2012-2013 Inclusión Económica y Social de los Recicladores de Liberia Fundación ALIARSE y ACEPESA 2012-2013 1 CONTEXTO En Costa Rica se estima que se producen diariamente alrededor de 3.780 toneladas de residuos sólidos (PRESOL 2006). Debido al incremento drástico de la generación de residuos en los últimos años y la complejidad de nuevos materiales utilizados, la gestión de residuos es cada día más crítica y un desafío que requiere una solución urgente. En atención a este panorama el 13 de julio de 2010, se publicó la nueva Ley para la Gestión Integral de Residuos - GIR No. 8839 de Costa Rica, que exige entre otras cosas una cooperación entre los sectores públicos y privados. Esta Ley tiene por objeto regular la gestión integral de residuos y el uso eficiente de los recursos, mediante la planificación y la ejecución de acciones regulatorias, operativas, financieras, administrativas, educativas, ambientales y saludables de monitoreo y evaluación. Un punto clave en la nueva Ley GIR es la responsabilidad compartida, según lo establece su artículo 5, punto a) “que la gestión integral de los residuos es una corresponsabilidad social, que requiere la participación conjunta, coordinada y diferenciada de todos los productores, importadores, distribuidores, consumidores, gestores de residuos, tanto públicos como privados.” Otro aspecto importante, mencionado en el artículo 8 es que las municipalidades son responsables de la gestión integral de los residuos generados en su cantón. Además, la Ley promueve la separación en la fuente y el aprovechamiento de residuos valorizables, tanto por parte del sector privado y los hogares, como de las instituciones del sector público. En el marco de la nueva Ley y con el objetivo de contribuir al mejoramiento de la gestión de los residuos sólidos de Costa Rica se creó en mayo del 2011 la “Alianza para el aprovechamiento de residuos valorizables”, en la cual participan el Ministerio de Salud, el Instituto de Fomento y Asesoría Municipal IFAM, el Programa Competitividad y Medio Ambiente (CYMA) financiado por la Cooperación Alemana para el Desarrollo (GIZ), así como la Fundación ALIARSE y las empresas privadas dedicadas al reciclaje: Coca-Cola, Empaques Santa Ana, Florida Bebidas, Grupo Vical y Total P.E.T. Las cuales tienen establecidos programas de reciclaje para los siguientes materiales: cartón y cartoncillo, papel, vidrio, envases plásticos de PET y HDPE, aluminio, hojalata y envases polilaminados. En este sentido, la Alianza se convierte en una respuesta actual e innovadora para aumentar la recuperación de residuos valorizables con énfasis en el reciclaje. Para el éxito de esta alianza se requiere la participación activa de todas las personas y sectores de la sociedad civil, incluyendo el sector informal del reciclaje. En el marco de una propuesta más amplia que está en proceso de negociación con el Banco Interamericano de Desarrollo –BID-, se extrae como un plan piloto, el trabajo en el cantón de Liberia para lograr la inclusión del sector informal de recuperación de residuos valorizables. Las acciones desarrolladas en este plan piloto contribuirán a validar la metodología de la propuesta general presentada al BID. 2 SITUACIÓN DEL SECTOR INFORMAL EN COSTA RICA Al igual que en el resto de la región, en Costa Rica, el sector informal del reciclaje se ubica en dos niveles: los recuperadores de materiales reciclables que realizan su actividad en las calles o botaderos, quienes comúnmente son conocidos en el país como “buzos” y las microempresas, por lo general de carácter familiar, que funcionan como centros de recuperación, acopio y segregación de materiales reciclables. Con respecto al primer grupo en el PRESOL se señala que “…el sector informal representa una parte muy significativa de los esfuerzos de reciclaje a nivel del país. Este sector de personas de estratos bajos de la sociedad y con niveles muy básicos de educación ha hecho de los residuos, de su recolección en las mismas calles e incluso dentro de los mismos vertederos y de su posterior venta un modus vivendi. Este sector practica una recolección y acopio informal de residuos que es difícil de cuantificar y prácticamente se desconoce. Solo en el territorio de la municipalidad de San José se estiman unas 500 personas recolectando materiales reciclables en las calles. Generalmente se da en la GAM (Gran Área Metropolitana) - y se enfoca en los residuos de mayor interés económico como cobre, acero, PET y aluminio entre otros”. Figura 1 Recicladores en el botadero de Liberia Recientemente la Red de Recicladores de Latinoamérica y Afines, con la asistencia de ACEPESA y el apoyo financiero de AVINA ha realizado un mapeo de las condiciones de las y los recuperadores informales que trabajan en los botaderos existentes en el país. Hasta la fecha se han mapeado 13 botaderos, encontrándose la siguiente situación: 3 Un total de 241 personas de las cuales el 39% (93) son mujeres y el 61% (148) son hombres. El 86% de las personas han estado ejerciendo su profesión desde hace 20 años, y el 14% tienen más de 20 años de ejercerla, en un caso se encontró una persona con 30 años. Respecto a los problemas encontrados se puede mencionar: Eminente cierre de los sitios Insalubres condiciones de trabajo, Falta de organización, Las limitaciones para la comercialización de algunos materiales La situación de ilegalidad de las personas migrantes que trabajan en estos sitios. Sobre todos estos botaderos está presente la amenaza de cierre por orden del Ministerio de Salud. Con el fin de enfrentar esta situación en algunos municipios, los recicladores ya se encuentran organizados en cooperativas o asociaciones, incluso existe una experiencia novedosa en el país en la que un grupo está en proceso de firmar un convenio con el municipio para asumir la recolección selectiva de los materiales. Con respecto a las microempresas, en el año 1996 se realizó un primer estudio sobre la participación de este sector en el manejo de residuos sólidos, llamado “Microempresas en la gestión de residuos sólidos en Costa Rica”, que fue parte de una Investigación Latinoamericana Sobre Microempresas y Cooperativas en la Gestión de Residuos Sólidos”, que se desarrolló en siete países latinoamericanos y fue promovida por el Banco Mundial, el Programa de Gestión Urbana de Naciones Unidas y WASTE de Holanda. En esta fecha ya algunas de estas personas tenían más de treinta años de ejercer la actividad. Luego de varias iniciativas de organización, algunas de ellas fallidas, la situación del sector se ve impactada por la aprobación de la Ley GIR que estimula la recuperación de materiales reciclables y obliga a los municipios a “garantizar que en su territorio se provea del servicio de recolección de residuos, en forma selectiva, accesible, periódica y eficiente para todos los habitantes, así como de centros de recuperación de materiales, con énfasis en los de mediana y pequeña escala para la posterior valorización”(Artículo 8. Funciones de las municipalidades, Ley N° 8839). Cómo piensan concretar esta directriz los gobiernos locales todavía no está claro, ya que al igual que se plantea en la investigación “The economics of the informal sector in solid waste management” (GIZ, CWG, 2011), en nuestro país muchas municipalidades no ven en el sector a un aliado, sino que los ven con hostilidad e indiferencia. Así, la promulgación de la Ley es una gran oportunidad para el fortalecimiento del sector y su inclusión en los sistemas de gestión integral de residuos municipales, pero también puede convertirse en una amenaza si no se acompaña con acciones de incidencia y desarrollo de capacidades, que contribuyan a cambiar la percepción social existente sobre el sector, llevando a la dignificación de la actividad del reciclador. Esta situación se ve agravada por la aprobación del Reglamento de centros de recuperación de residuos valorizables - Decreto ejecutivo N° 35906-S que plantea una serie de condiciones y requisitos para el funcionamiento de los centros de acopio, que amenaza con llevar al cierre de la gran mayoría de estos negocios. 4 Este reglamento entraba en vigencia en mayo del 2011, sin embargo, con el apoyo de la Red de Recicladores de Latinoamérica y Afines, se logró obtener una prórroga de 2 años para su aplicación por parte de las autoridades. Para poder alcanzar las condiciones que plantea el Reglamento, los primeros requerimientos que se han logrado identificar son: Mejoras en infraestructura (bodega apta de acuerdo al Reglamento), incluyendo las condiciones del terreno Contar con permisos de funcionamiento, lo que implica su legalización Maquinaria y equipo Todo esto requiere recursos económicos, financiamiento y capacitación. De tal manera que es probable que muchos de los actuales centros de acopio no logren sobrevivir a menos que establezcan asociaciones entre ellos, con las autoridades locales y cuenten con el apoyo real del sector formal de la industria del reciclaje. La salud ocupacional y seguridad laboral es un asunto preocupante en la recuperación de residuos valorizables. Las necesidades en los centros son entre otros, equipos básicos como equipo de seguridad y protección y también equipo técnico básico como romanas y compactadoras. SITUACIÓN DEL SECTOR INFORMAL EN LIBERIA En el caso particular del cantón de Liberia existe un botadero en proceso de cierre técnico con presencia de 58 personas (al momento de la primera visita, 21 mujeres y 37 hombres), recolectores informales, algunos de los cuales tienen más de 20 años de trabajar en el sitio. Sin embargo, para el mes de diciembre de 2012, los recicladores comentaron que había más de 100 personas trabajando. Este aumento se debe a la entrada de la temporada alta de turismo y a la necesidad de prepararse para la entrada al curso lectivo de los niños (febrero). A partir del mes de febrero la población de recicladores vuelve a ser de entre 50 y 60 personas. De las 58 personas entrevistadas en el botadero, el 57% es de nacionalidad costarricense, mientras que el 43% es nicaragüense, donde el 37% tiene cédula de residencia permanente. Esta información permitió desmentir la idea que tenían las autoridades de que la mayoría de las personas que trabajaban en el botadero son inmigrantes indocumentados. Se tiene información de la existencia de 2 pequeñas empresas privadas encargadas de la recolección de residuos sólidos, cada reciclador tiene a su propio comprador, y lo eligen según los beneficios que este les pueda dar, por ejemplo transporte hasta su casa o mejores precios. 5 Figura 2 Venta de materiales a las afueras del botadero de Liberia Este vertedero está bajo amenaza de cierre desde hace aproximadamente 10 años, y según la última resolución del Ministerio de Salud, la Municipalidad tiene tiempo hasta diciembre de 2013 para tener otra opción para disponer sus residuos. Al cerrarse el vertedero, los recicladores que continúan ahí tendrán que buscar otra forma de generar ingresos. En este vertedero se está recuperando actualmente plásticos, metales, aluminio, papel y artículos que puedan ser aprovechados para reventa o para uso propio de los recicladores. Un detalle importante de este botadero es que, al estar localizado en un área altamente turística, recibe residuos de varios complejos hoteleros, por lo que es posible recuperar muchos artículos como cámaras, ropa en buen estado, ropa de cama, vajillas o electrodomésticos. Con respecto a las alternativas La municipalidad cuenta con recursos para la construcción de un centro de acopio posiblemente ubicado en el botadero y se plantea que puede ser administrado mediante un convenio con los buzos. LOS RESIDUOS Y LAS EMISIONES DE GASES DE EFECTO INVERNADERO (GEI) El sector de residuos en Costa Rica según las definiciones del IPCC acumula 13,1 % de las emisiones totales de GEI en el país.1 Solamente la disposición de residuos sólidos genera alrededor 1.1 millones de toneladas de CO2e por año, la cual corresponde más de 11 % de las emisiones totales de GEI del país.2 Por esta razón el sector de residuos sólidos es un sector clave para la mitigación de GEI. Especialmente el aumento de reciclaje puede llevar al sector de residuos muy cerca de la carbono neutralidad de dicho sector, que contribuye a la meta de Costa Rica, como primer país en el mundo de lograr la carbono neutralidad en el año 2021. 1 Inventario Nacional Emisiones de Gases, GEI 2005, Instituto Meteorológico Nacional. 2 Cegesti para CEPAL, 2009: Evaluación del Potencial de Reducción de GEI y producción de energía a partir de rellenos sanitarios y vertederos en ciudades de Costa Rica. 6 Como resultado de esta iniciativa la inclusión social y económica del sector informal de reciclaje, incrementará los residuos valorizables recolectados en Costa Rica. Estos materiales reciclables (materias secundarias) remplazan materia prima en los procesos industriales y ahorran de manera significativa energía y el uso materia prima. OBJETIVO DEL PROYECTO Objetivo General Lograr la inclusión del sector informal del cantón de Liberia en el marco de las nuevas disposiciones dictadas por la Ley nº8839 para la gestión integral de residuos en Costa Rica, con el fin de que sean incorporados en el sistema de gestión de residuos municipal, y en la cadena de valor de la industria de reciclaje; realizando labores de mitigación del cambio climático mediante la la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) provenientes del sector de residuos. Objetivos Específicos 1. 2. 3. 4. 5. Establecer el acuerdo de trabajo entre el sector informal, la municipalidad y el sector privado de reciclaje para la instalación de un modelo de negocio sostenible que incluya a los recicladores. Fortalecer a los recicladores en la parte legal, gerencial, equipamiento, organizacional, entre otros, en busca de impulsar negocios competitivos. Contribuir a la implementación de la Ley No. 8839 de manera inclusiva por medio de una experiencia demostrativa en la municipalidad de Liberia. Sistematizar el conocimiento y la experiencia obtenida en el caso de Liberia. Promover alternativas técnicas y de trabajo que contribuyan a la mitigación de gases de efecto invernadero (compostaje, tratamiento mecánico biológico). ACTORES Organizaciones ejecutoras Este proyecto fue ejecutado por ACEPESA – Asociación Centroamericana para la Economía, la Salud y el Ambiente, en coordinación con la Fundación para la Sostenibilidad y la Equidad – ALIARSE. ACEPESA cuenta con una amplia experiencia en el desarrollo proyectos en donde intervienen diferentes actores sociales, tales como comunidades, empresas privadas, gobiernos locales e instituciones públicas. La realización de alianzas estratégicas ha sido fundamental para lograr incidir en políticas públicas que lleven a la mejora de la situación de grupos vulnerables, así como la promoción del ambiente urbano, el desarrollo económico local, considerando la perspectiva de género y la diversidad. Para el desarrollo de sus acciones cuenta con personal de diferentes disciplinas. La Fundación para la Sostenibilidad y la Equidad - ALIARSE, tiene como misión promover las alianzas publico privadas para el desarrollo de Costa Rica. Para tal fin, realiza actividades de investigación, 7 formación, intercambio de experiencias y gestiona proyectos público privados en educación, salud y medio ambiente. Organizaciones Aliadas Como parte del involucramiento del sector empresarial, este proyecto contó con el apoyo de la Alianza para el aprovechamiento de residuos valorizables, la cual está conformada por el Ministerio de Salud, el Instituto Nacional de Aprendizaje – INA; así como la Fundación ALIARSE y las empresas privadas dedicadas al reciclaje: Coca-Cola Company, Empaques Santa Ana, Florida Bebidas, Grupo Vical, Total P.E.T. y Kimberly Clark; las cuales tienen establecidos programas de reciclaje para los siguientes materiales: cartón y cartoncillo, papel, vidrio, envases plásticos de PET y HDPE, aluminio, hojalata y envases polilaminados. La Alianza tiene como objetivo contribuir a la elaboración e implementación de una estrategia nacional de recuperación de residuos valorizables. Desde el inicio del proyecto, la Alianza mostró mucho interés por los recicladores y se comprometió a apoyar el fortalecimiento de los recicladores. Municipalidad de Liberia La Municipalidad de Liberia busca promover el desarrollo del cantón y la calidad de vida de la población, por lo que su Concejo Municipal, en específico la Comisión de Asuntos Ambientales acordó dar el visto bueno a la ejecución del presente proyecto, así como promover que este proyecto sea desarrollado en coordinación con ACEPESA y Aliarse, el Ministerio de Salud y la Alianza para el Aprovechamiento de Residuos Valorizables y la Municipalidad de Liberia, para así lograr el cumplimiento de la Ley 8839 para la Gestión Integral de Residuos. Este gobierno local está preocupado por incluir a todos los actores del reciclaje en Liberia, por lo que busca, gracias a este proyecto, poner a derecho y formalizar a los recicladores que laboran en el vertedero municipal y en las calles. Región Rectora de Salud Chorotega del Ministerio de Salud / Área Rectora de Salud-Liberia El Ministerio de Salud, representado por funcionarios del Área Rectora de Salud de Liberia, es miembro del Comité Coordinador del Plan de Gestión Integral de Residuos Sólidos de Liberia, por lo que, comprendiendo la importancia de incluir a todos los actores del reciclaje en el Plan de Gestión de Residuos Sólidos, ha apoyado constantemente durante la ejecución de este proyecto. 8 ACTIVIDADES Y RESULTADOS Trabajo coordinado con la Municipalidad de Liberia Desde el mes de agosto del 2012 se realizaron al menos dos reuniones mensuales con el Comité Coordinador del Plan de Gestión Integral de Residuos Sólidos de Liberia, donde participan representantes del Ministerio de Salud, del ICE y de Península Papagayo. En algunas reuniones del Comité se contó con la presencia de funcionarios de la Universidad Nacional (UNA). Figura 3 Reunión con el Comité Coordinador del PGIRS de Liberia Inicialmente hubo resistencia hacia el proyecto, ya que desde la Unidad de Gestión Ambiental se interpretó que el apoyo a los recicladores implicaría organizarlos y trabajar con ellos dentro del botadero, con lo que se validaría esta actividad, prohibida por ley. Finalmente se aclaró ante el Comité, que si bien uno de los objetivos del proyecto es organizar a los recicladores, en ningún momento se harían actividades dentro del botadero y tampoco se buscaría promover la permanencia en este sitio. A través de la participación en este comité, fue posible convertir a los funcionarios del Área Rectora de Salud de Liberia en actores clave para el desarrollo de este proyecto. A través del Área de Desarrollo Social fue posible incluir a los beneficiarios del presente proyecto en el Programa “Manos a la Obra”, que tiene como objetivo dar un subsidio temporal y capacitación a personas en extrema pobreza desempleadas, esto a cambio de que los beneficiarios realicen actividades que beneficien a la comunidad. En el caso específico de este proyecto, se busca brindar apoyo al Área de Gestión Ambiental de la Municipalidad de Liberia en actividades de educación ambiental y promoción de la recolección separada de residuos sólidos en los barrios de Los Ángeles y Condega. Y la propuesta está enmarcada en el Plan de Gestión Integral de Residuos Sólidos de la Municipalidad. 9 Figura 4 Leda Martínez y Augusto Otárola, funcionarios municipales liderando el proyecto Como parte de la puesta en marcha del proyecto, y para garantizar sus sostenibilidad, fue imprescindible realizar actividades de sensibilización con actores clave, ya que los y las recicladoras del botadero, si bien son conocidos por los liberianos, su importancia suele ser invisibilizada. Se realizó un taller de sensibilización con funcionarios municipales el 28 de noviembre de 2012. Durante este taller se trabajó el tema de por qué las personas son consideradas diferentes y que aunque todos seamos iguales, las diferencias que existen dentro de los grupos suelen ser ventajosas para el desarrollo de la sociedad. Participaron 10 funcionarios y una representante del grupo de recicladores. Figura 5 Actividad con funcionarios municipales Otro actor importante para el éxito de este proyecto es la comunidad liberiana. Para que los recicladores puedan tener mejores ingresos trabajando en la recuperación de materiales valorizables casa por casa en Liberia, es importante que todos los vecinos entiendan que el reciclaje y la separación en la fuente son importantes para la protección del medio ambiente, pero que además, al estar involucrada la figura del reciclador, la valorización de los residuos se convierte en fuente de ingresos para un sector de la población que por lo general vive en la pobreza. 10 El involucramiento de los vecinos de Liberia es clave para el proyecto, por esta razón la Municipalidad realiza actividades constantes de sensibilización a la comunidad. Y en específico para el proyecto de recolección casa por casa se contó con el apoyo de estudiantes de la Universidad EARTH, quienes diseñaron un sistema de capacitaciones dirigido a Asociaciones de Vecinos y al público general, de forma que para cuando inicie la recolección de materiales valorizables, los vecinos atiendan al llamado y entreguen sus materiales valorizables. Uno de los objetivos del Comité donde se trabaja este proyecto es obtener un local, sea municipal o privado para destinarlo como centro de acopio y que así se aumente el volumen de recuperación de materiales. Pese a la disponibilidad de terrenos municipales, la construcción de un centro de acopio municipal depende de los recursos con que cuenta la Unidad de Gestión Ambiental, por lo que según los actores municipales, un centro de acopio municipal sería posible hasta mediados del 2015. Con la Municipalidad de Liberia también se trabajó en la redacción de un convenio para firmar en el momento en que la agrupación de recicladores se encuentre debidamente inscrita en el Registro de Asociaciones. Este convenio busca: “establecer el marco regulatorio por medio del cual se ejecutará la colaboración de ARELI con la Municipalidad de Liberia con el fin de realizar la recuperación y la gestión de los materiales reciclables de los hogares y comercios de Liberia, en el proyecto llamado:”Proyecto piloto de recolección de materiales reciclables en el cantón de Liberia”. Este convenio va a permitir a la municipalidad cumplir lo establecido en la Ley para la Gestión Integral de Residuos (Ley Nº 8839) y beneficiar financieramente al municipio por el ahorro en la recolección de residuos sólidos (en combustible, personal y transporte) y en la disminución de la cantidad de residuos sólidos que ingresan al sitio de disposición final municipal, repercutiendo esto en una mejoría en la calidad de vida de la población del cantón. Por otra parte, se va a beneficiar a una asociación local que cuenta con personería jurídica, que tiene experiencia en la recuperación de materiales reciclables.” Se espera que se firme a mediados del mes de agosto de 2013, cuando la Asociación de Recicladores de Liberia (ARELI) se encuentre debidamente inscrita. Con respecto a la logística de recolección, se trabajó con personal de la Municipalidad para evaluar posibles rutas, y se concluyó que para garantizar la mayor recolección de material valorizable en el centro de Liberia, se recorrerán todas las calles y avenidas dentro del perímetro propuesto. Se confeccionaron 7 rutas de aproximadamente 1.5 km cada una. Es importante que a la hora de poner en marcha cada ruta, se tomen tiempos y se evalúe la eficiencia de la misma. Cada ruta se trabajará del punto más lejano del punto de venta (cerca del Barrio la Victoria), hacia el centro de acopio. Para el diseño de las rutas se contó con la colaboración del Geógrafo Mauricio Molina, que labora en el Departamento de Catastro de la Municipalidad de Liberia y tiene experiencia con el monitoreo de rutas de recolección de residuos. Esta propuesta de ruta queda aún por validar y mejorar. Conformación de la Asociación de Recicladores de Liberia, ARELI Desde el inicio del proyecto, en Agosto de 2012, se convocó a una reunión general de todos los recicladores del botadero interesados en conocer más sobre el proyecto, esta reunión se llevó a cabo el día 27 de setiembre de 2012 en una iglesia local en la comunidad de Martina Bustos. Participaron 3 representantes municipales y 61 recicladores y recicladoras del botadero. En esta reunión se presentó el proyecto y se eligió a un comité de trabajo, conformado por 6 personas: Luis Reyes, Ismael Cabezas, 11 Francisco Gómez, Seidy Franco, Doris Mondragón, Anastasia Chaves. De estas 6 personas, 5 continuaron como comité de trabajo, don Ismael Cabezas consiguió trabajo fuera del botadero. Figura 6 Comité de trabajo Con este comité de trabajo se inició la constitución de lo que se convertiría el 17 de diciembre de 2012 en la Asociación de Recicladores de Liberia. Inicialmente, con este grupo de trabajo se discutieron los problemas que enfrentan en el botadero, especialmente la violencia que se da entre los mismos recicladores, principalmente hacia las mujeres. Posterior a esto se logró Este grupo de trabajo definió que para la agrupación de recicladores sería importante contar con uniformes, ser capacitados, trabajar en equipo y coordinar con la Municipalidad para así poder trabajar en reciclaje fuera del botadero. Como parte del involucramiento de los recicladores con la Municipalidad de Liberia, el equipo de trabajó nombró a la señora Doris Mondragón como representante ante el Comité Coordinador del Plan de Gestión Integral de Residuos. A mediados de 2013 ella fue nombrada oficialmente en la Comisión, sin embargo ha participado desde octubre de 2012. Como parte de las actividades realizadas con este comité de trabajo, se decidió organizar a los recicladores bajo una figura legal para así poder establecer un convenio con la Municipalidad, tal y como lo especifica la Ley 8839. Se evaluaron la figura de la cooperativa y de la asociación privada, finalmente se decidió conformar una asociación debido a que es más fácil de conformar y su funcionamiento es más sencillo. El 17 de diciembre de 2012 se realizó la Asamblea General en la comunidad de Martina Bustos, la invitación fue dirigida a todos los recicladores del botadero de Liberia y participaron 14 personas: 4 hombres y 10 mujeres. Ese día se realizaron actividades en grupo para explicar el Acta Constitutiva de la Asociación, aclarar dudas y darle un nombre. Finalmente se realizó una votación para elegir a la Junta Directiva. La conformación legal de esta asociación ha estado a cargo de la Licenciada Ana Isabel Campos, vecina de Liberia y quién ofreció sus servicios a un precio reducido. En el mes de junio de 2013 la ARELI fue aprobada por el Registro de Asociaciones y está en proceso de ser publicada en la Gaceta para estar legalmente constituida. Se espera que para el mes de agosto de 2013 la Asociación pueda fungir como tal y finalmente firmar el Convenio con la Municipalidad de Liberia. 12 Figura 7 Fundadores de la Asociación de Recicladores de Liberia, ARELI Con ARELI se realizaron actividades de capacitación en temas como trabajo en equipo, resolución de conflictos, gestión del trabajo, y se coordinó que el Instituto Nacional de Aprendizaje (INA) impartiera una capacitación sobre gestión de residuos, “Conceptos Básicos Para El Manejo de Desechos Sólidos”, el cual fue impartido en la comunidad Martina Bustos durante 3 días. Con la Junta Directiva se trabajó en la creación de un logo para la Asociación y en coordinar con el Comité municipal las actividades que se realizarían al momento de iniciar con la recolección. Con ellos se vieron temas como el funcionamiento de una Junta Directiva y los deberes que tienen. También se trabajó el tema de manejo de conflictos y conceptos básicos de administración de empresas. Figura 8 Junta Directiva de ARELI, de izquierda a derecha: Johan Junes, Fiscal; Erni Martínez, Secretario; Carlos Pavón, Tesorero; Jeannette Murillo, Vocal; Maynor Piña, Vicepresidente; Doris Mondragón, Presidenta. Debido a la falta de un centro de acopio, se decidió con la Junta Directiva que la forma de recolección iba a ser la siguiente: cada grupo de trabajo (parejas o tríos) recolecta material en su ruta y luego le vende el material al centro de acopio “Reciclaje Moya”. La Junta Directiva se dio a la tarea de negociar con el dueño de este centro de acopio un precio más justo por los materiales recuperados y entre ambas partes se decidió trabajar en equipo para lograr la compra de materiales como el cartón, que este centro de acopio no comercializa y vidrio, que tampoco es recuperado en Liberia. 13 Como parte del trabajo coordinado entre el Comité municipal y ARELI, se organizó una actividad de conmemoración del Día Mundial del Ambiente para el sábado 8 de junio. Esta actividad fue organizada también por la Cámara Liberiana de Turismo (CALITUR), la Municipalidad y actores locales. Estas organizaciones invitaron a ARELI a participar en la actividad y de esta forma ser presentados a la comunidad liberiana. La actividad, bajo el nombre de “Nos agarró la limpiona, recuperemos nuestra ciudad blanca”, consistió en una pequeña feria en el parque Héctor Zúñiga, de donde salieron grupos de limpieza liderados por miembros de ARELI. Esta actividad permitió limpiar el centro de Liberia y los materiales valorizables fueron entregados a ARELI para que fueran comercializados. De esta manera muchos vecinos de Liberia se dieron cuenta de la existencia de esta asociación, por lo que se espera que empiecen a separar materiales reciclables. Figura 9 Asociación de Recicladores de Liberia, 8 de junio de 2013 El 8 de junio, ARELI se presentó en el centro de Liberia, mostrando las bicicletas y los uniformes con los que trabajarán. Figura 10 Anastasia Chávez, separando material el 8 de junio de 2013 14 Equipo de recolección y seguridad personal El diseño del medio de transporte que los recicladores utilizarán para recolectar materiales valorizables casa por casa en Liberia fue discutido y diseñado por integrantes del Comité PGIRS y también por representantes de ARELI y por el pequeño comité de recicladores conformado inicialmente. Primero se propusieron bicicletas con la carreta hacia atrás, pero, por razones de ergonomía a la hora de cargar peso se recomendó que la carreta estuviera delante, de esta manera el peso es empujado y no arrastrado. Se contrató la construcción de 6 bicicletas. La construcción de estas bicicletas tomó 4 meses, debido a atrasos con la compra de los materiales (bicicletas y tubo para armar el cajón). Previo a la entrega de la primera bicicleta, integrantes de ARELI fueron a visitar el taller y dieron su visto bueno, con esto se dio arranque a la construcción de las 5 bicicletas restantes. Cada bicicleta tuvo un costo de $600. Figura 11 Inicio de construcción de bicicleta y producto final, Liberia A los integrantes de ARELI se les entregó 3 camisetas con el logo impreso adelante y por detrás, fajas lumbares, guantes, mangas para proteger los brazos del sol, lentes de seguridad y capas para la lluvia. Figura 12 Entrega de equipo de protección personal a integrantes de ARELI Junto con cada bicicleta, a través de una donación de la Fundación ACONVIVIR, se les entregó un casco, un chaleco reflectivo y luces para las bicicletas, así como un manual de cómo ser un buen conductor. 15 Reducción de emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) Se contabilizaron las emisiones evitadas solamente por la recuperación de materiales valorizables en el botadero de Liberia. La actividad de los recicladores fue monitoreada a través de la cantidad de material vendido a “Reciclaje Moya”, quienes facilitaron los registros del mes de diciembre de 2012. Con esta información y con ayuda de factores de emisión calculados por la EPA (Environmental Protection Agency, Estados Unidos) fue posible calcular la reducción de emisiones que se dio gracias al trabajo de los recicladores. Se determinó que las 27,1 toneladas de materiales reciclables recuperadas en el mes de diciembre y vendidas a “Reciclaje Moya” a las afueras del botadero de Liberia, evitaron la generación de 73,81 toneladas de CO2e, lo cual, si se extrapola al trabajo realizado durante 1 año implica una reducción de emisiones de 885,6 toneladas de CO2 equivalente al año, esto equivale a la huella de carbono de una pequeña empresa costarricense. Si bien los factores de emisión no corresponden a los de Costa Rica, esta estimación permite dar a conocer el potencial del reciclaje y, en este caso del reciclaje inclusivo, como una medida de reducción de emisiones para nuestro país. CONCLUSIONES Para garantizar la sostenibilidad de ARELI falta aún que los integrantes de la Asociación entiendan más sobre el trabajo en equipo. Es importante resaltar que el trabajo que realizaban en el botadero no era colectivo, todo lo contrario, en el botadero predomina la ley del más fuerte, lo que implica que los integrantes de esta asociación deben dejar su comportamiento individualista y adaptarse poco a poco a trabajar por el beneficio de todo el grupo. Un desafío para ARELI es la falta de un centro de acopio. Si bien la Municipalidad tiene la intención de construir uno, de momento el trabajo que realizan en las calles es poco eficiente y se ven obligados a separar materiales en la vía pública y a trabajar a la intemperie. La falta de un centro de acopio, o de al menos una bodega para almacenar material ha implicado perder material por las lluvias. Para garantizar la supervivencia de este programa de recolección en la fuente, tanto ARELI como la Municipalidad de Liberia deben lograr que los vecinos del cantón aprendan la importancia del reciclaje y separen correctamente sus residuos. Para esto es imprescindible que la Municipalidad continúe y fortalezca sus actividades de sensibilización y que promueva el reconocimiento de ARELI como gestor autorizado de residuos en el cantón. El fortalecimiento de ARELI permitirá que sus integrantes tengan la oportunidad de generar más ingresos, continuando con la actividad que les agrada, pero en condiciones dignas. Este modelo particular de reciclaje inclusivo en el país puede ser replicado en otros cantones donde existan “buzos” o donde recicladores de base recuperen materiales de las calles. Las Municipalidades deben aprender a reconocer a los recicladores de base como aliados en sus sistemas de gestión de residuos sólidos. 16