zo=!, habas, vino y otros frutos, (le que sacan crecidas utili­ dades mediante un comercio muy activo.” Él mismo med ico-director, para dar una idea de los p r o ­ ductos territoriales de este pueblo, presenta la cantidad anual que rinden los diezmos, casas excusadas y santa iglesia; dedu­ ce por un quinquenio que asciende de 750 á 81,810 r s . , y enu­ mera las especies de que se saca este impuesto: añadiendo á continuación " q u e según los inteligentes, si se pagasen jó ad­ ministrasen con religiosidad estos artículos, llegaría aquella suma a 1000, y de consiguiente que el total de los productos territoriales excederla de un millón anual.” Terminare este párrafo manifestando que los vegetales que viven en este si­ tio, que se dan los mas de ellos en todas las estaciones del ano, son excelentes, del gusto mas delicado, y prestan un ali­ mento abundante, que contiene jugos sanos y bastante nutri­ tivos. N o es de inferior calidad ni menos abundante el alimen­ to animal: las carnes de este sitio, completamente abasteci­ do , son muy tiernas y sabrosas ; y aunque se cria ganado ca­ brío , lanar y v acu n o, solo el carnero sirve para el diario susten to. L o templado del clima en la parte inferior del pue­ blo y la aspereza y desigualdad del suelo hace sea mucha la caza, por lo que hay perdices, codornices, chirlos, zorzales y conejos de cam po, criándose ademas en las casas los domés­ ticos y muchas gallinas y palomas que venden sus honrados vecinos á precios muy moderados. Las Alpujarras surten la población de ganado de cerd a , y el Mediterráneo de los mas exquisitos pescados * que por la inmediación á sus costas se co ­ men casi tan baratos y frescos como en la misma orilla del agua. Se ha dicho que el cerro en que está colocado Lanjaron es mas angosto por la parte inferior que por la superior, y asi presenta una figura que asemeja á un cono inverso: le sepa­ ran de los otros cerros dos cortaduras ó barrancos que uno está á Levante y otro á Poniente : por el primero corre el rio que lleva el nombre del pueblo , íormando vistosas cas­ cadas y torrentes impetuosos: por el segundo un arroyo que se ine/.cia con las aguas medicinales después que han servido para los baños. Estos barrancos están muy inmediatos á la po­ blación, y dista uno de otro poco mas de un cuarto de legua. Las aguas del rio son claras, trasparentes, ligeras, de sabor fresco y ag radable, y muy buenas para bebida ordinaria, pues aunque traen su origen de las nieves que se derriten en el picacho de V e l e t a , como por una parte vienen precipitadas desde una elevación tan grande, y como por otra corren por sitios pizarrosos, silíceos y areniscos en que no hay cuerpos solubles que alteren su composición, conservan sil pureza, y adquieren la cantidad de aire necesaria para ser potables, que perdieron al tiempo de convertirse en nieve. Este rio lleva un caudal muy regular aun en la estación del estío, y divididas sus cristalinas corrientes en 10 ó cáuces riegan la mayor parte de ios campos, y en su curso dan movimiento á varios molinos harineros. El arroyo que corre por el barran­ co de Poniente, conocido con el nombre del Sala do, baña y fertiliza la porción de la vega correspondiente á esta parte. Brotan ademas otras varias fuentes; las que manan por cima del pueblo dan unas aguas exquisitas; mas no son tan buenas las que nacen por bajo, pues son algo turbias, grue­ sas, de mal sa bor, y contienen y e s o , cal y a r c illa , á causa de que se filtran por minerales selenitosos, calcáreos y ar­ cillosos. A no ser por el r i o , el arroyo y estas fuentes y por el aprovechamiento y sábia distribución de sus aguas, L a n ­ jaron por su posición al Mediodía , por la naturaleza del terieno y por su mucha pendiente y aspereza, sufriria gran­ des sequías, y sus cosechas serian muy escasas é insuficientes para sostener tan crecido numero de moradores; pues aun dado caso que las lluvias fuesen abundantes, al poco tiempo de caer las aguas desaparecerían , y su benéfico influjo seria damasiado fugaz, como sucede en los dos montes que se ha­ llan á los lados opuestos de los barrancos , que aun cuando la tierra es la misma, son menos pedregosos y están cultivados con el mismo esmero; sus producciones son muy escasas y casi nulas en los años secos, comparadas con las de la loma de la Bordaila. Terminare la descripción topográfica de pueblo tan singu­ lar y pintoresco, trascribiendo los párrafos con que la con­ cluye también el medico-director Baldovi en la expresada di­ sertación. " L a s gentes de Lanjaron (d ic e ) no conocen mas ocupa­ ción que la campestre, y como el manantial de su riqueza es el campo, le obligan sin cesar con sus sudores á que les rin­ da el fruto suficiente para su subsistencia: no viven en la opulencia y abundancia; pero tampoco están en la indigen*ia: su comida y bebida es parca y frugal : su vida y costum­ bres sencillas; ocupados durante el dia en los penosos traba­ jos del cam p o, destinan la noche para el reposo y descanso desús fatigados miembros; no conocen la holgazanería y ocio­ sidad, que son el germen de tantos vicios. En la actualidad las personas mendicantes no llegan á 2 0 , número excesiva­ mente corto en una población de cerca de 800 vecin os, entre los cuales no hay ningún grande propietario. Aqui pueden ver los sabios políticos y economistas cuántas ventajas trae á la sociedad que la propiedad territorial este dividida entre mu­ chos brazos. «Colocado el pueblo en una posición tan ventajosa , que le libra de los helados aires del Norte y de la humedad, y de iin frio y calor ex cesivos; enriquecida y empapada su atmós­ fera de abundante ox íg e n o , exhalado de los innumerables ár­ boles que cubre su vega: abastecido de un agua p u ra , clara y cristalina , dotada de un sabor v i v o , fresco y agradable; ocupados sus vecinos en las labores del campo, donde tienen actividad sus miembros durante el dia; habituados á una comida parca y frugal , y á una vida y costumbres muy sen­ cillas; exentos de los vicios nacidos del ocio y holgazanería, desconocidos en este pu eblo; libres también de los insalubres aires del Mediodía ; favorecidos en fin de tan felices circuns­ tancias, es fácil prever que deben gozar una salud completa, como realmente disfrutan; no conocen las enfermedades en­ démicas y epidémicas, sino las esporádicas ó comunes á todos los moradores del globo. Las calenturas intermitentes, tan fre­ cuentes en los sitios húmedos y pantanosos, aqui no se pa de­ cen: las afecciones gástricas crónicas propias de los países en que las aguas potables son malas, no ,se observan en este: los hombres resisten el trabajo sin incomodidad ; se crian robus­ tas, sanos y vigorosos; digieren con prontitud y facilidad; sus cuerpos son de buena talla, bien formados y nutridos; no son bebedores de vino ni licores; son dóciles, de buen corazón y nada escasos de luces intelectuales. Las mugeres son sanas, robustas y fecundas; paren con facilidad, y crian á sus hijos sin menoscabo de su salu d; son muy trabajadoras, industrio­ sas y de costumbres sencillas y buenas, tanto en lo físico c o ­ mo en lo moral , y por lo mismo dignas de ser imitadas. E l histerismo, la leucorrea, la clorosis y otras afecciones muy frecuentes en las señoras de las ciudades populosas, son aqui muy raras. Por último, la proporción de los muertos con los nacidos, que es de uno á dos y dos tercios, manifiesta paten­ temente la salubridad que goza este p u eb lo , cuyo mayor nú­ mero de enfermedades se presenta por lo general en la p ri­ mavera y el otoño, que es cuando se observa una alternati­ va frecuente y desigual de temperatura.” De cuanto acabo de exponer sobre la topografía de Lan­ ja ro n , puede inferirse cuán á propósito debe ser un sitio tan singular, con especialidad en el v era n o , para que se resta­ blezcan los dolientes que acuden á usar las excelentes aguas medicinales que brotan en e l ; y de cuyas propiedades físicas y químicas me ocuparé en los siguientes artículos. MORETO. E l Parecido en la corte . N o puede ser guardar una mu­ ger. D e fu e r a vendrá quien de casa nos echará . Trampa adelante . M oreto quiso enriquecer nuestro teatro con la fábula de los Meneemos ó de los parecid os , conocida ya en la escena de España desde la traducción, ó por mejor decir, imita­ ción que Juan deT im oned a hizo de la comedia latina. Pero el plan de nuestro autor en nada se roza con el del antiguo dra­ ma. Es una comedia en el género de las de capa y espada de Calderón , en la cual está como engastada la historia del pa­ recido. Justifica muy bien su ficción por la necesidad y por el amor: la continúa por los artificios de su criado; y cuando incitado de la h o n r a , quiere romperla, no lo consigue sino con mucha dificultad: tan creida estaba ya. D. Fernando de R i b e r a , caballero noble de S e v illa , re­ ducido á pobreza por sus devaneos juveniles, pasa á la corte, huyendo de la justicia que le perseguía por haber dejado mal herido á un amante de su hermana que encontró de noche y á oscuras en su casa. Apenas llegó á M adrid con muy pocos med ios, se enamoró de una dama que vió y habló en la calle. Un caballero que le encontró, le saludó con el título dd1ami­ g o , otro con el de b i j o , y ambos con el nombre de D. Lope Lujan , que habiendo pasado á Indias muchos años antes, era esperado por momentos en casa de su padre D. Pedro. La se­ mejanza extraordinaria de entrambos produjo la equivocación. D. Fernando quiere excusa rse; pero su criado, impelido de su necesidad y la de su am o, finge que es D. L o p e ; y para disculpar su extrañeza con su padre y amigo, supone que por hechizos que le dio una c r io l la , estaba á veces desmemoriado, señaladamente á la entrada de las lunas. D. Fernando es ad­ mitido como hijo en casa de D. Pedro, con tanto mas gusto, cuanto la dama que le ha prendado se le presenta como her­ mana. Llega el h ijo ve rd a d ero , y no le conocen. Pero D. Lo pe es el mismo á quien D. Fernando hirió en S e v il la , y á quien viene siguiendo su hermana Doña Ana Ribera. D. Fernando, por recobrar ó vengar su honor , descubre la ficción: pero el supuesto desmemoriamiento impide que se le dé crédito, mucho mas cuando los viajes y la herida han desfigurado las faccio­ nes del verdadero bijo. Esta combinación prolonga la fábula hasta donde le era posible llegar. Los lances de a m o r , de ce­ los, de valor y de h o n o r, de que está llena la comedia , se enlazan muy bien con la ficción principal; el estilo urbano, como es generalmente el de M o r e t o , está lleno de chiste y sal en boca de Tacón. V ie n d o á su amo pob re, sin haber co­ m i d o , y sin saber todavía qué comerá, decir requiebros á una dama, d ice: ¡Qué baya hombre que tenga aliento de enamorar en ayunas! Y o no he acertado requiebro en mi vida hasta tomar aguardiente por lo menos. Como la mayor necesidad de él y su amo era la de c o ­ m e r , dice al p a d re, hablándole de la enfermedad de su su­ puesto hijo, E l mas eficaz rem edio es darle á comer muy bien y m ucho, porque el cerebro con vapores regalados se le vaya humedeciendo. Cuando el hijo verdadero pugna por ser recon ocido, y D. Pedro airado le dice Tacón H o m b r e , y o no soy tu padre. S eñ or , que te llame tío; pártase la diferencia, y hazle siquiera sobrino. Y en otra parte S í : que ahora os sale este hijo como cebollón de invierno. Mas citaríamos si no fuesen pasajes mas alegres de lo que permite la decencia. El defecto de este drama es la situación de D. Fernando y de Doña Inés. Esta se cree de buena fe hermana suya: pero como se habia prendado de él la primera vez que le vió en la c a lle , y D. Fernando, con el pretexto del o l v i d o , no deja de enamorarla, hay en su corazón una lid nada favorable á las costumbres. M e jo r combinación hu­ biera sido haberla hecho sabidora y cómplice del fingimiento. N o puede ser guardar una muger es una imitación del M ayor imposible de Lope. En ella siguió Moreto con mas in­ mediación la fábula que le sirve de m odelo; pero la mejoró mucho suprimiendo las escenas episódicas y los papeles de R e y , Reina y almirante de Ñapóle s, introducidos por L o p e , á la verdad muy inútilmente. La comedia de M oreto camina con Velocidad al desenlace, según el precepto de Horacio, y dis-, trae menos la atención del asunto principal. Es una muger enamorada, á quien cela su hermano; y cuantas precauciones toma este para g uardarla, se inutilizan por la astucia de T a ­ r u g o, criado del amante. Este criado es el personaje prin ci­ pal de la comedia. Su carácter chistoso y burlón se conoce desde la primera escena. Acom paña á su amo á la casa de D o ­ ña Ana Pacheco , donde hay una academia de poesía: pregun­ ta T aru go si la señora , á quien D. F é li x habia celebrado de rica y hermosa, es poeta: y respondiéndole que s i , dice: S e ñ o r , cosa es muy posible ser rica , bella y discreta: pero ser rica y poeta, viv e Dios que es imposible. F é lix ¿ P ° r q ué ? T arugo . ¿ E s o du das? F é lix Sí dudo. Tarugo. . . ¿ P u e s hay hombre á quien dé el cielo con gracia aqueste desvelo ( 1 ) que no esté siempre desnudo? y esto es forzoso, señor; porque la poesía es cosa , que aunque es v irtud, y gustosa, nunca ha tenido valor. Es flor de la humanidad; y como una flor en fin sirve de adorno al ja r d in , mas no á la necesidad. Adornan las flores bellas, y el que en un jardin las mira, como hermosas las admira; pero no cena con ellas. Y el que un jardin entra á ver , mas presto se irá á buscar espárragos que cenar, que las flores para oler. Poesía y riqueza ingrata siempre trocaron los frenos, y no hallarás versos buenos hechos con bujías de plata: con candil sí............................. Por el candil de Epíteto ¿ n o dieron tres mil ducados? F é l i x . . . . . Ese es filósofo. Tarugo . Cesa; pues toda la poesía ¿ q u é es sino filosofía? Asi fuera genovesa. ( 2 ) , Su amo cita los hombres ricos é ilustres que habían poe­ tizado en otros tiempos y en aquel, entre ellos al conde de V illa m ed ia n a , y aunque no le n om bra, señala al Príncipe de E s q u ila d le , lo que puede servir para conocer la época en que M oreto floreció. Ultimamente le hace notar el rico ador­ no de la casa de Doña Ana. T aru go responde : L o estoy v ie n d o , y no lo c r e o : mas viv e Dios , que como eres tú D. F élix de T o l e d o , si es poeta ha de ser pobre. F é lix ¿C óm o puede ser , teniendo en su casa tal riqueza? T arugo . . . Una noche haciendo versos se le ha de quemar la casa y ha de amanecer en cueros. Dice á su amo que se va á j u g a r , y c o n c lu y e : ¿ Y o academia? no haré luego cinco pintas en diez años si estoy un hora entre versos. Esta es una de las comedias mas graciosas, mejor condu ­ cidas y dialogadas de Moreto. No pueden presentarse extrac­ tos de e l l a , porque es preciso leerla to d a , y si hemos citado los versos anteriores es para que se juzgue de la idea que es­ te autor tenia formada de su arte, y del tiempo en que es­ cribió. D e fu e r a vendrá quien de casa nos ech a rá , es el drama en que M oreto se atrevió mas abiertamente á describir las ridi­ culeces de sus contemporáneos. El militar embustero y ju g a­ d o r , pero valiente: el mentidero de las gradas de S. Felipe, que también estuvo algún tiempo en la calle, de las Huertas: el caballero de ciudad , enamorado y pendenciero : el licen­ ciado cobarde y pedante: la viuda verde que predica el re­ cogimiento á las doncellas; el criado n ecio, malicioso y m o gig ato, están descritos con felicidad en esta comedia , en cuya representación, como se haga con mediana habilidad, es inex­ tinguible la risa. El alférez A g u irre comienza la pieza rompiendo una ba­ raja : dice que ha perdido. hoy doscientos escudos con un page que no los tuvo todo su Jinage, ¿Que no teman las pintas un co leto? Mas vienen juntas quince ó diez y siete, que perderán el miedo á un coselete. H a b la , para desenfadarse, del mentidero. Por la mañana yo al irme vistiendo pienso una mentirilla de mi mano: vengo luego y aqui la siembro en g rano; y crece tanto que de allí á dos horas hallo quien con tal fuerza la prosiga, que á contármela vuelve con espiga. Chichón, el mogigato, escudero de la viud a, dice saliendo de la iglesia: Y a oí misa á buena cuenta: ¡q ué sea y o tan perdulario que nunca acabe un rosario! porque en llegando á esta cuenta, que es la del alma, es n o tor io , de aqui no puedo pasar: ( 1 ) E studio , ocupación. (2 ) Entonces eran genoveses los asentistas de rentas. y arrendadores todo so me va en sacar ánimas del purgatorio, ¡ Como almorzar i ades * os , Chichón! M|ue bien sabe pues, un torreznito , después de-encomendarse uno á Dios! Brillante y animadísimo estuvo el primer baile verificado en el salou de Oriente en la noche .del sábado último. Nada diremos á nuestros lectores de su adorno rico y elegante, pues en uno de nuestros números anteriores hicimos una des­ cripción bastante detenida de el, que copiaron casi todos los periódicos de Madrid. Limitarcmonos por tanto á decir que la fiesta ha correspondido completamente á los preparativos que El alférez y su amigo el capitán Lisardo, que se ha pr en­ se habían hecho para ella , y que el salón y sus dependencias dado de Dona Francisca, sobrina de la vindi , llegan á in­ han estado perfectamente servidos. Algunos ligeros defectos formarse de el. Después de decirles (pie 110 lia de murmurar, que notarnos, y que por ser de poca consideración no men­ cionamos siquiera , serán corregidos en los bailes sucesivos. porque es m uy vir tu o s o , comienza asi: La concurrencia no ha sido por de mas numerosa; pero sí su­ ficiente para que reinase en el vasto recinto la animación y la Mire usle', lo que es la viuda, alegría, compañeras inseparables de la careta. es hija de ios demonios. Creemos que en el segundo baile, que se verificará en el Los mismos ojos la saca próximo sábado, se apresurarán las hermosas de Madrid á ir á la pobre Francisquitu: a ostentar sus gracias y su elegancia en los magníficos salo­ ¿ v e l a us té ? es una satírica, nes de Oriente, y á continuar las intrigas y festivos lances mas g ra n d ís i m a b e l l a c a : que son el distintivo de la época. po r casarse a n d a p e rd id a . Consta esta entrega de mas de 14 pliegos de impresion, y se halla venal en el despacho de dicha imprenta Nacional al precio de 3 rs., tanto en rústica como en rama. Dentro de pocos dias habrá tomos encuadernados , tan­ to en pasta como en rústica, de las doce entregas de dicho año, que forman el tomo 25 de la colección. Y á la nina do envidiosa no deja galan á vida. U s a r do. .. t* Y entra alguno á ser dichoso ? C hichó n... Jesús!'ni imaginación, que eso era murmuración y yo soy muy virtuoso. Mas ¿ve usle la lia? so ¿rulilga, y por marido revienta: se alaba (tenga usté cuenta) y se alab.» y se remilga: se hace nina de faicion. Pues ¿ ve usté? aunque mas los borre, treinta tiene, y lo que corre desde c! Seíior San Simón. El número del domingo 16 contiene los artículos siguien­ tes adornados con dibujos y grabados originales. Usos y trajes provinciales.^=nLos gallegos de Finisterre. Variedades.— Morir sin haber vivido. España pintoresca.— La catedral de Tenerife. Costurnbres.^Los poetas y la melancolía. Poesía.<=E1 suspiro del moro. Se suscribe en las librerías de J o r d á n , calle de Carretas* de Paz , frente á las Covachuelas; de P o u p art, calle del Are­ nal, y extrangera calle de la Montera; y e n las provincias en la9 administraciones de correos y principales librerías. En Madrid a 4 rs. al mes y 86 por todo el año : en las pro­ vincias 14 rs. por trimestre y 24 por medio año franco de porte. En las mismas librerías se halla de venta el tomo cuorto de la colección , que comprende todo el año de 1889 y con­ tiene una cantidad de lectura equivalente á la de 10 tomos en 8? regular, y los artículos, dibujos y grabados correspon­ dientes originales y trabajados expresamente para esla publi­ cación por distinguidos literatos y artistas: precio del tomo, 36 rs. en M adrid, y en las provincias con el aumento del porte. L a tía es lib id in os a, Lisardo por medio de una carta se introduce en casa de la viuda. Esta y su sobrina se enamoran de el: los lances de amor y de celos, las respuestas del alférez á la solicitud de Lisnrdo que le suplicaba enamorase á la tía para verse libre de sus persecuciones, las necedades de Chichón y las mali­ cias de la criada Margarita, ocupan agrada lilemente las dos jornadas últimas hasta que se descubre la ficción con la lle­ gada del hermano de la viuda. El diálogo es siempre vivo y lleno de sal ; y los caracteres están muy bien conservados. T ram pa adelante es en nuestro entender la fábula mas difícil y mas bien conducida de Moreio. D. Juan de Lara, tan caballero por su sangre y sus sentimientos, como pobre, está enamorado de Dona Leonor de Toledo. Millan, su cria­ do , para mejorar la suerte de su amo, se aprovecha del amor de Dona Ana de Vargas, señora muy rica, y que está prendada de D. Juan. El infeliz sirviente, por el cual nos in­ teresamos, pues aunque miente y enreda mucho, es solo por socorrer su hambre y la de su señor, tiene (pie formar dos intrigas á la p a r, y llevarlas adelante. Una cuyo objeto es persuadir á Doña Ana que D. Juan está enamorado de ella y sacarle letras de cambio con que vestir, engalanar y dar de comer á su amo; y otra ocultar á este la anterior intriga, en que nunca consentiría la nobleza de su alma, y fingir que el dinero con que mejoran su suerte es prestado á crédito por un mercader amigo suyo. ¿Qué de artificios ha tenido que inventar la imaginación fecundísima de Moreto para hacer que ambas ficciones fuesen creídas por algún tiempo, á pesar de la solicitud de Doña Ana por ver y hablar á su supuesto amante, de los celos de Doña Leonor, de la delicadeza de D. Juan y de la intervención celosa de los hermanos de am­ bas, que habían estipulado casar ca ja uno con la hermana del otro? El espectador, divertido con las continuas tribula­ ciones de Millan, no se complace menos con su actividad, con los chistes de su buen humor, y con los nuevos enredos que pone en planta para salir de sus apuros. Es una verdadera comedia de Terencio, con mas Ínteres, con mas nobleza que la de los personajes del teatro latino. En la primera escena hace D. Juan Paces con Doña Leo­ nor, que estaba celosa: y M illan, que habiu procurado sacar algún ínteres de la reconciliación, amenazado por su amo dic e: ¿Hay infamia como aquesta? ¡ Que haga las paces di? balde quien há ya un mes que no cena, y la noche que hay guisado se buce de carne de huerta! Después dice D. Juan : ¡Gran gusto son unos celos, si un dulce fin los concierta! M illan. .. . Y principalmente cuando la hora de cenar se llega, y solo ese plato dulce hay que poner en la mesa. Desc ribe la estrechez á que se hallan reducidos : entre otras cosas habla de las prendas fiadas. Las pistolas la tendera tiene yo de lo fiado tan cargadas que revientan. El broquel há ya tres meses que tiene la pastelera ; y aun el broquel empeñado antes da alivio que pena: porque con eso tenernos empeñadas las pendencias. De ir y venir cada día al secretario de gu erra, solo traemos mas hambre; porque da a las dos audiencia; Y tras toda esta desdicha solo es lo que me consuela que en la corte pretensiones aunque largas, son inciertas. No pueden justificarse mejor las astucias y trampas de Millan para socorrer a su amo, mientras se le daba el premio por los servicios que habia hecho en Flan des .= A . L. ( E l Tiempo .) • * * * ......................... .. ............... o BOLETIN DE COMERCIO. BOLSA D E M A D R ID . ’ Cotización del dia 17 á las tres de la tarde . EFECTOS PÚBLICOS. BIBLIOGRAFÍA. SEMANARIO PINTORESCO ESPAÑOL. Inscripciones en el gran libro á 5 por 100, 00. Títulos al portador del 5 por 100, 28 tres dieziseisavos, 4 , siete treintaidosavos y 28 tres dieziseisavos con cupones al contado: 2 8 ¿ , f , £ , nueve dieziseisavos, f-, veinte y uno treintaidosavos y 2o f á v. f. 6 yol. y firme: 28-£, 2 9 , 28£ y 29¿ á v. f. ó yol. á prima de £ , | , nueve dieziseisavos y 4t por 100 con cupones. Inscripciones en el gran libro á 4 por 100, 00. Títulos al portador del 4 por 100, 22£ á G0 d. f. ó vol. con cupones. Vales Reales no consolidadas, 00. Deuda negociable de 5 por 100 á papel , 00. Deuda sin ínteres, 8^-, cinco once dieziseisavos nuevas al contado: 9 á 60 d. f. 6 vol.: 5^ á 14 id. á prima de g por 100 C u r s o c o mpleto elemental de matemáticas puras , com­ puesto en francés por S. F. Lacroix : traducido al cas­ nuevas. tellano por D. José Rebollo y Morales, catedrático de los Acciones del banco español de S. F e r n a n d o , 00* caballeros pages de S. M. Se halla de venta en la im pren ta Nacional á los precios CAM BIOS. siguientes: Londres, á 90 días, 38^. Paris, 16-5. Alicante, 1 d. Barcelona, á ps. fs., ¿ ápar id. Bilbao , par. Cádiz, f á i d. Coruña 2 d. Granada, 2 á 1-f id. Málaga, $ a $ id. Santander, i á par b. Santiago, 2 d. Sevilla , | d. Valencia , i d. Zaragoza, £ b. Descuento de letras, á 6 por 100 al año. SUBASTAS. consecuencia de lo mandado por el Excmo. Sr. director general de Correos, en providencia asesorada de 1? del corriente, se anuncia la subasta acordada por S. M. de las pa­ radas de posta comprendidas desde Vitoria á I ru n , hasta el dia 27 del corriente , en que ha de celebrarse su primer re­ mate según y en los términos que se anunció en la Gaceta de 27 de Enero próximo pasado. . A Tomos. i? 2? 84! En rama. En rústica. En pasta. 15 15 18 22 16 16 20 24 20 20 24 28 E l tomo 1?, cuya quinta edición acaba de verificarse, ha sida escrupulosamente corregido. LES AVENTURES DE TÉLÉMAQUE FILS D’ULISSE. PAR FÉNÉLON. Se halla de venta en el despacho de la Imprenta Na­ cional á 16 rs. pasta y 13 en rama. Es una bella edición, hecha con el mayor esmero y E n el despacho deNCPAITRLOEM ella se venden : Reglamento de exámenes para maestros de escuela ele­ con suma corrección, teniendo presente para esto último mental y de escuela superior de instrucción primaria : á 1 real. la edición estereotipada de Didot. Reglamento provisional de las comisiones de instrucción primaria : á 1 real. Reglamento provisional de las escuelas públicas de ins­ trucción primaria elemental : á 2 rs. TEATROS. P R I N C IP E . A las siete de la noche. E n celebridad de También se hallarán en las administraciones de correos de las provincias. la solemne apertura de las Cortes de 1840, ha dispuesto la sociedad una variada y amena función, distribuida del modo siguiente: 1? Sinfonía. 2? L A H U E R F A N A M U D A , comedia muy interesante en dos actos. 3? Boleras á seis. 4? La divertida comedia en un acto, titulada COLECCION DE LEYES, REALES DECRETOS ORDENES Y REGLAMENTOS DEL GOBIERNO E L L A E S EL. Y DE LAS DIRECCIONES Y AUTORIDADES SUPERIORES. En todos los intermedios se tocarán himnos patrióticos. E n trega de DIC IE M B R E de 183 9 , C RU Z. A las siete de la noche. Se volverá á poner en Con la que se completa el tomo correspondiente á di­ escena la ópera seria en dos actos del maestro D. cho año. Comprende los decretos, órdenes y circulares ex­ Saldoni, titulada pedidas en el citado mes; un apéndice de varias que se C L E O N I C E R E G I N A DI SIRIA. habían omitido en las entregas anteriores; un índice cro­ nológico formado por ministerios, que se coloca al prin­ cipio del tomo; y otro alfabético, que para mayor como­ didad se ha añadido este año al fin del tomo. B a lta s a r