UNIDOS – es hora de ser inteligente El día 9 setiembre 2013 se entregaron 1554 firmas en la corte electoral en Montevideo pidiendo que UNIDOS (Por Nuestras Riquezas Naturales) sea inscrito como Partido político. Se escribió historia. Frente la indiscriminada destrucción de nuestros recursos naturales, acelerado por el “Fraude Amplio”, es una llamada a la responsabilidad civil de enfrentarse a todos los niveles, con las causas del irrespetuoso comportamiento social y económico. Los derechos de la naturaleza, aun establecido en la constitución y en varias leyes, se pisan sin vergüenza con pies embarrados en el pantano del neoliberalismo. Ya ahora no existe más agua potable sin residuos de agrotóxicos en Uruguay, al igual como la comida. La costumbre de que el agua acá siempre fui pura, genero una confianza sin necesidad de actuación. Obviamente este indiferencia favoreció a los responsables de tolerar algo que la naturaleza misma no lo puede. Todos tenemos bien claro: si queremos sobrevivir como sociedad humana hay que volver a lo que hice crecer la humanidad en los últimos decenas de miles de años; dicho es la agricultura natural, o hoy en día mejor conocido como agricultura orgánica. El uso de venenos en la agricultura es la prueba del fracaso en el arte de cultivar comida sana. Los circuitos de la cadena alimentaria no están más cerrados, pero viciosos. El argumento de la mafia industrial que no se podría producir bastantes alimentos en forma orgánica para 7 mil millones de habitantes en el mundo, está ampliamente refutado por una cantidad de estudios, científicos y prácticos. A revés: investigaciones comprueben de que la producción en campos plantados con transgénicos y agrotóxicos, es entre 6% y 8% inferior a los plantados en forma orgánica. Sumando los costos adicionales que tiene la plantación de soja transgénica, como la absoluta pérdida de biodiversidad (¿cuánto vale, por ejemplo, la extinción de una especie de escarabajo endémico de una zona hoy fumigado por todo tipo de insecticidas y herbicidas?) y la baja de la fertilidad del suelo alrededor de un 3% por año (no incluyendo las emisiones altísimas de gases con efecto invernadero,¡ porque se necesita entre 5 y 10 unidades energéticas en forma de energía primaria, para producir solamente una unidad energética comestible! ) la sociedad empobrece. Tradicionalmente la agricultura estuve un productor de energía, hoy en día es un consumidor. Unos pocos productores están ganando lo que nosotros perdimos en calidad de vida. Ellos se creen tener derechos que no lo tienen. ¿Democracia? Seguro, si 3 millones 245 mil habitantes del territorio nacional no son capaz de defenderse frente a un grupito de productores y políticos irresponsables, cuales demás actúan ilegal, es una colectiva falta de coraje y capacidad. Es por ahí que empieza UNIDOS Por Nuestras Riquezas Naturales. Fundado oficialmente como Partido el 28 agosto 2013, en la Estación Experimental Alternativa Tíbet, los socios fundadores de UNIDOS Por Nuestras Riquezas Naturales acuerdan de estar por definición libre de ideologías partidarias, y que el objetivo fundamental será recuperar y conservar el origen virgen, señalado por la naturaleza misma, de las necesidades básicas (agua, alimentos, vestimenta, habitación) de todos los habitantes del territorio nacional y del mundo. Consideramos que el hambre es un problema global, como también lo será el agotamiento del agua potable o el hecho de morir envenenados, y que, por consiguiente, la solución debe ser global, no de una comunidad de activistas. Que si las derechas y las izquierdas no cooperan, esto se acabó. Si los gobiernos, sin importar su orientación político partidista, no cooperan, esto no tendrá solución. No sólo porque el problema es global, sino porque ningún gobierno está dispuesto a solucionarlo. Por eso declaramos que no es la ideología política la que lo resolverá, sino la infinita comprensión humana que dará este importante salto evolutivo. UNIDOS, libre de ideologías partidarias, alcanzará esa infinita comprensión humana para transformar la necesidad en una nueva realidad. Pretendemos que Uruguay sea el primer país del mundo con una producción alimentaria 100% orgánica. Este solución integral recuperará el estado natural del agua y de la comida, y permitirá a su vez, una nueva conexión con la raíz de nuestra existencia, que está basada en la sabiduría indígena, respetando los derechos de la madre tierra con todos sus seres cuidándola para las generaciones que vienen. Declaramos explícitamente que esa transformación se realizará absolutamente de forma pacífica. Buscamos que la tecnología no se use para destruir la naturaleza, sino exclusivamente para desarrollar alternativas que puedan sustituir las materias inorgánicas con reproductivas y lograr una independencia energética, mano a mano practicando una verdadera autonomía del estado Uruguayo. No se podrá separar lo que es de nadie y a la vez de todos, porque estamos UNIDOS en la naturaleza. Como productor agrícola responsable estoy consciente de que si no empezamos de defendernos juntos, en pocos años no será más posible de producir alimentos sanos en forma natural aun en el campo más remoto del país. Mega-fracking, Mega-minería, Megaforestación, Mega-transgénicos, Mega-tóxicos, Mega-papeleras, Mega-puerto, Mega-parque eólicos, Mega-corrupción, Mega-engaño de Uruguay natural. Protestando en contra todo eso no es suficiente. Sin presentar una alternativa económicamente, social y medio ambiental irresistible faltaría la legitimación de la protesta. Hay que tomar responsabilidad política para poder cambiar. El lema “Uruguay 100% orgánico” permite a solucionar una cantidad de problemas automáticamente. Vamos a crear una verdadera identidad Uruguaya natural y demostrar una vez más al mundo que somos un país de vanguardia y uno de los más civilizados de todos. Empezamos de dar pelea política al capital hoy, que todavía hay alguna gente sana, inteligente y fuerte. Cuando todos tenemos cáncer ya no peleamos más. Peter Johann Abmayr Kranzfelder, Tibet, Aiguá, Maldonado