La demarcación entonativa y el énfasis en la locución de los editores de boletines informativos radiofónicos Carme de-la-Mota1,2 y Emma Rodero2 Universitat Autònoma de Barcelona1, Universitat Pompeu Fabra2 1. INTRODUCCIÓN La eficacia de la comunicación radiofónica se sustenta en buena parte en el manejo de la prosodia como soporte de expresión fundamental de los contenidos en el medio. La prosodia es un factor determinante tanto de la atención como de la comprensión de un oyente y contribuye de forma decisiva a estructurar el discurso (Hirschberg y Pierrehumbert 1986; Elordieta y Romera, 2004). Esta consideración resulta particularmente relevante en el caso de los informativos radiofónicos, al ser contenidos que se basan en datos íntegramente presentados a través de la voz, que reclaman atención y presentan altos índices de audiencia. Sin embargo, a pesar de su importancia, pocas son las investigaciones empíricas que se han realizado en torno a la entonación de los locutores de radio. Por tanto, el objetivo de esta investigación es estudiar las manifestaciones acústicas de las principales peculiaridades prosódicas que se observan frecuentemente en la locución radiofónica, en especial con relación al realce de formas enfatizadas, al acento y a los patrones tonales circunflejos en la entonación demarcativa. En los trabajos de revisión sobre lenguaje radiofónico y en las escasas investigaciones experimentales realizadas sobre el tema se coincide en señalar la tendencia de los locutores de informativos a reproducir una melodía constante y regular denominada en la profesión cantinela o tonillo. Los aspectos fónicos que caracterizan esta peculiaridad prosódica de los medos producen una sensación de énfasis constante debido a la necesidad, asumida por el locutor, de remarcar algunas secuencias (Strangert, 2005). De todos modos, como indica Navarro Tomás (1944 [1974]:164), “el énfasis se sirve […] del reforzamiento articulatorio de los sonidos, de la intensificación del acento y de la elevación del tono”. Cantero et al (2005:39) lo consideran “un fenómeno multifactorial, caracterizado por la concurrencia de múltiples rasgos (melódicos y no melódicos)”. Efectivamente, en los llamados “procedimientos de intensificación” se usan “recursos prosódicos junto a recursos fónicos segmentales tales como los alargamientos o las relajaciones intencionadas” (Hidalgo, 1997; Hidalgo, 2002; Albelda, 2005). Los recursos fónicos para enfatizar un pasaje (modificaciones segmentales, variaciones de la cualidad de la voz y prosodia) “pueden ser empleados de forma combinada” (Machuca y de-la-Mota, 2006). En principio, los principales manuales radiofónicos convienen en señalar que la reproducción constante, excesiva, de patrones enfáticos o con una cantinela no resulta aconsejable. Tubau (1993: 45) asegura: “los buenos profesionales de la locución no lo hacen; sí suelen hacerlo los periodistas que no saben leer”. Igualmente duro es Arias Ruiz (1964: 399) 1 cuando afirma: “Un locutor que no sea capaz de leer dando al oyente la completa sensación de que está charlando con él y contándole una cosa, puede despedirse de la profesión”. Los libros de estilo de radio y televisión recogen sucintamente estas características prosódicas como defectos que se deben evitar1. Entre ellos, el Libro de estilo de Telemadrid describe entre los “vicios” más frecuentes el dejo, el tonillo, el desentono, la monotonía y la afectación, y presta especial atención a la “modulación desagradable de la voz al fin de las palabras o las frases” y a “la repetición constante de un mismo movimiento entonativo”. También en el Libro de Estilo de Canal Sur se indica que “la monotonía, la falta de cadencia, los sonsonetes y las dislocaciones acentuales provocan confusión” y no son adecuadas al discurso periodístico, “cuyas características principales son la naturalidad y la claridad”. Por último, la Guía de Estilo de Onda Cero recomienda que “se debe evitar la lectura monocorde y repetitiva”. Por otro lado, los resultados de experimentos llevados a cabo previamente para el español (Rodero y Campos, 2005; Rodero, 2007; Hualde, 2006) indican que se reproducen unos patrones acentuales característicos y una melodía peculiar, también observada en otras lenguas (Nihalani y Lin, 1998; Dainora, 2002), a los que se presta escasa atención en los materiales de enseñanza de la pronunciación (Carbó et al., 2003). Así, los estudios de Rodero han demostrado que el análisis de las junturas internas y terminales de los locutores de informativos en televisión revela el uso de movimientos tonales circunflejos (Rodero, 2005 y Rodero, 2006). Además, el análisis de cinco diferentes modelos de entonación en los informativos de radio sometidos a la evaluación de una muestra de sujetos demostró que el modelo con movimiento circunflejo sólo obtuvo un 18% de valoración (Rodero, 2007). Los sujetos experimentales lo calificaron como: tipo de entonación que no es seria, cantada, como un pregón, es un cántico, un soniquete, un tonillo, es ridícula. En definitiva, estas razones avalan la necesidad de realizar una investigación empírica sobre la demarcación enfática que los locutores de informativos de radio emplean en sus presentaciones y contribuir con ello a caracterizar la singularidad de la variante lingüística de los medios audiovisuales. 2. METODOLOGÍA La investigación se sustenta en una metodología experimental para la que se trabaja con un corpus compuesto por las grabaciones de 24 boletines radiofónicos obtenidos de RNE, Cadena SER, Cadena COPE y Onda Cero (que forman parte de un corpus mayor integrado por 60 boletines), distribuidos en seis por cada cadena en horarios de mañana, tarde y noche para 1 Para una revisión del tema, véase Alcoba (coord.), 2009. 2 obtener la suficiente variedad de hablantes. De cada uno de ellos, se han segmentado las muestras correspondientes a la intervención de los editores, es decir, de los presentadores de los boletines, con una media de análisis de un minuto y medio por cada boletín. Para mantener la paridad de género, la mitad del corpus está producida por hablantes femeninos y la otra mitad por hablantes masculinos. Una vez obtenido, el corpus se ha analizado mediante el programa de análisis acústico Praat (Boersma y Weenink, 2009). Para el análisis de los contornos nucleares circunflejos se han tomado en consideración los siguientes valores: (a) punto de inicio de la sílaba acentuada, (b) punto final de la vocal acentuada, (c) punto final de la sílaba acentuada, si la hay, y (d) punto y valor de la frecuencia fundamental (f0) del primer valle, del pico y del último valle. Las configuraciones tonales que preceden a las junturas entre unidades prosódicas se han etiquetado con el sistema ToBI y se han analizado dentro del modelo métrico-autosegmental. 3. RESULTADOS Entre los aspectos fónicos que contribuyen a dotar a la locución de una sensación de énfasis constante y que, por tanto, se asocian a la denominada cantinela, cabe destacar, en primer lugar, el realce de acentos primarios con pico no desplazado (en foco estrecho, como en “No se ha producido NINGUNA petición de documentación”, RNE, 10-08-09, 18 h), en segundo lugar, una sobreacentuación que da lugar a la creación de acentos secundarios (“Desde las agencias de viaje alemanas”, Onda Cero, 10-08-09, 19 h) y, por último, la demarcación enfática de las unidades prosódicas, especialmente llamativa en tonos ascendentes o circunflejos (es decir, con un contorno ascendente-descendente). A continuación se describen algunas de las características de la demarcación enfática para pasar a continuación, al análisis de los contornos nucleares circunflejos en oraciones declarativas. 3.1. Aspectos fónicos de la demarcación enfática La demarcación enfática en radio se pone de manifiesto especialmente en los inicios, en los tonos delimitadores ascendentes y sostenidos, en el habla entrecortada y en el uso de tonos nucleares circunflejos en oraciones declarativas. 3.1.1. Demarcación de inicios. En posición inicial de unidad entonativa de orden mayor se observa (aunque no necesariamente de forma conjunta) un aumento de intensidad, un inicio agudo que supone una resituación del tono (reset), un aumento de la velocidad de elocución del pasaje (especialmente un inicio rápido en anacrusis) y, en ocasiones, un alargamiento de la sílaba inicial (Cruttenden, 1986; Chafe, 1987; Nihalani y Tay Po Lin, 1998; Mora y Cavé, 2000; 3 Aguilar et al., 2002). En la Figura 1 se aporta un ejemplo en el que, tras una inspiración audible, se produce una resituación del tono y un aumento de la velocidad de elocución. Figura 1: Oscilograma, espectrograma de banda ancha y contorno de F0 (en azul) de la secuencia “…constitucional Manuel Celaya. Y los mercados inician la semana…” (RNE, 10-08-09,18 h) 3.1.2. Tono ascendente agudo. Al finalizar la frase intermedia (ip) es frecuente en español que se produzca un ascenso progresivo del tono que incluye el último acento (continuation rise). En los casos de demarcación enfática el tono alcanzado es particularmente agudo para la tesitura del hablante (véase la Figura 2). Figura 2: Oscilograma, espectrograma de banda ancha y contorno de F0 (en azul) de la secuencia “El primer teniente de alcalde de Palma” (Onda Cero, 10-08-09, 10 h) 3.1.3. Tono sostenido con alargamiento. Aunque menos frecuente en español, la frase intermedia (ip) puede finalizar con un tono sostenido (sustained pitch). Resulta una estrategia habitual en algunos locutores, que lo producen con un alargamiento que afecta también, si los hay, a los sonidos sordos en posición de coda. Obsérvese el final de “tormentas” en la Figura 3. 4 Figura 3: Oscilograma, espectrograma de banda ancha y contorno de F0 (en azul) de la secuencia “En cuanto al tiempo, hoy seguirán las tormentas… en buena parte del país.” (COPE, 10-08-09, 10 h) 3.1.4. Habla entrecortada. La pronunciación continuada de grupos acentuales en unidades entonativas distintas provoca la sensación de que el habla queda entrecortada, ya que las unidades quedan formadas, de forma repetida, por unas pocas sílabas. Este es el caso de la secuencia que se ilustra en la Figura 4: “Salimos - al exterior. - Cinco - personas…”, en la que los tonos de juntura delimitan cuatro unidades. Figura 4: Oscilograma, espectrograma de banda ancha y contorno de F0 (en azul) de la secuencia “Salimos al exterior. Cinco personas…” (COPE, 10-08-09, 10 h) 3.2. Los contornos demarcativos circunflejos ascendentes-descendentes En el estilo radiofónico los contornos circunflejos pueden emplearse al final de una oración declarativa para destacar el cierre de una secuencia amplia. A modo de ejemplo, puede observarse que la palabra protestas de la Figura 5 termina con un ascenso que culmina en la sílaba tónica seguido de un descenso que se realiza en la postónica. 5 Figura 5: Oscilograma, espectrograma de banda ancha y contorno de F0 (en azul) de la secuencia “…la peor parte durante las protestas. Informa Paco Pelegrín.” (COPE, 29-12-09, 12 h) De los 110 casos de contornos circunflejos que conforman el corpus de análisis, 89 (un 80,9%) se encuentran en posición final de declarativa. Los 21 restantes se encuentran realzando elementos en foco estrecho o, menos frecuentemente, ante subordinadas o incisos aclaratorios. El contorno puede analizarse como un tono complejo ascendente L+H* seguido de un tono de frontera bajo L%. A continuación se presenta el resultado del estudio de la alineación del valle con el que se inicia el acento bitonal y del pico que corresponde al tono alto del acento. Tomados todos los casos conjuntamente, el valle inicial se encuentra antes del inicio de la sílaba acentuada en el 87,27% de casos, a unos 30 ms (n=110; 30,22 ms; d.e.=41,76), aunque existe un cierto margen para su ubicación (probablemente debido al contexto prevocálico). Si se examinan únicamente los 89 contornos que aparecen en posición final se observa que el movimiento ascendente se inicia a 29,74 ms de media (d.e.=42,19). No existe una diferencia significativa en el comportamiento de los contornos finales y los no finales en cuanto al momento de inicio del ascenso (ANOVA: F=,061; p=,805). Si se examinan los 110 casos de circunflejos conjuntamente, se observa que el pico de f0 aparece antes de que finalice la vocal acentuada en 92 casos (el 83,64% de las ocasiones). Tomando en consideración el tiempo que media entre el inicio de la sílaba y el final de la vocal puede calcularse el porcentaje de proximidad que presenta la posición del pico con respecto al final vocálico. En esa mayoría de 92 casos, el pico dista un 29,2% (d.e.=20,45) de la duración con relación al final de la vocal. Los 89 contornos que aparecen en posición final presentan también el pico antes del límite de la vocal en el 85,39% de casos. La distancia del pico al final de la vocal no distingue tampoco los contornos circunflejos finales y no finales (ANOVA: F=2,069; p=,153). El análisis de los contornos finales indica que la posición del pico depende más de la posición del límite vocálico que de la existencia de una coda silábica. En los casos en los que no 6 hay coda (que son 52), el pico está a una media de 35,89 ms antes del final de la vocal que cierra la sílaba (d.e.=38,74). De los 10 casos que presentan una coda sorda únicamente en uno (producido con una velocidad de elocución elevada) se observa el pico en la sílaba siguiente. En los demás el pico aparece antes de que finalice la vocal. Los 27 casos con coda sonora presentan el pico 30,68 ms (d.e.=53,17) antes del final de la vocal acentuada y a 98,57 ms (d.e.=61,70) del linde silábico. El 70,37% de ellos presenta el pico antes del final de la vocal. Considerados conjuntamente los 110 casos del corpus, no se observan diferencias significativas en cuanto a la posición del pico en función de si existe o no coda en la sílaba acentuada y de su sonoridad (ANOVA: F=,258; p=,773). Al considerar solo los contornos finales no se observan tampoco diferencias significativas (ANOVA: F=,228; p=,789). El movimiento ascendente-descendente puede describirse (aunque las frecuencias de los hablantes no estén normalizadas), como un contorno melódico circunflejo que se inicia, para las voces masculinas (n=62) a 115 Hz de media (d.e.=14), asciende hasta 175Hz (d.e.=26) y desciende hasta los 105Hz (d.e.=17). En las locutoras se inica a una media de 158 Hz (d.e.=17), asciende hasta los 224 Hz de media (d.e.=32) y desciende hasta los 161 Hz (d.e.=21). En la Figura 6 se pueden observar los esquemas que corresponden al contorno. A la izquierda se presenta el contorno fonético obtenido a partir de los resultados del presente experimento. A la derecha, el gráfico que corresponde a la abstracción de la configuración tonal fonológica (Prieto y Roseano, en prensa). 30 30 L sílaba acentuada + H* L% L + H* L% Figura 6: Representación esquemàtica del tono circunflejo L+H* L% El contorno circunflejo L+H* L% está documentado en español peninsular en posición nuclear en oraciones de diverso tipo, especialmente en oraciones exclamativas, en imperativas y en interrogativas exclamativas Qu-. Navarro Tomás (1944 [1974]:159) atribuye al circunflejo un carácter emocional, aunque también observa que puede darse en discursos persuasivos. Su uso en declarativas parece ser más limitado y aparece en el elemento realzado de las oraciones con foco estrecho (Cfr. de-la-Mota, 1995; Face, 2001; Estebas-Vilaplana y Prieto, 2008). Los circunflejos en posición nuclear están presente en diversas variedades de español: canario, cántabro, chileno, mexicano, quiteño… y aparecen, según variedades, en oraciones declarativas con foco estrecho, en oraciones declarativas con foco neutro, en interrogativas exclamativas Qu, 7 en interrogativas imperativas Qu-, etc. (Cfr. Quilis, 1993; Sosa, 1999; Martín Butragueño, 2004 y los trabajos sobre distintas variantes que se presentan en Prieto y Roseano (en prensa). El uso del contorno circunflejo nuclear en oraciones declarativas se considera frecuente y propio de los programas informativos de radio y televisión (Seco, 1990; Casado Velarde, 1995). En tales casos se emplea con finalidad demarcativa un tono de juntura final grave para cerrar de forma evidente una unidad entonativa mayor en el discurso. Se constata un uso frecuente del contorno circunflejo al final de oraciones en las que se emplean varias unidades entonativas delimitadas con tonos ascendentes o sostenidos fuertemente marcados, incluso separados por pausas. Su empleo como cierre de unidades entonativas mayores en declarativas puede resultar efectivo para identificar el final de una unidad temática y sintáctica ante la llegada de la siguiente y podría ser una estrategia para indicar un cambio de paratono o macrounidad prosódica (Cfr. Fox, 1973; Hidalgo, 2006). Su uso repetitivo, en cambio, además de desagradable puede resultar problemático. A este respecto se pronuncia Garrido (1994:188) cuando indica que los oyentes muestran rechazo si “el hablante marca indebidamente todos los finales de grupo fónico como ascendentes o con una pauta característica (por ejemplo, ascendente-descendente), independientemente de su naturaleza.” Esto es así, según advierte, porque “no sirven para identificar el tipo de grupo fónico dentro de su pauta de entonación”. 4. CONCLUSIONES Buena parte de la peculiar melodía que se atribuye a la locución de informativos en radio se produce al emplear con frecuencia estrategias que generan énfasis, probablemente debido a la necesidad de mantener viva la atención del oyente. Entre estas estrategias se observa el realce de acentos primarios con pico no desplazado, la sobreacentuación que da lugar a la creación de acentos secundarios y la demarcación enfática de las unidades prosódicas. La demarcación enfática es frecuente en los inicios de unidades prosódicas mayores, en tonos de frontera ascendentes o sostenidos, en el habla entrecortada que resalta los grupos acentuales y en el uso de contornos circunflejos de cierre. El contorno circunflejo L+H* L% en posición final puede analizarse como la combinación de un acento nuclear ascendente en el que el tono alto está alineado con la sílaba tónica seguido de un tono de frontera bajo que determina el final descendente. En este contorno el valle suele alinearse cerca del inicio de la sílaba tónica y el pico se alinea antes del final de la vocal tónica (sin que se observe una especial incidencia por el hecho de que exista una coda). Las configuraciones nucleares circunflejas L+H* L% se emplean, en este contexto, para el cierre de unidades entonativas superiores ante la proliferación de unidades entonativas breves en las que se destaca el grupo acentual y es plausible también su uso para la finalización de paratonos. Dada su frecuente aparición en contextos de cierre, cabe preguntarse hasta qué punto 8 y en qué contextos el uso de los contornos circunflejos resulta o no comunicativo para delimitar unidades menores con valor de continuación. 5. BIBLIOGRAFÍA Aguilar, Lourdes, Santiago Alcoba, Carme Carbó y María Jesús Machuca (2002): “Los marcadores discursivos en la lengua oral informativa”. Congreso Internacional de Análisis del discurso: lengua, cultura y valores, Pamplona. Albelda, Marta (2005): La intensificación en el español coloquial. Valencia: Servicio de Publicaciones de la Universitat de València, CD-Rom. Tesis doctoral disponible en: http://www.tdx.cat/TDX0701105-125232. Alcoba, Santiago (coord.) (2009): Lengua, comunicación y Libro de Estilo. Edición digital. Disponible en: http://dfe.uab.es/dfeblog/salcoba/files/2009/07/libro_estilo_alcoba.pdf. Arias Ruiz, Aníbal (1964): Radiofonismo. Conceptos para una radiodifusión española. Madrid: A. Vasallo. Allas, José María y Luis Carlos Díaz (coords.) (2004): Libro de Estilo de Canal Sur y Canal 2 Andalucía. Sevilla: RTVA. Disponible en: http://www.canalsur.es/resources/archivos/2010/3/22/1269268079994LibrodeestiloCanalSur.pdf Boersma, Paul y David Weenink (2009): Praat: doing phonetics by computer [Programa]. Disponible en: http://www.praat.org. Cantero, Francisco José, Raúl Alfonso, Marta Bartolí, Anna Corrales y Maribel Vidal (2005): “Rasgos melódicos de énfasis en español”. Phonica 1: 1-40. Disponible en: http:/www.ub.es/lfa Carbó, Carme, Joaquim Llisterri, María Jesús Machuca, Carme de-la-Mota, Montserrat Riera y Antonio Ríos (2003): "Estándar oral y enseñanza de la pronunciación del español como primera lengua y como lengua extranjera". ELUA, Estudios de Lingüística de la Universidad de Alicante 17: 161-180. Casado, Manuel (1995): El lenguaje de los medios de comunicación. La lengua española, hoy. Madrid: Fundación Juan March. Cruttenden, Alan (1986): Intonation. New York: Cambridge University Press. Chafe, Wallace L. (1993): “Prosodic and functional units of language”. En Edwards, Jane Anne y Martin Lampert (1992: 33-42). Dainora, Audra (2002): “Modeling intonation in English: a probabilistic approach to phonological competence”. LabPhon 8: Eighth Conference on Laboratory Phonology, New Haven, Connecticut, 107-132. de-la-Mota, Carme (1995). “La representación gramatical de la información nueva en el discurso”. Tesis doctoral, Universitat Autònoma de Barcelona. Publicación electrónica, 2008. Disponible en: http://www.tesisenred.net/TDX-0331108-112911. Elordieta, Gorka y Magdalena Romera (2004): Estudio experimental de las unidades prosódicas del discurso y sus funciones. Círculo de lingüística aplicada a la comunicación, 18. Estebas-Vilaplana, Eva y Pilar Prieto (2008). “La notación prosódica del español: una revisión del Sp_ToBI”. Estudios de Fonética Experimental 17: 265-283. Fox, Anthony (1973). “Tone sequences in English”. Archivum Linguisticum 4: 17-26. Garrido, Joaquín (1994): Idioma e Información. La lengua española de la comunicación. Barcelona: Síntesis. 9 Hidalgo, A. (1997): Entonación coloquial. Función demarcativa y unidades de habla. Valencia, Anejo XXI de Cuadernos de Filología, Universitat de València. Hidalgo, A. (2002): Comentario fónico de textos coloquiales. Madrid: Arco/Libros. Hidalgo, Antonio (2006): “Estructura e interpretación en la conversación coloquial: El papel del componente prosódico”. Revista de Filología de la Universidad de la Laguna 24: 129-151. Hirschberg, Julia y Janet Pierrehumbert (1986). “Intonational structuring of discourse”. Proceedings of 24th meeting of the association for computational linguistics. Nueva York: 136-144. Hualde, José Ignacio (2006): “Stress removal and stress addition in Spanish”. Journal of Portuguese Linguistics 5 (2): 59-89. Machuca, María y Carme de-la-Mota (2006): “Estrategias pragmalingüísticas orales: El énfasis en la publicidad”. Actas del XXXV Simposio Internacional de la SEL (Ed. por M. Villayandre Llamazares). Universidad de León. Madero, Félix et al. (1996): Guía de estilo de Onda Cero Radio. Madrid: Onda Cero. Martín Butragueño, Pedro (2004). “Configuraciones circunflejas en la entonación del español mexicano”. Revista de Filología Española 84(2): 347-373. Mora, Elsa y Christian Cavé (2000): “Fronteras internas y externas: límites de palabras y de unidades entonativas”. Entre Lenguas 5 (2):118-127. Navarro Tomás, Tomás (1944): Manual de entonación española. Nueva York: Hispanic Institute. 4ª ed.: Madrid: Guadarrama (Punto Omega, 175), 1974. Nihalani, Paroo y Tai Po Lin (1998): “Intonation patterns in news broadcasts”. World Englishes 17(1): 15-29. Prieto, Pilar y Paolo Roseano (eds.) (en prensa): “Transcription of Intonation of the Spanish Language”. Lincom Europa: Múnich. Quilis, Antonio (1993): Tratado de fonética y fonología españolas. Madrid: Gredos. Rodero, Emma (2006): “Analysis of intonation in news presentation on television”, Experimental Linguistics, Universidad de Atenas: 209-213. Rodero, Emma (2007): “Caracterización de una correcta locución informativa en los mensajes audiovisuales”. Estudios del mensaje periodístico 13: 523-542. Rodero, Emma y Gloria Campos (2005): “Las voces de los presentadores de informativos en televisión”. Revista Comunicar. Revista Científica Iberoamericana de Comunicación y Educación, 25. Seco, Manuel (1990): "Los periodistas ante el idioma". En Asociación de la Prensa de Zaragoza, Zaragoza. Sosa, José Manuel (1999): La entonación del español. Su estructura fónica, variabilidad y dialectología. Madrid: Cátedra. Strangert, Eva (2005): “Prosody in public speech: analyses of a news announcement and a political interview”, INTERSPEECH 2005. Lisboa, 3401-3404. TeleMadrid (1993): Libro de Estilo. Madrid: TeleMadrid. Tubau, Iván (1993): Periodismo Oral. Hablar y escribir para radio y televisión. Barcelona: Paidós. 10