Estado del Arte de la Solución Amistosa en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). FICHA 1 CASO Nº ACTOR ESTADO FECHA RESUMEN 12.426 y 12.427 Las organizaciones no gubernamentales Centro de Defensa de los Derechos del Niño y del Adolescente Padre Marcos Passerini y Centro de Justicia Global (CJG) - NIÑOS CAPADOS DE MARAÑÓN. Brasil 15 Marzo de 2006. 1. Hechos En ambas denuncias las peticionarias alegaron que el Estado brasileño había violado las obligaciones que le imponen la Conven ción Americana sobre Derechos Humanos y la Declaración Americana, al no adoptar medidas eficaces para poner coto a las prácticas de tortura y homicidio de diversos niños en el Estado de Marañón y por estar en omisión de investigar los hechos. Las peticionarias relataron, específicamente, la desaparición de los niños Raniê Silva Cruz, Eduardo Rocha da Silva y Raimundo Nonato da Conceição Filho, en la ciudad de Paço do Lumiar, y el hecho de que sus cuerpos fueron encontrados con marcas de tortura y castración en los órganos genitales. Alegaron que hubo retraso injustificado por parte de las autoridades locales en la búsqueda de los niños, y que las averiguaciones policiales sobre la responsabilidad por los crímenes fueron demasiado lentas y ineficaces. Destacaron que ello se debió a la impericia de la Policía del Estado de Marañón y a la omisión de la Policía Federal, que intervino en forma extemporánea en las investigaciones. Las peticionarias alegaron que los dos casos denunciados forman parte de una serie de casos de niños mutilados y asesinados en el Estado de Marañón, divulgados por la prensa brasileña como “Caso de los Niños Castrados de Marañón”. Subrayaron que recién en abril de 2003, doce anos después del primer crimen, se designó un grupo de trabajo compuesto por autoridades de la Policía Ci vil, la Policía Federal y el Ministerio Público, para investigar los hechos. En marzo de 2004, el grupo de trabajo presentó al probable autor de los crímenes, quien confesó haber asesinado a 30 niños en São Luis do Maranhão y a otros 12 en Altamira, en el Estado de Pará. En relación con el fenómeno en general, las peticionarias destacaron que los índices de desarrollo humano en el Estado de Marañón son significativamente bajos, notablemente en la población infanto-juvenil, que experimenta un universo de problemas, tales como explotación del trabajo infantil, altos índices de evasión escolar y elevada tasa de analfabetismo. Adujeron que la población de niños y adolescentes de la región de la Gran São Luis (capital del Estado de Marañón) se encuentra privada de sus derechos básicos en materia de educación, salud, vivienda, esparcimiento y alimentación. Por último, frente a la respuesta del Estado brasileño en relación con el trámite de las investigaciones, las peticionarias cuestionaron las medidas concretas tendientes a identificar a los responsables de los crímenes, prevenir la perpetración de nuevos asesinatos de niños, otorgar una reparación a los familiares de las víctimas y mejorar las condiciones de vida de los niños y adolescentes en el Estado de Marañón. Estado del Arte de la Solución Amistosa en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). NORMAS Violación a los artículos I (Derecho a la vida), VI (Derecho a la constitución y a la protección de la familia), VII (Derecho de protección de la maternidad y la infancia) y XVIII (Derecho de justicia), de la Declaración Americana sobre Derechos y Deberes del Hombre (en lo sucesivo denominada “la Declaración”), y los artículos 4 (Derecho a la Vida), 8 (Garantías Judiciales), 19 (Derecho a la protección del Niño) y 25 (Derecho a la Protección Judicial) de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. “El Estado brasileño reconoce su responsabilidad internacional en relación con los casos nº 12.426 y nº 12. 427 en los siguientes términos: el Estado de Marañón reconoce la insuficiencia de resultados positivos de anteriores líneas de investigación, en comparación con el actual estado de la indagatoria, admitiendo errores y dificultades en la necesaria solución inmediata de los casos, por las fallas estructurales del sistema de seguridad hasta entonces existente, la complejidad de los hechos y su modus operandi. VULNERADAS SOLUCIÓN AMISTOSA El reconocimiento público de la responsabilidad del Estado brasileño en relación con la violación de derechos humanos arriba mencionada se efectuará en ceremonia pública. El Estado de Marañón instalará una placa en homenaje simbólico a los niños-víctimas en el Complejo Integrado de Protección al Niño y al Adolescente. La Unión Federal, por medio del Ministerio de las Ciudades, y el Estado de Marañón, por medio de la Secretaria de las Ciudades, incluirán a las familias beneficiarias, en el plazo de 12 (doce) meses, en los programas de Viviendas de Interés Social cuya gestión está a cargo del Ministerio de las Ciudades, en forma no onerosa, en las áreas en que actualmente residen. El Estado de Marañón, mediante autorización legislativa, realizará el pago de una pensión especial mensual, de carácter indemnizatorio, por un valor de R$ 500,00 (quinientos reales), a cada una de las familias beneficiarias, por un plazo de 15 (quince) años.” 1 PALABRAS CLAVE AUTOR DE LA Tortura y homicidio de menores de edad, violación de derechos humanos, omisión de investigación de las instituciones del Estado, castración de órganos genitales, desaparecimiento de menores. Alethia Arango, Cristina Madrigal. FICHA 1 Informe 2006 CIDH. En línea:[http://www.cidh.org/annualrep/2006sp/Brasil12.426.htm] Estado del Arte de la Solución Amistosa en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). FICHA 2 CASO Nº ACTOR ESTADO FECHA RESUMEN 10.205 Comisión Intereclesial de Justicia y Paz- Germán Enrique Guerra Achuri. Colombia 16 Marzo de 2006. 1. Hechos Se alega que el domingo 8 de febrero de 1988, aproximadamente a las 2:30 AM, el campamento donde se encontraban los trabajadores de la finca fue objeto de una incursión armada por parte del Ejército Nacional, como consecuencia de la cual el señor Guerra resultó herido de bala en la pierna izquierda, junto a dos trabajadores más. La petición indica que con posterioridad al ataque, los miembros del Ejército ingresaron abruptamente a la casa del campamento donde requisaron a los trabajadores, colocándolos boca abajo mientras les gritaban “guerrilleros bandoleros” y le pegaban pun tapiés. Se alega que a las 7:00 AM los trabajadores fueron transportados en un camión donde permanecieron hasta su llegada al municipio de Remedios en horas del medio día, donde los trabajadores heridos fueron finalmente atendidos en un centro asistencial, gracias a la intervención del Alcalde. Se alega que como consecuencia de estos hechos y a pesar de la asistencia recibida horas después, el señor Guerra perdió su pierna izquierda y quedó incapacitado de manera permanente. Según surge del expediente, la investigación por las lesiones causadas a Germán Enrique Guerra fue adelantada ante la justicia penal militar. Esta investigación concluyó el 3 de noviembre de 1993 con la decisión del Comandante de la Décima Brigada del Ejército, con sede en Puerto Berrío, de declarar extinguida la acción penal en vista del fallecimiento del único sindicado dentro del proceso. También consta que el 18 de junio de 1997 la Dirección Nacional de Fiscalías asignó a la Unidad Nacional de Derechos Humanos la investigación por el delito de lesiones personales en perjuicio del señor Germán Enrique Guerra. Estado del Arte de la Solución Amistosa en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). NORMAS Derechos protegidos por los artículos 1, 5, 8 y 25 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. VULNERADAS “El Estado se compromete a dar aplicación a la ley 288 de 1996, con el propósito de reparar los perjuicios morales y materiales sufridos por el señor Germán Enrique Guerra Achuri como consecuencia de los hechos ocurridos el 8 de febrero de 1988 en el campamento de los trabajadores de la finca “La Perla” ubicada en el Municipio de Remedios, Antioquia. SOLUCIÓN AMISTOSA El Gobierno se compromete a presentar ante la Procuraduría General de la Nación una solicitud a fin de que aquélla, dentro del marco de sus competencias, interponga la acción de revisión de la sentencia de fecha 23 de enero de 1995, proferida por la Justicia Penal Militar (Expediente N° 4137 – 113859 – 337 del Tribunal Superior Militar).”2 PALABRAS Homicidios extrajudiciales por las fuerzas militares, violación de Derechos Humanos, lesiones personales, incapacidad. CLAVE AUTOR DE LA Alethia Arango, Cristina Madrigal. FICHA FICHA 3 CASO Nº ACTOR ESTADO 12.238 Abogados Ponce Fernández de Córdoba & Simón - MYRIAM LARREA PINTADO. Ecuador. FECHA 15 Marzo de 2006. 2 Informe 2006 CIDH. En línea:[http://www.cidh.org/annualrep/2006sp/Colombia10.205.htm] Estado del Arte de la Solución Amistosa en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). RESUMEN 1. Hechos NORMAS Violaciones a los artículos 8.1, 25, y 1.1 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. Se denuncia que la señora Miriam Larrea Pintado fue mantenida en prisión preventiva durante un año, cinco meses y 25 días, entre el 11 de noviembre de 1992 y el 6 de mayo de 1994. Fue arrestada en virtud de una orden de prisión preventiva dictada contra ella por el Juez Cuarto de lo Penal de Pichincha el 11 de noviembre de 1992. En esa fecha dicho juez imputó formalmente a la Sra. Larrea Pintado el delito de transferencia fraudulenta de bienes. Estando en curso el proceso penal la peticionaria presentó un recurso de habeas corpus ante la Corte Suprema de Justicia, y el 6 de mayo de 1994 el Presidente de dicho cuerpo decretó su libertad. El juicio penal seguido contra la Sra. Larrea Pintado por el delito referido se inició el 16 de agosto de 1993 y concluyó el 31 de octubre de 1994, con sent encia absolutoria. La absolución fue confirmada por la Tercera Sala de la Corte Superior de Quito el 20 de marzo de 1996, y nuevamente confirmada por la Segunda Sala de la Corte Suprema el 4 de febrero de 1997. VULNERADAS SOLUCIÓN “El Estado ecuatoriano reconoce su responsabilidad por haber transgredido los derechos humanos de la señora Myriam Genoveva Larrea Pintado. AMISTOSA El Estado ecuatoriano entrega a la señora Myrian Genoveva Larrea Pintado una indemnización compensatoria por una sola vez de doscientos setenta y cinco mil dólares de los Estados Unidos de Norteamérica (US 275.000,oo), con cargo al Presupuesto General del Estado. El Estado ecuatoriano iniciará las acciones necesarias tendientes al enjuiciamiento tanto civil como penal y a la búsqueda de las sanciones administrativas de las personas que, en cumplimiento de funciones estatales o prevalidas del poder público, se presume que tu vieron participación en la violación alegada. ”3 PALABRAS Transferencia fraudulenta de bienes, violación de derechos humanos, prisión preventiva, absolución. CLAVE AUTOR DE LA Alethia Arango, Cristina Madrigal. FICHA 3 Informe 2006 CIDH. En línea:[http://www.cidh.org/annualrep/2006sp/Ecuador12.238.htm] Estado del Arte de la Solución Amistosa en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). FICHA 4 CASO Nº ACTOR ESTADO FECHA RESUMEN NORMAS VULNERADAS 711.01 y 4331/2002, 4394/2002, 4576/2002, 33/2003, 119/2003, 427/2003, 909/2003, 64/2004, 105/2004, 150/2004 , 137/2004, 202/2004, 494/2004, 571/2004. Peticionarios comprendidos en el Acuerdo de Solución Amistosa de 22 de diciembre de 2005: Alvarado Galván, Eleana Morayma; Alvarez Guillén, Jaime; Arellano Serquen, Julia Eleyza; Avilez Rosales, Ricardo; Catacora Gonzáles, Dalia Aurora; Cueva Góngora, José; Chaupis Huaranga De Ricse, Natividad; Garrote Amaya, Durbin Juan; Gómez Alva, Fidel; Gonzáles Victorio, Samuel Onésimo; Jo Laos, María Elena; La Madrid Ibáñez, Hugo; Linares San Román, Juan José; Losza Méndez, Malco; Martel Chang, Rolando Alfonzo; Montes Tisnado, Adelaida Elizabeth; Munive Olivera Heraclio; Navas Rondón, Carlos; Peralta Ramírez María; Pimentel Zegarra, Bernardo Alcibíades; Quispe Arango, Pablo; Quispe Segovia, Héctor; Rosas Montoya, Segundo Benjamin; Siclla Villafuerte, Elmer; Trelles Romero, Carlos. Peticionarios comprendidos en el Acuerdo de Solución Amistosa suscrito el 5 de enero de 2006: Aragón Ibarra, Luis Angel; Bera ún Rodríguez, Ricardo Jesús; Cavero Flores, Sunciona; Degracia Velásquez, Gerardo Germán; Del Carpio Rodríguez, Columba Maria; Delgado De Marky, Luz Elizabeth; Martiarena Gutiérrez, Leoncio; Minaya Guerrero, Esteban Urbano; Paccini Virhuez, Flavio Ernesto; Palacios Tejada, Olga Lourdes; Perla Montaño, Clara Aurora; Sancarranco Cáceda, Hilda Flores De María; Taipe Chavez, Sara Josefa. Peticionarios comprendidos en el Acuerdo de Solución Amistosa suscrito el 8 de febrero de 2006: Arana Miovich, Alfredo Julio; Butron Seballos, Pastora Udelia; Cusirimay Jiménez, Walter Epifanio; Céspedes Garcia, José Eduardo; Chávez-Riva Castenada, Pedro Abraham; Encinas Llanos, Rosario Del Pilar; Quinte Villegas, Andrés; Samame Flores, Javier Claudio; Yrivarren Fallaque, Eduardo Raymundo Ricardo. Peticionarios comprendidos en el Acuerdo de Solución Amistosa suscrito el 10 de febrero de 2006: CARBAJAL PORTOCARRERO, ANDRÉS ALEJANDRO; LLERENA HUAMÁN, ANGEL DAVID; TORRES SUÁREZ, ROGELIO; VÁSQUEZ PAULO, JORGE ADALBERTO. Perú. 15 Marzo de 2006. 1. Hechos Los peticionarios alegan, en sus respectivas denuncias, que la resolución o el acto que decide su no-ratificación no cuenta con motivación alguna, de conformidad con lo exigido por la Constitución. De hecho, sostienen que el artículo 139°, inciso 5) de la Constitución, prescribe que todas las resoluciones judiciales deben tener motivación escrita. Añaden asimismo, que se ha vulnerado su derecho a la defensa y el principio de la inamovilidad de los jueces. Los peticionarios solicitan la reincorporación en sus cargos, sometimiento a un nuevo proceso de evaluación y ratificación, y reparaciones de tipo moral y material. Finalmente, sostienen que no existe un recurso en la jurisdicción interna que pueda controlar las decisiones del Consejo Nacional de la Magistratura. Derecho a las garantías judiciales, el derecho a la protección a la honra, sus derechos políticos, el derecho a igual protección de la ley, y el derecho a la protección judicial, todos ellos consagrados en los artículos 8, 11, 23, 24 y 25 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. Estado del Arte de la Solución Amistosa en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). “El Estado reconoce que el proceso de ratificación de jueces y fiscales, tal como fue llevado al cabo antes de la entrada en vigor el 1 de diciembre de 2005 del Código Procesal Constitucional (Ley No. 28237), si bien estuvo conforme a la interpretación de las normas aplicables realizada por las instancias pertinentes, no incorporó ciertas garantías de la Tutela Procesal Efectiva, particularmente la exigencia de resolución motivada, que debe ser observada en todo tipo de procedimiento. SOLUCIÓN AMISTOSA El Poder Judicial o el Ministerio Público, en los casos de jueces o fiscales, respectivamente, dispondrá la reincorporación del magistrado a su plaza original dentro de los 15 (quince) días siguientes a la rehabilitación del título. De no estar disponible su plaza original, a solicitud del magistrado, éste será reincorporado en una plaza vacante de igual nivel en el mismo o en otro Distrito Judicial. En este caso, dicho magistrado tendrá la primera opción para regresar a su plaza de origen apenas se produzca la vacante respectiva. El Estado Peruano se compromete a reconocer el tiempo de servicios no laborados contados desde la fecha de la Resolución de n o ratificación, para los efectos del cómputo de su tiempo de servicios, jubilación, y demás beneficios laborales que le corresponden conforme a la ley peruana. El Estado Peruano difiere el pago de cualquier otro monto indemnizatorio que resultare procedente, de conformidad con la normativa y jurisprudencia nacional y supranacional.”4 PALABRAS Reincorporación a cargos judiciales o fiscales, violación de derechos humanos, garantías judiciales, Consejo Nacional de la Magistratura (CNM). CLAVE AUTOR DE LA Alethia Arango, Cristina Madrigal. FICHA 4 Informe 2006 CIDH. En línea:[http://www.cidh.org/annualrep/2006sp/Peru711-01yotros.htm] Estado del Arte de la Solución Amistosa en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). FICHA 5 CASO Nº ACTOR ESTADO FECHA RESUMEN NORMAS VULNERADAS 33-03 y 4394/2002, 985/2003, 119/2003, 137/2004, 494/2004, 571/2004, 958/2004, 764/01 y 456/2006. Presuntas víctimas comprendidos en el Acuerdo de Solución Amistosa de 26 de junio de 2006: Alberca Pozo, Gerardo; Atto Mendives, Magda; Benavides Díaz María de Jesús; Bromley Guerra, Ana María Enriqueta; Carrasco Vergaray, Hanmerli Rosendo; Chavarri Vallejos, Pedro Gonzalo; Coronado López, Gina Liliana; Díaz Mejía, Roque Alberto; Egoávil Abad, Jorge Alberto; Gómez Benavides Percy; Junchaya Vera, Frecia Cristel; Loayza Azurin, Oscar; Quiroz Vallejos, Gustavo Efraín; Torres Toro, José Teodoro; Zarria Carbajo, Segundo Vicente. Presuntas víctimas comprendidos en el Acuerdo de Solución Amistosa suscrito el 24 de julio de 2006: Cavero Velaochaga, Mario Armando; Celis Zapata, Carlos Alberto; Coayla Flores, Bartolomé Oscar; Díaz Pérez, Jorge Alex; Díaz Vallejos, José Wilfredo; Espino Méndez, Alejandro; Mamani Solórzano, Elí Fernando; Núñez Julca, Héctor Hugo; Romero Quispe, Jacobo; Saavedra Lujan, Richard Milton; Sanz Quiroz, Jorge Enrique; Tucto Rodil, Carlos. Perú. 21 Octubre de 2006. 1. Hechos Las presuntas víctimas alegan, en sus respectivas denuncias, que la resolución o el acto que decide su no-ratificación no cuenta con motivación alguna, de conformidad con lo exigido por la Constitución. De hecho, sostienen que el artículo 139°, inciso 5) de la Constitución, prescribe que todas las resoluciones judiciales deben tener motivación escrita. Añaden asimismo, que se ha vulnerado su derecho a la defensa y el principio de la inamovilidad de los jueces. Las presuntas víctimas solicitan la reincorporación en sus cargos, sometimiento a un nuevo proceso de evaluación y ratificación, y reparaciones de tipo moral y material. Finalmente, sostienen que no existe un recurso en la jurisdicción interna que pueda controlar las decisiones del Consejo Nacional de la Magistratura. Derecho a las garantías judiciales, el derecho a la protección a la honra, sus derechos políticos, el derecho a igual protección de la ley, y el derecho a la protección judicial, todos ellos consagrados en los artículos 8, 11, 23, 24 y 25 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos Estado del Arte de la Solución Amistosa en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). “El Estado reconoce que el proceso de ratificación de jueces y fiscales, tal como fue llevado al cabo antes de la entrada en vigor el 1 de diciembre de 2005 del Código Procesal Constitucional (Ley No. 28237), si bien estuvo conforme a la interpretación de las nor mas aplicables realizada por las instancias pertinentes, no incorporó ciertas garantías de la Tutela Procesal Efectiva, particularmente la exigencia de resolución motivada, que debe ser observada en todo tipo de procedimiento. SOLUCIÓN AMISTOSA El Poder Judicial o el Ministerio Público, en los casos de jueces o fiscales, respectivamente, dispondrán la reincorporación del magistrado a su plaza original dentro de los 15 (quince) días siguientes a la rehabilitación del título. De no estar disponible su plaza original, a solicitud del magistrado, éste será reincorporado en una plaza vacante de igual nivel en el mismo o en otro Distrito Judicial. En este caso, dicho magistrado tendrá la primera opción para regresar a su plaza de origen apenas se produzca la vacante respectiva. El Estado Peruano se compromete a reconocer el tiempo de servicios no laborados contados desde la fecha de la Resolución de n o ratificación, para los efectos del cómputo de su tiempo de servicios, jubilación, y demás beneficios laborales que le corresponden conforme a la ley peruana. El Estado Peruano difiere el pago de cualquier otro monto indemnizatorio que resultare procedente, de conformidad con la normativa y jurisprudencia nacional y supranacional.”5 PALABRAS Reincorporación a cargos judiciales o fiscales, violación de derechos humanos, garantías judiciales, Consejo Nacional de la Magistratura (CNM). CLAVE AUTOR DE LA Alethia Arango, Cristina Madrigal. FICHA 5 Informe 2006 CIDH. En línea:[http://www.cidh.org/annualrep/2006sp/Peru33-03yotros.htm] Estado del Arte de la Solución Amistosa en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). FICHA 6 CASO Nº 12.555 ACTOR Josefa Agudo Manzisidor, Marino Alvarado y José Ramón Ortuondo- SEBASTIÁN ECHANIZ ALCORTA Y JUAN VÍCTOR GALARZA MENDIOLA. Venezuela. 21 Octubre de 2006. 1. Hechos Los peticionarios denuncian que el 31 de mayo de 2002 el señor Juan Víctor Galarza Mendiola, ciudadano español, residenciado en Venezuela, fue detenido en forma arbitraria e ilegal en el estacionamiento de su residencia ubicada en Valencia, Estado de Carabobo, Venezuela cuando se encontraba acompañado de su esposa y su hija de 2 años de edad, ambas venezolanas. La detención fue efectuada por seis funcionarios con chaquetas que los identificaban como funcionarios de la Dirección de los Servicios de Inteligencia y Prevención (DISIP) quienes los rodearon y los encañonaron. Denuncian que sin mostrarle orden de detención, ni dar explicación de motivos, se llevaron al señor Galarza informando a su esposa que sería dirigido a la sede de la DISIP en la localidad de Naguanagua del mismo estado. Sostienen que el señor Galarza tenía 12 años residenciado en Venezuela, estaba casado con una ciudadana venezolana, había renovado recientemente su visado y estaba en total legalidad en apego a las normas de inmigración que rigen en Venezuela. Los peticionarios denunciaron que el 16 de diciembre de 2002 fue detenido Sebastián Echaniz Alcorta en forma arbitraria e ilegal en su centro de trabajo ubicado en la población de Choroni, Estado de Falcón, Venezuela. Señalan que la detención fue efectuada por cuatro funcionarios vestidos de civil que fueron identificados por varias personas como miembros de la DISIP. Alegan que sin orden de detención, ni explicación de motivos, rodearon, encañonaron y se llevaron al señor Echaniz en un auto con rumbo desconocido. ESTADO FECHA RESUMEN Los peticionarios indican que el señor Galarza denunció que durante su detención en la sede de la DISIP fue visitado por un funcionario de la Embajada española que lo amenazó hablándole en 'euskera' y diciéndole que si no encontraban a los seis 'etarras' buscados por las autoridades españolas se los llevarían a ellos. NORMAS VULNERADAS Derecho a la integridad personal (artículo 5), derecho a la libertad personal (artículo 7), garantías judiciales (artículo 8) , protección a la honra y de la dignidad (artículo 11), Derecho de Circulación y de Residencia (artículo 22.6 y 8) , Igualdad ante la Ley (artículo 24) y protección judicial (artículo 25), en concordancia con la obligación general de respeto y garantía prevista en el artículo 1.1 del citado instrumento, protecció n a la familia consagrada en el artículo 17 de la Convención Americana. Estado del Arte de la Solución Amistosa en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). SOLUCIÓN AMISTOSA PALABRAS “El Estado venezolano acepta su responsabilidad internacional por violación de los derechos humanos de los ciudadanos vascos Juan Víctor Galarza Mendiola y Sebastián Echaniz Alcorta, al haber procedido a realizar una deportación ilegal y entrega ilegal al Estado español. El Estado de Venezuela reconoce que en caso de solicitud de extradición de un extranjero requerido por la justicia de otro país, debe aplicarse el procedimiento de extradición. En el caso de Juan Víctor Galarza Mendiola la indemnización de daño moral será por los sufrimientos causados a su persona y familiares (esposa e hija) como consecuencia de la expulsión ilegal, de los tres años privados de libertad, de la inestabilidad económica causada y de la inestabilidad familiar causada. La cuantía por el daño moral a Juan Víctor Galarza Mendiola será de cincuenta mil (50.000) euros, a pagar a más tardar a los 90 días de firmado el presente acuerdo de solución amistosa con una prorroga de 30 días. A su esposa María José Ugalde la cantidad de treinta y cinco (35.000) euros y a su pequeña hija Haizea Galarza la cantidad de siete mil (7.000) euros. Su no pago en este plazo acarreará al Estado el debido pago de la mora respectiva. La cuantía por el daño material referido al lucro cesante como al daño emergente a Juan Víctor Galarza Mendiola y a su familia será de cuarenta mil (40.000) euros, a pagar más tardar a los 90 días de firmado el presente acuerdo de solución amistosa con una prorroga de 30 días. Su no pago en este plazo acarreará al Estado el debido pago de la mora respectiva. En el caso de Sebastián Echaniz Alcorta y su concubina, la indemnización de daño moral será por los sufrimientos causados a su persona y familiares como consecuencia de los años privados de libertad que ya ha cumplido y los que cumpla a futuro, de las torturas recibidas, de la expulsión ilegal, de la inestabilidad económica causada y de la inestabilidad familiar causada. Igualmente una indemnización por lucro cesante por los daños causados al cercenarle un ingreso mensual producto de su trabajo diario el cual gozaba para el momento de su detención y posterior deportación ilegal así como por el daño emergente, referido al desplazamiento forzado de su concubina al Estado español y a las visitas que la misma ha tenido que realizar a distintas prisiones españolas en los casi cuatro años que lleva en prisión más los que aún tiene por cumplir. La cuantía por el daño moral a Sebastián Echaniz Alcorta será de setenta y cinco mil (75.000) euros a pagar más tardar a los 90 días de firmado el presente acuerdo de solución amistosa con una prorroga de 30 días. La indemnización por el daño moral de la concubina María Aranzazu Plazaola Echaniz será por la cantidad de veinticinco mil (25.000) euros. Su no pago en este plazo acarreará al Estado el debido pago de la mora respectiva.”6 Detención ilegal, violación de derechos humanos, deportación ilegal, ciudadanos vascos en Venezuela. CLAVE AUTORES 6 Alethia Arango, Cristina Madrigal. Informe 2006 CIDH. En línea:[http://www.cidh.org/annualrep/2006sp/Venezuela12.555.htm] Estado del Arte de la Solución Amistosa en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). FICHA 7 CASO Nº ACTOR ESTADO FECHA 12.205 La Comisión Ecuménica de Derechos Humanos- JOSÉ RENÉ CASTRO GALARZA. Ecuador. 15 Marzo de 2006. Estado del Arte de la Solución Amistosa en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). RESUMEN 1. Hechos El Sr. José René Castro indica que fue detenido por la Policía el 26 de junio de 1992, sin que existiera boleta de dete nción o mediara flagrancia. El peticionario alega que tras la detención fue trasladado al Regimiento Quito donde permaneció incomunicado durante 34 días. Recién el 30 de julio de 1992, el peticionario señala que fue puesto a disposición de un juez competente, quien le informó que se le investigaba por tráfico de drogas, enriquecimiento ilícito y testaferrismo dentro del “Operativo Ciclón”. En consecuencia, se iniciaron 3 procesos penales en su contra en la Presidencia de la Corte Superior. El Sr. José René Castro alega que después de encontrarse detenido 12 meses y 4 días, es decir, el 1 de diciembre de 1992, se emitió la boleta para su encarcelamiento. En la causa seguida en su contra por enriquecimiento ilícito, el peticionario indica que fue sobreseído el 22 de noviembre de 1996, y que la Cuarta Sala de la Corte Superior dictó el sobreseimiento definitivo el 7 de mayo de 1998. Sin embargo, para que el auto quedara firme se debían resolver primero, el Recurso de Casación, interpuesto por el Ministro Fiscal y, el Recurso de Hecho, interpuesto por el Procurador General. Respecto del proceso por testaferrismo, el peticionario alega que el 23 de marzo de 1998 fue sobreseído. Sin embargo, a la fecha de la denuncia, se encontraba en consulta en la Primera Sala de la Corte Superior, lo cual, según el peticionario violaba el artículo 398 y siguientes del Código de Procedimiento Penal, que establece un plazo para su resolución de 15 días. Igualmente, el peticionario indica que, a pesar de que conforme a la ley el sumario debía resolverse en 60 días, en el presente caso se resolvió a los cuatro años. En el juicio por tráfico de drogas que se siguió en su contra, el peticionario indica que se le condenó a 8 años de reclusión. Sin embargo, la Corte Superior, al conocer en apelación esta sentencia, redujo la sentencia a 6 años de reclusión, el 15 de septiembre de 1997. El peticionario alega que el 16 de abril de 1998, se solicitó a la Dirección Nacional de Rehabilitación Social una rebaja de la pena ya que de acuerdo al Código de Ejecución de Penas, el detenido que observe buena conducta puede beneficiarse de una rebaja de la pena de hasta 180 días anuales. Esta Dirección mediante oficio dirigido al Director de la cárcel de fecha 21 de abril de 1998 informa que concede una rebaja de 66 días de la condena del Sr. José René Castro y solicita que se informe a la autoridad respectiva para que emita l a boleta de libertad, lo cual el peticionario señala que no se dio cumplimiento. El peticionario alega que a pesar de que al 22 de abril de 1998 habría cumplido la pena de 6 años de reclusión menos los 66 días otorgados por buena conducta, continuó detenido. El peticionario señala al momento de presentar la denuncia ante la Comisión que se encuentra ilegalmente detenido ya que había transcurrido el plazo de cumplimiento de su condena por tráfico de drogas, y también los plazos que se señala en el artículo 114 del Código Penal en las causas por enriquecimiento ilícito y testaferrismo, es decir, un tercio de la pena que cumpliría en caso de ser condenado. A pesar de que presentó un recurso de hábeas corpus ante el Alcalde de Quito el 7 de mayo de 1998, este fue rechazado. El peticionario señala que apeló esta decisión ante el Tribunal Constitucional, el cual ordenó su libertad inmediata el 13 de julio de 1998, al haber cumplido en exceso el plazo de reclusión. El Sr. Castro Galarza salió en libertad el 16 de julio de 1998. NORMAS VULNERADAS El derecho a la libertad personal, el derecho a la integridad personal, el derecho a las garantías judiciales y a la protección judicial, todos ellos consagrados en los artículos 7, 5, 8 y 25 respectivamente de la Convención Americana sobre Derechos Humanos Estado del Arte de la Solución Amistosa en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). SOLUCIÓN “El Estado ecuatoriano reconoce su responsabilidad por haber transgredido los derechos humanos del señor José René Castro Galarza. AMISTOSA El Estado ecuatoriano entrega al señor José René Castro Galarza una indemnización compensatoria, por la cantidad de ochenta mil dólares de los Estados Unidos de Norteamérica (US 80.000,00), con cargo al Presupuesto General del Estado, por una sola vez. El Estado ecuatoriano realizará sus mejores esfuerzos para el enjuiciamiento tanto civil como penal y a la búsqueda de sanciones administrativas de las personas que en cumplimiento de funciones estatales o prevalidas del poder público, se presume que tuvieron participación en la violación alegada.” 7 PALABRAS Violación de Derechos Humanos, enriquecimiento ilícito y testaferrato, sobreseidismo. CLAVE AUTORES Alethia Arango, Cristina Madrigal. FICHA 8 CASO Nº ACTOR 12.207 La Comisión Ecuménica de Derechos Humanos- LIZANDRO RAMIRO MONTERO MASACHE. ESTADO Ecuador. 15 Marzo de 2006. FECHA 7 Informe 2006 CIDH. En línea:[http://www.cidh.org/annualrep/2006sp/Ecuador12.205.htm] Estado del Arte de la Solución Amistosa en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). RESUMEN 1. Hechos En fecha 19 de junio de 1992, el señor Lizandro Ramiro Montero Masache fue detenido, sin contar con orden de aprehensión emitida por autoridad competente, para ser luego trasladado a los calabozos del que actualmente es el Regimiento Quito No. 2, lugar en qu e permaneció incomunicado hasta el 23 de julio del mismo año. Al avocar conocimiento de los hechos, el Presidente de la Corte Superior en base del informe policial habría dictado tres autos cabezas de proceso en contra del señor Montero Masache por los delitos de testaferrismo (18 de noviembre de 1992) en el que, se lo sindica con orden de prisión, de enriquecimiento ilícito (30 de noviembre de 1992), y por conversión de bienes (30 de noviembre de 1992). Posteriormente, durante los años 1998 y 1999, el señor Montero Masache fue sobreseído definitivamente en los tres juicios. Según el relato de los peticionarios, durante su detención, la presunta víctima interpuso varios recursos para obtener su libertad, tales como el de Amparo ante el Presidente de la Corte Suprema presentado el 8 de mayo de 1995 y el 17 de noviembre de 1997 sin que ninguno haya sido aceptado o negado; y el recurso habeas corpus interpuesto ante el Alcalde de Quito el 8 de agosto de 1997, el cual negó la petición de libertad. Esta última decisión fue confirmada el 12 de septiembre de 1997 por la primera sala del Tribunal Constitucional. Este recurso fue nuevamente interpuesto ante el Alcalde el 8 de abril de 1998, quien niega el mismo el 14 de abril de 1998. Sin embargo en esta oportunidad, el Tribunal Constitucional, revocó la decisión del Alcalde ordenando la inmediata libertad del detenido el 4 de junio de 1998, al considerar que conforme a la Ley 04, el señor Montero Masache cumplió más de la tercera parte de lo establecido en la Ley de drogas como pena máxima. NORMAS VULNERADAS SOLUCIÓN AMISTOSA Derecho a la integridad personal (artículo 5), libertad personal (artículo 7), garantías judiciales (artículo 8), igualdad ante la ley (artículo 24), y protección judicial (artículo 25). De igual manera alegan la violación de la obligación general de respetar y garantizar los derechos prevista en el artículo 1.1 de la Convención Americana. “El Estado ecuatoriano reconoce su responsabilidad por haber transgredido los derechos humanos del señor Lizandro Ramiro Montero Masache. El Estado ecuatoriano entrega al señor Lizandro Ramiro Montero Masache una indemnización compensatoria por la cantidad de sesenta mil dólares de los Estados Unidos de Norteamérica (US 60.000,oo), con cargo al Presupuesto General del Estado, por una sola vez. El Estado ecuatoriano realizará sus mejores esfuerzos para el enjuiciamiento tanto civil como penal y a la búsqueda de sanciones administrativas de las personas que en cumplimiento de funciones estatales o prevalidas del poder público, se presume que tuvieron participación en la violación alegada.”8 PALABRAS Violación de Derechos Humanos, enriquecimiento ilícito y testaferrato, sobreseidismo. CLAVE AUTORES 8 Alethia Arango, Cristina Madrigal. http://www.cidh.org/annualrep/2006sp/Ecuador12.207.htm Estado del Arte de la Solución Amistosa en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). FICHA 9 CASO Nº ACTOR ESTADO FECHA RESUMEN 533-01 Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos, así como María Leonor Giler Esmeraldas- FAUSTO MENDOZA GILER Y DIÓGENES MENDOZA BRAVO. Ecuador. 15 Marzo de 2006. 1. El Sr. Diógenes Monserrate Mendoza Bravo señala que se encontraba viajando junto a su hijo, Fausto Fabricio Mendoza Giler, de 16 Hechos años de edad, el 19 de marzo de 2000 sobre la 01:30 AM, en una camioneta de marca Mazda, cuando a la altura de un local conocido como “Rancho Texas” recogieron a dos mujeres que les pidieron que las trasladasen a la urbanización Florida Norte. Según el peticionario y, supuestamente debido al estado de embriaguez en que se encontraba una de las dos mujeres trató de abrir la pu erta del vehículo, por lo que tuvo que frenar inmediatamente. Una vez que se detuvo el automóvil las dos mujeres salieron corriendo, coincidiendo con la llegada de una patrulla de la policía del grupo de operaciones especiales (GOE), quienes empezaron a disp arar contra su vehículo, alcanzando uno de ellos al Sr. Diógenes Mendoza. Asustado por estos disparos, el Sr. Diógenes Mendoza señala que su hijo, Fausto Fabricio Mendoza agarró el arma que llevaba en el vehículo e hizo un disparo al aire. Inmediatamente, la policía procedió a detener a Diógenes Mendoza y a Fausto Fabricio Mendoza siendo golpeados brutalmente durante su traslado hasta el Cuartel Modelo de la Policía Nacional. Debido a que como consecuencia de los golpes su hijo se encontraba en muy mal estado, fue trasladado al Hospital Luis Vernaza. En el hospital los médicos constataron el fallecimiento de Fausto Fabricio Mendoza a consecuencia de las graves lesiones que sufrió en la cabeza, así como en las extremidades superiores e inferiores, las cuales fueron señaladas debidamente en el informe médico legal. Mientras tanto, Diógenes Mendoza fue trasladado a los calabozos de la policía donde permaneció detenido hasta que se interpuso un recurso de hábeas corpus que fue resuelto favorablemente el 28 de marzo de 2000, por el Alcalde de Guayaquil. NORMAS VULNERADAS El Sr. Diógenes Mendoza señala que presentó una acusación particular en contra de los policías que asesinaron a su hijo ante el Juzgado Séptimo de lo Penal del Guayas. El Juez Décimo de lo Penal de Guayas, subrogante del anterior, se inhibió de continuar substanciando la causa el 28 de junio de 2000, alegando que los acusados gozaban de fuero policial y por tanto, remitiéndola a la Comandancia del Cuarto Distrito de la Policía Nacional. El 20 de julio de 2000, el Juzgado Segundo del IV Distrito de la Policía Nacional dictó auto cabeza del proceso de una manera muy general no sindicando a ninguno de los agentes, a pesar que se encontraban plenamente identificados. Artículos 4, 5 y 7 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, en concordancia con el artículo 1.1 del citado instrumento internacional. Estado del Arte de la Solución Amistosa en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). SOLUCIÓN AMISTOSA “El Estado ecuatoriano reconoce su responsabilidad por haber transgredido los derechos humanos del menor Fausto Mendoza Giler y del señor Diógenes Mendoza Bravo El Estado ecuatoriano entrega al señor Diógenes Mendoza Bravo una indemnización compensatoria, por la cantidad de trescientos mil dólares de los Estados Unidos de Norteamérica ( US 300.000,00), con cargo al Presupuesto General del Estado, por una sola vez. El Estado ecuatoriano realizará sus mejores esfuerzos para el enjuiciamiento tanto civil como penal y a la búsqueda de sanciones administrativas de las personas que en cumplimiento de funciones estatales o prevalidas del poder público, se presume que tuvieron participación en la violación alegada.”9 PALABRAS Violación de Derechos Humanos, golpes por la policía nacional, disparos, presunción de inocencia vulnerada. CLAVE AUTORES Alethia Arango, Cristina Madrigal. FICHA 10 CASO Nº ACTOR 12.033 Rómulo Torres Ventocilla. ESTADO Perú 15 Marzo de 2006. FECHA 9 Informe 2006 CIDH. En línea:[http://www.cidh.org/annualrep/2006sp/Ecuador533-01.htm] Estado del Arte de la Solución Amistosa en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). RESUMEN 1. Hechos De conformidad con la denuncia, el 5 de abril de 1992, el Presidente Alberto Fujimori dio el denominado “autogolpe de Estado” por medio del cual rompió el Estado de Derecho y por medio de diferentes dispositivos legales, disolvió el Congreso Nacional, el Tribunal de Garantías Constitucionales y el Consejo Nacional de la Magistratura. De igual manera, destituyó a vocales y fiscales supremos, vocales y fiscales superiores, jueces y fiscales de primera instancia, así como diplomáticos de carrera. El artículo único del Decreto Ley Nº 25446, publicado en el Diario Oficial El Peruano de fecha 24 de abril de 1992, dispuso el cese de los cargos de vocales de fiscales superiores, jueces y fiscales de primera instancia. Con dicha medida se paralizó la administración de justicia peruana, se suspendió temporalmente el despacho judicial y se prohibió por la fuerza el ingreso de los Magistrados, funcionarios y litigantes a los despachos judiciales. El doctor Rómulo Torres Ventocilla argumentó que el 24 de abril de 1992, en virtud del citado decreto ley, fue cesado en su cargo de juez civil de Lima, sin ningún tipo de motivación, fundamento o causa legal. Asimismo, señaló que el 28 de abril de 1992 se dictó el Decreto Ley Nº 25454, por medio del cual se establecía la improcedencia de la Acción de Amparo, dirigida a impugnar los efectos de la aplicación de los Decretos Leyes 25442, 25423 y 25446, privando de este modo a los magistrados cesados de dicho recurso y de cualquier tipo de defensa ante la agresión de la cual habían sido víctimas. A pesar de la prohibición expresa contenida en el Decreto Ley Nº 25454, el peticionario indicó que interpuso un recurso de amparo ante el 20 º Juzgado Civil de Lima, a fin de que se declarara la inaplicabilidad de los Decretos Leyes 25446 y 25454. Igualmente, solicitó que, una vez acogido su recurso, se lo restituyera en la situación anterior a la entrada en vigencia del primero de dichos decretos. El doctor Rómulo Torres Ventocilla alegó que con el rechazo de la acción de amparo por todas las instancias competentes del poder judicial, esto es, juzgado de primera instancia, Corte Superior y la Corte Suprema, agotó los recursos jurisdiccionales domésticos. Al respecto, destacó que el juez de primera instancia que conoció originalmente el proceso de amparo, fue denunciado penalmente por el estado por el delito de prevaricato, por haber admitido a trámite el recurso. En virtud de lo anterior, el peticionario recurrió al Tribunal Constitucional, que por medio de sentencia de fecha 27 de octubre de 1997, resolvió confirmar la resolución emitida por la Sala de Derecho Constitucional de la Corte Suprema y, en consecuencia, declaró improcedente la acción de amparo interpuesta por el doctor Torres Ventocilla. De conformidad con la denuncia, la sentencia del Tribunal Constitucional fue publicada en el diario oficial El Peruano de fecha 9 de enero de 1998 y notificada al peticionari o el 27 de febrero de ese mismo año. Estado del Arte de la Solución Amistosa en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). NORMAS VULNERADAS SOLUCIÓN AMISTOSA El derecho a las garantías judiciales, el principio de legalidad, el derecho a la protección a la honra, sus derechos políticos, la igualdad ante la ley y la protección judicial, todos ellos consagrados en los artículos 8, 9, 11, 23, 24 y 25 respectivamente de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. “El Estado Peruano reconoce su responsabilidad en base a los artículos 8° inciso 1, 11°, 23°, inciso 1 c), 24° y 25º inciso 1, de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, por el agravio en perjuicio de Rómulo Torres Ventocilla durante el período de tiempo comprendido entre el 24 de abril de 1992, fecha en que fue arbitrariamente cesado. El Estado Peruano reconoce el Derecho del peticionario al pago de la cantidad de $ 40,000.00 (Cuarenta mil Dólares Americanos y 00/100 centavos de dólar) como indemnización íntegra que comprenda el lucro cesante, el daño emergente y el daño moral por concepto de reparación dineraria. PALABRAS CLAVE AUTORES 10 El Estado peruano se reserva el derecho de repetición contra aquellas personas que se determine ser responsables en el presente caso de conformidad con la legislación vigente.”10 Violación de Derechos Humanos, cesamiento de funciones ilegal, Consejo Nacional de la Magistratura, reincorporación a cargos judiciales, garantías judiciales. Alethia Arango, Cristina Madrigal. Informe 2006 CIDH. En línea:[http://www.cidh.org/annualrep/2006sp/Perú12.033.htm]