CENTRO SUPERIOR DE ESTUDIOSDE LA DEFENSANACIONAL BOL Abril, 1971 ClON Núm. 54 SUMARIO 1. — V. ORGANIZACION Desmilitarización de la Defensa ESTUDIOS TACTICOS Y LOGISTICOS La fuerza nuclear táctica — VI. — — ESTUDIOS POLITICO-SOCIALES La Política soviética al S. y al E. de Suez VII. ESTUDIOS ECONOMICOS Aspecto económicodel empleo de la energía nuclear El rendimiento de los recursos dedicados a la defensa — — IX. CUESTIONES TECNICAS ri i 1t ic r ti sistema norteamericano ae aerensa .areguara misiles balísticos estratégicos. . . — X. i,, contra VARIOS Libro Blanco Alemán (III Parte) — XI. ACTIVIDADES DEL CESEDEN Inauguración del Curso de “Energía Nuclear y Defensa Nacional — SECCION BIBLIOGRAFICA c9Iíjtiueii4u&/:i954 Cfl c& wt49z RMMIZAtItM•• - DESM1UTAR/ZACION LA OEFEN$A ¡ CESEDEN ¿DESMILITARIZAR - (De - -? Por LA DEFENSA...? el General NEMO (c.r.) - la Revista de Defensa Nacional francesa. Mayo 1970) Traducido por el Tte. de O.M. del Aire D. MARINO GONZALEZ PASCUAL :—,; Abril, 1971 DE INFORNACION BOLETIN NUM. 54 - 1 Si se pudiese lograr un día de una forma segura, la supre sión de los armamentosy la.prohibición de los recursos para la guerra ¿llevarla ésto’consigo...la supresión de la Defensa Nacio nal...? A esta pregunta, apostaría que el hombre de la calle da ría, sin dudarlo, una respuesta.afirmativa y, quedaría confundi do por la candidez, o. inquieto..por. lo capcioso de la misma. Pues no se pregunta una cosa de la que ya se conoce la respuesta. Acabo de leer varios textos muy serios que me. inducen a pensar que la defensa seguiría siendo necesaria en un..mundo des armado y pacífico. Y. he reflexiona&o mucho que, después de todo, los argumentos de esta insólita tesis merecen algo ms de aten ción que la simple curiosidad. — * ** El mundo de hoy tiende a borrar las. fionteras que cada uno franquea a voluntad, bien por su gusto., peor.su trabajo o por sus negocios. Este mundo nos llega a domicilio de 1mano de los colores de la televisión y de las ondas de la radio. Al ampliarse con ello la cultura —aunque algunas estadísticas pesimistas quieran demostrar que el porcentaje. de. analfabetos aumento en proporción al número de’niños.no.escolarizados.en los países del Tercer Mundo— daa losbeneficiados los..medios.necesarios para — — —— — juzgar mejor los acontecimientos; de sopesar mejor el “pro” equi libra’al “contra”, puede. resultar con ello-una indecisión imper tinente, una verdadera neutralización-de juicio y, que, a falta de saber elegir, muchos hombres prefieren entregarse en manos de los líderes que son los maestros.de.laPalabra’y de las fórmulas, abdicando en’ manos de éstos sus: propias responsabilidades, aun que. ello sea’darpruebasde un.espíritu.de.aflicción. Ya se sabe que’ esta misma indecisión, es. la. señal. de.un. conflicto interior,a menudode difícil resolución para cada. indivIduo. Cuanto ms se eleve el nivel’de vida,.cuanto m.s.se.transformen las costumbres los hbitosdel pensamLento’, ms se agravaeste conflicto. - . Esto mismo podemos aplicarlo.alas.colectividadeS. igua-l’que losde los indivíduos’,.sus conflictos internos - van Al - -- acompañados de ótros’ externos, con las colectividades vecinas; ‘bien se tratedetradicionaies qurellas.de..límites, de competen cias’ económicas o de’divérgencias kolíticas o espirituales. - - —2— Las tradiciones, las religiones, las utopias, escribe Johan Galtung, Director del Instituto de Investigación para la paz internacional en Oslo (1) , colocan la felicidad perfecta en la ausencia de todo conflicto, de toda.inquietud yde toda frustra ción. Esto es un concepto negativo, al cual el mundo y, sobre to do el mundo de hoy no se suscribiría. La multiplicación y la in tensificación de los contactos entre..los hombres son generadores de conflictos, aún llegándose a suprimir las guerras generales y apocalípticas. Y es bueno que estosea así, a condición de que nos acordemos de la frase de Gandhi “Un conflicto, lejos de sepa rar a los adversarios les debería unir, precisamente porque ás— tos ponen en común sus incompatibilidades”. Igualmente los hom bres deben convencerse de que hay que saber vivir en situación de conflictos. Es la esencia misma de la vida, la prenda de su duración y de su intensidad, de su interésy de su valor. Pero hay que ser capaz de sobrepasarla, a fin de que se instaure una paz que no se basaría en un concepto negativo, sino, por el con trario, animada y enriquecida por un concepto dinámico. - — - Esta g.ran prudencia filosófica no está, sin duda, al al cance de todos. Para adquirirla será necesario -suponiendo que pueda alcanzarse alguna vez por el conjunto de los hombres— una gran educación, que demandarla siglos. Se me ocurre pensar que la defensa nacional podría ser, en espera de la aurora de los días de prudencia generalizada y común, el indispensable instru mento para dejar atrás los conflictos inevitables. En resumen,la prenda más segura para la paz por una movilización permanente de los espíritus en busca de la verdad, tal como la podamos imagi nar sobre la tierra. — - — No disimulo lo que una tal idea pueda tener de utópica.Pe ro ¿queda excluIda, en apariencia, el que algún día pueda llegar a ser realidad. ..? * * * Una tesis doctoral, hasta el momento no publicada en libre rías, y de la que es autor Claude Jacques Damrné (2) plantea esta cuestión. Su objeto es demostrar lo bueno que tendría el desmili tarizar la defensa nacional. Su argumentación me parece que po dría resumirse, o mejor dicho, esquematizarse como sigue: (1) En un artículo iluído en “Proc’eso en Salud Mental: conclu sicnes del XVII Congreso Interrc:Jonal. sobre Salud Mental, editadopor H.Freeman y publicado por 3. y A. Churchill 1969 (2) Claude Jacques Dammé -Administración y Defensa- Tesis mecano grafiada. 339 páginas. - —3— La defensa ha sido durantemucho tiempo la razón de ser del Ejército, mientras que la Administración dirigía de manera rutinaria los .intereses colectivos.dentro’de la vulgaridad de una vida monótona. El progreso, al.acuinular los peligros a los que est.n expuestos ahora estos. intereses, por razón de su núme ro, de la concentración de la movilidad. de la población, en ra— zón también del aumento rápido de. los peligros de toda especie,modifica el ritmo de la Administración.y hasta su naturalezaDes de ahora en adelante es necesario hacer. frente a situaciones di fíciles, inesperadas tanto en el.momento de su iniciación como en las modalidades de su desarrollo..Es. decir, a crisis de una rapidez y de una violencia jamás conocidas. Incluso en la vida cotidiana, el manejo de grandes masas, laconducción de una eco nomía compleja- y caprichosa, con impulsosy. frenazos, exigen una constante atención, una: estrategia a largoplazo.mantenida poruna téctica oportuna, dentro de.un. movimiento general cuya velo cidad’ se-acrecienta. A las. cómodas. costumbres del.pasado, deben suceder por’ tanto, métodos dinámicos susceptibles de renovación o modificaciones répidas. - - — La aptitud para hacer frentea.estascrisis da —o debería dar- a la Administración cualidadesy.posibilidades que ésta no poseía, permitiéndole, en. consecuencia,. tomar a su cargo muchas misiones atribuídas al Ejército, aparte del empleo de la fuerza organizada- y-’equipada- para la guerra. Esta’mutación-parece tanto ms indicada,:cuanto que el Ejército viene-a ser-, por consecuencia.desu propia evolución,me nos numeroso’ en efectivos y mejor. dotado en-materiales complejos, cuyo mantenimiento’ por otra: parte depende..de las industrias civi les m.s avanzadas en loque se. refiere alasunidades de fuerzas estratégicas y de combate.’Tratndosede.unidades de defensa te rritorial, cuyo asentamiento sobre. el- territorio nacional se efectúa siguiendo la -delimitación, de. las. circunscripciones admi nistrativas’,’ su- eficacia depende, evidentemente, de la solidez y simbiosis’ que realizarían la Administración y el Ejército. - - —- - Para hacer frente a las.condiciones.en tiempo de paz y en tiempode’ guerra, cuyas..diferenciasse alejan cada vez més, como lo demuestra’ ampliamente’; la experiencia, conviene desmilitarizar la’ defensa, transfiriendo: a. la:Administración el conjunto de las tareas que el Ejércitonopuede..yno debeasumir. Esto tendría múltiples ventajas, de las cuales.laprimerasería, sin duda, la de±nteresar’més vivamente al.conjuntode..los.ciudadanos en la defensa’—en’ el sentido’:de- interesar- a la.masa;trabajadora—;la se gunda, la’ de- asegurar: una preparaciónmés .completa y eficaz del país en. toda’ ciase.de acontecimientos; .ia.tercera, la de evitar la esclerosis.de- las institucionesy organismos. encargados de la defensa,- al’ estar’ en todo tiempo en estado de alerta y adaptados - — - —4-- a las necesidades del momento. Y por. último, entre otras muchas no enumeradas, el dar, en fin, unsentidocompletoal artículo 20 de la Constitución que dice que.elgobierno “dispone de la Administraci6ny de las Fuerzas Armadas”, colocando así sobre un plano de igualdad dos instrumentos mayores de su política. - — Espero no haber traicionadoel pensamiento del autor. Es te pensamiento se inspira evidentemente en el Decreto de Enero de 1959 que el autor llama el “Nuevo Testamento”, siendo la Ley de julio de 1938 el “Antiguo”, ya que el texto ms reciente no ha derogado- el precedente. Claude-Jacques Dammé se une pues a la concepción ampliade la defensa, extendida a todos los cam pos y-a la rplicade todas las formas de agresión, y trata de pasardel principioa la aplicación. En otra tesis doctoral, sostenida antes de la de ClaudeJacques Damm,Bernard Chantebout (1) opinaba lo contrario, al decir claramente “Si la defensa nacionaL est en todas partes, escribía, se expone ano estarlo en ninguna”. La noi5n se vuel ve inexplotable y peligrosa, “inexplotable”.porque “se confunde plenamente con la política general del gobierno”; peligrosa “pa ra las- libertades públicas”, pues .a cubierto de. la defensa nacio nal, pretexto- fcii y siempre justificable.en.apariencia, los poderes públicos pueden tomar medidas anti—democrticas y obrar sin el-debido consentimiento .delpueblo, ya se trate de obliga ciones- o sujeciones impuestasa los:ciudadanoso de- una políti — ca capaz- de- conducir- a-crisis violentas. o hasta la guerra. Ber nard Chantebout quería demostrar que unaparte de la seguridad nacional- debería ser- sacrificadaen..beneficio de la libertad de los individuos-y las institucionesgarantizadas“contra los me canismos jurídicos-que-han permitidolasustitución de otras responsabilidadesa las previstas por la Constitución”. - Aunqueyo conciba la defensa.bajosu forma ms amplia, no tengo la intención de juzgar.las.dos tesiscontrarias, ni de rendir un juicio-de Salomón en-una materia .tan delicada y tan discutida Pero- retengo un argumento de Claude-Jacques Damm porque meparecequecorrespondea una realidad prctica, fue rade-las decisionesy postulados de principio. - - Si lasFuerzasArmadas se benefician:de una prioridad en la defensa, losotros campos enloscuales.s-ta debe ejercerse (1) en Francia:desdeeIfjnal-de la.:pr±ineriurra- mundial. Li brería Genéral deDerecho-y-de--Jrisprudencia. i967 —5— arriesgan mucho de’ serperjúdióadós.. En±éfédtO; ;“una” prioridad se’transforma’ répidamente’en “la .prioridad.flica’, o deja de ser una prioridad. ‘Es difícil’ y,quizilUsOriO’el mantener el fielde’ la balanza urgentes y cuyos’ lrhites’ quedan’ inciertos.’:,Seconcibefáculmete, por ejem p10, ‘que’hayamovilizaCi6n rnilitar...ymovilizaci6fl econ6mica, ¿perod6nde’eStla’iflea divisoria,entreellas, cuando la moví lizacin econ6mica debe respondera..lavez: a’:las necesidades del’Ejército’ y’ a los imperativos.propioSlde .la competencia eco nómicaquelaS.hoSti1idade5”notiene1. asta qué punto y se — ‘ -— g.ñ’ qué criterios”puedefl iiriiitarsea,las: informaciones que sir ven’ a’ la’vezpara” el’ iantenimiento,,Y1a.exa1tación de la moral deuna poblaci6n yde un’ejército en,situaci6n de conflicto agu doy’ a’la necesariadifuSiófl’de informes’exaCtoS sobre el desa— rrollóde éste...? Sin’ dudá no’ existe’ reglaabsoluta-.efl tales materias. Si guiéndo’ las circunstancias presentes:y.previsibles, conviene di rigir’el esfuerzo principal sobre un.campopOr.Ufl.tiemp0 conve— niente segt5.n’ una direcci6nde,la defensa. que, evidentemente, ‘noes solamente del tiempode’guerra, sino que debe ser conti nua. Todo elló, sin’embargo,’flO’lo oculto, ¿c6mo pasar’ a”laprctiCa...? permanece te6rico ‘«“Tradicionalmente’,’ la Administraci6fl.Y’.el Ejército viven sobre’el’plano’de’Una’CoeXiSteflCa pacífica,.. surcada a veces ‘por algunos tormentas.’Para realizar:estasimbio5i5’, como desea Claude-Jacques’Dalflmé’, seria necesario en”primer lugar transfor mar” estas’ relaciones. — Su origen proviene’, ami parecer,,:de,.difereflcias congéni tas ono ‘(como se.podra,creerdeSPUé5de.Unamen superfi cial) de’ oposiciones’ entre,personalidadeS’.qUe’tta5e1 de con servar’, tomar y”ejercer el.poder;,;estas diferenciaS’Con seguri dad’ que”existefl’,’ pero”no’tienefl’ioS efectos:.que a ‘menudo se les presta -La autoridad1Iflilitar,eSté,c0flcaParatv en en:el:que importa elegir y’ adoptar soiuciones:.urgentes,en’provecho”de intereses individuales; todo’error:,en,suS juicios;puede significar el triunfo” del adversario 1ia,,ruina:,del r,pas;y:haSta su; desaparición’.’La autoridad’ civiL obra.p0r,c0mPr0mí50 ;,es:deçir, lenta— .mente’,porque:,esta,autoriaaa:.tiene:para:síun:factorse1i .,. ‘,‘ - que falta”a; los militares: .elitiempoen,.sU..contiflUidad. Para la primera,’ toda,oposici6flCOflSideradade5deelPt0 ,de,vista del momento de crisis’,’es:una,traicin; ‘,para’la..seguflda,eSta oposi ción;es,un’ freno’muchas’,veces:útili .,algunaS’,,indiSpensable y en todas: al mis mo’ t’iempo’qie’ un alegato’ permanente de la’ parte contraria, cuyos — —6— términos, final. aún siendo exagerados atemperan y-matizan la decisión Todoloespectacular que.pueda..ser:1a.mutación de la Admi nistración- considerada por ClaudeciacquesDammé,no me parece que pueda llegar a darleloscaracteres.que:acabo-de-atribuir al Ejército, pues éstos-, en la.época..de:.los-.armamentos nuclea res- y- de la motorización rápida,. se..acusan todavía-más. Aunque la Administración- deba decidirsey.obrarrápidamente, mucho más rápidamente que de- otras- circunstancias,., elEjército debe hacer lo instantáneamente. La- diferencia. permanece -entre ellos, al me nos en lo que serefiere-al ritmo desuacción; pero su natura leza, cuya- esencia vendría a. ser para.cada:uno un dinamismo oportunamente calculado, podría hacerse,: efectivamente, compara ble. Si tal fuese el-caso,--.Bernard.chantebout podriatemer aún más el riesgo-dé-ver despreciarlaslibertades:indjvjduales y produdirse- lasdésviaciones-delos mecanismos jurídicos. - -- — Será necesario-admitir- guela. ciencia:administrativa mere ce una- total transformación, que utiliza:medios:muy modernos y rechaza del- pasadosus--lentitudesburocrátjcas y:el gusto por los expedientes incubados. Pero. también que -elarte:de ponerla enprácticá--no-sebasa solamenteen la virtuosidad de decisio nes rápidas,-sino-que-reposa, fundamentalmente, sobre un senti doagudo de la justicia.yTdela equidad. Juzgandó-por el número de- fáltas y errores cometidos desde..hace:mi1eniospor los mili tares de todos- los países en:el remolino de-los:acontecimientos en- cascada,- me- pregunto- sillos:administrativos:encontrarán rápi damente el- dominio-de- su- papel- en- una sociedad que-atravesase, sin cesar,-crisis y-conflictos. — - Se- puede,--efectivamente,- reconciliar al Ejército y a la Administración; :el-hacerlo esconveniente.Peropienso que es ilusorio- el- intentar- hacerlos comparables-:o:.parecidos. Uno y otro- siguen- sus--propias-leyes, que dictan su evolución. — — - Cláude—Jacques:Daminé-- señálamuy- bien, desde las primeras líneas-de su--tesis, que: sus :vías:son. paraielas:”Estasvías para lelas, vendrán,superponerseialgunas:veces:ose -entrecruzarán a la- entrada en- agujas” Admitiendo que.esta geometría sea teme raria, la idéase -comprende; estáademás.claramenteexpuesta, “Es- en. estos:entrecruzamientos.-enlos -que el Ejércitoy la Admi nistración- condicionarán--todo- lo- que debe- ser una Defensa Nacio nal global”. - Por mi parte,-no estoy de acuerdo, puesestos”entrecruza— mientos”- son el efecto:délalógicade1a.evoucj5fllos dos instrumentos-del Estado, o:seadedosl5gjcas -diferentes que se encuentran-por casualidád y momentáneamente-en un mismo pun— —7— to. No se puede edificaruna’defensa,sobrela,aieatOria conjun ci6n de dos curvas.- Y’ si es,necesario-.corlservar una- imagen ms— piradaen los ferrocarriles, diríaque.la:defénSa”glObal debe reposar sobre railes- sólidámente unidós por traviesas a toda prueba- y-no” sobre- la- entrada-en agujas. * * - * En la-actual organizacióndelaDefefl5at estas traviesas son los textos que fijan ias.atribuciones:.deLlaS autoridades ci viiesy militares desde jferentesescaiOflesy’:,,lOS” organismos mixtos a los’ cuales incumben las.aplicaciones’Y los”’ conciertos impuestospor lás condióiones’de lugar’y momento. — Es fcilcriticar una”.organizaciónqueT.SeíPOne1leflta y di fícilmente’ enmarcha;Como:,no:,.ha:.SUfrido.la.PrUeba’deU1 expe— riericia real, es:fcil:imaginarsOluCiofleSdereCambi0 de las que’ se” puede”afirmar “a’priori” que tienen el mismo carácter te6rico. Pero una idea”sedésprende:clarameflte. la,lentitud sustituciándé” ias’autoridadés,militareSpor.-laS civiles ‘diferentesrarnasde la’ defensa;y’Lel:.:papelprepOnderaflte buídóa las.primeras,desdé:que:apareCe.elPeligr0de la de la en las atri-— guerra de la defensa, -tal como’ la considera’ en’ un porvenir’ ideal Claude-’ Jacques Dammé. - Las’ razOnes” de’esteestado’,de ,cosas:soniciaras: es difí—— cil’ suplir la ausencia de’:medios’:a:.disposici6n.delaSaUtOridade5 civiles, a. pesardel:enormepoteflciaidelaLeCoflomía1ocal,.regbo y nacional’; de la de la ur gentes’. uay’;otra’ quizámásdifíóil.todaVíá: .la,extrema dificul ‘tad dé, conciliár el que cadá unoa se encuentra- implicado’:directameflte, .Es. innegable que todavía que’ posee al--mismo.tiempo’un:.carCtertcflíc0 ..nadie.cree en se rio. afron tar la. política. cívi cano evolucionan’.de..la,inisma.-formani al mismo ritmo. No es cil pues, el armonizarlas’y el ‘coordinarlas. - — El ejemplo ms’palpable es sin duda, el servicio nacional. —8— La Administración —la de losoficinistas— y el Ejército -el de los mercenarios- no tienen buena..prensa entre la opinión, par ticularmente entre los jóvenes. Estoes..un hecho innegable. La re ducción del número de oficiales.dereserva, no permite ofrecer a todos los jóvenes instruídos.unaformacjón militar y conforme a sus conocimientos y acorde consu espíritu. La exaltación patrió ticaya no esta de moda. Y no hablo..de..las.ideologías contrarias que encuentran auditorio. La.juventud.dehoy, como la de otros tiempos, creeen los valores absolutos.,..al punto que considera la guerra como odiosa —lo que cada.uno.est de acuerdo en aprobar— llegando a la conclusión de que.supreparación lo es tambiénlo que no requiere una misma comprensión. La.Defensa les aparece pues, balo un prisma desfavorable..Uno.no sabría descuidar esta aptitud. Los viejos saben bien que,si el país fuese atacado y ocupado, la juventuddehoyreaccionaría.como la de otras veces; pero saben también que la defensa no se improvisa. — — — —— - ¿Una defensa desmilitarizada sería. juzgada. favorablemente en el espíritu de los jóvenes.y. en. el delaopinión...? Por expe riencia personal sabemos lo difícil que.es hacer comprender una idea nueva en. semejanternateria; pero. sabemos. también que es posi ble.convencer cuando. los hechos. comienzan a.hacer;ver la necesidad de una organización verdaderamente adaptada al momento. — El servicio nacional-.no. se impondrmés.. que. en. el momento en que; sus objetivos: sean::claros, sus.primeras.realizaciones acer tadasy eficaces;La démostración mediante el ejemplo es el mejor argumento. Hay- queguardár esta verdad.psícológica.en. el espíritu. La verdad se. ajusta- a:consideraciones:de.naturaleza. diferente. El costoS de un..servicionacional.con: predominio. civil sería verdade— si un servicionacionai: respeta:ia igualdad1 parece:.lógico:.incluir en él a lasmujeres-jóvenes,:en. particular. las:que,siguiendo carre ras- en- competencia: con: los .hombres,. se.encuentran..actua1mente f a— vorecidas con respecto: a éstos. La cuestión es compleja y su solu ción ofrece grandes dificultades. — — - Citandoal Controlador General.GENEVEN.que.escribía: “el servicio- nacional en. tiempo.de..guerra.es.ms.civil que. militar;en tiempo-de paz,:más:miiitar:que:cjvil”. .ClaudeJacquesDammé subra ya. esta situación-;paradójica: :de .una:sub-militarización en tiempo de guerrapor:una:sobre-miiitarizacj5n.en.tjempodepaz”. También se pregunta: en:qué medida.el:.sector:público.podríarea1izar el re a encon trar- su- pleno empleo en tiempode guerra”. - —9— Si las fronteras- entre 1a:.paz,y,.ia:guerra’han de llegar a ser cadavezms imprecisas’en’la.sociedad”dei porvenir, la áues tión no limitado. Si la gue rra concebida’e’forma’ tradicionalno:debe’Ser otra cosa que un episodio violéntp’ en- una sucesión,casi:iniñterrumpida de conf lictos-y decrisisecon6miCaS,’ sociaiesy:..espirituales,’ poco irrtporta que ésta ilev& consigo una sub-militarizaciófl; nuestros dscen dientes- no- se’ asornbrarn’ como nosotros,. sin: duda’, ante un 1icho que les’ parecer’natura1’. Pero si nos atenemos al presente,]Ja pa radoja permanecé.. • • — • Las’ fuerzas estratégicas,y.1asfuerZaS de intervención dbi les en efectivos’ y’potentes,enmaterialesmOderflOs’ “de vanguardia” —en la-que ‘la logística’ reposa estrechamente Sobre las actividades industriales civiles- no pueden. obrar,.,eficazmente ms que sobre una cuadríd1iá”orgafliZadaSObree1territ0ri0 cional o a partir de’ ste;’Admito, sin embargo, que..la,duraci6n .de supuesta a pun to’ es -te6ricamente-” sea iló gico considerar qüe’ estas’-fuerzas,,puedan..tefler’Ufla.amPliaautono mía “vis avis”é la,Administraciófl. ,No,,.es:lo,:mismo,efl,lo qu. respectaa ‘las ñierzasterritoriales. :Estas,,no:puedefl.vi7ir’rns con:los repre sentantes”de: laAdministración ,a1imentadasy. sostenidas por ellos, tanto’m.s’,cuanto:,’que’,1es,,son,indisPeflSables para• subsistir La Re’sis— tencianI Francia”y’en’ los:países:europeoS:efleLCurSo’de laúlti ma’guerra’murd-i. los’,conflictos.,armadoS,,flacidOS,dela descoloni zación’-, son” otrás tantas:experienciasLvividas,durante-ufl cuárto de siglo, que’ dernuestran1a,,neceSidad.de,,,Ufla,.eStrecharelación en tre el’Ejército’y ia:,Adriinistraci6n;,:Efl-fifl, :supongo. como pada cual” puede’ suponer’: que:,una:guerra:nuclear,.:.arrastrando desfruc—— j0fls’ considera es’:,dvidaS:y:debienes1exigiría-ms aun’ una coordinación: entre,todas:lasautoridádeSqUe hubiesen es capadó’ a’ la’matánza; es,décir,:,el: reconocimiento.de’Una sola auto ridad’ capaz’déhacer:frenteT:a:Ufla.SitUaCiófl.aCtualme1’1te imprevisi bler. de entre— garse a” sútiles’ distinciones’ de” atribuciones y de responsab’ilida des. - — - .‘ -- - • • • • • - Dejemos aquí’ esta visi6nde,pesadil1ade’laqUedig0 sin em bargo que,’ todo’ló ?impénsable’ ,que,sea,::bienmerece’ ser “pensa—— da”. ‘En’resumen,-por loque:se.refiere—aun.,conflicto armado, dos casosse’presentafl: las de- iñterVenC’i5n’’que:es:cl-SiC0 tradicio l’:,ypor lo tan to en’cierta:medida’,esperaflZadOr el,delás:fuerZaSterritoriale5, en las-que las’,enseñanzas recientes. debén:ser adaptadas. a la vida inodérna’y a”lás:estructuras,socialeS1de.hOYY delmañana y que -abren un’amplio:campoa” la’imaginación, a’ la inventiva y a la aplicación-de” fórmulas nuevas. — — —— — lo — Ya se sabe que, eniosdo as1 losefectivos propiamente militares- serán relativamente reducidos; pero- los efectivos en es tado- intermedio —a medio- camino entre.elciviiy- el militar— se rn considerablemente aumentados. Pensemos..solamente-en todos los observadores,- agentes, auxiliares, guerrilleros de- toda especie que acompañan al núcleo de- fuerzasregulares-.-su diversidad enca— -ja mal conunaorganizaci6npiramidai1detjpo militar o adminis trativo, en “cuadros de efectivos..ydedotaci5n”-sujetos siempre aun encuadramiento y a una disciplina-rigurosa que puede ser adaptada-a- lás necesidades del momento de-la acci6n. - -- Si, como-estoficialmenteprevjsto, secrean cuerpos de de fensa- dentro del marco- de-. un: servicio nacional-,es evidente que su generalizaci6ntropezaría- con-.dificultades:innumerables:obs—— trucciones- dénaturaleza política, imposibilidadesde encuadra-miento,dudas-sobre- su-utilidad inmediata y sobre surendimiento, etc. - - Revisando- los-textos y. las-tentativas:fragmentarias de apli cación que-sobre este tema.selhanhecho,:claude.-Jacques Dammé ile gar a-la-conclusi6n-de que aparte de: laayuda:yde: la cooperaci6n técnica, no-se ha hecho prcticarnen-tenada.en-este sentido. ‘El servicio mílitár permanece-como la única realidad de nuestros días. — — • -A falta-dé podér organizar:unservjcionacion bipolar -mi litar-y civil-ya-que-: ia:irnpiantaci6n. de.un. Servicio Nacional de Trabajo, el renacimiento,:bajo:uflau.otraforma:delosCírculos de:Juventud dice Claude-Jacques-Dammé;- tal vez fuese posible utilizar-el servicio militar con fines civiles. - -. - • - En la practica-,seutilizan corrientemente las.formaciones militares- en- casos:de: caiamidadéspúblicasy parasupli a los servicios civiles- de-: interés:generalparalizados-:por: huelgas. Es te- empleo permiteremediar- situaciones excepcionales. ¿Puede transforinarseia excepci6n enreglacorriente...? — —— Tomando- como ejemplo: la experiencia realizada-por el Regi— miento- de Zapadores dé París, Claude-JacquesDarnrnéescribe: “El Ejército podría servir,de puntode arranque delosfuturos cuer— posde défensa”. :Esto es ciertamenteposibleen.casosparticula__ res;:pero:sería.-añadir.a las cargasdel:Ejércitounanueva que, soportable mientras-.fuese limitada,..nolo.. sería:..al:.generalizarse. El: Ejército. asegura:ya,-. para ciertos:reclutamientos;un. complemen to- de- instrucci6n primaria, unaformación:profesional ademas de otras tareas:complementarjas: que::entorpecen:.los.. programas de ms— trucci6n.restringidos yapor.ios:límites:de. un..tiempo-de servi— cío progresivamente- disminuído. Parodiando-la- frase-de Bernard — - — — 11 — Chantebout citada ms arriba, se podría escribir.:....‘Si: el Ejército esta en todas partes, se expone entonces:a,no..estario:’en ninguna Y la desmilitarización de la defensano debe-arrastrar-a la del Ejército; pues “si-la sal pierde su sabor,’.con qué-se-la devolve remos...?’. Desmilitarizar la defensa me parece’ estar:conforme con la lógica de la evolución de’ nuestro mundo y:de..nuestra’sociedad. Es t de acaerdo también’ con los textos’actualmente.,.en:vigor y el es píritu que- ha presidido su establecimiento. .Peroesta: desmilitari zación deseable no-debe conducir al desarme.deipaís. Las armas nuevasno son solamente las-bombas nuclearesy.atómicas, los ra yos laser,’las-eronaves supersónicas, los satélites;..:,lo.son tam bién’el trabajo productivo en una economía .sana.,..una,moneda sóli da, un progreso intelectual, una fuerzade persuasión. pór. el he cho y-la-palabra, un equilibrio social nacido.deunasuficiente satisfacción delas”necesidades primarias y deseos legítimos, una confianza’ justificada en sí misma y una..inagotable caridad hacia el prójimo.Estas armas son’el fruto-de la educación. - - - Estoy de acuerdó’con Claude—Jacques.Dammé., quien ha señala do que el- servicio militar no”podría”estar’armoniosamente organi— zado si’ no existiese un “programa’ de educación ,nacionai, desde la “escuela primaria””hasta”el Instituto de:Altos Estudios...de Defen sa Nacional” .Siento, sin’ embargo,- que no haya. dedicadoms que algunas péginas de su ‘tesis’a’esta’cuestión..primordial. Es cómo do plantear el principio; pero contrariamente.es..muydifícil de - poner’apunto semejante programa,’an’en susgrandes..líneas, evi— tando-’su “orientación”,’asegurando una total”objetividad, por en cima’de conceptos’ y’ de’ partidismos’ políticos. La defensa’ quedaría’ verdaderamente-’desmilitarizada el día en que cada ciudadano adiñita’su razón de ..sery..lassuj.ecionés que ‘ella le impone al margen de’todapresión:que.:.provenga de aconteci mientos exteriores-y antes de que no.seademasiado.tarde para —— obrar’. La’ defensa- es actualmente mucho .ms’. sufrida.que..vivida; ahora’ bien,’ si’.fuese- verdadéramente vivida, tendría muchas proba bilidades de’no ser-nunca sufrida. La dominante militarde la defensa es una..sucesión de cos tumbres, el reflejo’ también’ de una civilización.queno tiene la suficiente confianza-en sí misma, no se-atreve a tomar:bastante • - — — conciencia-de’ su’vaior para recurrir.a’.la,,violencia. .Es esta la continuación-de- la política por.otros..medios, .siguiendo. la frase célebre...?’Nolo creo; es:elrecurso...supremo deuna política que no sabe”liegar hasta. ei..fin’.desus.posibilidades;..es•decir, de una política’ cuyo desarrollo.no.está.terminadotodavia yque se encuentra en” la obligación :.de.abdicar cuando la. prueba sobrepasa sus- medios; la alternativa del uso de la fuerza señala el límite - ‘ — actual de sus fuerzas. 12 — Y esto no es un simple juego de palabras.— No sabríamos admitir la desmilitarización de la defensa mientras dure esta insuficiencia política. Esta desxtilitarizaci5n que yo creo deseable en su principio, será progresiva y probable mente lenta ¿Por qué...? Porque los progresos de las ciencias y de la ética no van a la par; porque la técnica precede -con muchoa la moral; porque los hombres, afirmando su dominio sobre el mun do material, permanecen divididos entre sí y contra ellos mismos; porque siempre es posible explotar lo que hay de mejor y peor en ellos para fines discutibles. -- — En su hermoso libro sobre “La Epopeya Kamikaze”, Bernard Mi llot (1) señala muy bien cómo “El Imperio del Sol Naciente se construyó por medios modernos, pero con una ática medieval”. Es to es lo que permitió a los dirigentes japoneses de la i5ltima gue rra mundial obtener resultados que un occidental considera como más dignos de desprecio que de admiración. El espíritu de defensa se confundía allí con el culto nacional. “Cuando el Japón empezó a sufrir las consecuencias de la guerra, ni siquiera tuvo que re currir a las tradiciones milenarias para obtener de los combatien tes un brote de agresividad y de fanatismo. Esto llegó por sí so lo”. -- No es “natural” que la defensa se transforme en un mito. Pe ro tampoco que sea un concepto abstracto y neutro, es decir, va cío en la práctica. Igualmente su camino es estrecho y difícil en tre la borrachera de las exaltaciones generosas y la tentación de renunciamientos fáciles. Pero quizá también se convertirá un día en la “Conciencia Nacional” —el día lejano en el que la guerra,—— al igual que otros azotes que desolan el mundo, haya sido venci da-. (1) Bernar Millot.”La Epopeya Kamikaze”. (Colección “La historia que vivimos” * * * Ediciones 1970). Robert Laffont ¡uei’z4ao/;z 9tbi “54 o P c& 14i,aCjt9it ESTUVII’S TAt rieti;r w,s r,cz - L4 FUERZA NUCLEARAC/CA CESEDEN LA GUERRA NUCLEAR - (De TACTICA Por Robert M. Lawrence - la Revue Militare Generale enero febrero 1971) — Traducido Abril, 1971 por el Dept° Informaci6n DE INFORMACION BOLETIN NUM. 54 - V Parte 1 Aunque muchos creen lo contrario, la guerra nuclear estraté gica ha sido muy discutida y ha suscitado un considerable debate político. No consideramos necesario someter a discusión la guerra con vencional. Contamos con muchos ejemplos de guerra semejante y ac tualmente nos encontramos angustiados por el tercer gran conflic to de armas convencionales de los últimos 25 años. Al menos, has ta que los temores sobre Vietnam alcanzaron las recientes propor ciones, los medios informativos narraron victorias y publicaron actos heroicos de nuestros combatientes como si la guerra hecha con armas convencionales fuera una cosa normal, aunque lamentable, en las relaciones internacionales, en un régimen de estado—nación. — — Durante los últimos años, sin embargo, ha habido una posi—— ble clase de guerra sobre la que ha sido virtualmente imposible discutir públicamente en una forma razonada y coherente. Esta es la guerra nuclear táctica, el uso de armas nucleares con fines mi litares tácticos limitados, tema que ha tomado una apariencia ca si repugnante y que parece esencialmente incapaz de suscitar la curiosidad intelectual, y mucho menos capaz de ser seriamente con siderado por parte de los investigadores, sabios o políticos. — — La guerra convencional fue objeto de un análisis magistral, “inter alia”, por parte de Karl von Clausewitz (On War) La gue rra estratégica fue analizada en la obra de Herman Kahn (Qn Ther— momuclear War) Sin embargo, la guerra nuclear táctica, o bin ha sido declarada irreflexiva e impracticable, en el más amplio sen tido de la palabra, o desorbitada de toda proporción realista por aquellos que aparentemente tratan solamente de racionalizar sus propias conclusiones actuales. . . — ¿Vamos nosotros, a causa de la desagradable experiencia de Vietnam, a rectificar nuestros compromisos y dejar a todo el mun do resolver sus propios problemas de defensa? ¿O es posible que decidamos mantener unos importantes compromisos,. debiendo decidir lo mediante una cuidadosa deliberación, a fin de lograr una op ción militar de la que hasta ahora hemos preferido privarnos: una capacidad nuclear táctica veraz? — — — A pesar de la aparente y aplastante preponderancia de poten cial militar convencional, los Estados Unidos fueron incapaces de disuadir a Vietnam del Norte, controlar la guerra, o llegar a una solución militar satisfactoria. La mayor parte de los comentaris tas estarían de acuerdo en que esta guerra no supone un problema militar solamente y que no es posible resolverla con medios mili tares únicamente. No obstante, la victoria militar es la condi— ción previa para poder aplicar con éxito los procedimientos polí ticos, sociales y económicos, y el no lograrla, ademas de las enormes sangrías en hombres y dinero, justifica el que surjan las ms graves controversias acerca de la posibilidad física y la corn placencia política de América a contender en tales situaciones mi litares con medios nucleares. — —— La guerra de Vietnam ha sido y seguirá siendo un mar de grandes confusiones. De todos modos, los problemas con ella aso-ciados han demostrado claramente la necesidad de nuevas fuerzas y políticas de defensa, si los intereses americanos en ultramar han de ser apoyados en el futuro. -- Aquí no tratamos de discutir sobre la necesidad de Estados Unidos de compromisos allende los mares, ni siquiera del compromi so específico en Vietnam, sino ms bien acerca de las políticas y doctrinas que han contribuído a una prolongada, costosa y relati vamente infructuosa aplicación del potencial militar americano una vez adoptada la decisión del compromiso. El pueblo americano muestra su desilusión por Vietnam. Existe una opinión muy extendi da de que, si no podemos conseguir la victoria, deberíamos retiramos a tiempo prescindiendo de las consecuencias. Una corriente de convicción nacional numerosa manifiesta que no podemos afron—— tar semejantes compromisos militares, ni los que pudieran resul—— tar en el futuro. Ciertamente, si Vietnam es la muestra de la for ma y tamaño que han de tomar estos asuntos, el precio es prohibir tivo. — Nos encontramos frente a una crisis de confianza y determi nación, tanto en los Estados Unidos como en el exterior, sobre el papel que Estados Unidos podría o debería jugar en los asuntos in ternacionales. Se nos presenta un dilema, por una parte, las crer cientes presiones que tratan de que se reduzcan los compromisos militares con el extranjero, y una continuidad de problemas de se guridad internacional que demanda, según muchos, una efectiva in fluencia americana, por otra parte. - Es incierto adonde puede conducir finalmente el debate so bre estas cuestiones. Lo que éste ha engendrado hasta el momento, en lo que a política oficial se refiere, es la Doctrina Nixon la cual defiende tenazmente una presencia militar americana en el ex tenor ms reducida. Los principales puntos de referencia de esta —3— política han sido: 1. Reducción de las fuerzas norteamericanas en Vietnam de 384.000 hombres del total de 500.000 existentes a media dos de octubre. 2. Un plan anunciado para retirar 20.000 americanos de Co rea del Sur, dejando temporalmente unos 42.000 que se rían totalmente retirados después de o más años; y 3. El anuncio, en agosto, de que Estados Unidos había transferido a los japoneses la responsabilidad de la de fensa convencional de Japón. Aunque alegar que, un riguroso dan, en los de la Unión —— lo anteriormente descrito está prosperando, podemos como corolario a la retirada americana, es necesario examen de otras alternativas y coyunturas que respon compromisos estadounidenses, frente a las amenazas Soviética y de China. — Es improbable que exista alguna solución, pero es igualmen te improbable que una continuación de la pasada política pueda contender de forma efectiva con las amenazas a los intereses ame ricanos y a los de sus aliados. Muchos americanos prtenecientes a diferentes sectores de la esfera política están de acuerdo en que una continuación de las anteriores políticas hasta podría ser desastroso. — LAS POLITICAS DE LOS 1960 Las políticas de Defensa iniciadas en 1961 por la nueva Ad ministración Kennedy se apoyaban en la teoría, expuesta al pbli co, de que los Estados Unidos necesitaban de unas opciones mili tares adicionales que permitieran, según las últimas palabras del Presidente, “otras alternativas que no fueran la humillación o la acción nuclear total”. El fruto de esas nuevas políticas fue la modernización y expansión de los ingenios, bélicos conven cionales (incluyendo los antisubversivos) , tratando de equili— brar el potencial militar global que había cambiado drásticamen te durante el mandanto de Eisenhower. — — — La lógica de la declaración de Kennedy era entonces irreba tible y continua siéndolo hoy día. Sin embargo, en la conceptua lización del asunto, la Administración Kennedy omitió una opción muy importante, y las acciones tomadas para implantar su po - —4-. lítica no consiguieron los resultados anhelados. El incremento de las fuerzas convencionales elevó el presupuesto de defensa en unos 10.000.000 de dólares, antes del compromiso vietnamita, y los gastos hubieran sido aún mayores si se hubieran cumplido por completo los autocompromisos con las fuerzas convencionales pro pias. Desde que la guerra del Vietnam alcanzó las actuales condi ciones, el presupuesto de defensa ha aumentado tanto que ha llega do a ser casi el doble de el de 1961. No obstante, todo este de sembolso no ha conseguido la gama completa de flexibilidades que se consideran esenciales para la seguridad nacional. - - La nueva teoría defendía que la amenaza de responder a los desafíos limitados con armas convencionales suponía al agresor una amenaza efectiva, -mucho ms que si se le amenazara con oponérsele con armas nucleares-. Por lo tanto, se creía que una es trategia basada en el empleo de la fuerza convencional constitúia una disuasión, en lo que respecta a los conflictos de bajo nivel, ms fuerte y més segura. Ademas, las armas convencionales eran consideradas como la defensa “idónea” contra los desafíos milita res limitados. La agresión con armas convencionales habría de ser Contrarrestada con el mismo tipo de armas, con el mismo tipo de armas. El uso de cualquier arma nuclear supondría una “super—ré—— plica” sin garantías, una segura superdestrucción (“daño colate—— ral”), un elevado riesgo de escalada nuclear, y unos costes polí ticos críticos. - — - Siguiendo esta teoría los Estados Unidos han procurado con tender en los conflictos militares localizados usando, con cierta aproximación, el mismo nivel y tipo de fuerzas con que el enemigo amenazó o empleo, lo que equivale a decir que solamente se opuso con armas convencionales, hemos oído decir repetidamente que ésta es la política ms acertada, no solo por que es la ms segura, si no por que al mismo tiempo es la rns efectiva, tanto como medio de disuasión de la guerra limitada como de defensa contra cual quier agresión limitada futura. Así ha sido, aún cuando estuvo ex puesta a desgracias mayores. — Lejos de proporcionarnos la réplica flexible prometida,nues tra flexibilidad en las posibilidades militares ha sido reducida aún ms —innecesariamente claro esta—. Entre una réplica de fuer zas convencionales que no ha sido efeçtiva en Viertnam ni políti— camente satisfactoria en Estados Unidos y en el extranjero, y una réplica nuclear estratégica que no emplearemos a menos que seamos directamente atacados, nos encontramos ante un reducido margen de alternativas practicas. El recorrido intermedio esta vacante. El dispositivo nuclear téctico, que debería ocupar este espacio intermedio, no es plausible ni política ni militarmente, no se en cuentra técnicamente al día, y por lo tanto no es útil, excepto quizá como “ostentación” o con propósitos muy destructivos como - — —5— último recurso a la desesperada. En muchas cosas el dispositivo militar de hoy parece menos efectivo que aquél legado por la Ad ministración Eisenhower. A pesar del gigantesco incremento de los gastos de defensa, la guerra en Vietnam fue en aumento y la aplicación del potencial de fuego convencional no ha dado unos resultados positivos. La estratégia Eisenhower hubiera probable mente evitado una guerra estrictamente convencional de esta maa nitud. No hemos logrado nada positivo en la NATO con nuestra tendencia a aumentar las posibilidades convencionales y deposi tando la confianza en ella. Esta estratégia ha contribuído sus tancialmente a la defección de Francia y a otros descontentos en la Alianza. Puede que, a pesar del incremento de los gastos de defensa, hallamos quedado detrás de la Unión Soviética, en lo que a progreso tecnológico se refiere, en el balance militar estratégico. La superioridad estratégica norteamericana existen te anteriormente ha desaparecido. La codiciada flexibilidad de réplicas no se ha alcanzado. Para muchos observadores el riesgo de destrucción segura ha ido aumentando de año en año proporcio nalmente con el costante aumento del potencial estratégico ruso. El pasado optimismo de los políticos creyendo que una estrate—— gia de fuerza convencional daría como resultado una reavivada NATO, una rápida solución a las conminaciones militares en el Sudeste Asiático, y una presenciá americana en el mundo ms ad misible e influyente, resultó ser una grave equivocación. - - — - - La razón principal de este retroceso radica en nuestra de liberada actitud de privarnos de las ventajas de los avances tecnológicos en el campo de la guerra nuclear limitada. No po demos hacer esto sin pagar por ello un alto precio. — ¿Por MOTIVOS CA. qué lo hacemos? PARA LLEVAR A CABO EL DESARROLLO DEL ARMA NUCLEAR TACTI Hace 12 años, en un clima intelectual algo diferente, en un libro sobre guerra limitada, que fue bien acogido, se decía que t1nadainherente en la amplia gama de armas atómicas las ha ce incompatibles con la guerra limitada”. El autor señalaba una condición singular: “En consideración a la necesidad de un dispositivo mili tar flexible, destaca la importancia del cometido de las armas nucleares tácticas; la adaptación de estas a la guerra limitada es probablemente el problema ms crucial de todos los relativos a la limitación de armas y objetivos con que se enfrentan ac—— —6— tualmente los estrategas americanos”. (1) Después de haber transcurrido 12 años, esta aseveración no es solamente válida, sino que es ms pertinente que nunca. Aún cuando los avances tecnológicos hacen actualmente posible la se lección y adaptación de las armas nucleares, se ha hecho muy po co sobre su almacenamiento, adaptación a la guerra limitada, o integración en nuestros dispositivos militares. Realmente, los avances tecnológicos de laboratorio han progresado faltos de es tímulo e incluso abiertamente en contra del Departamento de Esta do y de los elaboradores de la política de Defensa. En verdad, no existe ni una sola nueva arma en el inventario nuclear tcti— co actual como consecuencia de las decisiones sobre su produceción tomadas después de 1960. Ha habido una repulsa total a la incorporación de la tecnología moderna, sobre lo cual trataremos ms adelante. Esto nos hace pensar que el Departamento de Defen sa ha evitado la módernización de nuestra capacidad nuclear tc— tica únicamente por razones de política o aversión psicológica. — — - - Semejante acusación saltó a la luz pública en el verano de 1968 cuando un experto miembro del Congreso, Craig Hosmer, anti guo miembro del Comité conjunto sobre Energía Atómica y también miembro de su sub—comité militar, escribía al Secretario de De—— fensa, Clark Clifford en este sentido: “Caben plantearse ciertas dudas con respecto al credencial político que pueda ofrecer nuestra reserva táctica actual. No existe tan solo un arma en ella, debido a las decisiones de pro ducción. tomadas después de 1960. Tampoco existe ningún sistema de armamento en el campo nuclear téctico que haya posibilidad de incorporarlo a las fuerzas militares antes de 1972. Teniendo es to en cuenta es fácil comprender por qué la efectividad media de nuestra reserva t.ctica ha llegado a los horrendos extremos des critos por McNamara, y por qué los trabajos DOD (Departamento de Defensa) sobre una guerra nuclear téctica en Europa Occidental demuestran tan terribles probabilidades de devastación de perso nas y tierras de nuestros aliados de la NATO. — - - Sabiendo que los laboratorios de armamento de AEC (Comí— sión Energía Atómica) se encuentran capacitados para trabajar en el campo de los sistemas nucleares tácticos ms pequeños, perfec tos y calificados, a fin de mitigar tal devastación y puesto que la obsolescencia de nuestra capacidad aumenta de un día a otro, no puedo sino asegurar que la falta de una efectiva moderniza— ción de fuerzas es un cargo de conciencia y deliberada decisión, que incumbe a su departamento ...“ (2). (1) Robert E. Osgood, Limited War: A Challenge to nierican Stra tegy (Chicago University Press, 1957) , pp. 248—251. (2) Congressiona1.Record, H. 7955, Julio 31, 1968. — —7— Como cabría esperar, el trato que la literatura privada ha dado a las armas nucleares tácticas no ha mostrado ser de una ma yor profundidad, imaginación, o sofisticación que aquél del Depar tamento de Defensa, considerando a estos respectos, la necesidad de un progreso técnico. La escasa discusión pública sobre armas nucleares tácticas, parece demostrar un parco conocimiento de la tecnología actual de armamentos, o una falta de interés por aprender más. Es como si la gente no pudiera pensar sobre las armas nucleares más que rela cionándolas con la destrucción de Hirosima y Nagasaki. Aún los in teligentes académicos y periodistas, cuando escriben libremente sobre temas estratégicos y de defensa, parecen generalmente desco nocer las diferencias tan significativas que existen entre las ar mas nucleares, debido a los efectos que estas producen. Quizá al gunos prefieran ignorarlas. Generalmente prevalece una imágen úni ca absoluta de las armas nucleares. - Ciertamente, nuestra reserva táctica actual es inmensa.ExiS ten millares de cabezas de guerra para bombas de aviación, misi les y cohetes, piezas de artillería, morteros y cargas de demoli ción. Fuentes oficiales de Washington han manifestado que posee— mos un variado arsenal nuclear diseñado para los más efectivos em pleos militares que pudieran necesitarse. Pero de hecho se da una controversia. Subrayando la composición y situación de nuestras armas nucleares actuales, se ha establecido al mismo tiempo una doctrina basada en la esperanza y expectación de que nunca sean empleadas. Aunque poseemos una fuerza nuclear gigantesca no nos hemos provisto realmente de medios plausibles de usarla. Como re sultado, nos encontramos con que nuestras facultades están seria mente limitadas caso de tener que luchar en cualquier guerra tác tica razonable que sobrepase el umbral nuclear. Esta auto-impues ta limitación corroe gravemente la credibilidad política y la ca pacidad disuasoria de las fuerzas nucleares tácticas estadouniden ses. - — ¿Cómo interpretar este estado de cosas? La pura verdad es que el pensamiento sobre las armas nuclea res se ha endurecido en un principio y obstinadamente se resiste a cambiar. Las imágenes de las bombas de Hirosima y Nagasaki,y el subsiguiente énfasis dado al bombardeo estratégico, congeló nues tro pensamiento basta estos extremos. En los primeros años de la bomba atómica, las instituciones fueron generalmente indiferentes a la causa del desarrollo del ar ma no—estratégica. Las atenciones se dedicaron principalmente al bombardeo estratégico. Esto no contribuyó a una discrecional in vestigación de las posibilidades que pudieran obtenerse en otros —8— campos de aplicación nuclear. En tal ambiente era difícil conse guir, o siquiera visualizar, un esfuerzo propiamente equilibrado. El problema tomó el caríz de una competición entre la facción es tratégica y la de las armas nucleares. La facción estratégica ga n6 félcilmente la batalla, y la tendencia general por el desarro lb de las armas nucleares tomó dimensiones cada vez mayores. En 1951 las pruebas nucleares con implicaciones técticas fueron hechas en menor escala, mas, pronto fueron eclipsadas por las dramtjcas inferencias del “descubrimiento termonuclear” en las armas estratégicas, lo cual acaecía casi al mismo tiempo.Has ta la mitad de la década 1950 se habían producido y asignado a las unidades militares una reducida cantidad (extremadamente ba ja) de armas nucleares. De cualquier modo, no existía una doctri na clara de su empleo y su uso no estaba realmente previsto ms que para las fuerzas nucleares estratégicas. La represalia nu—— clear maxíva continuaba siendo el factor dominante en nuestra po lítica de defensa. - - Fué un accidente de la historia el que tuvo mucha importan cia e influencia sobre el estúpido pensamiento actual. En 1953,— la Administración Eisenhower empezó a dar forma a su política de defensa adoptando principalmente una postura nuclear, incluyendo las denominadas armas nucleares técticas, pero, en aquél tiempo, los medios técnicos para esta realización aún no existían. Junto a la oposición a la proliferación nuclear (la cual empezó a au—— mentar hacia el final de los 1950) tomaban forma, en un estrecho y marcado énfasis convencional, los medios técnicos para una doc trina nuclear táctica. Sin embargo, la prevaleciente opinión de la oposición fue la que ignoró aquellos nuevos potenciales tecno lógicos. Todavía es así. Durante la década de los 1950 no tuvimos ningún arma que pudiéramos hoy calificarla de “arma nuclear táctica”; tuvimos so lamente armas nucleares diseñadas para empleo táctico. Su rendi miento era grande (para misiones de combate terrestre táctico) su energía emanaba total o principalmente de la fisión de uranio y plutonio, lo cual llevaba consigo la liberación de enormes can tidades de radioactividad de gran longevidad, y sus efectos care cían de precisión y flexibilidad.Era difícil distinguirlas de las armas “estratégicas” y ninguna se adaptaba realmente a la guerra limitada. Esta situación provocó el desarrollo de teorías sobre la inevitable escalada nuclear. El medio ambiente del cam po de batalla nuclear que nuestras armas prometian, hizo parecer imposible el llevar a cabo operaciones militares significativas en tales condiciones, o desarrollar una doctrina factible y ace table de guerra limitada. Al mismo tiempo, al final de los 1950, fueron puestas en tela de juicio nuestras posibilidades no-nucleares para contender en guerras limitadas. Consecuentemente, los defensores de un refuerzo convencional disfrutaban de una si - ,- -- - — —9— tuación muy persuasiva. Llegamos a la conclusión de que necesitá bamos perfeccionar la fuerza convencional para hacer frente a las necesidades de la guerra limitada. - Paradójicamente, al tiempo que esto se convertía en una po sición política aislada, la tecnología de las armas nucleares ha bía avanzado hasta tal punto que podían haberse desarrollado las armas nucleares y los sistemas de lanzamiento factibles para una doctrina de guerra limitada nuclear táctica. Desafortunadamente, en aquellos tiempos, los defensores de la postura convencional que subieron al poder en 1961 estaban tan obsesionados con cier ta imagen de las armas nucleares, tan obstinados en contra del uso de cualquier arma de este tipo a cualquier nivel táctico,tan enamorado de su solución de extrema confianza en las armas con— vencionales, que se resistieron a reconocer aquellos progresos.— Por consiguiente el potencial tecnológico no fue explotado. — Al margen de toda esta dialéctica sobre “réplica flexible”, la Administración Kennedy adoptó una postura de proliferación convencional unilateral, justamente cuando la tecnología permitía una postura de proliferación nuclear más practicable que lo que había sido anteriormente. Las manifestaciones de los hombres clave y de los consejeros políticos dieron fuertes muestras de su conducta hostíl hacia las armas nucleares tácticas. En un De partamento de Defensa que introdujo rigurosos métodos de Análi-— sis de Sistemas, esta aversión parecía extrañamente basada en cre&CiaSy presentimientos. Por ejemplo, el Secretario Delegado de Defensa, Roswell Gilpatric exclamaba: “Yo, entre otras cosas, jamás he creido en la denominada guerra nuclear limitada. No se como puede establecerse un límite una vez que se haya producido cualquier clase de disparo nuclear (1) -- - El sumo sacerdote del Análisis de Sistemas en el Pentágono, Enthoven, que llegó a ser Subsecretario de defensa, afirma Alain ba: hay una gran diferencia entre las armas nucleares y las no—nucleares. Las armas nucleares no son simplemente altos ex plosivos... En los Ciltimos años se han desarrollado pequeñas ar mas nucleares con una potencia equivalente a la de unos cuantos millares de toneladas de TNT o menos. Llegará el día, si es que aCm no ha llegado, en que habrá armas nucleares de menor potencia que las armas de más alto explosivo. ¿Cuándo llegue este día, no existirá por más tiempo la distinción entre armas nucleares y ar mas convencionales? Algunos se han pronunciado en este sentido. Sin embargo, están equivocados. Hay y seguirá habiendo una gran “... — - — - (1) Henry Kissinger, “NATOs Nuclear (Marzo 28, 1963) , p. 24. 7 Dilemma”, “The Reporter”,28, — 10 — diferencia, una “barrera” por decirlo así, entre la guerra nuclear y la no-nuclear... Si ellos no están de acuerdo con esta distin— ción, no parece que exista otra limitación de armas fácilmente corn prensible en todo el recorrido de la gama destructiva de la güerra termonuclear”. (1) - Las declaraciones de este tipo han perjudicado seriamente hasta la más pasiva utilidad disuasoria de estas armas. La amenaza implícita inherente a su posesión es por supuesto de cierto valor disuasorio; ¿pero es solamente esto suficiente para mantener la di suasión cuando al mismo tiempo se acentúa una filosofía de no-uso? El valor disuasorio de las armas no puede por menos que degradarse cuando nosotros mismos llegamos al extremo de debilitar la credibi lidad de hacer uso de ellas. Según comentaba el estratega militar Bernard Brodie, “si no vamos a emplearlas lo menos que podemos ha cer es callarnos”. (2) —- A la sazón, la pregunta crítica que cabe formular sobre las consecuencias políticas del uso del arma nuclear táctica, es si po demos permitirnos el lujo de seguir renunciando a esta opci6n cuan do la credibilidad del uso de la fuerza convencional de Estados Unidos es seriamente desafiada en Asia y, acaso también, en Europa. La siguiente pregunta es, ¿si no podemos renunciar a esta opción,— qué debemos hacer para superar las objecciones a las armas nuclea res tácticas, de forma que dicha opción pueda llegar a ser una al ternativa racional a la irrealista réplica convencional? - Los argumentos de la escalada, tal como han sido desarrolla dos, han permanecido herméticos a las posibles diferencias entre las armas nucleares y sus efectos, a las disimetrías entre oponen tes, a las diferencias de lugar y modo del uso nuclear, y a las po sibles ventajas del uso nuclear táctico. Puede afirmarse, pór tan to, que estos argumentos reflejan un razonamiento para probar solu clones más que para llegar a ellas. — Para una gran mayoría la noción de escalada inexorable se ha basado en una escalada hipotética, disponiendo una continuidad de armas nucleares “siguiendo el esquema destructivo, hasta la guerra termonuclear a gran escala”, sin hacer una distinción discernible, ya que se usarían armas nucleares de todo tipo. En sentido técnico, esto hoy no es verdad. Particularmente, no es cierto con respecto a las armas antes mencionadas. En sentido militar, omite la existencia de otros tipos de escaladas que pueden resultar, actualmen— (1) Autocopia de la conferencia sobre Reflexiones acerca de los Problemas Morales de la Estrategia Nuclear, dirigida al West Baden College of Loyola, West Baden Springs, Indiana, 10 noviembre 1963. (2) Bernard Brodie, “What Price Conventional Capabilities in Euro pe?” The Reporter, vol. 28 (23 mayo 1963), pp. 25—33. — — - — 11 — te, al no usarse las armas nucleares tácticas, como indican nues tras experiencias en Vietnam. Ademas, esta escalada convencional, evidente en Vietnam, puede impedirnos conseguir la victoria. La prolongación e intensificación de una guerra convencional puede ser una escalada mucho mayor que la introducción de las armas nu cleares tácticas. - Desde el punto de vista político, esta teoría de la escala da, ignora las ms importantes limitaciones sobre conflictos, ta les como las limitaciones sobre objetivos, y las consideraciones de las condiciones características concertadas. En ciertas cir— cunstancias los riesgos de escalada pueden ser substanciales.Real mente, estos riesgos son tal vez una razón para descender el urn— bral crítico y declarar una política de uso nuclear táctico, pues to que el temor de escalada de los contrarios proporcionaría un factor disuasorio para nuestros aliados, semejante al que noso— tros detectamos con nuestro potencial estratégico. En otras situa ciones, cuando el contrario no tiene la opción de escalada nu— clear (caso de Vietnam por ejemplo) los riesgos pueden ser muchos menos. Por otra parte, la realidad del uso nuclear táctico podría por sí misma impedir posteriores escaladas, pues nuestra capacidad para conducir las operaciones nucleares tácticas quedaría pro bada y nuestras amenazas ganarían nuevamente una profunda credibi lidad. — - — - Ha existido una cierta inconsistencia o ambigüedad a este respecto en nuestros conceptos doctrinales nucleares de los iilti— mos tiempos. Las estrategias de “contrafuerza estratégica” han si do modificadas, ya que tratamos de constreñir las operaciones mi litares de forma que los daños civiles sean mínimos y nos permitan controlar una guerra nuclear estratégica. El ataque nuclear estratégico “espasmódico” total, ha dejado de ser la imnica opción posible. Muchos de los que reprobaban la idea de guerra nuclear táctica, debido a las dudas sobre su control y limitación, se muestran partidarios del concepto de guerra nuclear controlada o de contrafuerza estratégica. Es bastante extraño que ellos no aprecien la mayor probabilidad de oportunidades para limitar la guerra nuclear táctica a los objetivos de “contrafuerza”. — — — —- El debate sobre armas nucleares tácticas implica, frecuente mente, términos demasiado simplificados o casi absolutos de uso o no—uso en situaciones de guerra local o no—generalizada. Esto ha hecho enturbiar el problema dando lugar a grupos que defienden su uso y grupos que se oponen a éste. Ningún experto sensato en ar mas nucleares tácticas desea hacer uso de ellas indiscriminadamen te, o donde quiera que las armas convencionales puedan cumplir el cometido, o en situaciones cuya gravedad no justifique tal uso. Hasta cierto punto las “usamos” ahora con fines disuasorios. Muy pocos se opondrían absolutamente al uso de estas armas en réplica — 12 — — a un primer empleo por parte del enemigo, o cuando los intereses justificadamente vitales estuvieran en grave peligro. Sin embar go, limitándose a estos casos, existen generalmente misiones con cedidas a las armas nucleares tácticas, ircluso por los defenso res de la postura convencional. Consideremos la realidad en su doble aspecto. Primero, ¿he mos realmente desarrollado las armas y doctrina factibles para promover un uso racional dondequiera que éste pueda ser necesa—— rio?. Por supuesto, existen compromisos y restricciones sobre el empleo de estas.armas. Mas, ¿necesitan tales limitaciones de un desarrollo colectivo de una gama de armas más variada y efectiva que la que ahora disponemos?. ¿O nos imponemos nosotros mismos limitaciones artificiales?. ¿Existe alguna l6gica para retener una reserva de armas contaminadoras y altamente destructivas y una doctrina y una política basadas en éllas exclusivamente? - - — - Segundo, ¿ya que las alternativas no son verdaderamente de uso o no-uso, en qué circunstancias el empleo de estas armas es justificable y qué papel jugarían en nuestro sistema de defensa total?. Dadas unas nuevas tecnologías nucleares tácticas, compa radas con la tecnología de los desarrollos de las armas nuclea—— res en los años 1950, ¿no es hora de volver a examinar por completo las posibilidades de estas nuevas armas? Para analizar estas cuestiones es menester pensar en el fu turo. En el ámbito de la opini6n más corriente en Estados Unidos, las posibilidades de la realizaci6n de un desarrollo completo de las armas nucleares tácticas son escasas. Sin embargo, son va—— nos los signos que parecen indicar que existe conciencia de la necesidad de una evoluci6n. Hay una posibilidad muy distinta,pue de que no seamos capaces de cumplir con nuestros compromisos vi tales mediante fuerzas convencionales. También es posible que el día de mañana podamos conocer otras potencias nucleares, tanto amigas como enemigas, que adopten una política que establezca un umbral de violencia mucho más bajo que el que se mantiene hoy da como resorte de la guerra nuclear táctica. Tales posibilida des plantean la cuesti6n de si las armas y la guerra nuclear tác tica no..deberían ocupar un lugar prominente en nuestro futuro re pertorio de réplicas mediante los dispositivos de fuerza adecua dos para conflictos nucleares tácticos y otras clases de hostili dades. Como mínimo, el asunto debería ser objetivamente estudia do a fondo. - — * * * — 13 Parte CONSIDERACIONES SOBRE LAS — II ARMAS NUCLEARES TACTICAS ¿Qué es un arma nuclear táctica?. Refiriéndose a nuestro ar senal actual, deacuerdo con el testimonio del anterior Secreta—— rio de Defensa, McNamara, el arma nuclear táctica ordinaria tiene un poder destructivo mayor que el de las bombas desarrolladas por el Mando Aéreo Estratégico durante los primeros años de su existencia. Según tal definición son armas nucleares proyectadas sola mente para misiones no—estratégicas.Para otros expertos, armas nu cleares tácticas son aquellas de baja equivalencia (1) tal que no las permite ser clasificadas en la categoría estratégica. Por otra parte, algunos individuos niegan que puedan existir artefac tos semejantes. Estos mantienen la teoría de que el uso de cualquier arma nuclear en la guerra táctica conduciría, rápida e ine vitablemente, a la guerra termonuclear total. Sin embargo, existe otro enfoque a la definición de armas nucleares tácticas basado en dos condiciones que, al parecer, no se las ha dedicado la sufi ciente atención en la mayor parte de los debates sobre esta mate ria. —- — La primera condición es que el táctico militar 0pta por re currir a toda clase de armamentos, incluidos los nucleares. El t.ctico, quien brega con los problemas de actualidad en la forma de hacer la batalla o guerra, define el arma nuclear táctica como aquella diseñada para permitirle conducir las operaciones milita res con la mayor efectividad militar. En severa refutación a la teoría que sostiene que la bomba ms efectiva es la de mayor po—— tencia, un cuidadoso análisis de esta definición demuestra que en la mayoría de las aplicaciones la equivalencia explosiva táctica ms efectiva tiende a estar situada en el margen inferior del es quema nuclear. En este sentido, existe una tremenda disparidad en tre las cabezas de guerra almacenadas y las que debieran haberse fabricado. Si no cambian las políticas actuales esta disparidad continuara y puede que incluso aumente. - - - La berlas segunda condición es que nuestros políticos debieran ha solicitado, pero no lo han hecho. Esta es la carencia de (1).N.del T.- Al hablar de equivalencia en kilotones de TNT. se refiere a la potencia — — 14 — armas que da una medida más realista de la credibilidad política del país y en el exterior. Las decisiones al respecto en el pasa do han conducido a la incredibilidad política. Lo que es aún más significativo es que, al parecer, la política oficial USA en los últimos años ha sido la de inculcar ésta incredibilidad a nosotros mismos y a nuestros aliados, pretendiendo conseguir una ma yor aceptaci6n de la credibilidad de nuestra política de armas convencionales preferidas. (Además, el fracaso al convencer a nuestros aliados de la NATO de la necesidad de incrementar las fuerzas convencionales nos ha llevado de nuevo, pero más insis—— tentemente, a .la situación de 1961 —es decir—, a la represalia masiva). - — - En una carta.. al Secretario de Defensa, el miembro del Con greso, Hosmer, indicaba claramente que la Atomic Energy Commi— ssion había llevado a cabo satisfactoriamente numerosos y signi ficativos experimentos, relacionados con la realización de las armas nucleares tácticas, cuyas características estaban de acuer do con las descripciones expuestas anteriormente, pero que no hu bo acuerdo político alguno por parte del Departamento de Defensa para incorporar estos progresos al arsenal bélico. No hace falta decir que las necesidades e incentivos militares van parejos con aquellos de los científicos investigadores de la AEC (Atomic Energy Commission). Si tales necesidades se hubieran satisfecho en el pasado con tales armas, el arsenal táctico actual sería más rico de lo que es. — — -- — Como resultado de la manifiesta omisión a estos progresos tecnológicos, las armas inventariadas en nuestro arsenal táctico no representan en realidad más que perfeccionamientos y refina—— mientos de las bombas que fueron arrojadas sobre Japón hace 27 años. En los últimos tiempos ha habido una profunda e impresionante diversificación. Sin embargo, parece que la naturaleza in trínseca de estas armas y sus efectos ha permanecido constante,lo cual se considera reprobable. Cuantitativamente, estos progre sos han supuesto beneficios de primera magnitud. Cualitativarnen te, sin embargo, nuestro arsenal táctico actual simboliza simple mente las variaciones sobre un tema central, que está presente en nosotros desde que ocurrió la primera explosión nuclear. — Desde 1946 hasta 1958, cuando empezó la moratoria de las pruebas nucleares, la evolución del arma nuclear más relacionada con la aplicación táctica fue la del perfeccionamiento del arma de fisión. Durante este período fueron probados y activados inge nios que empleaban uranio y plutonio, tendiéndose hacia costes, tamaños, pesos y equivalencias reducidos, pero continuaban sien do principalmente armas de fisión. Las pruebas habidas desde que expiró la moratoria (1961), las cuales podían haber cambiado con siderablemente de cariz, no han causado ningún impacto por altec - — 15 — rar la naturaleza de éste arsenal. El uso tactico de las armas nucleares está todavía confinado, esencialmente, a bombas de fi sión de gran equivalencia (múltiplo del kilotón). - En general, el arsenal USA actual representa una modalidad de guerra nuclear cuyo significado, consecuencias y credibilidad están abiertos a una seria problemática. No es necesario expre—— sar cuantitativamente los efectos destructores y radiológicos de las explosiones a nivel de la de Hirosima o mayores. Aún a nive les de equivalencia mucho más baja, por ejemplo del orden de un kilotón, los efectos de las armas de fisión son todavía indicati vos -de una destructiva y. contaminadora guerra radiológica, cuyos costes podrían sobrepasar en valor a las metas políticas de la contienda en que fueran usadas. - Si se consideran únicamente estas armas atendiendo a la destructividad de la guerra nuclear táctica, podemos automáticá mente comprender el por qué de las reservas acerca del empleo de tales armas “para defender áreas tan densamente pobladas como Eu ropa”. Por ejemplo, él Secretario General de las Naiones Unida en el. “Report on Effects of Use of Nuclear Weapons”, cedido por. AEC, en noviembre de 1967, y difundido por la prensa, concluía que “la destrucción y aniquilamiento que podían resultar de la denominada guerra nuclear táctica apenas diferiría de los efectos derivados de la guerra estratégica en el área mencionada (1)’.’ - - Para apoyar esta conclusión el informe recurría al “análi sis de una amplia serie de juegosdelaguerra relativos al tea tro europeo”. Sin embargo, es preciso en estos “juegos” que se “verifiquen” sus propias suposiciones. En primer lugar, conside raba que en la guerra contendían, principalmente, dos potencias-los Estados Unidos y URRS- con una igualdad aproximada en núme ros y tipos de armas empleadas; y, además, el conflicto tenía por escenario la congestionada Europa. En segundo lugar, y muy importante, los juegos eran circunscritos al uso alternativo de 100, 200 y 400 armas. - - Estos juegos estaban al parecer inspirados en los estudios del Departamento de Defensa de los Estados Unidos,.que habían servido de apoyo a los defensores de la proliferación convencio nal y de congelación de la tecnología nucleartáctica. -- Nosotros, por supuesto, hemos fabricado armas nucleares mo dernas de gran poder destructivo cuyo empleo actual ofrece -pocas esperanzas de un resultado agradable. No obstante, tuvimos l oportunidad, y aún la tenemos, de producir armas que no tengan -. • 1(1) Apartado 29 (b), A/6858, 22a Sesión de la Asamblea General de las Naciones Unidas. Divulgado por U.S. AEC, noviembre de 1967, AEC 226/384. - — 16 — el poder destructivo y la radiactividad de las del arsenal actual. Por si fuera poco, en vez de aprovechar estas oportunida— des hemos elaborado reglamentos que tienden a excluirlas. Se ha hecho muy poco en pro de una aplicación constante de la tecnolo— gía que pudiera mostrar un diferente surtido de realidades y una situación mucho ms digna de confianza. Si co ideramos lasarmas de fisión de extrémadamente baja equivalencia, del orden de varias toneladas de TNT (compairb1es a las grandes Jonbas de alto explosivo), en su empleo en el cam po de batalla, ambia considerablemente la naturaleza de los efectos colaterales Primeramente, por supuesto, la magnitud de estos efectos se reduce grandemente con respecto a los resultan— tes de las exIpsiones de equivalencia de decenas de kilotónes. En segundo la aplicación adecuada de tales armas hace o sible actualrnenje que cambie la opinión sobre ciertos efectos co laterales indeseables. -- Con la, armas de fisión a niveles de muy baja equivajencia, es decir, tonjadas de TNT, los efectos de la radiacjón’nú].ear inmediata (neutrones y rayos gamma, cuya duración no es ms que de fracciones de segundo) son considerablemente mayores en magni tud que los efectos acompañantes de explosión y calor, causañtes de serios problemas civiles. Por ejemplo, tales armas podían usarse para;aacar tropas en ciudades sin causat un significati vo daño estrüctüral. Esta disparidad de efectos surge debidd a la gran sensibil±dad humana a la radiación nuclear. Para conseguir unos efectos fisiológicos comparables por medio de las óndas ex plosiva y calorífica se requeriría un aumento en la intensidad de energía 100 veces mayor o mas. —- - — Este tipo de armas nucleares, usado para infligir daños biológicos ms que físicos, no debe fcilmen.te interpretarse co mo otro grado ms del “esquema destructivo de la guerra termonu clear a gran escala”. Ademas, da lugar a plantearse el problema de como ajustar lo que se entiende por “distinción cualitativa comprensible” entre armas nucleares y no nucleares. Si la distin ción se hace con referencia a la fuente de energía tal distin ción cualitativa puede ser aceptada. Pero si se hace refirindo se a los daños que el arma ocasiona en el objetivo y en sus ale daños, entonces la distinción puede ser discutible y las diferen cias entre las armas nucleares pueden ser claramente estableci— das. — Con respecto a las armas de fisión de equivalencia multi—— kilotón, de las clases de nuestro arsenal actual, no es posible hacer uso de los efectos de radiacj6n inmediata contra personal sin que vayan acompañados de altas energías explosiva y caloríf 1 ca. Tales armas, empleadas en áreas pobladas o en sus.alrededores causaran una destrucción de la naturaleza experixn-itadaen - — 17 — HiroSima y Nagasaki. Esas armas, a diferencia de las de baja equi valencia que al parecer están escasamente representadas en nues tro arsenal táctico, deben razonablemente ser relacionadas en el “esquema destructivo” de la serie de equivalencias. Existe otro enfoque por conseguir esta disociación de efec tos que permite elevar ésta “barrera cortafuergos de los efectos de las armas” a niveles de equivalencia mucho ms alto. Dicho en— foque esta basado en la energía nuclear derivada de la fusión de núcleos de hidrógeno pesado, en vez de la fisión de núcleos de uranio o plutonio. Los explosivos de fusión pueden proporcionar una profunda variante en la naturaleza de la guerra nuclear tcti ca. Por una parte, su energía liberada es preponderantemente en forma de radiación inmediata (neutrones de alta energía) ms que en explosión y calor; por otra parte, contrastando con la vane—— dad de productos radiactivos residuales, a menudo de gran longevi dad, originados por las explosiones de fisión, las reacciones de fusión no producen absolutamente ninguna radiactividad residual. -- — - Las primeras revelaciones del gobierno sobre investigacio—— nes realizadas en cabezas de guerra con dispositivos de fusión, cuyos componentes fueran emisores efectivos de radiación nuclear inmediata, datan de hace 12 años. En un debate público sobre la proclama sobre pruebas nucleares, Adrián Fisher, entonces Director Adjunto de la Agencia de Desarme y Control de Armamentos de cía (1) — - “Con respecto a la bomba de fusión pura, cabe señalar que el desarrollo de tal arma no es en modo alguno cierto. Además, co mo Vds. saben, hemos hecho unos avances significativos en el cam po de las armas tácticas de fisión. Es por lo tanto un verdadero problema conocer si la bomba de fusión pura es de mayor utilidad que las armas de que se dispone hoy. Debemos analizar la diferén— cia entre un arma de fusión púra y las armas de que disponemos ac tualmente, no solamente teniendo en cuenta los riesgos de precipi tación radiactiva o de daños materiales sino considerando también el riesgo de escalada. Francamente yo no creo que nuestra posible reacción con respecto al uso táctico de las armas nucleares sería muy diferente si la cuestión radicara en desarrollar y usar armas de fusión pura, o armas de radiación aumentada del tipo de las que ahora tenemos (2). - — Ms recientemente la AEC y el Departamento de Defensa se re firieron de nuevo a esta clase de armas en unas declaraciones a la Associated Press. La pregunta y la respuesta fueron en este (1) Escrito dirigido por Adrian S.Fisher al Senador Thomas J.Dodd, 14 de marzo de 1963, publicado en el Congressional Record de 9 de abril de 1963 (2) “U.S.Discloses Its Weapons in Nuclear Arsenal”, Los Angeles Times, •6 de septiembre de 1961, ptg. 1. — -- — — 18 — sentido: — P. ¿Qué progresos se han hecho sobre las “ideas avanzadas” de las armas nucleares tales como la llamada “bomba neu trófica”? - R. La AEC esta investigando sobre las armas aumentada -bom bas neutrónicas-. Tal ingenio sería muy “limpio”...(l). La AEC también esta investigando sobre las armas de fu sión pura. El status de los programas para el desarrolb de tales armas es materia reservada (2) Las reacciones de fusión liberan aproximadamente el 80% de su energía en forma de neutrones de elevada potencia. Las reaccio nes de fisión liberan solo un 5% aproximadamente en forma de radia ción inmediata. De acuerdo con esto, una equivalencia de fusión de un kilotón puede desarrollar una efectividad de radiación ininedia ta (contra personal) semejante a la de un arma de fisión moderna que tenga una equivalencia ms de 15 veces mayor, es decir una equivalencia del orden de la de Hirosima. Además, el arma de fusión tiene solamente unos efectos de explosión y calor que no son sino una fracción de un kilotón, ya que la mayor parte de la ener gía liberada en la explosión es en forma de radiación inmediata.Es ta disparidad en la intensidad de efectos -es decir, entre radia—— ción inmediata y ondas explosiva y calorífica- es lo suficientemen te importante como para autorizar un arma de “radiación aumentada” que tuviera una equivalencia del orden de un kilotón y una efecti vidad militar de un arma de fisión de 15 kilotones, teniendo adems un grado de flexibilidad (cambios en los efectos colaterales de explosión y calor) de un arma de fisión de equivalencia del or den de toneladas. También, según indica la correspondencia AEC-DOD, el ingenio es “muy limpio”, la longevidad de sus efectos contamina dores podría reducirse a la centesima parte de los dela bomba de fisión de Hirosima. Para que un arma de radiación aumentada de fu sión pura, o “bomba neutrónica”, surja en forma de arma, como inge nio tal que carezca de los inconvenientes de la contaminación radiactiva producida por la fisión, habrá que contar con la impres— cindible cabeza de guerra de “radiación aumentada”. — — -— - — En la aplicación contra tropas enemigas, que es la clase de objetivo ms amplio e importante de la guerra téctica, a diferencia de los objetivos de los planes estratégicos que frecuentemente comprenden núcleos de población, la bomba neutrónica puede ser óp timamente usada cuando no suponga un grave peligro para la contex tura estructural de la población civil, excepto en aquellos casos en que las tropas enemigas estén entrelazadas con aquellas. Según lo confirman las guerras pasadas, esto difícilmentepuede ser ca-(1) N.del T.— Que ii deja radiación residual de importancia. (2) “U.S.Digcboseg Its Weapons in Nuclear Arsenal”,Los Angeles Ti mes, 6 de septiemjDrede 1967, pág. 1. —19— racterStiCO en el empleo de las armas convencionales; también, la gran reducción en los efectos destructivos físicos hace posi ble el uso de la bomba neutrónica en campaña, al no originar de moliciones y esombros que puedan, significativamente, retardar el avance de nuestras propias tropas. Esta característica es su mamente digna de apreciar en las áreas de arbolado donde un maxi yo abatimiento de arboles pudiera dificultar la libertad de movi miento necesaria para explotar satisfactoriamente el ataque. Fi nalmente, la bomba neutrónica puede reducir los problemas de se guridad de nuestras propias tropas en mayor medida que las armas tácticas actuales. La impugnación contra las armas nucleares en el sentido de que su uso puede ser escalado “hasta el límite del esquema destructivo de la guerra termonuclear a gran escalat1,necesitaría de una seria revisión en caso de que la bomba neutrónica sustitu ya a la bomba de fisión. Al contrario que la última, la primera, no es un arma destructiva fÍsicamente. Esta proyectada para ser singularmente efectiva contra personal enemigo, y su aplicaci6n puede efectuarse de manera que permita un grado de discriminación que no es posible ni con las armas convencionales. No exis te tal escalada de bomba neutrónica que tienda a incrementar la escala destructiva. Por el contrario, una escalada en la equiva lencia se produciría al perder la eficiencia militar y negar las ventajas excepcionales de tal arma. Por lo tanto aquí se argumen ta que la introducción de las armas de fusión en el arsenal de la nación proporciona otra “barrera cortafuegos”, que debe pasar la escalada si ha de proseguir m.s arriba. — — — A falta del satisfactorio desarrollo del arma de fusión pu ra, las cabezas de guerra de fusión-fisión de. baja equivalencia podían, sin embargo, usarse para reducir la radiactividad libera da en las explosiones de fisión. El diseño de tales armas esta— ría. basado en el bloqueo prieditado, en la cabeza de guerra, de los neutrones producidos por las reacciones de fusión. Esto ten dría el efecto de convertir la energía neutrónica en explosiva.— En conexión con esto, el programa Plowshare de la AEC, relativo al uso pacífico de los explosivos nucleares, ha intentado desa—— rrollar tales proyectos a fin de reducir los peligros de la pre cipitación radiactiva y aparentemente ha tenido éxito, reducien do el componente de fisión a proporciones minúsculas (1). En cuanto a los objetivos tácticos que requieren la des— trucción física, pueden hacerse dos cosas para incrementar la efectividad militar y reducir considerablemente el alcance del daño colateral: Primero, los requisitos en equivalencia pueden (1) ExposiCión de “Peaceful Application of Nuclear Explosives——— Plowshare” ante el Joint Committee on Atomic Energy el 5 de enero de 1965, trabajos de Edward Teller, y otros, The Cons tructive Uses of Nuclear ExplosiveS, McGraw-Hill, 1968. — —— - — 20— reducirse substancialmente por medio de perfeccionamientos en la exactitud de los lanzamientos, cosa que parece actualmente posi ble. Concrétamente, los desarrollos ahora en marcha prometen pro porcionar un misil aire-tierra de corto alcance que tendrá una precisión mucho mayor que la de las actuales técnicas de bombar deo. El resultado será la reducción de las equivalencias a nive les inferiores a aquellos requeridos por la precisión de las bom bas de gravedad actuales. Con una precisión extrema, las equiva lencias comprendidas entre toneladas y decenas de toneladas se—— rían suficientes para poder destruir físicamente una gran varie dad de pequeños blancos de gran dureza. Esta aplicación de una simple carga nuclear lanzada de forma precisa, diseñada conforme a las condiciones del blanco, puede contrastar con los múltiples centenares de cargas de alto explosivo que requieren la mayor parte de los blancos en la guerra de Vietnam, cuyo empleo destru ye inutilmente la población adjunta. Considerando las imprecisio nes de los ataques bombarderos contra Vietnam del Norte, los efectos colaterales derivados de esta precisa forma de lanzamien to nuclear podían ser muchos menos que los de aquellos que han afectado a las áreas pobladas en esa tierra salpicada de embudos por las bombas. - — - - Segundo, los medios anteriormente descritos para bloquear los neutrones en los explosivos de fusión de baja equivalencia,— que convierten su energía en onda explosiva, reducirían a5n ms el daño colateral. Tales cabezas de guerra tendrían, en esencia, las características explosivas de una bomba muy grande de las de alto explosivo, con la diferencia que la de versión nuclear se ría notablemente ms pequeña y ms ligera. Paralelamente con el empleo de la bomba “neutrónica” con tra personal enemigo, esta combinación de gran precisión de lan zamiento y control de efectos en el uso contra blancos físicos,— originaran una forma de guerra nuclear que no encuadra fcilmen— te en el “esquema destructivo de la guerra termonuclear a gran escala”. A pesar del innegable hecho de que es nuclear y debe re conocerse como tal (aunque quizé no sea demasiado fácil en algu nos casos) , es realmente ms afín al bombardeo con alto explosi vo, sin embargo, es mucho ms efectiva y ciertamente mís concesi va con respecto a los medios no—combatientes y no—militares que lo han sido hasta la fecha nuestros ataques con alto explosivo. — Debe tenerse en cuenta otro apartado del uso táctico. La longevidad de la contaminación radiactiva derivada de las explo siones de fisión ha sido considerada, con razón, como un efecto indeseable. No obstante, en una situación táctica en que sea ne cesario detener el avance enemigo, el uso de la radiactividad de corta duración podría ser muy efectivo, sin originar una contami nación prolongada. Esto supone una técnica conocida por “saltin” - — 21 — según la cual los neutrones liberados en las reacciones de fusión de los explosivos limpios pueden ser absorbidos por un dispositi vo adecuado que los hace radiactivos. Contrastando con la radiac tividad derivada de las armas de fisión nuclear, la cual no es controlable y comprende isópotos tales como el Estroncio-90 que puede perdurar durante decadas, esta llamada “radiactividad indu cida” podría ser limitada a horas o días -dependiendo de las exi gencias militares específicas-. No se parecería apenas a la inde seable precipitación generada por la explosión de las armas de fi sión actuales. - En este artículo hemós bosquejado algunos conceptos de ar—— más nucleares que son completamente diferentes a aquellos previos, oficiales del Departamento de Defensa o a los definidos en los juegos de la guerra nuclear táctica habituales. Son diferentes--porque derivan su energía de un combustible nuclear radicalmente diferente, porque su aplicación esta relacionada con las exigen—— cias de los objetivos tácticos específicos, y debido a que están proyectados con el fin de reducir el daño colateral tan frecuente mente asociado con la guerra moderna. En esencia, son armas dife rentes porque pretenden explotar, o restringir, efectos bélicos diferentes. Estas diferencias conforman un patrón de guerra nu clear táctica en el que llega a ser posible cumplir con las exi—— gencias militares de una forma que apenas concuerda con la idea general de grandes destrucciones y contaminaciones. Ademas, y gui z lo ms revelador de esta consistente distinción, las diferen—— cias entre estas armas y las convencionales demuestran que la gue rra convencional pudiera no ser tan relativamente virtuosa como muchos actualmente creen. — — — - Podía establecerse una comparación entre los efectos de las armas nucleares avanzadas y aquellos de las convencionales. El ha cer esta comparación no significa en modo alguno que sugiera un arsenal completamente nuclear que reemplace a nuestras fuerzas convencionales. En un previsible futuro habrá muchos requerimien tos tácticos para las armas convencionales y múltiples circunstan cias en las que necesitaremos usar estas armas en caso de que las hostilidades no puedan evitarse. De hecho, es necesario un perfec cionamiento considerable en el armamento convencional. La sugeren cia principal que cabe hacer es que la réplica puramente convencional no será en lo sucesivo adecuada a las exigencias de la se guridad de Estados Unidos, y que las armas nucleares pueden ser necesarias en ciertos conflictos futuros. Sin embargo, aún con la presencia de estas últimas, las armas convencionales habrán de ju gar importantes papeles. Por supuesto, la necesidad de un despli gue de las tropas enemigas ante una posible amenaza nuclear tcti ca estadounidense, hará a las armas convencionales relativamente ms efectivas, ya que los esfuerzos por minimizar los efectos del ataque nuclear llevarían a catalizar la eficiencia de estas armas. — —— — — 22 — La moralidad de los artefactos mortíferos ha sido durante mucho tiempo un factor que ha afectado a la conducta de la gue rra táctica. Han surgido contradicciones sobre las armas de al to explosivo, químicas, y biológicas. Durante algunos años la imagen terrorífica de la guerra nuclear ha tendido a centrarse alrededor de los efectos radiológicos. En las mentes de la gran mayoría no ha habido intento alguno por establecer una determi nación técnica sobre las diferencias en los efectos radiológi—— cos. Por el contrario, la tendencia general ha sido engLobar es tos bajo un denominador común la precipitación. - Sin embargo, no existe apenas un parecido practico entre la radiación nuclear inmediata, de radio limitado, emitida por el arma de radiación aumentada (“bomba neutrónica”) y la radia— ción de precipitación producida por las armas de fisión actua—— les, aunque ambas provengan de procesos nucleares. Los efectos de la radiación inmediata son esencialmente equivalentes a los de la exposición a los rayos X, excepto que la aplicación es mu cho ms breve —hasta una décima de segundo— y son mortales a una cierta distancia. Los efectos de la precipitación son produ cidos por las partículos radiactivas que se depositan sobre la tierra. Pueden proceder de la contaminación de la superficie, o del interior del cuerpo si la radiactividad es ingerida y asími lada. Los efectos de la precipitación pueden persistir durante meses e incluso años. — Conforme a lo mencionado anteriormente, la radiación nu clear inmediata puede ser altamente efectiva para incapacitar al personal. A aquellos niveles de intensidad de radiación sufí cientes para matar o herir a los seres humanos no existe ningún efecto significativo contra los objetos estructurales. Además, la distancia a la que los efectos de la radiación inmediata pue den afectar a los seres humanos -dentro de la clase de armas que abarca a las de fisión y a las de radiación aumentada, am bas de muy baja equivalencia— es considerablemente mayor que aquella distancia a la que la explosión y el calor pueden afec tar a los objetos estructurales. Por consiguiente, escogiendo una altura de explosión adecuada, los efectos de la radiación pueden ser usados selectivamente para producir numerosas bajas en el personal enemigo sin una destrucción física significativa. — — — — - Esta delimitación de efectos de las armas añade una dimen sión a la guerra que no ha existido anteriormente en medida efectiva alguna. Ofrece la oportunidad, si surgiera la necesi—— dad de atacar al personal enemigo cerca o dentro de las áreas urbanas sin infligir altos niveles de daños físicos en ellas. Sería efectivo incluso contra el personal situado en el interior de edificios, debido a que en la mayor parte de los casos, la nasa estructural sería probablemente insuficiente para permi— —— - - — tir 23 — una verdadera atenuación de la radiación nuclear. La más evidente secuela de una guerra convencional a gran escala es la guadañada de destrucción urbana que sigue al curso de la batalla. Las estructuras urbanas ofrecen una ocultación y protección considerables contra los efectos de las municiones con vencionales. Así, estas áreas han sido empleadas como puntos for tificados a lo largo de la historia de la guerra. Con el fin de desalojar a las fuerzas enemigas de pueblos y ciudades, fue nece sario en las guerras pasadas recurrir a niveles de potencia de fuego que reducían a escombros fracciones enormes de aquellas áreas. Esta destrucción fue frecuentemente llevada a cabo a una escala en que el sufrimiento de la población urbana se prolongó por mucho tiempo después de que la batalla hubiera terminado. Las guerras convencionales pasadas han dejado unos crudos recuerdos de devastación de la estructura civil, que están en desacuerdo con los objetivos preferidos y los deseos de los aliados a los que nosotros defenderíamos. Contando con las posibilidades de la “bomba neutrónica” no habría razones lógicas algunas para que las fuerzas enemigas permanecieran en las áreas urbanas, aunque pudie ran hacerlo con el fin de mezclarse con la población civil espe—— rando así eludir el ataque. Debido a la naturaleza penetrante de los efectos de la radiación nuclear, las ciudades (con la excep— ción anterior) no representarían en lo sucesivo puntos fortifica dos de resistencia. Por otra parte, el valor material de la ciu dad no podría ser mantenido como rehen mediante la ocupación de tropas ya que podría ser atacada positivamente con medios no des tructivos. La tendencia de este nuevo armamento es reservar la guerra táctica al campo de batalla al que propiamente pertenece.Dicho con otras palabras, la nueva dirección de la guerra sería hacia la llamada estratégia “contrafuerza” la cual trata de apar tar las hostilidades, en cuanto sea posible, de las áreas ocupa—— das por los no—combatientes. - - - — —— - — -- — — — — Los ataques nucleares usando de la radiación inmediata como instrumento mortífero, pueden contrastarse con los ataques con ar mas convencionales mediante otra comparación reveladora que se contradice contundentemente con la creencia popular en este aspec to. —— En la guerra convencional se da una mayoría de heridos con relación a los muertos. Por ejemplo, en la Segunda Guerra Mundial las bajas del ejército americano arrojaron aproximadamente la ci fra de tres heridos por cada muerto. De esos heridos hay muchos que quedaron marcados con las señales de sus heridas para el res to de su vida. En resumen, la naturaleza relativamente heterogénea de los efectos de las armas convencionales producen heridas localizadas que suponen la pérdida de una considerable cantidad de vitalidad y otras que pueden perdurar a lo largo del tiempo y debilitar continuamente. — - — — 24 — Cuando el instrumento mortífero es la radiación nuclear in mediata se dan los extremos opuestos, contrastando con los efec tos del arma convencional. La proporción muertos—heridos sería del orden de 3 a 1. En los casos de bajas por radiaci6n no-letal la naturaleza uniforme del campo de radiación no dará lugar a una intensa herida localizada, sino que producirá un efecto sen tido en todo el cuerpo -siendo el riego sanguíneo el afectado ms seriamente—. De todos modos, comparado con la permanencia de la gran variedad de heridas por arma convencional, las víctimas de los efectos de la radiación pueden, mediante los cuidados ne cesarios, llegar a recuperarse hasta un estado de salud aproxima do al que disfrutaban antes de su exposición a la radiación. — — -- Los cínicos atacaran este tipo de análisis basndose en que la guerra es la guerra y no puede intentarse ningún esfuerzo por hacer menos trágico lo que es inherentemente brutal y absur do. Refutando este argumento, cabe una posibilidad muy distinta, hasta que la guerra llegue, consistente en que los esfuerzos por minimizar la destrucción de guerra estén garantizados. Después alegaremos que cuanto ins superior es la tecnología de una nación, es decir cuanto mayor es su capacidad para destruir con las armas actuales, mayor es la responsabilidad para limitar se mejante destrucción si se comprometiera en guerra. -- — - — Volviendo de nuevo sobre la comparación entre los efectos de las armas nucleares avanzadas y los de las convencionales, ve mos que mas que una comparación en la que se incluye unas armas nucleares indefinidas, por lo que respecta a su poder destructj— yo (excesivo), destaca un efecto nuclear singular —la radiación inmediata— que parece no concordar con la idea que se tiene gene ralmente de la guerra nuclear. Realmente, cuando se comparan los efectos de unas y otras, encaminados a producir el mismo resulta do final, se observa que este efecto singular a que hemos aludi do puede ser usado no solamente con un mayor grado de eficiencia sino también con un grado de descriminación que las armas conven cionales no pueden adoptar. Usando este efecto contra aquellos objetivos sobre los cuales sea considerado como el ms efectivo, es posible que la secuela de la guerra pueda ser considerablemen te ms sobria, respecto a daños físicos y biológicos, que lo es con los efectos de las armas convencionales. - Se comprende, claro esta, que los factores políticos que apoyan los argumentos de las poderosas tesituras convencionales superen a las características de las armas nucleares y sus efec tos. Sin embargo, es oportuno formular la pregunta de si estos argumentos contienen un conocimiento y entendimiento de estas ca racterísticas, y como se manifiestan en relación con los desarro lbs futuros. - — 25 — — Los mitos pueden fácilmente perpetuarse en las mentes dé mucha gente cuando se carece de conocimientos. Y algunas veces es así aun existiendo estos. El gran poder destructivo fue’ la no ta dominanteennuestros empeños iniciales sobre las armas•nucleares y continuó sindolo durante muchos años, sin embargo, si decidiramosadQPtar algunas de las posibilidades técnicas que hemos bosquejdoraquí, y otras no mencionadas o que incliso:no han sido aún concebidas, nuestra actitud sobre la fórmuladestruc tiva podríacambiar radicalmente. Parece ser, no obstante, que la excesiva déstructividad nuclear continua siendo un encastrado mito en lamente de muchos, tal vez en la mayoría, y es difícil determinar cuando.desaparecer, si es que desaparece algún día -quizá para sersustituído por otro-. - - - — — - Los resúltados que una plena realización de las nuevas po sibilidades del arma nuclear pudieran tener sobre las actitudes actuales, esúnacuesti6n sin respuesta. El viejo significado de la palabra “nuclear” puede que persista acompañado por los vie jos mitos; nó:obstante, los progresos tecnol6gicos, casode ser admitidos, y lo: ue es ms importante si se les estimula,podrían fructificarepni4evaS realidades que acabarían con esos’:mitós. El futuro de la tecnología del arma nuclear táctica püede ser tan prometedor o tan desalentador como queramos hacerlo. Y esto es extensivo a cualquiera otra nación que se encuentre.áom— prometida con los desarrollos nucleares. La historia de los pro gramas de armámento de la AEC es una completa narrativa denota— bles progresos donde el incentivo ha sido elevado y a la crea ción científica se la ha dado la libertad y el estímulo necesa—— rio a cualquier.ernpresa investigadora. Aún así, ha habido un considerable excepticismo categ6ricó acerca de los cónceptos sobre el arma nuclear táctica avrizada, aquí discutida. Parte de este excepticismo refleja una te-idencia técnica conservadora, o timidez, cosa común en muchas persónas. Quizá, en gran prte, originadas por las sensibilidades yfiloso fías personales de muchos científicos y políticos, quienes por razones propias. adoptan una postura con respecto al desarrollo del arma nuclear, táctica semejante a la adoptada en el gr deba te sobre la bomba-E. — — •3: * * — EL 26 — DEBATE SOBRE LA BOMBA LECCIONES - H DE LA EXPERIENCIA. En 1949, al igual que hoy, concluir si los progresos futu ros habían de ser dirigidos y aplicados al campo de los armamen tos nucleares implicaba una decisión nacional vital. Para muchos, la bomba-H representaba una gran amenaza a la esperanza de condu cir la carrera de armas nucleares balo un control efectivo. Debí do a esto, los argumentos políticos llegaron a estar algunas ve ces intrincadamente entrelazados con la apreciación científica.Tal vez sea instructivo revisar brevemente la historia de éste episodio. El debate sobre la bomba—H transcurrió en un clima atemperado por algunas de las siguientes consideraciones: - —— El desarrollo del arma nuclear se encontraba en un período de relativa infancia. Los progresos, desde la primera explosión atómica de 1945, no fueron sino una explotación más bien limita da del proyecto de origen de la bomba arrojada sobre Nagasaki.El curso futuro del desarrollo del arma nuclear se vislumbraba, en el mejor de los casos, de manera confusa. Particularmente, las características probables de las armas termonucleares eran consi deradas, principalmente, en términos conservadores y completamen te limitados. — La Unión Soviética había ya explotado su primer ingenio atómico. Este acontecimiento había colocado la cuestión de la bomba de hidrógeno ante una perspectiva mucho más aguzada, haciendo reconsiderar, con un énfasis mucho mayor, el papel de las armas nucleares en nuestra política de defensa y los problemas del control de la carrera de armamentos nucleares. - — - - Nuestra ignorancia sobre las implicaciones militares de las armas nucleares fue enorme. La aplicación de estas armas pa recía inherentemente sujeta al uso estratégico, cuyos blancos de gran extensión (ciudades) monopolizaban la gama de objetivos.Las aplicaciones tácticas apenas fueron tenidas en cuenta y, en vis ta de la carestía (comparada con la actualidad) de los materia-les fisiles, fueron consideradas por muchos como de uso netamen te ineficiente. — Templado con tales consideraciones el debate tomó cuerpo.— Con las continuas medidas de sofisticación, los principios fue—— ron pobremente defendidos por ambas partes. Qué parte perdió o ganó es una cosa que no puede afirmarse de manera convíncente,pe ro si alguna conclusión cupo sacar del debate, fue la del progr — — 27 — so tecnológico. Aún así, la decisión del Presidente en el fondo básicamente negativa ya que se limitaba tir, en contraposición a insistir tenazmente (1). Truman fue a no desis- - Es significativo que el arma termonuclear particularmente atacada por una gran parte de la oposición nunca fue fabricada.— Descrita, con justificaciones falsas, como un objeto con muchas probabilidades de resultar extremadamente pesado y muy costoso, hizo sentar la hipótesis de que la efectividad militar limitada de tal arma no justificaría un programa a gran escala. En cambio, se argumentaba que un programa continuo de la bomba-A, sin ser interferido por la competencia del desarrollo termonuclear, ser vía mejor a los intereses militares de la nación. El defecto fundamental una tecnología esencialmente impronosticable. de esta tesitura era que se admitía estática para un futuro tecnológico Las fragilidades de tales suposiciones resaltaron chocante mente cuando, transcurrido algo ms de un año, tuvo lugar el ha mado “descubrimiento termonuclear”. Este acontecimiento no sola mente derrocaba al arma hipotética que había sido defendida por la oposición, menospreciándola, sino que, con bastante ironía, facilitaba una nueva tecnología que ofrecía una infinitamente me jor solución al capítulo de recomendaciones de dicha oposición,es decir, el progreso de las armas (de fisión) atómicas. - Dando un gran paso adelante: parte de la oposición había apoyado el incremento positivo de las armas atómicas (de fisión) tácticas (2). Actualmente las mayores preocupaciones sobre el desarrollo nuclear táctico se basan en los perfeccionamientos de la tecnología de fusión que siguió al “descubrimiento termonuclear”. La tecnología de fusión tiene ahora sus ms notables aplicaciones en las equivalencias del kilotón e inferiores, con trastando con la insistencia original sobre explosiones multime— gatón. — —— - —— Edward Teller decía a la American Physical Society: El interés por este desarrollo (bomba-H) y su significación son con frecuencia mal entendidos. El punto principal en la exposición ordinaria de la fábula de la bomba de hidrógeno esta relacionado con el tamaño de la explosión. Realmente, era m.s f cii mostrar el fundamento de la fusión mediante grandes explosio nes, sin embargo, una gran explosión no fue el propósito del es - (1) Véase “The H-bomb Decisión, How to Decide Without Actually Choosing” de Warner R. Schilhing, Political Science Quarter— ly, Vol. LXXVI. (2) En la obra de J.Robert Oppenheimer, United States AtomicEnergy Commission, 1954. - —- — 2,8 — tudio, ni resultó ser la consecuencia significativa a largo pla zo del desarrollo tecnológico... Lo que las explosiones termonu cleares llevaron consigo fue la posibilidad de fabricar armas nu cleares relativamente ligeras, fácilmente lanzables, y no dema siado costosas. Al mismo tiempo resultó posible el reducir la ra diactividad producida por las explosiones (1). Echando una ojeada atrás, sobre aquellas partes del debate relacionadas con las implicaciones militares de las armas termo nucleares, puede observarse cuan candida y restrictivamente fue tratada esta parte del asunto. Por supuesto, es probable que so bre nuestros actuales debates se hubieran sacado conclusiones se mejantes hace unos 10 6 15 años. Sin embargo, es importante ob-— servar el como pueden concebirse los asuntos militares, pobremen te criticados, en un momento dado y como el paso del tiempo Cfre cuentemente un periodo muy corto) puede afectar vitalmente a una decisión que implique progresos tecnológicos. Es muy difícil enjuiciar los méritos o deméritos del deba te sobre la construcción de la bomba-H. Considerando que el cur so de los acontecimientos siguientes al debate han sido en cier to modo inquietantes, hay que señalar que ello no ha originado ninguna gran catástrofe para los Estados Unidos. En este sentido la prueba del tiempo no ha mostrado una resolución de forma real mente concluyente. No obstante, la prueba que falló, durante un corto lapso de tiempo, fue la inhabilidad para valorar propiamen te el impacto de la investigación tecnológica. Hoy dia, con res pecto a las armas nucleares t.cticas, existe una tendencia simi lar a menospreciar los frutos de dicha investigación. — CONCLUSIONES Es relativamente fácil ponerse de acuerdo sobre los requi sitos necesarios para un dispositivo de defensa americano que po lítica y estratégicamente proteja los intereses de Estados Uni— dos y sus aliados. Aparte de las exigencias de las armas estraté gicas, que no es materia de este articulo, estamos de acuerdo en que las fuerzas locales efectivas son importantes para la disua sión; que la actitud para defenderse, desechar los objetivos li mitados, y responder a una amplia gama de amenazas es un comple mento necesario para poder conminar influyentemente con el golpe nuclear masivo; que la disuasión basada en la defensa local de— (1) “Atomic Explosives: Solved and Unsolved Problems”, de Edward Teller, dirigido a la reunión de la American Physical Socie ty, Washington, DC, 27 de abril de 1967. — 29 — pende del despliegue ultramarino de las armas nucleares; que es necesaria una variedad de armas nucleares defensiva y tcticamen te capaces. La prioridad concedida a estas armas nucleares, su exacto papel en nuestras defensas, las condiciones para su uso,y el tipo de armas al que deberían pertenecer no son materias fci les de acordar. Estas cuestiones no pueden ser resueltas aquí.Po díamos mencionar ciertas posibilidades y requisitos con la espe ranza de provocar una més abierta mentalidad, estableciendo un diálogo informado que promoviera una ms razonable consideración de las armas nucleares tácticas. — — Es importante que esto se lleve a cabo inmediatamente. Es— t.n acaeciendo demasiádos cambios —tecnológicos, políticos, mili tares- que lo requieren. Las respectivas misiones de las fuerzas convencionales y las nucleares tácticas modernas necesitan ser nuevamente fijadas. Ciertamente, continuaremos desarrollando y manteniendo la efectividad adecuada a la guerra convencional. Se pueden augurar muchas oportunidades, tanto políticas como milita res, para estos efectivos. De todas formas está claro que esta irrebatible necesidad tendrá que ir acompañada por una solución satisfactoria a los problemas de la guerra táctica futura. Y, en un mundo en el que las grandes potencias aceleran los desarrollos tecnológicos militares y las potencias menores han demostrado sus facultades de poder frustrarla efectividad convencional de EstadosUnidos, el grado de nuestra actual insuficiencia llegara a ser cada vez ms evidente. - —— — El impulso en cualquier proyección de las necesidades mili tares debe estar identificado con la aceleración del cambio tec nológico. El mero hecho de tal cambio en la tecnología militar significa que las alternativas tecnológicas en los problemas mi litares, originados o transformados por los progresos tecnológi cos, deben evolucionar constiteIfleflte. Esta evolución puede tener un impacto importante en el balance estratégico y en la defensa y disuasión regionales. Los progresos experimentados en las tec nologías nucleares militares de la Unión Soviética y de China constituyen una creciente amenaza estratégica para los Estados Unidos y una amenaza local cada vez mayor para sus aliados y ami gos, amenaza local contra la cual el poderío estratégico y con vencional de Estados Unidos parece casi desatinado debido a que es inaplicable, o esta falto de crédito. - - — Este cambio corre parejo con otro, el cual abre un nuevo horizonte a aquellos paises insatisfechos con las garantías de defensa norteamericanas. Muchos paises están acrecentando las po sibilidades para producir sus propiás armas nucleares. Contraria mente a la mitología popular, esas fuerzas pueden resultar rela tivamente baratas y quizá de diseños lo suficientemente avanza—— dos como para ser adaptables a los problemas de defensa particu lares inmediatos. — — 30 — En la NATO, esta situación se esté desarrollando desde el momento en qué la debilidad de la estrategia de signo convencio nal, las presiones para reducir las fuerzas estadounidenses en — Europa, la ausencia de Francia en los mandos de la Organización, y las demandas de los aliados, estén conduciendo a una revisión de la disuasión nuclear local. Aumentan las presiones para que Estados Unidos provea de mejores garantías a las disponibilidades actuales con.vistas a una réplica nuclear local efectiva. El NATO Nuclear Planning Group esté dedicando todos sus esfuerzos a este problema. Grecia y Turquía han insistido en que les sean ce didas armas nucleares técticas. Francia, por supuesto, ha ido mu cho més alié a través de sus ambiciosos programas nucleares estratégicos y técticos. Si las pretensiones reflejadas en talés evoluciones se enfrentan competentemente, el resultado seré la desmembración de la NATO, dando lugar a unas políticas més inde pendientes por parte de los aliados, cosa que se traduciré en nuevos alineamientos, en fuerzas nucleares independientes, o en ambas cosas. - — - Las compulsiones y tensiones sobre la estrategia de signo convencional de la NATO son bien conocidas y estén expuestas con detalle en numerosas obras que tratan el asunto (1). No es menes ter profundizar sobre ellas aquí. La posibilidad, coste y venta jas de una gran capacidad convencional europea fueron siempre muy discutibles. En la actualidad, incluso los Estados Unidos han abandonado sus primitivos objetivos con respecto a las fuer zas convencionales en Europa. Sin embargo, lo han hecho sin sus tituirlas por una defensa nuclear téctica adecuada. En esencia volvemos a una situación muy parecida a la inicial, con una de fensa convencional muy limitada respaldada por la amenaza del em pleo de las fuerzas estratégicas, con solamente unas alternati—— vas nucleares técticas que varían entre un uso de dudosa utili-— dad o un empleo que précticamente no se distingue de la guerra estratégica. —— -— - - Hoy se sabe que la Unión Soviética ha hecho sobre la gue rra nuclear téctica. La Unión Soviética ha dicho públicamente que nada de mantener su barrera cortafuegos y doctrina de signo convencional en Europa, y ha organizado, instruído y equipado a sus fuerzas del Pacto de Varsovia, principalmente para la guerra nuclear téctica. Su doctrina militar esté basada en la capacidad para sostener un ataque nuclear téctico a escala total contra la NATO. Esta fuerza adaptada nuclear, no solamente pone en duda la pertinencia de las fuerzas estructuradas convencionalmente de la NATO, sino que el hecho de que los Soviets hayan adoptado una postura ofensiva sitúa a las fuerzas nucleares técticas de Orga— -- -- (1) Destaca por su perfectividad y sagacidad el artículo “What Price Conventional Capabilities in Europe?” de Bernard Bro die. — — 31 — nización en una situación confusa -estas fuerzas son las que, según se dice aprovecharían los resultados al ser primeramente usadas por la NATO en una guerra convencional—. Si los Soviets iniciaran la guerra con un asalto nuclear táctico masivo, la NA TO se encontraría ante una seria desventaja en su defensa. -- — — Además de la aparente tendencia a estructurar, siguiendo unas líneas nucleares tácticas, los planificadores soviéticos sienten un fuerte móvil por llevar a cabo un método racional de guerra en consonancia con unos objetivos de múltiples propósitos. — -- En la contextura de Europa esto supondría ciertamente el discriminar las disponibilidades nucleares tácticas avanza — poder das. Supongamos que la Unión Soviética decide mostrar a Occiden te su postura nuclear táctica basada en el empleo de los tipos de armas nucleares discriminadas aquí discutidas. ¿Qué responde rían los Occidentales si los Soviets iniciaran el uso de estas armas de forma que exhibieran claramente una doctrina de contra— fuerza y que también nos incitaran a defendernos con medios simi lares?. Si la situación y doctrina actuales de la NATO persistie ran en el momento en que tal reto pudiera producirse, las alter nativas de réplica serían inapelables. Una respuesta convencional invitaría a una aplastante derrota. Una réplica nuclear se vería afectada por dos severas limitaciones: supondría una dispo sición de fuerza mal situada para contrarrestar el ataque nu— clear, unas armas nucleares mal adaptadas para este tipo de con flicto y a las restricciones del daño colateral extensivo. Nues tro arsenal nuclear actual representaría, caso de emplearse como réplica contra este supuesto ataque, algo más que una escalada,y sobre todo un ataque mucho mayor que aquél en equivalencia. Ello significaría responder a un ataque altamente discriminado con ar mas indiscriminadas, impropio de los objetivos políticos de Esta dos Unidos y la NATO respecto a Europa. - — — — Una extensa citación de la carta del Congresista Hosner al Secretario de Defensa Clark Clifford puede resumir mejor estos problemas: - Quiero hacer hincapié en que si la pasada política del DOD rehusando modernizar la capacidad nuclear táctica continúa duran te algunos años más, los Estados Unidos retornarán a través de fases evolutivas a la doctrina de represalia masiva, pero sin an helar ni resolver los frutos de aquella doctrina en los primero días de nuestra historia nuclear. - En una época en que nuestros probables enemigos poseen una impresionante y creciente capacidad nuclear táctica, necesitamos — 32 — de una fuerza similar en correspondencia realista con la demanda, tanto militar como política, para poder combatir en una guerra nu clear táctica, capacidad que al mismo tiempo va encaminada a di-suadir de tal guerra. Por el contrario, la falta de la misma pu diera estimularla. Si ésta llegara, nuestra incapacidad para res ponder a nivel inferior al estratégico, es decir, por medio de la represalia masiva, parece probable el suicidio nacional... Si los Soviets han estado realmente ocupados en perfeccio—— nar una familia de armas nucleares tácticas discriminadas y lim pias, pudiera llegar el día en que decidan usarla contra nosotros y nuestros aliados, habría llegado el día en que las armas de nuestro arsenal sembrarían la devastación y contaminación en la guerra tgctica. O llegara el día en que debido a la inevitalidad de tales devastaciones y contaminaciones, las apetencias soviéti cas por territorios del Mundo Libre habrán de ser aplacadas (1) —— - Se alude aquí a la posibilidad de que el balance estratégi co cambiante pueda hacer al uso de las fuerzas estratégicas amen canas inatractivo, y a la amenaza basada en su empleo de baja cre dibilidad, al mismo tiempo que la estructura de fuerza de uso ge neral podría ser incapaz de representar una amenaza nuclear tctí ca sofisticada. Esta posibilidad se da mayormente en Asia frente a la amenaza de China, así como en Europa y otras partes respecto a la amenaza de Rusia. Por otra parte, existe otra posibilidad que también apunta la necesidad de una mejor disposición nuclear táctica. Si la reacción de Estados Unidos con respecto a los avan ces nucleares estratégicos de Rusia y China es mantener un balan ce equilibrado, y especialmente si el balance estratégico futuro se basa en una combinación de fuerzas ofensivas y defensivas, el umbral de la guerra nuclear estratégica se elevaría aún ms para todos nosotros. Esto significaría que los desafíos nucleares tc— ticos aumentarían debido a que, en estas condiciones, parece ms probable que tales conflictos pudieran ser constreñidos y sosteni dos sin recurrir eventualmente a las fuerzas estratégicas. -— China, por supuesto, esta cimentando cuando menos una disua contra el ataque nuclear estratégico de Estados Uni dos, a través de la adquisición de los medios necesarios para in fligir la destrucción nuclear sobre algunas ciudades norteamerica nas. Una vez que esta facultad sea lograda, la amenaza de un ata que nuclear estratégico estadounidense contra China como respues ta a las provocaciones de este último país en Asía, perderá credi bilidad, pudiendo aumentar por tal motivo la agresividad china. En el conflicto vietnamita no tratamos verdaderamente de entablar una guerra convencional con China. Sin embargo, la facultad para distraer a las fuerzas militares chinas puede ser una condición Sión mínima — — (1) Hosmer a Clifford, Congressjonal Record. — 33 — “sine qua non” para la disuasión y estabilidad en Asia. Según pa rece no existe otra salida razonable en este diléma que no sea el desarrollo de una capacidad nuclear téctica veraz que pueda usarse con fines específicos de defensa militar en Asia, que corn prendería tal vez la transferencia selectiva de armas nucleares estadounidenses a otras naciones. Los chinos no dejarían de mos trarse cautos con respecto a tal capacidad y se recatarían de ha cer frente a ella. — Hace una década, el economista de Princeton, Oskar Morgens tern advertía en su libro “The Question of National Defense” que cuando se llegara a la situaci6n de “tablas” estratégica entre la Unión Soviética y los Estados Unidos, la violencia entre los dos no podría bajar de nivel salvo que pudieran lograrse unos acuerdos fundamentales. En un libro de 1970 “War and Peace”, su autor Henry Salkeld señala que soviéticos y americanos manten— drán la paridad estratégica constante, y la disuasión de la gue rra nuclear central generalmente atribuída a esa situación, por medio de una mútua acumulación de sistemas estratégicos en luga res recónditos en los que serán extremadamente difíciles de ate nuar. Así, de acuerdo con la teoría de Morgenstern, la violencia entre potencias con fuerza de disuasión estratégica, especialmen te entre superpotencias, sería de menor magnitud que la guerra nuclear estratégica central. - - — - Esta situación bosquejada plantea también otras cuestiones. ¿Qué efectividad tendría la disuasión ofrecida por Estados Uni—— dos y cugles serían las garantías para las potencÍas no-nucleares en el caso de una amenaza nuclear contra Pekín o Moscú? ¿Qué crédito y aplicabilidad tienen realmente las fuerzas estratégicas estadounidenses? Aún situando esta cuestión en la actualidad, uno se pregunta si las garantías nucleares (parte importante de nuestros objetivos de no—proliferación) son consecuentes con la carencia de un dispositivo nuclear táctico veraz y con las decla raciones de no—primer—uso. El problema en conjunto, muy simplificado, radica en que en una época de répido desarrollo tecnológico militar, tenemos muchos objetivos y compromisos políticos que no podemos atender con el tipo de tesitura militar que ahora adoptamos. Nuestras fuerzas convencionales puede que no fueran satisfactoriamente efectivas en muchas situaciones previsibles en que los Estados Unidos optarían por el empleo de la fuerza militar, y únicamente cabe preguntarse hasta donde darían de si estas fuerzas si sur-— giera hoy día un nuevo compromiso para las fuerzas militares adi cional al de Vietnam. Además no cabe esperar que continúe el re fuerzo de fuerzas convencionales en Vietnam. Las fuerzas estrat gicas son cada vez más apropiadas para disuadir un tipo de amena za solamente: el del ataque estratégico sobre Estados Unidos. Si - — — -- — — 34 — no incrementamos cualitativamente nuestras posibilidades para res ponder a las amenazas locales, nuestras influencias y compromisos futuros disminuirán con el curso de los acontecimientos. Por las razones aqui discutidas, el desarrollo de una nueva y discrimina da tesitura nuclear táctica parece ser una opci6n que revaloriza— ra considerablemente nuestras posibilidades de cara a este preo cupante futuro. Al menos, este asunto debería ser liberado de las represiones acadmicas y gubernamentales que han prevalecido durante tanto tiempo, debiendo darle una interpretaci6n satisfacto ria acorde con el momento que vivimos. * * * 914t4¡ueit4ao/ii L’j Mwac rs ruvws n1,u#ksoeIA LES - ¿A ,°OLITICA 50 lE TICA AL r AL Ot SUEZ d •1 ¡ • ki CESEDEN LA POLITICA AL SUR Y AL SOVIETICA — Por ESTE DE SUEZ T. 3. Millar — (De la revista Foreíng Affairs, octubre 1970) Traducido por el Departamento de Información. Abril, 1971 DE INFORMACION BOLETIN NUM. 54 - VI 1 Cualquiera que sea el objetivo de la URSS en el Mediterréneo Oriental, hay que suponer sea parte de una política més amplia y que, inevitablemente, los efectos de sus actividades allí se exten derén mucho inés allé de los estados inmediatamente implicados. - La considerable potencia navál soviética en el Mediterréneo, junto con el acceso de la aviación rusa a las bases en la Repúbli ca Arabe Unida y en otros lugares del Norte de Africa, han cambia do el balance de fuerzas en esta érea, transforrnéndola con toda ra pidez en otra de confrontación, comparable, en muchas formas, con la de la Europa Continental. Quizé es més peligrosa porque es me nos fécil de delimitar, y porque esté unida a una disputa apasiona da que ni los propios rusos ni americanos pueden tener plena con-fianza de controlar. Los israelitas, desde luego, pero también los yugoeslavos y turcos, tienen que dormir menos tranquilamente en sus camas. — Un examen de la política exterior rusa desde la Segunda Gue rra Mundial sugiere una disposición para aprovecharse de la debili dad occidental allí donde se presenta, tanto para fomentar los in tereses soviéticos específicos, como para mejorar el balance ruso occidental. Concesiones y acuerdos mútuamente provechosos van casi siempre acompañados por presiones ejercidas o tensiones generadas en algún otro lugar. Mientras que algunos observadores vieron la intervención norteamericana en Camboya corno una señal para los po líticos moscovitas del Oriente Medio de que EE.UU. estén prepara-dos para tomar fuertes medidas si fuese necesario, resulta difícil comprender como esta teoría puede ser convincente, especialmente a la luz de la retirada norteamericana del Vietnam, a la retrasada y limitada reacción norteamericana ante la instalación de los misi—— les superficie-aire rusos, junto al Canal de Suez, y a los vuelos de los Mig 21 en la misma érea pilotados por rusos. Seguramente es tas acciones soviéticas constituyeron una señal mucho més fuerte en el otro sentido, advirtiendo a EE.UU. de un nuevo nivel de unplicación rusa dentro de un érea que ha llegado a ser —por acciden te, evolución, circunstancias o designio— de més importancia para Moscú que para Washington, excepto quizá en el caso de una confron tación muy poco probable (mútuamente indeseada) entre las superpo tencias. — - —2-- La ventaja diplomética con los estados érabes, las reaccio nes políticas con los jefes més carismáticos e influyentes, una posici6n militar mejorada y una oportunidad para desasosegar a Oc cidente, no parece sean suficientes motivos para explicarnos los inmensos compromisos militares y sicol6gicos que la URSS ha con—— traído con la República Arabe Unida. No puede ser una coinciden-cia que la línea que divide a los combatientes, cuya rectificaci6n estén haciendo posible los rusos, es la vía marítima más im portante del mundo, que reduce en varios miles de millas el reco rrido entre el Mar Negro y las costas nordoccidentales del Océano Indico. No es, por supuesto, la ruta naval más importante para la URSS, ni actualmente, ni en potencia. Antes de su cierre, en 1967, s6lo una pequeña parte del comercio ruso atravesaba el Canal de Suez. Este no aumentaría considerablemente si fuese abierto de nuevo en un futuro pr6ximo, ya que los buques pegueros rusos, y los mercantes que transportan comercio de otros países, estén in crementando sus actividades en el Océano Indico. Desde el punto de vista ruso, el aspecto fundamental a considerar tiene que ser su valor estratégico, y ésto da especial énfasis al problema to tal de la política rusa en el Golfo Pérsico, en el Arábigo y en cualquier otro lugar del Indico. — - - — — - El Canales s6lo una parte del tránsito entre el Mediterrá neo y el Indico, —unas 100 millas en un total de 1.200-. En ningu na parte a lo largo del Mar Rojo, estén los rusos tan implicados, o tienen tanta influencia como en la RAU, con excepci6n quizá del rinc6n S.E. del Mar Rojo. Las armas rusas -incluso a veces los pi lotos rusos-, han hecho posible su ascendencia en el Yemen Repu—— blicano, y el puerto de Hodeira fue reconstruido con ayuda rusa. El acceso ruso continu5 en Adán y en Berber6, en la costa opuesta, donde los puertos y diques han sido mejorados, o lo estén siendo, por los rusos. En Egipto estén construyendo un nuevo puerto pes—— quero en el Golfo de Suez. Son los principales suministradores de armas del Sudán. Sus relaciones con la Arabia Saudita han sido me nos cordiales. Los rusos, por lo tanto, no han sustituído a los ingleses en un sentido estricto. Su presencia es más precaria; son huéspe des invitados, protectores residentes o no residentes, prestamis tas de dinero: no tienen ninguna autoridad constitucional, ni po der. Esto les hace menos vulnerables a los nacionalismos, pero, al mismo tiempo, hace sus lazos menos seguros. Sin embargo, si les han sustituído en cierta medida; es es pecial, y debido a su acceso asegurado a las bases aéreas y nava les de Egipto, se han convertido en la potencia extranjera predo minante, desde Port Said hasta Adán y Somalia. — — —3— Esta situación probablemente continuará, aunque no necesa riamente, cuando vuelva a abrirse el Canal. Puede suponerse que dicha situación está prevista, en parte, para conseguir la reapertura del Canal. Pero cualesquiera que puedan ser las resisten cias locales a la implicación rusa, no es probable que interven ga ninguna otra potencia importante. Todos se las han arreglado para adaptarse razonablemente al cierre del Canal. Fuera de la URSS ningún otro país tiene gran interés en ésto. Nadie está si tuado en sus proximidades. Nadie está extendiendo sus activida— des por intereses al Océano Indico. Solamente Francia tiene al gunos restos de su presencia, en la Somalia Francesa, enfrente de la ruta S.O. de la Península Arábiga. Es importante, en las actuales circunstancias, que aquella continúe en manos francesas. — II Los intereses estratégicos y compromisos, tienden a acumu larse, mas que a adquirirse de manera deliberada, derivándose en muchas pequeñas decisiones o acontecimientos, antes que en una iniciativa mayor única. Las actividades no siempre denotan inten ción. Los comerciantes se marchan de su propio país buscando mer cados o materias primas y terminan dando lugar a colonias que re quieren protección. Pueden crearse fuerzas con una finalidad y, una vez atendida ésta, pueden utilizarse en otra,ya que existen. Una adquisición inócua, pero en la que otro puede estar interesa do, adquiere importancia estratégica y así sucesivamente. — Mientras que, individualmente considerada, nosotros pode—— mos pasar por alto la marina mercante rusa, no podemos despre— ciar la idea de que parte de una gran marina, creada para hacer frente a la guerra fría en el Atlántico Norte, puede destinarse a otra área si el clima europeo mejora y si se presentan oportu nidades en cualquier otro lugar. Llevando ésto más lejos, parece probable que los rusos han llegado a ver, finalmente, las posibi lidades de desplegar su poder, previendo y creando la defensa de sus intereses continentales en áreas marítimas más lejanas y de las que Inglaterra o Norteamérica se están retirando. — ¿Qué están haciendo actualmente los rusos enel Océano In dico? No es fácil contestar con seguridad sobre el qué y el por qué de esta preguntan Si consideramos simplemente actividades na vales, parece ser se trate de una presencia continuada, aunque pequeña, a pesar de que el número de buques ha alcanzado en cier ta ocasión unos 25. Ha habido una recuperación espacial en el In dico, así como otras actividades también relacionadas con la in vestigación del espacio. Igualmente ha habido varias visitas de — —4— cortesía y alarde de fuerzas por un pequeño grupo de buques de su perficie y submarinos. Durante unas considerables maniobras nava les, a principios del año 1970, cuya mayor parte se realizó en otros lugares, una flotilla de destructores intervino en el Océa no Indico. Buques oceanográficos, hidrográficos y de información electrónica se ven de vez en cuando. Todo esto no supone un irnpor tante esfuerzo naval y es menos de lo que los ingleses han tenido o tienen todavía los franceses. Los buques navegan sin cobertura aérea. Pos supuesto podrían reforzarse, sobre todo, con ms faci lidad si se volviera a abrir el Canal. Es difícil creerse que un Ministro de Asuntos Exteriores australiano haya perdido su puesto y cartera por haber dicho, precisamente antes de las elecciones generales del año 1969, que los australianos no deberían sentir p.nico por ver buques rusos en el Indico. - — - Pero, por modesta que pueda ser la presencia naval rusa —no estamos seguros si será. mayor de lo que se nos informa— su impor tancia esta en cuatro hechos: a) . b) . c) . d) . supone una iniciativa hace menos de tres años y por tanto constituye una nueva política; lo por muy modesta que pueda ser esta fuerza naval, y por muy moderadamente que se la use, puede tener efectos po líticos muy importantes; parece ser habrá decreciente rivalidad respecto a las potencias occidentales y sus marinas de guerra (1) ; y la presencia naval soviética ha de considerarse tamente con sus otras actividades en la región. — conjun Las més importantes de estas actividades se han desarrolla do en el Subcontinente que domina el Indico al que después de to do le da su nombre. La India no puede desear el depender indefec tiblemente para su seguridad de ninguna potencia extranjera, pero tenemos que admitir que tiene pocas alternativas al apoyo soviéti co. Antes de la guerra con el Pakistan, en 1965, adquirió armas tanto en los países de Occidente como en los Comunistas; cuando los suministros occidentales se interrumpieron (tanto a la India como al Pakistén) , la India estrechó ms aún sus lazos con la URSS, y el Pakistan con la China Comunista. Inglaterra no fué ca paz de proporcionar submarinos en condiciones aparentemente tan favorables como las de la URSS; por este motivo la India se con— - - — (1) La presencia de unos pocos submarinos polaris norteamericanos y de una pequeña unidad de buques de superficie, no explica la variedad de las actividades rusas indicadas aquí. - —3— virtió en un cliente de Rusia, no sólo para submarinos, sino tam bién para escoltas, torpederos, así como para entrenar sus tripu laciones y para la reforma y ampliación de la base de Vishakha— patnam, en la costa oriental. La aviación india se abastece en la actualidad, predominantemente con aviones soviéticos, incluyendo el “Mig 21” fabricado en el propio país, siendo considera da la aviación como el ejército más pro-ruso de las fuerzas arma das indias. Hay algún equipo ruso en el ejército de tierra, y oficiales de alta graduación han asistido a cursos de entrenamiento realizados en la URSS y en países de Europa Oriental. — - — Mas allá de esta situación queda lo que para la India es una realidad ineludible. La guerra de 1965 demostró que las fuer zas armadas indias podían hacer frente a los ataques paquistaníes, pero no eliminaron los recuerdos humillantes de la victo—— riosa invasión china de carácter limitado, tres años antes. Ade más, desde entonces China se ha convertido en una potencia nu clear de creciente sofistificación. La principal amenaza exte— rior a la seguridad de la India procede de la China Comunista, por sí misma, o en unión con el Pakistán. Los ingleses por mu chas simpatías que puedan haber sentido, ,ya no son capaces de proporcionar ayuda importante en el casode un segundo ataque chino..EE.UU. está reduciendo sus compromisos en Asia y buscando mejores relaciones con China. Sólo la URSS parece capaz de pro—— porcionar ayuda en la cuantía deseada, de estar preparada para proporcionar seguridad, como rival histórica de la política china, y estar dispuesta, al menos a lo largo de sus fronteras,para comprometerse en un conflicto que contenga a los chinos.Ade más una relación militar más fuerte con los rusos satisface a los elementos del Parlamento Indio, cuyo apoyo necesita actual—— mente el llamado “Congress Party”. - - - — — - - - Desde la conferencia de Tashkent, en enero de 1966, la URSS ha participado de manera creciente en los asuntos de las re laciones entre la India y el Pakistán, y lo ha hecho con más éxi to que Inglaterra, EE.UU. o la ONU. Esto es, en parte, porque tiene un interés más directo, y en parte también, porque los dos estados -en particular la India— no tienen otro sitio donde din girse; además, porque el pragmatismo ruso se ve menos afectado por dudas morales y menos empeñado por rencores excoloniales. La ayuda militar rusa al Pakistán, negociada por el actual presiden te paquistaní, en su antigua calidad de Comandante en Jefe del Ejército de Tierra, no fue impuesta a un gobierno paquistaní rea cio. Era beneficioso para el paísya que llenaba vacíos existen tes en los tipos de armas rusas (incluyendo piezas de repuesto y accesorios) obtenidos a través de China (1) y porque frustraba a — - — (1) La Revolución Cultural afectó a la producción china de equi pos militares como a la de otras mercancías industriales, de tal forma que, las entregas de exportación en muchos artícu los están lejos de cumplir todavía las condiciones contrata das. —6-- la India. Era conveniente para los rusos puesto que hacía al Pa— kistén menos dependiente de la China y daba al gobierno ruso una mayor influencia diplomática en Rawalpindi. Los indios protesta ron, pero con mucho menos volumen y estridencia de lo que siempre hicieron con la ayuda norteamericana al Pakistan. En tanto el gobierno ruso sea capaz de mantener su influen cía en ambos países, es probable que haga todo lo posible para evitar un conflicto intercontinental, que debilite a ambos fren te a China y que dañe sus economías, destruyendo la mayor parte, o toda la ayuda extranjera recibida. Pero, normalmente, la in— fluencía no es una compensación suficiente a una inversión ¿Han recibido los rusos algún beneficio ms tangible a cambio, por parte de la India o el Pakistán? Ninguno de ellos, ni la URSS misma, estaría dispuesto a reconocerlo así. Las sugerencias de que la marina de guerra rusa ha recibido bases en la India, en Bombay, Goa, Cochin o en Adaman -o en Gwadar en Pakistan- han si do enérgicamente negadas. Pero no se desmiente que los buques ru sos tienen acceso a algunos puertos e instalaciones anexas de una manera que no lo habían tenido hasta hace poco. La ayuda ru sa para mejorar Gwadar, situado próximo al Golfo de Omn, puede relacionarse con su uso como puerto pesquero, pero algunos pes queros rusos se usan para fines militares, especialmente informa ción electrónica. Los indios han mantenido en silencio esta nue va ‘tbase8 soviética. Aunque no existen bases soviéticas declara das en el subcontinente, los cambios estratégicos habidos son irn portantes si se comparan con la situación de hace sólo unos po cos años, cuando los aviones norteamericanos de reconocimiento volaban desde Peshawar, las potencias occidentales proporciona—— ban o vendían el grueso de todas las armas usadas en ambos paí ses, y los buques de guerra rusos jarns se veían en los puertos de las aguas calidas del Océano Indico. - — - - — — III Una tercera área clave, es la conjunción entre el ndico y el Océano Pacífico. La ayuda de armas rusas y de Europa Oriental a Indonesia hizo posible su I!confrontacjónlt con Malasia y Singa pur, entre 1963-66, y provocó el colapso y contínua debilidád de la economía de Indonesia. Cualesquiera que fuesen los propósitos rusos por entonces fracasaron. Los objetivos de Sukarno,utilizan do armamento ruso, suponían el desmembramiento de la Federación Malaya y el dominio indonesio del írea, incluyendo el importante estrecho de Malaca. Poco después del colapso de la confrontación, la URSS comenzó a modificar su actitud respecto a Malasiá y Sin 7 gapur. Estableció misiones comerciales, luego embajadas, negocian do acuerdos coinerciales.Y de transporte aéreo y naval. Ofreció ar mas a Malasia en condiciones favorables; obtuvo aóceso a lás in talaciofleS astilleras de reparación de buques de Singapur y, ‘al— párecer, intentó, si bién fracasó, lograr derechos para construir sus propias instalaciones en el área. De nuevoél cambio en dua— tro años resulta considerable. En Indonesia, los rusos no Ia.n re cuperado la posición que disfrutaban antes de que Sukarno comenza s. a coquetear con los ‘chinos, pero tampoco han intentado hacerlá, qüizá porque creen qúe el clima político es demasiado desfavora— ble, o que la inestabilidad es endémica y no mérece la pena arriesgarSe previamente. El presidente Suhartó, dedicando espe cialmente la atención sobre el ejército de tierra, y dejando enmo hecer el complicado equipo aéreo y naval ruso, ha eliminado, prác ticamente, toda dependencia de la URSS que no sean las deudas con traídas por su antecesor. La decisión del gobierno conservador inglés de mantener en Malasia fuerzas después de 1971 puede tal vez haber afectado a,, los planes rusos dé implicación militar o naval allí, perono me jórará en gran medida las dificultades económicas producidas por la retirada inglesa en ambos estados. Aquí los nuevos acuerdóscO merciales, la adquisición rusa del caucho de Malasia (es el prin cipal comprador) y el uso de las instalaciones de reparación de Singapur, son tangibiesgaflaflCiaS. Cuando los ingleses terminén por ‘irse a su casa, acoiupañadoá quizá por los australianos y los neoze1andeses, Singapur puede muy bien encontrarSe con que, la URSS sea la única gran potencia interesada en pagar los servicios que la pequeña nación tenga que ofrecer, servicios logrados porlos ingleses y por la capacidad de trabajo local durante 150 años, y ahorá a disposición de una flota soviética en expansión sobre el Océano Indico. - - Al igual que el Canal de Suez cuando se abra, el Estrecho de Malaca se usa como paso de la marina de guerra y mercante en tre la URSS Oriental y Occidental, así como para los abastecímientos rusos en armas y equipos a las fuerzas comunistas en Viet nam y Laos. No habrá escapado a los rusos el hecho de que el 40% del petróleo del Japón pasa a través del estrecho de Malaca. — -- Una cuarta área clave, en especial mientras el Canal de Suez permanezca cerrado, es la región de la ruta naval alrededor de Africa del Sur, utilizada por unos 24.000 buques anualmente. A este respecto, el acuerdo “pesquero” ruso con las islas Mauricio, negociado en 1969 y firmado este año, es de especial interés. Él acuerdo proporciona ayuda rusa a la industria pesquera de Mauri— cío y la creación de una empresa conjunta. A cambio, los pesque—— ros rusos están autorizados para usar Port LouiS para carga y des carga, abastecimientos, reparaciones y relevos de tripulacioneS, transportadas en avión por la “Aereoflot” soviética. —— —8— Esto parece una cosa que no tiene demasiada importancia, pero debiera contemplarse menos en el contexto actual, en que las islas Mauricio conservan íntimos lazos con Inglaterra, que dentro de la posible evolución en el futuro. La economía de las islas, y especialmente sus ingresos de exportación, se basan en gran medida en el azúcar. La máyor parte de ésta se vende a In glaterra a precios preferenciales (artificialmente superiores) a tenor del Acuerdo sobre el Azúcar de la Commonwealth. Elacuerdo dura hasta 1974, pero antes Inglaterra podría entrar en el Merca do Común Europeo, y tendría que renunciar a sus convenios prefe—renciales de la Commonwealth. — - — En las islas Mauricio hay una estación naval de radio in glesa, establecida por acuerdo duradero hasta 1974 y con posterioridad hasta queuna de las partes solicite la cancelación, con un año de anticipación. Tanto si Inglaterra tiene o no necesidad de tal estación, para mediados de la década de los 1970, como si los sucesores de Sir S. Ramgoolam, actual primer ministro, sean o no partidarios de la permanencia de los ingleses, los rusos no podrán por menos de sentirse interesados por el citado equipo y por la utilidad de la ubicación geogréfica de las islas. Buques de guerra rusos, incluyendo un portahelicópteros,se observan con cierta asiduidad en las islas de Saint Brandon, 250 millas al norte, y pertenecientes a las de Mauricio, así como en el Archipiélago Chagos, las islas inglesas sit.iadas en el centro del Indico que pueden utilizar los buques norteamericanos. Igual mente, se ha acusado la presencia de buques soviéticos en el Ca nal de Mozambique y otros lugares, quizá para facilitar el abas tecimiento a los submarinos. Més al norte, técnicos rusos han am puado y modernizado el puerto de Mogadishu, en Somalia. La URSS es el principal suministrador de armas a Somalia y ha proporcio nado ayuda militar a Tanzania, Uganda y a los grupos nacionalis tas africanos. Los dos portahelicópteros, “Moskva” y “Leningrado”, la In fantería de Marina de reciente creación y una creciente flota lo ‘gístíca han hecho capaz a la URSS de intervénir a distancia en una cuantía al menos igual a la de Inglaterra. Probablemente ha br ms botaduras de portahelicópteros o portaviones, pudiendo llevar algunos aviones V/STOL. El acceso a una gama de instalaciones portuarias en el Indico ha ayudado a los problemas de rea bastecimiento ydescanso de las tripulaciones. Si el abastecímiento y el apoyo aéreo con base en tierra constituye siempre re quisito indispensable, ya han sido puestos los cimientos al obje to de tener acceso a los adecuados aeródromos. — - - —9— Iv Un área en donde pudiera haberse esperado especial activi dad rusa, pero donde no la hay, es el Golfo Pérsico o Arábigo.PU diera haber una simple explicación: los ingleses han estado allT durante muchos años y con el gobierno Wilson habían decidido abandonar dichas tierras a finales de 1971. No hubo ningún moti vo de crecientes sospechas sobre las incursiones soviéticas mien tras estén allí fuerzas inglesas, pues semejantes sospechas indu ciríafl a los ingleses a permanecer en dicha área. Otra explicación posible es que los rusos no estén especialmente interesados en la riqueza petrolífera del Golfo. Esto apenas puede creerse,— aunque algunos observadores consideran que la URSS tiene abundan tes recursos de petróleo para un futuro indefinido. Incluso aun que ésto fuese cierto, cosa discutible, no afectaría a la impor tancia estratégica a escala mundial de la industria petrolífera de Oriente Medio (1) , ni al deseo de obtener acceso al petróleo más barato del mundo y conservar los, recursos nacionales, ni al hecho de que muchos de los recientes campos petrolíferos descubiertos en la URSS estén a miles de millas de sus áreas indus— triales occidentales y de los países importadores de petróleo de Europa Oriental. -- - La URSS no ha ignorado en absoluto a Irán ni a los estados árabes petrolíferos en su reciente diplomacia. Durante largo tiempo ha tenido más que intereses diplomáticos en Irak e Irán, y las fuerzas rusas abandonaron este último, con resistencia,de. pués de la Segunda Guerra Mundial. Petróleo y gas natural son su ministrados por oleoductos desde ambos países, e igualmente am bos son receptores de ayuda económica y militar, así como de in versiones financieras. Los buques de carga rusos han desplegado sus banderas en el Golfo. La política y la dirección inglesas, junto con su modesta presencia militar, han mantenido la paz en tre los pequeños estados del Golfo, y con ésta la internacional. Quizá uno de los actos más desafortunados del gobierno Wilson fue anunciar el fin de esta operación relativamente poco costosa, -- - —— (1) El descubrimiento de nuevos campos petrolíferos, especialmen te en Africa del Norte y Occidental, han reducido la indepen dencia de Europa Occidental respecto al petróleo de Oriente Medio, pero éste supone todavía un 45% del total importado.Si el Canal de Suez no se hubiera cerrado, la mayoría del pe tróleo se recibiría a través del mismo. Se ha construído un oleoducto israelí desde el Golfo de Acaba y la RAU está cons truyendo otro desde el Golfo de Suez al Mediterráneo. Pero aunque el Canal se volviese a abrir, los superpetroleroS en contraría todavía rentable utilizar la ruta del Cabo. — — lo — mucho antes de que nadie en dichos territorios se lo hubiera pe dido. Es demasiado pronto para ver en qué medida Mr. Heath puede salvar la presencia e influencia briténica, La política laboris ta parece haberse basado en dos hipótesis: que toda presencia in glesa en el golfo presupone estimular sentimientos nacionalistas y antibriténicos y que los logros que no pueden protegerse por los gobiernos indígenas locales no pueden ser defendidos por un pais remoto y extraño. Pero ésto que puede ser cierto engeneral, puede llevar a resultados equivocados en su aplicación a determi nados casos. Así por ejemplo, el Shaikh de Duvai dijo al corres ponsal del periódico londinense “Times” ¿“Quién les pide que se vayan”?. - La propuesta inglesa de federación para los pequeños esta dos del érea resulta tan precaria como lo ha sido en otras par—— tes. A la vista de importantes y provechosas inversiones ingle—— sas y de otros países occidentales en el petróleo de esta región, y de varias pretensiones de carécter irredentista y chauvinista de varios estados, actualmente contenidos por Inglaterra, una re tirada inglesa precipitada sería desafortunada, abriría posibilí dades a cambios de protectores y manejos políticos, así como a expropiaciones de intereses occidentales. - Esto pudiera no afectar de manera importante al tréfico de petróleo a Occidente. Este no esté en absoluto bajo control in glés. Por otra parte y como suele decirse, puesto que el petróleo no pueden bebérselo y constituye la fuente de ingresos casi exclusiva, ya que para obtener beneficios es fundamental en pri mer lugar vender, no deben pasarse por alto las limitaciones en la venta de dicho producto que supondría ceñirse al reducido mer cado del bloque oriental. Organizaciones occidentales controlan la comercialización y gran parte de la distribución y tratamien to del petróleo del Oriente Medio a través de Occidente, así co mo en otros terceros países, Si fuese necesario otros abastecedo res podrían hacer frente a las interrupciones temporales del flu jo petrolífero de Oriente Medio. Pero, la ascendencia diplométi— ca estratégica y económica que se produciría como consecuencia de una mayor influencia rusa sobre los principales productores de petróleo, es algo que Occidente no puede considerar a la lige ra. - ¿Con qué grado de probabilidad buscaría la URSS sustituir a Inglaterra en el Golfo o estimular actividades nacionalistas locales contra los intereses occidentales? Los precedentes en el érea y en otras partes no son consoladores, y ningiín otro estado sería lo suficientemente poderoso, cercano e interesado como la URSS. Pero probabilidad no es certeza y habría resistencias loca les; habría competencia con otros estados, en especial la RAU posiblemente la China Comunista o incluso Japón por no mencionar — 11 - la Arabia Saudita, Irán e Irak. A la vista de tantos aspirantes a influir en una región tan rica, y animada por su éxito en el sub continente indio, la URSS pudiera sentirse tentada a llevar a ca bo la misma clase de actividades aquí. Lo que Inglaterra hizo du rante mucho tiempo, seguramente puede hacerlo una superpotencia socialista. — Esto es una especulación pero no por ello carente de funda mento. Respecto al antagonismo y rivalidad chino—soviético podría llegar a ser un hecho real, como lo es en muchos sitios, por al go más que simples disputas fronterizas. No se trata de un mero debate por el liderazgo entre los países comunistas o no almea-dos: se trata de un conflicto publico y declarado. El apoyo chino a las guerrillas palestinas y a otros movimientos revolucionarios locales va contra la política rusa y complica la total situaci6n de Oriente Medio. En el Africa Negra, la rivalidad es clara en Uganda, Kenia, Zambia y los dos Congos, y entre los movimientos de liberación. Sólo en Tanzania aparecen los chinos con ventaja. Ha habido informes de actividades navales chinas en el Océano In dico: en mayo pasado se vieron buques chinos en las proximidades de Andaman, y China está ayudando a Tanzania a construir una base naval en las proximidades de Dar-es-Salam. Sin embargo, la Marina de Guerra China no es suficientemente grande como para proporcio nar una presencia importante en el Océano Indico y su impacto allí es, en el mejor de los casos, meramente sicológico durante algunos años. - — - —- — En India y Pakistán, en su actitud respecto a Burma, como en sus actividades en Indochina, la URSS se mueve claramente en un intento de contener, refrenar o eliminar la influencia de la China Comunista. La sugerencia sondeo de Breznev en junio de 1968 por un “sistema de seguridad colectiva en Asia”, respaldado por la URSS, mientras que por una parte no excluía a la China Comunis ta, por otra se encaminaba claramente a ello (y sólo de manera se cundaria a la exclusión de EE.UU.) . Aquella no se tomó en serio por los países afectados. Es difícil creer que Rusia, en su ayuda a los estados del Sudeste Asiático, llegue a incluir fuerzas com batientes suficientes para resistir la agresión china. La ayuda masiva rusa en armamentos, económica y sicológicamente a Vietnam del Norte, ha hecho posible la continuación de la guerra y la re lativa independencia de Hanoi respecto a su gigantesco vecino (1) Los rusos están dispuestos a mantener esta posición de influencia tan importante en las relaciones triangulares con China y EE.UU. todo el tiempo que puedan. — — — — — — (1) Que ésto ha llevado también a enormes destrucciones dentro de Vietnam del Norte es probable no haya sido pasado por alto a los pueblos vecinos. — 12 — No resulta sencillo totalizar todas estas cuentas parciales, como tampoco lo es el resumir la política norteamericana en un so lo y coherente total. La URSS se ha proporcionado una modesta capa cidad de intervención a gran distancia, pero sería totalmente inca paz de mantener importantes operaciones durante muchos años lejos de la metrópoli. Un pragmatismo universal ha tendido a sustituir la ideología universal, adquiriendo unos extraños compromisos con intereses nacionales, que no resultan nada fáciles de conciliar.Pe riódicamente, el Kremlin ha modificado o desviado su visión, a la vista de nuevas aperturas o nuevas oportunidades. Al sur y al este de Suez, la prolongación de la influencia rusa es ms una sombra que una realidad, pero las sombras nos advierten de la presencia próxima de una realidad. - - — ** * 9bt lu€I44uo/II IlI?c& ESTUP105 ttONMI(DS -ASPECTO ECONOMICO DEL EMPLEODE ¿.4 ENERGIANUCLEAR. —EL RENDIMIENTO DE LOS DEDICADOS A LA DEPENA .111 CESEDEN ASPECTOS ECONOMICOS DEL EMPLEO - Por DE LA ENERGIA el Capitri Mario NUCLEAR d’Errico - (De la T’Rivista Marittima”, diciembre 1970). Traducido por el TC01. de Aviaci6n (S..V.), Diplomado DEM, Don Luis Rico de Sandoval - Abril, 1971 DE INFORMACION BOLETINNUM. 54 - VII Premisa Cori la firma del Tratado para la no proliferación de las:armas nucleares, Italia, como otras muchas naciones, ha renunciado a hacerse cori un atómico ‘, comproñietiéndoSe a desarrollar los estudios y el empleo de la energíanuclear fundamentalmente con fines pacíficos. -- Continúan abiertos aplicación, tales como: propulsión - a las aplicaciones (hoy día, naval, mañana, militares quizás, algunos aérea y campos de espacial), producción de energía eléctrica para Unidades y Centros aislados o,de alguna manera, autónomos.Recordemos, al respécto, las centrales electro-nucleares autopropulsadas construidas en la Uióñ Soviética; - — desalinización ce. del agua del mar para abastecimiento de agua dul Pero, aunque en el primero de esos campos el empleo con fines mi litares puéde alardear de una precedencia cronológica y, siquiera por el momento, de casi una ntexclusivafl,en los otros dos el empleo pacífi. co es decididamente prioritario, sea porque las exigencias militares son bastante más modestas que las civiles, sea porque los medios proce dentes de fuentes de energía convencionales han cubierto de sobra todas Las necesidades, hasta el momento. —. -- Por ello, la energía nuclear ha perdido buena parte de su interés. Por otra parte, no puede menospreciarSe la importancia que esta moderna rama de la ciencia está destinada a asumir, con evidencia siem pre creciente, en la vida del hombre. Consideramos, pués, muyutil e in teresante dedicar alguna atención a los aspectos económicos del empleo pacífico de la energía nuclear, con especial consideración de las pre visiores para el futuro. — - Reaccionesnucleares Ya es universalmente conocido que la energía nuclear se utiliza -2- en instalaciones en las que, en lugar de reacciones más o menos esotér— micas entre un combustible y un comburente, se desarrollan reacciones en el ámbito solo del combustible, sin necesidad de comburente. - Las reacciones - escisión - fusión La tenteso son de dos tipos: o fisión de núcleos de núcleos de átomos de átomos de elementos de elementos primera es la que se verifica en curso de perfeccionamiento. pesados; ligeros. en los reactores nucleares exis La segunda sólo se consigue, por ahora, en las bombas H, ya que las condiciones en que puede producirse no pueden lograrse en una insta lación industrial. — Por lo tanto, hablando de reactores y de energía nuclear, de aho ra en adelante siempre entenderemos que se habla de instalaciones de fi Sión de núcleos pesados. Combustiblesnucleares Lo5 combustibles uranio, con — %de son, esencialmente, en las composiciones isotópicas dos: 233 y 235 (indicadas - u233 y u235); Plutonio, De 0,7 nucleares en varias composiciones isotópicas. ellos, en la naturaleza solo existe el U235, que constituye la mezcla de isótopos que forman el uranio natural. Los otros isótopos fisibles se obtienen ciones nucleares ( provocadas, todas mediante nes ) de los siguientes elementos: - tono, - uranio, en la composición en la composición isotópica isotópica el como consecuencia de reac el bombardeo con neutro- 232 (Th232); 238 (u238). El tono está bastante extendido en la naturaleza; su falta de em pleo se debe además de la indicada necesidad de transformarlo previa-mente en Ii23-), a la dificultad desu elaboración y a su no bién desarro lladatecnología. No hay duda de que en el futuro, cuando ( por las ra zones que veremos ) haya subido el costo del uranio, el tono podrá salir al mercado a ún precio competitivo; incluso, dada su relativá abundan cia, es previsible su empleo a gran escala. -3- Pero es el u233 el que constituye el verdadero elemento clave la planificación del desarrollo de la energía nucléar en el próximo turo. En efecto, dicho elemento: el 99,3 % del constituye - uranio natural; puede transformarse con relativa reactores, en plutonio fisible. - de fu facilidad, en el interior dé -- Véarnos, ahora, como se presenta la situación de las reservas mun diales de combustiblnucleares. La opinión común sigue las vicisitudes del petróleo, en relación a las disponibilidades de fuentes de energía, con la certeza de tener, en cualquier caso, lista la solución global del problema; en efecto, se tiende a considerar” prácticamente inagota bies las reservas mundiales de combustibles nucleares. - Pero la cuestión está planteada en términos muy diversos. En mundo, la tabla 1 damos las existencias de uranio comprobadas excluidos los paises del bloque comunista en el Tablanúm.1 U203 Valoración de los recursos de uranio en el mundo, en térniiños ( no está comprendido el uranio ya extraido ). Territorios Costo 5 - de extracción 10 lO . U.S.A. Suárica Francia España Portugal Suecia Otros eiropeos Australia Argentina Congo Gabón Portugal larruecos India Japón Seguros 210 l95 140 37 11 7 325 15 5 10 15 Seguros 130 150 30 Recursos Posibles 170 200 5 28 --- --- 3 Seguros 100 Posibles 200 170 440 10 --- ---• 40 --- 6 --- 350 11 20 2,8 5 --- 15 50 --- 150 1,4 --- 12 --- --- -- 5 --- --- --- --- ---- 250 10 200 -—— --- 6 6 - -.-- 5 --- Total Posibles 290 --- --- — / libras Recursos Recursos Canada en dólares 15 --- --- --- --- --- --- --- 8 ——— 11. ——— --- --- 16,5 --- --- --- --- --- --- --- --- 642 de 2,6 684 429 -—— . - — 1Jr — Como vemos, no se trata, en absoluto, de cantidades inmensas, es pecialmente si consideramos la tabla 2, en la que se dan las necesidades previsibles de uranio en elmundo ( con la acostumbrada exclusión de los paises del bloque comunista). - Tablanúm.2 Cantidades de uranio que serán necesarias uranio natural metálico ). de Periodo r 1 1.970 1.980 1.990 - o a Iv 182 298 233 161 234 157 713 552 169 313 99 819 633 1.393 m 111 384 Total a II 79 &9 190 g ( millares de toneladas 1.115 En esta tabla se indican 4 programas de desarrollo, cada uno de lo cuales se caracteriza por los tipos de reactor que entrarán en fun ción: 1. II. III. IV . pre — S0l0 reactores. “térmicos” También reactores convertidores avanzados. Inmediatamente, reactores veloces. Solución de compromiso entre las tres anteriores. .• Este combustible está destinado a producir crecientes necesidades de la humanidad. energía para las siem La forma de energía más importante a los fines de la producáión industrial y del uso doméstico es la eléctrica; en los paises altamente industrializados, la demanda aumenta cada año alrededor del 6-7 %;y to davía más en los paises en vía de desarrollo. - Unido La previsión y los EE.UU. de necesidades para la Comunidad se da en la tabla núm. 3. Europea, el Reino - Tablanúm.3 Previsión del consumo anual de energía eléctrica en la Comunidad Económica Europea, Reino Unido y EE.UU. (consumo global en miles de mi llones de Kwh/año). 1.970 Comunidad Reino Unido. EE.UU. 1.980 1.075 570 290 1.590 570 2.8209.000 1.990 l.9j0 2.000 3.450 -5- Es interesante ver, de todas las necesidades indicadas, qué parte se satisfará con energía producida por las centrales electronucleares — y cual con energía producida por centrales de tipo convencional (de corn bustibles líquidos, de gas, de carbón, hidroeléctricas, geotermoeléctri cas, etc.). En la tabla la Comunidad para 4 se dan Europea. las previsiones de dicho reparto, solamente Tablanúm.4 cas dad Reparto de la producción entre el sector nuclear, privilegiadas (i) y fuentes térmicas tradiccionales, Europea ( en miles de millares de Kw/h.). 1.970 28 ?roducción nuclear id. privilegiada id. tradicional 200 342 Total 570 fuentes térmi—— en la Comuni- 1.980 1.990 2.000 280 240 920 260 555 750 2.400 280 770 1.075 1.930 3.450 Como se ve, entre 1.980 y 1.990 ( es decir, dentro de menos de 20 años ) laproducciónde Kw/h “ñucleares” superará a la de Kw/h “tradi— cionales”. A co:ntinuaciSn, la desproporción se hará aún mayor y,para el año 2.000, la relación entre ambas fuentes de energía será de 3 á l,a — favor de la nuclear. Estas son, al menos, ls previsiones. Y hacemos esta indicación porque, aparte del margen que hay que dejar a lo imprevisto,aún hay mu cho que hacer para resolver los problemas relacionados con el desarro—— lb de esta forma de energía. - Tiposdereactores Para encuadrar mejor el problema, consideramos oportuno tratarlo desde el punto d.e vista de los reactores construidos o en vía de desa-— :rrobbo, subdividiénd.o:,los en la forma más oportuna para nosotros, o sea según el tipo de combustible empleado. 1. Reactores Constituyen (1) — - térmicos. la totalidad de los reactores actualmente disponi— Por producción privilegiada se entienden la de fuentes hidroeléctricas; geotérmicas; en las proximidades del lugar de producción del combustible. —6- bies en el mercado, para los diversos tipos de instalaciones nucleares. E ellos, el combustible empleado es el uranio 235. Su concentra ción en la mezcla natural, como hemos visto,’ es bajisima, por lo que en casi todos los reactores se la aumenta con un proceso llamado de ‘!enri quecimiento Este procesoes extremadamente costoso y delicado. La única na— ción occidental en condiciones de vender uranio enriquecido son los EE. UU.; también Gran Bretaña y Francia poséen pequeñas instalaciones, pero para fi-nes esencialmente militares o, si de otro tipo, solamente nacio nales., El precio la concentración respeto. del de uranio enriquecido U 35. En la tabla es muy alto núm. 5 damos y sube al aumentar algunos valores al. Tablanúm.5 Costo Porc.entaj e dé U235 (én pe.so) 0,711 0,800 0,900 1,000 1,100 1,200 1,300 1,400 1,500 1,600 1,700 1,800 1,900 2,000 en del uranio enriquecido Costo (en dóla— res/gr.) Porcentaje de U235(en peso) Costo (en dóla res/gr.) 3.300 3.781 7.121 7.248 4.252 2,100 2,200 2,300 4.661 2,400 5.021 2,500 2,600 2,700 2,800 2,900 3,000 3,100 7.478 7.582 ‘ 5.338 5.622 5.876 6.105 6.313 6.503 6,693 6.837 6.984 Los porcentajes de los reactores térmicos 7.367 7.771 7.858 7.940 8.017 8.091 3,300 8.227 3,500 3,700 8.351 U235 que se dan son para las centrales . 8.463 los empleados normalmente electronuceares. La necesidad de emplear uranio enriquecido, costo del combustible, plantea el problema básico E efecto, el monopolio existente en la producción do con mas , 7.679 además d.e e-levar el de su aprovechamiento. de uranio enriqueci — pone grandes rémóras políticas a la posibilidad de disponer de él continuidad y en las cantidades necesarias para realizar los progra de nuevas centrales y para mantener en servicio las existentes. -7’- Una prueba de la importancia del problema la tenemos en el acuer do recientemente estipulado entre Gran Bretaña, Alemania y Holanda para la r.ealizaci6n común de una instalación de enriquecimiento, la ex clúsión de Italia de este acuerdo, además de constituir un grave sínto ma de la poca consideración que nuestra política nuclear tiene en el terreno internacional, pone a nuestras autoridades ante un problema bastante embarazoso. Los gastos que se tienen que hacer. para efectuar un estudio profundo en este campo son elevadísimos y elevadísd-mo es el costo de una instalación de producción. Sin tener en cuenta qúe es muy imitada la experiencia que se tiene al respecto en Italia. —— - — 2. Reáctores veloces. Mientras sé continúan instalando centrales con reactores tér micos, e están estudiando los llamados reactores ‘veloces” en los que sé emplearán plutonio y uranio 233. Las tinghouse presentar Los más importantes émpresas que trabajan en el sector, la Wes—y la General Electric -ambas estadounidenses-, cuentan con sus primeras centráles competitivas de este tipo en 1.980. - reactores las características de: renimiento; potencia específica; - - — ahorro de combustible; menor tamaño; decididamente Para tes veloces tienen datos del proyecto potencia - carga - - a los reactores dar una idea de estas -- - superiores General térmicos. características, citamos los siguien Electric: entre born-as del -alternador inicial de Pu fisible no fisible altura del núcleo diámetro del núcleo el9O % de la potencia se genera en el núcleo, centrado todo el plutonio. Kw 1.000.0 2.100 Kg . “ cm donde está con Alrededor del núcleo va una carga de 9.700 Kg de. uranio 238, que desarrolla doble función de mejorar el rendimiento del núcleo mismo y de producir más Pu. - 8 - En efecto, ‘potra característica notable de este tipo de reactores es, precisamente, la de convertir en Pu el U238h?; además, si el proyec to está hecho de forma adecuada, la cantidad de plutonio que se produce es mayor que la que se consume en la fisión. Este hecho, aparentemente paradójico, tiene su ord.gen en el hecho de que la rotura de un núcleo de plutonio, provocada por la captura de un solo neutrón, da lugar a que emerjan unos 3 neutrones por término me dio; de ellos, más de uno es absorbido por los núcleos de U23 , que se transforman en núcleos de P239 Como vemos, la ventajas que ofrecen los reactores veloce son de cisivas-. A la evidente pregunta sobre el motivo por el que tales reacto res no han entrado, aún, en uso corriente, las respuestas son: - dificultad - peligro - necesidád y, sobre intrínseco; de fluidos refrigerantes metálicos; todo: necesidad — de regulación; de disponer de una En cambio, el plutonio producido preferente en el campo militar. carga inicial de plutoniL hasta ahora ha encontrado empleo Por otra parte, aunque todo el plutonio producido hasta ahora se hubiera empleado en la carga de reactores veloces, el. número de centra les conçstrujdas habría sido muy pequeño, ya que es pequeña la producción de Pu en los núcleos de los reactores térmicos. los En la tabla núm. 6 damos reactores térmicos. las previsiones de producción de Pu en TablaNúm6 Producción de plutonio Periodo P . 1.970 1.980 1.990 1 (1) en los reactores - 79 89 99 Total Véase la nota r o g r a térmicos m a (1) 1 II 38 199 0 210 545 599 186 419 782 849 644 de la tabla 2. (en toneladas) III IV 39 40 . 197 472 709 • - —9— 7 damos, en cambio, las previsiones de necesida des de Pu para el aprovisionamiento de los reactores veloces, según el IV programa de desarrollo. En la tabla núm. TablaNúm IV Previsión de necesidades de Pu. para reactores programa de dearrollo, en toneladas ) Periodo RECARGA PRODUCCION INICIAL PERIODICA DE Pu CON EL u238 Prud te . Cálculo Opti mo - 89 - 99 1 - 54 498 - 92 923 de la suma - 69 692 821 1 i entre (i) Cálculo Opti mo Prud te Opti mo 1 35 - 129 63 761 900 1.015 resulta SALDO - la producción 658 t 37 -331 +124 721 -331 1+124 de Pu en los reac ( ver tabla núm. 6) y, la producción de Pu, partiendo u238, en los veloces, suma de la que se resta el consumo de Pu en reactores veloces. tores del los cifra Opti Prud mo te 1 925 Total Esta 5 90 830 (según el Cálculo Prud te 1 1.970 1.980 1.990 veloces DOTACION Cálculo . (1) . térmicos - Ellector puede comparar ambas tablas. Parece oportuno precisar que en la tabla núm. 7 se han dado dos previsiones ( una prudente, otra óp tima ) respecto a la diversa valoración de la capacidad de conversién del u238 en Pu — 3. Reactores conversores avanzados. Éntretando, se ha ideado un: tercer tipo de reactor cho estudios para que llegue a ser competitivo): se trata “reactor conversor avanzadot. ( y se han he del llamado - Como hemos dicho, tanto los reactores térmicos como los veloces u convierten” uranio en plutonio; los segundos más que los primeros,pe ro aún están por ser una realidad cotidiana, al menos en la producción industrial El reactor conversor avanzado se ha presentado como una solu -— ción intermedi entre los dos anteriores,presentando una relación de conversión mejor que el reactor térmico, sin los grandes problemas del reactor veloz. - - lo - Este tipo de reactor tiene la ventaja de utilizar uranio natural, lo que representa una gran ventaja económica, dado el costo del enriquecido. Pero no se ha logrado, aún, hacerlo completamente competitivo. A pesar de los esfuerzos efectuados en tal sentido, especialmente en Canadá y los Paises Escandinavos, por razones qúe no es necesario tra—— tar aquí. -- Tras esta rápida ojeada a los tipos de reactores realizados o en fase de realización, podemos aventurar la hipótesis de que la solución al problema de la correcta utilización de todas las reservas de combu tible nucleares ( comprendidos los materiales fértiles ) consistirá en un equilibrio entre los tres tipos de reactores indicados,, mientras se espera la aparición d un método económico -imprevisible por ahora- pa ra transformar el U23 en Pu y el Th en U233 fuera de los núcleos de los reactores- Consideracioneseconómicas Hasta principios de los años 60, las investigaciones, los es tudios y los experimentos efctuados en el campo de la producción de energía eléctrica mediante instalaciones nucleares, han ido dirigidos al logro de una competividadde estas instalaciones con las tradiciona les. Lograda esta condición, algunos años después han entrado en funcionamiento las primeras centrales capaces de proporcionar Kw “nuclea— res” al mismo costo que los “tradicionales” (Las centrales puestas en funcionamiento antes de dicho período no eran competitivas, pero te nían finalidades diversas según los paises. En Italia se trató de hacer experiencias, de ensayar la fiabilidad y otras características de las centrales nucleares.) - La primera vez que una instalación nuclear, en abierta y T7 Leal” competencia con instalaciones tradicionales, venció en una subasta pú blica para proporcionar una central eléctrica ( y la primera de estas competencias de la que se han hecho públicos los costos comparativos), fué la convocada por la T.VA. ( organismo correspondiente a nuestro E.N.E L. (1) en un estado de los EE.UU.) ron - En la tabla núm...8 se dan los datos de los costos, que conduje-a adjudicar la subasta a la empresa General Electric. Hay previstas dos unidades, cada una de 1.000 Mw de. potencia en tre los bornes del alternador. De hecho, las instalaciones nucleares son especialmente aptas para proporcionar potencias altísimas; y es en este sector en el que han logrado costos inferiores a los de las inst laciones tradicionales. Para potencias infériores a los 500.000 Kw, el. balance de costos aún es favorable a estas últimas. -. boca (i) Es interesante de mina “, para Organismo hacer ver que la central a carbón eliminar los costos de transporte nacional de la industria eléctrica ( N. se ofrecía a del combustible. del T.) •11 — — En el momento actual,los únicos reactores competitivos(para gran des potencias) son los de uranio enriquecido de tipo érmiCO”.ES,PUés, evidente que la solicitación de ese combustible, ya ahora muy elevada por el gran número de centrales encargadas en el mundo, aumentará en el próximo decenio y, especialmente, en los próximos años. Se comprende que ello no dejará de tóner consecuencias negativas en su precio. - —- Del exámen de las tablas presentadas resulta, también, que el de sarrollo exclusivo de los reactores de uranio enriquecido llevaría a un rápido agotamiento de las reservas mundiales de combustible8flUclear, de jando inutilizados a la mayor parte de ellos (ya que el U23 está liga do a la necesidad de transformarse en Pu.) • De aquí la necesidad de realizar cuanto antes los reactores velocés, en los qe, como hemos visto se puede “quema” Pu y, simul1anea-— ménte, tanfórmár con óptimos réridimientos el U3. en plutonio. Entre. tanto, el plutonio se ha convertido en un gran problema para todas las naciones en que hay instalados reactores nucleares, ya que, como hemos visto, todos los reactores producen Pu. TablaNúm. 8 Comparación res yacarbón de ( en los costos millares estimados de para CENTRAL General Electric . producción correspondientes ms talación ón electrónUCle. CENTRAL A CARBON NUCLEAR Westjn.a house .. eléctrica 600 20.909 83.940 82.422 109.938 61.908 61.110 40.158 8.503 9.451 13.070 • 25.283 . instalación 2.723 281 192.156 2.245 cación de producción de transmisión • ación de tranSmisión gener ales funcionamiento . cón strucción capit al . 700 600 23.152 y . de centrales d6lare ‘ de 0 •- -- 180.348 176.591 1.000 1.000 1.161 8.608 8.608 7.365 9.608 26.520 9.608 26.320 1.600 218.076 214.119 12.924 16.000 11.681 15.200 8.526 26.800 1.600 229.082 12.418 16.500 . total 2.129 116,9 1.989 121,2 2.206 117 - 12 - En espera de poderlo emplear, ese plutonio debe ser almacenado. Y aquí nace el problema porque, además de ser radioactivo, el plutonio’ es, también, altamente t6ico y su manipulación exige infinitos cuida dos y precauciones, que asguren, durante años, el hermetismo de los recipientes y la seguridadde los almacenes. — La auténtica gravedad del problema aparece cuando, tras haber completado las reservas deTingenios nucleares, las naciones proveedo—— ras de uranio dejan de reclamar el plutonio producido en los reactores. Es típico el caso de Italia, que restituía a Gran Bretaña el Pu produ cido en la central de Latina y que ahora, en cambio, se encuentra en la necesidad de ser ella misma quién lo conserve, con vistas a un em pleo futüro. -- - La implicación económica es evidente: hay que construir depósi—— tos seguros -y que continúen siendo seguros durante años- gastando di nero en- el almacenamiento de una sustancia que, por el momento, es mu tilízable y no tiene mercado. Y no es eso solo. Porque en el costo del Kw/h proporcionado por las centrales eiectronucle:ares, una buena parte de los ingresos eran los procedentes de la venta del plutonio producido, ingresos que han dejado de existir agravando el pasivo que han de sostener dichas cen trales. Se están realizando estudios para buscar la posibilidad de em plear el Pu en usos distintos de los reactores veloces. — — Perspectivasdelapropulsiónnavalmercantilnuclear. En una panorámica sobre los aspectos económicos del empleo de la energía nuclear, no puede dejarse de eçaminar el sorprendente fenómeno del fallido desarrollo de la propulsión naval nuclear. Sorprendente porque, en el fondo, los primeros reactores de potencia se destinaron al empleo flavlT —- El problema de un navío mercante es el de transportar la mayor cantidad de mercancías al menor precio posible. Una vez fijadas las ve locidades comercialmente más favorables ( y, en la actualidad, parece que la tendéncia es a valores comprendidos entre los 15 y los 20 nudos), la orientación es la de aumentar las cantidades transportadas aumentan do la capacidad de cada viaje. — Han aparecido los gigantescos petroleros de más de 300.ÓOO tone ladas de carga util y los navíos para cargas secas solo muy poco meno res. Las potencias instaladas en los elementos motores oscilan, como sabemos, alrededor de las pocas decenas de millares de caballos, con un esfuerzo notable de los motores Diesel para adaptarse a las exigen cias del mercado ( se han construido de 36.000 cv). Veamos lo que ofrece la propulsi6n naval nuclear: — - 13 — - — — independencia práctica del contacto largos periodos de tiempo; independencia del enlace entre con la tierra firme durante el aparato motor y la atmósfera. Parece claro que ninguno de estos factores tenga importancia de cisiva para in mercante. E efecto, hoy por hoy, el problema de estos navíos es, más bién, el de reducir las esperas ante los puertos satura dos. — Por lo demás, dichos navíos se verán siempre sujetos a la necesi— dad de arrimarse l muelle o al embarcadero para las operaciones de car gá y descarga. Y aún en el caso ( como ocurre en los barcos porta-”con tainersit) de que tales operaciones se puedan efectuar en pocas horas, este tiempo será siempre más que suficiente para el abastecimiento.de combustible. - - En cuanto a la posibilidad, de desligarse de la superficie del mar, es demasiado evidente lo lejos que eso está todavía, para que valga la pena hablar de ello. Hay que señalar otra ventaja ofrecida por el aparato motor : clear: el pocopeso del combustible. Pero está completamente neutraliza do por el mayor peso de la instalación y del casco ( al que se le exigen unas condiciones de fortaleza y compartimentación especialísimas y costosas ). Frentea las ventajas indicadas, el navío a propulsión nuclear presenta los siguientes graves incorivenientós, suficientes para hacer que los armadores lo descarten: — — • — costo inicial mucho mayor alto precio fuertemente -— que un navío convencional; del combustible, enriquecido; provocado por el empleo de uranio necesidad de instalar estaciones de servicio, oportunamente distribuidas por todo el globo, para las necesarias operaciones de sustitución del núcleo del reactor y para eventuales repara ciones; -— alto costo del personal dedicado al aparato motor, a causa del elevado grado de preparación básica y del adiestramiento preven tivo en tierra (conseguidos mediante frecuentes cursos en bases dotadas de simuladores, también muy caros — necesidad de someterse a normas muy costosas para el acceso a los puertos, con el consiguiente aumento de los costos de gestión. — - - En definitiva, por el momento no es previsible un desarrollo de la aplicación a la propulsión naval de la energía nuclear, en el campo mercantil. Ni siquiera cuando estén listos los reactores veloces, que serán adecuados para proporcionar potencias del orden del millón de Kw, es decir, inmensamente mayores de las necesarias en la aplicación. - Conclusiones. Alcanzada la competitividad con los reactores térmicos, la ener gía nuclear ha planteado las premisas para un desarrollo que, en los próximos decenios, alcanzará enormes proporciones. — Pero apenas alcanzada la competitividad, ya se ve en peligro por el costo del combustibleempleado; costo que enlos próximos años aumentará, tanto por la ley natural de la oferta y Ta demanda, como por la necesidad de construir nuevas plantas de enriquecimiento. La solu—— ción por la que se está trabajando consiste en la realización de reac tores veloces. Pero tal solución, aunque por un lado asegurarála corn petitividad de la energía nuclear con las otras fuentes, por otro no resolverá definitivamente el problema de la necesidad mundial de ener— gia., a causa de la limitación de los combustibles nucleares (incluido el tono). - La verdadera solució-i, por ahora, desgraciadamente, no realizable ni s±quiera en laboratorio, consiste en la fusión controlada de núcleos de elementos ligeros ( en la práctica, de isótopos del hidróge nos —— En cuanto a la contribución hecha por Italia a este gran esfuer zo por el control yel desarrollo de la energía niuclear, desdichadamen te hemos de admitir que es casi inexistente a nivel mundial y verdade ramente pequeña a nivel europeo. Tras un momento de entusiasmo inicial, correspondiente al perio do en que se encargaron las tres centrales electronucleares actualmen te en funcionamiento (Latina, Garellano, Trino Vercellese), hemos teni do un periodo de estancamiento. La tendencia a la dispersión de los re cursos ( común a otros sectores de la investigación científica ) y la falta de una clara política nuclear, unidas a las indecisiones de los organismos que actúan en el campo nuclear, han situado a Italia en una posición de tercer orden entre las naciones desarrolladas. En nuestra opinión, no obstante, Italia no puede resignarse con esta situación, porque tiene categoría de gran potencia económica: en tre las primeras del mundo, si se excluyen los dos colosos EE.UU. y —— URSS. Es, pués, necesario, salir de la situación actual y asumir el p pel que nos corresponde, no solo implantando nuevas centrales, sino ha ciendo una aportación concreta de investigaciones y realizaciones ori ginales. - 15 - El peligro es grave para los que se quedan retrasados: se trata de condenar a las generaciones futuras (además de la presente ) a la de pendencia del extranjero en lo que será la principal fuente de energía del futuro. — + + + CESEDEN EL RENDIMIENTO DE LOS RECURSOS DEDICADOS A LA DEFENSA (GRANDES DECISIONESY GESTION COTIDIANA) Por Nerre Louf, Interventor General de las FuerzasArmadas (Revue de Defense Natonale, noviembre 1970 Traducido por el Departamentode Información) AbrI, 1971 DE BOLETIN INFORMACION NUM. 54 - VII El Interventor General Louf, que se halla al frente del Departamento de Es tudios de la lntervencin General de los Ejércitos0 Desde el principio de la década de los sesenta ha preconizado la adopci6n de modernos métodos de decisi6n y gesti6n en los ejércitos. Ha organizado y dirigido durante varios años el ciclo anual de estudios”adminis fraci6npresupuestoU de la Escuela Superior de Guerra, En este artículo subraya las eshechas relaciones que existen entre el desarrollo de los méfodos de an6lisis racional de las grandes alternativas, en materia de sistemas de armamento o de organizacn de las fuerzas y sus apoyos, por una parte, y el perfecciona miento cualitativo de las gestiones cotidiano y sus intrumentos, por otra. ¿Cómo es posi ble pretender calcular los costes y el rendimiento de los que no es mas que un proyecto, cuando no es posible hacerlo con aquello que existe?. — El estudio de los métodos aplicados en los ejérctos de EstadosUnidos y de Sue cia conf irman esainterdependencia. Ella es, ademas, rica en preceptos tan importantes co mo éste: todo, sistema de Tnformaci6n, cual es el sistema contable por ejemplo, debe ser proyectado no solamente con el fin de satisfacer las exigencias de la autoridad central,— sino también, e incluso tal vez preferentemente, con miras a servir de instrumento de ges ti6n que intruya a los ejecutantes sobre sus propias funciones, * * La noción de rendimiento de los recursos dedicados a la preparación militar de la defensa, al igual que la de cualquiera otra acción ptblica,’ adquiere cada díd máscar ta de ciudadanía, La idea de que los objetivos nacionales deben ser alcanzados “sin con— sideracion de coste”, que los servicios publicos deben ser garantizados “a cualquier pre cio”, carece de sentido en el momento en que la multiplicidad de los objetivos y el rápi do crecimiento de las necesidades colectivas requieran soluciones cada vez mas penosas. — Partiendo de aquí comprenderemos más fácilmente que tratar de reducir el coste de obtención de un determinado resultado no quiere decir desatender las necesidades de los servicios vitales, ni los aspectos políticos, humanos y morales, dé los problemas plan -, e’ — teados,, sino por el contrario, de lo que se trato es de buscar el medio de satisfacer el m6 ximo de necesidades o de aspiraciones, de realizar mas desahogadamente la misión, de al canzar los ms ambiciosos objetivos. Con este espírituse irpiran, sin duda alguna, todas las actua les tentativas que tratan de proyectar los sistemas o las técnicas id6neas para mejorar la eficiencia del gasto p6blico. Se habla de racionalizaci6n de las alternativas presupuestarias, del sistema de programación del control de gesti6n, de la contabilidad analítica, de los estudios de cos te—eficacia, de an6lisis de sistema, etc. ... todo contando con la ¡nformtica. El profano se pierde un poco a través de estas ideas, ms a6n cuando las infor maciones que se le facilitan son diversas y, con frecuencia, confusas. Nosotros desearíamos, en este artículo, hacer ver como se ordenan o deberían or denarse estas tentativas, que esquem6ticamenie pueden situarse en dos planos aqul de la raci6nalizaci6n de las alternativas importantes cuyo efectos se cJe sarrollan a largo y medio plazo y son efectuadas al nivel m6s elevado, — y aquél de la gesti6n, es decir de las decisiones inmediatas o a corto o medio plazo tomadas cotidianamente en todos los niveles de la organización. Apoy6ndonos en estas consideraciones, haremosalgunas- indicaciones sobre los es fuerzos que en este aspecto han dedicado los ejércitos americanos, así como sobre las ex periencias en curso en los ejrcitosuecos0 * 1.- RÁCIONALIZACION * * DE LAS GRANDES ALTERNATIVAS En un artículo anterior (1) tratamos de bosquejar un cuadro sumario de las tcni— cas, que mediante un empleo juicioso permitiría conseguir una mayor racionalidad de las importantes alternativas, especialmente de las concernientes a la estructuraci6n de lasfuér zas y de los sistemas de armamentos. Se trata, en primer lugar, de estudios enfocados ha cia una evaluaci6n obletiva, y al propio tiempo, y en la mayor medida posible, hacia una evaluaci6n cuantitativa de la eficacia y el coste de los diversos métodos para lograr un determinado objetivo. A continuaci6n tratamos sobre el “programa”, instrumento de — (1) Racionalizaci6n de las alternativas militares, Septiembre 1969. Revue de Dfense Nationale, Agosto— - ¡uicio que permitiró sobreponerse a las interdependencias entre objetivos múltiples, a las coacciones financieras y frsicas, a la herencia de las decisiones pasadas, a las consecuen cias de las nuevos, y también tratamos sobre el “programa” como instrumento de acción— para la realización de estas tareas, - Los estudios sobre la evaluación comparativa de las diversas soluciones posibles deun determinado problema son.denominados estudios de coste—eficacia o de coste—redimiento, o anólisis de sistemas0 En realidad estas denominaciones estón afectadas por una cuestión. de nivel, los primeror términos se aplican generalmente a los estudios “puntuale’ (otro vocablo que se usa a veces) relativos a la comparación de medios simples dedicados a la obtención de un resultado elemental (cañón o arma para la destrucción de blindados), mientras que el último se aplica a la evaluación de sistemas complejos cuyo obletivo es cada dfa mós global (por ejemplo el sistema.de la defensa aérea, fuerza de intervención, etc.). Todos estos trabajos pertenecen, principalmente, al campo de la investigación ope rativa, sin embargo sobrepasan este campo en cuanto se despegan.del estudio demasiado puntual de mero comparación de medios, para elevarse al de los problemas de la asignación general de los recursos disponibles entre las diversas misiones u objetivos interdependien tes, que en conjunto, constituye la finalidad de los ejércitos. No obstante, en cualquier caso, incluso en los niveles mós elementales, se procurarón comparar eficacias operativas globales y costes totales de realización y no solamente rendimientos técnicos y costes de adquisición. . Mós, precisamente, ahr es donde se tropieza con la mayo4rdificultad. Para poder calcular las eficacias y los costes de realización preventivos hay que disponer de datos elementales formales,y de “modelos”, o lo que es lo mismo, de relaciones que permitan pa sor de los datos elementales a la evaluación global. A51 pues, refiriéndose a los costesen especial, es manifiesto que esto no es realizable sin un buen conocimiento de los datos elementales y de las estructuras de coste actuales, Cualquiera que esté tentado de hacer una gestión preventiva, simplemente sobre los gastos domésticos, sabe que la previsión no toma solidez y exactitud mósque en la medida en que la experiencia concreta permite co rregir y “ajustar”, de forma parecida a como se hacen en el tiro artillero, los primeros en sayos teórkos. Esto es móscomplicado al nivel de una vasta organización. Por consiguien te, si queremosconsiderar la posibilidad de “preveer” en términos de finalidades, de ele mentas org6nicos correspondientes a las misiones, a los “resultados” (“output”), es preci so efectuar el c6lculo en esos mismo términos. Entonces habró que operar una profunda tranformación ya qué..hoy dfa prevemos y calculamos (y con.frecuencia decidimos según las circunstancias) mós bien en términos de medios que de fines. — — — Las mismasobservaciones son aplicables a la otra parte del diptico: la eficacia. ¿Si la detérminación suficientemente precisa de los indices elementales de resultados, y a través de estos la obtención de evaluaciones globales de eficacia, no se cree posible, no se aplica a lo que existe1 como puede pretenderse hacerlo con aquello que no existe mós que en estado de proyecto? * — -4- Sin embargo, el programa es la pieza maestra en toda investigacién sobre la ra cionalizaci6n de las grandes alternativas. Este programa muestra, para los pr6ximos cinco o seis años (tiempo sobre el que es posible escrutar con una adecuada precisi6n) las consé cuencias de las decisiones adoptadas, e incluso las puramente implícitas de la simple reno vaci6n de un pasado algunas veces excesivamente remoto, Constituye en cierto modo un “referencial” o sistema de ejes cóordenados con “n” dimensiones. Los tres primeros, de es tos “n” ejes, registran el tiempo, los productos con que se cuenta (es decir los elementos de potencial militar producidos, o simplemente mantenidos en servicio), y los recursos fi nancieros que se van a preveer. Los demássirven para describir la evoluci6n de ciertas categorías de recursos que no pueden considerarse desde el punto de vista de su coste. To les recursos son aquellos que poseen una gran inercia propia y están sujetos a presiones pecíficas distintas a las meramente financieras: este es particularmente el caso de los efec tivos, especialmente la plantilla de mandos, que no pueden ajustarse inmediatamente a las fluctuaciones violentas y por consiguiente su evoluci6n no puede programarse solamente en términos monetarios. — Partiendo de un plan prospectivo con un horizonte de diez años como mínimo que fije los objetivos que se deseen investigar, así como los anc5lisis y estudios de coste y efi cacia, el programa se desvía o modifica según una especie de creación confTnua presen tando en cada instante un estado de todo aquello que ha sido reconocido como posible y— decidido a sujetar a los objetivos de dicho plan. Es manifiesto que si bien es verdad que los estudios m6s elementales, ms puntua les, de coste—eficacia pueden rigurosamente hacer abstraccin del conjunto en que estén incluidos los medibs que se trata de comparar, no podemosdecir lo mismo con respecto al an6lísis de importantes sistemas de armas o de fuerzas, y que desatender el condicionamien to de su insercin en este conjunto sería completamente inadmisible. El programa, tal co mo aquí se entiende, debe permitir estudici y determinar, sobre los “n” ejes que lo cons tituyen, las condiciones y las consecuencias de dicha Tnserci6n, Es pues, y ante todo, un indispenstible instrumento de estudio. Sin embargo, el programa deberser también un instrumento de acci6n. Define de forma precisa el calendario de los objetivos y de los recursos que, año por año, deber6n— ser dedicados a cada uno de aquellos. Estas normas no son ciertamente inmutables ya que el programa evoluciona sin cesar, no obstante, cada una de sus tareas anuales adquiere cada vez mc5sfirmeza a medida que se.acerca su momento, o por asi decirlo se solidifico en el presupuesto del año venidero. — Construir un programa que respondo a estos requisitos no es tarea fácil, En pri— mer lugar, nos encontramos con el problema de los costes preventivos ya aludidos: la soli dez y la precisión del “referencial” en el que se quiere relacionar la incidencia de las alternativas, depende de la solidez y precisi6n con que podamosevaluar estos costes tan to en lo que se refiere a la adqusici6n de armamento como a su puesta a punto, a la inver — sión y al funcionamiento. Por otra parte, este”referencial” no es aceptable masque. en caso de ser din6mico, y no estóHco, cuando sigue continuamente a una realidad esencial mente móvil, lo que supone que esté enteramente ligado a dicha realidad, la cuol no es otra que la de las tareas, los incidentes, los resultados de la labor cotidiana, la “gestión’ o si se prefiere del “pilotaje” continuo de vasto ensamblaje cuya situación pretende des cribir y proyectar en el futuro. * II. * * EL: PERFECCIONAMIENTO DE LA GESTION Para emprender este cometido cabría pensar que bastaría con un sistema de in formación adecuado. Este sistema proporcionaría los datos de gestión necesarios, los “tra taría” para exponerlos en la propia estructura del programa. Sería preciso, en resumidas. cuentas, habilitar una contabilidad analítica (algunos la llaman “contabilidad funcional’ que permitiera, sin cambiar las normasadministrativas y presupuestaria en vigor, reclasifl carpor finalidad, por elemento de programa (generalmente unidad o célula orgónica) los gastos que la contabilidad administrativa, conforme a su naturaleza, relaciona por capítu los. Así se obtendrían los datos fundamentales sobre los costes necesarios para los estudks de coste—eficacia, al mismo tiempo que los costes reales de los elementos del programa. Si de lo que se trata en realidad es de establecer las basesde la racionalización de las grandes alternativas a niveles superiores, este método no parece satisfactorio. En primer lugar, todo sistema contable que no se precia de ser un instrumento de gestión est mado por sus ejecutantes, ni de fuente de conocimientos para la alta dirección, corre el riesgo de ser tachado de papeleo inútfl. Así ha ocurrido algunas veces, en las empre sas privadas o• públicas, con ciertas contabilidades analíticas de explotación, conce bidas únicamente- con miras al simple conocimiento de los precios de fabricación, que afinan demasiado sus anólisis y sus contratos, incompredidas e incapacitadas por susin genieros y ¡efes de taller, mantenidas a base de datos móso menos exactos, propensas a convertirse en un claro ¡uego de contables. Recordemosasí mismo los sinsabores, no tan remotos, que causó la gestión mecanizada en ciertos sectores de las fuerzas armadas. En la medida en que la información obtenida no sea útil a los ejecutantes, o estos no lo apre cien como tal, la aportación de datos aI.sistema delaró mucho que desear. E,.segundo lu gar, un sistema de inFormación no sería gratuito. Habría que pagar el precio adicional de las diversas contabilidades administrativas tradicionales que permanecieran, intactas y que pesarían también con todas sus fuerzas; para evitar esto podríamos contentarnos con los sistemas anticuados que utilizarón en la mayor medida posible los datos ya existentes: te niendo en cuenta la observación hecha con anteroridad, correríamos el riesgo entonces de obtener una información, no de bajo valor sino mós bien de valor nulo. — — Por óltimo, el establecimiento de un sistema de información sobre los costes no es suficiente, Tambión se precisa el esclarecimiento de los resultados, de la eficacia. ¿Se creeró paralelamente un sistema de información de aprovechamiento casi exclusivo para el escalón superior y con miras ci las decisiones centralizadas? ¿Tal sistema, por el contrario, no debería permitir la confrontación de resultados y costes en cada uno de los niveles bósicos de ejecución?, — — Todas estas observaciones nos inducen a pensar que la simple inquietud por la ra cionalización de las alternativas en el escalón central desemboca necesariamente en las— preocupac iones de gestión. Aparte de esto, ciertas definiciones que los iniciados en estas cuestiones dan sobre el “sistema 3PB” (1), en el cual estón implicados los ejércitos, o sobre el RCB (2), con el cual trabajan las administraciones civiles, son excesivamente extensas y engloban los dos aspectos que nosotros hemosdistribuido aquí. No vamos a discutir esta cuestión de definición: lo fundamental es dejar sentado que, englobados o no en un mis mo y solo concepto, estos dos aspectos son completamente interdependientes. M65, es menester ir mós lelos y pregunfarse si el funcionamiento, la gestión cotí diana y sus intrumentos de información, no merecen un interés por ellos mismosy no sola mente como sostén y prolongación de las tócnicas de racionalización de las decisionescen tra 1izadas, Al parecer, en la administración militar francesa se presta bastante poca atención a esto. Segón una gran parte de los expertos, es preciso fiscalizar y perfeccionar el campo de las grandes alternativas e inversiones, Ahí es donde pueden producirse unos sensibles aumentos o disminuciones en el rendimiento de los créditos concedidos, Poco habría que temer y esperar, por el contrario, en el terreno del funcionamiento. Todo marcharó bien evitando, mediante los controles adecuados, los abusos y las falsas maniobras. — Sin embargo, otra corriente de opinión cree en la posibilidad de una apreciable reducción de los costes de funcionamiento y v en ello la solución por la cual podría dedi carse, sobre una base presupuestaria determinada, una mayor proporción a la moderniza ción del equipo. Tales mejoras son investigadas, sobre todo en determinados sectores, en razón a que ofrecen mayores posibilidades a la automatización, entre los cuales el ms explorado es el de la gestión de existencias. Los resultados son ciertamente satisfactorios, En general son difíciles de estimar y no siempre evidencian lo compensación del coste de la operación. Finalmente, cuando las “economías” no son solamente anheladas, sino con sideradas absolutamente necesarias, se efectóa una presión mós o menos intensa sobre los medios por las que ellas se obtienen. — (1) “Plan ¡Fication—programation—prparation du budget” (Planif ¡cac ¡ón—programac¡ón—pre paración del presupuesto), homólogo del PPBS americano. (2) “Racionalización de las alternativas presupuestoras”, Algunós hablan ya de ‘Raciono lización de las alternativas administrativas”, precisamente, sin duda, para dar mayor extensón a este concepto y para indicar la inclusión de la gestión. 7 Nos inclinaríamos por consiguiente a dar la razón a la primera tendencia, pero solamente en la medida en que reconoce y consiente sujetarse a una administración cen tralizada que gobierne mós por los medios que por los objetivos. En una administración tal, los ejecutantes menos responsablesson fundamentalmente los demandantes de medios. Estos medos alcanzados tienden por otra parte a perpetuarse, a “insttucionalizarse”. Mu chas veces no hay mósacción posible que la de frenar la demanda de medios, y esta es de efectos muy limitados, o cortar por lo sano. — Pero precisamente cuando hablamos de perfeccionamiento de la gestión, de lo que se trata es de echar abajo esta estructuración y sustituirla por un sistema en que, en todos los niveles de la jerarquía yen todas las ramas de la administración militar, cada uno sea plenamente responsable del trabajo que tiene que efectuar y del coste al que lo realiza: de demandante de medios, o bien de administrador de cierto capítulo particular de créditos o de determinada clase de recursos, estó llamado a convertirse entonces en “manager”. Observemos el espíritu que inspira a todas las modernas teorías sobre la gestión de las grandes organizaciones. Seg6n que acentuemos tal o cual aspecto de estas teorías, hablaremos de “dirección participativa mediante objetivos”, de “control de gestión” (1), de “gestión preventiva”, de “descentralización”, de “gestión mediante excepción” (2). Los conceptos y sus variantes no se acabarían: continuamente nacen otros nuevos. Una forma de aplicar estos conceptos en la administración de las fuerzas arma— das fué presentada, a grandes rasgos, en el año 1957 (3) y el interventor militar Lestiau precisó y completó este boceto en otro artículo ya publicado (4). Sin retroceder, en detalle, sobre estas descripciones recordaremos las caracteris ticas fundamentales de aquél esquema: (1) Se habla algina veces de “control presupuestario” de “gestión presupuestaria”, que riendo hacer hincapié sobre la existencia de presupuestosa nivel de cada centro de responsabilidad de la organización. Sin embargo, en la administración p6blica, estos conceptos corren el riesgo de ser tomados inmediatamente después con un sentido in verso al que pretenden significar. — (2) Este concepto significa que la alta dirección no entra en el detalle de la gestión mós cuando se revelan notables diferencias entre el programa de acción y el presupuesto de un centro de responsabilidad y los resultados y costes que este ha registrado realmente. (3) “Gestión dinómica y estructuras administrativas de las fuerzas armadas” (Revue de Defense Naional julio 1957). (4) “Las fuerzas armadas y su administración” de 1969). (Revue de Defense Nationale de marzo —8- a), Habríaque distinguir netamente dos grandes tipos de responsabilidad: la res ponsabilidad directa de la preparación y puesta a punto de las fuerzas, y la responsabilidad de las actividades anexas, es decir relativas a la compra,— fabricación, almacenamiento, distribución y entretenimiento de los recur sos que consumen aquellas fuerzas, b), El primer aspecto, aquel de las fuerzas, se caracteriza precisamente por que consume pero no produce, por regla general. Al menos, no se produce. otra cosa que la capacidad, el potencial de defensa que garantiza la uni dad, que es, en cierto modo, su propio producto final., Los centros de res ponsabilidad de este sector tratarían de fijarse los objetivos, los programas de acción, los tipos de resultados, que especifican este producto final, y los presupuestos globales de funcionamiento que les permitieran gestionar se, con una cierta libertad en la elección de lo recursos necesarios para la elecución de su programa. Estos recursos serían adquiridos, bien dirigindó sea los servicios de las actividades de los ejercitos (entonces dejarían de— ser gratuitos como lo son frecuentemente en la actualidad), o, en ciertos casos, a través de empresasu otros servicios piblicos, — De esta forma sería captado un coste de funcionamiento real y completo que podría compararse con las previsiones o las normas., Ello suministraría a los analistas y planificadores los datos bósicos respecto al coste de aplicación. Pero, sobre todo, la dimensión económica de la misión ya no estaría diso ciado de los demós componentes, el ¡efe de centro de responsabilidad ten dría conocimiento y sería responsable de un conjunto “resultados—coste”. c). Por el contrario, las actividades anexas (denominadas agencias, para distin guirlas de las unidades o elementos de servicio de las fuerzas operativas) producirón los bienes y servicio que consume y les pagan los centros de res ponsabilidad de las fuerzas. Aquí, por consiguiente, la gestión se apoya ría en una cuenta de explotación, que debería equilibrar financieramente los cargos mediante estos productos., Se asemelaría, a reserva de inevita — — bies convenios administrativos militares, cuyas consecuencias financieras deberían aclemósser calculados, a una gestión empresarial. — * Evidentemente, no es posible determinar cuantitativamente, “a priori”, el au mento de rendimiento que podría conseguir un sistema de gestión de este tipo (como tam poco, el que podría derivarse de una efectiva racionalización de las grandes alternati vas). La importancia de estas ventajas depende principalmente de la forma en que el sis -9- tema sea aplicado, y su eFicacia estaría sujeto a las reglas del juegos parejas con la Ii bertad de acción real y confianza concedida a los “manager” existir6 una responsabilH dad efectivamente puesta en luego, una verificación de datos financieros y, en particu lar, de precios y tarifas, una estrecha correspondencia entre poder de decisión y respon sabilida de un presupuesto, de tal manero que cada una asuma plenamente las consecuen cias de su alternativa0 Se observar6, por otra parte, que el sistema condiciona evdenté mente todaposibilidad deapreciación de tales incrementos en la eficacia, puesto que crea los, instrumentos de medida0 Cabe esperar, en conjunto, una mayór claridad prin c ipalmente. Todas estasreflexiones conducen, en definitiva, a las siguientes conclusiones: Si bienel establecimiento de unsistemade dirección y de gestión medianteob jetivospuede contemplarse independientemente del empleo de técnicas de racionaliza ción de lasgrandesalternativas, la recíproca no es cierta,Estastcnicascarecende va br sinoson sustentadas por un sistema de información sólido, sobre resultados y costes. Ya que parecedifícil de aceptarel costeprohibitivo de talsistema de información mós avanzado que el que sostiene la gestión actual, es menester que aquél demuestre ser al mismo tiempo el instrumento de una gestión m6s eficaz. Esto pues, no solamente le just fica en cierto sentido sino que le da ademós la solidez de que carecería si estuviera des’ ligado de las responsabilidades de la acción cotidiana, Estas consideraciones son forzo samente un poco teóricas. Sin embargo, la experiencia empieza a darles una cierta con firmoción. Así, los trabajos realizados en los últimos años encaminados a la aplicación del “sistema 3PB” en las fuerzas armadas, revelan, cada yz mós claramente, lasdificul tades de esta empresaen el marco de la gestión actual y que los instrumento que esta ofrece, especialmente aquellos de la contabilidad administrativa, son inadecuados. Otra confirmación adicionalpuede obtenerse al examinarel curso de los avan ces americanos en este campo, así como, en una escala diferente, remitiéndonos a los resultados obtenidos en las fuerzas ormadas suecas en los últimos siete años. * III.- * * LECCIONES A TOMAR DE LAS EXPRiENCIAS AMERICANA ‘Y SUECA. En Francia algunas veces, se ha cometido un error de apreciación al considerar el objetodel “Planning—programmingbudgeting system”(PPBS)que es,parael departa mento de defensade losEstados Unidos,el principal instrumento de la racionalización de las grandes decisiones y de la asignación general de los recursos. Este error consiste en creer que este sistema ha brotado en 1961, en un terreno virgen, en un tipo de gestión comparable a la de nuestras fuerzas armadas y balo un régimen y unas estructuras presu puestorias sernelantes o las nuestras, Jo - En realidad, después cJela 2g guerra mundial, la administracn de las fuerzas armados de los EstadosUnidos ha sufrido una considerable transformaci6n, El impulso lo han dado las dos comisiones Hoover (entre 1947 y 1955) que la han orientado en este sentido: — Presupuestosapuntados hacia los objetivos a alcanzar, los resultados a obte ner, y no b6sicamene sobre los medios autorizados. Sistemas de gestión y de contabilidad coherentes con estos presupuestos, que aseguren el control de los costes y no solamente el de la regularidad presu puestaria, Estas orientaciones han sido llevadas a la próctica de forma ms o menos inten siva seg6n los ejércitos. Su aplicacién ha sido rns rpida y ha avanzado ms en el Cuer po de Marines (desde 1953) y en Ejército de Tierra que, en 1956, creó su “Sistema de Administración del Mando” (ACMS: Army Command Managemeni- system). No obstante, con caracter general, los presupuestosde las fuerzas armados americanas, independien temente de la entrada en vigor’ del PPBS, se elaboran actualmente atendiendo mósa las finalidades que a la naturaleza de los fondos, Es muy importante hacer constar, compa— rndolo con nuestra propia estructura presupuestaria, que todo el funcionamiento de un ejército —dejandoaparte sus reservas-’ es sufragado por dos caprtu los (“asignaciones”) solamente: “personal militar’ y “funcionamiento y entretenimiento”. Estosson divididos1, por lo menos, en una decena de “artrculos” (“programas del presupuesto” o “actividades del presupuesto”) que corresponden, como svs nombres indican, m6sa programas de oc— cón o a funciones que a clases de fondos. Esta estrucui-ura no es ciertamente idéntica a la que tendrá el programa PPBSde los próximos 5 años, sin embargo, la diferencia no es radical y la una es adaptable a la otra. — — Entre tanto, 5i desde el principio el PPBSencontró en el sistema de gestión el mrnirno de datos que le eran indispensable y una orientación general coherente con sus propias metas, no ha tenido por menos que entrañar una nueva y muy rópida evolución, La Marina que estaba al parecer un poco apartada del movimiento provocado por las co misiones Hoover, sintió desde 1961 la necesidad de montar muy rópidarnente, para res ponder a las exigencias del PPBS, un ‘Sisterna de Ínformación de Coste de la Marina” (Navy Cost Jnformations System), En cada ejército deben operarse ajustes reciprocos en tre la estructura del programa de 5 años y la estructura interna de gestión. El Ejército del Aire, por otra parte, lanza en 1963 un sistema de “administración” muy avanzado con el nombre de proyecto FiRM, Por fin a partir de ‘1965con el impulso de M0Antho— ny, subsecretario de defensa, corno” interventor” se elabora, experimento y establece, con el nombre “proyecto PRIME!, una reforma que es en suma la madurez, generaliza ción y coronación de toda la labor desarrollada siguiendo las orientaciones de las comL sones Hoover. Este proyecto tent como objetivos (cuya realización parece haber sido lograda en cierta medida): — — — — — — 11 — Una mayor coherencia entre los ejércitos en lo que respecto a la definición de los costes de funcionamiento y su. distinción de los costes de inversión; Una ligazón mós estreña entre la estructura de “gerencia” fundamento Imen— te orgónica y la estructura del programa de cinco años, de tal forma que los datos puedan ser utilizados mósfócilmente aún por una y otra estructura, tan fo en los fines de la gestión coHdiana “en conjunto” como en las necesidades del PPBS; Finalmente, a nivel de toda unidad u organismo en que el jefe pueda tener una notable influencia sobre el rend.imiento de los recursos consumidos, la incautación de la totalidad de los costes de funcionamiento bajo la responsa bilidad del comandante de la unidad, relacionado con el presupuesto de fun cionamiento que le ha sido concedido para realizar un programa de acción, En las enseñanzas extraidas de las experiencias y realizaciones de los últimos— 20 años se exalta la idea de que computar’ los costes sin encauzarlos bajo la responsabili dad del ¡efe del organismo que incurre en ellos tiende rúpdamente hacia una acumulación de papeleo no rentabler 1J1misma idea exprimida aún mós cuando los elecutantes deben nutrir dos sistemas de información paralelos, uno con respónsabilidad administrativa y el otro sin ella, no tardón en llegar a desinteresarse por este último, el cual corre el riesgo de convertirse en un instrumento de escasa utilidad. Esto explica una de las directrices de los autores del proyecto PRIME al preveer que los detalles de su aplicación, especial mente aquellos del sistema de información contable, deben establecerse siguiendo el cri ferio esencial de la utilidad de la información para el jefe local, el manager “en la prc tica”. Merece la pena meditar sobre ello, ya que la tentación de elaborar los procesos de recogida y tratamiento de la información, principalmente, cuando no únicamente, en función de las exigencias de la autoridad central, es muy grande. En Suecia, el Ministrio de Defensa se halla comprometido desde 1963 en in vestigaciones y experimentos encaminados a realizar una programación general de la uti lización de los recursos por períodos constantes de 5 años. Sin embargo, al seguir en ello la concepción general aplicada por toda la Administración sueca (1), el Ministerio cita do quiere comenzar la obra por la bpse, es decir por los procedimientos de gestión. Co mo en los EstadosUnidos, el programa general de 5 años debe.tablecer un puente entre un plan a largo plazo de orientación fundamentalmente político—militar por un lado, y las obligaciones financieras del presupuesto anual y de su ejecución por otro, No obs tante, la primera preocupación, al menos cronológicamente, es garantizar la connexión del presupuesto y de la gestión. El programa se elabora, por consiguiente, de acuerdo— (1) Referido al artículo de S.L lversson,.dkector de control financiero en el Departa— mento Nacional de Cuentas, en la revista “Informatique et gestión” de 4 de enero de 1969. — 12 - con las estructuras efectivas de las fuerzas armadas, debiendo acoplarse perfectamente a un presupuesto que por si mismo se desarrollarra segin esas propias estructuras org6nicas, por medio de los presupuestosde funcionamiento otorgados a los responsablesde los diferentes niveles del mando (Regi6n, Regimiento, por ejemplo). Las experiencias en curso parecen encontrarse a punto de desembocar en una puesta en vigor de un proyecto de ley con estos fines, ya que el gobierno sueco decidi6 en abril tltimo someterlo a la aprobación del Parlamento, — Con dÇerencias con respecto a la stuaci6n actual y refiréndose por ejemplo al Ejército de Tierra, la filosofra del sistema que se perfila a través de éstas experiencias muy esquernticamenfe es la siguiente: — — — En el sistema actual, al igual que en el ejército francés, las unidades reci ben para su funcionamiento los créditos procedentes de un centenar de trtulos presupuestarios especificados seg6n la naturaleza del gasto (material, inten dencia, sanidad, construcciones, etc. . ..). El importe de estos créditos se calcula fundamentalmente a nivel de Estado Mayor del Ejército y de los Ser vicios Centrales. En el sistema experimentado de los regimientos son considerados, en tiempo de paz, como “m&luinas productoras” de unidades operativas, Los 1’productos” que les son demandados, son determinados en relaciones de “progrom&’ con las especificaciones mds claras posibles (1), Los comandantes de regimento calculan los recursos necesarios para realizar su programa. Estos presupuestos son reunidos y revisados por la Región Militar y el Ejército de Tierra. Si el total general es insuficiente, las misiones y los presupuestosson reducidos pa ralelamente, Son expresados mediante porcentajes de realizaci6n. Su estruc tura no compromete estrechamente a la autoridad responsable de un presupues to de funcionamiento: ésta puede, de acuerdo con la evolucién de las circuns tancias y las necesidades: transferir recursos no solamente de un medio a otro (por ejemplo aumenlar las mun¡cionesydisminuirel uso de vehrculos) sino tam bién, seg6n parece, de una misién parcial a otra. Naturalmente, una contabi lidad adecuada garantiza el control de costes, al mismo tiempo que organiza paralelamente un control (“inventario”) de resultados. Los responsables suecos parecen, pues, reconocer que seré sélidamenfe cimento do un programa de tipo orgánico y que la gestián cotidiana les sustentará, le rectificará, le daré vida y aprehensién de la realidad sin que presente gran dificultad ajustarle al plan prospectivo de la defensa, o dicho de otra manerasin que sea difícil hacerle jugar — (1) Este es el sistema T,O,E.M, (TakfiskQrganjsatoriskEconomjsk cificaciones tácticas, orgánicas y econámicas). malsatfníng: espe — 13 — el papel de ‘referenca”, descrito al principio, para la introducci6n de las grandes deci siones, en un esfuerzo por la racionalizaci6n de aquellas alternativas. En este intento por comparar los diversos caminos y técnicas, generalmente to— davfa en vfas de experimentaci6n, que tratan de incrementar el rendimiento de los recur sos destinados a la defensa, asr como por la obser’vaci6n de las experiencias extranjeras mejor conocidas, deducimos en definitiva una estrecha interdependencia entre dos gran des dominios: el de la racionalizaci6n de las grandes alternativas y el de la gesti6n coti diana, entre los cuales la”programaci6n” pretende serVir de enlace. Sin embargo, pare ce al mismo tiempo que no se les puede considerar como simtricoso paralelos: en rea lidad, un adecuado sistema de gesti6n es la base de todo el conlunto, Ciertamente hay que empezar tallando las piedras de la bóveda y esta es la tarea prendida en Francia durante los dos años siguientes a la entrada en vigor “sistema 3PB”. Es indispensable tam bin montar los pilares y por ello el Ministerio de Defensa, consciente de ello, trabaja activamente para determinar el plan de esta obra. .Vp4 e& • — t9&4z ¡ueM4uJJ?vf 54 /z4*mae TUN/CuS • EL SiSTEMA NORTEAMERIcANODE DEFENSA “SALEQÚARD” CONTRA MIS/LES 9AL/ST/COS ESTRATEGICOS __________ ix CESEDEN• EL SISTEMA NORTEAMERICANO DE DEFENSA “SAFEGUARD” (Del Bo1etn E. M. del Abril, 1971 de DifuSi6fl del Aire núm. 351) DE INFORMACION BOLETIN NUM. 54 - IX Cuando se haya terminado el despliegue del sistema Safeguard, cuya iniciación en la fase 1 ha sido aprobada y financiada reciente mente, quedará asegurada la supervivencia de una parte importante de las fuerzas de disuasión de los Estados Unidos, en caso de ata-que con misiles provistos de cabezas múltiples, protegida la pobla ción norteamericana contra un ataque con misiles relativamente rudi inentarios y se dispondrá de un sistema de protección contra cualquier ataque por sorpresa. Este sistema extremadamente costoso está compuesto por elementos estudiados dentro del marco del programa Ni ke X: equipos de radar PAR y MSR, misiles antimisiles Spartan y Sprint, sobre cuyas características principales y rendimiento se ha ce una breve exposición. — - - Hace mucho tiempo que los Estados Unidos se preocupan por su defensa contra los misiles balísticos estratégicos. Desde 1956, el Ejército de los EE.UU., que ha tenido a su cargo tal defensa, lleva gastados con destino al sistema de armas antimisiles (Nike Zeus, Ni ke x, Sentinel, Safeguard, sucesivamente) 5.800 millones de dóla res, a los cuales conviene sumar los mil millones que el ARPA (Ser vicio de Proyectos de Investigación Avanzados) ha dedicado a estudios y trabajos de investigación sobre los antimisiles. Este costo so esfuerzo deberá continuar a un ritmo todavía más rápido, en el curso de los próximos años, como consecuencia de la decisión, toma da en 1969, de implantar de forma efectiva el sistema Safeguard. Empleo del sistema Safeguard. El sistema norteamericano Safeguard, de defensa contra los mi siles estratégicos, concebido bajo la dirección de la Western Elec tric, estará constituído por elementos que ya fueron estudiados den tro del marco del programa Nike X: equipos de radar PAR, para la de tección de misiles hostiles y su seguimiento a gran distancia; equi pos de radar MSI, para el seguimiento y guía teledirigida de los mi siles antimisiles; misiles antimisiles de largo y corto alcance. Spartan y Sprint, respectivamente. Con estos elementos será posible disponer ya sea de una defensa de zona o bien de una defensa termi nal, e incluso de una combinación de las dos. - Una vez que los aparatos de radar PAR hayan efectuado la detección, a gran distancia de los límites territoriales, la defensa de zona quedará garantizada por las instalaciones de misiles Spar- —)— tan, asociadas a equipos de radar de guía MSR, ya que cada punto de misiles será capaz de interceptar, en una zona de varios cien tos de kilómetros de radio, los misiles balísticos intercontinen tales, los misiles balísticos lanzados desde submarinos y, posi blemente, las bombas orbitales que los norteamericanos llaman FOBS (Fractional Orbital Bombardement System). — pues den como por res ción pos Tal defensa tiene, sin embargo, una serie de limitaciones, las interceptaciones efectuadas fuera de la atmósfera pue—— haber sido confundidas mediante señuelos muy ligeros, tales cintas metálicas anti—radar o balones metálicos, esparcidos los misiles hostiles. Además, la explosión de cargas nuclea muy potentes, fuera de la atmósfera, puede originar la forma de zonas de gas ionizadas, capaces de inutilizar los equi—— de radar PAR durante varias decenas de segundos. Por consiguiente, la defensa de zona está destinada princi palmente a hacer frente a un ataque poco denso a base de misiles que carezcan de señuelos eficaces, pero, a pesar de todo, podrá desempeñar un papel que no habrá que menospreciar en caso deun ataque más evolucionado dirigido contra las fuerzas de disuasión. Sin embargo, la defensa de los puntos sensibles continua siendo parte de la misión de la defensa terminal, que pone en ac ción a los misiles Sprint y a los equipos de radar MSR. Este sis tema de defensa permite esperar a que los señuelos hayan quedado frenados o destruidos por la atmósfera antes de lanzar los dispo sitivos interceptadores. La discrimanción corre a cargo del equi po de radar MSR y la interceptación la realizan los misiles Sprint. Por ser muy corto el tiempo de respuesta de que se dispo. ne, los puntos de lanzamiento y el radar deben estar situados en las proximidades del objeto a defender. — —- Por otra parte, al igual que la defensa de zona puede pro ceder a la defensa terminal de los puntos sensibles, la defensa terminal puede utilizarse también para proteger los aparatos de radar PAR, que además están encargados de alertar a los equipos de radar MSR. Programa Safeguard. En una primera fase, se ha decidido implantar el sistema Safeguard únicamente en Malmstrom, lugar en que se halla instala da la primera escuadra de misiles balísticos intercontinentales, formada por 50 Minuteman 1 y 150 Mínuteman 2, y en Grand Forks, donde se encuentran estacionados 150 Minuteman 2, pertenecientes a la segunda escuadra de misiles. Esta primera fase deberá estar — — terminada para 1974; tiene como principal objetivo el proteger una parte de la fuerza de misiles Minuteman contra los ataques soviéticos realizados, especialmente, a base de misiles balísti cos intercontinentales, de cabeza múltiple, SS—9 Scarp, pero tam bién el poner rápidamente a prueba, dentro de un sistema operati yo, el conjunto de los distintos elementos que constituyen el sistema Safeguard. - - —- El posterior despliegue del sistema será sometido a revi—sión todos los años, para ajustarlo a la evolución de la amenaza. De este modo podrá decidirse la implantación de nuevas baterías de misiles antimisiles destinadas: A proteger dos bases suplementarias de misiles Minuteman y el centro de mando de Washington y a mejorar la defensa de las dos primeras bases de Minuteman, en el caso de que la Unión So-— viética continúe con la puesta en marcha de una fuerza estratégi ca susceptible de destruir los ingenios citados (fase 2A) - A proteger las bases de bombarderos del SAC (Strategic Air Command) , si se confirmase la amenaza que pueden representar los misiles balísticos soviéticos lanzados desde submarinos (fa— se2B); - - A garantizar una defensa de zona ante la fabricación,por parte de China, de misiles balísticos intercontinentales relati vamente rudimentarios (fase 2C). - En los dos últimos casos, el número de instalaciones de mi siles antimisiles a instalar sería de doce, comprendidas las dos instalaciones de la fase 1; las fases 2B y 2C sólo se diferencian en el número de aparatos de radar ymisiles antimisiles que hay que poner en servicio. — La realización de la fase 2, completa, comprenderá: Cuatro instalaciones completas, situadas en los vértices del cuadrilátero norteamericano, formadas cada una por un equipo de radar PAR de dos caras, un radar MSR, misiles Sprint y misi les Spartan. - Tres instalaciones para completar la defensa de la fron tera septentrional de los Estados Unidos, compuesta cada una por un radar PAR de una cara, un radar MSR y misiles Sprint y Spartan. - Dos instalaciones para la defensa de las costas oriental y occidental y otras dos en el interior del país, para proteger las bases de Minuteman de las escuadras cuarta y quinta; cada - — —4— instalación Spartan. estará compuesta por un radar MSR y misiles Sprint y Una instalación ubicada en Tejas, destinada a proporcio una cierta defensa de zona contra un ataque iniciado por el y a proteger determinadas bases del SAC, - nar Sur El número de misiles Sprint y Spartan que deberá equipar cada instalación no ha sido dado a conocer oficialmente todavía. El Ministro de Defensa ha declarado, sin embargo, que en el caso de un ataque soviético a los 1.000 silos de Mínuteman por medio de 420 misiles SS-9 Sarp, armados cada uno de tres cabezas de 5 Mt. cada una, el número de Minuteman que sobrevivirían al ataque pasaría de 50 a 100-150 con una defensa de fase 1 y a 250-300 con una defensa de fase 1 ms una fase 2A. Por tanto, parece que el número de misiles antimisij.es a instalar será por lo menos de 100 en el curso de la fase 1 y de 250 comprendidas la fase 1 y la fase 2A, - — — Una vez implantado, el sistema Safeguard deberá proteger a las fuerzas de disuasión de los Estados Unidos contra un ataque lanzado por la Unión Soviética, preservar a la población nortea mericana de un ataque del tipo del que podría realizar la Repú—— blica Popular China en el curso del período comprendido entre 1970 y 1980 y, finalmente, detener cualquier ataque accidental,— cualquiera que sea su procedencia. —— Coste del programa Safeguard. La fase 1 del programa, que cubre la instalación necesaria en los dos primeros lugares elegidos y la adquisición de los te rrenos que se precisan para las otras diez instalaciones, ascen der a los 2.100 millones de dólares. La fase 2A, que consiste en la instalación de dos nuevos centros de defensa de los Minute man, la instalación necesaria para la defensa del centro de man do de;Washington y en completar la dotación de misiles antimisi— les de las dos primeras instalaciones, costaré 1.300 millones de dólares mss. La terminación de la fase 2, es decir, la instala—— ción de los siete centros de defensa restantes exigirá un presu puesto adicional de 3.200 millones de dólares. En cuanto a la po sible implantación de instalaciones complementarias en Hawai y Alaska, podría suponer de 450 a 500 millones de dólares. - - Las cifras facilitadas no incluyen los gastos de estudio,investigación y pruebas efectuados durante el período de desplie gue, unos 2.500 millones de dólares, ni los gastos de la AEC (Co misión de Energía Atómica), que importan 1.200 millones de dó1a res, de los cuales sólo 200 corresponden al coste de las cargas nucleares necesarias para los misiles antimisiles. — — Por lo tanto, el programa Safeguard costará en definitiva 10.300 millones de dólares, importe de las instalaciones en los doce lugares elegidos, a los cuales habrá que añadir los gastos de funcionamiento, que cuando el sistema se encuentre totalmen te en servicio, ascenderán a 350 millones de dólares anuales. Si se considera sólo el coste de la fase 1, la inica que por el momento ha sido definitivamente aprobada, los desembol—— sos necesarios pueden calcularse en 5.300 millones de dólares:— 2.100 millones para adquisiciones, 2.000 millones para estudios, investigación y pruebas en el curso del programa de despliegue, 900 millones para la AEC (Comisión de Energía Atómica) y 300 mi llones para los gastos de funcionamiento. De toda esta suma só lo se dispone por el momento de 1.600 millones de dólares, ya que el presupuesto de 1.400 millones, pedido por el Presidente Nixon para e.l año fiscal 1971, no ha sido aprobado todavía. Ade más hay que tener en cuenta que, de los créditos pedidos para 1971, 600 millones de dólares lo han sido a título de la fase 2A. — — — ELEMENTOS Radar DEL SISTEMA SAFEGUARD. PAR. El equipo de radar PAR (Perimeter Array Radar), destinado a asegurar la detección de los misiles hostiles y su persecución a gran distancia, tendrá por misión el buscar, hallar y perseguir los blancos, determinar cuáles son los misiles hosti les, calcular sus trayectorias, prever sus puntos de impacto y comunicar a los MSR los blancos que hay que interceptar. - Se presenta bajo la forma de una edificación de cemento en tronco de pirámide, cuya base es prácticamente cuadrada, de aproximadamente 64 metros de lado y 40 de alto, cuyas caras es tán inclinadas 60° con respecto al plano horizontal; en una de sus caras o en dos contiguas lleva una antena circular de 35 me tros de diámetro. — Seg.n lo indicado en la revista Space/Aeronautics, este radar de conmutación électrónica, puesto a punto por la General Electric, comprenderá 6.600 dipolos que emitan cada uno l’l kw, funcionará a 442 MHz, barrerá un volumen de ± 60° en azimut y de 90° en posición y podrá detectar un blanco de un metro cua— drado a 4.250 km. de distancia, con una probabilidad de detec-— ción del 90% y una probabilidad de falsa alarma de 10—6. Estará funcionando en el modo de localización el 85° de su tiempo y en el seguimiento el 15%, y necesitará 100 ecos para extrapolar la tráyector ja. - — —6— El coste de un PAR de una cara se eleva a 130 millones de d6lares; el de un PAR de dos caras, a 160 millones; parece que estos precios corresponden al radar con el calculador asociado incluído. - — Radar MSR. El radar MSR (Missile Site Radar) , encargado de localizar y seguir los blancos que le hayan sido asignados por los PAR,dis criminar, llegado el caso, los cuerpos de reentrada después de su regreso a la atm6sfera y guiar mediante control a distancia los antimisiles lanzados para interceptar los blancos, tiene for ma an1oga a la del PAR, pero sus dimensiones son aparentemente menores (por estar su base enterrada) , ya que presenta 36 metros de lado y 12 de alto. Cada una de sus cuatro caras está dotada de una antena circular de cuatro metros de diámetro. - — - Según la revista Space/Aeronautics, este radar omni—direccional, de conmutácién electr6nica, puesto a punto por la Ray— theon, funcionará en banda 5 (aproximadamente 3 GHz) . Su alcan— máximo será de 1.500 km. Su precio asciende calculador asociado. Misil antimisil Spartan a 170 millones de délares, incluído el Standard. Este misil, cuyas dimensiones son 16,7 metros de largo y 1,09 de diámetro máximo, permite realizar interceptaciones a gran distancia (alcance máximo oblicuo: 740 km.) y a gran alti— tud (altitud de interceptaci6n máxima; 500 km. aproximadamente). El Spartan, que es una versión del Nike Zeus, perfeccionada en 1965, como la confirma su primera designación como Nike Zeus DM 15 x 2, esta siendo estudiado, fabricado y puesto a punto bajo la dirección de la McDonnell Douglas, y consta también de tres fases de propergol sólido, dos propulsoras y una de maniobra en el vacío, pero se diferencia del Nike Zeus, principalmente, en su segunda fase, que resulta ms grande y ms pesada a causa de llevar una carga militar ms potente. Su masa inicial es de apro ximadamente 13.000 kg. - —— - — Los motores que equipan las fases primera y tercera son los mismos que los del Nike Zeus: para la primera fase, un motor Thiokil TX 500, de 5,16 metros de largo, 1,09 de diámetro y de 2 a 2,25 MN de empuje; para la tercera fase, un motor Thiokol TX 239, de 1,4 metros de largo y 0,75 de diámetro; el propergol uti lizado es una mezcla de perclorato de amonio, de hidrocarburo 7 - - —7— de aluminio. La segunda fase l1evar un motor Thiokol TX 454, de propergol s6lido, de 109mtros de diámetro. Estos motores pesa rn, respectivamente, 5.500, 360 y 6.500 kg. El Spartan, provisto de un sistema de referencia inercial Honeywell, se guía por medio de un sistema de mando a distancia, puesto a punto por la Beil Telephone Lab. La carga múltimegat6nica, de la que va dotado, destruye los objetivos por radiaci6n X y posee un radio eficaz de varias millas náuticas. - El primer disparo de un Spartan se remontá a marzo de 1968; en junio de 1969 tuvieron lugar ocho lanzamientos (seis éxitos to tales y dos parciales). Los disparos se continúan a una cadencia Msi! anflmisil Sparton apróximada de uno al mes, y la primera interceptacl6n de un cuer po de reentrada se intentará en 1970, en el Campo de Tiro de Kwa— jalein. S61o el coste del misil se estima en 1,5 millones de d6la— res y el del misil en su silo (misil, equipo de lanzamiento y si lo), en 3 millones. —8— Antimisil Spartan perfeccionado. Los datos relativos al misil antimisil Spartan perfecciona do (Improved Spartan, Advanced Spartan, Spartan 2, projec 20) son pocos e imprecisos. Sin embargo, puede decirse que cierto número de firmas norteamericanas, en especial la McDonnell/Douglas, han recibido contratos para el estudio de un’misil derivado del Spar— tan Standard y de características de funcionamiento superiores; también puede afirmarse que esta mejora residirá principalmente en la substituci5n de la tercera fase actual por una nueva fase de masa e impulsi6n total ms elevadas. - — Antimisil Sprint. El Sprint (Solid PRopellant INTerceptor), que se presenta la fórma de un cono de 8,23 metros de largo y 1,37 de dime— tró en la base, es un misil que permi te realizar interceptaciones a corta distancia y a gran velocidad (en me nos de 15 segundos; alcance mcimo en diagonal: 46 km.), en una gama de al titudes que oscila entre 1.500 y 30.000 metros; de ahí que su lanza— miento se retrase lo suficiente como para que cuando tenga lugar haya po— clidó descubrirse por lo menos una gran parte de los señuelos lanzados. - bajo -- — -- El Sprint, cuya masa inicial es de 3.400 kg., que ha sido estudiado,construido y puesto a punto bajo la direcci5n de Martin Marietta, consta de dos fases, cuyos motores, de pro pergol s6lldo, desarrollados por la Hercules Powder Company, llevan una cubierta troncoc6nica fabricada me— diante el bobinado de fibras de vi drio recubiertas de plástico; el res to de la célula es de aleaci6n lige ra, con un revestimiento grueso y re forzado en “sandwich” de aluminio; es t protegido contra el calentamiento cinético por medio de una cubierta de un metal antitrmjco. Los dos moto— Annmis, Sprint que consumen res, propergol s6lido, han sido estudiados por Aerojet Gene ral; e).de la primera fase es un acelerador a p6lvora de doble ba se, cuyo empuje será de 2,9 MN. El sistema de pilotaje, que utiiT za una referencia facilitada por Honeywell, ha sido estudiado po — — — — - —9— Lockheed; durante la primera fase se realiza desviando la direc— ci6n del empuje por medio de una inyecci6n de líquido en lani ca tobera del motór; durante la segunda se consigue mediante la acci6n de los controles aerodinámicos situados en la base de la fase. El misil, al igual que el Spartan, se guía por medio de un sistema de control a distancia, puesto a punto por la Bell Tele— phone Lab. La cárga nuclear, de que estará dotado, se encuentra todavía en vías de desarrollo; tendrá una potencia ligeramente kilot6nica. El misil permanecerá guardado en un silo, desde don de será lanzadopor medio de un émbolo puesto en movimiento por un generador de gas de p6lvora. — Las pruebas en vuelo del Sprint comenzaron en 1965 y el primer lanzamiento se realiz6, desde una rampa, el 15 de marzo de 1965 y, desde un silo, el 19 de noviembre del mismo año. En White Sands han tenido lugar varios disparos de prueba; en junio de 1969, el balance de estas pruebas arrojaba un total de 29 dis paros, de los ctiales 14 fueron calificados como completamenté sa tisfactorios, 7 parcialmente satisfactorios y 8 como fallidos.La primera interceptaci6n de un cuerpo de reentrada está prevista para finales de 1970, en el Campo de Tiro de Kwajalein. S6lo el coste del misil se calcula en 1,1 millones de d6lares y el del misil en su silo (misil, equipo de lanzamiento y silo) , en 2 mi— llones. - - — * * * e iueitu&/ :iótu u 54 i ¿e ‘ 9’1mdÑ? VAR18S UBRO 8LANCO ALEMA6’ PARTE - . CESEDEN LIBRO BLANCO ALEMÁN 1970 ACERCA DE LA SEGURIDADDE LA REPUBLICAFEDERALDE ALEMANIA Y DE LA SITUACION DE LAS FUERZASARMADAS FEDERALES Hl Parte Edtado por el Minster!o Federal de la Defensa en nombredel Gobierno Federal. — Abrfl, 1971 BOLETIN DE INFORMACION NUM. 54 - X INDICE Pcgina 1 1. Bundeswehry Sociedad1 Soldados en La Sociedad Democrática Ciudadano de Uniforme7 1 . lnstrucci6n y Enseñanza. .. • . • • • • . • • • Promoci6n profesional en las Fuerzas Armadas Federales19 Las medidas de formación, de reajuste de ciclos y de reconversi6nprofesional21 1 ll Equipo. 15 27 . Armas y equipo Planificaci6n de armamento 1970-197434 Armamento y EconomíaNacional35 El Armamentoen el marco de la Alianza A:t.l&ttica Centro de pruebasde la Bundeswehr46 Infraestructura. . . .. CostosdelaDefensa59 . . . * . . * . . * . . . . . . . . . . . . 35 . 53 II.BUNDESWE.HRYSOCIEDAD SoldadosenlaSociedadDemocrctica 140. La Repiblka Federal de Alemania, a diferencia de la primera democracia alema na, no ha recibido sus FAS de un estado vencido, sino que las ha creado. La Bundes wehr ha sido ¡nc lufda desde el principio en la Constitucin y el Estado, asigncndole un puesto permanente. La organizacin de la Buncleswehrse vS dificultada por profundas divergencias interiores en torno al momento de su creación, a la vista de las circunstancias que caracterizaban la política exterior, Entre tanto ha cesado la disputa de los a?os cm cuenta y la Bundeswehrtiene hoy quince años de existencia, ms de la que llegaron a alcanzar la Reichswehr o la Wehrmacht. — — 141. Hoy tenemos un nuevo tipo de soldado. Su misi6n se sitúa en un campo de tensi6n completamente nuevo: ciertamente que ser ¡nstruído en el manejo de las armas de enorme poder destructor, pero con el inico fin de impedir que jamas sean empleadas. La mision de los soldados de la Bundeswehres impedir el empleo de la violencia con tra la República Federal y colaborar al mantenimiento de la paz. El presidente Hei— nemann le di clara expresi6n en su discurso de toma de posesi6n el 1 de julio de 1969: “No es la guerra la situaci6n grave en que el hombre ha de demostrar lo que vale, como aprendi mi generaci6n en la escuela en los tiempos del imperio, sino que es la paz la situaci6n gráve en la que todos nosotros hemosde acreditar lo que somos”. - —. - Pero si la paz fuera violada por un atacante, entonces tendrán nuestros soldados que estar capacitados y dispuestos a luchar segGn la voluntad del mando político. Y no menos que en los tiempos pasadosse les exige valor y disciplina. El mando político es consciente de la responsabilidad que contrae en relaci6n con la vida de los ciudadanos, El soldado, por su parte, sabe, ya sea general o recluto, que su mi sicn no es el ataque y la destruccicSnsinO proteccicn y autoproteccin. 142. La Bundeswehrtiene ciertamente diferencias, problemas y metas no logradas. En buena parte corresponde a la sociedad de que precede. En una parte de esta sociedad y no al contrario. Sus peculiaridades tienen incluso su correspondencia m6salk de su propio ¿mbito, Hay peculiaridades del servicio que, en el ambiente militar, ponen límites a las relaciones sociales normales en la vida civil, carentes de ellos. Los soldados han de aceptar determinadas limitaciones de su libertad individual; tienen que prepararse en su servicio diario para el empleo de la fuerza y disponerse a tener que actuar en medio del peligro. Estas peculiaridades del servicio estn condicionadas por la fun— ci6n y, por tanto, no puede suprimirse. El legislador las ha incluído expresamente en la Ley Fundamental y en el resto de las leyes. Sin embargo, hay tambin otros grupos profesionales en nuestra comunidad que se caracterizan de forma comparable o similar por peculiaridades de su servicio Los funcionarios tienen que aceptar tam bin una limitación de sus derechos individuales; el legislador les exige completa entrega; debe obediencia a su superior igual que el soldado, El trabajador, en la cadena de montaje, y el técnico, en su equipo, tienen que someferse también a lo disciplina. El minero y el marinero rinden un trabajo no menos peligroso que el del soldado, y los polic ías y bomberos han de actuar diariamente en medio del peligro. El servicio ¡unto a conciudadanos enfermos exige a la enfermera la entrega de toda su personaUdad. — En comparacin con los miembros de estos grupos profesionales existe una gran di ferencia para el individuo sujeto a la obligacin del servicio militar; no puede dec dirse libremente por la profesin militar, el legislador le exige la prestaci6n de es te servicio. Por iltimo, hay que observar que no son solo los soldados quienes pueden ser ob jetivo y víctima del empleo de la fuerza por un enemigo; la guerra pone en peligro la vida y los bienes de todo el pueblo, no solo de los soldados, Estasconsideracio— nes determinan que la Bundeswehrsea algo que se justifica por si mismo. 143. • 144, • Toda concentraci6n de poder —político, econ6mico y militar—, produce en una de mocracia, tensin, desconfianza y alarma, La Bundeswehres una de las organizacio nes ms amplias y fuertes de la RepGblica Federal. A ella pertenecen aproximadamen te 470.000 soldados y 170.000 civiles; su presupuesto se eleva a unos 20.000 millo— nes de D.M. (400.000 millones de pesetas). Constituye, no solamente una gran par te del poder ejecutivo, sino al mismo tiempo la mayor empresa de nuestro paísy el ms poderoso instrumento del poder estatal. Este instrumento necesita, por lo tanto, de un control vigilante. Todo el que tiene responsabilidad de la seguridad de los dems, ya sea en la in dustria, en el tr6fico o como soldado, tiene que estar preparado para enfrentarse con evoluciones desfavorables y contar con cargas extremas. Frente a ello el pueblo y la opinin pGblica siguen a veces el camino de la minusvaloracin de los peligros potenciales. Ademas, la opini6n pGblica es muy variable en la valoracin de los P! ligros. Y así, en 1966 solo el 37% de un sector representativo de la poblaci6n ale mana se sentí’a amenazada por lo Unin Sovifica; muchos no se sentían amenazados y el 26% no dieron respuesta. Por el contrario, en noviembre de 1968, tres meses después de la invasin rusa en Checoslovaquia, se modifica la proporcin: el 54% se — — sentía amenazado:; el 32% se creían en un peligro exterior; la cifra de los que no opinaron baja al 14%. Un año después el 55% no se sentían amenazados; el 32% se guian viendo el peligro y el 13/o no emitio ,uicio. Tenemos que vivir con estas oscilaciones de la opinión. La Bundeswehrno debe, sin embargo, exagerar el peligro. Pero el pueblo no debe olvidar que solo ténemos la oportunidad de llevar a cabo en paz nuestro desarrollo balo el techo de una segu ridad garantizada. Unapartedelasociedad 145. En los quince años de su existencia la Bundeswehr ha logrado un puerto firme en la conciencia pública. Incluso la forma y el contenido de las críticas contra ella son una señal de normalidad. La Bundeswehrno esta ni mejor ni peor que otras insti tuciones, No es ms criticada que el Parlamento, la Iglesia o la Universidad y, a la inversa, le presta a la Repiblica la misma lealtad que otros grupos. El militar es un ciudadano subordinado a otro ciudadano. Por ello resul’ta tan superfluo una cons tante repeticn de profesi6n de fe en la Bundeswehrcomo la constante profesión de fe del militar en la sociedad democrtica, — — En una encuesta realizada en abril de 1961, el 21% de los consultados respondie ron: “La Bundeswehrforma parte de la sociedad; la mayor parte se ha acostumbrado a los soldados”; el 15%: “No se ocupa uno mucho de la Bundeswehr; los soldados son hoy ago natural y ¡ustficado”; otro 15%: “La Bundeswehrpasa desapercibida para la mayoría; apenas se ve a los soldados”, Salo el 9% de los consultados respondicS: “La Bundeswehres como un estado dentro del estado; la mayor parte de la gente ape nas tiene contacto con soldados”. Dos terceras partes declararon que no encuentran diferenciaentrela profesi6n militar y una civil; el 9% opinaronque losmilitares pro fesionalesson “gente especialmente capaz” mientras que el 11% no emitieron juicio. El 14% se haríamilitar profesional solamentesino consiguiera nada porotrocamino. — 146. La Prensa, la Radio y la Televisi6n vienen cooperando en forma creciente duran te los últimos años en hacer transparente para la opini6n ptblica el desarrollo inte rior de las FAS. El Gobierno Federal así como las FAS mismasven esto con agrádo y se esforzar6n por que en el futuro la transparencia sea ain ms clara. La Bundeswehrse ha esforzado también en presentar con claridad a los ciudadanos sus misiones, dificultades yxitos con resultados satisfactorios. En 1969 logr6 acer— carse o 2,5 millones de hombresmediante diversas actividades entre las que podemos citar conferencias, publicaciones, visitas a las unidades, días de puerta abierta, con ciertos de músicas militares, exposiciones y exhibiciones de películas. 580 oficiales fueron interlocutores de 60.000 estudiantes de bachillerato y 100.000 jSvenes estu diantes de grado medio y de asociaciones juveniles. El Gobierno Federal concede — -4- gran importancia a los militares que han de famiflarizar a la generaci6n ¡oven con la misi6n y los problemas de la Bundeswehr, Con esta finalidad se seguir perfeccio nando la formaci6n de oficiales y suboficiales para la juventud. El estudio crítico recientemente realizado ha mostrado la necesidad de hacer un examen del conjunto de los trabajos de relaciones pGblicas; este examen se ha ini ciado ya. 147. Las Universidades e Institutos Científicos de la RpGblica Federal han comenza do a ocuparse de la seguridad, sociología militar y problemas interiores de los Fuer zas Armadas, El Gobierno Federal, ve en ello una contribuci6n importante a la in— vestigackn de la paz en cuya promoci6n esta especialmente interesado (1). El Ministerio de Defensa contribuye en una medida considerable a esta investiga ci6n, principalmente en el campo de la limitacicn internacional de armamentos. LaBundeswehrayuda 148. La Bundeswehrse ha hecho acreedora al reconocimiento, con las numerosasayu das que ha prestado en casos de emergencia. Los auxilios ms recientemente presta dos en el país y en el exterior estn ain frescos en la memoria de todos: durante las inundaciones de los nos Rhin, Mcm, Neckar y Danubio en la primavera de 1970 pres faron auxilios 5.100 soldados con 500 vehícu los, 150 botes neumticos, 50 botes an fibios y demotor así como 22 vehículos aéreos, abasteciendo a la poblacin de lo ms necesario, La aviaci6n logr6, en abril de 1970, realizar su mayor acci6n de au xilio transportando en el curso de pocos días 1.100 toneladas de medicamentos, ali mentos, tiendas de campaña, vestuario y material técnico o los territorios turcos afec fados por terremotos. — Con ello continGa la Bundeswehruna vieja tradick5n. Ha prestado auxilio en 388 catstrofes, en forma rpida, sin compticac iones burocr&icas, Unos 40,000 soldados, de los que seis perdieron la vida, colaboraron en los trabajos de salvamento con oca si6n de las grandes inundaciones en el Norte de Alemania en 1962, salvando la vi— dade 1.117 personas. (1) investigacin’de Una los programas de estudiosde los años 1968 y 1969 en28 es cuelas superiores de la RepGblico Federal ha dado el siguiente resultado: 1. En 8 es cuelas superiores con 30,000 estudiantes por semestre no se ha realizado ninguna clase de actividades científico—militares. 2. En 20 escuelas superiores con unos 250, 000 estudiantes por semestre tuvieron 80 actos con contenido científico—militar. Estos 80 actos son una pequeña parte del conjunto de los programas en dichas escue las, Esosactos fueron dirigidos por 55 profesoresde un total de 7,000. — — —5— Una compañía de Transmisiones de Aviaci6n facilit6 alimentaci6n y consuelo a 30 niños cerca de Naila; helic6pteros de la Marina transportaron enfermos desde is las e islotes del Mar del Norte a los hospitales. Soldados de infantería colaboraron con sus vehículos a la limpieza de nieve de las carreteras. No faltan ejemplos. Los últimos años se décía siempre: “La Bundeswehrestuvo allí y ayud6”. La escuadrilla de Salvamento de la Marina en el mar ha realizado en 11 años 1 .759 vuelos de salvamento que representan 75.000 horas de vuelo, salvando a 644 personas de un inminente peligro de muerte. La aviacicSn del Ej&cito de Tierra, s6— lo en 1969, ha prestado auxilio en 29 accidentes de montaña; en otras 677 misio nes transportaron 522 enfermos graves y heridos. — También en el extranlero ha prestado auxilios la Bundeswehr. Desde 1962 la Luft waFfe ha hecho 3.510 horas de vuelo con ocasi6n de 14 cat6strofes, transportando a 9 paísesdistintos 1.407 tm. de material de ayuda. Por ejemplo, de octubre a dic iern bre de 1969 transport6 a las zonas tunecinas afectadas por las inundaciones alrede dor de 461 tm. de material de todo tipo evacuando a 360 personas. La Luftwaffe par ticip6 también en la ayuda internacional a la poblaci6n afectada por la guerra de Nigeria realizando 13 misiones de transporte de vehículos, medicamentos y vestua rio. - El Servicio de Sanidad va a colaborar con sus propios centros en la asistencia de accidentados. El centro experimental de Ulm reunir6 las primeras experiencias. Es t6n previstos el Hospital Militar Central dé Coblenza y el de Hamburgo para consti tuirse en centros de este tipo. La Bundeswehrse esfuerza en prestar su ayuda en todos los casos urgentes. Siem pre que ello concuerde con fines de instrucci6n se har6 totalmente gratuito, lo que sucede en el 90% de los casos. Los soldados de la Bundeswehr han hecho colectas en muchos guarniciones, reu niendo considerables sumas para ayuda de enfermos, por ejemplo, niños lisiados o hurfanos, Para el cuidado de tumbas de cardos en la guerra se recaudaron dentro y fuera de la Bundeswehr, s6lo en 1969, 1.406,545 D.M,. La Bundeswehr ha ofrecido su colaboraci6n para la preparaci6n y desarrollo de los Juegos Olímpicos de Munich en 1972. El primero de abril de 1970 se ha consti— tuído en el Estado Mayor de las FAS un negociado especial para ocuparse de ello. Entreotras cosas pone a disposici6n sus instalaciones deportivas como centros de en trenamiento de los equipos nacionales, cocinas de campaña y personal de cocina para los campamentos olímpicos; zapadores para la instalaci6ny desmontaje de tri bunas, 1.500 hombrespara vigilantes de rutas, auxiliares de obst6culos o de tiro, cuarteles y alojamiento para técnicos e instalaciones de su servicio sanitario así co mo cooboraci6n paro & tr6fico oreo. — - — SoldadosyElecciones 149. El nimero de militares que son miembros de los parlamentos comunales, de los Linder o del Federal o Bundestag muestra la colaboracTn y responsabilidad compar tida de los militares en el estado parlamentario de derecho Tienen no solamente de recho de elecci6n activo sino también pasivo. El Gobierno Federal mantendr6 fir— mement& estos derechos si bien no desconoce los problemas que representan para las unidades. - En 1969 fueron 38 los militares candidatos al parlamento federal. Seis de ellos son hoy diputados, tres son diputados en los parlamentos de los Linder. A princi pio de 1970, 71 oficiales y 171 suboficiales eran miembros de los parlamentos co munales (1). Las sospechasde que los partidos extremistas encuentran un eco especial entre los militares no se verifican en la Bundeswehr, Por ejemplo los militares miembros del partido NPD son mucho menos de los que proporcionalmente le corresponderra considerando el total perteneciente a un grupo de población comparable. (Según da tos del Gobierno Federal son 560), Ademcs la valoraci6n cientfficando los resuIta— dos electorales en distritos seleccionados, con gran parficipacin de electores mili tares, no ofrece resultados divergentes de la norma general. El comportamiento de los militares en las elecciones corresponde al del conjunto de la sociedad. — — — Multiplicidádydiscusi6n 150. La Bundeswehres una organización socialmente abierta, Casi 200.000 soldados (de reclutamiento forzoso, militares, temporales o profesionales) ingresan anualmen te en la Bundeswehry otros tantos se licencian, Mientras que en el Ejrcito prusiano la cuarta parte de los aspirantes a oficial eran hijos de militares, y en la Reichswehr eran aproximadamente la mitad, en 1967 solo loerael 14% de los jefes de secci6n, — Si antes los hijos de los trábajadores no podran llegar prcticamente a oficiales, hoy constituyen un elevado tanto por ciento lo mismo que en las universidades ale manas. (1) En una encuesta entre electores realizada en abril de 1970, el 68% de los con sultados declararon que su decisi6nno estaba en absoluto influenciada por el hecho de que e candidato fuera militar o no, el 12% estaba positivamente influenciado por ello, el 11% negativamente y el 9v/o no dieron respuesta. -7- La Bundeswehrest6 también abierta a la multiplicidad de Opiniones. Es.una par te de nuestra sodedad pluraUsta. El Goberno Federal ni puede ni quiere definir la posición social de la Bundeswehr. Cada individuo tiene que buscar y crearse por sí mismo su posici6n en la sociedad0 Por eso es bueno que se discuta en. la Bundes wehr y resulta entonces naturalmente que pueden adoptarse posiciones opuestas —in cluso extremistas, ya sean conservadoras o progresistas- No puede sorprender que haya soldados que añoran un orden rebasado en el que no se planteaba “la exigen da irrea lista de una autoridad del superior surgida exclusivamente de la personali dad” y otros que, por el contrario, van tan lejos, que rechazan toda lealtad a las personas0 Y en este sentido la Bundeswehrno se diferencia en nada de la Justicia, de las Universidades, de los Institutos o de los Hospitales quir6rgicos. — 151. Numerosas discusiones en las FAS es la consecuencia natural del hecho de que no existe una homogeneidad, en el sentido de los vielos tiempos, en el mando mili tar. En ello se refleja el desarrollo social de la Bundeswehr. — Esta disconformidad no es peligrosa entanto esta clara la voluntad del Mando po. lítico y subsistan opiniones fundamentales comunessobre misin y objetivos. Ello co rresponde a una imagen del militar como ciudadano mayor de edad. La voluntad política es terminante., La sociedad democrtica crea mediante la le gislaci6n, el gobierno y el control parlamentario las FAS y les fija su miskSn. No es por el contrario misi6n de ¿stos configurar el estado y la sociedad. En el proceso de la reforma de la sociedad pueden y deben cooperar todos los ciudadanos, incluso los militares, pero no es mísin de la Bundeswehrcomo instituçi6n. Tampoco puede ser lo Bundeswehrabogado de una figura hist6rica que sea la inica vlida, porque tal no existe. En una palabra: La Escuela de las FAS es la Nacin y no viceversa. CiudadanodeUniforme 152,, La ¡m6gen fundamental del “ciudadano de uniforme” liga al estado la sociedad y la Bundeswehr . La Bundeswehrnaci en el año 1955 bajo este concepto que debe producir efec tos de dos clases: de una parte, la inclusin de las FAS en el orden constitucional democrtico libre y la subordinaci6n al mando político; de otra, la garantía de los derechos fundamentales, que no deben limitarse a los militares mGsde lo que exija el servicio0 El objetivo del concepto de “ciudadano de uniforme” es asegurar la efi cada de la Bundeswehren el marco del orden político, ¡urídico y social estableci do. — Sobre la base de este concepto, “Innere Fiihrung”. (Mando o conduccin interior) significa el desarrollo y aplicacin en el mbito riilitar de los mtódos modernosde —8— mando o conducci6n de hombres, Comprende los fundamentos de la formacicSne ms trucci6n, asistencia y mando de personas., Este concepto se ha acreditado y el Go— bierno Federal lo mantendrc Firmemente, El posterior desarrollo en una sociedad progresivamente cambiante s un proceso naturalmente constante, — La Ley Fundamental fund6 democr6ticamente la Bundeswehry —sincitarlo expre samente— hizo del ‘ciudadano de uniforme” su figura obligada. Por ello no son los fundamentos de la. “Innere FUhrung” ninguna mcscara que se pueda quitar, sino el núcleo esencial de la Bundeswehr, Quien la rechaza no es apto para mandar a nues tros soldados,. El Parlamento estamp6 la figura del “ciudadano de uniforme” en la Ley Militar de 1956, Allí esta escrito que el soldado tiene los mismosderechos que cualquier otro ciudadano y que estos derechos solo pueden limitarse mediante obligaciones legalmente fundamentadas y en tanto lo exija el servicio. El párrafo 6 de la Ley Militar complementa la figura de “ciudadano de uniforme”, en tanto en cuanto crea el enlace entre los derechos fundamentales y los deberes que se imponen al soldado, — — 153. El catalogo de obligaciones de la Ley Militar impone a todo soldado el deber fundamental de servir fielmente a la República Federal de Alemania y defender con todo esfuerzo el orden democrdtico libre lo que puede incluir, en caso extremo, el sacrificio de su propia vida. Ademas el soldado ha de prestar obediencia completa, consciente e ineludiblemente, En asuntos del servicio ha de decir verdad y ser re servado, Esta obligado al compañerismo. La Ley Fundamental obliga ademas a los superiores a una responsabilidad especial, han de ser un ejemplo de su comporto— miento general y en el cumplimiento del deber. Tienen la obligaci6n de vigilar el servicio y son responsablesde la disciplina de sus subordinados, También les obliga la asistencia y preocupacicSnpor sus subordinados, - — 154. Por primera vez en la hiçtoria alemana, no solamente se asignan a los soldados determinados deberes sino que también se le conceden derechos en la Ley Constitu cional, El soldado tiene derecho en todo tiempo a un respeto ilimitado a su digni— dad humana. Una orden militar que vuinera lo dignidad humana, segtn la Ley Mili tar, no obliga a su cumplimiento. Una orden cuyo cumplimiento puede tener como consecuencia un delito o un crimen no debe cumplirse. Ademas, el soldado tiene derecho a un libre desenvolvimiento de su personalidad, en tanto ello pueda coord nar con la msin que la constitucin asigna a la Bundeswehr y la necesidad, dispo nibilidad y potencia de las FAS, De ello se sigue, por ejemplo, su derecho a vestir fundamentalmente de paisano durante el tiempo libre y a decidir por sr mismo el cor te de pelo y llevar o no barba, en tanto que ello no afecte a su funcin de solda do; una barba, por ejemplo, no perturba nada en tanto la mscara cntigs pueda ajustarse perfectamente, De la misma manera se asegura al soldado la libre expre— sión de sus opiniones, si bien han de respetar en todo momento sus obligaciones di— - — — -9- manantes de la ley, defender el orden democrtico fundamental, guardar silencio sobre asuntos del servicio y no actuar en el servicio en favor o en contra de una de terminada dirección política. Se le garantizan la libertad de ¡nformacin, de opi— ni6n y asociaci6n. 155. El espíritu de la Ley Fundamental y de la Ley Militar han dado carccter a un conjunto de otras leyes, &denes, instrucciones y reglamentos de servicio. Determ na todo ello el estilo de mando de las FAS. Desde el punto de vista del soldado si nifica que no solamente tiene la obligaci6n de servir en la Bundeswehr, sino tam— bin salidos derechos en que pueda apoyarse. Sus derechos y posibflidades se encuen tran, entre otras, en el Reglamento Mflitar de Reclamaciones, en la ley sobre el co misionado parlamentario para las FAS, al que puede dirigirse directamente sin per juicio del servicio si cree que han sido vulnerados los derechos fundamentales o los principios de la “Innere Fhrung”; en la ley sobre la elecci6n y duraci6n del cargo de “hombre de confianza”, que debe conducir a:una colaboraci6n entre superiores y subordinados; en el Reglamento Disciplinario, en el de los superiores y en el Re— glamento Central 10/5 sobre el servicio interior en las directivas para la formación del soldado, en el decreto sobre medidas educativas y, finalmente, en el decreto sobre la actividad política de militares. - - 156. A la vista de la problemtica de un poder armado en un estado democrtico el legislador ha concedido al Parlamento especiales derechos de control en relacicn con la Bundeswehr. Son ejercidos en primera línea por la Comisin de Defensa y el Comisionado Parlamentario para Defensa. - — La Comisin de Defensa estd prescrita en la Ley Fundamental. Trabaja entre los períodos de elecciones y de sesiones para preparar decisiones del pleno. Posee los derechos y atribuciones de una Comisi6n de lnvestigaci6n y actGa con este carcter cuando lo solc ita la cuarta parte de sus miembros. La institución del Comisionado Parlamentario de Defensa se fund6 en 1958 siguieri do el ejemplo sueco y no como expresicn de una permanente desconfianza frente a los militares, sino como un anuncio de la voluntad de integrar a las nuevas FAS en el estado y en el orden social deseado por el legslador, El Comisionado Parlamen tario, segGn la Ley Fundamental ha sido creado para proteger los derechos funda— mentales de los soldados y ser, simultáneamente, un ¿rgano auxiliar del Parlamen to en el ejercicio del control. Según la Ley debe, ademas, proteger los principios de la “Innere Fhrung”, En la practica, el Comisionado Parlamentario se le concibe, no solamente como un guardián sino también, simultdneamente, como un defensor de los soldados fren te al Parlamento y la opinin pública. Desde su creación ha recibido unas 62.500 peticiones y queias, y de ellas ms de 6,100 solo en 1969. Se referían a violacin -lo- de derechos fundamentales el 2%, de principios de la “Innere Fhrung” el 21%, del derecho penal o reglamento disciplinario el 13% y el 61% a cuestiones socia les. El Gobierno considera esta ¡nstitucin imprescindible de todo punto y se opon— dr a todo intento de limitar o disminuir su Competencia. El Comisionado Parlamentario de Defensa sirve mediante su actividad no sola mente al Parlamento sino que hace que los soldados vivan la democracia parlamen tana y el estado de derecho. Sus informes, especialmente los anuales de 1968 y 1969, han contribuído notablemente a la aclaracin de conceptos y conf iguraci6n de la “Innere FGgrung” que constituyen jalones visibles para orientar las discusio nes en el seno de la Bundeswehr, — 157. Ademas de la Comisi6n de Defensa y el Comisionado Parlamentario de Defensa, merecen ser citadas aquí otras dos instituciones, El Consejo para cuestiones de “lnnere FUhrung”, 6rgano asesor del Ministro. Es t6 compuesto por representantes de los ms variados sectores de la poblaci6n. El Go bierno Federal agradece al Consejo su labor czsesoray consultiva que seguir siendo en el futuro un valioso auxiliare 158. Desde 1956 existe en Coblenza la escuela de “Innere Fihrung”, SegGn la idea inicial deberc aplicar a la “Innere Fhrung” mtodos científicos y facilitar la ense ñanza y aprendizaje de sus principios. Al mismo tiempo se le asign la misin de preparar a los Jefes de Batall6n y Compañía y Brigadas auxiliares de Compañía en la prcctica del mando moderno de hombres en las FAS, mediante cursos adecuados. Estas metas no han podido ser plenamente logradas. Ciertamente se han realizado desde 1957, 200 cursos de cuatro a seis semanasde duracicn para 7.880 Jefes y Ofi ciales, de los citados empleos ademas de 258 cursos breves para otros 8.124 miem bros de la Bundeswehr. — — - El prop&ito de que los Jefes de Batall6n y Compañía así como los Brigadas de astas últimas pasaran obligatoriamente por la escuela de Coblenza no se ha podido realizar por diversas causas. Sigue faltando espacio para ello; la permanente esca sez de Oficiales y Suboficiales ha impedido a las unidades desprenderse del número requerido para los cursos; ademas, la asistencia a algin curso en la escuela no esta ba incluída con carcter obligatorio en el plan de formcciSn de Oficiales y Subofi ciales; por ultimo, por razones de personal y de principios no se logra armonizar la cooperacicn entre el sector científico y la enseñanza militar. - Para asegurar la independencia de lo investigaci6n y la enseñanza de una mane ra institucional y conceder al grupo de trabajo cienti1ico un campo mayor de acti— —11 vídad en el morco de las instituciones formativas de lo Bundeswehr, en el año 1969 se desmembr6y se ampli6 a un “Instituto Cientflíco para educacin y formaci6n en las FAS”. La designaci6n de profesorado para la escuela de “innere Fhrung” en Coblenza produjo sin embargo nuevas dificultades. En consecuencia surgía la nece sidad de incorporar a la escuela un nuevo grupo científico para la enseñanza en la misma — El Gobierno tiene la ¡ntenci6n de remediar estas deficiencias, La escuela de Innere Fuhrungu, recibira una nueva mision en,,—correspondencia con sus posibilida des: En el futuro organizara reuniones de Comandantes de Unidad, instruír a los Oficiales profesores de las escuelas de la Bundeswehr, orientara a los Oficiales en cuestiones del mando >‘ como hasta ahora—organizara reuniones de caracter infoL mativo de cara a la opinion publica,, El Conseio para Innere Fuhrung apoya la elaboraci6n de propuestas para la actividad del Jnstituto Heider. Para el puesto de director del lnstituto, vacante desde hace cinco años, se ha designado un prestigio so catedratico de lnstrucci6n Poltica, Se ha creado ademas un puesto de General para cuestiones de educaci6n y formacian en la Bundeswehr. Depende directamen te del General Inspector y su misian es unificar e intensificar la educaci6n y forma ci6n en los tres Ejércitos y observar la consistencia interior de la Bundeswehr. — — Mandoactualdehombres 159. Solo se puede esperar del soldado la defensa del orden libre si el mismo posee los derechos que debe pr’oteger Esto es inamovible. En el servicio diario ha de ex perimentar los principios de libertad y estado de derecho y el respeto a su dignidad humana, Un soldado que no vive en el cotidiano hacer el orden de valores de la Ley Fundamental, difícilmente creera en la necesidad de su servicio en beneficio de la comunidad, — — En la Bundeswehrse producen quejas de lo deficiente educaci6n ciudadana, ad quirida en la escuela, con que llega el soldado al cuartel. Pero es falso que, a cau so de ello, hayan de limtarse los derechos de los soldados para que se pueda exi gir el cumplimiento del deber con medios mas duros Misi6n del mando es hacer que el soldado cumpla su obligacian sin que se limiten sus derechos, El mando de hombresen las FAS de una sociedad industrial organizada democra ticamente tiene que reconocer los siguientes principios: La necesidad democratica de discutir y convencer, el principio militar de mando y obediencia; el criterio tc nico de la autoridad que da el propio rendimiento y la disciplina real. 160,. La Bundeswehr puede cumplir la misi6n de mando de hombres si esta movida por el mismo espitu que la socedad que debe defender. El Comisionado Parlamentario para Defensa comprobaba en el informe Anual de 1969:“Si la Bundeswehrse apar— — 12 fa de los valores predominantes y de las formas de comportamiento en la sociedad civil, corre el peligro de experimentar un desarrollo al margen de esta sociedad, Es necesario que en las FAS sea una realidad la representaci6n de valores y las for mas de comportamiento de la sociedad en tanto no se opongan a las particularida des inmanentes del servicio militar”. Una regla fundamental del juego de la sociedad actual es la discusiSn. Dentro de la Bundeswehr el Ministro de Defensa lo impulsa enérgicamente, La discusión y la obediencia no se excluyen mttuamente, antes bin se complementan. La obe diencia es ms fcil para el joven s comprende por qu y para qu debe obedecer, Todo puede discutirse con una 6nica excepci6n: No puede someterse a discusi6n la obediencia a la Ley Fundamental y al Gobierno Constitucional, la obediencia a las leyes, que se apoyan en la Ley Fundamental, y la obediencia a las &denes que sean dadas sobre estas bases. — Tampoco en las condiciones actuales puede prescindir un Ejército del mando y la obediencia, Tampoco puede faltar una disciplina formal y los reglamentos de ser vicio; esto es valido, aunque en diferente grado, allí donde varios hombrestrabo— jan juntos para lograr una meto coman, Toda producci6n exige una disciplina a ella subordinada y por tanto también la producci6n de disuascn y potencia combativa. En consecuencia, el moderno Ejército necesita una insfrucci6n con las armas y —por ejemplo para el servicio de guardia o interior— reglamentaciones unificadas, En si tuaciones de combate, que proporcionan extremas penalidades, no se puede prescin dir de una disciplina sencilla de orden—obediencia. La contemplaci6n de un posible caso de guerro exige ademSs una medida en la dureza de la instrucci6n, es decir, la capacidad y voluntad de rendimiento en difí ciles condiciones, que no son necesarias mds que en muy pocas profesiones civiles, Algunos reclutas llegan al servicio con muy escaso entrenamiento corporal. Por eso es necesario una intensificación de la educaci6n fiica en la Bundeswehr, 161. La vida militar y los métodos de instrucci6n de las FAS estén cada vez ms in fluenciados por las normas industriales y los procedimientos de trabajo industriales, El desarrollo técnico ha ampliado y especializado las funciones del soldado. Los conceptos autoridad y disciplina han recibido en parte un nuevo contenido, Antes existía en el superior el ejercicio de la autoridad basada en el empleo y el cargo y en los subordinados una obediencia ciega y una disciplina formal, Hoy, en muchos aspectos, saltan al primer plano la autoridad del superior basada en una especial formackSn y en la experiencia y una disciplina especializada que surge de funciona miento tcnicamenfe complicado. — — 13 — El cüidado tcnico del porque de material y de los sistemas de armas requiere cada vez ms tiempo de servicio. Por ejemplo, el entretenimiento de un destructor exige del 60 al 70 por ciento del tiempo de servicio de la tripulación; en una uni dad de vuelo llega al 80 y 90 por ciento y en las unidades acorazadas es del 30 al 35 por ciento. De ello se sigue una necesidad de racionalizaci6n del servicio y una variacn en las relaciones entre superiores e inferiores. Tambin resulta de la tec— nificaciGn la necesidad de una practica continua; determinados procedimientos co rresponden íntegramente a los soldados que manejan un sistema de armas, especial mente para lograr el dominio de aparatos técnicamente complicados. — 162. El Comisionado Parlamentario para cuestiones de defensa diferenciaba, en su forme Anual de 1968, entre el estilo tradicional de mando, el estilo de mando en cooperacicSn y el estilo de mando personal. Llegaba a la conclusi6n de que el esti lo de mando de las FAS actuales tiene que ser en cooperación, pero que no se pue de prescindir, en las peculiares condiciones de cada caso, del tradicional sentido de la obediencia y el ascendiente personal El Gobierno Federal esta de acuerdo. El fundamento es: La cooperaciSn y la coordinacn preceden a la automtica de mando . — El grupo uniforme de los viejos tiempos ha cedido el puesto a la agrupación de soldados especialistas. En este sentido un combatiente es un especialista importante e imprescindible. Los especialistas cooperan en diferentes equipos,, El nuevo conce2 to de compañerismo ha variado la escalo de la disciplina militar, — Proresivodesarrollodela“lnnereFhrung” 163, La Bundeswehr ha conseguido vencer numerosasdificultades de carcter personal y material en los 15 años de su existencia. El estudio crítico -especialmente las con versaciones entre personal de todos los empleos y el Ministro de Defensa—han apor tado numerosaspruebas de que los principios de la “Innere FUhrung” son ampliamen te aceptados y sumamente practicados. En realidad la Bundeswehrest’ ms fuerte mente ¡ntegrada en la sociedad de lo que generalmente se supone. En un tiempo en que las instituciones tradicionales se ponen en tela de juicio, la Bundeswehrse ha abierto ‘ambin al dlogo Por ejemplo, los estudios del Ejr cito de Tierra titulados “Ideas para el mejoramiento de la situación interior” y las nuevas tesis de un grupa de ¡6venes Tenientes han sido puntos de cristalizaci6n de un debate tanto entre militares como la opini6n ptblica. Prescindiendo de que pre cisan un enjuiciamiento crítico y de que algunas ideas son rechazables, el debate ha demostrado la aptitud de los militares para discutir y para someter a juicio ias propias ideas.. — — - 14 - El elemento de la discusi6n libre debe ser tambin institucionalizado en la vi— da de la Bundeswehr, Con este fin el Ministro de Defensa har6 que las reuniones regionales con personal de todos los empleos desde suboficial a general sean insti tuciones permanentes. Siguiendo un eemplo sueco, se celebrara regularmente una reuni6n de soldados en la que tomaran parte los hombresde confianza elegidos por las unidades de los tres Ejércitos. También se encuentran en preparaci6n unas reuniones para funcionarios, empleados y obreros, — 164. En el perfeccionamiento de la “Innere FCihrung” se persiguen los prop6sitos si— guientes Los derechos fundamentales y los que conceden las leyes no sern recortados, se rechazare la limitaci6n de la actividad política de los militares asícomo la abo lici6n del arresto bajo palabra. Se rechazar también la reglamentacicSn innecesa rio en cuestiones personales (por ejemplo, el corte de pelo unificado, la coloca— ci6n unificada de los objetos en los dormitorios o de las prendas en los armarios o la prohibici6n a lossoldados de reclutamiento forzoso de llevar traje de paisanoal cuartel). Esto comprende tambn el saludo y forma de drigirse a un superior. Antes de establecer una nueva regulaci6n de estos extremos es necesario esperar la resolu— cicSn de un procedimiento ante el Tribunal Federal Administrativo, 165, Los cambios experimentados por la sociedad en los Gltimos años exigen una nue va ordenación del Derecho Disciplinario Militar. Actualmente se prepara una am plia actualizaci6n del Reglamento de Disciplina Militar, Entre otras cosasse pre— van: En faltas leves de servicio que al mismo tiempo constituyen delito coman y cuando el soldado haya sido ya condenado por el tribunal judicial, solo será auto rizado un correctivo de la falta de servicio por vía disciplinaria cuando lo exija el mantenimiento de la discipUna. Las faltas cometidas por los soldados fuera de servicio no será consideradas como faltas del servicio, a no ser que ¿ste resulte de cisivamente afectado. Desaparecern el retroceso en la escala de sueldos o la su— presin de avance en la misma; será sustituído por una prohibici6n de ascenso. Con objeto de acelerar los procedimientos disciplinario y de recursos se van a modifi car los seis tribunales militares existentes y crear otras tres cmaras, — 166. El Gobierno Federal tiene la intenci6n de proponer al Parlamento la sustituci6n de la promesasolemne del soldado de reclutamiento forzoso, por una ¡nstrucci6n formal de sus derechos y deberes y separar de este acto, de la jura de los soldados que prestaran largo tiempo de servicio (1). (A partir de abril de 1970 ya se han ‘:distanciado en-tiempo y lugar la promesay la jura). Por el contrario el juramento que deben prestar los militares profesionales y temporales solo se puede considerar — — (1). Nota del Traductor. Militares profesionales o temporales. - 15 — en relación con el que se presta en el resto de los servicios estatales. No tiene lu gar una sustitucin del juramento solo para militares. Parece necesario una expre— si6n ms clara de los conceptos empleados en la actual f6rmula del juramento mili ta r 167, El Gobierno tiene la intenci6n de adoptar una serie de medidas relativas a pre— visión, sueldos, viviendas, cantinas, escalas, formacicSne instrucci6n que tienden a la realizaci6n de losfines a que aspira la “Innere Fiihrung”. Vase el párrafo “Preocupaciones del personal militar”, parrafo 123). — 168. En la evoluci6n de la “Innere Fihrung” el Gobierno distingue entre los funda mentos invariables de una parte y los elementos que pueden sometersea variaci6n de otra. La primacía de la política, el respeto de la dignidad humana y lo protec cicSn judicial del individuo pertenecen a la categoría de los fundamentos invariables. Las formas de mando, la formación e ¡nstruccin, el estilo de mando, la ordenaci6n de las escalas y las formas de organización estn sometidas a variaciones. El Go bierno Federal pretende objetivar la discusicn sobre la Innere Fihrung”. La discu— sicn debe orientarse por las normas legales vigentes, la experiencia practica y los progresos científicos. Instrucci6nyEnseñanza 169. La Bundeswehr se compone de tres categorías de militares: Los de reemplazo, los alistados a largo plazo (de 2 a 15 años) y los militares de carrera. Estos últimos po san a situacin de retirado entre los 52 y los 60 años, segGnsu empleo. La Bundes wehr debe, con un personal de composici6n tan diversificada, cumplir un gran n mero de misiones. Le es por lo tanto preciso disponer de un sistema de instrucci6n y de cultura no salo completo sino también muy variado. Naturalmente, los programas de instrucci6n y de enseñanza no pueden estar corn primidos en moldes rígidos; deben, por el contrario, ser lo bastante flexibles para poder adaptarse a las evoluciones internas y externas de la Bundeswehr. Las misio nes que incumben a los militares y a la técnica esh5nsometidas a una evoluci6n constante. La instrucciGn de los militares, concebida para el cumplimiento de di— chas misiones, debe tener en cuenta imbricaciones muy estrechas con un número re lativamente elevado de profesiones civiles. Las condiciones inherentes a la instruc ci6n y a la cultura en la Bundeswehrdeben, en la medida de lo posible, estar en armonía y ligadas a las imperantes en el sector civil. El “Plan Nacional de Forma cian Intelectual” , a escala de la RepGblica Federal de Alemania, esta en su fase de elaboraci6n. Nuestros sistemas de enseñanza escolar y profesional se hallan en plena mutacn. Esta situacin no deja de tener incidencia en los sistemas de edu caci6n y de enseñanza de la cultura, dentro de la Bundeswehr. Es una labor consi — — —16— derable cuya reo lizacin abarcar los años futuros, Los principios sentados en el informe que el Gobierno Federal presentar dentro de poco sobre la formaci6n ¡nte lectual, tendrán allí su plena aplicaci6n, — 170. El fundamento del servicio mflitar para el conjunto de los miembros de las Fuer zas Armadas es la instruccin general bsica, En el Ej&cito del Aire y en la Mari na la ¡nstrucci&i debe, como antaño, seguirse haciendo, principalmente en unida des de instruccin especializadas y en escuelas, dada la mayor tecnicidad de los sistemas de armas empleados y el m6salto grado de disponibilidad operacional re querido en estos Ejrcitos. — Actualmente, los aspirantes a suboficial y a oficial reciben, independientemen te del empleo técnico que tendrn que asumir, una instruccin de superior discipli nario, Esta se da por los Ejrcitos bajo forma de cursos en las escuelas de suboficia les y de oficiales. Antes de alcanzar la categoría de jefe, los interesados siguen un curso de jefe y de seleccin para completar su formacitn. Después, para prepararlos para sus papeles de jefes, pasan, en gran parte en coman, a la Escuela de Estado Mayor (Stabsakademie); la formacn de los futuros oficiales diplomados de Estado Mayor se realiza en la Escuela Superior de Guerra de las Fuerzas Armadas Federa les (lUhrungsakademie), Uno de los principios básicos del perfeccionamiento de la formacin de los oficiales y de su utilizaci6n es la alternancia entre el empleo en las unidades y en los EstadosMayores, los cursos en los centros de ¡nstrucc6n y los períodos como instructor, ello no s6lo en el marco nacional en los escalones ejrci— tos e interej&citos sino también en el de las autoridades de mando y de servicios de la NATO, De este modo, cualquier utilizaci6n en un nuevo sector de responsabili dad estc valorizada como un escalan en la formaci6n del oficial. — — — 171. La idea de que un oficial pueda conocer a fondo el conjunto de las armas y de los materiales de su zona de responsabilidad pertenece al pasado. La organizaci6n de las Fuerzas Armadas en armas especializadas y en armas de servicios es una evi— dencia dictada por los hechos. La carrera militar propiamente dicha ya no existe, sino que esta sust.ituída por un gran ni5merode funciones militares muy diferentes, El oficial o el suboficial uniformemente instruído, e intercambiable entre un gran nme ro de sectores, no es ms concebible que un ingeniero polivalente o un técnico “ah round” en una empresa comercial o industrial. Al lado de los cuadros de mando, las Fuerzas Armadas necesitan un gran n6mero de especialistas. — - Dada la elevada especiahizaci6n requerida, el programa de ¡nstruccin militar general prev que los oficiales y los suboficiales aprendan a establecer lazos de coo peracin entre especialistas de disciplinas diferentes ya realizar la coordinacin ne cesaría para el cumplimiento de la misi6n común, Al oficial de Estado Mayor le ca be, antes que nada, ser una especie de gerente con papel de coordinador de los es pecialistas. Queda no obstante invariable un sector del mando militar, especia Imen — - 17- te en las situaciones difíciles aquél en el que se requieren acciones decididas, rc pidas y homogéneas, que no se dejan ni transferir ni controlar técnicamente y don de el ¡efe militar debe echar en la balanza su poder de decisin y la confianza que se ha merecido por sus servicios y por su car6cter. En el porvenir, ya nadie llegara a General si no ha demostrado su eficiencia — fuera del marco del Ejército al que pertenece, ni nadie tendr6 altas responsabilida des militares si no ha sido afectado a un servicio integrado o en el extranjero. 172. A menudo sucede que la Bundeswehr pueda sacar provecho de los conocimientos profesionales civiles de sus miembros en su instrucci6n especializada. En el momen to del llamamiento de los militares del reemplazo, o de los alistados a largo plazo, se tienen en cuenta estos conocimientos previos en la medida de lo posible. En aquel los casos en que coinciden la profesn civil y la función en las Fuerzas Arma das, algunos especialistas pueden empezar su servicio con cierto grado (de cabo pri mero a comandante). Los conocimientos técnicos adquiridos antes del alistamiento en el Ejército son ampliados tanto como se puede mediante la instrucci6n militar, ello es una ventaja tanto para el interesado a su licenciamiento como para la Bun— deswehr. — — Los soldados se instruyen en su rama técnica durante la instrucción especializa da bsica, en los cursos de especializaci6n (Marina), en los períodos de especiali— zaci6n o mediante la instruccin llevada a cabo directamente en los lugares de tra bajo. Los suboficiales se forman en los cursos de especializaci6n, en parte organi zados fuera de la Bundeswehr. El ascenso a los empleos de sargento, sargento prime ro y brigada queda condicionado por los ex6menes de especializaci6n superados. Los oficiales participan, a la salida de las Escuelas de Oficiales, en cursos relacionados con sus destinos ulteriores previstos0 A título de ejemplo, se cita la formaci6n de los pilotos de aviones de reacci6n y de los oficiales responsablesdel empleo de los misiles del Ejército del Aire, en centros de instruccicn alemanes situados en los Es tados Unidos, de los ingenieros y de los expertos economistas, en las Escuelas Téc nicas de las Fuerzas Armadas en Darmstadt, Munich y Neubiberg y, de otros oficio les, en las Escuelas de ApI icac i6n de los Ejércitos. — En el futuro ser6 necesario, m6s que en el pasado, explotar los conocimientos profesonales bsicos y las posibilidades de formación que brinda la Bundeswehr, pa ra que sus miembros puedan prepararse mejor para sus empleos militares y perfeccio narse., Entonces la Bundeswehr podría centrarse mcs en la formacicn en aquellos te rrenos que no tienen una actividad paralela en el sector civil. — El militar que disponga de conocimientos técnicos mayores que sus compañéros civiles de la misma edad, asume antes una responsabilidad mayor en los planos per sonal y material. El jefe de un carro de combate (sargento) tiene, por término me — — 18— dio, 20 años; le son confiados una tripulaci6n de tres hombresy un sistema de ar mas evaluado en un mill6n de DM, Un sargento primero encargado de las operacio nes de mantenimiento de un STARFGHTERy con diploma de maestro, tiene una re! ponsobilidad del mismo orden que un jefe de taller de la aviacicn civil que mantie ne en vuelo aviones de complejidad similar, El comandante de un patrullero (alfa— rez de fragata o teniente de navío) tiene, por término medio 26 6 27 años; la tripu laci6n es de 39 hombres y el barco cuesta actualmente unos 10 millones de DM, 50 millones lbs de nuevo modelo. Mas el conocer en sus detalles el oficio de las armas no constituye la Gnica ca— lificaci6n del superior. La educaci6n y la ¡nstrucci6n son un requisito previo para el cumplimiento adecuado de la misi6n y no un suplemento secundario, Su promo— ci6n por la Bundeswehrresponde a un deseo de la joven generaci6n de ser formada científicamente y de pasar ex6menes cuyos resultados sean reconocidos en la profe— sicn civil. 173. Dada la evoluci6n de la política en el terreno de la formaci6n intelectual, el Gobierno Federal tiene conciencia de la necesidad de reorganizar los programas de educaci6n y de instrucci6n de lo Bundeswehr. Para ello se constituir6, en el Minis terio Federal de la Defensa, una comisi6n a lo que pertenecer6n fambin expertos extraños a la Bundeswehr. Se busca una estrecha colaboraci6n con el Ministerio Fe deral de Educaci6n y Ciencia. Se espera que ser6 posible presentar, durante el año de 1971, y sobre la base de los trabajos preliminares realizados hasta ahora por el Ministerio Federal de a Defensa, una propuesta homogénea relativa a los centros y a los programas de educaci6n y de enseñanza. Su nGcleo estar6 constituído por las grandes líneas directrices siguientes: — La Bundeswehrdebe estar acorde con la evoluci6n de la sociedad. Debe dar a sus conceptos profesionales, a sus fases de instrucci6n y de formaci6n intelectual un nivel tal que sus miembros saquen de ¿1 el mayor provecho posible, tanto durante su formaci6n profesional dentro de la Bundeswehr como posteriormente, a su regreso a la vida civil, lo que sirve simult6neamente a la eficacia de la Bundeswehr y a la vocaci6n de sus carreras militares, Las formas de instrucci6n y los ex6menesdentro del conjunto del sector militar deben corresponder, tanto como se pueda, a los del sector civil, El objetivo es el reconocimiento directo por el sector civil profesional de los cursos de especializaci6n del sector militar, o el reconocimiento después de la superaci6n de un curso complementario en el marco de la instrucci6n á.lfinal del servicio (reconocimiento indirecto) En lo relativo al modo de instrucci6n y de for— maci6n intelectual de los oficiales, la escisi6n actual en cursos organizados en las Escuelas de Oficiales, en la Escuela de Estado Mayor (Stabsakademie) y en la Es— cuera Superior de Guerra (Fúhrungsakademie), con una diFerenciaci6n de los ex6— menes de selecci6n, debe ser objeto de una revisión crCtíca. La formación de Esta do Mayor ser6 integrada allí. Los sistemas de formación intelectual de la Bundes— wehr deberón hacerse permeables. No sólo la planificación uniformada a escala fe — — -19- deral, sino también la necesidad de una posibilidad de utilizar muchos oficiales en toda la Bundeswehr, llevan obligatoriamente a una coordinaci6n de los distintos Ejrcitos Los establecimientos de formaci6n intelectual de la Bundeswehrdeben reagruparse en cuento sea posible Se estudian eventuales fusiones en las ciudades universitarias de Munich (facultades tcnicas) y de Hamburgo (facultades no tcni cas) que, ya hoy día, son los centros de perfeccionamiento de la Bundeswehr. — — Promoci6nprofesionalen’lasFuerzasArmadasFederales 174. No basta tomar las medidas necesarias para que un militar alistado a largo pla zo, que vuelve o la vida civil al trmino de. su compromiso, pueda volver a empe zar en el punto en que se había parado antes de ingresar en la Bundeswehr. Para el militar que ha concluído su contrato de alistamiento y que ha sido empleado en la Bundeswehr como especialista o semi—especialista, este “lugar de trabajO” no es ms que uno entre los dems de su vida profesional. La Bundeswehrque, en este as pecto, es un “empleador” debe prepararlo plenamente y en tiempo útil para su re torno a la profes6n civil.. Debe crear las condiciones previas que le permitan se guir subiendo los escalones de la vida profesional y social despus de su salida de la Bundeswehr. El legislador ha tenido esto en cuenta al dar a la formación profe sional de los alistados a largo plazo un lugar preponderante en la Ley sobre las pen siones y dems prestaciones en provecho de los ex—militares. — 175. Los militares clasificados en las categorías de carrera de los suboficiales y de tropa, con un tiempo de servicio mínimo de ocho años, ya tiene derecho a seguir, durante este tiempo, los cursos de enseñanza prófesional general en una escuela de formaci6n profesional de la Bundeswehr:’durante el Gltimo año de servicio para los alistados para ms de ocho años y menos de doce, y durante los dieciocho tltmos— meses del tiempo de servicio para los alistados de doce años o ms. — El papel de las escuelas de formaci6n profesional de la Bundeswehres el de am pliar, mediante cursos básicos, la cultura general de los cursillistas y luego incul carles, mediante cursos de perfeccionamiento, conocimientos profesionales genera les para que puedan participar con provecho en los cursos posteriores de ¡nstrucci6n y de formacn perfeccionadas. Estoscursos de las escuelas de formación profesio nal de la Bundeswehr llevan al diploma de estudios del primer ciclo,a la aptitud profesional en materias de economía o de la técnica, al bachillerato; los completa un curso de formaci6n administrativa (ver cuadro de la pgina 20). Los que salen de las escuelas de formación profesional pueden, por lo tanto, pretender situacio nes interesantes en la economía civil o puestos de funcionarios administrativos del cuadromedio en las instituciones federales, de los Laender o comunales. — — Las 34 escuelas de formación profesional de la Buncleswehractualmente existen tes, que emplean en rgimen de plena dedicaci6n a unos 200 profesores de los cua = 1 semestre Exdmenes Formaci6n I [Certificadodeaptitud profesional II Exd menes V/4?hJ II Diplomad éstud ios del prime ciclo Examen Carréras LL Examen Bachillerato IL_ fidel cyadro medio II Exa men profesional general enseñada en las Escuelas de formacin profesional de la Bundeswehr II — 21 — dros medio y superior, ms un cierto número de profesores a medio empleo, han vis to pasar por elIas 8.444 alumnos en 1969, En ese mismo año, 2.076 alumnos han su perado las pruebas de los exmenes de salida y, otros 600 del curso de formaci6n administrativa, pudieron empezar sus estudios en una escuela superior de pedago gía tras exmenes de selecci6n de los sujetos dotados. Cierto nGmerode ex-milita res alistados a plazo largo, que habían pasado su bachillerato en una escuela de formaci6n profesional de la Bundeswehr, siguen desde 1967 sus estudios en universi dades o en escuelas superiores. — — 176 Lasmédidasdeformad6n,dereajustédeciciosydereconversi6nprofesional llevadas a cabo por las 36 oficinas de reclutamiento y de las reservas de círculo tienden a dar a los militares alistados a plazo largo, durante su servicio y después de éste, toda la ayuda necesaria para prepararlos a su profes?6n civil, para que pue dan, no s6lo integrarse sin inconvenientes en el proceso del trabajó, sino tambn elevarse desde el punto de vista profesional y social. — — El servicio encargado de la promocin profesional tiene por misin actualizar las relaciones entre el hombre y su profesi6n, organizar el perfeccionamiento profesio nal durante e! período que sigue al del servicio, cooperar a la integraci6n en la vi da profesional civil y readaptar convenientemente a los militares físicamente lesio nados. Para mantener los contactos con la profesi6n durante el servicio se da la po sibilidad a los alistados y tambin, a partir de 1968 a los de reemplazo, de partici par en grupos de trabajo especializados, en cursos de especialistas y de asistir a con ferenc las tcnicas Ademcs, bibliotecas bien surtidas en las distintas ramas técnicas ponen sus libros a disposici6n de los que siguen cursos por correspondencia, posibi lidad cada vez rns aprovechada en estos tltimos tiempos. Algunas cifras permiten hacerse una idea del volumen alcanzado por tales medidas de la formacin profesio nal y evaluar hasta qu punto los alistados y los del reemplazo recurren a ellas. 177. Hasta ahora se han extendido 565.000 certificados —delos cuales mcs de 90.000 lo fueron en 1969—en los que se hace constar la participación en los grupos de tra bajo y en los cursos especializados, así como el resultado positivo de los exmenes correspondientes. 150.000 militares han participado en los cursos especializados; las bibliotecas especializadas han prestado ms de 400 000 libros; 16000 militares han participa do hasta ahora en los cursos por correspondencia. Una formaci6n y un empleo en las unidades, habida cuenta de la profesión y de la especia lizacin, han dado ya a mu chas militares alistados a largo plazo la posibilidad de pasar, durante su servicio, exámenes convalidados por el sector civiL — 178, Sobre la base de los convenios establecidos entre el Ministerio Federal de la De fensa y los restantes Ministerios o las organizaciones econ6micas a escalan federal, 22 ms de 39.000 militares han pasado, hasta el 31 de diciembre de 1969, durantesu servició, excmenes de diversas especialidades profesionales, de ellos mds de 9.000 obreros especializados, artesanos y empleados que han aprendido un oficio moderno con salida garantizada, y ms de 1.600 maestros. Esta preparacin para tales ex menes estaba desde luego condicionada a un alistamiento prolongado, no inferior a cuatro años, El personal que cumple esta condicicn y perteneciente a las catego’— rías de suboficiales o de tropas tiene derecho, a petición propia, a una formaci6n especialízada despus de haber cumplido su tiempo de servicio; la duraci6n de es— fa formacin especializada es funcin del tiempo de ajistamienfo (ver grdfico). Ex6 menessufridos por los militares alistados ante Comisiones civiles durante su servicio: 6073 Otros exdi enes de especialidad diploma el ?menfal ‘Refa11 di— ploma de r diofonra, tarjeta de soldador, fc. 1865 Obreros especial ¡za dos, art sanos, de penden ?S Maestros 449 313 - 1962 1969 1962 1969 1962 1969 *Refa._ Racionalizaci6n del trabajo por el estudio de los tiempos elementales. 179. A la luz de la promoci6n profesional y social, se puede considerar esta instruc— cn que tiene por finalidad el aprendizaje de un oficio y de un empleo apropiado en las unidades, la comunicación de una cultura general en las escuelas de forma— ci6n profesional de las Bundeswehr y las medidas tendentes a mantener los contac’ tos con la proFesi6n civil, como una preparaci6n a esta formaci6n especializada. Se ha tenido en cuenta este hecho en la segunda enmienda a la Ley de Pensionesy otras prestaciones en provehco de los exmilitares, prolongando substancialmente los distintos plazos de especializaci6n. — 23 Ademds, la ley permite ahora a los militares hacer una elecci6n en lugar de benefkiarse de la enseñanza profesional general en una escuela de formacn pro— fesional, tienen derecho, si lo desean, a una especializaci6n suplementaria y vi— ceverso, Mientras dura esta especializaci6n, los ex—militares alistados a largo pio zo se benefician de una subvencin que les permite disfrutar, habida cuenta de sus emolumentos de transición, de un ingreso igual por lo menosal 90% del importe de su tltimo sueldo, Aderns, disponen de una vivienda de servicio mientras dura la especialzacin; los gastos de viaje ocasionados para ir a presentarse a un nuevo empleador se compensan hasta un cierto importe y se asigna una subvención por gastos de mudanza, cuando es necesario un cambio de domicilio, al trmino de los estudios de especialización para poder ocupar el puesto de trabajo — — — Duración de la formación en las escuelas de formación profesional de la Bundeswehr (EFPBW) y de la especialización para los alistados. Tiempo de servicio Formaciónen las EFPBw EspeciaUzacón — Semestres integralmente intercambiables O 405 años 60 7 anos 1 petición, 1 semestre a de estudios en una EFPBw IDI9 000 p000go _____ i2a15 ANTES del final del tiempo de servicio DESPUESdel final del tiempo de servicio Hasta el momento actual, unos 85000 alistados se han beneficiado de esta fór mula de especialización antes del final de su tiempo de servi cio. Los oficios que han elegido pasan de los 500, y su gama va desde el conductor de maquinas de movimiento de tierras hasta el cantante de ópé ra, Las cifras siguientes (redondeadas) permiten hacerse una mejor idea: 24 - - Alrededor — Han llegado a ser —Han ( )( /Vtaestros. . . .. Técnicos... Ingenieros . . ( Carreras comerciales ) Carreras universitarias hecho..,.,,,.,, ( ñanza e. . . .. . . , . . . • . — . •. Obreros especializados. Soldadores. . . . . . . . Han sidoformados ,. (Conductores de maquinas. . , 10 000 7.600 2,500 . (inclurda la ense Formaci6n IingUistica • • • • • Formaci6n en informHca (“Sanidad e higiene ptbUcas” ( ) . .. ( —Han recibido,..,,,,. . • . de: . o , o e o o . . . , . . . . , 7100 1 ,100 o 1.600 4000 1 .500 3,100 . e ..... 4.500 2,150 La mayor porte de los alistados que han alcanzado, durante su servicio en las Fuerzas Armadas Federales, un certificado de aptitud profesional como obrero espe cializado o como artesono, han optado por perfeccionar su formaci6n, despus del servicio, utilizando las posibilidades brindadas para llegar a ser contramaestres,tc nicos o ingenieros por cuenta de la Bundeswehr. — 180. La transferencia en lo vida profesional se ha llevado a cobo, hasta ahora, sin di ficultades, La posibilidad de conceder una subvencicSnde transicin a los licencia dos para facilitarles la integraci6n en la vida profesional civil no ha tenido, en vis ta de la situaciSn favorable del mercado del trabao, significaci6n material. En efec to, sSlo se registraron 27 en 1969, y, desde 1960 al final de 1969, un total de 373 solicitudes de este género. 30, 0 1965 Gastos anuales en millones de DM para la promoci6n prof esiona 1 1970J -25- 181. Se han aplicado medidas de asistencia específicas de promoci6n en el terreno profesional, a los militares que habían sufrido daño corporal durante su servicio y que han tenido que ser objeto, por este hecho, de una revisi6n de clasificaci6n.Se ha dado, en ms de 11.000 casos, una asistencia plenamente eficaz. 182. Algunas cifras ilustrar6n, finalmente, el siginificado y el volumen creciente sin cesar de la promoci6n profesional. Los gastos de la Bundeswehren este capítulo, hasta el 31 de diciembre de 1969, son del orden de los 98 millones de DM. En 1960 s6lo ascendían a 483.000 DM, para alcanzar 21,5 millones de DM en 1969. Los crdTtos para los años pr6ximos prevén, por lo menos, 30 mfl Iones de DM por año para atender a estos gastos (ver esquema p6g. 24), — — — 183. La industria, el comercio, el artesanado y los servicios públicos reconocen am pliamente que, la Bundeswehr, al licenciar a sus alistados, pone a su disposici6n un personal cuyas cualidades profesionales superan con mucho el nivel que tenían antes de su ingreso en las Fuerzas Armadas, — — El desarrollo de las escuelas de formaci6n profesional de la Bundeswehry de su servicio de promoci6n profesional, ha culminado en la creaci6n de una segunda ca dena de enseñanza notable. Por ello, la experiencia adquirida por la Bundeswehr en todos los terrenos de la instrucci6n, del perfeccionamiento y de la reviskn de la clasificaci6n de los adultos, ha influído en forma ejemplar en las leyes acerca de la promocf6n del trabajo y de la enseñanza, ambas entradas en’vigor én 1969. — — 184. Para los militares con menos de 12 años de servicio se ha creado el certificado de admsi6n y luego, después del 1 de enero de 1970, el certificado llamado de in— tegraci6n, que permite el ingreso en los servicios ptblicos. Estos certificados conf ¡e ren a sus titulares el derecho de ocupar puestos reservados para este efecto en ¡nsti tuciones federales, en los Laender y en municipios. El certificado de integraci6n garantiza por diez años un determinado activo, o sea que, durante este período, los emolumentos pagados por los servicios pblTcos no deben ser inferiores al importe del Gltimo ingreso disfrutado en la Bundeswehr, Las experiencias adquiridas duran te varios años por el servicio de promoci6n profesional han demostrado, sin embar go, y en contra de lo que se esperaba, que s6lo alrededor del 16% de los miltares con un compromiso de varios años, y apenas un tercio de los militares con 12 6 m6s años de servicio, se han interesado por un puesto en los servicios públicos. — — — 185. El Gobierno Federal se propone ampliar atn ms el abanico de las posibilidades de formaci6n de los militares alistados a plazo largo. Se prevn cursos en las escué las de formaci6n profesional de la Bundeswehr para la obtenci6n del título de bachi ller (a partir del 22 semestre de estudios 1970, empezando por las disciplinas: tcn ca, economía,, pedagogía social y trabajo social; el primer examen de fín de estu— dios esta previsto para fines de junio de 1971). Se piensa, ademas, en cursos para que puedan obtener el diploma de primer ciclo aquellos suboficiales de carrera que parezcan aptos para estudiar la carrera de oficialespecialista y, finalmente, en la preparación de los militares candidatos a las escuelas de formaci6n profesional de la Bundeswehr, con vistas a su ingreso mediante una enseñanza por correspondencia y su particpacin en el telecolegio. Una planificacin de prornoci6n profesional tendrá por objeto coordinar, con ma yor intensidad que antaño, la instruccin y el empleo de cada soldado.por su unidad con el oficio que haya aprendido y su objetivo particular profesional posterior. Espe cialmente lo que se busca es una utílizacin adecuada de los militares durante su ser vicio, para que puedan hacer valer una parte de este período corno practica profesio na 1. Por otra parte, existe un estudio en vías de desarrollo que tiene por obleto deter minar medidas de prornoci6n profesional para los oficiales que hayan firmado un corn promiso, a fin de definir hasta qué punto pueden ser ampliadas. Este estudio abarca también a los militares de carrera que, por haber llegado a límitesde edad, dean el servicio activo, 186. La promoci6n profesional de los del reemplazo será asimismo incrementada0 Se piensa en crear para los bachilleres del contingente la posibilidad de tomar parte en una enseñanza por correspondencia para que puedan prepararse, durante el tiempo de su servicio, para los estudios que se proponen seguir0 Desde abril de 1970, los in teresados pueden hacer sus estudios de los 19y 29 semestresinscribiéndose en el “Co legio—radio Quodriga”, que cuenta con un total de 56 secuencias de media hora, di fundidas por radio durante las emisiones de la tarde, y cuyo principio estc constitur do por una introducci6n a las matemticas modernas, El servicio de promoción profe sional corre con la totalidad de los gastos de estas emisiones, Puede concederse, a peticin, una subvenci6n substancial para la compra de los artículos y materiales ne cesarios, Han sido creados “círculos de encuadramiento de los estudios”, en las guar niciones pertenecientes al sector regional afectado por dicha emisi6n, — — Las prestaciones de la promoci6n profesional han progresado en estos iltimos años, tanto en volumen como en importancia. Esta evoluci6n tiene como consecuencia la de dotar y equipar las escuelas de formaci6n profesional de la Bundeswehry su servi cio de promoci6n profesional, tanto en el plano material como en el de personal, pa ro atender eficazmente a las necesidades, Las acciones previstas a este respecto abar carn, especialmente, la mejora de la infraestructura de las escuelas de formaci6n profesional y el refuerzo del personal del servicio de promoci6n profesional, Por otra parte, dichas escuelas seguirn atentamente los desarrollos modernos en lo relativo a didctica, a investigací6n en materia de “curriculum” y otros extremos afines. Para ello se va a organizar un grupo de trabajo permanente, - 27 - III.EQUIPO Armasyequipo 187. La Bundeswehrnecesita un armamento y un equipo que le permitan una accicn rpida y eficaz, que le asegure una gran movilidad y la haga apta para operar en comGn con sus aliados en el marco de la NATO. Esto supone una adaptaciSn contí nua y esfuerzos renovados sin cesar. — - El plan de armamento progresivo prevé, para el período comprendido entre 1970 y 1974, gastos de unos 27 mil millones de DM para el armamento y el equipo de las Fuerzas Armadas Federales. Ha sido obleto de nuevas discusiones con ocasi6n del “inventario crítico”. El Gobierno Federal anterior y los comités competentes del Parlamento ya habían aprobado una buena cantidad de proyectos para la puesta en condkiones del mate rial de la Bundeswehr(ver cuadro anexo). Cuando entr6 en funciones el Gobierno— actual estaban en los estadios de planificacicn, de estudio y de realización. Mas el inventario crítico ha puesto de manifiesto la necesidad de una nueva distribución de los créditos para la defensa, Es, por lo tanto, preciso proceder a un nuevo exa men de todos los proyectos iniciados en materia de armamento, desde el punto de vista de su oportunidad militar, de su practicabilidad y de su urgencia. - - El Ministro Federal de la Defensa ha tomado ya una serie de decisiones para am putar sensiblemente los programas aprobados en tiempos de su predecesor. De este modo: - L de acuerdo con el Gobierno de los Estados Unidos, el estudio en comGn del carro de combate 70 (MBT) ha sido suspendido. Esta previsto sin embargo incorporar algunos de sus conjuntos al carro LEOPARD II (ver párrafo 190); 2. el nGmerode aviones de combate del nuevo tipo MRCA, en cuya puesta en servj cio se piensa, ser reducido de 800, cantidad inicialmente prevista, a un mdxi mo de 420 (ver p6rrafo 191); 3. el programa de loshelicópteros previstos paraelEjercito de Tierra serárevisado con criterio ms restrictivo (verp&rafo190) 28 4. la fragata 70 ha sido relegada a la fase de concepci6n .a causa del constante au mento de los presupuestoscorrespondientes (ver p6rrafo 192); 5. ser6 asimismo objeto de reconsideroci6n el programa de aprovisionamiento de ca rros antiaéreos, Armasyequiposacóncurréncicdé60milmillonesdeDM 188. La activaci6n de la Bundeswehr no se llev6 a efecto sino después de 1955. co mo el tiempo apremiaba, se recurri6 para su dotaci6n inicial a materiales pronto disponibles que, desgraciadamente, no respondían siempre a las exigencias del pro greso técnico. El extranjero, especialmente los EstadosUnidos, proporcionaron ma feriales pesados por un valor total de m6s de 4 mil millones de DM, a saber, carros de combate M47, carros antiaéreos M42, piezas de artillería de distintos calibres para el Ejército de Tierra; aviones de combate y de reconocimiento F—84para el Ejrcito del Aire, destructores, fragatas—escuelay buques de desembarco para la Armada — — Posteriormente, esta dotaci6n inicial fue completada o sustituída por materiales modernos adquiridos en su mayor parte en los EstadosUnidos, Buques de pequeño to nelaje, vehículos autom6viles no acorazados, material llamado “no duro” (menaje de acuarfelam?ento, vestuario y dem6s artículos de este tipo) fueron comprados en la RepGblica Federal de Alemania0 Simult6neamente empezaba la construcci6n, ba jo licencio, de los sistemas de armas de origen extranjero: vehículos acorazados de combate de infantería .HS3O, misiles antiaéreos HAWIÇ aviones de combate y de re conocimiento F—104G (STARFIGHTER)Javiones de combate ligeros G-19, dragam nas costeros, y misiles SIDEWINDER para armamento de los aviones de caza, A partir de 1958, la Bundeswehrfue equipada con vehículos portadores de cabé zas nucleares t6cticas, pero sin dichas cargas nucleares, Estossistemas de armas son exclusivamente de origen americano. Comprenden como vehículos portadores, ade— m6s de una parte de los STARFIGHTER, los sistemas t6cticos tierra—tierra PERSHING (alcance m6ximo de unos 700 km.), SERGEANT (hasta 150 km,), HONEST JOHN (hasta 40 km,) y el misil tierra—aire NIKE, A fines de 1969, los gastos comprometidos para equiparo la Bundeswehren ar mas y materiales, incluídas las municiones y las piezas de recambio, habían alcan zoclo unos 60 mil millones de DM, El inventario de los materiales principales —situoci6n en 31 de diciembre de 1969—figuro en el ctiadro siguiente. — Principales materiales de la Bundeswehr (Situaci6n en 31 de diciembre de 1969) ‘EJERCITODETIERRA 1 .462 carros de combate M 48 1 .838 carros de combate LEOPARD 770 contra carros (cañ6n) 316 contra carros (misfl AC) 1 p768 vehfculos acorazados de combate de infanterfa HS 30 1 .608 vehiculos acorazados de combate de infantería HOTCHKISS 3. 139 vehículos acorazados de transpor te de personal M 113 496 carros antiaéreos M 42 77 obuses automotores M 110 de 203 mm 149 cañones automotores de 175 mm 347 obuses automotores M 109 G de 155 mm 272 obuses de 105 mm 360 morteros de 120 mm lanzamisiles dirigidos SERGEANT lanzamisiles HONEST JOHN 81 aviones ligeros de enlace Do—27 231 helic6pteros de transporte ligeros UH-1D, H-34, VERTOL 226 helicSpteros de enlace ALOUETTE II EJERCITODELAIRE 130 avknes de enlace ligeros Do27 511 aviones de combate F—104G STAR 113 heliccSpterosde transporte ligeros F IGHTER UH-1D 119 avTonesde combate y de entrena 54 helic6pteros de enlace ALOUETTE II, miento TF—104G BELL 47 21 aviones de entrenamiento F—104F 310 aviones de combate Ugeros G—91R/3 rampas de lanzamiento para misiles an 40 aviones de combate y de entrenamiento tiareos NII ligeros G—91T3 rampas de lanzamiento para misiles an 179 aviones de transporte NORATLAS tareos HAWK 32 aviones de transporte TRIANSALL rampas de lanzamiento para misiles 4 transportes pesados BOEING 707 PERSHING radares DA de largo alcance MARINA 18 1 1 destructores 24 6 fragatas 1 40 buques lanzatorpedos 40 11 submarinos 20 30 dragaminas rpidos 24 dragaminas costeros 103 aviones de combate y de reconoci miento F-104 G + TF104 G 23 heic6pteros 5-58 SAR 5 hidroaviones de casco ALBATROS STAR dragaminas Fluviales buques de desembarco buque escuela (“DEUTSCHLAND”) auxiliares, suministradores y cargos aviones patrulleros antisubmarinos BRE GUET ATLANTIC —30- Necesidaddelarecónvérsi6n 189. Al principio de este nuevo decenio, la Bundeswehrse halla abocada a proceder a compras de gran envergadura que se revelan necesarias por cuatro razones: 1). Parte de la dotaci6n inicial de las Fuerzas Armadas Federales era ya tcnica— mente anticuada desde un principio. La rapidez del progreso tcnico, así co mo la carrera entre la mejora de los resultados y el aumento de los gastos, no han cesado de crear serios problemas ni cesaran de crearlos en el porvenir. 2), En muchos casos, la duraci6n de la vida normal de los materiales puestos en servicio en su día esta sobrepasada y toca a su fin, A veces el desgaste es tal que los gastos para el entretenimiento y nueva puesta a punto del material so brepasan con mucho el nivel econ6micamente razonable; ademas, van surgien do serios problemas de seguridad, especialmente cuando se trata del material aeronáutico. 3). El armamento de las Fuerzas Armadas Federales! esencialmente adaptado al con cepto estratégico de “represalias masivas”, ya no es ptimo desde que este con cepto ha sido sustituído, en 1967, por la doctrina llamada de “respuesta flexi ble”. El STARFIGHTER, por ejemplo, destinado en el futuro sobre todo a misio nes convencionales, vale poco para el apoyo a tierra. Los materiales de los aviones se ven mucho ms solicitados para el vuelo a baja cofa que para el vue lo a alta cota. Por ello este avin, concebido en primer lugar para los ataques nucleares y para la defensa aérea, no ha alcanzado an la eficacia deseada que requiere el apoyo del Ejrcito de Tierra por las armas convencionales, — - 4). Respecto al estudio y aprovisionamiento de diversos materiales, los Gobiernos Federales precedentes aceptaron los riesgos al seguir un método abusivo debido, veces, a precios desmesuradamenteelevados o a defectos tcnicos. Así, para la serie de 12 submarinos encargada a principios del pasado decenio, se había empleado una calidad de acero amagntico que, al no presentar una resis tencia suficiente a los efectos del agua de mar, empez6 a corroerse, Pesea serios esfuerzos, no fue posible poner remedio a tal corrosión, Lossubmarinos U—1 y U—2, tuvieron que ser transformados y el acero amagntico incriminado sustituído por un acero normalmente utilizado en las construcciones navales; los submarinos U—4a U—8 recibieron un revestimiento protector de cinc que tuvo por efecto el de reducir sensiblemente su capacidad de inmersión, Estos submarinos ya no pueden servir mcs que para entrenamiento. Solamente los submarinos U—9a U—12, para los que se em— plec una nueva calidad de acero amagntico, han sido entregados a la armada y es - — fon operacionalmentedisponbles0 —31— El vehículo acorazado de combate de infantería HS 30 se puso en servicio sin estar suficientemente experimentado y s6lo se ha podido poner a punto poco a poco, tras miltiples retoques. El avin de reconocimiento BREGUETATLANTIC presenta ba también defectos tcn kos, debidos principalmente a un fenmeno de corrosin en condiciones atomosfricas particularmente desfavorables. Estosdefectos ehu— bieran pódido prevenir mediante una experimentaci6n m6s prolongada. Si las Fuerzas Armados Federales quieren conservar su valor de disuas.i& deben renovar gran parte de sus armas y de su equipo e Pero, por razones de índole finan ciero no se puede hacer de golpe una reconverslin, asta deberá sin duda escalonar se a lo largo de un período que pasard de 1980. Esta reconversin debe reflejar, tan claramente como sea posible, el carcter defensivo de las unidades de la Bun deswehr y aumentar su potencial de combate convencional. - 190. Para el Ej&cito de Tierra, tiene un significado cuádruple: mento de la movilidad, mejora y refuerzo de la defensa contra la aplicación de los principios arriba expresados aumento de la potencia de fuego convencional, au de la defensa contra aviones volando a bajo altura carro0 — Para aumentar su potencia de fuego convencional, los regimientos de artillería acorazada tendrcn una tercera batería de tiro. Para ello, 244 obuses automotores M 109 de 155 mm. al precio (1) unitario del orden del medio millan de DM (2) van a ser encargados. Ademas, el programa de aprovsnamiento prevé 209 (3) lanza cohetes multitubos ligeros (armas de saturaci6n) al precio de 0,4 millan de DM, des tinados a equipar los regimientos de artillería divisionaria, cada uno de los cuales estar reforzado con dos baterías de tiro. Nuevas municiones aumentaran la efica cia de este sistema de arma y permitir6n atacar los objetivos ms variados. — Con el fin de mejorar la movilidad del Ej&rcito de Tierra se han encargado 1.845 carros de combate LEOPARD (al precio de 1,1 millan de DM (2)). Eran nece sanos para dotar de nuevo a los 1 y Hl Cuerpos de Ejrcito. Se piensa en encargar, en caso necesario, 342 unidades suplementarias destinadas a constituir el volante de circuito. Los carros de combate del tipo anticuado M 47 han sido reformados. Es t previsto sustituir, después de 1975, los carros de combate M 48 del II Cuerpo de Ejército por carros LEOPARD II, Esta versi6n tendr elementos procedentes del ca rro de combate 70 y con juntos probados del LEOPARD. — — (1). Losprecios citados son, salvo ¡ndicaci6n en contra, precios unitarios presupuesta dos. Se componen del precio unitario medio del material principal, incluídos acce sorios y/o materiales asociados (armas, conjuntos electr6nicos) y de los gastos secun dorios para los cuadernos de especificaciones, los transportes y embalajes, la dota cicSn inicial de piezas de repuesto (por ejemplo, equipos de servicio en tierra y apa ratos de control), la documentaci6n técnica y la codificaci6n. Pero no tienen en cuenta carburantes, municiones, akances en cadena. 32 El Ejrcito de Tierra concede particular importancia a la cooperacin entre los carros de combate y los vehícu los acorazados de combate de infantería. Por ello el LEOPARD tendrd a su lado el VCI MARDER que acaba de ser puesto a pun to. Los Cuerpos de Ejrcito 1 y III sern las primeras Grandes Unidades que los ten gan en dotaclin. Esta en marcha el aprovisionamiento de 1.926 MARDER (precio: 0,75 mill6n de DM aproximadamente (2)). Su entrega esta prevista para 1974. Pa ralelamente serán entregados 245 mortores automotores de 120 mm, de la familia de los vehículos MARDER. Esta comprende, ademas, vehículos acorazados de ob— servaciSn y localizaci6n de artillería, de AA, de mando y de AA. de vigilancia cuya entrada en servicio esta prevista para ms adelante. — — — — El aumento de la aeromovilidod se ha iniciado. Desde 1968, el Ejrcito de Tie rra ha recibido 204 helicSpteros de transporte ligeros del tipo UH—1D(al precio de 2,5 millones de DM), La entrada en servicio a partir de 1973 de 135 helic6pteros de transporte medios CH—53 (precio: 11,3 millones de DM) debe responder a la ex gencia de un transporte areo en una oleada por Cuerpo de Ejrcito de un batall6n reforzado de tropas aerotransportadas o de cazadores. El importe global de los carros de combate, de los vehículos acorazados de c9rn bate de infantería y, sobre todo, de los helic6pteros de transporte, ha inducido al Ministro Federal de la Defensa a volver a examinar estos proyectos y a pensar de nuevo la decisi6n de su aprovisionamiento. — Asimismo, el proyecto de sustitución del vehículo acorazado antiaéreo M 42 por un sistema de arma ms moderno, debe ser objeto de nuevas consideraciones. — La defensa contra los aviones en vuelo a baja cota será mejorada por la entra da en servko, hacia 1974, del cañ6n automtico de 20 mm, (precio unitario: 80.000 DM), El volumen del encargo -segin los planes actuales: 984 piezas—ser nuevamente considerado. Este sistema de arma vale también para el combate ferres f re. Para la lucha contra carro las fuerzas disponen actualmente de cazacarros aco razados con cañ6n y de otros equipados con misiles AC y con cañones sin retroceso de 106 mm. sobre chasis HS 30, Se piensa en armar el cazacarros de misiles con in genios ms eficaces y de mayor alcance, Por otra parte, el Ejército de Tierra con cede mucha importancia al aumento de eficacia de las armas portdtiles AC. Se van a adoptar nuevas municiones de mayor alcance y de manejo ms seguro: las entregas empezaran, para la versin pesada de las armas porttiles AC, a fines de 1970 y, para la versi6n ligera, a principios de 1972. — 191. (2). (3). Para el Ejército del Aire, lo que ms importa es aumentar sus capacidades de reconocimiento,mejorar sus medios de defeccin y de defensa contra aviones yo— Preco unitario presupuestado (dotación inicial en piezas cJerepuesto excluída). De ellos 8 procedentes de pruebas militares y 201 de fabricacin en serie, - bajácoto>’ lando a 33 - réforzarlel apóyo areó én proveChQdel Ejercito.de.Tierra. Se han encargado 88 aviones de reconocimiento del tipo RF-4E PHANTOM (al precio de 23 millones de DM); est6n equipados con radares de barrido lateral (SLAR) Ademas, es preciso proteger mejor las instalaciones en tierra contra avio nes volando a baja altura. Para ello se ha decidido la compra de 1670 cañones automáticos gemelos de 20 mm sobre afuste (precio unitario unos 0,25 mill6n de DM); han de ser entregados hasta }974. Para asegurar una mejor deteccin de los aviones en vuelo a baja cofa, la red de vigilancia y detecci& antia&ea serc5equi pada, durante los prúximos diez años, con 56 radares modernos cuyo aprovisiona miento acaba de ser lanzado, - . - En la segunda mitad de este nuevo decenio entrara en servicio un nuevo avi&1 de combate, el MRCA (Mult—role Combaf Aircraft), destinado al apoyo de las fuerzas terrestres en todo tiempo y o conseguir una superioridad temporal y local; empezará entonces a sustituir el STARFIGHTER F-104G y el FIAT G—91. Este o vi6n serc construido en común por Gran Bretaña, Italia y la Repúblico Federal de Alemania — La fase de definici6n del MRCA ha terminado. Gran Bretaña y la RepúblicaFederal han elegido, sobre todo por razones de seguridad, la versión biplaza y bi motor. El avión serú de geometr(a variable. A5f concebido, presentor cualidades de vuelo favorables, tanto en el rgirnen subsnico como en el supers6nico, y 1e bastar6n para aterrizar pequeños terrenos de pistas cortas. Ya en el estado actual de la revisi6n del programa MRCA se ha tomado lo decisi6n de reducir drústicamen te el número de aviones, de los 800 que fueron inicialmente propuestos al Bundes— tag. Debido al precio elevado de este avión moderno, las Fuerzas Armadas federa les s6lo piensan adquirir un máximo de 420 parte de ellos para satisfacer las necesi dades de la Marina. El desgaste, las pérdidas y la duraci6n de la vida calculada para los sistemas de armas volante condicionan el rito de la reconversión. Como el MRCA no estar disponible antes de 1977/78, habrú que rellenar un vano. En sustitución de las pr didas de aviones F—104, serán construidos bajo licencia en 1974, 50 STARFIGHTER, (36 para la Marina y 14 para e.l Ejrcito del Ake), al preck unitario de 9 millones de DM. Ademús, para mejorar el entrenamiento de los pilotos y para compensar las prd idas padecidas, se piensa comprar asrmismo, en 1971, y a trtulo suplementario, 22 aviones escuelas G—91T 3 al precio unitario de 4,3 millones de DM. Finolmen te, prosiguen estudios con los servicios técnicos franceses para la realizaci6n de un avkSn escuela que permita el entrenamiento en común de los pilotos franceses y ale: manes. - 192. 34 - Marina La federal se ve obligada a retirar del servicio las unidades navales anticuadas, Los cinco destructores de la clase FLECHTER, todavía en servicio y puestos a disposicin de la Bundeswehr por los EstadosUnidos a título de prstan,o, datan de la segunda guerra mundial, El plan ya aprobado por el Bundestag de sus tituir estos destructores por cuatro fragatas, cuyo precio unitario pasar6 con cre ces de los 200 millones de DM, esta en vías de revisi6n bajo el doble punto de vis tafinanciero y militar. En cuanto a los 40 buques rpidos de la Marina federal, su vida operacional llega al fin. Presentan señales evidentes de fatiga como consecuencia de las so licitaciones considerables del material, Por ello se prevé, en primer lugar, susti tu ir, a partir de 1974, los diez primeros por otros diez, armados con misiles (des plazamiento 350 toneladas; sistema de arma dé triple’ empleo “Standard Missile la’; dos cañones de 76 mm y torpedos) Acaba de ser lanzada la construcción de los submarinos U—1’3a U—24llama dos a sustituir los submarinosU—3a U-8, que no estin plenamente operativos (pre cio unitario: 50 millones de DM). Entraran en servicio en la Armada a partir de 1972. Con un desplazamiento de 450toneladas, cada uno estc armado con 8 tubos lanza torpedos, La Marina proyecta tambnla sustitucin de losF-104 porMRCA, en lase gunda mitad del presente decenio. Asimismo, antes de 1973 el servicio de salva mento quedara modernizado por la compra de 22 helic6pteros del tipo SEA KING SAR (precio untario 10 millones de DM). Para asegurar una mejor protección de las unidades navales y de la infraestruc tura de la Marina contra aviones en vuelo a baja cofa, se compraran, antes de 1974, 250 cañones aufomcticos de 20 mm, (embarcados) y 330 piezas asentadas tierra (al precio unitario de 80.000 DM) (1) — Plan ificaci6ndearmamento1970-1974 193. (1) En 1968 el Gobierno federal presentaba, por vez primera, una planificación de armamento que recapitulaba las intenciones de adquisicin y las necesidadesde créditos para el equipo y el armamento de las Fuerzas Armadas federales. Poste— riormente, este plan fue puesto dos veces al día, o sea adaptado a la evolución de los costos y de los plazos de fabricación. El plan y sus dos enmiendas han sido pre Precio unitario presupuestado (excluída la dotacin inicial de piezas de repuesto). - 35 - sentados al Cornit parlamentario de la Defensa y al de Presupuestoy Finanzas, que han levantado acta de ello, La nueva puestaal díadel plande armamentoparalosañosde 1970a 1974 prevé gastoshasta26,9 miimillones de DM. Si no fiese posible, proceder en tiempo 6til al desbloqueode los935 millo nes de DM congelados para remediar la coyuntura, el ejercicio de 1970 s6lo dis pondr6 de 3,8 millones de DM para la realización de los proyectos de adquisici6n. Esto significar6 que los pro,.;ectosno se podr6n cumplir en su totalidad por loscré ditos reducidos, por lo que ser6 necesario proceder a una nueva distribuci6n de los créditos. El inventario crítico no dejar6de tenerrepercusiones sobreel programa dear mamento. Ha resultado, en efecto, que hay que prever cerca de 2,5 mil millones de DM para hacer frente, hasta finales de 1974, a los gastos de la Ayuda social en su m6samplia acepci6n. Estos gastos no figuraban en los planes de financiafl miento ¡nicialmente establecido. Si una realizaci6n retardada de los proyectos no tiene, ella sola, por efecto disminuir el ritmo de empleo de los crdtos y, en su consecuencia, aliviar la situación actual, el Gobierno se ver6 obligado a ampu tar los programas de armamento y a extenderlos sobre un periodo m6s largo, con el fin de ganar la latitud financiera que .precisa. — ARMAMENTO 194. Y ECONOMIA NACIONAL El inventario crítico de las Fuerzas Armados federales no había aGn tenido en teramente en cuenta el papel de la organizaci6n en el terreno del armamento ylos procedimientos que hay que seguir en materia de técnica militar. Estos elementos son objeto de un examen m6sdetallado que el Ministerio federal de la Defensa acaba de ¡niciar.. El presente Libro Blanco no pretende pues pronunciarse defini tivamente acerca de la organizaci6n futura de los terrenos de la “Economía”, de la “Tcnica” y de la “Adquisic6n”. El texto siguiente s6lo representa una des cripci6n de la situaci6n de partida. - ElarmamentoenelmarcódelaAlian±áatl6ntica De la misma manera que la seguridad de una Rep6blica federal aislada es in concebible y s6lo puede ser garantizada por una Bundeswehr totalmente integrada en las Fuerzas Armados de la NATO, también es incóncebible una industria de de fensa aislada. En el seno de la Alianza los esfuerzos realizados en cuanto a arma menfo se presentan bajo la forma de investigaciones y de estudios comunes, de — - 36 - construcciones bajo licencia y de programas colectivos. Esta exteriorizan en los trabajos de organismos y de instituciones, destinados a las investigaciones y a los estudios comunes, en el marco de programas internacionales en los que participan las industrias de diversos países, así como la asociaci6n de empresas industriales por encima de las fronteras y se manifiesfan, finalmente, mediante informes mili tares acerca de licencias y de patentes. — — Pero en este marcosé inscribe, no sin necesidad, la organizaci6n de una capa cidad industrial propia que permita a la Bundeswehr poner en servicio, y entrete ner con sus propios medios y recursos, los sistemas de arma importados del extranLe ro, cooperar a igualdad de derechos en los escalones internacionales y crear las condiciones previas para una logística nacional tal como la NATO exige. Las ex periencias adquiridas por las dems naciones industriales del Oeste demuestran, por otra parte, hasta que punto el desarrollo y la producci6n de sistemas de arma modernos favorecen el progreso tecnolgico en general y la puesta a punto de m& todos modernos de gestión, que permiten hacer frente o los problemas tcnico—eco nómicos tan complejos de nuestra época. — Incluso en el futuro, el Gobierno federal no tenderá a una autarqoía en cuanto a armamento y ello por razones de tipo político, econ6mico y financiero. Por ello serc normativo que los sistemas de armas complejos se desarrollen y se reo Picen en cooperaci6n con nuestros aliados, Ademas, el Gobierno federal se es— forzare siempre en impedir, medknfe el paso reglamentado y controlado de los encargos, la creaci6n de supercapacidcides que, por el hecho de un decrécimiento temporal de las necesidades militares, puedan ocasionar problemas de planos decar ga difíciles de resolver, Quedan lagunas por rellenar, sobre todo en lo referente a la planificaci6n, el desarrollo y la fabricaci6n de sistemas electrónicos de informa ci6n y de acci6n del mando (SEIAC) y de sistemas de armas con mando electr6ni— co. - — Partealícuótaalemdria 195. Entre 1955 y 1969, la Bundeswehrha gastado para armamento alrededor de 84 mil millones de DM, de los cuales 60 para compra de los materiales, 17,2 para su mantenimiento y 6,8 para los trabajos de investigaci6n, de estudio y de pruebas. 46,8 miles de millones, o sea el 61,3% de los gastos totales relativos al arma mento, y 30,5 miles de millones, o sea el 55,6% de los gastos previstos para las compras, han quedado en el ¡nteror de) pcils. Después de la actváci6n de ¡a Bun dewehr, la parte alícuota de los créditos gastados poro el armamento que se ha que dado en el interior del país no ha dejado de aumentar. Sin embargo, tales gastos sclo suponen un porcenfale mínimo del conlunto de la producci6n, varía alrededor — —, — del 2% (ver cuadro púg.38) Pese a asta dbil contribución, el armamento ha sido fuente de importantes impulsos del progreso tcnico y de la opciún por el sec tor privado de nuevas estructuras y de técnicas modernas. He aquí algunos ejenr” .:los: desarrollo de nuevos materiales, microminiaturizaci6n, creaci6n de sistemas complejos constituidos a partir de m6dulos por elementos de grin variedad de uti lizaci6n, puesta a punto de nuevos mtodos de explotaci6n y de gestión. . Gastos anua!es para el armamento en miles de millones de DM 9,313 Esta media del 2% no abarca, desde luego,, a todas las ramas de la industria. Algunas, como la industria aeronáutica, los productos de armas y municiones de penden mucho mús de los encargos militares. La industria aeron6utica y espacial se alimenta aún, en un 70 ú ‘80%, de lJs encargos de armamento. Esta relaciún deberra bajar aun 50 ¿ 60% merced a la realizaci6n de varios proyectos civiles, también’ subvencionados por el Gobierno Federal. Se puede, sin duda alguna, llamar progreso al nacimiento de grandesca pacidades industriales como consecuencia de numerososfusiones o asociacionesde firmas, en parte m6sallá de las fronteras. La industria de armas y municiones depende, asimismo, en gran medida de los encargos de armamento. En estos últimos años han surgido dificultades cuando se tratú de explotar con mayor rendimiento la capacidad de esta industria, que había quedado muy reducida desde el fin de la guerra, al hacerla beneficiaría, por ejem Tanto por ciento de los gastos de armamento con relación a la producción industrial Gastos para el armamento como consecuencia de los encargos hechos ene1 interio del país (en miles de millones de DM) Producción industrial (en miles de millones de DM) Tanto porcientode losgastos de armamento con relación a laproducción industrial (en rrpfles de millones de DM) 1956 2,6 5,000 2,6 1959 137,5 2,2 4,793 1,8 1966 1,3 1,8 1,9 4,390 4,647 247,6 1965 238,1 0,9 1964 218,5 5,113 189,7197,5 1963 0,011,3 125,7 1958 1,113 2,225 1,794 1957 117,9 1,424 99,3109,5 0,014 1962 Gastos para elarmamentocomo consecuencia de losencargos hechosene1 interior delpaís Producción industrial (en miles de millones de DM) 1 955 Producci6ndelaindustriaenlaRepGblicaFederaldeAlemaniaygastosparaelarmamentocomoconsecuencia délosénccirgóshéchoén’elinteriordélpaísentre1955y1968 2,4 4,608 1,7 269,2 5,905 241,6 1967 2,1 3,634 1968 174,5 1961 1,3 2,118 158,2 1960 - 39 - pb, de encargos civiles en materia de producci6n de materiales. Merced a la a— dopción de conluntos y de componentes electrónicos en los misiles, la rama indus trial que los produce tendrá tal vez la oportunidad de entrar progresivamente en los programas importantes de fabricaci6n electrónica. Las demás ramas de la industria, como las construcciones navales, las indus— trias del autom6vil, de telecomunicaciones y de la electr6nica dependen muy po co de los encargos de armamento. Están, en efecto, insertas en un amplic abanico de producciones civiles. En esta rama, el armamento s6lo supone del 5 al 10% de los encargos. Las dificultades a las que han tenido que enfrentarse los arsenales se deben al hecho de que su participación en la construcci6n de buques de guerra modernos ha bolado del 60 al 30%, mientras que la participaci6n en las armas y en la electr6nica —participaci6n en el ms amplio sentido de la palabra- represen ta alrededor del 70%, Los problemas de gerencia no se han resuelto a6n satisfac toriamente. — En 1969, los gastos expuestos paro liquidar los encargos hechos a la industria alemana (investigaciones, estudios, desarrollo, adquisiciones y mantenimiento de los materiales), se han repartido entre las distintas ramas de la industria como si gue: Encargosmilitaresefectuadosalasdistintasramasdelaindustriaalemana Ramas industriales en 1969 (en millónes de DM) 1. Construcci6n de c.lulas de aviones y de misiles 2. Construcci6n de propulsi6n de aeronaves 3. Electr6nica, telecomunicaciones, mecnica de precisi6n y 6ptica 14. Industria de transformaci6n de metalés 5. Industria automóvil y de accesorios de auto 6. Industria de armas 7. Arsenales navales 8. Municiones 9. Fabricas de pólvora 10. Industria pirotécnica 11. Productos farmaceúticos, material sanitario e ¡nstrumentos de cirugía 12. Productos alimenticios 13. Industria textil 14. Explotaci6n de minas de carb6n 15. POL 16. Otras ramas industriaes G 40 En la medida de lo posible, el Gobierno Federal tiende a hacer sus encargos— de armamento en el sector de la producción tradicional, con el fin de no crear en la República Federal de Alemania una industria específica de armamento. El cua: dro anterior muestra que una gran parte de los créditos de armamento se dirige hacia las industrias del porvenir. Salta a la vista el lugar destacado que ocupan las industrias de la electrónica y de las telecomunicaciones: resulta de la introducción masiva de los sistemas elec trónicos en casi todos los sistemas de arma (aviones, buques, carros de combate, de fensa antiaérea y misiles). La parte relativamente mínima del armamento en el conjunto de la producción deja entrever que, modificaciones introducidas en su concepto, incluso un desarme, no tendrían ninguna repercusón sustancial en la economía alemana,, Habría, como mucho, que procedera eestructuroc iones en varias ramas de la industria y en algu nas empresas. Una depresión del volumen de las actividades nacionales en el plano del armamento debería ser compensado, en su caso, con programas civiles técnica mente equivalentes y con futuras salidas aseguradas. Investigaciones,estudiosyebas 196. Las investigaciones y los estudios seguirón beneficiandose de una amplia promo ción como hasta ahora. El conjunto de las metas econórriicas apuntadas en el terre no de la tecnología Fde inclinarse ante la exigencia de procurar a la Bundeswehr el óptimo de las armas y equipos. En cambio, el progreso técnico recibe de los pro gramas de armamento, gracias a los procedimientos y las estructuras modernas que estosrequieren, impuisos mucho mósfuertes de lo que su modesta contribución a la producción nacional podría dejar suponer. - - Los estudios de materiales militares se hacen por fases con el fin de limitar los riesgos inherentes a todo desarrollo técnico Aprovechando la experiencia adquirida durante estos últimos diez añoso los es tudios futuros relativos a los grandes proyectos declaran una línea de conducta que prevé varias fases de planificación y un control de cada una de esasfases desde un triple punto de vista: meta, plazcde ejecución y costo. La aplicación de tal pro cedimiento rigurosamente jalonado por hitos (“mile stones, como dicen los ameri canos) tiende a prevenir, en la medida de lo posible, los aumentos de gastos de es tudios y los posteriores de costo de la producción y de los gastos de funcionamiento. Partiendo de experiencias realizadas en otros países, el éxito de los programas importantes depende, esencialmente, del juicioso manejo de los métodos que per - 41 - miten prever los plazos de ejecución y los gastos y ajustarlos a las necesidades. La República Federal de Alemania debe dedicarse, en primer lugar, a los problemas re ferentes a los plazos de ejecuci6n, al cos:tó. y a la financiaci6n de los grandes pro gramas planificados para eliminar de ellos al móximo los riesgos. Al lado de la me jora del planeamiento tcnico—militar, de un proyecto particular ó de un:programa completo, el control de los resultados alcanzados por las actividades de investiga— ción, así como por los estudios espeíficos de puesta a punto, reviste una importan cia acrecentada. Lainvestigaciónenelterrenotécnico—militar 197. Los centros de ciencia naturales son, en la República Federal de Alemania, las universidades, los institutos científicos, ciertas asociaciones de interés públicoy los orgañismos de investigación de la industria. Los trabajos que, en este terreno, sellé van a cabo, en provecho de la técnica militar tienen por base mercados público es tablecidos con las instituciones anteriores. Desde un principio se desechó la idea de crear centros de investigación propios de las Fuerzas Armadas. — Como ciertas disciplinas de las ciencias naturales carecen de capacidad para satisfacer las necesidades de la Bundeswehr, el Ministro federal de la Defensa ha in citado a varias sociedades con vocación científica a crear nuevas instituciones pa ra estudiar materias bien definidas. — Así, la Fraunhofergesellschaft” ha constituido varios institutos para la promo de la investigación aplicada: en Friburgo acerca de los materiales destinados al empleo eléctrico; en Karlsruhe acerca de las materias própulsivas y los explosi vos; en Weil acerca de balística y en Grafschaft/Sauerland (Westfauiá) acerca de aerobiología. Este último instituto, por ejemplo, está encargado de definir las ba ses científicas de la protección contra los agentes químicos. En l no pasa nada que no pueda suponer una infracción a los acuerdos suscritos sobre el plano del derecho internacional. Todos los miembros de este instituto están obligados a renovar, a in tervalos regulares, su compromiso de denunciar al ministerio público cualquier infrac ción, siquiera supuesta, a la renuncia formal de la República Federal de Alemania a la fabricación de armas B y Q. La actividad de este establecimiento desde 1967 no está sometida al secreto; todos los trabajos son publicados y se persigue una am plia cooperación a escala internacional. La “Astrophysikalische Gesellschaft” ha sido encargada por el Ministerio federal de la Defensa de organizar los institutos de Werthhoven que se dedican, uno a la radiotelecomunicación y a las matemáticas, el otro a la física de alta frecuencia y el instituto de Meckenheim que se entrega a estudios de ergonomía (adaptación de los sistemas técnicos a las necesidades huma nas). cióri - 42 - En 1958, el instituto de investigaciones balísticasde St. Louis (Francia) fue— transformado en establecimiento franco—alemán, a parte iguales en los gastos. Ensu conjunto, la cooperación dentro de esta instituci6n se ha revelado satisfactoria. El Ministerio federal de la Defensa había también participado en la reorganiza ckn de las instituciones de investigaciones aeron&iticas alemanas. Se incluye una breve exposición de las actividades de investigaci6n tcnico—mi litar en 1969. Los cr&lltos disponibles en 1970 para estas actividades se elevan a cerca de 160 millones de DM. — 198. Desde hace cierto tiempo, los contratos establecidos por el Ministerio federal de la Defensa con universidades e institutos de investigaci6n científica son el blan co de violentas críticas, Algunos preconizan retirar del sector civil los proyectosca lificados de investigaci6n para la guerra y estudiarlos en establecimientos interveni dos por la Bundeswehr. Pero tal crítica carece de fundamento. Hace ya tiempoque el Ministerio federal dé la Defensa ha adoptado el criterio de limitar el secreto en la ¡nvesflgacin militar al estrJcto mínimo. Por otra parte, las investigaciones sorné tidas al secreto no se confían a los establecimientos universitarios, Adem6s, todos los resultados de estudio conseguidos por los intitutos de las universidades se publi can, y el Ministerio federal de la Defensa concede a este hecho una importancia particular. seguirá, por lo tanto, estableciendo con estos institutos contratos de in vestigacin técnico—militar, como hasta ahora. En cuanto a los contratos establec dos con las distintas industrias, las prescripciones de clasificaci6n ser6n menos rigu’ rosas de ahora en adelante; la octava ley sobre la reforma del derecho penal, alsim plif icarIas, a permitido introducir mayor flexibilidad en estas prescripciones, hasta ahora poco flexibles. Esto es necesaro, por una parte, para no hacer estéril la in— vestigaci6n en el terreno de la tknica militar y, por otra, para permitir a los impul sos que emanan de ella alcanzar la ciencia y la industria de nuestro país así como— la de países amigos. — Elestudiodelosmaterialesmilitaresylosriesgosqueimplica 199. En los Gltimos años se han conseguido resultados notables en la puesta a punto de los materiales de las fuerzas terrestres, por ejernpIo el carro de combate LEO— PARD, los cazacarros con cañan y con misil, y el vehículo acorazado de combate— de infantería MARDER. En cuanto a la generación siguiente de los vehículos milita res sobre ruedas, su estudio prev& una adaptac6n tan completa como sea posible a los vehículos civiles. El material de paso de nos de las fuerzas terrestres se acaba de poner también al nivel de la última evoluci6n técnica. Investigacionestecn ¡co—mil¡taresen1969 Titu lares de contrato del Ministerio federal de la Defensa Gastos millones de DM Titulares de contrato Establecimientos universitarios e investigadores independientes Industria Fraunhofer—Gesellschaft Astrophysikalishe Gesellschaft Deussche Forschungsund Versuchsanstalt fir Luft— und Raumfahrt (DFVLR) Instituto de St.Louis, Francia (50% de los gastos) Ozeanographische Forschungsanstalt der Bundeswehr en 7,6 5,5 Terrenosdelainvestigacnmilitar Gastos en 1969 Terrenos especializados lnvestigaci6n operativa Medicina militar Protección nuclear Proteccicn química Estudios específicos de fen6menos físicos Físico de las altas frecuencias Física de los cuerpos s6lidos Informática Ciberntica Geofísica Materiales (acero) Metales no férreos, materias plásticas Transformaci6n de energía Mec6nica de los materiales volantes Propulsores Modos de construcci6n aeronáutica Investigaciones navales Física de detonaci6n Balística Materiales propulsivos y explosivos Deutsche Forschungs un Versuchsanstaly fir Raumfahrt (DFVLR) millones de DM en 1 1 Luft—und - 44 - Un nuevo ob6s de 155mm es objeto de estudios llevados a cobo en comGn con Gran Bretaña. La laguna existente en la defensa AA ha de ser colmada por un ca ñón de 30 o 35 mm sobre chasis acorazado, Paralelamente se estudia con Francia un misil antiaéreo. Asimismo, para la defensa AA se acaba de terminar el estudio de un cañón automático de 20 mm susceptible de ser empleado también en el comba te terrestre; será adoptado por el Ejército de Tierra así como por el del Aire y la Marina. Finalmente, la mejora de la defensa contracarro marca progresos, gracias especialmente al desarrollo franco—alemán de los ingenios MILAN y HOT. - — En lo referente a “Aire y Espacio., se procede en primer lugar a estudios de posibilidades de adaptación. Tienen por objeto adaptar los materiales extranjeros a nuestras condiciones particulares de empleo. El Ministerio federal de la Defensa no ha regateado susesfuerzos para el desarrollo de aviones de despegue vertical, y los gastos correspondientes ascienden a un total de 1,5 mil millones de DM. Considera ciones de orden tenolágico y Financiero, y un cambio del concepto militar, no han permitido hasta ahora que estos estudios culminen en la construcción de aviones opé rativos. En efecto, este nuevo concepto no da ya al despegue vertical de los avio nes de combate la misma prioridad. Desde luego, los futuros aviones de combate no serán aán concebidos para el despegue vertical, por no estar terminado el estudio de las cuestiones fundamentales desde el doble punto de vista tecnológico y logísti co. No obstante, los prototipos VJ 101, VAK 191 B y el avión experimental Do 31 han aportado valiosos conocimientos de los que se aprovecharán las generaciones de aviones siguientes. Toda una gama de buques de guerra, desde destructores a cor betas rápidas, han sido desarrolladas y construidas para la Marina federal por nues tros arsenales navales, a veces con grandes dificultades. Para aumentar la eficacia de los torpedos ha sido desarrollado un sistema de mando a distancia por hilo, llevan do equipo de localización y de dirección de tiro que equipará a los nuevos submari nos. Se ha dado mucha importancia al desarrollo de nuevos motores para submarinos. Prosigue la puesta a punto de un sistema de detección submarino por sonar. — - En todos los sectores de desarrollo de sistemasde armas, la electrónica aumenta su importancia. Paralelamente hay que pcner a punto y explotar sistemas electróni cos de información y de acción de mando (SEIDAC) para los Tres Ejércitos. El radar de barrido lateral tiene particular interés para el equipo de los aviones de reconoci miento PHANTQM; el desarrollo de sistemas ‘de detección y de defensa contra a— viones: volando a baja altura tiene asimismo gran importancia. Al lado de estosgran des proyectos se ha desarrollado toda una gama de equipos electrónicos: aparatos de radio de campaña para uso interarmas; aparatos de visión nocturna para carros de combate, buques y aeronaves, sistemas de dirección de tiro para piezas de artillería y torpedos; sistemas de conducción para ingenios contracarros y antiaéreos. El au mento desmesuradode los gastos comprometidos para el estudio y el desarrollo del material electrónico pone de manifiesto su importancia creciente para todos los sis temas de arma modernos. — - - 200. 45 - La experiencia ha demostrado que la preparación de los grandes proyectos supo ne un anólisis minucioso de todos los factores factres políticos, militares, tcni— cos, económicos y financieros. Los riesgos son relativamente mínimos cuando se fra fa de materiales que han sido ya adquiridos por otras fuerzas armadas y que han sido experimentados en servicio0 En cambio, surgen problemas —yse puede decir que es una regla— en cuanto se trata de adaptar dichos materiales a las condiciones de em pleo de las Fuerzas Armadas federales, o de aumentar sus realizaciones. En este co so pueden aparecer riesgos comparables a los inherentes al desarrollo de un nuevo material. - Contra mós exigentes son las necesidades militares y mósambiciosos los objeti vos, mós elevados son los riesgos, los gastos y los plazos. Gran cantidad de ejem— plos recogidos en el extranjero lo demuestran. Así los estudios em7rendidÓ para realizar en común un carro de combate germano—britónico han sido abandonados a causa de fuertes divergencias de concepto y de constantes aumentos de presupuestos. Los proyectos militares alemanes relativos a los aviones de despegue vertical —avión de combate VJ 101, avióp de apoyo terrestre YAK 191 B y avión de transporte Do 31 han sido suspendidosa con’ecuencia de una modificación del concepto militar. — En determinados casos, tales decisiones son ineluctables. Los estudios deben ser suspendidos en cuanto el costo de un proyecto pierde proporción con su eficacia, o cuando se pone em duda la oportunidad del concepto de base. A veces hay que correr el riesgo de una detención a mitad de camino, porque de otro modo el progre so técnico perdería toda oportunidad de concretarse. La indústria automóvil tiene— también sus “abortos” que no llegan nunca a la fabricación en serie. Mas como en esos casos, siempre hay proyectos que aprovechan estudios abandonados, aunque só lo sea por la adopción de partes de ellos. - Experimentación 201. Tras la puesta a punto de los prototipos, el material militar pasa al estadio de la experimentación en el que es sometido a múltiples ensayos. Se trata primero de pruebas constructoras efectuadas por el industrial encargado del estudio. Despus, el materkd es transferido ci uno o a varios de los diez centros de pruebas de la Bundeswehr, en los que prosigue la experimentación. — Antes de ser definitivamente adoptado por las Fuerzas Armadas federales, el ma terial pasa a las unidades para pruebas t6cticas. A veces, en el pasado, entraron en servicio armas y equipos sin haber sido previamente suficientemente ensayadospor los usuarios, y por ello hubo un número relativamente elevado de fallos técnicos. En el fuluro sólo entrarón en servicio los materiales suficientemente experimentados y completamente de fiar, Las piezas de repuesto y la documentación de empleo yde — — entretenimiento debern ves posibles. ser proporcionadas a los Usuarios en ‘os plazos m6s bre CENTROSDEPRUEBASDELABUNDESWEHR Tréveris Vehículos e ingenios acorazados Colenza Material de Ingenieros y equipos de uso general Oberjettenberg Múnsterlager Manching Eckernf&de Schirnau/Rendsburg Kiel Greding Meppen Campaña de frío y pruebas de montaña Material NBQ Material aeron6utico Armas de la Marina Protecc ién naval amagnética naval Técnica Material de transmisiones yArmas municiones El presupuesto de 1970 prevé para las actividades de investigación, de estu dio y de experimentación, la suma de 1,146 mii millones de DM, o sea, el 5,6% del presupuesto de defensa, La planificación de armamento correspondiente a los años de 1970 a 1973 pre vé un aumento de los créditos concedidos para estas actividades, aumento proporcio nal a la tasa de crecimiento gener’al del presupuesto de defensa, Pero, a la hora ac tual, es todavía imposible saber sI tal aumento bastaró para responder ci la tenden cia de especificaciones cada vez mós elevadas y, por consiguiente, de un costo de desarrollo creciente sin cesar. La RepGblca Federal de Alemania gasta para la investigación, los estudios y las experimentaciones menos que otros Estadosde la NATO a los que cabría compa rarla, Sin embargo, una comparación con Francia y con Gran Bretaña apenas sería representativa debido a los créditos presupuestarios concedidos a sus programas de armas nucleares, Organzacióndelarmamento 202. Al lado de 1osprogramas de producci6n coronados por el éxito hay otros cuya terminación estaba marcada por retrasos considerabies, eievados gastos perjudiciales - - 47 - y lagunas técnicas notables. Se podría citar a toda una gama de ejemplos a partir del vehículo acorazado HS 30, pasando por el desgraciado asunto del acero emplea do para la construcción de lós submarinos, el bitubo acorazado de 30 mm, el sonar de funcionamiento defectuoso que equipa los destructores, hasta el avión BREGUET ATLANTIC afectadopor la corrosión. Estas insuficiencias son indiscutibles. Cabe imputarlas, sobre todo, a los siguientes factores: errores de planificación, tenden cia a pedir especificaciones extremas, cambio de concepto que a veces se presenta hasta en la fase de fabricación, intervenciones presupuestarias y coyunturales, mer cados insuficientemente estudiados, trabajos industriales de calidad deficiente. En el caso de los programas colectivos hay que añadir conflicto de los intereses nacio nales en los planos político y. económico; diversidád de los procedimientos y de los métodos de evaluación; dificultades lingiiisticas; fluctuaciones de las paridades mo netarias. Hay que hacer notar tambin la pesadez de los procedimientos llamados de reo lización de los materiales, establecidos con vistas a reglamentar la cooperación de todos los servicios y de todos los escalones que participan en las fases de estudio y de adquisición. La construcción naval ha sido la primera en sufrir de ello. El pro— cédimiento particular, que tiene actualmente fuerza de ley en este sector, no per mite asegurar en tiempo útil la coordinación necesaria para la realización de estos brandes sistemas complejos que ¡ncorporan los mósdispares elementos, tales comolas construcciones navales y mecónicas, las instalaciones motoras, los sistemas elec trónicos y el armamento. Un ejemplo característico de la ineficacia de esta organ zación es la construcción de los cuatro primeros destructores de la Marina federal. 203. Es, por lo tanto, necesario reformar la organización y los procedimientos apli cables al terreno tcnico de la Bundeswehr, A este efecto, el Ministerio federalde la Defensa ha creadouna comisión especial encargada de someter un informe con tiempo suficienté para que se puedan tomar decisiones de reorganización antes del 31 de diciembre de 1970. El mandato de esta comisión se extiende,, no sólo a una encuesta detallada sino que debe refedrse, asimismo, a la falta de personal tcnico y a las relaciones de la Administracción militar con la industria privada con vistas a aplicar, en la medida de lo posible, las normas y los principios valederos para las exportaciones industria les a esta empresa económica que se llama ‘1Bundeswehr. Escierto que no se pue de dejar de lado una diferencia fundamental: las explotaciones comerciales funcio— nan con fines lucrativos y, por ello, son completamente libres de emplear a su albe drfo los beneficios conseguidos, mientras que la Bundeswehr tiene que recurrir a los fondos póblicos para la realización de sus proyectos; en su consecuencia, estó sorne tida al control político ejercido por el Parlamento y a un control de sus gastos a car go del Tribunal federal dé cuentas. - 48 - La comisi6n debe dejarse guiar por las siguientes directivas: 1). Como antaño, la adquisici6n conservare su car6cter interarmas y seguirá siendo estructurada segin los diversos terrenos tcnicos especializados (categorías de materiales), Hay que generalizar, cuando se trata de programas-clave, e! em pleo de responsables, encargados de la organizaci6n de los proyectos bien def 1 nidos (oficiales o ingenieros destacados) que ya existen en cierta medida. Hay que evitar cualquier doble empleo. 2). Proseguirá el proceso ya en curso de delegar a ‘os escalones subordinados tareas, responsabilidades y competencias del Ministeriofederal de la Defensa, Esto es asímismo valedero para las relaciones entre el Departamento federal de aprovi sionamiento y de la tcnica militar (BWB) y los servicios de l dependientes. 3). En vista de la responsabilidad colectiva y de la direcci6n interejrcito del apro visionamiento, los militares responsables del funcionamiento y del mantenimien to de sus medios de combate deben tener voz en el capítulo cuando se trate de tomar decisiones de principio. Precisamente en este espíritu deberc ser revisa do el procedimiento de realizaci6n de material militar’, 4). La complejidad siempre creciente de los sistemas de arma lleva imperativamen te a la Administracj6n a delegar en un capataz o en un contratista principal la responsabilidad del desarrollo y de la fcibricacicn del sistema en cuesti6n, sal vaguardando a la par los intereses de las empresasde tipo media (subcontratos). En principio, los contratos serán establecidos después del concurso al que podr6n acudir, si fuese necesario y en la medida de lo posible, industrias extranjeras. Cooperaci6ninternacionalsobreelplanodelármáméntó 204. El Libro Blanco de 1969 ha subrayado las intenciones del antiguo Gobierno fe deral de intensificar en el terreno del armamento la’cooperaci6n con nuestros alia dos. Tal cooperación permite llegar a un armamento normalizado de las fuerzas ar madas llamadas a llevar a cabo operaciones en comGn, ampliar la base de la logísti ca y de este modo aumentar sensiblemente la eficacia militar. Si bien todos Aliados reconocen el espíritu de estas intenciones, su puesta en practica no deja de suscitar dificultades. Rara vez se ha desarrollado la cooperación sin plantear problemas, ex cepto la reproducci6n bajo licencio en Europa de algunos sistemas de arma americo nos. Las razones estribaban en la divergencia de los conceptos militares, en la di ferencia de las capacidades tecnológica y económicas y en la incompatibilidad de los interes nacionales en los planos económico y político. Pese a todas estos dificultades, el Gobierno federal seguirá desplegando sus es fuerzas para ampliar y profundizar las relaciones internacionales sobre el plano del - 49 - armamento, especialmente cuando se trata de proyectos particulares tales como los programas NADGE y MRCA y el programa de misiles, o de estos numerososprogra mas de estudio y de producckn comunes que están en vías de ejecuci6n. No nospa rece oportuno de apuntar a la meta, todavía tan lejos de la realidad, de organizar una agencia .europea o NATO dei armamento, incluso de establecer un presupuesto comGn de investigaciones y estudios, y tampoco se piensa en una autarquía europea bien protegida contra la competencia americana. En muchos grupos de trabajo e instituciones, las cuestiones de armamento son tratadas en el marco de la NATO, de la UEO a escalones bilaterales o multilate rales, No obstante, estos organismos que se han revelado muy itiles para los inter cambios de ideas, piden a veces demasiado a los servicios administrativos y a los in dustriales, causando así duplicacionés de empleo, solapes y dificultades de coordi— naci6n. El Ministerio federal de la Defensa se ha propuesto tomar partido para una organizacn m6s racional. 205. La cooperacn en el campo de la investigacin y del estudio se ha intensifica do cada vez ms en el marco de la Alianza atl6ntica y con algunos aliados. En el marco de losorganismos (NATO) animados por los directores nacionales del arma’men to y en los grupos particulares para los Tres Ejércitos, 125 comisiones se dedican a problemas de investigacifn de armamento. Ha resultado que los trabajos de investigaci6n y de estudio, llevados a cabo conjuntamente con uno o varios aliados, libremente escogidos, pueden desembocar a resultados ms concretos ya que, en estas condiciones, es ms Fácil hacer concor dar las metas respectivas. - Para solucionar ciertos problemas tcnicos das instituciones mixtas, como de primera importancia, han sido crea 1). el Instituto de investigaci6n franco—alemán de St. Louis, que se dedica a las investigac iones balticas; 2). el Centro técnico del SHAPE en La Haya destinado en un principio al exclu sivo estudio de los problemas de la defensa aérea pero que, hoy día, se ocupa también de los relativos a la estratégica terrestre y aérea; 3). el Centro de estudio de guerra antisubmarina (Anti—SubmarineWarfare Center) en La Spezia (Italia) que tiene a su cargo las investigaciones relativas a la de fensa antisubmarina. — Son objeto de estudios y de producci6n en coman en el marco de la NATO: el vehículo todo terreno de mando y de enlace de 0,5 tonelada (VCL) afectado a - 50 - misiones militares y civiles (RFA, Francia1 Italia); los ingenios contracarros HOT y MILÁN (RFA, Francia), el sistema de ingenios antiaéreos ROLAND (RFA, Fran cia), el sistema de ingenios teledirigidos KORMORAN utilizado contra buques ene migos (RFA, Francia), el avión de combate MRCA que ha de tener configuración polivalente (RFA, Gran Bretaña, Italia), el avi6n escuela de reacción (RFA, Fran cia), los a’.’iones de com bate F—104G y G—91, el avin de reconocimiento BRE— GUET ATLANTIC, el avi6n de transporte TRANSALL y los sistemas de arma HAWK y SIDEWINDER. — Una gran parte del equipo actual de la Bundeswehrha sido importado directa mente de los EstadosUnidos o reproducido bajo licencio americana. Esto ha desem bocado, en su ¿poca, en una cooperacin en materia de logfstica que cubre todos— los sectores del aprovisionamiento, incluidos el entretenirniento de Losmateriales y el suministros de piezas de repuesto para los sistemas de armas comunes. — Exportacióndematerialesdearmamento 206. En la RepGblica Federal de Alemania, las exportaciones de materiales de arma mento (industria y Bundeswehr) salo representan una parte mínima del conjuntode las exportaciones: 0,3%. En 1968 este porcentaje era de 3,8% en los Estados Uni dos, de 3,1% en Francia, de 2,4% en Gran Bretaña, de 0,8% en Suiza y de 0,6% en Suecia. La Ley Fundamentat y la Ley sobre el control de las armas de guerra prescriben para las exportaciones de este género la autorizaci6n formal del Gobierno federal,— representado en este caso por el Ministerio federal de Economía que, antes de deci dir, pregunta su opinión al Ministerio de Asustos Exteriores. E5t prohibida cualquier exportaci6n de armas con destino a zonas de tensi6n. Para impedir operaciones trian guIares se pide al país destinatario un “atestado de consumo final”. El principio, la reventa a terceras partes de materiales de origen extranjero est6 generalmente sujeta a la autorización, bien sea del gobierno del país del que provienen estos materiales, bien sea del dador de licencio. El cañan de fabricación inglesa del carro de combo te LEOPARD no puede ser exportado al extranjero sin el consentimiento del Gobier no britónico. Ni el Ministerio federal de la Defensa ni la Bundeswehr estón particularmente interesados en las exportaciones de armas, excepto si ¿stas pueden servir para la nor malizaci6n de los materiales en el marco del Pacto Atlóntico, Pueden invocarseotras razones en favor de ciertas exportaciones de este tipo pero en este caso estas últimas se salen de la competencia del Ministerio federal de la Defensa - 51 - Ayudaenmateriadearmamentoydeentrénamientó’ 207. En estos últimos años el Gobierno federal ha proporcionado una ayuda militarpara la defensa mútua en el marco de la NATO a Grecia y a Turquía. La ayuda concedida hasta ahora a Turquía se cifra en 200 millones de DM. Hasta 1967, Gre cia había recibido suministros por un total de 101 millones de DM; desde entonces, la ayuda en favor de Grecia ha sido provisionalmente suspendida. - Estas prestaciones no incluían contribuciones Financieras, sino exclusivamente entregas de suministros, mitad balo forma de materiales de excedente de la Bundes wehr, mitad bolo forma de materiales nuevos procedentes directamente de la fabri cación alemana. La ayudaenequipo sirve para sostener a los Estadosamigos africanos y asió ti— cos para el mantenimiento de sus fuerzas de segunidad. Sólo se da a petición de los gobiernos necesitados y en virtud de acuerdos formales. En cooperación con el Mi nisterio de Asuntos Exteriores ha sido concedida una ayuda por un total de 276 milló nes de DM a 17 países africanos o asióticos entre 1962 y 1969. Para los próximos años, el Parlamento ha aprobado prestaciones del orden de 74 millones de DM para 13 países, de los cuales 12 en Africa. Estas prestaciones se realizarón asimismo es trictamente según el principio de ‘ningún suministro hacia las zonas de tensión”. — La ayuda en equipo estó destinada a contribuir a la estabilización de. los paises en vías de desarrollo y a la mejora de su infraestructura, de las telecomunicaciones y del transporte. Los suministros comprenden, por lo tanto, material de Ingenieros, de obras públicas y aviones de transporte. Conformo a una decisión del Gobierno federal, los suministros no, incluyen ningún material de armamento. - Material -208. excedente Al princio de la existencia de la Bundeswehr, la afectación de los excedentes a los fines mós diversos fue móso menos improvisada. Desde 1966 existe un proced miento bien reglamentado hasta sus detalles. Cada año, las Fuerzas Armados fede rales proceden a la liquidación de los stocks excedentes de materiales diversos de un valor de compra inicial de 7000 800 millones de DM. De 1965 a 1968, las reven tas han reportado en termino medio unos 100 millones de DM por año. La venta de los equipos militares excedentes se ha realizado hasta ahora por in termedio de empresasespecializadas en el comercio de armas, lo que ha relevado al Gobierno federal de la obligación de presentarse el mismo como parte contratante. Mós esto no permite excluir-del todo responsabilidades poco precisas y una falsa ca - 52 - nalizacin de los materiales0 En ciertos casos, armas de guerra procedentes de los stocks excedentes de la Bundeswehr han ¡do a parar a destinatarios distintos de los previstos. El Gobierno Federal examinar la cuestTn para saber si, en el futuro, no serc preferible renunciar en general a la intervenci6n del sector civil para liquidar los materia les excedentes Productodelaliquidaci6ndelosmaterialesexcédentés1965—1968 Recuperaci6n en el interior de la RFA, incluida la chatarra mitlonesdeDM, 99,1 Entregas a Estadosmiembros de la NATO 217,4 id. Entregas a Estados no miembros de la NATO total osea25,2% Id. Id. 55,3% 75,9id.Id.id.19,5% 392,4Id. Id. 100% Producto de la venta o de la chatarra Valor de compra inicial Aviones de transporte NORATLAS Carro de combate M47 3.000.000DM DM 500000 Venta 100.000DM 100.000 DM Chatarra 5.000 DM 7.000 DM Dada, por una parte,la extensi6n de laszonascalificadas mcs o menosabierta mente como zonas de tensi6n” y, por otra,el refuerzo de lasmedidasde control, la venta a los Estadosno miembros de la NATO acusa una fuerte disminuci6n, a sa ber: en 1965/66, 64,1 millones de DM; en 1967, 7,2 millones de DM; en 1968, 4,6 millones de DM; en 1969, 2,0 millones de DM. Una aplicaci6n mcs restricti va de la Ley sobre las armas de 9uerra llevará cónsigo, en cuanto se trate de armas y de municiones, un recorte Intensificado para la cnatarra de materiales excedentes. Así, en 1969, han debido ser descargadas municiones representando un va br de compra de 163 millones. El producto anual medio de la venta hasta ahora —13,6% del valor de compra- bajard probablemente a 7%, o sea, de 100 millones a 50 mi llones de DM por año. - 53 - INFRAESTRUCTURA 209. Lç infraestructura de la Bundeswehrcomprende acuartelamientos, instalaciones de enfrenamiento y locales administrativos y, ademas, instalaciones militares pro piamente dichas, tales como basesaéreas, rampasde lanzamiento de misiles, depó sitos, oleoductos e instalaciones de transmisiones. Actualmente la Bundeswehrdispo Infráestruc tu ro Instalaciones disponibles e instalaciones necesarias (situación actual y necesida des estimadas (1.) Necesidad Infraestructura Categorra de infraestructura total existente ,. 552.800 .20O Plazas en los acuartelamientos y escuelas Instalaciones de entrenamiento de guarnición Terrenos de deportes 223 492 168 (2) 473 Gimnasios y salas de armas 578 (2) 528 Bases aéreas Rampas de lanzamiento de misiles tierra—aire 49 151 124 Bases navales y anexos 10 10 Hospitales 15 18 11 18 Centros de pruebas y anexos . 49 Oficinas 1.761.000 Cantinas para suboficiales y tropa en todos los cuarteles 1.702.000 Hogares para militares (cualquier graduación) 205 48 Círculos y salas de oficiales 325 183 Depósitos (2) de materiales (capacidad en toneladas) de municiones(id. de productos petrolfleros, carburantes y lubricantes (capacidad en metros ci5bicos) Almacenes de municiones de guarnición ) 447.000 593.000 ¡d. 253.000 326.000 747.000 164 308.000 (1) En esta relación sólo figuran las instalaciones mós importantes. (2) En parte alquilados (todo o parte de esta infraestructura seró sustituida por instalaciones pertenecientes a la Bundeswehr. 85 - 54 - ne de 3.000 inmuebles que ocupan una superficie total de unas 250.000 hect6reas. entre 1955 y 1969 se adquirieron para la Bundeswehr42,000 hectóreas, por un va br de 860 millones de DM. Est6 proyectado añadirles otras 24.000 hectóreas an tesde 1978. — Durante los años 1957 a 1969, el Ministerio federal de la Defensa gastó alrede dor de 16 mii mflbones de DM para la realización de la infraestructura, o sea, una media anual de 1,3 a 1,4 mii millones de DM solamente para la construcción.. Necesidadesdeinfraestructura 210. Pese a los gastos considerables, comprometidos para la adquisición de inmue bles y para la realización de infraestructura, las necesidades no han podido, ni si quiera aproximadamente, ser cubiertas. Faltan aun por no citar m6s que algunos e jemplos: 50.100 plazas en tos acuartelamientos y escuelas, 4 hospitales, 120 gimna sios y salas de armas, capacidades de depósitos para almacenamiento de 192,000 fo neladas de material, de 267,000 toneladas de municiones y de 439,000 metros cibi cos de combustibles y lubricantes, 142 terrenos de deportes, 27.000 unidades de alojamiento para personal militar y civil y, finalmente, 157 hogares para militares. La ejecución de estos proyectos puede extenderse sobre un periodo bastante largo, debido a los gastos elevados que lleva consigo (precio actual: ms de 12 mil millo nes de DM). Por otra parte, es imposible prever, en la hora actual, si la evolución técnica rópida y los cambios eventuales introducidos en el concepto de defensa, im pondr6n o no alguna modificación sensible al programa de infraestructura. — El valor combativo de un buen numero de sistemasde arma es, en gran medida, función del estado y de las instalaciones de la infraestructura, El hecho de haber comprado un sistema de defensa area costoso antes de haber asegurado a las unida des destinadas al sistema HAWK acuartelamientos en las zonas de empleo demues tra, no sólo una falta de sentido económico, sino también una falta de consideración hacia la tropa. As’ una economra de chocolate del loro puede restar su eficacia e inversiones importantes. — Los planes a plazo medio (1969—1974) comprenden 1.800 proyectos de infraes tructura. Habrfa que gastar cada año 1,2 mil millones de DM en trabajos de construc ción si se quiere tener verdaderamente en cuenta la urgencia real de los proyectos. La fijación de las previsiones presupuestarias para 1969 en mil millones de DM y el titubeo con el que el Ministerio federal de Finanzas habfa procedido a la desconge lación de cródtos, habran obligado a extender en el tiempo la realización de pro yectos )/o inciodos osT corno a trasladar, a fecha posterior, el lanzamiento de nue vos proyectos. - 55 - La penuria de alojamientos y la falta de locales administrativos en buen núme ro de guarniciones ocasionan pesadas cargas para miembros de la Bundeswehr. Aqur también est6 previsto poner remedio a la situaciún (para músdetalles, ver p6rrafos 127 a 130) Tiemponecesarioparalarealizaci6ndelosprogramásdéinfráéstructúrá 211. En varias ocasiones, el inventario crfrico de la Bundeswehr ha revelado quejas acerca de los procedimientos demasiado largos y pesadosa que se encuentran somefi dos los proyectos de construcci6n. Generalmente, pasan de cuatro años y medio a seis años, desde la notificaciún de la peficin de construcci6n, por parte del usua rio militar, hasta la entrega del edificio. Esto se debe, en parfe,a la lentitud del procedimiento de preparaciún del terri forjo. Este procedimiento prescrito por la Ley sobre la adquisici6n de terrenos, ha de ser aplicado por los gobiernos de las Laender para cada programa de infraestructu ro y cerrado antes de la compra del terreno. Hace intervenir gran número de esca lones del sectorpúblico,losservicios centralesdel Land, los servicios regionales, los servicios comunales y buen número de organismos administrativos, como son las administraciones de Montes, de Agricultura, de Caminos e incluso las federaciones de Protecciún de la Naturaleza. A menudo los proyectos previstos son de interés lo cal y arrastran intervenciones por parte de delegados del Bundestago del Lantag, incluso del Primer Ministro del Land interesado0 No es raro que en tales casos los intereses de los escalones superiores resulten lesionados. En este contexto, el proyec to de construcción de un depúsito para productos petrolíferos, carburantes y lubrican tes para el Ejército del Aire —proyecto para el que el procedimiento de preparackn del territorio esta en instancia desde hace 10 años—puede ser considerado como un ejemplo extremo. Los procedimientos que hay que aplicar en las fases de planifica ci6n y de ejecuci6n de los trabajos de construcción sirven, asimismo, para ilustrar— los laberintos inextricables de la Administraci6n. Cada proyecto pasa por ocho ins tancias, sin contar los escalones internos, y est6 sometido a un total de 41 operacio nes que cada vez requieren un movimiento de los expedientes entre los servicios en cargados de estudiarlos. Las autoridades que desempeñan un papel decisivo en la pré paraci6n de los planes son el MinisteriQ federal de la Defensa, el Ministerio federal de Finanzas, la Administraci6n de la Reglún Militar competente, el Ministerio de Finanzas del Land respectivo y la Direcci6n regional de las finanzas (Sección:”Ser vicio de obras públicas del Landu). Para ilustrar la grotesca pesadez de los proced mientos, citemos el ejemplo de la construcciún de un gimnasio que se ha llevado a cabo de este modo: (el tiempo requerido para tratar el asunto en los diversos escalo nes y fases se indica entre paréntesis) — — En primer lugar, el despacho responsable de la infraestructura de la Fuerza inte resudo elaború la orden de establecer las características militares (tres semanas). Es — 56 - tas fueron establecidas por el Mando de la región militár (cuatro semanas) y luego examindas por el servicio competente de la Fuerza en cuestión (dos semanas) que luego dió luz verde a la plan ificación con vista a la adquisicíón del terreno (una se mana). En esto, la Dirección “Alojamento e lnmuebles del Ministerio federal de, la Defensa encargó a la Administración de la Región Mi litar competente (dos serna nas) de establecer la petición de construcción (cuatro semanas). Esta última fue exa minada y luego aprobada por el Mando de la Región Militar (una semana), retrans mitida a la Administración de la Región Militar (una semana) y reexpedida al Mi nisterio federal de la Defénsa (dos Semanas), donde fue comprobada una vez mc5sdes de el punto de vista militar y administrativo (cuatro semanas). La Direccón “Alo ja miento e Inmuebles” pudo entonces redactar la orden de planificación (tres semanz), que dirigió, a travs del Ministerio deFinanzas (dos semans). Sóló entonces el Ser vicio de Obras Públicas del Departamento de Finanzas competente pudo establecer los anteproyectos (ocho semanas), que fueron luego examinados por los responsables de la Dirección regionalde las Finanzas, del Ministerio de Finanzas del Land, de la Administración y del Mando de lá Región Militar y de la. Dirección “Alojamiento e Inmuebles” del Ministerio federal de la Defensa (nueve semanas). Esta última opro bc definitivamente el anteproyecto (dos semanas), extendió el permiso de construc ción (dos semanas) y ordenó el establecimiento del proyecto (una semana). Mientras tanto, si paralelamente a los estudios de construcción, las Direcciones “Alojamien to e Inmuebles” y “Presupuesto y Finanzas” del Ministerio federal de la Defensa, el Ministerio federal de Finanzas y la Administración de la Región Militar habían corn probado y aprobado el proyecto desde el punto de vista presupuestario (diez sema— nas). La Dirección “Alojamiento e Inmuebles” pudo entonces encargar a la Direc ción regional de Finanzas, por intermedio del Ministerio de Finanzas del Land, de hacer establecer el proyecto de construcción (cuatro semanas). En esto, el Servicb de Obras Públicas del Departamento de Finanzas interesado preparó los documentos de adjudicación (seis semanas) que, tras comprobación sucesiva por parte de la Di rección regional de Finanzas y de la Administración y el Mando de la Región Mili tar (seis semanas), fueron devueltos a la Dirección regional de Finanzas (una semana). Finalmente asta estableció el contrato para la ejecución de los trabajos (dos sema nas). La duración de los trabajos era de 40 semanas, mós una semana suplementaria para la recepción. de los trabajos por el Servicio de Obras Públicas. Tras la transfe rencia de propiedad al Departamento administrativo de guarnición (una semana), el gimnasio fue finalmente puesto a disposición del usuario (una semána). Esto significa, en resumen, que desde la petición de establecimiento de las ca racterísticas militares hasta la entrega del gimnasio —próyecto de construcción cuya ejecución, relativamente sencflla, no requiere procédimiento de preparación del te rritorio— habi’an transcurrido 1.14semanas, o sea, dos años y dos meses, de los cua les: tiempo invertido en ta planificación de la infraestructura 6 meses tiempo invertido en la planificación de la construcción meses 10 tiempo invertido en la ejecución de los trabajos meses 10 - • Servicio central meca nogr6f ico - - - ;Escue las profesionales Oficinas administrativas de’ gJcrnici6n Servicios mecqnogrfico$ Direcciones re gionales de suel dos y prestac iohes Almacen de vestuario : Direcciones reg ¡ono les de- vestuario. Oficina de re— -clutamiento y-de las reservds de círculo - Centro de ordnadóres Qficin. federal de lenguaje Escuelas de adm inistrac:in Escuela superior de la administro ciSn y-de la fç n-icamilitares - Servicio de re ceta en el ex tranléro - Centros dé ¡ñves tigaciones ocea nograficas — Ofi-é,inas de compras Servicio. tcni— co para pruebas de tiro y receta Servicio dé vi gilancia de los trabajos deestu iosnavales Servicios deel2lace y coordiracian. Servicio de ensQyo, de- maferial es- — Servliclio .tcni— co para siste mas de mando Centro dé ensay omologac ion del matçrial aerouti— - - Servició de la- documen taci6n de fci— bri cac icn A rs.na.l dela Marina Centros de pruebas Departamento féderal dé la tq.nica militar y del aprovisionamiento S itugcionLer’;,1 deabri 1 de 1.970 1 DE LAS FUERZAS ARMADAS FEDERALES M:lNIStERIO FEDERL DE LA DEFENSA Administracin de las regiones- militares, anexos incluidos Direcciones regionales de subsiste-ncics Servicio de la cd ministraCi6n de las Fuerzas Armadas federales en el ex— tranjero Departamento de la administraci6fl de las FuerzasArmadas federales 1 . . DE LA ADMINISTRACION (excluida la adr.iñ-i-strq ci6n de las unidades) ORGANIZACION 58 - El tiempo requerido para la realización de un gimnasio da una indicaci6n apro ximada acerca del que sería preciso para realizar proyectos mucho m6s complejos desde el punto de vista técnico, Lo que hace perder tiempo son precisamente todas las Operaciones que se desa rrollan entre el Ministerio federal de la Defensa y el Ministerio federal de Finanzas, especialmente cuando se trata de importantes programas de infraestructura. Lo que complica aún ms las cosas es el hecho de que la aprobaci6n de los proyectos por el Ministerio federal de Finanzas depende, en principio de la existencia de un cuadro de efectivos y de equipos (STAN) ya negociado entre este Ministerio y el Ministe rio federal de la Defensa, En caso de que el resultado esperado de esta negociaci6n no dejara prever ninguna incidencia sensible en los proyectos de construccin, se podría simplificar el procedimiento admitiendo, como basede decisi6n, el proyecto del cuadro de efectivos y de equipos puesto a punto por el Ministerio federal de la Defensa El Gobierno federal se propone llegar a ciertas mejoras en este terreno. En este contexto se impone una marcada delegaci6n de los poderes a los escalo nes regionales y locales para acelerar la realizaci6n de los proyectos. Por lo que se refiere a la construccin de edificios—tipo, la responsabilidad deber pasar, en su totalidad, a los escalones regionales, Ademds, el techo fijado actualmente en 150.000 DM para las nuevas construcciones de importancia secundaria y para los fra balos de transformaci6n y de preparaci6n, serc considerablemente elevado con obje fo de aumentar el volumen de los proyectos que puedan ser confiados a los escalones regionales o locales, con vistas a su realizacin sobre la base de un procedimiento simplificado. — — El Gobierno federal intervendr acerca de los Gobiernos de las Laender para que la capacidad de planificaci6n de los ttServicios de Obras Públicas” de las Loen der sea aumentada, mediante la creaci6n de grupos de planficaci6n centrales en el seno de las Direcciones regionales de Finanzas y que los proyectos dé la Bundeswehr sean llevados a cabo por servicios especiales a los que cabría la responsabilidad ex clusiva de la realizacin. Por otra parte, el Gobierno federal se propone crear una comiskn que reunirú los Ministerios federales y las Administraciones de las Laender competentes. Esta deber presentar, antes del 31 de diciembre de 1970, propuestas con vistas a una racionalizaci6n de los procedimientos de contruccin. — - 59 - COSTOS DE LA DEFENSA 212. El entretenimiento de un carro de combate LEOPARD, incluidas las piezas •de repuesto, cuesta por termino medio 55.000 DM anuales, o sea, el 5% del precio de compra (precio unitario presupuestadosin dofación inicial de piezas de repuesto) cifróndose en 1,1 millón de DM. El entretenimiento de un STARFIGHTER(precio uni tono presupuestado (1) sin dotaci6n inicial y sin equipos de serv1idumbres en tierra ni aparatos decontrol, 9 millones de DM), cuesta anualmente 640.000 DM y el en tretenimiento de un destructor lanzamisiles (precio de compra unitario presupuesta do (1) sin dotación inicial y sin equipos de servidumbre gastos de construcción de un cuartel de 1.000 plazas se cifran, por término medio, en 53 millones de DM, los de una base aérea capaz de dos escuadronesde F-104G —o sea, unos 40 aviones en 120 millones de DM y los de un depósito mixto de 5.000 toneladas para el alma cenamiento de munidiánes, de materiales, de víveres, de artículos de vestuario yde productos petrolíferos, carburantes y lubricantes en cerca de 15 millones de DM. - Los gastos de funcionamiento (personal, entretenimiento de material e infraes tructúra) de una brigada acorazada se elevan a 52 millones y los de una escuadrilla de corbetas rópidas a 19 millones de DM. Subidaenfléchadelosgastos 213. Lo experiencia habida a escala internacional seg6n la cual el precio de compra de sistemas de armamodernos se duplica cada diez años, se aplica también en la Bundeswehr. Sucede lo mismo para: los gastos expuestos para las investigaciones y estudios así como para el entretenimiento y el funcionamiento. Contra mós comple jos son los sistemas de arma, mósse impone la necesidad de mejorar los métodos de manogement?, lo que tiene por efecto secundario, por ejemplo, la colocación de instalaciones de la inforn6fica, — Los gastos de personal (2) han aumentado también considerablemente: durante los tltimos 4 años en un 4,4% por término medio. En 1966, los gastos anuales po ra un oficial se cifraban, por término medio, en 22.960 DM y ya en 1968 en 24.550 DM; en 1970alcanzarón la suma de 27.440 DM. en 1966 un militar que hacía su servicioobligatorio costabalasuma de 6.430 DM que ascenderóa 1970 a 6.773 DM. En 1966 la Bundeswehrteníaque gastar14.580DM en gastos de personal paraun suboficial; en 1970 estos gastos serón del orden de 17.900 DM. — (1) Para la definición del precio unitario, ver nota de lo pógino 31 (2) Los gastos de personal no incluyen los gastos de infraestructura. - 60 - Vistos los esfuerzos realizados para animar a los reenganchados y dadas los medidas tomadas por el Gobierno federal para abrir mejores perspectivas de por venir para los quintos, hay que esperar un aumento suplementario de los gastos de personal. GASTOS ANUALES PARA UN QUINTO Situación 1 970 Haber DM — Alimentación DM — Vestuarioy equipo (sinarmasni material) DM — — — Prestaciones generalesde ayuda social(incluida la ayuda concedida a la familia del quintoa ra zón de 997 DM así como la asistencia médica grafuita a razón de 300 DM) DM Seguros obligatorios (seguros de enfermedad, se gurode retiro, seguro de desempleo y seguro complementario) DM 2.4 Gastos de infraestructura (includoslosgastos de alojamiento) DM 1 1.359 — — La rópida subida de los gastos de funcionamiento de las unidades dotados de un gran parque de material, como las brigadas acorazadas y las escuadras del Ejército del Aire, es un factor cuya influencia se hace especialmente sen f ir. Los gastos de una brigada acorazada, que en 1966 era todavía de 44,8 millones de DM, se elevan, en 1 970, a 52 millones de DM, lo que represen fa por lo tanto un aumento de aproximadamente el 15%. Una escuadra de ca za que, en 1 967, figuraba en el presupuesto por 68,6 millones de DM cues ta, en 1 970, 75,9 millones, o sea, un aumento de cérca del 11%. Los gas tos de funcionamiento de una escuadrilla de corbetas rópidas han aumentado asimismo considerablemente: de 14 millones de DM en 1 965 han pasado a 19 millones, o sea, un aumentodel 35% aproximadamente. En 1970 el funciona miento de una Escuela de oficiales del Ejrcifo de Tierra cuesta 7,2 millones frente a 6,2 en 1 967 y la explotación de una oficina administrativa de guar nición 3,5 millones de DM frente a 3 millones en 1966. — — EVOLUCION DE LOS PRECIOS DE LOS SISTEMAS DE ARMA Una comparación de los precios unitarios presupuestados (comparacicSndel precio de la primera generación y del de la segunda generación) de algunos sistemas de arma representativos pone de evidencia la subida en flecha de los pre cios, No obstante hay que tener en cuenta el hecho de que cada relevo de ge neración trae consigo necesariamente un aumento de los gastos a causa de una mejora considerable de las realizaciones del sistema de arma cnsiderado. — - Avionesdecombate primera generación segunda generación F 84: 4 millones de DM F—104 G: 9 millones de DM (sin dotación inicial de repuestos, ni equipo de servidumbre en tierra, ni aparatos de con tro 1) (Aumento de los gastos: 125%) Avionesdetransporte primera generación segunda generación NORATLAS: 4,5 millones DM TRANSALL 24, millones de DM (capacidad de transporte triplicada con re— lación a la del NORATLAS) (Aumento de los gastos: mós del 500%) Carrosdecombate primera generac Tón M48: segunda generación 0,55 mfllón de DM LEOPARD: 1,1 mllón de DM (dotación inicial de piezas de repuesto excluida) (Aumento de los’gastos: 100%) Vehículoacorazadodecombatedeinfantería primera generación segunda generación HS 30: 0,45 millón de DM MARDER: 0,75 millón de DM (Aumentó de los gastos: cerca del 70%) Destructores primera generación Clase “Hambourg. 105 millones de DM segunda generación Ltjens” Clase millones 207 de DM (Aumento de los gastos: cerca del 100%) He aquí a título comprativo el ejemplo de una instalaciónindustrial: En 1955, el precio de compra de un tren de laminado para chapas gruesas(2 a 3m’. de ancho) era de 80 a 100 millones de DM. En cambio el precio actual de una ¡nstalación(5m. de ancho) varía entre 250 y 300 millones de DMe Su rendimiento es casi el triple con relación a la antigua instalación. --___________________ — - 62 - El aumento de los gastos comprometidos para la infraestructura salta asms mo a la vista. De hecho, entre 1 966 y 1 969, los gastos de contrucci6n de una guarnición de la Bundeswehr para 1.000 hombres han pasado de unos 43m llones a un importe aproximado de 50 millones de DM. * * * 1 c9tt4 p4 ¡ueitéua/iz o5j ¿‘ 449’iøzaeme AtT! VIP1IPES •Pfl ((SEDEN -INAUGuRAClON DEL CURSODE “ENERGIAÑUCLEAR Y DEFENSA NACIONAL” 1 1 4x CESEDEN ACTIVIDADES Inauguración “Energía Abril, 1971 Nuclear DEL CESEDEN del Curso y Defensa BOLETIN Nacional” DE INFORMACION NUM. 54 - XI Inauguraci6n “ENERGIA NUCLEAR del Curso Y DEFENSA NACIONAL” E!L pct4ctdo dLcL 13 de. ab’iJi .tuvo £aaJt, e’ e Aaa Ma9rla dei. Cent’to, e.eacto lu.9LULaL.de Cvt4o Monog’tó o “Ene’tgíct Nuc1ecut y Veen.4c. NctcÁ..ortcte”. E.. acto ue. p.’.e4sLddo pok e2 O e.c.-to’z. de.LCeJto, Te.Le.nte.Ge.yte.’taJ. de. Avacóyi O. MARIANO CUAVRA MEVIMA, £cL onv.ei’ie.-<cL nau.ga’tai. c c.cuLgo de..eGeneta.L de. Bgctdct La de. CabaUeitLa, de. E4tctdo4 Pl VAL. Je,Çe. de. E.6.tadLo4de. La E.siae. Mctyoite.4 Cojuto4 O. TOMÁS VE LIt’JIERS Y PALABRAS Y DE SALUTACION DEL GENERAL DE BRIGADA PIDAL A LOS COLABORADORES-CONCURRENTES CLEAR gía EL DIA 13 DE ABRIL AL CURSO DE ENERGIA Por ostentar, y por primera te Alto Centro, — Por la categoría - Por la naturaleza NU— DE 1971. Me ha correspondido el honor de dirigir Nuclear y Defensa Nacional”, y es para m — D. TOMAS DE LINIERS este Curso, “Ener—— un triple honor: vez, la representaci6n de los Concurrentes, de es y del Curso. Al saludarles, tal vez les extrañe que, vistiendo un unifor me “caqui”, emplee una tradicional expresi6n marinera: “Bienveni dos a bordo”. Pero — — puedo permitirme Primero, porque val y Aéreo, ese lujo de dicci6n: éste es un Centro Conjunto, Terrestre, Segundo, porque constituye una Nave en la que Tripulacién y Pasaje ponen todo su empeño para llegar al Puerto Desea do pese a todos los avatares de la mar y de los vientos. Y ¿qué es el CESEDEN?: Sus siglas definen su misi6n secuentemente, los principios de organización del Centro. fensa Na CESEDEN quiere decir Nacional. Analicemos Centro de Estudios estos conceptos: Superiores y, con de la De - CENTRO, nes — - por cuanto en l se analizan y sintetizan opinio diversas. ESTUDIOS, porque las conclusiones de sus trabajos, se hayan pedido o no, constituyen siempre propuesta pero jarns tienen valor ejecutivo. De le SUPERIORES, porque, sin aspirar a los sublimes, respeta a los inferiores; ya que, unos y otros, corresponden bien a Centros Políticos Rectores o a Escuelas Especiali —— zadas. - - De la DEFENSA y no de la defensiva, porque, si bien se renuncia a la acción agresiva en beneficio propio y con tra el derecho ajeno, se estima irrenunciable el derecho a la acción agresiva en “defensa’t del derecho propio. - NACIONAL. Parece absurdo tratar de definir este concepto y, sin embargo: ¡Cuanta evolución en él. ¡Cuantas nue vas y extinguidas nacionalidades en los últimos tiempos!. Para mí, el concepto Patria, base filosófica del legal o practico de Nación, lo definía, magistralmente, José An tonio Primo de Rivera, cuando decía que era una UNIDAD DE DESTINO EN LO UNIVERSAL. Para glosar esta idea, en mis alocuciones a la tropa, durante mis períodos de man do directo de fuerzas, decía que la Patria no era la su ma de todas las tierras de España, ni, con serlo mucho mas, la suma de todos los españoles viviendo dentro o fuera de esas tierras, porque era, sobre todo, la suma de nuestra Historia; de la pasada, de la presente y de la venidera. - — - — ¿Qué principios orgánicos son básicos en la constitución del CESEDEN para cumplir su misión?: Los clásicos, y contrapues tos, de Especialización y Flexibilidad. Especialización, — — Naturaleza Naturaleza Naturaleza en tres aspectos: de los Cursos. de los Concurrentes a los mismos. de la Graduación consecuente a cada Curso. Flexibilidad, en cuanto a la múltiple de especializaciones. ción Para — variedad compaginar ambos conceptos el Centro especializadas, las ms de combina ha sido organiza do: — En tres ramas - En una única y conjunta organización para toda clase misiones. específicas, de -3- Para atender a su funci6n especializada, el CESEDEN se or ganiza en tres ramas: ALEMI, EMACON e IEEE. ALEMI, Escuela de Altos Estudios Militares, en su especializada: - — - funci6n Convoca posibles Mandos Activos, civiles o militares, de la Defensa Nacional. Sus Cursos son fundamentalmente informativos, sin ex— cluir posibles aspectos formativos o de investigaci6n. — Las graduacoñes que concede suponen un reconocimiento de aptitud para ocupar altos cargos en la Defensa Nacio— nal. - —4— EMACON, especializada: — — — — — Mayores Conjuntos, en su función Convoca posibles Jefes de Estados Mayores Conjuntos o Corn binados, siempre entre Oficiales Diplomados de Estado Ma yor de los tres Ejércitos. Sus Cursos son fundamentalmente formativos, sin excluir posibles aspectos informativos o de investigación. — Las graduaciones que concede suponen la aptitud para de sempeñar los cargos de Estado Mayor al ms alto nivel de la Defensa Nacional. IEEE, — Escuela de Estados Instituto Cumple cuantos Español de Estudios Estratégicos: su fundamental misión como Reserva Intelectual asuntos rozan la Defensa Nacional. de Sus Cursos, ms bien Asambleas, tienen carácter, fundamen talmente, investigativo, sin excluir el informativo, rara vez, o, casi nunca, el formativo. Las graduaciones que concede, constituyen ins que premios, obligaciones, las obligaciones asesoras que corresponden a una confianza del País en aquellas personas que lo sir vieron, por largo tiempo o en difíciles ocasiones, con enorme competencia en todos los aspectos. - Para atender a su intención flexible, el Centro no puede or ganizarse en cuantas combinaciones suponen: tres categorías de Concurrentes, tres categorías de Curso y tres categorías de Graduación. — Por ello acude a los Cursos de CESEDEN, como lo es el que hoy iniciamos; las tres ramas en conjunto; tres ramas, cada una con tres especializaciones; un elevado número de posibles combina ciones. — — Pero, aún así, ¿estaría capacitado el personal fijo del Cen tro para atender competentemente la variedad de actividades de to da índole que pueden presentrsele? Desde su fundación, comprendió el Centro que nó y acudió, por ello, a aumentar su plantilla de profesores con la de colabo radores: — Reservándose organizadores los profesores, como función esencial, de las actividades del Centro, y — la de —5-- — Recabando información específica de personalidades ajenas al Centro y colaboradores a sus Cursos, competentes en ca da materia. Por último, como procedimiento para lograr esta deseada f le xibilidad, acudió al sistema, tan en boga en estos días, del Din— logo. El Curso que vamos a desarrollar “Energía Nuclear y.Defensa Nacional” no es curso específico de ALEMI nl de IEEE, es Curso Mo nográfico del CESEDEN. Su naturaleza es inforxnativo/investigativa. ¿Cuiles son las razones que han movido al Centro a organizar este Curso?: - Es obvio que vivimos la era nuclear y nadie podrá conside rarla un regreso: —6— - — - — — Progreso sivos, se consideró la era del invento de los expio Igualmente fue considerada la mecanización, Otro tanto ocurrió progreso la de con el de la navegación invento de aérea, y ¿Quién podría considerar un retroceso de nuestra civi lización el logro de la navegación espacial e interpia fletaría? Y ¿por qué?: Porque todos estos inventos, a pesar del enorme peligro de su utilización, con fines agresivos,su pusieron y suponen adelantos indiscutibles para el bie nestar de la humanidad: — - ¿Ocurrió fisiantes — otro tanto con los venenos, con los gases ax o con la contaminación bacteriológica? De algo sirvieron contra animales e insectos dañinos en beneficio del bienestar de la humanidad, pero ¿pu—— dieron considerarse tales eras como de progreso tenien do en contra el enorme y traidor daño que ocasionaron, y aón ocasionan, en los seres humanos? - Pero aquí esta el juego de lo que primero dispone de unos medios de inmenso valor para la Guerra y, al mismo tiempo, de in menso valor para la Paz: — - Juegan, hasta que su invento se divulga, co valor, exagerando su efectividad, y Juegan, hasta do su coste. que la producción con su auténti se hace viable, exageran Hay pueblos que siguen aceptando el tal juego, perdiendo,naturalmente, toda su posible independencia nacional. Hay otros que repudian el juego, despreciando la efectivi dad agreriva “contra ellos”, generalmente países subdesarrolla—— dos, de los medios nucleares. Hay, por ultimo, otros que, repudiando también el juego, han llegado a la conclusión de que independizarse como “países nucleares” a pesar de ser exhorbítante su coste, merece la pena para conservar su rango de país desarrollado; con todas las ven tajas de posible utilización, pacífica y agresiva, de la energía nuclear. — —7— zón Con estas premisas de ser? ¿tiene o no tiene realmente el Curso ra Y, siendo así ¿cómo tan solo dos meses, para el mismo, de duración?: porque su finalidad es la de servir, como en un automó vil, de puesta en marcha de un motor de arranque que habrá de po ner en funcionamiento un motor de potencia muy superior. Con otras palabras, un despertar de conciencias cuyos predicadores podemos ser, yo el ms modesto, altos representantes técnicos responsabies ante la Defensa Nacional. — - El Curso ha sido organizado pondientes iniciación y cierre: en tres fases, con sus corres-— Las tres fases fundamentales las hemos calificado de Infor—, mativa, Investígativa y Expositiva las otras dos de iniciación y cierre venían ya por sí calificadas de Salutación y Despedida. La primera fase fundamental, la Informativa, pretende colo car a todos los concurrentes a un nivel similar para poder discu tir sus propios puntos de vista, aquellos en los que son profesio nales natos con otros que, tal vez, les eran completamente ajenos. Por ello, creemos acertado lo de Colaborador/Concurrente; es f re cuente que un Concurrente esté tan enterado o ms que el propio Conferenciante y nada ms instructivo, sobre todo para el ajeno, que el di1ogo entre técnicos de idéntica naturaleza con ideas contrapuestas. — —— La - - segunda fase, la Investigativa, dos tiempos: Uno primero, breve, inicial, de trabajo en comisión, pro fesores y concurrentes, para determinar que extremos, de los muchísimos que podrían deducírse de la fase de Infor mación, se van a investigar. Uno segundo de auténtica leccionados: — - tres comprende Aquí, se organizan investigación de los extremos se dos grupós de trabajo. Aquí, cada Grupo de Trabajo contará con un equipo de Profesores del Centro como auxiliares y muy especialmen te unificadores de la extensión o profundidad de los te mas que se han seleccionado como unificados para ambos grupos. La tercera tiempos: — fase, la Expositiva podrá contar de dos o de -- —8— - — - Uno primero, tal vez el más arduo, de ordenaci6n del tra bajo, por cada Grupo. Uno segundo, el auténtico expositivo, pero con el doble matiz de oral y escrito; completo el 5ltimo, resumido el primero. El tercero dependerá de las discrepancias fundamentales que pueda haber en las exposiciones, orales y escritas, de los dos Grupos y, si las hay, habrá un tercer tiempo de Debate sobre aquellos extremos de discrepancia. Con cariño se ha preparado el Curso a ayudarnos se han prestado los más sabios pensadores sobre la materia pero, como dice Goethe: “Pensar es fácil y actuar difícil; pero actuar, con arreglo al pensamiento, la cosa más difícil del Mundo”. —— - * * * ¡ueit4uaf;z steao#VWOCRAFIC —t CE SEDEN BIBLIOGRAF lA (Libros y revistas ingresadosen a Biblioteca de este Céntro desdéla publicacin del Bo— letfn de lnformacifl núm. 53). Abrfl, 1971 DEBOLETIN INFORMACION NUM. 54 L 1 B R OS AUTOR TITUL.O Torroba Bernaldo de Quirós El Cid y Don Quijote Spaceflight Keneth W. Gatland Technology II Telecomunication II II Satellites Jane’s Weapon Systems 1970- 1971 E. Chacón Curso de Investigación Operativa Ejerckios y Problemas de Investigacióc. Oprt. La Asignación Optima de los RecursosEconmcs. Introducción de la Teoría de la Planificación La Pintura Española del siglo. XX El Militar de Carrera en España Ejercicios Anólsis de Contabilidad Nacional Económico Input Output Economía Española 1971 G. Desbazeille L. V. Kantorovich Fdez. Daz Andres Juan AntonioGoya Muño Julio Busquets G. Vibert W. Leontief M2 de Hacienda — - 3, REVISTAS ESPAÑA ActúalidadEconómica, núm. 680, 27 marzo 1971 Inversiones extranjeras:España pa riente pobre.— Comercio exterior: continúa la buena marcha.— España—Egipto:¿Lo he mos pensado bien?.— La economía asturiana: persona a persona.— Ante 1971: Fe en el futuro.— Hay que aprovechar nuestros recursos. .— ActualidadEconúmica, num. 681, 3abril 1971.- Expropiaciones agrarias ¿maxi? ¿mi di? ¿mini?.— Inversiones extranjeras: Contra demagogia, claridad.— Sector exterior:’ La polrnica de las competencias.— La reciente operaci6n con el Este: ¿Inoportuna o convéniente?. Las finanzas deliNi: El instituto no es rentable. ActuálidadEcon6mica, núm.682, 10 abril 1971,— Emigraciún 1971.— Con irritacn ha cia USA: vuelve el baile de los tipos de inters.— Balanza de pagos: feliz 1970, Baja el tipo de ¡nters: dinero ms barato para la expansi6n.— El futuro de la informti ca. — ActuálidadEcon6mica, num. 683, 17abril1971.— ¿Empezamosa salir del bache?...: la situaciún actual en gr6ficos. El fraude fiscal en España: un 50% es demasiado,Vuelven las importaciones.— España y el oleoducto egipcio: operaci6n autúnoma. Las cortes trabajan a ritmo lento: no hay raz6n para prorrogar la actual Legislatura0— Crédi to oficial: buen comienzo de 1971. — R.Aeron6uticayAstronáutica, núm. 364, marzo 1971.— La seguridad de vuelo y las aves.— “Vida y costumbres” del 104 Escuadran de FF .AA. Cuestiones jurídicas rela tivas a la explotaciún comercial de las telecomunicaciones por satélite.- Los “Bruguet XIX” en la Guerra de Liberaci6n (IV).— Semblanzas: Joaquín García Morato Castaño. BalanceMilitar (IV). .— BoletíndeDifusi6ndelE.M.delAire, núm. 355, marzo 1971.- Francia: Pruebasopera tivas con el Mirage “Mil6n”.— Francia: Pérdida del Mirage G.— Italia: El G222, un avión de transporte militar y civil.— EE.UU.: F14 y F15, futuros aviones de combate y caza.— EE.UU.: El avión de transporte L—100-30Super Hercules, de la Lockeed. Inglaterra: Reducciones en los aviones de combate. Inglaterra: Mejora lograda en el despegue corto de los aviones Jet. Inglaterra: Dudas en la eleccicn de un nuevo heU cSptero para la R.A.F. Inglaterra: Treinta aniversario del “Air Trining Corps” Fan Jet Falcon (Transparte). B.125 (Entrenamiento).— Organigrama del E,M. de la U.S.A.F.. Una importante categoría de nuevas armas: Los misiles.— RBO4 (Aire—Supr - — .— -4ficie).— Inglaterra: La defensa de los campos de aviaclin, un seguro vital.— Gastos de defensa de los países de la OTAN (1949—1970).—La defensa aérea de Américo del Nor:’ te (NORAD), BoletíndeTelecomunicaciones, marzo 1971.— Perspectivas para el futuro,- Cooperociún Técnica:SeminariodelaUITsobre tecnología de radiodifusi6n (Kuala Lumpur).- Confe rencias o reuniones de otros organizaciones. Planificaci6n de la red interurbana del Reino Unido con la ayuda de una calculadora electrcnica,La protecciún de las instalo ciones de telecomunicacjún en el marco de la UIT. — — BoletíndéTélecomunicaciones abril 1971,- Comisin del Plan para Africa.— Activida des de la Uniún/Cooperaciún Tcnica, Conferencias o reuniones de otras organizacio nes, lntelsat IV. Las Telecomunicaciones en Kuwait. Perfeccionamiento de los trans misores-responciecioresde satIite.— Canales de datos de velocidad media a través de sis temas de corrientes portadoras Ti,— Las Teíccomun icac iones: su futuro y su influencia en la humanidad,— lndices’funcjamentales de propagaci6n ionosfrica.— Cinemdtica de la UIT.— El Boletín cien años ha.’ — — — — ConséjóEcon6micóSindicalNacional, los EstadosUnidos (II parte). núm. 353, enero 1971.— La política industrial en ConsejóEc’onmicoSindicalNaciona’, núm. 354, febrero 1971.- Informe de la O.C.D.E. sobre la situaci6n y perspectivas de la economía española en 1970. Doc’uméntaciúnEspañola, núm. 18, marzo 1971,- La Prensadiaria y sus paradojas.Una libertad teúrica,— El coste de la producciún,- Vender a toda costa.- Como la lengua de Esopo, la publicidad. — ... ... BoletínInformativo.—EscueladeMóguinasArmada, núm. 1 , 1971 La turbina Curtis comoelementoregulador.-Laturbinadegasparala propulsión de destructores america nos.— Estudio y desarrollo de una turbina de gas para la marina.— Datos de trabajo en beri’a de cobre. . — Boletín,EscueladeTiroyArtilleríaNaval“JANER”, núm. 22, febrero 1971.— Los sím’ bolosenelTiroNaval.—Mantenimiento.—Noticiassobre misiles.— Ejercicios “MurcieV. Misil “SHIP Martel”.Sistema MK—26.— Potencial Militar Mundial. jrcitó, núm. 375, abril 1971.— Efemérides 1-IV—1939.—Calidoscopio internacional,— Algunas reflexiones en torno a la política exterior de España.—“Los stampillados”.— Las alas de la victoria.-’ Divisiún en fases de la maniobra.— Imposiciones de cruces y conde corac iones a autoridades en Ceuta, a bordo del buque insigra de Ja Flota. La guerra electrónica,— La Federación de Egipto, Libia y Sudón: Un nuevo factor en la geopolíti ca del Mediterrneo.— Defensa nacional, defensa civil y protección civil,— Filosofía - - — —5— del equilibrio de fuerzas en la ¡lustraci6n,— Una topografía rpida,— actividad española. EspañáenláPrensaMundiál, núm. 280, 1 abril 1971.— Los Príncipes de Españavisitan los EstadosUnidos, Lúpez Bravo se entrevista con el presidente El Sadat, Unas dedo raciones del Presidente francs,— Ministros de España ante la BBC—TVbritnica,— Proce so de Burgos. — -. Desarrollo de la — EspañaenláPrénsáMundial, núm. 281, 15 abril 1971,— Relaciones hispano—marroquies,— L6pez Bravo en Túnez,— España no acepta el “Status” actual de Jerusalén,— Perspecti vas de la políticaS exterior española.— El Ministro español Comisario del Plan, en Argen fina,— Apertura al Este,— Progreso de la Economía Española.— Política interior españo la.— Turismo, FúerzaNueva, núm. 221, 3abril 1971.— 12 de abril: Los capitanes, en sus puestos,— Funcj6n social del desarrollo,— Mussolini, después de Dongo.— El Mundo en que vivi— mas.— Aquí Vizcaya: A separadores y separatistas.- El pueblo del Surde Italia, en bus ca de la justicia,— En torno al “oro” de Moscú, FuerzaNueva, núm. 222, 10 abrU-497i...La culpa es deEspaña.— Opinin: La hora de los enanos,— La Iglesia y su tiempo: La Resurrección, ¿visiún o evasi6n? El Mun do en que vivimos,- Homenaje de la juventud a J. Antonio: Resumende los actos cele brados eh Madrid los días 31-111y 1-1V.— Informe: La Sierra del Norte y Aznalcúllar, Chile no es una cuenca.,, El soviet universitario, ¿est6 legalizado?, - ,— ,— B,deInformaciúnComercialEspañola, núm. 1250, 18 marzo 1971,- intercambios co merciales eñtre España y los países del Este,— La coyuntura econ6mica de la regiún vas cangada,— El xito del mercado socialista.— CEE: La Comisiún informa al Parlamento eurooo,— El petr6leo libio,— Las negocipciones petrolíferas,— Japún ofrece limitar sus exportaciones textiles a USA.- R.U.: Balanza de pagos.— Noruega y el Mercado Común, - B.delnformaci6nComercialEspañola, núm. 1251, 25 marzo 1971,— El comercio exte rior en febrero,— Comercio con los paises del Este, La economía soviética en el dece nio de los años setenta,— Hungría: Funciona bien el nuevo mecanismo econúmico,— El comercio exterior de la URSS,—El comercio exterior de la República Democrática Ale mana,— Insensatez en el caso de los textiles,— Se prev la elevacin de los precios de la lana,— El mercado del tomate en el Reino Unido,- El estremecedor programa que es t cambiando a Detrit,- También inflamación en Súiza.— Suecia y el Mercado Común, — B.deInformaci6nComercialEspañola, núm. 1252, 1 abril 1971,- La exportacicn es pañola: 1965—1970.—El crdito a la exportacin en Francia,— El “FECTORING”,- La reuni6n de la Comisiún Mixta España—CEE, Estados Unidos: El IVA es inflacionista,— Los precios agrícolas del Mercado Común.— Rusia y el Mercado Occidental de EnergÇa .— -6- Nuclear.— Reino Unido: El producto nacional bruto en 1970.— Los frenos japoneses a sus exportaciones de tejidos.—La libra en las negociaciones de la Gran Bretaña y la CEE. — B.informaciónComercialEspañola, núm. 1254, 15 abril 1971.— La ¡nflamaci6n: pro blema mundial.— Mu tilaterismo frente a amenazas de guerra comercial.— El comercio hispano—chileno en 1970.— El sistema de Preferencias Generalizadas de la CEE. USA: ¿D&de colocan su dinero los grandes inversionistas?. Mister Heath y las nego— ciacion europea.— Argelia en contra de las compañías petrolíferas francesas,— La indos tria del gas natural líquido. — R.lnformacinComercialEspañola, núm, 450, febrero 1971.- El mecanismo de los precios.— La teoría de la competencia imperfecta a los cuarenta años.— En torno a los precios.— Hacia una ordenaci6n din6mica de los precios.— Panorcmica de la ¡ntegra cian comercial 1971.— El Ciclo comercial de abastos.— El comercio mayorista de bie nes de consumo.— La defensa de la competencia.— Política monetaria y agricultura.— Misi6n comercial en Suecia.— El comercio exterior en 1970.— Incentivos tributarios so bre comercio exterior e inversiones en el extranjero.— Escandinavia—C.E.E, Evolu— ci6n probable de las estructuras comerciales (OCDE).— Trafico de perfeccionamiento: Reposicn de franquicia arancelaria. - .— lnnovaci6nEmpresa (i m6s e), febrero 1971.- Empresay Sociedad.— La Empresaante la contaminacin.Tragedia del pequeño comercio.— Criterios de selección de proce sos químicos.— Soporte matemático en la toma de decisiones. Teatro y Sociedad. La responsabilidad civil del empresario.— Lucha contra el ruido.— Nuevas normas UNE. Art fculos de ¡nters. - - — Momento, nim. 22, 25 marzo 1971 La reforma del crdito oficial. Los Príncipes visitan Andalucía.— Reservasespañolas de divisas: 2.000 millones de dlares. La con taminaci6n atmosférica en la industria.— Golpe de Estado en Turquía.— Belfast: Dimisi6n de Chichester Clark. Viena: Cuarta ronda de las Salt.— Berlín: Ligero retroceso de Brant.— lsael radicaliza su postura.— Retirada survietnamita de Laos Fbkist&albardede la Secesi6n.— Victoria abrumadora de Indira.— Contaminaci6n de la naturaleza.— El rbitrar’io reino del d6lar. .— - - — Momento, núm, 23, 10abril1971 CANARIAS: El archipilago ante el futuro. TV.E,: Enlace vía satlite con el archipilago. Telef6nica: Un paso ms en las comu nicaciones por satélite. Una zona de libre cambio para Españay Portugal.— Relacio— nes España—Hispanoamrica. XXIV Congreso del P.C. de la URSS.— Otro militar pa ra Argentina. ¿Victoria o derrota en Laos?.— Mujibur Rahman. .— — - - Reconquisfa, nim. 252, díciembre 1970.— Espanapara todos ¡os españo’es. Dec6lo— go del Guardia Civil.— La informaci6n de la verdad.— Los Militares en el Evangelio.— Retoques a las ordenanzas.— Derchurere, orne cumplido.— Política social y autoridad.— — -7- Los colegios “Nuestra Señora de Loreto”.— “Los valores ¿ticos de la Infantería moder no”. La formación profesional en el Ej&cito, Silencio y elocuencia de las Armas, Franco, futurólogo político—militar,— Liturgia militar,— El Cadete y el Oficial,— Ela?b militaren 1970. — — - RevistadeEstudiosPolíticos, num, 174, noviembre—diciembre 1970,- Roma y la teoría general del Estado, Antinomias estructurales de la libertad, Pisa y España en la baja Edad Media,— La idea de democracia en el pensamiento de don Enrique Gil y Robles,— A propósito de Marcuse,— Patria y dinómica internacional contemporónea,— En torno al nuevo antimaquiavelo,- Nacionalismo e izquierda en Bolivia, — — — RevistadeHistoriaMilitar, núm, 29, 1970,— Evoluciones y razones históricas de la guerrilla en España0—La Hispania indómita: Las guerrillas celtíberas como anteceden te para la historia del Ejórcito español0— La situación militar en Aragón en el siglo XVII II,— Los ministros de Carlos IV frente a la Revolución francesa.— San Martín en la batalla de Bafln.- Ciudad Rodrigo en poder de los ingleses (enero 1812),- Los bar cos hospitales en la campaña de Cuba.— Crónica de la Comisión Española de Historia Militar comparada en el Congreso Internacional de Ciencias Históricas (Moscú, agosto 1970), — — — — RevistadePolíticaInternacional, nGm 113, enero—febrero 1971,— Una constante inter nacional: La agresión extranjera contra España0- El Pacto y la Carta: Un parangón escki recedor. Aviones supersónicos: Del transporte aéreo al bombardero, Las comunicacio nes internacionales en un mundo de satélites,— La izquierda filo—china en Italia,— La Constitución de 1967 en Vietnam del Sur,— Constitución de guerra La política inter— — ,, ‘ .1, nacional de la URSS,—Los nuevos rumbos arabes segun la Carta de Tripoli El Dere cho humano espacial exterior y la Ley Divina en el Cosmos,—Diario de acontecimientos referentes a España en diciembre l97Oy enero de 1971,— Diario de acontecimientos mun diales durante los mesesde diciembre de 1970 y enero 1971, — — — ,— 0 — Revista“SP”, núm 532, 15 marzo 19710— Las nuevas coordenadas de la Falange His— panoamrica: El derecho de las 200 millas,— Los barjots— Colombia: la huelga de los oprimidos. Bolivia: ¿Campesinos facistas? Uruguay: Las ventajas de un infarto, Gran Bretaña: La tormenta de los helicópteros. Alemania: Tres emisoras incómodas, URSS: La visita de Monseñor. ,— — — , - — — — — — ALEMANIA “SoldatundTechnik”, marzo 1971,— Segunda y distensión son los objetivos de la NATO, Defensa de Alemania Occidental pronunciada en EE.UU, el 9 de febrero de 1971, sobre las principales directrices políticas de la NATO,— El RF—4EPhantom II el nuevo avión de reconocimeno de a Lutwaff e, la nueva motocic’eta Hercu’es K 25 v reglamen - —8— taric en la Bundeswehr.—El carro contracarro sueco 1KV 91.— El vehículo acorazado de desembarco norteamericano LVTP—7 y LVTPX—12.—El dragaminas ruso de la clase To58 en sus dos versiones.— Técnica naval, III parte.— El TOA norteamericano M-1 13 Al AC AV El misil aire-aire ruso ALKALI conocido en Estados Unidos por AA 1 II Ii II AlOLI.. •I II II 2 II it II I ANAB u u “ A A 3 II II II II A A1 II It II II AS 1—1 uu 45 - — “SoldatundTechnik abril 1971.— El Centro Alemcn de lnvestigaci6n y Ensayode Vue los Aeroespaciales0- El carro puente “Leopard.El transporte Oruga Acorazado M 113 A 1 P 1 Armas dentro de sacos de dormir.— Vehículos de ruedas del ejército che co0— Tcnica naval, III parte.— CSR yugoslavo de 82 mm.- Versión suiza del TOA grúa norteamericano M 579.- El TOA M-106 A 1 norteamericano para mortero de 107 mm. El aviún escuela inglés HARRIERT. Mk2. La loncha rápida rusa de la clase “Shershen”.— Los buques logísticos rusos de la clase TOVDA. . — - - — — TribunaAlemana, núm. 13, 19 marzo 1971.—Nuevo comienzo entre Polonia y Alemania0Problemas actuales del partido Social—Dem6crata- Posibilidades de la oposici6n parlo mentaria.— Seguridad europea y política de alianzas. - BELGICA Nouvellesde1’OTAN,marzo—abril de 1971.- La OTAN frente a las fuerzas del Pacto de Varsovia.— La situación militar en Europa.— Lanzamiento del segundo satlite de co municaciones de la OTAN.— Las dificultades de una comparaci6n de fuerzas0— El control de armamentos en el primer año de la década instituida por las Naciones Unidas sobre el desarme. Synthess, enero—febrero 1971.— Geopolítica y prospectiva.— Medio ambiente: ¿Un remedio? Las tradiciones filos6ficas indias. La Iglesia de Asia se inclina por el po blema del subdesarrollo.— Ortega y Gasset o la pasiSn por la luz. Llamada a los huma nistas y universalistas. — — — BRASIL RevistaMilitar, enero 1971 El mariscal Carmona noble figura de militar.— Coronel Josa Ribeiro da Costa Júnior.— Aspectos de la evoluci6n Estratégica Mundial en el año 1970.— Rclato de la reuni6n del Centro de Estudios de Marina del día 221—1971 Cd nico de la Aeronáutica. — . -9- FRANCIA L’Arme, noviembre 1970.- El sistema de armamento “Plutón”,— Como aumentar la efi cacia de tiro de la artillería tierra—tierra clósica.— El método activo y la formación mi litar.— Reflexiones sobre la caballería ligera blindada de las fuerzas territoriales. Des plazamientos militares en la espesa selva malgache.— Las comunicaciones en el Africa francófona y Madagascar.— El sistema “Tacfire”. — LArme, febrero 1971 El lugar del oficial en la sociedad industrial. El servicio militar de doce meses.— Reflexiones sobre la instrucción del personal auxiliar.— Misión del jefe de servicios tcncos en un Regimiento blindado o mecanizado. Papeete: El centro de transmisiones ‘TERRE”.— La instrucción de tiro contracarro en un regimiento de infan tería motorizada.— La integración de los negros en el ejército americano. — — — LesCahiersAtlontiques, núm. 4, 1970.— lJn. futuro para la Europa agrícola: La situación y las perspectvas.— Antecedentes para una política.— Proposiciones para una política.— Apéndices.— Gran Bretaña yel mercado común agrícola.- Del tratado de Roma y la po” lítica agrícola común. Tablas. Reservas específ icas. — — ForcesAériennesFrançaises, febrero 1971.— Aviones supersónicos: Transportesy bombar deros— Nuevo carburante para las turbom6quinas: El metano.— Reflexiones sobre el pro blema de la defensa aérea— Cierta idea de la intendencia.., cien años después.— Las estaciones espaciales. FórcesAériennesFrançaises, marzo 1971.— El Ejército del Aire y sus reservas.— ¿Monté nimiento o no? La corrosión y sus problemas.— El control de las operaciones de defen sa aérea y el automatismo. La determinación automótica del norte geogrófico en un punto fijo terrestre..— El centro de Experiencias Aéreas Militares. Las fuerzas aéreas ¡a pon esas. — — — — — Francia Informaciones, núm. 33, marzo 1971.— Francia y el mundo órabe (lI). Gran Bretaña adopta el sistema métrico.— Discursosy mensajesdel General de Gaulle (fin). — RevuedeDéfenseNationale, marzo 1971 Aspectos especiales de economía general de la función militar.— Por una participación mós intensa de las fuerzas de reserva.— La industrialización de ia cuenca mediterrónea.- La República Arabe Unida después de Ga mal’ Abbel Nasser— Apreciación sobre el anólisis de sistemas Sindicalismo y política enel mundooccidental Expectativas en Oriente Medio. Los satélites meteorológicos. Economia, política y estr’ategia — — — - — — — RevuedeDéfenseNationale, abril 1971.— La siderurgia en la cuenca mediterrónea,— Sobre una nueva conferencia de las Nociones Unidas acerca del derecho del mar. Fu turo: ¿Ejército del mar o marina nacional? Méjico: Ciudad del sol Las relaciones — .— .— — 10 - - entre la URSS, Indonesia y el mundo malayo. La poblaci6n de Siberia. monuclear, Singladuras soviéticas sobre et Oceano Indico. - - La energía ter — LaRevueMaritima, marzo 1971 El rejuvenecimiento de los mandos en la Marina: ¿Utopia o realidad futura?.— El submarino de ataque y su porvenir en la marina france sa, La contribuci6n francesa al principio de la libertad de los mares en el siglo XVI. La conferencia internacional de Londres de 1969 sobre el aforo. Marsella, ‘Europuer— to del Suru Concepcicn y realización de un dispositivo autom6tico de estabilidad en inmersi6n para el submarino, —- — — — .- RevueMilitareGnrole, marzo 1971.— Relaciones entre EstadosUnidos y las RepGblH cas Latino-Americanas. Añagazci o sinceridad?. La poirtica europea de Bonn. Lo defensa operacional del territorio. Las influencias -sicol6gicas de Roimondo Montecuc coli.— La acción político—militar del Pathet Lao contrapuestos aislados.— Contradiccio nes y apuestas sobre la defensa. - - — - Telonde, primer trimestre 1971 Entrevista con el Sr. Roger Gorse, Director General del CNCE. Thomson—CSFy la exportaci6n de bienes de equipo.— Los cristales líqui dos. La instrumentaci6n científica. .— — INGLATERRA AdelphiPapers, diciembre 1970, nm.73 socialismo 6rabe. .- Camaradas sagaces la Unión Soviética y e! -- TheEconomist, 30 enero 5 febrero 1971 ¿Funcionaran secos los surtidores? Ugan da puede no ser la Gltima. Declaración de independencia.— Batiéndose en retirada.-¿La segunda crisis? Un estudio sobre Malasia y Singapur. . — . — - . — TheEconomist, 6—12febrero 1971.— Faltan menos días.— M5 de acuerdo con la kgica— Las guerrillas pierden fuerza.— Altas miras para 1972.— ¿Quién quiere la Rolis Royce? El petroleo en la encrucijada.— Tantos para la energía nuclear. — TheEconomist, 13-19 febrero 1971 Justamente lo que Giap quería Una batalla que an no es una guerra.- Deriasiado caro. Ms hechos y menos palabras con respecto a la unidad monetaria europea. — .— — TheEconomist, 20-26 febrero 1971.— El nuevo buque de guerra. TheEconomist, 27febrero Ha su doctrina. — - La guerra de Laos. 5 marzo 1971.— A Golda, con esperanza. — Nixon desarro — TheEconomist, 6—12marzo 1971.- 11 — ¿Existe Pakist6n? Forcejeo sobre el I.R.A. .- TheEconomist, 13-19 marzo 1971 Pakistan al borde del caos. La Westpolitik Brezhnev— Ulster: Consecuencias del asesinato.— Reportaje sobre Dinamarca, . - — de — TheEconomist, 20-26 marzo 1971,- Lo que se ha conseguido.- Mejores palabras que hechos. Suecia dice no. Los americanos en el mercado de la energfa. — — — ThéEconomist, 27marzo—2 abril 197L- Es preciso ganarse a Pompidou. Los republi canos camino de Peking.- ¿Sobrevivird el RB ZIl una vez que el senado ha puesto el veto al SST? TheEconomist, 3—9 abril 1971.— Unidad a la fuerza.— El sexo subdesarrollado.- El dialogo da paso a la guerra.- La estrella roja en el Vaticcno. ¿Quienes son los crimi nales de guerra. Survval, febrero 1971 Seguridad o confrontacin. econ6micas internacionales. Documentaci6n. — Un proyecto dudoso.- - Políticas — Survival, marzo 1971 Sud6frica y lo defensa de occidente. lo fuerza Las armas nucleares y la guerra América latina. .- — - El delicado aspecto de- .— ITALIA RivistoAeronautica, febrero 1971 La evoluci6n progresiva de lo aviaci6n militar. ¿Qué va a ser de la industria aeroespacial brit6nca?. El militar y la sociedad. La Real Fuerza A&ea Australiana,— El yoga “Hatha” y el arte de mandar.— El despotismo y el ejercicio del mando.— ¿Cal sería el resultado de una conf rontacin entre el “,Phan tom” y el “Sam”. . - - — — — RvistaMaritima, marzo 1971.— Consideraciones sobre la evoluckSn de las fuerzas arma das de algunas naciones europeas.— Sistemas “On—Line” y “Real Time” de elaboroci6n automática de datos. SUIZA RevueMilitaireSuisse, marzo 1971.— Debemos volver a considerar nuestra defensa psi: col6gica. Cuando sobreviene el pcnico... El Laser. .— RevueMilitaireSuisse, abril 1971.— Aleccionamiento del mariscal de Belle—Isle a su hijo el conde Gisors.— Nuestra incierta seguridad.— La oleada antimilitarista y el ser vicio civil ¿Y los prisioneros? De la retarguardia al frente. .— .-- 12 - - U.R.R.S, RevueMilita;reSovitigue, febrero 1971.— La cusfodia de las fronteras areas.—”Los aviones portacohetes atacan. “El destacamento en alerta”. Cuestin de segundos”.—— La teoría y la próctica militar del mando. Un golpe de mano,— Con bosquesy panta nos. La vida cotidiana de una compañía especial.— De la dirección de la estrategia en tiempo de guerra.— Africa se une contra la agresión, — - - - RevuéMilitaireSoviétigue, marzo 1971.— La unidad con el pueblo fortalece al Ejrci fo. Un gigante energético en el Yenisey. Una cooperación contínua. El entrenamien fo físico del soldado. Los todo—terreno sovificos.Despuésde medio siglo ellos velan por las conquistas del pueblo. La red de espionaíe del sionismo. Los herederos de los samurais — — — - - - U.S.A. Aerospacelnternat;nal, enero febrero 1971.— La industria del transporte aireo y sus beneficios recesivos.- Anólisis económico-de las Lineas Aireas de EE.UU. Guerra a los secuestradores de aviones. Aviones piiotodos por control remoto. Los progresos del L-1Oii..— RollsRoyce:Preocupadaperotenaz.-El F.5-21 posible adversario. — .- — AirForceMagazine, Mundo aeroespacial. — febrero 1971 Noticias sobre material aireo, Noticias europeçs. La estrategia mundial de 1946.— MIRV: Anatomía de un enigma. .— - — ForeignAffairs, enero 1971.— Nuevas perspectivas en el Sudeste Asitc0, La doctrina Nixon y nuestros compromisos asióticos, Derroteros peligrosos en Africa meridional. Ciencia y política para una nueva década.— Europa entre las superpotencias.- Diplomo cia nuclear: Gran Bretaña, Francia y América.. Las divisiones reales de Europa,— Obs curidad en Haití,— La decadencia del poder naval de superficie, En el crepúsculo de la era de Franco. - — — — - — MermeCorpsGzette, febrero 1971.— El control de las minorías ¿tnicas en el sur de Asia.— Bolsaen Phuoc Yen.— Las Convenciones de Ginebra.— La formación linguisti— ce de los interrogadores. — MarineCorpsGazette, marzo 1971.— El entrenamiento en la opinión de unefe.— “Guerra cvii en Jordania”. Los marines embajadores. Una alegacion de ordenes su— Deriores. — - MfliirReview, — — diciembre 1970.— Subvención militar de Investigación y Desarrollo.— Unacotferencia Kermit Roosevelt: Participación militar al Este de Suez. — India—Segun do plan de defensa - El futuro del tanque.— Mandos de areas de maniobra .- Amenaza i: - u — soviética en eloceano Indico.- Henry Leavenworth—Un precursor.— Conviene simplifi car Política de defensa europea Obligaciones del prisionero de guerra.— Futuras fuerzas parael Ejército. .— .— MilitaryRevew, enero 1971.— La defensaisraelí delCanal de Suez.— La OER: Nueva hoja de calificación, La contaminación delambiente. El CS y su empleo. Unidades para la Guardia Nacional,- La policía militar soviética.-. La batalla de Cowpens.Evaluación de la instrucción.— EU. y la seguridad del Canadd.— Jurisdicción de los tribunales militares.— ROTC: Nuevo plan académico. — — — — MilitaryReview, febrero 1971.— Advertencia de la OTAN de 1968.— Fuerzas de de fensa de Japón.— La infantería de la Bundeswehr.—China: El Ejército, el Partido y el Pueblo.— Anólisis de sistemas.— Estrategia japonesa.— Conflicto en el Golfo Pérsico. La Panzer Lehr y la defensa.— Papel de las Fuerzas Armadas en América Latina.— La estrategia: ¿A que precio?. NationalGeographic, marzo 1971 Mapa de naciones y pueblos del Sudeste AsiótH co.- Mosaico de culturas.- Nuevo amanecer de un pasado olvidado Pagan, en la ca rretera de Mandalay.— Islas de las costas de Carolina del Sur, Georgia y Florida.— El retorno de la ballena gris de California.— Quebec: una ciudad francesa en un mundo anglosajón.. . - - NationalGeographic, abril 1971.— Hungría.— Maui.Irlanda.Oso polar: Nómada solitario del norte. — Las Arans, islas invencibles de ProblemasdelComunismo, noviembre—diciembre 1970.- El enfoque soviética a la SALT. El Pensamiento de Roger Garaudy.— La Tecnología Soviética: Sistema vs. Progreso.— La Intelectualidad en Oposición.— La Situación de los Judios Soviéticos.— Baladas desde el Subterr6neo. A través de los Ojos Soviéticos. - Próceedings, febrero 1971.— El oficial naval soviético de alta mar.— Modernización— del “Midway” El rechazo silencioso, La vigilancia ocednica, nueva arma de guerra naval— Destino del “Hero”: La Antartida. .— — Proceedings, marzo 1971.— La marina norteamericana del futuro.— La retención de los oficiales jóvenes.— La Armada Real Helena.’- La Ley de la marina mercante de 1970.¿Sistemas de armas? ¿Para defensa aérea7. USNews&WorldReport, 29 marzo 1971.- A medida que EstadosUnidos presiono por la paz en Oriente Medio.- Nuevos obstócu los para el reactor supersónico. Lo que piensa la gente sobre la América actual. “Los valores tradicionales se han perdido”.— Razones por las que los ex-combatientes en Vietnam se sienten como hombres olvidados. El nacionalismo negro crecientes preocupaciones en el Caribe. Sumido en la disensión — — — — — — - 14 Marcos de Fflipinas.— Vivir y familiarizorse con la energía atcmkci— El Gobierno de— ckro c qrr a la poluci6n. ¿Tratar con Rúsia? Los berlincscs no. — U.S.News&WorldReport, 5 abril 197. Balanc.ede situccin n Laos ¿Victcria o derrota? El nuevo plan quinquencfl d.cRusia: Prüeba crucTc orc: l sistema comunstc» Las ciudades perpobladas, los campos vados y.el. remedio de Nixon.El futuro en dochinaLa superioridad USA ha terminado. — US,Nc’:is&WorldReport, 12abril 19T! El Ejrcto trata do ovitar otro caso como el da M’ Li.— Rusia estrecha sus relaciones con Egipto. La causadel conflicto Pakis tarí. Quo pasaría después de una rpida retirada U.S.A. de Vietnam.— “Es impórtan_ te terHnar can esta guerra” Hoovar acusado. . —