guía del consumidor - Asociación General de Consumidores

GUÍA DEL CONSUMIDOR
SÉ AUTÉNTICO
www.asgeco.org/consumeoriginal/
#ConsumeOriginal
SÉ AUTÉNTICO
CONSECUENCIAS DIRECTAS PARA EL CONSUMIDOR
Riesgos para la salud: Las falsificaciones, imitaciones y copias se elaboran sin licen-
Las falsificaciones no son un fenómeno nuevo, pero en los últimos años la producción y
cia ni control sanitario, con materiales de mala calidad e incluso prohibidos en
la Unión Europea (UE). En medicamentos, además, se desconoce la composición real
del producto, y sus efectos en la salud de quienes lo toman.
comercialización de falsificaciones, copias e imitaciones se ha disparado.
Perjuicios económicos: La adquisición de productos falsos o de imitación afecta
Los consumidores, de forma consciente o inconsciente, colaboran con el desarrollo
de estas actividades, poniendo en riesgo su seguridad, su salud y sus derechos. La
adquisición de estos productos conlleva también gravísimos efectos socioeconómicos
económicamente al consumidor al hacer inviable exigencias en cuanto a devoluciones, garantías, reparaciones y, lo más importante, al resarcimiento y la responsabilidad en caso de que el producto ocasione algún daño y/o perjuicio.
Derecho a la información: La información del etiquetado de estos productos presenta, habitualmente, deficiencias en cuanto a componentes, idioma, datos identificativos del fabricante, etc. Además, se desconocen los componentes reales de estos
productos, por lo que no se dispone de una información veraz y completa.
que afectan desde el medioambiente hasta el empleo y los derechos laborales.
CONSECUENCIAS SOCIOECONÓMICAS
Los consumidores tienen clara la motivación y también los posibles perjuicios al adquirir
productos tradicionalmente falsificados, pero no así con sectores tales como Cosmética,
Medicamentos, Juguetes y Recambios.
El consumidor tiende a minimizar las consecuencias pensando que sólo perjudican
a marcas famosas y grandes corporaciones, pero no analiza de forma real todo lo
que implica:
• Destrucción de los puestos de trabajo que se generan con la concepción,
fabricación, distribución y venta de un producto original.
Por ello, queremos poner de manifiesto los problemas, consecuencias, riesgos y efectos
• Menor recaudación vía impuestos, lo que repercute en el deterioro de los
servicios sociales o de interés general.
menos percibidos tanto para el propio consumidor como para toda la sociedad en
• Freno a la inversión en I+D.
conjunto a través de esta guía, y de la web www.asgeco.org/consumeoriginal.
• Dificulta que empresarios y empresas puedan subsistir.
• Ayuda a perpetuar condiciones laborales indeseables.
• Fomenta a financiar redes del crimen organizado.
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AMENAZA LA SALUD
Y LA SEGURIDAD
DE LOS CONSUMIDORES
COSMÉTICOS
PRODUCTOS DE CUIDADO PERSONAL
Todos utilizamos cosméticos y productos de cuidado personal, por ello este
sector es uno de los grandes pilares del consumo y de la economía. Al afectar a
algo tan importante como la salud e higiene, las garantías y los controles en
la fabricación de estos productos se convierten en una cuestión de responsabilidad social.
Las falsificaciones de cosméticos pueden ser encontradas en tiendas no oficiales, online o en mercadillos, y presentarse como originales robados o extraviados, llevando a engaño a los consumidores. Por su parte, las imitaciones
son fácilmente reconocibles, ya que la simulación del producto original está
basada fundamentalmente en el diseño, y a simple vista es posible detectar las
diferencias con el producto original.
DETECTAR UN COSMÉTICO FALSO
Un cosmético falso requiere de una observación minuciosa para poder identificarlo,
pero no así una imitación:
• Verificar que los envases siguen la línea del resto de productos de la marca.
• Las principales compañías tienen tutoriales para detectarlos o permiten que el
producto dudoso se envíe al laboratorio.
• Estos productos suelen tener olores desvirtuados o excesivamente fuertes.
• Al usarlos la piel, ojos, cabello, etc. reaccionan de forma indeseada.
• Su precio es muy inferior al original o al resto de productos de la marca.
• Desconfiar de webs no oficiales, comerciantes desconocidos o sin reputación y
mercadillos.
Estos productos cosméticos pueden estar caducados, hechos sin controles
sanitarios ni de seguridad, con ingredientes no autorizados en la UE, o incluso tóxicos.
Si estos productos son adquiridos vía Internet, es generalmente porque los usuarios consideran que se trata de interesantes ofertas. Para evitar riesgos, la compra de cosméticos debe hacerse en webs autorizadas y, ante la duda, hay
que desconfiar de descuentos más atractivos de lo habitual o de productos que
no aparezcan en el catálogo de la web oficial.
RIESGOS
• Son inferiores en calidad, contienen sustancias perjudiciales
que pueden provocar dermatitis, intoxicaciones, manchas,
infecciones oculares o reacciones alérgicas severas.
• Muchos de los productos de imitación o falsos, como sombras
de ojos, delineadores, bases o máscaras de ojos, contienen
concentraciones peligrosas de plomo, arsénico y cadmio.
• Se pierde cualquier derecho a exigir resarcimiento y la
responsabilidad por los daños y perjuicios ocasionados al
consumidor que los usa o adquiere.
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AMENAZA LA SALUD
Y LA SEGURIDAD
DE LOS CONSUMIDORES
MEDICAMENTOS
Es frecuente recibir ofertas de medicamentos que se distribuyen a través
de webs o de supuestas farmacias online. Se trata de imitaciones o falsificaciones difícilmente distinguibles de los productos originales, y carecen de las
garantías legales y de los controles necesarios.
El contenido real de estos productos es desconocido y se incluye información falsa acerca de su composición. Así mismo, los efectos reales de su consumo son inciertos, pudiendo ocasionar el fracaso terapéutico, una intoxicación
e, incluso, la muerte.
Las falsificaciones más conocidas son aquellas para tratar la disfunción eréctil o
productos milagro para perder peso, pero en realidad abarcan desde simples
analgésicos hasta fármacos para enfermedades del corazón o contra el
cáncer.
DETECTAR UN MEDICAMENTO FALSO
Los medicamentos falsos se presentan como originales y resulta muy difícil
detectarlos a primera vista. Pero se pueden tomar precauciones:
• Medicamentos de prescripción facultativa: si un medicamento que requiere receta
se ofrece fuera de las farmacias autorizadas sin necesidad de presentarla, significa
que se trata de un producto potencialmente falso.
• Precio rebajado u ofertas: los medicamentos falsificados se ofrecen a precios
notablemente más bajos que los de las farmacias autorizadas.
• Presentación y embalaje: el medicamento falso puede presentar un color, forma,
olor, sabor o textura distintos a los habituales, así como carecer de las ranuras,
símbolos, letras y nombres habituales.
• Caducidad y lote: la fecha de caducidad y el número de identificación del lote
pueden estar modificados o expresados de forma distinta a la habitual.
RIESGOS
Adquirir medicamentos falsos conlleva numerosos problemas:
• Desconocimiento de lo que se adquiere y sus efectos en caso
de ingesta. Por tanto, se pone en riesgo la salud.
• Los grupos organizados y mafias que los distribuyen no se
hacen cargo de las responsabilidades derivadas de daños y
perjuicios causados por el producto.
• Puede tener consecuencias legales para el consumidor.
La compra de medicamentos de prescripción a través de Internet es una práctica expresamente prohibida.
• Perjudica a laboratorios, investigadores y farmacéuticos,
y frena la inversión en I+D.
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JUGUETES
En España, cerca del 33% de los juguetes son falsos, según datos de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado. Se trata de imitaciones que no cumplen
necesariamente las normas de seguridad legalmente establecidas y supone un
grave peligro para los más pequeños.
Los juguetes originales son productos homologados que han pasado unos
controles de calidad obligatorios y cumplen unos requisitos concretos de
seguridad, con el fin de que el producto adquirido esté compuesto de materiales
adecuados para la salud y la seguridad de los niños.
PUEDEN NO CUMPLIR
LOS ESTÁNDARES DE SEGURIDAD
DETECTAR UN JUGUETE FALSO
Hay que evitar los juguetes con alguna de las siguientes características:
• Calidad visiblemente inferior en comparación con el juguete original. Detalles o
diseños toscos.
• El precio del juguete sea notablemente inferior al precio del artículo en el resto de
establecimientos.
• Carezca de la rotulación y de las etiquetas que acompañan a los juguetes originales.
• No se venda en puntos de venta y tiendas autorizadas.
• Que combine diseños, imágenes, marcas y colores de distintas licencias.
Además, los comerciantes que venden juguetes tienen una serie de obligaciones dirigidas a verificar que el producto cumple con la normativa aplicable y
deben retirarlo si creen que el juguete no la cumple.
• Que presente idiomas en la rotulación que sean distintos al castellano, impidiendo
la correcta comprensión de la información proporcionada.
RIESGOS
Adquirir juguetes no originales conlleva riesgos innecesarios:
• Se puede conocer sin grandes diligencias que no son originales
y, por tanto, los intermediarios podrían eludir responsabilidades
por daños.
• Se desconoce si durante su fabricación ha pasado controles de
calidad y seguridad.
• Pueden contener piezas pequeñas y sueltas o remates
defectuosos.
• Se hace inviable exigir responsabilidades por daños y perjuicios
a los fabricantes.
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PIEZAS Y RECAMBIOS
DESTRUYE PUESTOS
DE TRABAJO E INVERSIÓN
TALLERES
Las piezas y recambios falsificados son muy difíciles de identificar al estar en el
interior de los productos y sistemas. Poca gente abre los aparatos para inspeccionar las piezas que los componen, y, de hacerlo, pocos serían capaces de distinguir
una pieza original de una falsa.
Podemos encontrar desde falsificaciones de fusibles, cables y cortacircuitos hasta
falsificaciones de componentes de automóviles o de aviones. Estas piezas presentan muchos problemas al no estar sometidas a ensayos o pruebas, al no
cumplir con los requisitos de seguridad, al tener una vida útil más corta y por
ser más sensibles a las condiciones ambientales.
El problema es mayor cuando hablamos de falsificaciones de componentes
de automóviles o de aviones, con piezas tan importantes como pastillas de
freno, neumáticos, faros, discos, etc.
Su instalación se realiza en talleres o Servicios Técnicos que, conscientes o no
de la ilicitud de los componentes, los adquieren por un precio inferior a los
originales para aumentar el margen de sus beneficios, o para ser más competitivos. Así, los consumidores creen tener piezas de recambio originales o
estar adquiriendo un producto original a un precio más reducido.
DETECTAR QUE SE TRATA DE COMPONENTES FALSIFICADOS
Pese a la dificultad, los consumidores pueden, a través de un protocolo sencillo de
inspección, verificar que el producto es original:
• Verificar el estilo, disposición y calidad de la documentación, del etiquetado y del
embalaje del recambio.
• Verificar que figura el nombre del fabricante y el país de origen.
• Si se ve la pieza, inspeccionar que es similar a las originales y detectar incoherencias
o falta de información.
• Verificar que la pieza no tiene arañazos, golpes, raspaduras, o carece de los códigos
habitualmente exigidos.
• Exigir factura con identificación de la reparación y del recambio.
RIESGOS
Los recambios falsos o de imitación tienen numerosos riesgos:
• Pérdida de la garantía del producto en el que están incluidos o
cuya pieza se ha sustituido.
• Vida más corta de los repuestos, con mayor sensibilidad a los
cambios y factores ambientales. Se pone en riesgo la seguridad
de las personas y pueden causar accidentes de tráfico.
• Aumento del consumo del combustible.
• No se puede exigir responsabilidades por daños y perjuicios al
fabricante por piezas falsas o de imitación.
• Si el consumidor acepta que se le pongan piezas no originales,
reduce la responsabilidad del taller.
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LOS PRODUCTOS
FALSOS
ESCONDEN
un serio
PELIGRO
CONSEJOS
1. Acudir a puntos de venta o tiendas autorizadas, evitando compras a terceros
sin garantías.
2. Extremar la precaución al comprar en mercadillos o puestos ambulantes si los
productos son toscos y carentes de detalle.
3. En la compra a través de internet, verificar que se trate de tiendas online
oficiales, y con certificados de confianza.
4. Informarse en las páginas oficiales de los fabricantes para saber acerca de los
tipos de producto, precios, diseño, embalaje, composición, puntos de venta, etc.
5. Evitar la compra de productos cuyo precio sea considerablemente más bajo
que el precio al cual se suelen vender los productos de la marca.
6. Evitar la compra de medicamentos o curas milagrosas, ya que se desconoce la
composición, origen y efectos reales.
7. Comprobar que el producto está etiquetado en castellano, con una ortografía
correcta, y que se proporciona el prospecto o la información para su uso en el
mismo idioma.
8. Comprar productos que incluyan el marcado “CE”, que representa su
conformidad con los requisitos establecidos en la legislación comunitaria.
9. Si en internet o por email se ofrece un medicamento que requiere receta sin
necesidad de presentarla, se trata de un producto potencialmente falso.
10. Pedir siempre el certificado de origen de las piezas de recambio y factura.
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#ConsumeOriginal
El presente proyecto ha sido subvencionado por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad/ Agencia Española
de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición, siendo su contenido responsabilidad exclusiva de ASGECO