FORO NACIONAL EDUCACIÓN DE CALIDAD PARA TODOS POSICIONAMIENTO ACERCA DEL FINANCIAMIENTO DE LA EDUCACIÓN 1. Antecedentes El Foro observa con preocupación que la política de financiamiento del sistema educacional en Chile se ha constituido en un importante factor que pone en riesgo el cumplimiento del Derecho a la Educación. Derecho que debiera estar consagrado – y no lo está – en la propia Constitución de la República. La combinación de aportes privados y estatales a establecimientos de propiedad privada –a los que no siempre los mueve un ideal de servicio- no ha impactado en la mejora de la calidad de la educación como se esperaba, sino que ha promovido un grave problema de segmentación social, reduciendo las posibilidades de que los estudiantes se formen en el intercambio entre personas de origen social y capital cultural diverso. Nuestro país es uno de los más segmentados social y económicamente y la lógica de mercado que se ha instaurado en la educación –junto a un debilitamiento del rol regulador del Estado- ha llevado a que ésta se desdibuje como factor de igualdad y de profundización de la democracia. Estamos convencidos de que a mediano y largo plazo la segmentación de los jóvenes en la educación no hará más que profundizar seriamente las diferencias de clase que ya existen, incidirá en dinámicas sociales contrarias a la inclusión social, la gobernabilidad y la participación, debilitando en último término la democracia del país. Observamos, también, con gran preocupación una cierta naturalización de esta situación donde las grandes políticas estatales de financiamiento –más allá de algunas iniciativas como la subvención preferencial- no están orientadas sustantivamente por un ideario ético de igualdad de oportunidades para todos y todas las estudiantes de nuestro país. 2. Qué es lo que observamos - El gasto público del Estado -4,1 % del PIB- en educación, si bien ha ido en aumento, no es el que se necesita para alcanzar la igualdad de oportunidades para todos y todas. El Gasto público de los países de la OECD es cinco veces 1 más que el de Chile por estudiante en enseñanza primaria y secundaria y tres veces más en la educación terciaria. - La inversión privada en la educación -3,1 del PIB (principalmente de las familias)- constituye una de las más altas del mundo, pero ello lejos de favorecer la calidad e igualdad de oportunidades no ha hecho más que segmentar la población estudiantil y generar un éxodo de estudiantes de colegios Municipales hacia colegios particulares subvencionados, debilitando de paso, lo que aún queda de educación pública. - Los hechos muestran un acelerado aumento de colegios particulares subvencionados en desmedro de los colegios municipales. En los hechos, esto significa la progresiva desaparición de la educación pública gratuita y se explica –en parte- por la situación de desventaja en que se encuentra la educación municipal frente a los establecimientos de propiedad privada que reciben financiamiento del Estado. Así, si bien la subvención es igual para establecimientos municipales y particulares subvencionados, estos últimos pueden seleccionar a sus alumnos, no se rigen por el Estatuto docente para sus profesores y pueden cobrar a las familias. - La segregación de los estudiantes en las escuelas y liceos de acuerdo a la capacidad de pago de sus familias –sumado a la distribución geográfica de la pobreza en las ciudades - redunda en que las escuelas municipales van concentrando aquellos alumnos que han tenido menos oportunidades y estímulos para desarrollar todos sus talentos y potencialidades. Paradojalmente, son el tipo de establecimientos que dispone de menos recursos y apoyos para generar estrategias de enseñanza pertinentes a estos alumnos. - Nos asiste la más clara convicción que el compromiso de las familias con la educación de sus hijos constituye un factor que ayuda a la calidad de la misma. Sin embargo, no hay evidencia que muestre que el mero aporte económico de las familias en los colegios particulares subvencionados impacte en la calidad de los aprendizajes de los niños o jóvenes, en tanto las diferencias observadas se explicarían principalmente por la selección de alumnos que realiza este tipo de escuelas y no tanto por una mejor intervención del establecimiento.1 - No se sabe aún si la subvención escolar preferencial –y la lógica de servicios de apoyo, consultorías o “intervenciones” externas de los establecimientos- Al respecto, la UNESCO en el Informe de Seguimiento de la Educación Para Todos (EPT) en el mundo para el año 2009, señala: “Otro tanto ocurre en Chile, un país donde los resultados del aprendizaje son decepcionantes, pese a que se le suele mencionar como modelo en las reformas de gobernanza relativas a la elección y competencia. Las escuelas privadas subvencionadas por el estado no logran mejores resultados que las municipales, una vez que se han efectuado las rectificaciones correspondientes para tener en cuenta el estatus socioeconómico. Las experiencias de Chile y Estados Unidos no proporcionan una prueba categórica a favor de la tesis de que la elección y la competencia entre escuelas mejoren la calidad y la equidad de la educación.” 1 2 impactará de manera sistémica y sustancial en la igualdad de oportunidades de aprendizaje para los y las estudiantes y en la mejora de la calidad de la educación en aquellos establecimientos que la reciben. 3. Nuestras convicciones - La educación es un derecho, un bien público al cual todos los y las estudiantes debieran acceder de manera gratuita, y respecto al cual el Estado debe garantizar las mismas oportunidades de aprendizaje para todos. No pensamos que el Estado debe constituirse como el único actor responsable de entregar educación, pero mercantilizarla -es decir concebirla como un servicio más, cuya oferta y calidad está regulada por el mercado y capacidad de pago de cada familia- constituye una grave vulneración al derecho y dignidad de las personas. - La actual “arquitectura” del financiamiento de la educación en nuestro país, ha favorecido la privatización y la progresiva desaparición de la educación pública gratuita, afectando de manera creciente la realización del criterio del bien común como valor rector en educación. - La competencia por la subvención del estudiante y el “libre mercado” para que particulares se instalen con establecimiento escolares como una empresa más, perjudica al conjunto del sistema ya que va dejando a las escuelas municipales con alta concentración de alumnos que han tenido menos oportunidades de desarrollar sus talentos y potencialidades o con necesidades especiales. - La segmentación de los estudiantes en los distintos tipos de establecimientos, según la situación socioeconómica de sus familias, atenta contra la calidad de la educación, en tanto una escuela que no favorece –o no permite- en su seno la convivencia entre estudiantes de distinto nivel socioeconómico y de distintas realidades no es de calidad, y falla en cumplir el aporte fundamental que la escuela como instancia de formación hace a la democracia. - Nos anima la convicción de que otros paradigmas y políticas de financiamiento de la educación son posibles: políticas que fomenten la igualdad de oportunidades, la inclusión social, la mejora de la calidad para todos, la redistribución de recursos entre Municipios ricos y pobres, la colaboración entre escuelas. 4. Nuestras propuestas - Elevar la inversión pública a 7 % del PIB como lo recomienda la UNESCO. El interés de Chile de incorporarse al conjunto de países que conforman la OCDE debe llevar –coherentemente- a que el gasto público en educación sea similar al de aquellos países. Para lograrlo es urgente una Reforma tributaria que grave las 3 ganancias de las empresas, especialmente aquellas vinculadas a la extracción de recursos naturales. - Es necesario modificar el sistema de financiamiento compartido, de modo que no produzca el grave problema social de la segregación de los estudiantes. - Es necesario idear un sistema de financiamiento que efectivamente fortalezca la educación pública y la igualdad de oportunidades de aprendizaje para todos. Aparte de la subvención por alumno, los colegios municipales debieran recibir otros aportes financieros que les permitan fortalecerse como instituciones escolares de calidad y ”equilibrar” la relación de desventaja en que se encuentran actualmente, respecto a los colegio particulares subvencionados. En esta misma línea, proponemos que en los colegios municipales parte del financiamiento sea por promedio de asistencia y otra parte por matrícula - El Estado –a través del Ministerio de Educación- debe ejercer una mayor regulación respecto a la instalación o construcción de nuevos establecimientos educativos privados. Es la necesidad de la población –y no el interés de un particular o el mercado- el que debiera regular la oferta educativa. De lo contrario, como se observa actualmente, se produce una competencia desigual entre establecimientos particulares subvencionados y municipales donde esto últimos se ven debilitados. - Modificar el Aporte Fiscal Indirecto a las universidades, para evitar el efecto discriminatorio que se produce actualmente sobre los estudiantes de establecimientos municipales. - Que la futura Superintendencia de Educación tenga entre sus atribuciones la vigilancia de la política educativa y de cualquier iniciativa orientada a mejorar la calidad del sistema de manera de salvaguardar –ante todo- el efectivo cumplimiento del Derecho a la Educación. - Revisar los efectos que producen las donaciones a escuelas. Dichas donaciones pueden ser descontadas de la carga tributaria de las empresas y, por lo tanto, el Estado debe vigilar que no afecten la igualdad de oportunidades. - Conceder mayores atribuciones a los Directores de las escuelas para el manejo y gestión de los recursos disponibles, en tanto toda la literatura indica que el factor manejo de la unidad educativa incide muy fuertemente en la mejora sustantiva de la calidad de los aprendizajes. - Conocer y difundir los estudios sobre los efectos en la igualdad de oportunidades de la subvención preferencial. - Calcular, en forma participativa, el costo por estudiante de la educación de calidad. 4