El día en que los cartageneros se declararon súbditos de Su Majestad Británica Gustavo Bell Lemus EL DIA EN QUE LOS CARTAGENEROS SE DECLARARON SUBDITOS DE SU MAJESTAD BRITANICA. El 13 de octubre de 1815. en reunión extraordinaria realizada por la legislatura de la provincia de Cartagena y presidida por el Gobernador Juan de Dios Amador. los cartageneros fueron declarados súbditos de la corona británica. y su gobernador quedó facultado para comunicar tal decisión a Londres. así como la de hacer en nombre de los nuevos vasallos el juramento de fidelidad a Jorge IV. Rey de Inglaterra. ¿Cómo se produjo esa declaración? ¿Qué circunstancias rodearon la reunión del 13 de octu- bre? ¿Cuáles fueron los antecedentes que desembocaron en esa decisión? ¿Por qué Cartagena de Indias. plaza fuerte del imperio español. ante cuyas murallas los ingleses habían sido derrotados y humillados en 1741 en un intento por apoderarse de la ciudad. se entregaba ahora por su propia iniciativa a la corona que durante tantos años había combatido? La combinación de una serie de factores de la ~eopolítica europea. con las pugnas internas que vivían los cartageneros por asegurarse el dominio político de la ciudad. explica la decisión que tomaron los delegados a la legislatura del 13 de octubre de izar la bandera británica para que ondeara ante las brisas del Caribe.l 1 Relatos de testigos presenciales del sitio de Cartagena de 1815 son básicamente el de Lino de .Pombo que se encuentra en José Urueta, Cartagena y sus cerranfas. 2a. edición por E. Gutiérrez de PIñeres. Cartagena 1912. pp. 348-356; el de Juan García del Río. "Página de oro del sitio de Cartagena de 1815" en Córrw nació la República de Colombia, Bogotá, 1981, pp. 51-68; el del francés Ducoudray Holstein, Memorias de Simón Bolívar. París, 1831. 58 HuellaS 25. Uninorte. Barranquilla pp. 58-?:3. Abril, 1989. ISSN 0120-2537 El presente ensayo intenta analizar y describir los diferentes sucesos acaecidos en octubre de 1815. tanto en Europa como en la Nueva Granada. que conducirían a la declaración de la legislatura de Cartagena. Si bien otros autores han descrito los hechos ocurridos ese día y los antecedentes que rodearon ese pronunciamiento. aquí se tratará de exponer tal suceso histórico como una muestra de la encrucijada que la política internacional británica afrontaba desde 1808 ante España: y. por otro lado. se intentará también presentar el 13 de octubre como la culminación de las luchas intestinas en que se encontraban trabadas las diferentes facciones políticas cartageneras. 1808: LA ENCRUCIJADA BRITANICA. DE INVETERADO ENEMIGO ESPAÑOL A INESPERADO ALIADO DE MADRID El descubrimiento y conquista de América inclinó el balance que tenían las monarquías en Europa a favor de los reyes de Castilla. La incorporación de los vastos territorios del Nuevo Mundo al dominio del rey Carlos V le coIÚirtó a España una preponderancia bastante notable con respecto a sus más cercanos rivales, Inglaterra y Francia:. ventaja que se aumentaría con la unión de Portugal a España bajo el reinado de Felipe 11. Sin embargo, España nunca podrá gozar Ml forma tranquila del usufructo de sus nuevos territorios, porque desde el mismo momento en que en el Viejo Mundo se difundieron las noticias acerca de las riquezas y extensiones de la Tierra Firme, las demas monarquías se movilizaron para tener una participación en tan preciado botín. Las rivalidades, que hasta entonces habían tenido como escenario el suelo europeo. se trasladaron mar Caribe.2. con inusitado vigor al InglatffiTa fue desde un comienzo el rival más beligerante que tuvo que enfrentar España a partir de la segunda mitad del siglo XVI. Desarrollando una poderosa flota naval a base de concederles grandes beneficios a piratas y bucaneros. Inglaterra estuvo pronto en capacidad de 'golpear permanentemente las posesiones españolas en América e interrumpir por largos períodos las rutas comerciales que la metrópoli mantenía con sus colonIas. A pesar de ello. España aún podía responder con relativo éxito el reto constante que representaba Inglaterra, y durante todo el siglo XVI y buena parte del XVII los reyes de España pudieron mantener a raya los sucesivos intentos británIcos. de desestabilizar sus colonIas. En 1655, sin embargo. Inglaterra lograría sembrar una afilada punta de lanza en el corazón del Caribe que. con el paso del tiempo. le habría de otorgar el dominIo de ese mar interior: Jamaica.3 La posesión de Jamaica y su estratégica localización incrementarían la presencia inglesa en el mundo hispanoamericano que España mantenía celosamente cerrado para los extranjeros. El principal factor que motivaba los continuos enfrentamientos entre ambas potencias lo constituía el acceso a los mercados hispanoamericanos el cual ~ólo le era permitido. a los comerciantes de Cadiz y Sevilla.4 A traves del contrabando. sin embargo. Inglaterra. Francia, Holanda y demás monarquías europeas lograban penetrar dichos mercados creando en las colonlas españolas una demanda por las mercancías extranjeras que la misma metrópoli era incapaz de contrarrestar. Hasta finales del siglo XVII Francia y Holanda se llevaban la mayor parte 2 ' .Obras generales s?bre el Canbe que dan cuenta del COnflIcto de las monarquIas europeas en sus aguas son la de Eric Williams, From Columbus to Castro -The History ofthe Caribbcan, Londres, 1970; Gennán Arciniegas. Biograf¡a del Caribe, Buenos Aires, 1966, y la de Juan Bosch. De Cristóbal del comercio ilícito mientras que Inglaterra hacía lo imposible para aumentar su participación. La guerra de sucesión española habría de darle la gran oportunIdad a Inglaterra para empezar a inclinar definItivamente la balanza del poder a su favor. Ante la ausencia de un heredero al trono de España que pudiera suceder al rey Carlos 11.las principales casas reales de Europa. Borbones y Habsburgos, se lanzaron a una cruenta y prolongada guerra por el control del gobierno de Madrid, con la intención no oculta de apoderarse indirectamente de todo el imperio hispáruco. Ante tal perspectiva nInguna monarquía europea podía ser indiferente a la suerte de la guerra y mucho menos Inglaterra. que tomó el bando de los Habsburgos ya que una victoria de los Borbones signIficaba la consolidación de Francia como principál potencia europea. Durante la guerra los comerciantes británIcos intensificaron sus expediciones a Tierra Firme 10grando desplazar a los contrabandistas franceses y holandeses en el comercio del Caribe. El final del conflicto en 1712 dejó victoriosa a la casa de los Borbones: no obstante, los términos en que se firmó el Tratado de Utrecht dejarían a Inglaterra en una posición favorable para continuar su expansión comercial y militar. Dos fueron las principales prerrogativas consagradas a favor de Inglaterra que se traducirían en un aumento considerable de su influencia en Hispanoamérica: la concesión del Asiento de Negros a la South Sea Company y el denominado "Annual Ship".5 A través de estas prerrogativas Inglaterra aseguraba la penetración de sus mercancías en los mercados hispanoamericanos, por vía de contrabando, en los barcos que transportaban los esclavos negros a Cartagena, Veracruz. Portobelo, La Habana y demás puertos. y por vía legal en el denominado "Annual Ship" o Navío Anual tos P rivile Utrecht terminar de PenTlisión. g ios ' así .. como La aplicación el del Tratado en general, sm embargo, estuvo los conflictos entre España de esde leJos de e Ingla- Colóna Fidel Castro. El Caribe, frontera imperial. La Habana,1981. 1 1 1 t i lt . l . terra os cua es. por e con rar o, se mu 1P1caron a todo lo largo del siglo XVIII. dejando al 3 Para una visión genemI del papel que jugó Jamaica como avanzada británica en el Caribe véase mi articulo "La coUas, Revista de la Universidad del Norte,1760-1840" Barranquilla, nexión jamaiquina y la Nueva Granada enVol., Hue- final a una España completamente exhausta y a una Inglaterra sólidamente poderosa. El continuo e nf rentamiento ang 1o-espano - 1 terua - t am- 18,diciembre,1986,pp. 9-19. 4 FemandBraudelha hechoun ejerciciode cuantificarel valor del mercadohispanoamericanoa finales del siglo XVIII para ilustrar mejorlos interesesde las grandesIlotenciasen arrebatárseloa España.Haciendocálculosbajosy sin contar bién otra connotación el contrabando por razones obvias, le asigna un valor de 30 millones de pesos de la época, equivalientes a 6 millones de libms esterlinas, una suma más ae cinco veces superior a la que toda Eur:opa recibia de la India. Sin dudas, em el gran tesora de la época. Braudel, Civilization and Capitalism 15th18th ceniwy, Londres, 1985, 3 Vols.. fil, pp. 421-422. 5 ' , y era la rivalidad anglo- ,,- Pam un conOCIm~ento d.e,estas dos ms?tuciones vease GeofTreyWalker, SpanLSh Polltics and Impenal n-ade !7001789. Londres 1979. Sobre el caso d,eCartage~: Nicolas Del Castillo Matl:ieu, La Llave de las IndIas, Bogotá, 1981. y Jc;>rge Palacios PrecIado. La trata de negros por Cartagena de IndIaS, 1\1nja. 1973. 59 francesa. ya que los lazos familiares entre los reyes borbones de París y Madrid hacían de estas dos monarquías unos aliados naturales frente a Londres. Eran pues. , mas de tres siglos de enemistad -aplicación relativamente fácil en el viejo continente. sin embargo. resultaría de complicada ejecución en hispanoamérica y en especial en aguas del Caribe donde se entre cruzaban las aspiraciones y británicas estadinenses. francesas. españolas y la de los patriotas de las diferentes encamizada la 9ue tenían Inglaterra y España cuando comenzo el siglo XIX bajo los fuegos de las tropas napoleónicas que se paseaban victoriosas por las campiñas del centro de Europa. No obstante vieja rivalidad entre lasInglaterra coronas de Madridesta y Londres. hasta entonces había adoptado siempre una posición. si no de- colonias de Fernando VII. El caso de Cartagena en este convulsionado período es bastante representativo de este cruce de banderas. biaría en 1804 cuando España se iría a la guerra contra la corona británica en alianza con Napoleón. A partir de ese año Inglaterra empezaría a trazar planes serios para lanzar una expedición contra ,las colonias españolas en América. especialmente con el fin de contrarrestar un previsible incremento de la influencia francesa en tan vital zona del comercio internacional. camente del intenso comerclo.9ue sosteruan los principales puertos de esa reglon con l~s ~ercaderes de Jamaica quienes, luego de la perdIda .del mercado de las colonias del norte. se hablan visto precisados a i~tens~icar su comercio con las posesiones espanolas. .Pese a que el contrabando era bastante extendIdo ~ su volumen considerable. y que durante los anos de las guer.ras europeas los puertos hispanoamericanos teman ;ue apr,ovisionarse en Jamaica. los ~omercian~esbritanicos. tanto residentes en Kingston como en la madre patria. no veían la hora de poder comerciar libremente con estos vastos territorios que aún ~jercían una seductora atracción sobre sus apetItos de ganancias. fensiva. colonias tampoco ofensiva contra España americanas: pero esta actitud y sus cam- El temor inglés contra Napoleón con respecto a las colonias españolas se hizo más dramático cuando Godoy permitió la entrada de las tropas francesas a suelo español con el fin de ocupar Portugal y obligar10 a bloquear a Inglaterra. su más antiguo y fiel aliado. Los incidentes de Bayona. que culminaron con la deposición de la familia real borbónica de la corona de Madrid y la elevación como nuevo monarca al hermano de Napo1eón. terminaron por convencer a Londres de enviar una expedición a Suramérica.6 Sin embargo. antes de partir la expedición, los primeros actos de resistencia del pueblo español contra las tropas napoleónicas llegaron a conocimiento del gobierno inglés que se apresuró a brindarle su completo apoyo; de esa manera las fuerzas que inicialmente se estaban preparando para atacar a España y sus colonias de ultramar ahora fueron despachadas a la Península para ayudar a los españoles a hacer1e frente a Napoleón. España e Inglaterra, enemigos a muerte por siglos, firmaron un armisticio y sellaron una alianza contra Francia. En adelante y por varios años. la política intemacional inglesa estaría subordinada a los intereses de dicha alianza: detener a toda costa el expansionismo francés apoyando la resistencia española. esta política de , .clusión 6 Un buen resumen de la política intemacional en el proceso de la independencia es el de D. A. G. Waddell, "International politics and Latin American Inde endence" en The Cambridge History 01 Latín America, Vo. 111,Cambridge, 1985, pp. 197-228. Para la posición británica en particular con respecto a la independencia de l~ Nueva Granada véase el excelente trabajo de Juan Diego Jaramillo, Bolívar y Canning 1822-1827. Bogotá, 1983. r 60 EN BUSQUEDADEL FAVOR INGLES , . ~ influencia britanica sobre las col°t;1as ,espanolas de la cuenca del C~ribe provem~ basi- Por ot~o lado. para algunos cuantos criollos que segulan de cerca los acontecimientos europeos. era claro que Gran Bretaña se consolidaba cada vez más como la principal potencia ,económica. militar y política del munct.°: fenomeno que les producla una gran admiracion al punto de ,desear que ella se convirtiera en,la nueva metropo1i y quedar bajo su proteccion. Tal era el caso de Pedro Fermín de Vargas quien, en un memorial diri~!do al .gobiemo inglés en 1806. titulado Relaclon sucmta del estado actual de las colon~s españolas en la América meridional, expoma las causas por las cuales dichas colOnia~ se independizarían de España e incitaba al gobIerno de Londres a apoyarlas para luego saca~les todo el provecho pü.sible a t~avés del comercl~ libre. En ~u exposicion, Fermm de Vargas analIZaba deterudamente las fuerzas militare~ que España podría oponerle a la Gran Bretana en estos territorios para llegar a la cond~ que para ésta sería muy fácil "el efectuar una mutación de gobierno en cualesquiera 7 G. Bell Lemus, "La conexiónjamaiquina...", op. cit. Para una mejor explicación del cambio de comercio de Jamaica puede consultarse la obra de E. Brathwaite, Creole Society in Jamaica 1770-1820, Oxford, 1971. de las provincias de la Arnértca mertdional".8 A pesar de las evidentes ventajas que para el comercio brttánico representaría el libre ~ceso al mercado hispanoamericano, el equilibrio europeo era su principal preocupación, y para 10grarlo debía mantenerse fiel a España para contener a Napoleón. Esta política estaba aún vigente cuando estallaron las primeras rebeliones en Quito, Caracas, Cartagena, Santa Fe y demás provincias contra España, 10 que pondría a prueba las verdaderas intenciones de la política I internacional británica. El dilema que se le presentó al gobierno de Londres entonces fue cómo mantener su alianza con España -que implicaba, además de resistir a Napoleón, no apoyar las rebeliones de sus colonias- y cómo no resentir a los líderes crtollos con su política para evitar que éstos buscaran la ayuda francesa.9 En 1810 Gran Bretaña se ofreció para hacer de mediadora entre España y sus colonias en Arnértca, que se habían rebelado contra la metrópoli; en contra prestación, los británicos pedían que se les garantizara el libre comercio con dichas colonias. Esta petición, sin embargo, encontró una tenaz oposición por parte de los comerciantes de Cádiz, quienes por más de un siglo habían gozado del exclusivo monopolio de ese comercio y se resistían a compartirlo con sus colegas británicos. 10Las discusiones sobre este asunto se prolongarían por varios años; mientras, en aguas del Caribe el intercambio comercial con la isla de Jamaica se multiplicaba de hecho.ll La posición brttánica obviamente no se limi- noamértca, ella también debía procurar impedir la penetración francesa mediante un cierto apo- yo a los movimientos independentistas; apoyo que debía ser disimulado para no crear el recelo y la,desconfianza de España, su aliado del momento. Esta política británica en el Cartbe y en relación con Cartagena y el virreinato de la Nueva Granada estuvo a cargo de las autortdades de Jamaica que demostraron tener gran habilidad en su aplicación, especialmente en el conflicto entre Santa Marta y Cartagena. Desde los comienzos del proceso de independencia tanto Santa Marta como Cartagena se apresuraron a conocer la posición que habrían de adoptar las autoridades británicas establecidas en Jamaica; ambas despacharon emisartos a Kingston con tal fin. Por su parte, observadores británicos fueron enviados a dichos puertos para conocer las intenciones de los líderes de la rebelión contra España y, en especial, el grado de penetración francesa en tales movimientos. Los enviados de Santa Marta y Cartagena se devolvieron con la notificación de la neutralidad británica, y a su vez los enviados brttánicos se devolvieron a Kingston con sus impresiones sobre la marcha de los acontecimientos en dichos puertos.12 A finales de 1810 ya aparecían claras las diferentes tendencias que habrían de adoptar en lo~ años siguientes Santa Mart.a y Cartag~na; mientras en este puerto las facciones de la elite crtoll~ se radica~izaban más ante la Sum.isión a Espana, en aquel ya se gestaba un movlll1iento realista que al final se adueñaría del control de la ciudad. A mediados de 1811 cuando las diferentes posiciones fueron irreconciliables es- taba a tener libre acceso al comercio con hispa -tallaron los conflictos río Magdalena. militares a 10 largo del En Cartagena, mientras tanto, se agudizaba un enfrentamiento entre dos facciones de su élite 8 Pedro Fennín De Vargas, Pensamientos Políticos, Siglo XVII, Bogotá, 1986, p. 202. Bolívar participará más adelante de la misma idea de Fermín De Vargas, ofreciendo incluso a Inglaterra, como contraprestación para su intervención a favor de la independencia de Venezuela y la Nueva Granada, a Panamá y Nicaragua; véase a este respecto su carta a Maxwell Hyslop, de 19 de maro de 1815, fechada en Kingston, Jamaica. en Vicente Lecuna IEd.) Obra-s:completas,de Bolívar, La Hab~a, 1950, V.ol. 1, p. 134. Vease tambien, J. D. JaramUlo. Bolwar y CanrW1g..., op. cit., pp. 204-200. 9 Sobre este punto, así como para buena parte del presente trabajo. se seguirá muy de cerca la obra de D. A. G. Waddell, Gran Bretaña y la Independencia de Venezuela y Colombia, Caracas 1983. 10 " " .realidad Mlchael P. Cost~loe, Spain and the Latin Amencan Wars"of l?dependence., The F~ee Trade Co?troversy, 18101820 , HlSpanic AmerICan HlStorical Revlew, Duke University Press, Vol., 61, N° 2, mayo de 1981, pp. 209-234. 11 Sobre el comercio inglés con las colonias hispanoamericanas del Caribe véase el articulo de Dorothy Goebel, " .." British. Tra,de to The Sparnsh Colornes, 1796-1823 , Amelican HlStoncal Review, Vol. XUIl, 1938, pp. 288-320. 12 Es interesante el informe que sobre la marcha de la independencia envió desde Cartagena el Capitán Francis Holmes Coffin al vice-almirante Stirling el 20 de marzo de 1812, En uno, de sus aparte~~ F. Coffin señalaba que todo indivi~uo de cIerta co,nsiaeraclon estaba aspirando a los cargas mas alt9s del goblemo de la ciudad. antes reservados sólo a 1 os espanoles europeos, pero un decreto de la Regencia ordenando no quehabía ellos tenido pudieran ser ocupados por los nativos en la efecto. siendo. por el contrario tan só!o una promesa para mantener uietos a los desconte~tos. Mas adelante Coffin informaba del i:-lcremento de la violencia contra los europeos y decía que si el Virrey fuera capaz d~ presentar una fuerza frente a Cartagena no había duda que a ella se unirían las personas de mayor consecuencia y de más propiedades. Public Record Oifice, Londres, ADM 1/263. 61 gobernante en torno a la independencia absoluta de España. enfrentamiento que arrastró consigo al resto de la población de la ciudad y que tuvo su desenlace el 11 de noviembre de 1811 con la dec]aración de independencia y la consecuente proclamación del Estado libre y soberano de Cartagena de Indias. A R DE' I ¡. .I Ü ." , , -+~~ " , ,¡t. l " + .hía.13 J..f~ .-¡¡:.u.t.. ,;;~ La presencia británica en Cartagena para entonces era más notoria. Con la declaración de libre comercio que la Junta Suprema de Gobierno había hecho en diciembre de 1810 la afluencia de comerciantes al puerto se hizo legal. de la misma manera que el tráfico de naves militares y mercantiles se hizo común en la baEn parte. la declaración de puerto libre tan sólo había reglamentado algo que ya de hecho se venía presentando desde años atrás. y era el intenso comercio entre Cartagena y Jamaica. y fue al amparo de estas relaciones entre comerciantes un -,' 'y -raciones ¡ O R \ D!¡ primer intento y cartageneros de intervención como se fraguó inglesa en los asuntos internos de Cartagena: según las declade José María García líder de la facción moderada opuesta a Toledo. la independencia j N británicos absoluta y quien había sido el primer presidente de la Junta Suprema de la provincia de Cartagena. a finales de diciembre de 1811 se reunieron en casa de Juan Ekar varios ciudadanos con algunos ingleses realistas ".,.con el fin de proceder a la prisión de los principales autores de la independencia y restablecer el Gobierno de la Junta sobre el pie que estaba antes del 11 de noviembre. contando ellos para el efecto con auxilios de un buque de guerra inglés que se hallaba en la bahía". 14La conspiración no prosperó por cuanto fue develada y varios de sus participantes fueron desterrados de la ciudad amurallada. 13 El decreto del libre comercio del puerto de Ca!tagena fue expedido ella de diciembre de 1810. Manuel Ezequlel Corrales (Compllador) , ErJemérides y Añales del EstadO de Bolívar, Bogotá, 1889, 2 vols.. 11. pp. 35-38. El Incremento del comercio de Cartagena con Jamaica no siempre fue cordial, varios incidentes se presentaron que estuvieron a punto de romper las relaciones entre el naciente Estado y la isla. Al respecto puede encontrarse los detalles de un Incidente en Manuel Marcellno Núñez, Exposición de los acontecimientos merrwrables relacionados con mí vida política que tuvieron lugarenestepaisdesde 1810, Cartagena,1864.p. 7. 14 Esta confesión se encuentra en el Alegato del Dr. García de Toledo, en el proceso que Morlllo le adelantó a los que más tarde serían conocidos como "los Mártires". Véase Roberto Arrázola. Los MáJtires responden..., Cartagena, 1973. p. 18. 63 ",i 'c LA MEDIACION DEL VICEALMIRANTE STIRLING A comienzos de 1812 el conflicto entre Santa Marta y Cartagena se hizo más cruento llevando la peor parte los cartageneros quienes sufrieron derrota tras derrota. siendo la más significativa la pérdida del control de Tenerife. puerto sobre el río Magdalena y punto clave para la navegación comercial con el interior del virreinato.]'5 Para Cartagena dicha pérdida significaba su aislamiento del resto de provincias. de las cuales aún continuaba recibiendo subsidios. y por ello su reconquista era de vital importancia para la supervivencia de su experimento político. En vista de la dificil situación militar en que se encontraba Cartagena, ante las arremetidas realistas de Santa Marta. se decidió enviar un comisionado a Jamaica para solicitar la intervención inglesa en el conflicto. Ignacio Cavero, antiguo presidente de la Junta de Cartagena, viajó a finales de marzo a Kingston donde sostuvo varias entrevistas con el vicealmirante Stirling a quien le expuso la necesidad que la Gran Bretaña tenía de despejar la vía del Magdalena para beneficio de su propio comercio. que si ella no podía hacer eso los cartageneros se verían obligados a: hacerlo por la fuerza, lo que no querían. Cavero le alcanzó a señalar a Stirling, inclusive. que él debía intervenir porque esas eran las órdenes del rey de Inglaterra: de otro lado le manifestó la gran confianza que el pueblo de Cartagena tenía depositada en los ingleses sin cuya garantía no firmarían ningún acuerdo. pero también le insinuó que si ellos no los asistían en sus peligros y dificultades se verían precisados a reclamarle protección a cualquier otra potencia en una clara referencia a Francia.16 Stirling le contestó a Cavero -y. mediante carta. a José María del Real. entonces presidente del poder ejecutivo del Estado soberano de Cartagena- que él no tenía ninguna clase de órdenes superiores referentes a intervenir en el conflicto con Santa Marta. y que sentía que ésta hubiera tomado a Tenerife y estuviera controlando la navegación por el Magdalena. 17Lo único que po- 15 Para un recuento de las luchas entre Santa Marta y Cartagena véasel~ obra de ~oberto Tisnes,..Laindependencia en la Costa Atlántica, Bogota, 1976. Tamblen la clasica Presionado por los reveses militares que seguían sufriendo a manos de los samarios, el gobierno de Cartagena accedió a enviar una comisión ante el Virrey Pérez compuesta por el propio José María del Real y Germán Gutiérrez de Piñeres. quienes se embarcaron en una nave de la armada británica rumbo a Panamá. El Virrey Pérez. .al tener noticias que el fin oculto de la comision era ganar tiempo para ~.allegada de unos refuerzos a ~.artagena. p!OCedlO a. a:restar a Del Real y a Gutlerrez de Pineres. Stlrlrng tuvo que intervenir nuevamente para que el virrey los liberara ~ pu~ieran r.egresar a su lugar de origen. En el rntenn hablan llegado alrededor de 600 refugia~os a Cartagena. entre quienes se contaba BollVar. los cuales fueron incorporados a las fuerzas de la ciudad pasando ahora a la contraofensiva. La presencia de numerosos franceses entre los refugiados llegados a Cartagena preocupó seriamente al virrey Pérez quien esta vez trató de ganarse el apoyo del vicealmirante Stirling exponiéndole la inminente llegada a Cartagena de tropas francesas despachadas desde las colonias de esa nación en las Antillas Menores.19 El virrey Pérez solicitó el bloqueo inglés al puerto como único medio para impedir el desembarco francés y el envío de armas a Santa Marta para resistir cualquier ataque. recibiendo. sin embargo. la 'misma respuesta que Stirling le había dado a Del Real y a Gutiérrez de Piñeres: tralidad oficial asumida por In g laterra la neule im- obra de José Manuel Restrepo trae muy bien detallada cronológicamente las luchas entre aQ4ellas dos ciudades, especialmente en su primer volumende la Historiade la revoluciónde Colombia,Medellin,Bedout,1974. 16Carta de CharlesStirling, Port Royal,Jamaica,28 de marzode 1812enP.R O.,ADMr/263, p. 72. 17C. Stirling a JoséMaría del Real,28 de marzode 1812, Port Royal,Jamaica,Ibídem. 64 día hacer por los cartageneros era ponerlos en contacto con los mediadores ingleses que irían a reunirse muy pronto con los españoles en esa isla. Cavero mostró escepticismo por el éxito de una comisión compuesta tan sólo por ingleses y españoles. y a su vez expresó que él mismo estaba autorizado únicamente para entablar conversaciones con el vicealmirante, pero que Cartagena estaba dispuesta a aceptar nuevamente a Fernando VII siempre y cuando se hicieran algunas concesiones comerciales y políticas que le garantizaran a las colonias su propia autodeterminación. Al final. a lo que se comprometió el vicealmirante Stirling fue a poner sus oficios para que el Virrey Pérez. recién nombrado para la Nueva Granada pero quien se encontraba establecido en Panamá, recibiera una comisión de Cartagena para discutir el cese de hostilidades y la reapertura del Magdalena.1B 18D. A G. Waddell, op. cit.,pp. 165-166. 19Sobrelas actividadesfrancesasen esteperiodoen la Nueva?ranadavéasedeAlbertoMiramón,Políticasecretade Napoleon en NuevaGranada,Bogotá,1978. diciembre de 1812 le elevó Palacio al presidente Monroe. éste contestó que estando en paz con España no podía tomar partido en sus contiendas internas. y le manifestó que como habitantes del mismo hemisferio su gobierno y el pueblo de los Estados Unidos. tenían "el más vivo interés en la prosperidad y bienestar de sus vecinos de la América del Sur, y se regocijarán de cualquier acontecimiento que tenga tendencia a promover su felicidad".21 Ante esta diplomática negativa, Palacio entró en contacto con el embajador francés en Washington, para exponerle el objetivo de su misión. Este, por carecer de facultades y recursos para proporcionarle, le sugirió seguir viaje a París, donde tendría la protección del Emperador. y su ayuda se limitó a costearle el viaje. En marzo de 1813 llegó Palacio a París pero las urgencias que vivía Napoleón en otros frentes le impidieron ocuparse de las inquietudes del enviado de Cartagena de Indias. Bergantín inglés. finales del s. XVIII. satisfacer el requerimiento español. La posición de Stirling. no obstante. favorecía más la causa de Cartagena por cuanto la neutralidad implicaba un cierto reconocimiento tácito de la legitimidad del movimiento de Cartagena. y por otro lado significó un alivio en términos de tiempo para que este puerto recibiera los refuerzos necesarios para hacerle frente a Santa Marta y derrotarla. La nueva ofensiva de Cartagena a finales de 1812 no solamente fue militar sino también diplomática. En octubre de ese año el gobierno envió a los Estados Unidos y a Francia al ciudadano Manuel Palacio como agente de negocios "con el fin de solicitar auxilios de armas y municiones y el reconocimiento formal de nuestra independet:lcia".2oAnte la solicitud que el 22 de 20 Carta de Manuel Rodriguez Torices a Camilo Torres, Cartagena, junio 10 de 1813, en Archivos, Academia Colombiana de Historia, Bogotá, NG5. diciembre de 1972, p. 81. Las instrucciones dadas a Manuel Palacio el 5 de octubre de 1812 se pueden leer en la misma publicaciónArchivos. en las páginas 91, 92 Y93. pedía Para ese entonces. Santa Marta se había recuperado expulsando las tropas cartageneras de su suelo e iniciando a su vez una contraofensiva con refuerzos provenientes de Cuba. En mayo arribó a Santa Marta. en calidad de Capitán General de la Nueva Granada. Francisco Montalvo. lo que vino a consolidar nuevamente a ese puerto como fortín realista. y más tarde como cabecera de puente para la reconquista de Morillo. En los meses siguientes. Cartagena intentó en vano someter a Santa Marta lo que acarreó varios reveses militares. al cabo de los cuales decidió más bien fortalecer la ribera occidental del bajo Magdalena para mantener abierto el comercio con las provincias del interior. Pero los fracasos que había tenido Cartagena en su enfrentamiento con Santa Marta no se limitaban al plano militar. más graves aún para su futuro serían los resentimientos políticos que su conducta había producido en las provincias del interior: en adelante ellas se negarían a prestarle un decidido apoyo tanto financiero como militar. Desde los comienzos del proceso de independencia, Cartagena había adoptado una postura bastante autónoma con respecto al resto de las provincias que conformaban el v'irreinato de la Nueva Granada, lo que le había granjeado cierta animadversión y predisposición, por parte de dichas provincias. que se iría haciendo más fuerte a medida que se sucedían las.-diferentesvicisitudes de la lucha contra España. Las razones 21 James Monroe a Manuel Rodríguez Torices, Wastúngton, 29 de diciembre de 1812, enArchiOOs, op. cit., p. 83. 65 -- de tal sentimiento se originaban desde antes de 1810 y eran básicamente de contenido fiscal y económico: a Cartagena se le acusaba de absorber y en muchos casos de dilapidar buena parte de los recursos fiscales de las otras provincias. 22 Los cartageneros siempre rechazaban esos cargos argumentando que su puerto era la antemuralla del virreinato y que su protección debía estar por encima de cualquier otro gasto común. y fue con ese pretexto. lógico y justificable en aquella coyuntura. como durante los primeros años de la independencia las otras provincias le enviaron subsidios para mantener la guerra que libraba contra Santa Marta. Estas ayudas, no obstante. se hacían también dentro del espíritu del Acta de Confederación de las Provincias Unidas de la Nueva Granada suscrita por las provincias de Antioquia. Neiva, Pamplona, Tunja y Cartagena en noviembre de 1811 y ratificada por otras provincias en el congreso de Villa de Leyva en octubre de 1812. La actitud de Cartagena. sin embargo. de no rendir cuentas de sus gastos, de recurrir al Congreso tan sólo en momentos de aprietos. y, en especial. de no cumplir las leyes de aduanas que se suponían comunes a todas las provincias, generaron un fuerte rechazo en las demás provincias. y en particular de Camilo Torres, entonces presidente del mencionado congreso. Torres en una de sus numerosas quejas contra Cartagena le hizo el cargo de darse una de una expedición a Caracas.24 Esta amenaza ya había sido prevista a comienzos de ese año por Bolívar. a la sazón en Venezuela, quien en carta fechada el 2 de febrero le sugería a Camilo Torres. presidente del Congreso de las Provincias Unidas. el pronto envío de una delegación conjunta de la Nueva Granada y Venezuela a Londres con el fin de obtener el apoyo de Inglaterra contra la inminente contraofensiva española: "Hay una medida que urge adoptar en el instante. y es poner a la Inglaterra en nuestros intereses. Ella ejerce ya una preponderancia decidida sobre los negocios de la España: y aun sin esto. si ella abraza nuestro partido como Señora de los Mares, burlará los esfuerzos de aquella. si se obstina en subyugarnos".25 Torres acogió la sugerencia de Bolívar y nombró para tal misión a los cartageneros José María del Real y Enrique Rodríguez: este último se excusó. no así Del Real. quien recibió las instrucciones de su misión en Cartagena.26 En las instrucciones iniciales. se le decía a Del Real que debía hacer una escala en Jamaica con el fin de presentar un reclamo por la detención de algunos barcos patriotas por parte de buques de la armada británica; además, las instrucciones especificaban que los emisarios (Rodríguez fue reemplazado por Matías Aldao y éste idea de superioridad sobre la Nueva Granada y de atribuirse derechos de soberanía absoluta.23 posteriormente por Juan García taban autorizados para negociar Poca disposición existía. pues, por parte de las provincias del interior para socorrer a Cartagena cuando el enfrentamiento con Santa Marta se recrudeció. privilegios comerciales a los británicos. Al llegar estas instrucciones. sin embargo. a Cartagenao Y ser conocidas por Rodríguez Torices y García de Toledo. éstos. alegando que el gobierno de las Provincias Unidas por su lejanía del Caribe no comprendía las dimensiones reales de la situación. procedieron a modificarlas unilateralmente en el sentido de no presentar ningún reclamo en Jamaica. sino directamente en Londres, "!I' lo más importante, auto~aron a .l~s comiSIonados a ~egociar la proteccion y au~~lo de la Gran Bretana of;~ciendo en. :ompensacIon ventajas comerciales. Las modifIcaciones fue- LA RECONgillSTA EN MARCHA Y LA NEUTRALillAD INGLESA En mayo de 1814 el rey Fernando VII es restituido al trono de España y con él el despotismo y el absolutismo como formas de poder. Una vez instaurado. Fernando VII convocó a varios individuos para que le aconsejaran los medios a seguir con respecto a sus colonias en América. Prevaleciendo entre ellos los partidarios de la vía militar. el 3 de octubre de 1814 se ordenó el envío del Río) no esconcesiones o 24 Los antecedentes y las contradicciones quesevivianen el seno de la monarquía española al momento de tomar esta decisión están muy bien expuestos en el opúsculo de Juan Friede, r-a otra verdad -La independencia americana vista por /os españoles, Bogotá, 1979. 22J. M. Restrepo, Historia de la..., op. cit., 193-194. La correspondencia de Camilo Torres, durante esos años está plagadaconestetipo de acusaciones contra Cartagena;véase 25 5imón Bolívar a Camilo Torres, Puerto Cabello, 2 de febrero de 1814, en Vicente Lecuna, compilador,Cartasdel U- bertador,NuevaYork, 1948,Vol.XI,pp. 22-23. por ej<:mplo !a pu?l1cada por. Anton~o Cacua ~rada en 26 Un sucinto relato de la misión de José María del Real se CustOOlOGarcla Rovlra, el estudiante ~ir, Bogota, 1983 y enCt;entra en el opúsculo de Sergio Elías Ortiz, Doctor José la ?ompilada en Arc~ivos, Vol. 2, N 3 de enero, 1968 -Mana del Real, Jurisconsulto y Diplomático, prócer de la dicl~~bre 1970, Bogotá, p~. 25-114.. independencia de Colombia, Bogotá, 1969. .C. Torres a C. Garcla Rovira, Tunja, abnl12 de 1814 en 27 José María García de Toledo a Joaquín Carnacho, CarArchivos, op.cit., p. 84. tagena, junio 18 de 1814, en "Correspondencia interesante", 66 67 con- las a fin puso le que lo g arre .acífico P .- o caprt 1974, edlclon, económ~s y ci~5; un , ogo s., vo 2 hIStoria, tra l nues XXXI de ul lograr pudo se tentativas. varias de luego Mas sg~ conlilCto~ grandesl .Los en Aguirre, Liévano 1ndalecio de 1815. de marzo de finales a sitiándola fuerza la: duda sin. es apasionadas más las De ri~a~sp~~cfalfdad. :~s la por Cartagena a tomarse resolvió mensajes. l~:n~~~to; ~~~~~ ~~cl:: ~doÍe~gd~a his~r;sa la dte pe~odo varios de cruce el tras y Castillo a requeridas este objetividad mayor con escribirse por aún Está 29 municiones de envío el Mompós en días varios 26. p. cit, op. Real, del María Dcx:torJosé 28 por aguardar de después quien. Libertador. el 20. y Cartagena de autorIdades las entre conflictos 1917,pp.18- 26y27,Cartagena, 25. Nos. Cartagenadelndias. . de Historia la de Academia la de Organo Historial, Boletín los comenzaron costa. la hacia Bolívar zarse movIli- de poco a ello. Por aristócratas. nados deno~i- los de caracterizados más exponentes los de uno como Castillo Del a forma misma como Gabriel con Piñeres. de Gutiérrez los de la de consideraba aquel que mientras Piñeres faccion la cuanto por federal. union la de cutivo de Gutiérrez hermanos los de promotor y aliado e~e- poder del encargado triu~virato el en brado firme un como considerado era Bolívar cuanto nom- fue cuando 1814. de finales a Fe. Santa por personal plano el rebasaba enfrentamiento para Torices Rodríguez presidente del partida este Pero ocultar. de trabajo el tomaba se dos la a violenta más tomó se lucha Esta ciudad.29 la los de ninguno que rencor profundo un daban en poder del dominio el por aristócratas. los mo guar- se quienes frente. a frente Castillo del nuel co- aquellos por denominada Toledo. de GarcIa Ma- a y Bolívar a nueyamente poner al tri~tas de la y demagogos. los denominada Piñe~es. pa- los a jugada mala una hacía le destino el Fe de Gutierrez hermanos los de faccion la entre Santa en reunir podido había se que fuerza rosa I?resento se independencia la de mism~ m1enzo nume- la por parte en originado época. aquella co~ el desde que conflicto el agudizaba se tanto. en respiraba se que optimismo el obstante No entre Cartagena. En Atlántico. el cruzar para alistaba se Morillo de expedición la apoyo. sioso final. an- del busca en Londres en británico gobierno objetivo su Marta. Santa hacia proseguir para del oficinas las recorría Real Del Mientras pertrechos demás y fusiles municiones. de ciable apre- cantidad una recibir debía donde tagena solas. Car- a llegar y Fe Santa de equipada salir debía sí por internacional reconocimiento el ganarse militar fuerza Esta español. desembarco de to que tendrían Estas españolas. colonias las de inten- cualquier impedir e atlántico litoral el do gobiernos tambaleantes los con comprometerse to- controlar poder para Maracaibo y Riohacha por sólo tan europeo equilibrio el en tagónico a luego siguiendo realistas. los de manos en aún pro- papel su arriesgaría no Bretaña Gran que Marta. Santa a liberara que expedición poderosa de convenció se Real Del británico. gobierno del una de envío el decidió se Bolívar. de tancias funcionarios con conversaciones innumerables ins- a y capital. esta En Fe. Santa a trasladó sus de final Al hispanoamericanos. insurgentes se cual el Unidas Provincias las de gobierno los a armas suministrasen le británicos ditos al Cundinamarca de sometimiento el con unidas súb- que expresamente prohibía se y Madrid. nuevamente estaban provincias las entonces. ra terna que interno conflicto el en neutralidad Pa- Granada. Nueva la y Venezuela a sino ciado. s.U reiteraba aquella cual del virtud en VII. nando anun- había se inicialmente como Aires. Buenos Fer- propio el con ocasión esta en España. con a destinada estaba no Morillo de expedición tratado nuevo un firmado había Bretaña Gran la que supo se cuando entendimiento al paso dar la año mismo ese de julio en vanas: fueron Real y apaciguarse a tendieron interior, del vincias Del adelantó Londres en que diligencias Las pro- las en también sino Cartagena en vivían se sólo no que internas. luchas estas Todas septiembre. de 27 el llegó donde Londres. hacia luego y Jamaica a rumbo Herald aristócratas. guerra de inglesa fragata la de bordo a 1814 los de faccion la de como considerados ambos de agosto en Cartagena de Real Del partió finales C~rtagena. de tropas las de general mandante instrucciones estas Con costas".28 y puertos tros co- como Bohvar- de enemigo -viejo Castillo nues- en desembarquen extranjera nación otra del Manuel -de y provincia. la de Gobernador de o inglesas tropas que en alguno. pretexto con como Amador Dios de Juan de 1815 de enero en ni alguno. caso en mismo. lo por convendrá "No nombramiento el y Piñeres de Gutiérrez manos tajantes: fueron instrucciones las cual el sobre her- los de definitivo destierro el con cluyendo punto existencia. su menos mucho y Unidas cias con- continuacion a siguieron rebeliones y tines Provin- las de derechos los comprometer podían mo- esta~o. de golpes revueltas. de sucesion Una concesiones las caso ningún en que expreso dejó poder. el monopolizar de trató vicepreSide?te. se pero central gobierno el por aprobadas ron Gmbado del s. XVIII. (MuseoNacional de Arte Antiguo, Usboa). tiendas; Bolívar a pesar de ello. decidió renunciar a su encargo. disolver su ejército y marcharse hacia Jamaica no sin antes lanzar una violenta diatriba contra las autoridades de Cartagena a las que acusó de querer elevar la provincia a la categoría de una potencia independiente del Gobierno General. de tener "...aspiraciones al capitalismo de la Nueva Granada. al monopolismo del comercio general y a composición en todo evento de los españoles".3o Bolívar consideraba que esa actitud se debía a que "una gran parte del pueblo de Cartagena es aristócrata. y el bajo pueblo es tan cuitado que a todo se presta".31 Ya para entonces Morillo había arribado a las costas de Venezuela, y se sabía que su destino inmediato era la Nueva Granada. Ante esta amenaza, el Gobernador Amador procedió a nombrar una comisión con destino a Jamaica para que procurase de las autoridades británicas auxilios materiales de toda especie, el apoyo abierto al gob.iernopatriota mediante el envío de fuerzas navales que impidieran el inminente bloqueo español, y, de ser posible, el despacho de un regimiento de infantería y un destacamento de artillería para guarnecer Cartagena y sus fuertes. De no ser viables estas solicitudes se pedía 30 Oficio de Bolívar al Presidente de la Unión. Turbaco. marzo 26 de 1815. en José Manuel Restrepo. comp.. 1)0cumentos importantes Los requerimientos cartageneros no tuvieron ningún efecto en las autoridades británicas quienes adujeron en esta ocasión que no estaban auto~dos por Londres para disponer de sus fuerzas para el fin propuesto y que lo más que podían hacer era .transmitir las solicitudes al gobierno con sede en esa capital. Por otro lado. al conocerse en Santa Fe la determinación de de Nueva Granada. Venezuela 11Co- lombia, 2 volS.. Bogotá, 1969.1,pp. 244-247. 31 Ibídern,p. 245. 68 entonces que Gran Bretaña favoreciera indirectamente a Cartagena obstaculizando el bloqueo español con el expediente de que éste peIjudicaba el comercio británico.32 Para lograr estos objetivos los comisionados -nuevamente Ignacio Cavero y John Robertson- podían esgrimir tres clases de argumentos: que el reconocimiento de la independencia de la Nueva Granada se estaba adelantando (con Del Real) en Londres. que ante el resurgimiento de Napoleón en el escenario europeo la seguridad de la Nueva Granada estaba mejor garantizada por un gobiemo independiente aliado de Gran Bretaña. y. finalmente. que de operarse la reconquista española de la Nueva Granada. se produciría un baño de sangre que conmovería a la humanidad. En últimas. y si los anteriores argumentos no prosperaban. los enviados estaban facultados para ofrecer "en depósito" a Cartagena hasta que se conociesen los resultados de la misión en Londres. (Como se sabe. Del Real no logró el objetivo de su misión.) 32 D. AG. Waddell,GranBretaña... op. cit., pp. 178-1SO. Cartagena con de enviar semejantes sin consultar instrucciones. inmediatamente y en esa fue forma misión seguido desaprobada expresa. los encontraban en rallada de de y se inminente por toda esperados ya impidieron biemo fuera establecido de la extemas no rrez era la mejor. Piñeres. mando ron de su las reveses que. gado. Ante de de Jamaica auxilio por de que con de el rigor del las la aceptar y Roberston. el traordinaria el fin de a la proponer legislatura de a sus miembros que considero capaz de con el de vía en España por la la en salvarla". go- ra he- jestad gobernador a hacer Cartagena con me- A renglón fue responsable Herrán en una carta de 7 de junio de 1869 de esta Sin de otra la actuar de esta antiguas legisladores la se de unáni- respecto a la fue autorizado de una resolución a las los estado de su en Santa Fe", de imparta Antes de presentes parte a la plaforma- fueron abastecimiento in- de la ciuno eran la legis- latura acordó que el Gobemador dispusiese de todo lo requerido para llevar a cabo la proclamacion de Cartagena de Indias bntaruca. Al la día parecer. y segun bandera siguiente -- algunos relatos británica fue se despachó izada la de la epo- en la ciudad y comisión con- .. de las Jamaica. relaciones h -. abian variado. se sionados y reiteraron flicto entre España como de Custodio era de Londres sus aún el tey el auto- esperarse y Madrid rehusaron a recibir su neutralidad Y molestamos op. cit., pp. 179-183. que una ridades cuanto quedar en las guarniciones de la Costa y del tránsito; y deducidos .estos rtúmeros de la fuerza co.n que !vforillo desembarco en nuestra costa, no quedana ningun soldado Ma- autoridades dad y sus perspectivas futuras. las cuales precisamente halagadoras. Finalmente sus el a de propa- comisión considerándonos de Su Majestad protección". vi- hechos expresar proclamación y despachar les reconquistar Estos a daba se numero de sitio, el que consecuencia pudiera con- y se que colonias. solemne de que que situación con quien autorización del el intenci0nes sus esta a fin en resultados formada por el senador Ennque Rodriguez. niente coronel Narciso de Francisco Martín comerciante in g lés Wellwood H y slo p . Las que que en uno de los patriotas más comprometidos en, la causa de la ~ndependencia y de l?s que mas influjos ejercían. en aquella epo~a.)a de.m°stracion con. que probaba matematicamente, se.gun él decla, que nada deblamos temer: tomaba en cuenta el. GarcíaRoviera. le- más ca. al disponible emla medida recuerdo~ de esos días escribió lo siguiente: "Aún después q1;le los espanoles,ocuparon a Cartag,,;na, el gobierno de la t!mon ninguna medida importante tomo. Me acuerdo haber oido a hombres que Morillo había perdido durante perderia por las enfermedades. el que perdería del sitio y por falta de recursos, el que habría la y direc- legislatura escucharon de la comisión enviada los de los dominios za una poderosa al enterarse del Pedro Alcántara en la que evoca por procedente de y sus "...la Jamaica lizar actitud del resto de provincias por cuanto desde comienzos de año no había hecho ~~ que pregonar lo bien abastecida que deja estabadey laserinexpugnabllidad interesante la de actitud sus murallas. que tuvieron No obstante, algunosno. personajes del gobierno central en Bogotá arribo de Morillo a las costas de Cartagena; Para el bien ofrecer Bretaña". desfavorables Británica formados 33 En parte la misma salvarlo para su conformidad del Gobemador. avisare ex- provincia "la única que miembros encontraban había 1808. era alguna conocimiento fuerza enviadas sesión Gran a Jamaica. sus en varios prolon- en memente puesta en de Estado el amparo manifestaran anterioridad cuenta puso del sólo que se proponía a los Los miembros de la seguidamente el informe movieron octubre o no lo que había si tenían les tan democrático ello la con ella insurgentes del reiteró que lue- cuando "bajo de de Morillo: a partir Cartagena incir- anarquía tanto del territorios capitulaciones gobiemo la co- cuales secuencia. Gutié- propuestas en y para Monarca los tropas de de lo Amador él proponía cosas por dificultasitio el convocó del las apropiado un todo. de conveniente negativa las ción la población. misiones de 13 de en y de bargo. de Bolívar. la existencia supremo gislatura sobre se tradujo y conocida Cavero lo de las a salvo pena- inclemencias de la península suerte los defensa Amador dida de creado apoderado ayudas las disputas el desespero el fracaso biemo chas las lo junto busca interior haber pusiera las desde de si entrar más de Cartagena las tratamiento provincia el go- si la por los por ocupación lo dado recuento el sitio parte sería encima requeri- posibles y partidarios operaciones aumentaron los Pero su la ya que la vieja polarihabía vuelto a exacerbar de algunos exiliados pro- Pronto coordinación que Fe tomó en de provi- realistas con la el gobemador resultados tropas a las el especie. de los las respecto de Jamaica de surtieron Santa tampoco eran diferentes zación de facciones se con la llegada al puerto venientes urgente cartageneros.33 con con y en indiferencia en los ciudad no la provinci~ des- el gobiemo envío porque o por mientos la se con por España había un sufrido agravado y por cundantes requeri- asedio: habían viemo go se preguntaba habían medidas de año amulas hizo había antes Morillo. militar ante el que Desde monetarios emisarios se ciudad de las el solicitándole medidas a la agosto. como recursos enviaron siones: de todas partidas recaudar Unión el sitio civiles enfrentar pacharon cartageneros avanzadas a tomar para de las tanto comenzado das isla. a finales llegada autoridades de la comenzó la fin comisionados que mienzos se Mientras Amador lidades consideradas por no los comien el concolo- -- nias. Rodnguez y De Francisco Martm permane- 69 cieron durante un tiempo en la isla actuando para el gobierno de Cartagena mientras que Hyslop. luego de reclamarle al gobierno de Londres no haber aceptado la oferta. retornó a Cartagena. donde permaneció hasta la caída de la ciudad el 6 de diciembre cuando fue hecho prisionero por los soldados de Morillo.34 Para entonces la pugna interna en la ciudad había culminado con una rebelión de la facción de los seguidores de los Gutlérrez de Piñeres compuesta en su gran mayoría por la oficialidad venezolana. quienes pusieron al comando militar de la ciudad al general José Francisco Bermúdez. tres días después de la reunión de la legislatura. esto es. el 17 de octubre.35 pública en virtud de la cual las provincias periféricas debían servir tan sólo como muros protectores de las del interior.37- Este conflicto de tendencias centrífugas y centrípetas entre Cartagena y Santa Fe de Bogotá habría de trasladarse a la república y sería el origen de no pocos conflictos entre ambas ciudades hasta la consolidación final del centralismo como forma de gobierno. Sobre las consecuencias de una dominación inglesa de Cartagena de Indias. sólo especulaciones se pueden esbozar y quizás una de las mejores planteadas sea la que Hernando Téllez hiciera en El Tiempo el 8 de mayo de 1962: Estos hechos muestran que Cartagena en el período estudiado respondía en su totalidad a la geopolítica del Caribe; éste era el escenario donde se jugaba su suerte como Estado independiente y de ahí los permanentes conflictos con el gobierno de las Provincias Unidas con sede en Santa Fe. que evidentemente tenía una concepción centralista de lo que consideraba era la re- A mí me ha parecido siempre una desdicha histórica el hecho de que la resistencia criolla y española hubiera impedido siquiera un parcial dominio inglés en algunas zonas del virreinato. pues el experimento de esa contraposición. de ese contraste de imperios. de razas. de mentalidades en la América hasta entonces dominada por España. habría producido resultados diferentes de los que conocemos. Del choque o convergencia de dos influencias contradictorias sobre una población en proceso de estructuración espiritual se hubiera originado otro tipo de consecuencias. Una influencia inglesa tal vez habría aminorado. aliviado ciertos defectos del carácter. de la actitud intelectual que la criatura de estas latitudes iba a tener indefectiblemente. sometida a la única y poderosa presión de .lo español.38 34 Un interesante recuento de las actividades de los hennanos Maxwell y Wellwood Hyslop en Cartagena durante los años de 1811 a 1825 se encuentra en R A. Humphreys. "British Merchants and South American Independence", n-adition and revolt in Latin America. Liverpool, 1969, pp. 100-.129. Sobre las actividades que De Francisco Martín y Rodn~ez adelantaron posteriormente en Kingston son pocas las informaciones que se tienen, parece ser que tu,vieron conflictos con l. Cavero a juzgar por una comunicacion que ellos mismos. enviaron a C~rtagena el 30 de noviembre de 1815 desde d~cho puerto. Vc;ase esa carta en Manuel ~~uiel Corrales, Autógrafos de ~ personas de gran d~tincwn y elevado carácter ofICial, edicion fascimilar de Carvajal, 1983, hojas 80 y 81. 35 Resulta curioso para la interpretación que varios autores le dan a la rebelion que encabezó Bermúdez el 17 de octubre. cOnstatar en el acta de la legislatura que ésta aparece firmada por el propio General Bermúdez mas no así por Manuel del Castillo. 36 Véase la carta de Luis F. de Rieux a Santander, Turbaco, agosto 30 de 1821, en Roberto Cortázar, comp.Crrespondencia dUigida al General Santander, 15 vols., Bogotá. 1964, XI, pp. 155-156. 37 Sobre este particular nada más ilustrativo que lo que escribió en sus Memorias, José Hilario López cuando se encontraba en Cartagena cumpliendo el encargo del gobierno central de preparar a la ciudad contra un posible ataque inglés: su concepto del "honor nacional" tan sólo se aplicaba a ras provincias del interior: "...los cuerpos de guarda nacional se instruían y el entusiasmo que reinaba en toda la república prometía que, aun cuando se perdiese la costa por la inmensa superioridad de fuerzas y de toda clase de recursos de que disponía el gobierno inglés, al menos se salvaría el honor nacional ;y e1 interior de la república sería preservado de la invasión'. José Hilario López, Memorias, Medellín, 1975, p. 376. 38 H~a.ndo Téllez, Textos no recogidos en libro, 2 vols., Bogotá, 1979. 11,pp. 589-590. No serían los criollos cartageneros los únicos en entregar la ciudad a la Gran Bretaña. seis años más tarde y cuando eran las tropas republicanas las que sitiaban a Cartagena. su gobernador español Gabriel de Torres y Velasco. también le hizo la misma proposición a las autoridades de Jamaica. la cual fue rechazada por éstas.36 70 Acta de la legislatura de la provincia de Cartagena 13 de octubre de 1815 'r , ;\)C¿ Este documento fue tomado del Public Record OIfice. Londres. en la sección Admiralty Records. ADM 1/266. págs.. 140 y ss. ~ n la ciudad de Cartagena de las Indias a trece de Octubre de 1815. año quinto de la República. reunida extraordinariamente la legislatura compuesta de los señores presidente Don Luis José Echagary. Senador Henrique Rodríguez. Don Juan Bernaceo que asiste por ausencia del señor Senador Juan Ignacio Cavero. los Representantes señores Don Ramón Ripollo Pedro Romero. Juan Salvador Narváez. Antonio Carlos Amador y Mateo Vega. con asistencia de mí. el Secretario, en virtud de citación del Excelentísimo Señor Gobernador del Estado en el salón principal del Palacio de Gobierno, el mismo señor Gobernador abrió la sesión con el discurso siguiente: "Señores del Senado y Cámara de Representantes, manifestar a ustedes la triste situación de la plaza después de cerca de 60 días de sitio y proponerles la única medida que considero capaz de salvarla es el objeto de esta convocación. Es notorio señores que aún no habíamos respirado del sitio de Bolívar prolongado hasta el mes de Mayo cuando a mediados de Agosto se presentó un nuevo asedio de los españoles. así no hubo tiempo para reemplazar los víveres consumidos en el primer sitio. Aunque el Gobierno libró inmediatamente las órdenes más estrechas a todos los Departamentos del Estado para llenar el déficit de sus Almacenes, o por falta de actividad de los comisionados o por la dificultad que siempre presenta la estación de las lluvias. apenas pudo llegar la quinta parte de los que se había recolectado. Todo el resto cayó en poder de los enemigos y la plaza quedó reducida casi al . ."j 'deplorable estado en que la dejaron las hostilidades de Bolívar. Sin embargo. a favor de más rigurosa economía hemos resistido dos meses de sitio. pero ya escasean los víveres y ocupada toda la provincia de partidas de españoles que con las más' duras vejaciones oprimen los lugares y sacan de ellos la subsistencia de sus tropas precisan ha de llegar el día en que lefalten a la plaza absolutamente. El triste recurso de las plazas sitiadas. de romper las líneas del enemigo. por las erifermedades propias de la estación no está en el día a nuestro alcance. ¿Entraremos en capitulaciones con un enemigo que no se ha dignado hacemos ni aún la menos intimación. que nos trata de insurgentes porque en los Gobiernos nulos y tumultuarios que se sucedieron en la Península. la América por no exponerse a los horrores de la anarquía tuvo que tomar medidas para gobernarse provisionalmente y de cuyas promesas en fin según los repetidos ejemplares de mala fe, de perfidia y de atrocidades no debe fiarse ningún pueblo? ¿En este coT1flicto qué partido nos queda que abrazar? Existir, ser feliz. son los primeros votos que forman el corazón del hombre y este es también el primero. o el único objeto de la sociedad. No fue otro nuestro designio cuando al vemos abandonados del Monarca Español. sin esperanzas de recobrarle y héchose eljuguete de los Gobiernos que el mismo Fernando VII ha declarado ilegítimo y tumultuarios. No fue otro. digo, el objeto que nos propusimos al proclamarse nuestra independencia y constituir un Gobierno Democrático y asegurar nuestra existencia y felicidad. Creímos en aquel tiempo que especialmente asociándonos como lo ejecutamos con las más de las provincias del interior lo lograríamos. ¿Pero podemos dudar en estas circunstancias de que ya no nos es posible .sostener la actitud" de Independencia? Sea que 71 las provincias o el Gobierno General no haya podido prestamos auxilios o que remitidos no hayan llegado por las circunstancias de la provincia todo nuestros recursos están agotados. "Es necesario procurar nuestra asistencia y felicidad por otros medios. Salvemos el Estado de los horrores que debemos prometemos de un enemigo resentido y sanguinario. ofrezcamos la provincia a una Nación sabia y poderosa. capaz de salvamos y gobernamos. pongámosla bajo el amparo y dirección del Monarca de la Gran Bretaña. Sin embargo. Senadores. Representantes. si vosotros discurrís otro medio capaz de salvar a nuestros comitentes o el que os indico presenta algunos inconvenientes espero me lo manifesteis. seguro de que nada anhela mi corazón sino acertar a desempeñar la honrosa conftanza que he merecido a los pueblos que oprimi~os hoy. abocados y reducidos a la fuerza a la incapacidad de expresar sus votos descarga en nosotros el cuidado de su salvación". Su excelencia se leyesen las instrucciones libradas a la comisión cerca del Gobernador de Jamayca en solicitud de auxilios de dinero. y armas a quien se previno que en todo evento se pusiese la provincia en depósito en manos del Gobierno de Gran Bretaña hasta el éxito de la comisión entablada en LOndres. asegurando que hasta ahora no se han tenido favorables resultas. La legislatura se tomó todo en consideración y habiéndose reducido la discusión a apoyar la moción de su excelencia haciendo muchos de los vocales mérito de la correspondencia de España interceptada en la Corbeta Neptuno apresada por nuestros corsarios. en que se manifiestan las intrigas y maquinaciones del gabinete de Madrid sobre estos dominios. y la impotencia de la Nación Española incapaz de proteger y solo poderosa por su saña y despecho para oprimir y derramar torrentes de sangre en la Provincia. convinieron todos con unanimidad en que en las circunstancias que se han manifestado la medida propuesta es la única capaz de salvar el Estado y que respecto a que por acuerdo de la legislatura de 22 de Marzo último el Excelentísimo Señor Gobernador está autorizado para obrar discrecionalmente y salvar la patria por los medios que le parezcan más convenientes sin sujeción a leyes fundamentales. su excelencia procediere cuando y como tuviese por conveniente a hacer la solemne proclamación de su Majestad Británica y despachar una comisión que avisare de esta resolución a las autoridades de Jamayca a fin de que considerándonos una parte de los dominios de su Majestad imparta a la plaza una poderosa protección. Pero como este mediQ no .debe adoptarse mientras no conste de la insu- 72 fl.Ciencia del Estado para mantener su actitud. la legislatura acordó se consLútase a la Junta del Estado Mayor Militar y Teniente Gobernador si quedaba alguna esperanza de recibir socorros de víveres o de procurárselos por medio de alguna salida contra el enemigo y su Excelencia dispuso inmediatamente se citasen sus vocales que son los Jefes que (...) y habiendo expresado estos su concepto manifestaron que los víveres ya escasean demasiado que no había esperanza de reti.nirlos. ni de la provincia por estar ocupada y oprimida del enemigo ni de los puertos vecinos por el bloqueo que forman las embarcaciones españolas. en cuyas manos han caído varios de los buques que venían a socorremos ni según las atenciones de la plaza amenazada de un desembargo por la Escuadra y las enfermedades que reinan en la tropa. no era posible hacer salidas. asegurando que sinembargo de esto la tropa decidida a sostener cualquier partido que tomase el Gobernador como no fuese capitular con los españole.s y caer otra vez en su poder sufría con heroica resignación las privaciones a, que nos ha reducido el asedio. Y oído este relato la legislatura acordó que el Gobernador, en uso de susjacultades dispusiera cuando y como tuviese por conveniente la proclamación del Augusto Monarca de la Gran Bre- taña con los ténninos antes acordados comunicando a nuestra legislación en Londres las instrucciones convenientes para asegurar bajo su augusta sombra y poderosa protección la prosperidad a que aspiran sus nuevos súbditos de Cartagena y hacer en su nombre el juramento de fidelidad y concluido el acto se finnaron todos los señores concurrentes de que yo el presente secretario certifico. Mariano Mantilla. Mayor General. José Benito Femández. Secretario de la Le-gislatur I neral. Manuel Anguiano. Inspector de los Cuerpos Facultativos. Manuel Cortés y Campomanes. Comandante General. Juan Boya. Comandante de Artillería. Excelentísimo del antecedente provincial, acuerdo de la re- íntimamente penetrado de los motivos que lo causan y siguiendo el espíritu y las intrucciones con que me hallo del Gobierno General de las Provincias Unidas y usando de sus facultades le imparto en cuanto sea necesario su aprobación y declaro que por parte del Estado o de las Provincias Unidas no se opondrá el menor inconveniente a la ejecución de cuanto se proviere. Juan de Dios Amador. Gobernador de la Provincia. Luis José Echagary. Presidente de la Legislatura. Henrtque Rodríguez. Senador Consejero deEstado. Juan Bernaceo. Senador Suplente. Juan Elías López. Teniente-Gobernador Consejero de Estado. Ramón Ripoll. Sub-Presidente. Pedro Romero. Representante. Mateo de Vega, Representante. Antonio Carlos Amador. Representante. Juan Salvador de Narváez. Representante y Sub-Jefe del Estado Mayor. José Francisco Bermúdez. Comandante Ge- nstruido presentación Fdo. Juan Marimón Comisionado del Gobierno General. DE JUAN DE DIOS AMADOR AL ALMIRANTE DOUGIAS Cartagena de América, 14 de Octubre de 1815 Señor: El señor Senador Henrique Rodríguez, Teniente Coronel Narciso Martín y Sr. Hellwood Hyslop que entregarán a vuestra excelencia este pliego van autorizados por este Gobierno para hacer a vuestra excelencia las manifestaciones consiguientes al objeto contenido en el Acta celebrada el dia de ayer por la legislatura provÚlcial que en copia se acompaña. I! Grabado del s. XVIII. (MuseoNacional de Arte Antiguo, Lisboa). 73