AL SEMINARIO DE c T e l l e r i - r m n r ■ f f.í; ífi H ila .II M d e ü RENTERIA: Primitivo TtUtri-Alde sede de la Curia Centraly del Aspiranladu. M aría Jesús M agaña O ndartza Desde que tengo uso de razón, he sentido que el Colegio de to ta l de ochenta. El reclutam iento seguía en auge y Telleri-Alde Telleri-Alde o la Casa grande com o la llamábamos fam iliarm ente quedaba nuevam ente pequeño. En el año 1924 se levantó la en casa, era eso, nuestra segunda casa. Pero sigamos los aconte- nueva vivienda para los postulantes adosada a la Casa General y cim ientos. Corría el año 1903 cuando el masón Emilio Combes fue habitada en 1925. La capilla se inauguró el veintisiete de sep- puso en práctica una ley de disolución de Ordenes Religiosas en tiem bre y el Noviciado M ayor se instaló en la zona de la Curia Francia, prohibiendo a sus m iembros vivir en com unidad o exten- General. A llí perm aneció hasta la guerra civil española en que der la re lig ió n . En consecuencia los religioso s H erm anos del quedó suprim ido para reiniciarse en Roma el año 1951. Sagrado Corazón tenían dos opciones, secularizarse o marchar al Pero el colegio siguió su curso y así, en el año 1918, surgió extranjero y m antener su condición religiosa. Desde la casa de la p ro p u e sta que el señor Tom ás G astam inza, g e re n te de la Chirac com enzó el exilio voluntario de estos Hermanos. Así, el 2 Fábrica de Lino (Fábrica Grande), se hallaba dispuesto a ceder en de ju n io de 1903 cruzan los Pirineos por la vertiente sur y llegan a a lquiler uno de los locales anejos a su industria. T ram itaron el Jaca, que fue la primera ciudad española que los acoge. Luego, asunto y firm a ro n la escritura el veinte de noviem bre de 1918. en el mes de septiembre, o tro grupo de Hermanos procedentes Siguieron en la Alam eda hasta el año 1965 en que volvieron a de otros colegios expropiados saldrían de Francia con idéntico fin Telleri-Alde después de dos años de obras, así en 1967 quedó y así llegan a Rentería, que entonces contaba con unos tres mil construido el actual edificio. habitantes, y se instalan en una casa de la calle Viteri n° 7, im parPero volvam os al sem inario. Por el año 1928, mi am ona tie n d o clases de francés, inglés y enseñanza p rim a ria, no sin Leonor Alzóla entró al servicio de los frailes com o cocinera (de ahí esfuerzo por su parte pues, recién llegados, no se defendían con mi apego a la casa). C uando estalló la c o n tie n d a , mi fa m ilia , la lengua. Pero com o la fe mueve montañas siguieron afianzándo- padres, tíos, etc... se refugiaban en el convento. Luego nos co nta - se y lograron fo rm a r una com unidad que, al principio, fue escuela rían, entre otras anécdotas, que la casa tu vo que soportar los y luego Casa de Formación. La estancia de los Superiores Mayores estam pidos de los obuses del acorazado "España" que, desde la en la calle Viteri tenía carácter provisional, ya que esperaban vol- bahía de Pasajes, disparaba contra las baterías del fuerte de San ver a Francia. Pero en vista que allí seguían con dificultades para Marcos. Cuentan que un proyectil penetró por la ventana de la la vida com unitaria se decidió construir otra nueva vivienda más habitación de uno de los Asistentes Generales y ante la inseguri- amplia en los terrenos denom inados Telleri-Alde, que sería sede dad personal se izaron en el tejado las banderas francesa y yanki, de la Curia General durante veinticuatro años. La casa de la calle por su origen francés y su expansión en Canadá, que protegían la Viteri fue vendida el año 1912, por ta n to vivieron allí casi diez inm unidad de la vivienda y de sus moradores. años. Pasada la guerra to d o volvió a la norm alidad y mi amona Don Cosme Etxeberria, que fue alcalde de la Villa, era el s ig u ió tra b a ja n d o hasta casi los sesenta en que se ju b iló . La dueño del terreno antes citado y se co m pro m etió a construir el recuerdo en la cocina con pucheros y cazuelas enormes. ¡Cóm o lo edificio con su propio peculio sobre los planos de éstos. Se estipu- haría!, me preguntaba yo entonces. Pelando patatas, toneladas ló pagar un alquiler fijo anual am ortizable durante veinte años, sin de patatas, justo acababan de com er ya tenía que pensar en la em bargo la deuda se canceló en treinta mil pesetas el año 1925. cena, ¡qué paciencia tenía!. Recuerdo el com edor con mesas en Las obras comenzaron en 1912 y fue habitado en 1913. Mientras hileras y enfrente la mesa de los Hermanos con una campanilla se realizaban las obras los Superiores habitaban en "Villa Iris" de para poner orden. Al lado de la cocina los fregaderos en que los A tegorrieta y los postulantes fueron enviados a Ibarra (Tolosa) por chavales se e n c a rg a b a n de fre g a r los ca ch a rros p o r tu rn o s , un año. ¡menos mal! Los largos pasillos, los dorm itorios con camas m etáli- La Curia General y los postulantes habitaron Telleri-Alde en cas y con unos colchones de lana y borra, que mi amona apaleaba el curso 1913-1914 y fueron llegando más aspirantes hasta ser un con frecuencia porque algún chaval, ¡más de u n o !, sufría de enu- 173 sobre todo, vacío. Ya no se escuchan voces, ni risas juveniles por resis y mojaba la cama. Luego los cambiaron por piezas de espu- los pasillos, comedores, patios, to d o es silencio. En el plazo de ma o foam , porque esto de hacer colchones no era rentable. diez años lo van a dem oler y construir o tro más m oderno adecua- Siem pre que cruzaba los pasillos olía a co m id a , incluso do a los nuevos proyectos, pero ya no será igual. Esta capilla que, ahora sigo oliendo igual. También criaban gallinas, conejos y cer- a través de los años, ha sido testigo de las inquietudes espirituales dos. Estos los mataba el carnicero Severiano Bidegain, ayudado de los H erm anos escolásticos, novicios, Superiores Generales, por algún fraile y por mi amona, que se encargaba de hacer los guarda la historia de las primeras andaduras corazonistas. Lucen chorizos y morcillas. ¡Y qué morcillas! Tenían una matanza para en sus vid rie ra s las efigies, desde el Padre F un d ado r A nd ré s una tem porada. Recuerdo que más de una vez hemos com prado C oindre hasta nuestros días y, ahora, al celebrar los actos del especias, orégano, pim entón, pim ienta, etc... donde la Mari, "la noventa aniversario, asistieron el H erm ano Provincial y demás aceitunera", al lado del bar Zugarram urdi en la calle Viteri, que Hermanos en representación de sus respectivos colegios, así com o era la qu e pro ve ía a los fra ile s . De los v in o s se e n ca rg a b a tam bién el alcalde y varios ediles representando al A yuntam iento. Fermoselle, ambos desaparecidos, dueños y comercios. También Durante la misa, cuando Josetxo Ule hizo la ofrenda de una había una hermosa huerta, hoy asfalto, y árboles frutales, y hasta teja com o símbolo de la casa, se me inundaron los ojos de lágri- colmenas tenían. mas y com o un torren te fueron fluyendo a mi mem oria los recuer- Tuve la suerte de conocer entonces a m uchos frailes del dos de tantos actos allí celebrados. Me queda el tesoro de esas seminario. Por ejem plo, al Hermano Andrés, que era el adm inis- vivencias, del pasado y del presente, com o la com unión de mis tra d o r y nos imponía respeto con aquella barriga prom inente y su hijos, y la boda de mi hija. Y es que el tie m po pasa tan rápido. raída sotana, una brillante calva y una cicatriz en el labio superior. Luego, en la cena, debajo del "seca d e ro", que entonces sí era Le estoy viendo, era el que daba las órdenes. Al Hermano M arino, una despensa de alim entos (patatas, alubias, cebollas, pimientos, que creo que aún vive y está en C olom bia y era hijo de Estanislao etc...), se llevó a cabo la entrega de placas, discursos y abrazos, y Moraza, que m urió en Telleri-Alde. Le llamábamos el "a b u e lico " y luego música bailable. ¡Qué diría el Hermano Andrés si lo viera! ayu d ab a en la cocina lo q ue podía. Al H erm a n o A lly riu s , al Fue un encuentro muy em otivo, con m uchos frailes conocidos, H erm ano B enigno y a lg u n o más. Pero del que g u a rd o m ejor hoy venerables Herm anos que pasaron por este sem inario en recuerdo es del Hermano Teodoro Portalier, que fue Provincial y aquellos años y guardan buenos recuerdos de la Señora Leonor Maestro de Novicios, y para mí com o el abuelo que no conocí. Se que fue para ellos su segunda madre, desviviéndose por sus "fra i- portó con nosotros com o si fuésemos su fam ilia, aún conservo el les y seminaristas". Y esa noche para mí flotaba en el am biente el rosario que me regaló en mi primera com unión, así com o recor- "a u ra " de la cocinera. Pero no me voy a poner triste, todavía hay datorios, fotos y cartas personales. La últim a me la escribió desde jóvenes que sienten la llamada corazonista. Ahí están los semina- Vitoria, en su retiro, antes de m orir el 3 de diciembre de 1963, rios de Puente la Reina, Alsasua y Noviciado de Griñón (M adrid), con 95 años. Aunque era francés pasó aquí toda su vida, alto y donde estudia mi hijo con o tro renteriano y se form an para ser recio, con su hábito y botas características claveteadas, fabricadas Hermanos del Sagrado Corazón. ¡Cóm o iba yo a pensar aquellos en La Lozére (Cantal). Su acento delataba su origen, tenía un gran años que mi hijo pertenecería a la Casa! Así que seguiré querien- carisma y fue uno de los grandes bastiones de la Orden. do a la Institución y a "m is frailes". Ahora, con el cierre del seminario desde el curso 1992-1993 ¡Viva Telleri-Alde! (por falta de vocaciones), el edificio se ha quedado obsoleto y, ( 174