¡ADRiD. - ARO I . - N O M . ni MARTES 27 JUNIO Wl'í Teléfonos: 5.502 para Dirección, ofisSnas y iaüeres; ,5.075 para Bsdaeclón, ^ 31 para conferencias interurbanas^ Redacción, oficina* y taüeres: Carrsra ^de San Francisco, 13. Sucursal para la venta: Mesonero Romanos, 10. Ko 66 ¿avueiven ios orisinales. Apartado de Correos SIS. C(i«ire wllet*K*s disrías OCHE Fundadcn üajiyeí Delgado Barreta. Káméro suelto, S céntimos tiBiiiMWiiwmwiWJW'iiiwnniMii.wiim ESTE PERIÓDICO, SIN RELACIOM CON LOS GREfflOS POLÍTICOS, TIENE FOE UÍ4ICO PROGRAMA DECIR LA VERDAD maKSBasfaa!^m^íítujm»,:m^MjMmma:smmimm¡>iiiem^eisaaí^smB!íj¡ "•""MiMíMieífflttiai*" AHORA, UNOS COMENTARIOS am TOBO Y NADA EN VqZJSAJA... E l señor c o n d e d e R o m a n o n c s , a quien t a n t o debe preocuparle la export a c i ó n ' y el c o n t r a b a n d o , no sólo como presidente del Consejo d e ministros, sin o como interesado en g r a n número de empresas nacionales, no ha dicho una sola p a l a b r a acerca d e la interesantísim a información p u b l i c a d a en estas col u m n a s , y que tan h o n d a impresión ha p r o d u c i d o en el p ú b l i c o ; el señor Gimeno, q u e , como ministro d e E s t a d o , debe conocer la mayor parte d e los d e talles del informe, ha e n m u d e c i d o , y los periódicos, por sumisión al Gobiern o unos, por a m i s t a d e s los otros, por c o m u n i d a d d e intereses los d e más allá, y por inconcebible puntillo profesional n o pocos, h a n hecho, en su n i a \ o r í a , com o si no se enterasen de cosa que tant o importa al país y que puede ser el aviso providencial para prevenir próx i m o s riesgos, d e consecuencias dolorosísiinas. I A nosotros, n a t u r a l m e n t e , t o d o eso nos tiene sin c u i d a d o , parque c u a n d o se sigue como norma d e c o n d u c t a cumplir el d e ber, sin preocuparse d e convencionalism o s ni pararse a calcular la proporción d e a m i s t a d e s o d e enemistades, d e grat i t u d e s o d e malquerencias conquistad a s con q u e responda el público, el verd a d e r o público, que no es artiñcioso d e intereses creados, sino viva y palpitante r e a l i d a d , y a se ha l o g r a d o el propósito. E l silencio es uno d e los sistemas m á s ridículos y m á s d e s a c r e d i t a d o s d e cuantos se emplean en la f a r á n d u l a política. C u a n d o a la gente le interesa conocer una cosa, va a buscarla d o n d e se halle, y el que no se la d é en una u otra form a pierde el tiempo y el crédito. El informe publicado por LA ACCIÓN ha sido reproducido y comentad o por centenares d e periódicos d e t o d a E s p a ñ a , y a estas horas serán pocos los españoles que no ¡o conozcan. Delira el señor c o n d e d e R o m a n o n e s c u a n d o ;piensa q u e !o que él no d i g a a los reporteros a las doce y media d e la tard e es un secreto para ios c i u d a d a n o s . T e n e m o s b a s t a n t e m á s púlJico que él, y sobre t o d o m á s crédito como inform a d o r e s , ya que no como capitalistas. Pero, en &n, esas son minucias p a r a la sección d e Nuésír^is ecos y no p a r a am artículo. A q u í lo q u e importa d e j a r bien cons i g n a d o es q u e , a t e n d i e n d o m á s al interés nacional que a los intereses particulares, hemos publicado un document o q u e , por su forma, por sus prolijos d e t a l l e s , por sus citas concretas y categóricas, n o puede ser invención ni pasatiempo, sino t r a b a j o formal, de gentes bien e n t e r a d a s que t r a m i t a n un exp e d i e n t e en a s u n t o gravísimo. D e ese d o c u m e n t o se d e s p r m d c : Primero. Q u e unos países beligerantes, creyéndose perjudicados por el aprovisionamiento con que se favorece a sus enemigos, llaman la atención del Gobierno neutral p a r a q u e limite el tráfico a proporciones convenientes que eviten un cauihio d e trato. Segundo- Q u e el Gobierno no d a -56fiales d e haberse e n t e r a d o , ni tiene siquiera la previsión h u m a n i t a r i a y p a triótica d e advertir a los interesados, indicándoles el escollo y señalándoles .la buena ruta. Tercero. Q u e , a d e m á s d e exponern o s con esa c o n d u c t a a serias dificultid e s internacionales, a g r a v a la situación interior, porque las estadísticas, si son ciertas—a nosotros nos lo parece, y na dic lo ha rectificado—, están diciendo q u e si en E s p a ñ a escasea el carbón y Se encarecen los víveres y carecemos en g r a n parte de lo que antes importáb,a¿nos, obedece a que un número considerable d e buques españoles y un no cort o número d e industriales d e E s p a ñ a a t i e n d a n e x a g e r a d a m e n t e las d e m a n d a s del exterior sin que estén cubiertas las lacccsidades interiores. Ante estas r e a l i d a d e s , el Gobierno se cruza d e brazos. E ! señor conde d e Rf^manones luchará a estas h o r a s , d e seg u r o , entre sus obligaciones d e gobernante y sus acciones d e nulionario. Y así no se puede gobernar, porque g o b e r n a n d o así se aviva el recelo fuera y se acrecienta d e n t r o d e casa un malestar que ofrece todos los síntomas ái una incubación revolucionaria, no con el carácter d e esas revoluciones tumultuarias que se resuelven en Gobrenación convenciendo a tal Publio o a cu-il Polichinela, sino d e esas otras que oblig a n a cambiar r á p i d a m e n t e los procedimientos y las personas. Ni io verán ni lo creerán los profesionales d e los pasillos del Congreso, seriamente convencidos d e q u e aquello tan minúsculo, tan superficial y tan artificioso es ¡3 vida española, lá vida d é 18 millones d e seres que sufren hambre e injusticia ; pero los q u e a n d a m o s por el m u n d o „ cara a! so! y a la r e a l i d a d , sabemos que así piensa el pueblo, que así sentim.os todos y q u e c a d a d í a a d quieren m a y o r insistencia nuestras convicciones. Dirán los gobernantes que- y a intentan legislar en el sentido que a p u n t a mos, j V á l g a n o s D i o s ! P a r a imponer a u s t e r i d a d e s , la primera condición es la d e la propia a u s t e r i d a d , y los gobernantes d e a h o r a — n o nos referimos a las personas, sino a los procedimientos políticos—llevan mucho tiempo d e francachela p a r a q u e p u e d a n hacerse la ilusión d e q u e .las g e n t e s les a t r i b u y a n a u s t e r i d a d d e moralistas. L a vida pública se ha convertido en una contratación escandalosa. El toma y d a c a , la compensación y la íoleraiir cía, son los únicos resortes conocidos d e algún t i e m p o a esta parte en el sistema d e gobernar. Quienes así proceden, difícilmente convencerán a los gobernados d e la rectitud d e sus intenciones, menos c u a n d o a. ía vez q u e se habla d e m e d i d a s contra negocios excesivos se vive r o d e a d o d e los que negocian y d e los q u e a m p a r a n los negocios, si es que no los inician y los dirigen. Conviene hablar con t o d a c l a r i d a d : esta situación, antes d e n a c i d a , a p e n a s sospechada,, despertó en el exterior r e ; celos que aun no se h3,n b o r r a d o , y ert el interior inquietudes y desalientos, bien pronto convertidos en triste certidum^ bre dfsl mal. A la hora presente, aunque traten d e ocultarlo los políticos al uso y los periódicos d e las viejas h a b i l i d a d e s , t o d o lo que n o sea un Gobierno q u e , por su a u s t e r i d a d y "su seriedad, imponga respeto a ios d e fuera y discipline a los d e d e n t r o , será vivir en un eterno sobresalto y acrecentar p o r minutos la penuria. El informe q u e liemos p u b l i c a d o es una advertencia, que sería en lo futuro prueba de grave culpabilidad d e los gobernantes si, p o r desgracia, en plazo más o menos remoto, se viera cumplido lo que en ella parece a p u n t a d o ; pero, así y t o d o , nos tememos mucho que la previsión no h a g a cambiar d e r u m b o a este Gobierno. .Sólo el país, d á n d o s e cuenta d e su situación, p o d r í a imponer el cambio si supiera convertir en voluntad el deseo que le anima. VISTO Y O Í D O En Sau Sebastián ha muerto el caballo dChebcsti», que llevaba ganados miles de francos. ¿ H a dejado testamento? La gente se asombra de ver al Befior Lerroux tan partidario de! impuesto so bre los beneficios de la guerra. £ s t « noche celebrs, su b«neñcio JiutH Bouafé, el ilustre aitior de ^n, ConiedÍA«. ¿Xos será permitido decir di yasiula qu» Bonafé, en cierto aspecto, e«, & Dueatrq juicio, el primer comediante eapafiolS Sentimos' Diucho diferir caai sieiiijpre de la critica consagrada y de loe gacetilie» rus que redactun los sueltos de teatro» La culpa está en cjue aquellos culegaa que! aisisten a la función para después iufor-í ms,r ai pública sueieu limitarse a exami»' uar el trabajo particular de uu estreuoy-i una velada, etc., y controlar la adaptacióai del papel en el cómico. Por el cout.rariO| i nosotros eAcusamos las inevitables ea:i»| geuciaa del reparto, generalmente absur"! do, y nos esforzainoa en descubrir la ver-t dadora pcrsouaüdad de un tcmpcr&ioem^f tü bajo sus pelucas y su colorete, c o m e ' limpiaríamos un palimpsesto. Por ejem-'' pío: a través de las payasadas de Correa en «El orgullo de Albacete» sé vislumbra todo un actorazo de finuras ultramoder-' aas. E r histrión que de un pelele, de uxí espantapájaros, co.usigue hacer un tipo i de carue y hueso, sin duda tiene la tau- | matúrgica facultad de infundir alma a ' los muñecos artificiales, de crear... Cuidado, que no vamos a iuv.^ntar el paraguas, pues no se trata ahora de ídeRcubrir» al popular Bonafé... En el ambien-' te artístico español no cuesta extraordi-! tiariós esfuerzos darse a conocer y aua el logro de la ajena estimación. Pero casi nadie consigue los ap'ausoa definitivos. Si no sois casados, si no lleváis barbar,, si no envejecéis, difícilmente ha de con-cederos nadie otra categoría que !a ¿ 6 «chico listo». Y menguados de vosotros ai cultiváis géneros que no aburren o afcemoriz,ín... EN L.A rvlIIMA " L A B X P O R T A C i O -Esío marchaba muy bien, pero hemos tropezado con on obstáculo. Es que a don Alejandro lé sucede lo que a algunos comerciantes, que cuando se retiran del negocio les parecen exiguas todas las contribuciones impuestas ai coiHercio. •«> Hoy S3 despide Regaterín, por creer que su tiempo j a pasó. Como le dé a los políticos que ya pasaron por hacer lo propio, no va a tener fecha libre el Gallo, que ahora se ha dedicado a despedir compañeros. ¡Porque est.4 haciendo mucha falta un coro general de despedidos I .^ • . Con motivo de Ip. huelga de carreteros, el alcalde tuvo que facilitar carros a particulares que loa necesitaban, entre ellos al marqués de Alhucemas. Hubo momentos que en el Congreso sa pensó en avisarle para que mandara unos cuantos carros fúnebres. A recoger vo.rios cadáveres j u n t o a! banco azul. Se han inaugurado los Jardines ; hoy hace lo propio Magic-Park, y dentro de pocos días comenfarán los espectáculos nocturnos en la plaza de toros. El público gozará, pues, de los espectáculos al aire libre. Pero es innegable que donde más fres, co hay es en los Jardines. Como que pertenecen a! Ayuntamiento «La Mañana» titula sn información política de este modo retumbante: " E ! Gobierno triunfa de los intereses creados.» Y io peor es que "la ciudad alegre ¡ confiada;) consicntt^ esos triunfos que tanto ufíinan a «La Mañana». ' E! señor Ruiz Jiménez dijo ayer a los •ptM-iodistas que «a los obreros de Bilbao, de tanto trabajar en el hierro, se les pega algo-de la dureza, y por eso las huelgas son más peligrosas allí que en parte alguna». i A ver ! EJ premio Nobel p a r a el psicólogo de la 'Puerta del Sol... Expulsión de "apaches" San Sebastián, 27 (11 m.). La Policía ha comenzado a expulsar a los extranjeros sospechosos. Ayer fueron entregados a la Policía francesa de la frontera cuatro "apaches» y seis mujeres. < Los cuatro extinguían una quincena en ía cárcel. Al ser conducidos a la estación promovieron un gran escándalo al pasar por la calle de Miram.ar. Entre los expu!.=!ados va\í\lfredo Lerpieling, cuyo verdadero nombro es Francisco 'Berland, araigo y compañero de Fernando Renaud, que se suicidó eQ Guadiilajara,. Lerpieling o BerLand era el enrn.rgado, de recoger la correspondencia de Renaud. OX2?&.«^ ÍTOT'.A. .0 que quieren fos yanquis Oontetsidp íls un;» fiusva nota " !.'ón, 20 (11 ü.). El Oobicr:' shiügton ha enviado una riot-: después de una confereno,: • tre el presidente Wil'-o'» ^ iÍKÍ.R nota pide pong;{Í!í":tíi.rnpri(-e n. foa RÍJIC' á- iHiije•>rj<)io- uño a las tr¿otra di i' DEL RETABLO PAÍÍLAMENTAnSO Calminó la jornada congresil de ayer en una tremolina,. Y como en e! decurso de ios episodios parlamentarios hay profusión de uioiceníos que recoger y variedad do figuras a destacar, vamos seguidamente a ello, sin que nos sea dado acusar ininuciaa de la tarde, tales como la postura del hijo del señor Rodrigáñez, engreído de su condición _ de director general, ni ¡a seriedad tremebunda del señor AraíTsburo, ni la indecisión de que e-5)'á si/jjjdo víctima, p| nrinistro de Marina sobre, si debe o no sei>,tafs.e en el banco azul mientras habla el señor Cambó, «ir ¥. te r quía ,i. .^^'^ ....,........,..„,,.,;,...,j camundana, tan infeliz... *^' La suavidad y frescura la ,base de ta 'oeOeza. Se uso de la Loción Coral, Droguería y Perfumería ción Jerónima, S. '..,. ,<••, .'. j e! pob'" Una animación inusitada en la Cáma:.7j| ra... Hay ambiente épico. Se sabe que don .„, ; ..,, .., ,j c! Antonio Maura va a intervenir én la inde venta en 1% terpelación del conde de Bugalla!... Y coCoral, Concs|>» rno la expectación es grande, el señor Villanueva, iniperativo, adentra desde lue<%> go al Congreso en el debate sugestioAyer se há presentado Ang' nadot. blico madrileño entre na mi' Eu las tribunas hay lindas mozuelas, sonajes, chisteras, músicí! : en cuyas manos aletean; grácile.3, abanijercs «chící... El prodisio-cos preciosos. El conde de Casa Valenpintor ^.ihidaba ^ov cia estrecha efusivo ¡a m a n o . d s i señor apenas, te incüriuba Cierva, y allá, en la altura,, de un esi Si le h'jbicsci.s V1.-..J caño, el señor íturralde se pavonea... pein;<do y sudoroso, re-.:',-i Todo ello, mientras el señor Cambó esde Cíistrl, dando ordene,-., tá hablando... Viene don ,Francisco en pavlüicíito, «ue so limD'&b.i, r. guisa de cruzado,_ pero de buen talante. lainentando in falta de %: No vamos a asistir a un «corps a corps» eándove ante una-j cortil', entre ói y el señor Alba. ¡ Oh, n o ! Quien ratadas cun relievos tal pronosticara no podrá ufanarse de coa ana es-jalera y í,r<n-. nocer la seriedad y la eircunspecciórj del ponja SU3 lienzos, qu- :i,> • . :> seaor Cambó... El señor Carnbó habla, Y el señor Dato, oportuno, t el seílor atreveríamos a tocar..., que no!* a ¡nodo de ejemplo, de !a novena sinfoLcrrpu.1t, avieso, y don Ángel ur?.á-iz, renía de Becthoven. Sonríe el ministro de celoBO, y don Melquíades Alvareí, aspa- sagrados. Hacienda a tan lírica evocación y mesa Allí -nst,Íbamos Raf.'ijl Dotr.eur ventero, y el señor Nougaés, «mi gcíiesus cabellos, notando, ¡ ay i, que ya no hacía taiPoién de inst.a.adu''; i í v .-. .., risii..., fueroíi completando la gran ba-^ empenacha m testa aquella melena que tuda. El cone'e de Romsnones juzgó ne- iieniíndo do agudan observacionep un os>tal cual envidioso de la fuerza capiírir ca- cesaria tina votación. Sobre el sentido de pelioo ; PPCO Llorónr.. N'tSr-.torj qoe no COBlificara de melena í(tenorina». Y luego, utila votación, el señor López Ballesteros s- s'-güía .'¡aliñarse de la embnagtít^a de un lizando la catapulta de su ideología, el creyó «sn el caso de prejuzgar. Y el hijo cuadro r-ino ppsáridose al otro, y este di» señor Cambó lanza una bomba: «Sobra el del señor Vilíanueva y ei hijo del sefior gauíos «cb)"oniqU'^ijr>-- ,. bn un bañen «i«í Parlamento dssde el instante en que burBarroso estaban todo alborozados a! cu- pino aiiii-.ábanr una b i t c r í a de botellaa láis, Gobierno, la división de los poderes lumbrstrse protagonistas de una tan lin- de cerveza... Pasaban lo., bofnbíTos con del Estado y hacéis caso omiso de la da efemérides de "su incipiente vida polí- fcu<3 escaleras, que hubo que utilizar sn i»Constitución^... colocación de la a i c g c í a de Vaíf^nci»... tica... Está repleto el banco azul. H e aquí un Angiada se quedó en mangas de cauri" Y fué la votación. Una votación .ibsurgriive conflicto para el .sefior Gasset si s,t, cop el aspa d e los tiiM,fr;,eíi. FumabAí da, sin térrniíio» hábiles de oposición. Y don Rafael hubiera de levanf.srse a hacon 1(150» diputados sigue gobernando— y lí^oí-día nn puro ; da cuamio en cu&ado blar, i No podría pascar el ministro RU, valga el enícmismo—el conde de J.loma- VJ llcvab.Ti l.T tiznada siiano a ia frente, iaperorata!... Por fin, el general Miranda v'idida oor una greña... V sucedió que tas nones... se ha resignado a presenciar estos emarremang.rdíi-a m,angas se descnroibibaai belecos, y asiste, un tantico distraído, a y caían,, que fastidia tant-ü.*,. Entoncea^ V.-n Ins pasillos del Congreso hervía el la discusión. fué Áiigíadft. c o g o ;itií!.8 tijeras y, ¡ras, TÍO... llov, cuando ¡)or el país se El señor Alba es un virtuoso de la haras!, tortó b"»» importunos brazuelos, loa c. , h\ riíiSíf-ií- de que las difusas y echo al montón de ion escombros... Bri= bilidad. Ha escamoteado lindamente el teí'r'. n candilero han s,a- i Unban los ojuelos de! a-i-tista como los da nervio del asunto, y contesta, al señor nñd; . tod;;? h-- wiradn.a 1 un aJquimisia que hubiese emcontrnuiío ÍA Cambó en forma que arranca a la mayo'•'t&mii- | ríiedra filosofal. ría de su sopor y la impele al aplauso. tmn cíe rv«)'iyv daa, hacia ada 1¡I;Í ¡ " - - i Va- está"!... Mientras, en uno de los escaños .siltos, el .uás !a seseñor Baselga y don Pábifn H.amos ju- dn donde iiyet óaiíu . bn;? virutas y los trozos d » »1f«m« rena, la íntegra., ia H realidad i bríiEntre guetean y están en amistosa eíianaa... En y ins iiarrfídorfifi quedaban, resaltainterpreta- j bai- tas iiifinga.í, el banco azul, _ el conde de Ro?nanones de las cosas, con más ' cois sus puüus y sus g«; ofreeti «na visión chabacana, pues que ción de la ley y de! d. 1- '~'-^ pfirecfari deRpoios de sruerrii, n.dopta «na t)ostiira_ improcedente. De'Luis ífE QkUm Feeíerif.o 3<^KCM SÁNCHIX rrengado pobre el asiento, las manos caídas, íoreiaa !•'. corbata y hundidíi Bobre el pecho la cnbeza, e! jefe de! Oobierno compone una silueta perfectamente lamentable, oae, en siendo R'.'izorada por, el señor Mnctínerí l'res/ie-nli!. ''•' -•: •• ío en {'} • de lo (Ion ,ix"'e!r¿o [- n í l 'j Q.CB.ni'.raüu.oi'd... Erguido en su escaño, don Antonio Memra. vá a intervenir en el debate. Hay.uíi .«silencio que emociora, lino de csoí "iifpcios que son la con'oiiÓD palndi-ia—y a vcceti incnscientp—de' !!• i ' »ien(o V de la, admiración . El Í >i ••-.iihvtcno—2 cómo no'í--,'.' 'i " ' ra<-r a • n c 'iice la nolét,.'H-íla Li riirs tión rJ ri"Tit-i mi'" iifori'o o b t i m .1. ''¥•• r n ) ilp•-'t-vl'-'-T Y Ciilf. j¡ 'O-l rn-r' inso de hur¡,^i Cíl SI • '•«nríe, h úido, ron una Sf , lo.i Q -^er pábu'o^ al con-' «•^ncimienÉo .. íidí'cen'los minlsiros Eí señor Mau brovT, sajanlo, .'•'•iá rliapi-inndo con ' '^--' sil elociicn.ñ'^ m.Tf. ic'. a! saetas ir' ((iic ri.ii^brji' n f i v c en*"" ' DÉ LA NOVILLADA BENÉFICA ÉN VISTA ALEGttÉ i «>' ,. ' . M tiía.hs¡ y ñsachits Qabkidá,Juian!ta Marañen y Milagros'Baüle Bs-miálen&e i& ns" ¡ coi^ra, las' v wílisda. ü » síttall» é» l& Mita {Fs-i, Jü-iea.) «.«» irrespün!. Y bien, ¿qué premio hay digno de la hazaña que acaba de con.sumar don Feüpe Rodés 'í Salvó al Gobierno don Felipe... Tú sabes, lector, que nosotros sentimos una honda simpatía, por el señor Uodés. Hacia su talento nos lleva un sincera, desapasionada, admiración... Ayer el heñor Rodés ha bamboleado en nosotros tanto aquestos sentimientos, que a poco mayor esfuerzo por su parte, hoy habríamos roto el ídolo. El seüor Bodes ha tenido un error a] insi r a r sus palabra.8. Par añadidura, don _'elipe sufre atroz desvarío... Y aun cuando salvar iina vida sea cosa ¡n.ignánima y generoso impulso, j no croe el señor Rodéa que; la raquítij» vida d:^ ui¡ Gobierno no merece t-amaf';o .afán como ai que ayer realizó el diputado catalán, cqn mengua de lo fulgurante de su aureola?... ¡ Oh, rio, sefior Rodés! Usted no va por ese camino. Escogió usted la trocha en un instante de alucinación, quizá impulsado por un noble móvil de infundir vida en un muerto Gobierno! Pero ese no es eb real camino por dondft usted ha do ir a UT5 coristitucionaüsmo que ayer, usted, empecatado, tergiversó y hasta aparen!.!' ' : . • . G' >r!Rr?c el aplsiiso de don M a n u c »..>OT:Z."II'Z íiontoria, que aplaudía, eíj efecto, a! 8.eaor Rodó». Pero e! sefior íiontoria es fácil al aplauso cuando, ho-mbre de iflesnada, smpcqueflece su figura eiceigft BCíitado entre una grey incolora... No se rinda, don Felipe, a ios íiechizos engañadores de ía.nt.a sirena como, dulces y melodio»iis, cercan a ios parlam&DlSkfio» áe pro... Creemos que Bonafé es acaso el ánieo prestigio de su arte entre nosotros que no se abandona a la inspiración y al ÍDES» tinto. Maravilla el «sibihamo» de Borráe, acertando por la voluntad de los dioses, y el «sonambulisraoí de la milagrosa Rosario .Pino, tan espiritual, y que casi no sabe leer, y cuyo entretenimiento fax'orvfco es jugar a! tute con su camarera encima de un baúl. Pueblo de francotiradores, da guerrilleros en todo. Juan Bonafé es reflexivo, sutil, cauto, consciente^ como na anatómico, de ía psicología y cíe la emoción. Nosotros quisiéramos ver a Bonafé ea obras realmente artísticas, modernas, complejaR, de matiz. Es el actor de comedia por excelencia. Y comedia signifjca antes que nada cultura, buen .gusto, , refinamiento. Sería encantador que Bonafé representase aíguna de la-s obras da Osear ^Wilde... í Q u é c'^ .. ''.. español podría, acoraei .a empresa?... Silencio en ¡ to que ano de lOs primeros ñ . '&- "I^.k seííof Aiba en vanó. ÍSn él banco J, •• tS'ie ne aiienta.i, m Ca'^ti oviil'í 10 d o n 'Vn- LA «yKLtó.4 ÚS t ••«OSo—Aiil oisJévli miíttar }!««?*«<!<» hí íféStápoi-U ^ earae ééi Matarisn» ilk