereses, supone que el usuario pierde una información útil para la toma de decisiones. Nos referimos a los RPO, que en nuestro país es una variable arraigada e incorporada frecuentemente en los análisis financieros para observar el uso que se le ha dado a tales recursos financieros, ya sea invirtiéndolos en la empresa, ya sea repartiéndolos como dividendos o dedicándolos al reembolso de deudas, y que, como hemos comentado, permite, al compararse con otras variables (BN y EPO) determinar situaciones financieras y de tesorería. Habida cuenta de los argumentos anteriores, puede decirse que el BPGC ha seguido literalmente las indicaciones de la normativa del IASB en la elaboración del EFE distanciándose en algunos aspectos de lo establecido en el Documento 20 de AECA. Las diferencias fundamentales radican en el método recomendado para el cálculo de los flujos de efectivo generados por actividades de explotación, la presentación de los flujos obtenidos por actividades de inversión y de financiación y la clasificación de intereses cobrados y pagados. No obstante encontramos positiva la sustitución del cuadro de financiación por el EFE propiciada por la adaptación de la normativa contable española a la internacional, por los beneficios relacionados con su análisis ya mencionados, porque contribuye eficazmente al cumplimiento de los objetivos de la información financiera relacionados con las necesidades de los usuarios respecto a los flujos de caja que necesitan conocer. También, porque constituye un formato demostrativo de liquidez congruente con nuestra legislación (art. 216 TRLSA) y porque puede permitir un avance en la elaboración de información en términos provisionales. EL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO: PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS 41 BIBLIOGRAFÍA ASOCIACIÓN ESPAÑOLA DE CONTABILIDAD Y ADMINISTRACIÓN DE EMPRESAS, AECA (1998): El estado de flujos de tesorería. Documento nº 20 de la Comisión de Principios y Normas Contables. BAHNSON, P.R.; MILLER, P.B.; BUDGE, B.P. (1996): “Nonarticulation in Cash Flow Statements and Implications for Education, Research and Practice”, Accounting Horizons 10, 1-15. BERNARD, V.L.; SKINNER, D.J. (1996): “What motivates managers´ choice of discretionary accruals?”, Journal of Accounting and Economics, vol. 22 (1-3): 313-325. CLINCH, G.; SIDHU, B.; SIN, S. (2002): “The usefulness of direct and indirect cash flows disclosures”, Review of Accounting Studies, 7 (4): 383-404. DING, Y.; STOLOWY, H.; TENENHAUS, M. (2003): “Shopping around for accounting practices: the financial statement presentation of French groups”, Abacus, vol. 39 (1): 42-65. FINANCIAL ACCOUNTING STANDARDS BOARD (FASB) (1978): Concept Statement 1: Objectives of Financial Reporting by Business Enterprises. Van der Meulen, S.; Gaeremynck, A. y Willekens, M. (2007): Atribute Differences between U.S. GAAP and IFRS earnings: An exploratory Study, The Internacional Journal of Accounting, 42: 123-142. FINANCIAL ACCOUNTING STANDARDS BOARD (FASB) (1984): Concept Statement 5: Recognition and Measurement in Financial Statements of Business Enterprises. FINANCIAL ACCOUNTING STANDARDS BOARD (FASB) (1987): Statement of Financial Accounting Standards nº 95: Statement of Cash Flow. FINANCIAL ACCOUNTING STANDARDS BOARD (FASB) (2006): Preliminary views: Conceptual Framework for Financial Reporting: Objective of Financial Reporting and Qualitative Characteristics of DecisionUseful Financial Reporting Information, Financial Accounting Series (nº 1260-001, july 6). GONZALO ANGULO, J.A. (Presidente) (2002): Informe sobre la situación actual de la contabilidad en España y líneas básicas para abordar su reforma (Libro Blanco para la reforma de la contabilidad en España). Comisión de Expertos nombrada por el Ministerio de Economía, ICAC, Madrid. GONZALO ANGULO, J.A. (2003): “El estado de flujo de efectivo y el estado de cambios en el patrimonio neto: origen, contenido y utilidad”, Documento de Trabajo de la Universidad de Alcalá publicado también en Boletín de Estudios Económicos, 2003, nº 178: 41-73 INSTITUTO DE CONTABILIDAD Y AUDITORÍA DE CUENTAS (ICAC) (2007): Borrador del Nuevo Plan General de Contabilidad. INTERNATIONAL ACCOUNTING STANDARDS BOARD (IASB) (1997): NIC 1- Presentación de Estados Financieros. INTERNATIONAL ACCOUNTING STANDARDS BOARD (IASB) (1994): NIC 7- Estado de flujos de efectivo. EL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO: PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS 42 INTERNATIONAL ACCOUNTING STANDARDS BOARD (IASB) (1999): NIC 23- Costos por intereses. INTERNATIONAL ACCOUNTING STANDARDS BOARD (IASB) (2007): Proyecto de Norma Internacional de Información Financiera para Pequeñas y Medianas Entidades. JETER, D. (2005): “Using the Statement of Cash Flows”, Comercial Lending Review, vol. 20 (4): 3-6. LARRÁN JORGE, M.; GARCÍA-BORBOLLA FERNÁNDEZ, A.; GARCÍA CORREAS, A.; RUIZ BARBADILLO, E. (2003): “Análisis empírico sobre las grandes compañías españolas”, Técnica Contable, nº 651, marzo: 27-41. LEY 16/2007, de 4 de julio, de reforma y adaptación de la legislación mercantil en materia contable para su armonización internacional con base en la normativa de la Unión Europea, publicada en el BOE nº 160 de 5/7/07. MOYA, S. (2005): “El estado de flujos de tesorería”, Harvard Deusto Finanzas y Contabilidad, nº 67, sept-oct.: 30-39. RUIZ LAMAS, F. (2005): “La adaptación a las NIIF y la presentación normalizada de la conciliación entre beneficios y flujos de efectivo de explotación”, Comunicación presentada a la V Jornada de Trabajo de Contabilidad Financiera, ASEPUC: 257-272. SLOAN, R.G. (1996): “Do stock prices fully reflect information in accruals and cash flows about future earnings?”, The Accounting Review, vol. 71 (3): 289-315. VILLACORTA HERNÁNDEZ, M.A. (2006): “El Estado de flujos de efectivo”, Técnica Contable, vol. 58, nº 691: 18-30. UTILIDAD DEL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO PARA DETECTAR MANIPULACIONES DE RESULTADOS(1) Fernando Ruiz Lamas Universidade da Coruña E-mail:fruiz@udc.es António Augusto Gregório ISPGAYA - Instituto Superior Politécnico Gaya E-mail: agregorio@ispgaya.pt PALABRAS CLAVE Contabilidad creativa, estado de flujos de efectivo. RESUMEN Las prácticas de contabilidad creativa han sido objeto de creciente preocupación en el mundo desarrollado. La armonización internacional de las normas contables se considera una forma de mejorar la calidad de la información financiera. Dado que la información sobre flujos de efectivo se considera menos subjetiva que el resultado, la presentación de un estado de flujos de efectivo en el seno de las cuentas anuales de las empresas se considera un instrumento útil para prevenir la manipulación de beneficios. En el presente trabajo discutimos el contenido de la conciliación entre resultados y flujos de efectivo de explotación, divididos en ajustes de largo plazo y ajustes de corto plazo. La evidencia empírica sugiere que las conclusiones del análisis de estos dos items son sustancialmente diferentes cuando se trata de detectar prácticas de contabilidad creativa. (1) Una versión preliminar del presente trabajo fue presentada al IX Congresso de Contabilidade e Auditoria, en Coimbra, en noviembre de 2006. UTILIDAD DEL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO PARA DETECTAR MANIPULACIONES DE RESULTADOS 44 1. INTRODUCCIÓN El artículo 34.2 del Código de Comercio, en la nueva redacción dada por la Ley 16/2007, establece que “Las cuentas anuales deben redactarse con claridad y mostrar la imagen fiel del patrimonio, de la situación financiera y de los resultados de la empresa, de conformidad con las disposiciones legales. Pese a ese objetivo de imagen fiel a mostrar por las cuentas anuales, como subrayan Laínez e Callao (1999: 17), la regulación de la presentación de información financiera no puede dejar de incluir elementos subjetivos, cuya aplicación requiere en muchos casos la realización de estimaciones por parte de la empresa, posibilitando que una misma realidad pueda ser reflejada de formas diferentes. A esto se añade la propia flexibilidad e indeterminación presente en las normas contables. Es en este contexto en el que surge el concepto de contabilidad creativa, ligado a la falta de veracidad en los estados financieros, puesta de manifiesto en diferentes escándalos financieros que han puesto en tela de juicio la utilidad de la información suministrada a los usuarios. Como consecuencia, siguiendo a Amat e Blake (2002: 10), a escala internacional se están tomando medidas que limiten las posibilidades de manipulación. Ello tiene que ver con alcanzar un mayor grado de armonización en la regulación contable, que incorpore normas de mayor calidad técnica. La obligación de presentar un estado de flujos de efectivo puede ser considerada una actuación más en dicho sentido. En el presente trabajo se analiza la utilidad de la presentación obligatoria del estado de flujos de efectivo, conforme a lo establecido en el borrador de nuevo PGC, a efectos de controlar la existencia de prácticas de contabilidad creativa en la declaración de resultados. Son muchos los trabajos que han justificado a priori la inclusión de un estado de esta naturaleza en el seno de las cuentas anuales basándose en que se aporta así una base más fiable de medida del desempeño empresarial. Con todo, tales afirmaciones precisan de dotar al analista de una metodología que le permita detectar tales prácticas. 2. CONTABILIDAD CREATIVA Y RESULTADOS No existe una única definición de contabilidad creativa, por lo que se presentan algunas perspectivas diferentes sobre el tema. Así, para Jameson (1988: 20), la contabilidad creativa es esencialmente un proceso de uso de normas, donde la flexibilidad y las omisiones pueden hacer que los estados financieros den una visión diferente a la prevista por tales normas. Naser (1993: 59), por su parte, define la contabilidad creativa como el proceso de manipulación de las cuentas de una empresa aprovechando las lagunas de las normas contables y la existencia de diferentes opciones en los criterios de valoración para transformar los estados financieros reales en lo que se quiera que sean; pero también el proceso por el que se planean las operaciones para obtener los resultados contables deseados, en vez de informar de un modo consistente y neutral. En la opinión de Lainez y Callao (1999: 20), la contabilidad creativa es la que aprovecha las posibilidades que ofrecen las normas (opcionalidad, subjetividad, vacíos de regulación, etc.) para presentar estados financieros que reflejen la imagen deseada y no necesariamente la que es en realidad. UTILIDAD DEL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO PARA DETECTAR MANIPULACIONES DE RESULTADOS 45 Amat y Blake (2002: 11), explican que el término contabilidad creativa se utiliza para describir el proceso mediante el cual los contables se sirven de su conocimiento de las normas para manipular las cifras incluidas en las cuentas de una empresa. En la opinión de Cosenza (2003: 6), la contabilidad creativa está asociada a la estrategia de ofrecer una visión más optimista de la compañía para los distintos agentes económicos de lo que resultaría a través de su verdadera imagen. Uno de los factores más influyentes a este respecto es la presión, cada vez mayor, del mercado de capitales, para presentar cifras de resultados, rentabilidad, situación financiera y patrimonial prometedoras. Según Laínez y Callao (1999: 22), la mencionada presión que siente una compañía conduce al desarrollo de innovaciones en contabilidad creativa, las cuales hacen que a los usuarios les sea cada vez más difícil saber cuándo la información está reflejando la verdadera imagen o cuándo es fruto de la creatividad del contable. La existencia de sistemas de remuneración dependientes de la evolución de la empresa, en función de la información contenida en los estados financieros, alimentados por el propio responsable de la contabilidad, es otro incentivo para la presentación de una imagen ficticia de las cuentas. De hecho, el responsable de la elaboración de la información, al beneficiarse de su privilegiada situación, ya que controla todo el flujo de información contable generada por la empresa, estará en condiciones de manipular la información financiera de forma que pueda incrementar su remuneración. En este sentido, como subraya Monterrey (1999: 448), la evidencia empírica documentó con precisión que en las empresas con problemas financieros la contabilidad tiende a orientarse de forma casi unánime en la dirección de engordar los resultados. 3. RESULTADOS VERSUS FLUJOS DE EFECTIVO DE EXPLOTACIÓN En este trabajo se parte de la premisa de que la presentación del estado de flujos de efectivo reduce las prácticas de manipulación que afectan al resultado, dado que la utilidad de comparar resultados con flujos de caja se basa en que, en última instancia, los ingresos deben acabar por convertirse en entradas de efectivo. En la opinión de Mulford e Comiskey (2005: 271-284), las prácticas de contabilidad creativa sobre el resultado podrían detectarse por comparación con la evolución de los flujos de efectivo derivados de las actividades de explotación, una vez aisladas las diferencias debidas a factores estacionales, alteraciones en el ciclo económico y en la posición de la empresa en el ciclo de vida de su negocio típico o principal. En relación con esta última cuestión, los negocios de las empresas pasan por etapas análogas a las que se identifican en el análisis del ciclo de vida de un producto, esto es: las fases de introducción, crecimiento, madurez y declive. Stickney y Brown (1999: 69), asocian cada fase con una determinada estructura de flujos de efectivo por actividades, en función del signo, positivo o negativo, de los respectivos flujos. Pero a lo largo del ciclo de vida de un negocio, la relación entre los resultados y los flujos de efectivo de explotación no es necesariamente estable. En ausencia de otros factores, durante la etapa de introducción y en los primeros momentos de la etapa de crecimiento, tasas relativamente elevadas en el crecimiento de los ingresos de explotación producen un aumento mayor en los resultados que en los flujos de efectivo de explotación. Sin embargo, en las etapas siguientes ocurre lo contrario, por lo que se reduce la diferencia entre resultados y flujos de efectivo de explotación hasta el punto de que éstos lleguen a superar a aquéllos. UTILIDAD DEL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO PARA DETECTAR MANIPULACIONES DE RESULTADOS 46 Gráfico 1: Relación entre resultados y flujos de efectivo de explotación a lo largo del ciclo de vida de un negocio (Fuente: Mulford e Comiskey, 2005: 278). + Resultados Flujos de efectivo de explotación 0 Introducción Crecimiento Madurez Declive ETAPAS DE CICLO DE VIDA DE NEGOCIO En la comparación entre resultados y flujos de efectivo de las actividades de explotación, un factor explicativo común es el importe de la cifra de ventas. Mulford e Comiskey (2005: 290) proponen un indicador llamado Excess Cash Margin, cuya fórmula es la siguiente: ECM = (FCO -RO)/V. Siendo: ECM: Excess Cash Margin FCO: Flujos de efectivo de las actividades de explotación RO: Resultado del ejercicio V: Ventas Así, la evolución de esta ratio a lo largo del tiempo, para cuyo estudio se debe considerar un período mínimo de tres años, puede servir como punto de partida para analizar las diferencias entre flujos de efectivo y resultados. De este modo, reducciones continuadas en el valor de la ratio implicarían que la tasa de crecimiento de los resultados se sitúa por encima de la tasa de crecimiento de los flujos de efectivo de explotación; o bien, que la tasa de disminución de los resultados es menor que la tasa de disminución de los flujos de caja. En ambos casos, se trataría de un indicio de prácticas de contabilidad creativa sobre el resultado, con el propósito de presentar beneficios superiores o pérdidas inferiores a las que realmente corresponderían con una gestión neutral sobre el resultado. Cuando el ECM aumenta continuadamente, esto puede ser debido a que los flujos de efectivo de explotación aumentan a una tasa mayor o disminuyen a menor ritmo que los resultados. Esta evolución tampoco resulta sostenible con el paso del tiempo, ya que sólo podría venir explicada por una reducción anormal de las necesidades operativas de fondos, definidas como la diferencia entre los activos y pasivos corrientes de explotación. Otra explicación posible a esta evolución procedería del aumento de los gastos por amortizaciones o pérdidas por deterioro del valor de los activos, u otras partidas de la cuenta de resultados que no produzcan variaciones en los capitales corrientes relacionados con las actividades de explotación, sin relación con aumentos en las ventas y en el resultado bruto de explotación. En este segundo caso, puede suceder que se hubieran producido en el pasado prácticas de contabilidad creativa sobre el resultado que derivaron, por ejemplo, en una infravaloración de las dotaciones a amortizaciones. UTILIDAD DEL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO PARA DETECTAR MANIPULACIONES DE RESULTADOS 47 Si el valor del ECM es estable a lo largo del tiempo, es decir, si su valor en términos acumulados, sin perjuicio de que se produzcan alteraciones más o menos frecuentes en el signo y en el valor de la ratio de un ejercicio para otro, se produciría una relación estable entre flujos de caja y resultados, lo que evidenciaría la ausencia de prácticas de contabilidad creativa sobre los resultados; dado que las variaciones debidas a las oscilaciones en el ciclo económico o a cambios de etapa en el ciclo de vida del negocio de la empresa vienen representadas por la evolución de la cifra de ventas en el denominador de la ratio. Las diferencias entre el resultado y el flujo neto de efectivo por actividades de explotación pueden analizarse mejor separando los denominados ajustes de largo plazo de los ajustes de corto plazo. Los primeros son la diferencia entre los ingresos y gastos que producen aumentos y disminuciones en los capitales corrientes de las actividades de explotación; mientras que los ajustes de corto plazo explican la diferencia entre los normalmente denominados recursos generados, o recursos procedentes de las operaciones, y los flujos de efectivo de las actividades de explotación, es decir, la variación registrada a lo largo del ejercicio en el capital corriente de las actividades de explotación (activos corrientes, menos pasivos corrientes, de explotación). El estudio separado de las dos clases de ajustes, desde el punto de vista del análisis de los flujos de efectivo, se debe a que los ajustes de corto plazo muestran el retardo (aumento de los capitales corrientes de explotación) o la anticipación (disminución de los capitales corrientes de explotación) de los ingresos con respecto a los cobros y, al contrario, el retraso o la anticipación de los gastos con respecto a los pagos. Sin embargo, los ajustes de largo plazo reflejan eliminaciones de determinados ingresos y gastos no relacionados con el registro de cobros y pagos por actividades de explotación. Así, por ejemplo, un mayor o menor gasto por amortización de inmovilizado material no afecta ni a los flujos de caja de explotación actuales ni a los futuros; sino que su valor está relacionado con el flujo de tesorería negativo por la inversión en la adquisición del inmovilizado. Tratamos así de explicar que, aunque en el estado de flujos de efectivo, en su modalidad de presentación indirecta, que por otra parte coincide con la adoptada en el formato contenido en el borrador de nuevo PGC, se incluya una conciliación entre el resultado y los flujos de efectivo de las actividades de explotación, el proceso de generación de esta clase de flujos de caja no comienza, en realidad, en el resultado, sino a partir del resultado bruto de explotación, concepto que viene a coincidir con el EBITDA (earnings before interests, taxes, depreciations and amortizations) o con los recursos generados. De igual forma, el resultado del ejercicio es consecuencia de añadir al resultado bruto de explotación una serie de ingresos y gastos a mayores, no relacionados con las actividades de explotación. En suma, no parece adecuado analizar la calidad o bondad del resultado por comparación con los flujos de efectivo de explotación, sino a partir de los recursos generados. Es también en la comparación entre flujos de efectivo de explotación y recursos generados donde se puede analizar la bondad de los primeros con respecto a los segundos. El estudio de las diferencias entre los recursos generados y los flujos de efectivo de explotación equivale a analizar las causas de la variación, ya sea un aumento, o una disminución, de los capitales corrientes de explotación, ya que: FCO = RG – CCE. Son tres los factores que explican la variación de los capitales corrientes de explotación: las ventas, el margen y la rotación de los capitales corrientes de explotación. De este modo, a igualdad del resto de los factores, un aumento de las ventas provoca un aumento en el saldo de deudores comerciales, llevará también a un mayor volumen de compras y a un aumento de las existencias y del saldo de proveedores. De este modo, normalmente se producirá un crecimiento de los recursos generados y un aumento en los capitales corrientes de explotación. Si este último es mayor, se producirá una disminución en los flujos de efectivo de explotación UTILIDAD DEL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO PARA DETECTAR MANIPULACIONES DE RESULTADOS 48 con respecto al período anterior. En caso contrario, se produciría un aumento. Por otro lado, a igualdad del resto de los factores, un crecimiento del margen (prescindiendo de las partidas del resultado no relacionadas con actividades de explotación, nos estaríamos refiriendo al margen de explotación), provocará un aumento de los recursos generados y un aumento en el saldo de clientes, provocando un aumento en los capitales corrientes de explotación, llegándose a la misma situación que en el caso del aumento de las ventas. Las dos situaciones son consecuencia de una evolución positiva de la empresa y, sin embargo, no aseguran en todo caso un crecimiento de los flujos de efectivo de explotación. Sin embargo, una menor rotación de las existencias o de los clientes, o una mayor rotación de los proveedores; en suma, una disminución en la rotación de los capitales corrientes de explotación, equivalente a un aumento en el tiempo que la empresa tarda en dar una vuelta completa a su ciclo de explotación, también producirá, a igualdad del resto de los factores, un aumento en el saldo de los capitales corrientes de explotación, lo que dará lugar a una disminución en los flujos de efectivo de explotación. Teniendo en cuenta todo lo anterior, partiendo de la cuantía de los recursos generado en el ejercicio anterior, los flujos de efectivo de explotación del ejercicio corriente vendrían determinados por la suma de los efectos relacionados en el cuadro 1. Cuadro 1: Conciliación entre los recursos generados del ejercicio anterior y los flujos de efectivo de explotación del ejercicio corriente. Recursos generados en el ejercicio anterior: Efecto de la variación de las ventas sobre los recursos generados: Efecto de la variación del margen sobre los recursos generados: RG0 (V1-V0)xM0 V1x(M1-M0) Recursos generados del ejercicio corriente: - Aumento de los capitales corrientes de explotación: - Aumento de existencias debido a la variación de las ventas: - Aumento de existencias debido a la variación de la rotación: - Aumento de clientes debido a la variación de las ventas: - Aumento de clientes debido a la variación de la rotación: + Aumento de proveedores debido a la variación de las ventas: + Aumento de proveedores debido a la variación de la rotación: RG1 Flujos de efectivo de explotación del ejercicio corriente: FCO1 -(V1-V0)x(1/RE0) -V1x((1/RE1)-(1/RE0)) -(V1-V0)x(1/RC0) -V1x((1/RC1)-(1/RC0)) +(V1-V0)x(1/RP0) +V1x((1/RP1)-(1/RP0)) Siendo: Vi: Ventas en el ejercicio “i”. Mi: Margen del ejercicio “i”, definido como cociente entre los recursos generados y las ventas. REi: Rotación de las existencias, definida como el cociente entre las ventas y las existencias a la fecha de cierre del ejercicio “i”. RCi: Rotación de los clientes, definida como el cociente entre las ventas y los clientes a la fecha de cierre del ejercicio “i”. RPi: Rotación de los proveedores, definida como el cociente entre las ventas y los proveedores a la fecha de cierre del ejercicio “i”. UTILIDAD DEL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO PARA DETECTAR MANIPULACIONES DE RESULTADOS 49 Resumidamente, se observa que el valor obtenido de los flujos de efectivo de explotación de un ejercicio es el resultado de los recursos generados en el ejercicio anterior, más la combinación de los efectos sobre la tesorería provocados por la variación de las ventas, del margen y de las rotaciones de los activos y pasivos corrientes de explotación. De ello se deduce que una variación en las actividades de la empresa, medida por la cifra de ventas, no afecta siempre de la misma manera a los flujos de efectivo de explotación. Mulford y Comiskey (2005: 31) proponen como medida resumida del efecto del crecimiento de las ventas sobre los flujos de efectivo de explotación la diferencia entre el margen y el inverso de la rotación de los capitales corrientes de explotación, variable denominada originalmente como growth cash flow profile ratio (en adelante, GCFP ratio). Dicha ratio es positiva cuando un aumento de las ventas produce un aumento en los flujos de efectivo de la explotación, ya que el valor indica el porcentaje de crecimiento de las ventas transformadas en flujos de efectivo de explotación. 4. ESTUDIO EMPÍRICO SOBRE LA COMPARACIÓN ENTRE RESULTADOS Y FLUJOS DE EFECTIVO DE EXPLOTACIÓN En esta parte del trabajo, para una muestra de empresas cotizadas en la bolsa de Madrid, analizamos la relación entre resultados y flujos de efectivo de explotación aplicando la metodología expuesta en el apartado anterior. La muestra toma los estados financieros consolidados de grupos de empresas industriales y comerciales con cotización en la Bolsa de Madrid referentes al período 1999 a 2003 que presentaban la información necesaria para calcular los flujos de efectivo de explotación, dado que tales grupos no presentaban, de acuerdo con la normativa en vigor, un estado de flujos de efectivo en el seno de sus cuentas anuales consolidadas. Se analizaron las cuentas de 68 empresas que cumplían tal requisito para el horizonte temporal del análisis. La determinación de los flujos de efectivo consolidados así como del resto de datos empleados, se obtuvo a partir de los balances y cuentas de resultados incluidos en la base de datos SABI (Sistema de Análisis de Balances Ibéricos). En el análisis de la diferencia entre recursos generados y resultados, a partir del Excess Cash Margin (ECM), se definen dos variables para medir por separado los ajustes de largo plazo y los de corto plazo. Así la ratio (RG-RO)/V muestra la diferencia entre los recursos generados y los resultados, dividida por las ventas; y la ratio (RG-FCO)/V, cuantifica la diferencia entre los recursos generados y los flujos de efectivo de explotación, es decir, la variación en los capitales corrientes de explotación, por cada unidad monetaria de ventas. Para los llamados ajustes de largo plazo, es de prever que sean positivos, dado que el ajuste principal suele corresponder a las dotaciones a amortizaciones. El cuadro 3 muestra la frecuencia de los casos en los que la diferencia entre recursos generados y resultados es, respectivamente, positiva o negativa. El porcentaje de ajustes positivos no baja del 73%. UTILIDAD DEL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO PARA DETECTAR MANIPULACIONES DE RESULTADOS 50 Cuadro 3: Distribución de los ajustes positivos y negativos en la conciliación entre recursos generado y resultados. 1999 2000 2001 2002 2003 nº obs. % nº obs. % nº obs. % nº obs. % nº obs. % RG > RO: 58 85,29% 58 85,29% 53 77,94% 50 73,53% 52 76,47% RG < RO: 10 14,71% 10 14,71% 15 22,06% 18 26,47% 16 23,53% Total obs. 68 68 68 68 68 Sin embargo, con respecto a los estadísticos de la ratio (RG-RO)/V, en el cuadro 4 se puede observar que el valor de la media es negativo en todos los años del estudio, excepto en 2000, mientras que la mediana es siempre positiva. La asimetría negativa indica la presencia de algunos casos con valores negativos anormalmente elevados. Esto se ve más claramente en el gráfico 2. Para estos casos, los ajustes de mayor cuantía se corresponden con resultados por la venta de activos no corrientes y con la participación en beneficios de sociedades contabilizadas por el método de la participación. En el primer caso, se trata de beneficios atípicos, que podrían evidenciara prácticas de contabilidad creativa. Cuadro 4: Estadísticos de la ratio (RG-RO)/V 1999 2000 2001 2002 2003 Nº Obs. 68 68 68 68 68 Media: -0,0766 0,1801 -0,3296 -0,0529 -0,2703 Mediana: 0,1031 0,0888 0,0556 0,0500 0,0424 Máximo: 0,7916 16,0686 1,0813 1,1510 0,7606 Mínimo: -13,6891 -12,0557 -21,6709 -9,5270 -20,5147 1,6826 2,4607 2,7463 1,1906 2,5136 Asimetría: -8,1373 2,2514 -7,3744 -7,7151 -8,0381 Curtosis: 66,7999 35,2184 56,7764 62,3326 65,5557 Desviación estándar: Con referencia a los ajustes de corto plazo, el cuadro 5 muestra las frecuencias de los casos positivos y negativos de la variación de los capitales corrientes de actividades de explotación, equivalente a la diferencia entre los recursos generados y los flujos de efectivo de explotación. Aunque son más frecuentes los casos positivos, ello no se produce en todos los años del estudio, y en otros períodos la diferencia entre los casos positivos y los negativos es menor que para los ajustes de largo plazo. UTILIDAD DEL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO PARA DETECTAR MANIPULACIONES DE RESULTADOS 51 Gráfico 2: Evolución temporal de la media y la mediana de la ratio (RG-RO)/V (RG-R)/V Media Mediana 0,3000 0,2000 0,1000 0,0000 -0,1000 -0,2000 -0,3000 -0,4000 1999 2000 2001 2002 2003 AÑO Cuadro 5: Distribución de los ajustes positivos y negativos en la conciliación entre recursos generados y flujos de efectivo de explotación. 2000 2001 nº obs. ACCO>0 ACCO<0 Total obs. 47 21 % 69,12% 30,88% nº obs. 36 32 2003 % nº obs. 52,94% 30 44,12% 27 45,76% 47,06% 38 55,88% 41 54,24% 68 68 2002 % 68 nº obs. % 68 Los estadísticos del cuadro 6 no reflejan resultados estables a lo largo de los años del estudio; si la media es positiva, entonces la mediana negativa, o al contrario, salvo en 2000. Pero las oscilaciones en la mediana son mucho menores. Cuadro 6: Estadísticos de la ratio (RG-FCE)/V 2000 2001 2002 2003 Nº Obs. 68 68 68 68 Media: 0,2651 -0,0232 0,0964 0,0574 Mediana: 0,0291 0,0072 -0,0092 -0,0096 Máximo: 15,0233 0,2444 3,8165 5,7889 Mínimo: -0,4032 -1,6869 -0,3163 -0,9428 Desviación estándar: 1,8229 0,2300 0,5201 0,7279 Asimetría: 8,1561 -6,1040 6,0227 7,4432 66,9877 42,6365 40,7245 59,6820 Curtosis: UTILIDAD DEL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO PARA DETECTAR MANIPULACIONES DE RESULTADOS 52 Las causas de las diferencias entre los recursos generados y los flujos de efectivo de explotación pueden ser mucho más variadas que para los ajustes de largo plazo. Recordemos que estamos hablando ahora de las causas de un retardo o de la anticipación de los cobros y los pagos con respecto a los ingresos y los gastos. Separando los efectos que explican la cuantía de los flujos de efectivo de explotación de un período a partir de los recursos generado en el período anterior, de la forma explicada en el apartado anterior, se obtienen los valores medios del cuadro 7: Cuadro 7: Estadísticos de los diferentes factores que explican la transformación de los recursos generados en los flujos de efectivo de explotación 2000 Nº de casos 2001 2002 2003 59 46 37 39 Efecto de la variación de las ventas sobre los recursos generados Media Mediana Desv. Std. 0,0780 0,0346 0,1068 0,0363 0,0195 0,0455 0,0278 0,0148 0,0530 0,0379 0,0117 0,1162 Efecto de la variación del margen sobre los recursos generados Media Mediana Desv. Std. -0,0290 -0,0216 0,2448 -0,0703 -0,0487 0,2239 0,0194 0,0054 0,2152 0,0164 0,0141 0,1659 Aumento de las existencias por variación de las ventas Media Mediana Desv. Std. -0,1312 -0,0254 0,3998 -0,0302 -0,0189 0,0604 -0,0974 -0,0137 0,3647 -0,0291 -0,0121 0,0603 Aumento de las existencias por variación de las rotaciones Media Mediana Desv. Std. -0,1327 -0,0648 0,1740 -0,0582 -0,0399 0,0614 0,0398 0,0046 0,2135 -0,0505 -0,0252 0,0874 Aumento de los clientes por variación de las ventas Media Mediana Desv. Std. 0,1391 0,0574 0,2211 0,0561 0,0394 0,0613 -0,0628 -0,0278 0,1047 0,0556 0,0278 0,0981 Aumento de los clientes por variación de las rotaciones Media Mediana Desv. Std. 0,0501 0,0024 0,1821 -0,0050 0,0016 0,0626 0,0064 0,0131 0,0569 0,0169 0,0083 0,0948 Aumento de los proveedores por variación de las ventas Media Mediana Desv. Std. 0,0481 0,0164 0,1805 0,0235 0,0128 0,0994 0,0898 0,0290 0,2312 -0,0117 -0,0015 0,0741 Aumento de los proveedores por variación de las rotaciones Media Mediana Desv. Std. -0,0473 -0,0180 0,2343 0,0009 -0,0089 0,0937 -0,0313 -0,0063 0,1537 -0,0093 0,0031 0,0804 La reducción en el número de casos se debe a la eliminación de las empresas que presentaban disminuciones en las ventas del ejercicio, o margen negativo en el ejercicio anterior, para que las variables resulten comparables. Así, por ejemplo, para el año 2003 se observa en el gráfico 3 que la mayor contribución positiva sobre los flujos de efectivo de explotación se debe al aumento de proveedores debido al crecimiento de las ventas, seguido del efecto sobre los recursos generados del aumento de las ventas. Sin embargo, el UTILIDAD DEL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO PARA DETECTAR MANIPULACIONES DE RESULTADOS 53 mayor impacto negativo sobre los flujos de efectivo de explotación se debe al aumento de los clientes por efecto del crecimiento de las ventas, seguido del aumento de las existencias producido por la misma causa. Con todo, estos resultados no se mantienen a lo largo de los años del estudio. Gráfico 3: Factores que explican la cuantía de los flujos de efectivo de explotación de 2003 a partir de los recursos generados de año anterior (medias aritméticas) APRVR03 ACLVR03 AEXVR03 APRVV03 ACLVV03 AEXVV03 EVMRG03 EVVRG03 -0,0600 -0,0400 -0,0200 0,0000 0,0200 0,0400 0,0600 Así, en el gráfico 4 aparecen resumidos en tres clases, para todos los años del estudio, los diferentes efectos relacionados en el cuadro 7, es decir, el efecto resumido de la variación en las ventas sobre los recursos generados y los capitales corrientes de explotación; el efecto resumido de la variación de las rotaciones sobre los capitales corrientes de explotación; y el efecto del margen sobre los recursos generados. Se puede comprobar cómo la distribución temporal de los diferentes efectos agrupados es muy variable de un año para otro. Tampoco se mantiene el signo positivo o negativo del efecto. Salvo en 2003, la suma de efectos produce una disminución de los flujos de efectivo de explotación con respecto a la cuantía de los recursos generados en el ejercicio anterior. Pero en 2002 ello es debido al efecto del crecimiento de las ventas, en 2001 al efecto del margen; y en 2000 a la suma de ambos. El efecto de la variación de las rotaciones es positivo salvo en 2003 (casi nulo en ese año). Es decir, la gestión de los capitales corrientes de explotación, por término medio, produce un exceso de efectivo, salvo cuando los efectos de la variación del margen y de las ventas son positivos, compensando siempre a éstos. UTILIDAD DEL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO PARA DETECTAR MANIPULACIONES DE RESULTADOS 54 Gráfico 4: Efecto resumido de la variación del margen, de las ventas y de la rotación sobre los flujos de efectivo de explotación (medias aritméticas) 2003 2002 2001 2000 -0,0800 -0,0600 -0,0400 -0,0200 0,0000 2000 2001 VAR. ROTACOES 0,0509 VAR. VENDAS -0,0468 VAR. MARGEM -0,0290 0,0200 0,0400 0,0600 2002 2003 0,0194 0,0150 -0,0042 0,0041 -0,0426 0,0139 -0,0703 0,0194 0,0164 El trabajo prosigue con el análisis de las reacciones a las oscilaciones de las ventas, en función de la pertenencia de las empresas de la muestra a un determinado sector. Para eso, se emplea la ratio growth cash flow profile (GCFP), anteriormente definido como la diferencia entre el margen y el inverso de la rotación de los capitales corrientes de explotación. La clasificación sectorial es la utilizada por la Bolsa de Madrid. El cuadro 8 muestra los diferentes sectores, el número de casos y el valor medio de la ratio GCFP para cada sector en el período 1999-2003. Cuadro 8: Valores de la ratio GCFP en el período 1999-2003 (media aritmética) Sector 1999 2000 2001 2002 2003 2 0,0757 0,1171 0,0546 0,0621 0,0860 MAT. BÁSICOS, INDUSTRIA Y CONSTRUCCIÓN 22 0,0831 0,1376 0,1360 0,1235 0,1275 BIENES DE CONSUMO 20 0,1022 0,1175 0,1201 0,1079 0,0643 SERVICIOS DE CONSUMO 14 0,0038 0,2303 0,2104 -0,0001 0,1761 SERVICIOS INMOBILIARIOS 4 2,3439 -5,8153 -0,0761 0,6640 -2,6908 TECNOLOGÍA Y TELECOMUNICACIONES 4 -0,2243 0,3424 0,0609 -0,5046 0,4158 66 0,1902 -0,1978 0,1271 0,0854 -0,0359 PETRÓLEO Y ENERGÍA Total: Nº casos UTILIDAD DEL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO PARA DETECTAR MANIPULACIONES DE RESULTADOS 55 En el gráfico 5 se observa que el valor medio de la ratio para el conjunto de la muestra oscila entre más y menos 0,2. Por lo tanto, un crecimiento de las ventas no tiene de forma consistente, por término medio, un efecto positivo o negativo sobre los flujos de efectivo. Gráfico 5: Evolución temporal del valor medio de la ratio GCFP para el conjunto de la muestra. GCFP 0,3000 0,2000 0,1000 0,0000 -0,1000 -0,2000 -0,3000 1999 2000 2001 2002 2003 AÑO Pero en el cuadro 8 se muestra un valor positivo en la mayoría de los sectores, por lo que analizamos a continuación la influencia del sector en el valor de la ratio. Para eso, realizamos el test no paramétrico de Kruskal-Wallis, para comprobar la hipótesis de si la pertenencia a un determinado sector condiciona el valor de la ratio GCFP, con los resultados que se observan en el cuadro 9. Cuadro 9: Test de Kruskal-Wallis sobre la influencia del sector en el valor de la ratio GCFP (estadísticos del test) Chi-cuadrado gl Sig. asintót. 1999 2000 2001 2002 2003 4,3114 18,9301 4,1401 2,1532 5,7063 5 5 5 5 5 0,5055 0,0020 0,5294 0,8276 0,3359 Los resultados del test solo obtuvieron diferencias significativas en función del sector para el año 2000, debido a los valores anormales que alcanzan una de las empresas del sector inmobiliario. Pero esta situación no se da en el resto de ejercicios. Por el contrario, en 1999, la media de la ratio para el sector inmobiliario es mayor que las de los restantes sectores, aunque las diferencias no resultan estadísticamente significativas en ese año. UTILIDAD DEL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO PARA DETECTAR MANIPULACIONES DE RESULTADOS 56 5. CONCLUSIONES En el presente estudio empírico, los ajustes de largo plazo acostumbran a ser positivos. Sin embargo, cuando el resultado es mayor que los recursos generados, por ejemplo, por la venta de activos no corrientes, nos podríamos encontrar ante una primera evidencia de prácticas de contabilidad creativa, por comparación con lo que sucede por término medio para la generalidad de las empresas. Es decir, que la existencia de ajustes de largo plazo negativos es una primera alarma sobre la existencia de prácticas de manipulación del resultado. Para los ajustes de corto plazo, sin embargo, se mezclan los efectos de la variación de las ventas, del margen y de las rotaciones de los capitales corrientes de explotación. La evidencia mostrada por este estudio empírico es que tales efectos presentan oscilaciones continuadas a lo largo del tiempo, tanto en lo que respecta a su signo como a su cuantía. Agrupando los efectos, se observa que las oscilaciones de las rotaciones de los capitales corrientes de las actividades de explotación parecen servir de compensación a los otros efectos. Esto es: cuando, por ejemplo, un crecimiento de las ventas y del margen provocan una disminución de los flujos de efectivo de explotación, entonces las rotaciones provocan el efecto contrario, compensando la restricción en la capacidad de generación de liquidez. Habida cuenta de que los flujos de efectivo de explotación contribuyen a financiar las actividades de inversión, las conclusiones son similares a las de Fazzari y Petersen (1993), en relación al papel que juega el capital circulante en la financiación de las inversiones en activos fijos. Por la interrelación entre los tres efectos: variación de las ventas, del margen y de las rotaciones, un crecimiento de las ventas puede, alternativamente, producir un aumento o una disminución de los flujos de efectivo de explotación. El valor positivo o negativo de la ratio growth cash flow profile, propuesta por Mulford y Comiskey, ayuda a prever el sentido del efecto de la variación de las ventas. Pero el valor de la ratio no es estable a lo largo del tiempo. Por la reducida dimensión de la muestra, no se puede decir que la pertenencia a un determinado sector produzca diferencias significativas en el valor de la ratio. Más bien, tales diferencias obedecen al efecto de casos de empresas en particular. Aquí nos encontramos de nuevo con que es la comparación de los valores individuales de la ratio con respecto a la media, la que puede ofrecer indicios de prácticas de contabilidad creativa. En consecuencia, la comparación entre resultados y recursos generados no aporta de manera directa información que permita detectar manipulaciones de resultados. Éstas tienen que ser inferidas mediante el análisis conjunto del estado de flujos de efectivo, de la cuenta de pérdidas y ganancias, pero también del balance, singularmente en lo que respecta a la evolución de los saldos de los capitales corrientes de explotación. UTILIDAD DEL ESTADO DE FLUJOS DE EFECTIVO PARA DETECTAR MANIPULACIONES DE RESULTADOS 57 BIBLIOGRAFÍA Amat, O.; Blake, J. (2002): Contabilidad creativa. 4ª Ed., Gestión 2000. Barcelona. Cosenza, J. P. (2003): “Contabilidade criativa: as duas faces de uma mesma moeda”. Pensar Contábil. Revista do Conselho Regional de Contabilidade do Estado do Rio de Janeiro, nº 20, pp. 4-13, Mai/Jul. 2003. Fazzari, S. M. y Petersen, B. C. (1993): “Working capital and fixed investment: new evidence on financing constraints”. Rand Journal of Economics, Vol. 24, No. 3, Autumn, pp. 328-342. Laínez Gadea, J. A.; Callao Gastón, S. (1999): Contabilidad creativa. Civitas Ediciones. Madrid. Jameson, M. (1988): A pratical guide to creative accounting. Kogan Page. London. Monterry Mayoral, Juan (1998): “Un recorrido por la contabilidad positiva”. Revista Española de Financiación e Contabilidad, Vol. XXVII, Nº 95, pp. 427-467. Mulford, C.; Comiskey, E. (2002): The financial numbers game: detecting contabilidade criativa practices. John Wiley & Sons. New Jersey. Mulford, C.; Comiskey, E. (2005): Creative cash flow reporting. John Wiley & Sons. New Jersey. Naser, K.H.M. (1993): Creative financial accounting: its nature and use. Prentice House. London. Stickney, C.P.; Brown, P.R. (1999): Financial statement analysis. A strategic perspective. The Dryden Press. Harcourt Brace Jovanovich College Publishers, 4th edition. ANÁLISIS DEL RIESGO Y TRATAMIENTO DEL DESCUENTO BANCARIO Vicente García Martín E-mail:vgarcia@uma.es Alfonso Rojo Ramírez E-mail: arojo@ual.es Julio Diéguez Soto E-mail: jdieguez@uma.es PALABRAS CLAVE Descuento bancario, balance de situación, análisis financiero, rating RESUMEN La financiación de las empresas está condicionada por el nivel de riesgo asignado a las mismas, analizándose éste en base a datos contables. El borrador de PGC sigue considerando el descuento de efectos como una deuda financiera, dentro del epígrafe III del pasivo corriente del balance de situación Deudas a corto plazo. Cuando los expertos analizan una empresa en base al riesgo, incorporan como un pasivo corriente más el importe de efectos negociados no vencidos, lo que las hace aparecer como muy endeudadas y en difícil situación financiera, sin que esto sea realmente así. Aunque el descuento supone un riesgo para la empresa, raramente es una deuda en su totalidad que afecte su nivel de solvencia. Esta comunicación presenta alternativas de registro y presentación de los efectos comerciales que solucionan el grave perjuicio que ocasiona el sistema actual en el análisis de la solvencia de multitud de compañías sometidas a procesos de calificación. ANÁLISIS DEL RIESGO Y TRATAMIENTO DEL DESCUENTO BANCARIO 59 1. INTRODUCCIÓN La adopción de las NIC/NIIF está suponiendo un revulsivo para muchas empresas. En particular, la banca y las compañias de seguros tienen que reconocer en el Balance, como consecuencia de los acuerdos de Basilea, el riesgo de crédito asociado a sus clientes (Ballarín, 2006:17) cuestión ésta que se hace más sensible para el caso de empresas Pyme (Labatut, et al, 2006), obligando a clasificar los créditos en función de la solvencia de los clientes. Aunque el análisis de riesgo puede ser contemplado desde diversos ángulos(1), en este trabajo analizamos sólo uno de estos riesgos, el riesgo de crédito. Éste tiene que ver con el análisis financiero de la empresa y es contemplado aquí, sólo desde la óptica del análisis contable, el que usa los estados contables como mecanismo de evaluación de dicho riesgo. Aunque éste puede ser analizado contemplando variables no contables de tipo cualitativo(2), o variables de mercado(3); éstas no serán tratadas por nosotros, ya que no guardan relación con el fin perseguidio. El objetivo de este trabajo es, concretamente, mostrar cómo la información contenida en los estados contables que generan las empresas españolas con la legislación actual y con el borrador del Plan General de Contabilidad (BPGC), es poco fiable para el análisis de la solvencia a corto plazo de la empresa. Con esta finalidad, y tomando como referencia el coeficiente dinámico de solvencia técnica (CDST) propuesto por García Martín (1990), se muestra la inconsistencia de los datos contables en el cálculo y se propone la corrección del sistema de representación seguido en el borrador en aras de una mejora de esta información para la toma de decisiones, dando cumplimiento así al requisito de relevancia que preconiza el Marco conceptual recogido en el BPGC. Para ello hemos dividido esta investigación en los siguientes apartados: en primer lugar, en el apartado 2, se realiza un estudio de los antecedentes sobre la solvencia a corto plazo de la empresa; en segundo lugar, en el apartado 3, se describe cómo se desarrolla el análisis de la solvencia basado en los datos contables; el apartado 4 muestra cómo actúa el descuento de efectos en el análisis de dicha solvencia. Finalmente, el apartado 5 incluye algunas conclusiones. 2. ANTECEDENTES El análisis de la insolvencia basada en datos contables podemos decir que se estudia de forma estructurada desde el trabajo seminal de Beaver (1966), en el que trata de buscar la capacidad predictiva de los ratios contables ante una situación de insolvencia empresarial. A partir de este momento, surgen modelos más desarrollados que sustituyen el análisis unidimensional de Beaver por otro de tipo multidimensional cuyo hito (1) El acuerdo de Basilea reconoce tres tipos de riesgos (Labatut, et al, 2006:6): a) Riesgo de crédito: riesgo asumido en la concesión de créditos, por impago, no devolución o probabilidad de insolvencia del deudor; b) Riesgo operativo: riesgo de pérdida derivado de la inadecuación del sistema administrativo o de fallos de los procesos internos de administración, del personal o de los sistemas internos; c) Riesgo de mercado, riesgo derivado de las variaciones en los tipos de cambio y de la diversificación de las carteras. En cualquier caso, para un análisis de los tipos de riesgo puede verse Mascareñas (2004) (2) Existen diferentes trabajos que analizan la insolvencia y que contemplan la utilización de variables no cuantitativas tales como el de Keasey and Watson (1987), Somoza (2001) o el caso de Back (2005) para Pymes. (3) Puede verse sobre este tipo de modelos denominados estructurales Martín J.L. et al (2006). ANÁLISIS DEL RIESGO Y TRATAMIENTO DEL DESCUENTO BANCARIO 60 más significativo es el trabajo de Altman (1968) con su conocido modelo Z-score. En general todos estos modelos establecen que la probabilidad de insolvencia o quiebra se incrementa cuando la rentabilidad disminuye y el nivel de endeudamiento se incrementa, tal como ocurre con el modelo de Altman o el también conocido modelo de Olhson (1980). Al conjunto de trabajos que utilizan variables financieras de tipo contable se les conoce como modelos contables para el análisis de la insolvencia financiera y usan, sobre todo, un gran número de ratios que suelen reducir mediante el Análisis de Componentes Principales (ACP), que permite seleccionar aquellos que mayor influencia tienen en el estudio(4). Una revisión de los trabajos empíricos desarrollados entre los años 1968 y 2005 para la predicción de la quiebra puede verse en Ravi y Ravi (2006). Tal como se desprende del trabajo de Ravi y Ravi (2006:5-8) los ratios contables son profusamente utilizados en en análisis de la insolvencia, tanto desde la óptica de liquidación del negocio (winding-up option), por ejemplo, los ratios activo circulante /pasivo circulante; activo circulante/activo total; o deudas totales/activos totales; como de continuidad (run-on option), por ejemplo, resultado antes de intereses e impuestos/activos totales; flujos de efectivo/deudas totales. Sin duda los ratios contables son de una gran utilidad y uso generalizado y se vienen aplicando tradicionalmente para el análisis de la solvencia y la liquidez (Kristy, 1994). La óptica de liquidación, aunque utilizada en los análisis, presenta limitaciones insalvables asociadas a su propio punto de vista (la liquidación) por lo que se viene sugiriendo la utilización de otros ratios que ofrezcan más luz en relación con las operaciones del prestamista basados en el principio de gestión continuada. En este sentido es de destacar la aportación de Fraser (1983) en el análisis de la liquidez proponiendo el ratio Fraser ratio = CFO + Dt-l PCt-l donde: CFO son los flujos de tesorería de las operaciones del ejercicio t D, son las disponibilidades (tesorería y activos financieros cotizados) de t-1 PC, es el pasivo circulante de la empresa de t-1 Este ratio establece la importancia en el análisis de la liquidez y solvencia de la tesorería, así como la introducción del tiempo. De la importancia de los flujos de tesorería en la dinamización del análisis de la solvencia da idea el incremento de trabajos que en los últimos años incorporan los flujos de tesorería en el estudio de la predicción de la insolvencia(5). En España, quizá debido a la no incorporación del Estado de flujos de tesorería en el modelo contable de 1990, se le ha prestado menos atención a esta cuestión. Uno de los trabajos en este campo es el de Rojo (1993) en el que, entre otras propuestas basadas en flujos financieros, desarrolla el siguiente ratio: Cobertura de la deuda = RGO - D ET (4) Por ejemplo, Ballarín (2006) (5) Por ejemplo, Olmeda y Fernández (1997), Yang et al (1999), McKee y Lensberg (2002) y Piramuthu et al (2005). ANÁLISIS DEL RIESGO Y TRATAMIENTO DEL DESCUENTO BANCARIO 61 Donde: RGO son los recursos generados en las operaciones; D, son los dividendos ET, es el exigible total Posteriormente, este mismo autor (Rojo, 2000:260) propone el coeficiente de cobertura de las obligaciones financieras: COBF = FTO OBF Donde: FTO, es la tesorería generada en las operaciones; OBF, son las obligaciones financieras contractuales, reembolso de deudas financieras, intereses y dividendos, en su caso. Con todo, el autor que más ha insistido a nivel español en la necesidad de analizar la solvencia tomando en consideración un punto de vista dinámico y trabajando con flujos de tesorería ha sido García Martín (1990) al proponer para el análisis de la liquidez de la empresa el coeficiente dinámico de solvencia técnica (CDST)(6): CDST = RGOt VNFt + aft-l + DIVt-l [1] Donde: RGO, Recursos generados en las operaciones; VNF, es la variación de las necesidades de financiación entre dos períodos consecutivos; af, es la reducción del endeudamiento o amortización financiera prevista; DIV, son los dividendos que se espera pagar en el ejercicio. De acuerdo con los autores, un ratio superior a la unidad presupone que la empresa es solvente técnicamente. 2.1. El coeficiente dinámico de insolvencia técnica: una breve explicación. Sabemos que en el activo a corto plazo hay una serie de partidas que permanecen en la empresa a lo largo de su vida como consecuencia de que se renuevan con una determinada periodicidad –existencias, deudores comerciales, entre otros-, lo que justifica el carácter permanente que configuran los importes de estas cuentas en el balance, y a ese agregado le llamamos activo comercial. Paralelamente en el pasivo a corto plazo nos encontramos también con determinadas partidas contables que permanecen en la empresa a lo largo de su vida como consecuencia de que se renuevan con una determinada periodicidad –proveedores, acreedores comerciales, organismos de la seguridad social acreedores,..etc-, lo que justifica el carácter permanente que configuran los importes de estas cuentas en el balance, y a ese agregado le llamamos pasivo comercial. Un concepto derivado de la comparación del activo comercial y del pasivo comercial es la magnitud financiera Necesidades de Financiación. Ello quiere decir que dado el carácter permanente de los activos y pasivos comerciales, la diferencia entre ambos debe ser cubierta siempre por financiación permanente (recursos (6) Ver también García Martín y Fernández (1992) ANÁLISIS DEL RIESGO Y TRATAMIENTO DEL DESCUENTO BANCARIO 62 propios), y de esta forma se establece el equilibrio financiero en el corto plazo. Cabe la posibilidad –grandes superficies- que las necesidades de financiación sean negativas, lo que significa que financiación permanente via proveedores cubre el activo comercial y un largo etc. Si queremos conocer la tesorería generada por la actividad ordinaria (TAO) tendremos que acudir a la siguiente expresión: TAOt = RGOt ± VNFt [2] Donde: VNF, variación de las necesidades de financiación. Si la VNF>0 absorbe fondos: resta de los recursos generados, la TAO disminuye. Si la VNF<0 aporta fondos: suma a los recursos generados, la TAO aumenta. En base a lo anterior la expresión [1] puede quedar como sigue: CDST = TAOt aft-l + DIVt-l [3] Con ello reafirmamos la idea de que la solvencia es operativa exclusivamente con una visión dinámica, y que los ratios tradicionalmente empleados para la medición de la misma carecen de utilidad; no se justifican científicamente en un razonamiento ad hoc. 3. EL ANÁLISIS DE LA SOLVENCIA TÉCNICA EN BASE A DATOS CONTABLES De acuerdo con el CDST, si analizamos las empresas de una muestra, la mayor parte de ellas deberían tener un valor superior a la unidad, ya que, tal como sugiere la propia lógica económica, las empresas deben generar flujos de tesorería suficientes en el ejercicio para hacer frente a los compromisos financieros que vencen en el mismo. Para comprobar esta hipótesis se ha seleccionado una una muestra de 479 empresas andaluzas no cotizadas durante el período 2000-2004 que presentan cuentas anuales normales. Sobre esta base, se ha calculado CDST para los ejercicios 2001-2004. Por las limitaciones de la información financiera procedente de la muestra se han realizado algunas transformaciones en el ratio. En particular, el numerador de la expresión [2] ha adoptado la forma siguiente: RGO – VNF = FTO RBEdT – VNF(7) [4] Donde: RBEdT, es el Resultado bruto de explotación (RBE) que se ha ajustado por los impuestos, por suponer éstos un desembolso financiero. (7) : “Aproximadamente igual”. ANÁLISIS DEL RIESGO Y TRATAMIENTO DEL DESCUENTO BANCARIO 63 A su vez, esta opción supone que aft-l del denominador pasa ahora a recoger el importe del nominal de la amortización financiera y los intereses. Quedando la expresión como sigue(8): CDSTt = RBEdTt – VNFt aft-l + DIVt-l [5] Bajo la restricción de que toda empresa será solvente si su valor es superior o igual a la unidad. La tabla 1 recoge el porcentaje de empresas que para cada uno de los años (2001-2004) presentan un CDST superior a la unidad. Tabla 1. Número de empresas y % de ellas con CDST > 1 CDST01R Empresas válidas % de empresas > 1 CDST02R CDST03R CDST04R 476 476 476 476 39,08 34,45 37,39 35,29 Sin duda los resultados son desalentadores: prácticamente el 63% de las empresas son insolventes, en tanto que, durante estos ejercicios no eran capaces de cubrir con la tesorería generada en cada año los compromisos contractuales adquiridos en el ejercicio previo con vencimiento en el actual: devolución de la deuda financiera (préstamos), pago de intereses y, en su caso, pago de dividendos acordados. Resulta difícil asumir estos datos. Pensar que el 63% de las empresas no tienen capacidad para cumplir sus compromisos contractuales rebasa la lógica y la realidad. En este sentido cabe argumenar que esta incapacidad puede tener sus causas en elementos no controlados. Dos son las causas que se pueden esgrimir: 1. Al crecimiento experimentado que obliga a financiar las actividades con recursos ajenos acicionales (RAc) que sirven para reintegrar los compromisos financieros adquiridos en ejercicios pasados. 2. La inadecuada información que ofrecen los datos contables en relación con las necesidades del análisis de solvencia. En este trabajo nos interesa centrarnos en la segunda de las cuestiones, por el especial momento de regulación contable en la que nos encontramos inmersos, por lo que sólo a ella nos referiremos. 3.1. El descuento de efecto en el CDST. El problema que se plantea tiene que ver con la forma de presentar los datos contables y, en menor medida, en la forma de resgistro seguida. (8) Cuando VNF es superior a RBEdT, el primero se pasa al denominador utilizando la expresión [1], de forma que el coeficiente sólo sea negativo sin RBEdT es negativo. Cuando las obligaciones financieras a corto plazo (af + DIV) son 0, se toma el mayor valor del cociente entre la media del sector y el total de la muestra. ANÁLISIS DEL RIESGO Y TRATAMIENTO DEL DESCUENTO BANCARIO 64 Nuestra hipótesis es que la forma de mostrar el descuento de papel en el balance influye en un incorrecto análisis de la información para el estudio de la solvencia empresarial. Cuando las empresas descuentan efectos comerciales siguiendo el PGC90 (e igual ocurre en el BPGC), éstas mantienen dentro de los deudores comerciales el importe descontado (con otro nombre: ‘Clientes, efectos comerciales descontados’) y reconocen una deuda con las entidades financieras por igual importe, generalmente bajo el nombre de ‘Deudas por efectos descontados’. Así, una empresa que descuenta efectos comerciales por importe de 100, soportando unos gastos financieros de 10, haría: 100 90 10 Clientes, efectos comerciales descontados (4311) Clientes, efectos comerciales en cartera (4310) 100 Banco (572) Intereses por descuento de efectos (664)(665 BPGC) Deudas por efectos comerciales descontados (5208) 100 Cuando elabora el balance, la partida ‘Clientes, efectos comerciales descontados’, lógicamente, figura dentro del Activo Circulante, epígrafe III(9). Deudores (1. Clientes por ventas y prestaciones de servicios). Sin embargo, la partida Deudas por efectos descontados se hace figurar dentro del Pasivo Circulante en el epígrafe E.II Deudas con entidades de crédito(10), de carácter financiero. Tal como muestra la expresión [5] el numerador trata de estimar los flujos de tesorería de las operaciones del ejercicio (FTO) agregando al RBEdT la variación de las necesidades de financiación (VNF). Mientras el RBEdT lo extraemos directamente de la cuenta de resultados, la VNF, así como la amortización financiera (af) del denominador, la obtenemos mediante adición de diferentes partidas del balance. La partida Clientes efectos comerciales descontados, al estar dentro de Clientes por ventas es catalogada como un activo comercial (ACo), mientras que la partida Deudas por efectos comerciales descontados, al estar dentro de las Deudas con entidades de crédito será catalogada como pasivo a corto no comercial, lo que tiene como resultado un incremento de la VNF (ACo – PCo) y un aumento del endeudamiento financiero a corto. En base a lo anterior se produce un empeoramiento formal –no real para el modelo desarrolladode la solvencia de la empresa. Este comportamiento tiene la siguiente implicación: 1. Por un lado aumentamos los ACo al seguir manteniendo un crédito contra el cliente, cuando lo más probable es que éste se extinga al vencimiento por el pago al banco que realiza el propio cliente. NF = ACo+ – PCo Donde: ACo+, pone de manifiesto que recoge los clientes descontados cuyo cobro se ha realizado a través del banco de forma anticipada y que éste no cargará a la empresa salvo que sea impagado. (9) Activo no corriente del BPGC, epígrafe III, Deudores comerciales y otras cuentas a cobrar, de naturalea económica. (10) Pasivo no corriente, epígrafe III, Deudas a corto plazo, de naturaleza financiera. ANÁLISIS DEL RIESGO Y TRATAMIENTO DEL DESCUENTO BANCARIO 65 2. Por otro lado, aumentamos formalmente la amortización financiera (af) del próximo ejercicio al aumentar el pasivo a corto no comercial (Pcnc), aún cuando lo más probable es que no haya que hacer frente a tales deudas, salvo que los efectos resulten impagados. La partida Deudas por efectos comerciales descontados pasa a incorporarse a las obligaciones financieras a corto plazo de la deuda: af = Pcnct-l+ + GFP donde: - Pcnct-l, recoge las obligaciones financieras por préstamos y similares que tienen vencimiento en el ejercicio siguiente, e incluye las deudas por efectos descontados que no se pagarán por la empresa salvo que sean impagadas por el cliente. - GFP, son los desembolsos a realizar por gastos financieros. Este doble efecto hace que el numerador de la expresión [5] se vea disminuido(11) mientras que el denominador figura incrementado, lo que merma el CDST y muestra una posible falta de solvencia de la empresa. Mientras que la teoría nos muestra que la solvencia técnica, a nivel agregado, debería ser superior a 1, nos encontramos que muy pocas empresas superan este nivel, tal como se ha mostrado en la tabla 1. El apéndice 1 recoge un ejemplo ilustrativo de lo que se ha señalado. En él se muestra cómo, aunque el CDST es inferior a 1, en realidad no se puede decir que la empresa no pueda cubrir sus obligaciones financieras. Para solucionar este despropósito podemos considerar la partida Deudas por efectos comerciales descontados como un menor importe de la partida Clientes efectos comerciales descontados (menor activo comercial) o viceversa, según a que partida demos más relevancia. En cualquiera de los dos casos, estamos consiguiendo que el impacto del descuento de papel comercial sea nulo en el CDST, puesto que el trasfondo económico de la operación es nulo también, salvo en el posible riesgo de impago, que recogeríamos mediante el sistema de correcciones que establezca el modelo contable(12). El sistema sugerido, aunque muestra ciertas reticencias asociadas a la tradición contable y, posiblemente al enfoque sesgado a favor de las entidades financieras, no cabe duda que es ventajoso para todos al ofrecer información adecuada sobre la realidad económico-financiera de la empresa y, a nuestro entender, tiene cabida dentro de la nueva regulación contable (BPGC) ya que: 1. El activo descontado no puede ser dispuesto por la empresa en tanto que ha sido transferido a un tercero, por lo que no puede esperarse de él beneficios económicos futuros, tal como señala el Artº 36 de la Ley 16/2007. 2. De acuerdo con los criterios de confección del Balance del BPGC, “un activo y un pasivo se podrán presentar en el balance por su importe neto…(en tanto que) la empresa tenga en ese momento, (11) El efecto puede ser neutro cuando la cuantía de efectos descontados se mantiene constante a lo largo de los ejercicios. Ver Apéndice 1. (12) Las reticencias generales a este procedimiento tropiezan con una tradición asociada al concepto de transferencia del riesgo de crédito concedido por la entidad financiera. Se argumenta que debe ser reconocida en Balance la deuda ya que todavía no se “ha cedido de manera sustancial los riesgos y los beneficios inherentes a su propiedad”. Sin embargo, lo cierto es que el riesgo de crédito sólo se produce si existe impago por el cliente, lo que significa reconocer un deterioro de valor sustentado en una póliza (contrato) que posibilita el descuento de papel. Esta opción permite, al mismo tiempo, un análisis de los períodos medios de cobro a nivel general o teórico (sin considerar el descuento, importe bruto de los clientes) y el real (considerando el descuento, importe neto de los clientes) más realista. ANÁLISIS DEL RIESGO Y TRATAMIENTO DEL DESCUENTO BANCARIO 66 el derecho exigible de compensar los importes reconocidos,….” (Normas de elaboracón de las cuentas anuales 6ª.2), aspecto éste que se cumple según entendemos. 3. Siguiendo las sugerencias de las definiciones y relaciones contables del BPGC (cuenta 431), se indica que la deuda asociada a los efectos descontados “deberá recogerse, generalmente, en las cuentas correspondientes del subgrupo 52.” Esto significa que es una opción y, por tanto, admisible cualquier otra. 4. EL EFECTO DEL DESCUENTO EN EL ANÁLISIS DE LA SOLVENCIA Si bien se puede argumentar, (y de hecho así se argumenta a menudo por parte de quienes les cuesta admitir los cambios), que conocido el problema lo mejor que puede hacerse es que sea corregido por el propio interesado en el análisis, esto sólo es posible cuando estudiamos una empresa de forma individual, si ésta ofrece información suficiente, es decir, si a través de la Memoria muestra el descuento realizado(13) . Sin embargo, cuando se trata de conocer datos agregados, (por ejemplo, el comportamiento del sector), mediante el uso de bases de datos, esto es imposible, por lo que cualquier análisis individual carece de renferencia y, por tanto, de utilidad. Este problema se evidencia al querer estimar el impacto del descuento en el CDST. Para ello debemos tratar de simular el nivel de descuento que realiza cada empresa, ya que lo desconocemos. Para solventar esta cuestión se ha seguido un procedimiento indirecto, consistente en un primer estadio, en estimar el porcentaje de efectos descontados no impagados (EDnI) por unidad monetaria de producción de las empresas no financieras (UMP) que, por término medio, se produce en la economía española, de acuerdo a los datos del INE. EDnI cd_ump = UMP Este índice se ha multiplicado por la cifra de negocio de cada empresa de la muestra(14) lo que permite considerar un importe probable de descuento para cada una de ellas(15). Tras proceder a corregir el capital circulante de cada ejercicio (CCExpst) y las obligaciones finacieras a corto plazo por el importe de los efectos, recalculamos el CDST cuyos resultados se muestran en la tabla 2. Tabla 2. Número de empresas y % de ellas con CDST > 1 CDST01R Empresas válidas % de empresas > 1 CDST02R CDST03R CDST04R 476 476 476 476 55,04 51,05 51,26 52,73 (13) Esta información puede ser mostrada de forma clara (si así lo decide la empresa, pues la realidad es que no siempre es ésta la práctica general) en el PGC90 (Ver nota 14.2 de la Memoria). El BPGP hace lo propio en la nota de memoria 9.2.3.d). (14) Se establece la hipótesis restrictiva de que todas las empresas utilizan el mismo porcentaje de descuento. (15) Cuando este importe es superior al volumen de obligaciones financieras a corto plazo (af) que figuran en balance, se considera que la empresa no tiene deudas financieras a corto plazo. ANÁLISIS DEL RIESGO Y TRATAMIENTO DEL DESCUENTO BANCARIO 67 Resulta ilustrativo observar cómo el número de empresas cuyo CDST supera la unidad es superior en todos los ejercicios al 50%, lo que resulta más ajustado a la realidad económica. Aproximadamente un 16% de las empresas que figuraban como insolventes técnicamente se convierten en solventes. Aunque este coeficiente aún resulta racionalmente bajo, (ya se ha argumentado otras posibles circunstancias) no cabe duda que el impacto del descuento comercial queda reflejado en la mejora del índice, aún a pesar de la simplificación a que nos hemos visto obligados para la estimación del mismo. 5. CONCLUSIONES Probablemente la conclusión más relevante que puede deducirse de este trabajo es la importancia que el registro y la emisión de información por parte de las empresas tienen sobre el análisis e interpretación de la realidad económica que de ellas se realiza y, por tanto, el impactro económico de la norma contable. Esta circunstancia es de particular importancia ahora que Basilea II exige a las entidades financieras, y de seguros, analizar el riesgo de crédito. Un análisis de esta naturaleza requerirá, sin duda, contemplar a las empresas en su justa situación, lo que se revela todavía más interesante cuando nos encontramos en un proceso de reforma contable. El estudio realizado, aunque con ciertas limitaciones, propias de la falta de datos sobre descuento, demuestra que el uso del descuento de papel tergiversa la solvencia técnica de la empresa, dado el sistema de registro y presentación de la información seguida por la normativa contable española, mostrando una imagen negativa de la capacidad de la empresa para operar en el mercado financiero. Este trabajo sugiere la conveniencia de cambiar la forma en que el descuento de efectos figura en el Balance de las empresas, de manera que no distorsione el análisis de la solvencia y de los períodos de cobro a clientes. La reforma del PGC debería considerar la importancia de hacer figurar en el pasivo del balance el descuento de papel, neto de los clientes que lo financian. Esta opción, no sólo responde al fondo económico de la operación antes que a la forma, además contribuye a una más realista interpretación de la realidad de la empresa y favorece a ésta a la hora de desarrollar su actividad mediante el crecimiento y su financiación. El trabajo desarrollado abre una línea de investigación que debe ser estudiada con mayor profundidad, con el fin de conocer con más detalle el impacto de esta actividad financiera de la empresa en el análisis que de ella se realiza. En particular, puede ser de especial interés conocer hasta que punto el el crecimiento puede estar afectando el coeficiente y en que medida. ANÁLISIS DEL RIESGO Y TRATAMIENTO DEL DESCUENTO BANCARIO 68 BIBLIOGRAFÍA ALTMAN, E.I. (1968) “Financial Ratios, Discriminant Analysis and the Prediction of Corporate Bankruptcy” The Journal of Finance Vol. XXIII, Nº. 4, Setember, pp.589-609. BACK, P (2005): “Explaining Financial Dificultéis Based on Previous Payment Behavior, Management Background Variables and Financial Ratios”. European Accounting Review. Vol. 14, No. 4, 839–868, 2005 BEAVER, W.H. (1966) “Financial Ratios as Predictors of Failure” Journal of Accounting Research. Vol. 4 (Suplement), pp .71-127. DIÉGUEZ, J.; TRUJILLO, F.; CISNEROS, A.J. (2006): “Modelos de predicción de la insolvencia empresarial: la incorporación de ratios a partir de un marco teórico”. En Actas de las “VI Jornadas sobre Riesgos, regulación bancaria y derecho concursal”. Carmona (Sevilla). MARTÍN , J.L.; SAMANIEGO, R.; TRUJILLO, A. (2006): Un análisis de los modelos contables y de mercado en la evaluación del riesgo de crédito: aplicación al mercado bursátil español”. En Actas de las “VI Jornadas sobre Riesgos, regulación bancaria y derecho concursal”. Carmona (Sevilla). GARCÍA MARTÍN, V., (1990): “La solvencia empresarial: criterios básicos para su adecuada determinación”. Actualidad Financiera, Nº 13. GARCÍA MARTÍN, V., (2003): “Transparencia financiera: El caso de las Deudas por Efectos Descontados”. Revista AECA, Nº 64. GARCÍA MARTÍN, V., y FERNÁNDEZ, M.A. (1992): Solvencia y rentabilidad de la empresa española. Instituto de Estudios Económicos. Madrid. KRISTY, J.E. (1994): “Conquering Financial Ratios: The Good, The Bad, and the Who Cares?. Business Credit. Nº 96 (February): 14-19. LABATUT, G. ; MOLINA, R; POZUELO, J. (2006): La predicción del fracaso empresarial en las Pymes: un factor clave en el nuevo contexto financiero internacional”. En Actas de las “VI Jornadas sobre Riesgos, regulación bancaria y derecho concursal”. Carmona (Sevilla). MASCAREÑAS, J. (2004): “El riesgo en la empresa”. Ed. Pirámide. MIN, J.H. y LEE, Y.C. (2005): “Bankruptcy prediction using support vector machine (SVM) with optimal choice of kernel function parameters”. Expert Systems with Applications 28, pp. 603–614. MCKEE, T.E. LENSBERG, T. (2002): Genetic programming and rouge sets: A hybrid approach to bankruptcy classification, European Journal of Operational Research Nº 138, pp. 436–451. OHLSON, J. A. (1980) “Financial Ratios and the Probabilistic Prediction of Bankruptcy” Journal of Accounting Research, Spring, pp. 109-131 OLMEDA, I. y FERNANDEZ, E. (1997): “Hybrid classifiers for financial multicriteria decision making: The case of bankruptcy prediction”. Computational Economics Nº 10, pp. 317– 335. ANÁLISIS DEL RIESGO Y TRATAMIENTO DEL DESCUENTO BANCARIO 69 PIRAMUTHU, S.; RAGAVAN, H; SHAW, M.J. (1998): “Using feature construction to improve the performance of the neural networks, Management Science 44 (3). RAVI, P. Y RAVI, V. (2006): “Bankruptcy prediction in banks and firms via statistical and intelligent techniques – A review”. European Journal of Operational Research. Nº 180, pp. 1–28 ROJO, A. (1993): “Análisis de la empresa a partir del cuadro de financiación: flujos de fondos y valor de la empresa”. Revista Española de Financiación y Contabilidad. Vol XXII. Nº 76. Júlio-Septiembre, pp. 521565 ROJO, A (2000): “Estados de flujos de fondos financieros y análisis de la empresa”. Ed. Tebar. SOMOZA, A (2001) “La Consideración de factores Cualitativos, Macroecómicos y Sectoriales en los Modelos de Predicción de la Insolvencia Empresarial. Su aplicación en el Sector Textil y Confección de Barcelona (1994-97)” Papeles de Economía Española. Nº 89-90, pp. 402-426. YANG, Z.R.; PLATT, M.B.; PLATT, H.D. (1999): “Neural network in bankruptcy prediction, Journal of Business Research. Nº 44, pp. 67–74. ANÁLISIS DEL RIESGO Y TRATAMIENTO DEL DESCUENTO BANCARIO 70 APÉNDICE 1 Sea la empresa “A” que presenta el siguiente balance de situación a 1/1/2006: Balance de la empresa a 31/12/2005 ACTIVO PATRIMONIO NETO Y PASIVO Tesorería 500 Capital social 500 Total Activo 500 Total PN y pasivo 500 Suponga que durante el ejercicio 2006 realiza las siguientes operaciones (mostradas siguiendo el PGC90 o BPGC): 400 Compras Caja 700 Clientes Ventas 600 Clientes, efectos en cartera 600 Clientes, efectos comerciales descontados 550 Banco 50 Intereses por descuento de efectos 400 1300 Clientes, efectos en cartera 600 Deudas por efectos comerciales descontados 600 Al final del ejercicio mostrará el siguiente balance: Balance de la empresa a 31/12/2006 ACTIVO PATRIMONIO NETO Y PASIVO Clientes 700 Capital social 500 Clientes, efectos comerciales descontados 600 Pérdidas y ganancias 850 Tesorería 650 Deudas por efectos comerciales descontados 600 Total Activo 1950 Total PN y pasivo 1950 ANÁLISIS DEL RIESGO Y TRATAMIENTO DEL DESCUENTO BANCARIO 71 Suponga ahora que en el ejercicio 2007 realiza estas otras operaciones: 700 Banco Clientes 700 600 Deudas por efectos comerciales descontados Clientes, efectos comerciales descontados 600 800 Compras Caja 800 1.200 Clientes 800 Clientes, efectos en cartera Ventas 800 Clientes, efectos comerciales descontados Clientes, efectos en cartera 800 725 Banco Deudas por efectos comerciales descontados 800 75 Intereses por descuento de efectos 2.000 Al final del ejercicio 2007 mostrará el siguiente balance: Balance de la empresa a 31/12/2007(16) ACTIVO PATRIMONIO NETO Y PASIVO Clientes 1200 Clientes, efectos comerciales descontados 800 Capital social 500 Reservas 850 Pérdidas y ganancias Tesorería 1275 Deudas por efectos comerciales descontados Total Activo 3275 Total 1125 800 3275 El ratio de solvencia del año 2007 sería el siguiente: RGO – VNF af = 1125 – 700 600 <1 donde: RGO = pérdidas y ganancias = 1.125 NF2007 = ACo – PCo = 2.000 – 0 = 2.000 NF2006 = ACo – PCo = 1.300 – 0 = 1.300 VNF2007 = 2.000 – 1.300 = 700 Pcnc2006 = af = 600 (la cuantía de deudas por efectos comerciales descontados del año 2006) ¿Realmente la empresa está necesitada de financiación en el año 2006 por 1300? Como se aprecia, aunque existía un riesgo de impago de los efectos comerciales descontados, éste no se ha producido y no ha existido variación del patrimonio, por lo que no ha sido necesario financiación adicional. Sin embargo el sistema de registro ha incrementado el activo comercial, y por ende, las necesidades de financiación. El dinero está materializado ahora en tesorería no en la cuenta de ‘Clientes, efectos comerciales descontados’. (16) No se pagan dividendos ni se reparten dividendos ANÁLISIS DEL RIESGO Y TRATAMIENTO DEL DESCUENTO BANCARIO 72 Tampoco la empresa debía 600 en el ejercicio 2006, como parece deducirse de la cuenta de ‘Deudas por efectos comerciales descontados’. Ni ha tenido que pagar ese dinero en el año 2007, ya que al no resultar impagados no se ha visto obligada a devolver a la entidad financiera el dinero anticipado. Sin embargo, está situación provoca que el CDST sea menor que 1, cuando la situación de la empresa es a todas luces muy buena. Esto es debido a que, al mostrar el Balance según el PGC90, o el BPGC, las partidas ‘Clientes, efectos comerciales descontados’ y ‘Deudas por efectos comerciales descontados’ están quedan subsumidas dentro de otras de las que no se puede conocer su desglose por el analista(17). Si, por ejemplo, la empresa reconociese la deuda, neta de los clientes que la cubren, el analista puede comprobar el cambio de situación. A continuación se muestran los mismos balances correspondientes a los años 2006 y 2007, en donde la partida de clientes descontados figura compensando a las deudas financieras. En este caso, la información, al estar compensada, no se corre el riesgo de arrastarla a otro tipo de análisis Balance de la empresa a 31/12/2006 (compensado) ACTIVO PATRIMONIO NETO Y PASIVO Clientes 700 Capital social 500 Tesorería 650 Pérdidas y ganancias 850 Deudas por efectos comerciales descontados Total Activo 1350 600 Clientes efectos comerciales descontados (600) Total 1350 El CDST no puede recoger saldo alguno en el denominador, ya que tampoco se pagan dividendos. Por tanto será para el ejercicio 2007: RGO – VNF 1125 – 800 = >1 af 0 Balance de la empresa a 31/12/2007 (compensado) ACTIVO PATRIMONIO NETO Y PASIVO Clientes 1200 Capital social 500 Tesorería 1275 Reservas 850 Pérdidas y ganancias Deudas por efectos comerciales descontados Total Activo 2475 1125 600 Clientes efectos comerciales descontados (600) Total 2475 (17) En algunos casos, cuando se realiza un análisis individualizado de la empresa, es posible que esta información figure desglosada en la memoria. Por supuesto, si el análisis es agregado es totalmente imposible. ANÁLISIS DEL RIESGO Y TRATAMIENTO DEL DESCUENTO BANCARIO 73 No cabe duda del efecto importante que esto produce en el análisis. También el cálculo de período medio de cobro se ve afectado por la forma de presentación de la información, según cómo reconozcamos el descuento. Si seguimos el sistema del PGC90 o BPGC, el período medio de cobro a clientes (PMCl) a nivel general o global, será: PMCl 2006 = 360 • PMCl 2007 = 360 • Clientes 2006 Ventas 2006 Clientes 2007 Ventas 2007 = 360 • = 360 • 1300 1300 2000 2000 = 360 días = 360 días Sin embargo, utilizando el sistema de compensación mostrado en los balances alternativos, el el PMCl real sería: PMCl 2006 = 360 • PMCl 2007 = 360 • Clientes 2006 Ventas 2006 Clientes 2007 Ventas 2007 = 360 • = 360 • 700 1300 1200 2000 = 193 días = 216 días LA INSOLVENCIA EMPRESARIAL EN LAS MICROEMPRESAS DE LA COMUNIDAD VALENCIANA UNA APROXIMACIÓN A PARTIR DEL ANALISIS UNIVARIANTE Gregorio Labatut Serer Profesor Titular de Universidad E-mail:Gregorio.Labatut@uv.es Rafael Molina Llopis Profesor Titular de Universidad E-mail: Rafael.Molina@uv.es José Pozuelo Campillo Profesor Titular de Universidad E-mail: Jose.Pozuelo@uv.es Departament de Comptabilitat - Universitat de València Facultat d’Economia Avga. dels Tarongers, s/n - 46022 Valencia Tno. 963828280 - Fax 963828287 LA INSOLVENCIA EMPRESARIAL EN LAS MICROEMPRESAS DE LA COMUNIDAD VALENCIANA UNA APROXIMACIÓNA PARTIR DEL ANALISIS UNIVARIANTE 75 1. INTRODUCCIÓN La línea de investigación iniciada por Beaver y Altman en la segunda mitad de los años sesenta se ha visto enriquecida por numerosas aportaciones de diferentes autores que han contribuido a mejorar los resultados de los modelos, ya sea, como sostienen De la Torre y Gómez (2005:3), por los diseños muestrales, la ampliación del horizonte temporal de análisis, la consideración espacios sectoriales y geográficos determinados, la selección de las variables o la aplicación de herramientas estadísticas e informáticas más robustas, lo que ha supuesto que el interés de estos modelos no se limite únicamente al ámbito investigador y haya trascendido a los distintos agentes económicos relacionados con la empresa, pasándolos a considerar como un instrumento de gran eficacia en el proceso de toma de decisiones. En cualquier caso, estas aportaciones han contribuido a desarrollar las bases de un marco conceptual con el que sustentar una teoría general sobre el fracaso empresarial. Al revisar la literatura financiera sobre el fracaso empresarial en nuestro país, advertimos que tradicionalmente la mayoría de las investigaciones se han centrado en aquellos sectores formados por grandes empresas, con cotización o sin ella, y en los sectores con regulaciones específicas, por ofrecer ambos un tipo de información contable con garantías objetivas para acometer este tipo de trabajos empíricos. En las dos últimas décadas se han realizado importantes contribuciones que abordan la realidad de las pymes en distintos ámbitos temporales, geográficos y sectoriales, aunque cuando se analizan las muestras de estudio se observa que en su mayoría están formadas por empresas de tamaño mediano, siendo escasa la presencia de las pequeñas. Son muy pocos los trabajos centrados exclusivamente en las pequeñas y prácticamente inexistentes los que consideran también las microempresas, a pesar de que, según se demuestra empíricamente, es en este segmento donde se dan las mayores tasas de fracaso empresarial, entre otras razones por ser, generalmente, las más numerosas en el tejido productivo en las economías actuales desarrolladas. Sin duda, la razón la encontramos en la creencia, errónea como demostraremos, de que la información suministrada por estas empresas no reúne, por diversas circunstancias, las condiciones adecuadas para abordar con suficientes garantías este tipo de investigaciones. Precisamente la ausencia tan notoria de trabajos en este segmento empresarial nos ha motivado para acometer esta investigación. Para su desarrollo nos basaremos en una muestra de pequeñas empresas y microempresas radicadas en la Comunidad Valenciana. A pesar de que en los momentos actuales la economía en general goza de buena salud, estimamos que estamos asistiendo al final de un ciclo, como lo demuestran ciertas señales macroeconómicas, lo que supondrá, previsiblemente en el corto plazo, un repunte de fracasos empresariales que incrementará el interés de investigadores y usuarios por su análisis y estudio. Esta circunstancia también ha influido decisivamente en la decisión de acometer este trabajo. Con el estudio realizado, además de aportar evidencia empírica adicional en este campo de investigación, pretendemos constatar la utilidad de la información financiera ofrecida por el tipo de empresas que son objeto de análisis para predecir acontecimientos futuros, en especial la posibilidad de que la empresa sufra procesos de degeneración financiera que la conduzcan al fracaso y en algunos casos a su posterior desaparición. Para ello, estimaremos modelos adaptados a la realidad empresarial de la Comunidad Valenciana que identifiquen situaciones potenciales de fracaso hasta con cinco años de antelación a partir de la información económico-financiera suministrada por la propia firma, aplicando, en principio, la técnica de análisis discriminante univariante. LA INSOLVENCIA EMPRESARIAL EN LAS MICROEMPRESAS DE LA COMUNIDAD VALENCIANA UNA APROXIMACIÓNA PARTIR DEL ANALISIS UNIVARIANTE 76 2. METODOLOGIA PARA LA PREDICCIÓN DE LA INSOLVENCIA PARA LAS MICROEMPRESAS DE LA COMUNIDAD VALENCIANA Desde finales de la década de los ochenta han visto la luz numerosos trabajos empíricos sobre el fracaso empresarial en España, destacando las aportaciones pioneras de estudios sobre sectores particulares que gozaban de una regulación especial como el bancario, con trabajos de Laffarga, Martín y Vázquez (1985, 1986), Rodríguez Fernández (1987, 1989) y Pina (1989). También el sector asegurador ha sido objeto de la atención de algunos investigadores como Rodríguez Acebes (1990) y Mora (1994). Últimamente la atención se ha dirigido a otros sectores como el de la construcción (Minguez (2006) o el textil (Somoza López (2001). Los estudios centrados en la realidad económica de ámbitos regionales constituyen las ultimas aportaciones en esta línea, con trabajos como los de López, Gandia y Molina,(1998) sobre el fracaso empresarial en la Pyme de la Comunidad Valenciana, Rodríguez López (2001) centrado en la predicción del fracaso empresarial en las Pymes gallegas. Sin embargo, hasta la fecha el segmento empresarial que forman las pequeñas empresas y microempresas apenas ha captado el interés de los investigadores, debido fundamentalmente a la dificultad de acceso a la información que reportan este tipo de empresas. No obstante, son empresas que presentan un alto riesgo como consecuencia de su tamaño y en las que se dan altas tasas de fracaso. Por lo tanto, consideramos muy interesante hacer un estudio de carácter univariante sobre estas empresas como paso previo al diseño de un modelo que permita calcular la probabilidad de impago (PD) de las pequeñas empresas y microempresas en el ámbito de la Comunidad Valenciana. La importancia de este segmento empresarial en el marco geográfico elegido se pone de manifiesto en los últimos datos estadísticos publicados por el Instituto Valenciano de Estadística, en los que se indica que de las casi 350.000 empresas censadas en la Comunidad Valenciana a 1 de enero de 2006, el 97,14 % tenían menos de 20 empleados y otro 2,51 % entre 20 y 99, por lo que apenas el 0,35 % de las unidades empresariales tenía 100 o más asalariados. a. Selección de la muestra. Para la selección y obtención de la muestra de empresas se ha recurrido a la base de datos financieros SABI (Sistema de Análisis de Balances Ibéricos). Se ha utilizado concretamente el disco 72 correspondiente a la actualización de agosto de 2005 que contiene datos cualitativos y cuantitativos de un total de 832.083 empresas españolas desde 1995. La muestra se ha seleccionado siguiendo los criterios de ubicación geográfica, temporalidad y tamaño. En cuanto al primero, la muestra se limitó a las empresas domiciliadas en la Comunidad Valenciana. Respecto al periodo, se han considerado solamente las empresas fracasadas entre 1999 y 2004. La selección realizada atendiendo a estas dos primeras consideraciones dio como resultado un conjunto de 341 empresas. Con el tercer criterio relativo al tamaño, se eliminaron aquellas empresas que superaban los límites establecidos en la recomendación de la Comisión de las Comunidades Europeas de 6/5/2003, recogidos en el cuadro núm. 1, para su consideración como pequeñas empresas o microempresas. LA INSOLVENCIA EMPRESARIAL EN LAS MICROEMPRESAS DE LA COMUNIDAD VALENCIANA UNA APROXIMACIÓNA PARTIR DEL ANALISIS UNIVARIANTE 77 Cuadro 1. Criterios de selección de la muestra CRITERIOS EMPRESA PEQUEÑA MICROEMPRESA < 50 < 10 VOLUMEN DE FACTURACION < 10.000.000 euros < 2.000.000 euros BALANCE GENERAL ANUAL < 10.000.000 euros < 2.000.000 euros PLANTILLA El descarte por esta razón de, únicamente, 6 empresas refuerza la hipótesis que establece una relación inversa entre el tamaño y el fracaso empresarial atribuyendo las mayores tasas de mortalidad a las compañías más pequeñas. De las 335 empresas restantes, se realizó un nuevo filtrado para que hubiese un número de empresas proporcional al índice de fracaso del sector en que operaban. Finalmente, un nuevo proceso de depuración descartó aquellas empresas de reciente creación y las que no disponían de datos contables completos de al menos cinco años previos a la fecha del fracaso, lo que estableció la composición final de la muestra de estimación de empresas fracasadas en 83. Para completar la muestra de estimación con vistas a la aplicación de las técnicas estadísticas de clasificación seleccionadas para el estudio, se recurrió a la técnica del emparejamiento consistente en asociar cada una de las empresas quebradas con una sana elegida aleatoriamente entre aquellas que, operando en el mismo sector económico de acuerdo con la Clasificación Nacional de Actividades Económicas (CNAE) de 1993 a nivel de cuatro dígitos, presentasen un tamaño similar, medido en términos de volumen de activo, y dispusieran de estados contables para idéntico horizonte temporal. De acuerdo con todo lo expuesto, la muestra definitiva estaba formada por datos de 166 empresas, 83 sanas y 83 fracasadas. b. Selección y definición de las variables explicativas. Ante la ausencia de una teoría general que guíe el proceso de selección de las variables explicativas, el desarrollo de este apartado de la investigación se ha basado en los ratios con presencia habitual en la literatura sobre análisis contable(1), considerando su frecuencia de aparición en estudios anteriores y la facilidad para ser calculados y definidos en función de la información contable disponible. Atendiendo a estos criterios, se ha confeccionado una lista inicial de 73 indicadores clasificados en las categorías de rentabilidad, estructura financiera, actividad, rotación, liquidez, solvencia a largo plazo y estructura económica. Los ratios seleccionados se ofrecen en la tabla núm. 1. (1) Un estudio interesante para aportar una guía para la incorporación de ratios basados en un modelo económico-financiero de solvencia empresarial lo encontramos en Dieguez et al. (2006). LA INSOLVENCIA EMPRESARIAL EN LAS MICROEMPRESAS DE LA COMUNIDAD VALENCIANA UNA APROXIMACIÓNA PARTIR DEL ANALISIS UNIVARIANTE Tabla 1. Ratios utilizados en el análisis empírico RENTABILIDAD CLAVE RATIO REN 1 RESULTADO ANTES DE INTERESES E IMPUESTOS/ACTIVO TOTAL REN 2 RESULTADO DEL EJERCICIO/ACTIVO TOTAL REN 3 RESULTADO DEL EJERCICIO/FONDOS PROPIOS REN M 4 RESULTADO DEL EJERCICIO/PASIVO TOTAL REN 5 RESULTADO DE ACTIVIDADES ORDINARIAS/ACTIVO TOTAL REN 6 RESULTADO ANTES DE INTERESES E IMPUESTOS/VENTAS REN M 7 RESULTADO DE ACTIVIDADES ORDINARIAS(*)/PASIVO TOTAL REN 8 RESULTADO DE ACTIVIDADES ORDINARIAS/FONDOS PROPIOS REN 9 RESULTADO DEL EJERCICIO/VENTAS REN CF 10 CASH FLOW RECURSOS GENERADOS/FONDOS PROPIOS REN CF 11 CASH FLOW RECURSOS GENERADOS/ACTIVO TOTAL REN CF 12 CASH FLOW RECURSOS GENERADOS/PASIVO TOTAL REN CF 13 CASH FLOW RECURSOS GENERADOS/PASIVO CIRCULANTE REN 14 RESULTADO ANTES DE IMPUESTOS/ ACTIVO TOTAL REN 15 RESULTADO NETO – REALIZABLE - EXISTENCIAS/ ACTIVO TOTAL REN CF 16 CASH FLOW RECURSOS GENERADOS/VENTAS REN 17 RESULTADO ANTES DE INTERESES E IMPUESTOS/GASTOS FROS. REN 18 RESULTADO ANTES DE IMPUESTOS/ FONDOS PROPIOS REN 19 RESULTADO ANTES DE IMPUESTOS/ VENTAS REN M 20 RESULTADO ANTES DE IMPUESTOS/ PASIVO TOTAL REN 21 RESULTADO ANTES INT. E IMP./GASTOS FROS. + PAS. CIRCULANTE REN CF 22 PASIVO FIJO/CASH FLOW RECURSOS GENERADOS REN 23 RESULTADO DE ACTIVIDADES ORDINARIAS/VENTAS (*) Antes de impuestos 78 LA INSOLVENCIA EMPRESARIAL EN LAS MICROEMPRESAS DE LA COMUNIDAD VALENCIANA UNA APROXIMACIÓNA PARTIR DEL ANALISIS UNIVARIANTE Tabla 1. Ratios utilizados en el análisis empírico. (Continuación) ESTRUCTURA FINANCIERA CLAVE RATIO EF 1 PASIVO TOTAL/FONDOS PROPIOS EF 2 PASIVO FIJO/FONDOS PROPIOS EF 3 PASIVO CIRCULANTE/FONDOS PROPIOS EF 4 GASTOS FINANCIEROS/PASIVO TOTAL EF 5 PASIVO CIRCULANTE/ PASIVO TOTAL EF 6 PASIVO FIJO/ACTIVO TOTAL EF 7 PASIVO CIRCULANTE/ ACTIVO TOTAL EF 8 FONDOS PROPIOS/ PASIVO TOTAL EF 9 GASTOS FINANCIEROS/ VENTAS EF 10 PASIVO TOTAL/ACTIVO TOTAL EF 11 PASIVO FIJO/CAPITAL SOCIAL ACTIVIDAD CLAVE RATIO ACT 1 VALOR AÑADIDO/VENTAS ACT 2 GASTOS DE PERSONAL/VALOR AÑADIDO ACT 3 GASTOS FINANCIEROS/VALOR AÑADIDO ACT 4 INGRESOS DE EXPLOTACION/CONSUMOS DE EXPLOTACION ACT 5 RESULTADO DEL EJERCICIO/VALOR AÑADIDO ACT 6 PASIVO FIJO/VENTAS ACT 7 GASTOS DE PERSONAL/VENTAS ACT 8 GASTOS DE PERSONAL/ACTIVO FIJO 79 LA INSOLVENCIA EMPRESARIAL EN LAS MICROEMPRESAS DE LA COMUNIDAD VALENCIANA UNA APROXIMACIÓNA PARTIR DEL ANALISIS UNIVARIANTE Tabla 1. Ratios utilizados en el análisis empírico. (Continuación) ROTACIÓN CLAVE RATIO ROT 1 VENTAS/ACTIVO TOTAL ROT 2 VENTAS/ACTIVO CIRCULANTE ROT 3 VENTAS/ACTIVO FIJO ROT 4 VENTAS/FONDOS PROPIOS + PASIVO FIJO ROT 5 VENTAS/ PASIVO CIRCULANTE ROT 6 ACTIVO TOTAL/INGRESOS DE EXPLOTACION ROT 7 VENTAS/CAPITAL CIRCULANTE ROT 8 VENTAS/EXISTENCIAS ROT 9 VENTAS/REALIZABLE SOLVENCIA (Liquidez) CLAVE RATIO SOLV 1 ACTIVO CIRCULANTE/PASIVO CIRCULANTE SOLV 2 ACTIVO CIRCULANTE - EXISTENCIAS/PASIVO CIRCULANTE SOLV 3 DISPONIBLE/PASIVO CIRCULANTE SOLV 4 CAPITAL CIRCULANTE/PASIVO CIRCULANTE SOLV 5 CAPITAL CIRCULANTE/ACTIVO TOTAL SOLV 6 CAPITAL CIRCULANTE/VENTAS SOLV 7 REALIZABLE/CAPITAL CIRCULANTE SOLV 8 ACTIVO CIRCULANTE - EXISTENCIAS/VENTAS SOLV 9 RECURSOS GENERADOS ANTES DE IMPUESTOS/PASIVO CIRCUL. SOLV 10 (ACTIVO CIRCULANTE – EXISTENCIAS).-.PASIVO CIRCULANTE/GASTOS DE EXPLOTACION – AMORTIZACIONES – PROVISIONES (Intervalo sin crédito) SOLV 11 CAPITAL CIRCULANTE/INGRESOS DE EXPLOTACION SOLV 12 REALIZABLE/INGRESOS DE EXPLOTACION 80 LA INSOLVENCIA EMPRESARIAL EN LAS MICROEMPRESAS DE LA COMUNIDAD VALENCIANA UNA APROXIMACIÓNA PARTIR DEL ANALISIS UNIVARIANTE 81 Tabla 1. Ratios utilizados en el análisis empírico. (Continuación) SOLVENCIA A LARGO PLAZO CLAVE RATIO SOLV LP 1 ACTIVO FIJO/FONDOS PROPIOS SOLV LP 2 RECURSOS GENERADOS ANTES DE IMPUESTOS/PASIVO TOTAL SOLV LP 3 ACTIVO TOTAL NETO/PASIVO TOTAL ESTRUCTURA ECONÓMICA CLAVE RATIO CF 1 EXISTENCIAS/ACTIVO CIRCULANTE CF 2 ACTIVO CIRCULANTE/ACTIVO TOTAL CF 3 ACTIVO CIRCULANTE/ACTIVO FIJO CF 4 EXISTENCIAS/CAPITAL CIRCULANTE CF 5 EXISTENCIAS/ACTIVO TOTAL CF 6 REALIZABLE/ ACTIVO TOTAL CF 7 DISPONIBLE/ ACTIVO TOTAL La categoría de rentabilidad incluye una serie de ratios que relacionan magnitudes representativas del beneficio a distintos niveles con el endeudamiento que hemos denominado mixtos (REN M), así como diversos indicadores relativos al Cash-Flow en su acepción tradicional de recursos generados, es decir, beneficio más amortizaciones más provisiones, que han sido identificados como REN CF. c. Análisis univariante. El análisis univariante examina el comportamiento de las variables explicativas de forma individual, sin cruzar ningún tipo de información entre ellas. Cuando se aplica al estudio del fracaso empresarial, la hipótesis subyacente es que el análisis de la evolución temporal de una sola variable permite predecir la situación de insolvencia con uno o varios años de antelación. Esta metodología ha sido utilizada en numerosas investigaciones desarrolladas en la línea de trabajo iniciada por Beaver en 1966, revelando la capacidad de los ratios para ofrecer información sobre el proceso de fracaso empresarial. A pesar de las limitaciones derivadas de la no consideración de los efectos combinados de diversos indicadores evidenciados en investigaciones posteriores de carácter multivariante, consideramos que un análisis preliminar LA INSOLVENCIA EMPRESARIAL EN LAS MICROEMPRESAS DE LA COMUNIDAD VALENCIANA UNA APROXIMACIÓNA PARTIR DEL ANALISIS UNIVARIANTE 82 de la capacidad predictiva individual de cada uno de los ratios seleccionados puede aportar información relevante para el desarrollo posterior de un estudio multivariante más ambicioso. De acuerdo con este planteamiento, el estudio empírico se ha desarrollado siguiendo cuatro etapas: Etapa 1: Análisis descriptivo Etapa 2: Contraste de la hipótesis de normalidad. Etapa 3: Test de igualdad de medias. Etapa 4: Contraste de la capacidad predicativa de las variables mediante la aplicación del Test de clasificación dicotómica. Para llevar a cabo el análisis estadístico se ha recurrido al programa SPSS 14.0 (Statistical Package for Social Sciences). c1. Analisis descriptivo. En primer lugar, llevaremos a cabo un análisis descriptivo de cada una de las distribuciones correspondientes a los cinco ejercicios anteriores al momento del fracaso calculando la media, la desviación típica y los valores máximo y mínimo de cada variable, tanto en las empresas sanas como en las quebradas. En el primero de los años considerados se aprecia que los valores medios de algunos ratios en las empresas quebradas se alejan significativamente de los valores medios de las sanas, lo que en principio podría apoyar la capacidad discriminante estas variables. Con esta primera aproximación, aunque no podemos clasificar con rigor los dos grupos de empresas, al menos se da el primer paso en su separación. Repitiendo el análisis para el resto de los años considerados, se observa como la diferencia de medias entre los dos tipos de empresas se reduce, siendo menor a medida que nos alejamos del momento del fracaso. Así pues, como era previsible, la posibilidad de anticipar la insolvencia con los indicadores contables es mayor a medida que nos acercamos al momento del fracaso. Una de las limitaciones de este tipo de análisis es que ante distribuciones con una gran dispersión, los valores medios están influidos notablemente por los valores atípicos o extremos, lo que provoca la existencia de un solapamiento no detectado en las distribuciones que reducirá el valor predictor del ratio. Para superar esta y otras limitaciones vamos a completar el análisis con el contraste de la hipótesis de normalidad. c2. Contraste de la hipotesis de normalidad. Una de las etapas clave en el análisis descriptivo de las variables será determinar si siguen o no una distribución normal(2), ya que en caso afirmativo con la media y la desviación típica quedaría caracterizada toda la distribución y además numerosas técnicas estadísticas requieren esta condición para ser aplicadas correctamente. Para ello, se realizaran una serie de pruebas(3), comenzando por el test de Kolmogorov-Smirnov sobre cada una de las variables consideradas. Este es un test no paramétrico especialmente adecuado para muestras grandes (n>30) que se basa en la (2) Dentro de los estudios para detectar empíricamente los ratios que presentan distribuciones cercanas a la normalidad destacan los realizados por Deakin (1976), Frecka y Hopwood (1983) y García-Ayuso (1996) confirmándose en todos ellos que son muy reducidos los casos en que los ratios se distribuyen normalmente. (3) Las principales pruebas para contratar la normalidad en la distribución de los ratios son, el contraste ?2 de Pearson, el test de Kolmogorov-Smirnov y el contraste de Shapiro y Wilks. LA INSOLVENCIA EMPRESARIAL EN LAS MICROEMPRESAS DE LA COMUNIDAD VALENCIANA UNA APROXIMACIÓNA PARTIR DEL ANALISIS UNIVARIANTE 83 comparación entre la función de probabilidad acumulada de la variable analizada y una función teórica, en este caso la normal, contrastando el grado de homogeneidad entre las dos distribuciones a partir de las diferencias que muestran para cada valor observado. El contraste se efectúa calculando el estadístico D y rechazando la hipótesis de normalidad cuando el valor de D es suficientemente grande para un nivel de significación prefijado. Por el contrario, cuando la hipótesis nula es cierta, cabe esperar que el estadístico D tome valores próximos a 0. En nuestro caso, si la significación asociada al valor de D es mayor que 0’05, concluiremos que la muestra SI procede de una población Normal Dada la extensión de esta prueba resumimos en la tabla núm. 2 los resultados, en donde se puede apreciar como excepto en los ratios reseñados, en la mayoría de ellos en los diferentes ejercicios considerados se rechaza la hipótesis de normalidad: Tabla 2. Variables que no rechazan la hipotesis nula de normalidad según la prueba de Kolmogorov-Smirnov RATIO AÑO-1 AÑO-2 REN15 0,4381 0,1728 EF7 0,1781 0,6565 ACT1 AÑO-3 AÑO-4 AÑO-5 0,1836 0,0628 0,3038 5 0,414 0,2528 0,4278 5 0,0569 0,124 2 0,0539 1 ACT7 SOLV5 0,1088 0,297 0,2097 0,4216 SOLV6 0,0562 CF5 CF6 Total: 5 0,0577 1 1 SOLV11 0,0765 N 0,2627 0,0837 SOLV7 CF1 GLOBAL 0,0652 1 0.2095 3 0.0595 1 5 0,4911 0,2275 0,4012 0,4518 0,6114 5 4 7 6 8 0 De los 73 ratios analizados en los cinco ejercicios previos al fracaso considerados, vemos que los ratios que no rechazan la hipótesis de normalidad oscilan entre tan solo los cinco del primer año y los ocho del quinto año anterior al fracaso. La primera conclusión es que la mayoría de ratios rechazan la hipótesis de normalidad. Ante esta circunstancia podemos adoptar medidas correctoras como la transformación logarítmica de las variables o la eliminación de valores extremadamente atípicos que distorsionan el perfil de la muestra. En nuestro trabajo pretendiendo no alterar ni eliminar valores de la muestra hemos decidido asumir la no normalidad y desarrollar la investigación con esta circunstancia. LA INSOLVENCIA EMPRESARIAL EN LAS MICROEMPRESAS DE LA COMUNIDAD VALENCIANA UNA APROXIMACIÓNA PARTIR DEL ANALISIS UNIVARIANTE 84 c3. Contraste de la igualdad de medias. Dado el elevado número de variables explicativas consideradas inicialmente deberemos seleccionar aquellas que verdaderamente destaquen por su capacidad discriminante. Con carácter previo al calculo de la capacidad discriminante de cada ratio vamos a realizar una comparación entre sus valores medios en los dos grupos de empresas, sanas y quebradas. Como veremos el poder discriminante de cada ratio se confirma cuando se observan las diferencias entre los principales estadísticos que caracterizan las distribuciones. No obstante, para considerar las medias de cada grupo como representativas de las situaciones de saneamiento o fracaso, este estadístico debe ser significativo en sus distribuciones, lo que se cumplirá cuando la media de cada grupo sea aquella en la que se concentren los valores de las observaciones del ratio en ese grupo y que simultáneamente sean valores diferentes para los dos grupos, lo que permitirá caracterizar la pertenencia a un grupo y su diferenciación con los demás. La comparación de los valores medios se puede estudiar con varios contrastes, unos de carácter paramétrico como el test de Fisher-Schnedecor y el de la t de Student, este especialmente válido cuando solamente se consideran dos grupos, como es nuestro caso, y otro no paramétrico, el de la U de Mann-Whitney. El contraste de la t exige que las dos poblaciones cuyas medias se comparan sean normales. Si eso no es así, como prácticamente se demuestra con los test de normalidad anteriores, la alternativa es un contraste no paramétrico cuyas hipótesis de partida son menos exigentes, de ahí que propongamos un test no paramétrico alternativo para confirmar la posible igualdad de medias. Es el test de la U de Mann-Whitney. Para decidir sobre la hipótesis a contrastar hay que fijarse en el valor de la significatividad. Si es menor que 0'05 las medias son distintas. En la tabla núm. 3 reproducimos a modo de resumen los ratios para los que no se pudo rechazar la hipótesis nula de igualdad de medias, es decir, no se encontraron diferencias significativas en las medias de los dos grupos de empresas. En principio este contraste sirve para realizar un primer filtrado de la lista de variables propuesta aunque antes de llevar a cabo esta operación selectiva vamos a reforzarla con el planteamiento del test de clasificación dicotómico en el que se analizará la capacidad discriminante de cada una de las variables por separado. Por lo que podemos decir, que un amplio número de ratios presenta diferencias significativas entre los valores medios de los dos grupos de empresas que se atenúan a medida que nos alejamos de la fecha del fracaso. LA INSOLVENCIA EMPRESARIAL EN LAS MICROEMPRESAS DE LA COMUNIDAD VALENCIANA UNA APROXIMACIÓNA PARTIR DEL ANALISIS UNIVARIANTE 85 Tabla 3. Ratios que no rechazan la hipótesis de igualdad de medias AÑO-1 AÑO-2 AÑO-3 AÑO-4 AÑO-5 GLOBAL REN3 REN6 REN8 REN10 REN22 REN CF10 REN CF22 REN CF10 REN CF10 REN18 REN18 REN CF22 EF1 EF2 EF2 EF3 EF4 EF4 EF5 EF5 EF6 EF6 EF4 EF5 EF5 ACT1 ACT1 ACT1 ACT2 ACT2 EF7 EF11 EF11 ACT1 ACT4 ACT7 ACT7 ACT7 ACT8 ACT8 ACT8 ACT8 ACT8 ROT3 ROT3 ROT3 ROT3 ROT3 ROT4 ROT4 ROT4 ROT4 ROT4 ACT8 ROT4 ROT6 ROT6 SOLV7 SOLV8 SOLVLP1 SOLV8 SOLV8 SOLV12 SOLV12 SOLV8 SOLV8 CF1 CF1 SOLVLP1 CF2 CF2 CF2 CF2 CF2 CF3 CF3 CF3 CF3 CF3 CF5 CF5 CF6 CF6 CF6 CF6 CF6 CF6 15 17 14 17 20 4 LA INSOLVENCIA EMPRESARIAL EN LAS MICROEMPRESAS DE LA COMUNIDAD VALENCIANA UNA APROXIMACIÓNA PARTIR DEL ANALISIS UNIVARIANTE 86 c4. Test de clasificación dicotómica. Con este test se establece un punto de corte para cada ratio que minimice el número de errores de modo que una empresa será catalogada como fracasada o sana dependiendo de que el valor del ratio en cuestión esté a un lado u otro del punto de corte. Si las distribuciones de cada grupo de empresas son normales este criterio es óptimo, pero como hemos comprobado anteriormente esta circunstancia no se da cuando se trabaja con ratios financieros, caracterizados por presentar grandes sesgos hacia la derecha, de modo que el punto crítico determinado no será el mejor discriminador. En cualquier caso, no se pretende con esta prueba encontrar el punto de corte óptimo más eficiente, sino empezar a separar los ratios en función de su capacidad de clasificación. Mostramos a continuación la tabla 4. resumen en la que aparecen ordenadas las variables según la capacidad discriminante obtenida en los diferentes ejercicios previos al fracaso, considerando en cada ejercicio los 10 ratios con mayor porcentaje de clasificación correcta. Tabla 4. Ratios con mayor capacidad discriminante RATIO RATIO AÑO-2 RATIO AÑO-1 (*) (*) REN M4 88,60 REN M4 78,30 REN CF12 88,00 REN M20 REN M20 88,00 REN M7 AÑO-3 RATIO RATIO (*) AÑO-4 (*) REN 5 80,70 SOLV LP2 76,50 77,70 REN M4 77,70 REN 2 REN M7 76,50 REN M7 77,70 85,50 REN CF12 75,90 REN 14 SOLV LP2 85,50 EF10 75,30 REN 21 83,10 REN 5 REN CF11 81,30 REN CF13 AÑO-5 RATIO (*) GLOBAL (*) REN 2 71,10 REN M7 80,20 75,90 EF10 70,50 REN M4 79,10 REN CF12 75,90 ACT 3 69,90 REN M20 78,70 77,70 REN M4 74,70 REN M4 69,30 SOLV LP2 76,70 REN CF11 76,50 REN M7 74,70 REN M7 69,30 REN CF11 76,20 74,10 REN M20 76,50 REN M20 74,70 REN 9 69,30 REN CF12 75,70 SOLV LP2 74,10 REN 19 75,90 REN CF13 73,50 REN CF11 68,70 EF10 74,80 80,70 REN 2 72,90 SOLV LP2 75,90 REN 14 72,90 EF9 68,70 REN 14 74,20 REN 14 78,90 REN CF11 72,30 REN 2 74,70 SOLV 9 72,90 REN CF12 68,10 SOLV 9 74,10 SOLV 9 78,90 REN 14 72,30 REN CF12 72,90 REN 9 72,30 REN 14 68,10 REN CF13 73,20 (*) Porcentaje global de aciertos. En una primera fase de análisis de los resultados vemos que una parte considerable de los ratios presenta una notable capacidad discriminante llegando un numeroso grupo de ellos a diferenciar correctamente los dos grupos de empresas, sanas y fracasadas, en más de un 70% de aciertos en la clasificación. En general a medida que nos alejamos del momento del fracaso la capacidad predictiva de las variables se reduce, en algunos casos considerablemente, lo cual es lógico, si se tiene en cuenta que los valores de los ratios son mas estables cuanto más lejos estamos del momento del fracaso. LA INSOLVENCIA EMPRESARIAL EN LAS MICROEMPRESAS DE LA COMUNIDAD VALENCIANA UNA APROXIMACIÓNA PARTIR DEL ANALISIS UNIVARIANTE 87 Analizando el comportamiento de cada ratio, sobresale el REN M 4, un ratio de naturaleza mixta que en su numerador aparece el resultado del ejercicio y en el denominador la cifra de pasivo total. El ratio muestra una capacidad discriminante que va desde el 88,60% el primer año hasta prácticamente el 70% el quinto año previo al fracaso. Su elevada capacidad discriminante tiene relación con la escasa capacidad para generar beneficios que muestran las empresas con dificultades unida a altas tasas de endeudamiento, que lejos de disminuir paulatinamente van aumentando, sobre todo a corto plazo, en numerosas ocasiones como resultado de negociaciones realizadas bajo la presión de la supervivencia que acaban siendo muy poco ventajosas para la empresa. Esta circunstancia se aprecia especialmente en las pequeñas empresas donde los márgenes de negociación con las entidades bancarias y proveedores son escasos o nulos en la mayoría de los casos, denotando una deficiente gestión financiera de los recursos. Le sigue en importancia discriminante el ratio REN CF 12, de la categoría de Cash-Flow que relaciona esta magnitud en su acepción tradicional de recursos generados, Beneficio + Amortizaciones + Provisiones, con la estructura financiera. El ratio muestra una capacidad discriminante que va desde el 88 % el primer año hasta prácticamente el 70% el quinto año previo al fracaso Su buen comportamiento discriminante lo atribuimos a la escasa capacidad que muestran las empresas para generar recursos, sobre todo cuanto más próxima está la fecha del fracaso, unido a una elevada tasa de endeudamiento. El ratio REN CF 11, también de la categoría de Cash-Flow, que relaciona esta magnitud con el activo total también se presenta como buen discriminante, pasando del 81,30% el primer año a 68,70% el quinto año. Este ratio muestra la escasa capacidad para generar recursos en relación a su inversión, lo que nos sugiere que en el caso de las empresas fracasadas la presencia de volúmenes de activo poco adaptados a las necesidades cambiantes del mercado en el que operan, y en cualquier caso una rigidez en sus estructuras que dificulta su viabilidad y con un escaso o nulo poder de negociación con los clientes. LA INSOLVENCIA EMPRESARIAL EN LAS MICROEMPRESAS DE LA COMUNIDAD VALENCIANA UNA APROXIMACIÓNA PARTIR DEL ANALISIS UNIVARIANTE 88 3. CONCLUSIONES Las pequeñas empresas y microempresa son, por su tamaño, las que cuentan con menor capacidad crediticia, y para determinar las principales características de las empresas fracasadas (con mayor riesgo crediticio) de las pequeñas y microempresas radicadas en la Comunidad Valenciana, se ha realizado un análisis univariante mediante la selección de determinados ratios contables Del análisis univariante realizado, podemos concluir que un número elevado de los ratios seleccionados tienen capacidad para conseguir altos porcentajes de clasificación. Se ha podido constatar que los que muestran mayores porcentajes de aciertos, configurándose como mejores diferenciadores de las situaciones de futura insolvencia, son aquellos que relacionan aspectos de la generación de recursos con el endeudamiento. Por otra parte resaltamos el comportamiento discreto los ratios de solvencia y la escasa significatividad de los de estructura económica. Las conclusiones que obtenemos de este primer análisis, podemos decir que las empresas valencianas fracasadas pertenecientes al segmento de las pequeñas y microempresas en general muestran una escasa capacidad para generar recursos unida a unos volúmenes de inversión desacordes con el nivel de actividad y un excesivo nivel de endeudamiento, sobre todo en el corto plazo. Generalizando, la rentabilidad es baja aunque este factor considerado aisladamente no es decisivo para clasificar correctamente los dos grupos de empresas ya que las bajas tasas de rentabilidad son características globales de este segmento. En la muestra global, donde aparece reflejada la clasificación global de los ratios según la media ponderada de los cinco ejercicios, los resultados van en la misma línea. Los ratios con mayor capacidad de clasificación son aquellos que comparan magnitudes como el beneficio en sus distintos niveles y los recursos generados con la estructura financiera. También se aprecia un comportamiento modesto de aquellas variables que informan de la actividad y la insignificante capacidad de aquellos que informan sobre la actividad económica. LA INSOLVENCIA EMPRESARIAL EN LAS MICROEMPRESAS DE LA COMUNIDAD VALENCIANA UNA APROXIMACIÓNA PARTIR DEL ANALISIS UNIVARIANTE 89 BIBLIOGRAFÍA BEAVER, W. H. (1966): “Financial Ratios as Predictors of Failure”. Empirical Research in Accounting: Selected Studies, Supplement of Volume 5, Journal of Accounting Research. Pp 71-111. DEAKIN, E.B. (1976): “Distributions of Financial Accounting Ratios: Some empirical Evidence”. The Accounting Review. January. Pp. 90-96. DE LA TORRE, J.M., y GÓMEZ, Mª E. (2005): “Análisis de la sensibilidad temporal en los modelos de predicción de insolvencia: Una aplicación a las pymes industriales”. Comunicación presentada al XIII Congreso de A.E.C.A. (Armonización y Gobierno de la Diversidad). Oviedo, 22-24 de septiembre. DIEGUEZ, J. y TRUJILLO, F. y CISNEROS, A.J. (2006): “Modelos de predicción de la insolvencia empresarial: La incorporación de ratios a partir de un marco teórico”. Comunicación presentada a las VI Jornadas sobre Predicción de Insolvencia Empresarial – Carmona (Sevilla), 9 y 10 de noviembre. FRECKA, T.J. y HOPWOOD, W.S. (1983): “The Effects of Outliers on the Cross-Sectional Distributional Properties of Financial Ratios” Accounting Review. Vol. 58.N.1. Enero. Pp. 115-128. GARCIA-AYUSO COVARSI, M. (1996): “Técnicas de Análisis Factorial Aplicadas al Análisis de la Información Financiera (Clasificaciones a priori, Hallazgos y Evidencia Empirica Española)”. Revista Española de Financiación y Contabilidad. Vol. XXV. N.86. Pp.57-101. LABATUT SERER, G., MOLINA LLOPIS, R. y POZUELO CAMPILLO, J. (2006): “El riesgo de crédito en el marco de Basilea II y las NIIF”. Comunicación presentada a las V Jornadas de Contabilidad de ASEPUC. Madrid. LAFFARGA, J., MARTÍN, J. y VAZQUEZ, J. (1985): “El Análisis de la Solvencia en las Instituciones Bancarias: Propuesta de una Metodología y Aplicaciones a la Banca Española”, Esic Market, N. 48, AbrilJunio. Pp 51-83. LAFFARGA, J., MARTIN, J. y VAZQUEZ, J. (1987): “Predicción de la crisis bancaria española: comparación entre el análisis logit y el discriminante” Cuadernos de Investigación Contable. Vol. 1 nº 1. Pp 103-110 LÓPEZ GRACIA, J., GANDIA CABEDO, J.L., MOLINA LLOPIS, R. (1998): “La suspensión de pagos en las pymes: una aproximación empírica”. Revista Española de Financiación y Contabilidad. Vol. XXVII. Nº 94. Enero-Marzo. Pp. 71-97. MINGUEZ CONDE, J.L. (2006): “Factores explicativos de la insolvencia empresarial: una aplicación a la pequeña y mediana empresa constructora”. Comunicación presentada a las VI Jornadas sobre Predicción de Insolvencia Empresarial. Carmona (Sevilla), 9 y 10 de noviembre. MORA ENGUIDANOS, ARACELI (1994a): ”Los modelos de predicción del fracaso empresarial: Una aplicación empírica del LOGIT”, Revista Española de Financiación y Contabilidad, nº 78, Enero-Marzo, Pp.203-233. LA INSOLVENCIA EMPRESARIAL EN LAS MICROEMPRESAS DE LA COMUNIDAD VALENCIANA UNA APROXIMACIÓNA PARTIR DEL ANALISIS UNIVARIANTE 90 PINA MARTÍNEZ, V. (1989). “La información contable en la predicción de la crisis bancaria”. Revista Española de Financiación y Contabilidad. Vol. 18. nº 58. Pág. 309-338. RODRIGUEZ ACEBES, M.C. (1990): “La predicción de las crisis empresariales: Modelos para el sector de seguros”. Departamento de publicaciones. Universidad de Valladolid. RODRIGUEZ FERNANDEZ, J.M. (1989): “Análisis de las insolvencias bancarias en España: Un modelo empírico”. Moneda y Crédito N.189. Pp. 187-227. RODRÍGUEZ LÓPEZ, M. (2001): “Predicción del Fracaso Empresarial en Compañías No Financieras. Consideración de Técnicas de Análisis Multivariante de Corte Paramétrico”, Actualidad financiera, núm. 6, pp.27-42. SAMANIEGO MEDINA, R. y MARTIN MARIN, J.L. (2005): “El método estándar en el acuerdo de Basilea”. Comunicación presentada en el XIII Congreso de AECA. Oviedo. SOMOZA LÓPEZ, A. (2001): "La consideración de factores cualitativos, macroeconómicos y sectoriales en los modelos de predicción de la insolvencia empresarial. Su aplicación al sector textil y confección de Barcelona (1994-1997)", Papeles de Economía Española, núm. 89/90, pp. 402-413. LA REFORMA DEL TRATAMIENTO DE LOS ARRENDAMIENTOS: HACIA UNA REVELACIÓN MÁS ADECUADA DE LOS RECURSOS, COMPROMISOS Y ESTRATEGIA EN LA GESTIÓN DE ACTIVOS DE LA ENTIDAD Antonio Barral Rivada Profesor asociado de ETEA E-mail: abarralriv@economistas.org Isabel Gómez Rodríguez Profesora adjunta de ETEA E-mail: igomez@etea.com Jesús N. Ramírez Sobrino Profesor titular de área de ETEA E-mail: jramirez@etea.com Información financiera ETEA - C/Escritor Castilla Aguayo, 4 - 14004 Córdoba Tel. 957222157/616961278 - Fax: 957222101 E-mail: hmolina@etea.com PALABRAS CLAVE Arrendamientos operativos. Riesgos y ventajas. RESUMEN La aplicación de las normas internacionales de contabilidad en el ámbito de la Unión Europea ha permitido la revelación de los compromisos por arrendamiento operativo contraídos por los grupos de sociedades cotizados en la Unión Europea. Por otra parte, en la actualidad, los organismos reguladores internacional (IASB) y el estadounidense (FASB) están abordando un proyecto para reformar el tratamiento contable de los arrendamientos, conducente a eliminar la distinción entre arrendamiento operativo y financiero. Este proyecto viene de antiguo cuando el G4+1 en la década de los 90 del siglo pasado comenzó a estudiarlo. El principal efecto sobre los estados financieros es la incorporación al activo de los recursos controlados y al pasivo de los compromisos firmes adquiridos en aquellos arrendamientos operativos con contratos no cancelables superiores al año. Nuestro trabajo pretende analizar el impacto en los estados financieros y en dos magnitudes básicas utilizadas por los analistas: el Retorno sobre Activos (ROA) y el ratio de endeudamiento. En segundo lugar, pretendemos estudiar la configuración de los arrendamientos y si existen diferencias en razón del país o del sector de actividad. Finalmente, analizamos si la decisión arrendar o invertir en inmovilizado, esto la decisión sobre cómo controlar los activos inmovilizados, varía en razón del país o del sector. Los resultados, obtenidos sobre una muestra de compañías españolas y británicas cotizadas en Bolsa, ofrecen diferencias más pronunciadas en cuanto al sector que en cuanto al país, tanto en lo que se refiere al impacto sobre las magnitudes básicas del análisis financiero como en la propia configuración de los arrendamientos. LA REFORMA DEL TRATAMIENTO DE LOS ARRENDAMIENTOS: HACIA UNA REVELACIÓN MÁS ADECUADA DE LOS RECURSOS, COMPROMISOS Y ESTRATEGIA EN LA GESTIÓN DE ACTIVOS DE LA ENTIDAD 92 1. INTRODUCCIÓN A comienzos de 2006, el International Accounting Standard Board (IASB, 2006a: 7), en la reunión de su Consejo, sugirió incorporar el tratamiento de los arrendamientos a la agenda común con el Financial Accounting Standard Board (FASB). Esta norma, conectada con los derechos de uso en general, es relevante por lo que implica de concreción del concepto de activo. El proyecto fue iniciado en el año 1996 por el G4+1 (grupo que integra a los reguladores de Australia, Canadá, Estados Unidos, Nueva Zelanda y Reino Unido) y el entonces IASC (precursor del IASB) en el que se proponía un nuevo enfoque para la cuestión de los arrendamientos. El documento aparecía firmado, como autor principal, por McGregor (1996), director ejecutivo de la Fundación de Investigación de Contabilidad Australiana. En el año 2000, vio la luz un nuevo documento elaborado por un grupo de trabajo del G4+1, esta vez redactado por Nailor y Lennard (2000), ambos procedentes del Reino Unido. Este segundo documento, y la reforma por él auspiciada, estaban liderados por el Accounting Standard Board británico(1). El origen sobre la necesidad de esta reforma se encontraba en la arbitrariedad y los déficits de comparabilidad que introduce el doble sistema de reconocimiento de los arrendamientos (entre financieros y operativos), conclusión a la que había llegado el documento previo del año 1996. Así, es relevante el planteamiento de Taylor y Lennard (2000, par. 1.19): “la capitalización de los arrendamientos operativos por los preparadores claramente ofrecería mejor información. También reduciría los costes, porque los cálculos necesarios (que a su vez son aportados ya por algunas grandes compañías) necesitan ser realizados sólo una vez, por la compañía en cuestión, más que cada analista tener que efectuarla para preparar sus propios cálculos” (p. 1.19). Con unas motivaciones similares, la Securities and Exchange Comisión (SEC, 2005) estadounidense, siguiendo las recomendaciones de la Ley Sarbanes-Oxley, preparó un documento de reforma del tratamiento de determinadas partidas entre las que se encontraban los arrendamientos operativos. Dicha reforma sugería la incorporación al balance de los compromisos contraídos por estos contratos. La cuestión planteada es que ante un marco de conceptos preocupado por una adecuada valoración de los activos y pasivos de la entidad tendría difícil encaje la distinción entre arrendamientos operativos y financieros, siempre y cuando éstos tuviesen una proyección plurianual. En el momento que se firma un contrato de arrendamiento se han transferido sustancialmente los riesgos y ventajas del bien que, no necesariamente de manera ilimitada. Al mismo tiempo, la entidad contrae una obligación presente cuyo reconocimiento en el balance es el objeto de la cuestión. En nuestra opinión, la clave se encuentra en el concepto de transferencia sustancial de los riesgos y ventajas. La transferencia “sustancial” es la que determina el control del recurso y quién se apropia de los beneficios económicos futuros que genere. Si el concepto “sustancial” tiene una connotación de temporalidad, se asocia al concepto de vida física del bien y da lugar al enfoque denominado por el IASB como “whole of asset”. Según éste existen dos tipos de arrendamientos (uno que abarca la totalidad de riesgos y ventajas que sería el financiero y otro que abarca una parte de la vida o del valor del activo que sería el operativo); por el contrario, si el concepto “sustancial”, se asocia a la idea de totalidad, todos los riesgos y ventajas significativos, se podría admitir un único tratamiento para ambos tipos de arrendamientos: los recursos controlados se incorporarían al activo durante el periodo que son controlados. (1) Una referencia previa de este organismo la encontramos en un borrador de unos de los documentos que configuran el marco conceptual británico (Statement of Position), sobre el reconocimiento de partidas en los estados financieros. En el párrafo 34 indica “Cuando un contrato de lugar a compromisos firmes para ambas partes se debería reconocer sus respectivas obligaciones. Un ejemplo es un contrato para el arrendamiento de un avión, en el que el contrato abarca un periodo significativo de tiempo y conlleva una severa penalización en la cancelación por cualquier parte la cual se reforzaría en la práctica debido al tipo de contrato. En este caso, al propietario del avión se le reconocería su obligación al dejar de reconocer aquella parte de su interés en el avión que ha accedido a traspasar al arrendador (y reconocer un activo “cuenta a cobrar”), y el arrendador debería reconocer su obligación de pago de rentas futuras (al mismo tiempo que el correspondiente activo “derechos a usar el avión”).”. No obstante, este párrafo tan revelador fue eliminado en la versión definitiva del Statement of Position. LA REFORMA DEL TRATAMIENTO DE LOS ARRENDAMIENTOS: HACIA UNA REVELACIÓN MÁS ADECUADA DE LOS RECURSOS, COMPROMISOS Y ESTRATEGIA EN LA GESTIÓN DE ACTIVOS DE LA ENTIDAD 93 El objetivo de nuestra investigación es analizar el impacto que la capitalización de los activos y el reconocimiento de las deudas por los compromisos contraídos por arrendamiento operativo tienen en las cuentas anuales. Por otra parte, la nueva política de revelación permite extraer conclusiones sobre las políticas de control de activos y el grado de flexibilidad que las empresas se dotan para reducir sus riesgos de negocio. Asimismo, procederemos a analizar si los compromisos y sus efectos sobre los principales ratios, así como la configuración de los propios arrendamientos están relacionados con variables tales como el país, el sector de actividad, el tamaño, la rentabilidad económica y el endeudamiento previo de las compañías. La aplicación por parte de los grupos de sociedades cotizados en Europa de la normativa internacional (NIC 17), permite evaluar el impacto que tendría la capitalización de los arrendamientos operativos, así como estudiar las características básicas de los contratos de arrendamiento y su relación con las decisiones de inversión en inmovilizado. No obstante, somos conscientes del bajo nivel de revelación existente en este primer ejercicio de normas internacionales en España. Barral, Gómez y Molina, (2006, 35) sólo observan que un 44% de las compañías del mercado continuo presentan información sobre los compromisos por arrendamientos operativos no cancelables. El trabajo se organiza con el esquema que pasamos a describir a continuación. Inicialmente analizamos cuál es el tratamiento que la cuestión de los arrendamientos ha tenido en la literatura científica. El segundo bloque del trabajo se destina a presentar la metodología y en epígrafe aparte los principales resultados, de nuestra investigación. Como no puede ser de otra manera, el trabajo finaliza con las conclusiones y los desarrollos pendientes del mismo. 2. EL ESTADO DE LA CUESTIÓN EN LA LITERATURA CIENTÍFICA La cuestión de los arrendamientos y su registro contable ha experimentado una intensa evolución en los últimos años. Especialmente estudiados han sido los producidos en EE.UU. con la promulgación del SFAS 13 que suponía la capitalización de ciertos arrendamientos: los financieros. En el Reino Unido se ha estudiado la emisión de la SSAP 21 que suponía un cambio equivalente al SFAS 13 estadounidense. Con motivo de estos cambios, se escribieron algunos trabajos que trataron de analizar si se produjo algún impacto por la aplicación de dichas normas. Por su parte, en España, el cambio regulatorio se produjo con el Plan General de Contabilidad de 1990 y la cuestión, bien directamente, bien a través de una cuestión conexa como es el tratamiento de los derechos de uso, ha ido matizándose en la década de los 90 y comienzos de este siglo, fruto todo ello de varias consultas resueltas por el Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas y de las soluciones adoptadas en algunos planes sectoriales. Sin embargo, la literatura patria sobre la materia ha sido escasa y ha tomado como referencia los trabajos realizados en el ámbito anglosajón. Así, Pina (1988) y Castelló (1989) llegaron a la conclusión que la información sobre los arrendamientos financieros, siempre y cuando figurase en las Notas, era útil en los modelos de decisión de los usuarios (Pina, 1988, 118) o en el valor de mercado de la acciones (Castelló, 1989, 444). Esto les lleva a los autores a demandar al primero que apareciese la información, siquiera en el anexo y a la segunda a recomendar su capitalización en el balance. Ashton (1985, 233) identificó dos grandes líneas de trabajos realizados hasta aquel momento sobre la contabilización de los arrendamientos. El evento que había dado lugar al trabajo de Ashton era la norma LA REFORMA DEL TRATAMIENTO DE LOS ARRENDAMIENTOS: HACIA UNA REVELACIÓN MÁS ADECUADA DE LOS RECURSOS, COMPROMISOS Y ESTRATEGIA EN LA GESTIÓN DE ACTIVOS DE LA ENTIDAD 94 británica SSAP nº 21 del año 1984 que requería la incorporación de los arrendamientos financieros al balance de situación. Ashton identificó dos tipos de problemas investigados: a) el efecto sobre el precio de las acciones y b) el efecto sobre los indicadores de rendimiento utilizado por los analistas financieros y los gestores en la toma de decisiones. Recientemente, el grupo de trabajo del IASB (2007e) ha sistematizado la literatura científica existente sobre los arrendamientos operativos, considerando los problemas a los que han tratado de dar respuesta. Estas líneas son: a) Simulación del efecto en los estados financieros de la incorporación de los arrendamientos al balance y los sectores de actividad que estarían más afectados. b) Relación de sustitución o intercambio entre los arrendamientos y otras fórmulas de financiación, así como el efecto de ambos sobre el riesgo de capital. c) Percepción o empleo de la información financiera por los usuarios (inversores, acreedores y otros usuarios). d) Análisis del efecto del SFAS 13 en la valoración del riesgo y la rentabilidad realizada por el mercado de valores, así como el empleo de los arrendamientos en relación a otros tipos de financiación. Conceptualmente, la sistematización del IASB presenta tres grandes temas investigados y un cuarto que recoge cómo alguno de estos temas se resolvió en un caso concreto como fue la emisión del SFAS 13 en EE.UU; sin embargo, a nuestro juicio, un cambio regulatorio presenta la situación para poder estudiar el comportamiento de las compañías o los inversores y no una línea de trabajo per se. Por otra parte, existen algunas investigaciones que han tomado como referencia otros cambios regulatorios como la emisión del SSAP 21 en el Reino Unido o más cercano, la presente investigación toma su sentido con motivo de un cambio de regulación y alguno de los objetivos de investigación tiene que ver con el cambio en sí. Por tanto, en nuestra presentación de la revisión de la literatura vamos a organizar los trabajos en dos grandes epígrafes: a) Simulación del efecto en los estados financieros de la incorporación de los arrendamientos al balance y los sectores de actividad que estarían más afectados. b) Relación de sustitución o intercambio entre los arrendamientos y otras fórmulas de financiación, así como el efecto de ambos sobre el riesgo de capital. 2.1. Impacto en los estados financieros. Los primeros trabajos se producen con las primeras propuestas a finales de los años 70. Ashton (1985, 236) analizó la capitalización voluntaria de los compromisos por arrendamientos financieros en el año previo a la adopción del SSAP 21 en el Reino Unido. Sólo 23 compañías sobre 300 presentaban esta información. De ellas observó un efecto significativo en el ratio de endeudamiento, con un incremento superior al 20%, no así en otras magnitudes y ratios como los Resultados antes de Intereses e Impuestos, las ganancias por acción, la rentabilidad sobre fondos propios, el margen de beneficio, el retorno sobre el capital empleado o la cobertura de intereses. LA REFORMA DEL TRATAMIENTO DE LOS ARRENDAMIENTOS: HACIA UNA REVELACIÓN MÁS ADECUADA DE LOS RECURSOS, COMPROMISOS Y ESTRATEGIA EN LA GESTIÓN DE ACTIVOS DE LA ENTIDAD 95 Posteriormente, en la década de los 90 nos encontramos algunos trabajos que van más allá y tratan de analizar el impacto que tendría la capitalización de los arrendamientos operativos no cancelables, en línea con la propuesta que el IASB tiene actualmente sobre la mesa. Dos de los trabajos más relevantes y pioneros fueron los de Imhoff, Lipe y Wright (1991 y 1997). Estos trabajos desarrollaron un modelo para analizar el impacto en el balance y la cuenta de resultados de los arrendamientos operativos no cancelables en caso de ser capitalizados. A estos trabajos han seguido un grupo de ellos destinados a evaluar el impacto de un cambio regulatorio conducente a reconocer las deudas y activos derivados de un arrendamiento operativo. En el Reino Unido, Beattie, Edwards y Goodacre (1998, 253), utilizando el método de Imhoff, Lipe y Wright (1991), sobre 232 compañías cotizadas, concluyeron que la deuda a largo plazo se encontraba infravalorada en un 39%, mientras que los activos lo estaban en un 6%. Asimismo, concluyeron que la capitalización tenía un efecto significativo en el margen sobre ventas, retorno sobre activos (ROI) y las medidas de endeudamiento. Finalmente, el sector servicios fue el que mostró un mayor impacto. Los autores terminan apelando a los reguladores contables a que consideren una reforma contable del arrendamiento debido a los efectos económicos que tiene. Sin embargo, el hecho de que aparezca en el balance de situación o en la cuenta de resultados no es imprescindible para que sea considerado por los usuarios, si apareciese revelado en las notas. En cuanto a la incidencia sectorial, Goodacre (2001, 18 y 27) pone de manifiesto que son las empresas comerciales las más intensivas en el empleo de arrendamientos operativos, representando 3,3 veces más que la financiación recogida en el balance y aproximadamente un 28% del valor del total de los activos. 2.2. Relación con otras fórmulas de financiación Una segunda línea de trabajos está orientada a la relación entre arrendamientos y otras formas de financiación. Beattie, Goodacre y Thomson (2000, 1214-6) observaron una relación positiva entre el riesgo del capital y el ajuste en la deuda por los compromisos derivados de arrendamientos operativos. En EE.UU., Duke, Franz Hunt y Toy (2002, 349), llegaron a la conclusión de que el empleo del arrendamiento operativo estaba asociado positivamente a la concentración del capital y a la existencia de cláusulas de cumplimento de restricciones financieras en los contratos de endeudamiento. No obstante, no pusieron de manifiesto una clara relación entre el empleo de arrendamientos operativos y el nivel de endeudamiento, ni tampoco con la existencia de planes de incentivos basados en el retorno sobre el capital. Los efectos de la regulación sobre el tratamiento de los arrendamientos dependen de la extensión de la figura del arrendamiento frente a otras fórmulas de control de los activos y esto en parte tiene que ver con el contexto económico. Asimismo, el empleo de la figura del arrendamiento puede tener relación con la cultura empresarial o el desarrollo de los mercados de arrendamiento. En EE.UU., la SEC (2005, 63-65), al analizar las revelaciones sobre los compromisos bajo arrendamientos operativos y financieros en una muestra de emisores, obtuvo que el 63,3% de las compañías presentaba información sobre compromisos por arrendamientos operativos, con un valor medio de 1.252.006 millones de dólares, mientras que un 22,2 % los presentaban sobre arrendamientos financieros con un valor medio de los mismos de 45.102 millones de dólares. Como indica el informe, el ratio de compromisos futuros por arrendamientos operativos sobre financieros es de 25 a 1. En el Reino Unido, Goodacre (2003, 50) muestra un fuerte crecimiento de los arrendamientos operativos, LA REFORMA DEL TRATAMIENTO DE LOS ARRENDAMIENTOS: HACIA UNA REVELACIÓN MÁS ADECUADA DE LOS RECURSOS, COMPROMISOS Y ESTRATEGIA EN LA GESTIÓN DE ACTIVOS DE LA ENTIDAD 96 fuera de balance, frente a los financieros, reconocidos en el balance, desde el año 1985, año siguiente a la entrada en vigor del SSAP 21 (APC, 1984). Por el contrario, en Malasia, Abdullah y Alfan (2005), sobre 200 emisores de los 598 de la Bolsa de Malasia, muestran la escasa presencia de arrendamientos operativos (6%) frente a los financieros (42,5%); destacando asimismo un 35,5% que no tienen ningún tipo de arrendamiento. El importe medio de los compromisos por arrendamientos operativos y financieros es similar. 2.3. Objetivos de la investigación e hipótesis La aplicación de las Normas Internacionales de Contabilidad en la información financiera consolidada de los grupos de sociedades europeos a partir del 1 de enero de 2005, nos ofrece un hito relevante para analizar cuál es el impacto que los actuales trabajos del IASB y del FASB pudieran tener en las principales magnitudes de los estados financieros. También es nuestro objetivo describir el tipo de arrendamientos (operativos o financieros), la duración media de los compromisos contraídos en arrendamientos operativos y si el peso de los arrendamientos sobre el total de activos, lo que nos indica el peso de los arrendamientos en función del tamaño de la entidad. Por último, pretendemos estudiar el papel de los arrendamientos en la política de financiación de las compañías; es decir, si juegan un papel sustitución respecto al endeudamiento o bien al contrario, desempeñan un papel complementario, como la literatura ha puesto de manifiesto. Finalmente, este estudio pone de manifiesto el grado de implantación de los requisitos de revelación requeridos por las Normas Internacionales(2). Nuestro estudio indaga además si en países con tradiciones contables diferentes se producen prácticas de revelación diferentes. A tal fin hemos comparado los compromisos adquiridos en España y en el Reino Unido y las consecuencias sobre el análisis de ratios fundamentales como el Retorno sobre Activos (ROA) o el Ratio de Endeudamiento, en la tipología de arrendamientos y en el efecto sustitución del arrendamiento sobre la adquisición de inmovilizados. Como en otros trabajos previos, hemos contratado también si el sector de actividad caracteriza el uso de los arrendamientos operativo o, si al contrario, los compromisos no dependen del sector de actividad. Por tanto, las hipótesis de este estudio son: a) Hipótesis relacionadas con el efecto sobre el análisis: H1.1: El efecto en el ROA es independiente del país donde esté domiciliada la matriz del grupo. H.1.2: El efecto en el ratio de endeudamiento es independiente del país donde esté domiciliada la matriz del grupo. H.1.3: El efecto en el ROA es independiente del sector de actividad donde mayoritariamente opere el grupo. H.1.4: El efecto en el ratio de endeudamiento es independiente del sector de actividad donde mayoritariamente opere el grupo. (2) Con ciertas cautelas sobre la representatividad de su muestra, Ashton (1985) destaca que, en el periodo 1983/1984 en el Reino Unido y a pesar de la inminencia de la nueva norma (SSAP 21), sólo 23 de 300 compañías mostraban voluntariamente información suficiente para poder evaluar el efecto de la capitalización de los arrendamientos. La capitalización de los arrendamientos es una cuestión que no despierta un gran entusiasmo, por su incidencia en determinadas variables, peor además los cambios regulatorios en muchas ocasiones tienen que superar las inercias informativas de las compañías. A nuestro juicio, es relevante estudiar la evolución de la implantación de la nueva normativa en varios ejercicios con la finalidad de aislar este efecto. LA REFORMA DEL TRATAMIENTO DE LOS ARRENDAMIENTOS: HACIA UNA REVELACIÓN MÁS ADECUADA DE LOS RECURSOS, COMPROMISOS Y ESTRATEGIA EN LA GESTIÓN DE ACTIVOS DE LA ENTIDAD 97 b) Hipótesis relacionadas con la configuración de los arrendamientos: H2.1: La proporción de compromisos por arrendamientos operativos sobre el total es independiente del país donde esté domiciliada la matriz del grupo. H.2.2: La influencia de los compromisos por arrendamientos operativos sobre el total de activos es independiente del país donde esté domiciliada la matriz del grupo. H.2.3: La antigüedad de los arrendamientos operativos es independiente del país donde esté domiciliada la matriz del grupo. H2.4: La proporción de compromisos por arrendamientos operativos sobre el total es independiente del sector de actividad. H.2.5: La influencia de los compromisos por arrendamientos operativos sobre el total de activos es independiente del sector de actividad. H.2.6: La antigüedad de los arrendamientos operativos es independiente del sector de actividad. c) Hipótesis relacionadas con el carácter sustitutivo de los arrendamientos: H3.1: La proporción de compromisos por arrendamientos operativos sobre el inmovilizado material es independiente del país donde esté domiciliada la matriz del grupo. H3.2: La proporción de compromisos por arrendamientos operativos sobre el inmovilizado material es independiente del sector de actividad. 3. METODOLOGÍA Nuestra investigación se desarrolla a partir de la información consolidada publicada por los grupos de sociedades que cotizan en el mercado continuo español y en la Bolsa de Londres. El trabajo de campo ha consistido en recabar las cuentas anuales de las compañías y en su posterior lectura para la extracción de la información relevante al objeto de nuestro trabajo. 3.1. La muestra La muestra está formada por 713 grupos de sociedades cotizados en el Reino Unido y en España. La muestra descarta las entidades financieras y de seguros, por la especialidad de sus actividades y la posible distorsión que los balances y ratios de estas compañías pueden introducir en nuestro estudio. En el Reino Unido sobre una población de 655 compañías cotizadas hemos seleccionado 581. A este grupo se han añadido 27 compañías del Alternative Investment Market (AIM) para las que existe una disposición transitoria que les habilita a no formular cuentas anuales consolidadas bajos Normas Internacionales de Contabilidad, en cierres anteriores al 1 de enero de 2007. En España, se ha utilizado las compañías cotizadas en el mercado continuo, seleccionándose todas aquellas que, domiciliadas en España, formulasen cuentas anuales consolidadas. La muestra final es de 105 compañías LA REFORMA DEL TRATAMIENTO DE LOS ARRENDAMIENTOS: HACIA UNA REVELACIÓN MÁS ADECUADA DE LOS RECURSOS, COMPROMISOS Y ESTRATEGIA EN LA GESTIÓN DE ACTIVOS DE LA ENTIDAD 98 sobre un total de 111, no disponiéndose de cuentas anuales consolidadas de: CVNE, Española de Zinc, Federico Paternina, Puleva Biotech o siendo rechazadas por ser compañías foráneas: Bayer AG y Reno de Medici. Los principales datos descriptivos agregados de la muestra conjunta y separada por países aparecen en la Tabla 1. Tabla 1. Datos descriptivos de las compañías de la muestra España Reino Unido Total N Media Desv. tip. N Media Desv. tip. N Media Desv. tip. Total activo (en miles de ) 105 5.678.141 12.994.019 608 3.149.480 13.795.935 713 Resultado neto 105 315.959 820.166 608 193.841 1.892.713 713 211.825 1.776.006 Total pasivo 105 4.040.079 9.673.560 608 1.957.825 7.432.804 713 2.264.468 7.830.272 3.521.863 13.701.335 Fuente: elaboración propia Como se puede observar, el valor de los activos en media es superior a las británicas, existiendo una dispersión parecida; asimismo, las compañías españolas presentan un resultado y un nivel de deuda superior a las británicas. Los sectores a los que pertenecen las compañías es una de las cuestiones que no ha resultado sencilla. El sistema de codificación de la Bolsa de Madrid se clasifica en 6 grupos, mientras que el de la Bolsa de Londres en 9. Dado el carácter más internacional de esta última y el mayor número de observaciones a codificar, hemos empleado este último sistema porque introduciría menos errores de apreciación del sector. Por tanto, procedimos a asignar las compañías españolas a cada uno de los 9 grupos en los que se clasifica la actividad en el Reino Unido (anexo 1). En nuestra opinión este es uno de los procesos en los que técnicamente existen dificultades difícilmente subsanables. Un grupo empresarial como Acciona en España ¿debe ser considerada del sector de la Construcción o de Suministros, por su fuerte presencia en el sector eléctrico a través de sus filiales de energía renovable y su participación en Endesa?. Es decir, la diversificación de actividades dificulta la delimitación de los sectores de actividad; por este motivo, la codificación realizada por el propio regulador bursátil nos ofrece un parámetro mejor informado de la actividad relevante y libre de sesgos. 3.2. Las variables Nuestros análisis requerían el empleo de variables de naturaleza cualitativa y cuantitativa. Entre las primeras, se encuentran las que nos permiten identificar el país y el sector de actividad. Entre las segundas, las variables cuantitativas, unas proceden de datos primarios, a saber: el total de activos, el importe del inmovilizado material, los compromisos por arrendamientos operativos a corto plazo y largo plazo, compromisos por arrendamientos financieros a corto y largo plazo, pasivo a corto y largo plazo, resultado neto. Otras proceden de datos secundarios, obtenidos a partir de los anteriores, como son: la proporción de compromisos por arrendamiento operativo sobre el total (financieros y operativos); el peso relativo de los compromisos por arrendamiento operativo a corto y largo sobre la deuda a corto y largo respectivamente; el ratio de rentabilidad LA REFORMA DEL TRATAMIENTO DE LOS ARRENDAMIENTOS: HACIA UNA REVELACIÓN MÁS ADECUADA DE LOS RECURSOS, COMPROMISOS Y ESTRATEGIA EN LA GESTIÓN DE ACTIVOS DE LA ENTIDAD 99 sobre activos y la rentabilidad sobre activos incorporando a éstos los compromisos por arrendamientos operativos; el ratio de endeudamiento y su corrección con la incorporación de los compromisos por arrendamientos operativos, el compromiso total por arrendamientos operativos y su relación con el total de activos (influencia sobre activos) y con el total del inmovilizado material; la diferencia entre el ROA y el ROA corregido y entre el ratio de endeudamiento y su corrección; para finalizar con una estimación de la vida de los arrendamientos obtenida por el cociente del compromisos total entre el compromiso por arrendamiento operativo a corto plazo. Estas variables nos van a permitir dar respuesta a las cuestiones que nos planteamos en el apartado anterior de este trabajo; algunas de ellas no son medidas perfectas, pero nos permiten aproximarnos de una manera razonable. Por ejemplo, los compromisos por arrendamiento operativo aparecen por el valor nominal, lo coherente con la valoración de la deuda y con la propuesta bajo estudio, sería presentarlos actualizados, lo cuál tiene un efecto significativo en los que son a largo plazo. Sin embargo, al igual que propone el documento de trabajo, las cuotas contingentes, referidas a un índice deberían estimarse. En nuestro caso, nuestra opción implica considerar un tipo de descuento real (sin efecto inflacionario) de cero o cercano a cero. Asimismo, nuestra medida de la duración de los arrendamientos, infravalora la misma, dado que supone que los compromisos del primer ejercicio se mantienen constantes a lo largo del tiempo; este escenario no es verosímil, por lo que la medida no nos dará la duración máxima, sino el concepto medio estrictamente hablando. Por el contrario, esta medida descarta los arrendamientos no cancelables en la estimación de la duración de los arrendamientos, lo cual es coherente con la información manejada (de ahí que no consideremos apropiado utilizar el gasto de arrendamiento anual como denominador a la hora de calcular la vida media de los arrendamientos). En este trabajo no hemos utilizado esta última variable al analizar los resultados descriptivos, dado que se ven distorsionados por la presencia de varios outliers (motivados por un valor muy reducido de los compromisos a corto plazo). Por otra parte, el empleo del inmovilizado material nos parece una medida más apropiada del efecto sustitución sobre la inversión en activos productivos, dado que la cifra de total de activos incorpora activos que no son sujetos de arrendamiento, por ejemplo; el circulante o las inversiones financieras y, normalmente los intangibles. 3.3. Los instrumentos estadísticos En este trabajo presentamos los principales resultados descriptivos, así como los contrastes dirigidos a probar nuestras hipótesis. Para probar las hipótesis sobre el efecto de la capitalización en dos variables destacadas del análisis financiero, como son el ROA y el ratio de endeudamiento, utilizamos una tabla ANOVA de un factor. Con esto verificamos si el factor país o sector tiene influencia en alguno de los efectos que tiene la capitalización de los arrendamientos (variables de variación en el ROA y en el ratio de endeudamiento). En segundo lugar pretendemos evaluar algunas características de los arrendamientos y si existen diferencias en razón al factor país y sector. Nos referimos a la proporción de arrendamientos operativos sobre financieros, al volumen de compromisos por arrendamientos operativos ponderado por el factor tamaño de la entidad (total activos) y a la antigüedad de los arrendamientos. En tercer lugar, medimos el efecto de dichos factores, país y sector, sobre la proporción del compromiso sobre el total del inmovilizado material. LA REFORMA DEL TRATAMIENTO DE LOS ARRENDAMIENTOS: HACIA UNA REVELACIÓN MÁS ADECUADA DE LOS RECURSOS, COMPROMISOS Y ESTRATEGIA EN LA GESTIÓN DE ACTIVOS DE LA ENTIDAD 100 4. RESULTADOS El epígrafe de resultados lo vamos a organizar en dos grandes epígrafes. En el primero de ellos presentamos los resultados descriptivos, básicos para conocer las magnitudes del problema que queremos investigar. Posteriormente, tenderemos un epígrafe destinado al contraste de nuestras hipótesis, las cuáles son el eje de los cuestionamientos que nos hemos formulado. 4.1.Resultados descriptivos a) Análisis global de los resultados y por países La capitalización del arrendamiento operativo tendría un efecto notable en los ratios ROA y de endeudamiento de las compañías. El efecto sobre el endeudamiento a largo plazo es evidente, elevándolo en un 312% e incrementando en un 58% el ratio de endeudamiento. Sobre el ROA, la incidencia es más limitada quedándose en el 13%. Estos efectos son más limitados en España y más pronunciados en el Reino Unido. A priori, podemos afirmar que el efecto no es desdeñable desde el punto de vista del analista de los estados financieros. Por otra parte, los datos globales sobre los compromisos por arrendamientos operativos revelan un mayor recurso al arrendamiento operativo que al financiero. Esto es, las empresas valoran en este tipo de contratos la flexibilidad que impone la no recepción de todos los riesgos y ventajas de los activo. Los valores relativos ponen claramente de manifiesto que un 88% de los compromisos por arrendamiento son operativos. Sin embargo, a nivel país observamos un comportamiento diferente; en España el nivel de arrendamientos financieros es proporcionalmente más elevado (el de operativos sobre el total es del 66,62%), los compromisos por operativo superan los procedentes de arrendamientos financieros. Estos resultados son coherentes con parte de la literatura previa que ya advertía del recurso más frecuente al arrendamiento operativo (por cuestiones de flexibilidad en la gestión de los recursos y por una clara mejora de la presentación de la situación financiera). Por otra parte, los resultados muestran que, en media, se incrementaría un 33% el total del Balance (deuda y activos), siendo más acusada la influencia en el reino Unido que en España; si bien también en aquel país observamos comportamientos más heterogéneos que en España (desviaciones típicas notablemente superiores y coeficientes de variación algo más elevados). Finalmente, sobre el inmovilizado material, la diferencia es muy elevada. Los compromisos representan 2,85 veces el valor del inmovilizado material, siendo el comportamiento de España muy diferente al caso británico. En España, los arrendamientos representan una forma complementaria de controlar los recursos de proyección plurianual; en el Reino Unido, los recursos permanentes que gestiona la compañía, los controla por contratos de arrendamiento y no por derechos de propiedad. Estos resultados apuntan a un claro efecto sustitución del arrendamiento como vía para controlar los recursos y para financiar el equipo técnico. LA REFORMA DEL TRATAMIENTO DE LOS ARRENDAMIENTOS: HACIA UNA REVELACIÓN MÁS ADECUADA DE LOS RECURSOS, COMPROMISOS Y ESTRATEGIA EN LA GESTIÓN DE ACTIVOS DE LA ENTIDAD 101 Tabla 2. Resultados descriptivos totales y por países Total España Reino Unido N Media Desv. tip. N Media Desv. tip. N Media Desv. tip. Compromisos por arrendamiento Operativo/total (%) 606 88,48 23,11 32 66,62 35,27 574 89,69 21,65 Diferencia en ROA 613 0,13 0,18 43 0,06 0,11 570 0,14 0,19 Peso relativo del corto 606 0,11 0,48 43 0,04 0,08 563 0,12 0,49 Peso relativo del largo 596 3,12 18,35 43 0,79 3,20 553 3,30 19,02 Peso relativo total 614 0,58 2,45 43 0,13 0,26 571 0,61 2,54 Diferencia en ratio endeudamiento 614 0,58 2,45 43 0,13 0,26 571 0,61 2,54 Influencia sobre activos 614 0,33 1,29 43 0,08 0,18 571 0,35 1,34 Compromiso/inmovilizado Material (%) 609 285,35 1.855,31 43 27,82 49,81 566 304,91 1.923,16 Antiguedad de compromiso 591 46,30 288,42 41 5,73 3,24 550 49,32 298,77 N valido (segun lista) 559 29 530 Fuente: elaboración propia b) Análisis global y por sectores Por sectores de actividad (tablas 3 a 7) podemos resaltar que el ROA varía sustancialmente en los sectores relacionados con servicios al consumidor e inmobiliarias; siendo poco significativo en industrias extractivas, las de materias básicas y las de suministros. Por su parte, el ratio de endeudamiento experimenta un comportamiento muy similar, elevándose un 128% en los servicios al consumidor y tecnología (98%). Nuevamente, las compañías extractivas, de materias básicas y suministros experimentan un impacto menor. En cuanto a la configuración de los arrendamientos, la proporción de financieros sobre el total (inverso al ratio presentado) es muy elevada en el sector de suministros, mientras que los arrendamientos operativos predominan en los sectores relacionados con el consumo, servicios al consumidor y tecnología. El efecto tamaño no parece alterar los cometarios anteriores. Finalmente, el efecto sobre los activos inmovilizados materiales es importante en todos los sectores. El menos afectado es el de suministros, que cuenta con inversiones importantes para desarrollar su actividad, destacando nuevamente los servicios al consumidor (615%) LA REFORMA DEL TRATAMIENTO DE LOS ARRENDAMIENTOS: HACIA UNA REVELACIÓN MÁS ADECUADA DE LOS RECURSOS, COMPROMISOS Y ESTRATEGIA EN LA GESTIÓN DE ACTIVOS DE LA ENTIDAD 102 Tabla 3. Resultados descriptivos por sectores de actividad. Petróleo y gas y materias básicas Total Petróleo y Gas (0) Materias básicas (1) N Media Desv. tip. N Media Desv. tip. N Media Desv. tip. Compromisos por arrendamiento Operativo/total (%) 606 88,48 23,11 22 87,21 21,13 28 81,56 31,74 Diferencia en ROA 613 0,13 0,18 22 0,04 0,08 27 0,03 0,05 Peso relativo del corto 606 0,11 0,48 21 0,06 0,10 26 0,02 0,03 Peso relativo del largo 596 3,12 18,35 21 3,34 14,53 26 0,93 4,33 Peso relativo total 614 0,58 2,45 22 0,22 0,65 27 0,27 1,04 Diferencia en ratio endeudamiento 614 0,58 2,45 22 0,22 0,65 27 0,27 1,04 Influencia sobre activos 614 0,33 1,29 22 0,06 0,13 27 0,04 0,06 Compromiso/inmovilizado Material (%) 609 285,35 1.855,31 21 49,55 178,31 26 95,22 295,92 Antiguedad de compromiso 591 46,30 288,42 21 6,31 4,36 25 16,86 42,01 N valido (segun lista) 559 20 24 Fuente: elaboración propia Tabla 4. Resultados descriptivos por sectores de actividad. Actividad industrial y bienes de consumo Total Actividad Industrial (2) Bienes de consumo (3) N Media Desv. tip. N Media Desv. tip. N Media Desv. tip. Compromisos por arrendamiento Operativo/total (%) 606 88,48 23,11 180 89,75 18,30 64 90,57 19,20 Diferencia en ROA 613 0,13 0,18 182 0,10 0,10 66 0,07 0,10 Peso relativo del corto 606 0,11 0,48 182 0,05 0,08 66 0,04 0,08 Peso relativo del largo 596 3,12 18,35 180 1,18 5,55 65 0,59 1,35 Peso relativo total 614 0,58 2,45 183 0,19 0,30 66 0,22 0,60 Diferencia en ratio endeudamiento 614 0,58 2,45 183 0,19 0,30 66 0,22 0,60 Influencia sobre activos 614 0,33 1,29 183 0,13 0,21 66 0,09 0,17 Compromiso/inmovilizado Material (%) 609 285,35 1.855,31 183 120,29 198,09 66 198,09 1.025,62 Antiguedad de compromiso 591 46,30 288,42 180 16,09 46,80 64 17,95 40,11 N valido (segun lista) 559 Fuente: elaboración propia 171 62 LA REFORMA DEL TRATAMIENTO DE LOS ARRENDAMIENTOS: HACIA UNA REVELACIÓN MÁS ADECUADA DE LOS RECURSOS, COMPROMISOS Y ESTRATEGIA EN LA GESTIÓN DE ACTIVOS DE LA ENTIDAD 103 Tabla 5. Resultados descriptivos por sectores de actividad. Medicina y salud y Servicios al consumidor Total Medicina y Salud (4) Servicios al consumidor (5) N Media Desv. tip. N Media Desv. tip. N Media Desv. tip. Compromisos por arrendamiento Operativo/total (%) 606 88,48 23,11 52 90,19 19,04 137 93,32 17,01 Diferencia en ROA 613 0,13 0,18 52 0,10 0,16 139 0,28 0,26 Peso relativo del corto 606 0,11 0,48 52 0,10 0,25 138 0,18 0,42 Peso relativo del largo 596 3,12 18,35 48 2,36 6,17 139 8,17 35,42 Peso relativo total 614 0,58 2,45 52 0,60 2,33 139 1,28 2,52 Diferencia en ratio endeudamiento 614 0,58 2,45 52 0,60 2,33 139 1,28 2,52 Influencia sobre activos 614 0,33 1,29 52 0,31 1,41 139 0,82 1,84 Compromiso/inmovilizado Material (%) 609 285,35 1.855,31 52 339,43 864,46 138 615,41 3.722,04 Antiguedad de compromiso 591 46,30 288,42 50 31,63 137,14 132 135,81 583,28 N valido (segun lista) 559 47 130 Fuente: elaboración propia Tabla 6. Resultados descriptivos por sectores de actividad. Telecomunicaciones y suministros Total Telecomunicaciones (6) Suministros (7) N Media Desv. tip. N Media Desv. tip. N Media Desv. tip. Compromisos por arrendamiento Operativo/total (%) 606 88,48 23,11 13 78,89 37,42 16 54,71 40,88 Diferencia en ROA 613 0,13 0,18 14 0,07 0,08 16 0,04 0,08 Peso relativo del corto 606 0,11 0,48 14 0,03 0,05 16 0,05 0,14 Peso relativo del largo 596 3,12 18,35 13 0,25 0,36 16 0,10 0,17 Peso relativo total 614 0,58 2,45 14 0,13 0,16 16 0,07 0,16 Diferencia en ratio endeudamiento 614 0,58 2,45 14 0,13 0,16 16 0,07 0,16 Influencia sobre activos 614 0,33 1,29 14 0,08 0,11 16 0,05 0,13 Compromiso/inmovilizado Material (%) 609 285,35 1.855,31 14 41,86 53,23 16 8,90 17,96 Antiguedad de compromiso 591 46,30 288,42 14 22,39 39,46 16 8,51 6,51 N valido (segun lista) 559 Fuente: elaboración propia 11 15 LA REFORMA DEL TRATAMIENTO DE LOS ARRENDAMIENTOS: HACIA UNA REVELACIÓN MÁS ADECUADA DE LOS RECURSOS, COMPROMISOS Y ESTRATEGIA EN LA GESTIÓN DE ACTIVOS DE LA ENTIDAD 104 Tabla 7. Resultados descriptivos por sectores de actividad. Inmobiliarias y Tecnología Total Inmobiliarias (8) Tecnología (9) N Media Desv. tip. N Media Desv. tip. N Media Desv. tip. Compromisos por arrendamiento Operativo/total (%) 606 88,48 23,11 27 65,18 43,51 67 94,43 13,95 Diferencia en ROA 613 0,13 0,18 27 0,16 0,21 68 0,10 0,13 Peso relativo del corto 606 0,11 0,48 24 0,49 1,46 67 0,16 0,89 Peso relativo del largo 596 3,12 18,35 27 1,60 4,10 61 3,56 12,57 Peso relativo total 614 0,58 2,45 27 0,56 1,28 68 0,98 5,84 Diferencia en ratio endeudamiento 614 0,58 2,45 27 0,56 1,28 68 0,98 5,84 Influencia sobre activos 614 0,33 1,29 27 0,40 1,06 68 0,39 2,33 Compromiso/inmovilizado Material (%) 609 285,35 1.855,31 25 341,34 726,58 68 343,14 778,53 Antiguedad de compromiso 591 46,30 288,42 23 66,35 251,71 66 19,41 57,17 N valido (segun lista) 559 21 58 Fuente: elaboración propia En definitiva, por sectores parece apuntarse un efecto sobre los estados financieros diferenciado, una tipología también diferente y finalmente un efecto sustitución también distinto. 4.2.Contraste de hipótesis a) Contraste del efecto sobre los ratios financieros El contraste de nuestras hipótesis sobre la influencia que tiene el factor país sobre el ROA es significativa (se rechaza la hipótesis de igualdad de medias), no así en cuanto al efecto sobre el ratio de endeudamiento (se acepta la hipótesis de igualdad de medias). En el primer caso, el efecto sobre el ROA es más elevado en el Reino Unido que en España (6% en España frente a un 14% en el Reino Unido, véase tabla 2). LA REFORMA DEL TRATAMIENTO DE LOS ARRENDAMIENTOS: HACIA UNA REVELACIÓN MÁS ADECUADA DE LOS RECURSOS, COMPROMISOS Y ESTRATEGIA EN LA GESTIÓN DE ACTIVOS DE LA ENTIDAD 105 Tabla 8. ANOVA de la variación en ratios en función del país Suma de cuadrados Diferencia en ROA Diferencia en ratio de endeudamiento gl Media cuadrática Inter-grupos 0,252 1 0,252 Intra-grupos 20,008 611 0,033 Total 20,259 612 Inter-grupos 9,528 1 9,528 Intra-grupos 3678,122 612 6,010 Total 3687,649 613 F Sig 7,685 0,006 1,585 0,208 Fuente: elaboración propia Por su parte, el factor sector (tabla 9) tiene una influencia significativa en los valores medios del ROA y del ratio de endeudamiento, rechazándose en ambos casos la hipótesis de igualdad de medias. La diferencia es significativa en ambos casos. Tabla 9. ANOVA de la variación en ratios en función del sector Suma de cuadrados Diferencia en ROA Diferencia en ratio de endeudamiento gl Media cuadrática F Sig 18,166 0,000 2,417 0,011 Inter-grupos 4,321 9 0,480 Intra-grupos 15,938 603 0,026 Total 20,259 612 Inter-grupos 128,196 9 14,244 Intra-grupos 3559,454 604 5,893 Total 3687,649 613 Fuente: elaboración propia Estos resultados rechazan las hipótesis H1.1, H1.3, H1.4 de igualdad de medias y son coherentes con los hallazgos de la literatura previa que ya advertían de la influencia que un cambio en la legislación puede tener en la imagen proyectada por los estados financieros y, como derivada de ello, en la toma de decisiones de los analistas. LA REFORMA DEL TRATAMIENTO DE LOS ARRENDAMIENTOS: HACIA UNA REVELACIÓN MÁS ADECUADA DE LOS RECURSOS, COMPROMISOS Y ESTRATEGIA EN LA GESTIÓN DE ACTIVOS DE LA ENTIDAD 106 b) Contraste del efecto sobre la configuración de los arrendamientos El contraste de nuestras hipótesis sobre la influencia que tiene el factor país sobre la configuración de los arrendamientos nos revela que se rechaza la hipótesis H.2.1 (proporción media que supone el arrendamiento operativo sobre el total) de igualdad de medias, siendo muy superior en el Reino Unido sobre el caso español, como ya habíamos apuntado al abordar los resultados descriptivos. Por su parte el compromiso total sobre el volumen de activos, es decir ponderado por el factor tamaño del grupo de sociedades, no se ve afectado por el factor país (se acepta la hipótesis H.2.2), ni tampoco la duración media de los arrendamientos (se acepta la hipótesis de igualdad de medias H.2.3). Tabla 10. ANOVA de la configuración de los arrendamientos en función del país Suma de cuadrados gl Media cuadrática F Sig Operativo/ Total (%) Inter-grupos Intra-grupos Total 16139,260 307100,320 323239,580 1 604 605 16139,260 508,444 31,742 0,000 Influencia sobre activos Inter-grupos Intra-grupos Total 2,812 1023,485 1026,296 1 612 613 2,812 1,672 1,681 0,195 Antigüedad del compromiso Inter-grupos Intra-grupos Total 72510,413 49007515 49080025 1 589 590 72510,413 83204,609 0,871 0,351 F Sig Fuente: elaboración propia Tabla 11. ANOVA de la configuración de los arrendamientos en función del sector Suma de cuadrados gl Media cuadrática Operativo/ Total (%) Inter-grupos Intra-grupos Total 41766,158 281473,423 323239,580 9 596 605 4640,684 472,271 9,826 0,000 Influencia sobre activos Inter-grupos Intra-grupos Total 51,807 974,489 1026,296 9 604 613 5,756 1,613 3,568 0,000 Antigüedad del compromiso Inter-grupos Intra-grupos Total 1427176,1 47652849 49080025 9 581 590 158575,119 82018,673 1,933 0,045 Fuente: elaboración propia La proporción de compromisos por arrendamiento operativo sobre el total de compromisos por arrendamiento depende del sector de actividad, rechazándose la hipótesis H.2.4. Asimismo, la media de influencia sobre LA REFORMA DEL TRATAMIENTO DE LOS ARRENDAMIENTOS: HACIA UNA REVELACIÓN MÁS ADECUADA DE LOS RECURSOS, COMPROMISOS Y ESTRATEGIA EN LA GESTIÓN DE ACTIVOS DE LA ENTIDAD 107 activos varía en función del sector de actividad del grupo (rechazándose la hipótesis H.2.5) y de una forma moderada (significativo al 95%) también la duración de los compromisos varía en función del sector (rechazándose la hipótesis H.2.6). En resumen, el sector tiene una influencia más destacada en la configuración de los arrendamientos que el factor país, que sólo influye en la mayor o menor presencia del arrendamiento operativo sobre el total de arrendamientos. c) Contraste del carácter sustitutivo de los arrendamientos El contraste de nuestras hipótesis sobre el carácter sustitutivo de los arrendamientos respecto a la inversión en inmovilizado no depende ni del factor país (tabla 12) ni del sector (tabla 13). Por lo tanto, se confirman nuestras hipótesis H.3.1 y H.3.2., lo que viene a indicar que no existen diferencias en las políticas de inversiónarrendamiento en razón del país o el sector. Tabla 12. ANOVA del carácter sustitutivo de los arrendamientos en función del país Compromiso/Inmovilizado Material % Suma de cuadrados Inter-grupos Intra-grupos Total 3068383,5 2,09E+009 2,09E+009 gl 1 607 608 Media cuadrática 3068383,5 3442809,3 F Sig 0,891 0,346 F Sig 0,809 0,608 Fuente: elaboración propia Tabla 13. ANOVA del carácter sustitutivo de los arrendamientos en función del sector Compromiso/Inmovilizado Material % Suma de cuadrados Inter-grupos Intra-grupos Total Fuente: elaboración propia 25139610 2,07E+009 2,09E+009 gl 9 599 608 Media cuadrática 2793290,0 3451943,3 LA REFORMA DEL TRATAMIENTO DE LOS ARRENDAMIENTOS: HACIA UNA REVELACIÓN MÁS ADECUADA DE LOS RECURSOS, COMPROMISOS Y ESTRATEGIA EN LA GESTIÓN DE ACTIVOS DE LA ENTIDAD 108 5. CONCLUSIONES La insatisfacción que la regulación sobre arrendamientos causa en algunos países del área anglosajona (Reino Unido y Estados Unidos), fundamentalmente derivada de la omisión de los compromisos firmes que implican los arrendamientos operativos no cancelables, es la causa que ha impulsado el proceso de reforma que el IASB, conjuntamente con el FASB, han iniciado en fechas recientes. Nuestros resultados revelan claramente que la capitalización de los arrendamientos operativos, en línea con las propuestas que se están estudiando, implicaría sobre nuestra muestra de compañías británicas y españolas una disminución del 13% del ROA y un incremento del 58% del ratio de endeudamiento. La diferencia de impacto por países sería significativa en el caso del ROA, no así en el del ratio de endeudamiento. Asimismo, las diferencias por sectores serían significativas tal y como han puesto de manifiesto anteriormente otros estudios (Goodacre, 2001). Por otra parte, las características de los arrendamientos son diferentes por países. Así hemos observado una mayor proporción de compromisos por arrendamiento operativo sobre arrendamientos financieros en el Reino Unido que en España, siendo la diferencia significativa. No obstante, no hemos observado que el volumen de compromisos por arrendamiento operativo ponderado por el tamaño de la compañía sea diferente atendiendo al país, ni que la antigüedad de los arrendamientos esté vinculada al país. Sin embargo sectorialmente, sí existen diferencias en base a esta configuración de los arrendamientos. Finalmente, no hemos observado que existan diferencias atendiendo al país o al sector en la relación de sustitución arrendamientos operativos sobre inmovilizado material. De estas conclusiones podemos extraer que, si bien los factores culturales, asociados al país, tienen un efecto marginal en la estructura de los arrendamientos y en su influencia en algunas variables, dicha diferencia es más acusada atendiendo al sector de actividad. En cuanto a las limitaciones de nuestro estudio, destacaríamos el elevado grado de compañías que en España no revelan (Barral, Gómez y Molina, 2006, 35). Por otra parte, consideramos que una mejora en nuestra línea de trabajo sería valorar el efecto no sólo sobre el pasivo a corto, largo y total, sino sobre el pasivo con coste (pasivo bancario), dado que de emplearse los arrendamientos operativos como forma de financiación es para soslayar la contratación de pasivos con coste. De esta forma evitamos el efecto distorsionador de otros pasivos no negociados (pasivos fiscales, por compromisos por pensiones o deuda comercial). LA REFORMA DEL TRATAMIENTO DE LOS ARRENDAMIENTOS: HACIA UNA REVELACIÓN MÁS ADECUADA DE LOS RECURSOS, COMPROMISOS Y ESTRATEGIA EN LA GESTIÓN DE ACTIVOS DE LA ENTIDAD 109 BIBLIOGRAFÍA ABDULLAH, M. Y ALFAN, E. (2005), “An Insight of Malaysian Companies' Treatment of Leases”, Internacional Review of Business Research Papers, vol. 1, nº 2, pp. 75-83. ACCOUNTING STANDARD BOARD (1992), Discussion Draft: Statement of Principles Chapter 4. The recognition of items in financial statements. Ed. Accountancy books. ALVARADO RIQUELME, M. Y MOLINA SÁNCHEZ, H. (2000), “Algunas reflexiones sobre el tratamiento contable de los arrendamientos”, Actualidad Financiera, nº 5, mayo, pp. 29-42. ASHTON, R. K. (1985), “Accounting for Finance Leases: A Field Test”, Accounting and Business Research, summer, pp. 233-8. BARRAL, A., GÓMEZ, I, MOLINA, H. (2006), “Impacto de la propuesta de reforma internacional sobre arrendamientos”, Revista de AECA, nº 76, pp. 31-38. BEATTIE, V., EDWARDS, K Y GOODACRE, A. (1998), “The impact of constructive operating lease capitalisation on key accounting ratios”. Accounting and Business Research, vol. 28, nº 4, pp. 233-254. BEATTIE, V., EDWARDS, K Y GOODACRE, A. (2000), “Recognition versus Disclosure: An Investigation of the Impact on Equito Risk Using UK Operating Lease Disclosures”. Journal of Business, Finance & Accounting, vol. 27, nº 9-10, pp. 1185-1224. BULLEN Y CROOK (2005), “Revisiting the concepts”. Newsletter IASB/FASB. Mayo. CASTELLÓ TALIANI, E. (1989), Estudio económico de los contratos de leasing y su captación en los informes contables. Ed. ICAC Madrid. DUKE, J. C., FRANZ, D.P, HUNT, H. G. Y TOY, D. R. (2002), “Firm-Specific Determinants of Off-Balance Sheet Leasing: A Test of the Smith/Wakeman Model”. Journal of Business and Management, vol.8, nº 4, pp. 335-353. GOODACRE, A. (2001), “The potencial impact of enforced lease capitalisation in the UK retail sector”. Working paper. University of Stirling. GOODACRE, A. (2003), “Assesing the potencial impact of lease accounting reform: a review of the empirical evidence”. Journal of Property Research, vol 20, nº 1 pp. 49-66. IMHOFF, E. A., LIPE, R. C. Y WRIGHT, D. W. (1991), “Operating Leases: Impact of Constructive Capitalization”. Accounting Horizons, vol. 5, March, pp. 51-63. IMHOFF, E. A., LIPE, R. C. Y WRIGHT, D. W. (1997), “Operating Leases: Income Effects of Constructive Capitalization”. Accounting Horizons, vol. 11, nº 2, pp12-32. INTERNACIONAL ACCOUNTING STANDARD BOARD (IASB) (1997), “Internacional Accounting Standard 17, Leases”. Internacional Financial Reporting Standards 2006, pp. 969-996. Ed. IASB, Londres. INTERNACIONAL ACCOUNTING STANDARD BOARD (IASB) (2006a), IASB Update. March. Ed. IASB, Londres. LA REFORMA DEL TRATAMIENTO DE LOS ARRENDAMIENTOS: HACIA UNA REVELACIÓN MÁS ADECUADA DE LOS RECURSOS, COMPROMISOS Y ESTRATEGIA EN LA GESTIÓN DE ACTIVOS DE LA ENTIDAD 110 INTERNACIONAL ACCOUNTING STANDARD BOARD (IASB) (2006b), IASB Update. April. Ed. IASB, Londres. INTERNACIONAL ACCOUNTING STANDARD BOARD (IASB) (2007A), Amendments to IAS 37 Provisions, Contingent Liabilities and Contingent Assets and IAS 19 Employee Benefits. June. Ed. IASB, Londres. INTERNACIONAL ACCOUNTING STANDARD BOARD (IASB) (2007B), Information for Observers. Board Meeting 22 March 2007. Project: Leases. Identification of assets and liabilities arising in a simple lease (Agenda Paper 12A). Ed. IASB, Londres. INTERNACIONAL ACCOUNTING STANDARD BOARD (IASB) (2007C), Information for Observers. Board Meeting 22 March 2007. Project: Leases. Analysis of different accounting models for a simple lease (Agenda Paper 12B). Ed. IASB, Londres. INTERNACIONAL ACCOUNTING STANDARD BOARD (IASB) (2007D), Information for Observers. Board Meeting 22 March 2007. Project: Leases. History of lease accounting (Agenda Paper 12C). Ed. IASB, Londres. INTERNACIONAL ACCOUNTING STANDARD BOARD (IASB) (2007E), Information for Observers. Board Meeting 22 March 2007. Project: Leases. Academic Research on Lease Accounting (Agenda Paper 12D). Ed. IASB, Londres. MCGREGOR, W. (1996), Accounting for Leases: A New Approach. Recognition by Lessess of Assets and Liabilities Arising under Lease Contracts. Ed. FASB, Norwalk. NAILOR, H. Y LENNARD, A. (2000), Leases: Implementation of a New Approach. Ed. FASB, Norwalk. PINA MARTÍNEZ, V. (1988), Efectos económicos de las normas contables. Ed. AECA, Colección Monografías, nº 11. Madrid. Real Decreto 1643/1990, de 20 de diciembre, por el que se aprueba el Plan General de Contabilidad, publicado en el BOE nº 310, de 27 de diciembre de 1990. Securities and Exchange Commission (SEC) (2005), Report and Recommendations Pursuant to Section 401(c) of the Sarbanes-Oxley Act of 2002 On Arrangements with Off-Balance Sheet Implications, Special P u r p o s e E n t i t i e s a n d Tr a n s p a r e n c y o f F i l i n g s b y I s s u e r s . J a n u a r y. D i s p o n i b l e e n http://www.sec.gov/news/studies/soxoffbalancerpt.pdf. Telefónica de España, S.A., Cuentas Anuales 2005. Disponible en la web www.cnmv.es. LA REFORMA DEL TRATAMIENTO DE LOS ARRENDAMIENTOS: HACIA UNA REVELACIÓN MÁS ADECUADA DE LOS RECURSOS, COMPROMISOS Y ESTRATEGIA EN LA GESTIÓN DE ACTIVOS DE LA ENTIDAD 111 ANEXO 1 Cuadro 1: Sectores de actividad Industria Supersector Sector Subsector 0001 PETRÓLEO Y GAS 0500 Petróleo y gas 0530 Productores de petróleo y gas 0570 Equipo, servicios y distribución de petróleo 1000 MATERIAS BÁSICAS 1300 Químicas 1350 Químicas 1700 Recursos básicos 1730 Silvicultura y papel 0533 Exploración y producción 0537 Petróleo y gas integrados 0573 Equipo y servicios de petróleo 0577 Tubería de distribución 1353 Químicas de mercancía 1357 Químicas especializadas 1733 Silvicultura 1737 Papel 1753 Aluminio 1755 Metales no ferrosos 1757 Acero 1771 Carbón 1773 Diamantes y piedras preciosas 1775 Minería general 1777 Minería de oro 1779 Platino y metales preciosos 2353 Materiales de const. e insta. fijas 2357 Construcción pesada 2713 Aerospacial 2717 Defensa 2723 Envases y embalaje 2727 Actividad instrial diversificada 2733 Componentes y equipos eléctricos 2737 Equipo electrónico 2753 Vehículos y camiones comerciales 2757 Maquinaria industrial 2771 Servicios de entrega 2773 Transporte marítimo 2775 Vías férreas 2777 Servcios de transporte 2779 Transporte por camión 2791 Servicios de apoyo empresarial 2793 Agencias de formación empresarial 2795 Administración financiera 2797 Suministradores insdustriales 2799 Servicios de recogida de desechos 3353 Automóviles 3355 Piezas de automóviles 3357 Neumáticos 3533 Cervecerías y sidrerías 3535 Destilerías y vinateros 3537 Bebidas no alcohólicas 3573 Agricultura, ganadería e ind. pesquera 3577 Alimentos 3722 Productos domésticos duraderos 3724 Productos domésticos perecederos 3726 Mobiliario 3728 Construcción de domicilios 3743 Artículos electrónicos de consumo 3745 Productos de ocio 3747 Juguetes 3763 Ropa y accesorios 3765 calzado 3767 Productos personales 3785 Tabaco 1750 Metales industriales 1770 Minería 2000 ACTIVIDAD INDUSTRIAL 2300 Construcción y materiales 2700 Bienes y servicios industriales 2300 Construcción y materiales 2710 Aerospacial y defensa 2720 Actividad industrial general 2730 Equipo electrónico y eléctrico 2750 Ingeniería industrial 2770 Transporte industrial 2790 Servicios de apoyo 3000 BIENES DE CONSUMO 3300 Automóviles y piezas 3350 Automóviles y piezas 3500 Alimentación y bebidas 3530 Bebidas 3570 Productores de alimentos 3700 Bienes personales y domésticos 3720 Bienes domésticos 3740 Bienes de ocio 3760 Bienes personales 3780 Tabaco LA REFORMA DEL TRATAMIENTO DE LOS ARRENDAMIENTOS: HACIA UNA REVELACIÓN MÁS ADECUADA DE LOS RECURSOS, COMPROMISOS Y ESTRATEGIA EN LA GESTIÓN DE ACTIVOS DE LA ENTIDAD 112 Cuadro 2: Sectores de actividad (continuación) Industria Supersector Sector Subsector 4000 MEDICINA Y SALUD 4500 Medicina y salud 4530 Servicios y equipos de asistencia técnica 4533 Proveedores de asistencia médica 4535 Equipo médico 4537 Provisiones médicas 4573 Biotecnología 4577 Fármacos 5333 Minoristas de medicamentos 5337 Minoristas y mayoristas de alimentos 5371 Minoristas de ropa 5373 Minoristas diversificados 5375 Minoristas de material de bricolaje 5377 Servicios al consumidor especializados 5379 Minoristas especializadas 5553 Programación y entretenimiento 5555 Agencias publicitarias 5557 Publicación 5751 Líneas aéreas 5752 Juego 5753 Hostelería 5755 Servicios de ocio 5757 Bares y restaurantes 5759 Viaje y turismo 6535 Telecomunicaciones de linea fija 6575 Telecomunicaciones sin hilos 7535 Electricidad 7573 Distribución de gas 7575 Multiutilidades 7577 Agua 8355 Bancos 8532 Seguros diversificados 8534 Brokers de seguros 8536 Seguros multi-riesgo 8538 Reaseguros 8575 Seguros de vida 8733 Inversión y desarrollo inmobiliario 8737 Sociedades de inversión inmobiliaria 8771 Gerentes de fondos 8773 Finanzas para el consumidor 8775 Finanzas especializadas 8777 Servicios de inversión 8779 Hipotecarios 8985 Instrumentos de inver. en sociedades 4570 Fármacos y biotecnología 5300 Venta al por menor 5330 Minoristas de alimentos y medicamentos 5370 Minoristas generales 5500 Medios de comunicación 5550 Medios de comunicación 5700 Viaje y ocio 5750 Viaje y ocio 6000 TELECOMUNICACIONES 6500 Telecomunicaciones 7000 UTILIDADES 7500 Utilidades 6530 Telecom. de linea fija 6570 Telecom. sin hilos 7530 Electricidad 7570 Gas, agua y multiutilidades 8000 FINANZAS 8300 Bancos 8500 Seguros 8350 Bancos 8530 Seguros salvo seguros de vida 5000 SERVICIOS AL CONSUMIDOR 8700 Servicios financieros 8570 Seguros de vida 8730 Inmobiliaria 8770 Financieros diversos 9000 TECNOLOGÍA 9500 Tecnología 8980 Instrumentos de inversión corporativa 8990 Instrumentos de inversión no corporativa 9530 Software y servicios informáticos 9570 Hardware y equipo tecnológico Fuente: Industry Classification Benchmark 8995 Instrumentos de inver. no corporativa 9533 Servicios informáticos 9535 Internet 9537 Software 9572 Hardware informático 9574 Equipo electrónico de oficina 9576 Semiconductores 9578 Equipo de telecomunicación ASEPUC ETEA Sede en Córdoba: C/ Escritor Castilla Aguayo 4 - 14004 Córdoba - Tlf.: 957 222 100 - Fax: 957 222 182 - lgodoy@etea.com - www.etea.com