26 A lfonso Daza González 344 C.P.P.), sino desde las audiencias preliminares como en la audiencia de control de legalidad de la captura (art. 297 inciso 2), y en la audiencia de solicitud de medidas de aseguramiento (arts. 288.2 y 308). La omisión del descubrimiento, o el descubrimiento parcial y amañado vulnera tanto el principio de contradicción como el de igualdad de armas, aparte de constituir una conducta anti ética, contraria a la lealtad procesal. El segundo derecho se manifiesta con la facultad de confrontación (art. 378 C.P.P.), cuyas principales manifestaciones son: El contrainterrogatorio (arts. 125 y 393 C.P.P.), que puede involucrar la impugnación de testigos (art. 403 C.P.P.). Las oposiciones u objeciones a la admisibilidad de pruebas, a la declaración inicial, al interrogatorio y contrainterrogatorio, y a los alegatos de conclusión. El derecho a solicitar u ofrecer pruebas de refutación (art. 362 C.P.P.), y el ejercicio del derecho de impugnación cuando se inadmitan, excluyan o rechacen pruebas (arts. 359 y 363 C.P.P.). En el reconocimiento del derecho de defensa está en juego la legitimidad del juicio: el poder penal del Estado, como todo poder estatal, no es absoluto (en un Estado social de derecho); debe ejercerse racionalmente, no arbitrariamente; es un poder sujeto a limitaciones: una de ellas es el derecho de defensa, que torna racional y legítimo el juicio. El sistema acusatorio concibe al juez como un sujeto pasivo, rígidamente separado de las partes, y al juicio como una contienda entre iguales iniciada por la acusación, a la que compete la carga de la prueba, enfrentada a la defensa en un juicio contradictorio, oral y público. El procesado goza de amplia libertad de defensa, pues ninguna de las pruebas le está vedada. – Dentro de las características principales del sistema procesal acusatorio, encontramos las siguientes: – El juez no puede proceder ex oficio a la hora de abrir el proceso, precisa de una acusación para actuar.