Por una familia comprometida con la lectura… Estimulando el hábito lector en casa (I parte) Estimados padres y madres de familia, les cuento que en estos días vengo releyendo y disfrutando: "EL LIBRO DEL CAPITAN" (Jorge Eslava, 2008) que me ha llevado a navegar por la literatura infantil de una manera francamente maravillosa. El autor reseña obras infantiles de la literatura universal, que no sólo pueden ser un deleite para pequeños y pequeñas sino también para los mayores que han aprendido a no tomarse tan en serio como adultos. Como ustedes sabrán, trabajo a diario en mi consultorio y en mis talleres con niños/as y adolescentes y, tal vez por eso, este libro me ha dado más entusiasmo y creatividad para seguir promoviendo la lectura como fuente de disfrute y enriquecimiento intelectual y espiritual. Por ello, aprovecho la ocasión para recomendarles este bella obra que puede servirles a manera de guía a la hora de decidir qué libros comprar para que los chicos lean en casa en las horas de descanso, de tal manera que también desde el hogar promovamos la lectura y disfrutemos con ellos. No olvide que la lectura es una operación que implica a toda la persona: inteligencia, voluntad, fantasía y sentimientos; y por tanto, tiene un abanico de repercusiones positivas: - Contribuye y afianza el proceso de madurez a través de la autonomía intelectual. Es un instrumento para la formación intelectual, moral, afectiva y estética. Desarrolla la capacidad de comprensión y expresión. Despierta y estimula la imaginación. Fomenta y educa la sensibilidad Provoca y orienta la reflexión y cultiva la inteligencia. Enriquece el vocabulario y por ende, la expresión oral y escrita. Exige concentración, reflexión, comparación y previsión; con lo cual se estimula la estructuración del pensamiento. “Finalmente, las múltiples historias hacen del libro una inagotable recurso contra el aburrimiento; y es que el disfrute y gozo que la lectura proporciona convierte a esta actividad en una de las formas más bellas de pasar el tiempo” Recuerde que un “individuo no lector está más sujeto la pasividad y a lo que hacen y dicen otros; difícilmente logrará autonomía intelectual plena, ni podrá desarrollar un sentido crítico. En muchos casos se verá fácilmente sometido a la servidumbre del televisor” o de la computadora. Para finalizar, les comparto una de las tantas anécdotas que cuenta Jorge Eslava en su libro: "Me ocurrió hace poco en Piura, cuando una niña me preguntó: "¿Cómo son los ojos de un lector?". "Con anteojos", respondí enseguida porque ella llevaba puestas unas lindas gafas. "Entonces tú no eres lector - me replicó - , porque no tienes anteojos". Todo el auditorio festejó, niñas y niños de segundo y tercer grado. Quise aclararle que sí tengo, que los uso solo para leer, pero sentí que ya había perdido el juego de palabras; entonces preferí decirle que "los ojos de un lector no son ojos normales..., que no están tranquilos sino que son burbujeantes, fugaces, risueños, lagrimeantes y hasta distantes de nosotros". La niña susurró algo; le pedí que se acercara al micrófono y dijo sabiamente: "Como estrellas que nos guían". “Quise levantarla en hombros. Porque eso son astros luminosos en nuestra nocturnidad humana; para seguir confiando en la alegría y la esperanza; para no renunciar a soñar despiertos ni descuidar el alma. Construirnos como lectores es cultivarnos como personas libres. Lo que Michele Petit define con precisión: "Ser autores de nuestra propia vida". Como psicólogo de nuestro querido colegio “Santa María de la Providencia”, les invito también a subirse a bordo del "Libro del Capitán", para que nos guíe, cual mapa que nos conduzca a verdaderos tesoros: libros para nuestros hijos. Un abrazo a todos/as. Ps. César Samillán Canales C. Ps. P. 7360